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Príncipe ❀ᴛᴀᴇᴋᴏᴏᴋ

˗ˏˋsaskiaˎˊ˗

Published: 2022
Source: https://www.wattpad.com
00

—Me niego abuelo, no quiero ir—Se quejaba un pelinegro al teléfono—


Porque estoy bien con mis amigos y me niego a coronarme.
— ¡¿No te das cuenta de nada?! —Regañaba Heechul colero— Jeon
Jungkook, te ordeno volver a casa ya mismo.
—Bien, iré, iré—Se quejaba el chico— Ya rey Heechul, su hijo irá allá.
—Hijo, sabes que te quiero y por eso te di libertad—Suspiraba el
hombre— Pero es hora que asumas tu verdadera responsabilidad como
príncipe heredero y vengas a tomar sucesión de mi lugar.
—Pero es que no quiero, quiero ser normal—Reclamaba cansado— Soy
feliz como estoy, sin lacayos, cabalgatas o cenas obligadas...
—Jungkook, ¿No crees que eso hubiera hecho feliz a la abuela Hani? —
Musitaba mientras Jungkook sentía la opresión en su pecho— Ella siempre
quiso que tú fueras un sucesor, luego de lo de tus padres...
—Lo sé, abuelo pero... ¿Soy el único que está por la línea sucesora?
—Oficialmente eres el heredero legitimo—Escuchó la emoción en la voz
de Heechul— Desde que eres mayor de edad, eres ya casi el Rey. Por favor
Jungkook es tu país...
—Lo sé, parto en la mañana entonces—Se resignaba el chico— Espero
que en el jet dejen ir con mascotas, mi gato Bokshil vendrá conmigo.
—Sí, bueno... nos vemos hijo—Despedía el hombre— Sabes que te
quiero, ¿Verdad?
—Lo sé, siempre ha sido como mi padre—Comentaba el chico
acariciando a su gato— Nos vemos, ya mejor te dejo que tengo que hacer
las maletas.
El chico colgó la llamada y lanzó su móvil en la cama, miró hacia las
calles del departamento en el que vivía y suspiró. Desde que empezó su
carrera universitaria en negocios internacionales, había rogado a Heechul
una vida más universitaria. Y a duras penas el hombre accedió, pero eso sí,
un guardia real le vigilaría relativamente cerca.
¿Vaya libertad no? Pero Jungkook se había sentido libre de qué comer,
beber y con quien convivir. Había hecho muchos amigos, entre ellos Jimin.
Un peli naranja muy entusiasta, ecologista y siempre le apoyaba en todo.
Suspiró y marcó a su amigo, lo invitaría ya que de todas maneras el Jet
privado real era muy amplio para ambos y el gato.
—Bueno mi Bokshil, iremos a una casa más amplia—El gato maullaba,
al menos uno sería feliz allá— Al menos tendrás más espacio para jugar,
quien sabe mi anterior cuarto era bastante más amplio que este
departamento.
Luego de unos minutos, escuchó el timbre y sonrió. Jimin estaba allí.
—No te pases, ¿Cómo que viajaremos al centro del país? —Indagaba
sonriente el más bajo.
—Sí, bueno Jimin ya tengo autorizado decirte... o al menos merezco
tener el derecho—Empezaba a ponerse nervioso— S-Soy el príncipe
Jungkook, heredero del trono.
— ¡¿Qué?! —Miró con estupefacción— Espero no estés bromeando niño
del mal...
—Jimin, no. En serio es verdad—Sonreía el chico nervioso— Pues...
¿Aceptas mi invitación?
—Claro que sí, iré a hacer las maletas y vendré para dormir acá—Se
levantaba y dirigía a la puerta— Vengo en un rato, mientras haz tu equipaje
y emociónate. ¡Rey Jungkook!
Jimin salía sonriendo del lugar, mientras Jungkook negaba fastidiado con
la cabeza y sacaba sus maletas. Sabía que no sería necesario, así que solo
haría la más pequeña.
Odiaba tener que ser el heredero legítimo al trono, no quería gobernar
toda una vida. Quería disfrutar de la vida, recorrer el mundo y conocer el
amor con alguien que le quiera por quién es y no por su posición noble.
Pero la última proclama de la abuela Hani antes de fallecer, fue su deseo de
ver a su nieto como el rey de Hanyang y su abuelo Heechul quería honrar a
su esposa con aquello.
Jungkook no podía objetar, también porque tenía ventajas eso de ser
noble. Como el que podía viajar en Jet privado, comprar todo lo que
quisiera sin límites y su favorita ventaja de todas, convencer a su abuelo de
mejorar al país. Sólo esperaba no tener que lidiar con mucho en cuanto
llegara allá.
- -

Mientras que en Hanyang, un castaño caminaba por los pasillos del palacio
con seguridad y una sonrisa arrogante. Mientras Heechul viraba los ojos y
suspiraba, era Kim Taehyung, conde de Hwaseong.
— ¿Qué pasa ahora Taehyung? —Suspiraba el hombre.
—Nada, sólo vine de visita— Admiraba las flores de los jarrones— He
oído que su nieto es ya mayor de edad, el chico para el trono.
—Así es, ¿Hay algún problema con eso? —Indagaba curioso.
—Ninguno, por alguna razón se me ha citado en la audiencia real—
Torcía la boca— Así que, ¿Vamos su alteza?
Heechul asintió y siguió al chico hasta la sala de asamblea, donde les
esperaban los parlamentarios con una sonrisa cortés. Se sentaron a escuchar
la proclama de ley.
—Bienvenido su majestad, conde Kim—Hablaba el presidente de la
asamblea— Como sabemos, el joven Jungkook es mayor de edad ya y
heredero al trono.
Ambos hombres asentían, mientras Taehyung miraba curioso la situación.
—Bien, hay noticias muy maravillosas para el conde y quizá
desafortunadas para usted—Avisaba el líder— El conde Taehyung es
también candidato a gobernar, pero si el príncipe se niega a hacerlo.
— ¿Qué? ¿Yo heredero? —Hablaba por primera vez Kim— Es extraño,
no tengo ninguna relación sanguínea con la familia Jeon.
—Así es, sin embargo su tátara abuelo fue el primo segundo del rey—
Informaba serio— Por eso es la condición de que puede ser si y solo si el
príncipe se niega. El rey nos informó que llegará mañana al palacio, así que
se hará una fiesta en su honor. Allí el príncipe decidirá su destino, joven
Taehyung.
Taehyung miraba molesto al parlamento, odiaba estar atado a la decisión
de un mocoso caprichoso. Odiaba mucho al príncipe Jungkook. Asintió con
la cabeza y recuperó su voz, tratando de no sonar molesto.
— ¿Para qué se me trajo aquí entonces? —Miraba a todos— Me han
hecho hacer un día de viaje en automóvil, cuando bien pudieron mandarme
la proclama al castillo.
—Oh bueno, lamentamos eso conde Kim—Hablaba otro sujeto del
parlamento— Se le trajo aquí también para el baile, la proclama y para que
sea el ayudante del rey en su coronación. Una gran tarea.
—Bien, entonces me retiro. Me encuentro agotado—Informaba sin
expresión— Con su permiso majestad.
Cuando el Kim se había retirado, Heechul miraba al parlamento serio.
Era hora de sacar todo al parlamento.
—Bien, ¿A qué trajeron a Kim? —Miraba serio— Dudo que solo a lo
que se le ha dicho.
—Muy bien pensado majestad, le trajimos para la cláusula de la ley— El
hombre enseñaba un viejo papel— Aquí marca que el joven Jeon se debe
casar, usted lo sabe por su situación con la reina Hani.
—Ya veo de que va esto, ¿Taehyung será el marido?
—No, será la opción si Jungkook no puede casarse—Avisaba el hombre
— Y también se Jungkook rechaza esta condición y la corona.
El rey asintió y salió del parlamento, ya se encargaría de ver las
intenciones de todo eso.

- -
A la vez que Taehyung era acomodado en una habitación de huéspedes
en el palacio, mientras miraba hacia el balcón con molestia.
—Ya me las pagarás, principito de mierda—Susurraba furioso.
Y no es que le interesara la estúpida corona, no. Sino que por un
caprichoso niñato se le había interrumpido de su tranquila vida, también
porque por cualquier deseo de ese príncipe su vida se vería afectada.
Si algo odiaba Taehyung era no tener el control completo de su vida, y
con la noticia de la coronación y su posible destino, el control de su
calmada vida estaba viéndose afectado.

Hola, esta es la propuesta para este fic. Y bueno, es amor-odio como


dejé claro en las etiquetas, así que se irá desarrollando un poco lento en
Taekook. Paciencia he de pedir. Además, de claramente su apoyo y
opiniones de esta obra que tenía en borradores y ya la he sacado a la luz.
Basado en "Diario de la princesa" o "Princesa por sorpresa"
PD: No odien a este Taehyung (?)
01

El príncipe pelinegro miraba a la par de su amigo el cielo, estaban a menos


de quince minutos de llegar a la capital de Hanyang. Jimin iba peinando su
cabello con una mano mientras acariciaba con otra mano al gato del menor
Bokshil.
—Ya quiero llegar, estar en un jet es genial—Admiraba el peli naranja—
Pero es aburrido y contamina mucho.
—No te preocupes, cuando lleguemos pedía te dieran buena habitación—
Sonreía Jungkook suspirando— Hace tres años que no estoy en casa, debe
haber cambiado mucho.
— ¿Cambian decoración seguido? —El príncipe asintió— Vaya, eso es
tener dinero. Bueno, eso explica que uses ropas muy caras...
—No es eso, se supone son por si viene alguien de visita real y...
—Aburrido...—Canturreaba abrochándose el cinturón.
—Lo es, por eso hui de casa. —Alzaba los hombros— Pero mi abuela y
abuelo... mejor dicho, mis padres, quieren que sea sucesor.
—Oh tu abuela es la hermosa Hani-ssi—Admiraba Jimin— Ahora veo
todo, siempre te me hacías parecido.
—Bueno... ¿Qué planeas hacer cuando lleguemos?
—Conocer contigo el castillo—Sentía el aterrizaje— Parece locura pero
no recuerdo mucho. Prefiero mi departamento.
—Igual era grande—Puntualizaba Jimin— Vaya, ya llegamos.
El pelinegro miró por la ventana del aeropuerto real, suspiró y tomó a su
gato. Salió del Jet junto a Jimin, el cual miraba sonriente y emocionado
todo.
—Príncipe, el rey Heechul me ha pedido que viniera por usted—Sonreía
amable un hombre— Me llamo Jung Hoseok.
—Soy Jimin, el amigo real—Saludaba mientras caminaba a la par de
Jungkook.
—Sí, ¿Dónde está mi abuelo?
—El rey ha tenido juntas desde la mañana—Hablaba mientras conducía
— Si quiere su alteza y su amigo, pueden llamarme J-Hope o Hobi.
—Hobi suena mejor—Señalaba Jungkook— ¿Llegamos?
—Así es, subiré las cosas a sus habitaciones—Sonreía amable— Ahora,
puede dar un vistazo al palacio.
Jimin miró a su amigo mientras Hoseok se retiraba del lugar. Jungkook
miró a su amigo e hizo un además con su manos, mientras avanzaban al
interior del castillo.
—Vaya, es enorme...—Admiraba los pasillos Jimin— ¿En dónde
dormiremos?
—Me han dicho que en el ala este, ya que una de las habitaciones está
ocupada—Se adentraban a la cocina— ¿Quieres algo de comer? Yo muero
de hambre.
—Sería genial comer pizza—Sonreía el peli naranja.
—Pizza es genial— Miraba al cocinero— ¿Es posible que sea pizza?
—Lo que ordene majestad— Sonreía el hombre— Me alegro que haya
vuelto.
—Vaya pero que nieto tan intranquilo tengo, ¿No crees Mingyu? —
Escucharon una voz.
—A-Alteza...—Susurró Jimin— Y-Yo... J-Jimin...
—Tranquilo, soy una persona normal—Sonreía Heechul— Bienvenido,
Jimin. Jungkook nos ha hablado de ti.
—Sí, bueno... somos buenos amigos—Hablaba Jimin sonriente— Un
placer rey Heechul.
—Bueno, te dejo con mi abuelo un momento—Hablaba Jungkook— Iré
por unas cosas a mi habitación, igual si no puedes pedir que te lleven a la
tuya. Mándame un mensaje.
El pelinegro salió de la cocina y suspiró mirando el castillo, quería ir a su
habitación a desempacar o a ver como se había decorado. Caminaba
tranquilamente mientras miraba los viejos cuadros familiares, tantas caras
desconocidas pero significativas...
- -

Taehyung estaba aburrido, luego de correr un poco y leer se sentía


fatigado. Odiaba estar en ese lugar, pues no se sentía emocionado y
divertido. Más bien aburrido y odiando más y más al príncipe Jungkook.
—Supongo que tendré que encerrarme en la habitación—Susurró
dirigiéndose a las escaleras.
Pero una figura en el pasillo interrumpió su plan, miró con atención al
chico. No lo había visto el día anterior en el lugar, quizá por el tamaño del
castillo. Pero no pudo evitar fijarse en lo delicado y hermoso que era aquel
chico.
Incluso aunque estaba con una mirada algo cómica, parecía estar en su
mundo. Taehyung sonrió ladino, mientras miraba con más detalle al chico.
Vio como dos mucamas se acercaban a él.
—Príncipe Jungkook, hemos hecho su alcoba—Hablaba una castaña—
Puede dirigirse allí si así desea.
—Muchas gracias, en seguida iré—Comentó sin dejar de ver los cuadros
— Pueden retirarse.
Taehyung se dio cuenta de que aquel hermoso chico era el príncipe dueño
de sus jaquecas. Otro motivo más por el que odiaba estar allí. Lo que no
sabía, es que Jungkook ya lo conocía. Taehyung siempre había sido el
primer amor del chico, desde que lo vio en la fiesta numero dieciséis que
tuvo. Cuando el castaño tenía ya 18 cumplidos.
—Si cierras la boca no parecerás ido—Soltó de pronto, asustando al
pelinegro.
—Nadie ha pedido tu opinión—Se quejó frunciendo el ceño.
—No, pero era un amable consejo de mi parte—Miraba engreído.
—Eres tan...—Apretaba los puños— Mira tú...
—Taehyung, conde Kim Taehyung—Se presentaba reverenciado—
Principito.
—Ya te he dicho que no me digas así—Avanzaba escaleras arriba— Odio
eso, eres despreciable.
Taehyung subía por las escaleras laterales a la par de Kook, y el menor
bajó furioso las escaleras.
—Déjame en paz.
Jungkook salió a la cocina nuevamente y Heechul lo miró con extrañeza,
igual que Jimin, el cual comía helado al lado del rey. Jungkook los miró y
suspiró para sentarse al lado de Jimin y robar helado, mientras Heechul
miraba nervioso la escena. Era ahora o nunca.
—Jungkook, quiero que hablemos en privado—Llamaba su atención—
Sígueme al despacho, volvemos ahora Jimin-ah.
El de cabellos naranjas asintió mientras seguía comiendo e indicando
como quería la pizza al chef, Jungkook sonrió y avanzó con su abuelo al
viejo despacho familiar. Al entrar, Heechul tomó una mirada seria e indicó
al menor tomar asiento.
—Bien, ¿Qué pasa abuelo?
—Como sabrás, eres elegido legítimamente para gobernar aquí—
Jungkook asintió— Bien, hay algo así como una condición.
— ¿Qué es esa condición? Me estás asustando.
—Es que contraigas nupcias—Jungkook palideció— Tienes que casarte
para tomar mi lugar.
—P-Pero es una injusticia, ¿Qué pasa si me niego?
—Le cederán el trono a Kim Taehyung, el conde de Hwaseong—
Jungkook palideció más, ¿Se lo darían a ese engreído? — Y entonces serás
libre.
—Yo... tengo que pensar todo. Pero no quiero que ese idiota gobierne—
Heechul le miró extrañado— Iré a mi habitación, con permiso abuelo.
Jungkook salió del despacho sin decir más. Se sentía enfermo, cansado y
muy molesto. Cuando vio a Jimin comiendo pizza suspiró, se sentó a su
lado y empezó a comer en silencio.
—¿Malas noticias?—Habló Jimin de pronto.
—Las peores del mundo—Suspiró cansado.—Realmente no quiero
hablar de ello, ¿Comemos?
El pelinaranja asintió en silencio, respetaba las decisiones de su amigo. Y,
cuando estuviera listo par contar sus penas, sabía que lo haría sin más.

- -
Heechul suspiraba frustrado mientras veía la imagen de su esposa y su
hijo con su nuera. ¿Estaría haciendo las cosas bien?
Sus pensamientos se vieron irrumpidos por el sonido de la puerta, alzó la
vista y movió la cabeza de lado a lado.
—Adelante—Sentenció.
Taehyung entraba al lugar con elegancia, mientras paseaba su seria
mirada por el lugar. Heechul miró con interés aquello.
—Vine a decirle que no cuenten conmigo para entrenar o lo que sea al
príncipe.
—Pues... En realidad ahora no estoy seguro ya Taehyung.—El chico lo
miró curioso— En fin. ¿Te interesa en verdad gobernar la nación?
—Siendo sinceros su majestad, ni un poco— Hablaba tranquilo— Pero
supongo que soy mejor candidato que su propio nieto.
—¿Qué te hace decir eso?—Frunció el ceño— ¿Qué sabes de mi nieto
que yo no?
—Con todo respeto, ha pasado fuera de aquí mucho tiempo—Se aclaraba
la garganta— además de que dudo mucho que lea diarios locales o vea las
noticias.
—¿Tú lo haces? ¿Es eso toda tu objeción?
—Lo hago en efecto— Se levantaba del lugar— Como ya dije, no me
interesa el trono. Pero si no hay nadie ademas de Jungkook... Supongo debo
arriesgarme.
—¿Por qué eres así? —Miraba con tristeza— Dudo mucho que Taeyeon
y Baekhyun te criaran de esa manera.
—Mi tío Kai siempre fue mejor, supongo que por eso.—Recordaba sus
días felices— Además, no hay nada ni nadie que me alienten a cambiar.
—Tu tío Kai no era la mejor persona, tus padres sin embargo...
—No vine para hablar de mi pasado, así que con su permiso.
Taehyung se retiraba dejando a Heechul melancólico. Si tan solo ese
chico volviera a ser el dulce chico que había sido en el pasado. El mayor
siempre había creído que el pequeño Kim y su nieto podrían ser una buena
pareja.
Pero desde hace mucho que el castaño era frío, arrogante y diferente. Él
más que nadie deseaba que las cosas no salieran de control con ambos
chicos en el palacio.

Hola. ¿Qué les pareció el capítulo?


Feliz V Day

Y ya nos veremos en la siguiente actualización ❤


02

—Te lo juro Jackson estoy muy harto de ese niñato— Se quejaba el castaño
mientras masajeaba sus cienes— Es tan caprichoso y tan idiota...
—Ya, no digas eso del príncipe Jungkook—Regañaba el mayor— Eres
un conde, además... ¿Qué hay de malo en que le ayudes a ser mejor
persona?
—No es eso en sí, es que él es...—Lanzaba un puñetazo al escritorio
donde estaba— Es tan irritante y tan... ni siquiera sé porque la asamblea lo
quiere de rey, ¡Es un universitario inmaduro!
—Debo suponer entonces que... ¿Eres más maduro? —Taehyung lo
fulminó con la mirada— Hombre, es que eso es lo más idiota que te he oído
decir.
—No es idiota, simplemente que... no soporto la idea de que ese niño me
mande— Lanzaba un bufido— Pero tengo que soportar esto... es que
simplemente esto es absurdo.
—Te volverás más viejo si haces más de esos gestos—Se burlaba
Jackson— De igual manera, no debes expresarte así.
—Contigo no se puede... —Se levantaba del escritorio— Hoy se supone
es el baile real, ¿Correcto?
Jackson asintió dudoso.
—Su primo Namjoon vendrá al baile también—Habló sonriente— Mark
me lo dijo ayer esta mañana que hablamos.
—Bien, ¿Cómo van las cosas con BamBam? —Indagaba curioso, hace
mucho que no sabía de aquellos dos.
—Vaya que vives en tu mundo amigo—Reía el rubio.
—No lo entiendo, ¿Qué sucede?
—Hace mucho que no estamos juntos—Sonreía— Él ahora es feliz, con
un chico llamado Yugyeom. Yo estoy con Mark.
—Pero creí que Mark y tú...
—Sí, nos odiábamos. Pero cuando terminé a BamBam...—Suspiraba
enamoradizo— Él me ayudo, bueno no es como si llevara mucho con
BamBam...
—Creí que seguían juntos—Se disculpaba— Lamento haber sido
inoportuno.
—No te preocupes Taehyung, al menos ya no estás tenso—Reía como
loco— Bueno, iré a avisar de la llegada de Namjoon. Permiso.
Taehyung asintió mientras veía como Jackson salía de la habitación.
Soltó un bufido molesto y en su mente la imagen de aquel irritante príncipe
llegaba de pronto. Jeon Jungkook era el príncipe más desesperante.
—Supongo debo ayudarle...—Analizó de pronto— Aunque no se sí...
Sintió una opresión cálida en el pecho, esto no debía ser así. No después
de sus encuentros con aquel mocoso. Salió de su habitación con pasos
tranquilos.

- ❤ -
Mientras que Jungkook estaba con Jimin viendo algunos postres para la
cena, mientras que analizaba su situación. Tener que casarse y ser rey... todo
se había puesto de cabeza para el chico, no es que no le gustara su reino. Lo
amaba con su corazón, pero el tener que contraer nupcias para incluso poder
gobernar aquel prospero lugar...
—Jungkook, ¿Estás bien? —Escuchó la voz de Jimin.
—Jimin... yo en realidad no—Soltaba un suspiro— No estoy seguro de
que quiero...
—Oh podríamos pedir algo de comida frita entonces...
—No es eso, es más bien sobre el reino—Miraba a todos lados y se
acercaba a Jimin— No sé si soy el mejor para gobernar.
—No digas eso Jungkook, eres el mejor para hacerlo—Sonreía animado
— Siendo sincero, sé lo mucho que te preocupas por el reino. Siempre
pensé que eras una especie de entusiasta que amaba al país pero ahora...
comprendo todo.
—Es que me puse a pensar en todo esto y no sé si quiero hacerlo—
Soltaba nervioso el chico— No sé si en verdad quiero ser rey o solo es por
lo que quieren de mí.
—Creo que deberías pensarlo, además tiene ventajas este lugar—Reía
divertido.
—Eso es cierto, que hagan mis comidas favoritas...—Ambos chicos reían
divertidos.
—¿Estará mal pedir algo de leche chocolatada?
—No lo creo, mejor pidamos un chocolate caliente—Reía el príncipe
alegre— Y unos emparedados, suena excelente.
—¡Viva el príncipe! —Sonreía emocionado Jimin.
Sin saber que cierto conde los había escuchado desde la puerta de la
cocina. Taehyung rodó los ojos con molestia y lanzó una mirada molesta al
príncipe Jungkook. Salió del lugar sin querer seguir escuchando aquella
plática, era tan molesto que el chico pensara de esa manera y solo quisiera
ser príncipe por ello.
Aunque no se había quedado lo suficiente para ver como Jungkook
dejaba de reír y miraba serio a Jimin.
—Quiero gobernar para mejorar al país, así que supongo esa es mi meta
—Soltaba un suspiro— También quisiera ayudar pero creo que no estoy del
todo preparado...
—Ya sabrás que hacer en su debido tiempo—Tomaba algo de helado—
Además quizá en tu boda haya sorpresas. No sé.
—Tienes razón...—Reía nervioso para luego pedir la cena.
Luego de esos instantes en la cocina, fueron informados los mejores
amigos por un guardia, que sería esa noche una fiesta para el príncipe. Su
bienvenida oficial a casa. Jimin estaba emocionado, así que tomó a su mejor
amigo de la mano y se fueron a cambiar, esa noche prometía mucho.

