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 Sttaf
Moderadoras
Tessa Jessibel Neera

Traductoras
Luisa1983 cjuli2516zc
Nananormal Neera
Jabes Tessa
3

Moderadoras de Corrección y Correctoras

RRZOE Jessibel Neera

Lectura Final
Jessibel

Diseño
Blue
 Índice
Sinopsis Capítulo 6
Capítulo 1 Capítulo 7
Capítulo 2 Capítulo 8
Capítulo 3 Capítulo 9
Capítulo 4 Capítulo 10
Capítulo 5 Sobre el autor

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 Sinopsis
L
iberty ha pasado años viendo a su madre trabajar como empleada
doméstica para la poderosa familia Spade. Es difícil para ella ver que
todos a su alrededor tienen dinero, pero es aún peor cuando se
enamora de uno de esos hombres ricos. Devlin es alguien que nunca podrá tener
y todos sus deseos por él son incorrectos. ¿Tal vez tomar un trabajo como su
secretaria fue un error?
Devlin Spade nació y se crió para ser un determinado hombre, tener un
determinado trabajo y vivir una determinada vida. Pero cuando se encuentra con
Liberty, todo cambia. Él está dispuesto a renunciar a todo si eso significa tenerla,
pero ella no deja de alejarlo. Él no puede dejarla ir, incluso si ella intenta correr.

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 1
Traducido por Luisas1983
Corregido por RRZOE

Loren
Me paro en medio de la oficina de mi padre y observo que hay caos por todas
partes. Sé que este lío esparcido alrededor hará que mi padre se enoje, pero no
me importa.
Lo tendrá limpio inmediatamente cuando vea que lo hizo la chica que
encerró aquí. Ella parecía tener mi edad, pero estoy rodeada de vampiros todo el
tiempo, así que nunca sé qué edad tienen algunas personas. Tuve que mirarla un
buen rato para asegurarme de que era humana. Mi padre es un vampiro y puede 6
decir cuando alguien es humano por su olor. Eso es lo que hizo que subestimara
a la chica en su oficina.
Estoy un poco orgullosa de que ella causara este desastre ya sea en su ira
o en su necesidad de encontrar algo. Encuentro fascinante toda la situación y
quiero volver a hablar con ella. Quiero preguntarle qué está pasando y por qué mi
padre la está reteniendo contra su voluntad. También quiero a alguien con quien
hablar. Eso suena patético cuando lo pienso, pero no puedo recordar la última
vez que salí con una chica de mi edad. Ni siquiera sabría qué decir.
Miro una de las carpetas abiertas que tengo a mis pies y me agacho para
recogerla. Es una imagen en blanco y negro de un hombre que conozco muy bien.
Solo he visto su foto una vez antes, pero recuerdo cada detalle. Esta es diferente,
pero los sentimientos de antes son los mismos. Se enciende algo dentro de mí y
es algo que mi papá no me puede quitar. Lo guardo en mi mente y no lo dejo salir
a menos que no pueda evitarlo. Últimamente eso sucede cada vez más y más, y
se siente como si se estuviera acercando. Tal vez sean los sueños que he tenido,
pero siento que se avecina un cambio. Puede que parezca una locura, pero puedo
sentirlo en mi sangre. ¿Aunque eso es más loco que los vampiros?
La imagen que tengo ahora parece tener más de cien años. Lo vi por solo un
segundo, pero el hombre de la foto se grabó en mi mente. ¿Podría ser cómo sus
ojos llamaron mi atención, o fue el hecho de que mi padre me dijo que él fue el
hombre que mató a mi madre? Gran parte de mi infancia está borrosa, y ni
siquiera la recuerdo, pero esa imagen nunca se me olvida.
 Ese día mi papá me dijo que tenía edad suficiente para saber la verdad. Me
contó lo que sucedió y que yo necesitaba saberlo para poder entender por qué
vivimos como lo hacemos. Dejé de pedir libertad después de eso porque me di
cuenta de que solo estaba tratando de mantenerme a salvo.
Creí cada palabra que me dijo, pero esta nueva imagen significaría que me
mintió. La doblo por la mitad y la meto en el bolsillo de mi vestido. No quiero que
me la quiten antes de poder verla mejor.
La puerta de la oficina se abre de golpe y me doy vuelta para ver a mi papá
parado allí. Sé que se acaba de despertar porque su cabello es un desastre y
todavía se está abotonando su traje. Cuando se fue a la cama por unas horas,
supe que era mi única oportunidad de salvar a la chica. Una chica cuyas palabras
no puedo olvidar. Una burla que quiero ignorar, pero sé que no podré.
—Has estado del lado del mal todo este tiempo y pensaste que estabas
parada en la luz. Este no es el lado correcto de las cosas.
—La dejaste ir. —No respondo porque él sabrá si miento.
Mi papá me da información para mantenerme a salvo del mundo exterior.
Él dice que no puede perderme como perdió a mi madre y siempre me hace dejar
de presionar por un mundo más allá de estas paredes. Pero últimamente he
estado pensando que él dice estas cosas para asustarme y hacer que tema salir
de casa. Pensé que antes de mudarnos aquí vivíamos una vida bastante aislada,
pero entendí por qué. Tenía que proteger quién era, pero ahora está más allá de 7
eso porque estamos rodeados por una ciudad.
Él siempre es bueno para ver la verdad, y si pudiera elegir un rasgo de
vampiro para tener, eso sería todo, incluso por encima de la inmortalidad. Miro
hacia el suelo y sé que hice lo correcto, pero la culpa persiste porque fui en contra
de la única familia que tengo. Es todo lo que sé, y va más allá de eso ahora que
nos hemos alejado de mi antigua vida. Apenas si conozco la ciudad en la que
estamos y me perdería sin él.
Lo escucho soltar una respiración profunda y su frustración conmigo es
clara. Estoy empezando a acostumbrarme. Tal vez estoy viviendo los años de la
adolescencia rebelde que debería haber tenido, pero la educación en el hogar evitó
que salieran y ahora se están dando a conocer.
—¡Vete a tu habitación! —grita, más fuerte que nunca, y luego sale
corriendo de su oficina.
Va a perseguir a la chica, pero espero por su bien que no lo haya hecho. No
tengo idea de qué planes tenía para ella, pero cada día se está volviendo más
oscuro y no quería ver cuánto más puede serlo. Ya he visto cosas que desearía no
haber visto, cosas que él cree que son las elecciones correctas.
Hago lo que me dice, sin querer enojarlo más, no sin antes de tomar algunas
cosas más del piso antes de ir a mi habitación. No quiero encontrarme con alguien
que pueda quitarme las carpetas, así que me apresuro por el pasillo solo para
detenerme cuando veo a Greg parado frente a mi puerta.
Le doy una sonrisa al nuevo guardia que comenzó cuando llegamos a esta
casa. No tengo una buena sensación de él, pero siempre soy educada. Es difícil
para mí ser grosera incluso cuando lo intento. Algo sobre él no está bien y es como
si se estuviera escondiendo a simple vista. Está un poco ansioso por ayudar a mi
papá cuando se trata del lado más oscuro de las cosas. Mi padre podría pensar
que no sé mucho de lo que ha estado pasando últimamente, pero cuando estás
encerrado, incluso en una hermosa mansión, no hay mucho que hacer sino
prestar atención.
Greg es lo suficientemente inteligente como para no mirarme o intentar
tocarme frente a mi padre y yo soy lo suficientemente inteligente como para no
decirle a mi padre tampoco. De alguna manera, guardo esto en mi bolsillo trasero
para que algún día pueda usar su atracción a mi favor. La gente dice que siempre
hay indicios de quién es alguien y si estás cerca de él, decides ignorarlo y no ver
lo que está justo frente a ti. Estoy empezando a creer eso. Cada vez es más difícil
ignorar las acciones de mi padre y poner excusas para él.
—Me has metido en problemas, ¿no es así, niña?
Los brazos de Greg están cruzados sobre su pecho y no sé si es para verse
más grande o para recordarme que está a cargo. Él podría manipularme
fácilmente si tuviera que hacerlo. Es un hombre grande y estoy segura de que
podría dar a algunos de los vampiros más jóvenes una lección difícil de superar
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si llegan a los golpes. Si tuviera que tener un guardia humano durante el día, mi
papá se aseguraría de que tuviera al mejor. No dudo que Greg sea fuerte, pero no
es el cuchillo más afilado en el cajón. De lo contrario, sus ojos no se detendrían
tanto en mí. Todos saben que estoy fuera de los límites y la mayoría de las veces
los guardias actúan como si yo fuera invisible. Vi a mi padre romper la muñeca
de un hombre después de que me agarró del brazo.
—Lo siento —digo, y lo lamento.
No quiero que nadie se meta en problemas por mi culpa, pero tal vez esté
tomando el ejemplo de mi padre. A veces alguien debe ser sacrificado por el bien
mayor. Siempre he odiado el dicho, pero he ido y lo he cumplido. Mentí para que
Greg se fuera y le dijera a mi papá que iba a pasar la noche en mi cuarto. Sabía
que si él se iba podía salvar a la chica. Todo el tiempo sabiendo que Greg tomaría
el castigo por mis acciones. No quería que la chica fuera sacrificada por el bien
mayor o por cualquier motivo.
—Tal vez me muestres lo mucho que lo sientes. —Se me acerca y siento que
su mano se desliza por mi desnudo brazo.
Lo miro y veo la lujuria en sus ojos. Mi estómago se tensa ante su toque. No
estoy acostumbrada a que nadie me toque. Mi papá solo me da abrazos breves y
no son tan frecuentes. Tal vez eso es algo que viene con la edad. Es difícil ver
cómo actúa el resto del mundo cuando paso la mayor parte de mi vida encerrada.
Aunque estoy segura de que hay lugares peores para estar encerrados.
—Entra en tu habitación por ahora. Pero te encontraré más tarde. —Él baja
su mano de mi brazo y no puedo moverme lo suficientemente rápido para alejarme
de él.
Cuando entro en mi habitación, cierro la puerta y giro la cerradura detrás
de mí. No es que eso pudiera impedir que entrara, porque incluso yo puedo abrir
una cerradura. Sonrío pensando en Sam, el hombre que solía ser mi guardián
antes de mudarnos. Me enseñó muchos pequeños trucos que una vez pensé que
nunca usaría. Él y yo siempre teníamos mucho tiempo en nuestras manos cuando
el sol estaba alto y la casa estaba en silencio. Nos mudamos tan repentinamente
y Sam se fue de mi vida. No era como ninguno de los otros hombres que mi papá
contrató, y lo extraño. Fue amable conmigo e hizo que los días no fueran tan
largos y solitarios. Él era mi amigo, o lo más cerca que he estado de tener uno.
Me acerco a mi cama y me siento mientras saco la foto de mi bolsillo.
Desearía que fuera diferente esta vez cuando lo miro, pero no lo es. Está ahí, en
mis manos, en blanco y negro.
Bishop y mi papá están parados uno junto al otro en la foto. Si esto fue
tomado hace cien años, entonces mi padre tendría que haber sido un vampiro en
ese entonces. O podría haber sido un humano convertido en vampiro poco
después. Esta no es la historia que me contó.
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Mi papá dijo que Bishop los atacó a él y a mi mamá cuando yo era solo un
bebé. Me dijo que lo habían dejado por muerto, pero otro vampiro lo salvó. Dijo
que se había convertido y se comprometió a obtener justicia para mi madre. Eso
no se suma al marco de tiempo en esta imagen. Solo tengo veinte años, por lo que
eso significa que podría haber cambiado hace veinte años. Sin embargo, esta
imagen es evidencia de su mentira.
Nunca vi a mi padre llorar a mi madre, pero era muy joven. Cuando él habla
de ella, solo tiene enojo por Bishop. Todos tratan el dolor de diferentes maneras y
tal vez los vampiros también lo hacen. Fue empujado a un mundo completamente
nuevo y todavía tenía que cuidar a una niña pequeña. Tiene que echar de menos
a mi madre porque, ¿por qué otra cosa sería tan fuerte su venganza por Bishop?
Me pregunto si lo recuerdo mal y de repente no estoy segura de mí misma.
¿Podría yo tener esta historia confusa, o él realmente me está mintiendo? Lo único
que me han inculcado es que Bishop mató a mi madre y debería pagar por ello.
Por supuesto que quiero que Bishop pague pero, ¿cuánto costará? Nunca he visto
a papá con otra mujer, y me hace pensar que no puede seguir adelante con ellas.
Es un pensamiento dulce y triste, y tal vez por eso lo está presionando tanto. Si
él puede obtener la venganza que está buscando, finalmente puede seguir
adelante con su vida.
Pero esas piezas de la historia que me contó no se suma a la imagen que
tengo en la mano. Mis ojos vuelven a Bishop y siento un extraño hormigueo por
todas partes. Últimamente está creciendo y ahora siento un tirón hacia él. Me
pregunto si tal vez soy yo quien quiere mi propia venganza. ¿Por qué otra cosa me
sentiría así por un hombre que destrozó a mi familia?
No solo me quitó a mi mamá, sino que ahora se ha llevado a mi papá.
Gordon no es el padre que fue una vez. Desde que me contó todo acerca de que
era un vampiro y cómo había llegado a serlo, todavía lo he visto como la misma
persona. Mi papa. Él no era un vampiro, era un hombre, seguía siendo el mismo
hombre para mí, pero ya no puedo decir lo mismo. Puede pasar de dulce a
pesadilla en dos segundos y lo juro, a veces puedo verlo conteniéndose. Me
pregunto si tal vez se está volviendo loco. Tal vez Bishop sea la razón por la que
es así. Cuanto más nos acercamos a él, más desquiciado está mi padre.
Mi padre siempre me enseñó a mantener mi nariz fuera de sus asuntos y
siempre lo hice. Confié y lo amé, pero estoy descubriendo que tiene tantas capas.
Él no ve mal el lastimar a personas inocentes si eso significa derribar algo más
grande. Me enteré de eso hace seis meses, cuando entré por casualidad en nuestro
sótano. Es la misma escena que me vino a la mente cuando la chica a la que
ayudé a escapar me dijo que había estado del lado del mal.
Mi papá me dijo que estaba haciendo lo que debía hacer ese día. Después
juro que intentó hacerme olvidar. Le vi usar el truco en otros humanos antes,
pero nunca pensé que me lo hiciera a mí. Asentí y fingí mientras hablaba. No
sabía qué más hacer porque estaba más sorprendida que nada. Me dije a mí
misma que solo estaba tratando de protegerme para que no viera algo terrible, 10
pero el fastidioso pensamiento de que lo había hecho antes me persigue. Me hizo
preguntarme por qué algunas cosas de mi pasado se sienten tan confusas.
¿Podría ser verdad lo que dijo esa chica? ¿Qué pasa si estoy al lado de un
monstruo?
Me levanto de la cama y me dirijo a la ventana de mi habitación. Retiro las
cortinas y miro el camino que le dije a la niña que tomara. No veo nada, pero es
demasiado oscuro para mí, de todos modos. Me pregunto si todavía podré usar el
camino una vez que mi padre y sus hombres descubran mi pequeño secreto. No
lo uso mucho ahora, es un poco agradable saber que está ahí. Que mi papá piense
que me mantiene bajo llave, pero sé que siempre puedo escapar.
Una cosa es cierta: quiero saber la verdad. Hay tres lados en cada historia,
y planeo obtener la de Bishop de una manera u otra.
 2
Traducido por Luisas1983
Corregido por RRZOE

