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Licenciatura en Logística Integral

Ciclo de complementación curricular

Régimen Jurídico Aplicado

Unidad 1
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Régimen Jurídico Aplicado [UNIDAD 1: Conceptos introductorios]

INDICE
INTRODUCCIÓN A LA UNIDAD ................................................................................................................. 5

1. NOCIONES DE DERECHO .................................................................................................................... 7

1.1 Derecho Positivo .............................................................................................................................. 8

1.2 Derecho público y orden público ..................................................................................................... 9

1.3 El orden público como limite a la autonomía de la voluntad ........................................................ 11

1.3.1 El fraude a la ley .................................................................................................................. 11

2. FUENTES DEL DERECHO Y SU APLICACIÓN ....................................................................................13

2.1 Interpretación. Consideraciones generales, básicas y fundamentales .......................................... 14

2.2 Principio de buena fe ..................................................................................................................... 15

2.3 La empresa y el Código Civil y Comercial ....................................................................................... 16

3. LA MATERIA COMERCIAL A PARTIR DEL CÓDIGO CIVIL Y COMERCIAL ...................................... 17

3.1 Nuevas figuras del Código Civil y Comercial .................................................................................. 18

3.1.1 Los sujetos comerciales ....................................................................................................... 18

3.1.2 Sujetos con “actividad económica organizada” ................................................................... 19

3.1.3 Sujetos individuales antes considerados comerciantes ....................................................... 19

3.1.4 La empresa .......................................................................................................................... 20

3.1.5 El establecimiento comercial, industrial, agropecuario o de servicios ................................ 22

3.1.6 Exclusión de profesionales liberales y agropecuarios .......................................................... 23

4. LA CONTABILIDAD OBLIGATORIA ................................................................................................... 25

4.1 Registros contables ........................................................................................................................ 26

5. CONTRATOS EN MONEDA EXTRANJERA ....................................................................................... 29

5.1 Jurisdicción comercial .................................................................................................................... 30

SÍNTESIS DE LA UNIDAD ...................................................................................................................... 33

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INTRO
UNIDAD 1
Conceptos

TEMA 1
introductorios

TEMA 2
¡Le damos la bienvenida a la unidad número uno!

Introducción

TEMA 3
Durante el transcurso de esta primera unidad, lo introduciremos en los conceptos generales del derecho
que constituirán una base para que usted pueda comprender las sucesivas unidades de la asignatura. Los
conceptos, normas generales e institutos que se tratarán serán luego aplicables a contenidos específicos
que abordaremos y en esto reside su importancia.

Las nociones de derecho, el derecho como norma, las fuentes de derecho enunciadas por el Código

TEMA 4
Civil y Comercial de la Nación (CCyC) junto con los principios interpretativos aplicables y el principio de
“buena fe” constituyen, sin dudas, el eje que nos guiará en la comprensión de todos los institutos, en
especial su aplicación a la interpretación de los contratos y obligaciones.

El tratamiento unificado de las obligaciones, contratos civiles y comerciales así como los sujetos de
derecho que establece el CCyC, lo proveerán de los elementos imprescindibles para comprender las
figuras de los entes contables determinados sin personalidad jurídica, personas humanas, empresario
TEMA 5

o cuasi-empresario, a fin de que seamos capaces de identificar a los diversos sujetos de las relaciones
jurídicas, sus derechos y obligaciones.

Abordaremos además el concepto de actividad económica organizada y sus diversos efectos jurídicos.
En particular, la obligación de llevar la Contabilidad y Estados Contables, el modo adecuado de realizarlo,
las exigencias legales al respecto y las excepciones que establece el art. 320 en el CCyC al relevar de la
obligación a los profesionales liberales y actividades agropecuarias desarrolladas por personas humanas.
SINTESIS
A partir de lo expresado, esperamos que en esta primera unidad usted logre los siguientes objetivos:

 Comprender los conceptos básicos del derecho.

 Conocer las nociones de derecho, el derecho como norma, las fuentes de derecho enunciadas
por el Código Civil y Comercial de la Nación.

 Reflexionar sobre el concepto de actividad económica organizada y sus diversos efectos jurídicos.

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INTRO
TEMA 1
TEMA Nociones de Derecho

TEMA 2
La vida en sociedad exige la existencia y cumplimiento de normas que hagan viable la convivencia y el

TEMA 3
desarrollo social. Podríamos decir entonces que, sin derecho, la sociedad sería caótica. Asimismo, estas
normas que regulan las relaciones en sociedad han evolucionado a través del tiempo hasta llegar al
concepto de derecho moderno.

El hombre primitivo, aún dentro de un sistema rudimentario de sociedad, advirtió la necesidad de


sujetarse a las normas. Esta inclinación a aceptar limitaciones de convivencia tiene su fundamento en
el instinto de auto preservación. De esta manera, el hombre acepta la regulación “no matar” pues de lo

TEMA 4
contrario todos podríamos hacerlo y esto implicaría que podríamos ser muertos por otros.

En las sociedades primitivas estas normas de conducta para la convivencia se manifestaban en forma de
normas religiosas, morales y jurídicas que no siempre estaban bien diferenciadas. La evolución social,
a través de los siglos, determinó también formas más complejas de organización como el Estado y la
imposición de sus normas jurídicas.

Para que usted se vaya familiarizando con los autores que abordan el tema citamos a continuación una
TEMA 5

definición realizada por Guillermo Borda quien considera el derecho como:

“El conjunto de normas de conducta humana obligatorias y conforme a la justicia. Cuando


establecemos que ese conjunto de normas son conformes a la idea de justicia la consideramos
derecho”. 1
SINTESIS

1. Borda, Guillermo A.(1999), Tratado de Derecho Civil, Parte General, Tomo I, Buenos Aires, Abeledo-Perrot Garrido y otros (2015) ,Código Civil y Comercial Comentado, Buenos Aires, Editorial
Astrea.
Veamos a continuación qué es el derecho positivo.

1.1 Derecho Positivo


Podríamos afirmar que el conjunto de leyes vigentes en un país constituye el denominado Derecho
Positivo. A su vez, éste se clasifica en dos grandes ramas: el Derecho Público y el Derecho Privado.

Si bien hay diversas teorías sobre la distinción entre ambas ramas del derecho, con la intención de no
extendernos más allá de lo necesario para esta asignatura, basaremos la distinción de conformidad
con lo enunciado por el Dr. Guillermo Borda quien establece que la diferencia reside en el sujeto de la
relación. Si interviene el Estado, como poder público, estamos frente a una norma de derecho público.
En cambio, si lo hacen los particulares o el Estado en su carácter de simple persona jurídica, estamos
frente al derecho privado.