- ❤ -

La noche caía y con ella la gente empezaba a llegar, el palacio se había


decorado con flores desde la entrada, una larga alfombra roja también se
combinaba con la decoración. Limosinas y muchos autos deportivos lujosos
empezaban a llegar al patio frontal, donde los encargados del
estacionamiento eran muchos.
—¡El duque de Hondae! —Informaba el anunciador real— ¡Kim
Namjoon!
Un chico alto de cabellos cafés salía del auto con una sonrisa galante,
mientras suspiraba al ver el castillo. Sabía que allí estaba su primo,
esperaba que no estuviera muy molesto.
—¡El noble SeokJin! —Informaba el chico— ¡Y su hermano pequeño
Ren!
—Vamos pequeño Ren, es hora de entrar—Informaba el mayor.
—Sí, hyung—Se emocionaba el pequeño de cuatro años.
El de cabellos rubios salía con un pequeño vestido de manera adorable,
con un trajecito de militar inglés sin el casco enorme, con un peinado muy
tierno. Haciendo juego con el traje azul de su hermano mayor. El pequeño
Ren miraba con curiosidad el castillo. Entraban con una sonrisa, pues Jin se
encargaría de cuidar a Jungkook y a su hermano al mismo tiempo, sería
emocionante.
Más gente seguía entrando, mientras en el interior del castillo se
preparaban para la entrada del rey Heechul y el príncipe Jungkook. Como
una tradición real, Jungkook tenía que bailar con todos los solteros
disponibles y nobles, incluyendo al molesto de Kim Taehyung. Jungkook
esperaba conocer al que fuese como su príncipe azul.
—Ya viene el rey—Informaba un chico sonriente— Preparen las cosas,
repito. El rey ya viene, posiciones.
—¡Ya viene el rey! —Susurró una dama de llaves— Todos derechos y
sirvan bien a todos.
—Ya viene entrando—Avisaba Hoseok— Águila en vuelo.
Heechul avanzaba con tranquilidad, con su amplia capa roja por detrás y
una corona de oro sencilla. Miraba el recibidor ordenado y con sus flores
azules preferidas, además de unas blancas que a Hani le encantaban. El
chico que organizaba todo se reverenció y Heechul se acercó a él.
—Sé ya que es un atuendo hermoso—Sonreía el hombre— ¿Han llegado
los invitados Hoseok?
—Su majestad va tarde—Informaba divertido.
—Un rey jamás llega tarde—Acomodaba su cabello— Los demás
simplemente llegan antes.
Hoseok asintió con una sonrisa y avisó al anunciador la llegada del rey.
— ¡Su majestad el rey Heechul de Hanyang! —Las puertas se abrían
para dejar entrar al hombre.
—Bienvenidos amigos míos, es un placer recibirles esta noche—Sonreía
con caballerosidad— Disfruten de la velada.
Champán, vinos muy caros y comidas internacionales era el festín
ofrecido en la fiesta, Heechul era informado de la entrada de Jungkook. Ya
que Jimin estaba esperando a su mejor amigo debajo, junto al resto de
invitados.
Hoseok hizo un ademán de entrada al anunciante y este asintió, para
luego poner un pequeño golpe en el piso. Silenciando a los invitados.
—Bien, como saben ha venido mi nieto Jungkook—Sonreía el rey—
Vamos a celebrar y brindar por Jungkook mi adorado nieto.
— ¡Presentando a su alteza real el príncipe Jeon Jungkook príncipe de
Hanyang! —Alzaba la voz el presentador.
Luego las puertas se abrían para dar paso al príncipe Jungkook, el cual
lucía un traje blanco con detalles en color rojo y dorado. El chico sonreía
amable y bajaba las escaleras, para detenerse en medio de estas y saludar a
los invitados.
— ¡Mi nieto Jungkook! —Sonreía emocionado Heechul.
El chico bajó y el baile se inauguró, Jungkook reía al verse bailando con
chicas y chicos. Unos más extremos que otros.
—Vaya alteza, baila más que bien—Halagaba el hombre— En verdad
que lo hace.
—Gracias, aunque yo no entiendo muy bien el baile de este estilo...
El hombre sonreía y otro más se acercaba con una sonrisa para luego
tomar al chico y bailar.
—Uno, dos, tres... uno, dos, tres...—Susurraba el chico mirando al piso y
bajando y subiendo la mano de Jungkook con mucha energía.
Jungkook miraba a Jimin, el cual se reía con diversión al lado de Hoseok
y Jin. El pequeño Ren dormía en brazos del mayor.
—Un, dos, tres...—Alzaba la mirada para sonreír al príncipe.
Jungkook amablemente saludaba al chico y reía sin querer en realidad
hacerlo. Era incómodo el baile. La gente miraba aquello y hablaba del
príncipe, se les hacía muy atractivo pero se veía tan tierno...
Habían llevado el pastel de Jungkook y el castaño, junto a Jimin
picoteaban las flores de crema batida.
—Eso no es bueno príncipe...
—Sí, no es muy higiénico...
—Lo siento yo... ¡Yugyeom! ¡BamBam! —Sonreía abrazándolos.
—Cuánto tiempo—Sonreía el más alto— BamBam quería venir antes
pero el duque...
—Lo bueno es que están aquí—Sonreía emocionado, girándose a Jimin
— Jimin, ellos son mis mejores amigos en la infancia...
Los chicos hablaban emocionados, conociéndose, luego SeokJin se unía a
ellos con una sonrisa. Heechul miraba la escena con una sonrisa, quería que
su nieto disfrutara de la velada. Jungkook caminaba y reía con los tres
chicos hasta que chocó con alguien, pisándole sin querer.
—Lo siento...
—Descuide príncipe—Miraba con una sonrisa muy sarcástica Taehyung
— Con su permiso.
Taehyung se alejaba hacia otro chico alto, el cual curiosamente hablaba
con SeokJin. Jungkook miró la escena con un suspiro, hasta que una chica
tocó su hombro y le invitó a bailar.
—Bien, sacaré mis mejores pasos—Sonreía.
La chica sonreía y empezaba a hacer pasos de porrista, se abría de
piernas haciendo que Jungkook tomara posiciones incomodas agachándose
para no soltar a la chica.
—Vaya ese príncipe es muy guapo—Comentaban varios a su alrededor—
Que lastima que baile con esa chica...
—Está bailando o... ¿Invocando a satanás con un ritual? —Miraba Jimin
con risas.
—No lo sé. Es muy raro aquel baile—Opinaba Jin— Pobre de mí
Jungkookie.
—Lo peor es que no hay más con quien pueda bailar—Opinaba
Yugyeom.
Taehyung alzó la vista de su copa de champán y vio la incomodidad pero
a su vez, la caballerosidad en el príncipe. Casi lo conmueve. Casi.
Decidió hacer un acto de caridad hacía el príncipe y se aproximó con
elegancia hacia donde el chico bailaba, tocó el hombro de la chica y encaró
a Jungkook.
—Creo que es mi turno con su majestad—Informaba a la chica, la cual se
alejaba— ¿Me permite la pieza?
Jungkook asintió y Taehyung pasó una mano por la cintura del chico y
con la otra guiaba a Jungkook en un elegante baile. Jimin y Heechul
miraban la escena emocionados, aquellos dos se veían jodidamente bien
juntos.
—En verdad te agradezco Conde Taehyung—Hablaba sincero el chico.
—No es nada príncipe Jeon, era obligación mía hacerlo—Le daba una
vuelta al chico— Aunque me pisaras.
—Oh lamento eso, en verdad—Sonreía agradecido— Me alegro que mi
torpeza no altere su destreza.
—Claro, puedes pisarme cuando quieras—Ironizaba.
Fuera de su discusión, los amigos del príncipe miraban la escena con un
suspiro. Ambos estaban en el centro de la pista, resaltando entre los demás.
Y es que Taehyung tenía un traje negro con azul marino y adornos dorados,
como si hubieran combinado los trajes en algún espacio mágico.
—Hacen una hermosa pareja...—Susurraba Jin.
—Sí...—Comentó Namjoon de pronto cerca de él, muy cerca.
—Awww...—Suspiraban todos con ternura ante la escena.
Su baile era elegante y con pasos perfectos, sincronía perfecta y esos
chicos con rostro perfecto. Sus cuerpos en las vueltas se unían, haciendo
que ambos se miraran a los ojos profundamente. Jungkook sabía que este
recuerdo estaría mucho tiempo en su mente.
- -
Hola, espero les gustara la actualización. Como saben, esto está
adaptado a la película "Diario de la princesa 2 o "Princesa por sorpresa
2" pero no al 100 porque alteré ya mucho al inicio. Pero quise basarme
en esta escena porque la amo.
Así que no se sorprendan si encuentran cosas diferentes o muy iguales
kkk
Nos vemos.
03

Jungkook estaba aburrido, sentado en la gran sala de su habitación


comiendo algunas cosas. No tenía idea de donde estaban los demás, solo
Jimin el cual comía palomitas a su lado.
—Príncipe Jungkook—Llamaban al menor.
—Jin-hyung... ¿Pasa algo? —Miraba curioso.
—Lo siento, vengo a decir que el tío del conde Taehyung está aquí—
Sonreía abiertamente.
— ¿El tío de Taehyung? —Miró con mucha curiosidad— ¿Quién es y
porqué debo saber esto?
—Él es el causante de que Tae sea así realmente—Suspiraba cansado—
El duque tercero Jookhyung es muy... ambicioso, sinceramente a Tae lo
conozco desde que era niño, como a ti. Pero no sé...
— ¿Qué no sabes? —Indagó curioso Jimin.
—Taehyung es una persona amable y con sentimientos muy puros—
Jungkook lo miró sin creer— Y me duele como cambió desde un momento
para otro, es decir sus padres... Baekhyun y Taeyeon eran amables.
—No sabía que no tuviera padres...—Analizó Jungkook— Pero
realmente no le entiendo, creo que no lo haré.
Jin sonrió, porque él, Jimin y todos se dieron cuenta de aquella chispa
que había entre ambos. Sólo que no lo diría, esperaba que ambos se dieran
cuenta.
—Igual creo que deberás casarte, ¿No? —Preguntaba curioso Jimin— O
eso es lo que escuché, no sé.
—Se me hace absurdo, mi abuelo quiere que lo haga en treinta días...—
Caminaba de un lado a otro, no notando la presencia de Heechul— Esto es
una trampa, que sea así es mi única elección... ¿Por qué?
—Jungkook, sinceramente eso lo hice yo—Admitió Heechul, causando
que le miraran con sorpresa— Hani y yo solo éramos amigos, en aquellos
días yo estaba enamorado de una chica llamada Hara, pero nuestros padres
nos comprometieron... al inicio solo le tenía cariño, pero con el tiempo
logramos amarnos. Tu padre, Minho es fruto de aquel amor.
—Pero yo no quiero eso abuelo—Suspiraba Jungkook melancólico,
causando que Jimin se sintiera un tanto triste— Mis padres, Suzy y Minho
se amaban y yo quería eso...
De pronto las palabras de su padre se le vinieron a la mente, causándole
un golpe de realidad.
—El valor no es la ausencia del miedo, sino el conocimiento de algo más
importante...—Musitó de pronto, encarando a su abuelo y a los presentes—
Sé que es mi destino esto, así que espero cambie todo al reinar.
—Así se habla amigo—Aplaudía Jimin.
Jungkook soltó un suspiro, deseando realmente poder encontrar el amor
muy pronto.

- -
En otra habitación, Taehyung, Namjoon, Jackson y Yugyeom estaban
sentados mientras jugaban cartas con el tío de los dos primeros, Jookhyung
el cual era un anciano cascarrabias que miraba atento a los chicos.
—Taehyung, tú deberías ser el Rey— Animaba con una sonrisa traviesa
— Eres mayor, responsable y más cercano a tu nación que ese príncipe.
—Eso es cierto, pero... ¿Cómo le haremos?
—Fácil, es como en las apuestas—Sonreía mientras mostraba sus cartas
— Sabotaje y luego ganar el juego.
—Lo es, pero jugaste sucio y eso es malo—Se quejaba serio.
— ¿Quién dijo que no lo hice? —Namjoon y Jackson solo miraban
negando frustrados, mientras Yugyeom solo ignoraba al hombre.
Igual es hora de reunirnos con el rey y príncipe.

- -
Heechul acomodaba los últimos detalles de algunas construcciones
nuevas, mientras miraba con atención a todo. Hoseok se acercó con una
sonrisa y suspiró.
—El joven Taehyung y su... compañía le están a punto de llegar—
Informaba mientras Heechul se levantaba— Así que hay que recibir su
visita de hoy.
—Lo sé, él no se queda aquí por nada del mundo—Informaba mientras se
acercaba a Jungkook, quien le esperaba con un traje de lana en tonos pastel
y se acomodaba el cabello— El duque tercero no se debe quedar, así que
Hoseok vigila por favor.
—Es increíble que el parlamento invite a quien quiera aquí, es
inaceptable.
—No lo hicieron ellos—Sentenciaba Heechul— Yo lo hice realmente.
— ¿Qué? ¿Por qué? —Se quejaba el menor— Si ya odio al sobrino por
lo imbécil que es... ¡Imagina al tío!
—Si hay complot, quiero al menos que sea bajo mi vigilancia—
Informaba sentándose.
Mientras que muy cerca de ellos, el conde de Hanyang Taehyung y su
compañía bajaban del auto con pesadez, escuchando las quejas del tío de
Kim.
—Deberían ser más cuidadosos—Reclamaba a Hoseok— Casi es una
burla que nos reciban así.
—Por favor el rey Heechul...
—Nada, mejor avancemos antes de que me ponga de malas.
Hoseok suspiró, mirando como Taehyung y el resto solo bajaban la
cabeza avergonzados. Jin ya le había dicho que no eran en realidad iguales,
pero él se aseguraría de proteger a Jungkook. Dentro del palacio, Jungkook
no parecía estar igualmente tranquilo.
—No seré amable, porque seguro es grosero, arrogante y egocentrista...
—Calma Jungkook, ¿A caso lo conoces? —Indagó Heechul curioso.
—N-No necesito ser genio—Argumentaba nervioso— Además, ¿Por qué
Taehyung quiere el trono ahora? A ese que le pasa...
—Como sea debemos ser amables—Argumentaba serio Heechul—
Recuerda nuestra diplomacia.
—Presentando al conde de Hanyang Taehyung y a su tío, el conde tercero
Jookhyung—Escuchaban la voz de un chico pelinegro— A continuación, el
rey Heechul y el príncipe Jungkook.
Jungkook miró con sorpresa la seriedad de Taehyung al lado de su tío,
aquel hombre no le daba confianza. Taehyung se reverenció y se posó frente
a Heechul.
—Gracias por el recibimiento—Se quejaba Jookhyung— Es agradable
verle majestad.
—Muchas gracias por invitarme al palacio nuevamente—Agradecía
Taehyung con diplomacia.
—No es nada, debo presentarle a mi nieto—Sonreía mirando como
Jungkook evadía a todos, mirando a otro lado.
—Alteza Jeon—Saludaba cortés Taehyung.
—Jungkook, saluda al invitado. ¿Quieres? —Indagaba Heechul curioso.
Jungkook trataba de regular su furia, mirando a un jarrón que parecía ser
más importante que Taehyung. Soltó un suspiro pesado y encaró al mayor
con una sonrisa falsa y muy sarcástica. Se colocó derecho y se acercó a
Taehyung.
—Conde de Hanyang, Kim Taehyung—Le tomó de las manos con
delicadeza— Deje le muestro mis respetos.
Y ante la sonrisa victoriosa de Taehyung y la mirada de los presentes,
Jungkook alzó la rodilla con velocidad y certeza. Dando en el medio de las
piernas de Kim. Hoseok abrió la boca asombrado, BamBam no pudo evitar
reírse y Heechul miró alarmado a Jungkook.
Viendo como este último daba la media vuelta y con una sonrisa se iba
del lugar, dejando al chico en el suelo retorciéndose de dolor.
—A-Así debe saludar...—Murmuró con dolor Kim.
—I-Iré por algo para el dolor—Hablaba nervioso Heechul.
Hoseok se acercaba a Jookhyung nervioso, mientras BamBam y Jin
llevaban a Taehyung a otra parte.
—Y ahora nuestro príncipe baila flamenco— Se burlaba Jookhyung— Y
así quieren que nos gobierne...
—Fue un accidente—Defendía Hoseok.
—Ajá, un accidente.

- -

Heechul caminaba furioso hacia la habitación de Jungkook, al llegar le


encontró con Jimin hablando como si nada de lo que hizo hubiera pasado.
Se acercó con enojo y se paró frente al menor.
—Se puede saber... ¿Por qué has hecho aquello? —Exigía el rey— ¿Qué
pasó afuera?
—Lo siento, es que... antes incluso del baile...
—Vamos Kook, dile al rey lo que pasó.
—Bien, antes de que vinieran incluso al baile le vi—Heechul miró sin
entender— Vi al conde Kim Taehyung antes de esto.
—Creo que todos hemos visto como bailaron aquella vez—Interponía
Jimin sonriente.
—Bueno... creí que estaban coquetos esa vez— Hablaba Heechul algo
curioso.
—Quizá coqueteamos un poco en el baile—Admitía Jungkook— Pero es
tan odioso que... me siento tan estúpido ahora...
—Como rey, saben chicos que no puedo tolerar estas cosas—Hablaba
serio, para sentarse al lado de Jimin y mirar a su nieto— Como tu abuelo y
con la experiencia de mi linda Hani... entiendo.
—Su esposa... ¿También le pateo las bolas? —Indagaba Jimin con
confianza.
—Hani era una persona muy enérgica... —Soltó un pequeño aplauso— Si
vienen conmigo les enseñaré algo.
Ambos chicos se levantaron con sus helados a la mano, curiosos y
sonrientes.
—Será mejor vengan sin helado—Sonreía avanzando.
—Oh, bueno vamos Jiminie—Sugería Jungkook.
Ambos chicos salieron del lugar, dejando los helados en la mini nevera
que tenía aquella habitación de Jungkook.
—Bueno, sabes que tu vieja habitación...—Los guiaba por un corredor
enorme—Será la de Jimin improvisada, ¿correcto?
—Sí, así es.
—Han terminado la tuya, tenían que haberla terminado hace unos días...
—Abría una puerta— Pero he pedido que la hagan más... moderna.
—Oh pero no era necesario—Apuntaba nervioso— Con la red de internet
en todo el palacio me hace feliz... también a Jimin.
—Sí, creo que es fantástico...
—No, quiero que tengas lo mejor y... aprendí que el primo del duque solo
sirve en arte—Reía nervioso— También Yesung aportó con la tecnología
del lugar.
—Oh entonces debe haber cosas asombrosas—Admiraba.
Cuando las puertas de la habitación fueron abiertas a la par, una sala en
colores azules, dorados y beige se mostraba. Con el toque tradicional del
palacio, pero con cosas muy modernas como una pantalla enorme y sofás de
última moda.
—Esto es...—Jungkook abría la boca con sorpresa— Es increíble...
abuelo...
—Vaya, esto es más que en mis sueños—Puntualizaba Jimin.
—¡Overwatch! Es fantástico—Se paseaba por la sala— ¡Abuelo Heechul
esto es maravilloso!
—Me alegra que te guste—Lo tomaba de la mano e invitaba a Jimin a
avanzar— Les mostraré más.
Abría una segunda puerta a la habitación del menor, la cual estaba
decorada de azul y con una cama que se veía como de película. Jungkook
sonrió y se lanzó a esta junto a Jimin. Mirando también un castillo azul para
su gato Bokshil.
—Parece ser que les ha gustado la habitación—Sonreía, viendo como
Hoseok se acercaba de pronto.
Jimin y Jungkook miraban como Hoseok parecía decirle algo importante
al mayor, ya que este solo asentía y miraba a los chicos.
—Iremos en un momento Hoseok—Encaraba a los chicos— Jungkook,
la lista de posibles candidatos.
—Candidatos... ¿A qué?
—Oh sí Jiminie...—Sonreía nervioso— Voy a casarme...
—¿Con quién? —Miró con sorpresa.
—Bueno... veremos en la sala a los candidatos y candidatas—Sonreía
nervioso— Aunque creo que será un chico el elegido.
Jimin solo asintió con nerviosismo, dejándose guiar por Hoseok y
Heechul hasta la sala de proyecciones personal de Jungkook, la cual estaba
en otra habitación.
—Varon Kim Hyungjoong...—Presentaba Hoseok— Edad treinta y un
años...
—No, no me gusta—Hablaba Heechul— Tiene el vicio del juego.
—Sí, igual está viejo para Jungkook—Se quejaba Jimin.
—Bien, el príncipe Kwon JiYong—Señalaba Hoseok la foto de un chico
de cabellos rojos.
—¡Sí! ¡Claro que sí acepto! —Gritoneaba Jungkook emocionado.
—También lo aceptaría sinceramente—Admitía Jimin.
—Oh, él no es elegible ya que hereda trono—Hablaba Hoseok— Además
de estar ya con Choi SeungHyun.
—Entonces... ¿Por qué lo pusiste?
—Es que no pude resistirme, es perfecto—Admitía BamBam de la nada.
—Oh, lo preparó BamBam—Miró con sorpresa Heechul a Hoseok.
—Sí, él quiso ayudarme.
Mostraban una foto de un joven muy bien parecido, el cual tenía cabellos
castaños.
—Él es Lee Taemin, no es de la realeza pero es de buena familia—
Puntualizaba BamBam
—No creo que quiera a otro bailarín—Señalaba Hoseok— Es guapo
pero...
—Siguiente...—Dijeron Jimin y Kook a la vez.
Y no es que tuvieran algo contra el chico, simplemente querían ver más
opciones.
—Igual ponlo en todas las invitaciones—Sonreía Heechul— Es un
bailarín nato.
Mostraban la foto de un sujeto de cejas pobladas y de cincuenta años.
—Muy viejo—Se quejaba Heechul.
La foto de un niño de doce años, llamado Park Jisung. Luego de otro
sujeto más grande.
—Él es demasiado joven—Se quejaba Jungkook— Y el otro...
—Son demasiados arrestos para Yunho.
—Necesitamos a alguien que gobierne con Jungkook, que no pierda
noción de las cosas—Empezaba a hablar Heechul con cansancio—
Atractivo, con título, listo y nada arrogante. Debe mostrar compasión y que
le guste a Jungkook.
Las fotos pasaban hasta que dieron en cierto chico.
—Como ese joven—Señalaba Jimin a Jungkook.
—Sí, alguien parecido a ese joven—Admiraba Heechul.
—Han Sanghyuk, el duque de Daejeon. —Hablaba Hoseok— Fotógrafo,
noble y con un perfil intachable.
—Oh, es... lindo—Miraba Jungkook detenidamente.
—Se ve decente para ti amigo—Sonreía Jimin.
—Perfecto, Hoseok, Bambam—Llamaba Heechul— Programen una cita
en la playa con Hyuk.
Los dos hombres asentían con tranquilidad. Mientras Jimin y Jungkook
miraban tranquilos aquella foto. Quizá podía surgir algo con aquel chico.