Bishop
—¡Bishop! —grita alguien, pero solo hace eco en mis oídos.
El sonido está lejos y mis piernas están débiles cuando cierro los ojos. Me
siento llevado a mi cama cuando una ola de agotamiento me golpea. En algún
lugar en el fondo de mi mente puedo recordar a Dove diciendo quién es la chica
en la pintura pero no puedo concentrarme.
Todo se está volviendo negro y el mundo se inclina justo antes de que
aterrice en mi cama. Puedo oler el olor del miedo y el pánico por todas partes y 11
luego hay gritos. Me extiendo, pero las sábanas frías son todo lo que se
encuentran con mis dedos cuando abandono la conciencia.
Cuando caigo en la oscuridad, veo los ojos violetas que he estado soñando.
Es casi como si estuviera aquí conmigo. Pero si lo estuviera, no me estaría
muriendo. Puedo sentir que el final de mi vida se acerca rápidamente, y creo que
eso es lo que me está sucediendo ahora. Siempre supe que este momento vendría,
pero no estoy listo. Todavía hay mucho que necesito decirle a mi familia. Hay tanto
que necesito enseñarles sobre nuestras maneras. Intenté escribirlo todo y hacer
toda la investigación que pude, pero no es suficiente. Han pasado doscientos años,
pero es una gota en el cubo en comparación con las vidas que todos vivirán ahora.
Han encontrado a sus compañeros y se han formado sus verdaderos lazos. Eso
es todo lo que siempre quise para ellos. Sé que no importa qué, estarán con la
persona que aman, y saber que están a salvo hace que esto sea más fácil dejarme
ir.
Solo tengo un arrepentimiento y es que nunca la encontré. Mi hermoso
sueño con sus ojos violetas y cabello rojo. Sé en mi alma que ella era mi
compañera, pero no estaba destinada a serlo. Me voy de este mundo sin
encontrarla, pero no puedo evitar esperar que, de alguna manera, la encuentre
en la eternidad.

**********************************
 Tres días después...
Mi boca está seca y mi cuerpo débil cuando me giro en la cama. Siento que
una mano cálida sujetar la mía y abro los ojos lentamente.
—¿Ravana? —grazno, y sus ojos se levantan para encontrarse conmigo.
—Oh, gracias a Dios —respira mientras se gira para apartar la vista de mí—
. ¡Valen! ¡Está vivo!
Ella aprieta mi mano y parpadeo varias veces, alejando el sueño — ¿Cuánto tiempo
estuve inconsciente? —Mi voz es ronca y suena como si hubiera estado mordiendo
tiza.
—Shh, tómalo con calma. No hables —dice mientras inclina la cabeza en lo
que puedo decir es el alivio—. Estás bien.
Escucho a Valen entrar corriendo en la habitación y pararse junto a Ravana.
Él pone un brazo alrededor de ella y coloca su mano sobre las nuestras donde
están unidas.
—Nos has asustado mucho, viejo.
Quiero sonreírle, pero en este momento todo duele.
—Has estado inconsciente por tres días. Creo que estabas en algún tipo de
coma. No teníamos idea de qué hacer. Kane y Juliet estaban hablando de hacer 12
un viaje para encontrar un médico vampiro. —Levanto una mano en señal de
protesta.
—No te preocupes. Acabo de llamarlos —agrega Valen. Se sienta en la silla
al lado de Ravana y ambos me miran fijamente—. Pensamos que habías muerto.
—No es mi momento —le digo mientras me aclaro la garganta otra vez, y
esta vez duele un poco menos—. Me estoy quedando sin tiempo. —Los dos
comparten una mirada y hay algo que no me están diciendo—. Ahora no es el
momento de guardar secretos.
—Dove piensa que ha encontrado a tu compañera. La chica de las fotos —dice
Ravana, mirando hacia ellos.
Los recuerdos de sus palabras justo antes de que me desmayara vuelven a
inundarme.
—¿Cómo puede ser que ella sea la hija de Gordon? No puede ser posible
—digo—. ¿Cómo pudo haberla encontrado?
Conocí a Gordon cuando era un vampiro joven y viajaba por el mundo. Su
creador acababa de morir y se levantó al poder de la noche a la mañana. En ese
momento no entendía lo que significaba dirigir una ciudad y estar a cargo de otros
vampiros. O lo que significaba mantener a salvo nuestros secretos. Pero Gordon
fue criado por alguien que pensó que los vampiros debían gobernar el mundo sin
preocuparse ni arrepentirse de a quién tenían que matar en el camino. Al
principio, pensé que había cosas que podía aprender de Gordon sobre cómo
mantener el control de un área y cómo crear riqueza más allá de mis sueños más
salvajes. Pero al final, todo lo que sentí fue frío y vacío.
Él creía que para que la gente te siguiera, debían temerte y yo no estaba de
acuerdo. Tomamos caminos separados, y pensé que había establecido su
residencia en las nevadas colinas de Rusia. Supuse que viviría sus años allí
porque no creía que encontrar un compañero fuera el secreto de la inmortalidad
de los vampiros. Creía que si probaba suficiente sangre humana, sería suficiente
para mantenerlo vivo para siempre, sin importar lo que nuestra historia nos haya
enseñado.
Leí todos los libros antiguos que tenía y traté de absorber todo el
conocimiento que pudimos sobre nuestro tipo antes de seguir adelante. No podría
estar cerca de su oscuridad sin sentir que sería tan negro y sin alma como él. Eso
fue hace una década, antes de crear la familia que tengo hoy.
Ahora mi territorio cubre la extensión de la ciudad y vivimos en paz. Mi
familia ha encontrado a sus compañeros y al ver lo felices que son, eso me hace
feliz a mí también. Hace que me de cuenta de que tomé la decisión correcta al
traerlos al redil y crear todo lo que tenemos.
Me pregunto mientras estoy aquí, sintiéndome sin fuerza y débil, ¿Gordon
River buscaría en el mundo a mi única compañera y luego la alejaría de mí? Por
supuesto, él lo haría. Es el hombre más cruel que he conocido y tiene poder. Esa
es una combinación peligrosa y la razón por la que lo evité por tanto tiempo. Pero
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si él tiene a la mujer con la que he estado soñando, mi compañera, entonces no
hay nada que no pueda hacer para detenerlo.
—¿Dónde está ella? —pregunto, Ravana y Valen intercambian una
mirada—. ¿Dónde? —vuelvo a preguntar, esta vez mi voz es más fuerte.
—Los gemelos tienen un plan para tratar de atraparla —admite Ravana y
levanta sus manos cuando trato de levantarme de la cama—. ¡No! Tienes que
descansar.
—No puedo dejar que hagan eso. Ellos no saben qué tipo de hombre es.
—Se ha puesto el sol, Bishop. Ninguno de nosotros va a ningún lado —dice Valen,
levantándose y poniendo una mano en la espalda de Ravana—. Necesitas conservar
tu fuerza. —Hay una mirada triste en sus ojos mientras sacude la cabeza—. No
sabemos cuánto tiempo tienes.
Ravana deja escapar un sollozo y cubre su rostro con sus manos. Extiendo
la mano y coloco mi palma en la parte posterior de su cabeza mientras ella llora.
Aunque amo a todos en esta familia, Ravana y yo siempre hemos tenido un vínculo
más estrecho. Ella es, después de todo, mi sangre. Mi sobrina, traté de protegerla
desde lejos, pero fracasé y tuve que traerla para salvarla.
—No hagas eso —digo, tratando de mantener mi voz clara—. Sabíamos que
este día llegaría.
 Ella esnifa mientras se sienta y se limpia la cara.
—Voy a llamar a Juliet y asegurarme que sepa que estás despierto. Ella dijo
que Kane ha estado dando vueltas toda la noche.
Con eso, Ravana se levanta y prácticamente sale corriendo de la habitación.
—Ella ha estado a tu lado todo el tiempo —dice Valen, tomando la silla
vacía—. No creí que se diera cuenta de cuánto le afectaría perderte. Pero creo que
eres la última familia verdadera que ha permitido acercarse y eso de perderte la
golpeará fuerte.
—Ella siempre ha sido especial para mí y me alegro de que te haya
encontrado.
—Ella piensa en ti como su padre —él niega con la cabeza—. Tienes que
averiguar cómo mantenerte vivo. Ella está hablando de dejarte beber toda su
sangre para ver si algo de eso funciona.
—¿Y qué dijeron todos los compañeros? —pregunto y siento que sonrío.
—Seré honesto, no me fue bien —dice, sacudiendo la cabeza.
—Los compañeros son muy protectores —estoy de acuerdo, y él sonríe—.
Beber la sangre de otro vampiro o humano es sagrado. Solo debe ser compartido
entre compañeros en condiciones de servidumbre. Entiendo el deseo de Ravana
de hacer lo que sea necesario para salvarme, porque yo haría lo mismo por mi
familia. Pero beber su sangre o la tuya no me salvará. Solo el sabor de mi 14
verdadera compañera lo hará.
—¿Y crees que este tipo, Gordon, la tiene? ¿Tu compañera?
—No lo sé —digo, mirando la imagen que he dibujado mil veces.
La primera vez que dormí después de mi creación soñé con ella. Durante
doscientos años ha venido a mí todas las noches, de una u otra manera. Algunas
noches son solo visiones de ella y otros sueños se sienten tan reales como si
estuviera aquí a mi lado. Ha sido una tortura saber exactamente qué aspecto
tiene, hasta la marca de nacimiento en su hombro, pero no ha sido efectivo para
encontrarla.
—Solo lo sabré si estoy lo suficientemente cerca para olerla, pero no sé cómo
será posible. —Muevo mis piernas y me duelen con el más mínimo toque de las
sábanas contra ellas.
—Si depende de la familia, encontraremos una manera —dice Valen, y se
inclina hacia adelante y toma mi mano—. Tú eres el líder de todos nosotros, así
que tienes que luchar.
Asiento, porque tiene razón. Ahora no es el momento de ceder y dejar que
la muerte me lleve. Necesito reunir toda la fuerza que me queda y encontrar una
manera de llegar a ella. Mi ángel de ojos violetas que ha estado conmigo todo el
tiempo. Si Gordon la tiene, será su último error.
 3
Traducido por Nananormal
Corregido por Jessibel

