Tema: “LAS 4 VERDADES DEL MATRIMONIO CRISTIANO”

Texto: Efesios 5: 25 – 33
Introducción: El matrimonio es una institución designada por Dios para reflejar Su amor y
compromiso. Dios ha establecido a la familia como el núcleo de la sociedad. A lo largo de las
Escrituras se nos revela que el matrimonio no es un simple acuerdo o pacto entre dos
personas, sino mas bien un diseño divino con propósitos específicos y sagrados. En Génesis
2:24 se nos enseña que el matrimonio fue diseñado por Dios desde el principio, como una
unión entre un hombre y una mujer que se convierten en una sola carne, ésta unión es
semejante a la relación de Cristo con su Iglesia que es testimonio del amor y la fidelidad de
Dios hacia su pueblo. En Efesios 5:25-33, Pablo revela el profundo significado del matrimonio
basado en el amor sacrificial de Cristo y la sumisión de la Iglesia.

Oración de Transición: Veamos a la luz de las Escrituras cuales son esas 4 verdades

I. EL ESPOSO DEBE SER AMOROSO Y DESINTERESADO

A. Debe amar por sobre todas las cosas a la mujer que ha escogido como compañera de
vida.
B. Su amor debe ir más allá de las emociones, es un compromiso diario con su esposa
C. Debemos imitar a Cristo en su manera de amar incondicionalmente a su Iglesia

II. LA ESPOSA DEBE SER SUMISA Y AMOROSA

A. La esposa es llamada a obedecer y sujetarse fielmente con amor a su esposo
B. Esta sumisión no es signo de inferioridad, sino de amor y respeto en el diseño divino
para
el matrimonio.
C. La esposa cristiana es el reflejo de la Iglesia de Cristo.

III. EL MATRIMONIO ES UN REFEJO DE LA COMUNIÓN Y LA UNIDAD

A. Es un pacto entre dos personas, similar al pacto entre Cristo y la Iglesia.
B. Ambos viven y trabajan mutuamente para cuidarse y cultivarse.
C. Es un reflejo del amor abnegado de Dios expresado entre el amor de dos personas.

IV. EL MISTERIO ENTRE CRISTO Y SU IGLESIA ES REVELADO EN EL

MATRIMONIO
A. Porque muestra la unión de Cristo y la iglesia a traves del matrimonio.
B. Da a conocer el amor apasionado, fiel y redentor de Dios hacia los pecadores.
C. Lo que el esposo es para la esposa, Cristo lo es para la Iglesia.

CONCLUSIÓN: Éstas cuatro verdades fundamentales reflejan el modelo divino de amor y

unión conyugal, primero destacamos la relación entre Cristo y la iglesia como un paralelo del
matrimonio humano, los esposos somos llamados a amar a nuestras esposas así como Cristo
amó a su iglesia, podemos resaltar también la unidad indivisible entre el esposo y la esposa
dentro del matrimonio, la tercera verdad destaca la responsabilidad de los esposos de amarse
mutuamente, respetarse y honrarse y el matrimonio revela el papel importante del misterio
sagrado entre Cristo y su iglesia porque se convierte en un signo visible del amor eterno de
Dios por la humanidad.