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Catedrático:

Abog. Kraysis Diaz

Alumno:

Valery Ruvio Inestroza

Cuenta:

3220098

Tema:

Teoría del acto de lo Contencioso Administrativo

Fecha:

23 de marzo de 2024
Objetivo general

• Comprender clara y detallada del recurso contencioso administrativo,


explicando su naturaleza, usos y procedimientos.

Objetivos específicos

• Definir el concepto del recurso contencioso administrativo, detallando


su naturaleza legal y su función como herramienta de reclamación frente a
actos de la Administración Pública.

• Definir las circunstancias específicas en las que se utiliza el recurso


contencioso administrativo, destacando los conflictos que pueden surgir
entre ciudadanos y entidades administrativas.
Introducción

La Teoría del Acto de lo Contencioso Administrativo es un concepto fundamental en el


ámbito del Derecho Administrativo que aborda la naturaleza, características y
consecuencias de los actos administrativos sujetos a control jurisdiccional. Este
enfoque teórico surge de la necesidad de establecer un marco legal y doctrinal que
regule las relaciones entre la Administración Pública y los ciudadanos, así como
garantice la legalidad y la justicia en la actuación de los órganos administrativos.

En esencia, la Teoría del Acto de lo Contencioso Administrativo se centra en analizar los


elementos esenciales de los actos administrativos, tales como su validez, eficacia,
legitimidad y los derechos y obligaciones que generan para las partes involucradas.
Además, esta teoría se ocupa de examinar los mecanismos de control jurisdiccional que
permiten revisar la legalidad y corrección de dichos actos, asegurando el respeto a los
derechos de los administrados y la sujeción de la Administración al ordenamiento
jurídico.

La Teoría del Acto de lo Contencioso Administrativo constituye un pilar fundamental para


la garantía del Estado de Derecho y la protección de los derechos de los ciudadanos
frente a la actuación de la Administración Pública, contribuyendo a asegurar la
legalidad, la justicia y la equidad en las relaciones entre los poderes públicos y los
administrados.
Recurso contencioso administrativo

El recurso contencioso-administrativo es un medio jurídico mediante el cual los


ciudadanos pueden impugnar los actos administrativos que consideren contrarios a sus
derechos e intereses, así como las disposiciones de carácter general dictadas por la
Administración Pública. Este recurso se utiliza como una vía de control judicial de la
legalidad de los actos administrativos, permitiendo que los tribunales competentes
revisen la conformidad de dichos actos con el ordenamiento jurídico.

Los recursos contencioso-administrativos se utilizan en situaciones donde los


administrados consideran que la Administración ha actuado en contra de sus derechos,
ya sea por exceso de poder, desviación de poder, incompetencia, o por vulneración de
normas legales o constitucionales. Al interponer este recurso, los ciudadanos solicitan a
los tribunales administrativos que revisen la legalidad y corrección de los actos
administrativos impugnados, con el fin de obtener su anulación o modificación, así
como la adopción de las medidas necesarias para restablecer sus derechos.

Este recurso se convierte en una herramienta fundamental para garantizar el principio


de legalidad y el Estado de Derecho, ya que permite controlar la actuación de la
Administración y proteger los derechos de los ciudadanos frente a posibles abusos o
arbitrariedades. Además, contribuye a fortalecer la seguridad jurídica y la confianza de
los ciudadanos en las instituciones públicas, al proporcionar un mecanismo eficaz para
la resolución de conflictos entre la Administración y los administrados.

En muchos sistemas jurídicos, el recurso contencioso-administrativo se configura como


una garantía procesal fundamental, otorgando a los ciudadanos la posibilidad de
acceder a una tutela judicial efectiva y obtener la protección de sus derechos frente a
los actos de la Administración.

El recurso contencioso administrativo es un instrumento que permite reclamaciones


ante actos de la Administración Pública o disposiciones de carácter general. Se trata de
una herramienta que se utiliza cuando se agota la vía administrativa porque la entidad
administrativa determina la imposibilidad de continuar con el procedimiento.

El recurso contencioso administrativo se interpone cuando existe un conflicto entre un


ciudadano y una Administración pública que produce perjuicio o lesiona derechos o
intereses legítimos de la persona. Este recurso legal es útil para que el tribunal emita
resoluciones que pongan fin a la situación.