Loren
Me acuesto en mi cama mientras pulso en mi computadora portátil. Han
pasado días desde que ayudé a la chica a escapar y sigo revisando las noticias
locales para ver si está desaparecida. No hay nada, así que eso tiene que ser
bueno. Si algo le pasara, entonces su familia habría denunciado su desaparición.
El alivio me llena cada vez que hago clic en la página de noticias y no la veo.
Aunque hay otras chicas desaparecidas.
Mis ojos se mueven por la pantalla hacia las cinco mujeres desaparecidas.
Todas tienen el pelo rojo e inconscientemente me acerco y toco el mío. Me paralizo
cuando reconozco a una de ellas. Sólo me encontré con ella una vez. Vino a 15
entregar comestibles hace más de un mes cuando el repartidor normal estaba
enfermo. Apenas compartimos unas pocas palabras, pero fue agradable. Salió
corriendo cuando papá entró en la cocina, pero eso no era inusual porque la gente
siempre parece tenerle miedo. Abandonan su espacio lo más rápido posible, a
menos que use su encanto en ellos. Creo que disfruta cuando la gente sale
corriendo de la habitación. Nunca me sentí así, pero tal vez estoy acostumbrada
a cualquiera que sea la vibra que él irradia porque he crecido a su alrededor.
Entiendo ese sentimiento porque lo tengo cuando estoy cerca de Greg. Tengo la
necesidad de estar en cualquier otro lugar, pero a poca distancia de él.
Mi pecho comienza a doler y odio este remolino de emoción que se ha estado
cerrando a mi alrededor. Ni siquiera en mi sueño puedo escapar de ello. Cuando
cierro los ojos, todo lo que veo es a Bishop. Todavía no le he preguntado a mi papá
acerca de eso por miedo a aprender cosas que no quiero saber. Es infantil y débil.
La culpa me golpea cuando pienso en todas estas preguntas crecientes de
dudas rodeando a mi papá. Me estoy volviendo como todos los demás y salgo
corriendo de la habitación cuando él entra. Sé que no podemos seguir de esta
manera. Al menos, yo no puedo.
Escribo nuestra antigua dirección en la barra de búsqueda y comienzo mi
búsqueda. Dos mujeres pelirrojas del área desaparecieron en el pasado, pero ha
pasado más de un año desde la última desaparición. Me incorporo y cruzo las
piernas mientras pongo la computadora portátil en mi regazo. No quiero creer lo
que está justo delante de mí porque podría ser una coincidencia. Es demasiado
doloroso pensar en qué otra cosa podría significar. ¿Y si es uno de sus hombres?
Muchos vinieron con nosotros en la mudanza, eso tiene que ser. Intento razonar
conmigo misma mientras me aferro a cualquier otra posibilidad.
Sigo desplazándome y casi grito cuando veo una foto de mi antiguo guardia
Sam. Pongo mi mano sobre mi boca para evitar que el miedo crezca mientras
reviso el artículo y veo que la policía está buscando pistas. Su cuerpo fue
encontrado flotando debajo de un puente cerca de donde solíamos vivir. Según el
artículo, fue poco después de que nos mudáramos.
Cierro la computadora portátil y la tiro al otro lado de la cama, sin querer
que esté cerca de mí. Las lágrimas caen por mis mejillas incluso con los ojos
cerrados fuertemente. Sofoco mis sollozos con la mano, pero no sirve de nada.
Puedo sentir que solo está comenzando, así que salto de mi cama y me apresuro
a la ducha. La enciendo y me quito la ropa antes de entrar. Dejo que la ducha
ahogue el sonido de mis sollozos mientras apoyo mis manos contra la baldosa fría
para mantenerme en posición vertical.
Lloro por Sam, lloro por mi papá y egoístamente lloro por mí.
Las cercanas paredes de la ducha se estrechan a mi alrededor y no quiero
nada más que correr. No sé a dónde iría, pero me imagino que a un lugar donde
mi papá puede explicarlo todo. Él puede decirme que mi imaginación ha sacado
lo mejor de mí y que todo va a estar bien. La alternativa es huir de él, y ese
pensamiento me causa aún más dolor.
16
No hay a dónde ir. No tengo a nadie y no tengo dudas de que mi papá me
encontraría.
Cuando el agua finalmente se enfría, salgo de la ducha y me envuelvo con
una toalla. Me congelo cuando abro la puerta de mi baño y veo a Greg sentado en
mi cama con mi computadora portátil abierta. Sus ojos vagan sobre mí como
siempre lo hacen, pero esta vez todo lo que tengo es una toalla para cubrirme. El
lado de su boca se levanta y trago mientras trato de no parecer asustada.
—¿Por qué tienes mi computadora portátil? —pregunto, y me sorprende que
mi voz sea firme.
—Mi trabajo es mantener un ojo sobre ti. —La cierra y se levanta de la cama.
Lucho contra las ganas de dar un paso atrás. Los hombres como él
disfrutan del miedo que pueden incitar en la gente. Lo sé porque he visto a mi
papá. Él lo disfruta demasiado, pero siempre lo atribuí a su posición de jefe. Ahora
no estoy tan segura de que eso sea cierto. Su forma de vida es todo lo que he
conocido, y por lo que acabo de descubrir, todo podría ser una ilusión.
—No era consciente de que no podía tener algún tipo de privacidad. —Levanto la
barbilla en desafío.
—Nunca tendrás eso. —Alejo la mirada de él hacia la puerta de mi
habitación cerrada, preguntándome si podría hacerlo. Puede que no sea necesario
porque mi grito llamaría la atención—. Pero eso ya lo sabes, pequeña Loren.
 Lo miro y él lame sus labios. Puedo decir que algo está retumbando en esa
cabeza suya.
—Él mató al último hombre que cuidó de ti. —No estoy segura de si ya lo
sabía o si sólo lo vio en mi computadora portátil.
—No —digo, pero mi cabeza está asintiendo, no solo me sorprende, sino que
también lo veo en la cara de Greg. Mi fe en mi padre está vacilando y acabo de
mostrarle a Greg una debilidad.
—¿Por qué? —su voz es baja ahora.
—No lo sé. —Una lágrima se desliza libremente. Estaba segura que las
había llorado todas. Me equivoqué. Me equivoqué en muchas cosas.
Ambos nos paramos en silencio. No es incómodo, simplemente no puedo
encontrar algunas palabras para decir. Al menos por eso estoy callada. Greg es
un poco más lento en la aceptación, sin embargo, justo cuando tomo un puñetazo
mental por él, me doy cuenta de que yo soy la lenta.
—Él las mata —dice finalmente, y esta vez no puedo detener el escalofrío
que me recorre ante el impacto de sus palabras—. El querido viejo papá no es
quien pretende ser delante de ti. Eres su querida y dulce hija. —Lame sus labios
otra vez—. ¿Crees que piensa en ti cuando las mata? Sabes que he leído sobre esa
mierda. Asesinos que pretenden matar a la misma persona una y otra vez. Alguna
mierda enferma si me preguntas.
17
De repente, me imagino a todas esas chicas con el pelo rojo. El pensamiento
asqueroso había entrado en mi mente por un breve momento antes de que lo
arrojara afuera de nuevo. Greg está arrojando una luz sobre eso, sobre todo lo
que me niego a mirar. Le está dando voz a los pensamientos y eso lo hace sentir
real.
Sacude la cabeza.
—Aunque pude ver por qué el no tener la cosa real sería insatisfactorio.
Especialmente cuando está justo frente a ti. —Elimina el resto de la distancia
entre nosotros y todo dentro de mí se paraliza.
Pasa su dedo por mi mejilla y sigue bajando por mi cuello y por la parte
superior de mis senos. Quiero alejar su mano con una bofetada, pero mantengo
mi agarre sobre la toalla.
—Apuesto a que no has sido tocada, ¿verdad? Has estado encerrada para
que nadie se te acerque, cuando realmente deberías temerle a con quién estás
encerrada.
—¿Me vas a lastimar? —pregunto, porque estoy harta de no saber.
Sus palabras son ciertas y debería temer a lo que me rodea. Todo este
tiempo mi padre ha estado hablando de cosas por ahí que podrían lastimarme
debido a quien es él, pero el peligro permanece entre estas paredes.
 —No, no quiero lastimarte. Te quiero para mí porque él no te merece. —Las fosas
nasales de Greg se ensanchan y la oscuridad que sé que tiene en él brilla en sus
ojos. Me doy cuenta de la forma en que dice “quiero”, lo que significa que lo hará
si tiene que hacerlo.
Es en ese momento cuando sé que vale más el malo conocido que el bueno
por conocer. Mi papá nunca ha puesto una mano sobre mí. Podría ser capaz de
cosas horribles, pero hasta ahora no han sido hacia mí. Su temperamento
conmigo está creciendo y puedo sentirlo. La tensión está en el aire y sé que todo
lo que necesitará es una chispa. Aún así, estaba más segura con él que con Greg.
Tal vez podría salir de aquí con la ayuda de Greg, pero todavía tengo mi propio
camino de escape oculto, si no lo han destruido.
—Te mataría si él supiera lo que estabas diciendo. —Le recuerdo a Greg con
quién se está metiendo. Estoy tratando de usar el miedo que mi padre usa en los
demás para que retroceda.
—Pero no se lo dirás, ¿verdad? —su sonrisa se ensancha—. No te gusta ver
a la gente lastimada, en lo cual no te pareces a tu padre. —Se inclina, rozando su
nariz contra mi cuello y subiendo hasta mi oreja—. O tal vez no quieres que él me
lastime. Te sacaré de aquí y luego te tendré para mí solo. —Se aleja de mí y sale
de la habitación. Me siento aliviada, pero su fantasía de que quiero estar con él
es aterradora.
Me quedo allí sabiendo que el sol se está poniendo y tengo que tomar una
decisión. Greg tiene razón. No le contaré sobre él porque sé que significará su
18
muerte. No sé si puedo correr, pero lo que sí sé es que no puedo dejar que mi
papá siga matando mujeres. Incluso si eso significa sacrificarme a mí misma.
 4
Traducido por Jabes
Corregido por Jessibel

Bishop
—¿Cuál es el plan? —dice Kane mientras cruza sus brazos sobre el pecho.
Toda la familia vino hace una hora y soy finalmente capaz de salir de la
cama y caminar hacia el estudio. Tan pronto como me siento, Kane comienza.
—El hombre recién salió de la cama. ¿Realmente tenemos que hacer un
movimiento en este preciso segundo? —pregunta Ravana mientras mira alrededor
de la habitación.
Un silencio cae sobre todos y le sonrío suavemente a ella.
—Como dije antes, no me queda mucho tiempo. —Me doy vuelta hacia Dove 19
y asiento—. Cuéntanos lo que sabes.
—No mucho, pero creo que ella está siendo retenida en contra de su
voluntad o con falsas pretensiones.
—¿Qué te hace decir eso? —pregunto, pendiente de cada palabra. Esta
podría ser la compañera que he estado buscando y tengo que encontrarla.
—Sólo una sensación cuando la miré. Creo que el hecho de que tenga una
ruta secreta de escape es un gran indicio de que no es seguro para ella. Todo lo
que sé es que su nombre es Loren y es la hija de Gordon.
—¿Sabías que él tenía hijos? —pregunta Ezra, y muevo mi cabeza.
—No, lo último que escuché es que estaba sin compañera y tratando
diferentes maneras de mantenerse vivo para siempre. Él no creía que el amor
fuera la clave para la eternidad —digo, y veo a las parejas mirarse los unos a los
otros.
—No pudo haber tenido una hija sin compañera —dice Valen, con su ceño
fruncido—. No funciona hasta que no encuentras una, ¿no es cierto?
—Cierto —dice Kane en acuerdo—. A menos que tenga una compañera,
habría sido físicamente imposible para él tener un hijo. ¿Estás seguro de que no
ha encontrado la suya?
 —Siempre está la posibilidad —digo, pero no encaja con el Gordon que
conozco—. Creo que habría visto a una compañera como un signo de debilidad.
No es su estilo.
—¿Qué sabemos acerca de dónde está siendo retenida? —pregunta Kane.
Erik se acerca al monitor y enciende la pantalla.
—Aquí es dónde encontramos a Dove —dice mientras imágenes aparecen
en la pantalla—. Ezra y yo fuimos y obtuvimos toda la información que pudimos
ayer, y por lo que vimos, el lugar está fuertemente vigilado.
Valen coloca los planos de la casa y los extiende.
—Llamé por algunos favores y obtuve esto hace unas horas. —Señala una
habitación que da a los bosques donde Dove corría—. Por lo que pude ver, basado
en las fotos de los gemelos del exterior, aquí es donde Loren está siendo retenida.
Está custodiada por dos hombres que cambian en turnos de día y noche. Si tengo
que adivinar, sería entre un humano y un vampiro basado en el sol —dice, y
asiento.
—Nos preocupa que el camino que tomó nuestra Dove ya ha sido
traspasado, así que ese punto de salida queda fuera —dice Erik mientras hace
clic en más fotos—. Los guardias exteriores alinean cada salida con armas
pesadas y el hecho de que Dove haya salido con vida es un milagro.
—Sí no podemos irrumpir dentro, ¿podemos sacarlos? —pregunto, y Valen
asiente. 20
—Ese es mi plan sugerido de extracción. —Valen da vuelta al documento
original para revelar un plano de las manzanas circundantes y las propiedades
cercanas—. Cableamos explosivos aquí y aquí —dice, señalando cuatro puntos
clave alrededor de la casa—. Digo que los temporicemos para que exploten en
intervalos y crear confusión.
Kane se adelanta y señala un lugar en el mapa.
—Plagié su sistema de seguridad y esta es su salida de emergencia. Si hay
un problema, este es el camino que tomará.
—¿Este es el plan? —dice Ravana desde la esquina y todos se dan vuelta
para mirarla—. ¿Sólo volar un montón de mierda y esperar que podamos
arrebatar a la compañera de Bishop en su salida?
—¿Tienes uno mejor? —pregunta Valen sin presión en sus palabras. Suena
genuinamente curioso por ver si su compañera lo hace mejor, y me gusta que esté
dispuesto a explorar otras ideas.
—¿Qué pasa si metemos a alguien adentro para que la recupere? —dice
Ravana y se encoje de hombros.
—No. —La palabra resuena desde todos los compañeros, excepto uno.
—Podría funcionar —dice Dove, y ahora todos los ojos están sobre ella—.
Estuve en esa casa. Están armados hasta los dientes. Pero Gordon parecía que lo
estaba perdiendo y creo que si pudiéramos tener a alguien adentro sería más fácil
escabullirla que volar una manzana de la ciudad y empezar una guerra.
—Ninguno de nosotros va a permitir eso —dice Kane.
—Yo lo haré —dice Ravana, y Valen toma su brazo.
—Deberíamos discutir esto primero —dice en voz baja, pero ella lo ignora.
—Sus hombres te conocerán —dice Kane, y mira alrededor de la
habitación—. Nos conocerán a todos.
—¿Entonces qué importa? —dice Ravana, empujando otra vez para ser oída—.
Digamos que nos escabullimos dentro y no nos atrapan y sacamos a Loren de ahí.
No hay problema ¿cierto? —Ella levanta sus manos cuando nadie concuerda con
ella—. Escenario dos, si nos escabullimos y nos atrapan volamos la mierda de
todas maneras y escapamos. No veo el problema.
—Ella tiene un punto —dice Valen mientras se frota el mentón—. Si va
hacia el sur, podemos tener los explosivos en su lugar para crear distracción. Si
somos capaces de hacerlo silenciosamente entonces hay menos víctimas y menos
posibilidades de que algo le suceda a Loren.
—No pasé mucho tiempo con él, pero tengo miedo de lo que es capaz —dice Dove,
y el silencio cae sobre todos nosotros.
Extiendo mis dedos frente a mí mientras pienso en mis opciones. No me
gusta la idea de mandar a alguien solo para sacar a Loren, pero la idea de la 21
posibilidad de lastimar gente inocente en una serie de explosiones es
desgarradora. ¿Por qué son estas nuestras dos únicas opciones?
—Yo lo haré —digo mientras reúno fuerza y me levanto de la silla.
—¿Estás loco? ¡Difícilmente puedes caminar! —dice Ravana mientras se
precipita a ayudarme.
—Sí esta es mi compañera, todo lo que tengo que hacer es acercarme lo
suficiente para olerla y entonces todo estará bien. —Miro alrededor de la
habitación a cada uno—. ¿No fue de esa manera para ustedes? Un rastro y el
apareamiento se hizo cargo y todo dentro vuelve a la vida. He estudiado el
emparejamiento por dos siglos y esta es la única constante. Lo sabré en el instante
que esté con ella si es la elegida. —Hago una pausa mientras dejo que la
posibilidad de la decepción me golpee—. Y si no es ella, entonces es el final de mi
vida de todas maneras. No voy a arriesgar a ninguno de ustedes por esto.
—Bishop… —Ezra da un paso hacia adelante, pero levanto mi mano.
—Quiero que todos se queden atrás y protejan a aquello que aman. Sí esto
sale mal, entonces deberán estar preparados para irse. Deberán salir de la ciudad,
irse tan lejos y tan rápido como puedan.
—No nos estamos yendo —dice Ravana mientras aprieta sus puños—. Podemos
quedarnos y pelear.
 —Pero les estoy ordenando que no lo hagan —digo, y puedo ver sus
hombros caer—. Moriré protegiendo a mi familia y mi sacrificio sería en vano si
algo le sucede a alguno de ustedes. —Dejo salir el aliento y miro alrededor de
ellos—. Vayan a casa y estén listos. Me iré al atardecer.
Está en silencio hasta que salgo de la habitación y escucho susurros detrás
de mí. No les presto atención porque sé que al final lo que ordené será hecho. No
tienen elección porque soy su creador, pero también porque saben que tengo
razón. Ninguno de ellos quiere arriesgar la seguridad de sus compañeros. No está
en su naturaleza ahora que se encontraron el uno al otro, así que, aunque la
intención está ahí, serían incapaz de llevarlo a cabo.
Nunca les pediría que hicieran esta tarea por mí, porque es mía para
asumirla.
Cuando llego a mi habitación, me dirijo hacia las pinturas y vuelvo a
mirarlas. Algunas son mejores que otras, pero los ojos son siempre los mismos.
El color violeta me mira fijamente y la esperanza se eleva en mí. ¿Podría ser ella
la única?
Me toma mucho tiempo ponerme mi traje porque mis movimientos son
lentos y letárgicos, pero cuando me miro en el espejo, nada ha cambiado. Ahí,
todavía están el cabello oscuro y los ojos oscuros que he mirado por doscientos
años. Mi cuerpo es grande y fuerte, y no importa lo que siento en este momento,
sé que si Gordon se interpone entre lo que es mío y yo, acabaré con él de una vez
por todas.
22
Hay más para nosotros en nuestra historia, pero ahora mismo mi único
objetivo es llegar a Loren.
 5
Traducido por cjuli2516zc
Corregido por Jessibel

