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LECCIÓN 1 de 3
El Valor Actual (VA), es la cantidad de dinero que representa en la actualidad cualquier ingreso futuro “S” que se
debe recibir dentro de “n” años.
Esta suma de dinero que se puede o pudiera cobrar en este momento se determina utilizando la conocida fórmula: VA
= S/(1 + i)n.
El VAN también se define como la diferencia entre el valor de mercado de una inversión y su costo. Se utiliza
como uno de los criterios principales de evaluación de inversiones, por varias entidades de crédito internacional,
conjuntamente con la denominada Tasa Interna de Rendimiento (TIR), (variante de cálculo del VAN), así como la
Tasa de Rentabilidad Contable.
La regla de aceptación de un proyecto para el VAN, sea cual sea el tipo de proyecto, es VAN ≥ 0.
Para elegir el mejor entre dos proyectos se dispone de dos reglas equivalentes:
Un VAN nulo significa que la rentabilidad del proyecto es la misma que colocar los fondos en él invertidos en el
mercado con un interés equivalente a la tasa de descuento utilizada (costo de oportunidad).
Una de las mayores dificultades radica en fijar el valor para la tasa de interés, existiendo diferentes alternativas.
Tasa de descuento ajustada al riesgo = interés que se puede obtener del dinero en inversiones sin
riesgo (deuda pública + prima de riesgo).
Costo de oportunidad del dinero (mejor uso alternativo e incluyendo todas sus posibles utilizaciones).
La TIR representa una medida de la rentabilidad que se obtiene al vencimiento del proyecto. La Tasa Interna de
Retorno, supone que los flujos de fondos son reinvertidos a la misma TIR hasta el final de la vida en el mismo
proyecto o en otros proyectos con idéntico rendimiento.
A diferencia del VAN, para aplicar el criterio de la TIR es necesario saber el tipo de proyecto que se pretende
evaluar.
Dado que la TIR es la tasa de crecimiento del capital, cuanto más alta sea, mejor si se trata de una inversión porque la
TIR estará midiendo la rentabilidad. Por lo tanto, si se trata de un crédito, la ocurrencia será totalmente lo contrario.
Para aceptar un proyecto el criterio de la TIR exige que no sea menor que la tasa de descuento si se trata de una
inversión (costo de oportunidad) y que no sea mayor que la tasa de descuento si se trata de un crédito.
Si un proyecto tiene flujos de fondos negativos al inicio (inversión) y positivos en los periodos posteriores, el criterio
de la TIR establece que se debe invertir en los proyectos que tengan una TIR >i.
Si un proyecto tiene flujos de fondos positivos al inicio y negativos en los otros, la regla de la TIR dice que se debe
invertir en el proyecto si la TIR < i.
Se establece que dos proyectos son mutuamente excluyentes cuando la realización de uno de ellos no permite
llevar a cabo el otro. Si a cada una de estos proyectos de inversión se los considera como proyectos individuales, la
implementación de uno de ellos implica que no se puede ejecutar el otro.
Cuando los proyectos son mutuamente excluyentes, se considera que la regla de decisión de la TIR no es de utilidad
para elegir al mejor proyecto. No se puede decir que el proyecto con la mayor TIR es el que debería llevarse a cabo.
De allí que si los proyectos son mutuamente excluyentes, la regla de elegir el proyecto de mayor TIR no debería ser
implementada para seleccionar entre proyectos.
Para elegir el mejor entre dos proyectos A y B, es necesario y aplicar la regla de decisión habitual al proyecto
diferencia (A - B). Con independencia de si A y B son proyectos de un tipo u otro, el proyecto diferencia puede ser
del mismo tipo o de cualquier otro.
Cuando existe por lo menos una TIR, las recomendaciones de los criterios TIR y VAN coinciden.
Se establece que la tasa interna de retorno es en cierto modo un indicador de rentabilidad relativa del proyecto,
(cuando se compara la TIR de dos proyectos no se tiene en cuenta la posible diferencia en las dimensiones asociadas
a esos proyecto). Por ejemplo: un proyecto con una gran inversión con una TIR baja puede tener un VAN superior a
un proyecto asociado a una inversión de pequeña escala pero con una TIR más elevada.
Tasa contable
El método de la tasa contable se basa en el concepto de Cash-Flow, en vez de cobros y pagos (Cash-Flow
económico).
La principal ventaja, es que permite hacer cálculos más rápidamente al no tener que elaborar estados de cobros y
pagos (método más engorroso) como en los casos anteriores.
El principal inconveniente, además del defecto de los métodos estáticos, es que no tiene en cuenta la liquidez del
proyecto.
