ENVEJECIMIENTO CUTÁNEO - Material de Lectura

Dermatocosmiatria – Envejecimiento cutáneo
ENVEJECIMIENTO CUTÁNEO
El envejecimiento cutáneo es un proceso continuo en el que progresivamente, se producen

cambios en el aspecto y en las funciones de la piel.
Hay un declive en las funciones biológicas y en la capacidad para adaptarse al estrés

metabólico.
El paso del tiempo se relaciona con parte de estos cambios, aunque la exposición a la
radiación solar tiene un papel protagonista en el envejecimiento.
Edad cronológica: Es la edad que marca el documento.
Edad biológica o funcional: Es la que informa la edad real de las células y los órganos del
cuerpo, resulta decisiva en cuestión de longevidad.
Es difícil separar los aspectos que dependen solamente de la edad y de los derivados de la
exposición solar, por lo que normalmente se considera que una piel con gran “carga actínica”
(daños por exposición solar) es una piel envejecida.
Queda prohibida la reproducción total o parcial de este material por cualquier medio electrónico o
mecánico, sin autorización por escrito del autor.
La piel de las áreas más expuesta al sol o fotoexpuestas, muestran más envejecimiento,
como son, alteraciones de la pigmentación y arrugas.
Podemos diferenciar al envejecimiento cutáneo en:
• Envejecimiento intrínseco o biológico.
• Envejecimiento extrínseco o fotoenvejecimiento.
Envejecimiento Intrínseco o Biológico

El envejecimiento es un proceso continuo, universal e irreversible que determina una
pérdida progresiva de la capacidad de adaptación.
El envejecimiento intrínseco o biológico no se debe a factores ambientales modificables,

pero se asocia al avance de la edad, con el que se producen, incluso en la piel protegida del
sol, cambios clínicos, histológicos y fisiológicos.
Características principales:
• Envejecimiento cronológico, asociado con el avance de los años.
• Proceso continuo, universal e irreversible.
• Sin relación con factores ambientales modificables.
• Manifestaciones clínicas: adelgazamiento de la piel, xerosis, arrugas finas y atrofia,

sin cambios en la pigmentación.
Cambios epidérmicos durante el envejecimiento intrínseco
La piel experimenta cambios importantes en su estructura, incluso en las áreas

fotoprotegidas.
Se produce un adelgazamiento generalizado de la epidermis de un 10-50% entre los 30 y los

80 años, las alteraciones epidérmicas más importantes afectan al estrato
basal (principalmente las células madre) y sobre la unión dermoepidérmica, que sufre un
aplanamiento progresivo.
Este último cambio, reduce la superficie de contacto entre la epidermis y la dermis, con lo
que se incrementa la fragilidad cutánea y se facilita la formación de ampollas con los
traumatismos.
Queratinocitos
Los queratinocitos, llegan a su límite replicativo y entran en senescencia, permaneciendo en

la fase de reposo del ciclo celular.
La senescencia celular es el proceso iniciado como respuesta al estrés y daño ocurrido en

una célula, y constituye una ruta alternativa de respuesta a la muerte programada y es de
vital importancia para suprimir la formación de células cancerosas.
Aunque el paso del tiempo produce un descenso en la actividad mitótica de los

queratinocitos, en una piel envejecida paradójicamente hay una mayor predisposición a las
neoplasias.
Las células senescentes son más resistentes a la apoptosis, persisten largo tiempo sin
replicar o morir, pero debido al curso biológico, sus mecanismos reparadores del
metabolismo oxidativo tienen una menor eficacia.
La apoptosis es una vía de destrucción o muerte celular programada o provocada por el