No obstante lo expresado, es necesario que usted comprenda que el derecho es un sistema dinámico y
ambas ramas forman parte de un todo y de ningún modo se comportan como si fueran compartimentos
estancos.

El derecho es uno, es decir…

“el edificio jurídico es único y coronado por la Constitución Nacional, ésta es el elemento
aglutinante y, por así decirlo, la base sobre la que reposa todo el ordenamiento legal” 2.

Ahora bien, le proponemos detenernos y considerar la siguiente clasificación que está realizada en base
a quienes son los sujetos involucrados en relación con la norma.

2. Borda, Guillermo A.(1999), Tratado de Derecho Civil, Parte General, Tomo I, Buenos Aires, Abeledo-Perrot Garrido y otros (2015) ,Código Civil y Comercial Comentado, Buenos Aires, Editorial Astrea

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Régimen Jurídico Aplicado [UNIDAD 1: Conceptos introductorios]

Veamos la definición de cada uno:

Derecho público: Es el conjunto de normas que se refieren a la organización del Estado y a la


actividad que desarrolla para cumplir con las atribuciones que al Estado le corresponden.

Derecho privado: Es el conjunto de normas que rige las relaciones entre los particulares,
normas que le son aplicables al Estado cuando no ejerce funciones de poder político.

A su vez cada tipo de clasificación se divide en diferentes ramas:

Ramas del derecho público Ramas del derecho privado

Derecho constitucional Derecho civil

Derecho administrativo Derecho comercial

Derecho penal Derecho laboral

Derecho procesal Derecho internacional privado

Derecho internacional público

Estamos en condiciones de afirmar que, por su parte, el derecho público es en esencia un conjunto
de normas que regulan la actividad del Estado en cumplimiento de sus fines esenciales, mientras que
el derecho privado regula la relación jurídica entre los particulares, es decir, que está integrado por
normas que colocan a las personas en un plano de igualdad legal. Asimismo, el Estado también está
regido por el derecho privado cuando se desempeña en actividades privadas. Por ejemplo cuando
desarrolla actividades comerciales o industriales se rige por el derecho privado, es el caso de Y.P.F, las
relaciones que puedan surgir entre la empresa y sus empleados, con los contratistas o con terceros.

1.2 Derecho público y orden público


Hemos establecido, de modo sintético, las diferencias entre el derecho público y privado. Nos interesa
que usted pueda diferenciar ahora, el derecho público y orden público, porque en el derecho privado
encontramos normas de orden público.

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Podemos decir entonces que, en el orden público, existen situaciones donde prevalece el interés social
o colectivo que debe proteger el Estado sobre el interés particular. Es el caso de las legislaciones del
trabajo donde las disposiciones protectoras del trabajador son irrenunciables aunque las partes quieran
lo contrario. En la legislación de familia, la ley sustituye la voluntad de las partes, limitándola. Por
ejemplo, si una niña y un niño de 12 años quisieran contraer matrimonio no pueden hacerlo porque hay
normas de orden público que lo prohíben.

Es decir que…

…el orden público constituye un conjunto de normas que protegen las relaciones o instituciones
que por su importancia y efectos requieren de un tratamiento legal especial.

Una cuestión es de orden público cuando responde a un interés general, colectivo, por oposición a la
cuestión de orden privado en los cuales sólo juega un interés particular. Por ejemplo, en el derecho
de familia, en el de los menores, en el derecho del trabajo, por la importancia que tienen los sujetos a
quienes estos derechos protegen, requieren una mayor injerencia del Estado considerándose de orden
público. Se trata de derechos irrenunciables.

A continuación, lo invitamos a leer el artículo 12 del CCyC ya que lo consideramos de relevancia en


relación con los temas desarrollados:

“Orden Público. Fraude a la ley. Las convenciones particulares no pueden dejar sin efecto las
leyes en cuya observancia está interesado el orden público. El acto respecto del cual se invoque el
amparo de un texto legal, que persiga un resultado sustancialmente análogo al prohibido por una
norma imperativa, se considera otorgado en fraude a la ley. En ese caso, el acto debe someterse a
la norma imperativa que se trata de eludir”.

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Régimen Jurídico Aplicado [UNIDAD 1: Conceptos introductorios]

A partir de la cita anterior, podemos señalar que este artículo contiene dos conceptos vinculados. En el
primer párrafo determina los límites de la autonomía individual identificados con el concepto de orden
público. En el segundo, establece la noción de acto otorgado en fraude a la ley y sus efectos.

El de orden público no es un concepto estático y acompaña los cambios sociales. Sin embargo, es estable
y comprende un conjunto de normas imperativas indisponibles para la voluntad de los particulares y de
los principios que en cada momento se consideran necesarios. El objetivo es la protección de la sociedad
y el adecuado amparo de los derechos fundamentales de los ciudadanos.

1.3 El orden público como límite a la autonomía de la voluntad


A partir de lo dispuesto en el artículo 19 de la Constitución Nacional y disposiciones concordantes del
bloque de constitucionalidad federal, las personas gozan en nuestro país de libertad para decidir si
arriban o no a acuerdos y para determinar su contenido. Dicha libertad está relativamente acotada en
algunos supuestos como los de los contratos celebrados por adhesión a cláusulas predispuestas.

Tenga presente que, como toda libertad, está sujeta a reglamentación y a límites razonables establecidos
teniendo en consideración el bien común por lo que el orden público constituye un límite indisponible
por las partes y sus disposiciones son de acatamiento obligatorio.

Es claro que la regla contenida en este artículo no se aplica sólo a los contratos sino que se extiende
a toda forma de acuerdo entre partes como pueden ser los celebrados con relación al matrimonio o
a la regulación de una relación convivencial. De esta manera, las normas de orden público deben ser
aplicadas por los jueces aun cuando ello no sea peticionado por las partes.

1.3.1. El fraude a la ley

Seguramente usted se estará preguntando en qué casos estamos hablando de fraude a la ley. En este
sentido, diremos que la estipulación contempla la existencia de un determinado acto realizado bajo
la cobertura de una norma pero destinado a burlar una prohibición establecida por otra de carácter
imperativo.