La verdadera justificación de la existencia de este orden y de este procedimiento, es


velar, en beneficio de los interesados y del interés general, el sometimiento pleno de la
Administración en todas sus actuaciones al Derecho. Como es sabido, no todas las
actuaciones de la Administración se materializan en reglamentos, actos administrativos
y contratos públicos, sino que en ocasiones esta actividad se traduce en prestaciones,
inactividad u omisiones de actuaciones debidas que han de estar igualmente sometidas
a la ley.

Por ello, toda actividad de la Administración está sujeta al control de la Jurisdicción que
deberá controlar el cumplimiento de la ley

¿Cuándo se utiliza el recurso contencioso administrativo?

El recurso contencioso administrativo se presenta cuando se agotan los medios que la


Administración ofrece y no se ha tenido éxito en las reclamaciones. Los daños por los
que se interpone el recurso pueden ser ocasionados por acciones o resoluciones de la
Administración Pública o por omisión de responsabilidades. Es decir, que se puede
reclamar por perjuicios provocados por lo que la entidad de la Administración hizo o por
lo que no hizo y hubiera debido hacer.

Cualquier persona física o jurídica lo puede interponer cuando estima que es o fue
perjudicado. Los sindicatos, asociaciones, grupos, entidades de todo tipo están
habilitadas para usar este recurso. Es una herramienta de los ciudadanos para
defender sus intereses.

¿Cómo se hace para interponer un recurso contencioso administrativo?

El primer paso para interponer un recurso contencioso administrativo es presentar un


escrito en el que se exprese la solicitud. En el texto deben mencionarse los argumentos
y la información relacionada con el caso preciso.

Es fundamental especificar concretamente si se quiere recurrir una actuación, a una


resolución o a la inactividad de la Administración Pública. También es importante que en
este documento se desarrollen los argumentos que explican el perjuicio para el
demandante.

Se adjuntará un anexo en el que se incluirán los documentos que se mencionan en el


escrito y que justifican el recurso. Debe incluir el acto administrativo que se recurre y
toda la documentación que certifique que se cumplen los requisitos para este
procedimiento.

Identificación del acto impugnado: Es necesario identificar claramente el acto


administrativo que se desea impugnar. Esto incluye conocer la fecha de emisión del
acto, su contenido y las circunstancias que motivan la impugnación.
Plazo para interponer el recurso: Se debe verificar el plazo establecido por la ley para
interponer el recurso contencioso-administrativo. Este plazo suele comenzar a contar a
partir de la notificación del acto administrativo impugnado.

Elaboración de la demanda o escrito de interposición: Se debe redactar un escrito o


demanda de interposición del recurso contencioso-administrativo. En este documento,
se deben incluir los siguientes elementos:

Identificación del recurrente: Nombre, apellidos, domicilio, documento de identificación,


y en su caso, representación legal.

Identificación del acto impugnado: Descripción del acto administrativo, fecha de emisión
y órgano que lo dictó.

Fundamentos de impugnación: Se deben exponer los motivos por los cuales se


considera que el acto administrativo es contrario a derecho, ya sea por vulneración de
normas legales, desviación de poder, incompetencia, etc.

Pretensiones: Se debe indicar expresamente lo que se solicita al tribunal, como la


anulación del acto, la modificación del mismo, la suspensión de su ejecución, etc.

Documentación adjunta: Es importante adjuntar a la demanda todos los documentos


relevantes que respalden los argumentos y fundamentos expuestos.

Presentación ante el órgano judicial competente: Una vez elaborada la demanda, se


debe presentar ante el órgano judicial competente en materia contencioso-
administrativa. Esto puede ser un tribunal especializado, una sala de lo contencioso-
administrativo, un juzgado de lo contencioso-administrativo, entre otros, según la
organización judicial de cada país.

Pago de tasas o aranceles (si es necesario): En algunos países, puede ser necesario
abonar tasas judiciales o aranceles por la interposición del recurso. Es importante
verificar este requisito y realizar el pago correspondiente si es aplicable.

Seguimiento del procedimiento: Una vez presentada la demanda, se deberá seguir el


procedimiento establecido por la ley procesal de cada país. Esto incluye la notificación a
la Administración demandada, la tramitación del expediente judicial, la presentación de
alegaciones por ambas partes, la celebración de vistas o audiencias, y finalmente, la
resolución del tribunal.
Es fundamental seguir todas estas etapas con rigor y cumplir con los requisitos
formales exigidos por la ley para asegurar la admisión y viabilidad del recurso
contencioso-administrativo. En caso de dudas o dificultades, siempre es recomendable
contar con el asesoramiento de un abogado especializado en derecho administrativo.

