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CHRISTIAN ESCOBAR JIMENEZ: GUERRA DE LAS CIENCIAS Y PUGNA POR LA RAZON
Palabras clave
Ideas principales
1. Postura Política de Sokal: Sokal es presentado como un ultra socialista. Durante la
Revolución Sandinista, enseñó matemáticas en Managua. Su motivación principal se
considera política, ya que no entiende cómo la izquierda puede beneficiarse de un
enfoque que niega la realidad o reduce la ciencia a discurso.
El real alcance de la broma y las conclusiones que se pueden sacar de ella quizá sea la mayor
crítica. Incluso si se aceptan los excesos y las gratuidades de las citas a las que alude Sokal, su
procedimiento con Social Text prueba bastante poco.
Los lectores con formación científica ya podían haber sospechado que se trataba de una
broma; aunque esta afirmación quizá sea difícil de sostener, porque las ideas de la ciencia
como una nueva religión y como construcción social de la realidad, y su asociación con el
«dogma positivista» es un recurso muy usado no solo en las Humanidades, sino en la propia
Sociología.
«la opinión que han adelantado algunos periodistas ignorantes e irresponsables de que el
positivismo lógico es favorable al fascismo no era compartida por los propios fascistas».
La tercera parte del texto indica el problema en Francia y las acusaciones de xenofobia
relacionadas con la publicación de "Impostures intellectueles" en 1997. En este contexto, se
critican a varios intelectuales franceses, y se destaca la sospecha de francofobia debido a que
la mayoría de los autores citados son franceses. La respuesta a estas críticas incluye la
edición de "Impostures scientifiques" en 1998, que reúne a filósofos, científicos y académicos
franceses.
El profesor Pascal Engel defiende a los intelectuales franceses atacados, argumentando que
Sokal y Bricmont muestran una gran ignorancia en sus críticas. Engel sostiene que los
intelectuales franceses son defensores de la razón y la verdad, representando la mejor
tradición ilustrada. Por lo tanto, acusa a Sokal y Bricmont de un positivismo grosero y de
actuar como policías moralistas.
En la cuarta y ultima parte, el artículo también menciona las respuestas de Bruno Latour,
quien ve el escándalo como un caso de policía académica en Estados Unidos. Latour sugiere
que los físicos, privados de grandes presupuestos después de la Guerra Fría, buscan nuevas
amenazas para confrontar y ven a Francia como un país que produce "drogas intelectuales".
También se aborda la postura política de Sokal, quien se identifica como socialista. Se discute
cómo el caso Sokal coincide con los ataques conservadores a la academia y se argumenta que
las actitudes anticientíficas están más vinculadas a la derecha en ese momento, con esto se
destaca la asociación del positivismo con la derecha, aunque se señala que esta asociación va
en contra de los hechos, ya que muchos positivistas eran socialistas.
Al final del texto se destaca la crítica a la objetividad absoluta de los primeros positivistas y
cómo esta crítica se relaciona con la idea de Marx sobre la necesidad de transformar el
mundo después de conocerlo. Se concluye que el caso Sokal y la guerra de las ciencias se
insertan en debates sobre la relación entre ciencia, política y postura epistemológica.