El fraude a la ley se caracteriza por la realización de actos aisladamente válidos pero nulos en tanto
tienen como finalidad la de eludir una prohibición de orden público. Es la causa la que priva de eficacia
jurídica al acto fraudulento.

¿Cuáles son los efectos jurídicos del acto en fraude a la ley?

El acto en fraude a la ley es ineficaz pues se ve privado de los efectos pretendidos por las partes en razón de su
intención de violar una ley imperativa que debe ser aplicada desplazando al acto fraudulento. Dicha aplicación
directa de la norma eludida constituye el efecto principal de la determinación de la existencia del fraude a la ley.
Trataremos a continuación las fuentes del derecho.

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12
INTRO
TEMA 1
TEMA Fuentes del derecho
y su aplicación
2

TEMA 2
TEMA 3
En este punto de la unidad lo invitamos a leer el artículo 1º del CCyC, en el cual se definen las fuentes
del derecho de la siguiente manera:

“Fuentes y aplicación. Los casos que este Código rige deben ser resueltos según las leyes que re-
sulten aplicables, conforme con la Constitución Nacional y los tratados de derechos humanos en

TEMA 4
los que la República sea parte. A tal efecto, se tendrá en cuenta la finalidad de la norma. Los usos,
prácticas y costumbres son vinculantes cuando las leyes o los interesados se refieren a ellos o en
situaciones no regladas legalmente, siempre que no sean contrarios a derecho”

Así, surge de la enunciación del artículo primero que las fuentes del derecho privado son:

a. Leyes aplicables (es decir, el propio CCyC y las leyes complementarias) que deben estar en
TEMA 5

total consonancia con la Constitución Nacional y los tratados de derechos humanos en los
que el país sea parte —tanto los que tengan jerarquía constitucional como los de jerarquía
originaria o que tengan jerarquía constitucional derivada. Sería el caso de los instrumentos
que enumera el art. 75, inc. 22; que adquieran tal lugar por una mayoría especial como lo
prevé la misma normativa como aconteció en el 2014 con la Convención sobre los Derechos
de las Personas con Discapacidad (en adelante, CDPD), según lo establece la ley 27.044 y los
SINTESIS

que carezcan de tal valoración normativa pero que hayan sido ratificados por el país;
b. En un segundo nivel, los usos, prácticas y costumbres en las siguientes condiciones:

• cuando las leyes o los interesados se refieren a ellos,

• en situaciones no regladas legalmente y

• siempre que no sean contrarios a derecho.

En lo que respecta a los usos y costumbres, es importante que usted tenga presente que el art. 17 del
Código Civil, ahora derogado, regulaba de manera autónoma esta cuestión en el mismo sentido que lo
hace el Código Civil y Comercial. Así, dicha normativa disponía: “Los usos y costumbres no pueden crear
derechos sino cuando las leyes se refieran a ellos o en situaciones no regladas legalmente”. Como puede
ver, otra vez, el texto civil y comercial amplía la regulación de esta cuestión al referirse al uso y las cos-
tumbres pero también a las prácticas.

Además, el texto civil y comercial alude al supuesto de leyes que se refieran a ellas (a usos, prácticas
y costumbres) pero también permite y valora que los propios interesados los tengan en cuenta lo que
puede acontecer perfectamente en el derecho de los contratos. Por último, se agrega que la relevancia
en el campo jurídico de los usos, prácticas y costumbres está condicionada o sujeta a que ellos no sean
contrarios a derecho.

Cabe destacar que el CCyC sancionado no contempla como su predecesor (Código Civil) como fuente
expresa del derecho a la jurisprudencia, la cual estaba prevista en la versión elaborada por la comisión
redactora que después de la primera oración agregaba la siguiente: “A tal fin, se tendrá en cuenta la juris-
prudencia en consonancia con las circunstancias del caso”. Ello no significa que la jurisprudencia no sea
fuente de derecho —en este caso, implícita—, sino que no está mencionada como una de las principales
porque es cierto que la fuerza de los precedentes, a veces, es un argumento de peso para que el derecho
no se dinamice sino que, por el contrario, quede rígido o estancado.

Como comprenderá, esto trae como consecuencia una dificultad de adaptar y modernizar la legislación
a través de interpretaciones que acompañen los cambios sociales. La falta de mención de la jurispruden-
cia en el CCyC como fuente de derecho ha generado debates en torno a su aplicabilidad. La mayoría de
los autores sostiene que la jurisprudencia, conformada por los fallos de los jueces, es la “ley viva” y es
fuente inspiradora e interpretativa de legislación aun cuando el Código omita su mención.

2.1 Interpretación. Consideraciones generales, básicas y funda-


mentales
En este punto de la unidad nos parece importante que usted comprenda que la incorporación de los
derechos humanos representa un cambio jurídico y social al establecer como eje y centro a la persona
humana y la satisfacción de sus derechos. Los instrumentos de derechos humanos —con jerarquía con-
stitucional desde 1994— han provocado la revisión crítica de todo el sistema normativo. Los aspectos

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Régimen Jurídico Aplicado [UNIDAD 1: Conceptos introductorios]

valorativos que auspician el CCyC en su construcción y en la interpretación que de él se lleve adelante


son explicitados en los fundamentos del anteproyecto, uno de los cuales es la “Constitucionalización del
derecho privado” al cual se hace mención. En otros términos, en el art. 1° que transcribimos a continu-
ación:

“La mayoría de los códigos existentes se basan en una división tajante entre el derecho público y privado.
El Anteproyecto, en cambio, toma muy en cuenta los tratados en general, en particular los de Derechos
Humanos, y los derechos reconocidos en todo el bloque de constitucionalidad. En este aspecto innova
profundamente al receptar la constitucionalización del derecho privado, y establece una comunidad de
principios entre la Constitución, el derecho público y el derecho privado, ampliamente reclamada por la
mayoría de la doctrina jurídica argentina. Esta decisión se ve claramente en casi todos los campos: la
protección de la persona humana a través de los derechos fundamentales, los derechos de incidencia
colectiva, la tutela del niño, de las personas con capacidades diferentes, de la mujer, de los consumidores,
de los bienes ambientales y muchos otros aspectos. Puede afirmarse que existe una reconstrucción de la
coherencia del sistema de derechos humanos con el derecho privado”.

