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RESÚMENES

ADENOVIRUS
Los adenovirus, al menos 47 pueden infectar a los seres humanos. Estos serotipos están
clasificados en seis subgrupos basados en estudios de homología de ADN y patrones de
hemaglutinación. Infectan principalmente a los niños y, con una menor frecuencia, a los
adultos. En niños y adultos inmunodeprimidos se producen cuadros clínicos a partir de virus
reactivados. Existen diversas enfermedades clínicas. Los trastornos habituales provocados
por los adenovirus son infección de vías respiratorias, conjuntivitis (ojos enrojecidos), cistitis
hemorrágica y gastroenteritis.

Su genoma se compone de una molécula de ADN lineal bicatenaria con una proteína
terminal unida a cada extremo 5' mediante enlaces covalentes. Los viriones tienen forma de
deltaicosaedros no encapsulados. La cápside se compone por hexones y pentones.

REPLICACIÓN: Durante esta los genes se transcriben en ambas direcciones desde ambas
cadenas de ADN en momentos distintos. Los genes relacionados se agrupan y los ARN
transcritos se procesan para formar múltiples ARNm en el núcleo. Las proteínas tempranas
favorecen el crecimiento celular, incluida una polimerasa de ADN involucrada en la
replicación.
También codifican proteínas que inhiben las respuestas inmunológicas e inflamatorias del
huésped. Las proteínas tardías, producidas después del inicio de la replicación del ADN,
son principalmente componentes de la cápside. La replicación de los adenovirus se ha
estudiado en cultivos celulares, y un ciclo viral dura de 32 a 36 horas, produciendo
alrededor de 10,000 viriones.
La entrada de los adenovirus a las células ocurre en dos pasos: las proteínas de la fibra
viral interactúan con receptores en la superficie celular, seguido de la interacción de la base
pentona con una α-integrina para la internalización mediada por endocitosis. Una vez en el
núcleo, la cápside libera el genoma de ADN. La pentona y las proteínas de la fibra pueden
ser tóxicas para la célula y afectar la síntesis macromolecular.
CARACTERÍSTICAS: Los adenovirus presentan una cápsula deltaicosaédrica desnuda con
fibras en sus vértices, que actúan como proteínas de adherencia viral. Su genoma es lineal
y bicatenario, con proteínas terminales 5'. La síntesis de la polimerasa de ADN viral induce
la transición de la transcripción de genes tempranos a genes tardíos. El virus codifica
proteínas que estimulan la síntesis de ARN mensajero y ADN, incluyendo su propio ADN
polimerasa. Los adenovirus humanos se agrupan en los tipos A a F, según homologías de
ADN y serotipos (más de 42 tipos).
La transcripción inicial en los adenovirus resulta en la producción de productos genéticos
que estimulan el crecimiento celular y la replicación del ADN viral. Algunos ARNm
comparten promotores y secuencias iniciales,