Loren
Respiro hondo para calmar mis nervios. Aliso mi vestido, asegurándome de
que no me veo tan hecha un lio en el exterior como en el interior. Cuando abro la
puerta, sonrío al ver a Marcus de pie allí. Él brinda su usual asentimiento con su
barbilla hacia mí. Él nunca dice mucho. Es bienvenido sobre Greg cualquier día.
Me pone más nerviosa después de sus palabras de despedida. Soy buena con ser
ignorada por Marcus, si eso significa que guarda sus manos para sí mismo, y los
vampiros siempre lo hacen. Al menos los que he conocido.
—¿Está papá en su oficina? 23
Me brinda otro asentimiento y sonrío cortésmente en agradecimiento antes
de girar y bajar las escaleras. Con cada paso, el miedo pondera dentro de mi.
Intento sacudirlo lo mejor que puedo. Tengo que hacer esto. Tengo que hacer las
preguntas de las que necesito respuestas. No me voy a sentar y hacer la vista
gorda a lo que podría estar haciendo.
La puerta está entreabierta, pero golpeo ligeramente.
—Entra, Loren —dice mi papá, y la abro.
Se queda sentado detrás de su escritorio. Ya puedo sentir la extraña tensión
en la habitación, pero tal vez sea yo. Él inclina su cabeza y me mira. No es el
mismo hombre que recuerdo de hace años, y es un recordatorio de lo rápido que
pueden cambiar las cosas.
—Tienes miedo de algo —dice mientras se levanta. —¿Alguien te lastimó?
—pregunta mientras apoya las manos en su escritorio.
¿Alguien me hizo daño? No. ¿Me tocaron? Sí. No es una mentira, lo cual es
algo de lo que siempre tengo que tener cuidado.
—Nadie me ha hecho daño —respondo, yendo más lejos en su oficina.
—Ven, siéntate. —Señala una silla y yo hago lo que me dice, tomando
asiento delante de él.
 Sigue estudiándome y ni siquiera sé por dónde empezar. Me quedo mirando
la misma cara que he conocido toda mi vida. Estoy envejeciendo cada año, pero
él siempre se mantiene igual. Si le dijeras a alguien que somos padre e hija, no lo
creerían. No con lo joven que todavía parece.
—Suéltalo —presiona, y puedo decir que ya está irritado conmigo.
Me hace extrañar aún más al viejo él. Quizás este era el verdadero él, todo
el tiempo y solo lo veo ahora que lo estoy buscando. Me doy cuenta de que se está
descuidando al mantener las cosas escondidas de mí.
—Encontré esto. —Saco la foto y la coloco en el escritorio—. Me mentiste —
recoge la foto y la mira sin una reacción—. ¿Cómo puedo ser tu hija? —Las
palabras salen en voz baja, pero sé que él me escucha.
Retuerzo mis manos en mi regazo. Nunca me ha contado mucho sobre su
historia de vampiros, diciéndome que cuanto menos sepa, mejor. No había
presionado porque cuando era más joven no lo pensé demasiado. Era demasiado
joven para comprender plenamente lo que era un vampiro más allá de lo que vi
en la televisión o leí en un libro.
—Te crie, ¿no? —dice, su voz es tranquila e igualada—. Te di todo lo que
necesitabas.
Asiento con la cabeza.
—Papá. —Miro al hombre que ha sido mi vida y es todo lo que sé—. Necesito 24
que seas honesto. Por favor.
En silencio, le suplico que lo exponga todo y me haga sentir horrible por las
cosas que he conjurado en mi mente. Tal vez solo dijo unas cuantas mentiras
blancas para protegerme. Necesito saber algo porque mi mente sigue intentando
encontrar una razón tras otra para desconfiar de él.
Deja caer la foto sobre el escritorio y se sienta. Odio el silencio que perdura
y me hace pensar que está inventando mentiras para decirme. La verdad debería
salir a la luz fácilmente.
—¿Estás matando mujeres pelirrojas? —Tiro la bomba para sacudir el
silencio, pero él solo soltó una carcajada. Lanza su cabeza hacia atrás y el sonido
no me tranquiliza. No ríe como si mi pregunta fuera una locura. Es siniestro. Hace
que el dolor en mi estómago palpite.
—No eres tan estúpida como pensé que eras. —Sus palabras son peores
que una bofetada física en la cara y una lágrima se escapa. —No llores. —Esta
vez hay un rastro de pesar en su voz. —Me preocupo por ti, Loren. No pensé que
lo haría, pero empezó con el tiempo. Eres lo más parecido a una hija que jamás
tendré.
No estoy segura de cómo responder.
—Deberías agradecerme. Tu madre, si puedes llamarla así, te metió en una
casa de drogas. Tienes suerte de estar viva. Te encontré cuando tenías tres años
corriendo alrededor de un cubo de basura, apenas alimentada. Te salvé y te hice
olvidar esa vida podrida.
Sonríe como si estuviera orgulloso de sí mismo y no sé cómo sentirme al
respecto.
—¿Mi madre sigue viva? —Sacude la cabeza—. Bishop la mató. —Repito las
palabras que me ha dicho cientos de veces. Siempre están en mi mente y, a veces,
están en un bucle que se reproduce una y otra vez. No puedo procesarlo todo
ahora, tan loco como suena. Tal vez estoy enloqueciendo.
—Es por su culpa que está muerta —confirma.
—No entiendo nada de esto. ¿Las mujeres? ¿Por qué elegiste llevarme? ¿Por
qué...? —Me callo. Hay demasiadas preguntas para siquiera nombrarlas y ahora
mi cabeza da vueltas—.¿Realmente trabajas para el gobierno?
—No trabajo para ningún hombre. —Mi cuerpo se adormece y mi mente
trata de ponerse al día, pero hay muchos agujeros. Recuerdo gritos del sótano y
hombres que iban y venían. Me dijo que algunas cosas fueron hechas por el bien
mayor.
—Un bien mayor de tu elección. —Su mirada se fija en la mía. Pensé
ingenuamente que el bien mayor estaba destinado para todos.
—Esto era mucho más fácil cuando me dejabas entrar en tu mente —suspira—.
Es más difícil ahora y no sé cómo lo haces, pero lo haces. 25
Junto mis manos para evitar que tiemblen. Todo se está desmoronando. No
es solo aprender una cosa mala sobre él, sino que está podrido hasta la médula.
Mis confusos recuerdos tienen más sentido.
—Has estado al lado del mal todo este tiempo y pensaste que estabas a lado
de la luz. Este no es el lado correcto de las cosas.
Las palabras de la chica flotan en mi mente.
—Esto es todo sobre Bishop, ¿no es así? —Tiene que ser. Todo siempre gira
en torno a Bishop y al odio de mi papá por él. Si hay algo de lo que estoy segura,
es que mi padre odia a Bishop. ¿Cómo me enredé en este desastre entre ellos?
Todavía no tiene sentido, debido a que ahora mi papá no tiene necesidad de
vengar a mi madre. Ella no era nada para él, entonces, ¿por qué está haciendo
esto?
—Sí, comenzó allí. Sabía que te quería, así que te llevé. —Lo dice con tanta
facilidad, como si hubiera entrado en la tienda y me hubiera comprado.
—Me llevaste —repito. Esas simples palabras me hacen sentir como si solo
fuera un objeto y nada más.
—Te salvé. —Esta vez siento el mordisco de sus palabras. Se está enojando,
pero aún así empujo. —Eres mía ahora, hija, y él no puede tenerte.
 Tal vez él sí se preocupa por mí de alguna manera extraña y retorcida. Pero
ahora que sé que ha estado jugando con mi mente, no tengo idea de qué era real
o no. Además, ¿por qué Bishop me quiere? Por qué siempre lo quieres, responde
mi mente. Alejo ese pensamiento. No quiero al hombre que mató a mi madre.
Tampoco estoy segura de que quiera que el hombre que está sentado frente a mí
continúe estando en mi vida.
—¿Me salvaste de la vida que estaba viviendo o de él? —pregunto y me
levanto. Él hace lo mismo y nos miramos fijamente.
Puedo decir que no quiere responder la pregunta cuando su mandíbula se
tensa.
—Realmente no te preocupas por mí o lo que sea esto. —Señalo entre
nosotros, sintiendo que mi calor y mi ira aumentan. —¡Soy un juguete masticable
entre ustedes dos por alguna loca razón que no me dirán! —grito.
Antes de que lo vea moverse, sale del escritorio y me golpea con fuerza en
la cara. Vuelvo a caer en la silla y agarro mi mejilla mientras lamo mi labio inferior
y pruebo la sangre. Mi cara palpita, pero es el menor de los dolores que siento
ahora mismo.
Gordon se para a mi lado, luciendo un poco sorprendido de que me
golpeara.
—Yo… —sus palabras son interrumpidas cuando el altavoz de su teléfono
cobra vida. 26
—Violación de seguridad.
—¡Mierda! —maldice, luego toma el teléfono y escucha lo que se dice.
—Ve a la sala de pánico. Quédate allí hasta que yo vaya por ti. —Me levanta
de la silla y me empuja hacia las puertas de su oficina—. Loren, ¿me estás
escuchando? Ve a la habitación del pánico. Ya conoces el procedimiento. —
Asiento.
Salgo de su oficina y camino hacia el sótano aún sosteniendo mi mejilla.
Los hombres corren a mi lado cuando llego a la puerta del sótano y me detengo.
Recuerdo la última vez que fui allí y lo que había visto. Había tanta sangre por
todas partes y ahora pensar en ello me da escalofríos.
Una fuerte explosión sacude toda la casa y tengo que apoyarme en la pared
para no caerme. Mis oídos resuenan por el sonido, pero algo dentro de mí se da
cuenta de que esta es mi oportunidad. Dejo caer mi mano y veo una mancha de
sangre en las puntas de mis dedos. Mi labio se rompió cuando me golpeó. Nunca
negó haber matado a esas mujeres y no voy a ser agregada a esa lista.
 6
Traducido por Neera
Corregido por Neera

