Está en la página 1de 2

1.

En conclusión, Lewin destaca que los sistemas exhiben comportamientos que no


se pueden predecir basándose únicamente en sus elementos individuales. Las
propiedades de un sistema surgen de las propiedades de sus elementos
constituyentes, pero no son simplemente aditivas o sustractivas. Autores como
Sherif y Asch, influenciados por las teorías de la Gestalt, enfatizaron la
interdependencia y la naturaleza dinámica de los grupos, viéndolos como algo
más que la simple suma de sus partes. Esta perspectiva legitimó el estudio de los
grupos y desvió la atención de los debates improductivos sobre la relación entre
individuos y grupos.

Conceptos como entitatividad, propuesto por Campbell, y grupalidad, propuesto


por Bogardus, tenían como objetivo describir la realidad de los grupos, pero
finalmente fueron abandonados debido a limitaciones en la aplicabilidad de la
investigación. Sin embargo, la aceptación de la realidad grupal es casi unánime
hoy en día, aunque existe una tendencia a centrarse en los aspectos negativos del
comportamiento grupal. Este sesgo negativo perpetuado por los psicólogos
sociales ha llevado a un desequilibrio en la representación de los grupos,
enfatizando los efectos negativos sobre los positivos como la cooperación y la
facilitación.

Comprender la complejidad de las relaciones entre individuos y grupos es crucial


para abordar cuestiones como la xenofobia, el racismo y la discriminación. En
lugar de culpar a los grupos por los problemas sociales, es esencial reconocer los
beneficios potenciales de ser miembro de un grupo y fomentar mejores relaciones
entre individuos y grupos. Los enfoques que ven a los individuos y a los grupos
como entidades separadas son inadecuados para comprender la fluidez y la
interdependencia de las interacciones sociales. Autores como Tajfel han
propuesto un continuo de comportamiento interpersonal e intergrupal,
destacando la naturaleza entrelazada del comportamiento individual y grupal en
contextos sociales.

En general, reconocer la interacción continua entre las dinámicas individuales y


grupales es clave para comprender el comportamiento social. Diferenciar entre
procesos interpersonales y grupales permite una comprensión más matizada del
comportamiento en diversos contextos sociales. Desarrollar teorías específicas
para explicar el comportamiento grupal, distintas de las teorías del
comportamiento individual, es esencial para comprender las complejidades de la
dinámica grupal y promover interacciones positivas dentro de los grupos
2LA PSICOLOGÍA DE LOS GRUPOS EN EL CONTEXTO DE LAS CIENCIAS SOCIALES

El estudio de los grupos es un campo amplio dentro de las ciencias sociales,


tradicionalmente cubierto por la antropología, la sociología, la psicología y otras
ramas como la psicología social, la educación, la psicología clínica, la psicología
organizacional y la psicopatología comunitaria. Comprender la psicología de
grupos requiere integrar perspectivas de estas disciplinas, destacando la
tendencia a la convergencia. Para este propósito se utilizan el diagrama de
Parsons (1969) y el “modelo de prisma conductual” de Munne (1986, 1989). El
sistema de actividad humana de Parsons incluye subsistemas biológicos,
personales, sociales y culturales, cada uno de los cuales corresponde a un campo
de investigación específico. La psicología de grupo se sitúa en la intersección de
factores psicológicos y sociales, incorporando elementos biológicos y culturales.
El modelo de Munne aclara aún más la relación entre el comportamiento y
disciplinas como la etología, la psicología, la sociología y la psicología social,
enfatizando el impacto de la biología y la evolución.

La psicología de grupo se sitúa dentro de la tensión entre las perspectivas


psicológicas y sociológicas, ya que los individuos interactúan con los grupos y son
influenciados por ellos. El campo tiene conexiones con la psicología social y
estudia cómo los grupos dan forma a los individuos y viceversa. Si bien tanto la
psicología como la sociología contribuyen a comprender la dinámica de grupo,
tienen metodologías y objetivos distintos. La naturaleza interdisciplinaria de la
psicología de grupos enfatiza la importancia de la colaboración con otras ciencias
para comprender las complejidades del comportamiento grupal y su impacto en
los individuos.

También podría gustarte