Módulo 6 - Género y Seguridad Vial

7/11/23, 11:34 Módulo 6: Género y seguridad vial.
Módulo 6: Género y seguridad vial.
Sitio: Aula Virtual de la Agencia Nacional de Seguridad Vial Imprimido por: Gustavo David LOPEZ
Curso: Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional 2023 Día: Tuesday, 7 de November de 2023, 11:34
Libro: Módulo 6: Género y seguridad vial.
https://aulavirtual.seguridadvial.gob.ar/mod/book/tool/print/index.php?id=2800 1/28
Tabla de contenidos
1. Género y conducción.
1.1. Imagen social, punto de partida.
1.2. Género, estereotipos y masculinizacion
1.3. Masculinización del espacio público
2. Datos de Argentina.
2.1. En cuanto al uso de elementos de seguridad.
2.2. Cumplimientos de normas
2.3. Cierre de Módulo.
1. Género y conducción.
La violencia es una problemática que vivimos todos los días en el espacio público. Y a la
vez , es la causa de siniestros viales, en infinidad de veces.
Cuando analizamos el comportamiento de las personas que conviven en el espacio
público la perspectiva de género sin dudas los atraviesa.
Desde ya hace varias décadas se pone en agenda la cuestión de géneros, y sobre todo,
en los últimos años, se puso más en boga la temática. A partir de la creación del
Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad (MMGyD) en 2019, se incorpora a todos los
ámbitos de la Administración Pública Nacional, entre ellos la Agencia Nacional de

Seguridad Vial, la perspectiva y los contenidos de géneros.
1.1. Imagen social, punto de partida.
1.2. Género, estereotipos y masculinizacion
La perspectiva de género responde a una herramienta conceptual que pone de manifiesto

que las diferencias entre varones y mujeres no se da solo por una determinación
biológica.
Es un concepto relacional que involucra a varones y mujeres y las formas en que se

relacionan. La misma alude a una construcción social y cultural, que se da a partir de las
diferencias sexuales entre unos y otras.
La perspectiva de género permite analizar cómo operan las representaciones sociales, los
prejuicios y los estereotipos en cada contextos o espacio social y en este sentido, el
espacio vial no escapa a el.
Tal como dice Eleonor Faur, en "Desafíos para la Igualdad de Género en la

Argentina": la construcción social y cultural de las identidades y relaciones
sociales de género redunda en el modo diferencial en que hombres y mujeres
pueden desarrollarse en el marco de las sociedades de pertenencia, a través de su

participación en la esfera familiar, laboral, comunitaria y política.
Las representaciones sociales del género, derivan en los estereotipos, que atribuyen
determinadas conductas al varón y otras a las mujeres. Por ejemplo, los estereotipos de
género determinan que la mujer debe estar más abocada a tareas de cuidado de la
infancia y tercera edad o enseñanza y más alejada a lugares de poder o de decisión
institucional, rol que se delega mayormente al varón.
Pensemos algunas cuestiones ¿Es natural que las mujeres sean las principales
cuidadoras de sus hijos/as? acaso, ¿Los varones nacieron amando el fútbol y los
autos y las niñas las muñecas? ¿Las mujeres han nacido para hacerse cargo de las
tareas del hogar y los varones para tener un trabajo remunerado fuera de la casa?
Cuando pensamos o nos dicen que los varones “se desempeñan” o son “naturalmente
mejores” en algunas tareas y las mujeres en otras, estamos reproduciendo, como
hablamos antes, un estereotipo.
Con relación al tránsito podríamos preguntarnos, ¿Es natural que haya más varones
conductores que mujeres conductoras? Por otro lado, ¿Es verdad que las mujeres
manejan mal? ¿Es natural que, si en una pareja heterosexual donde ambos saben
conducir, quien más lo haga sea el varón. O que las personas trans estén
invisibilizadas en el espacio público?.
Podemos someter fácilmente el ámbito vial a esta reflexión cuando relacionamos la