Además, la tasa media de rendimiento tiene poco significado real, puesto que el rendimiento económico de una
inversión no tiene por qué ser lineal en el tiempo.
El índice de rentabilidad
Es el valor presente de los flujos de efectivo esperados de una inversión, divididos entre la inversión inicial.
Ct = flujos de caja en el periodo t
t = tiempo
La regla de decisión nos indica que seleccionar todos los proyectos que tengan un PI>1. De presentarse un conflicto
entre proyectos, se debe elegir el proyecto que tenga mayor PI. En algunas ocasiones el Índice de Rentabilidad podría
inducir a decisiones erróneas si se comparan proyectos de inversión mutuamente excluyentes, por las consideraciones
que realizáramos oportunamente sobre este tipo de inversiones.
Lo más importante es que permite llegar más rápidamente a la combinación óptima de proyectos cuando exista una
restricción de capital. Sin embargo, en ocasiones el PI no genera la solución correcta y entonces se recomienda el
VAN.
Pasqual, J. (2006) considera que proyectos de diferente vida útil se presentan cuando dado un proyecto A,
caracterizado por una inversión inicial en el periodo cero y unos flujos económicos (positivos o negativos) durante
una cantidad de periodos determinada hasta el periodo final Tz, z=A, B (en suma, tz = 0, 1, ..., Tz), se compara con
otro B, que presenta las mismas características pero con duración y flujos distintos.
Un problema típico sería el de reemplazo de máquinas y equipos. Los métodos pueden resumirse como sigue:
1 Método BM. Se define un mismo ámbito temporal para ambos proyectos, calculado como el m.c.m. de
la duración total de cada uno de ellos. Se determinan los respectivos VAN y se elige el proyecto con
mayor VAN.
2 Método BM'. Manteniendo los ámbitos temporales originales, se calculan los VAN de cada proyecto y,
para una cantidad de periodos igual al del proyecto menos uno (no se tiene en cuenta en este cómputo
el periodo inicial cero porque este lapso temporal puede suprimirse al continuar el proyecto), se
determinan las cuotas constantes por periodo que son equivalentes al VAN hallado. Se elige el
proyecto con una cuota constante mayor. La generalización para una cadena ilimitada de proyectos de
un mismo tipo siguiendo este método, como proponen BM, no es correcta porque, el VAN calculado
tiene en cuenta Tz+1 periodos, presupone pues la necesidad de emplear siempre Tz+1 periodos,
cuando esto únicamente es necesario la primera vez y para proseguir con un proyecto idéntico se
requieren sólo Tz periodos por cada renovación.
3 Método MC. Se procede como en el método BM, con una salvedad: para cada proyecto, al flujo
correspondiente al periodo final Tz se le suma el correspondiente al periodo inicial 0, de forma que el
periodo Tz+1 es indistinguible del periodo 1z, asegurando indefinidamente la continuidad del
proyecto. Se elige el proyecto con mayor VAN. Sistema adecuado para el caso de proyectos largos con
necesidad de reponer una o más veces algunos equipos con otros de las mismas características.
4 Método MC'. A partir de los datos obtenidos según el método anterior (MC), se calculan las cuotas
constantes equivalentes a los respectivos VAN para Tz periodos, de forma semejante a cómo se hacía
con el método BM', pero sin contabilizar el flujo correspondiente al periodo inicial 0. El resultado es
pues un flujo inicial y unas cuotas constantes para cada proyecto por un tiempo ilimitado (en rigor las
cuotas duran Tz periodos, pero como son replicables indefinidamente equivalen a cuotas ilimitadas en
el tiempo). Se calculan los respectivos VAN para un tiempo ilimitado y se elige el proyecto con mayor
VAN. Tal vez sea un modelo adecuado para la gestión de recursos naturales.
LECCIÓN 2 de 3
Sin tomar en consideración los impuestos, el flujo de efectivo operativo de un proyecto (FEO), se puede expresar
como UAII más depreciación:
D = depreciación
El último caso de interés es el punto de equilibrio financiero, que es el nivel de ventas que resulta de una VAN de
cero. Primero se determina cuál debe ser el flujo de efectivo operativo para que el VAN sea cero; después se utiliza
esa cantidad para determinar el volumen de ventas.
El análisis de los escenarios es la determinación de que le ocurre a las estimaciones de VAN cuando se formula el
interrogante: ¿qué pasaría si...?
Una tendencia natural al tomar decisiones en escenarios de múltiples criterios de selección, es la de asignar
ponderaciones a los atributos o criterios y determinar para cada opción un indicador de desempeño.