La replicación del ADN viral ocurre en el núcleo y es mediada por una polimerasa de ADN
vírica que utiliza una proteína terminal de 55 kDa como cebador para la replicación de
ambas cadenas del ADN. La transcripción genética tardía se inicia después de la replicación
del ADN y produce ARNm a partir de un transcrito de ARN primario de gran tamaño
codificado por la cadena derecha del genoma.
Las proteínas de la cápside son producidas en el citoplasma y luego transportadas al núcleo
para ensamblar el virus. Las procápsides vacías se ensamblan primero y luego se incorpora
el ADN y las proteínas nucleares a través de un orificio en la cápside. La replicación y el
ensamblaje a menudo contienen errores, resultando en la acumulación de partículas
defectuosas y ADN en cuerpos de inclusión nuclear. El virus persiste en la célula hasta que
ésta se degenera y el virus es liberado.
MECANISMOS PATÓGENOS: estos mecanismos dan lugar a una infección faríngea. Los
dedos transmiten los virus a los ojos. El virus infecta las células mucoepiteliales de las vías
respiratorias, tubo digestivo y conjuntiva o córnea, provocando lesiones celulares
directamente. La enfermedad está determinada por el tropismo tisular del grupo específico o
serotipo de la cepa vírica. Los anticuerpos son importantes tanto para profilaxis como para
la resolución de la enfermedad.
Las proteínas de la fibra viral determinan la especificidad de la célula diana, y la toxicidad
de la pentona puede resultar en inhibición del transporte del ARNm, síntesis proteica
alterada y daño tisular.
En infecciones por adenovirus, se observan inclusiones intranucleares densas y necrosis de
células epiteliales. La viremia puede ocurrir, especialmente en individuos inmunodeprimidos,
con el virus diseminándose a órganos viscerales. Los adenovirus pueden entrar en un
estado de latencia en tejidos linfoides y otras áreas, reactivándose en condiciones
inmunodeprimidas. Los anticuerpos y la inmunidad celular son cruciales en la resolución de
las infecciones por adenovirus.
Poseen mecanismos para evadir las defensas del huésped, como la inhibición de apoptosis
y la interferencia con la presentación antigénica. Los viriones de adenovirus son resistentes
a diversas condiciones, lo que les permite difundirse por vía fecal-oral, contacto directo y vía
respiratoria.
TRANSMISIÓN: Contacto directo, contacto íntimo, a través de las gotas de aliento y la
materia fecal, las manos, fómites.
MÉTODOS DE CONTROL: Existe una vacuna viva para usos militares, especialmente para
los serotipos 4 y 7.
Se emplea el análisis directo de muestras clínicas para detectar rápidamente los adenovirus
sin necesidad de aislar el virus. Para la detección del tipo y grupo de virus, se utilizan
inmunoanálisis y pruebas genómicas, como la reacción en cadena de la polimerasa y el
análisis de sondas de ADN. Algunos tipos de adenovirus, como los entéricos 40, 41 y 42,
que no crecen en cultivos celulares habituales, se detectan mejor mediante estas técnicas.

VIRUS HERPES HUMANOS


Los virus herpes comparten características morfológicas, forma de replicación y capacidad
para establecer infecciones latentes y recurrentes. La inmunidad celular es esencial tanto
para controlar la infección como para los síntomas. Codifican proteínas y enzimas que
facilitan su replicación y su interacción con el huésped. Pueden causar infecciones líticas,
persistentes, latentes o recurrentes, y algunos se asocian a cánceres humanos.
Las infecciones por virus herpes son comunes y ubicuas. Aunque a menudo son benignas,
pueden causar morbimortalidad, especialmente en personas inmunodeprimidas. Los virus
herpes son sensibles a agentes antivirales y existe una vacuna viva para el virus varicela
zóster.
Los virus herpes son virus encapsulados de gran tamaño con una molécula bicatenaria de
ADN. El virión tiene una envoltura que contiene glucoproteínas y un núcleo rodeado por una
cápside deltaicosaédrica. El espacio entre la envoltura y la cápside, llamado tegumento,
contiene enzimas y proteínas víricas.
La replicación comienza con la interacción de glucoproteínas víricas con receptores
celulares, seguida de fusión con la membrana plasmática. Las enzimas y factores de
transcripción se introducen en la célula en el tegumento. La transcripción viral ocurre en
fases coordinadas y reguladas, incluyendo proteínas precoces inmediatas, precoces y
tardías.
La transcripción del genoma vírico se realiza de forma coordinada y regulada en tres fases:
1. Proteínas precoces inmediatas, que engloban proteínas importantes para la regulación
de la transcripción genética y el control de la célula.
2. Proteínas precoces, que incluyen diversos factores de transcripción y enzimas, incluida
la polimerasa de ADN.
3. Proteínas tardías, formadas principalmente por proteínas estructurales que aparecen
tras el comienzo de la replicación del genoma vírico.
están reguladas por factores codificados por el virus y factores celulares. La interacción
entre estos factores determina si la infección es lítica, persistente o latente.
Las células en estado de infección latente transcriben genes virales específicos en ausencia
de replicación genómica, mientras que la expresión de genes precoces y tardíos conduce a
la destrucción celular y una infección lítica.
La replicación del VHS implica la acción de enzimas codificadas por el virus, incluyendo una
polimerasa de ADN dependiente de ADN y enzimas depuradoras como desoxirribonucleasa
y timidina cinasa. Estas enzimas son esenciales para la síntesis del ADN viral. La
ribonucleótido reductasa convierte ribonucleótidos en desoxirribonucleótidos, mientras que
la timidina cinasa fosforila desoxirribonucleósidos para el uso como sustrato en la
replicación.
CARACTERÍSTICAS: se caracterizan por sus grandes cápsides deltaicosaédricas
envueltas Codifican una variedad de proteínas que manipulan la célula huésped y la
respuesta inmunitaria. Sus enzimas, estimulan la replicación del ADN viral y se consideran
objetivos valiosos para tratamientos antivirales.
La liberación del virus puede ocurrir a través de exocitosis, lisis celular y puentes
intercelulares. Los virus herpes pueden desencadenar diversos tipos de infecciones: líticas,
persistentes, latentes e, incluso, inmortalizantes, como el virus Epstein-Barr. Estos virus son
ubicuos y su control depende en gran medida de la inmunidad mediada por células.