Bishop
—Mierda —digo cuando escucho que se apaga la explosión.
Los demás deben estar lo suficientemente cerca para escuchar las alarmas.
Me las arreglé para escabullirme en la escalera de la cocina trasera sin ser
detectado, pero la puerta permaneció abierta demasiado tiempo y activó un
sensor. Estoy débil y no puedo moverme tan rápido como lo necesito, así que
tengo que tener cuidado.
Entro en el pasillo y espero a que pase un grupo de hombres con armas.
Mientras me tome mi tiempo y me mantenga tranquilo, estaré bien. Me mareé 27
varias veces en el camino y sé que mi familia estaba muy cerca observando, sin
importar cuántas veces les dije que se mantuvieran alejados.
Mientras me alejo de la pared, espero que se produzca la siguiente
explosión, pero no lo hace. Pueden estar esperando para activar otra para usar
cuando me escape. Saldré de aquí vivo y con Loren. Haré todo lo que pueda para
salvarla y mantener a ese monstruo alejado de ella y de mi familia.
Doy unos pasos por el pasillo y me quedo inmóvil cuando escucho que algo
viene. No tengo el tiempo ni la energía para correr y esconderme, así que me paro
allí cuando la persona se acerca a la esquina y me enfrenta de lleno.
Mi garganta se tensa cuando veo a la joven parada allí. Lleva un vestido
blanco con sangre y su pelo rojo le rodea la cara. Ella levanta la vista del suelo
cuando me ve y sus ojos violetas chocan con los míos.
—Eres tú —le digo, apenas por encima de un susurro, mientras miro
fijamente la cara de la mujer con la que he estado soñando.
—¿Bishop? —dice ella, y aunque me mira como si estuviera sorprendida de
verme aquí, no está huyendo.
—Tienes que venir conmigo —le digo mientras extiendo mi mano.
La mira por un largo momento antes de dar unos pasos hacia mí. Cuando
estamos a solo unos pasos de distancia, su olor me rodea y todo lo que pensaba
que estaba perdido cobró vida. Huele a canela y manzanas frescas y me hace agua
la boca. Mi espalda se endereza y mis músculos se flexionan. Es como si me
estuvieran recargando con cada aliento que tomo en mis pulmones.
—Tengo miedo —confiesa mientras me mira a los ojos.
Puedo ver el miedo allí y todas las preguntas a su alrededor. Tengo que
asegurarme de que esté a salvo, y ahora mismo siento que podría lanzarla por
encima del hombro y arar a través de la pared de concreto a mi lado.
—Si vienes conmigo, te juro por mi honor y por mi vida que no te haré daño.
—Flexiono mi mano abierta y solo duda un segundo antes de colocar la suya en
la mía—. Confía en mí.
Mientras digo las palabras, la tomo en mis brazos y corro tan rápido como
puedo por el pasillo y hacia la entrada trasera donde entré. Es probable que haya
guardias allí, pero es la salida más rápida y el tiempo no está de nuestro lado.
El sentimiento que está bombeando a través de mi cuerpo en este momento
no es nada como lo que alguna vez he sentido. Quiero protegerla y abrazarla y
poseer cada pulgada de ella. Quiero probar su cuerpo y hacerla reír, y quiero darle
todo lo que su corazón desea. ¿Es esto lo que significa ser un compañero? ¿Este
deseo abrumador de tomarla y dominar todo mientras eres generoso con todo tu
ser? Es como si me hubieran entregado un ángel precioso y ahora es mi deber
asegurarme de que nadie la lastime o rompa su espíritu mientras viva.
—¿A dónde vamos? —pregunta mientras se acomoda cerca de mí.
28
—Te llevaré a casa. —Algo se acomoda en mi pecho y es como si estuviera
vivo por primera vez en doscientos años.
—Tratarán de detenernos.
Me sorprende que no presente una protesta, pero tal vez también sienta el
empujón hacia mí.
—No permitiré que nadie te lastime ni se interponga en mi camino.
Justo cuando las palabras salen de mi boca, un hombre sale y bloquea la
puerta por la que estaba a punto de salir. Es un gran hijo de puta, pero es
humano. Puede que no haya podido luchar contra él hace unos momentos, pero
ahora tengo a mi compañera y ya no estoy en la puerta de la muerte.
—Greg, déjanos ir —suplica Loren, y niego.
—No le rogarás a ningún hombre, ángel —le digo mientras la pongo de pie
y la empujo detrás de mi cuerpo. Miro al hombre musculoso y levanto mi
barbilla—. Puedes dejarnos ir o puedes morir intentando detenernos.
—¿Crees que puedes tomar lo que ya me pertenece? —dice y se ríe.
Puedo sentir el miedo saliendo de Loren como si fuera un ser vivo. Le tiene
miedo, y eso significa que él tiene que pagar.
 —Intenta tocarla y romperé todos los huesos de tu cuerpo. —Aprieto los
puños y planto mis pies—. Si te apartas del camino y nos dejas ir, te dejaré vivir,
tu elección.
Se ríe de nuevo, pero antes de que pueda hacer un movimiento, me pongo
en pie y golpeo su cara con la palma de mi mano. Escucho sus dientes crujir y él
agarra su boca mientras tropieza hacia atrás. Le doy una patada en el pecho y
escucho cómo se rompen sus costillas cuando cae contra la pared. Está fuera del
camino ahora, así que decido salir mientras todavía podamos. Estiro mis brazos
detrás de mí y Loren toma mi mano sin dudarlo, y lo rodeamos.
Justo cuando ella pasa, Greg se acerca y toma una pierna con una mano y
saca un cuchillo con la otra. El terror me atraviesa y reacciono como lo haría
cualquier compañero si alguien intentara hacerles daño. Agarro su muñeca y la
doblo hacia atrás, rompiéndola con un simple movimiento de mi mano. Él grita y
yo agarro el cuchillo, apuñalándolo en su cuello para silenciarlo.
—No lo mires —le digo mientras le bloqueo la vista. La cara de Loren es
blanca cuando la acerco a mí y salgo corriendo por la puerta—. No tengo tiempo
de explicar, pero prometo que todo estará bien.
Me preocupa que esté traumatizada porque ahora está temblando. ¿Es esto
lo que sucede cuando los humanos entran en estado de conmoción?
Justo cuando salimos de la casa, hay otra explosión al otro lado e
internamente, estoy agradecido de que mi familia no me haya escuchado. La tomo 29
en mis brazos y corro tan rápido como puedo lejos de la casa y lejos del daño.
Una camioneta oscura está esperando cerca y cuando nos acercamos, la
puerta se abre. Me siento aliviado cuando Kane y Valen saltan para ayudarnos a
entrar más rápido.
—Gracias. —Respiro mientras cierran la puerta y la furgoneta se aleja del
bordillo. Loren está temblando, y Juliet coloca una manta encima de ella mientras
la acuno en mis brazos.
—No podemos volver a las casas. Ese es el primer lugar donde buscará —le digo—
. Si todos están dentro, entonces vamos a la montaña.
Ezra está detrás del volante y asiente. Dove se encuentra entre él y Erik, y
se da vuelta para mirarme.
—Tenemos todo en la lista de emergencia cargado en la parte posterior. Los
gemelos y yo teníamos la casa abastecida la semana pasada por si acaso.
Debemos ser buenos para escondernos por ahí durante mucho tiempo, o hasta
que podamos averiguar qué hacer a continuación.
Asiento y me siento aliviado de tener a mi familia conmigo para ayudar. Sé
que pensé que estaba tomando la decisión correcta al enviarlos, pero estaba
equivocado.
—Gracias, Dove. —Ella me sonríe alegremente y luego mira a Loren.
 —¿Estás bien? —pregunta, pero Loren no responde.
—Solo llévanos al complejo —le digo, y Dove asiente y se da la vuelta.
Me inclino y le susurro a Loren.
—Todo va a estar bien. Estás a salvo y nadie te va a lastimar. —Coloco un
beso en su cabeza y cuando se entierra aún más contra mí, sé que va a estar
bien—. Puedes confiar en todos nosotros.
Necesito que entienda que no está en peligro y que solo estamos aquí para
protegerla. No sé cuánto tiempo tomará, pero ahora tengo todo el tiempo del
mundo, gracias a ella. Ella me salvó la vida, y la mejor manera de pagarlo es
asegurarme de que el peligro nunca vuelva a encontrarla.

30
 7
Traducido por Neera
Corregido por Neera

Loren
Finalmente, me alejo del cuello de Bishop cuando siento que estoy bajando
sobre una superficie blanda. Extraño su rico aroma y calidez al instante porque
me aferré a él como un salvavidas en la tormenta en que se había convertido mi
vida. Sentí que me estaba ahogando, y cuando me acercó más a él, el temblor
finalmente se detuvo. Me fundí con él, sintiendo confort al instante. Era
demasiado, pero cuando estaba rodeada de él me sentía segura.
Cuando lo vi parado allí, pensé por un momento que era un sueño. Que
ninguno de los horrores era real y me despertaría en la cama en una vida que no
se había vuelto del revés y mi papá volvería a ser él mismo. Pero no había sido
31
todo un sueño.
Fui con Bishop voluntariamente y creí las palabras que salían de sus labios
como si fueran verdades talladas en piedra. Fui con él tan fácilmente porque algo
dentro de mí me atrajo hacia él, diciéndome que estaba a salvo. Era como un hilo
invisible que nos unía y se tensaba, y sabía que él haría que todo estuviera bien.
El mismo hombre a quien mi padre me dijo que temiera por todos estos
años es el que me salvó. Gordon, corrijo mentalmente, porque en realidad no es
mi padre. Necesitaba llegar a un acuerdo con eso. Gordon me había tomado tal
como lo había hecho Bishop, pero ¿no fui voluntariamente con Bishop? Me
preguntó y no peleé con él. Extendí mi mano, tomando su mano, y fue la cosa
más natural del mundo.
Sus ojos oscuros miran fijamente los míos y levanta su mano. Debería
estremecerme, pero inclino mi cabeza, encontrando su mano contra mi mejilla.
Algo dentro de mí anhela su afecto.
—¿Quién te hizo esto? —Su toque es suave como una pluma para un
hombre tan grande. Sus dedos permanecen en mi mejilla como si estuviera hecha
de vidrio.
 Trago, sin querer llorar. Todavía estoy sorprendida de que Gordon me haya
golpeado, pero creo que sabía que venía. Él había estado cambiando últimamente,
y tenía que haberlo sabido en algún nivel o no habría estado caminando sobre
cáscaras de huevo.
—¿Dime? —pregunta Bishop mientras se acerca aún más a mí.
—¿Cómo suenas ordenado y preocupado al mismo tiempo? —digo.
Escucho un fuerte resoplido y vuelvo la cabeza para ver a un grupo de
personas observándonos. Sé que el ruido vino de la mujer vampiro de cabello
oscuro. Probablemente se vería más ruda si el hombre a su lado no la
empequeñeciera en comparación, con el brazo colgando cariñosamente de ella.
Dove también está aquí, y encuentro consuelo en eso. Me pregunto si
debería haber aceptado su oferta ese día. Supongo que algunas lecciones debo
aprenderlas por mi cuenta.
Está emparedada entre gemelos idénticos, y no hay forma de distinguirlos.
Ambos tienen un control posesivo sobre ella, y es extraño porque no estoy
acostumbrada a ver tantas parejas. Por alguna razón eso me pone aún más
relajada. El cariño abierto que todos tenemos el uno por el otro me hace pensar
que este debe ser un lugar seguro.
—Guau. Nunca antes había visto ojos así —dice otra mujer, haciéndome
mirarla. Un vampiro con una cara cicatrizada está a su lado. Ella lo está
abrazando como si fuera un osito de peluche gigante, pero prácticamente le está 32
bloqueando la vista.
—La gente siempre dice algo sobre ellos la primera vez que me ven —admito. Estoy
acostumbrada a eso, pero algunas personas piensan que son bonitos, mientras
que otras piensan que son extraños. Me olvido de ellos hasta que conozco a
alguien nuevo.
—Lo siento, soy Juliet. —Ella me brinda un pequeño saludo—. Son sólo...
—Magníficos —dice Bishop, interrumpiéndola—. Son las cosas más
hermosas que he visto en mi vida. Son los mismos ojos con los que he estado
soñando —dice mientras se inclina—. Ahora dime, quién te golpeó.
—Mi papá. —Sacudo la cabeza—. Me refiero a Gordon.
Su mandíbula se tensa y juro que escucho un ruido sordo desde lo más
profundo de su interior. Debería retroceder con miedo, pero no lo hago. En lugar
de eso, me apoyo en él, disfrutando el sonido de su enojo por mi daño.
—¿Me estás haciendo algo? ¿Estás jugando con mi mente?
—No —responde, ofendido y disgustado por la idea—. Nunca te haría eso.
—Quiero confiar en ti —admito—. Pero te odio. —Cuando digo las palabras,
suenan mal. Bishop es el que se estremece esta vez y la culpa se desliza a través
de mí—. Lo siento —murmuro, mirando mis manos en mi regazo. ¿Cómo me
siento perdida y encontrada al mismo tiempo?
 —Tal vez deberíamos dejarlos a los dos solos. —Miro a Dove—. Estaremos
alrededor. Prometo que no hay un lugar más seguro en el mundo para que estés.
Con eso, todos se van, y veo una mezcla de preocupación y felicidad en sus
caras.
—Se preocupan por ti —le digo cuando miro hacia atrás a Bishop. No son
como los hombres de Gordon, que le temen, y por eso siguen sus órdenes. Sus
hombres no tienen otra opción, pero no hay nada de eso aquí.
—Son mi familia. —Aparece una sonrisa en la esquina de su boca, y puedo
decir que está orgulloso de decir eso.
—Ya no tengo familia. —No quiero decirlo en voz alta, pero sale—. Él no es
realmente mi padre.
—Amor. —Puedo escuchar el dolor en su voz por mí mientras me tira a su
regazo. La simple palabra me golpea fuerte. Es la primera vez que pienso en la
palabra, debido a que no es una palabra de la que esté acostumbrada escuchar.
Nunca la he usado yo misma—. Soy tu familia, y ahora ellos también son tu
familia.
¿Por qué diría eso? Gordon dijo que me quería, pero nunca dijo por qué.
—¿Mataste a mi madre? —lo digo como una pregunta, y el cuerpo de Bishop
se paraliza.
No me responde y el tiempo pasa. Debería empujarlo lejos, pero no lo tengo 33
en mí. ¿Qué dice eso sobre mí? ¿Por qué presioné con Gordon cuando pensé que
algo estaba mal, pero con Bishop coloco la cabeza en su hombro, sin querer
moverme?
—Está muerta por mi culpa —dice finalmente, y me doy cuenta de que no
dice que la mató, pero él es el culpable—. Gordon no se preocupa mucho por mí.
No puedo evitar la carcajada que brota de mí ante su grosera subestimación.
Incluso Bishop deja escapar una pequeña risita y se siente bien reírse por un
momento.
—No quería que encontrara a mi compañera. Sabía que estaba obsesionado
con la idea de la chica de mis sueños que vino a verme por la noche.
—¿Compañera? —pregunto y me pregunto si él quiere decir una esposa.
—Sí, compañera. Si un vampiro tiene la suerte de encontrar a su
compañero, entonces su alma le pertenece a ella. La mujer que lo salvará será su
todo. Le dará una razón para querer vivir por la eternidad.
Me incorporo y lo miro a los ojos.
—No tenía idea de que había algo así entre vampiros. Suena maravilloso. —
Suena bien y eso es lo que quiero. El nudo apretado de dolor que siempre tengo
en mi estómago se afloja y estoy caliente por todas partes.
 —Creo que hay muchas cosas que Gordon te ocultó —dice, y una mirada
de dolor cruza su rostro—. Si hubiera sabido que te tenía... —el arrepentimiento
brilla en sus ojos y aprieta los dientes—. Quería hacerme daño, y sabía que peor
que la muerte para mí sería nunca encontrar a mi compañera. —Se inclina más
cerca, su boca a un suspiro de la mía—. Tu eres la indicada.
Todo el aire sale de mis pulmones cuando me da lo que sabía que venía.
Podía sentirlo, pero al escucharlo decir que confirma lo que mi cuerpo y mi
corazón me han estado diciendo todo el tiempo. Un peso que no sabía tenia se
había ido con sus palabras fáciles.
Él me levanta en sus brazos y lo sostengo con fuerza.
—Deja que te muestre.
Me lleva por la casa y sube las escaleras. Entonces me doy cuenta de que
no tengo idea de dónde estoy, pero no me importa. No toma mucho tiempo y abre
la puerta de un dormitorio y me pone de pie.
—Esta es una de mis casas —me dice—. Soñé contigo por primera vez la
noche que me convertí. Con los años, más y más de ti venía a mí. Primero fue tu
cabello. —Se acerca, envolviendo un mechón de mi cabello rojo alrededor de su
dedo—. Luego, qué tan suave eras. —Su otra mano se desliza por mi brazo
mientras toca mi piel—. Tus ojos me pusieron de rodillas. Son una belleza que no
sabía que existía. —Los mira y juro que puedo sentirlo mirando hacia adentro y
viendo todo de mí. 34
Mi boca se abre porque nadie me ha dicho palabras tan dulces antes. Su
dedo suelta mi cabello y se acerca más, mientras su mano se desliza alrededor de
mi cadera.
—Luego esto.
Se inclina lentamente, y sé de inmediato que es para darme tiempo para
decirle que se detenga. Lo que no haré.
Él besa la piel desnuda en mi hombro sobre mi marca de nacimiento.
—Lo llevé directamente a ti, amor. Nunca quise hacerlo y lo siento mucho.
Ahí está esa palabra otra vez, haciendo que mi corazón se agite.
—¿Cómo lo llevaste a mí? —sé que Gordon fue el que mató a mi madre
ahora. La mató y me llevó.
Se hace a un lado y su gran cuerpo se aleja de mí. Me quedo allí
conmocionada mientras mis ojos escanean las paredes. Hay pinturas de mí en
todas partes y es impresionante.
—¿Pintaste esto? —mi mano cubre a mi boca—. Hay tantos.
—Así es como sé que soy responsable de la muerte de tu madre. Gordon
usó algunas de las pinturas que hice en el pasado para encontrarte. Las usó para
cazarte y robarte de tu madre. Si no te hubiera pintado o mantenido en secreto,
entonces él no la habría matado.
—Eso no es tu culpa —le digo defendiéndolo. Sé en mi corazón que me está
diciendo la verdad.
Gordon me alimentó de mentiras, pero en el fondo sabía que era malo.
Puedo ver directamente al alma de Bishop y es puro y bueno.
—Lamento mucho no haberte encontrado antes. —Él roza sus nudillos a lo
largo de mi mandíbula y mi cuerpo está encendido por el calor—. Pero ahora estoy
aquí, y haré cualquier cosa para mantenerte a salvo. Eres mía, Loren.