- -
Hola milkis.
¿Qué les pareció el capítulo? Me encantan VIXX y quise agregarlos
aquí. También ya saben los que me conocen que mi Ship para 100pre
hetero es HanixHeechul así que xD
Estas partes ya estarán más basadas en la película, a diferencia del
inicio de esta fic.
04

En una playa cercana al palacio, se veía a dos chicos caminar


tranquilamente por el lugar, seguidos de sus respectivas familias.
—Sanghyuk, es un soñador, fotógrafo y noble chico el cual está teniendo
una agradable cita con nuestro príncipe Jungkook—Narraba una periodista
local a su cámara— Además de que hace poco se unió a la real fuerza aérea.
Todo un partido a gobernar al lado de Jungkook, parece que la cita va de
maravilla.
Hoseok y BamBam vigilaban el lugar como halcones, mientras Jungkook
platicaba alegre con el chico. Heechul miraba con una sonrisa por fuera,
aunque por dentro se sentía incómodo. Sabía bien que su nieto estaba
interesado en otro hombre, Taehyung, para ser más exactos.
—Los enamorados tienen el clima perfecto, junto a los familiares más
cercanos detrás suyo. Siguiendo el protocolo—Sonreía la periodista viendo
como Heechul hablaba de algo con Hoseok— Es el momento más perfecto
de todos.
Jungkook y Sanghyuk, saludaban a los reporteros que les perseguían
mientras caminaban tranquilos. En eso, el menor dio un traspié a punto de
caerse pero las manos del chico le sostuvieron con velocidad inmediata.
—¿Estás bien? —Indagaba el chico preocupado.
—Sí, aunque...—Empezaba a reír poniéndose de pie— Es muy cómico
esto de caerse...
Heechul al ver aquella escena, aló la vista hacia los padres de Sanghyuk,
los cuales sonreían ante aquello. En un acto involuntario, tomó la palabra.
—¿Gustan ir a tomar el té con nosotros en aquella mesa? —Señalaba
tranquilamente— Vamos, dejemos a nuestros chicos.
Los padres del chico asintieron siguiendo al rey hacia aquella mesa.
Jungkook y Sanghyuk por su parte, reían mientras intercambiaban miradas
y caminaban muy juntos.
Aquel evento, era visto desde una habitación real por Taehyung, el cual
solo sonrió ladino ante lo "estúpidos" que lucían. Suspiró y anticipó la
llegada de ese chico al palacio, vaya que sería más divertido molestar al
tonto príncipe Jeon.
Los días pasaban y Jungkook se hacía cercano a Sanghyuk, hasta se
podría decir que eran amigos. Y justo en esos momentos, jugaban a tenis
con felicidad, mientras Jimin y las mucamas veían la escena con una sonrisa
alentadora. Todo parecía ir muy bien.
De pronto, el menor cayó al tratar de pegarle a un tiro, haciendo que
todos se preocupen.
—Dejen que los tortolos se atiendan —Comentaba Jimin divertido.
Luego de aquel acto romántico a los ojos de Jimin, los chicos caminaron
rumbo al viejo roble real. Donde era tradición comprometerse, ambos
mirando a los reporteros tras ellos. Sin saber que otro miembro real también
les veía desde las sombras.
—Sabes Jungkook... te tengo un regalo—Proclamaba Sanghyuk
sonriente— Espero que te guste.
Le entregaba un rollo de cámara, el cual todos empezaban a ver ansioso.
Jungkook con tranquilidad lo abrió, dejando ver una sortija de platino
sencilla; símbolo de compromiso.
—Sé que es algo extraño, pero esta sortija hizo que mis abuelos duraran
juntos 57 años—Jungkook lo miró con sorpresa en el rostro— Así que
espero esto nos pase a nosotros, es decir sé que las circunstancias...
—Ellos nos están grabando. —Señaló el menor— ¿Esperas que yo me lo
coloque?
El chico sonrió al príncipe, colocando el fino anillo en su dedo. Jungkook
solo miraba sonriente a su prometido, dando aviso a la prensa que estaba
allí frente a ellos de su compromiso. Logrando que todos los vieran ya
como la pareja del año, estaba sonriente y algo emocionado por aquello, sin
saber que Taehyung y su odioso tío los miraban con el seño fruncido.
—Esto es inaceptable—Reclamaba el tío de Taehyung— Nadie se puede
enamorar tan pronto y por compromiso.
—Bueno el príncipe Jungkook...
—Nada, de eso. Tu tarea es enamorarlo ahora—Sonrió con seriedad—
Enséñale lo que es el verdadero amor. Un amor lleno de energía y pasión.
—Y cambio su opinión de Sanghyuk.
—Exacto, así en treinta días, el trono será tuyo—Sonreía con malicia—
Serías obviamente mejor rey que ese... niñato.
—Iré entonces...—Suspiró pesado el chico—Aunque no me convence
meterme en estas tonterías, ya soy noble.
—Tu padre esto quería, antes de morir su deseo era que estuvieras en el
trono—Argumentó mientras miraba la foto del padre de Taehyung— Ahora
ve, tienes un príncipe que conquistar.
Pero, ¿Quién terminará conquistando a quién?

- -

—Sí, sí... gracias. Cuento con usted— Se escuchaba a Hoseok mientras


subía las escaleras— ¡Oh alteza!
—Hoseok baje la voz...—Susurraba el menor entre su libro.
—Lo siento, es que Sanghyuk ya despegó a su destino...—Miró con
curiosidad a su menor— ¿Por qué tanto misterio?
—Me escondo para que me dejen un rato libre...
Hoseok sólo atinó a asentir mientras se retiraba, dando paso a que
Taehyung se animara a su primera fase del plan. Viendo como Jungkook
miraba su anillo, se acercó silbando tranquilamente, llamando la atención
del menor.
—Vaya, ¿Te arrepientes ya de tu decisión?
—No, solo admiro mi sortija—Contestaba de manera brusca, viendo
como Taehyung se acercó a él demasiado cerca— Bueno... si... si me
disculpas, tengo que ver los detalles de mí boda.
Vio las escaleras gemelas de la que quería subir, así que se fue corriendo
a aquellas. Viendo como Taehyung subía a su par del otro lado, estresándole
y poniéndole más nervioso.
—Disculpa pero... ¿Hay algo que quieras decirme? —Exigió saber el
menor.
—No, yo no fui quien pisó a alguien con sus piesotes—se burlaba el
mayor.
—¿Mis pies enormes? —Miró con molestia— Déjame te recuerdo que
bailaste conmigo, con todo y mis pies enormes.
—Sí, bailamos pero a nadie le interesa— Se acercó al menor finalmente,
arriba en el primer piso— Bailamos menos de un minuto según recuerdo.
—Fue...—Suspiraba mirando aquellos ojos del Kim— Más de un minuto
el que bailamos.
—Está bien, minuto y medio.
—Sí, todo un engaño—Se quejaba— Jamás me dijiste que me querías
quitar mi trono y me odiabas como yo lo hago...
—Jungkook, eso es de malos modales—Miraba algo divertido— Para la
próxima te enseño mi árbol genealógico.
—Eso no es todo, sé lo que hacías aquella noche— Señalaba avanzando
molesto.
—Bien, dímelo porque no sé.
Justo cuando el menor estaba a punto de hablar, escucharon el ruido de
las mucamas del menor. Haciendo que Jungkook, en un acto desesperado,
se encerrara junto a Taehyung en el cuarto de limpieza.
—El baile no me importa, pero ahora lo sé. Claro que sí— Reclamaba
sintiendo la cercanía de Taehyung presente, haciendo sentir nervioso al
chico— Se lo que quieres hacer...
—Dime, ¿Qué demonios es? —Exclamaba muy cerca de los labios del
menor.
—Yo...
De pronto la puerta fue abierta por una empleada del castillo,
sorprendiendo a ambos chicos en aquella posición comprometedora.
Haciendo que ambos salieran del lugar algo avergonzados.
Aquello no pasó por alto del saber de Heechul, el cual estaba ahora
analizando aquella situación. Sabía que Taehyung era una opción
demasiado buena para su nieto, conde de Hwaseong, graduado de honores
de la mejor universidad del país, altruista y hablaba cinco idiomas
fluidamente. Vaya que era mejor que cualquiera de las opciones, pero
lamentablemente, Jungkook ya estaba tomado.
Todo esto le parecía demasiado curioso al rey de Hanyang.

- -
La mañana pintaba bien para aquel entrenamiento de Jungkook en su tiro
con arco, era una tradición de Hanyang para todo el que heredara la corona
y nadie podía ser la excepción. Lamentablemente, Jungkook no podía hacer
aquello del todo bien, siempre había un tiro que le salía peor que otro.
—Lo siento...—Pidió al jardinero que casi daba con la flecha.
—¡No hay problema su majestad! —Decía algo nervioso el hombre.
Jungkook lo intentó nuevamente, preparando su tiro con delicadeza. La
flecha había salido disparada, dando a unos centímetros de donde Taehyung
leía un libro de medicina con tranquilidad.
—Conde Kim, lo siento—Pidió avergonzado el chico.
—No hay problema, príncipe—Aclamaba tranquilo.
Cuando el menor siguió con su fatal entrenamiento, mientras cierto conde
le veía con tranquilidad y una sonrisa casi invisible en su rostro.
Horas más tarde, como era tradición igual, el futuro rey debía estar al
lado del rey actual para la presentación de auditorías del pueblo. Donde por
ocasión especial, los nobles presentes, Taehyung y su odioso tío, estarían
presentes; además claro de Jimin, el cual hablaba con BamBam y Mark
sobre alguna cosa.
Y es esos momentos, Jungkook estaba tras de Heechul viéndole hacer su
tarea real con diplomacia. Al lado de la foto de la reina Hani.
—Descuide, enviaremos personal a revisar el pozo—Sonreía el rey— Es
posible que se arregle y salve su cosecha.
—Muchas gracias Rey mío—Sacaba una canasta llena de frutas de
huerto— Es para su mesa, muchas gracias Rey Heechul, príncipe Jungkook.
Heechul sonrió mientras un guardia tomaba las frutas y las dirigía a la
cocina. Taehyung vio la expresión de Jungkook con admiración, se veía
muy feliz de estar allí. Aunque podía igual ser falsa. Vio a Jimin, el cual
parecía anotar las cosas o las personas de aquel evento.
—Aquí tiene, ellos te adoran...—Exclamaba Jungkook entregando agua a
Heechul.
—Es parte de gobernar, ser uno con el pueblo—Sonreía bebiendo un
poco y regresándoselo a Kook— Hay que ser justos y ver las resoluciones a
pesar de las dificultades que se presenten. Eso sí, ser humilde.
Varios ciudadanos después, estaban con el último el cual era un hombre
llamado Wonyeok, el cual sonreía abiertamente.
—Bienvenido, le presento a mi nieto, el príncipe Jungkook—El menor
sonreía a aquel hombre, el cual sonrió emocionado.
—Príncipe, gracias por recibirme—Sonrió el hombre, Taehyung de
pronto se vio interesado en aquel sujeto.
El mayor alzó la vista a Jungkook, viendo como este era muy amable con
el hombre.
—Un obsequio para su mesa—Extendió una canasta— Es mi favorita.
Jungkook agradeció algo extrañado de lo último dicho, así que miró con
curiosidad la canasta y al hombre.
—Su majestad Jeon, ¿Le gusta a usted el omelet? —Jungkook rió
asintiendo.
—Está bien... ¿Puedo dar un vistazo? —El hombre asintió.
Destapó la canasta y una gallina salió de pronto, sorprendiendo a
Jungkook. Y ya que amaba a los animales, quiso acariciarla un poco. Pero
la gallina no cooperó, ya que salió revoloteando por todo el lugar.
—Una gallina... ¡Se escapó! —Exclamó de pronto— ¡Voy por ella!
Todo se hizo un caos, Jungkook perseguía a la gallina, el hombre reía al
ver la travesura de su gallina, Taehyung miraba riendo la escena junto a su
tío, Jimin miraba preocupado el semblante serio de Heechul y detuvo a
Jungkook.
—No debes hacerlo amigo—Exclamaba el más bajo preocupado.
—Demonios, de nuevo lo arruiné...—Exclamó algo decaído.
Taehyung, quien escuchó aquello. Sintió cierta simpatía con el menor,
debía ser difícil adaptarse de ser un "ciudadano normal" a todos esos
protocolos.
Jungkook se fue a su habitación, a escribir aquel diario que Hani le había
regalado. El cual en principio fue de su propio padre, estaba un poco más
anímico, ya que cabalgaría para dar lista a la guardia real.
Aunque él no sabía estar a caballo...
Vio a Heechul entrar junto a Jimin a su habitación, mientras el más bajo
se sentó en el sillón individual mirando a ambos familiares intercambiar
miradas.
—Yo... no sé montar a caballo. —Sentenció Jungkook avergonzado.
—Ni yo, en realidad... nadie más que Hani sabía—Reía Heechul mientras
Jin se acercaba con Ren cargando, junto a un álbum entre sus manos.
—Aquí tienes Kookie, esto es secreto de la familia real—Sentenciaba Jin
sonriente.
—Nadie sabe, así que usamos este caballo y estos aparatos para que se
vaya derecho—Hablaba el rey mientras miraba a Jin— SeokJin te ayudará
mañana con esto, mientras Namjoon nos hizo favor de controlar a su tío.
—Y cuidar a mi pequeño hermano Ren—Sonrió el rubio.
Jimin vio con interés la sonrisa del mayor, le envidiaba sólo un poco.
Tener un romance en un palacio sonaba demasiado hermoso. Suspiró y
miró a su mejor amigo, mañana sería un día loco.
Mientras tanto, Taehyung analizaba lo sucedido con Jungkook. Se
empezaba a dar cuenta que quizá ese chico no era tan estúpido y engreído
como se lo había pensado. Quizá hasta Jackson y Namjoon tenían razón,
Incluso Yugyeom; el chico no tenía malas intenciones.

- -
Hola mis milkis ❤
¿Les ha gustado este capítulo?
Quiero invitarles a mis nuevos fic, además de avisar que esta semana
que viene estaré demasiado activa. Para que ustedes se preparen en todas
las historias para mis locuras.
05

Finalmente la pesadilla de Jungkook llegó, la cabalgata real de pase de lista


era en unos minutos. Se sentía con los nervios de punta mientras era
escoltado por los guardias reales hasta el inicio del recorrido, el cual debía
hacerlo absolutamente solo.
-El pase de lista real se hará a continuación-Escuchó a alguien decir.
El tío de Taehyung miraba con complicidad a un hombre delgado, el cual
miraba a Jungkook con una sonrisa.
-Usted me ha dicho que el caballo teme a las serpientes-Musitó mirando
al príncipe- Así que... creo que será divertido...
-Sí, ya lo creo-Sentenció aquel chico.
Aunque lo que no sabían era que cierto guardia pálido escuchó aquello,
sería mejor informar a Hoseok de inmediato.
Taehyung miró con curiosidad a su tío, suspiró y giró su mirada al lado,
donde estaban SeokJin, Jimin y Sanghyuk sonrientes, mirando a Jungkook
prepararse para el evento. Con cortesía se presentó al prometido de
Jungkook.
-Hola, soy el conde Kim Taehyung-Extendió su mano- Un placer
conocerle, caballero.
-Oh, usted es el que quiere adueñarse del trono-Musitó con tranquilidad-
Impresionante verlo apoyar al príncipe.
-Sí, no sé qué haces aquí-Siseó Jimin- Te odio por querer dañar a mi
mejor amigo.
-Jimin...-Regañó SeokJin.
-¡Atención dos pasos todos atrás! -Escucharon una orden- ¡Su alteza real
inicia la ceremonia!
Jungkook empezó a cabalgar nervioso, pero este no perdió su compostura
en ningún momento. Sonrió levemente y seguía con su tarea de pasar lista a
los presentes, todo iba muy bien. Pero no todo era bueno en ese día, ya que
el hombre quien hablaba con el tío de Taehyung, mostró al caballo una
serpiente, la cual hizo que el pequeño caballo se asustara.
-Tranquilo amigo...-Siseó nervioso.
Jimin y SeokJin se asustaron, mirando a Hoseok y Mark con
desesperación. BamBam y Yugyeom miraron con terror como el caballo
empezaba a moverse más y más.
-Sálvelo por favor-Pidió SeokJin asustado- ¡Príncipe Kook!
El caballo se volvió loco, haciendo que Hoseok se acercara dispuesto a
ayudarle.
-Príncipe Jeon...
-¡No! Está bien-Pedía alterado- Sólo dejen que se calme y...
El caballo no pareció entender, ya que perdió el control y el galope se
hizo salvaje, sacudiendo al príncipe muy brusco. Logrando que soltara un
grito de espanto que le dejó en vergüenza, luego el caballo corrió con el
chico sin control.
Taehyung miró la escena con angustia, aunque no quería al chico,
realmente se preocupó de que no le pasara nada. ¿Realmente no sentía
nada?
Minutos después, cuando Jungkook estuvo ya a salvo, gracias a la
intervención de Jackson, quien estaba por allí misteriosamente, el menor se
escondió en el establo. Mientras veía como paseaban a los pobres y
hermosos caballos, no pudo evitar sentirse mal consigo mismo, ya que al
parecer jamás le saldrían las cosas.
-Soy un fracaso...-Susurró mirando las sillas de montar.
No pudo evitar sollozar con dolor ante aquello, se sentía tan frágil...
Taehyung entró preocupado a ver al príncipe Jeon, pues no lo había visto
desde aquel incidente. Al verlo llorar, algo en su corazón le dio ardor y se
acercó lentamente al príncipe.
-No te escondas, así alimentas las críticas.
-Tú... ¿A qué vienes? -Susurró con lágrimas en los ojos- ¿Qué haces
aquí?
-Yo solo... piénsalo, cabalgaste más salvaje que tarzán-Sonrió animando.
-No quiero más chistes malos ahora-Pidió con algo de molestia- ¿Podrías
irte?
-Jungkook... como lo siento-Sinceró preocupado, sin notar la presencia
de Hoseok allí- En verdad yo...
-No es cierto, deja de mentir. Te da gusto que fracase- Se alejó del chico
mientras lloraba- Déjame con mis penas y vete, por favor vete de aquí.
-Jungkook...
-Príncipe Jeon, el rey le espera-informó Hoseok interrumpiendo-
Debemos irnos ahora, vamos.
Jungkook asintió mientras se retiraba del lugar, Taehyung quiso ir tras él,
pero la mano de Hoseok le impidió hacerlo.
-Taehyung, ¿Me harás decepcionar de ti? -Taehyung lo miró sin
comprender- O al general Min...
-Vaya cosas que pasan, ¿No les parece? -Interrumpió una voz.
-Tío...-Susurró Taehyung.
-Quiero hablar con tu tío- Taehyung se fue y Hoseok miró al hombre-
Espero que esos incidentes no pasen, el general Min y yo tenemos mucha
inmunidad...
Hoseok se fue a la par de un chico pálido, el cual miró con seriedad al
hombre. Dejándole los pelos de punta, tal parece que esto no sería tan fácil
con la llegada de aquel chico.

(...)

Taehyung acomodaba el postre que acababa de hacer, mientras Heechul


le miraba con curiosidad al igual que SeokJin. El menor solo decoraba en
silencio, pensaba regalar aquello a Jungkook para alegrarle un poco.
-Taehyung... ¿Por qué estás en contra de que Kookie gobierne? -Indagó
SeokJin sorprendiendo a los presentes.
-Mi tío dice que debe conocer más al pueblo.
-¿Y tú conoces al pueblo? -Indagó Heechul con curiosidad.
-Sí, he ido al colegio aquí, me educaron con historia Hanyang...-Suspiró
y terminaba de decorar su postre- Siendo franco su majestad, lord Jin... el
príncipe ha estado fuera mucho tiempo.
-Yo creo que es buen candidato-Contradijo SeokJin- Es noble,
bondadoso, inteligente y divertido.
-Lo sé, es cierto esto-Sonrió a los hombres- Pero, ¿Cómo gobernará el
reino que no conoce debido a su "libertad"?
-Touché...-Susurró Heechul- Pregunta inteligente.
Taehyung dejó a los hombres en la cocina, se retiró con su postre y miró
a la mucama del príncipe. Con un susurro le dio el postre y se fue a dormir,
el día siguiente sería muy divertido.
La reunión de los nobles para la fiesta de compromiso de Jungkook se
hizo presente, con buenos postres y comidas. Jungkook y Sanghyuk
miraban a todos con una sonrisa. Jungkook se levantó a mirar a los
invitados, debía saludarles.
Se acercó al Vizconde de Sang y a su esposa, dos ancianos que Jungkook
se le hacían muy agradables.
-Buenas tardes, ¿Cómo están sus nietos? -Miró a la pareja- Jaemin y
Taeyong.
-Bien, gracias por preguntar.
Luego de una breve plática, se acercó al noble Kihyun el cual le sonrió
alegre.
-Hola, ¿Cómo está? Un gusto verle-Sonreía Jungkook- ¿Su cachorro
cómo está?
-Muy bien, en verdad... mire que usted lo vio...
El menor se despidió también de él y se acercó a dos viejos amigos
suyos, InSeong y Dawon.
-Oh buenas Sir In, hola Sir Dawon.
-¡Príncipe Jeon Hola! -Saludó InSeong.
Mientras los jóvenes hablaban, Heechul, SeokJin y Hoseok miraban
sonrientes como parecía conocer a todos y era muy cortés. Ese era su
mundo después de todo.
-Parece que mi Kook lo hace muy bien-Sonreía Heechul a los presentes-
Habla perfecto con los invitados.
Todos sonreían al ver al menor con su prometido y los invitados convivir,
aunque por alguna razón en la mente de los mayores e incluso la de Jimin,
imaginaban esa escena con alguien más. Cierto conde que no aparecía aun.

