cosecha Principales daños y sus consecuencias A nivel mundial se estima que las pérdidas post- cosecha de frutas y hortalizas, causadas por micro-organismos son del 5 al 25% en países desarrollados y del 20 al 50% en países en desarrollo. Los países desarrollados cuentan con condiciones climáticas / ambientales menos favorables para la ocurrencia de este tipo de daños, pero también disponen de una mayor cantidad de recursos tecnológicos, económicos y de infraestructura, para prevenirlos o reducirlos. Las frutas y hortalizas frescas son generalmente los productos más susceptibles al deterioro post-cosecha.
1. Cambios 2. Daños mecánicos
fisiológicos: causados por senescencia y magulladuras (roces, maduración comprensión o Algunas de impacto) las razones son las siguientes: 4. Causas 3. Daño químico patológicas: (residuos de (daños por plaguicidas) microorganismos) Son muchos los factores que pueden afectar a los productos agrícolas durante en post-cosecha; la mayoría de éstos son aspectos intrínsecos al ciclo de vida de los frutos, como la respiración o la producción de etileno; pero, también puede haber factores externos que les afecten y deterioren, como daño por manejo inadecuado. Los daños fisiológicos: Se deben a factores externos y naturales, por ejemplo, la exposición a temperaturas extremas o los desbalances nutricionales, las frutas y vegetales pueden presentar daños fisiológicos que repercuten sobre su calidad. Algunos de los daños más comunes: Daños por frío: Temperaturas bajas ayudan a conservar en mejor estado las frutas y vegetales, pero debe haber un control. Pero la exposición a heladas o temperaturas bajo cero de manera constante puede desarrollar síntomas negativos, como: sabores amargos, olores fuertes, deterioro de tejidos, etc. Daño por altas temperaturas: Al igual que el frío excesivo, temperaturas muy elevadas influyen en la calidad de los frutos: modifican el efecto del etileno, acelerando el proceso de envejecimiento o pueden favorecer la germinación de esporas de hongos patógenos; también provocan que los frutos experimenten una pérdida acelerada de agua que puede terminar en la pérdida de la cosecha. Daños por bajos niveles de oxígeno: Un bajo nivel de O₂ en el ambiente, puede inducir procesos de fermentación en las frutas ocasionando malos olores y sabores; así como, el deterioro del producto. Esto sucede cuando la ventilación del ambiente en el cual se encuentran los productos es deficiente y les favorecen las altas temperaturas. Daños por altos niveles de CO₂: La acumulación de dióxido de carbono puede retrasar el proceso normal de ablandamiento y pérdida de verdosidad en algunas frutas; en otros casos, se observan síntomas de decoloración y deterioro interno por la acumulación de este gas. El exceso de CO₂ también puede producir en algunas frutas, mal sabor y marcas en la piel. Daños físicos: Pueden ser lesiones ocasionadas por golpes, caídas o cualquier tipo de rotura de la piel del fruto. Como consecuencia de esto se producen una serie de reacciones físicas que pueden mostrarse en forma de tejido dañado, ablandamiento de un segmento, ennegrecimiento de la piel, malos olores, etc. Las enfermedades: En post-cosecha, los productos agrícolas son susceptibles de verse afectadas por microorganismos como hongos y bacterias que deterioran su rendimiento y calidad. Cada patógeno tiene un efecto distinto, pero las consecuencias más comunes son: pudrición, degradación, pérdida de sabor y malos olores. A más tiempo estén los productos almacenados, mayor será la posibilidad de contraer alguna enfermedad, pues la capacidad de síntesis de las sustancias naturales que los protegen de a las enfermedades, disminuye. Algunas de las enfermedades en post-cosecha más comunes son las siguientes:
Penicillium Digitatum (moho verde)
Penicillium Italicum, P. expansum (moho azul). Alternaria Citri. Botrytis Cinerea. Geotrichum Candidum. Phytophthora Citrophthora. Phomopsis. Diplodia. Rhizopus Nigricans. La aparición de hongos en esta fase es más común; por lo general, su crecimiento es óptimo a 20 – 25°C, aunque toleran temperaturas de hasta 38°C. Temperaturas inferiores a 15°C inhiben su crecimiento y desarrollo; algunos hongos como P. expansum, B. cinérea, Alternaria alternata, pueden hacerlo incluso a -1°C Para que se lleven a cabo estos procesos de infección es necesario también que el ambiente sea húmedo, el cual suele darse en las zonas de manipulación de este tipo de productos (campo, centro acopio, planta proceso, etc). Algunos roedores e insectos pueden aumentar las pérdidas de forma directa al causar daños mecánicos e indirectamente al transmitir y crear vías de entrada a patógenos y agentes de riesgo cuarentenario, E.: Ceratitis capitata o mosca de la fruta. Factores que influyen en deterioro de deshidratados y granos. Los más importantes son la humedad, la temperatura, la condición del grano y la cantidad de oxígeno disponible en el almacén. La humedad es el factor de mayor influencia en la conservación de granos y semillas durante el almacenamiento Bajo las mismas condiciones de almacenamiento, los granos y semillas pueden tener calidades diferentes, que dependen de variables ocurridas en etapas anteriores (cosecha, manejo). Cuando las condiciones ambientales son adversas el deterioro puede ocurrir en pocos días, descomponiendo el grano hasta su destrucción total. La calidad inicial de granos y semillas depende de los siguientes factores: - Condiciones climáticas en el período de maduración. - Grado de maduración en el momento de la cosecha. - Daños mecánicos - Impurezas - Humedad - Temperatura - Microorganismos - Insectos - Roedores. Los enemigos de los granos almacenados son: Microorganismos, insectos y roedores. Microorganismos (levaduras, moho, bacterias) son agentes biológicos presentes en el suelo que, transportados por el aire o el agua, pueden contaminar los productos antes, durante o después de su recolección. Insectos y roedores destruyen y contaminan los productos. En manejo post-cosecha, el almacenamiento es clave: * Los recipientes para almacenar grano o semilla no deben estar en contacto directo con el suelo. * Los espacios de almacenamiento deben estar limpios y frescos. * Deben estar protegidos bajo techo. * No tener contacto con contaminantes de ningún tipo. * Nunca mezclar grano viejo con grano nuevo. X X Para garantizar la disponibilidad de granos y semillas, en cantidad y calidad, se debe realizar un buen manejo post- cosecha, que incluye una serie de prácticas para acondicionar el producto, tales como: secado, limpieza, selección, control de plagas, clasificación y almacenamiento; que se efectúan a partir de la recolección en campo y hasta la comercialización. Consecuencias *Un manejo inadecuado, genera pérdidas a los productores. * Encarece los productos al consumidor, se reduce la oferta. * Baja la calidad de los productos. Consecuencias Los productos pierden valor por derrames, contaminación química, daños provocados por usar herramientas inadecuadas, o exceso de rudeza en la manipulación durante la recolección o las operaciones de carga, empaquetado o transporte