35
 8
Traducido por Neera
Corregido por Neera

Bishop
—Ya no puedo mantenerme alejado de ti —le digo mientras tomo su rostro
y ella inclina su mejilla en mi palma—. He esperado casi doscientos años hasta el
día que te encuentro, y justo cuando perdí la esperanza, ahí estabas.
—¿Qué está pasando? —dice mientras me inclino y mantengo mis labios a
un suspiro de los de ella.
—Voy a besarte, luego te voy a probar —le digo mientras deslizo un brazo
alrededor de su espalda y presiono mis labios hacia ella.
Hay un pequeño rastro de sangre en su labio desde donde se partió antes, 36
y cuando toca mi lengua lo siento hasta en los dedos de los pies. El sabor de la
dulce canela azucarada llena mi boca y profundizo el beso.
Sus manos se deslizan por mi pecho y la siento agarrar la chaqueta de mi
traje. Tiro del material, lo quiero lejos de mi cuerpo y su piel contra la mía. De
repente estoy frenético por la necesidad de tenerla y amar cada centímetro de su
cuerpo. Ella alcanza los botones de mi camisa y también puedo sentir su urgencia.
—Te necesito —le digo mientras beso su cuello y rozo mis dientes a lo largo
de su delicada carne. Muevo mi duro miembro contra ella y jadea, extendiendo
sus piernas. La cálida cuna de sus muslos me da la bienvenida y me muevo contra
ella—. Bebemos el uno del otro, así es como eres mía para siempre.
Gime mientras la presiono contra la pared y me saco la camisa. Ella pasa
sus uñas por mi pecho desnudo y quiero aullar con emoción. Mis manos van a su
vestido y abro la tela alrededor de su cintura para que pueda sentir su calor contra
mí. Trazo mis dedos a lo largo del borde de sus bragas, besándola por la clavícula.
—¿Me morderás? —pregunta, y me inclino hacia atrás un poco para ver la
necesidad en sus ojos.
—Cuando me lo pidas —le digo y me arrodillo frente a ella—. Sostén esto
para mí.
Ella agarra el borde de su vestido y lo levanta para que pueda ver sus bragas
blancas expuestas. La vista de ella ante mí y el olor de su deseo me marean por
la lujuria. ¿Cómo puede ser tan pura y dulce, y querer un hombre como yo? Puede
que no sea el hombre que se merece, pero seré mejor para ella. Seré lo mejor que
pueda y le daré todo lo que desee.
Suavemente quito sus bragas, exponiendo su desnudo sexo y sus labios
rosados. Están frescos con rocío y siento que me duelen los dientes por saborearla
y morderla.
—No has sido tocada, ¿verdad, amor? —pregunto mientras froto mi pulgar
entre sus labios. La miro de vuelta y observo su mirada. Asiente y se muerde el
labio inferior—. Ya no lo estarás.
Ella sale de sus bragas cuando me inclino hacia adelante y paso mi lengua
a lo largo de los pliegues de su sexo. Su cuerpo se tensa, pero luego se relaja de
inmediato cuando me deja probarla. La canela dulce y cálida es más fuerte aquí,
y gimo por el sabor. ¿Cómo puede saber tan celestial? ¿Todos los compañeros se
sienten de la misma manera?
Levanto una pierna y la pongo en mi hombro mientras mis manos van a su
trasero. La agarro con fuerza, abro la boca sobre su sexo y chupo su clítoris. Ella
gime mi nombre y sus manos van a mis hombros mientras rueda sus caderas
contra mi cara. Observándola trabajar su cuerpo para llegar al orgasmo, es sucio
y sexy.
Monta mi cara y su cuerpo tiembla, y sé que su orgasmo se acerca
rápidamente. Puede que sea virgen, pero tiene hambre de convertirse en mujer, y 37
eso es lo que haré pronto.
La necesidad de tenerla es abrumadora y no puedo controlar mis impulsos
por mucho tiempo. Mientras su cuerpo se enrosca, deslizo dos dedos dentro de
ella y siento que se rompe su virginidad. Grita mientras alcanza su clímax y su
orgasmo la golpea con fuerza. Chupo su clítoris mientras monta la ola de placer
y grita mi nombre.
Puedo probar su sangre virgen en mi lengua, y la lamo para limpiarla y
besar el interior de su muslo. Antes de que pueda decirle lo que voy a hacer,
hundo mis dientes en la carne blanda y rompo la piel. Lloriquea cuando otro
orgasmo llega y yo sonrío, saboreando su sangre.
Cierro los ojos y gimo mientras bebo de ella y siento el vínculo que calienta
mi cuerpo. Estoy duro como una roca y está empeorando porque mi cuerpo ha
estado esperando este momento durante doscientos años. No puedo esperar
mucho más, pero no sé cuánto duraré.
Cuando he probado suficiente de ella, por ahora, lamo la herida para
cerrarla y luego me levanto. Sus manos aún sujetan firmemente el vestido, así
que rasgo el material y luego lo saco de su cuerpo. Ella está completamente
desnuda ante mí y nunca he visto nada más hermoso.
Sus piernas tiemblan, y la sostengo cerca mientras camino hacia el pequeño
sofá en la esquina de la habitación. Me siento y la ayudo a ponerse a horcajadas,
inclinándome un poco hacia atrás. Sus manos van a la cintura de mis pantalones,
la ayudo a desabrocharlos y sacar mi miembro. Es tan grueso que no estoy seguro
de que encaje dentro de ella, pero no siento su miedo. En cambio, siento emoción
y algo mucho más profundo.
Después de probar su sangre, estoy conectado con ella de una manera que
nunca creí posible. De esto es de lo que hablan todos los libros que he estudiado
durante tanto tiempo, pero nunca supe que podría ser así. Sus pensamientos son
míos y me pregunto cómo será cuando me pruebe.
—Ahora es tu turno, amor —le digo mientras llevo mi muñeca a la boca y
perforo mi piel con los dientes.
Sus ojos se abren con sorpresa, pero de nuevo no hay miedo. Es curiosa y
tiene hambre. Cuando la sostengo para ella, se inclina y coloca sus labios sobre
mí sin dudarlo, y ahí es cuando agarro mi miembro y lo mantengo firme mientras
levanta sus caderas y baja sobre él.
Sus ojos violetas se fijan a los míos. Siento que ella me prueba al mismo
tiempo que mi miembro se desliza lentamente en su sexo. Me está chupando
mientras mi miembro se hunde más y no puedo mirar hacia otro lado. Es el mejor
momento de mi vida e instantáneamente siento que nuestra conexión nos
envuelve como un muro sólido que nos protege del mundo exterior. Lo único que
importa ahora mismo es que los dos estamos en este cuarto y nada puede
quitarnos eso.
38
—Demonios —le digo con los dientes apretados mientras se sienta en mi
miembro y me sostiene profundamente dentro de ella. No sé cómo su cuerpo pudo
tomar cada pulgada, pero la magia que nos une debe ser lo que lo hace posible.
Es mucho más pequeña que yo, pero de alguna manera, somos uno.
Toco su mejilla mientras quito la muñeca y luego la llevo a mi boca para
sellar el corte. Hay un pequeño rastro de sangre en su labio inferior y me inclino
hacia adelante, tomando su rostro con ambas manos y besándola profundamente.
Sus pechos desnudos presionan contra mi pecho y sus picos duros se burlan de
mí. El beso es abrumador cuando me pruebo en su lengua y siento que nuestra
conexión se abre completamente por primera vez. Puedo escuchar sus
pensamientos y sentir lo que hace y puedo escuchar sus deseos. Rompo el beso y
muevo la boca hacia sus pezones, porque se pregunta cómo sería tenerlos en mi
boca.
Sus caderas se balancean cuando pienso en lo bien que se sentiría cuando
ella se moviera hacia mí, y juntos nos damos lo que queremos.
—Bishop —susurra ella, y me inclino hacia atrás para mirarla. Sus ojos
violetas están oscuros ahora y puedo sentir lo bien que se siente mi miembro
dentro de ella—. ¿Siempre es así? —pregunta mientras mueve sus caderas hacia
atrás y hacia adelante.
 —No lo sé. Solo sé lo que es hacer el amor contigo. —Froto mis manos y
luego agarro sus glúteos—. Pero me imagino que esta conexión en este momento
solo ocurre con los verdaderos compañeros. Con las personas que se aman.
Sus caderas vacilan, la agarro por la cintura y me levanto antes de inclinarla
de espaldas en el pequeño sofá. Su trasero está en el borde y estoy flotando sobre
ella mientras la penetro más y más fuerte.
—Tenemos todo el tiempo del mundo para definir qué es lo que sientes
ahora, pero para mí, esto es un amor innegable. El amor que he buscado desde
el día en que me crearon. Incluso antes de que nacieras, te estaba buscando. Esto
es real y verdadero, Loren, y voy a protegerlo con mi vida.
Ella se acerca y agarra mi pecho mientras gime y se aprieta a mi alrededor.
Su respiración es pesada y su cuerpo es suave mientras se acuesta y me permite
tenerla. Pongo mi mano sobre su vientre y la miro a los ojos.
—Voy a convertirte en una madre —le digo, dejando que mi miembro se
deslice más profundo dentro de ella—. Has estado sola por mucho tiempo. Es hora
de que te cuide y recibas lo que tu corazón desea. —Me inclino para chupar su
pezón y jadea—. Puedo leer todos tus pensamientos a la vez y tú también puedes
leer los míos. Sé que en el fondo esperas quedar embarazada para poder tener un
bebé.
—Oh dios, Bishop. —Respira mientras su sexo me aprieta. Mis palabras
sucias son solo la verdad y estoy haciendo una promesa que tengo la intención de 39
cumplir.
—Si un bebé es lo que quieres, entonces eso es lo que obtendrás —le digo,
frotando su clítoris con mi pulgar y sintiendo que su cuerpo se tensa—. Todo lo
que quiero es amarte hasta el final de la eternidad.
Ella grita mientras su clímax golpea, y ya no puedo contenerme. Me hundo
profundamente en ella una última vez y siento que mi miembro se derrama dentro
de ella. Me invaden olas de placer, y es el doble porque también siento la de ella.
La conexión nos permite a los dos compartir el orgasmo y la mantengo cerca
mientras corre sobre nosotros.
Ambos estamos jadeando por aire mientras los fluidos mezclados de los dos
salen de su sexo, y alrededor de donde nos unimos. No estoy listo para dejar su
cuerpo, así que no salgo cuando me pongo de pie con ella y la llevo al baño.
—¿A dónde me llevas? —pregunta adormilada, acurrucándose contra mí.
—Pensé que te gustaría tener un buen baño caliente conmigo —le digo
mientras entro al baño y abro el agua caliente de la bañera.
La establezco al borde del lavabo, pero aún así no dejaré su cálido abrazo.
Todavía estoy duro como un diamante, pero me imagino que seguiré estándolo
durante bastante tiempo.
Mientras espero a que el baño se llene, agarro su cara y la miro fijamente a
los ojos. Le coloco el cabello detrás de las orejas y le toco los labios, pero no puedo
dejar de mirarla. Nuestras mentes están tan conectadas como nuestras almas, y
estamos compartiendo todos nuestros recuerdos. Algunos de los suyos son tan
tristes y solitarios, pero hay algunos buenos de cuando era más joven y tuvo que
salir a jugar. Ella ve la mía y lo solo que estaba hasta que empecé a tener mi
propia familia, pero siempre faltaba una pieza. Ahora que la he encontrado, mi
corazón está lleno y ella también lo ve. No hay palabras para intercambiar y nada
queda sin decir. Esta es la mejor parte de estar emparejados, mi verdad está ahí
para que ella lo vea.
La llevo a la bañera y entro antes de hundirme lentamente. Todavía está a
mi lado mientras coloca su cabeza en mi pecho y el agua tibia nos rodea.
—Mañana —le digo cuando siento que sus preguntas burbujean—. En este
momento, solo déjame cuidarte, Loren. Déjame mostrarte amor.
Siento que su cuerpo se adapta al mío ya que realmente sabe lo que se
siente pertenecer a algún lugar.