mismo organismo, con el fin de controlar su desarrollo y crecimiento, puede ser de
naturaleza fisiológica y está desencadenada por señales celulares controladas
genéticamente. La apoptosis tiene una función muy importante en los organismos, pues
hace posible la destrucción de las células dañadas, evitando la aparición de enfermedades
como el cáncer, consecuencia de una replicación indiscriminada de una célula dañada.
Por estos motivos, durante el período de senescencia acumulan lesiones sobre las proteínas,
los lípidos y el ADN a causa del estrés oxidativo, aumentando la inestabilidad genética y la
presencia de mutaciones.
Cuando la célula acumula un cierto daño proteico y genético, puede tener lugar su
transformación neoplásica (una neoplasia es una masa anormal de tejido, cuyo crecimiento
excede y está descoordinado con el de los tejidos normales, y que persiste en su
anormalidad).
Melanocitos
Son las células que dan pigmento a la piel.
Se disponen a nivel de la capa basal epidérmica y contactan con los queratinocitos por
medio de sus dendritas, existe un melanocito por cada 4 o 10 queratinocitos.
Disminuyen entre un 8-20% por década, después de los 30 años de edad y desarrollan
heterogeneidad morfológica y funcional.
Con la exposición solar, se forman focos de melanocitos activados junto con áreas de menor
densidad celular, con células inactivadas.
Esto ocasiona una disposición parcheada en el color de la piel, con maculas

hiperpigmentadas (léntigos) mezcladas con zonas hipopigmentadas (hipomelanosis
guttata).
Células de Langerhans
Las células de Langerhans son las células más importantes del sistema inmunológico en la
piel, disminuyen con el envejecimiento y sufren una pérdida de eficacia en su función, con
una menor capacidad de captación de antígenos y de formación de dendritas para
presentarlos.
Se cree que esto puede explicar la disminución en la capacidad inmunológica de la piel

madura.
Cambios dérmicos en la piel
La dermis contiene los componentes de soporte, inervación y vascularización de la piel.
En la piel joven sana, su componente principal es el colágeno, con la edad y la exposición

solar, las fibrillas normales de colágeno son sustituidas por un material amorfo, homogéneo
y sin función que recuerda a la elastina.
Este fenómeno se conoce con el nombre de elastosis solar, que es más abundante en las
áreas fotoexpuestas.
Entre las fibras elásticas se produce un depósito de proteoglicanos y glucosaminoglicanos.
Hay otros cambios secundarios en la dermis envejecida, como la dilatación de los vasos, el
incremento del número y la actividad de los fibroblastos y la presencia de un infiltrado
inflamatorio variable.
La dermis está formada por células embebidas en una matriz compuesta

por GAGS (glicosaminoglicanos), fibras de colágeno y elastina, proteínas sintetizadas por las
células llamadas fibroblastos.
Esta matriz es la responsable de la firmeza, fuerza y elasticidad de la piel: los signos de

envejecimiento reflejan de cierta forma su “estado”.
La matriz de la piel envejecida y fotodañada se ve debilitada e irregular ya que la

radiación UV (en este caso la UVA que es la que logra penetrar hasta la dermis) afecta los
procesos de degradación de fibras dañadas y producción de nuevas proteínas.
Modificación en las fibrillas de colágeno y elastina
Las fibras conectivas (el colágeno y la elastina) son las responsables de mantener la piel
elástica y sin arrugas.
La estructura de soporte de la dermis empieza a caerse y, al hacerlo, forma arrugas en la

piel.
Colágeno
Esta proteína estructural compone el 80% de nuestra piel y es uno de los principales
responsables de que luzca joven, tersa y sana.
El colágeno se estructura mediante una triple hélice compuesta por tres cadenas de
polipéptidos enroscadas una sobre otra. Cada una de estas cadenas está, a su vez, formada
por aproximadamente 1000 aminoácidos de diferentes tipos.
Elastina
La elastina es el componente principal de las fibras elásticas.
Es responsable de que la piel tenga la capacidad elástica de volver a su forma y situación

habitual luego de ser estirada. Las fibras elásticas están conformadas por varias elastinas
entrelazadas junto a algunas microfibras, como por ejemplo fibrillin. Ambos componentes
a su vez están formados por aminoácidos como Glycine, Valine, Alanine y Proline.
GAGs - Glicosoaminoglicanos
Tanto el colágeno como la elastina se encuentran contenidos en un material similar a un gel

que contiene los llamados GAGs.
Básicamente, los GAGS son polisacáridos que se encuentran en la dermis y cumplen una
función de humectantes naturales.
Cumplen la función de mantener el agua y conservar la hidratación de la dermis, proteger

las fibras de colágeno y elastina y recubrir la superficie de la piel.
La industria cosmética busca constantemente nuevas formas de incrementar los niveles de

colágeno y reparar el que ya dañado, por eso se basan tanto en estas proteínas.
Si bien existen ingredientes que pueden ayudar a estimular su síntesis (AHA,

retinol, péptidos), cuando una crema dice tener colágeno o elastina en realidad los tiene,
pero funcionando sólo como hidratantes. El colágeno y la elastina son demasiado grandes
para penetrar la piel -cuando se aplican tópicamente- y no se incorporan de NINGUNA
FORMA a ella, solo quedan en la superficie y actúan como humectantes.
Unión dermoepidérmica
• La unión dermoepidérmica se aplana hasta 35%.