¿Dónde se presenta el recurso contencioso administrativo?

El escrito, juntamente con su anexo documental, se presentarán ante el tribunal


especializado en lo contencioso administrativo de la localidad. Es obligatoria la
intervención de un abogado, también se puede contar con un procurador.

Asimismo, es posible presentar el recurso ante las salas de la Audiencia Nacional, de


los Tribunales Superiores de Justicia o del Tribunal Supremo. En estos casos se exige
la presencia de un abogado y de un procurador.

El Ministerio Fiscal, la Administración de la comunidad autónoma y la Administración del


Estado también son entidades ante las que se puede presentar el recurso contencioso
administrativo.

Plazos para la presentación del recurso

El damnificado dispone de 60 días a partir del día siguiente a la notificación o


publicación del acto impugnado para presentar el recurso contencioso administrativo.

La ley reconoce la figura de acto presunto, que son aquellas situaciones en que la
Administración no resuelve en el plazo legal. Se le llama “silencio administrativo”,
porque la entidad pública no responde a la inquietud presentada por la persona. En este
caso, la legislación permite al interesado acudir al tribunal mediante un recurso.

En el supuesto en que se recurra un acto presunto, el plazo disponible será hasta los 6
meses desde el día siguiente al que comenzó el silencio administrativo.

En algunos países, estos tribunales pueden tener diferentes denominaciones, como,


por ejemplo:

 Tribunal Contencioso Administrativo: En algunos sistemas jurídicos, existe un


tribunal especializado denominado Tribunal Contencioso Administrativo o
equivalente, encargado de conocer y resolver los recursos contencioso-
administrativos.

 Sala de lo Contencioso-Administrativo: En otros casos, los recursos contencioso-


administrativos son tramitados ante una Sala o Sección especializada dentro de
un tribunal superior, como es el caso de las Salas de lo Contencioso-
Administrativo en los tribunales superiores de justicia.
 Juzgado de lo Contencioso-Administrativo: En algunos países, los recursos
contencioso-administrativos se presentan ante un juzgado especializado en esta
materia, conocido como Juzgado de lo Contencioso-Administrativo.

En cuanto al procedimiento para presentar el recurso, suele establecerse un plazo


determinado a partir de la notificación del acto administrativo impugnado. Los
interesados deben presentar un escrito o demanda ante el órgano judicial competente,
en el que exponen los motivos de impugnación y solicitan la revisión del acto
administrativo. Es importante seguir los requisitos y formalidades establecidos por la ley
procesal de cada país para garantizar la admisión del recurso.

Tipos de sentencias frente a un recurso contencioso administrativo

La sentencia es la instancia final del proceso que se inicia con la interposición del
recurso. En ella se expresa la decisión del juez o del tribunal. Una vez analizado el
recurso, el juez podrá:

1. Declarar inadmisible el recurso contencioso administrativo. La ley prevé varias


causas para este resultado, incluidos los defectos en la tramitación y la presentación
fuera de plazo.

2. Estimar el recurso contencioso administrativo. En este caso, el juez entiende


procedente la reclamación y reconoce el error de la entidad pública. La sentencia
corregirá la actuación de la Administración.

3. Desestimar el recurso contencioso-administrativo. Este es el fallo natural cuando


el proceder de la Administración contra la que se recurre se ajusta a Derecho.

El proceso también se termina cuando el interesado abandona el procedimiento o


cuando la Administración demandada reconoce la razón de quien interpone el recurso.
Asimismo, puede quedar sin efecto el recurso cuando las partes llegan a un acuerdo.

El proceso de un recurso contencioso administrativo es extremadamente técnico. El


escrito inicial y la argumentación juegan un papel esencial. Es imprescindible contar con
un abogado que controle los hilos del procedimiento.

Las fases del procedimiento contencioso-administrativo son: interposición del recurso,


el emplazamiento de las partes, demanda y contestación, alegaciones previas, la
prueba, la vista y las conclusiones.
Tipos de recursos contencioso-administrativos

Es posible distinguir tres tipos de recursos contenciosos administrativos:

1. El procedimiento contencioso administrativo abreviado:

Es el procedimiento en el que la cuantía de la demanda no supera determinado valor,


en la actualidad. Asimismo, se interpone este recurso en resoluciones relacionadas con
la extranjería y cuando no se resolvió de forma favorable una solicitud de asilo político.

