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INTRODUCCIÓN

La hipertensión, también conocida como tensión arterial alta o elevada, es un


trastorno en el que los vasos sanguíneos tienen una tensión persistentemente alta,
lo que puede dañarlos. Cada vez que el corazón late, bombea sangre a los vasos,
que llevan la sangre a todas las partes del cuerpo. La tensión arterial es la fuerza
que ejerce la sangre contra las paredes de los vasos (arterias) al ser bombeada
por el corazón. Cuanto más alta es la tensión, más esfuerzo tiene que realizar el
corazón para bombear.¹

La tensión arterial normal en adultos es de 120 mm Hg cuando el corazón late


(tensión sistólica) y de 80 mm Hg cuando el corazón se relaja (tensión diastólica).
Cuando la tensión sistólica es igual o superior a 140 mm Hg y/o la tensión
diastólica es igual o superior a 90 mm Hg, la tensión arterial se considera alta o
elevada.
Se entiende por hipertensión arterial (HTA) a la enfermedad que se produce
cuando las cifras de tensión arterial medidas como promedio en tres tomas
realizadas en condiciones apropiadas, con intervalos de 3 a 7 días entre cada
toma, se encuentran ≥140 mmHg de tensión arterial sistólica (TAS) y ≥ 90 mmHg
de tensión arterial diastólica (TAD). Se trata de una enfermedad crónica que
evoluciona de forma silente durante muchos años, no resulta fácil establecer el
número de personas que se convierten en hipertensos cada año.
La Hipertensión arterial (HTA) es un importante problema de salud, ya que un
millón de adultos (20%) son hipertensos en todo el mundo. Es el motivo de
consulta más frecuente y el principal factor de vulnerabilidad tratable de la
enfermedad cerebrovascular (ECV), el infarto de miocardio (IMA), insuficiencia
cardiaca (IC), enfermedad vascular periférica y la insuficiencia renal crónica (IRC).
Predomina en el sexo masculino antes de los 50 años, después de la menopausia
su frecuencia se incrementa en la mujer y sobrepasa a la del hombre. Su
prevalencia es mayor entre la población con piel negra, con tasas más elevadas
de fallo renal, ECV y mortalidad.²

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Este signo, síndrome y enfermedad al mismo tiempo se asocia a tasas de
morbilidad y mortalidad considerablemente elevadas, por lo que se considera uno
de los problemas más importantes de la salud pública, especialmente en los
países desarrollados y en vías de desarrollo; afecta cerca de mil millones de
personas a nivel mundial. La mayoría de las veces es asintomática pero fácil de
detectar; sin embargo, cursa con complicaciones graves y letales que de no
tratarse a tiempo pueden dañar irreversiblemente múltiples órganos y sistemas de
la economía corporal.

Dentro de las enfermedades crónicas no transmisibles la hipertensión arterial


(HTA) constituye un problema de salud a nivel mundial, pues 30 % de la población
sufre de sus consecuencias, lo cual origina 7.1 millones de muertes a nivel
mundial lo que representa un 13 % de la mortalidad total.

Si tenemos en cuenta que la primera causa de muerte en Cuba la constituyen las


enfermedades del corazón y dentro de ellas la más importante es el IMA y
conocemos la estrecha relación de la Hipertensión Arterial (HTA) con dicho
padecimiento, queda demostrado que en la hipertensión no tratada fallece el 50%
de pacientes con cardiopatía coronaria, el 33% de apoplejía y del 10 al 15% de
insuficiencia renal. 3

Existen estudios en los que se ha demostrado que una intervención educativa


mejora el conocimiento en estos pacientes, generando beneficios para ellos, que
derivarán en un mejor control de su enfermedad. De un paciente bien informado
se puede esperar que cumpla con el tratamiento, mejore sus hábitos de vida
y, en consecuencia, sus cifras de presión arterial, así como su calidad de vida y
4,5
por extensión, la de sus familiares.

La hipertensión arterial fue descrita por primera vez por el científico inglés Thomas
Young en 1808, donde realiza cálculos e hipótesis de presión arterial inspirado en
los trabajos previos de Stephen Hales. El médico inglés Richard Bright en 1836
publica un texto sobre enfermedades renales: describiendo la enfermedad de

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Bright. El médico italiano Domenico Cotugnoe 1770 realiza estudios sobre el
contenido de albúmina en la orina (Albuminuria) en algunas enfermedades
renales, su contribución es la de enlazar estas evidencias dispares: enfermedad
del riñón (albúmina) e hipertensión. Estos estudios inician la investigación química
de otros componentes de la orina, y se relacionan levemente con evidencias de la
enfermedad.
No es hasta 1876 en que se fabrican los primeros aparatos y hasta 1908 que
Korofkoff muestra el esfigmomanómetro de mercurio, el cual mantenemos hasta
nuestros días.

El concepto de hipertensión esencial (hipertonia esencial) fue introducido en 1925


por el psicólogo Otto Frank para describir la presión arterial que no posee una
causa específica. En el año 1928, el término hipertensión maligna que fue
acuñada por diversos doctores pertenecientes a la Mayo Clinic describen una
apreciación de manera súbita y rápida de aumento de presión arterial, con una
retinopatía severa y una función correcta del riñón que resulta tras un año en la
muerte por causa de un infarto, fallo cardiaco o fallo renal. 3
Tras la Segunda Guerra Mundial la investigación en soluciones farmacológicas se
disparó. Las investigaciones del doctor Edward David Freis en los años setenta
dieron con fruto el empleo de diuréticos capaces de ofrecer prestaciones
hipotensas.

Las tendencias mundiales al aumento de la expectativa de vida en la mayoría de


los países, ha propiciado que una cantidad de personas transite hacia el
envejecimiento. En la mayoría de los países, la prevalencia está entre un 15 a
30%, así, por ejemplo, en los EUA oscila entre 30 y 38%, es poco mayor en el
hombre que en la mujer y los afrodescendientes tienen una incidencia y
prevalencia mayores en comparación con los sectores de la población blanca. La
frecuencia de HTA aumenta con la edad, demostrándose que después de los 50
años, casi el 50% de la población la padece. En Cuba la prevalencia de la HTA ha
aumentado marcadamente desde 1995 con una tasa de 69.6 por cada 1000

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habitantes, hasta el 2014 con 196.2 por cada 1000 habitantes, más frecuente en
mayores de 60 (587x1000 hab.). En el 90% de los casos la causa es desconocida
por lo cual se le ha denominado "hipertensión arterial esencial", con una fuerte
influencia hereditaria y en un 5 al 10% de los casos existe una causa directamente
responsable de la elevación de las cifras tensionales. A esta forma de hipertensión
se le denomina "hipertensión arterial secundaria" que no solo puede ser tratada y
desaparecer para siempre sin requerir tratamiento crónico, sino que además
puede ser la alerta para localizar enfermedades graves de las que sólo, es una
manifestación clínica. Aunque más frecuentemente se encuentran los pacientes la
HTA de causa esencial, existen causas curables de HTA secundaria, que se
deben tener en cuenta a la hora del manejo de un paciente hipertenso.
Algunos de los factores ambientales que contribuyen al desarrollo de la
hipertensión arterial incluyen el consumo de alcohol y las profesiones estresantes,
se ha notado que, en sociedades económicamente prósperas, estos factores
aumentan la incidencia de hipertensión con la edad.
La prevalencia ha aumentado, asociada a patrones alimentarios inadecuados,
disminución de la actividad física y aspectos conductuales relacionados con los
hábitos tóxicos. Aunque se dispone de fármacos eficaces para su tratamiento y de
numerosos programas científicos de formación y actualización, la realidad es que
solo se controla un porcentaje bajo de pacientes de acuerdo con las cifras
consideradas normales en la actualidad.
Una porción importante de los hipertensos no está consciente de su estado y en
Cuba, este conjunto se calcula en cerca del 30 %. El perfeccionamiento de la
prevención y el control de la presión arterial es un desafío importante para todos
los países, lo cual debe constituir una prioridad de las instituciones de salud, la
población y los gobiernos. La adecuada percepción del riesgo que significa
padecer de HTA nos obliga a ejecutar una estrategia poblacional con medidas de
educación y promoción. 6,7

En Cuba, la prevalencia de HTA es de 28 a 32% en adultos mayores, en personas


de 15 años y más, 30% en zonas urbanas y del 16% en las zonas rurales. En

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nuestro país hay actualmente un aproximado de 2.6 millones de hipertensos. En
Holguín para el año 2010 la prevalencia en esta provincia ascendió a 180 798
casos y en el 2014 se reportaron 5 576 casos nuevos. Al terminar el año 2018, en
el policlínico de Buenaventura se reportaron un total de 6663 casos de
hipertensión arterial, de ellos 2936 mujeres y 3727 hombres, del total de casos
161 fueron reportados en hoja de cargo como captaciones de esta enfermedad.
Nuestro consultorio tiene un total de 163 hipertensos, de ellos 72 hombres y 91
mujeres, el paciente más joven tiene 17 años de edad y los grupos etarios con
más hipertensos, son el de 55-59 y los de 60 y más. Por lo que teniendo en cuenta
la prevalencia de esta afección en esta población y las frecuentes
descompensaciones nos motivamos a la realización de esta investigación en el
que se plantea como problema científico:
Bajo nivel de conocimientos de los pacientes hipertensos del Consultorio médico
de la familia de Jagüeyes sobre la hipertensión arterial enero – diciembre 2018.

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MARCO TEÓRICO

La hipertensión arterial es una enfermedad poligénica interrelacionada con varios


factores, que ha ido en aumento con los nuevos estilos de vida inadecuados, la
vida sedentaria y los hábitos alimentarios que tienden a comida rápida y alimentos
chatarra, de poco valor nutricional, con exceso de sal y grasas saturadas. Son de
gran importancia los antecedentes familiares de hipertensión arterial, el sobrepeso
u obesidad, el hábito de fumar y el estrés.