(...)

-Jungkook... ¿A que no sabes quién llegó? -Susurró InSeong con


diversión- Te vas a sorprender...
-No sé, ¿Quién es? -Indagó demasiado curioso.
-El aspirante a rey con el despampanante Sir Hongbin-Musitó con
diversión, Jungkook alzó la vista y sintió un pinchazo en el corazón- No lo
esperaba así.
-Oh, ese chico es su... ¿Novio? -Preguntó curioso.
-Taehyung jamás tiene novios, solo... chicos-Sonreía con burla Dawon-
Siempre son muy atractivos...
-¿No le hablas?
-Sí, hemos conversado pero... lo odio-Musitó Jungkook aniñado-
Sanghyuk... ¿Vienes un segundo?
El chico, el cual platicaba con Jimin fue inmediatamente a la par del
menor. Mientras Jimin sonreía y se relajaba comiendo una bandeja de
bocadillos.
-¿Pasa algo príncipe? -Miraba Sanghyuk- ¿Necesitas algo cariño?
-No, solo... vamos a pasear. -Sonreía amable- ¿Quieres hacerlo?
El chico algo dudoso asintió y empezaron a avanzar entre los jardines
reales, hasta la entrada del laberinto al kiosko, el lugar favorito de
Jungkook.
-Sabes Jungkook, hoy salió todo muy bien-Sonreía mostrándole la
cámara- En verdad que serán buenos recuerdos.
-Oh, eso en verdad me alegra demasiado.
-Espera, deja te tomo una foto-Sugería con su cámara- El sol en tu piel
hace que se vea brillante.
-Basta-Sonreía avergonzado el chico- No más fotos...
-Una más
-Son muchas fotos ya...
-Sólo una más Jungkook...
-Son muy bonitas pero...-Sintió una presencia a su lado, la cual era
Taehyung y su acompañante-Oh vaya, incómodo.
Sanghyuk miró a los chicos frente a él y saludó con cortesía al apuesto
chico frente suyo.
-Hola, soy el noble Sanghyuk-Ofrecía su mano.
-Mucho gusto, soy Hongbin-Saludaba el chico al lado de Taehyung-
Alteza Jungkook.
-Mucho gusto-Musitó Jungkook y miró a Taehyung- Ah, hola.
-Saben, Hongbin comentaba que se ganó una gran beca a Inglaterra-
Presumió Taehyung- Le llegó la notificación ayer.
-Oh felicidades-Sonreía Sanghyuk- Es una espléndida noticia.
-Me avergüenza un poco...
-¿Por qué? -Miró Taehyung a Jungkook- Eres maravilloso y hay que
comentarlo.
-Sí, es magnífico en verdad, pero...-Miró a Taehyung- Sanghyuk tiene
una maestría ya en antropología en Oxford, así que...
-Eso es increíble...
-Fantástico, Hongbin fue con cuerpos de paz-Sonrió Taehyung
engrandecido- Una tarea muy noble a decir verdad.
-Sanghyuk fue a África a investigar árboles antiguos-Sonreía mientras los
dos chicos ajenos a la discusión abrían la boca para opinar, pero no podían
hacerlo debido a la discusión de los nobles.
-Pues Hongbin...
-Sabes, él quiere decir algo-Opinó burlón Jungkook- ¿Qué decía Sir
Hongbin?
-Sí, Sanghyuk... ellos van a jugar a mí casa es más grande que la tuya-
Jungkook y Taehyung se sonrojaron un poco- ¿Gusta ir por algo
refrescante?
-Sí, si nos disculpan...-Se despedía el chico.
Jungkook y Taehyung se quedaron en silencio, muy incomodos de la
presencia del otro.
-Ustedes se ven muy geniales como pareja-Opinó Taehyung.
-Ya lo sé, perfectos.
-Es una lástima que no te guste o lo ames.
-Así es pero...-Vio la sonrisa de Taehyung y como se retiraba- Oh no, tú...
¡Espera!
Mientras ambos chicos desaparecían, suspiró mientras veía el espectáculo
a su frente. ¿Sería bueno dejarlos solos? Bueno, si él no tenía ese tipo de
suerte, no debía arruinárselo a su mejor amigo. Además que esos dos se
veían bien juntos.

(...)

-Oye... ¡Ven acá! -Gritó Jungkook al mayor persiguiéndole- Quiero


informarte que me siento muy atraído a Sanghyuk.
Jungkook caminaba muy rápido para alcanzar al mayor, ya que este
caminaba fuerte. Tanto así que casi se caía en ese momento.
-Oh de eso puedo darme cuenta.
-En verdad, él es...-Suspiraba ya cerca de Kim- Somos perfectos, el uno
para el otro. Me entiende...
-¿Él en verdad te entiende? -Miró Taehyung, dándose finalmente la
vuelta y encarando a Jungkook-Eso... eso en verdad es... wow... qué pasión
se tienen. Pero no te escuché decir nunca la palabra amor.
Jungkook lo miró con diversión, sacando sus guantes blancos de sus
manos y dando la espalda a Taehyung.
-Ya veo...-Avanzó un poco- ¡Estás muy celoso de Sanghyuk!
Taehyung le miró con sorpresa y sonrió, dos pueden jugar a eso.
-¿Por qué estar celoso de Sanghyuk? -Jungkook no se detenía así que
soltó: - Va a pasar toda la vida contigo, no estoy de ello celoso. En serio.
Supo que había dado en el clavo cuando Jungkook miró al chico con
molestia, lanzando un golpe con el guante al pecho de Kim.
-Te odio demasiado.
-Y yo a ti- Opinó devolviendo el ligero golpe.
-Yo te odio más.
Taehyung sonrió, tomando al menor de la cabeza y besándole los labios
con apuro. El beso a ambos les hizo sentir mariposas en el estómago y la
sensación de que debían pertenecerse, aquello aterró a Jungkook el cual se
separó velozmente de Taehyung con miedo.
-Estás loco... ¡No puedes besar a quien se casa! -Gritó girando en la
fuente frente a él- Oh, ya veo...
-¿Qué ves? Lo disfrutaste también-Opinó sonriente- ¿Te doy otro besito?
-Es que... ¡No! -Se giró a verlo furioso- ¡No me confundas o lo intentes!
-Ya veo, ¿Los besos míos te confunden?
-No, tú me quieres enamorar para así quedarte con todo-Siseó cerca del
mayor- Esas intenciones las sé, así que deja de...
-Podría hacerlo... -Tomó al príncipe de su cintura, mirándolo con
galantería- ¿O puedo besarte de nuevo?
-Suéltame...-Se quejó tratando de salir del agarre- ¡Ya basta!
Ambos al intentar ganar, cayeron rotundamente a la fuente. Jungkook se
levantó de inmediato y Taehyung lo miró con preocupación.
-Jungkook cuidado...
-Tengo una idea, ¿Por qué no te sumerges y cuento un millón?
El menor se retiró con furia del lugar, dirigiéndose a donde estaba
Heechul y Sanghyuk. El rey lo miró curioso.
-Deseo saber...
-No lo creo-Musitó el mojado chico.
Con furia el menor se adentró al palacio, dejando a los hombres curiosos.
-Vaya, es un chico travieso- Opinó Sanghyuk.
-Con él nunca te aburrirás-Sonreía cortés.
El chico asintió mirando a donde se fue el menor, realmente se
preguntaba ahora si era correcto enamorarse de Hongbin con ese dulce
príncipe con él.

Hola mis milkis


Como prometí, aquí está el capítulo. ¿Les gustó? También la nueva
portada hecha por Hanni una amiga mía muy querida.
¡Hay nuevas historias y portadas! Espero se pasen
Besitos ♡
06

Jimin tenía muchos sueños en la vida, era un entusiasta del amor. Así que
por ello sabía que aquel "odio" de su mejor amigo y el conde, no era más
que la vieja frase... "Del odio al amor sólo hay un paso" al menos eso
pensaba para ambos chicos, de cierto modo se sentía algo triste de estar
solo. Pero no podía hacer nada al respecto.
Era el día de la independencia de Hanyang, Jimin, Jungkook y todos en el
palacio estaban listos para el desfile, Jimin y Jin irían en el auto viejo de
Jungkook, mientras este, iría con Heechul en el carruaje real. Mientras veía
como Jin se aseguraba que el carro combinara con el resto de los adornos,
se espantó al sentir un toque en su hombro.
—Usted, ¿Quién es? —Exigió un hombre muy pálido serio— No le
reconozco.
—Soy Park Jimin, mejor amigo del príncipe Jungkook—Señalaba
sonriente— Ya sabe, el futuro rey. Soy el amigo real, ¿Usted quién es?
—Soy Min Yoongi, seguridad especial—Sonreía ladino— Así que el
chico lindo es amigo del príncipe...
Jimin y el chico se miraron un instante, regalándose una sonrisa traviesa
comprometedora. Yoongi quedó cautivado por aquel chico de ojos felices,
era un chico muy apuesto y creía que el hecho de ser igual de directo que él
le daba un toque extra de genialidad a Park Jimin.
Además que su rostro aniñado se le hizo de lo más hermoso del mundo...
—Bien, debemos empezar el desfile—Se despedía el uniformado Min—
Nos andaremos viendo... quizá.
Cuando el pálido se fue, SeokJin se acercó con una sonrisa pícara al
menor. Mientras Jimin sonreía sonrojado y emocionado, avanzando al
desfile.
Hoseok repartía algunas banderillas para el desfile con una sonrisa
amable, mientras veía la cara larga de cierto hombre mayor, al lado del
famoso conde Kim. Suspiró y ofreció banderas a ambos, Taehyung la
aceptó con diplomacia, pero su tío no hizo lo mismo.
—No sostendré un banderín hasta que un rey tome posesión de la corona
— Sonreía mirando a Hoseok con burla— ¡El rey Taehyung!
—Sí, bueno... entonces repartiré a los demás—Se excusaba marchándose.
Taehyung miró a su tío con irritación, mientras negaba cansado con la
cabeza. Miró a su alrededor, todo parecía prometer un buen día para el
príncipe Jungkook y para el desfile, vio el banderín entre sus manos.
¿Estaría haciendo lo correcto con lo del trono?
Mientras veía como su tío desaprobaba todo, no pudo evitar pensar en el
príncipe Jeon. ¿Estaría bien después de lo acontecido el día anterior? Se
sentía ya mal por el chico, se notaba que se esforzaba por el reino... quizá
hasta se le hacía aquello atractivo. Sólo un poco atractivo.

(...)

Jungkook se sentía nervioso y decaído, como las cosas iban y lo que


había pasado el día anterior en la cabalgata fallida. Tenía igual miedo de
que ese día importante para su país le sucediera algo, Hoseok, SeokJin y
todos le miraban siempre con apoyo, pero él se sentía siempre nervioso de
esa mala suerte que cargaba.
Aunque jamás le había pasado, siempre se había caracterizado por ser
una persona que todo le salía a la primera, sin embargo... ahora no sabía ya
ni en que o quien creer.
—Jungkook...—Llamó Hoseok— ¿Sucede algo?
—No, nada. Sólo que...—Suspiró mirando a la gente— Me pregunto
ahora, porque todo me está saliendo mal. Quizá deba ser una premisa.
—No lo creo, BamBam y todos pensamos que es magnífico— Sinceraba,
mientras su mirada iba a Taehyung, quien estaba al lado de su tío— Y
presiento que no seremos los únicos que piensen en esto.
—Yo no sé ya ni qué hacer—Suspiró rendido— Pero tengo que
esforzarme en mejorar todo.
—Así se habla—Escucharon una voz ajena.
—Abuelo Heechul...
—Sí, bien. Hoseok, vamos ya. —Sonreía mirando a Jungkook— No hay
que darles espera a la gente en este día.
Mark y Yugyeom serían los encargados de transmitir en vivo aquel
evento, por petición de Heechul. Jackson estaba con Namjoon y el pequeño
Ren sentados cerca de Taehyung, esperando al igual que Sanghyuk.
El carruaje empezó a avanzar, junto a los nervios incrementándose de
Jungkook. Jimin y Jin miraban sonrientes desde atrás, disfrutando del buen
clima y la festividad.
—Hola, aquí Mark transmitiendo para el festival de independencia—
Sonreía a la cámara— Junto al guapo Yugyeom.
—Hola, ¡Aquí viene el desfile! —Sonreía mientras la cámara enfocaba el
carruaje— El Rey Heechul y el príncipe Jungkook.
—Vino gente de todo Hanyang, es increíble la decoración—El desfile
avanzaba y la gente aplaudía cantaba y gritaba—El noble Kim SeokJin fue
el encargado de que todo combine, junto al amigo del príncipe Park Jimin.
Enfocaban al príncipe y al rey, los cuales sonreían alegres. Jungkook
miraba atento el desfile y saluda al pueblo, hasta que algo llamó su
atención.
Un niño de dos años era molestado por otros más grandes, al igual que a
su alrededor había muchos niños con ropas algo gastadas; pero con emoción
en sus lindos ojitos. Aquello derritió el corazón del de cabellos oscuros,
mientras veía incluso un pequeño bebé llorar.
Al ver como estaban los niños, luego dar un vistazo a sus finas ropas.
Aquel noble corazón del que le caracterizaba actuó.
—¡Esperen y deténganse! —Gritó de pronto.
—¿Qué sucede? —Miró preocupado Heechul
Yoongi acató la orden y detuvo a la milicia, Jimin miró con curiosidad al
igual que el resto de personas presentes.
—Ha detenido todo...—Susurró embelesado Taehyung.
—Es estúpido y vulgar—Se quejó su tío a lado.
Jungkook miró a Hoseok tranquilizándole, al igual que a Heechul. Se
paró del carruaje y salió de este rumbo a los niños allí, mirando a todos con
tranquilidad y una sonrisa. Miró al pequeño de dos años y al bebé en brazos
de una mujer grande.
—Vaya, aquí alguien está llorando y se molestan—Comentó acercándose
a la mujer— Discúlpeme, ¿Quiénes son estos niños?
—Son huérfanos en su mayoría—Sonreía nerviosa— Cuidamos a los que
podemos.
Jungkook miró al bebé en brazos de la mujer, le hizo un además y la
mujer se lo dio a cargar. Luego miró al pequeño de dos años y sonrió al
resto de los niños.
—Comprándose a los huérfanos... qué asco—Musitaba el tío de
Taehyung asqueado.
Taehyung miró como Jungkook miraba a los pequeños con una sonrisa.
—Deles una corona a los niños y tiaras a las niñas—Pedía a un vendedor
— Yo las pagaré, porque declaro que estos nenes hoy serán príncipes y
princesas.
—Pero su majestad...
—Vamos a marchar niños, pónganse firmes—Sonreía y los adentraba al
desfile— Recuerden creerse altos y... ¡Divertirse!
Los niños sonreían emocionados y Jungkook miraba al bebé entre sus
brazos y al pequeño de dos años a su lado. Esos dos pequeños le habían
robado el corazón.
—Despreciable—Musitaba el tío de Taehyung.
—Yo pienso que eso es muy lindo que marchen así—Musitaba Taehyung
con una sonrisa— Aquellos niños en sus brazos...
— ¿Dijiste algo? —Habló de pronto Jackson.
—No nada—Sonreía al ver a Jungkook desfilar con los niños.
Jungkook caminó en todo el desfile cargando al bebé y con los niños
huérfanos, donde Taehyung en todo el desfile miró con una sonrisa al
menor, estaba cayendo en el amor por Jungkook.
Yugyeom y Mark miraban muy felices al chico príncipe, ya que el menor
seguía caminando sonriente con los niños. La gente miraba con aprobación
aquel acto gentil del chico.
—Vaya, esto nadie se lo esperó— Comentaba asombrado Mark— Es
increíble esto que hizo el príncipe.
—Sin duda de los mejores días de la independencia—Sonreía Yugyeom
— Ahora ya acabará el desfile.
Luego de aquel acto, la mente del menor no pudo no dejar de pensar en
los pequeños que tuvo en sus manos. Debía hacer algo por aquellos niños.

(...)

Taehyung miraba los cuadros de los reyes antes a Heechul, los cuales
sonreían y se les veía felices con sus parejas. Mientras en su mente,
recordaba a Jungkook con los niños entre sus brazos y esa sonrisa sincera
que tuvo al momento que marchó con ellos.
Estaba demasiado impactado en ese momento de la decisión que tomó el
menor de marchar con los infantes, ya que jamás en serio jamás en su vida
había escuchado de ese acto de algún otro monarca. Menos con las personas
con las que fue criado.
—Realeza...—Susurró casi inaudible.
Tenía que admitir que siempre se le hizo tierno aquel chico de cabellos
oscuros, con su sonrisa y bondad desde pequeño. Quizá hasta por un
momento lo pensó con hijos propios, a ambos quizá.
Debía admitir que aquel chico tenía un corazón muy noble y puro, no
como él, que tenía un corazón que de seguro era oscuro y repulsivo... no
notó la presencia de cierto amigo de Jungkook hasta que este estuvo a su
frente.
—Conde Taehyung—Musitó Jimin burlón— ¿Qué haces aquí viendo a la
familia de Jungkook?
—Park Jimin—Habló con voz grave— No hacía nada, sólo miraba
perdido en mis pensamientos al margen real.
—Pues... sólo quiero decirte que dejes en paz la corona—Soltó de pronto,
sorprendiendo a Kim— Es decir, ¿Por qué el empeño en quererla?
—Yo...
—¿No es suficiente con saber que Jungkook es buen rey? —Ambos
chicos no notaron la presencia de Min Yoongi tras suyo— Jungkook tiene
todo, hasta un buen corazón...
—Lo sé, es por eso que creo que es genial—Sinceró a Jimin— Es por eso
que me cautivó...
Jimin abrió la boca sorprendido, mientras Taehyung carraspeó y se retiró
nervioso de allí. Había abierto demasiado la boca.
Jimin estaba aún es sorpresa, así que cuando Yoongi se acercó, salió de
su trance con un grito pequeño.
—Jimin... ¿Estás bien? —Preguntó el pálido.
—¡Sí! —Sonreía emocionado— Es sólo que... ¿No crees que el amor es
sorprendente? Bueno, debo ir con Jungkook.
Y contra esa felicidad y palabras no pudo Min Yoongi, ya que era lo que
creyó desde el momento en el que conoció a Park Jimin. Aunque hace
menos de dos días se conocían... creía que Jimin era magnifico y
refrescante. Eso explicaba por qué era amigo de Jungkook.
Jungkook se había reunido con los encargados de los planes
arquitectónicos del reino, había decidido hacer un plan que aunque no
quisieran se llevaría a cabo.
—Entonces, los niños estarán en mi palacio de invierno—Musitaba
sonriente— Hasta que reunamos fondos para un orfanato digno para ellos.
—Su majestad Jeon, no es correcto—Musitaba un hombre— El uso de
hotel de ese castillo genera ingresos a los magistrales...
—Perfecto, entonces ellos serán quienes donen lo que falta en el
presupuesto—Sonreía mirando el terror en los demás hombres—
Caballeros, no tendré dos palacios mientras que los niños están sin comer y
sin una buena vida.
—Me parece una buena idea—Opinó SeokJin— Mientras más pronto
donen, será mejor para ustedes.
—Además, el rey Heechul aprobó mi proyecto ya—Sonreía ladino el
príncipe Jeon— El proyecto se está ya pensando, el lord Kwon será el
encargado de la repartición del castillo.
—Pero su majestad, ¿Cuándo será la recaudación?
—Oh, esta está abierta desde ya—Mostró los bocetos—Estas son ideas
para el palacio y para el orfanato. Este proyecto es mío así que caballeros
respeten esto.
—Quizá en alguna cena de beneficencia—Opinaba un hombre— Esos
siempre funcionan y son geniales.
—Bien, SeokJin sería el encargado de hacerlo—Miró Jungkook al mayor
— Sólo si estás de acuerdo.
—Sí, me parece genial hacerla—Sonreía mientras cerraba los bocetos—
Creo que está bien, fue una buena reunión.
—Ya lo creo, así que caballeros—Se levantó con tranquilidad— Hemos
ya entonces concluido esta reunión. Nos reuniremos en dos meses para el
plan del orfanato.
Con eso el menor dio por concluida aquella reunión, saliendo de aquella
sala de juntas y encontrándose con su mejor amigo Jimin. El cual se colgó
extrañamente sonriente de su brazo y empezaron a caminar de una manera
cómica.
—¿Pasa algo Jimin?
—No, estoy bien—Sonreía el más bajo—Sólo estoy feliz.
Jungkook no dijo más, seguía caminando a la par de su mejor amigo.
Mientras Hoseok se acercaba sonriente.
—Príncipe Jungkook, hemos puesto las cosas para deslizarse. La rampa
—Sonreía mientras caminaba más— Nos vemos, ya está todo para esta
noche.
Jungkook asintió sonriente, mientras alzaba la mirada. Encontrándose
con cierto chico.
—Taehyung...
—Hola príncipe.