conducción del varón con la fuerza, el poder, la agresividad, la competitividad, la toma de
riesgo, la valentía o la eficiencia. Y cuando asociamos la conducción de la mujer con la

extrema prudencia, la debilidad, la lentitud, el miedo o el cuidado.
En definitiva, el género, es una noción que hace hincapié en el hecho de que lo que
conocemos como hombres y mujeres no son realidades naturales si no construidas
culturalmente. Esto debido a que cada sociedad ha definido a su modo como debe ser
un hombre y como debe ser una mujer. El termino género remite a una serie de ideas,
creencias y atribuciones sociales construidas en cada cultura y momento histórico,
tomando como base la diferencia sexual. Y de allí parten los estereotipos que
determinan como debe comportarse un hombre y como de comportarse una mujer.
1.3. Masculinización del espacio público
Con los estereotipos, lo primero que aparece son los prejuicios acerca de que “la mujer
no debería manejar”, como si los varones tuvieran una condición natural para hacerlo.
Cuántas veces escuchamos:
● “Me está agrediendo porque sabe que soy mujer y no me voy a bajar a pelear a las
piñas”
● “Me mira como diciendo “no pasas” y me cruza el auto. Si fuera un varón no estaría
haciendo lo mismo”
● “Las mujeres son más prudentes y el varón es más temerario por naturaleza”
● “Las mujeres a veces por cuidarse mucho demoran un poco el tránsito”
● “La mujer manejando es mucho más lenta, por precaución. Tiene miedo a equivocarse y
que le griten “Anda a lavar los platos”.
La conclusión del estereotipo masculino de conducir es que el volante no es el lugar
apropiado para una mujer. En este sentido, hay dos observaciones interesantes:
● La tendencia a que conduzca el varón aún si se moviliza junto a una mujer que sabe
conducir;
● Los varones ocupan la mayoría de los puestos de trabajo vinculados con el conducir,
aquellos que manejan taxis, remises, camiones, colectivos o corredores de autos.
2. Datos de Argentina.
En Argentina, la conducción continúa siendo una actividad principalmente masculina.

Veamos los datos del siguiente informe realizado por el Observatorio Vial de la Agencia
Nacional de Seguridad Vial, durante el 2023, el cual visibiliza y pone en discusión las
representaciones sociales sobre la buena conducción:
Durante los últimos años la participación femenina en la conducción demuestra una

tendencia creciente. Entre 2019 a 2022 la emisión de la LNC para mujeres pasó del 28%
al 31%.
En cuanto a las clases de licencias vigentes a la fecha, cabe mencionar que casi 3 de
cada 10 licencias clase A 1 (motos) corresponde a una mujer, dato similar a la
participación de las mujeres en las clases B de autos (35%). Si bien la conducción de

motocicletas continúa siendo eminentemente masculina, las mujeres cada vez más se
animan a este tipo de vehículo.
¿Qué sucede con la LiNTI?
En cuanto a la Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional (LiNTI) los datos arrojan

los siguientes números:
En la actualidad hay un total de 286.817 LiNTI habilitadas de las cuales:
-284.785 pertenecen a varones y;
-2032 pertenecen a mujeres
Es decir que, un 99,29% de las LiNTI habilitadas pertenecen varones y el resto, 0,71
% son de mujeres.
2.1. En cuanto al uso de elementos de seguridad.
Cinturón de Seguridad
Los datos arrojan que el 62,5% de las mujeres utilizan el cinturón, mientras que en los
varones un 53,4%.
Uso de casco
En conductoras/es de motos, las mujeres usan menos el casco que los varones (60,7%
vs. 70,6% respectivamente). Inversamente, cuando ocupan la posición de acompañantes
en moto, las mujeres viajan más protegidas por el uso del casco que los varones (43,2%
vs. 39,7% respectivamente).
No obstante, en la posición de acompañantes (ocupada fundamentalmente por mujeres)

