Saludo:
Que la paz de Cristo habite en esta casa
y en todos los que en ella habitan.
Motivación:
Como miembros de la Parroquia de San-
ta Gertrudis, Grecia y siendo enviados
por el Espíritu Santo, queremos agrade-
cerles por abrir las puertas de su hogar,
pero también de su corazón. Como dis-
cípulos de Cristo hemos salido a com-
partir su Noticia, pero también es un
momento para fomentar la gracia y la
fuerza del encuentro, al participar de es-
te momento de bendición queremos es-
cucharlos y compartir el mensaje de la
Buena Noticia con ustedes. Por eso, in-
voquemos la presencia de Dios para que
camine con nosotros y pedirle que abra
nuestra mente y corazón para que el Es-
píritu de Dios renueve nuestros pensa-
mientos y actitudes, rejuveneciendo así
nuestra vida y podamos asemejarnos a la
de su Hijo Jesucristo. Por eso, les invi-
tamos a invocar la presencia de Dios
Uno y Trino:
En el Nombre del Padre,  del Hijo y
del Espiritu Santo.
Ahora hermano(s) les invito a escu-
char la Lectura del Apóstol San Pa-
blo a los Efesios (4, 20-24):
Hermanos, pero no es eso lo que uste-
des han aprendido de Cristo; si es que
de veras oyeron hablar de él de él
aprendieron en qué consiste la verdad.
Despójense de la conducta pasada, del
hombre viejo que se corrompe con sus
malos deseos; renuévense en su espíri-
tu y en su mente; y revístanse del hom-
bre nuevo, creado a imagen de Dios
con justicia y santidad auténticas. Por
lo tanto, eliminen la mentira, y díganse
la verdad unos a otros, ya que todos
somos miembros del mismo cuerpo.
Palabra de Dios.
Pautas para el diálogo:
• La invitación del Apóstol es que
al haber sido encontrados por
Cristo debemos dejar la conduc-
tas o hábitos viciosos que hacen
que el corazón se corrompa y se
aleje de Cristo y por ende de la
comunidad.
• Nos habla de una transformación,
es necesario experimentar un
proceso de “desapego” o si lo
queremos en otra palabra: de
muerte. Necesitamos morir al pe-
cado para nacer a la Vida en Cris-
to.
• Cuando nacemos en Cristo, en-
tonces nos hemos dejado renovar
en el espíritu y en la mente. Lo
que muchas veces nos da miedo,
lo que a nosotros nos parecía im-
posible estar, hacernos presente,
ahora lo podemos, pues nacemos
para la Vida, la Libertad y el
Amor en Cristo.
• Es necesario entonces, vencer
aquellas barreras, etiquetas o pre-
juicios que impiden ver la reali-
dad y la riqueza que Cristo nos
otorga en su Iglesia.
Preces:
Oremos hermanos al Buen Dios que hace
nuevas todas las cosas, para que se digne
escuchar nuestras suplicas y nos atienda
con solicitud de Padre:
Por esta familia N para que Dios les
bendiga, les conceda lo necesario pa-
ra alcanzar la santidad. Oremos.
Escúchanos Señor.
Por todas las naciones y sus habitantes:
para que la paz de Cristo se extienda
a toda familia humana, y los gober-
nantes para que sepan buscar el bien
común. Oremos.
Por cuantos carecen de alimentos, de
justicia o de amor; por cuantos pade-
cen a causa de las discordias familia-
res: para que el Señor sea su fuerza
en la tribulación. Oremos.
Por aquellos que ponen sus dones al ser-
vicio de los enfermos, para que cada
persona que sufre encuentre en su
camino gente capaz de escucharlos,
de curarlos, de ayudarlos, de rodear-
los de amor. Oremos.
Por nuestra parroquia, para que se abra a
la acción del Espirítu Santo y poda-
mos renovar nuestro corazón sin per-
der la fidelidad y el amor al Evange-
lio. Oremos.
Oremos a Dios Padre como Jesús nos en- Parroquia Santa Gertrudis, Grecia.
señó: Padre Nuestro que estas …
Diócesis de Alajuela.
Oración Final:
Te queremos agradecer Dios Santo e in-
mortal por todas las gracias que nos rega- Misión Parroquial
las continuamente: por nuestra vida, fa-
milia, trabajo y hogar. Gracias, porque te
acercas y nos muestras las caricias y la
“Abiertos a la renovación del
fuerza de tu Amor que se derrama cons- Espíritu” Ef 4, 23.
tantemente en nuestras vidas. Ciertamen-
te Señor, no han faltado cosas que nos
desanimen o que nos roben la esperanza,
son momentos difíciles, pero confiamos
en tu Providencia que siempre nos ampa-
ra.
Con el corazón humilde y agradecido ele-
vamos nuestra acción de gracias por com-
partir en tu Nombre este espacio de en-
cuentro contigo y con nuestros hermanos,
ayúdanos a que podamos dejar que nues-
tro corazón y nuestra mente están abier-
tos a la acción de tu Espíritu Santo, deje-
mos los miedos y aquellas falsas seguri-
dades para celebrar en comunidad y co-
mo discípulos tuyos el gozo de tu Pascua.
Amén.
Mientras hacen la siguiente oración se signan
la señal de la cruz:
Que Dios Todo Poderoso nos bendiga, nos
guarde y nos lleve a la vida eterna. Amén.