Hola mis milkis


Aquí el capítulo, ¿les gustó?
Ya se están dando cuenta de sus sentimientos los dos chicos así que...
Igual estaré actualizando mucho, para que sepan.
Besitos~ ♡
07

Jimin y los demás presentes habían dejado a los dos chicos solos, los cuales
se miraban con algo de incomodidad. Jungkook miró con tranquilidad a
Taehyung, para luego respirar profundo para hablar.
—Tú... ¿Vendrás a mi despedida? —Taehyung lo miró inquisitivo— Es
una pijamada, solo eso.
—No, no asistiré. Gracias por la invitación—Aclaraba serio— Por cierto,
felicidades por lo de la propuesta y proyecto.
—Gracias Taehyung—Sonreía el príncipe mientras se alejaba un poco—
Bueno, tengo que ir con Jin, BamBam y Jimin, están esperando.
—Por supuesto, adiós.
Jungkook se acercó a un emocionado Jimin con una pequeña sonrisa en
el rostro, la cual no pasó por alto ante el más bajo. Pronto se unió SeokJin a
los chicos junto al pequeño Ren, el cual miraba embelesado todo el lugar.
—Hyung, ¿Esta es mi fiesta? —Indagó curioso el pequeño.
—No cariño, es de Jungkookie por su boda—Sonreía al príncipe— Por
eso será la fiesta.
—Oh vaya... —Musitó el pequeño niño con un mohín.
—Pronto haré que te hagan una fiesta—Proponía Jungkook logrando una
sonrisa en Ren— Así que... ve a comer dulces.
Poco a poco arribaron al palacio algunos príncipes y nobles a la fiesta de
Jungkook, los cuales sonreían y se acercaban ansiosos a la amplia gama de
dulces y comida que habían sido preparados para aquel evento.
Jungkook y Jimin veían la mesa de regalos muy llena, sonrieron y
asintieron mientras veían a los presentes.
—Hola, muchas gracias por mis regalos de boda—Informaba el príncipe
—Ahora, yo tengo un regalo a todos... ¡Colchones para surfear!
De pronto el menor sintió un toque en su hombro, girándose vio a
Heechul sonriente y se sintió nervioso.
—Colchones, no creí que lo harías...
—Yo lo siento, en serio pero...
—No se diga más, les enseñaré como se hace...—SeokJin sonrió con
emoción y Jimin se puso ansioso y emocionado— Les mostraré así que...
permiso...
Jungkook y el resto miró como Heechul se colocaba en el balcón junto al
tobogán y tomaba un colchón, parándose en él y deslizándose tranquilo.
Todos miraron aquello con asombro, ya que el Rey parecía estar
familiarizado con eso.
—¡Eso fue fabuloso! —Gritó emocionado Jungkook— En verdad que es
increíble...
—Era el deporte favorito de Hani—Sonreía mirando a Jungkook— Y
ahora, pues... soy el profesional aquí.
Jungkook abrazó a Heechul y la fiesta empezó a lo grande, incluso el
pequeño Ren convivía con algunos niños príncipes y nobles en un colchón
saltando felices. Vieron con asombro también a SeokJin subirse en el
tobogán con un colchón y como se peinaba sus cabellos hacia atrás.
Heechul sonreía y Jungkook miraba con asombro.
—Aun lado básicas—Musitó mientras se preparaba— Aquí vamos...
Cuando llegó a piso, todos aplaudieron y él se empezó a reír como loco.
Jimin aplaudía junto a Jungkook y seguían con la diversión de los
colchones, la noche era joven y ellos debían divertirse, aunque a Jungkook
le hubiera gustado estar con Taehyung también.
El menor negó con la cabeza y suspiró sonriendo y lanzándose por el
tobogán en colchón, era la noche más genial de todas.

(...)
Luego de tanto juego, se habían sentado a cantar y bailar en la sala de
recreaciones real, donde en esos momentos Hoseok y Jimin bailaban con
maestría. Jungkook miraba con una sonrisa, hasta que sintió una presencia a
su lado. Taehyung estaba allí con un semblante serio mirando el
espectáculo, hasta que se giró en dirección a Jungkook.
—Taehyung... ¿Qué... cómo...?—Miraba con la boca abierta— Porque...
—Me invitaste, pude venir—Habló simplemente— Y veo que está muy...
divertido todo.
—Lo sé, son geniales bailando—Sonreía emocionado— Siempre ha
bailado bien Jimin.
Taehyung y Jungkook miraron a Jimin y Hoseok bailar, luego algo llamó
su atención aún más. El general Min veía embelesado a Jimin y vieron las
miradas pequeñas que se daban, sonrieron con complicidad y Heechul vio
aquello.
SeokJin se acercó y tocó el hombro de Taehyung, el cual lo miró algo
sorprendido.
—Canta algo Taehyung—Habló el mayor sonriente— Vamos, solo un
poco...
—No, no muchas gracias—Negaba con cortesía— Mejor cante algo
usted SeokJin.
—Vamos Taehyung, por favor—Escuchaba la voz de Jungkook y lo miró
con algo de sorpresa— Si quieres yo... yo podría cantar contigo...
—No, muchas gracias príncipe.
—Vamos, no seas aguafiestas—Se quejó Jimin— Jungkook te hará
segunda voz.
Taehyung suspiró rendido y asintió, levantándose de su lugar y pasando
frente a todos. Heechul, Hoseok, Jimin, Yoongi y el resto los miró con
curiosidad. Incluso estaban allí Namjoon, Jackson, BamBam, Yugyeom y
Mark.
—Esta canción que escuchábamos cada día...—Cantaba Taehyung
mirando a Jungkook—Me hace llorar cada día. Me hace pensar en ti
—Porque suena como nuestra canción—Cantaron ambos a la par,
mirándose a los ojos profundamente—No importa que tanto trate de cubrir
mis oídos. Gira a mí alrededor...
—No quiero escucharla, lucho en contra, pero la escucho todos los días
—Empezaban a cantar con más sentimiento y mirándose aún—La letra que
se escuchaba como la historia de otros se convirtió en nuestra. La única
cosa que permanece son los días arruinados
—Escuchando esta canción en mi pequeño cuarto—Cantaba Taehyung
finalizando, y Jungkook haciendo un falsete muy asombroso a la vez—
Mientras te llamo cuidadosamente otra vez...
https://youtu.be/-Ph4dqyGfyM
Todos quedaron con la boca abierta ante aquel dueto, pues la canción era
perfecta y ellos dos cantando juntos lo hacían increíble. Jungkook y
Taehyung se miraban algo jadeantes debido a la canción, sonrieron y
miraron al resto con esa sonrisa. Luego de eso, siguieron comiendo y
festejando con una sonrisa durante toda la noche.
Aunque en sus corazones aquella canción y momento permanecería para
siempre.

(...)
El tío de Taehyung al enterarse de aquello, citó a Taehyung en su
pequeño palacio, con cara molesta y con un plan en mente.
—No puedo creer que mi sobrino sea tan...—Bufó con molestia— Tonto
para bailar y cantar en la fiesta de ese príncipe...
—No es eso, él es bueno y muy increíble—Admitía Taehyung— Es el
mejor candidato a Rey que yo haya visto.
—Tú... ¿Vas a dejar que él reine? —Regañaba sobándose las sienes—
Después de todo lo que hemos hecho... ¡Después de tu padre!
—A mi padre no le metas en estas cosas—Puso serio su semblante y
suspiró— Jungkook va a estar muy feliz, reinará bien y eso lo sé.
—Ya veo, te has enamorado el príncipe—Musitó con decepción— No
puedo creerlo, es estúpido y me has decepcionado...
—No tío, lo que pasa es que...
—Nada, contigo es mucha decepción en verdad...—Suspiró y lo miró
serio— ¿Crees que dejaría a su novio ese por ti? Es absurdo por favor.
—Él no se interesa en mí y lo sé—Admitió con cierto dolor— Sólo...
deja de hacerle cosas malas... sabotaje.
—Lo amas, no puedo creerlo—Suspiró y sonrió— Bien, si eso te hace
feliz... yo solo quiero verte muy feliz Taehyung.
—Muchas gracias tío.
—Ahora, ve con él—Animaba aún sonriente— Felicítalo y bueno, no
haré más cosas.
Taehyung asintió sonriente, saliendo del lugar con una sonrisa sincera en
su rostro. Sentía que por primera vez podía iniciar las cosas bien con
Jungkook, ya que desde la noche anterior y el beso... se dio cuenta de que
Jungkook era tan valioso y generoso.
Sumando que el menor había hecho eso con los huérfanos y aún más, con
el parlamento y como transformó un castillo para los niños... Jungkook
estaba calando muy profundamente en su corazón. Pero sabía que debía
decirle adiós a todo eso, debía irse antes de la boda.
Miró hacía el castillo de su tío con una sonrisa ladina, al menos ya estaba
a salvo Jungkook. Pero estaba lejos de serlo.
El tío de Kim miraba por la ventana entre las cortinas como el chico se
iba con una sonrisa, su semblante era serio y un tanto furioso.
—No creas que pasará—Susurró el tío mirando a Taehyung ya muy lejos
de allí.
Tomó su móvil y sonrió ladino, sabía que su sobrino se iría ya pronto de
Hanyang y eso beneficiaría sus planes, no dejaría que el trono se fuera de
sus manos tan fácilmente.

(...)

Jungkook practicaba su tiro con arco, esta vez con algo de fuego. Llevaba
un tiempo practicando, es más como todo el día. Pero simplemente no le
salía ni una sola vez aquello, suspiraba y en su mente se aparecía algo que
lo desconcertaba aún más.
Se recordaba de quince años, en un baile real y como miró a Taehyung
aquella vez, así sin siquiera conocer su nombre, sintió su corazón acelerado
y las mejillas calientes. Recordaba como el mayor estaba en un traje color
vino y un semblante serio en su rostro, saludando a todos con
caballerosidad.
Aquella vez recordaba, sólo pudo mirar a aquel misterioso chico. No
supo bien hasta que lo volvió a ver que su corazón no le había superado. A
pesar de todo, se sentía nervioso y con algo en el estómago al ver al conde
Taehyung, además de que el beso que se habían dado solo hizo confirmar
eso.
Sumando ahora también el hecho de que habían cantado juntos una
canción tan especial como aquella y la mirada que se dieron, como si nadie
más existiera... simplemente era muy increíble.
—Jungkook cuidado— Escuchó a Sanghyuk hablarle— Cariño creo que
el arco...
Jungkook miró con sorpresa como no había dado al blanco y luego volteó
a ver a su prometido. El traje de Sanghyuk estaba ligeramente quemado y
Jimin le miraba con algo de curiosidad, sabía que su mejor amigo se había
dado cuenta que algo estaba mal.
Jungkook se acercó a ver el traje de Sanghyuk y trató de limpiarlo, luego
vio que Taehyung se aproximaba y miró a Jimin con complicidad.
—Jimin, ¿Vienes un minuto? —Jimin asintió y se retiraron un poco— Ya
viste, ¿No es así? Viene Taehyung.
—Lo sé, tu dime a quien corremos y se hará—Señalaba ansioso—
¿Taehyung o Sanghyuk?
—Quiero hablar con Taehyung un momento, ¿Podría ser Sanghyuk?
—Creí que no lo pedirías...—Vio como Jimin se acercaba a su prometido
— Sanghyuk, enséñame a tu familia...
—¡Sí! En lo que practico—Sonreía agradecido Jungkook— ¿Podrías
hacerlo Sanghyuk?
El chico solo asintió y desapareció con Jimin, mientras Taehyung se
acercaba mirando las flechas tiradas y a un Jungkook algo rendido.
—Jungkook, deja te ayudo con esto—Señalaba el arco y flechas—
Ahora, ¿Podrías?
Jungkook asintió mientras se preparaba en posición para lanzar la flecha,
sintiendo a su lado a Taehyung. Muy cerca de él.
—No, inclina más tu hombro para abajo—Señalaba acomodándole—
¿Lo ves? Tu codo es el ancla, debe estar a la barbilla.
—Está bien, lo haré.
—Tú puedes...
Jungkook se giró levemente y se vio demasiado cerca de Taehyung, lanzó
la flecha y le dio en el blanco. Se emocionó y giró para dar las gracias al
chico, sintiendo la respiración del mayor en su rostro. Ambos se miraron
con intensidad y Jungkook le sonrió.
—Muchas gracias, no creía hacerlo.
—Eres capaz de muchas cosas Jungkook—Hablaba cerca del menor—
Me alegra que lo puedas hacer.
Jungkook miró nuevamente a Taehyung, paseando su mirada a los labios
de este y cerrando más la distancia. Taehyung acarició su rostro y dio un
pequeño beso en la frente.
—Me he venido en verdad por una cosa— Jungkook le miró con
curiosidad— En sí, he venido a despedirme de ti Jungkook.
— ¿Despedirte? —Miró con tristeza— ¿Es que acaso ya te irás?
—Debo atender cosas de mi castillo y...—Suspiró alejándose ligeramente
de Jungkook— Estoy a tiempo de despedirme dignamente de todo, así
que...
—Nos vemos entonces...—Tendía la mano al mayor— Conde Kim
Taehyung.
—Sí, no creo que nos veamos—Sinceraba el chico— Esta es mi
despedida Jeon Jungkook.
Jungkook mordió sus labios con tristeza, asintiendo con desgano y
mirando aquellos ojos que le volvían loco. Tocó ligeramente la mano de
Taehyung y sonrió con amargura.
—Entonces... adiós...—Vio como el chico se alejó de él y su agarre,
dejándolo sólo en el jardín— TaeTae...
Hola milkis
Espero les gustase este capítulo y bueno, no me resistí a poner esta
canción tan TaeKook en el capítulo porque... no lo sé.
En fin, habrá maratón de semana de esta y otras fic para que estén
listos.
Besos
( ˘ ³˘)♥
08

SeokJin y Jimin veían las cosas para la boda, en especial la música, comida
y lo necesario para que fuera algo perfecto. Ambos sonreían al probar la
comida y pastelillos que se iban a entregar en la recepción, hasta que cierto
chico interrumpió aquella escena.
—Jin... Tu hermano Ren está buscándote—Hablaba Namjoon— ¿Lo
traigo o aún no?
—Namjoon, gracias por cuidarlo...—Sonreía acercándose al chico—
Claro, ya quiero verlo. Además le daríamos dulces aquí.
Namjoon asintió marchándose, mientras Jimin miraba pícaro al mayor.
SeokJin atinó a sonrojarse y negar divertido con la cabeza, Jimin suspiró y
miró a lo lejos a cierto general, el cual estaba ordenando alguna cosa a la
guardia real.
—Háblale, ponle la excusa que probaremos la música y baila con él—
Opinaba SeokJin— Se nota mucho que ambos se gustan.
—No lo digas así... yo... él...
—Oh vamos, sólo ve por él—Animaba mientras veía a Namjoon
acercarse con Ren— Y yo bailo con Namjoon para simular.
Jimin lo miró acusatorio y suspiró, acercándose a Yoongi, el cual le miró
con una sonrisa ladina.
—Quieres... ¿Quieres ayudarme con la música? —Miraba nervioso al
piso— Necesito una pareja de baile para ello y bueno...
—Sí, me encantaría—Argumentaba el general Min— ¿Vamos?
Ambos chicos llegaron con Namjoon, Ren y Jin, los cuales esperaban
sonrientes. Ren se quedó cerca de la mesa de bocadillos comiendo unos
dulces y los mayores se acercaron al centro de la enorme habitación.
Colocaron la música y se dejaron llevar por esta, bailando como si la
pareja contraria no existiera. Totalmente perdidos en su mundo.
Namjoon y Jin bailaban tranquilos, mientras sonreían y tenían un sonrojo
en sus mejillas muy evidente.
—Así que... esta será la pista musical—Susurró Namjoon— Es muy
buena si me dejas decirlo.
—Es permitido hacerlo—Sonreía SeokJin mirando a la pareja contraria
— Y veo que no somos los únicos que disfrutamos este baile.
—No, noble Jin... ¿Cuándo me dejarás estar contigo bien? —Indagó
curioso Namjoon— Estoy cautivado por ti...
—Hablaremos de eso después, sí quiero es obvio...—Opinaba sonrojado
Jin y miraba a Ren y a la pareja— Ahora es creo momento de esos dos, ¿No
te parece que es bonito?
Namjoon se giró para ver a la pareja contraria y después a SeokJin, el
cual le sonrió y se dieron un muy avergonzado beso. Finalmente se dejaban
llevar por los sentimientos, además, Jin sabía que Namjoon trataba muy
bien a su pequeño hermano Ren.
Mientras que la otra pareja, Jimin y Yoongi se dejaban guiar por aquella
música clásica que resonaba en el salón. Las manos del mayor se deslizaban
por la cintura de Jimin y sonreían embelesados.
—Usted general baila muy bien—Musitaba Jimin con una sonrisa—
Demasiado bien...
—Es mi deber hacer las cosas bien— Opinaba girando a Jimin y
dejándolo cerca de él— Como capitán y... hacer bien esto contigo Jimin.
—Oh General Min...
—Dime Yoongi...—Sonreía bailando— Con eso es más que suficiente.
Jimin sonrió y miraron a Namjoon y SeokJin, los cuales habían dejado de
bailar y estaban con Ren. Parecían una familia verdadera. Se despidieron y
suspiraron, debían seguir las demás actividades propias de ese día.
(...)

Taehyung miraba viejas fotos propias en las que estaba con sus padres,
las escondía claro de su tío. Suspiraba mientras veía algunas en el castillo,
cuando él y Jungkook eran pequeños. Claro que en aquellos días no había
una corona de por medio entre ambos o alguna otra cosa que les fuera de
impedimento en su vida.
Suspiraba mientras la imagen de cierto príncipe sonriente se le venía a la
mente.
—Jungkook...—Susurró mientras miraba por la ventana el anochecer.
Se recordaba de más joven, hace un par de años. Cuando no quería ser de
la realeza ni mucho menos, cuando quería simplemente estudiar más de lo
que hacía y vivir la vida al máximo. Pero siempre era un impedimento algo
en su vida, su tío.
Aquel hombre que nunca le dejaba hacer muchas cosas pero... debía
ahora estar un poco agradecido de que le hiciera caso y no molestase más a
Jungkook.
Debía admitir que en un inicio no soportaba al menor, se le hacía un crío
mimado y príncipe caprichoso. Sin embargo, a medida que avanzaban las
cosas... vio aquel corazón tan hermoso que el menor poseía y aquella
belleza que se negaba a ver antes, ahora se desvivía por el chico.
Sus lindos ojos brillantes cuando ayudaba a alguien eran únicos, además
de esa sonrisa tan sincera que regalaba siempre que hacía algo bueno o se
sentía feliz. También Jungkook poseía aquel espíritu libre que a Taehyung
le fascinaba.
Aunque a veces ese espíritu libre era un poco terco, eso le gustaba aún
más. Ya que Jungkook en serio no era nada malo y caprichoso, era en
verdad amable y muy diplomática su forma de ser. Digno Rey.
—Taehyung...—Escuchó una voz llamarle— ¿Te irás en serio?
—Jimin...—Miró al chico y asintió— No creo poder ver cuando él se
case...
—¡Ve por él! —Taehyung le miró con extrañeza— Vamos, será la última
noche... ¿No sería genial que ambos la pasaran juntos?
—Yo... ¿Qué propones que haga?
Jimin sonrió y se acercó al conde Kim, susurrándole un plan que a él le
parecía perfecto.
—Entonces, espéralo afuera de su habitación y yo voy por él—Opinaba
sonriente— Si no, lanza piedras a la ventana... ya sabes...
Taehyung sonrió y asintió, mientras un emocionado Jimin salió corriendo
de allí. Vaya que iba a cometer una locura.

(...)
Jungkook leía algunas cosas, se sentía un tanto decaído de la noticia de la
marcha de Taehyung del lugar. Debía admitir que se había flechado de
aquel chico que juraba odiar. Quizá desde el primer beso. Pensó mientras
suspiraba y acomodaba las cosas para irse a dormir.
—¡Jungkook! —Escuchó un grito— ¡Soy Park Jimin! ¡Jungkook a tu
ventana!
—Jimin, ¿Qué sucede?
Jimin lo tomó de los brazos y sonrió, señalando efusivamente la ventana.
—Tu príncipe azul arroja piedras—Musitaba Jimin emocionado.
—¡Taehyung! ¡Taehyung! —Susurraba el menor al verlo en el jardín—
¿Qué es lo que haces?
Taehyung le sonrió y suspiró mientras miraba a todos lados, luego a
Jungkook.
—¡Oh mi lindo Julieto, me pregunto si un paseo conmigo quiera dar!
—Si fuera con usted, sería un fracaso—Se burlaba Jungkook sonriente,
se metió a su habitación y miró a Jimin— Oh mi dios...
—¿Qué dice?
—Quiere que nos fuguemos esta noche—Admitía sonriente— Y en
verdad que quiero ir...
—Hazlo, vamos...—Sonreía emocionado— ¿Quieres una sosa despedida
de soltero o una velada romántica con tu príncipe azul?
Jungkook analizó aquello y sonrió divertido, tomó sus cosas y un abrigo.
Lanzó el abrigo a Taehyung y empezó a salir por la ventana. Taehyung
sonreía complacido al ver como Jungkook había accedido a irse con él esa
noche.
—Ya está... cielos...—Vio la cámara— Ojalá no me vean...
El menor trataba de ocultarse, sin saber que no sería visto para nada por
Hoseok, Mark y BamBam. Ya que estos estaban muy cómodamente
jugando póker, ignorando las cámaras por la concentración en aquel juego
que les encantaba.
—Esto es más romántico en los cuentos de hadas—Musitaba Jungkook
bajando por la enredadera— Ni rapunzel se arriesgó tanto a que lo pique un
insecto.
Taehyung reía ante las ocurrencias del menor, Jimin desde la ventana
miraba con diversión a su amigo colgando de la enredadera y aferrándose
con una cara muy graciosa a todo lo que veía.
—Demonios... ¡Se me atoró el pie! —Gritoneaba frustrado—Esto no es
nada lindo... ¡¿No hay hadas madrinas acaso?!
Jungkook trataba de bajar como podía, mientras Jimin veía entretenido la
lucha de su amigo contra la enredadera. El conde abajo, sólo miraba con
una sonrisa y algo de preocupación. Era divertido, pero peligroso así que
estaba al tanto.
El menor dio un traspié con su pie atorado y chocó de bruces son la
pared, dándose en la cara y causando carcajadas que Jimin trataba de
silenciar con sus manos en la boca.
—Jimin... ¡Cuando llegue verás! —Se quejaba dolorido— ¡Tú enano!
—Vamos Jungkook, fue cómico desde aquí arriba—Sonreía inocente.
Jungkook renegaba con fingida molestia y resopló mientras seguía
bajando, Taehyung se preparaba para recibirle. Nuevamente iba a caerse y
esta vez, se lanzó al suelo. Pero el mayor fue más rápido y extendió sus
brazos para recibir la caída de Jungkook.
—¡Ah! —Gritó Jungkook.
Cayó encima de Taehyung, así que el mayor exclamó algo de dolor al
haber sido tacleado por un Jungkook que iba a caer. Se miraron con una
sonrisa divertida.
—Perdón... ¿Te dolió?
—No yo...—Lo miró con una sonrisa— Ya me acostumbre a esto
contigo...
Jungkook se levantó avergonzado, mirando a la ventana mientras Jimin le
levantaba los pulgares con una sonrisa enorme. Ambos chicos se miraron y
salieron corriendo del palacio, como prófugos o los amantes a escondidas
de los cuentos... dejando a Jimin saltando por toda la habitación. Estando
muy emocionado.
¡Había sido testigo de un escape estilo romeo y Julieta o Rapunzel!
Se tiró en la cama de Jungkook con una sonrisilla, ya luego le sacaría las
cosas a Jungkook sobre qué pasó con ambos.

(...)

