Alumna: Javiera Monje Pasaporte: F57323227 Asignatura: Tecnologías Ambientales Fecha del informe: 26/11/2023 1. Desarrollo 1.1 Resumen del Articulo "Mucho ruido y ¿pocas nueces?: así nos enferma el ruido”
Ane Arregi Otxotoren, investigadora predoctoral del grupo Grupo de Basque
Environmental Health Research Group (B-EHRG), aborda en su artículo bajo el título "Mucho ruido y ¿pocas nueces?” la creciente inquietud acerca del impacto del ruido ambiental en la salud. Comienza haciendo referencia a una advertencia emitida por el premio Nobel Robert Koch hace más de un siglo, enfatizando la necesidad de abordar el ruido con la misma importancia que otras enfermedades. Pues, según la OMS, se destaca que el ruido ambiental ha ascendido a ser el segundo factor de riesgo ambiental para la salud, afectando a 22 millones de personas en la Unión Europea. El ruido ambiental se define como cualquier sonido no deseado derivado de la actividad humana, y se establece que exposiciones a niveles superiores a 55 dB, equivalentes al período día-tarde-noche, son perjudiciales. Además, se resalta el impacto adverso en la salud, al incluir problemas para dormir, deterioro cognitivo, alteraciones metabólicas y afecciones cardiovasculares. Por otra parte, el artículo subraya que el ruido no solo incide en la audición, sino que también provoca efectos no auditivos reconocidos, como trastornos del sueño, deterioro cognitivo, alteraciones metabólicas y cardiovasculares. De lo anterior, se enfatiza que la molestia es el principal efecto del ruido, según un modelo reciente de reacción al ruido, que destaca la vía indirecta centrada en la percepción cognitiva y la respuesta emocional. Por otro lado, se aborda el tema de la habituación psicológica al ruido, donde las personas pueden acostumbrarse. De ello, se destaca que esto no implica habituación fisiológica. La respuesta fisiológica del cuerpo al ruido es inevitable, activando tanto el eje hipotalámico-pituitario-suprarrenal como el sistema nervioso simpático, lo que conlleva la liberación de hormonas del estrés. Se explica que el estrés crónico resultante puede llevar a la sobrecarga alostática, lo cual resulta relevante, ya que dicha sobrecarga está relacionada con problemas de salud como inflamación, supresión inmunológica y riesgos cardiovasculares. Finalmente, el artículo concluye resaltando la importancia de intervenir para reducir la exposición al ruido, proponiendo medidas efectivas como modificaciones en la planificación urbana, restricciones de velocidad, construcción de barreras de ruido y citando el ejemplo del proyecto de superislas en Barcelona. Junto con lo antes mencionado, se insta a considerar el modelo de ciudad en el que deseamos vivir, especialmente dada la proyección de un aumento en la población urbana. 1.2 Opinión Critica La investigación de Ane Arregi Otxotoren sobre el impacto del ruido ambiental en la salud es reveladora y, a la vez, alarmante. Al comenzar con la advertencia de Robert Koch, la autora establece un enlace histórico que resalta la necesidad de crítica de abordar el ruido con la misma gravedad que otras enfermedades. La magnitud del problema se subraya al revelar que el ruido ambiental se ha convertido en el segundo factor de riesgo ambiental para la salud, afectando a una cantidad considerable de personas en la Unión Europea, lo cual se fundamenta de la OMS (Organización Mundial de la salud). Además, el artículo detalla de manera impactante los efectos adversos del ruido en la salud, desde trastornos del sueño hasta riesgos cardiovasculares, resaltando que la molestia es el principal resultado. Lo cual, en mi opinión me parece sumamente interesante, pues nunca imagine las grandes repercusiones del ruido, y por supuesto pienso que es necesario difundir esta información. Por otra parte, el artículo aborda de manera efectiva la habituación psicológica al ruido, subrayando la distinción entre la habituación psicológica y fisiológica. Explicando de esta forma, la respuesta fisiológica del cuerpo al ruido, incluyendo la activación del eje hipotalámico-pituitario-suprarrenal y el sistema nervioso simpático. Lo anterior, proporciona un contexto valioso para que los lectores comprendan los riesgos a largo plazo, como la sobrecarga alostática. El llamado a la acción al final del artículo es tanto persuasivo como práctico, ya que la autora propone medidas concretas, desde modificaciones en la planificación urbana hasta restricciones de velocidad y la construcción de barreras de ruido, respaldadas por el ejemplo del proyecto de superislas en Barcelona. Además, el artículo no solo presenta hechos impactantes sobre los peligros del ruido ambiental, sino que también motiva a la acción inmediata, y genera consciencia en el lector, destacando la importancia de crear entornos urbanos más saludables.