Según el Séptimo Reporte del Comité para la Prevención, Detección Evaluación y


Tratamiento de la Hipertensión Arterial (JNC VII) se clasifica según las cifras de
TA como normal la sistólica menor de 120 mm Hg y la diastólica menor de 80
mmHg, prehipertensión 120-139mm Hg o 80-89 mm Hg, estadio 1;140-159 mm Hg
o 90-99 mm Hg; estadio 2; mayor de160 o mayor de 100, y aislada 140 o más y
menos de 90mm Hg respectivamente (sistólica y diastólica).
Esta clasificación resulta útil para identificar, de acuerdo con el nivel de tensión
arterial, a individuos y grupos poblaciones y poder establecer, de cierta forma, el
riesgo particular de cada individuo en relación con la gravedad de la hipertensión.
De igual forma las cifras de TA no constituyen por sí solas el único indicador
pronóstico y la evolución de esta enfermedad, hay que tener en cuenta los
factores de riesgo asociados, así como otros aspectos a calificar. La clasificación
prehipertensión, introducida por vez primera, reconoce esta relación y señala la
necesidad de incrementar la educación tanto del personal médico asistencial en
todos sus niveles como el de la población en general.
Clasificación de la hipertensión arterial según etiología
Hipertensión arterial esencial. También denominada idiopática, primaria o
criptogénica. Ocupa alrededor del 90-95% de los casos de pacientes hipertensos y
se debe a disímiles causas, donde su dificultad principal para descubrir sus
mecanismos causales, es la gran variedad de sistemas que participan en la
regulación de la tensión arterial, interrelacionándose todos de manera compleja.

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Hipertensión arterial secundaria. Ocupa el 5-10% de los casos, donde existe una
causa etiológica responsable de la elevación de las cifras tensionales, que no solo
puede en ocasiones ser tratada y desaparecer para siempre sin requerir
tratamiento a largo plazo, sino que además, puede ser la alerta para localizar la
enfermedad de base causante de esta hipertensión.
Fisiopatología
A pesar de la alta incidencia de hipertensos a nivel mundial y los enormes estudios
realizados a lo largo de la historia, aun no se puede dilucidar a ciencia cierta,
cuales son los mecanismos responsables de la elevación de la tensión arterial en
el 95% de los pacientes (HTA esencial). De aquí se deriva el hecho de que la
incidencia y prevalencia de este fenómeno sean diferentes para distintas
poblaciones de individuos susceptibles, de acuerdo con sus características
demográficas, étnicas, de edad, sexo y factores hereditarios. El conocimiento de la
verdadera magnitud de la proporción de la población afectada se ve obstaculizado
por varios hechos. El primero es que una porción importante de los hipertensos no
está consciente de su estado ; y, en Cuba, este conjunto se calcula en cerca del
30%.La situación de desconocimiento se incrementa en la niñez y adolescencia,
por la ausencia de hábito en las consultas de la toma sistemática de la TA a esa
categoría de pacientes, y se ha evidenciado, durante pesquisas sistemáticas, que
existe un gran porcentaje de personas jóvenes que padecen de HTA o de
prehipertensión, y que desconocía totalmente este hecho. En segundo lugar, como
resultado de vigilancias automatizadas de la TA, se ha vendido acrecentando la
noción de que entre el 2 y el 34% de aquellos que resultan con mediciones
elevadas de la TA en los consultorios médicos, no mantienen niveles hipertensivos
durante su vida cotidiana (hipertensión bata blanca), aunque se mantiene
controversia con respecto a si estos grupos comportan pronósticos distintos al de
los hipertensos comprobados o no. Sobre lo que sí parece existir acuerdo, es que
la HTA es el indicador o factor de riesgo siempre independiente de enfermedad
vascular, de mayor incidencia y prevalencia en las sociedades occidentales,
situación que ha sido comprado en múltiples estudios.

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E bagaje de conocimiento acumulado sobre los hechos que inducen el proceso
hipertensivo (patogenia) y sobre los mecanismos de producción de las
manifestaciones de la enfermedad (fisiopatología) es, en la actualidad, enorme.
Sin embargo, el caudal de teorías que en ambas áreas se mantienen aún sujetas
a controversias y especulación, tiene un volumen equivalente ; y es probable que
que tenga dimensiones superiores, lo que todavía se desconoce al respecto. Lo
aceptado es que la HTA se origina como resultado de la alteración en los
mecanismos que regulan y mantienen la TA normal.
Algunos autores, en búsqueda de las causas de HTA esencial, han planteado la
teoría del "mosaico patogénico", donde intenta explicar los disímiles mecanismos
para los cuales puede elevarse la TA, involucrando factores hemodinámicos,
neurohumorales, endocrinos, renales, genéticos y ambientales, teniendo gran
aceptación a nivel mundial y demostrando que el hombre y sus enfermedades,
deben verse con un enfoque biosicosocial
Diagnóstico
La HTA es un enfermedad silenciosa, que cursa con síntomas inespecíficos en la
mayoría de los casos, dependiendo a su vez del estadio de la misma, la evolución
y los daños que ya puedan estar establecidos o no en el momento del diagnóstico.
El médico debe conocer los datos semiológicos más importantes que pueden
presentarse en la evolución de la enfermedad, y que señalan, muchas veces, la
presencia de HTA.
La cefalea, a pesar de ser un síntoma inespecífico, es constante en la mayoría de
los pacientes hipertensos de comienzo o en formas avanzadas de HTA cuando
cursa con cifras elevadas. Esta cefalea puede presentarse en horas tempranas del
día, aunque también puede aparecer durante el sueño y despertar al enfermo.
Cuando esta se acompaña de náuseas, vómitos, fotofobia y de forma pulsátil,
puede simular una crisis migrañosa bastante molesta.
También pueden aparecer palpitaciones, insomnio, irritabilidad, disnea, trastornos
de personalidad, sudación, rubor y otros síntomas que puedan apuntar a una HTA
secundaria, donde la anamnesis y el examen físico son de suma importancia para
comprobar estas sospechas.

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De modo característico, la HTA transcurre de una forma encubierta, sin síntomas
prominentes, siempre que la elevación tensional no sea extrema y no aparezcan
complicaciones que impliquen daño en los órganos diana: aquellos sobre los que
la hipertensión ejerce su impacto principal. Las quejas sintomáticas de los
pacientes hacia la región lesionada. Así, las cefaleas intensas, zumbidos de oídos,
vértigos, trastornos sensoriales convulsiones y otros estados de déficit
neurológico, son propios de la encefalopatía hipertensiva o de accidentes
cerebrovasculares en instalación o ya establecidos. La disnea de esfuerzo
paroxística, palpitaciones y dolor precordial hablan de cardiopatía hipertensiva en
distintos grados de desarrollo, o de enfermedad coronaria, mientras que la
hematuria y la anemia pueden ser expresión de daño renal. En caso de que se
evidencien otros síntomas y signos de mayor importancia, es obligado realizar un
análisis profundo de los mismos y descartar cualquiera de las múltiples causas de
HTA secundaria.
El diagnóstico requiere la valoración integral del paciente y la realización de una
historia clínica minuciosa. La toma correcta de la TA es el punto cardinal a la hora
de diagnosticar la hipertensión arterial. Se deben tener en cuenta aspectos como
el ritmo circadiano, factores de riesgo estrechamente ligados (la edad, el sexo, la
raza, antecedentes patológicos familiares y personales), la historia de la
enfermedad, así como un correcto examen físico en búsqueda de síntomas y
signos que indiquen el inicio de la HTA u otros datos semiológicos que puedan
hacer sospechar una afectación orgánica de comienzo inminente.
Se ha comprado que el monitoreo ambulatorio de la presión arterial (MAPA), es un
indicador que cada vez cobra mayor importancia en el mundo actual. A través de
dispositivos o equipos electrónicos automáticos, se registran en 24 horas las cifras
de TA, ejecutando mediciones periódicas fuera del contexto médico o de la
consulta, obteniéndose cifras más fidedignas y permitiendo valorar entre otras
cuestiones :la eficacia del tratamiento antihipertensivo, pacientes con hipertensión
bata blanca, diagnóstico de HTA resistente o refractaria, variaciones circadianas y
riesgo de afectación en órganos Diana, entre otros.

