República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular

para la Educación, Ciencia y Tecnología

Universidad Politécnica Territorial del Norte del Táchira Manuela Sáenz

La Fría – Estado Táchira

Las redes sociales y su efecto en la sociedad

Docente: Lcdo. Engelver Delgado Autor: Jean Diego

Caicedo Baena

C.I.: 29.918.490

Noviembre, 2023

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Como parte de las tecnologías, estas tuvieron, de lejos, una capacidad de influencia
contundente y, de alguna manera, cambiar, para bien o mal, las actitudes y el estilo
de ejecutar las tareas diarias del hombre, incluso su comportamiento. Las redes
sociales (o R.R S.S.) pertenecen al avance científico, tratándose del apartado de las
tecnologías de la información y comunicación, cuyo potencial llegó a reemplazar
medios tradicionales de transmisión de eventos de actualidad como la radiodifusión,
el periódico y la televisión (que, por lo menos, ha incorporado elementos, o
propiedades, propias de un teléfono celular moderno), aunque esto no ha tenido que
suponer alguna mejora en la calidad de la información recibida –la propagación de
noticias fraudulentas vieron un crecimiento exponencial por el uso de las R.R S.S-.

Un punto en el que sí ha resaltado y sido conocido es en la forma frenética e

incontrolable del esparcimiento de la información, al grado de volver en noticia
vieja algo que haya sucedido en unos minutos gracias al flexible alcance que han
tenido sobre cada aspecto de la vida cotidiana de cada usuario con conexión a
internet.

Uno de los puntos por considerar de las redes sociales, aparte de su no poca
notoriedad en la información, es en su permeabilización dentro del público juvenil.
Nuevas maneras de conectarse a cientos, actividades lúdicas digitales para holgarse,
eventos en el mismo formato que atraen a millones, son las modalidades que, en la
población joven, han calado hasta formar un novedoso modo en que los miembros
de este grupo hallen prácticas de entretenimiento cuasi-únicas y modelen jergas en
las que se entiendan e identifiquen y compartan tantos datos como otros elementos
posibles. Sin embargo, los efectos no únicamente intervienen en los recursos del
solaz, como un inocuo medio de y para el esparcimiento. Son las conclusiones que
investigaciones profesionales arrojaron sobre los dañinos efectos psicológicos de las
redes sociales.

Problemas tales como la privación del sueño y sus resultados, la depresión, el bajo
rendimiento académico, el resentimiento de sus relaciones sociales y disminución de
su calidad de vida son una muestra de lo que las redes sociales, mal empleadas, son
capaces de efectuar. Es preciso mencionar que el colectivo joven no es el único

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implicado en el uso equivocado de estos medios, pues cualquiera quien no sepa
tener control en este apartado, padecerá las dichas consecuencias. Estas últimas han
producido graves daños, incluso en la capacidad natural de la atención de los
individuos, que se ha visto debilitada en estos últimos años debido al uso sin control
de las aplicaciones de R. R. S. S., que han tendido a gestar adicción entre sus
usuarios y descuidar sus vidas, y esta descripción coincide con la realidad de
muchos.

En consonancia con lo anterior, múltiples testimonios han señalado el abuso que las
empresas que mantienen el monopolio de las redes sociales en el mundo aplican
sobre sus mismos clientes y usuarios que emplean sus servicios digitales. El
elemento más buscado (o «codiciado») es el dato, la unidad de información que es
capaz de revelar mucho del individuo. Los datos se tornaron en el objetivo por
perseguir de las grandes compañías, las cuales se sirven de un amplio abanico de
posibilidades y funciones que añaden a sus productos virtuales con el fin de
mantener por un tiempo más prolongado la exposición a las pantallas, sin tomar en
consideración las gravosas consecuencias que esta actividad conlleva, puesto que se
traduce como el desgaste progresivo y constante de habilidades humanas útiles para
la resolución de problemas.

La entrada de las redes a la sociedad dio un efecto tibio en la sociedad, ya que, por
unos lados, benefició a innumerables personas, mientras que, por el otro, se
convirtieron en la representación de cómo alguien perdería el reconocimiento de sus
límites y comienza a depender de fuentes externas a niveles altos.

Los negocios probaron que las redes son una indispensable herramienta para
incrementar el volumen de sus ventas y hacer conocer los emprendimientos llevados
por pequeños agentes que buscan progresar en sus ocupaciones económicas sin
importar la distancia de sus ubicaciones.

Lo anterior es un ejemplo, ahora, del lado útil y productivo que las R.R.S.S
resultaron para varias personas en distintos contextos. Las tecnologías en sí mismas
no representan un mal o un bien para la humanidad, ya que estas son solo
herramientas al alcance de la mano de la mente que enfoca sus objetivos.

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Un punto a favor a esta forma de comunicación es haber excavado un canal
diferente a los medios tradicionales que monopolizaban la información, aplicar
técnicas novedosas al periodismo, sin mencionar la casi entrega de esta tarea a la
gente del común a través del uso de la cámara fotográfica del teléfono celular.

La información no se encuentra ahora en manos de grupúsculos que reciban,

modelen y muestren los eventos a su parecer, por lo que el control ciudadano en
cuanto a este apartado es decisivo para evitar el consumo de desinformación, aparte
de hacer una clara invitación a construir un verdadero criterio basado en las
elecciones que mejor encajen en la capacidad de discriminación del individuo de los
reportajes que tenga de frente. Aunque, como se estableció al principio, las redes se
convirtieron en un pasaje seguro para las noticias falsas, y el mejor método para
evitarlas es utilizar el sentido común y cotejar un portal de noticias y proveedor de
datos con otros para que este punto no caiga en contradicción con lo desarrollado al
empezar. El punto eludido se denomina la «democratización de la información.

En conjunción, las redes han ayudado a (aunque parezca ficción) la conexión de

todos los usuarios del mundo con los de la otra parte de este, las barreras
idiomáticas, de la distancia, se derrumbaron por el desarrollo de programas asistidos
por internet para realizar esta función y acercar el contacto humano a través de las
pantallas. Así, amigos con tiempo sin verse y familiares extrañando a los suyos
encuentran un atajo aliviador que cercena las distancias y recuperan el ansiado trato.
No obstante, como punto en desacuerdo, a la vez las redes perjudicaron el contacto
más próximo, pues, como derivación de esto, la calidad de las relaciones humanas
se enfría, causando la soledad, marcada por una acentuación única, en la que los
usuarios anteponen la tecnología sobre la interactividad social cercana.

Siguiendo el tenor de lo anterior, los medios sociales han permitido que los usuarios
puedan interactuar con los principales responsables de quienes entregan, de primera
mano, la información y despejar dudas que aparezcan entre quienes se percataron de
algo sucedido. Como sucesión a lo anterior, pero entrando a la sección de las
compras, las redes sociales remodelaron el modo en que se traen los productos al
hogar. Si bien, está la presencia de páginas de compra-venta, las redes

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contribuyeron, ahora, gracias a la opinión de los consumidores y clientes, a la
mejora de la calidad de los bienes y servicios por adquirir, siempre consultando las
recomendaciones de quienes ya los probaron. Como siguiente mérito, potenció el
área cultural para grupos minoritarios dándoles voz para exponer sus problemas.

Por lo expuesto previamente, las plataformas sociales han pisado el peldaño del
impacto en la sociedad. Planteado esto, es menester conocer e impedir la ignorancia
de estos medios, sino fomentar su uso correcto y prudente teniendo en cuenta la
influencia magna de estas han inyectado hoy, en el mundo moderno.