Para solucionar conflictos de disciplina deportiva en materia de dopaje también se


emplea el procedimiento abreviado.

Los funcionarios públicos de carrera pueden emplearlo cuando establece una demanda
que tenga relación con cuestiones de personal, respecto de la relación de servicio con
el ente público en el que trabaja.

2. El procedimiento contencioso administrativo ordinario:

Es el más frecuente. Se trata del recurso contencioso administrativo en el que no se


está conforme con un acto administrativo y se ha agotado la vía administrativa para la
reclamación.

3. El recurso administrativo para la protección de derechos fundamentales

Es un procedimiento especial. Se interpone el recurso contencioso administrativo


cuando se pide amparo judicial para proteger los derechos y libertades

Elementos y características de un acto administrativo

Los actos administrativos poseen ciertos elementos característicos y cualidades


propias:

 Tiene naturaleza cuasi-judicial y resulta directamente ejecutable.

 Debe ser objetivo y dictarse mediante un procedimiento administrativo (así se


trata de evitar la arbitrariedad en la actuación administrativa).

 Competencia: la Ley determinará en cada caso el órgano competente que


corresponda para realizar una actuación administrativa. Este órgano tendrá que cumplir
ciertos requisitos como la imparcialidad o la capacidad de obrar. De no ser así, el acto
podría ser impugnado
 Causa o finalidad del acto: el objetivo de cualquier acto administrativo es la
satisfacción del interés general respetando los principios y normas del ordenamiento
jurídico.

 Contenido: a pesar de que el acto administrativo se encuentra regulado y no


debería de contener más que los elementos esenciales o legales, en ciertas ocasiones
la Administración tiene facultad para introducir elementos accidentales o eventuales en
sus actos.

 Forma: la actuación de la Administración está sometida a ciertas formalidades, el


acto debe realizarse por escrito y en determinadas ocasiones tendrá que motivarse.

 Notificación y publicación: los actos administrativos deberán notificarse a los


interesados y, en determinadas ocasiones, tendrá que ser publicado.

Artículo 1. Por la presente Ley se regula la Jurisdicción de lo Contencioso


Administrativo encargada de conocer las pretensiones que se deduzcan en relación con
los actos, de carácter o general, de la Administración Pública sujetos al Derecho
Administrativo.

Artículo 2. Para los efectos del Artículo anterior, se entenderá por Administración
Pública:

a) El Poder Ejecutivo;

b) Las entidades estatales, entendiéndose por éstas las Municipalidades y las


Instituciones Autónomas.

Artículo 3. La Jurisdicción de lo Contencioso Administrativo conocerá también de:

a) Las cuestiones referentes al cumplimiento, interpretación, resolución, rescisión y


efectos de los contratos regulados por la Ley de Contratación del Estado que hayan
sido celebrados por cualquiera de los Poderes del Estado, por las Municipalidades y por
las Instituciones Autónomas, y todo lo relativo a los Contratos de Servicios
Profesionales o Técnicos que celebren los Poderes del Estado;

b) Las cuestiones que se susciten sobre la responsabilidad patrimonial del Estado y


de las entidades estatales;
c) La ejecución de las resoluciones que se adopten en aplicación de la Ley de la
Carrera Judicial y que tengan por objeto reintegros o el pago de indemnizaciones;

d) Lo relativo a los actos, particulares o generales, emitidos por las Entidades de


Derecho Público, tales como Colegios Profesionales y Cámaras de Comercio e
Industrias, siempre que la Ley no los sometiere a una jurisdicción especial, así como el
cumplimiento, interpretación,' resolución y efectos de los contratos celebrados por estas
entidades, cuando tuvieren por finalidad obras y servicios públicos de toda especie;

e) Las cuestiones que una Ley le atribuya especialmente.

Artículo 4. No corresponderán a la Jurisdicción de lo Contencioso Administrativo:

a) Las cuestiones de orden civil, mercantil laboral y pena ¡y aquellas otras que,
aunque relacionadas con actos de la Administración Pública, se atribuyan por una Ley a
otra jurisdicción o correspondan al Derecho Agrario; y

b) Las cuestiones que se susciten sobre los actos de relación entre los Poderes del
Estado o con motivo de las relaciones internacionales, defensa del territorio nacional y
mando y organización militar, sin perjuicio de las indemnizaciones que fueren
procedentes cuya determinación si corresponde a la Jurisdicción de lo Contencioso
Administrativo.