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La hipertensión se diagnostica luego de tres o más tomas de TA de forma correcta
en tres tomas durante diez días, constatándose cifras de PAS y/o PAD mayores
de 139mm Hg y 89mm H respectivamente.
Correcta medición de la tensión arterial:
1. Dar al paciente 5 min de descanso antes de la toma de TA.
2. No fumar o ingerir cafeína 30 min antes.
3. Posición sentada u brazo apoyado.
4. El manguito de esfigmo debe cubrir al menos dos tercios del brazo, el cual debe
estar a la altura aproximada del corazón.
5. Palpar la arteria radial e insuflar el manguito hasta 20 o 30 mm Hg sobre la
desaparición del pulso.
6. Colocar el diafragma del estetoscopio sobre la arteria humeral en la fosa
antecubital y desinflar el manguito a una velocidad de 3 mmHg/s. La lectura debe
estar fijada en los 2 mm Hg o divisiones más próximas a la aparición o
desaparición de los ruidos.
7. Efectuar dos lecturas separadas por 2 min, si la diferencia es de 5 mm Hg o
más se debe hacer una tercera medición y promediarlas.
8. Verificar en el brazo contralateral y tomar en cuenta la más elevada.
Evaluación clínica del paciente hipertenso
Según la Guía cubana para la prevención, diagnóstico y tratamiento de la HTA,
debe estar encaminada a:
-Clasificar la hipertensión del paciente según las cifras de TA.
-Identificar las causas de la HTA en caso de ser secundaria o que se sospeche de
la misma.
- Precisar y evaluar la presencia de daño de órganos diana y la extensión del
mismo si lo hubiera.
-Definir y evaluar la respuesta a la terapéutica impuesta.
-Identificar otros factores de riesgo cardiovascular o comorbilidades asociadas que
permitan definir un pronóstico futuro y aplicar la terapéutica más adecuada.
-Precisar los factores psicosociales y ambientales que puedan o no influir.
Historia clínica

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Anamnesis
-Antecedentes familiares de TA elevada o de enfermedades cardiovasculares.
-Antecedentes del paciente sobre enfermedades cardiovasculares, renales,
cerebro vasculares o diabetes mellitus.
-Tiempo de duración de la hipertensión y cifras que ha alcanzado.
-Resultados y efectos secundarios de los medicamentos utilizados.
-Historia de cómo se ha comportado su peso corporal, si realiza ejercicios físicos,
cantidad de sal, grasa y alcohol que ingiere.
-Síntomas que puedan sugerir hipertensión secundaria.
-Factores psicosociales y ambientales.
-Otros factores de riesgo cardiovasculares: dislipidemias, hábito de fumar,
obesidad, intolerancia a los carbohidratos.
-Datos sobre medicamentos que utiliza rutinariamente.
Examen físico:
-Tres medicaciones de la TA (para diagnóstico).
-Calcular el índice de masa corporal y clasificarlo en:
Sobrepeso: intervalo de 25-29.9 kg/m2.
Obeso: intervalo de 30-39.9 kg/m2.
Obesidad mórbida: 40kg/m2 o más.
-Examen del fondo de ojo: buscar retinopatía. Clasificación de la retinopatía
hipertensiva de Keit y Wagener:
Grado I: arterias estrechadas.
Grado II: signos de Gunn ( entrecruzamiento arteriovenoso patológico).
Grado III: hemorragias y/o exudados.
Grado IV: hemorragias y/o exudados con papiledema.
-Examen del abdomen buscando soplos, aumento del tamaño de los riñones,
masas tumorales, dilatación de la aorta.
-Examen del aparato respiratorio buscando entre otros, broncoespasmo y signos
de hipertensión pulmonar.
-Examen del cuello buscando soplos carotídeos, venas dilatadas y aumento del
tamaño del tiroides.

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-Examen del corazón precisando la frecuencia cardíaca, aumento del tamaño del
corazón, elevación del precordio, clicks, soplos y arritmias.
-Examen de las extremidades, precisando disminución o ausencia de pulsos
arteriales periféricos, soplos y edemas.
- Examen neurológico completo.
Diagnóstico etiológico:
Las clasificaciones según las causas de la HTA son extensas y ocupan un lugar
importante dentro de este acápite, las cuales deben ser identificadas siempre que
sea posible. No es ocioso repetir que en la filosofía del diagnóstico, es vital tratar
de descubrir hipertensiones secundarias, potencialmente curables, por lo que esto
implica para el pronóstico del paciente.
Hipertensión esencial: En el 95% de los pacientes, cuando se descartan causas
secundarias de la misma.
Hipertensión secundaria: Sus causas etiológicas constituirán a su vez los
diagnósticos diferenciales de la HTA Esencial. La HTA secundaria debe
sospecharse en hipertensión que se inicia antes de los 20 y después de los 50
años de edad, así como cuando se constatan cifras de TA mayores de 180/110,
signos de lesiones orgánicas graves (trastornos oculares, trastornos renales,
neurológico y cardiovasculares), soplos abdominales y/o lumbares además de
resistencia al tratamiento con más de tres fármacos en caso de que el paciente
refiera el antecedente de la enfermedad y cumpla con el mismo correctamente.
Estas entidades causantes de HTA secundaria pueden agruparse de la siguiente
forma:
Medicamentos y hormonas exógenas: Es de suma importancia descartar el uso de
medicamentos como causa secundaria de hipertensión arterial dada la prevalencia
de uso de este tipo de fármacos en la población para tratar la artritis, artrosis,
crisis de migraña y otras algias, donde el paciente desconoce esta reacción
adversa y muchas veces pasa inadvertido su uso tras la automedicación. Entre los
más comunes se encuentran:
-Corticoides adrenales.
-Anticonceptivos orales.

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-Antiinflamatorios no esteroideos.
-Ciclosporinas.
-Medicamentos simpaticomiméticas.
-Eritropoyentina.
-Metoclopramida.
-Supresión de alfagonistas centrales (crisis HTA por efecto rebote).
-Supresión de betabloqueadores (crisis HTA por efecto rebote).
-Anfetaminas.
Causa cardiovasculares:
-Coartación de la aorta.
-Fístula arteriovenosa.
-Insuficiencia valvular aórtica.
-Arteriosclerosis aórtica.
-Aumento del volumen intravascular (hipervolemia).
Causas renales:
-Parenquimatosas:
a) Glomerulonefritis aguda.
b) Glomerulonefritis crónica.
c) Síndrome nefrótico.
d) Pielonefritis crónica.
e) Amiloidosis.
f) Nefropatía diabética.
g) Riñón poliquístico.
h) Hidronefrosis.
i) Tumor renal (hipernefrona).
j) Trasplante renal.
k) Nefroblastoma (tumor de Wilms).
-Renovascular:
a) Aneurisma de la arteria renal.
b) Estenosis de las arterias renales.
c) Embolia e infarto renal.

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d) Trombosis de las venas renales.
Causas Endocrinas:
-Síndrome de Cushing.
-Feocromocitoma.
-Acromegalia.
-Síndrome de Conh (aldosteronismo primario).
-Síndrome adrenogenital.
-Hipertiroidismo e hipotiroidismo.
-Hiperparatiroidismo.
-Síndrome carcinoide.
-Climaterio sexual femenino o menopausia.
-Causas cerebrales:
-Traumatismo craneoencefálico.
-Meningoencefalitis.
-Hipertensión endocraneana.
-Tumor cerebral.
-Poliomielitis bulbar.
-Enfermedad de Von Recklinghausen (neurofibromatosis).
-Porfiria aguda.
-Sección medular .
-Síndrome de Guillain-Barré.
Estrés agudo, incluida la cirugía:
-Hiperventilación psicógena.
-Hipoglucemia.
-Quemaduras.
-Abstinencia al alcohol.
-Post reanimación.
-Posoperatorio.
-Crisis de anemia por hematíes falciforme (sicklémica).
Intoxicaciones:
-Por plomo, talio, mercurio, cocaína y otros tóxicos.

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-Otras causas:
-Hipertensión en el embarazo.
-Fiebre.
-Poliarteritis nudosa.
-Apnea obstructiva durante el sueño (SAOS).
-Causa psicógena.
-Hipertensión de bata blanca".
La orientación diagnóstica frente a la amplia gama de posibilidades precisa de una
organización procesal, a cuyos efectos se emiten algunos consejos:
-Ser cuidadosos en la exploración anamnésica y física, en búsqueda de datos que
indiquen causas secundarias a la HTA-ocupacionales, tóxicas, evidencias de
síntomas e historia familiar.
-Examinar el fondo de ojo que puede dar indicios de causa y gravedad.
-Tomar TA en brazos y piernas, así como las características de los pulsos
periféricos.
-Auscultar el abdomen y las regiones lumbares para detectar soplos.
-Precisar la existencia de masas palpatorias.
Exámenes complementarios:
1. Exámenes destinados a determinar factores de riesgo asociados:
a)Lipidograma completo.
b) Glucemia.
2. Exámenes destinados a valorar la afectación de los órganos diana:
a) Eletrocardiograma
b) Hemograma completo.
c) Ecocardiograma.
d) Creatinina sérica.
e) Filtrado glomerular.
f) Examen de orina.
g) Ácido úrico.
h) K+ sérico medido sin diuréticos.
i) Ultrasonografía renal.

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j) Tracto urinario simple.
k) Urograma descendente (en caso necesario).
l) Radiografía de tórax.
3. Otros exámenes más específicos cuando se sospecha HTA secundaria según
la enfermedad de base o primaria.
Diez rasgos desfavorables o inapropiados para la HTA esencial:
1. Inicio antes de los 20 años y después de los 50.
2. TA >180/110 en el comienzo.
3. Hallazgos grado II-IV en el fondo del ojo.
4. Creatinina >130mmol/L o 1.5 mg/dL.
5. Cardiomegalia en los rayos X o HVI en el ECG.
6. Hipopotasemia no provocada.
7. Soplos abdominales (epigástrico, subcostales o en fosas lumbares).
8. Cifras variables de TA con taquicardia, sudación y/o temblores.
9. Antecedentes patológicos de enfermedades renales.
10. Pobre respuesta al tratamiento convencional.
Complicaciones
La mayoría de los síntomas y signos significativos que refiere el hipertenso son
debidos a la afectación acompañante de los órganos diana, y su intensidad guarda
relación directa con el grado de esta repercusión visceral. En general, las
manifestaciones clínicas de la HTA pueden tener un sustrato hipertensivo o
aterosclerótico según el tipo de complicaciones, aunque lo más frecuente es
encontrar patología mixta, lo que puede dar lugar a una sintomatología abigarrada
Repercusión cardiaca
La HTA produce hipertrofia ventricular, que puede conducir a disfunción sistólica,
asintomática en su comienzo, pero que en su evolución tórpida puede cursar
clínicamente con episodios de insuficiencia cardiaca congestiva.
El desarrollo de aterosclerosis de los vasos coronarios condicionará la aparición
de cardiopatía isquémica clínica, que se manifestará por ángor o infarto agudo de
miocardio. Todo este sustrato patológico facilitará la aparición de arritmias

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supraventriculares o ventriculares, con sintomatología variable desde palpitaciones
leves hasta síncope, e incluso muerte súbita.
Hipertrofia ventricular izquierda(HVI): la detección de HVI en la población
hipertensa se asocia a un aumento de la incidencia de morbilidad y mortalidad
cardiovascular. La prevalencia de HVI aumenta con la edad y supera el 50% en la
población hipertensa leve o moderada.
Enfermedad coronaria: El aumento de la incidencia de isquemia miocárdica en el
paciente hipertenso, puede resultar de un disbalance entre las necesidades
metabólicas del ventrículo izquierdo y un flujo coronario inadecuado. El ángor o
angina de pecho, definida como dolor precordial precipitado por el ejercicio, el
ambiente o el estrés, es considerado como la manifestación clásica de la isquemia
miocárdica.