• Hay menos papilas por mm2.
• Aumenta la vulnerabilidad de la piel.
• Menos área de intercambio nutricional.
• Disminución de la capacidad de proliferación celular.
• Menor absorción percutánea.
• Aumenta la posibilidad de separación dermoepidérmica.
Hipodermis
Hay una disminución en el número y volumen de los adipocitos.
Se altera la protección mecánica y su función aislante del frío queda disminuida.
La atrofia generalizada provoca la característica flacidez cutánea senil, acentuando los

pliegues y los surcos.
Las estructuras subyacentes, como los huesos y los vasos, se hacen más notorias.
En las plantas de los pies esta disminución de grasa propicia el desarrollo de ulceraciones e
inconvenientes al caminar.
Envejecimiento Extrínseco
El envejecimiento extrínseco de la piel es un proceso de evolución distinta, causado por

factores ambientales.
Se produce como resultado de la exposición diaria a una variedad de fuentes que

incrementan la producción de radicales libres que a su vez dañan lípidos, proteínas y ADN y
conducen al estrés oxidativo, con la consiguiente incapacidad de las células para mantener
su integridad y función.
• Asociado con los factores externos ambientales: radiación UV, tabaco,

contaminación, ingestión calórica.
• Se produce como resultado de la exposición diaria a diversas fuentes que

incrementan la producción de radicales libres.
• El principal factor exógeno de envejecimiento es la exposición crónica a la radiación

UV, responsable del fotoenvejecimiento.
• La severidad del fotoenvejecimiento es proporcional a la exposición solar acumulada

e inversamente relacionada con el grado de pigmentación de la piel.
• El tabaquismo es un factor de riesgo independiente para la aparición prematura de

arrugas faciales, incluso controlando la exposición al sol, a edad, el sexo y la
pigmentación de la piel.
• La exposición a la contaminación atmosférica está correlacionada con signos

cutáneos de envejecimiento extrínseco, como las alteraciones en la pigmentación,
lo que indica que la contaminación puede también influir.
• La restricción calórica está asociada a largo plazo con un menor daño oxidativo del
ADN mitocondrial.
Factores que influyen en el envejecimiento extrínseco:
a) Radiación UV
UVC
• De menor penetración y mayor energía.
• Quedan retenidos en la capa de ozono.
UVB
• De menor penetración intermedia.
• Atraviesan la atmósfera e inciden sobre nuestra piel.
• Responsables del enrojecimiento y quemadura que produce el sol y del bronceado
a corto plazo.
• No atraviesan la capa basal de la epidermis.
UVA
• Son los más penetrantes y de menor energía.
• Atraviesan a epidermis y llegan a la membrana basal de la dermis.
• Producen bronceado retardado.
• Son los responsables, cuando se abusa de los mismos, del envejecimiento
prematuro de la piel, cáncer, etc.
b) Radicales libres
Los radicales libres son moléculas inestables y altamente reactivas que han perdido un
electrón; por lo tanto, lo “roban” de las moléculas que están a su alrededor para restablecer
su estabilidad.
La molécula atacada se convierte a su vez en un radical libre, iniciando de esta forma una
reacción en cadena que dañará muchas células.
Los radicales libres atacan el ADN impidiendo la replicación celular.
Nuestro organismo genera enzimas antioxidantes como:
a) La catalasa
b) El superóxido dismutasa
c) El glutatión
Cuando la defensa antioxidante es insuficiente, genera el denominado estrés oxidativo.

