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INSTITUTO TECNOLÓGICO SUPERIOR DE JESÚS

CARRANZA

INGENIERÍA EN AGRONOMÍA
805-C
ZOOTECNIA DE AVES

DE LOS SANTOS

UNIDAD 3 EXTERIOR Y MANEJO


3.1 REPRODUCTORES

Cuando hablamos de reproductores nos referimos al parent stock, es decir a los


padres de las aves que nos dan el producto final, bien sea carne o huevos. Es
decir, serían los padres de los pollos de carne o de las gallinas ponedoras.
La fase de reproducción con la puesta del huevo incubable, la incubación en la
planta incubadora y nacimientos de pollitos/as de 1 día, que después serán
trasladados a las naves de cebo. Por eso, cuando hablamos de reproductores nos
solemos referir a reproductores de estirpes pesadas, progenitores de los futuros
pollos de carne y a ello nos vamos a referir, fundamentalmente.
3.1.1 MANEJO DE HUEVO FERTIL

La práctica, hay que partir de la base de que un cierto porcentaje de los huevos
puestos por las reproductoras no son aptos para afrontar con garantías de éxito el
período de incubación. Por esta razón, hay que tener en cuenta una serie de
aspectos para determinar cuáles, de todos los huevos puestos, van a ser los que
se introduzcan en las máquinas incubadoras.
Por otra parte, el huevo fértil es un elemento vivo, que debe ser manejado desde la
propia granja con sumo cuidado y conforme a unas rutinas que no perjudiquen al
potencial de incubabilidad inicial de este huevo.
3.1.2 MANEJO DE LA HEMBRA EN SUS
DIFERENTES ETAPAS

Cumplir con los requerimientos de machos y hembras reproductores durante cada


etapa de la cria-recria y prepararlos para la madurez sexual.
Recriar la reproductora Ross en la etapa de crianza de acuerdo con la curva de
objetivo de crecimiento que permite que los machos y las hembras logren un
rendimiento óptimo en su vida reproductiva, al asegurar que las aves crezcan y se
desarrollen correctamente.
En diferentes tiempos se desarrollan los diferentes órganos y tejidos, durante cada
fase del crecimiento, el responsable del lote debe considerar y conocer las
prioridades de las aves respecto a su crecimiento en dicha etapa.
3.1.2.1 CRIANZA DE LAS POLLITAS FURURAS
REPRODUCTORAS
Crianza de las pollitas reproductoras el objetivo que se persigue durante este
periodo es cubrir, en cada momento de esta etapa de crecimiento, todas las
necesidades que tiene los futuros reproductores. Esta fase de crianza tiene una
repercusión vital en el periodo de reproducción posterior.
Mantener el peso y ritmo de crecimiento de las pollitas en todo momento (cada
semana) dentro de los objetivos marcados en la curva estándar ideal de peso.
El peso de las aves debe estar en o sobre los marcados en la curva estándar de
peso hasta los 7-14 días.
Restringir el consumo de pienso, en base a incrementos pequeños de la
cantidad de alimento, pero con una distribución regular que permita alcanzar
una buena uniformidad en toda la manada desde el principio. Recalcular el
suministro de pienso periódicamente en función de los resultados de peso.
Los machos y las hembras se crían de forma separada hasta que llegue el
momento del apareamiento (hasta las 18-23 semanas).
3.1.2.2 INICIO DE LA PUESTA
En un sentido amplio, esta fase de arranque de puesta comprendería el tiempo que
transcurre desde el alojamiento de las aves en la nave de producción hasta que las
gallinas alcanzan su peso corporal adulto, lo que en la práctica se traduciría en el
periodo de 17 semanas a 30-35 semanas de vida.
MANEJO DE LA NUTRICIÓN DURANTE EL ARRANQUE DE LA PUESTA

En un primer momento, las aves tienen que sobreponerse al estrés de traslado y


adaptarse a su nuevo entorno. Pero el desafío fundamental es, desde la aparición
de los primeros huevos, conseguir cubrir las necesidades de las aves, no solo las
de producción (número y tamaño de huevos que aumentan exponencialmente en
pocas semanas, si no las de crecimiento, que no concluirán hasta las 35 semanas
de edad.
3.1.2.3 PROGRAMAS DE ILUMINACIÓN.
La iluminación tiene un efecto muy importante sobre el desarrollo del aparato reproductor.
El programa de luz que aplicamos (fotoperiodo e intensidad lumínica) nos permite regular el
estímulo y controlar la madurez sexual de los reproductores, por lo tanto, tiene una gran
influencia sobre el rendimiento productivo de los mismos. Debe haber una coordinación
entre el programa de luz, la evolución de la curva de pesos y de la homogeneidad del lote.
Como principio, nunca debe aplicarse un programa de iluminación creciente durante la fase
de cría-recría, puede ser constante o decreciente.
La maduración sexual de las gallinas viene determinada de forma directa, por el programa
de iluminación que se aplica durante el periodo de cría-recría de las pollitas futuras
ponedoras. Este programa previo condicionará además el programa de iluminación que se
habrá de aplicar en la puesta.
3.1.3 MACHOS
A partir de las 18-23 semanas de vida, los machos y las hembras ya se pueden
aparear, pero deben de estar maduros sexualmente. Una vez trasladados a las
instalaciones de reproducción, se les junta de forma gradual. Al igual que las
hembras, es importante que los machos se desarrollen de forma adecuada para
que desarrollen de forma efectiva su capacidad reproductora. También se realiza
un estricto control de pesos corporales, crecimiento en función de la edad y
conformación, comparándolo con la curva ideal. A partir de los 105 días (15
semanas) es importante controlar la llegada a la madurez sexual de forma uniforme
y coordinada con las hembras.

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