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seguridad que vigilan 24h el lugar que la víctima refería.

Tras esto, la víctima finalmente


reconoce que sí conoce al asaltante, pero que no dará ninguna información sobre él.

Pasados casi 15 años, el caso es reabierto y dirigido por la Agente Especial Jessica
Daugherty, quien es consciente desde el inicio sobre las dificultades que tendrán en
obtener información de la víctima pasado tanto tiempo, y que pueda ser usada en un juicio.
Cabe recalcar, que durante este tiempo, siempre se da la existencia de un único
sospechoso, que es uno de los instructores del curso de la víctima, sin embargo la falta de
pruebas hace con que en ningún momento sea probatoria su culpabilidad y vinculación
con el caso y con la víctima.

Durante dos años de arduo trabajo, el equipo de investigación finalmente obtiene una
pista que seguir tras la aplicación de la técnica de la entrevista cognitiva a la víctima.
Durante dicha entrevista, la víctima llega a recordar que, durante el asalto, en determinado
momento, fija su mirada en una de las paredes de la vivienda, donde se encuentra un
cuadro colgado con una foto en su interior del sospechoso con su familia. Esta pista, llevó
a los investigadores a realizar una búsqueda en el interior de la casa del sospechoso, con
la esperanza de encontrar algunas fotografías que posteriormente serían mostradas a la
víctima para reconocer.

Siguiendo este procedimiento, la víctima finalmente consiguió reconocer la fotografía en


cuestión, que fue utilizada durante el juicio como testimonio y evidencia probatoria para
vincular e inculpar al instructor sospechoso con los hechos acaecidos sobre la víctima 16
años antes.

Finalmente, el jurado decidió que la sentencia para el instructor sería de prisión durante
16 años, los mismos años que la víctima había sufrido sin una resolución judicial sobre
los actos infames a los que había sido sujeta.

Es evidente, y como relata la propia agente que lleva el caso, que la utilidad de la
entrevista cognitiva en una víctima de abuso sexual para recabar informaciones y
memorias ocultas en lo más profundo de la psique tras actos traumáticos como éstos, es
realmente crucial. En este caso, en concreto, esta técnica acaba por ser un factor
determinante en la resolución de un caso que, de otra forma hubiera quedado sin
encerramiento, perpetuando la victimización de la persona, así como los problemas
inherentes a ésta, tanto psicológicos, como judiciales y procesuales en el campo de la
investigación criminal.

Sergio Roldán Salmerón.

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