La investigación de operaciones, también llamada IO, es una rama de la ingeniería industrial.
Como objeto de estudio, ase del cargo de escoger las decisiones que lleven a buen curso una empresa, organización —u otro tipo de asociación, o sociedad— con tal de incrementar la calidad de los procesos hechos dentro. La participación en un equipo de investigación de operaciones precisa de competencias certeras y, ciertamente, vinculantes al análisis (incluido el arte) y ciencia para autorizar la admisión de un miembro más que colabore con las actividades pertinentes. Tales competencias deberían ser las siguientes: conocimientos en matemáticas, estadísticas, teoría de la probabilidad y economía, administración de empresas, computación e ingeniería. La investigación de operaciones puede desenvolverse con calidad en las siguientes áreas: producción, marketing, compras, manufactura y contabilidad. Estos espacios generalmente aparecen en la gestión de empresas, negocios y relativos para mantener a flote su progreso, lo cual torna importante la contratación de individuos que, como se mencionó previamente, cumplan con los requerimientos que un equipo de investigación tiene que procurar si existen miras al constante y sostenido crecimiento. Una explicación mejor detallada del porqué cada una de las áreas mencionadas necesita de la intervención de la investigación de operaciones es la siguiente: en la Producción se percibe una administración profesional de los precios, las tareas y de la integración de personal en sus filas; en el marketing¸ el manejo óptimo de los productos y las dinámicas referentes al mercado y sus movimientos; en cuanto a las compras, reemplaza los materiales y busca dar uso frecuente a los objetos que recibe empleando estrategias propias de negocio; con la manufactura, la respalda y contribuye a su producción; tocante a la contabilidad, analiza los flujos de efectivo. La historia de la investigación de operación data en el siglo III a.C., en la defensa de Siracusa, en la cual participó el inventor Arquímedes, donde se supone que gracias a sus análisis y evaluación de la situación dio una solución contra los invasores. En el siglo XVI, Leonardo da Vinci conocimientos para inventar una gran cantidad de cosas. Durante los siglos XVII al XVIII muchos matemáticos aportaron a esta área: por ejemplo: Jean Fourier contribuyó con conceptos semejantes a los de la programación lineal; Gaspar Mounche tiene precedentes del método gráfico; a Charles Babbage se le toma como padre de la investigación operativa; Thomas Edison participó en la guerra antisubmarina; Frederick Lanchester dio avances sobre potencia balística; durante la segunda guerra mundial, la IO vio sus primeros pasos cuando un grupo de científicos británicos formaron una serie de herramientas que ayudaran a administrar mejor el material de guerra. En las décadas después de este evento, la IO vio avances frecuentes, esta vez con la aparición de las primeras computadoras y el uso de técnicas de las tales. Actualmente, la Investigación de Operaciones está sostenida por modelos de diversas disciplinas.