Los antioxidantes son sustancias que tienen la capacidad de neutralizar los radicales libres.
Los radicales libres se activan cuando el organismo entra en contacto con el oxígeno y se
ve afectado por factores externos.
• Smog.
• Contaminación ambiental.
• Humo de cigarrillo.
• Pesticidas.
• Insecticidas.
• Alto consumo de grasa animal.
b) Glicación
La glicación es una reacción lenta, no enzimática, de azúcares con los grupos aminoácidos
de una proteína.
La glucosa proveniente de los carbohidratos, al encontrarse con las fibras de colágeno y

elastina, se adhiere a estas proteínas, “caramelizándolas” y tornándolas rígidas y
quebradizas.
Producto de esta reacción, se generan unos complejos llamados AGES (del inglés: Productos
Finales de la Glicación Avanzada), que se acumulan en la matriz extracelular y aumentan el
nivel de oxidación.
Los AGES se asocian al estrés oxidativo, procesos de quimiotaxis que llevan a una
inflamación crónica y apoptosis celular.
El resultado es la formación de arrugas o pérdida de elasticidad de la piel y manchas.
La glicación no enzimática de proteínas también aumenta la producción del daño a nivel

vascular, renal y del sistema nervioso.
Consumir alimentos que ya están glicosilados (snacks, embutidos, carnes carbonizadas o

ahumadas, papas fritas, galletas, horneados).
Escala de Richard Glogau
TIPO I - LEVE - Sin arrugas
• Inicio de fotoenvejecimiento.
• Ausencia de arrugas, y fase inicial de líneas de expresión.
• Cambios pigmentarios moderados o ausencia.
• Sin queratosis.
• Edad: 20-30 años.
TIPO II – MODERADO – Arrugas con movimiento
• Arrugas visibles con el movimiento gesticular, paralelas a la sonrisa.

• Fotoenvejecimiento leve a moderado.
• Léntigos seniles iniciales.
• Queratosis leve.
TIPO III – AVANZADO – Arrugas en reposo
• Arrugas visibles aún sin movimiento.

• Fotoenvejecimiento avanzado.
• Discromias y léntigos evidentes.
• Telangectasias.
• Queratosis visibles.
TIPO IV – SEVERO – Arrugas
• Predominan las arrugas en todo el rostro.

• Fotoenvejecimiento severo, marcas severas.
• Lesiones malignas de piel tempranas.
• Discromías y telangiectasias.
• Queratosis visible.
• No hay edad específica, podría ser entre los 60 y 70 años.
Signos del envejecimiento
Arrugas
Las arrugas forman parte del proceso normal de envejecimiento cutáneo, pueden
presentarse en la juventud e intensificarse progresivamente con los años.
• 25 años: aparecen arrugas frontales muy finas, sutilmente se marca el surco
nasogeniano.
• 30 años: aparecen las patas de gallo.
• 35 años: las arrugas se marcan a mediana intensidad.
• 40 años: ya aparecieron todas las arrugas faciales, acentuándose de ahí en más.
• 60 años: aparecen las arrugas en el labio superior y se produce flacidez en las
mejillas.
El primer signo perceptible del envejecimiento a partir de los 25 años es la presencia de