el uso del casco es significativamente menor (42%), respecto de la de conductor/a
(68,7%), la cual es asumida en su mayoría por varones (78,7%). Esto se traduce en una
mayor exposición al riesgo de las mujeres que circulan como acompañantes en

motocicletas ante la eventualidad de la ocurrencia de un siniestro vial.
Sistema de retención infantil (SRI)
El rol feminino se despliega fundamentalmente en el terreno del traslado de niñas y niños,

siendo este comportamiento parte de su asociación con los cuidados infantiles.
Cuando la conductora de autos es mujer, los niños/as viajan más protegidos al usar el
sistema de retención infantil (31,2%), que cuando conduce un varón (24,6%). Respecto al
traslado de menores en motocicleta y al uso de casco por parte de éstos (27,8%), no se
observan diferencias en cuanto el género del conductor/a.
2.2. Cumplimientos de normas
Las mujeres son más respetuosas de las señales del semáforo que los varones,
tanto en calidad de conductoras de automóviles (96,5% vs. 94,5% respectivamente),
motos (84,6% vs. 77,4% respectivamente) y bicicletas (58,5% vs 49,9%,
respectivamente).
Consumo de alcohol
Analizando el consumo de alcohol previo a la conducción de vehículos, se detectan

niveles más bajos entre las mujeres con respecto a los varones. Los datos actuales de
controles de alcoholemia del período diciembre 2020 a febrero 2023 indican que la
prevalencia de alcoholemias positivas entre los varones es el doble que entre las mujeres
(4% vs. 2% respectivamente).
Límites de velocidad.
Los varones, con mayor frecuencia superan los límites de velocidad permitidos que las
mujeres, para todos los tipos de vías de circulación: en conductores/as de autos 21% vs.
14% respectivamente, y en conductores/as de motos 16% vs. 7% respectivamente.
Infracciones.
En cuanto a las infracciones de tránsito durante el 2022, las mismas ascendieron a
733.088 según el SINAI (Sistema Nacional de Infracciones). Aquellas registradas a los

varones superan ampliamente a las infracciones de las mujeres: siete de cada diez son
masculinas. Esto se debe a que, como la calle se encuentra comandada por los varones,
estos se encuentran más expuestos al tránsito.
Sin embargo, el peso estimado de las infracciones registrada por género es mayor entre
las mujeres que entre los varones. Si bien el mal estacionamiento es la categoría más
recurrente para ambos géneros, las mujeres superan en ésta a los varones, mientras que,
el exceso de velocidad, que es la segunda más recurrente, se destaca más entre los
varones.
Siniestralidad.
Con relación a las víctimas, 3 de cada 4 siniestros fatales son varones. Los ocupantes de
motos continúan siendo la principal víctima fatal y con mayor presencia entre los varones.
Entre las mujeres, las ocupantes de automóviles son la principal víctima, las cuales 4 de
cada 10 se trasladan en este tipo de vehículos, así como también estas se destacan
como víctimas fatales peatonas.
Rango de edad:
La edad de las víctimas, demuestra el mismo patrón entre ambos géneros, con una
mayor concentración entre los 15 y 34 años.
2.3. Cierre de Módulo.
Los datos de seguridad vial analizados en el presente módulo indican que en Argentina,
los varones conducen más que las mujeres, situación que genera en éstos una mayor
exposición al tránsito y, consecuentemente, una mayor probabilidad de cometer

infracciones y/o estar implicados en siniestros viales.
Puede decirse, a partir de los datos expuestos, que las mujeres son más precavidas que
los varones al conducir y muestran tener mayor percepción del riesgo, hecho que se
relaciona directamente con bajas probabilidades de vivenciar siniestros viales siendo

conductoras y de que éstos deriven en traumatismos graves o incluso la muerte. No
obstante, tal como se observó, las mujeres tienen menor número en la posesión de la
Licencia Nacional de Conducir, así como de LiNTI.
La clave central para la deconstrucción de conductas negativas es la visibilización de