2.2 Principio de Buena Fe


En relación con este principio le presentamos la distinción que han realizado diversos autores a través
de la doctrina:

• La buena fe lealtad

• La buena fe-creencia

De acuerdo con el Dr. Atilio A. Alterini, hay “buena fe-creencia” (objetiva) cuando versa de manera jus-
tificada acerca de la titularidad de un derecho. La apariencia implica el estado objetivo del que deriva el
estado subjetivo de la creencia que, cuando es generalizada, se convierte en error común; y error com-
munis facit jus (el error común crea derecho). Por su parte, en la buena “fe-probidad” (subjetiva) importa
el comportamiento leal, el comportamiento honesto, en la celebración y cumplimiento del acto y es,
desde otro enfoque, presupuesto del reconocimiento de ciertas facultades o derechos subjetivos.

Podríamos definirlo entonces como el comportamiento de la gente de bien, de la


gente que actúa con corrección en un ámbito de convivencia social.

Es importante que usted comprenda que la buena fe no produce efectos propios porque es lo común en
la vida jurídica. La mala fe, en cambio, rompiendo la armonía de la conducta común esperable desvía el
curso normal de los fenómenos jurídicos y produce consecuencias consideradas disvaliosas para quien

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aporta ese elemento “inesperado” en la convivencia social. El principio de la buena fe impone a las per-
sonas el deber de obrar con corrección, como lo haría una persona honorable, diligente y prudente –en
palabras de Vélez Sarsfield, como un buen padre de familia. La buena fe es, en definitiva la que encarna
la idea de honestidad en las relaciones jurídicas y la circulación de bienes en general y tiene su funda-
mento en la justicia y equidad.

Platón definía a la justicia “como la recta ordenación de todas las facultades y virtudes del hombre”. Se
trata, entonces, de la honestidad llevada al terreno jurídico que en palabras de Ulpiano: “Honeste vivere,
neminem laedere et suum cuique tribuere” que se traduce en: “Vivir honestamente, no dañar al otro
y dar a cada quien lo que le corresponde”; y de aquí la esencial importancia del principio que hemos
analizado.

En esta línea incluimos el art. 9 del CCyC que establece:

“Principio de buena fe. Los derechos deben ser ejercidos de buena fe”

Como usted verá este principio está expresamente consagrado y a su vez relacionado con otras
disposiciones del mismo cuerpo legal que se refieren específicamente al mismo. Así, el art. 961 se refiere
a la buena fe contractual, el 992 al deber de confidencialidad, el 729 establece que deudor y acreedor
deben sujetarse al principio de buena fe, el 991 sujeta las tratativas previas al contrato a este principio
y, por último, el 1061 lo establece como principio de interpretación de los contratos.

2.3. La empresa y el Código Civil y Comercial


El Código Civil y Comercial, a diferencia del derogado Código de Comercio, no regula ni al comerciante
ni a los actos de comercio, no hace mención del registro público de comercio ni sociedades comerciales.
Como usted entenderá, estas particularidades contenidas en la nueva normativa, modifican conceptos
a los que estamos habituados.

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INTRO
TEMA 1
TEMA La materia comercial
a partir del Código Civil
3 y Comercial

TEMA 2
El Código de Comercio fue derogado y el nuevo Código Civil y Comercial no regula ni al comerciante ni
a los actos de comercio. De esta manera, no hay más registro público “de comercio” ni sociedades “co-

TEMA 3
merciales”. Además, el nuevo Código no tiene un capítulo especial para el derecho comercial, para el
empresario ni para la empresa. Esto puede llevar a pensar que el Código Civil y Comercial ha eliminado
al derecho comercial como categoría diferenciada del derecho civil con sus propias normas, jurisdic-
ciones y competencias, receptando en una misma regulación las obligaciones y contratos para todas las
personas humanas y las personas jurídicas dejando de lado la índole de sus actividades o profesiones.
Sin embargo, esa situación sería contraria a lo normado por la Constitución Nacional, que exige una leg-
islación diferenciada en materia civil y comercial sin importar que sea en textos separados o unificados

TEMA 4
(art. 75 inc.12 de la C.N.).

Teniendo en cuenta lo expresado anteriormente, creemos relevante que usted comprenda que el derecho
comercial subsiste en el nuevo Código sólo que con otros presupuestos. Señalaremos, a continuación,
los más destacados:

a. El “comerciante” fue reemplazado por el “empresario” (o el cuasi empresario).


TEMA 5

b. El “acto de comercio” fue desplazado por la “actividad económica organizada”.

c. El nuevo eje del derecho comercial es “la empresa”, sin la cual no hay sociedad y cuya
continuación se procura mediante los mecanismos de tolerancia de la unipersonalidad
sobreviniente, efecto no liquidatorio de las nulidades y posibilidad de reactivación societaria si
existe viabilidad económica y social de la subsistencia de la actividad (art.100 Ley General de
Sociedades).
SINTESIS
d. El derecho mercantil se expande en tanto:

• En los contratos unificados la regla es aplicar la solución comercial y la excepción la


solución civil. Se invierte el sistema anterior con lo cual se comercializa al derecho civil
aplicando soluciones mercantiles específicas tendientes a la celeridad de los negocios,
la seguridad y la limitación de riesgos.

• Se amplían y promueven las posibilidades del arbitraje, la obligación de rendición de


cuentas y la representación negocial que son instituciones mercantiles típicas.

• La exigencia de contabilidad obligatoria, propia del derecho mercantil, se extiende a


otros sujetos sin fin de lucro y donde no existe recurrencia habitual al crédito.

• La exigencia de registración mercantil se extiende a las asociaciones civiles.

e. El Derecho mercantil se mantiene incólume en las leyes complementarias del código de


comercio, que continúan como leyes complementarias del CCyC, entre las que se cuenta la ley
de concursos y quiebras que solo registra un impacto indirecto.

f. Se mantiene el fuero de la justicia comercial diferenciada tal como la establecen las leyes
locales actuales.

Finalmente, tenga en cuenta que en lo que atañe al derecho del consumidor existen diferentes derechos
y obligaciones para el productor respecto del consumidor en los contratos y relaciones de consumo
(art.1092 y stes.) lo que también implica un tratamiento diferenciado. En definitiva, la materia comercial
subsiste y se expande en el nuevo CCyC aun cuando, sin una clara definición conceptual, exige un
esfuerzo especial de interpretación.

3.1. Nuevas figuras del Código Civil y Comercial


A continuación se hará una descripción detallada de las nuevas figuras del Código Civil y Comercial.

3.1.1 Los sujetos comerciales

El CCyC no hace mención del comerciante pero incorpora nuevos sujetos comerciales que son los
obligados contables.

