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BOLILLA 3. - TITULOS DE CREDITO.

TITULOS DE CREDITO- CARACTERES ESENCIALES.

Los caracteres que desarrollaremos son peculiares, propios y genéricos en ellos.


Dentro de algunos títulos de crédito en particular (como la letra de cambio, pagare y
cheque), que tienen caracteres propios de su especie como lo es la abstracción, formalidad y
completividad.

CARACTER -NECESARIO- DEL DOCUMENTO.

CONCEPTO.
El concepto necesario del titulo de crédito en tanto documento constitutivo y dispositivo
del derecho cartular; sobre esta base, se puede suministrar un concepto lato de necesidad,
expresando que es la característica esencial del documento, la cual hace imprescindible tener el
titulo de crédito para contar y poder disponer del derecho cartular en él representando.
Este concepto halla su sustento lógico-jurídico en el análisis de la estructura documental
del titulo de crédito, en razón de ser éste un instrumento que ha incorporado representativamente
una declaración de voluntad con contenido económico que ha hecho de él un documento de
características constitutivas, que si bien cuenta con aptitud probatoria, esta se ve absorbida por
la naturaleza constitutiva y, debido a que la compenetración entre derecho y documento es una
conexión permanente entre ambos elementos, tiene ademad aptitud dispositiva, la cual hace que
la adquisición y el ejercicio de los derechos cartuchos que emergen de la declaración contenida
en el documento queden circunscriptos al tenor literal representado en él, pues tal promesa
obligacional tiene existencia para el derecho en tanto adquiere forma documental.
Esa necesidad apunta a tener que poseer el documento en su materialidad para crear,
tener, transmitir, ejercer y aun extinguir el derecho cartáceo que en él vive.
La mentada declaración de voluntad, representada en forma documental, atañe a la
existencia misma del derecho, en tanto, derecho cartular, pues este adquiere naturaleza cartácea
debido a la forma esencial de expresarlo o representarlo en el instrumento; de allí surge la
constitutividad del documento respecto de la relación cartácea en el representada.
En resumen, EL DERECHO CARTULAR AL ESTAR EXISTENCIALMENTE VINCULADO
CON EL DOCUMENTO, PRODUCE LA NECESIDAD DE TENER ÉSTE PARA PODER ADQUIRIR,
DISPONER, Y EJERCER AQUEL.

FUNDAMENTO DE LA NECESIDAD.
Radica en la espeical estructura documental del titulo de crédito, que en tanto documento
cumple funciones constitutivas y dispositivas respecto del derecho cartular que lleva incorporado.
El titulo de crédito es un documento de carácter constitutivo, en razón de ser continente
del derecho cartular que en él se ha documentado, a la vez que su posesión resulta condición
imprescindible para el ejercicio de ese derecho.
Resulta absolutamente necesario que el legitimado activo tenga o posea el documento
para exigir, entregar, negociar y transferir el derecho cartáceo que en él se ha representado, lo
cual halla sustento positivo en nuestro ordenamiento jurídico.

EFECTOS DEL CARACTER NECESARIO DEL DOCUMENTO.


El efecto más destacado del carácter necesario del TdeC, considerado como documento,
es, entre otros, que el derecho en él representado, en tanto derecho cartular, sólo puede nacer,
existir y ser ejercido exclusiva y excluyentemente por su legitimo portador.
La conexión permanente entre documento y derecho que hacen a su estructura funcional,
hace ineludible el recuadro de la posesión del sustrato material para crear, transferir, realizar y aun
extingue el derecho como derecho cartular.
Este carácter necesario del TdeC es el patrocinador de la función de presentación.
Este carácter es el que legitima al deudor requerido de pago en su negativa a cumplir la
obligación cartacea representada en el titulo si el requirente no le ofrece la entrega o restitución
del documento.
NO hay derecho cartáceo sin titulo y de que no se concibe titulo de crédito sin un derecho
individualizado en él, pues a donde va el titulo va el derecho; y si bien el titulo no lo afirma ni
perfecciona, ya que solo le sirve de soporte o sustrato material, se puede afirmar que lo lleva
consigo, debido a que el sistema cartular regula que el derecho sobre el título conlleva el derecho
del titulo.
El carácter necesario, para concluir, tiende a tutelar genéricamente los valores de certeza,
rapidez y seguridad.

CARACTER -LITERAL- DEL DERECHO.

CONCEPTO.
El derecho representado en un titulo de crédito, en tanto derecho cartular, es de carácter
literal en razona de que su existencia, cuantía y exigibilidad se rige exclusivamente por el tenor
escrito en el documento.
Cualquier modificación, disminución o mutación de los TdeC sólo puede resultar de los
términos textuales del documento.
Este caracter del derecho cartáceo contenido en el documento esta íntimamente
relacionado con el carácter necesario del titulo.
El documento es constitutivo en virtud de que se ha incorporado representativamente una
declaración de voluntad con contenido económico; ello se ha producido en oportunidad en que el
librador del titulo ha liberalizado la relación cartácea.
Para que la relación obligaiconal de derecho comun sea considerada una relación cartular,
debe por fuerza ser instrumentada en forma documental.