Taehyung llevó al menor hacia los caballos, los cuales tomaron para huir.
Aunque el menor tenía algo de miedo, lo perdió al sentir luego el apoyo de
Taehyung sobre él.
A los pocos minutos llegaron a una colina cerca de un pequeño lago,
donde ambos sabían que nadie pasaba a menudo. Lo cual era perfecto para
aquella velada que pasarían antes de no volverse a ver, eso último le dolía
demasiado a ambos.
Se detuvieron bajo un árbol de cerezos y empezaron a platicar mientras
jugaban guerra de pulgares, el juego favorito de Jungkook.
—Dime un deseo tuyo entonces...—Comentó Taehyung sonriente—
Vamos, tu mayor deseo.
—Tú dime un secreto, Kim.
—Eso no es lo mismo a lo mío...
—Casi, pero todos piensan en los deseos...—Musitaba casi ganando en la
guerra de pulgares—Nunca ven hacia tu interior.
—Bien, dime algo Jungkook...—Lo miraba y después seguía jugando con
él— Algo sobre ti que nadie sepa.
—Bueno, a veces sueño en blanco y negro—Sonreía mientras atacaba el
pulgar de Taehyung— Y me encanta el Kimchi fermentado.
—Yo cuando iba a la escuela fingía enfermedades en los exámenes—
Comentaba divertido— También me encanta poner chocolate a todo tipo de
cereal, incluso el de chocolate.
—Eso es normal, sobre el chocolate...—Sonreía ganándole casi al mayor
— Creo que sabe delicioso, pero prefiero colocar frutas.
Taehyung reía mientras negaba divertido, luego miró el pulgar con el que
jugaba y sonrió ladino.
—Le temo a las medusas...—Soltó Jungkook— No me gustan para nada.
—Yo debo confesarte algo muy importante Jungkook—Soltó dejándose
ganar por el menor— Bueno, al menos para mí.
—Oh, ¿Qué es Taehyung? —Lo miró con curiosidad— ¿Es algo malo?
—Nosotros... ya no hemos bailado desde aquella vez—Musitó de pronto
— Fue genial cuando lo hicimos aquella vez.
—Es la verdad, no es un secreto—Argumentó sonriente el menor.
—El secreto aquí es que...—Jungkook lo miró riendo un poco— Aun lo
deseo... mucho...
Se miraron a los ojos, dejándose llevar por sus corazones. Se acercaron
hasta que la distancia en ambos fue nula, para finalmente darse aquel
ansiado beso. Ambos lo deseaban, vaya que lo hacían.
Los labios del mayor iban lentos, disfrutando del sabor y textura de los
de Jungkook. Al separarse, el mayor se levantó para tenderle la mano a
Jungkook y poner música de su iPod. Tomó al menor de la cintura y lo pegó
a él, dejando sus frentes juntas... dejándose llevar por la dulce melodía de
una canción muy famosa. "Last Dance" la cual, curiosamente sin que el otro
supiera, era la canción favorita de ambos.
Jungkook colocó sus manos en el cuello de Taehyung, aun con sus
frentes juntas y los ojos de ambos cerrados. Luego, las manos de ambos en
un giro se encontraron, justo en la parte más alta de la canción, quedando
con las manos entrelazadas y bailando más lento. Cuando la canción
finalizó, ambos se abrazaron y se quedaron hablando de muchas cosas,
hasta que se quedaron profundamente dormido en la manta que llevaban,
abrazados y con un sentimiento cálido en ellos.

Hola Milkis
Bueno, este capítulo me causó de todo escribirlo xD
Esta es mi película favorita de este estilo que tiene Disney, así que es
algo especial para mí y espero les guste tanto como a mí escribirla.
Actualizaré mucho esta y mis demás historias para que se pasen a leer...
Besitos ( ˘ ³˘)❤
09

La mañana pronto vino para los jóvenes enamorados, siendo el primero en


despertarse Taehyung, el cual miraba embelesado a Jungkook. Quien a los
pocos minutos, finalmente despertó con una sonrisa de genuina felicidad.
—Buenos días, Jungkook—Susurraba Taehyung abrazándole a su pecho.
—Taehyung... ¿Cómo estás? —Miraba recibiendo la caricia de Taehyung
en sus cabellos— ¿Estás bien?
—Todo está muy bien—Sonreía abrazándole— Nos hemos quedado toda
la noche...
—Sí... ¡No! Se hizo de día...—Se levantaba rápido— No puedo creerlo.
Empezaron a reír divertidos, hasta que algo llamó la atención de
Jungkook. Cerca de donde estaban, en una lancha vieja, se veía algo
extraño.
—Tae... ¿Qué es eso?
—No lo sé, es muy extraño...—Miraba con detenimiento— ¿Algún
lanchero?
—Sí, con una cámara...—Musitaba viendo al camarógrafo—Taehyung,
eres un asco.
Jungkook se levantó muy rápido y tomó al caballo que había usado la
noche anterior. Taehyung le siguió desesperado.
—No Jungkook... cariño...
—Eres el ser más insoportable y traicionero—Musitó molesto Jungkook
— No quiero volver a verte en mi vida.
—Jungkook por favor debes creer que no fui yo...—Suplicaba dolido—
Yo jamás te haría daño de esa manera.
—No me importa saberlo, me marcho.
—Jungkook...—Musitó tarde, ya que el menor se había marchado.
Taehyung se sentía con un nudo en la garganta ante las palabras que le
había dicho Jungkook. Recordaba la noche anterior mientras acariciaba al
caballo frente a él, no pudiendo evitar algunas traicioneras lágrimas se
deslizaran por sus mejillas.
Eran el reflejo de su corazón aún más roto que antes. Había creído que
podía soportar el que el menor se casara con Sanghyuk, incluso cuando
defendió a Jungkook de su tío. Pero ahora su corazón dolía, quemaba; como
lava ardiente recorriendo su ser.
Y es que en poco tiempo, Jungkook se había vuelto su todo y ahora era
nada, nada más que un bello recuerdo de un amor que no podía ser. Ahora
gracias a aquello jamás vería a Jungkook y con más razón este se casaría
con Sanghyuk... si tan sólo no le hubiera hecho caso a su tío...
Su tío...
Ahora empezaba a tener todo sentido para el chico, aquel hombre era
seguramente el causante de todo eso. No podía creerlo, pensar que le pidió
que le dejara tranquilo al príncipe... sin embargo parecía que en los planes
de su tío estaba sabotear siempre a Jungkook.
¿Tanto así ansiaba la corona aquel hombre?
Negó frustrado con la cabeza, debía reclamar a su tío. Porque el
recuperar a Jungkook era muy tarde. Sólo esperaba que el menor fuera feliz
a partir de ahora, porque él ya iba a perder la felicidad con la boda de ese
día.

(...)

Jungkook llegó al palacio, viendo a Jimin y Heechul hablando serios.


Jungkook miró con vergüenza a Heechul y después vio como Jin se
acercaba junto a Hoseok para enseñarle el vídeo donde salía con Taehyung.
—Yo... puedo...
—No entiendo nada, ¿Quieres a Taehyung? —Indagaba Heechul— ¿Se
quieren mutuamente?
—No, caí en una trampa suya...—Sollozaba— Soy tan tonto, creí que él
y yo...
Jimin y SeokJin se miraron con interrogante en su semblante, pues ambos
sabían que el mayor estaba muy enamorado de Jungkook. Aunque en
cambio el tío... ambos se miraron asintiendo, seguro era por ese sujeto.
—Jungkook, sé que es muy difícil para ti esto—Musitaba Heechul—
También sé que le tomaste cariño a tu prometido... pero me niego a creer
que lo ames.
—Pero tú sabes que... —Se abrazaba afligido— Yo lo único que quiero
es que el reino...
—Sí, lo haces por el reino querido—Acariciaba los cabellos del menor—
Sé que probablemente estás mal y que estás enamorado de Taehyung, lo sé
porque desde pequeños lo mostrabas.
Jungkook le miró sin creer, mientras Heechul le regalaba una sonrisa
pequeña y acariciaba sus cabellos.
—Pero me traicionó... yo creí que ayer...—Se limpiaba las lágrimas—
Creí que sería diferente todo...
—La pregunta es... ¿Aún habrá boda?
Jungkook analizó las palabras de Heechul, mientras veía de pronto a su
prometido entrar a la habitación con el semblante serio.

(...)

—Sanghyuk... de verdad lo siento...—Pedía tras el chico— Te prometo


que nada de eso pasó...
—No es eso, es el hecho de que fuiste—Musitaba molesto— No
entiendes Jungkook, en mi país soy muy codiciado...
Jimin miraba por la ventana negando con desaprobación, igual que
SeokJin e incluso Hoseok.
—Yo... tengo muchos hombres y mujeres tras de mí Jungkook—El
menor bajaba la mirada avergonzado— Pero hoy... voy a desposarte a ti
sobre todos ello... ¿Es difícil pensar en ello? Yo... Jungkook
—Sanghyuk...
El chico besó al príncipe con hambre, empezando inmediatamente una
batalla de lenguas que no surtió algún sentimiento en el contrario. Jimin
miró con la boca abierta y volteó a ver a SeokJin y Hoseok, luego se
sorprendió de ver al mismo Heechul mirando la escena sorprendido.
Ambos jóvenes se separaron abruptamente, mientras el resto negaba
desde la ventana. Cada quien con una idea en mente, pero una persona en
común. Taehyung.
—Y bien... ¿Te ha gustado Jungkook? —Indagó curioso Sanghyuk— ¿Lo
hizo?
—En verdad que quisiera decir que sí lo hizo—Se excusaba— Pero es
que... se supone que debes sentir algo... como mariposas o un sentimiento
que recorra tu ser y te haga feliz...
—Y nosotros...
—Es que entre nosotros no hay... ¡Química!
—Pues es muy cierto—Jungkook le miró con interrogante y el chico
negó excusándose— Fue un beso muy placentero.
—Sí, mucho.
—Pero creo que ambos sabemos que...—Suspiraba y miraba a Jungkook
— No hay esa magia que ambos sabemos debería haber.
—No, no la hay. —Se giraba para bajar la mirada— Si no lo quieres
hacer está bien, ya yo me inventaré algo para zafar esto.
Sanghyuk miró a Jungkook decaído, él sabía que aquel chico era muy
bueno y sus intenciones siempre habían sido buenas. Suspiró pesadamente y
se acercó al menor para demostrar su apoyo.
—Jungkook... yo acepté cuando tú me elegiste—Sinceraba y Jungkook lo
miraba asintiendo— No te angusties por ello, yo... tú y yo hoy diremos que
sí y mañana seremos esposos... será otro día.
—Sanghyuk... yo.... Muchas gracias en verdad—Agradecía dando un
beso en la mejilla— En verdad muchas gracias.
Ambos chicos se abrazaron, haciendo negar a quienes les miraban desde
la ventana. Ya que todos sabían que en realidad el menor estaba totalmente
enamorado de Taehyung y probablemente esa boda causaría desgracia en
más de un corazón.

(...)

Jungkook miraba su habitación por última vez, viendo como Jimin estaba
afuera con un chico muy pálido y sonriente. Sentía un poco de celos al ver a
su amigo sin angustias, pero luego negó con la cabeza y soltó un suspiro.
Iba a casarse en menos de dos horas, así que debía ser positivo con eso.
—Príncipe Jeon, se le está haciendo algo tarde—Musitaba Mark— Debe
ir a arreglarse, me dijeron que se teñirá el cabello y el peluquero real le
espera.
—Ya lo ha dicho el Rey Heechul antes—Musitaba sonriente— Un rey
jamás llega tarde, los demás siempre lo hacen antes.
Mark asintió y avanzó junto a Jungkook hacia donde le esperaban para
prepararlo para la boda. De pronto Jungkook lo miró con curiosidad.
—Mark... ¿Estás con Jackson no es así?
—Sí, estoy con él desde hace un tiempo—Sonreía algo avergonzado—
Bueno, en sí bastante su majestad... ¿Por qué la pregunta?
—Es que... me entró curiosidad de saber—Admitía mientras miraba al
estilista— Y bueno, es que no parecía que dejara a BamBam y de pronto...
—La vida a veces te pone con alguien incorrecto—Musitaba mientras
ambos veían como a lo lejos Yugyeom y BamBam se tomaban de la mano
— Para luego acomodarte con la persona que está hecha para ti. Es decir, yo
sentía que lo mío con Jackson era imposible.
—Eso fue... ¿Fue porque estaba con BamBam?
—No sólo eso príncipe, sino que sentí que jugaba conmigo—Reía
negando con la cabeza— Pero luego entiendes que a veces no es eso, sino
otras personas que se interponen. En ese tiempo BamBam ya estaba con
Yugyeom.
—Bueno, ahora a los cuatro se les ve felices.
—Pues es así príncipe—Sonreía amable Mark— Cuando encuentras a la
persona correcta, a su lado estás feliz. Vea a SeokJin y Namjoon o las veces
que el general Min se ve con su amigo Jimin.
Jungkook asintió analizando aquellas palabras, luego vio al estilista real
con una sonrisa. El cual tenía todo preparado, incluso un traje
perfectamente alzado en un empaque fino y tres ayudantes para toda la tarea
de arreglar al príncipe.
—Bien mi estimado príncipe Jeon, es hora de que se transforme—
Animaba el estilista— Le haré verse como una obra de arte... aunque claro,
es muy poco lo que se haría para eso.
—Muchas gracias... —Sonreía mirando todas las cosas— ¿Con qué se va
a empezar?
—Ya verá, usted sólo confíe en mí y verá que pasa.
Jungkook asintió mientras se relajaba y miraba como le empezaban a
teñir el cabello de castaño, luego le empezaban a poner demasiados
productos en la piel de su cuerpo y cara, para que se viera más vital y
saludable. O al menos esas eran las palabras que había usado el estilista.
Pero en la mente del pequeño Jeon estaba Taehyung... ¿Iría a la boda?

(...)
Con el conde Taehyung, estaba su tío buscando como loco alguna cosa.
Mientras el chico solo miraba aburrido la escena.
—No encuentro mis guantes elegantes...—Musitaba el hombre— ¡Rachel
mis guantes!
Taehyung solo bufó algo aburrido.
—Sabe tío, creo que no iré a esa boda—Musitaba decidido— Creo que es
lo mejor que puedo hacer.
—Muchacho, ¿Otra vez con esas cosas? —Musitaba arrogante— Vamos
a divertirnos un rato, en dos semanas esa corona será tuya.
—Eso no será, será esposo de Sanghyuk—Objetaba mirando rendido a su
tío— Hoy se hará eso.
—¡Cierto! En fin, la boda va a ser un verdadero desastre—Se colocaba
finalmente los guantes— Será divertido y quizá me gane el botón del traje...
Taehyung rodaba los ojos mientras veía a su tío marcharse, se levantó de
aquel viejo sofá. Dirigiéndose al espejo de cuerpo completo, mirando su
traje con desinterés.
Aquel consistía en todo de color negro de una marca que el adoraba
Gucci, salvo algunas joyas que colocó en las solapas del cuello y un dije
que hace muchos años le había regalado su padre.
Aunque se suponía que debía usarlo en su boda con el amor de su vida,
sin embargo decidió colocarlo aquel día, en el que en sí perdería al amor de
su vida.
Suspiró pesadamente mientras negaba al verse en tal situación y la
imagen del chico al lado de Sanghyuk le llegaba a su pensamiento,
sintiéndose como un estúpido en esos momentos... lo bueno es que no era
tan masoquista y no iría a ver como Jungkook le daba el sí a otra persona.
Se puso a pensar en cómo se vería el chico en esos momentos, ¿Estaría
bien o con el corazón herido como el suyo?
Y respondiendo a aquello sin que el mayor lo supiera, Jungkook se
miraba en el espejo de su habitación mientras veía como los estilistas
recogían todo lo que habían utilizado para arreglarle.
—Es... increíble—Susurró mirándose.
El traje era blanco, salvo la orilla cerca del pecho y la corbata, que más
bien le colocaron un moño negro, además de un botón negro que
contrastaba en el traje. Le habían maquillado para que se viera natural, pero
con los ojos resaltando debido a una fina capa de delineador difuminado.
Miró a Jimin, con un traje en color negro muy sencillo. Aunque
casualmente notó que llevaba un pañuelo exactamente igual al del general
Min. También vio a SeokJin ir muy similar a Namjoon, salvo por su corbata
rosa.
—Jungkook... Ya es hora—Musitó Hoseok entrando a la habitación.
—Sí, yo ya voy—Hablaba mirándose por última vez en el espejo.
Se veía como alguien que se iba a casar, aquel traje elegante, el cabello...
todo contrastaba, salvo aquella mirada que no irradiaba amor. Sino más bien
una profunda tristeza, una tristeza que era de aquel que fue separado del
verdadero amor.
Con un suspiro grande, salió del lugar a su boda. Era uno de los peores
días de su vida sin duda alguna.

Hola milkis
¿Qué les ha parecido el capítulo?
Aquí les dejo un apoyo visual para que imaginen como se veían los
chicos

Y bueno, ya se está acabando este fic ;-; sin embargo, Royalty Love es
como un "suplente" de este tipo de trama. Espero les guste, ya saben que
subiré que pondré de maratón para que pasen a mi perfil.
Besitos~ ♡
10

Taehyung estaba sentado en un mullido y viejo sofá, se sentía algo decaído


al saber que aquel hombre por el que su corazón latía estaba a nada de
contraer nupcias. Pensaba en aquellos ojos brillantes y sonrisa cautivadora,
mientras hablaba aquella noche de sus gustos.
Se sentía fatal, aquel sin duda era de los peores días de su vida. Resopló
mientras veía como su móvil no dejaba de sonar, tratando de ignorarlo pero
era demasiado ruidoso y en cierto punto, molesto.
Tomó con resignación el dispositivo entre sus manos y abrió los mensajes
que tenía recibidos, virando los ojos al ver que eran nada más y nada menos
que de Park Jimin. El mejor amigo de Jungkook.
Abrió los mensajes y vio como el chico pedía urgentemente hablar con
él, logrando que una incertidumbre y presentimiento se le vinieran a Kim de
pronto.
Buscó el numero de Jimin y marcó angustiado, esperando que nada malo
le pasara a Jungkook. Después de dos timbres Jimin pareció contestar.
—¿Taehyung?
—Ya marqué, yo... —Carraspeó con el sentimiento de un ardor recorrer
su pecho. Quemando como lava— ¿Pasó algo con Jungkook?
—Sí, algo muy grave.
Esas palabras fueron como un balde de agua fría para Taehyung. Sintió
su corazón reprimirse y la garganta seca; de pronto todo su mundo se
concentró en eso. En Jungkook.
—¿Qué le ha pasado...?
—Pasa que esta a nada de desposar al hombre equivocado —Taehyung
miró con recelo su móvil, jactándose de aquellas palabras— Necesitas
venir, si lo amas... si tú en verdad lo haces...
—Jimin, Basta. —Sentenció con molestia en su voz— Jungkook no
quiere verme, yo respetaré aquella petición.
—Es que no entiendes, está aquí tu tío —Taehyung solo viró los ojos y
sacó el aire de sus pulmones de golpe— ¿Y si intenta algo?
—Mi tío no le hará nada a Jungkook.
—En eso se equivoca joven—Escuchó una tercera voz interponerse— Su
tío si le hará algo hoy al príncipe.
Taehyung alejó el móvil de su oreja, para mirar con sorpresa y curiosidad
a Rachel. La cual se alisaba sus vestimentas nerviosa ante la mirada de
Kim, alzó su visa la señora y soltó un suspiro algo largo.
—Su tío lo mencionó...
—Yo... Jimin...—Habló Taehyung al móvil —Iré en seguida...
Colgó sin esperar respuesta del otro chico, mirando a Rachel con prisa.
—Dijo que no permitiría que usted no gobierne...—Soltó de pronto— Y
hoy en la boda puede que haga...
—Debo irme ya... —Musitó preocupado —Nos vemos Rachel.
El chico salió corriendo en búsqueda de algún transporte a irse.
Necesitaba llegar antes que su tío cometiera una locura.

(...)
Jimin caminaba ansioso por el lugar, mirando algo molesto a Heechul.
Jungkook había estado arreglándose desde hacía minutos, y eso le dejaba
con tiempo libre al lado de ese aclamado rey.
Miró a su majestad Heechul y se mordió el labio con indecisión,
pensando en qué podría hacer él para intervenir con aquello. Este
comportamiento, junto a su movimiento constante de cuerpo, llamó la
atención de Heechul.
Y es que aquel chico se caracterizaba por ser tranquilo y un poco
extrovertido a veces. Pero eso sí, siempre muy seguro de sí mismo.
Heechul algo fastidiado del comportamiento que estaba presentando
Jimin, se acercó a este con aquella elegancia natural tan suya, para también
ver como SeokJin y BamBam hacían lo mismo.
—Jimin-Ah, ¿Estás bien?—Idagó Heechul con curiosidad.
Jimin detuvo abruptamente sus movimientos, mirando un poco ansioso al
rey. Soltó una negación y bajó los hombros en señal de derrota.
—No, no estoy bien...—Susurró entre dientes—. Sinceramente creo que
la boda no se debería hacer...
Y fue allí donde Heechul se dio cuenta de como o que tan nervioso
estaba el menor.
—Lo que pasa... es que ya no se hacer más para detener algo—Sinceraba
— He intentado hacer algo para esto, pero no hace caso o bueno la verdad
es que...
Heechul le tomó de los hombros, haciendo que Jimin le mirara con
sorpresa y los labios se volvieran una perfecta O.
—A ver, vamos por partes—Pedía tranquilo, mientras miraba a Jimin
intrigado — ¿Qué es lo que tú quieres evitar y aún más importante que
eso... ¿Qué has intentado o hecho?
—Yo... verá...
Se sentía muy nervioso, como un crío que se le encontró tomando
galletas de un frasco cuando la madre decía que no. O como un adolescente
pillado en un momento donde hace alguna travesura de rebeldía. Sentía
aquel mismo sentimiento picante en el pecho y sudoración en las manos,
mientras resoplaba y miraba con timidez al adulto frente a él.
—Yo fui el culpable su majestad...—Soltó cerrando sus ojos fuertemente.
—El culpable... ¿De qué acto?—Indagó demasiado extrañado— Jimin-ah
no entiendo nada...
—Que yo fui quien hizo que Taehyung y Jungkook se fueran a ese
lugar...—Soltó finalmente, sintiendo como un peso imaginario se escapaba
de sus hombros— Yo... Ayude a Taehyung a que Jungkook fuera, además
de que convencí a mi mejor amigo que irse con Taehyung era una buena
idea...
—Jimin-ah...
—Y es que ambos se ven tan bien su majestad...—Hablaba sin escuchar
al mayor, soltando todo aquello que por miedo ocultó y no podía más con
eso—Es que debe comprender que para mí y muchos de aquí, ellos... Ellos
son como la pareja perfecta.
—Sí, verás Jimin...
—Y en verdad lo siento, pero hoy no puedo ocultarle esto. Sé que se casa
mi amigo...—Bajaba la mirada algo triste —Pero en verdad porque sé como
es y lo quiero, conzco que no será feliz con Sanghyuk. Ambos no se
pertenecen... Porque Taehyung y Jungkook se ven tan bien juntos que yo lo
hice sin pensar.
—Lo sé muy bien Jimin —El menor le miró con los ojos abiertos de
sorpresa— Sé que mi Jungkook y Taehyung son la pareja perfecta.
—Pero entonces... ¿Por qué usted...?—Abría la boca desconcertante —
¿Por qué no hizo algo?
—Ellos se deben dar cuenta —Miraba a su nieto salir y hacer seña a
Jimin — Ve con él, espero que se de cuenta a tiempo.
Jimin sólo atinó a asentir sin más, retirandose y dejando a un melancólico
Heechul en camino a aquella boda.
(...)