40
 9
Traducido por Tessa
Corregido por RRZOE

Loren
—¿Qué he hecho? —susurro mientras miro a Bishop tumbado en la cama
a mi lado.
Por primera vez desde que puedo recordar, mi cabeza está clara y no hay
confusión. Había tantas cosas que Gordon ocultó en mi propia mente. Había
estado viviendo con ese monstruo toda mi vida y no lo sabía.
Bishop tiene los ojos abiertos y se da la vuelta, así que está encima de mí.
Me inmoviliza debajo de él y hay una mirada de preocupación en su cara.
—Ni siquiera pienses en huir de mí. Esa historia se está haciendo vieja por
41
aquí. —Le sonrío, pensando que podría pasar la vida así.
—No quiero ir a ningún lado. —Arrastro mis manos por su pecho y la meto
en su cabello corto y oscuro—. No quiero que más gente salga herida por mi culpa.
¿Y si viene por ti y...? —me interrumpe con un beso tan profundo y dulce que
hace que todo mi cuerpo cobre vida. Gimoteo en su boca y lo rodeo con mis
piernas. El placer de la noche anterior inunda mi mente y quiero hacer esas cosas
de nuevo.
Nunca te dejaré. Sus palabras flotan en mi mente. Va a tomar algún tiempo
acostumbrarse a eso. Y yo nunca te dejaré, respondo sin tener que usar palabras.
Nuestra conexión ya es tan profunda, y tal vez sea porque estaba allí mucho antes
de que nos diéramos cuenta.
Me pellizca el labio antes de inclinarse hacia atrás y tira de mi hacia arriba
con él, por lo que estoy a horcajadas en su regazo.
—Vendrá —le digo, sabiendo que es un hecho. Me desperté con el temor de
haber llevado a Gordon a la puerta de Bishop. Entonces recordé que ya no estaba
sola. Sea lo que sea que venga, Bishop y yo lo enfrentaremos juntos.
—No lo culpo. Yo tampoco te dejaría ir. —Me da una sonrisa arrogante.
—Bishop, hablo en serio. —Su mano llega hasta mi barbilla para que lo
mire. Siempre quiere que nos miremos.
 —Lo sé, y me encargaré de ello. Es mejor que venga aquí, y además, hace
tiempo que esto debería haberse hecho.
—Vas a matarlo. —Para alguien que no quiere que nadie más muera, no
digo una palabra en defensa de Gordon.
—Debería haberlo hecho hace mucho tiempo, pero siempre hay un orden
en las cosas. Cuando el consejo lo encontró de nuevo, se escabulló y sólo se ha
acercado ahora.
—¿Cuándo nos mudamos aquí? —pregunto, y él asiente.
—Gordon siempre ha estado un poco loco. Incluso antes de que se
convirtiera, anhelaba las cosas más oscuras de la vida. Algunos hombres
disfrutan del poder del mal. —Cierra los ojos por un momento, agitando la cabeza.
—Eres poderoso. —Puedo sentirlo y no sé si es porque ya nos hemos
apareado o porque es un aura que emite. No sólo es potencia, sino también fuerza
y protección.
—Algunas personas dirían que sí.
—Pero no es algo que hayas pedido o querido —termino por él.
—Correcto. Asumí el papel de supervisar el área y hacer que otros líderes
me informaran. —Se encoge de hombros como si no fuera gran cosa que sea una
especie de líder vampiro—. Sabía que mis intenciones se mantendrían puras, y
eso no siempre sucede con los vampiros. 42
—Gordon me dijo que trabajaba para el gobierno. Dijo que estaba haciendo
lo que tenía que hacer por un bien mayor. Siento vergüenza de no haber visto a
través de todo esto, incluso si él estaba usando trucos mentales conmigo.
—No hagas eso, amor. —Bishop se inclina y roza sus labios contra los
míos—. Esto no es tu culpa. Eras sólo una niña cuando te atrapó y jugó con tu
cabeza. Confía en mí, lo sé. Sus poderes no funcionan conmigo y me ha engañado.
El único bien mayor por el que Gordon se esfuerza es el suyo.
—¿Es por eso que te odia? ¿Por que podías ver quién era realmente? —pregunto,
porque ese fue el momento en que finalmente me atacó. Incluso con la mente
despejada, me sorprende que me golpeara. Nunca me hizo daño en todo el tiempo
que estuve con él. Creo que en algún nivel retorcido él se preocupa por mí, pero
no de una manera paternal. Soy una mascota muy apreciada para él y nada más.
—Le quité algo que él quería, así que intentó hacer lo mismo.
—Él me alejó de ti.
—No eras un secreto entonces. Era joven cuando conocí a Gordon. Todos
sabían que te estaba buscando y no lo oculté. Eso fue hasta que me di cuenta de
que podía ser usado en mi contra. Nunca pensé... —deja salir un gruñido
profundo—. Nunca pensé que empezaría a matar a mujeres que podrían ser mi
pareja. Creo que sabía que todas ellas no eran tú. Tu cabello, esos ojos, y esto...
—se inclina, besando mi marca de nacimiento—. Es único. Disfrutaba de
enemistarse conmigo y de hacerme saber que te estaba persiguiendo. Cada vez
que me acercaba a él, volvía a desaparecer. —Su frente cae sobre la mía—. Creo
que cuando te encontró sus planes cambiaron y pensó que era mejor ponerte en
mi contra. Intentó hacer que me odiaras, pero Gordon nunca entendió el
emparejamiento. Pensó que hacían débiles a los vampiros.
—No me siento débil. Lo hacía cuando estaba con él. Me sentía perdida e
insegura de todo —admito—. No entiende el poder de los compañeros porque te
hacen más fuerte.
Tener a alguien a tu lado que sea tu otra mitad y que te apoye para siempre
es más que poderoso. Eso nunca podría ser débil. Estoy más viva ahora de lo que
he estado en toda mi vida.
Creo que sus trucos mentales dejaron de trabajar en mí cuando nos
mudamos aquí. Sé que parece una locura, pero creo que estar más cerca de ti me
hizo más fuerte. Ya no funcionaba y empecé a ver la realidad de lo que me rodeaba.
Bishop deja salir una respiración profunda.
—Creo que tienes razón. Durante el último año he cambiado. Estaba más
nervioso y pensé que me estaba volviendo loco y que mi fin estaba llegando. Tal
vez lo era, pero mis sueños contigo eran más claros que nunca y te sentías más
cerca. Pensé que te encontraría en el otro lado y estaba listo para irnos.
—¡No! —jadeo, incapaz de pensar en su muerte. Odio la idea de que ya no
esté aquí. Sus palabras son oscuras, pero dice cuánto me necesita. Quizá esté 43
mal que me guste eso, pero no me importa. La idea de no estar nunca con él,
aunque sólo sea por una noche, es demasiado dolorosa para pensar en ella.
—No va a ser sólo una noche, amor. Te lo prometo. Después de tantos años
de soñar contigo y no encontrarte nunca, pensé que ya habías pasado y me
estabas esperando al otro lado. Quería estar donde tú estuvieras, aunque ese
lugar fuera la muerte. —Cierro los ojos y absorbo sus palabras—. Sientes eso,
¿no? Te seguiré a todas partes. Eres mía, Loren, y no te alejará de mí otra vez. —
Abro los ojos y se me escapa una lágrima. Puedo sentir cuán profundamente me
ama. Bishop la besa y sé que siente todo lo que hay dentro de mí ahora.
Todas esas veces que miré su foto estaba tan insegura de lo que me estaba
pasando. No sabía lo que era porque nunca lo había experimentado antes. Pero
todo este tiempo fue amor.
—Hazme el amor —digo contra su boca mientras me inclino por otro beso.
Su boca se encuentra con la mía durante un breve instante antes de que se aleja.
—Debería haberlo sabido —gruñe, y me hace caer sobre el colchón blando,
pero se ha ido de la cama antes de que pueda tratar de agarrarlo. Veo como se
viste tan rápido que no puedo ver lo que está haciendo—. Ya viene. Pensé que se
reagruparía, pero parece que está atacando tan rápido como puede. Debí haber
sabido que no debía tratar de predecir la locura de un hombre como Gordon. —Me besa
de nuevo antes de que pueda responder—. Te diría que no te movieras, pero sé
que no lo harás y no puedo encerrarte como él lo hizo.
Me visto rápidamente con una de las camisas de Bishop. Cuelga en mis
rodillas, pero no quiero tener nada que ver con el vestido que está manchado con
mi propia sangre de cuando Gordon me golpeó. No quiero que nada de esa vida
pasada me vuelva a tocar.
Tomo la mano de Bishop y el me saca del dormitorio.
—¿Está solo? —pregunto, sabiendo que Bishop será capaz de darse cuenta.
—La mayoría de su gente fue asesinada en las explosiones. Pedí que se
hiciera un barrido de la casa de Gordon justo antes de entrar a buscarte.
Apuesto a que Gordon fue el primero en salir de allí y dejó a sus hombres
atrás. No tengo ninguna duda de que, si algo así sucediera aquí, Bishop sería el
último hombre en salir. Los dos son el día y la noche.
Cuando llegamos al final de las escaleras, miro para ver a todos los de
anoche, excepto a Dove y Juliet. Mi pecho se calienta porque están todos aquí
para echar una mano en lo que está a punto de pasar.
—No puedo creer que ese imbécil haya venido solo —dice uno de los gemelos
antes de guiñarme el ojo—. Soy Erik, por cierto. —Señala a su hermano—. Ese es
Ezra. Yo…
—Nosotros... —Ezra interviene. 44
Erik sacude la cabeza hacia su hermano.
—Nosotros queríamos agradecerte por ayudar a Dove a comunicarse con
nosotros. Nunca podremos compensarte por lo que hiciste. Bienvenida a nuestra
familia. —Los dos me sonríen y asiento con la cabeza.
—Era lo correcto —les digo, sin necesidad de agradecimiento—. Debería
haber ido con ella. —Pienso en ese momento y sé que incluso si me hubiera ido
todo esto no habría parado.
—Estás aquí ahora y eso es todo lo que importa. —Bishop me mete en su
costado y me besa en la parte superior de la cabeza. Se queda un momento y sé
que me está aspirando.
La vampiresa alta y morena Ravana nos está sonriendo.
—Supongo que eso te convierte en mi tía —dice, y miro a Bishop, insegura
de lo que quiere decir. ¿Están relacionados?
—Sí —él está de acuerdo con una pequeña risita.
—¿Hago los honores? —pregunta Valen. Puedo sentir que es humano, y que
tiene que ser por mi vínculo de apareamiento con Bishop—. Es mi trabajo,
después de todo.
 —No nos lo recuerdes, cazador —dice Kane—. Sé que estás escondido en el
armario del pasillo —agrega con un grito que sale de la nada y mira hacia una
puerta que está un poco más abajo en el pasillo.
—¡Maldita sea, Kane, ahora van a salir! —Ezra le grita mientras levanta una
de sus manos. Miro entre todos ellos preguntándome de qué están hablando.
—No entiendo cómo cree que no sé exactamente dónde está en todo
momento —responde Kane, pero pienso más en sí mismo que en Ezra. La puerta
del armario se abre y Dove y Juliet salen.
—Está aquí —dice Bishop, caminando hacia la puerta principal y
llevándome con él.
—De vuelta al armario —les dice Ezra a las chicas. No me doy la vuelta para
ver si hacen lo que se les dice, pero oigo que se cierra una puerta—. Voy a disfrutar
de azotar su trasero más tarde por eso —le murmura a su gemelo. Ambos se
aparean con ella, y me pregunto cómo funciona algo así. Creo que estaría
locamente celosa de compartir a Bishop.
—Nunca tendrás que hacerlo —me susurra al oído, leyendo mis
pensamientos—. Sólo te pertenezco a ti. —Le echo un vistazo. ¿Cómo es posible
que sólo hayan pasado horas desde que llegué a conocerlo de verdad y que sienta
que ha sido parte de mí toda mi vida? Porque lo he hecho. Como tú has estado en
la mía. Sus palabras flotan en mi mente y sé que tiene razón.
—¡Bishop! —grita Gordon, y mi atención le es arrebatada a mi compañero. 45
Veo como sale de la oscuridad hacia nosotros. Nunca lo había visto tan mal.
La luna está alta y brillante, iluminando la noche. El hombre al que una vez llamé
papá no se parece en nada a lo que recuerdo. Gordon siempre quiso todo en orden
y las cosas tenían que estar en su lugar. Siempre estaba vestido a la perfección,
pero ahora mismo habría pensado que iba rodando por el bosque. Puede que no
se vea impecable, pero parece mortal. La salpicadura de sangre en su sucia
camisa blanca con botones le hace parecer aún más siniestro. ¿Cómo no pude
haber visto antes quién era realmente?
—Dame a mi hija. Ella me pertenece —exige, señalando el suelo que está a
su lado. Sus ojos se dirigen a los míos y chasquea los dedos—. Ven aquí.
—No —le digo—. Ya no me controlas. —Me pongo más derecha.
—¿Lo eliges a él antes que a mí? ¿Tu propio padre? —grita.
—No eres mi padre —le recuerdo—. Me tomaste y me encerraste para
usarme como una especie de arma. Nunca fui tuya.
—Te salvé. —Suena ofendido ahora cuando sus ojos se dirigen a Bishop—.
Ella habría muerto en ese lugar. Tienes suerte de que yo llegara primero antes
que alguien más.
—Te lo agradezco, Gordon. Salvaste a una niña ese día. Como cualquier
persona con una pizca de compasión o cuidado por otro ser humano.
 Gordon se ríe de la respuesta de Bishop.
—Son débiles. ¿Por qué siempre los proteges? —me echa un vistazo—.
Incluso Loren. —Bishop gruñe tan profundo y fuerte que puedo sentir el sonido
pasar a través de mi cuerpo. Gordon no hace caso de la advertencia—. Ella era
débil, pero todavía me preocupaba por ella.
—¿Qué planeabas hacer conmigo? —pregunto, aún sin entendiendo esa
parte—. ¿Ibas a matarme? Podrías haberlo hecho cuando me encontraste el
primer día. —No puedo evitar el quiebre de mi voz mientras trato de ser fuerte. Sé
que me usó y ni siquiera me ama. No estoy segura de que pueda entender esa
emoción, para ser honesta. Ahora que miro hacia atrás con la mente clara, puedo
verlo todo.
—Esos ojos. Me miraste y nunca antes había visto algo así. Nunca había
querido una pareja, luego vi los de Bishop. No todos los vampiros tienen la suerte
de encontrar una, como dicen, pero Bishop fue agraciado con una que era tan
diferente. Podía sentir lo puro que era tu corazón. ¿Por qué el destino elegiría una
compañera así para él? No me importaba mucho eso, así que te tomé para mí —
sonríe—. Entonces quería que supiera que te tenía y que había hecho que me
amara y lo odiara.
Mi cabeza cae.
—Eso —susurro. Sé que todos me oyeron. Los vampiros siempre lo hacen,
pero ya no importa. Su plan no funcionó, levanto la cabeza y miro a Bishop. Ha 46
estado callado todo este tiempo.
—Quería que dijeras o preguntaras lo que necesitabas decir —dice,
respondiendo a mi pregunta no formulada de por qué había estado tan callado—.
Siempre te daré lo que necesitas o quieres, amor. Lo sabes. —Le brindo una
sonrisa porque lo sé.
—¿Viniste aquí solo para morir? ¿Todo se ha vuelto demasiado? Conozco el
dolor y el anhelo de una pareja —dice Bishop, y me duele el corazón que haya
tenido que esperar tanto para encontrarme.
Miro hacia atrás a Gordon, tiene una sonrisa en la cara.
—Siempre tengo un plan. —Se encoge de hombros—. Hay una cosa que me
encanta de la idea de los compañeros. Harían cualquier cosa por el otro, y me
refiero a cualquier cosa. —Un escalofrío sube por mi columna vertebral y Bishop
se pone delante de mí. Tengo que mirar a su alrededor para ver qué está
pasando—. ¿Has oído hablar de la Parca?
Arrugo la cara, tratando de recordar lo que sé de la Parca. ¿Es real? Tal vez
no, pero los vampiros son reales después de todo, así que ¿Quién sabe?
—Sé de él —responde Valen. Cuando miro a su compañero, se ve tan
sorprendido como todos los demás. Excepto Bishop, que parece tranquilo y
consciente—. ¿Qué hay de él? No hay nadie aquí para que él lo coleccione. De
hecho, si estuviera aquí, creo que vendría por ti.
 —A menos que... —Gordon hace una pausa, mirando directamente a
Bishop—. Le dije que te llevaste a su compañera, que no te gustaba no tener poder
sobre él, así que encontraste una forma de controlarlo.
—¿El tiene una compañera? —pregunta Kane, moviendo la cabeza con
incredulidad.
—No puede, es mayor que cualquiera de nosotros. Ya se habría vuelto loco
si no la hubiera encontrado en todo este tiempo —dice Bishop.
—¿Alguien sabe realmente lo que es la Parca? —dice Valen.
—Tienes un don para meterte hasta el cuello de problemas —agrega Bishop
con un largo suspiro.
—No deberías jugar con cosas de las que no sabes nada, y nadie sabe una
mierda sobre la Parca —dice Valen.
—¿Quién jodidos es la Parca? —pregunta uno de los gemelos al otro. No
puedo decir cuál es cuál ahora.
—La Parca es la personificación de la muerte. Él viene a recoger las almas
de aquellos cuyo tiempo ha llegado. Hay muchas historias diferentes que lo
rodean. —Una suave voz femenina dice.
—Dove —Ezra y Erik ladran al mismo tiempo. Parece que salieron del
armario.
47
Ella los ignora y sigue adelante.
—Creo que Bishop tiene razón. Estás en un aprieto si estás jugando con la
Parca. Si alguien aquí ha estado esquivando la muerte, eres tú. —Dove da un paso
adelante y Ezra la toma y se la devuelve a él y a su hermano—. Puedo decirles
esto; en la mayoría de las historias la gente intenta sobornarlo o hacer trucos para
evitarlo, pero nunca funciona. Creo que has mordido más de lo que puedes
masticar.
Todo se queda en silencio como si el mundo dejara de moverse cuando Dove
termina de hablar. La brisa de la noche se ha ido, junto con los sonidos distantes
de los grillos. Bishop se mueve antes de que yo sepa lo que está pasando y se
vuelve para cubrir mi cuerpo con el suyo. Siento que el suelo se sacude un poco
como si algo duro cayera sobre él, seguido de un fuerte chasquido.
—¿Dónde está mi compañera? —retumba la voz más profunda que he oído.
Hay un sonido como la rama de un árbol que se rompe por la mitad y siento
que Bishop se inclina hacia atrás. Me deja ir un poco para girarme y enfrentarme
a la voz. Cuando miro hacia arriba, ahí está el hombre más grande que he visto
en mi vida sosteniendo a Gordon como una muñeca de trapo. Arroja el cuerpo de
Gordon al suelo como si fuera un paño blando, y puedo ver que le ha roto el cuello.
—Pensé que la Parca tenía una guadaña —susurra Dove en voz alta,
colocando sus anteojos en su nariz.
 Mis ojos se fijan en el hacha gigante que levanta del suelo y la pone a
descansar sobre su hombro.
—Realmente no quieres que te lo pida de nuevo —dice, y me sorprende el
silencio.

