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Materia: Zoonosis y Salud Pública

Baylisascaris procyonis como una zoonosis


causante de larva migrans
Resumen

Baylisascaris procyonis es un nematodo gastrointestinal del mapache, que se encuentra


principalmente en América del Norte, sin embargo también se puede encontrar en América del
sur, Europa y Asia.
La infección por este parásito tiene gran impacto en la salud pública y de diversas especies
animales tanto en vida silvestre como en zoológicos, debido a su gran capacidad de infección y
a la exposición cada vez más constante a los mapaches.
B. procyonis causa enfermedades neuronales en diversos animales como aves y otros
mamíferos y es causante de larva migrans neural en humanos, también conocida como
baylisascariasis, desde 1980, siendo los niños los principales afectados.
Esta migración larvaria se manifiesta con meningoencefalitis, la cual es asociada con niveles
altos de eosinófilos. Para su diagnóstico se puede llevar a cabo pruebas de aerología, historia
clínica y epidemiología, mis como estudios de imagen y siendo la más importante el hallazgo
de larvas en tejidos.
Su tratamiento se basa en dosis de albendazol y esteroides, con la finalidad de controlar la
inflamación, sin embargo en fases avanzadas el pronóstico será malo, debido a que las larvas
pueden migrar y dar como resultado larva migrans visceral y ocular, provocando neurorretinitis,
la cual será diagnosticada mediante serología y mediante la visualización del parásito en ojo.

Palabras claves: Baylisascaris procyonis, mapache, larva migrans, zoonosis, LMN, LMO, LMV

Introducción

El gusano redondo Baylisascaris procyonis, es una zoonosis de vida silvestre emergente de


gran importancia en salud pública en América del Norte, Sur, Europa y Asia transmitida por
mapaches (Procyon lotor), al defecar en lugares comunales, los cuales actual como focos de
infección para la transmisión de B. procyonis, ya que los huevos del parásito pueden persistir
en el medio ambiente durante muchos años (Francés, s; et al, 2019); (Louis, M; et al 2020)
La lombriz intestinal B. procyonis no causa signos clínicos en los mapaches, pero puede ser
fatal para los humanos y muchas otras especies (Louis, M; et al 2020)
La etapa larvaria es causante de infecciones que pueden provocar enfermedad neurológica en
aves, mamíferos y en humanos causando larva migrans neural y ocular (Francés, s; et al,
2019); (Kazacos, K; et al, 2013). Siendo los animales jóvenes y en temporada de otoño los más
afectados, así como la urbanización en zonas cercanas al hábitat de mapaches (Baldi, S; et al,
2018)

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Etiología

La baylisascariasis es una enfermedad parasitaria causada por el nemátodo gastrointestinal


Baylisascaris procyonis del mapache común (Procyon lotor), el cual presenta una alta
prevalencia en zonas urbanas (Moravec, F; 2009)
B. Procyonis induce una infección en su estado larvario, causando una migran larvaria errática,
conocida como larva migrans en el ser humano, la cual puede ser fatal (Roussere, G; et al,
2003)

Epidemiología y distribución geografía

Es un nemátodo con un alto potencial zoonótico, pertenece a la superfamilia Ascaridoidea,


siendo el mapache común su hospedero definitivo, en el cual los efectos de la parasitosis son
mínimos (Sorvillo, F; 2002)
B. Procyonis pertenece al género Baylisascaris, al cual pertenecen ocho distintas especies las
cuales también son potencialmente zoonóticas (Baldi, S; et al, 2018)

La enfermedad se extiende desde América del Norte y Sur, Europa y Asia, debido a la amplia
distribución del mapache tanto en vida silvestre como en zoológicos (Louis, M; et al 2020)

Ciclo de vida y método de transmisión


(Fig. 1)
Su ciclo de vida es directo y los parásitos
adultos alcanzan un tamaño de 15 a 20 cm
en hembras y 10 a 15 cm en machos (Graeff-
Teixeira, C; et al, 2016)
Las hembras eliminan huevos al medio
ambiente por medio de las heces del
mapache, aproximadamente de 25 a 450 mil
huevos/gramo y los huevos son altamente
resistentes al ambiente, llegando a sobrevivir
por años y en promedio contaminar hasta
0.03 hectáreas cada año (Shafir, S; 2011)
Cuando las condiciones ambientales se
encuentran a una temperatura de entre 18 a
24ºC con una humedad del 80 al 100% los
huevos pasan a estado de latencia, es decir,
Larva 1 (L1), posteriormente a L2, el cual
será su estadio ideal para comenzar a
infectar en un lapso de 10-16 días, y será Fig. 1 Ciclo de vida de B. Procyonis hacia
consumida por otros mapaches y por los hospedero definitivo e incidentales (Baldi, S;
seres humanos mediante alimentos et al, 2018)
contaminados (Graeff-Teixeira, C; et al,
2016); (Shafir, S; 2011)
Patogenia