Taehyung se sentía desesperado, realmente desesperado, ya que no había


encontrado medio de transporte cerca del castillo de su tío. Salvo aquella
vieja bicicleta que era de su propio padre.
Analizó unos momentos si era segura, además si era la mejor idea usarla.
Pero al verse de pronto corto de tiempo no le importó, simplemente tomó
aquella bicicleta y se acomodó para salir pedaleando con velocidad.
—Demonios...—Musitaba frustrado —Debo darme prisa... Necesito
llegar a tiempo...
El camino desde ese lugar a la iglesia era largo, cerca de 20 kilómetros de
distancia.
Se sentía ya fatigado, eso que no llegaba aún a medio camino. Seguía
pedaleando con una imagen en su mente: Jungkook estando a punto de
casarse con alguien que no era él.
Y aunque le dijeran tonto por haberse dado cuenta antes, no le importaba.
Sabía que en realidad lo era.
Pero ya no quería eso más, no quería ni la corona, ni la aprobación de su
tío o lo "mejor" para Jungkook. Quería una vez por su vida arriesgar todo,
incluyendo su corazón ardiente por Jungkook, para poder impedir aquella
boda que le estaba matando el alma con la idea de no tener al menor más
con él.
Ansiaba con todo su corazón que el menor le perdonara aunque fuese. De
pronto sus piernas no respondían bien, se sentía cansado y empezaba a
sentirse rendido.
Pero el destino parecía estar en su favor aquel día. Ya que vio a un viejo
granjero conocido por él, pastoreando encima de un caballo y con una
sonrisa en sus facciones cuando vio a Taehyung cerca.
—Hola conde, ¡Me alegra verle!
—Hola DanYoo —Sonreía cansado— ¿Podría pedirte el favor más
enorme de mi vida?
El hombre le miró con comprensión y algo de preocupación. Asintiendo
mientras se detenía cerca de Taehyung.
—Yo... Necesito que me preste su caballo. —Soltaba desesperado —
Necesito llegar con alguien... Por favor... Se está...
—No se preocupe Conde.
—¿Me lo prestaría en verdad DanYoo?—Aquel granjero asintió con una
sonrisa radiante, mientras se bajaba del caballo y se acercaba a Taehyung —
Muchas gracias, en verdad que muchas gracias...
—No es nada Taehyung...—Sonreía con amabilidad y señalaba el caballo
— Solo te pediré un pequeño... Es muy pequeño favor a cambio.
Taehyung miró con interrogante a aquel sujeto, pero al saberse aun con
menos tiempo. Asintió muchas veces y salió disparado al caballo.
—¿Cuál es su petición?
—Quiero que usted sea siempre muy feliz...—Miró al chico y después al
cielo— A partir de ahora vienen cosas buenas...
—¿Cóno lo sabe?
—Usted ha cambiado, para bien.
Taehyung se quedó mudo. Asintiendo al recordar a Jungkook con una
sonrisa, salió cabalgando rápidamente del lugar. Con solo una idea en
mente, o más bien, con una persona dando motivación para seguir con dicha
travesía.
Jeon Jungkook. Su príncipe caprichoso, su príncipe amable y bondadoso.
La persona que más ama en este mundo.
(...)

Jimin miraba a su mejor amigo mientras se encaminaban a la boda de


Jungkook. Mientras que el menor sonreía pero sabía que la sonrisa en su
mejor amigo era falsa, ya que era obvio que el menor quería a Taehyung. Se
le hacía estúpido, ya que ambos se atraían y eso era muy obvio, pero tal
parecía que ambos eran ciegos para darse cuenta...
—Jimin... ¿Sucede algo?—Indagó el príncipe— ¿Está todo bien?
—Sí, bueno... ¿Estás seguro de casarte con Sanghyuk?
—¿Por qué la pregunta?
—Sólo... pregunto—Miraba hacia la iglesia— Pero bueno, no importa...
Miró a su alrededor y se sorprendió al ver a Hongbin mirándose con
Sanghyuk intensamente; tal parecía que había algo allí. Nuevamente se
alineó en la entrada de la iglesia, mirando a Yoongi junto a SeokJin y
Namjoon. Esperando a que el príncipe hiciera su entrada. Suspiró y
escuchando la marcha nupcial, dada por el coro del país más reconocido.
Empezó entonces a caminar a pasos muy lentos, mirando de vez en
cuando ligeramente hacia la entrada.
Aunque era algo imposible debido al largo pasillo que debía recorrer.
Sabía bien que detrás de él, Jungkook caminaba a tientas a la boda más loca
que pudo pensar alguna vez. La boda con una persona que Jungkook no
amaba.
Cuando se vio delante del cura, dio la media vuelta y se dirigió a su lugar,
el cual, curiosamente era al lado de ese sexy general. Min Yoongi.
Vio a Jungkook llegar, acompañado de Heechul, el cual miraba atento a
todas partes. Quizá también estaba buscando a Taehyung o algo que evitara
esa locura. Ya que recordaba como en una de esas pláticas con aquel rey,
este le había confesado que deseó siempre que fuera Taehyung la pareja de
Kook.
Aunque ahora eso se veía imposible, ya que al parecer el menor iba muy
en serio en aquello de casarse con Sanghyuk.
—No...—Susurró inaudible, para luego ver como Yoongi le miró con el
ceño fruncido.
Miró nuevamente a la entrada, deseando que aquel tonto de Taehyung
llegara finalmente. Aunque igual tenía fe en Hongbin, y en que este
irrumpiera con aquella boda.
Los minutos pasaban, viendo como terminaba el ritual inicial de
casamiento, para luego llegar a la parte que más le ponía los nervios de
punta. Aquella donde siempre lloraba y se emocionaba, pero esta vez no.
Esta vez, sólo deseaba que algo le interrumpiera todo y que su mejor
amigo no cometiera alguna locura como aquella.
Al ver la misma expresión que tenía en Heechul y SeokJIn, supo que no
era el único. Vio igual como el mismo Jungkook se veía algo decaído cada
vez que miraba a los invitados, como deseando que de igual manera alguien
le rescate.
—Jeon Jungkook, ¿Acepta a Sanghyuk como esposo para amarlo y
respetarlo en las buenas y en las malas...—Jimin se llevó su mano a la boca
con ansiedad— Hasta que la muerte los separe, en todo momento y ser
felcies?
—Yo...
Todos estaban en silencio, esperando la ansiada respuesta del menor, con
sus corazones latiendo a mil por hora. Jimin, SeokJin y Heechul, perdiendo
las esperanzas. Inclusive el mismo Jungkook.
—Yo me opongo—Escucharon una voz gruesa de pronto.

Hola milkis
¿Qué les pareció este capítulo? Como saben queda a nada esta historia
de concluir. Así que espero les gustara este pedazo de trama algo distinta
a la película. Ya les había comentado que algunas cosas como el final los
alteré.
besitos~♡
Final.

—Yo me opongo—Escucharon una voz gruesa de pronto.


Los novios y los invitados voltearon al mismo tiempo hacia la entrada de
la iglesia, unos con sorpresa, otros sonrientes. Jimin, SeokJin, Heechul y
Hoseok. Además de otros con obviedad en sus miradas.
Pues era nada común ver al serio y elegante conde, Kim Taehyung, correr
y detener un evento tan diplomático como el que se estaba celebrando. No
se podía haber pedido más de este chico, ya que llevaba una vestimenta que
le hacia sobresalir entre el resto. Incluso del novio del príncipe.
Taehyung miró a Jungkook, ignorado a todos a su alrededor.
—Taehyung...—Susurró Jungkook.
El mayor, viendo el desconcierto en la cara del menor. Además de que se
había quedado estático por la sorpresa en su lugar, avanzó con paso sereno
hacia donde el menor se encontraba. Hacia aquel altar.
No pudo evitar ver a la corte, su tío le miraba como esperando a que
hiciera algo malo hacia el menor. Taehyung negó con la cabeza, suspirando
y dirigiéndose a Sanghyuk y Jungkook con más prisa.
Incluso sintió miradas de los padrinos de boda, los cuales sonreían
ligeramente por su llegada. Incluso el serio general Min, estaba sonriendo
muy cerca de Jimin.
Taehyung sintió la garganta seca, acompañada esa sensación con la de un
corazón latiendo a mil por hora y una angustia a que fuese rechazado aún
más. Pero quería o sentía que podía tener esperanza de estar con Jungkook,
pero con las cosas que habían pasado últimamente, ya no estaba del todo
seguro.
Pero por primera vez sentía que era lo correcto, que interrumpir aquello
estaba bien. Que ofrecer su corazón al menor en bandeja de plata estaba
bien, porque era lo que realmente quería hacer en mucho tiempo.
—Jungkook yo...—Miraba al menor.
Cada paso que daba era como una tortura y una salvación a su vez,
haciendo que su corazón se sintiera más y más oprimido.
Vulnerable.
Finalmente, se posó frente a Jungkook. Mirándole con aquella adoración
que le tomó, como si el menor fuera la maravilla más perfecta creada jamás.
—Jungkook, por favor no te cases—Soltó y miró al estrado— Yo... Te
cedo mi inclinación a la corona.
Una exclamación de sorpresa se hizo en todos los invitados, haciendo
que Jungkook mirara nervioso cada vez más al mayor.
Taehyung miró a Sanghyuk, el cual miraba a Hongbin de vez en cuando.
Suspiró y vio ahora a Jungkook, el cual tenía la mirada baja, esperando que
algo más le dijera alguien.
Sanghyuk miró a Taehyung y Jungkook, luego asintió retirándose.
Sentándose junto a Hongbin, el cual le miraba con adoración y algo de
tristeza.
Taehyung miró a Jungkook una vez más, carraspeando y llamando así su
atención.
—No te cases porque...—Pasó nervioso su lengua por los labios—Porque
yo te amo.
Jungkook lo miró con la boca abierta, al igual que el resto de los
presentes. Ya que en su mayoría de los de ese lugar, jamás habían visto al
chico de aquella manera.

(...)
—Esto es verdaderamente ridículo —Soltó el tío de Taehyung de pronto
—No digas estupideces Taehyung.
Luego de minutos en silencio, aquel hombre lo había roto con ese
comentario.
Taehyung miró a su tío con molestia, para también ver a Heechul y al
anciano del parlamento poner atención a este. Sanghyuk y Hongbin del
mismo modo prestaban atención a todo.
—Es obvio que el príncipe Jungkook no está capacitado para el trono—
Hablaba el hombre— Sin embargo, sé que mi sobrino sí. Siempre a estado
más preparado que el príncipe...
—Yo declino, ya lo he dicho. El príncipe Jungkook es capaz de gobernar,
tiene carisma, visión, sentido de justicia...—Se giró ñara ver al menor—
Nos llevará hasta el siglo veintiuno. Además, se vería muy lindo en las
estampillas...
—¿Se vería muy lindo en las estampillas?—Imitó su tío con molestia,
mirando con furia a Taehyung y Jungkook —¡Tú también te verías bien en
las estampillas! ¡Te verías muy lindo!
Hoseok y Jackson, quienes estaban cerca del tío de Taehyung. Viraron los
ojos con resignación, preparandose junto a Mark y BamBam para
encarcelar a ese sujeto. YugYeom solo miraba la escena con Heechul al
cuidado.
—Creo que si Taehyung quiere declinar, debe respetar esa decisión —
Habló de pronto Heechul— Él al igual que yo, vio aquello en Jungkook que
yo sé que es capaz de entregar al pueblo. Ademas de que será buen
gobernante.
—No, me reuso a seguir escuchando este tipo de estupideces—Se
quejaba el hombre—Taehyung... ¡Piensa en tu padre y su deseo! ¡Piensa en
mi y estos años criándote para gobernar el país!
—Te dije que no quiero gobernar ya, que Jungkook es mejor opción.—
Miró al parlamento —Él es el correcto, yo lo sé y no porque lo quiera. Sino
porque evidentemente lo ha demostrado cada día, con acciones tan nobles
como lo del albergue.
Los hombres miraron a Jungkook, el cual miraba aun con sorpresa las
palabras de Taehyung. Vio como el tío se acercaba a él furioso, pero
también como Taehyung tomaba del brazo a su tío y le sacaba del lugar.
Lo cual hizo que Hoseok y Mark los siguieran en silencio. Viendo el
enojo de Taehyung hacerse cada vez más y más grande.
—Suelta, niño malcriado, malagradecido... ¡Suelta mi brazo!—Se
quejaba el hombre una vez fuera de todo eso, junto al chico— Taehyung,
¿Estás loco verdad? Ese príncipe te lavó el cerebro... Y como idiota te
enamoras de él.
—Sí, soy un idiota tío. Lo admito—Miraba el chico con recelo— Soy un
idiota porque te hice caso, no por amar a Jungkook. Amarlo me hizo darme
cuenta de que estaba siendo muy mentiroso con mis sentimientos y mi
actuar...
—Esas son tonterías, además...—Miró hacia la puerta donde estaba la
boda— ¿Crees que ese chico te ama a ti? Por favor, se casará con
Sanghyuk. Tú te quedarás sin nada.
—Prefiero eso, lo prefiero a seguir escuchando un minuto más esto—Se
quejaba Taehyung, mirando a la puerta —Ya pueden llevárselo.
El hombre se sorprendió al ver como Hoseok y Mark salían de pronto,
tomándolo por el brazo y poniéndole esposas. Todo porque Taehyung se
había dado cuenta de la presencia de aquellos dos, debido a su crianza en
técnica de defensa.
—Queda arrestado por intentar usurpar el trono —Habló Hoseok, para
luego dirigirse a Taehyung —Ya ve por él muchacho.
Taehyung asintió y volvió a abrir aquella puerta de madera vieja.
Nuevamente nervioso.

(...)
Jungkook al ver como salía Taehyung hecho una furia con su tío, además
de Hoseok y Mark saliendo a su vez. Miró a sus invitados y parlamento,
suspiró y se colocó en medio, listo para hablar.
—Yo... primero que nada, gracias Sanghyuk por acceder a esto—El chico
le sonrió amable—Pero creo que declino mi oferta de contraer nupcias
contigo.
Todos los presentes abrieron la boca de sorpresa. Pero Jimin, SeokJin y
Heechul celebraron a su manera aquello. Sonriendo y en el caso de los
menores, tomando la mano de sus enamorados.
—En verdad creo que debo ser franco en que quiero gobernar...—Miró
con una sonrisa al parlamento — Sino, ¿Por qué estaría en traje de novio
este día?
Las risas no se hicieron esperar, logrando que Jungkook se sintiera más
en confianza y con más determinación.
Y es que sentía su corazón a flor de piel, nervioso de que le rechazaran
en el trono y nervioso a su vez por Taehyung. Ya que estaba durando afuera,
al igual que Hoseok y Mark. Deseaba que a nadie le pasara algo malo ese
día, pues quería felicidad lara todos.
—Yo sé que seré un buen rey, tengo visión y me gusta ayudar a que todo
esté en orden—Miraba a Heechul con una sonrisa— También les pido al
parlamento, me consideren para rey.
—Voy a hablar ahora —Escucharon a Heechul— Sé bien que esa ley
existe hace muchos años. La implementaron conmigo y casi con mi hijo, sin
embargo, creo que sería un error muy grande que fuera aun vigente.
El presidente del parlamento analizaba las palabras de ambos hombres,
mientras veía como Jungkook se veía nervioso y dispuesto a cualquier cosa.
—Mi nieto les ha demostrado carácter, porte y todo lo necesario para ser
rey—Opinaba muy sincero, viendo como muchos asentían —También que
aceptó casarse sólo para que el reino tuviera un buen rey. ¿No les es esl más
motivo sincero para creer en Jungkook?
Jungkook miraba a Sanghyuk, el cual devolvía el gesto con una mirada
de apoyo y sostenía la mano de Hongbin. Miró hacia Jimin, el cual estaba
pegado al general Min Yoongi sonriente, del mismo modo SeokJin estaba
con Namjoon h su pequeño Ren.
—Sé que puede gobernar. —Hablaba Heechul— Sólo dejen que les
demuestre y anule la ley.
—Bien, creo que más de uno en el parlamento nos dimos cuenta de que
en efecto Jungkook está más que listo para gobernar aquí —Musitaba el
anciano— Así que, aprobamos la petición de que gobierne y anularemos la
ley. Ya que en verdad a demostrado ese cariño por el pueblo.
Todos sonrieron alegres, Jungkook no cabía en la felicidad. Aunque le
faltaba algo...
Miró hacia la puerta con nerviosismo, viendo como esta se abría
lentamente y un rubio entraba sin hacer ruido. Devolviendo la mirada al
menor.

(...)

Taehyung abrió la puerta cuando los aplausos se hacían muy fuertes,


viendo una sonrisa en el rostro de Jungkook. Se acercó nuevamente y vio
como las miradas se posaban en él y Jungkook, haciéndole sentir nervioso.
Caminó lentamente, con el corazón palpitante y con un ardor en este que
le hacía sentirse agobiado. Seguía con su mirada posada en Jungkook, luego
le vio sin su futuro esposo.
Miro a todos lados, encontrando a Sanghyuk con otro chico y a Jungkook
fuera del altar. Se acercó justo a tiempo, para escuchar al menor hablando
muy alto.
—Y para no desperdiciar esto de la boda—Miró a Jimin y SeokJin—
Case por favor a estos cuatro chicos. Se merecen esta celebración...
—Jungkook... Pero tú... —Jimin estaba sonrojado— ¿Qué dices? A penas
conozco a Yoongi...
—Yo no le veo problemas a eso, Jimin. —Musitaba el general con una
sonrisa de suficiencia— Yo sí quiero hacerlo, ¿Qué tú no?
Jimin miró a Jungkook un momento, viendo como este sonreía y asentía
emocionado. Luego, posó su mirada en la de Min Yoongi, perdiéndose en
sus ojos y sintiendo su corazón cálido.
Analizó un poco las cosas, viendo como hasta Heechul asentía sonriente
ante la idea. Se giró a Yoongi y sonrió.
—Sabe de antemano mi general que quiero hacerlo— Sonreía
emocionado, tomando la mano de Yoongi— Vamos a cometer esta locura
Yoongi, vamos a casarnos.
El general Min asintió y se colocó con Jimin cerca del altar, viendo ahora
a SeokJin y Namjoon verse con nerviosismo y al pequeño Ren. Aquel
pequeño estaba muy indiferente a lo que estaba pasando, ya que jugaba con
una flor que se le fue entregada por Namjoon.
SeokJin miró a Namjoon y luego a Jungkook. Estaba muy nervioso y a la
vez emocionado, pero no iba a hacer las cosas por impulso.
—Namjoon, yo tengo que cuidar a mi hermano —Musitó serio, ya que
sabía que debía ser sincero— Y sé que será incómodo para ti saber que si
esto pasa... vivirás con una "Familia" donde ni siquiera sé si podrás tolerar.
Yo debo ver por mi pequeño Ren antes que por mí.
—Por favor, creo que es obvio que adoro a Ren— Objetaba Namjoon
mirando al pequeño sonriente— Y quiero intentar tener todo contigo desde
este presente hasta el futuro lejano...
SeokJin miró a Namjoon con la boca abierta.
—¡Sólo cásense y ya!— Escucharon la voz de Jackson— Todos sabemos
que lo quieren hacer.
SeokJin y todos rieron antes aquello, para luego ver como el mayor
asentía a Namjoon con una sonrisa. Logrando que todos aplaudieran y que
Jungkook sonriera por aquello.
Jungkook de pronto, sintió un toque muy gentil en su cintura, que le hizo
girar de ver a los futuros esposos. Se encontró con Taehyung, quien le
miraba con adoración y nerviosismo.
—Jungkook... Yo te dije que te amo y...—Lamió sus labios— Me
pregunto ahora si tu haces lo mismo.
El menor lo miró con una sonrisa, tomándole de la mano y
ruborizándose. Aquel día fue de los más felices en la vida del castaño.

Hola milkis
¿Les gustó el final? Espero que lo hiciera y no se preocupen. Habrá
epílogo.
Lo subiré rápido y espero sea de su gusto.
Besitos~♥
Epílogo

El día de la coronación llegó, Heechul sonreía mientras veía como las cosas
empezaban a ser colocadas en su lugar para el evento. Las flores más
hermosas y cuidadas, hechas adornos enormes, eran colocadas
estratégicamente en toda la sala, creando un ambiente tipo bosque mágico y
a la vez, no perdía ese toque de elegancia que distinguía a las familias
reales.
El ambiente era muy tranquilo, incluso el pequeño Ren ahora jugaba con
un par de cosas que le había regalado Heechul, junto a un sonriente Jimin.
—Deberíamos servir canapés de camarón—Hablaba SeokJin— Son
deliciosos y a todos los presentes les gustan.
—Lo sé, pero al príncipe le gustan también las cosas dulces.
—No sólo a él Yugyeom—Objetaba Mark—Pero, los canapés serán,
igual que tarta de chocolate.
SeokJin estaba junto a Mark y Yugyeom planificando algunas cosas para
el banquete y fiesta posterior al evento. Hoseok, BamBam, Jackson y
Yoongi estaban en la planificación de la seguridad del lugar, ya que después
de todo era algo indispensable a pesar de que era un reino muy tranquilo.
Todo parecía ir en perfecto orden, todo estaba en su lugar y eso para
Heechul era magnifico.
—Su alteza, ¿Dónde está mi amigo Jungkook? —Escuchó a Jimin de
pronto— No lo he visto...
—Ahora que lo mencionas, supongo que está arriba—Señalaba el
hombre— En la habitación que era de sus padres, que ahora es suya.
Jimin asintió, cargó al pequeño Ren y se lo llevó al patio para jugar. Ya
dejaría a su amigo tener su espacio en esos momentos, ya que después de
todo ese día debía ser algo especial y el menor debía estar concentrado.
Lejos de todo ese ajetreo, se encontraba Jungkook en el lugar de
audiencias reales. Miraba con curiosidad desde el trono los cuadros a su
alrededor, sin evitar una sonrisa emocionada y de total felicidad. Pero de
pronto, una presencia ajena le hizo mirar hacia la entrada.
—Taehyung...
—Futuro rey Jungkook—Sonreía el chico acercándose— Me preguntaba
si tenía oportunidad de una audiencia con usted.
—Esta... ¿La solicita ahora? —Miraba con una sonrisa traviesa—
¿Quiere ahora está?
—Sí, necesito una audiencia—Sonreía frente al chico— ¿Podría
atenderme su majestad?
Jungkook rodó los ojos con una risilla alegre, levantándose firme y
mirando travieso a Taehyung.
—Muy bien, ex-conde Kim—Musitaba frente al chico— Le escucho.
—Oh, pero no vine precisamente a hablar—Sonreía feliz— Vengo a darle
un regalo su majestad.
— ¿Ah sí? ¿De qué se trata?
Taehyung lo tomó de la cintura con una mano, con la otra la subió hasta
la mejilla izquierda de Jungkook acariciado suavemente esta. Jungkook
miró con un brillo de emoción en sus ojos, mientras las distancias se
acortaban y unían sus labios en un beso suave.
Aquel gesto derritió algo en el corazón de ambos, luego de unos mimos
más y de sonrisas entre besos, se separaron lento. Ambos se miraron y
sonrieron.
—Me alegra mucho que te coronen hoy.
—Muchas gracias TaeTae—Sonreía el menor alegre— En verdad me
haces feliz.
—A mí también me haces muy feliz— Miraba al chico y sonreía— Mi
lindo esposo.
Porque sí, ese día de la boda fracasada, Jungkook terminó casándose.
Aunque no precisamente con Sanghyuk.
(...)

