LA INTRODUCCIÓN DE DROGAS EN FORMA DE DULCES EN LAS

ESCUELAS SECUNDARIAS: DESAFÍOS Y ESTRATEGIAS DE PREVENCIÓN

Profr. Gener Antonio Escalante Hernández

La introducción de drogas en forma de dulces en las escuelas secundarias es un

problema creciente que preocupa a padres, maestros y autoridades educativas. A
pesar de los esfuerzos por parte de la sociedad para prevenir el consumo de
sustancias ilícitas entre los adolescentes, algunos estudiantes continúan
experimentando con drogas en el entorno escolar. Este ensayo abordará este
tema delicado y discutirá las medidas que los maestros y profesores pueden tomar
para evitar estas situaciones, considerando el contexto de una campaña de
prevención realizada durante el ciclo escolar: "Si te drogas, te dañas".

I. El Desafío de las Drogas en Forma de Dulces en las Escuelas

Secundarias

1. La atracción de los dulces: Los adolescentes son particularmente

susceptibles a las influencias externas y a la búsqueda de experiencias nuevas y
emocionantes. La presentación de drogas en forma de dulces puede resultar
atractiva debido a su sabor y apariencia inocente.

2. El peligro subestimado: Los estudiantes pueden subestimar los riesgos

asociados con el consumo de drogas en forma de dulces, creyendo erróneamente
que son menos dañinas que otras formas de consumo, consideran que no se
darán cuenta sus compañeros al parecer dulces de tienda.

3. Presión de grupo: La presión de grupo y complicidad es un factor importante

que influye en la decisión de los adolescentes de experimentar con drogas. La
introducción de drogas en forma de dulces puede ser impulsada por la influencia
de amigos que desean compartir la experiencia.

Un alumno contacta personas fuera de la escuela para conseguir las gomitas con
cannabis, las cuales le venden solo el compuesto en forma de azúcar, después de
la tercer hora clase, salen a la clase de educación física, mientras salían el alumno
en cuestión mezcla las gomitas con el compuesto y salen a la clase. Ya
previamente durante las primeras dos horas ya habían consumido algunas
gomitas durante las clases, durante la cuarta y quinta hora este alumno y otros
dos ya habían consumido varias de estas gomitas. Para el final de la quinta hora
una de las alumnas sale del salón y me comunica de manera discreta lo que
estaba pasando en el salón. Inmediatamente me comunico con el padre de familia
del menor supuestamente responsable, los padres llegaron para el final de la
séptima hora, y se tuvo la evidencia en la mochila del alumno. A los padres se les
caía la cara de vergüenza, para el día siguiente se citó a los padres de los demás
alumnos implicados, que eran otros cuatro. Estos hechos fueron regresando de las
vacaciones de abril. El alumno se tuvo que ir a trabajar a distancia, ya que
estábamos en el ultimo trimestre y no pretendimos afectarlo más, se acordó con el
padre de familia que fuera a terapia con el psicólogo de la escuela, do veces por
semana, además tenia entrega de trabajos con los maestros cada quince o veinte
días en algunos casos, se entregaban y revisaban las actividades por la
plataforma de classroom y algunos exámenes el alumno fue a realizarlos a la
escuela y otros en línea. También se acordó que el alumno estaría en
regularización de inglés y matemáticas. Así como un curso para su examen
COMIPEMS, y continuar con el equipo de basketball de la escuela, para alejarlo
de las drogas mediante el deporte.

II. La Campaña de Prevención "Si te drogas, te dañas"

Los hechos sucedieron antes del inicio de la campaña "Si te drogas, te dañas"
que está diseñada como un esfuerzo importante para sensibilizar a los estudiantes
sobre los riesgos asociados con el consumo de drogas y fomentar un entorno
escolar seguro y saludable. A pesar de sus esfuerzos, algunos alumnos ya habían
caído en esto, las ganas de experimentar con drogas, en este caso en forma de
dulces. Es fundamental que los educadores se involucren de manera activa para
prevenir estas situaciones. Cabe mencionar que el alumno responsable, ya tenia
situaciones previas con vapeadores, pero no habíamos podido comprobarlo, y a
que lo había realizado fuera de la escuela. El alumno entrego a distancia los cada
uno de los productos que pidieron los profesores en las diferentes asignaturas y el
alumno los expuso en los salones de primer grado.

III. Medidas que los Maestros y Profesores pueden Tomar para Prevenir la
Introducción de Drogas en Forma de Dulces

1. Educación y Concienciación Continua: Como menciona el experto en

prevención de drogas John Smith, "La educación es la mejor herramienta de
prevención contra el consumo de drogas. Cuando los estudiantes comprenden los
riesgos y las consecuencias asociadas con el uso de sustancias, están mejor
preparados para tomar decisiones informadas y saludables."

2. Detección Temprana: Según lo recomendado por nuestras autoridades

educativas, "La detección temprana es clave para prevenir el consumo de drogas
en las escuelas secundarias. Los maestros y profesores deben estar atentos a
señales de alarma, como el cambio en el comportamiento de los estudiantes."

3. Promoción de Ambientes Seguros: En palabras de la Dra. María López,

psicóloga escolar, "Fomentar un ambiente escolar seguro y libre de drogas es
esencial. Esto incluye la implementación de políticas y regulaciones estrictas
contra el consumo de sustancias en la escuela y la colaboración con las
autoridades para llevar a cabo inspecciones y registros aleatorios."

4. Intervención y Apoyo: Según el Instituto Nacional de Abuso de Drogas, "La

intervención temprana y el apoyo emocional son cruciales para ayudar a los
estudiantes que han caído en la trampa de las drogas. Los educadores deben
estar preparados para ofrecer orientación y dirigir a los estudiantes hacia recursos
de tratamiento adecuados."

5. Colaboración con Padres: Como señala la Asociación de Padres y Maestros,

"La colaboración constante entre educadores y padres es esencial para abordar el
problema de manera efectiva. Los educadores y padres deben trabajar juntos para
identificar y abordar cualquier preocupación relacionada con las drogas."
 Para concluir la introducción de drogas en forma de dulces en las escuelas
secundarias es un desafío serio que requiere una respuesta coordinada de
educadores, padres y autoridades educativas. A pesar de las campañas de
prevención como "Si te drogas, te dañas", la observación de los profesores
durante la jornada escolar, la colaboración con padres de familia, las campañas de
concientización con autoridades como la policía municipal, algunos estudiantes
pueden caer en la tentación de experimentar. Sin embargo, con una educación
continua, detección temprana, promoción de ambientes seguros, la sana
convivencia, la intervención y apoyo adecuados, y una estrecha colaboración entre
todos los actores educativos involucrados, podemos reducir la incidencia de este
problema y proteger a nuestros adolescentes de los peligros asociados con el
consumo de drogas.