De conformidad a lo establecido en el art. 320 del nuevo Código, se somete, entre otros
sujetos y entes, a ciertas personas humanas a una obligación especial: la de llevar contabilidad,
si las mismas: si realizan una actividad económica organizada o son titulares de una empresa o
establecimiento comercial, industrial o de servicios”.

18
Régimen Jurídico Aplicado [UNIDAD 1: Conceptos introductorios]

De esta manera se desprende del mismo Código que, no obstante la unificación anunciada, admite dos
categorías de personas humanas: una general y otra especial sujeta a obligaciones contables que a su
vez, necesariamente, estarán sujetas también a practicar una inscripción de antecedentes (publicidad).
Esta categoría especial está compuesta por dos clases de personas humanas:

a) Las que realizan una actividad económica organizada y

b) Las que son empresarios en el sentido de ser titulares de una empresa o de un establecimiento
comercial, industrial o de servicios.

De ambas categorías resulta que no sólo los empresarios integran esta categoría especial de personas
humanas sino también quienes no siéndolo realizan una actividad económica organizada que no llega a
configurar una empresa, a los que denominaremos cuasi-empresarios.

3.1.2 Sujetos con “actividad económica organizada”

El CCyC no contempla la figura del comerciante. Los que revestían la calidad de comerciante en el
Código de Comercio derogado, en consideración a que realizaban una actividad económica organizada,
mantienen ahora la obligación de llevar contabilidad sean o no titulares de una empresa o de un
establecimiento. En consecuencia, esta clase comprende a quien realiza una interposición en los cambios
asumiendo riesgos, actuando por cuenta propia en forma profesional, habitual y con fin de lucro. Esta
nueva categoría incluye al comerciante que no llega a ser un empresario.

De esta manera, se utiliza el concepto de “comerciante” para designar a quien realiza una actividad
de intermediación en el cambio de bienes. Por otra parte, se denomina empresario al titular de una
empresa entendiendo por tal la actividad organizada de los factores de producción para producir bienes
y servicios destinados al mercado. Podemos decir entonces que son conceptos diferentes pero para
algunos autores hay una relación de género (empresario) y especie (comerciante).

De todos modos, si bien ambos conceptos comparten una zona en común y también tienen diferencias,
lo que nos interesa es que usted conozca cuales son las obligaciones y el tratamiento le impone el CCyC
a estos sujetos.

3.1.3 Sujetos individuales antes no considerados comerciantes

Dada la derogación de la figura del comerciante y considerando que el concepto de “actividad


económica organizada” excede la noción del art. 1º del derogado Código de Comercio, entendemos
que hay sujetos “no comerciantes” que ahora se encuentran obligados. Es el caso, principalmente, de
los prestadores de servicios que no se interponen en el comercio de bienes pero que despliegan una
actividad económica organizada. También aplica en esta categoría el caso del fiduciario, persona física,

19
cuando la administración registra cierta complejidad.

3.1.4 La empresa

En el nuevo Código tienen obligaciones contables las personas humanas que son “empresarios”, es decir,
que explotan una empresa sin exigirse que posean un establecimiento. De esta manera, se ha definido
a la “empresa” como la organización en la cual se coordinan el capital y el trabajo y que, valiéndose del
proceso administrativo, produce y comercializa bienes y servicios en un marco de riesgo. Además, busca
armonizar los intereses de sus miembros y tiene por finalidad crear, mantener y distribuir riqueza entre
ellos. Asimismo, podemos decir que es una organización con finalidad económica y con responsabilidad
social, generadora de productos y servicios que satisfacen necesidades y expectativas del ser humano.

A nivel jurídico, la empresa no tiene un estatuto propio motivo por el cual debe atenderse al régimen
legal de sus diversos elementos descriptos, resultando de interés los aportes del derecho tributario y del
derecho laboral. De esta manera, la hacienda o fondo de comercio será su elemento objetivo en tanto
puede ser objeto del negocio de “transferencia” regido por la ley 11.867. Esto implica, además, cierta
separación patrimonial entre acreedores del “fondo” y acreedores personales de las partes.

El empresario será su elemento subjetivo, sea persona individual o jurídica, como el sujeto que es
titular de todas las relaciones jurídicas y responsable de ella en tanto la organiza, dirige, explota y
percibe sus resultados. Un mismo empresario puede tener varias empresas como unidades productivas
independientes, tal como lo describe Jaime Anaya1.

Por otra parte, los trabajadores estarán regidos por las normas laborales, previsionales y sindicales
respectivas. Por todo ello, el término “empresa” se utiliza en Derecho en forma ambigua ya que ora
designará al establecimiento comercial o industrial, o se referirá al empresario titular y responsable de
su acontecer, o señalará la actividad cumplida; todo lo que exige diferenciar en cada caso los alcances
de la expresión.

Como podemos apreciar, el concepto de empresario ha evolucionado en el mundo de la situación de


empresario capitalista como promotor, propietario y administrador a una concepción de empresario
profesional que solo promueve y administra a la empresa, sin ser su dueño o propietario. En efecto,
históricamente, las funciones del empresario pasaron de ser el suministrador del capital (teoría de Carlos
Marx) a otras: organizador de los restantes factores de producción, tomador de decisiones dentro de la
estructura empresarial, tomador del riesgo del negocio.

Ahora bien, cuando las funciones descriptas están fragmentadas entre distintas personas o cuando el
empresario no aporta capital porque lo toma prestado de terceros, cuando traslada el riesgo mediante
múltiples instrumentos jurídicos (seguros, opciones, derivados, etc.) y cuando traslada la organización
económica y las decisiones a asesores, mandatarios o empleados nos preguntamos…

1 Anaya, Jaime, “El marco jurídico de la empresa”, Tratado de la Empresa (Dirección: Ana I. Piaggi), T. I, Ed. Abeledo Perrot, Buenos Aires, 2009,.

20
Régimen Jurídico Aplicado [UNIDAD 1: Conceptos introductorios]

¿Qué es lo que define al empresario?

Podríamos decir que lo que lo define es ser “el centro” de una serie de contratos mediante los cuales la
empresa adquiere su configuración.

Por su parte, para el derecho laboral lo que define al empresario es la “dirección


y organización de la empresa”. Al respecto, dice la ley que es “quien dirige la
empresa por sí, o por intermedio de otras personas y con el cual se relacionan
jerárquicamente los trabajadores, cualquiera sea la participación que las leyes
asignen a éstos en la gestión y dirección de la empresa” (art. 5º, segunda parte,
Ley de Contrato de Trabajo).