El menor lo miró con una sonrisa, tomándole de la mano y


ruborizándose. Taehyung le miró expectante, sin entender aún que pasaba.
—Yo también lo hago Conde Kim—Musitó sorprendiendo al mayor—
También te amo.
Taehyung no cabía en la felicidad que recibió en su corazón al escuchar a
Jungkook musitar aquellas palabras. Se acercó y miró a Jungkook a los
ojos, luego a todos los presentes.
—Jungkook, sé que es pronto—Se lamió ligeramente los labios— Pero
ya que están todos, un cura, un banquete y ambos de traje... ¿Te casarías
conmigo cariño?
—Creo que...—Miraba a sus amigos y a los presentes— Esta boda pasó a
ser triple.
Todos abrieron la boca, sorprendidos de que aceptara y de ese modo.
Ambos jóvenes se acercaron al altar, al lado de sus amigos y sonrieron
prestando atención a la nueva e improvisada boda triple.
—Park Jimin, ¿Acepta usted a Yoongi entonces como marido...?
—Sí, sí quiero—Gritoneaba el chico emocionado.
—Min Yoongi, ¿Usted igual acepta...?
—No estaría aquí sino— Sonrió ladino el general.
Jungkook soltó una sonrisa divertida ante aquella pareja tan peculiar, se
le hacían divertidos.
—SeokJin, ¿Acepta entonces usted a Kim Namjoon como esposo?
—Yo claro que lo hago—Miró a Namjoon— Acepto a Namjoon como mí
esposo.
—Usted Namjoon, ¿Acepta a Kim SeokJin como su esposo?
—Sí, quiero.
De pronto escucharon un llanto venir de los invitados, giraron sus
cabezas y vieron a Jackson llorar en el hombro de Mark emocionado. Pues
a pesar de ser rudo, el chico amaba las bodas. Jungkook empezó a reír con
diversión ante aquel panorama y luego prestó atención a la parte en la que
iban ellos.
—Conde Kim Taehyung, ¿Acepta usted a su majestad Jeon Jungkook...
—El mayor relamió sus labios mirando con atención— Como marido para
amarlo y respetarle?
—Sí, acepto a su majestad.
—Y usted su alteza, ¿Acepta al conde Taehyung como marido?
—Yo...—Sonrió y miró emocionado a Taehyung— Claro que acepto a
TaeTae.
Ambos chicos se miraron con una sonrisa de adoración, perdiéndose en
su mundo. Hasta que las palabras que quisieron escuchar siempre resonaron
en el lugar.
—Por el poder que me concede la corte—Musitaba el hombre— Los
declaro a todos casados. Pueden ya besarse.
Jungkook se lanzó a los brazos de Taehyung, siendo él quien robara el
beso esta vez al mayor. Jimin y Yoongi se besaron con emoción y hambre,
mientras que SeokJin y Namjoon eran más tímidos en aquel gesto.
Pero sin duda alguna, aquel día fue el más feliz en la vida de Jungkook.

(...)
Las trompetas se hicieron sonar, callando a los invitados. Jimin estaba al
lado de Yoongi sonriente, SeokJin estaba cargando a Ren y recargado en el
pecho de Namjoon. Mark, BamBam y Jackson estaban en un costado
mirando emocionados el evento, Yugyeom, Hoseok y Taehyung miraban
con una sonrisa las escaleras.
Heechul salió de estas primero, con la corona imperial y una sonrisa
enorme, bajando las escaleras y luciendo su capa roja en el proceso. Una
vez abajo, el hombre se colocó a un lado del trono real, esperando a
Jungkook.
—Su alteza real, Jeon Jungkook—Escucharon de pronto.
Taehyung sonrió al escuchar el nombre de su esposo, mirando las
escaleras con emoción. Jimin, Jackson y los demás, miraban con una
sonrisa aquella escena, se notaba el amor de ambos en se tipo de gestos.
Jungkook salió de la puerta, luciendo un traje de rey y una capa rojo un
tanto más pequeña que la de Heechul. Sonrió a los invitados y con
diplomacia y elegancia, caminó hasta las escaleras. Bajando de estas con
tranquilidad y emoción muy evidente en su rostro.
Ya en la parte de abajo, avanzó hasta el trono real y tomó asiento. Miró a
Taehyung y sonrió ligeramente, viendo como su esposo le devolvía el gesto
y enviaba su apoyo a través de la mirada.
—Hoy estamos presentes para la venida de un nuevo rey—Habló
Heechul— Jeon Jungkook, Jura ante el reino y la corono gobernar con
maestría, diplomacia y con su corazón.
—Juro gobernar como lo hicieron mis antepasados— Recitaba con
seriedad— Juro hacer próspero y mejor el reino, gobernando y tomando las
decisiones que sean necesarias y correctas.
El rey se puso frente a Jungkook, sacándose la corona y sonriendo al
chico. Se la colocó con tranquilidad en la cabeza, para luego darle un cetro
y un mundo pequeño bañados en oro.
—Por el poder que me concede como Rey—Aclamaba Heechul—
Proclamo hoy, a Jeon Jungkook de Hanyang. Como rey legitimo del bello
reino de Hanyang.
Se hizo a un lado, dejando a Jungkook con aquellos artefactos y una
sonrisa alegre. La música clásica resonó en el lugar, para luego dar paso a
aplausos de felicidad y regocijo. Jungkook sonrió y se acercó a Taehyung
sonriente.
—Mi bello rey, ¡Soy un hombre muy afortunado! —Musitó emocionado
— Felicidades amor mío.
—Muchas gracias, Rey consorte—Sonreía el chico— Me haces muy
feliz Taehyung.
El chico besó castamente a Jungkook, para luego dar una reverencia y
sonreírle.
— ¿Me permite esta pieza de baile?
—No me lo perdería por nada—Sonreía tomando la mano de su marido
— Vamos a bailar Taehyung.
Jungkook asintió y Taehyung pasó una mano por la cintura del chico y
con la otra guiaba a Jungkook en un elegante baile. Jimin y Heechul
miraban la escena emocionados, aquellos dos se veían jodidamente bien
juntos.
De pronto ambos jóvenes se recordaron en una escena similar, pero en
aquella ocasión discutiendo como críos.
"—En verdad te agradezco Conde Taehyung—Hablaba sincero el chico.
—No es nada príncipe Jeon, era obligación mía hacerlo—Le daba una
vuelta al chico— Aunque me pisaras.
—Oh lamento eso, en verdad—Sonreía agradecido— Me alegro que mi
torpeza no altere su destreza.
—Claro, puedes pisarme cuando quieras—Ironizaba."
Ambos chicos rieron al recordar aquello y Jungkook se pegó más al
cuerpo de Taehyung.
—Entonces... ¿Puedo pisarte ahora? —Reía sonriente.
—Su majestad, usted puede pisarme cuando quiera—Reía el mayor—
También podemos hacer algo mejor que pisarnos al bailar.
—Y, ¿Qué propone Taehyung?
—Propongo esto—Musitó besándole.
Y ambos entendieron de pronto que todo eso que pasaron, desde su
primer encuentro hasta su pasado. Había sido para unirles. Que a pesar de
sus bobas peleas de un inicio, ambos estaban ahora más unidos que nunca.
En una relación que era muy divertida y única.
Además que tenían toda una vida juntos ahora.
Fin.

Hola milkis
¿Les gustó mi adaptación?
Mil gracias por leer esta historia y acompañarme en mis locuras. Me
emociona y entristece haber terminado esto.
Mil gracias y espero me acompañen en mis nuevas adaptaciones e
historias, que les traigo con todo gusto.
Mil besos~♥
Especial 1

Las fiestas en el enrome palacio siempre se le habían hecho al pequeño


JungKook muy aburridas, a sus cortos diez años, no entendía muy bien el
motivo de que fueran llenas de gala y con muchas etiquetas que debía
seguir. Pero lo que más le enfadaba o lo que más discutía con Heechul, era
el hecho de que debía aprender a comer con más de diez cubiertos
diferentes.
¿No era más sencillo con solo tres principales?
Había muchas cosas que a su corta edad aun no entendía, sin embargo...
le agradaban los regalos que por ejemplo en su cumpleaños le obsequiaban
y el convivir con su abuelo un poco más de lo que lo hacía normalmente.
—JungKook—hablando de su amado abuelo, el menor sonrió y le encaró
—. Ven a saludar a los invitados de hoy.
—Ya voy, un momento por favor.
Acomodó su traje, para después, con una imitación a la forma de caminar
del rey Heechul, avanzar hacia los invitados que le estaban esperando.
Mientras una sonrisa que sabía que a su abuelo le gustaba que diera a todos,
se dibujaba en su rostro.
Miró primero al rey Heechul, para después darse la vuelta y encarar a los
recién llegados. Sorprendiéndose cuando, un chico de quizá un par de años
más grande estaba frente a él con una sonrisa que podía iluminar toda la
habitación.
—JungKook, él es el conde Kim TaeHyung—Presentaba Heechul con
tranquilidad— TaeHyung, él es mi nieto, el príncipe JungKook.
Ambos se miraron con una sonrisa, mientras se tomaban de la mano. Un
sonrojo decoró las mejillas de ambos, causando que el rey les mirara con
curiosidad.
—Bueno, JungKook...—Llamó el mayor con autoridad, haciendo que
ambos chicos soltaran sus manos— ¿Por qué no llevas a jugar al conde a
los videojuegos mientras los adultos hablamos?
—Yo... abuelo creo que...—Miró con un sonrojo al mayor, quien asentía
levemente—Sí, lo llevaré entonces. ¿Vienes conde?
—Sí, ya lo creo—Sonreía mientras se apartaban de los mayores—
Gracias por la invitación a jugar, no me gustan mucho esas reuniones.
JungKook se sorprendió por aquello, mientras se sentía con más cosas en
común con el chico. Ambos pronto se la pasaron jugando un poco con los
juegos favoritos del pequeño príncipe, llevándose muy bien y notando que
les gustaban muchas cosas en común.
Aunque eso no duró para siempre como ambos les hubiera gustado que
pasara, ya que el mayor tuvo que irse del palacio. Con la promesa de volver
a reunirse pronto y seguir con la pequeña amistad que ambos habían
construido en ese corto lapso de tiempo.
Pero no sucedió así.
Luego de eso no supo de aquel niño en un buen periodo de tiempo, cinco
años para ser precisos.
Y era de nuevo en un evento como el que recordaba de niño, mientras
comía algo de manera aburrida y veía a todas esas personas pomposas
jactarse con una copa de champaña, que le vio de nueva cuenta.
Ahora se veía diferente, ya no había rastros del niño que había sido su
amigo de una tarde. Parecía que la adolescencia le había pegado para dejar
a un joven adulto atractivo, quien estaba con un señor que el chico no había
visto en las reuniones de su abuelo.
Sintió su corazón acelerándose, mientras el chico que no recordaba su
nombre, pero si esos brillantes ojos, se acercaba a él con paso lento. Hasta
quedar de frente, con su presencia y su atractivo hechizantes.
—Príncipe Jeon—Escuchó su voz grave, mucho más que lo que podía
imaginar—Feliz cumpleaños.
—Muchas gracias—Musitó en un modo más similar a un susurro—
Cuánto tiempo sin vernos...
Vio como el gesto del muchacho no cambiaba al verse reconocido, sin
embargo, una sonrisa ladina adornó sus labios y asintió.
—Mucho tiempo, aunque debo decir que le sentó bien la edad—
Murmuró mientras hacía una pequeña reverencia al menor de ambos—
Bueno, debo irme ya que me han tomado con anterioridad sobre mis
estudios.
—Oh, es una desgracia—Torció el gesto, mientras sentía su corazón
latiendo rápido ante la idea loca que cruzaba por su mente—Por otra parte,
podemos quedar para... ya sabe... hablar.
—Bueno, es su cumpleaños—Miró a su tío de soslayo, soltando un
suspiro—Supongo que unos minutos más no me vendrán mal ni a usted, mi
príncipe.
Ambos jóvenes se fueron al balcón donde JungKook solía tomar aire
cuando se sentía abrumado de todo lo elegante de las fiestas, mientras el
frío del exterior les daba en el rostro. Se encaminaron hasta donde estaban
las flores del rey Heechul y se quedaron allí, de pie mirándose sin decir
nada.
—Yo...—Empezaba el conde mientras apretaba el dobladillo de su traje
— Lamento no haber venido más, pero pasé por muchas cosas.
—No te preocupes—Sonreía nervioso JungKook, sintiendo el latir de su
corazón—Aunque me alegra mucho verte y saber que estás bien.
TaeHyung iba a decir algo más, cuando miró hacia la fiesta y notó a su
tío buscándolo. Suspiró y cambió a su semblante serio de nuevo,
acercándose al menor hasta estar a pocos centímetros de su rostro.
—Feliz cumpleaños—Besó la mejilla del príncipe mientras se marchaba
—Tómalo como algo que no debe pasar.
JungKook no había entendido aquello bien, pero su corazón se había
acelerado y sentía su cara roja por el acto de aquel chico. ¿Eso era lo que se
consideraba un primer amor?
Si era así, quizá desde antes se hubiera enamorado del chico que acababa
de marcharse.
Especial 2

Había pasado tan solo un mes desde que Jeon JungKook había sido
nombrado Rey de Hanyang, las cosas habían ido a mejor para el palacio a
pesar del inicial desconfío que hubo hacia el nuevo gobernante. El nuevo
monarca junto a su pareja el rey consorte, Kim TaeHyung, eran dos
monarcas con una visión al futuro que todos habían admirado.
Ambos eran encargados del nuevo orfanato que, rápidamente se le habían
juntados los fondos para la realización. Recordando cómo es que con un
simple desfile, TaeHyung había caído más enamorado del príncipe.
Y el castaño recordaba ese día, pero no por el hecho de su propio marido.
Sino el recordar las caritas dulces de los niños del orfanato, además de un
lindo bebé recién nacido y uno de quizá dos años que le habían robado el
corazón. Esos rostros los vería en poco y eran como una debilidad a su
latente corazón.
—JungKook, ¿Quieres pasar a mirar el nuevo orfanato? —Escuchó el
castaño la voz de su marido, girándose para asentir algo despistado— ¿Pasa
algo cariño que te esté molestando?
—No, simplemente...—JungKook sonrió a su esposo, para tomarle de la
mano y darle un pequeño beso en los labios—Estoy pensando en las cosas
que faltan para aquel nuevo orfanato.
—Está bien entonces, pero...—Sonrió ladino, mirando a todas partes y
notando que ambos estaban solos. Se acercó al menor y le tomó de la
cintura, logrando sonrojar a JungKook— ¿No te parece que deberíamos
aprovechar un poco de tiempo?
—No sé en qué...—Salió más como afirmación, acompañada de un
pequeño gemido de sorpresa al sentir la mano de TaeHyung por sus glúteos
—T-TaeHyung... No hagas eso...
—Anoche no decías eso cariño—Besó cerca del cuello del menor, para
después soltar una risa un tanto cómica y alejarse del menor. Acarició la
mejilla de JungKook y le tomó de la mano—Descuida, sé que debemos ir a
ver a los pequeños. Entonces vamos amor, debemos partir ahora ya que al
parecer esos pequeños quieren ver al rey... estoy celoso.
JungKook sonrió con diversión, soltando una risa un tanto silenciosa.
Negando, avanzó a la par de su esposo; marchándose ambos finalmente al
nuevo orfanato.
Minutos después de llegar, notaron el recibimiento animado y
emocionado de los infantes de ese lugar. Ambos sonrieron mientras que, en
sus mentes sin saber que el contrario pensaba lo mismo, la idea de tener
hijos y una familia al fin era una vista muy buena para el futuro.
La pareja se miró entre sí con aquel pensamiento, para después bajar la
vista avergonzados de decir aquel deseo al contrario. TaeHyung miró a su
chico y sonrió con ternura ante la idea de ver a JungKook con dos
pequeños, obviamente no de ambos ya que no podían procrear, pero sí con
dos niños que les dieran amor como si de su sangre se tratara.
JungKook miraba a sus manos, pensando en la manera de decirle a
TaeHyung sobre los dos pequeños que, desde aquel desfile habían robado su
corazón. Pero la duda de si su marido quisiera del mismo modo una familia,
era la que le impedía decir aquello con gran confianza como todo lo que les
pasaba se platicaban.
El sonido de la puerta del automóvil les hizo salir de sus cavilaciones,
para ver cómo les abrían las puertas y ambos salían con calma de este.
Siendo recibidos por una hilera de infantes emocionados ante la presencia
de ambos hombres.
— ¡Hola nuestros reyes! —Saludaron a la par los niños.
Los dos sonrieron e hicieron ademán con las manos, para después
acercarse al encargado del orfanato, quien cargaba al pequeño bebé que
había robado el corazón de JungKook. El menor de la pareja real, se acercó
de inmediatamente a donde estaba el bebé, mirando con algo de vergüenza
al encargado.
— ¿Puedo tomarlo? —Indagó con curiosidad, mientras recibía un
asentimiento un tanto sorpresivo del encargado— ¡Muchas gracias!
TaeHyung miró la emoción en el rostro de su Rey, para después pensar en
que, quizá el menor no era indiferente ante la idea de tener familia. Además
de que al parecer, ese pequeño bebé era quien había robado su corazón. Se
acercó a su marido, para mirar al bebé que este cargaba, luego a la belleza
de su marido al tener los ojos iluminados por el infante.
Sonrió y acarició al bebé con ternura, mientras el bebé permanecía
dormido. Entonces la misma cosa que había enganchado a JungKook, lo
hizo con TaeHyung. Aquel bebé con ojitos cerrados, piel con un tono un
tanto rosado, el olor a talco y a bebé, llenó sus pulmones. En aquel
momento, cuando iba a decir algo más, sintió un jalón en sus pantalones.
Bajó la mirada con sorpresa, notando como un pequeño niño le miraba
con ojos esperanzados. Eso robó su corazón demasiado, quedándose viendo
en aquellos ojos brillantes.
—Oh no, eso no se hace—escuchó de pronto al encargado del orfanato,
quien trató de acercarse al infante—Lo siento mucho su majestad...
—Oh, no lo quites de mí—Ordenó para agacharse, acariciando al
pequeño infante de sus cabellos y extendiendo sus manos, para que el niño
se lanzara a sus brazos con alegría—Bueno, ya que estamos... ¿Cómo van
las instalaciones hasta ahora?
—Va muy bien su majestad, en verdad son muy amplias las habitaciones
—Sonreía el hombre con emoción y alegría—Esto es un milagro enorme
para todos. Estaba con algo de temor hace unos meses ya que eran muchos
niños, pero ahora... hay mucho espacio.
—Quiero adoptarlos—Musitó JungKook de pronto, haciendo que ambos
hombres le miraran con curiosidad ante lo repentino que era eso—Al bebé
en brazos de TaeHyung y a este... quiero adoptarlos. Bueno, si Taehyung
está de acuerdo.
El mayor sonrió con alegría, asintiendo ante ello y después mirando al
encargado con algo de preocupación.
—Espero se puedan adoptar—TaeHyung lanzó un beso en la mejilla del
niño que cargaba—Sería un honor que nos lo permita. Y sobre nuestra
ayuda mensual, les llegará la de estos dos niños también, de eso no se
preocupe.
—Yo... muchas gracias sus majestades—Sonreía el hombre con alegría,
mientras avanzaba con ambos monarcas hasta la oficina de adopciones—Y
se puede, ya que ustedes tienen el sustento económico, están casados y
bueno... son los reyes de Hanyang.
Los chicos sonrieron, mientras leían las cláusulas de los papeles de
adopción. Firmaron con el sello real que hacía oficiales sus documentos,
para después entregar un cheque con una cantidad mensual para ropa y
comida de los infantes del lugar. El rey JungKook y el rey consorte
TaeHyung, sonrieron con alegría al ver los papeles de adopción realizados
en un día.
Los dos niños estaban dormidos, mientras se terminaban las formalidades
correspondientes.
Sabían bien que esos trámites eran de meses o años, pero era una ventaja
al parecer ser de la realeza. Ambos monarcas se retiraron con los infantes
en brazos, despidiéndose de los demás pequeños y ordenando a HoSeok que
repartiera los juguetes y dulces que habían preparado para ellos.
—No sabía que querías ser padre—Se burló ligeramente TaeHyung, para
observar un sonrojo del menor en sus mejillas—Pero me alegra, yo también
quería pero no sabía cómo decirte.
—Ni yo que tú también quisieras—Musitaba mientras tocaba la nariz de
su ahora hijo, mientras sonreía con alegría ante lo que había pasado—Había
pensado en adoptar a ambos desde que pasó lo del evento del desfile, pero
no pude hacerlo. Aunque ahora mismo...
—Lo sé, yo también aquel día me sentía aún más cautivado contigo por
los niños—Admitió mientras el menor le veía con sorpresa, a su vez que el
mayor acariciaba su rodilla con su mano libre—Y ahora mismo, creo que en
verdad inicia nuestro cuento de hadas.
—Yo creo que inició desde que nos vimos la primera vez—Sonreía el
menor con alegría—Y aun no es ni cerca el final feliz, ya que el final de una
historia, en verdad es la continuación de toda una vida.
—En eso concuerdo contigo—TaeHyung suspiró ante lo bendecido que
se sentía el estar ahora con su familia—Y en verdad que mi querido
príncipe fue la mejor elección del mundo.
—Lo mismo digo, conde TaeHyung.
Y ahora con una nueva familia, la felicidad era infinita en ambos.

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