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Las larvas cruzan la mucosa del intestino para formar estructuras enquistadas en distintos
órganos del hospedero paraténico, lo que vuelve a los animales débiles y los lleva a la muerte y
de esta forma se logra completar su ciclo (Baldi, S; et al, 2018)
En los seres humanos posterior a ingerir la larva tendrá presentación clínica de larva migrans,
las cuales pueden ser larva migrans nerviosa (LMN), la cual afecta al sistema nervioso central,
periférico o ambos, ocular (LMO y visceral (LMV) (Baldi, S; et al, 2018)

Lesiones

• En niños con LMV presentan hepatoesplenomegalia, exantema macular, pneumonitis y


granulomas en órganos (Baldi, S; et al, 2018)
• En LMN invasión de cerebro y médula espinal (Baldi, S; et al, 2018)

Signos clínicos

El mapache no presentara ningún signo aparente de la enfermedad, sin embargo los seres
humanos presentaran sintomatología nerviosa de leve a severa y esto dependerá del grado y la
localización de las larvas (Sorvillo, F; 2002)

Los signos son dosis dependiente por lo que pueden presentarse de 1 hasta 21 días post
infección. Los signos más comúnmente vistos en LMN son debilidad general, letargia, tortícolis,
pérdida de función motora fina, ataxia, incoordinación, estado mental alterno, estupor,
convulsiones y coma (Graeff-Teixeira, C; et al, 2016)
Para LMO los signos reportados son retinocoroiditis, vitritis, uveitis con fotocopia, granulomas
intraoculares, endoftalmitis, desprendimiento de retina, neuroretinitis y panoftalmitis y perdida
de la vista, todos estas afecciones comúnmente son unilateral (Baird, M; et al, 2003).
En los casos de LMV, se observa principalmente en niños, los cuales presentan cuadros
febriles, dolor abdominal y debilidad (Graeff-Teixeira, C; et al, 2016)

Diagnóstico

Su diagnóstico es complejo, ya que consta de diversos factores y la falta de información sobre


poblaciones de mapaches en zonas específicas (Helgen, K; et al, 2008)
Se basa en historia clínica, examen de fondo de ojo ya que las larvas tendrán un largo de 1,500
a 2000 µm, estudios de imagen en busca de granulomas que van de 1 a 3 mm de diámetro y
resonancia magnética en pacientes sospechosos de LMN, para revelar encefalomielitis y
anormalidades de la materia blanca (Baldi, S; et al, 2018)

En el caso de animales que han sido infectados es difícil el diagnóstico ya que se requieren
analizar los huevos mediante microscopía electrónica para evaluar su estructura externa, de lo
contrario suele ser confundido con Toxocara o cualquier especie de ascarido (Baldi, S; et al,
2018)

Pruebas de detección

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• ELISA indirecto, con el cual se busca detectar IgG, sin embargo pueden presentarse falsos
positivos por reacciones cruzadas debido a otras especies de ascaridos (Graeff-Teixeira, C;
et al, 2016)
• PCR punto final y en tiempo real: Para identificar ADN del citocromo C, subunidad Cox2
(Franssen, F; et al, 2013); (Xie, Y; et al, 2011)
• Pruebas inmunoenzimáticas: Se puede utilizar Western blot, ya que tienen una alta
sensibilidad y especificidad para B. procyonis. Esto gracias que permite reconocer
componentes antagónicos, lo que permite reconocer proteínas de bajo peso molecular
(Dangoudoubiyam, S y Kazacos, K; 2009)

• Post mortem se pueden realizar biopsias en busca de los parásitos y sus lesiones
(Franssen, F; et al, 2013)

