Derecho Administrativo y sus Procedimientos

Participante
Juan B. Hiraldo Amonte
Matricula
201804349
Tema
Trabajo final
Facilitadora
Fernando Ozuna
Fecha
05-04-2024
Introducción
El Acto Administrativo constituye uno de los pilares fundamentales del Derecho
Administrativo en República Dominicana. Este ordenamiento establece un marco legal
que regula tanto la creación y ejecución de los actos administrativos como los
mecanismos para su impugnación en caso de controversia.
En este ensayo, exploraremos el papel del Acto Administrativo en el sistema jurídico
dominicano, las vías de impugnación tanto en sede administrativa como jurisdiccional,
el Derecho Administrativo Sancionador y sus procedimientos, así como las medidas
cautelares y los procedimientos contenciosos administrativos especiales.
El Acto Administrativo en el Ordenamiento Jurídico Dominicano
El acto administrativo, pieza fundamental en el engranaje del Estado de Derecho,
representa la manifestación concreta del poder público en la gestión de los asuntos de
interés general. En el contexto del Ordenamiento Jurídico Dominicano, el acto
administrativo adquiere relevancia por su papel en la regulación, ejecución y control de
las políticas públicas, así como en la protección de los derechos de los ciudadanos. En
este ensayo, se explorará la naturaleza, características, elementos esenciales, y el
régimen jurídico del acto administrativo en la República Dominicana.
En primer lugar, es esencial comprender que el acto administrativo en el sistema
jurídico dominicano está regulado principalmente por la Ley No. 107-13, que establece
el Régimen Jurídico de los Actos Administrativos, promulgada el 9 de septiembre de
2013. Esta ley define el acto administrativo como toda declaración de voluntad, de
juicio, de conocimiento o de deseo realizada por un órgano de la administración pública
en ejercicio de una potestad administrativa distinta de la potestad reglamentaria. Esta
definición abarca una amplia gama de acciones administrativas, desde decisiones
individuales hasta disposiciones generales, que afectan los derechos e intereses de los
administrados.
Una de las características fundamentales del acto administrativo en el ordenamiento
jurídico dominicano es su carácter unilateral y coactivo, lo que implica que se impone a
los ciudadanos sin necesidad de su consentimiento y puede ser ejecutado mediante el
uso legítimo de la fuerza pública en caso de incumplimiento. Esta característica resalta
la asimetría de poder entre la administración y los administrados, y enfatiza la
importancia de garantizar la legalidad y la protección de los derechos fundamentales en
la actuación administrativa.
El Acto Administrativo en la República Dominicana se define como aquella
manifestación de voluntad de la Administración Pública, que produce efectos jurídicos
en el ámbito del Derecho Público. Este puede emanar de cualquier órgano o entidad
administrativa con competencia para ello, siempre que esté investido de potestades
públicas. Para que un acto sea considerado administrativo, debe cumplir con los
requisitos de competencia, forma y finalidad establecidos por la ley.
Vías de Impugnación del Acto Administrativo en Sede Administrativa y sus
Procedimientos
Las vías de impugnación del Acto Administrativo en sede administrativa están
reguladas por la Ley No. 107-13 sobre los Derechos de las Personas en sus
Relaciones con la Administración y de Procedimiento Administrativo (Ley 107-13). Esta
ley establece que los ciudadanos tienen derecho a impugnar los actos administrativos
que consideren lesivos a sus intereses legítimos. El procedimiento para impugnar un
acto administrativo varía según la naturaleza y el alcance del mismo, pero
generalmente implica la presentación de recursos administrativos ante la autoridad
competente, como el recurso de reconsideración o el recurso jerárquico.
Las vías de impugnación en sede administrativa se refieren a los procedimientos y
recursos que tienen los ciudadanos para impugnar los actos administrativos emitidos
por la administración pública. Estas vías varían según el sistema jurídico de cada país,
pero suelen incluir recursos como el recurso de reposición, el recurso de alzada, el
recurso de revocación, entre otros.
El recurso de reposición es aquel que se interpone ante el mismo órgano administrativo
que dictó el acto impugnado, solicitando su revisión y revocación total o parcial. Este
recurso suele ser el primer paso en la impugnación de un acto administrativo, ya que
permite a la administración corregir sus propios errores sin necesidad de acudir a
instancias judiciales.
Por otro lado, el recurso de alzada se interpone ante el superior jerárquico del órgano
que dictó el acto impugnado. Este recurso busca la revisión del acto por parte de una
autoridad superior, que puede confirmarlo, revocarlo o modificarlo en virtud de los
argumentos presentados por el recurrente. Es importante destacar que este recurso
suele estar reservado para aquellos actos administrativos que no son susceptibles de
recurso de reposición.