48
 10
Traducido por Tessa
Corregido por RRZOE

Bishop
Sostengo a Loren detrás de mí mientras miro a los negros ojos de la Parca.
Es grande y da miedo, pero veo algo en él que puedo sentir en mí mismo.
—Te estaba mintiendo y lo sabes. Tu compañera no está aquí —digo
mientras doy un paso hacia él.
—Bishop —dice Ravana advirtiendo desde detrás de mí, pero la ignoro.
—El dolor que sientes ahora es exactamente lo que había dentro de mí antes
de conocer a mi Loren. Esperaba la muerte todos los días para que me sacara de
mi miseria o me acercara a ella —no se mueve, pero veo que la línea entre sus
49
ojos se relaja un poco mientras hablo desde mi alma—. Sé que ahora mismo no
hay nada que no harías por encontrar a tu pareja. Pero sabes que Gordon te
engañó y sabes que ella no está aquí.
Pasa un segundo y deja escapar un respiro antes de bajar el hacha.
—Dijo que tú lo sabrías y yo le creí. —Sacude la cabeza como si supiera que
no era verdad, pero no quería admitirlo ante sí mismo.
—Tenemos una deuda de gratitud por matarlo por nosotros. Y quiero
devolverla.
La Parca me mira con vacilación.
—¿Cómo crees que puedes ayudarme si no puedes encontrar a mi pareja?
—dice mientras mira alrededor de la habitación—. Todos en esta sala parecen
haber formado lazos. ¿Qué es lo que podrías ofrecerme que no pueda obtener por
mi cuenta? Soy la Parca, Bishop. No hay nada más allá de mi alcance. Incluso
ahora conozco a todo el mundo aquí y aún así no sabes nada de mí. Sólo susurros
que son compartidos en la oscuridad por gente que me teme.
Escucho el dolor en sus palabras y no puedo imaginar cómo llegó a estar
donde está hoy.
—Tienes razón, no conozco tu historia y asumimos muchas cosas. Lo que
puedo ofrecerte es un lugar para descansar y compartir con nosotros lo que sabes.
Busco en el mundo el conocimiento y tú eres alguien de quien podemos aprender.
Quiero invitarte a mi casa y a nuestra familia. Ayúdanos a entender lo que haces
y déjanos compensarte por lo que has hecho hoy.
Miro el cuerpo de Gordon y observo cómo empieza a convertirse en cenizas.
Pronto no quedará nada de él donde yace y será como si nunca hubiera existido.
Sólo puedo esperar lo mismo para el dolor en el corazón de mi pareja cuando se
trata del hombre que ella creía que era su padre.
—¿Por qué haría eso? —pregunta, y aunque su voz sigue siendo áspera,
puedo sentir algo más suave allí.
—Porque incluso en mis momentos más oscuros, mi familia estaba ahí para
mí y me ayudó a superar el dolor. ¿Tienes a alguien así?
—No tengo a nadie —responde simplemente mientras vuelve a mirar a su
alrededor.
—Puedes quedarte con nosotros. —Me sorprende cuando me doy la vuelta
para ver a Kane dar un paso adelante con Juliet a su lado—. Puede usar una de
nuestras habitaciones libres. Sería un honor tenerte aquí.
Kane es casi tan grande como Grim, y al principio no esperaba que fuera
voluntario, pero ahora tiene sentido. Kane pasó la mayor parte de su tiempo como
vampiro y como recluso. Su pareja ha traído calor a su vida, y creo que por
primera vez Kane ve su soledad y dolor reflejados en otra persona. Tal vez todos
nosotros veamos un pedazo de nosotros mismos en la Parca. 50
—Creo que me quedaré un rato —dice, extendiendo la mano y estrechando
la de Kane—. Gracias por la oferta.
—Te dejo para que resuelvas los detalles —le digo, mirando a la familia—.
Me voy a quedar aquí unos días más con mi amigo. —Llevo a Loren a mi lado y le
sonrío—. Nos veremos en casa y hablaremos más tarde.
Grim asiente y le estrecho la mano antes de salir de la habitación. Cuando
subimos las escaleras, Loren se inclina y me susurra.
—¿Crees que estará bien que esté aquí?
—No hay necesidad de temerle, amor. La muerte es parte de la vida para
algunas personas, pero ya no para nosotros. Tú y yo vamos a vivir hasta el fin de
los tiempos, así que piensa en él como un nuevo amigo que podría ser un poco
tímido por un tiempo.
—No puedo imaginarme a alguien tan grande siendo tímido.
Le sonrío mientras abro la puerta de nuestro dormitorio y la cierro detrás
de nosotros.
—¿No puedes? Imagina estar solo en el mundo y no tener familia. —Toco
su barbilla y le sonrío cuando veo el amanecer en ella—. No se parece a ninguno
de nosotros en un momento dado. He oído leyendas sobre lo que es capaz de
hacer, pero los humanos tienen todo tipo de ideas sobre nuestra especie. ¿No es
mejor darle la bienvenida a nuestra familia que crear un enemigo? Mira la forma
en que Gordon vivió su vida y cómo eligió gobernar. No toleraré eso para nuestra
ciudad.
—Todavía soy nueva en todo esto, pero sé que más que nada, estoy orgullosa
de ti y orgullosa de que seas mi compañero. —Veo la mirada de amor en sus ojos,
junto con los movimientos del deseo.
—Tienes todo el tiempo del mundo para aprender lo que hago y cuál será
tu nuevo papel. —Corro mis manos por su cuerpo y sus caderas mientras la
acompaño de vuelta a la cama.
Sus cejas se juntan y la parte posterior de sus piernas golpea el colchón.
—¿Mi nuevo papel?
—Vas a ser madre —le digo mientras agarro el borde de la camisa y se la
arranco en un rápido movimiento—. He descubierto que los humanos y los
vampiros pueden reproducirse juntos. —Cae de espaldas en la cama y le abro las
piernas con las rodillas mientras me desabrocho los pantalones y saco mi
miembro. Estoy duro y goteando, pensando en ella húmeda—. Quieres una
familia, amor, y me aseguraré de que la tengas.
Me coloco encima de ella, deslizo mi miembro entre sus labios mojados y lo
meto hasta el fondo. Su sexo me agarra fuerte. Siento que sus pliegues húmedos
me envuelven y empiezo a moverme. Agarro sus muñecas y las sostengo por
encima de su cabeza a medida que profundizo con cada deslizamiento de mi dura 51
longitud de acero.
—Necesito probarte —le digo mientras beso sus labios suavemente y luego
recorro con mis labios su cuello—. Ha pasado mucho tiempo. —Sólo han pasado
horas, pero mi cuerpo ya anhela su sabor.
Ella gime mientras abre más sus piernas e inclina sus caderas hacia arriba.
Chupo su pezón antes de besar la tierna piel debajo de su pecho y rozo
suavemente mis dientes a lo largo de él hasta hacer un pequeño corte. Cuando la
pruebo, mi miembro se hincha dentro de ella y ella grita mientras su sexo gotea.
—Bishop no te burles de mí —me ruega mientras le tiemblan las piernas.
Sé que está al borde del orgasmo, pero quiero que diga lo que quiere en voz alta.
—¿Qué necesitas, amor? —su dulce sabor me atraviesa y es como si me
hubieran inyectado placer y fuerza. Nunca me he sentido más vivo que cuando
estoy dentro de ella.
—Yo también quiero probarte —grita mientras yo disminuyo la velocidad lo
suficiente como para mantenerla al límite.
—Tendrás todo lo que tu corazón desea, Loren —le digo. Me muerdo la
muñeca y se la llevo a la boca.
 Ella lame la herida e inmediatamente nuestra conexión es más aguda y
poderosa. Electrifica mi cuerpo con lujuria y amor al mismo tiempo y no hay más
contención.
Introduzco mi pesado miembro dentro de ella y su cuerpo tiembla mientras
llega al clímax. Puedo sentir su suave sexo dar la bienvenida a mi semilla. Libero
lo que he estado reteniendo y me derramo dentro de su vientre esperando. Esta
caliente, húmeda, y hay tanto que puedo sentir que corre entre nosotros.
Estoy fuera de control en este momento, así que me agacho y recojo lo que
está goteando y se lo paso por la barriga. Quiero que mi semen cubra su cuerpo
y que se bañe en mi olor. Nunca supe que podía ser tan posesivo con una cosa, y
resulta que es mi pareja. La quiero embarazada y unida a mí de todas las maneras
posibles, aunque ya estemos destinados para siempre.
—Te amo tanto —dice mientras jadea para recuperar el aliento.
Lamo la pequeña herida en su pecho y luego mi muñeca antes de darnos la
vuelta.
—Te amo más de lo que jamás soñé posible —digo mientras beso sus labios
suavemente y paso mi dedo por su cabello mientras ella acaricia mi pecho.
Nos quedamos en silencio durante mucho tiempo pensando en nuestro
amor y en lo felices que somos. Nuestra conexión a través de nuestra mente es
tan pura y honesta que no tengo que ocultarle nada.
52
Nunca entendí la investigación que encontré sobre el apareamiento e
incluso sobre la observación de parejas que conocí. No podía entender la conexión
tácita entre ellos, y sé que mi vínculo con Loren es especial. Mi vínculo con ella es
tan diferente; es único. He estado buscando todo lo que he podido encontrar sobre
las parejas durante los últimos doscientos años y lo he hecho todo para que ella
pueda ver lo perfecto y único que es esto.
Ella se sienta y mi miembro se hunde más profundamente en ella mientras
se sienta a horcajadas sobre mí. Me sonríe como si estoy siendo un tonto, y giro
la cabeza hacia un lado.
—¿Qué? —pregunto, sin entender su proceso de pensamiento.
—El hecho de que no puedas creer que esto es diferente es divertido para
mí —dice mientras mece sus caderas, y ahora me toca a mí gemir—. La primera
vez que vi tu foto supe que había algo ahí. Y has estado soñando conmigo desde
la noche en que te crearon.
Me agarro a sus caderas y la mantengo firme para poder concentrarme en
lo que dice.
—Nuestra conexión y lo que podemos compartir es lo que nos hace grandes.
Tenemos mucho que lograr, y juntos gobernaremos.
—Para siempre —digo mientras suelto sus caderas y empieza a moverse de
nuevo.
 —Para siempre.
No hay nada que se interponga en el camino del mundo que queremos crear.
Su corazón es puro y mi cuerpo fuerte, y con ella a mi lado tendremos todo lo que
hemos soñado.
Incluso con nuestro nuevo amigo Grim viviendo entre nosotros.

FIN

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 Sobre el autor
Alexa Riley es un seudónimo tras el que están dos amigas descaradas que
se reunieron y escribieron algunos libros eróticos. Ambas casadas, son mamás de
dos niños que aman el futbol, los donuts y los héroes de libros.
Se especializan en las historias de amor insaciables, sobrecargadas, dulces
y cursis que no toman todo el año leer. Si quieres algo seguro, corto y siempre con
un final feliz, entonces ¡Alexa Riley es para ti!
Alexa Riley son dos amigas atrevidas que se juntaron y escribieron algunos
libros sucios. Ambas son madres casadas que aman el futbol, donas y tienen una
obsesión por los héroes de los libros.
Se especializan en historias de amor insta-love, exageradas, dulces y cursis
que no toman todo el año para leer. Si quieres algo seguro, corto y siempre con
un felices para siempre, entonces, ¡Alexa Riley es para ti!

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Traducido, Corregido
& Diseñado por:

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