La ley laboral reconoce al empresario la facultad de organizar económica y técnicamente la empresa


(art. 64 LCT). Esto implica las siguientes potestades:

a) de organización;

b) de dirección;

c) disciplinaria;

d) de variar unilateralmente ciertas modalidades del trabajo y

e) de denunciar sin causa el contrato de trabajo.

Sin embargo, tenga en cuenta que, en derecho laboral, no siempre la noción de “empleador” se identifi-
ca con la de “empresario” ya que hay empleadores que no revisten tal calidad. Sentado ello, el concepto
de “empresario” permite distinguir diversas categorías o roles que pueden o no coincidir en una misma
persona:

a) “de título”: es el sujeto titular de la empresa y responsable por sus obligaciones.

b) “de gestión”: quien dirige la empresa.

c) “de riesgo” es el accionista o socio de la sociedad.

Además, debe tenerse presente la existencia de un empresario “indirecto”, como es el caso de la persona
física controlante de la sociedad titular de la empresa, sujeto a las responsabilidades societarias (art.54
ley 19.550) y concursales (art.161 inc.2º ley 24.522) pertinentes.

3.1.4.1. La empresa como sociedad

Para continuar con nuestro análisis le presentamos el artículo primero de la actual Ley general de
sociedades, el cual establece que “habrá sociedad si una o más personas, en forma organizada conforme
a uno de los tipos previstos en esta ley, se obligan a realizar aportes para aplicarlos a la producción o

21
intercambio de bienes o servicios, participando de los beneficios y soportando las pérdidas…”. Ahora bien,
al haber desaparecido el régimen de las sociedades civiles de los arts. 1648 y siguientes del derogado
Código Civil (Ley 340), que no exigía, para que exista sociedad, la “forma organizada” ni la aplicación de
los aportes a “la producción e intercambio de bienes y servicios”, resulta que en el concepto legal actual
de la “sociedad” es imprescindible el “objeto empresario”, o sea la existencia de una organización para
la producción e intercambio de bienes y servicios.

Por su parte, el art. 1442 del Código Civil y Comercial, entre las disposiciones generales para los
contratos asociativos, dispone que éstas se aplican a todo contrato de colaboración, de organización
o participativo, con comunidad de fin “que no sea sociedad”. De tal suerte, toda asociación de dos o
más personas con fines de lucro, donde haya aportes para obtener utilidades de su aplicación pero sin
explotar una empresa, no es sociedad y queda subsumida en algunas de las figuras de los “contratos
asociativos” que en el código son contratos sin personalidad jurídica (arts.1442 a 1478). En definitiva,
a partir de la ley 26.994, las sociedades no se denominan más “comerciales” pero deben ser todas
“empresarias”.

3.1.5 El establecimiento comercial, industrial, agropecuario o de servicios

La empresa y el establecimiento comercial, industrial o de servicios no son lo mismo porque…

…el establecimiento es una parte de la empresa (hacienda o sustrato material) y no el todo


(que incluye personal, know how3, etc.).

Sin embargo, como la ley habla del titular (elemento personal), resulta relevante que usted comprenda
que se trata de dos conceptos análogos y que la reiteración pretendió ser ejemplificativa en el sentido
de no dejar dudas de que el titular de un negocio debe siempre llevar libros.

En el punto cabe recordar que la ley 11.867, cuya vigencia se mantiene, declara elementos constitutivos
de un “establecimiento comercial o fondo de comercio”, a los efectos de su transmisión por cualquier
título…

“las instalaciones, existencias en mercaderías, nombre y enseña comercial, la clientela, el derecho


al local, las patentes de invención, las marcas de fábrica, los dibujos y modelos industriales, las
distinciones honoríficas y todos los derechos derivados de la propiedad comercial e industrial o
artística”(art.1º).

3 conjunto de conocimientos técnicos y administrativos que son indispensables para conducir un proceso, ya sea comercial, industrial, etc. y que no están protegidos por una patente
pero son determinantes para el éxito de una empresa. Es un bien intangible.

22
Régimen Jurídico Aplicado [UNIDAD 1: Conceptos introductorios]

Se dispone además de un procedimiento de precio, información, edictos y oposiciones necesariamente


previos al documento definitivo de transferencia que será objeto de inscripción en el Registro Público
de Comercio (art. 12). La obligación contable pesa sobre el titular de un fondo de comercio, sea su
propietario, locatario, comodatario o que lo detente a cualquier título siempre que tenga el control de
los recursos y de sus resultados, o sea que lo explote. Tal titularidad le da carácter de empresario.

3.1.6 Exclusión de profesionales liberales y agropecuarios

Por disposición del art. 320 del CCyC, segundo párrafo, primera parte, se excluye a los profesionales
liberales y a las actividades agropecuarias cuando se trata de personas humanas que, aunque desarrollen
actividad económica organizada, no llegan a constituirse como “empresa”. Transcribimos a continuación
el artículo mencionado:

(…) “Sin perjuicio de lo establecido en leyes especiales, quedan excluidas de las obligaciones previstas en
esta Sección las personas humanas que desarrollan profesionales liberales o actividades agropecuarias
y conexas no ejecutadas u organizadas en forma de empresa. Se consideran conexas las actividades
dirigidas a la transformación o a la enajenación de productos agropecuarios cuando están comprendidas
en el ejercicio normal de tales actividades. También pueden ser eximidas de llevar contabilidad las
actividades que, por el volumen de su giro, resulta inconveniente sujetar a tales deberes según determine
la jurisdicción local”.

¿Cómo determinamos cuando una actividad de un profesional se considera


empresa?

En este sentido, lo invitamos a acudir al derecho tributario. De diversos dictámenes sobre distintos
impuestos, resulta el siguiente concepto tributario de la empresa: “la organización industrial, comercial,
financiera, de servicios, profesional, agropecuaria o de cualquier otra índole que, generada por el
ejercicio habitual de una actividad económica basada en la producción, extracción o cambio de bienes
o en la prestación de servicios, utiliza como elemento fundamental para el cumplimiento de dicho fin
la inversión de capital y/o el aporte de mano de obra asumiendo en la obtención del beneficio el riesgo
propio que la actividad que desarrolla”

Por tales razones se exceptúan los servicios profesionales, técnicos o científicos en donde el componente
intelectual prevalece sobre el aporte de capital y/o de la mano de obra auxiliar o de apoyo. Resulta,
por tanto, de particular relevancia para determinar la existencia de una empresa comercial a los fines
tributarios, determinar si el trabajo de los otros profesionales empleados con título habilitante tiene
aptitud o no para suplantar o independizarse del trabajo del profesional titular. De esta manera, estamos
en condiciones de afirmar que existe empresa en el primer caso y no en el segundo.