finas líneas y de arrugas.
Estas finas líneas aparecen en diferentes zonas faciales y son los signos de envejecimiento
que se reconocen más fácilmente, y son las primeras en aparecer. Estas arrugas pequeñas y
poco profundas tienden a percibirse en los ángulos externos de los ojos. También se
conocen como líneas de la risa o patas de gallo, también pueden localizarse también en las
mejillas.
En la frente, las arrugas se perciben como líneas horizontales, y pueden estar
desencadenadas por la expresión facial y tienden a ser más profundas en el trascurso del
tiempo. Las líneas verticales, de menor tamaño, entre las cejas están causadas por el
fruncido de estas.
Las arrugas más profundas que se forman entre la nariz y la boca reciben el nombre de
pliegues nasolabiales. Están relacionadas con el descolgamiento de la piel y a menudo se
asocian a una pérdida del volumen.
Arrugas estáticas
Las arrugas estáticas son aquellas que aparecen debido a la pérdida natural del volumen
del tejido, de colágeno y de elasticidad y se corresponden a los pliegues naturales de la
piel.
Este tipo de arrugas las tenemos desde el nacimiento, pero se marcan más con la edad
debido al movimiento repetitivo de los músculos a lo largo de los años, lo que hace que
sean visibles incluso estando en reposo.
Arrugas dinámicas
Las arrugas dinámicas se forman por los movimientos faciales repetitivos, como fruncir el
ceño, sonreír, entrecerrar los ojos y fruncir la boca, son las llamadas arrugas de expresión.
Estas arrugas por lo general comienzan a aparecer en torno a los 25 años.
Arrugas gravitatorias
Este tipo de arrugas se producen como consecuencia del proceso de envejecimiento.
Con el paso de los años la piel va perdiendo colágeno y elastina y va cayendo por efecto de
la gravedad acentuando las arrugas dinámicas, es lo que comúnmente
denominamos flacidez.
Este tipo de arrugas suelen aparecer a partir de los 40 años y envejecen el rostro
notablemente.
Fatiga cutánea
A medida que la piel envejece y se endurece, su respuesta a las fuerzas externas aplicadas
también cambia. Podemos considerar la piel como un tejido elástico que se deforma en
respuesta a cargas externas, incluidas fuerzas de compresión, tensión y cizallamiento. Las
fuerzas aplicadas provocan deformación o tensión y dependen de la elasticidad, rigidez,
resiliencia y extensibilidad de la piel. Estas características son dinámicas y pueden variar en
el corto plazo y con la edad.
Pérdida de volumen
En ocasiones difícil de identificar, la pérdida de volumen se conoce también a veces como
piel descolgada, pérdida del contorno, cuello de pavo, piel de gallina o "aspecto contraído".
Cambia el aspecto general de la cara de un modo transformador pero difícil de identificar
con precisión.
Lo más evidente es que la disminución del volumen y el contorno facial laxo asociados a la
pérdida de volumen, pueden conferir a la cara un aspecto negativo, triste o fatigado. Esto
puede, a su vez, dar lugar a percepciones incorrectas del estado de humor o a la imagen de
una persona.
Pérdida de densidad
Más corriente en mujeres de edad postmenopáusica, la pérdida de densidad se manifiesta
en la superficie en forma de piel más delgada y débil.
Al contrario que las arrugas o la pérdida de volumen, la pérdida de densidad, afecta a toda
la cara en lugar de asentarse en determinadas zonas.
A menudo se asocia a arrugas más profundas y aparece junto a una disminución de la

luminosidad y una tendencia a una piel más apagada.
En el caso de los huesos del cráneo se produce una desmineralización del tejido óseo, lo que
provocará un descolgamiento facial y una merma de volumen y de colágeno y elastina, ya
que todos los tejidos superiores también se verán afectados.
Con la edad observamos cómo van cambiando los huesos del contorno del rostro. Si los
faciales se «encogen», aumentan los espacios y disminuyen los anclajes con tejidos blandos.
La piel ya no será capaz de tensarse en torno a estos espacios generados por la pérdida de
tejido óseo y se formarán las arrugas.
Tercio superior
Las cejas caen. Los párpados caen.
Aumenta la cavidad orbitaria y el hundimiento de las sienes, lo que da lugar a la aparición
de bolsas, ojeras y arrugas de expresión.
Tercio medio
El hueso cigomático se aplana y cae. El maxilar superior disminuye, cosa que afecta tanto a
la dentición como al tejido blando de la boca, haciéndose notorio igualmente en la región
nasal. Por lo tanto, se producirá una disminución en la dimensión entre la nariz y la boca.
Tercio inferior
La mandíbula tiende a proyectarse hacia delante, lo que hace que el mentón se vea más
prominente. Al perderse densidad ósea observamos que los dientes inferiores quedan más
expuestos. Por lo tanto, los puntos de anclaje de los tejidos blandos se deterioran y
advertimos una pérdida de tonicidad y descolgamiento en los labios, la región de la papada
y el cuello. Se pierde, además, la definición del óvalo facial.
¿Cómo identificar la pérdida de densidad?

La pérdida de densidad se manifiesta en la superficie de tres maneras clave:
• Piel más delgada. La piel facial luce menos elástica y puede empezar a aflojarse.
• Arrugas más profundas. A medida que la piel pierde la capacidad de mantener su
forma, las arrugas se vuelven más profundas.
• La piel tiende a volverse más pálida y opaca.

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Dermatocosmiatria – Envejecimiento cutáneo

El envejecimiento cutáneo es un proceso continuo en el que progresivamente, se producen

Hay un declive en las funciones biológicas y en la capacidad para adaptarse al estrés

Edad cronológica: Es la edad que marca el documento.