Artículo 5. La competencia de la Jurisdicción de lo Contencioso-Administrativo se


extenderá al conocimiento y decisión de las cuestiones prejudiciales e incidentales no
pertenecientes a la materia, directamente relacionadas con un juicio contencioso
administrativo, salvo las de carácter penal. La decisión que se pronuncie no producirá
efecto fuera del proceso en que se dicte, y podrá ser revisado por la jurisdicción
correspondiente.

Artículo 6. La Jurisdicción de lo Contencioso Administrativo es improrrogable. Los


órganos de la jurisdicción podrán declarar, incluso de oficio, la falta de jurisdicción,
previa audiencia de las partes sobre la misma. En todo caso, esta declaración será
fundada y se efectuará siempre indicando la jurisdicción concreta que se estime
competente, y si la parte demandante comparece ante ella en el plazo de diez días, se
entenderá haberlo efectuado en la fecha en que se inició el señalado para la
presentación de la demanda, si hubiere planteado ésta siguiendo las indicaciones de la
notificación administrativa o fuere defectuosa. Los conflictos jurisdiccionales que se
suscitaren entre la Jurisdicción de lo contencioso Administrativo y otras jurisdicciones,
se resolverán al tenor de lo dispuesto en la legislación aplicable.
Artículo 24. La representación y defensa del Estado ante la Jurisdicción Contencioso
Administrativo corresponde a la Procuraduría General de la República. La Procuraduría
General de la República solamente podrá allanarse a las demandas, cuando estuvieren
autorizados especialmente para ello mediante Acuerdo emitido por el Poder Ejecutivo.
No obstante, si dichos servidores públicos estimaren que el acto impugnado no se
ajusta a derecho, lo harán saber así, en comunicación razonada al Procurador General
de la República y éste deberá transcribirla de inmediato al Secretario de Estado o
superior jerárquico de quien dependa el órgano autor del acto para que acuerde lo que
estimare procedente, en cuyo caso aquellos servidores podrán solicitar al Juez
respectivo, y éste deberá concederle, la suspensión del juicio por el plazo de un (1)
mes.

Artículo 25. La representación y defensa de las entidades estatales se regirá por lo que
dispongan las leyes especiales o sus respectivas leyes orgánicas. No obstante, lo
anterior, la Procuraduría General de la República podrá representarlas ante la
Jurisdicción Contencioso-Administrativo cuando dichas entidades se lo soliciten. En
todo caso, la Procuraduría General de la República estará obligada a revisar los juicios
en los que no participe para investigar si están bien conducidos y en el caso de detectar
incapacidad o negligencia por parte del apoderado legal o irregularidades en la
tramitación, lo hará del conocimiento de la entidad interesada y ésta, según sea el caso,
deberá sustituir el apoderado legal incapaz o negligente o indicarle las irregularidades
detectadas para que gestione su corrección.

Artículo 26. La representación de los particulares ante la Jurisdicción-Administrativo, se


regirá por lo dispuesto en las leyes respectivas.

Artículo 27. Las personas que actúen como demandados en virtud de lo dispuesto en el
inciso c) del Artículo 17, o como coadyuvante, deberán litigar unidos y bajo una misma
representación y dirección, siempre que sus posiciones no sean contradictorias. Si en el
plazo que se les concediere no se pusieren de acuerdo para ello, el tribunal resolverá lo
que estime pertinente.

Artículo 29. Cuando se formulare alguna petición ante la administración y ésta no


notificare la resolución en los plazos señalados en el Artículo 84 de la Ley de
Procedimiento Administrativo, el interesado podrá denunciar el retraso y transcurridos
ocho días desde la denuncia, podrá considerar denegada su petición, a efecto de
formular frente a esta denegación presunta, el correspondiente recurso administrativo o
la acción jurisdiccional, según proceda, o esperar la resolución expresa de su petición.
Artículo 31. No se admitirá la acción contencioso-administrativa respecto de: a) Los
actos firmes, es decir, aquellos que no hubieren sido recurridos en tiempo y forma o que
hubieren sido consentidos expresamente, y los confirmatorios de los actos firmes
consentidos, así como los que sean reproducción de otros anteriores ya definitivos o
firmes; b) Las resoluciones que pongan término a la vía administrativa como previa a la
judicial; c) Los actos que se dicten en virtud de una Ley que expresamente les excluya
de la vía Contencioso Administrativo.