23
24
INTRO
TEMA 1
TEMA La contabilidad
obligatoria
4

TEMA 2
TEMA 3
A continuación, transcribimos la norma básica en la materia que es el art. 320 del Código Civil y Comer-
cial de la Nación y que dispone:

“Están obligadas a llevar contabilidad todas las personas jurídicas privadas y quienes realizan
una actividad económica organizada o son titulares de una empresa o establecimiento comercial,

TEMA 4
industrial o de servicios. Cualquier otra persona puede llevar contabilidad si solicita su inscripción
y la habilitación de sus registros o la rubricación de sus libros como se establece en esta misma
Sección”.
TEMA 5

“Sin perjuicio de lo establecido en leyes especiales, quedan excluidas de las obligaciones previstas en esta
Sección las personas humanas que desarrollan profesionales liberales o actividades agropecuarias y con-
exas no ejecutadas u organizadas en forma de empresa. Se consideran conexas las actividades dirigidas
a la transformación o a la enajenación de productos agropecuarios cuando están comprendidas en el
ejercicio normal de tales actividades. También pueden ser eximidas de llevar contabilidad las actividades
que, por el volumen de su giro, resulta inconveniente sujetar a tales deberes según determine la jurisdic-
ción local”.
SINTESIS
Es necesario advertir, que este nuevo texto debe complementarse, en primer lugar, con otras disposicio-
nes contables del mismo código unificado y, en segundo término, con lo que surge de leyes especiales
no derogadas por la nueva legislación. A los fines de una mejor comprensión de esta obligación de llevar
contabilidad podemos agrupar a quienes están obligados en cuatro categorías:

a. Las personas jurídicas privadas donde el fundamento de la exigencia contable debe bus-
carse en su recurrencia habitual al crédito (sociedades y cooperativas) o en la adminis-
tración de intereses de terceros.

b. Los entes contables determinados sin personalidad jurídica están obligados por ley, como
es el caso de las agrupaciones de colaboración, uniones transitorias y consorcios de coop-
eración. El fundamento de la obligación contable estaría en una calificada rendición de
cuentas de los administradores y representantes a los partícipes de estos contratos.

c. Las personas humanas que desarrollan ciertas actividades económicas, como son el ejer-
cicio de una actividad económica organizada, la titularidad de una empresa y la titularidad
de un establecimiento comercial, industrial o de servicios. El fundamento debe buscarse
en la recurrencia habitual al crédito propio de estas actividades.

d. Los agentes auxiliares del comercio regidos por normas especiales, como es el caso de
martilleros y corredores. El fundamento debe buscarse en su conexión por intervención o
facilitación con operaciones económicas que interesan a terceros.

Tomemos en consideración que el Código, no en todos los casos, prevé la inscripción registral previa de
todos los obligados a llevar contabilidad, como es el caso de las simples asociaciones, los sujetos con ac-
tividad económica organizada, etc., destacándose que se ha derogado la obligación de todos los sujetos
mercantiles de matricularse en el Registro Público.

4.1 Registros contables


Las disposiciones fundamentales están previstas en los arts. 321 a 328 y 330/331 del CCyC, a los cuales lo
remitimos a usted para su atenta lectura. Se destaca, la posibilidad de gestionar autorización para utilizar
“ordenadores y otros medios mecánicos, magnéticos o electrónicos” para todos los sujetos obligados y
no solo para las sociedades comerciales, permitiendo también conservar la documentación en soporte
digital, lo cual implica una facilidad de archivo y conservación.

El art. 325, exige que los libros y registros permanezcan en el domicilio del titular. Respecto de los ca-
sos de contabilidad informática, si bien la ley no hace mención expresa de los mismos, algunos autores
han interpretado, que, con independencia del “alojamiento” de la información en forma externa (nube,
“cloud compution”4 o servidor externo) la misma debe estar accesible desde el domicilio al que hace
referencia el artículo. Otros autores sostienen que estaría implícita la obligación de que los servidores
4 Literalmente “computación en la nube”, es un tipo de servidor externo

26
Régimen Jurídico Aplicado [UNIDAD 1: Conceptos introductorios]

estén alojados dentro del territorio nacional, con el fin de que puedan controlarse o incautarse, por
ejemplo, en el caso de una quiebra.

Por su parte, el art. 327, indica en forma expresa, que las formalidades también rigen para los libros
subdiarios. El art. 320, primera parte, in fine, contempla la posibilidad de la adhesión voluntaria a la con-
tabilidad. Esta disposición resulta útil para los casos dudosos de sujetos que no tengan claro si están o no
comprendidos en la obligación contable y la asuman expresamente para evitar inconvenientes.

27
28
INTRO
TEMA 1
TEMA Contratos en
moneda extranjera
5

TEMA 2
Es habitual en los contratos que se establezcan obligaciones de dar sumas de dinero en moneda extran-

TEMA 3
jera. Lo más frecuente es establecer el precio en dólares. El CCyC ha generado controversias respecto
de este particular al establecer criterios contradictorios en los artículos 765 y 766. Lo invitamos a leerlos
para poder continuar el análisis:

Artículo 765: “Concepto. La obligación es de dar dinero si el deudor debe cierta cantidad de moneda,
determinada o determinable, al momento de constitución de la obligación. Si por el acto por el que se ha
constituido la obligación se estipuló dar moneda que no sea de curso legal en la República, la obligación

TEMA 4
debe considerarse como de dar cantidades de cosas y el deudor puede liberarse dando el equivalente en
moneda de curso legal”.

Artículo 766.- Obligación del deudor. El deudor debe entregar la cantidad correspondiente de la especie
designada.

Ahora bien, lo primero que debemos tener en cuenta es que la moneda extranjera no tiene carácter
dinerario, por lo cual, si la obligación está pactada en moneda extranjera es considerada como dar can-
TEMA 5

tidades de cosas.

