Al analizar la infraestructura de una empresa desde la perspectiva de las condiciones

medioambientales, es importante considerar varios factores que pueden influir en la

sostenibilidad y el impacto ambiental de las operaciones. Algunos de estos factores incluyen:

Eficiencia energética de las instalaciones: Evaluar cómo se utiliza la energía en las instalaciones de
la empresa, incluyendo el uso de equipos y sistemas de iluminación eficientes, sistemas de
calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC), y otras tecnologías que reducen el consumo
de energía.

Gestión de residuos: Analizar cómo se gestionan los residuos generados por las operaciones de la
empresa, incluyendo la implementación de programas de reciclaje, la reducción de residuos en
origen, y el tratamiento adecuado de residuos peligrosos.

Uso de recursos naturales: Evaluar cómo se utilizan los recursos naturales en las operaciones de la
empresa, incluyendo el agua, materiales de construcción, materias primas y otros recursos
naturales. Se busca identificar oportunidades para reducir el consumo de recursos y minimizar el
impacto ambiental.

Diseño y construcción sostenibles: Evaluar si las instalaciones de la empresa han sido diseñadas y
construidas de manera sostenible, utilizando materiales de construcción ecológicos, técnicas de
construcción que minimizan el desperdicio, y considerando la eficiencia energética y el uso de
recursos durante todo el ciclo de vida de la construcción.

Impacto en el entorno natural: Considerar cómo las operaciones de la empresa pueden afectar el
entorno natural circundante, incluyendo la calidad del aire, del agua y del suelo, así como la
biodiversidad local. Se busca identificar medidas para minimizar el impacto ambiental y proteger
los ecosistemas sensibles.

Cumplimiento normativo ambiental: Evaluar si las instalaciones de la empresa cumplen con todas
las regulaciones y leyes ambientales aplicables, incluyendo normativas sobre emisiones, vertidos,
contaminación del suelo, protección de especies en peligro de extinción, entre otras.

Resiliencia ante eventos climáticos extremos: Considerar la capacidad de las instalaciones de la

empresa para resistir y recuperarse de eventos climáticos extremos, como inundaciones,
tormentas, sequías y otros fenómenos relacionados con el cambio climático.
Evaluar estos factores proporciona una visión integral del impacto ambiental de la infraestructura
de la empresa y ayuda a identificar áreas de mejora para promover la sostenibilidad y la
responsabilidad ambiental