Podemos diferenciar al envejecimiento cutáneo en:

• Envejecimiento intrínseco o biológico.

• Envejecimiento extrínseco o fotoenvejecimiento.

Envejecimiento Intrínseco o Biológico

El envejecimiento intrínseco o biológico no se debe a factores ambientales modificables,

• Envejecimiento cronológico, asociado con el avance de los años.

• Proceso continuo, universal e irreversible.

• Sin relación con factores ambientales modificables.

• Manifestaciones clínicas: adelgazamiento de la piel, xerosis, arrugas finas y atrofia,

Cambios epidérmicos durante el envejecimiento intrínseco

La piel experimenta cambios importantes en su estructura, incluso en las áreas

Se produce un adelgazamiento generalizado de la epidermis de un 10-50% entre los 30 y los

Los queratinocitos, llegan a su límite replicativo y entran en senescencia, permaneciendo en

La senescencia celular es el proceso iniciado como respuesta al estrés y daño ocurrido en

Aunque el paso del tiempo produce un descenso en la actividad mitótica de los

La apoptosis es una vía de destrucción o muerte celular programada o provocada por el

Son las células que dan pigmento a la piel.

Esto ocasiona una disposición parcheada en el color de la piel, con maculas

Se cree que esto puede explicar la disminución en la capacidad inmunológica de la piel

Cambios dérmicos en la piel

La dermis contiene los componentes de soporte, inervación y vascularización de la piel.

En la piel joven sana, su componente principal es el colágeno, con la edad y la exposición

Entre las fibras elásticas se produce un depósito de proteoglicanos y glucosaminoglicanos.

La dermis está formada por células embebidas en una matriz compuesta

Esta matriz es la responsable de la firmeza, fuerza y elasticidad de la piel: los signos de

La matriz de la piel envejecida y fotodañada se ve debilitada e irregular ya que la

Modificación en las fibrillas de colágeno y elastina

La estructura de soporte de la dermis empieza a caerse y, al hacerlo, forma arrugas en la

La elastina es el componente principal de las fibras elásticas.

Es responsable de que la piel tenga la capacidad elástica de volver a su forma y situación

Tanto el colágeno como la elastina se encuentran contenidos en un material similar a un gel

Cumplen la función de mantener el agua y conservar la hidratación de la dermis, proteger

La industria cosmética busca constantemente nuevas formas de incrementar los niveles de

Si bien existen ingredientes que pueden ayudar a estimular su síntesis (AHA,

• La unión dermoepidérmica se aplana hasta 35%.

Hay una disminución en el número y volumen de los adipocitos.

Se altera la protección mecánica y su función aislante del frío queda disminuida.

La atrofia generalizada provoca la característica flacidez cutánea senil, acentuando los

El envejecimiento extrínseco de la piel es un proceso de evolución distinta, causado por

Se produce como resultado de la exposición diaria a una variedad de fuentes que

• Asociado con los factores externos ambientales: radiación UV, tabaco,

• Se produce como resultado de la exposición diaria a diversas fuentes que

• El principal factor exógeno de envejecimiento es la exposición crónica a la radiación

• La severidad del fotoenvejecimiento es proporcional a la exposición solar acumulada

• El tabaquismo es un factor de riesgo independiente para la aparición prematura de

• La exposición a la contaminación atmosférica está correlacionada con signos

Factores que influyen en el envejecimiento extrínseco:

Los radicales libres atacan el ADN impidiendo la replicación celular.

Nuestro organismo genera enzimas antioxidantes como:

Cuando la defensa antioxidante es insuficiente, genera el denominado estrés oxidativo.

La glucosa proveniente de los carbohidratos, al encontrarse con las fibras de colágeno y

El resultado es la formación de arrugas o pérdida de elasticidad de la piel y manchas.

La glicación no enzimática de proteínas también aumenta la producción del daño a nivel

Consumir alimentos que ya están glicosilados (snacks, embutidos, carnes carbonizadas o

Escala de Richard Glogau

TIPO I - LEVE - Sin arrugas

TIPO II – MODERADO – Arrugas con movimiento

• Arrugas visibles con el movimiento gesticular, paralelas a la sonrisa.

TIPO III – AVANZADO – Arrugas en reposo