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Ignorantia iuris non excusat

(del latín 'la ignorancia del derecho no excusa') o ignorantia iuris neminem
excusat (del latín 'la ignorancia del derecho no excusa a nadie') es un principio
de derecho que indica que el desconocimiento o ignorancia de la ley no sirve de
excusa, porque rige la necesaria presunción o ficción jurídica de que, habiendo
sido promulgada, han de saberla todos. (promulgación y publicación). Los países
de derecho europeo con una tradición del derecho romano también pueden usar
una expresión de Aristóteles traducida al latín: ignorantia iuris nocet ('La
ignorancia del derecho perjudica').
En cuanto a la ignorancia del derecho subjetivo y propio admitieron
los romanos ciertos casos en que producía determinados efectos. Los autores
suelen distinguir la ignorancia del error de derecho diciendo que la primera es falta
total de conocimiento del derecho y el segundo un conocimiento falso e
incompleto; pero la distinción carece de trascendencia en la práctica.

TUTOR REM PUPILLI EMERE NON POTEST


El tutor no puede comprar una cosa del pupilo

CUI EST COMMODUM DEBET ESSE ETIAM INCOMMODUM

Quien está para el beneficio debe estarlo para el perjuicio

Prior in tempore, potior in iure

Es una expresión latina, que puede traducirse como "Primero en el tiempo, mejor
en el Derecho", que hace referencia a un principio de Derecho, en virtud del cual,
en el caso de existir controversia entre partes que alegan iguales derechos sobre
una cosa (ejemplo: una hipoteca a su favor

ius publicum privatorum pactis mutari non potest

Gral. 'El derecho público no puede ser alterado por pacto de particulares'
(Papiniano: Digesto 2, 14, 38).

La autonomía de la voluntad tiene su sede en el derecho privado sin capacidad


para alterar el denominado ius cogens (derecho necesario).
quod nullum est, nullum producit effectum

Gral. 'Lo que es nulo no produce ningún efecto'.

En el ámbito civil es la regla general de ineficacia de los contratos pues «exige


destruir sus consecuencias y borrar sus huellas como si no hubiesen existido y
evitar así que de las mismas se deriven efectos, de acuerdo con la regla
clásica quod nullum est, nullum producit effectum ('lo que es nulo no produce
ningún efecto')» (STS, 1.ª, 25-III-2015, rec. 138/2014). En el ámbito contencioso-
administrativo, la regla solo alcanza a la nulidad radical o de pleno derecho, cuya
declaración conlleva la pérdida de eficacia ex tunc. Sin embargo, no se aplica a la
mera anulabilidad, susceptible de convalidación, pues si se subsanasen los
defectos cobraría eficacia ex nunc: «los vicios de nulidad absoluta son
insubsanables, conforme al principio recogido en las máximas quod nullum est,
nullum producit effectum» (STS, 27-XI-1999, rec. 7668/1995). La nulidad de una
disposición administrativa provoca que los actos administrativos no firmes dictados
a su amparo, con anterioridad a la declaración de nulidad, que tengan por objeto
su ejecución, queden invalidados conforme impone este principio: «Nada cabe
objetar, sin embargo, al carácter genérico de la nulidad así dispuesta por la Sala
de instancia para los actos de ejecución de la resolución recurrida, lo que por otro
lado es consecuencia natural e inevitable de la declaración de nulidad de esta
última quod nullum est, nullum producit effectum» (STS, 1.ª, 7-XI-2014, rec.
2896/2012). Este criterio general afecta también a algunas instituciones concretas
como, por ejemplo, al efecto de interrupción de la prescripción derivado de la
actuación administrativa, que, en aplicación del principio, se considera supeditado
a la validez de esta (STS, 3.ª, 29-IX-2004, rec. 273/2003).

nemo enim invitus compellitur ad communionem

Gral. 'Nadie puede ser forzado a mantenerse en situación de copropiedad'


(Ulpiano: Digesto 12, 6, 26, 4).

La jurisprudencia sintetiza en esta máxima la causa legal de la facultad


imprescriptible de disolución del condominio: «la idea que se mantiene desde el
principio es que nadie puede ser forzado a mantenerse en situación de
copropiedad (nemo invitus compellitur ad conmmunionem), que no es sino un
estado transitorio mirado con disfavor por el ordenamiento (communio est mater
discordiarum)» (STS, 1.ª, 21-X-2014, rec. 2501/2012).

Se damnat iudex qui innocentem opprimit.

El juez que condena a un inocente se daña a sí mismo.


Lex posterior derogat priori.

La ley posterior deroga la anterior

Ius sanguinis.

Derecho de sangre. Principio jurídico para atribuir la nacionalidad a una persona teniendo como
criterio la de los padres con independencia del lugar del nacimiento. Es válida la expresión jus
sanguinis (latín tardío). Ejemplo: “En algunos países europeos aunque una persona nazca en el
territorio de los mismo, a los efectos de su nacionalidad priva el ius sanguinis”. En Venezuela la
nacionalidad se otorga tanto en virtud del ius soli como del ius sanguinis. Ejemplo de uso por la
Sala Constitucional: “De allí que, en el Texto Fundamental los criterios atributivos de la
nacionalidad, los constituyen: 1.- la nacionalidad originaria por haber nacido en el territorio de la
República (ius soli), o por filiación, referida a los hijos de padre y madre venezolanos por
nacimiento nacidos en el extranjero, y los hijos de padre o madre venezolano por nacimiento
nacidos en el extranjero (ius sanguinis) —artículo 32 de la Constitución de la República Bolivariana
de Venezuela—, y 2.- la nacionalidad derivada, referida a la nacionalidad venezolana por
naturalización para extranjeros —artículo 33 eiusdem—“

Quid pro quo.

Algo por algo. Cosa recibida en compensación por otra. Ejemplo: “Al final llegaron a un acuerdo
de quid pro quo para terminar el pleito”. De acuerdo con la RAE, el plural es igual al singular (los
quid pro quo).

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