VIRUS DE LA HEPATITIS
El VHA provoca una hepatitis infecciosa que se transmite por vía fecal-oral. Las infecciones
por el VHA acostumbran a ser el resultado del consumo de agua contaminada, marisco u
otro tipo de alimentos. El VHA es un picornavirus que anteriormente se denominaba
enterovirus 72, pero que se ha reclasificado en un nuevo género, Heparnavirus, basándose
en su exclusivo genoma

Replicación: El VHA se replica de manera semejante a otros picornavirus (v. capítulo 56).
Interacciona de manera específica con un receptor expresado en los hepatocitos y en
algunos otros tipos de células. Sin embargo, a diferencia de otros picornavirus, el VHA no
es citolítico y se libera por exocitosis. Los cultivos de laboratorio de VHA se han adaptado al
crecimiento en estirpes celulares primarias y continuas de riñón de mono, pero las cepas
clínicas son difíciles de cultivar en cultivos celulares.
En primer lugar, el VHB tiene un tropismo por el hígado muy definido. Su pequeño
genoma también impone restricciones, como ilustran sus características de transcripción y
traducción. Además, el VHB se replica a través de un intermediario de ARN, y produce y
secreta partículas que actúan como señuelos antigénicos (HBsAg). La adhesión del VHB a
los hepatocitos está mediada por las glucoproteínas HBsAg. Se ha propuesto la
participación de diversos receptores de las células hepáticas, como el receptor de
transferrina, el receptor de asialoglicoproteína y la anaxina V hepática humana. No se
conoce el mecanismo de entrada, pero la HBsAg se une a la albúmina sérica humana
polimerizada y a otras proteínas del suero, y esta interacción puede facilitar la unión y la
captación del virus por las células hepáticas. Cuando penetra en la célula anfitriona, la
cadena parcial de ADN se completa para transformarse en un círculo completo de ADN
bicatenario, y el genoma se transfiere al núcleo de la célula. La transcripción del genoma
está controlada por elementos celulares de transcripción que se encuentran en los
hepatocitos. El ADN se transcribe en tres clases principales) y dos clases secundarias de
ARN mensajeros (ARNm)

enfermedades clínicas: Los síntomas provocados por el VHA son muy similares a los
provocados por el VHB y se deben a las lesiones hepáticas producidas por la respuesta
inmunitaria. Tal como se ha comentado previamente, la enfermedad es más moderada en
los niños que en los adultos y suele ser asintomática. Los síntomas aparecen bruscamente
entre 15 y 50 días después de la exposición, y se intensifican durante 4 a 6 días antes del
comienzo de la fase ictérica (ictericia) (v. figura 65-3). Los síntomas iniciales consisten en
fiebre, astenia, náuseas, pérdida de apetito y dolor abdominal. La ictericia se observa en el
70% al 80% de los adultos, pero tan sólo en el 10% de los niños (< 6 años de edad).
PAPEL DE LOS VIRUS EN LAS ENFERMEDADES
La mayoría de las infecciones víricas provocan síntomas leves o ningún síntoma en
absoluto, y no requieren un tratam iento intenso. El resfriado común, la gripe, los síndromes
seudogripales y la gastroenteritis son enfermedades víricas habituales.
Los principales sitios de aparición de una enfermedad vírica son las vías respiratorias, el
tubo digestivo, los revestimientos epitelial, mucoso y endotelial de la piel, la boca, el aparato
genital, el tejido linfoide, el hígado y otros órganos y el sistema nervioso central (SNC). Los
ejemplos que se dan en este capítulo representan las causas más habituales de
enfermedad.

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