El análisis de escenarios puede ser hecho cualitativamente o cuali cuantitativamente (modelando tanto factores de
influencia como dependencias de diferentes escenarios). Estos escenarios pueden por ejemplo, contribuir al análisis
de posibles desarrollos futuros en mercados, ambientes políticos, grupos objeto, y desarrollos regionales o globales.
Cualquier tipo de análisis de estrategias dentro de la organización puede ser mejorado mediante la utilización de
escenarios.
Los múltiples escenarios pueden alertar a los decisores respecto a la incertidumbre que enfrentan en el
planeamiento del futuro.
Los escenarios ayudan vencer la tendencia a ser demasiado confiado y a planificar en base a "las
mejores predicciones" del futuro.
Los escenarios mejoran la calidad del pensamiento estratégico y amplían las perspectivas.
El análisis de sensibilidad
El análisis de sensibilidad se define básicamente como el proceso de cambiar las hipótesis de los valores de las
constantes en un modelo dado y examinar los resultados que se han generado a partir de la modificación de esos
valores.
En los análisis de sensibilidad de los proyectos de inversión se mantienen inalterables todas las variables excepto una
y luego se procede a analizar qué tan sensible es la estimación del VAN a los cambios de esa variable.
Un proyecto de inversión puede ser aceptable bajo las condiciones previstas, pero podría no serlo si se produjera la
modificación de una variable significativa.
Por ejemplo ¿cuál sería el VAN si el costo de las materias primas aumentara o disminuyera en 12%, 20% o en 45%
con respecto a los estimados en el proyecto? En consecuencia ¿es conveniente realizar el proyecto?, y si lo es ¿cuál
es el margen de maniobrabilidad para superar las contingencias?
1 Variaciones múltiples en cada una de las variables, permaneciendo constantes las demás variables del
proyecto (Modelo Unidimensional).
El modelo unidimensional corresponde al análisis de una sola magnitud o variable. Por ejemplo el precio de venta. A
modo de ejemplo, se podría consultar el VAN si esa variable aumentara o disminuyera en una determinada
proporción por ejemplo en un ± 15%, 30%, etc. (esa variación puede ser porcentual un cambio a un valor absoluto).
Desde el punto de vista matemático, el modelo estadístico bidimensional corresponde al estudio de dos magnitudes
que varían simultáneamente en igual o en diferente proporción. Por ejemplo el precio de venta de un producto o
servicio y el costo de la materia prima. Se plantea entonces la situación de cuál sería el VAN si esas dos variables
aumentaran o disminuyeran simultáneamente en una determinada proporción o a determinados valores absolutos.
El punto de equilibrio contable representa el nivel de ventas que resulta en una unidad neta del proyecto de cero.
Para entender el concepto, se deben identificar los diferentes costos intervienen en el proceso productivo.
Los costos fijos son aquellos costos que se espera que permanezcan constantes durante una unidad de tiempo. En
condiciones de funcionamiento normales, los costos fijos se mantienen constantes. Algunos ejemplos de costos fijos
incluyen los pagos de alquiler, los intereses de préstamos, los salarios de empleados administrativos, etc.
Los costos variables se modifican cuando existe un cambio en la cantidad de producción y son nulos cuando no hay
producción. Lo que significa que en comparación con los costos fijos, que deben afrontarse independientemente de
que la empresa continúe en actividades o no, los costos variables desaparecen si la firma no realiza actividades
comerciales.
Entre los ejemplos de costos variables se incluyen el costo de mercaderías vendidas, la mano de obra industrial y las
comisiones sobre ventas.
El análisis de punto de equilibrio proporcionará un objetivo de ventas que puede expresarse en unidades monetarias o
en unidades de producción o de ventas, o en cualquier otro término que sea pertinente.
Si bien el análisis del punto de equilibrio es un concepto estático, su aplicación a una situación dinámica ayuda a la
administración en las operaciones de planeación y control.
El análisis del punto de equilibrio impele a la empresa a diagramar un estudio del comportamiento exhibido por los
costos fijos y variables de la empresa. El punto de equilibrio real es de menor importancia que el efecto de las
decisiones sobre los costos y sobre las ventas. Finalmente, tengamos presente que el análisis costo-volumen-utilidad
proporciona a los administradores financieros información pertinente y muy útil acerca de las repercusiones de los
cambios en los costos, en los ingresos, en el volumen y en la mezcla del producto sobre las utilidades.
Referencias
Ross, Weterfield y Jordan. (2006). Fundamentos de Finanzas Corporativas (7a edición). Editorial Mc. Graw Hill.