Arritmias: La fibrilación auricular es la arritmia supraventricular que más se


correlaciona con la HVI. La frecuencia de extrasístoles ventriculares complejos
aumenta con la intensidad de la HVI. La predisposición a arritmias ventriculares
guarda más relación con los cambios estructurales de las fibras miocárdicas.
Repercusión en vasos arteriales
Las grandes arterias, carótidas, aorta y sector iliaco pueden afectarse en la
población hipertensa. Desde el punto de vista clínico, la sintomatología isquémica
está en relación directa con el territorio y grado de afectación, siendo la
claudicación intermitente la más común, y la más grave la disección aórtica, en el
seno de una emergencia hipertensiva.
Enfermedad vascular periférica(EVP): se correlaciona directamente con un mayor
riesgo de mortalidad cardiovascular. En la actualidad se utiliza el índice tobillo-
brazo (cociente entre la presión arterial sistólica registrada a nivel del maléolo y en
la arteria humeral) para identificar la afectación vascular. Con dicha metodología
se refiere EVP en el 5% de la población hipertensa.
Disfunción eréctil: aparece clínicamente en el contexto de la disfunción endotelial
hipertensiva. Es frecuente en sujetos con hipertensión arterial por encima de 60
años, bien a causa del propio daño endotelial o secundario a los fármacos

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hipotensores. Existen varios estudios que revisan la prevalencia de problemas
sexuales en el hipertenso, con un rango que va desde el 7,6-44,2% en pacientes
sin tratamiento y del 9,0-57,9% en hipertensos tratados.
Repercusión cerebral
Entre las repercusiones más frecuentes de la HTA sobre el sistema nervioso
central, con manifestaciones clínicas específicas y origen de discapacidad
neurológica residual, destacan: Isquemia cerebral transitoria: La sintomatología se
traduce en un déficit focal transitorio, de predominio motor o sensitivo, en el
territorio de la arteria carótida o vertebrobasilar, con debilidad, parestesia, disfasia,
disartria o diplopía. Sus causas más frecuentes son estenosis o trombosis
arteriales por placas ateroscleróticas.
Infartos cerebrales: El 50% se producen en pacientes hipertensos, y la
sintomatología que producen es variable dependiendo de su localización y
extensión.
Infartos lacunares: Representan el 15-20% de las lesiones cerebrales isquémicas
y no son específicas de la hipertensión. Dado que las lesiones son pequeñas y
localizadas en profundidad no suelen ser sintomáticos. Su repetición (infartos
lacunares múltiples) desencadena demencia vascular.
Hemorragias cerebrales: Suponen el 10-15% de los ictus y su principal factor
etiológico es la acción directa de la HTA. El cuadro clínico depende de la
localización específica y de las manifestaciones secundarias de la hipertensión
intracraneal.
Hemorragias subaracnoideas: La causa más frecuente de forma espontánea, es
una hemorragia cerebral con apertura al sistema ventricular o al espacio
subaracnoideo. En otras ocasiones, son rupturas de aneurismas saculares, que
aparecen en pacientes hipertensos en un 30%.⁴

El tema sobre la HTA se encuentra priorizado por el plan perspectivo de


investigaciones científicas, y al mismo tiempo es un tema principal en el plan de
respuestas a problemas de Ministerio de Salud Pública.

18
Tratamiento:
El tratamiento ocupa dos modalidades: el tratamiento preventivo, que incluye
modificaciones en el estilo de vida (dieta, actividad física, hábitos tóxicos, entre
otras), el cual debe abordarse y ponerse en práctica dada la importancia para el
médico de APS; y el tratamiento curativo (no farmacológico y farmacológico),
cuando se necesita de medicamentos que controlen la HTA, no solo para reducir
sus cifras, sino encaminado a frenar o evitar la progresión de la enfermedad y sus
complicaciones subyacentes, teniendo en cuenta las comorbilidades que pueda
presentar el paciente en el momento del diagnóstico.
Tratamiento preventivo
Cambios del estilo de vida.
Debe instituirse medidas de estilo de vida cada vez que sea apropiado en
todo los pacientes hipertensos, incluyendo a los que requieren tratamiento
farmacológico. El propósito es bajar la PA, controlar otros factores de riesgo,
y disminuir el número o las dosis de drogas antihipertensivas. También son
recomendables medidas de estilo de vida en sujetos con presión arterial
normal y normal-alta para disminuir el riesgo de desarrollar hipertensión.
Las recomendaciones de estilo de vida no deben ser dadas como una
formalidad, sino que deben ser instituidas con suficiente apoyo de expertos y de
comportamiento, con refuerzos periódicos. Las medidas de estilo de vida que
son ampliamente conocidas que bajan la PA y/o el riesgo cardiovascular y
que se debe considerar son:
Control del peso corporal
Incremento de la actividad física
Evitar o disminuir la ingestión de alcohol
Disminuir la ingestión de sal
Eliminar el hábito de fumar
Dieta: abundantes frutas y vegetales y el consumo mínimo de grasas instauradas
y colesterol, las bebidas con gas, el pan, la mayonesa y la mantequilla, así como
algunos dulces.
Control sobre el estrés

19
Tratamiento curativo
No farmacológico:
Dentro del tratamiento curativo, cuando la hipertensión ya está diagnosticada,
también se pueden aplicar las estrategias y medidas no farmacológicas, ya
abordadas en párrafos anteriores, las cuales igualmente, ocupan un lugar esencial
en este acápite, donde el médico, con todo el equipo de salud, junto con el
paciente y la familia, juegan un lugar indispensable para que este pueda llevarse a
cabo de una forma equilibrada y consciente.
Farmacológico:
El tratamiento ideal para la hipertensión no existe, el mejor método para saber cuál
puede llegar a ser el ideal y más eficaz, consiste en saber individualizarlo en cada
paciente según sus características (edad, sexo, raza, profesión, nivel sociocultural
y económico, calidad de vida, estadio de la HTA, lesión en órganos diana,
presencia de otras enfermedades) y en correspondencia con lo que se quiere
lograr, así como cuáles constituyen los patrones o las metas terapéuticas
deseables para cada individuo. La constancia y el cumplimiento del tratamiento
por parte del paciente son fundamentales.
Inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA). Constituyen un
grupo farmacológico de primera línea en el paciente hipertenso. Su acción
fundamental es la inhibición de la enzima convertidora de angiotensina I en
angiotensina II, con lo que se obtiene una limitación del efecto vasocontrictor de la
misma a nivel periférico.
Los IECA son excelentes hipotensores bien en monodosis o en combinación con
otro de estos medicamentos, principalmente con diuréticos y antagonistas de
calcio, en pacientes de todas las edades.
Su eficacia está demostrada en hipertensos con insuficiencia cardíaca congestiva,
hipertrofia ventricular e hipertensos con afectación renal y/o diabético en el que
han mostrado un claro efecto nefroprotector.
Están contraindicados durante el embarazo, la lactancia y en pacientes con
Estenosis bilateral de la arteria renal.

20
Diuréticos (tiazídicos, del ASA y ahorradores de potasio). En general su acción
hipotensora se ejerce al bloquear la reabsorción tubular de sodio incrementando la
pérdida de sal y agua con la consiguiente reducción del volumen plasmático a
corto plazo. Las tiazidas son de elección para iniciar tratamiento hipotensor en la
mayor parte de los pacientes hipertensos, por su eficacia y por ser baratos. Están
contraindicados en la insuficiencia renal.
Los diuréticos del ASA se deben indicar en la insuficiencia renal o cardíaca y en el
hipertenso refractario.
Los diuréticos ahorradores de potasio se indican principalmente unidos a los
diuréticos tiazídicos para limitar las posibles pérdidas de potasio.
Anticálcicos. Son medicamentos muy eficaces como hipotensores. Su acción
vasodilatadora se ejerce al interferir la entrada de los iones calcio al interior de las
células, principalmente de la musculatura lisa de los vasos sanguíneos,
disminuyendo la resistencia periférica.
Betabloqueadores. Ejercen su acción farmacológica por el bloqueo de los
receptores adrenérgicos. Reducen la tensión arterial y atenúan la respuesta
presora inducida por el ejercicio dinámico pero no por el ejercicio isométrico. Han
demostrado una prevención clara del reinfarto en pacientes con cardiopatía
isquémica y aumentan la supervivencia los pacientes con insuficiencia cardíaca.
Están especialmente indicados en la HTA que cursa con la renina elevada, gasto
cardíaco elevado, taquiarritmias, cardiopatía isquémica, insuficiencia cardíaca,
miocardiopatía hipertrófica, estrés, ansiedad, migraña o Hipertiroidismo. Su
eficacia antihipertensiva es inferior en negros y ancianos.
Antagonistas de los receptores de angiotensina II (ARA II). Estos fármacos ejercen
su acción vasodilatadora al bloquear la enzima angiotensina II a nivel de sus
receptores AT1.Sus efectos hipotensores son similares a los IECA.
Existen otros fármacos como los Inhibidores directos de renina, los bloqueadores
de receptores alfa, los simpáticoliticos de acción central y los vasodilatadores
directos.

