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3.

Los juegos del lenguaje y la crítica de las investigaciones a la concepción agustiniana


(parágrafos §1-23, §26-38)
Agustín describe un sistema de comunicación, así podría decirse; pero todo lo que es el
lenguaje, no pertenece a este sistema. Surge entonces la cuestión: ¿es esta representación
apropiada o inapropiada? Puede responderse que sí, pero solo en la comunicación
circunscrita (las palabras nombran objetos y con ello hacen indicación de lo que se necesita
(juegos y mímica)) sobre el albañil A y el ayudante B. pero no para la totalidad de lo que
pretendemos representar. Es como un juego: que consiste en desplazar cosas sobre una
superficie según ciertas reglas (las palabras colocadas en los lugares apropiados, en
diferentes oraciones, o momentos del indicar (se opera con palabras)) como reglas de un
tablero, que se deben seguir, pero, esta no es aplicable a todos los juegos del lenguaje, por
eso, se restringe a todos los otros juegos. Es por eso que dice Wittgenstein que ese concepto
de lenguaje es una imagen primitiva del modo y manera en que funciona (un solo uso, o en
que cada palabra tiene un significado, es el objeto por el que esta la palabra) el lenguaje.
Expóngase (dice Wittgenstein: imagínate) los vacíos o huecos que guarda esa concepción
del lenguaje agustiniana en un caso análogo: imagínate una escritura en que las letras puede
designar, indicar, varios objetos o sonidos (pautas sonoras) de la escritura (una letra tiene
funciones diferentes) y no solo uno, como indica Agustín en el que cada palabra designa un
solo objeto (una letra solo indique una función). Una concepción así de una escritura tan
simplista se asemeja a la concepción agustiniana del lenguaje.
Esta circunscripción del lenguaje agustiniana, en que la concepción general del significado
de la palabra, que circunda al lenguaje lo hacen de él, inoperante en algunos otros
momentos del lenguaje. Disipa las trabas, al estudiar los otros fenómenos del lenguaje en
géneros primitivos de su empleo, para entender la finalidad y el funcionamiento propio de
las palabras.
Como San Agustín describe el lenguaje, en esta forma primitiva, puede decirse que un niño
en su etapa oral, cuando aprende a hablar. En su aprendizaje no hay una explicación, sino
un adiestramiento (instrucción): consiste en que en un instructor señale un objeto, y capte la
atención del aprendiz, y pronuncie a la vez una palabra, a esta relacionar, se le llama
«enseñanza ostensiva de palabras»: que consiste en establecer una conexión asociativa
entre la palabra y la cosa. Esta asociación entre la palabra y la cosa, hace que ocurra en la
mente, una figura de la cosa, el objeto, cuando es pronunciada la palabra. Si esto así sucede
¿es esto la finalidad de la palabra? - Sí, puede ser la finalidad. Pero de acuerdo con la
función que tiene la palabra en §2 su finalidad no es despertar imágenes (figuras) (para
comprender la verdadera finalidad de las palabras, es útil esta función). Pero esta cualidad
de la enseñanza ostensiva, no percibe completamente a la palabra: si produce una
asociación entre la palabra y la cosa, es con ayuda de una determinada instrucción, si la
instrucción fuera diferente, la enseñanza produciría una comprensión distinta, al relacionar
la palabra con otro objeto diferente.
Juegos de lenguaje.
En la práctica del uso del lenguaje, como enseñanza ostensiva de la palabra §2, hay una
parte (instructor) que enuncia las palabras (enuncia) y otra (aprendiz) que actúa conforme
con ellas: en la instrucción del lenguaje, encontramos este proceso: el aprendiz nombra los
objetos, cuando el instructor la señala. En ese repetir de las palabras por parte del alumno,
de lo que dice el maestro, ambos procesos se parecen al lenguaje. El proceso del uso
(función) de palabras que ocurre en §2 es uno de los 1. Juego(s) (modo y manera) por
medio del cual aprenden los niños su lengua materna. Wittgenstein a estos juegos los llama
«juegos de lenguaje», el lenguaje primitivo, o primario debe en este sentido ser entendido
como una parte, un juego de lenguaje entre los juegos de lenguaje. 2. El proceso de
nombrar y repetir palabras puede llamarse también «juegos de lenguaje». 3. Asimismo un
«juego del lenguaje» al todo formado por el lenguaje y las acciones que se desglosan de él.

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