Gobierno

Sin importar el lugar del mundo en donde opere su organización, difícilmente estará exenta del
cumplimiento de normativas y regulaciones gubernamentales que deben ser abordadas en
algún nivel. Esto es más palpable cuando hablamos de normas ambientales.
En algunos países, existen normas ambientales federales, nacionales o locales, que regulan
temas como los materiales reciclables, el tratamiento de aguas residuales, o las emisiones de
partículas. El cumplimiento de estas normativas, es un claro ejemplo de necesidades y
expectativas de una parte interesada. El gobierno.
Accionistas
Los accionistas de su organización quieren que usted gane mucho dinero y racionalice el uso
de ese dinero. Ese es uno de los objetivos al implementar un Sistema de Gestión Ambiental.
Ellos – los accionistas -, están interesados en su SGA, en la medida en que es una herramienta
que permite a la organización cumplir con requisitos, evitar sanciones, y ahorrar dinero
utilizando prácticas como el reciclaje.
Clientes
Al igual que sus accionistas, los clientes no quieren prescindir de su producto, como
consecuencia de un cierre ordenado por alguna entidad gubernamental, como sanción por el
incumplimiento de alguna normativa ambiental.
Pero los clientes también pueden tener sus propios objetivos ambientales, que pueden ser
identificados y comprendidos, si la organización tiene una reunión con ellos, con el objetivo de
conocerlos. Muchas de esas necesidades y expectativas, tienen relación con la forma en que la
organización se deshace de los residuos, el tipo de embalajes que utiliza, y la procedencia de
las materias primas necesarias para elaborar el producto.
Vecinos
Si las operaciones de su organización, pueden producir impactos ambientales en las zonas
aledañas, como derrames químicos, ruido, vertimiento de aguas residuales, entonces sus
vecinos inmediatos se convierten en parte interesada en su Sistema de Gestión Ambiental, y por
supuesto, es importante que su organización entienda sus necesidades y expectativas.
La emisión de gases contaminantes, hace que vecinos distantes, también se vean afectados, y
por tanto deben ser considerados también como parte interesada.
Empleados
Los empleados desean vivir y trabajar en espacios libres de contaminación. Ellos se sentirán
orgullosos al trabajar en una organización que contribuye a cuidar el planeta, desde el espacio
de trabajo.
Los empleados no son solo parte interesada. Ellos mismos están involucrados de forma íntima
en el rendimiento del sistema.
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