Respecto al pago, el art. 765 establece que el deudor tiene la opción de liberarse dando el equivalente
en moneda de curso legal, lo cual se contradice con lo establecido por el artículo 766 al establecer que
el deudor debe entregar la cantidad correspondiente de la especie designada, por lo tanto si se obligó
a entregar, por ejemplo dólares, debería entregar la misma moneda. Sin embargo la opción establecida
SINTESIS

en favor del deudor de optar por desobligarse pagando en pesos no se trata de una norma de orden
público, motivo por el cual, los contratantes pueden pactar expresamente no aplicarla.

Esto implica, en definitiva, que las partes pueden acordar válidamente que el contrato fijado, por
ejemplo, en dólares deba pagarse en dólares y no en pesos.

En síntesis:

En los actos en los que se estipuló dar moneda que no sea de curso legal:

• La obligación debe considerarse como de dar cantidades de cosas.

• El deudor puede liberarse dando el equivalente en moneda de curso


legal (art. 765).

• No obstante, dicha mención no es de orden público y, consecuente-


mente, puede renunciarse.

• Se puede establecer una forma de equivalencia de moneda que no


necesariamente sea la que establezca el BCRA.

5.1. Jurisdicción Comercial


Con la unificación de las normas civiles y comerciales en el CCyC diversos autores se han planteado la
subsistencia de la jurisdicción comercial. Al respecto, si bien quedó derogado el art. 6º del Código de
Comercio, a nivel nacional está vigente el art. 43 bis del Dec. Ley 1285/58, que dispone:

“Los jueces nacionales de primera instancia, en lo comercial de la Capital Federal, conocerán en todas
las cuestiones regidas por las leyes mercantiles cuyo conocimiento no haya sido expresamente atribuido
a los jueces de otro fuero. Conocerán, además, en los siguientes asuntos: a) Concursos civiles; b) Ac-
ciones civiles y comerciales emergentes de la aplicación del Decreto N°15.348/46, ratificado por la Ley
N°12.962; c) Juicios derivados de contratos de locación de obra y de servicios y los contratos atípicos a los
que resulten aplicables las normas relativas a aquéllos, cuando el locador sea un comerciante matricu-
lado o una sociedad mercantil…”.

Como lo explica acertadamente el Dr. Favier Dubois5, a pesar de la supresión “nominal” de lo mercantil
en el nuevo Código, que crea una apariencia derogatoria, la realidad sustantiva es que su materia ha per-
manecido y, en muchos campos, se ha extendido. Por todo ello cabe concluir que, a partir de la vigencia
del nuevo Código, la autonomía legislativa del Derecho Comercial se desplaza del Código hacia las leyes
comerciales no codificadas que no fueron derogadas.

5 Favier Dubois, Eduardo M. (h) (2016) “Manual de derecho comercial”, Buenos Aires, Editorial La Ley, 2016.

30
Régimen Jurídico Aplicado [UNIDAD 1: Conceptos introductorios]

Es de fundamental importancia recordar que la Constitución Nacional establece, y exige una legislación
diferenciada entre la materia civil y la comercial, sea en textos separados o unificados (art. 75 inc.12 de
la C.N.). La constitución en su parte pertinente dice:

(…) “12. Dictar los Códigos Civil, Comercial, Penal, de Minería, y del Trabajo y Seguridad Social, en cuer-
pos unificados o separados, sin que tales códigos alteren las jurisdicciones locales (…)

Teniendo en cuenta lo anterior, podemos decir que, por disposición de nuestra Ley Fundamental, queda
zanjada cualquier discusión acerca de la subsistencia de la jurisdicción comercial.

31
32
INTRO
SINTESIS

TEMA 1
Síntesis de la unidad

TEMA 2
Durante el desarrollo de esta unidad introductoria hemos visto el concepto de derecho moderno y el
contenido de “justicia” como característica asociada. Con el advenimiento de las estructuras del Estado
tal como lo conocemos hoy, hemos definido al derecho positivo como el conjunto de leyes vigentes en

TEMA 3
un país. A los fines de su estudio en forma organizada, hemos enunciado las diversas ramas en que se
lo clasifica pero resaltando que constituyen un sistema dinámico y que forman parte de un todo y de
ningún modo se comportan como si fueran compartimentos estancos. Con ese criterio, establecimos las
diferencias entre el Derecho Público, que es en esencia un conjunto de normas que regulan la actividad
del Estado en cumplimiento de sus fines esenciales, y el Derecho Privado que es el conjunto de normas
que regulan la relación jurídica entre los particulares.

TEMA 4
Hemos establecido las diferencias conceptuales entre Derecho Público y Orden Público. Esa diferenciación
nos permitió conocer la función protectora y tuitiva que realiza el Estado.

Al analizar el artículo 1ro del CCyC, que enuncia las fuentes del derecho privado, hemos puesto de
manifiesto la importancia de dicha enunciación y la jerarquización que dispone y la particular relevancia
de los derechos humanos como fuente de derecho en consonancia con la Constitución Nacional. El
principio de Buena Fe, consagrado expresamente por el CCyC, cobrará particular importancia, más
TEMA 5

adelante, cuando debamos aplicar este principio en lo atinente a la redacción y ulterior interpretación
de los contratos.

Respecto de los sujetos de las diversas relaciones jurídicas, tuvimos ocasión de analizar y diferenciar
los sujetos y entes a los que hace referencia el CCyC, que no hace mención del “Comerciante” pero
incorpora nuevos sujetos comerciales que son los obligados contables y de conformidad con el art. 320
CCyC analizamos el concepto de actividad económica organizada, empresa y establecimiento comercial,
SINTESIS

industrial o de servicios. Distinguimos los diferentes sujetos de la actividad económica organizada y la


exclusión de la norma de los profesionales liberales y agropecuarios en materia de contabilidad. En esta
materia y en los estados contables tuvimos oportunidad de conocer la normativa básica de la misma que
contempla el art. 320 CC y C.

Otro punto de interés, que tendrá aplicación práctica en los contratos que estudiaremos en las unidades
siguientes, lo constituye sin dudas la celebración de contratos en moneda extranjera, la aparente
discrepancia de normas y finalmente la interpretación de la misma de modo correcto para proceder a
su aplicación práctica.

Hemos analizado las posibles controversias, luego de la unificación de las normas civiles y comerciales
en el Código Civil y Comercial de la Nación respecto de la subsistencia de la jurisdicción comercial
resolviéndolas a la luz de la Constitución Nacional.

En definitiva, hemos abordado institutos que tendrán aplicación general y práctica en la mayoría de los
temas que desarrollaremos a lo largo de la asignatura.

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Régimen Jurídico Aplicado [UNIDAD 1: Conceptos introductorios]

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