Buenos días compañeros y doctora presentes. En esta oportunidad tengo el placer de
explicarles lo que son los antecedentes familiares dentro de la historia clínica. Hace referencia a aquella indagación o aquellas preguntas realizadas al paciente o incluso a los familiares que nos van a brindar la información relevante acerca de las condiciones de salud de los ascendientes, descendientes, colaterales y cónyuge en relación con la salud del paciente. A la hora de interrogar, En primer lugar, debemos de conocer el estado actual de salud de los miembros de la familia, principalmente nos interesa saber acerca de los padres, hermanos, abuelos e hijos. De esta forma, se debe de preguntar y señalar cuáles de los parientes ya antes mencionados se encuentran vivos o si han fallecido. Si están vivos, se pregunta acerca del estado actual de salud y qué enfermedad sufren o sufrieron, anotándose así todos los padecimientos importantes conocidos. En el caso de que estén fallecidos, se anota la edad que tenía el familiar en el momento del deceso, la fecha en la que sucedió y más importante, la causa patológica presumible, si es conocida o es sospechada. Todas estas indagaciones deben de ser exhaustivas en la línea directa, es decir, en cada miembro inmediato de la familia y los principales colaterales del paciente. Todas estas descripciones son de suma importancia, especialmente en aquellas ocasiones cuando hay alguna posibilidad de que la causa del fallecimiento del pariente esté relacionada con la enfermedad que sufre el paciente, ya sea por medio de contagio, factores genéticos o hereditarios, influencia congénita e incluso el impacto psicológico que puede originarse gracias al fallecimiento o el padecimiento de un miembro de familia. Asimismo, se lleva a cabo un interrogatorio sobre las enfermedades o síntomas que tengan los familiares que sean similares o estén en relación con lo que presenta el paciente. Aquí es sumamente esencial informarse especialmente de afecciones acumuladas que puedan suponer una disposición hereditaria, es decir, preguntar sobre enfermedades que presenten los familiares que posean una transmisión genética; particularmente debe de indagarse en este momento de enfermedades cardiovasculares, las neoplásicas y metabólicas. También se preguntan sobre enfermedades adquiridas en un mismo ambiente, como las enfermedades infecciosas, ya sean parasitarias, virales, bacterianas, entre otras, y las endémicas, haciendo hincapié entonces en estas patologías infectocontagiosas como la tuberculosis, lepra, sífilis o el SIDA. Particularmente en la sífilis hereditaria ocasionada por sífilis en los progenitores, esta solo tiene valor para los niños que la presentan, debido a que la sífilis hereditaria tardía o en adultos no existe. Po otro lado, en este momento interesan también las enfermedades infecciosas durante el embarazo, particularmente en el caso de la rubeola en los primeros tres meses de embarazo, debido a que puede ocasionar malformaciones congénitas en los descendientes. Haciendo un poco más de énfasis, las literaturas mencionan la indagación de enfermedades como la diabetes mellitus, la obesidad, gota (el cual es tipo de artritis), cáncer, tumores, epilepsias, las enfermedades coronarias, enfermedades mentales, las hematológicas, alérgicas, la hipertensión arterial y toxicomanías. Especialmente interesa indagar sobre patologías que presentan cierta predisposición hereditaria, como la hipertensión arterial, gota, entre otras. También encontramos la hemofilia, la cual es transmitida del abuelo al nieto a través de la madre y la jaqueca, que suele ser transmitida por la madre a los hijos. En el caso de que el paciente padezca de una enfermedad con un factor genético importante, por ejemplo la diabetes, pero existe una ausencia aparente de este trastorno en los ascendientes, se debe de negar en la historia clínica la ausencia de este padecimiento en la familia. A modo de resumen, podemos ordenar y llevar a cabo una secuencia de los datos que se obtendrán: a) Estado de salud del padre y madre. b) Estado de salud de los abuelos: c) Estado de salud de los hermanos: d) Estado de salud del cónyuge, e) Número de hijos y sus estados de salud. En cada uno de estos familiares se va a precisar entonces si se encuentre vivo o muerto, la edad, la enfermedad en caso de que haya, y en caso de fallecimiento la edad que tenía cuando falleció, fecha y causa de este. Es importante que cuando el paciente no precia detalles sobre la muerte de los familiares, se interrogue las circunstancias relacionadas al fallecimiento de los mismos. Árbol genealógico o genograma En algunas oportunidades, y siempre que haya indicios o sospechas por parte del médico de un trastorno de tipo genético, se construye y se dibuja un esquema del árbol genealógico más próximo al enfermo o paciente, también llamado familiograma o genograma. Este familiograma representa gráficamente la estructura de la familia, donde se incluye la línea genealógica directa de padres a hijos del paciente, incluyendo también abuelos, hermanos y cónyuge, y se señalan aspectos como la edad, el sexo, la tipología familiar y los antecedentes patológicos de cada miembro. Además de esto, se debe de señalar los miembros fallecidos, indicando la edad de fallecimiento y enfermedad mortal, y las afecciones más notables, si estas se repiten en la familia. Como símbolos gráficos suelen utilizarse círculos para representar a los miembros de la familia mujeres y cuadrados para los hombres. En el caso de que un miembro no esté vivo, se raya el símbolo con una “x” o se coloca en negro.