El sujeto activo de cada relación cartular nada puede pretender que no se halle
liberalizado o escrito en el titulo, y el sujeto pasivo de cada una de ellas, ademas de no poder
enervar la pretensión jurídico-economice del acreedor de que cumpliendo el requerimiento en los
títulos textuales del titulo, quedará liberado.

FUNDAMENTO DE LA LITERALIDAD.
Como derecho cartular solo existe en el documento en la medida en que se lo ha
liberalizado, el fundamento de su carácter literal radica en la naturaleza documental adquirida por
ese derecho al ser incorporado o representado en el titulo en oportunidad en que su librador lo
creó con su firma.
El fundamento por el cual el derecho bartular tiene carácter literal reside en la naturaleza
documental que adquiere al ser representado en el titulo de crédito.
También, el fundamento es la confianza que supone la objetivación de la declaración de
voluntad contenida en un titulo de crédito.

EFECTOS DEL CARACTER LITERAL DEL DERECHO.


El más importante de los efectos es que el acreedor no puede exigir y percibir más de lo
expresado en el título, y el deudor requerido, para reducir su obligación, no se leude valer de
otros elementos jurídicos extra los que no sean los literalizados objetiva y formalmente en el
documento.
El carácter literal del derecho representado en un titulo de crédito requiere una carga de
atención bilateral, pues cada uno de los sujetos intervinientes en las relaciones cartáceas, activa
o pasivamente, se deberá atender exclusivamente a lo escrito en el titulo para determinar sus
derechos y obligaciones.
La bilateralidad de la literalidad halla su justificación en la circunstancia de que toda
disminución, alteración, modificación o extinción del derecho bartular se debe fundar, para tener
validez en el ámbito de las relaciones cartáceas, en la expresión textual del documento, siendo
irrelevantes los posibles elementos extracartulares que pudieran surgir de negocios o relaciones
ajenas al titulo de crédito.
La literalidad es un carácter común a todos los títulos de crédito y, junto con el carácter
necesario del documento, contribuye a tutelar la certeza en la adquisición del derecho; tiende
más energéticamente a afianzar la rapidez en la negociación y circulación de los créditos, y
propicia la seguridad en su realización final al tiempo del vencimiento del titulo. El derecho
bartular solo podrá ser exigido y atendido de acuerdo con el tenor literal del documento que le da
existencia cartácea.
Las relaciones obligaciones que emanan de un título de crédito se rige, en el ámbito del
sistema cartular, por lo escrito en el título. Este carácter es esencial y común a todos los títulos de
crédito, y precisamente por ser esencial al derecho bartular contenido en el documento no
desaparece como tal en caso de que el requerimiento de pago sea entre el librador y el tomador
del titulo.
La literalidad adquiere su máxima significación, respecto del sujeto que recibe el titulo de
crédito, una vez que éste ha circulado, esto es, frente al tercero portador de buena fe, en razón
de que este sujeto sólo cuenta, al recibir el titulo, con lo expresado literalmente en su teto; debido
a ello, y en tutela de los valores esenciales de certeza, rapidez y seguridad, se le otorga plena
relevancia.

CARACTER -AUTÓNOMO- DEL DERECHO.

CONCEPTO.
El carácter autónomo del derecho cartáceo contenido en un titulo de crédito es tal debido
a que el titular de éste lo adquiere en forma originaria; o sea que la adquisición del derecho NO
deriva del tradens, sino que nace, ex novo, en la cabeza del accipiens, en oportunidad de recibir
el titulo, mediante la respectiva tradición, de acuerdo con la ley de circulación de éste; en tal
caso, el nuevo titular NO es sucesor del sujeto que le transmitió el titulo, sino que lo adquiere en
forma originaria, por no derivada.
El nuevo portador regular del título de crédito adquirió y puede ejercitar un derecho
propio, originario, distinto, independiente y no restringiste por las relaciones jurídicas existentes
entre los anteriores poseedores del titulo y el deudor.
El principio de autonomía significa que el derecho representado en un documento
cartáceo será ejercido, por su portador legitimado, con prescindencia de las situaciones
subjetivas de sus tenedores anteriores.

FUNDAMENTO DE LA AUTONOMIA.
El fundamento lógico-jurídico de la autonomía del derecho cartular radica en la postura
asumida por el legislador al instituir el sistema regulador de las relaciones cartácea.
La intervención de los sucesivos poseedores (del título) queda relegada entre los
elementos materialmente imponderables, pues se le otorga una función puramente instrumental,
ya que el acto de transmisión que ellos cumplen es el medio por el cual, a través del documento,
se vincula directamente al deudor por el poseedor ultimo del título del crédito.
Cualquiera sea la situación de los sujetos intervinientes en las transmisiones del título,
legítima o ilegitima, cumplen una función instrumental que permite al ultimo poseedor vincularse
en forma directa con el deudor por medio del documento. Tal es la justificación lógica de la
adquisición originaria del derecho es la justificación lógica de la adquisición originaria del derecho
y consecuentemente, el fundamento de la autonomía del derecho del poseedor de buena fe del
título.
En el ámbito de las relaciones carteas las transmisión del titulo, que implica la adquisición
de la relación real del documento, atento a su naturaleza jurídica de cosa mueble, conlleva la
adquisición originaria del derecho cartular en él contenido.