El Ministerio de Salud Pública ha trazado una política basada en la promoción de


salud y la prevención de enfermedades, en ello resulta importante además la

21
participación del médico de la familia como elemento fundamental para lograr e
introducir cambios que se precisen en el perfil sanitario. Las secuelas
cardiovasculares derivadas de la arteriosclerosis, que incluyen la enfermedad
cerebrovascular (ECV), la enfermedad de la arteria coronaria (EAC), la arteriopatía
periférica, la insuficiencia cardíaca congestiva (ICC) y la insuficiencia renal crónica
(IRC) se presentan con una frecuencia entre 2 y 4 veces mayor en los pacientes
hipertensos respecto a los normotensos de la misma edad y sexo.

22
Objetivos:

General:

Implementar intervención educativa para aumentar los conocimientos sobre la


hipertensión arterial, en pacientes hipertensos, consultorio médico No. 34
Policlínico Buenaventura. Enero Diciembre 2018.

Específicos:

 Caracterizar el comportamiento de algunas variables socio-demográficas: edad,


sexo, nivel de escolaridad, antecedentes patológicos familiares, antecedentes
patólogicos personales, y conocimientos generales sobre la hipertensión
arterial.

 Aplicar intervención educativa.


 Determinar el nivel de conocimientos sobre la hipertensión arterial antes y
después de las actividades educativas.

23
DISEÑO METOLÓGICO.

Se realizó un estudio de cuasi-experimental de Intervención educativa sobre los


conocimientos en pacientes con hipertensión arterial, consultorio médico No.34
Policlínico Buenaventura. Enero - Diciembre 2018.

El universo de estudio estuvo constituido por todos los pacientes hipertensos que
son un total de 163 y la muestra fue de 60 conformada según criterios de
exclusión e inclusión, mediante el muestreo aleatorio simple

Criterios de inclusión:
 Pacientes con el consentimiento informado a participar en el estudio.
 Pacientes hipertensos.
 Pacientes que pertenezcan al área de salud.
 Pacientes que no presenten discapacidad mental.

Criterios de exclusión:
 Pacientes portadores de enfermedades mentales severas.
 Pacientes que no deseen participar en el estudio.

Criterios de salida:
 Cualquier paciente que desee abandonar la investigación.

24
Operacionalización de las variables:

Variable Tipo Operacionalización


Escala Descripción.
Sexo Cualitativo
Masculino
Nominal Según sexo
Femenino
Dicotónica
Edad 25-29
30-34
35-39
Cuantitativa 40-44 según edad del
Discreta 45-49 paciente
50-54
55-59
60 y más
Nivel de escolaridad Primaria
Cualitativo
Secundaria Según nivel
Ordinal
Preuniversitario terminado
Universitario
Antecedentes Patológicos Familiares de
Cualitativo
Familiares (APF) Presentes primera línea
Nominal
Ausentes (padres e hijos) que
Dicotónica
padezcan de HTA
Cualitativo Diabetes Mellitus
Antecedentes Patológicos nominal Obesidad Incluye el tipo de
Personales Cardiopatías enfermedad de los
Enfermedades renales pacientes
Otras
Conocimientos generales Cualitativa
Buena Según las
sobre la hipertensión ordinal
respuestas del
arterial : Regular
Politónica paciente
Acerca de los

25
factores de Mal
riesgo
Síntomas
Complicaciones
Prevención

Para dar salida al objetivo 1, se caracterizó las variables edad y sexo.

Para dar salida al objetivo 2, se elaboró e implementó un programa de


intervención educativa sobre factores de riesgo de la hipertensión arterial, así
como sus principales complicaciones .Para dar salida al objetivo 3, mediante una
encuesta aplicada antes y después de la intervención se determinó el nivel de
conocimientos de los participantes.

El estudio se dividió en tres etapas:


Etapa Diagnóstica:
Se les explicó las características del estudio. A los que deseen participar (Anexo
2) se les explicó el cuestionario inicial a través de la cual se obtuvo los datos
generales de cada paciente y el nivel de conocimiento acerca de la hipertensión
arterial. Para la escala evaluativa se elaboró una clave de calificación (Anexo 3)
Etapa de intervención:
Correspondió a la elaboración de los talleres de capacitación que incluyó técnicas
participativas (discusiones grupales y juegos didácticos) con una hora de duración
y una frecuencia semanal, por un período de tres meses; los talleres se
elaboraron a partir de los desconocimientos detectados en el cuestionario inicial,
que permitió determinar las deficiencias para lograr un mejor trabajo.

26
Temáticas tratadas en el programa de intervención

Temas Título Tiempo


I Presentación de la intervención educativa. 1 hora
II Factores de riesgo de la hipertensión arterial 1 hora
III Principales síntomas de la hipertensión arterial. 1hora
IV Principales complicaciones de la Hipertensión arterial 1 hora
V Prevención de las complicaciones de la Hipertensión arterial. 1 hora
VI Aplicación de le evaluación final. 1 horas

Primer Taller:
Tema: Presentación de la intervención educativa.
Objetivos:
Definir el concepto de Hipertensión Arterial.
Identificar los principales temas a tratar en la intervención educativa.
Desarrollo:
Para iniciar la actividad y propiciar la orientación de los temas de la intervención
educativa se le preguntará a los participantes : ¿Qué es la Hipertensión Arterial?
Teniendo en cuenta las respuestas dadas por los participantes se definirá el
concepto de Hipertensión Arterial.
Luego se plantearán las siguientes interrogantes:
1) ¿En su familia hay pacientes con esta enfermedad?
2) ¿Cree usted que ser hipertenso es un mal de familia?
3) ¿La enfermedad estará relacionada con la alimentación y con la práctica de
ejercicios físicos?
4) ¿Saben ustedes cuándo tienen la presión alta?
5) ¿Se puede prevenir la Hipertensión arterial?
6) ¿Qué consecuencias para la salud puede traer padecer esta enfermedad?

27
A continuación, se explicará que para una mejor comprensión de estas y otras
interrogantes serán realizados diferentes talleres con los siguientes temas:
1) Factores de riesgo de la Hipertensión arterial en el adulto mayor
2) Principales síntomas de la Hipertensión arterial.
3) Principales complicaciones de la Hipertensión arterial
4) Prevención de la Hipertensión arterial en los pacientes de riesgo.
De esta manera se espera motivar a los participantes para los siguientes talleres a
desarrollar.

Segundo Taller:
Tema: Factores de riesgo de la hipertensión arterial
Objetivo: Identificar los principales factores de riesgo de la hipertensión arterial
Desarrollo:
Preguntar: ¿Qué factores ustedes consideran que intervienen en la aparición de
esta enfermedad?
Luego a partir de las respuestas se explicarán de forma sencilla los factores de
riesgo para esta enfermedad.
Entre los factores que guardan mayor relación con la HTA se señalan: edad, sexo,
raza, herencia, hábitos de alimentación, peso corporal, hábito de fumar y
alcoholismo.
 Edad: la presión arterial promedio tiende a aumentar de manera progresiva
a medida que el individuo envejece.
 Sexo: De modo general, se acepta que la prevalencia de HTA es mayor en
hombres que en mujeres.
 Raza: Existen evidencias de que la HTA en la raza negra tiene una
prevalencia más alta y un pronóstico menos afortunado, dada la gravedad
de la repercusión sobre los órganos diana en este grupo; por ejemplo, se ha
señalado que la insuficiencia renal terminal en la HTA se presenta 17 veces
con más frecuencia en negros que en blancos.

28
 Herencia: Se conoce que esta enfermedad tiende a surgir en familias y que
los hijos de padres hipertensos tienen un riesgo mucho mayor que el
promedio para padecerla.
 Obesidad: La obesidad se acompaña de una mayor frecuencia de HTA y se
calcula que la prevalencia de ésta es el 50 % mayor entre las personas que
están en sobrepeso que entre las que están en su peso normal.
 Dietas ricas en sal: Existen pruebas inequívocas de que la ingestión
excesiva de sal participa en la aparición de la HTA. La cantidad de sal
necesaria para un individuo de aproximadamente 70 kg de peso, es de
unos 2 g al día; sin embargo, la dieta normal en los países desarrollados
oscila entre 3 y 4 g diarios.
 Factores psicosociales: Se señala que las tensiones emocionales
mantenidas o reiteradas pueden desencadenar reacciones vasopresoras
con HTA. Dichas tensiones suelen estar condicionadas por múltiples
factores, que van des de la personalidad hasta el régimen socioeconómico
en que se vive.
 Tabaquismo: el hábito de fumar da lugar a alteraciones en los vasos
sanguíneos que favorecen la aparición de la enfermedad.
 Alcoholismo: El consumo excesivo de alcohol es un importante factor de
riesgo para la HTA. Los alcohólicos se incluyen dentro de los grupos de
riesgo porque el alcohol produce resistencia a la terapia hipotensora
Se consideran Factores de Riesgo Mayores Cardiovasculares en la población
hipertensa, los siguientes:
a) Historia familiar de enfermedad cardiovascular (mujeres por debajo de 65 años
y hombre por debajo de 55 años).
b) Edad (por encima de los 60 años).
c) Sexo (mujeres posmenopáusicas).
d) Tabaquismo.
e) Dislipemia (alteraciones en las grasas del cuerpo)
f) Diabetes mellitus.²