Tratamiento

En pacientes con LMN ya sea central o periférico es limitado y ante la sospecha temprana se
debe tratar de manera inmediata para reducir la morbilidad y mortalidad (Baldi, S; et al, 2018)
Se recomienda el uso de antiparasitarios que crucen la barrera hematoencefálica, con buena
absorción y concentración alta en tejidos, como los albendazoles durante diez días a un mes a
dosis de 20-40mg/kg/día, la dosis debe administrarse vía oral y repartirla en dos tomas cada
día y el uso de corticosteroides para reducir la inflamación (Wise, M; et al, 2005)
Otra fármaco recomendado son las ivermectinas con la finalidad de reducir la migración a
cerebro (Wise, M; et al, 2005)
También se deben realizar hemogramas seriados para evaluar el cambio en eosinófilos y en
caso de LMO el uso de láser para para la eliminación de larvas a nivel retinal (Wise, M; et al,
2005).

Prevención y control

Debido a que las zonas urbanas cada vez se acercan mas al hábitat de muchas especies, entre
ellas el mapache, como medida se recomienda el correcto desecho de alimentos para evitar
que puedan acceder al alimento y de esta forma evitar que se acerquen a las viviendas, así
como en el caso de perros evitar que ingiera heces o alimentos en las calles y llevar de manera
adecuado sus desparasitaciones (Shafir, S; 2011)
Otra medida es el correcto almacenamiento de alimentos con la finalidad de evitar la
contaminación por medio de las heces. Utilizar agua caliente para lavar superficies así como
asegurarse que cocinar bien los alimentos ya que los huevos no resisten temperaturas mayores
a 62ºC (Shafir, S; 2011)
En caso de observar heces, deben ser recogidas y realizar la limpieza de la superficie con lejía
o cloro, dejando actuar entre 1 a 2 horas (Shafir, S; 2011)

Discusión

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El aumento en la población humana a hecho necesario tomar parte del hábitat de diversos
animales, lo cual a hecho que dichos animales se vuelvan “urbanos” y estemos en contacto con
sus heces y orina (Baldi, S; et al, 2018)
En este caso nos hace susceptibles a ser parasitados por B. procyonis, que puede llegar a ser
fatal en muchos casos (Baldi, S; et al, 2018)
Baldi Salas, en su articulo Baylisascariasis como diagnóstico diferencial de larva migrans en
humanos, Costa Rica menciona que la principal vía de contaminación es mediante el consumo
de agua y alimentos contaminados por heces de mapaches o por cualquier otro mamífero que
sea intermediario en este ciclo, así como la contaminación de piscinas y las medidas a tomar
en cada uno de los casos (Baldi, S; et al, 2018)
Hace mención que el perro, como principal mascota en muchas hogares al rededor del mundo
es un posible hospedero intermediario, por lo que hace hincapié en llevar la desparasitación de
manera rigurosa en zonas con alta indice de población de mapaches, coatíes, kinkajú, etc ya
que son portadores de las diferentes especies de Baylisascaris y todas ellas son
potencialmente zoonoticas (Sapp, S; et al, 2017)
Se plantea que los niños son los principales afectados, en un rango de edad de entre 5 a 10
años, por lo que se recomienda que los padres sean riguroso en las medidas de higiene y que
se les enseñe a los niños como tomar sus medidas de higiene bascas, como el lavado de
manos y evitar zonas de recreación que sean posiblemente visitadas por mapaches o perros
(Baldi, S; et al, 2018)
Siempre tenemos que recordar que es una zoonosis con poco control, debido a que no se
tienen datos de las población animales que padecen dicha enfermedad, por lo que no se puede
predecir el alcance de la misma (Sapp, S; et al, 2017)

Conclusión

B. procyonis es un nemátodo común en mapaches, causante de larva migrans neuronal, ocular


y visceral en los seres humanos que es potencialmente mortal, pese a que tiene un potencial
de infección muy alto, así como su mortalidad es una enfermedad fácil de controlar, ya que solo
requiere una buena desinfección ya sea física o química, limpieza y adecuada medicina
preventiva en los animales que permanecen en nuestro hogar.
Sin embargo muchas personas siguen sin llevar a cabo o de manera incorrecta la medicina
preventiva en sus animales de compañía, así como la incorrecta limpieza de sus alimentos o
bebidas, la correcta o nula limpieza de sus piscinas, pocos hábitos de higiene, entre muchas
otras cosas.
Así como actualmente el interés por animales no convencionales como mascotas, nos han
acercado mas a estas enfermedades, ya que ahora se tienen mapaches como mascotas, sin el
conocimiento de sus necesidades ni la atención veterinaria que requieren.

Referencias

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