REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN

U.E.C.P. “EL PARQUE”
ACARIGUA – ESTADO PORTUGUESA.

REDACCIÓN DE UN CUENTO INÉDITO

Estudiante:

Juan David Terán.

C.I. 31.710.950
Año y Sección: 3ero “U”
Profesora: Vianmi Mujica
Área:
Castellano.

Acarigua, Marzo de 2021

Cuento:

“EL NIÑO DE LA COMIDA RÁPIDA”.

Había una vez un niño llamado Santiago David, de 9 años de edad, era
hijo único, la mayor parte de su tiempo estaba sólo, no tenía con quien jugar
porque vivía en un apartamento, por tal motivo sus padres lo complacían en todo.
Le gustaba mucho la comida rápida como: la hamburguesa, perros calientes,
pizza, entre otras.
 Siempre que su mamá cocinaba, no le gustaba comer, sólo quería salir a
comer comida rápida; cuando comía en casa, la mayoría de las veces obligado por
sus padres.

Un día su mamá salió al trabajo y tuvo un accidente, lamentablemente

murió. Cuando su madre muere faltaban pocos días para que Santiago saliera de
vacaciones escolares. Su padre triste por lo sucedido y en vista que quedó sólo
con su hijo, decide ir de vacaciones unos días para el lugar donde él vivió su
infancia (su casa natal).
 Santiago estaba acostumbrado a vivir en la ciudad y éste lugar donde se
crió su padre y está la mayoría de sus familiares, es un lugar alejado de la ciudad
llamado PALMA REDONDA, éste lugar es muy diferente a lo que él estaba
acostumbrado; allí habían pocas casas, entre una casa y otra había mucha
distancia.

Pero en éste lugar no todo era malo, se respiraba aire puro, había
tranquilidad, no se necesitaba aire acondicionado porque el clima era muy fresco.
En la mayoría de las casas la gente era muy amable y atenta; Además en todas
las casas cocinaban con fogón no utilizaban gas, eso le llamo mucho la atención a
Santiago.
 El primer día que llegaron, sus familiares los recibieron muy contentos,
porque desde que él padre de Santiago se casó, nunca más los había ido a visitar
y casi no habían compartido con Santiago, prácticamente lo conocían era por
fotos. Ese día su abuela paterna llamada Efigenia, preparó unas ricas arepas de
maíz pilado con unas deliciosas caraotas, aguacate y queso; su padre estaba
preocupado porque pensó que tal vez Santiago no iba a comer, pero al contrario
quedó encantado con las arepas de maíz pilado; Además para el almuerzo
hicieron sancocho de gallina criolla y también comió.
 Al día siguiente Santiago estaba muy alegre, compartiendo y jugando con
sus primos y todo lo que cocinaban le encantaba, hasta hacia competencias de
quien se comía todo más rápido. En este día su abuelo mató un cochino de los
que crían y su abuela preparó cochino frito con cachapa y queso, Santiago se
comió todo sin protestar y hasta repitió.

Su padre estaba muy contento y tranquilo porque Santiago estaba

comiendo de todo, pasta con caraota, tostones de plátanos pintón; y lo que más le
sorprendió fue que le gusto la mazamorra de maíz, y junto a sus primos y primas
disfrutaban de su sabor.
 El padre de Santiago se acerca a su madre Efigenia y le dice: “Gracias a
Dios que a Santiago le ha gustado todas las comidas que han preparado, porque
él es muy mal comer nada de lo que preparaba su mamá le gustaba, sólo quería
comida rápida, lo habíamos mal acostumbrado; también veo que le gusta el
ambiente donde me crié. Ahora me doy cuenta mamá que estaba cometiendo un
error, al no traer a Santiago a que compartiera con la familia, en cualquier
chancecito que tenga en el trabajo, los vuelvo a visitar junto a Santiago David”.

FIN