EFECTOS DEL CARACTER AUTONOMO DEL DERECHO.


Durante la circulación y transmisión del derecho de crédito incorporado en el documento
no se produce la acumulación de vicios sustanciales que pudieran derivarse de cada transmisión
del titulo.
Hay que destacar que cada sujeto transmitiese del documento participa y, en su caso,
asume durante la circulación de este, una relación jurídica independiente de las demás
establecidas o que se pueda establecer respecto del documento recibido y transmitido.
La posesión del documento luego de que éste ha cumplido con las formalidades que el
sistema bartular exige para considerarlo portador legitimado del título, es decir, que lo posea en
su materialidad y al presentarlo acredite que éste llego a su poder habiendo cumplido regularme
con su ley de circulación.
Si bien la transferencia del titulo, en tanto documento, como objeto de relaciones reales se
puede considerar una adquisición derivada o derivagiva la transmisión que efectúa el tradens
produce el nacimiento de un derecho nuevo para el accipens.

ES IMPORTANTE DESARROLLAR EL MODO EN QUE OPERA LA AUTONOMIA RESPECTO DE


LOS TITULOS CAMBIARIOS: Letra de Cambio, Pagaré y Cheque.

Los papeles de comercio manifiesta el carácter autónomo del derecho representado en


cualquiera de las 3 clases de títulos que integran esta especie.
Tanto la letra de cambio y le pagare, son títulos cuya esencia es dude documentos “a la
orden”, como el cheque, son títulos cuya ley de circulación exige realizar las sucesivas
transmisiones mediante la tradición del documento, previo endoso.
El endoso produce 3 efectos: LEGITIMANTE (habilita al endosatario, sujeto en cuyo favor
se endosa y transmite el título, a ejercer todos los derechos y potestades cambiarias que emanen
del documento)- TRASLATIVO (produce la transmisión de la propiedad del documento y la
titularidad del derecho cambiario en él incorporado) y VINCULANTE (Constituye en el obligado
cambiario al endosante del titulo, quien con su forma se transforma en garante del pago de la
obligación cambiaria, cuando ella se torne exigible)
Es el efecto vinculante propio de los títulos cambiarios el que permite afirmar que del
pago del titulo responde, en primer lugar, su librador.
Tratándose de la letra, en primer lugar responde el sujeto que siendo girado acepta la
letra; en caso contrario, es decir, si no la acepta, el primer obligado sigue siendo el librador, como
en el pagare y cheque. Responden igualmente por el pago, el tomador que se transforme en
endosante y los endosantes que le sucedan ulteriormente, o sea, en definitiva, todos los
firmantes, quienes integran materialmente una cadena, la cual el otro el primer obligado, con el
doble carácter del acreedores y responsables eventuales: acreedores, cada uno, con respecto a
los anteriores poseedores del titulo; responsables, frente a los sujetos que le sucedieron en
aquella.
Desde el punto de vista del activo: cada sujeto que recibió el titulo adquirió un derecho
autónomo; y refiriéndolo al caso del portador legitimado, o ultimo endosatario, él tendrá un
derecho originario, por no derivarlo, respecto de cada uno de los firmantes del titulo que son
garantes del paso a su vencimiento.
Observando la relación cambiaría desde el punto de vista de pasivo, la obligación de los
sujetos firmantes, quienes han quedado obligados al pago, responsabilizándose cambiariamente
a éste, con prescindencia de las demás obligaciones asumidas por los demás firmantes
responsables.
Tal circunstancia posibilita que el portador legitimado del titulo pueda reclamar a todos los
demás firmantes el cumplimiento de la promesa de pago que aquel tiene incorporada.
Recapitulando, el portador legitimado de un papel de comercio podrá exigir su pago a
cualquiera de los firmantes-obligados en forma independiente, no importando, en el caso, si
alguna de las firmas sobrantes en el titulo cambiario ha sido efectuada o extendida por un sujeto
incapaz o inhabilitado o, una persona inexistente, o un mandatario que actúe con exceso de
poder, o que algunas de las mencionadas firmas pertenezcan a personas supuestas (art 7 del
dec); tales circunstancias, repetimos, aunque se presente aisladas o conjuntamente respecto de
uno o varios firmantes no obsta a la validez de las firmas restantes y, por ende, a sus respectivas
obligaciones, posibilitando exigir su cumplimiento independientemente de la suerte de las demás
obligaciones.
Se podría decir, que en el ámbito de las relaciones cambiarias el principio de autonomía
se puede expresar diciendo que el derecho cartular, desde el punto de vista del activo, es un
derecho autónomo u originario, y que desde el punto de vista pasivo, la correlativa obligación es
independiente respecto de las demás asumidas o documentadas en el papel de comercio por
cada uno de los firmantes del titulo.

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