Derecho Administrativo Sancionador y Procedimiento para el Ejercicio de la

Potestad
El Derecho Administrativo Sancionador en la República Dominicana se refiere al
conjunto de normas y procedimientos que regulan la imposición de sanciones por parte
de la Administración Pública ante el incumplimiento de sus disposiciones. Este derecho
establece garantías procesales para los presuntos infractores, tales como el derecho a
la defensa, el principio de legalidad, el derecho a ser oído y el derecho a un proceso
justo. El procedimiento para el ejercicio de la potestad sancionadora incluye la
instrucción del expediente administrativo, la audiencia del presunto infractor, la
resolución del órgano competente y la posibilidad de interponer recursos
administrativos contra dicha resolución.
El ejercicio de esta potestad debe estar sujeto a los principios fundamentales del
Derecho Administrativo, tales como el principio de legalidad, que establece que la
administración pública solo puede actuar en virtud de lo establecido por la ley y dentro
de los límites de su competencia. Asimismo, se deben respetar los principios de
proporcionalidad, debido proceso, audiencia, defensa y presunción de inocencia,
garantizando así el equilibrio entre el poder estatal y los derechos individuales.
El Procedimiento para el Ejercicio de la Potestad Administrativa establece el conjunto
de normas y garantías que regulan el proceso sancionador desde su inicio hasta su
conclusión. Este procedimiento debe ser claro, transparente y accesible para los
ciudadanos, asegurando su derecho a ser informados adecuadamente sobre las
actuaciones administrativas que se llevan a cabo en su contra.