Artículo 32. Se admitirá la acción Contencioso-Administrativa contra los actos firmes y


aquellos confirmatorios de los actos firmes a que se refiere el inciso a) del Artículo
anterior, cuando fueren nulos de pleno derecho y estén surtiendo efectos; pero ello
únicamente para fines de su anulación e inaplicabilidad futura.

El Proceso Contencioso Administrativo es el proceso único de mucha importancia, por


cuanto a través de este proceso se controla la actuación administrativa de toda la
Administración Pública, entonces estamos ante un proceso que además del control que
ejerce, permite que la tutela judicial efectiva de los administrados.

El Proceso Contencioso Administrativo constituye una garantía esencial del Estado de


Derecho, porque fue creado para controlar que la administración pública actúe
subordinada al marco jurídico que regula su actividad (la Constitución, las leyes y los
reglamentos), permitiendo a los ciudadanos acudir a otro poder del Estado (el Judicial)
demandando que evalúe si las actuaciones de la administración son contrarias o no a
derecho.

En esencia, la Teoría del Acto de lo Contencioso Administrativo se centra en analizar los


elementos esenciales de los actos administrativos, tales como su validez, eficacia,
legitimidad y los derechos y obligaciones que generan para las partes involucradas.
Además, esta teoría se ocupa de examinar los mecanismos de control jurisdiccional que
permiten revisar la legalidad y corrección de dichos actos, asegurando el respeto a los
derechos de los administrados y la sujeción de la Administración al ordenamiento
jurídico.

Entre los principales aspectos que aborda la Teoría del Acto de lo Contencioso
Administrativo se encuentran:
Elementos del acto administrativo: Se refiere a los elementos esenciales como la
competencia, la forma, la finalidad, la causa y el objeto del acto, cuya presencia y
concurrencia son requisitos para su validez y eficacia.

Control de legalidad: Este aspecto se relaciona con la posibilidad de que los actos
administrativos puedan ser sometidos a control judicial para verificar su conformidad
con la legalidad y los principios del ordenamiento jurídico.

Recursos administrativos y judiciales: La Teoría del Acto de lo Contencioso


Administrativo también examina los medios y procedimientos a disposición de los
administrados para impugnar los actos administrativos que consideren contrarios a sus
intereses, ya sea a través de recursos administrativos ante la propia Administración o
mediante acciones judiciales ante los tribunales competentes.

Efectos de los actos impugnados: Se analizan las consecuencias jurídicas derivadas de


la impugnación de un acto administrativo, incluyendo la suspensión de su ejecución, la
anulación o revocación de este, así como la eventual indemnización por los perjuicios
ocasionados.

En resumen, la Teoría del Acto de lo Contencioso Administrativo constituye un pilar


fundamental para la garantía del Estado de Derecho y la protección de los derechos de
los ciudadanos frente a la actuación de la Administración Pública, contribuyendo a
asegurar la legalidad, la justicia y la equidad en las relaciones entre los poderes
públicos y los administrados.
Conclusiones

 El recurso contencioso administrativo se erige como un pilar fundamental en el


sistema legal, proporcionando a los ciudadanos una herramienta esencial para
impugnar actuaciones administrativas que afecten sus derechos.

 La existencia de este recurso no solo beneficia a los individuos perjudicados,


sino que también cumple una función crucial en el interés general al someter
todas las acciones de la Administración al escrutinio de la ley.

 La complejidad técnica del proceso subraya la importancia de contar con


asesoramiento legal, destacando la necesidad de abogados especializados para
asegurar una presentación adecuada y el debido desarrollo de todas las fases
del procedimiento contencioso-administrativo.
Bibliografías

https://www.buenastareas.com/ensayos/Proceso-Contencioso-Administrativo-De-
Honduras/75808645.html

https://sierraabogados.es/blog/recurso-contencioso-administrativo/

https://administrativando.es/fases-procedimiento-contencioso-administrativo/
#:~:text=Las%20fases%20del%20procedimiento%20contencioso-
administrativo871

https://www.tsc.gob.hn/biblioteca/index.php/leyes/48-ley-de-la-jurisdiccion-de-lo-
contencioso-administrativo

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