Tengas tu propio proyecto o formes parte de la plantilla de una empresa, acabarás

recurriendo a la oratoria en algún momento, ya sea en presentaciones de proyectos,

propuestas de negocio e incluso en eventos de networking. Esto puede dar mucho
respeto las primeras veces, no en vano el trabajo de un orador siempre ha sido
considerado uno de los más difíciles. Son muchos los que tiemblan ante la posibilidad
de pararse frente a una audiencia y dar un discurso.
Sin embargo, con unos cuantos consejos de oratoria todos seriamos capaces de
enfrentar a un público desconocido, o conocido, y llevarnos una agradable sorpresa al
ver que esta tarea no es para nada compleja. Por eso, hoy te animamos a poner en
práctica estos 10 consejos de oratoria con los que podrás llenar de emoción a tu
audiencia y dejar de ver el hablar en público como un reto insuperable.
Escucha a otros oradores
Si quieres convertirte en un buen orador, rodéate de ellos. Hoy en día, con las
posibilidades que la tecnología nos ofrece tienes la ventaja de que puedes ver las charlas
dictadas por los más admirados oradores del momento. Una mención especial aquí
para Fernando Miralles, campeón de España de oratoria, cuyos consejos podéis
encontrar en su canal de Youtube.
Lo mejor de todo es que esto no solo te servirá para fijarte en el estilo y lo que lo hace
ser un buen orador, sino que también te llenará de inspiración y determinación, lo
cual te acercará cada vez más a tu meta.
Dale una estructura a tu discurso
Por muy natural que suene el discurso de tu orador favorito ten por seguro que éste,
antes de pararse ante su audiencia, estructuró su discurso para ganar en fluidez y no
dejar nada sin mencionar. Los discursos estructurados no solo brindan a la audiencia
una cantidad de información determinada, también le dan una idea al orador acerca
del tipo de discurso que dará y las posibilidades de interacción que podrá tener con
su público.
Conecta con la audiencia
La mejor forma de lograr que tu audiencia se conecte e identifique con lo que estás
diciendo es traer al podio vivencias y anécdotas de la vida real. Aun cuando no estés
ante un público conocido, toda la audiencia sabrá qué tema vas a tratar y si están allí es
porque el tema les interesa. Sácale provecho a esa asistencia comportándote de forma
genuina y empática.
No actúes. Conversa de forma natural
Para empezar a ser un orador exitoso lo más probable es que tus primeras charlas
debas darlas delante de tu grupo social cercano: tu familia, amigos, compañeros de clase
y/o de trabajo serán los primeros en evaluar tu potencial como orador. Ten presente, por
tanto, que ante todo debes actuar con naturalidad.
Los buenos oradores son auténticos, lo cual hace que la audiencia sienta no solo
simpatía por ellos, sino confianza. Como orador debes forjarte un estilo pero esto jamás
se referirá a perder tu esencia.
Haz que tu audiencia participe
No existe mejor forma de conectar con una audiencia que promover la
participación. Hace unos años, cuando se hablaba de dar un discurso, la atención de
muchos no predominaba, debido a que estos solían ser aburridos y monótonos.
Hoy en día la audiencia es participativa y está atenta a cada cosa que dices, así que
debes incluir dentro de tu discurso recursos que permitan a la audiencia construir la
charla de la que serán testigos.
Prioriza las ideas principales
Debes asegurarte de extraer las ideas principales que te gustaría desarrollar durante el
tiempo que estés conversando. Partiendo de esa premisa podrás organizar mejor el
tiempo y los temas que deseas puntualizar.
Una estrategia de oratoria efectiva es invitar a la audiencia a desarrollar las ideas
principales antes de desarrollarlas a fondo. Esto además de promover la participación
permitirá que para ellos también quede claro el objetivo del discurso.
No te aprendas el discurso de memoria
Sea cual sea el tema del que vayas a hablar, ten presente que es un tema que te
apasiona y que conoces, por lo cual no sería aconsejable escribirlo y aprendértelo de
memoria. Esto puede ocasionar dos cosas, que tu audiencia note la rigidez en tu forma
de hablar y que, en algún momento, olvides la idea y pierdas la fluidez al expresarte.
Pon un tiempo límite
Hoy en día, las charlas de oradores exitosos no duran más de 1 hora. Esto se debe a
que, en promedio, una vez que la audiencia ha entendido la idea principal del discurso,
pierde capacidad de concentración y atención, lo cual se incrementa cuando no
promovemos la participación.
Gesticula sin exagerar
La naturalidad al expresarte debe predominar durante tu discurso. Gestualizar de
forma exagerada mientras hablas solo causará que la audiencia se distraiga de lo que
dices y deje de tomarse en serio el tema del que hablas.
Mientras hablas debes mantener una actitud natural. Si los nervios te atacan recuerda
realizar ejercicios de respiración antes de comenzar e ir con calma.
Ten algo que te de seguridad
Es posible que encuentres algunos consejos de oratoria que te digan que no es
profesional tener objetos en la mano mientras das tu discurso, pero la verdad es que si
este elemento te aporta seguridad entonces puedes utilizarlo. Antes de notar algo tan
básico como un pequeño bolígrafo o un clip, tu audiencia notará los nervios e
inseguridad con la que te expreses.