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Quintana Roo y Baja California Sur reportan los incrementos más elevados en
el 2022: 14.6% y 14.2%, respectivamente
Las zonas turísticas del país viven un boom inmobiliario que hace que vivienda sea
asequible, pero para los extranjeros que buscan invertir en dichas regiones, por lo
que factores como la escasez de oferta junto con el aumento de la demanda en
estos destinos, se han combinado para que los precios habitacionales aumenten de
manera considerable.
Según datos de la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF), Quintana Roo y Baja
California Sur (BCS) fueron los estados con las variaciones más marcadas durante
el 2022, con crecimientos anuales de 14.6% y 14.2%, respectivamente.
Ambas entidades superaron significativamente el incremento promedio a nivel
nacional del 2022, que fue de 8.9 por ciento. Por su parte, el precio promedio en
BCS se ubicó, al cierre del 2022, en 1 millón 699,551 pesos, mientras que en
Quintana Roo, éste fue de 1 millón 625,941 pesos.
Resumen
En el año 2022, Quintana Roo y Baja California Sur experimentaron un significativo
aumento en los precios de la vivienda, con incrementos del 14.6% y 14.2%,
respectivamente, superando el promedio nacional del 8.9%. Este aumento se debe
en gran parte a la creciente demanda de viviendas por parte de extranjeros que
desean invertir en zonas turísticas de estos estados.
Los Cabos, en Baja California Sur, se destaca como una región especialmente
dinámica debido a su proximidad a California, Estados Unidos, y a su infraestructura
hotelera y servicios. La oferta de viviendas nuevas es escasa en estas áreas, lo que
ejerce presión sobre los precios inmobiliarios.
En el año 2022, se construyeron 818 unidades residenciales en Baja California Sur,
y el 80% de la oferta estaba en los segmentos medios y tradicionales, con precios
de 4 a 8 millones de pesos. Se vendieron 2,845 viviendas en el estado, siendo el
74% de ellas en Los Cabos.
Aunque los precios promedio de las viviendas en Tulum y Los Cabos son superiores
al promedio nacional, son asequibles para el mercado extranjero, ya que son hasta
un 60% más económicos que comprar una casa en Estados Unidos. Esto se debe
a que las tasas de interés de los créditos hipotecarios en Estados Unidos han
aumentado significativamente.
La mayoría de las compras de viviendas por parte de extranjeros, en particular
estadounidenses, se realizan con el objetivo de entrar en el mercado de alquiler
vacacional. Además, los corredores turísticos del país han experimentado un
impulso gracias a las opciones de trabajo remoto, la migración de nómadas digitales
y las amenidades que ofrecen una mayor calidad de vida.
En resumen, la demanda de viviendas en Quintana Roo y Baja California Sur,
especialmente en Los Cabos, ha aumentado considerablemente debido a la
inversión de extranjeros, lo que ha resultado en un aumento significativo de los
precios inmobiliarios en estas áreas turísticas.