29
Al final se preguntará si existe alguna duda referente al tema impartido y se
aclarará en caso de existir alguna.

Tercer Taller:
Tema: Principales síntomas de la hipertensión arterial.
Objetivo: Identificar los principales síntomas de la HTA
Desarrollo:
Se comenzará con la pregunta: ¿Sabe usted cuándo tiene la presión alta?
Luego de escuchar la opinión de todos los presentes se pasará a exponer el tema
La HTA es una enfermedad con una sintomatología inespecífica y aunque los
síntomas y signos que la acompañan varían, están en relación con el tipo de
hipertensión y el estadio en que se encuentra la enfermedad.
El dolor de cabeza es un síntoma constante y habitualmente se presenta en horas
de la mañana con localización detrás de la cabeza, alrededor de los ojos o frontal;
en ocasiones despierta al paciente o aparece durante el sueño, o incluso simula
una migraña, en cuyo caso se hace pulsátil y se acompaña de náuseas, vómitos y
molestias por la luz.
Entre otros síntomas que pueden aparecer están las palpitaciones, irritabilidad,
insomnio, trastornos de la personalidad y falta de aire. La visión en candelillas, el
zumbido de oídos y los vértigos, son síntomas clásicos asociados a la HTA. El
escotoma (visión de un punto negro) es un elemento de frecuente observación en
la población hipertensa, así como también la disminución de la agudeza visual. La
nicturia (cuando el paciente orina varias veces en la noche) suele aparecer en
etapas tempranas de la enfermedad o en la fase de descompensación de ésta.
Otros síntomas menos comunes son la disminución de la memoria y de la
capacidad corporal o intelectual, los cuales no siempre están relacionados con la
terapéutica.⁴
Al final se preguntará si existe alguna duda referente al tema impartido y se
aclarará en caso de existir alguna.

Cuarto Taller:

30
Tema: Principales complicaciones de la Hipertensión arterial
Objetivo: Identificar las principales complicaciones de la Hipertensión arterial
Desarrollo:
Las complicaciones se pueden presentar en cualquier momento de la enfermedad
y no siempre guardan relación con el tiempo de evolución y el tipo de HTA. Estas
complicaciones dependen de las alteraciones en el corazón, los vasos, el cerebro
y los riñones.
Complicaciones cardíaca: Cardiopatía hipertensiva. Se considera cardiopatía
hipertensiva a toda afección cardíaca que sucede a consecuencia de la HTA
sistémica. Sus manifestaciones clínicas fundamentales son la cardiopatía
isquémica (infarto y anginas) y la insuficiencia cardíaca.
Complicaciones vasculares: La HTA favorece y agrava las manifestaciones de
arteriosclerosis, de ahí la frecuencia de los eventos cerebrovasculares y del
corazón. Pueden aparecer además úlceras en los pies.
Complicaciones encefálicas: La trombosis y la hemorragia cerebral constituyen
una causa frecuente de invalidez y muerte. La presencia de un dolor de cabeza
intenso acompañada de manifestaciones neurológicas (somnolencia, desmayos,
convulsiones, calambres, pérdida o disminución de la fuerza muscular en un lado
del cuerpo, alteraciones del lenguaje, perdida de la memoria o desorientación)
permite sospechar una complicación cerebrovascular.
Complicaciones renales: La HTA conduce a alteraciones en los vasos sanguíneos
del riñón, que tarde o temprano evoluciona hacia la insuficiencia renal terminal.
Otro de los órganos muy afectados por la enfermedad son los ojos, en estos se
produce un deterioro irreversible como consecuencia de una Hipertensión arterial
mal compensada. 11,12
Al final se preguntará si existe alguna duda referente al tema impartido y se
aclarará en caso de existir alguna.

Quinto Taller:
Tema: Prevención de las complicaciones de la Hipertensión arterial.

31
Objetivo: Identificar las principales acciones para prevenir las complicaciones de la
Hipertensión arterial
Desarrollo:
Se comenzará con la siguiente pregunta: ¿Es posible evitar las complicaciones de
la Hipertensión arterial?
Luego según las respuestas de los participantes se explicarán las acciones de
prevención de las complicaciones de la enfermedad
La finalidad de la terapéutica hipotensora no es sólo reducir la PA, sino también
prevenir y facilitar la regresión de las lesiones de los órganos diana. Debe tenerse
en cuenta que el hipertenso es portador de una enfermedad crónica, lo que lo
obliga a restricciones y modificaciones en sus hábitos de vida, que necesita un
tratamiento constante y que su calidad de vida puede afectarse, tanto por la
enfermedad como por las reacciones adversas que pueden presentarse con
algunas drogas.
Los cambios del estilo de vida siempre son beneficiosos y han demostrado ser
efectivos para disminuir las cifras tensionales; además, pueden utilizarse como
única terapia, y aun en los casos en que por sí solos no disminuyen la PA,
benefician porque reducen el número y la dosificación de las drogas hipotensoras.
Los aspectos más importantes que se deben tener en cuenta son:
1. Control del peso corporal disminuyendo la obesidad.
2. Reducir el consumo de sal.
3. Lograr una adecuada educación nutricional.
4. Incrementar la actividad física.
5. Eliminación o disminución a niveles no dañinos de la ingestión de alcohol.
6. Eliminación del hábito de fumar.
7. Control del stress.
8. Cumplir con el tratamiento farmacológico
Control del peso corporal:
La obesidad se ha señalado como un factor contribuyente para la elevación de las
cifras tensionales. La reducción de 1 kg de peso implica una disminución promedio
de 1,3 a 1,6 mmHg en la presión. La medida más eficaz para lograr una buena

32
reducción del peso corporal es la restricción calórica de la dieta asociada a
ejercicios físicos.Es bien sabido que el peso corporal está directamente
relacionado con la PA y que el exceso de grasa corporal predispone a un aumento
de los niveles de PA. La reducción del peso corporal reduce la PA en los
individuos obesos y tiene efectos beneficiosos sobre otros factores de riesgo
asociados, como la resistencia a la insulina, la diabetes mellitus, la hiperlipidemia,
la hipertrofia ventricular izquierda y la apnea obstructiva durante el sueño. Una
reducción de peso modesta, con o sin reducción del sodio, puede prevenir la
hipertensión en los individuos con sobrepeso que tienen una presión arterial
normal, y puede facilitar una reducción escalonada de la medicación e incluso su
suspensión.
Dado que en individuos de mediana edad, el peso corporal presenta a menudo un
aumento progresivo (0,5-1,5 kg al año), la estabilización del peso puede
considerarse también un objetivo que es útil alcanzar.
Reducción del consumo de sal:
Existen evidencias irrefutables que demuestran que las dietas ricas en sodio
desempeñan un papel muy importante en el desarrollo y mantenimiento de la HTA,
si bien la respuesta a la ingestión de sal difiere en los diferentes grupos de
hipertensos: los afroamericanos, los ancianos y los hipertensos diabéticos son
más sensibles a la sal. Se recomienda un máximo de 1,5 a 2,9 g de sal en la dieta:
ello implica a no agregar sal a las comidas al cocinarlas y evitar aquellos alimentos
que en su confección se enriquecen con la sal de cocina (embutidos y enlatados).
El consumo de sal en la dieta contribuye a elevar la presión arterial y a la
prevalencia de la hipertensión. La reducción del consumo de sodio en 80-100
mmol (4,7-5,8 g de cloruro sódico) al día, respecto a un consumo inicial de
alrededor de 180 mmol (10,5 g de cloruro sódico) reduce la presión arterial en una
media de 4-6 mmHg, aunque con una gran variabilidad entre distintos pacientes.
La restricción de sodio puede tener un efecto antihipertensivo superior si se
combina con otras recomendaciones relativas a la dieta y puede permitir una
reducción de las dosis y el número de fármacos antihipertensivos. El efecto de la
restricción de sodio en la presión arterial es mayor en los individuos de raza negra,

33
los de mediana edad y los ancianos, así como en los individuos con hipertensión,
diabetes mellitus o enfermedad renal crónica, es decir, los grupos que tienen
menor capacidad de respuesta del sistema renina-angiotensina-aldosterona.
Educación nutricional:
Incluye la adición en la dieta de suplementos de potasio, calcio, magnesio y de
grasas insaturadas. Se recomienda una dieta rica en alimentos con alto contenido
de potasio (frutas y vegetales), sobre todo cuando se están utilizando diuréticos
tiazídicos. El magnesio se encuentra en las verduras, judías, arroz, carnes,
cereales y mariscos. Las grasas contenidas en algunos alimentos de origen
vegetal (maíz, soja, girasol) son ricas en ácidos grasos polinsaturados; también
éstas se encuentran en las carnes de algunos peces, los llamados pescados de
sangre azul (macarela, jurel, atún, etc.).
Incremento de la actividad física:
Es conocido que la actividad física sistemática y armónica favorece el
mantenimiento o la disminución del peso corporal, con el consiguiente bienestar
físico y psíquico del individuo. Es por ello que se debe recomendar al hipertenso
practicar ejercicios (aeróbicos, natación, trotes, marcha) de 30 a 45 minal día, de 3
a 6 veces por semana.
Consumo de alcohol:
Se recomienda limitar el alcohol, porque aun cuando se ingieran (1 onza) de
etanol o su equivalente, pueden producirse elevaciones significativas de la TA.La
relación entre el consumo de alcohol, los valores de PA y la prevalencia de la
hipertensión es lineal en las poblaciones. El alcohol atenúa los efectos del
tratamiento con fármacos antihipertensivos, pero este efecto es al menos
parcialmente reversible en 1-2 semanas al moderar el consumo de alcohol.
Diversos estudios sobre la reducción del consumo de alcohol han mostrado una
reducción significativa de la presión arterial sistólica y diastólica. A los varones
hipertensos que consumen alcohol se les debe aconsejar que limiten este
consumo a no más de 20-30 g de etanol al día.
Eliminación del hábito de fumar:

34
La supresión del tabaco es una recomendación obligatoria para los hipertensos. El
tabaquismo causa un aumento agudo de la PA y la frecuencia cardiaca, que
persisten durante más de 15 min después de fumar un cigarrillo. Es probable que
el mecanismo sea una estimulación central y de las terminaciones nerviosas del
sistema nervioso simpático que originan un aumento de las catecolaminas
plasmáticas paralelo al aumento de la presión arterial.
El tabaquismo es un potente factor de riesgo cardiovascular y, probablemente,
dejar de fumar sea el cambio del estilo de vida más efectivo para la prevención de
un gran número de enfermedades cardiovasculares. Por tanto, a los hipertensos
fumadores se les debe recomendar que abandonen el consumo de tabaco.
Cuando sea necesario, cabe considerar la administración sustitutiva de nicotina o
un tratamiento farmacológico coadyuvante.
Control del stress:
Se conoce que el stress puede favorecer elevaciones agudas de la presión arterial
Las técnicas más utilizadas para controlar el stress son: relajación muscular
progresiva, meditación trascendental, yoga, psicoterapia de grupo e hipnosis

Cumplir el tratamiento farmacológico


Es muy importante cumplir con el tratamiento farmacológico antihipertensivo que
indica el médico. Siempre se debe indicar el fármaco de elección en cada caso en
particular, ya sea uno o varios fármacos, hasta lograr compensar al paciente. El
abandono de la terapia antihipertensiva puede llevar a complicaciones a corto o
largo plazo, al igual que la no compensación con la terapia indicada.
Al final se preguntará si existe alguna duda referente al tema impartido y se
aclarará en caso de existir alguna.
Etapa de evaluación:
A los 3 meses de realizada la intervención se aplicó nuevamente el cuestionario
inicial. Esta vez sin incluir los datos generales, para evaluar los conocimientos
adquiridos a través de la intervención. El nivel de conocimiento se evaluó por el
cuestionario.

35
Obtención de la información: En primer lugar se realizó una amplia revisión
bibliográfica sobre la hipertensión arterial, factores de riesgo y complicaciones,
prevención, tratamiento y otros temas afines que aparece reportada en la literatura
nacional e internacional en formato impreso y digital.
Para la obtención del dato primario se aplicó un cuestionario (anexo 2)
previamente validado, lo que nos permitió diagnosticar el nivel de conocimiento de
los sujetos en estudio antes y después de la intervención en relación a la
hipertensión arterial. Los resultados de la encuesta realizada a cada sujeto con
relación a sus conocimientos se clasificaron en bueno, regular y mal. Los datos
obtenidos se recogieron y codificaron en una base de datos creada al efecto en el
programa Microsoft Acces para su posterior procesamiento y análisis.
Procesamiento de la información y análisis estadístico: Se utilizaron métodos
del nivel teórico (histórico-lógico, analítico-sintético, sistémico-estructural-
funcional y holístico-dialéctico) para la sistematización de los antecedentes
teóricos y la construcción del aporte. Y los mét odos y técnicas del nivel
empírico propios de las investigaciones sociales (encuestas, entrevistas,
análisis documental y estadístico) para el diagnóstico de la eficiencia del proceso
de formación científica en el territorio y los factores que en ello inciden.
Se utilizaron los métodos de la estadística descriptiva e inferencial para
determinar el comportamiento de las variables en estudio a nivel de la muestra y a
nivel poblacional.
Métodos del nivel teórico
El método histórico-lógico: en la determinación de la evolución del problema
científico y de los conceptos y teorías precedentes relacionadas con la
investigación.
El método analítico-sintético: para la caracterización del conocimiento de los
pacientes hipertensos del CMF Jagüeyes del área de salud del Policlínico de
Buenaventura, sobre la hipertensión arterial y sus complicaciones, así como
para la interpretación de la información obtenida por los métodos empíricos.

36
El método sistémico-estructural-funcional: en la explicación del objeto de la
investigación y la modelación del campo de acción, en la concepción de la
estructuración del programa de intervención.
El método holístico-dialéctico: en la determinación de las relaciones
contradictorias que se dan en el objeto y que constituyen una fuente de
desarrollo como base metodológica de la investigación.
Métodos y técnicas del nivel empírico:
La observación: mediante la misma se conoce la realidad del proceso, para así
diagnosticar y poder aplicar la estrategia de intervención educativa que permite
resolver el problema científico de la investigación.
La encuesta: Se elaboró un cuestionario (anexo 2) mediante la cual se obtendrán
datos de valor Además se utilizó para determinar el nivel de conocimiento de cada
sujeto antes y después de la intervención El resultado de las preguntas del
cuestionario se evaluó en bueno, regular y mal según la guía para la evaluación
del cuestionario (anexo 3) que se elaboró en consecuencia.
El m é t o d o estadístico: se utilizó la estadística descriptiva para determinar
frecuencia absoluta y porcentaje de los indicadores de las variables que serán
medidas. Se utilizará además la estadística inferencial con la finalidad de inferir
los resultados para la población mediante estimación puntual en cada una de
las variables en estudio. Se r e a l i z ó además una prueba de hipótesis
asumiendo el nivel de satisfacción antes y después.
Consideraciones éticas:
Se tuvieron en cuenta los principios de la Declaración de Ginebra de la
Asociación Médica Mundial y el Código Internacional de Ética Médica y la
declaración de Helsinki. La investigación biomédica concordó con normas
científicas universalmente aceptadas y se cumplieron con los principios éticos
básicos: el respeto a las personas, la beneficencia, la no maleficencia, y
el de justicia. La investigación se realizó por personas calificadas, se realizó una
revisión previa y un cuidadoso estudio de los riesgos predecibles con relación a
los beneficios posibles, se mantuvo la integridad y privacidad del individuo.

37
Se tuvo en cuenta el consentimiento informado de los pacientes en estudio , los
cuales firmaron el documento que así lo avala (Anexo 1). Se mantuvo a lo largo de
toda la investigación los principios éticos de los pacientes a los que se les brindará
una información detallada del propósito del estudio, la inocuidad del mismo, el
anonimato y su independencia para continuar en el, también conocieron que eran
libres de abandonar el estudio si lo estimaban conveniente.
Toda la información utilizada en este estudio se conservó bajo los principios de
máxima confiabilidad, el uso de la misma fue exclusivamente con fines científicos
y empleada teniendo en cuenta los objetivos establecidos. Por último, el informe
final se redactó teniendo en cuenta los requisitos establecidos por el
Departamento de Investigación de la Universidad de Ciencias Médicas de
Holguín.

38
ANÁLISIS Y DISCUSIÓN DE LOS RESULTADOS

Tabla 1. Distribución según sexo y edad de los pacientes con hipertensión arterial,
consultorio médico No.34 Policlínico Buenaventura. Enero - Diciembre
2018.

Masculino Femenino
Grupo etáreo
No % No. %
25-29 0 0 1 1.7
30-34 0 0 1 1.7
35-39 2 3.3 2 3.3

40-44 5 8.4 3 5.0

45-49 4 6.7 5 8.4


50-54 5 8.4 4 6.6
55-59 6 10.0 7 11.6
60 y más 7 11.6 8 13.3
Total 29 48.4 31 51.6
Fuente: cuestionario

Al realizar el análisis según edad y sexo, se observó que existe un predominio en


la muestra tomada del sexo femenino, en un 51.6%, y el grupo etario que presentó
mayor participación en mi intervención comunitaria fue el de 60 y más por ser el

39
grupo que presenta menos carga laboral y responsabilidades, por lo que tuvieron
mayor disposición a participar, lo que coincide con estudios realizados por la
doctora Liety Pérez Molina.
Caselles en su investigación reportó que el grupo etáreo más afectado fue
representado entre 40 a 45 años con 24 personas para el 50%,seguido por el
grupo de 50 a 55 años con 15 para el 31% de las personas. El sexo más afectado
fue el femenino con 31 casos para el 62%.36

Wyssen su estudio sobre Disparidad global en la prevalencia y control de los


factores de riesgo de hipertensión arterial” , donde el 62% pertenecían al sexo
masculino y el grupo de edad predominante fue el de 35-50 años35
Lourdes Rodrígez Dominguez y colaborsdores en estudio realizados en su articulo
"Factores de riesgo asociados a la hipertensión arterial en los trabajadores en la
oficina central del MIMBAS constataron que la Prevalencia de la HTA en el sexo
masculino está en el 59.7%.

Tabla 2. Distribución según escolaridad de pacientes con hipertensión arterial,


consultorio médico No.34. Policlínico Buenaventura. Enero - Diciembre
2018.

Escolaridad No. %

Sin nivel de escolaridad - -


Primaria 7 11.6
Secundaria 21 35.0
Preuniversitario 17 28.4
Universitario 15 25.0
Total 60 100
Fuente: Cuestionario

Al analizar la tabla 2, observamos que el grupo de secundaria básica representa el


mayor porcentaje, con el 35% de los pacientes del estudio, lo que coincide con

40
estudios realizados en el consultorio 13 del Policlínico Rolando Ricardo Estrada en
el año 2017, y el menor porcentaje lo tiene el nivel primario con el 11.6%.
Luego del triunfo de la Revolución, con la campaña de alfabetización y el
programa de la Educación, en nuestra comunidad no hay pacientes iletrados, solo
un pequeño porciento que no terminó el nivel primario y de ellos ninguno participó
en el estudio.
El Dr. C Juan Rodríguez y la Dra. Tania Laucerique en su estudio “Prevalencia de
la hipertensión arterial , adhesión al tratamiento y su control en adultos mayores”
en municipios de la Habana plantean que el nivel de escolaridad que predominó
fue secundaria básica con un 33.3%, mientras solo el 2.6% eran iletrados. Estos
resultados coinciden con nuestro estudio.