aquellas que son saludables, y tal como está demostrado, las mismas son reproducidas
en mayor proporción por las mujeres, manifestando mayor apego a las normas y leyes
viales existentes. En definitiva la forma de reducir las muertes y las lesiones por
siniestros viales.
Sin lugar a dudas el análisis del escenario vial con perspectiva de género permite de
algún modo comprender y desnaturalizar conductas dominantes que reproducen patrones
que en la mayoría de los casos se alejan de la buena conducción y convivencia, que es el
tema central que nos ocupa.
Toda esto constituye solo un primer paso para poder reflexionar y avanzar hacia el
estudio más complejo de la problemática, incluyendo el análisis de los determinantes de
los comportamientos viales según género, y visibilizando los hábitos y patrones de

movilidad diferenciales y que subsisten sin distinción, con el objetivo de planificar políticas
públicas de transporte inclusivas y tendientes a reducir los siniestros viales y sus

consecuencias en Argentina, fomentando una convivencia entre todas las personas
usuarias de la vía, superadora, tolerante y en armonía en post de fortalecer los simientos
de nuestra cultura en materia de seguridad vial.

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7/11/23, 11:34 Módulo 6: Género y seguridad vial.

Módulo 6: Género y seguridad vial.

Cuando analizamos el comportamiento de las personas que conviven en el espacio

público la perspectiva de género sin dudas los atraviesa.

ámbitos de la Administración Pública Nacional, entre ellos la Agencia Nacional de

1.1. Imagen social, punto de partida.

1.2. Género, estereotipos y masculinizacion

La perspectiva de género responde a una herramienta conceptual que pone de manifiesto

Es un concepto relacional que involucra a varones y mujeres y las formas en que se

Tal como dice Eleonor Faur, en "Desafíos para la Igualdad de Género en la

pueden desarrollarse en el marco de las sociedades de pertenencia, a través de su

invisibilizadas en el espacio público?.

Podemos someter fácilmente el ámbito vial a esta reflexión cuando relacionamos la

riesgo, la valentía o la eficiencia. Y cuando asociamos la conducción de la mujer con la

1.3. Masculinización del espacio público

Cuántas veces escuchamos:

● “Las mujeres a veces por cuidarse mucho demoran un poco el tránsito”

La conclusión del estereotipo masculino de conducir es que el volante no es el lugar

En Argentina, la conducción continúa siendo una actividad principalmente masculina.

Durante los últimos años la participación femenina en la conducción demuestra una

participación de las mujeres en las clases B de autos (35%). Si bien la conducción de

¿Qué sucede con la LiNTI?

En cuanto a la Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional (LiNTI) los datos arrojan

En la actualidad hay un total de 286.817 LiNTI habilitadas de las cuales:

-284.785 pertenecen a varones y;

-2032 pertenecen a mujeres

2.1. En cuanto al uso de elementos de seguridad.

vs. 39,7% respectivamente).

No obstante, en la posición de acompañantes (ocupada fundamentalmente por mujeres)

mayor exposición al riesgo de las mujeres que circulan como acompañantes en

Sistema de retención infantil (SRI)

El rol feminino se despliega fundamentalmente en el terreno del traslado de niñas y niños,

2.2. Cumplimientos de normas

Analizando el consumo de alcohol previo a la conducción de vehículos, se detectan

En cuanto a las infracciones de tránsito durante el 2022, las mismas ascendieron a

733.088 según el SINAI (Sistema Nacional de Infracciones). Aquellas registradas a los

2.3. Cierre de Módulo.

exposición al tránsito y, consecuentemente, una mayor probabilidad de cometer

relaciona directamente con bajas probabilidades de vivenciar siniestros viales siendo

La clave central para la deconstrucción de conductas negativas es la visibilización de

tema central que nos ocupa.

los comportamientos viales según género, y visibilizando los hábitos y patrones de

públicas de transporte inclusivas y tendientes a reducir los siniestros viales y sus

de nuestra cultura en materia de seguridad vial.

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