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Carolina Aristizábal
Alejandra González
Daniela González
Susan Ruíz
Introducción
Los seres humanos poseen “cerebro, pero
también “corazón” y muchas veces hacen lo
que dicta este último.
El ser humano esta dotado de la variada
paleta de los colores de la emoción.
1. Expresión facial.
2. Afectiva muscular.
3. Actividad cerebral.
4. Tono autónomo simpático y parasimpático.
5. Tenor hormonal.
En toda emoción se pueden identificar tres
diferentes tipos de procesos.
1. Los efectos periféricos de los patrones de respuestas
corporales para cada emoción.
2. Los efectos cerebrales adaptativos sobre el
procesamiento perceptual y cognitivo.
3. La experiencia emocional subjetiva, estados de animo o
sentimientos internos.
Capacidad de fingir un estado de animo.
“Nivel de apercibimiento”
“Inteligencia emocional “
La expresión emocional
En el patrón efector emocional es posible
distinguir a grandes rasgos dos grupos de
componentes:
La respuesta efector emocional corporal o
somático.
La respuesta efector emocional autónomo o
visceral.
P. Ekman y W. V. Friesen utilizaron actores
profesionales para que expresaran con sus
rostros las distintas emociones y así lograron
crear una galería fotográfica normalizada de
expresiones emocionales faciales…
Midiendo la esfera afectiva en la
salud y en la enfermedad
Es necesario distinguir entre emociones
agudas, estados de animo relativamente
duraderos o incluso crónicos y vulnerabilidad
temperamental a un estado emocional particular.
Emociones agudas
Son el componente de adaptación perceptual-
cognitivo se puede explorar ya sea conductualmente o
bien midiendo directamente el funcionamiento cerebral
(electrofisiología, imagenología funcional)
Levels of Emotional Awareness
“Como se sentirá usted?” “Y como se sentirá la otra
persona?” (0 a 5)
Ira
Miedo
Alegría
Tristeza
Circuitos cerebrales de las
emociones
A principios del siglo XX fueron
acumuladas evidencias de diferentes tipos
acerca de la participación de varias estructuras
(interconectadas) del cerebro anterior en tres
procesos básicos de las emociones.
Este conjunto de áreas es conocido como sistema
límbico e incluye además áreas paleocorticales
y núcleos subcorticales integrados en el
denominado “circuito emocional” de J. W.
Papez.
Aunque estas estructuras son muy importantes
para la función de las emociones, no quiere
decir que estas sean netamente límbicas, pues
a la fecha se sabe de la intervención de otras
estructuras de ese tipo de comportamiento.
En el Diencefalo: se encuentra el tálamo y el
hipotálamo como nucleos principales de la
inducción y de la conducta alimentaria.
Los niveles diencefalicos - hipotalámicos y límbicos
– septales, son regiones del S.N y desempeñan 2
funciones:
Inductora: motivadora de la conducta
Reforzante: inhibidora de la conducta
En general, el comportamiento de los
organismos más simples consiste de dos tipos
de reacciones: acercamiento a los estímulos
que les permiten preservar su existencia y
alejamiento de aquellos que puedan dañar su
integridad.
En los seres más desarrollados, entre esas dos
reacciones extremas se sitúan otras muchas
que aparentemente son neutras pero que, sin
embargo, están guiadas por esas dos clases de
respuesta de naturaleza básica.
a) Las dirigidas a obtener estímulos
reforzantes.
b) Las orientadas a evitar los estímulos lesivos
que compondrían reacciones de huida o
evitación.
c) Las de antagonismo o de ataque que
posiblemente surjan como expresión de la
competencia por sustancias alimentarios o por
pareja sexual.
No todas las instigaciones o motivaciones
hipotalámicas son consideradas por nuestra
cultura como emocionales; hambre y sed o
calor o frio, solo son definidas como estados
de desasosiego.
El término “emocional” únicamente se aplica a
los comportamiento agresivos o a los escapes
que se dice son provocados por el miedo.
Igualmente se acepta que la sexualidad está
teñida por la emoción.
La agresión o el miedo implican activaciones
simpáticas mas generalizadas, al igual que la
sexualidad que al involucrar componentes
hormonales lleva a una activación corporal
mayor.
El sistema olfativo.
El sistema gustativo o táctil.
• Lesiones amigdalinas.
• Lesiones del núcleo septal.
ESTIMULACIÓN
REFORZANTE Y CUALIDAD
DE LAS EMOCIONES
La división amigdalina del sistema límbico,
centrada principalmente en la conducta
alimentaria y en las reacciones de ataque, o en
las de huida, produce en el ser humano como
estados emocionales:
• El desasosiego propio del hambre, la sed o el
frio y el calor.
• La ira que acompaña a la conducta agresiva.
• El miedo que es parte de las reacciones de
huida.
• La división septal relacionada con la conducta
reproductiva y afiliativa parece conectada más a
los reforzamientos, es decir, a los tonos
placenteros.