Tabla 3. Distribución según antecedentes patológicos familiares de pacientes


con hipertensión arterial, consultorio médico No.34 Policlínico
Buenaventura. Enero – Diciembre 2018.

Pacientes con factores de riesgo de HTA


Antecedentes Patológicos Familiares
No. %

Si 36 60

No 24 40

Total 60 100

Fuente: cuestionario

Al analizar en la tabla 3, la asociación de los antecedentes patológicos familiares


sobre la aparición de la hipertensión arterial vemos que se asocia al 60%, la
presencia de los mismos en los pacientes del estudio.
Estos resultados coinciden con los resultados de los doctores Raúl Morales
Concepción y Juan Carlos Baster en su estudio “Caracterización clínico-
epidemiológica, de la hipertensión arterial en el adulto mayor”, Policlínico Cristino

41
Naranjo, donde detectaron que el factor de riesgo más frecuente fue el
antecedente patológico familiar de hipertensión arterial para un 76%.
Las doctoras Mariela Tamayo y Maira Rivas en su estudio “Pesquisaje de
hipertensión arterial en la población adulta del consultorio Potrerillo, Báguanos”,
destacaron que aproximadamente el 65.9% de sus pacientes tenían antecedentes
patológicos familiares de HTA.
También coinciden los estudios realizados por los doctores Raciel Sánchez
Parronda y Liety Pérez Molina.
Se puede decir en cuanto a los antecedentes patológicos familiares de
hipertensión arterial existe relación directa con la enfermedad, en especial los de
primera línea de parentesco, o sea padre o madre.

Tabla 4. Distribución según antecedentes patológicos personales de pacientes


con hipertensión arterial, consultorio médico No.34 Policlínico Buenaventura.
Enero – Diciembre 2018.

Antecedentes Patológicos Pacientes con factores de riesgo de HTA


Personales. No. %
Diabetes Mellitus tipo I o II 3 5.0
Obesidad 9 15.0
Cardiopatías 8 13.4
Enfermedades renales 2 3.3
Otros 38 63.3
Fuente: Cuestionario

Al analizar los resultados de la tabla 5, observamos que el 63.3% de los pacientes


del estudio no tienen relación con factores de riesgo como la diabetes mellitus, la
obesidad, afecciones vasculares, enfermedades renales, etc., sin embargo
podemos relacionarlos con el hábito de fumar, malos hábitos alimentarios y estrés.
Este estudio coincide doctores Raúl Morales Concepción y Juan Carlos Baster en
su estudio "Caracterización clínico-epidemiológica, de la hipertensión arterial en el

42
adulto mayor", Policlínico Cristino Naranjo, y Ariamna Laguna Pérez, en los
Haticos de Báguanos, en el 2017, no así con el estudio de Wyssen.
La hipertensión arterial no es solo una importante enfermedad multifactorial que
afecta a la población es un factor de riesgo para la aparición de otras
enfermedades y un punto para marcar el pronóstico y curso de otras
enfermedades.

Tabla 5.Distribución según el de nivel conocimientos acerca de los factores de


riesgo de la hipertensión arterial antes y después de la intervención
consultorio médico No.34 Policlínico Buenaventura. Enero - Diciembre
2018.

Nivel de conocimientos acerca de los Antes Después


factores de riesgo de la hipertensión
No % No %
arterial
78.4
Bueno 10 16.6 47

Regular 19 31.6 10 16.6

Mal 31 51.8 3 5.0

Total 60 100 60 100


Fuente: cuestionario
En la tabla 5 se muestra el conocimiento de los pacientes en cuanto a los factores
de riesgo de la hipertensión arterial antes y después de la intervención educativa,
donde se observa que antes de aplicarla solo el 16.6% de los pacientes tenían los
conocimientos adecuados sobre el tema, luego de aplicar la intervención, sube a
un 78.2% de conocimiento satisfactorio o bueno.
Estos resultados coinciden con los del estudio realizado por el Dr. Alejandro
Aguilera en el año 2018, Milagro C. Pupo Campo en el año 2015, y Yunia Cuenca
Magarino igualmente en el 2015.
Sin embargo queda por debajo con relación al estudio realizado por la Dra. Liety
Pérez Molina en la comunidad el Pozón, en Venezuela. Se puede apreciar que

43
aunque esta intervención se aplicó a pacientes de varios grupos etarios, incluido la
tercera edad, con factores biosicosociales, diversos niveles de escolaridad la
aceptación de los conocimientos por parte de ellos fue buena, pero aún hay que
seguir profundizando sobre este acápite en particular, no solo con los pacientes
hipertensos, sino con aquellos que presentan algún factor de riesgo y toda la
población en general.

Tabla 6. Distribución según el de nivel conocimientos acerca de los síntomas y


signos de la hipertensión arterial antes y después de la intervención
consultorio No.34. Policlínico Buenaventura. Enero - Diciembre 2018

Nivel de conocimientos Antes Después


acerca de los síntomas de
No % No %
la hipertensión arterial

Bueno 11 18.4 54 90.0

Regular 19 31.6 6 10.0

Mal 30 50.0 - -
Total 60 100 60 100

Fuente: cuestionario

Al analizar los resultados de la tabla 6 vemos que el nivel de conocimiento sobre


los síntomas era de un 18.4% antes de la intervención y de un 90% luego de esta,
lo que es muy positivo si tenemos en cuenta que el 50% de la muestra antes de la
intervención tenían conocimientos insatisfactorios.
Un estudio similar fue realizado en Argentina acerca del nivel de conocimientos de
los pobladores sobre esta enfermedad, reveló como resultados que el 9.86% era
insuficiente, el 33.10% aceptable y solo el 57.04% era bueno, los resultados de
nuestra encuesta inicial no coincide ya que la población estudiada tenían

44
conocimientos malos sobre los síntomas de la HTA, además luego de los
intercambios en los talleres algunos pacientes comentaban no conocer sus
propios síntomas cuando presentan descompensación de esta patología.
Otros estudios realizados en Colombia y Honduras revelan que esad poblaciones
tienen un ni escaso o insuficiente del tema.

Tabla 7. Distribución según el de nivel conocimientos acerca de la prevención de


la hipertensión arterial antes y después de la intervención educativa, consultorio
No.34 Policlínico Buenaventura. Enero - Diciembre 2018.

Nivel de conocimientos Antes Después


acerca de la prevención
No % No %
de la hipertensión arterial
Bueno 9 15.0 56 93.4

Regular 22 36.6 4 6.6

Mal 29 48.4 - -

Total 60 100 60 100

Fuente cuestionario

La tabla 7 nos muestra que antes de la intervención solo el 15% de los pacientes
estudiados tenían buenos conocimientos, mientras que el 48.4% de ellos era
inadecuados, luego de la intervención, el 93.4% de los pacientes adquirió

45
conocimientos favorables, solo el 6.6% fue regular, lo que se asemeja a los
resultados de la Dra. Liety Pérez Molina y el Dr. Alejandro Aguilera.
Estos resultados coinciden con estudios realizados por Martínez Rosales L. y Vega Prado R,
que evalúan el nivel de conocimientos en comunidades de Nicaragua, sin embargo no
coincide con el estudio de Raciel Sánchez Parronda en 2017.
La autora señala que entre los aspectos más importantes de estos talleres aplicados está
el tema de la prevención de la enfermedad, ya que nuestro objetivo fundamental como
médicos de familia es la promoción de salud y prevención de enfermedades, por lo que
considera muy satisfactorio de los resultados luego de la intervención educativa.

Tabla 8. Distribución según el de nivel conocimientos acerca de las


complicaciones de la Hipertensión arterial antes y después de la intervención
consultorio médico No.34 Policlínico Buenaventura. Enero - Diciembre 2018

Nivel de conocimientos Antes Después


acerca de las
complicaciones de la No % No %
hipertensión arterial
Bueno 8 13.4 59 98.3

Regular 22 36.6 1 1.7

Mal 30 50 0 0

Total 60 100 60 100

46
Fuente : cuestionario

La tabla 8 nos muestra como los niveles de conocimiento sobre las


complicaciones de la HTA subieron (98.3%) luego de aplicada la intervención, si
tenemos en cuenta que el 30% inicialmente no conocían nada sobre posibles
complicaciones de esta enfermedad, lo que nos demuestra el interés que los
pacientes mostraron hacia el tema, lo que coincide con el estudio de la Dra. Liety
Pérez Molina, aunque ella logró el 100% de conocimientos satisfactorios sobre
este tema.
Se describen varios estudios sobre afecciones en los órganos diana, como el
realizado en Chile por Korch C. E. sobre las complicaciones de la HTA donde se
encontró que un 60% de los pacientes estudiados presentaban signos de
cardiopatía hipetensiva y conocían sobre sus complicaciones.
La autora no coincide con los estudios realizados en el año 2016 en el municipio
10 de Octubre en la Habana, por el doctor García Molina sobre el nivel de
conocimientos de las complicaciones en el adulto mayor.

CONCLUSIONES

47
En el estudio realizado predominó el sexo femenino y el grupo etario de mayor
participación fue el de la tercera edad, del nivel de escolaridad secundaria básica,
con antecedentes patológicos familiares de HTA.
El nivel de conocimientos sobre la HTA era regular antes de la intervención
educativa y buena luego de esta.

RECOMENDACIONES

48
Se debe continuar trabajando con esta intervención educativa y aplicarla a los
grupos de riesgo de la hipertensión arterial y a la población enferma de esta y
otras comunidades.

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