Vías Jurisdiccionales de Impugnación de la Actuación Administrativa

Las vías jurisdiccionales de impugnación de la actuación administrativa en la República
Dominicana están contempladas en la Ley No. 137-11, que establece el Tribunal
Superior Administrativo como la instancia competente para conocer y decidir los
recursos contenciosos administrativos. Los ciudadanos tienen derecho a acudir a este
tribunal para impugnar los actos administrativos que consideren ilegales o lesivos a sus
derechos fundamentales. El procedimiento contencioso administrativo sigue las reglas
del debido proceso y garantiza el acceso a la justicia de manera efectiva.
El recurso contencioso-administrativo es, quizás, el más relevante dentro de estas vías,
ya que permite impugnar las decisiones de la Administración Pública ante los tribunales
de lo contencioso-administrativo. Este recurso se caracteriza por su carácter objetivo,
ya que su finalidad principal es el control de la legalidad de los actos administrativos,
sin entrar en consideraciones sobre su oportunidad o conveniencia. Asimismo, ofrece a
los ciudadanos la posibilidad de obtener medidas cautelares para evitar que los actos
impugnados produzcan efectos irreparables durante el proceso.
Por otro lado, el recurso de amparo se configura como una vía de protección de los
derechos fundamentales ante posibles violaciones por parte de la Administración
Pública. Su finalidad esencial es garantizar la efectividad de los derechos reconocidos
en la Constitución o en los tratados internacionales de derechos humanos, cuando
estos sean vulnerados o amenazados por actos u omisiones de la Administración. De
esta manera, el recurso de amparo constituye un mecanismo de protección especial
para situaciones de urgencia o gravedad en la afectación de los derechos
fundamentales.
En cuanto al recurso de revisión, este se configura como una vía para impugnar actos
administrativos firmes que adolecen de vicios de nulidad o anulabilidad. Su finalidad es
corregir aquellos actos administrativos que sean contrarios al ordenamiento jurídico o
que adolezcan de defectos graves que afecten su validez. Es importante destacar que
el recurso de revisión suele estar sujeto a plazos y requisitos estrictos, los cuales
deben ser cumplidos por los ciudadanos para poder ejercerlo de manera válida.
Medidas Cautelares Utilizadas en el Derecho Administrativo
El Derecho Administrativo, como rama del ordenamiento jurídico que regula la actividad
de la administración pública, se encuentra intrínsecamente ligado a la idea de eficacia y
celeridad en la gestión de los asuntos públicos. Sin embargo, esta eficacia no puede
desvincularse de la necesidad de garantizar la legalidad y los derechos de los
administrados. Es en este contexto donde las medidas cautelares adquieren una
relevancia fundamental.
Las medidas cautelares son herramientas utilizadas en el Derecho Administrativo para
proteger los derechos e intereses de los ciudadanos mientras se resuelve el fondo del
litigio. En República Dominicana, estas medidas pueden ser solicitadas ante el Tribunal
Superior Administrativo o ante la misma Administración Pública, y su concesión está
sujeta a la demostración de la existencia de un riesgo inminente de daño irreparable.
Ejemplos de medidas cautelares incluyen la suspensión provisional del acto impugnado
o la adopción de medidas para evitar la consumación de un perjuicio.
Las medidas cautelares en el Derecho Administrativo representan un conjunto de
acciones judiciales o administrativas que tienen como finalidad garantizar la eficacia de
la actuación administrativa, así como proteger los derechos e intereses de los
ciudadanos frente a posibles actuaciones arbitrarias o ilegales por parte de la
administración pública.
Procedimientos Contenciosos Administrativos Especiales
Además de los procedimientos contenciosos administrativos regulares, existen
procedimientos especiales para ciertas materias en el Derecho Administrativo
dominicano. Por ejemplo, el procedimiento para la impugnación de los contratos
administrativos, el procedimiento para la impugnación de los actos en materia de
contratación pública, entre otros. Estos procedimientos contemplan plazos y requisitos
específicos que deben cumplirse para la interposición de los recursos
correspondientes.
Uno de los principios fundamentales que rigen los PCAE es el principio de igualdad de
armas, que garantiza que ambas partes en el conflicto, es decir, el ciudadano y la
Administración, tengan las mismas oportunidades y recursos para defender sus
intereses. Esto se traduce en el derecho de los ciudadanos a acceder a la justicia en
condiciones de igualdad con la Administración, lo que implica que los procedimientos
sean transparentes, imparciales y respetuosos de los derechos fundamentales.
Otro principio relevante en los PCAE es el principio de celeridad procesal, que busca
asegurar que los conflictos se resuelvan de manera rápida y eficiente, evitando
dilaciones injustificadas que puedan afectar los derechos de las partes involucradas. La
celeridad procesal es esencial para garantizar la efectividad de estos procedimientos y
para evitar que la demora en la resolución de los conflictos pueda generar perjuicios
irreparables a los ciudadanos.

Conclusión
En conclusión, en este ensayo relacionado a los diferentes temas trabajado de esta
unidad el acto administrativo en el Ordenamiento Jurídico Dominicano juega un papel
crucial en la regulación de las relaciones entre la Administración Pública y los
ciudadanos. Las vías de impugnación tanto en sede administrativa como jurisdiccional
garantizan el respeto a los derechos y garantías de los individuos frente a la actuación
de la Administración. El Derecho Administrativo Sancionador establece un marco legal
para la imposición de sanciones, asegurando al mismo tiempo el debido proceso y el
derecho a la defensa.
Las medidas cautelares y los procedimientos contenciosos administrativos especiales
complementan este sistema, proporcionando herramientas adicionales para la
protección de los intereses de los ciudadanos frente a la Administración Pública. En
conjunto, estas disposiciones contribuyen a fortalecer el Estado de Derecho y la
democracia en la República Dominicana.