El agua es un elemento básico y prioritario para el sustento humano, ya que
sin aquel elemento no sería posible la supervivencia del hombre dentro de un ámbito geográfico.
La legislación internacional ha desarrollado normas y doctrinas jurídicas
para la protección y aprovechamiento de este vital recurso hídrico; es así, que el agua obtiene esa característica de “derecho” con una fundamentación y sustento jurídico, íntimamente ligado a la dignidad del hombre y por ende su regulación y aprovechamiento deben de proveerse en un sentido asequible y equilibrado.
Nuestra legislación, hasta el año 2016 no contenía o ampliaba su regulación
en cuanto al “derecho al agua”, se daban proyectos de ley, pero ninguna con efectos positivos.
el pasado 22 de junio del 2017 dictó la Ley N° 30588 “ley de reforma
constitucional que reconoce el derecho de acceso al agua como derecho constitucional”. Dicha ley establece en su enunciado normativo que:
“Artículo 7º-A.- Acceso al Agua Potable
El Estado reconoce el derecho de toda persona a acceder de forma
progresiva y universal al agua potable. El Estado garantiza este derecho priorizando el consumo humano sobre otros usos. El Estado promueve el manejo sostenible del agua, el cual se reconoce como un recurso natural esencial y como tal, constituye un bien público y patrimonio de la Nación. Su dominio es inalienable e imprescriptible”.
El derecho constitucional desde su ente regulador el Tribunal
Constitucional ya reconoció el Derecho agua como un derecho fundamental aceptado por la comunidad jurídica Internacional en dos casos, esto dentro de las Sentencias recaídas en los expedientes: 06546-2006-PA y 06534- 2006-PA, y bajo el amparo del Artículo 3 de la Constitución Política, es decir, dentro del artículo denominado “númerus apertus”. Pero, otro punto importante a tener en cuenta es que el “derecho al agua” ya tenía un tratamiento jurídico interno. Es decir, ya venía siendo regulado por la ley de Recursos Híbridos (ley 29338). Y con ello vemos que este “derecho al Agua” tiene fundamentos como efectos en cuanto a su aplicación como a su institucionalización y no por ello pasa a ser un tipo jurídico exento de importancia.
Sin embargo, el tema del agua es en sÍ un problema ya de mucha
coyuntura, con mucha polémica y distintos puntos de opinión. el recurso agua hoy en día es importante, ya que, al ser conexa a otros derechos fundamentales hace que sea necesaria su regulación y protección. Pero el problema se agudiza con la creciente población, con limitantes geográficos como recurso natural limitado, siendo responsabilidad del Estado realizar inversiones relacionados al agua, a través de los organismos reguladores como las entidades privadas o a través de los ministerios u otras entidades que puedan ayudar a brindar suficiente y continuo acceso al agua con proyectos u otros para dar con soluciones a la falta de acceso de agua para la población.
Con la presente investigación se buscará si el análisis del enunciado
normativo del “acceso al Agua” en nuestra legislación traerá consigo aspectos relevantes, importantes o contradictorios al ámbito jurídico. Mediante la presente investigación se dará una respuesta al precepto jurídico de acceso al agua potable y si este traerá consigo una institucionalización innecesaria, con poca actividad jurídica en el transcurrir del tiempo o será suficiente en su regulación para nuestro ordenamiento jurídico, a la vez que al constitucionalizarse el Derecho agua en nuestra legislación será causante de mejoras o declives en el derecho de uso primario al agua. Es decir con la constitucionalización del Acceso al Agua Potable se verá afectado el derecho ya establecido como Derecho de Uso Primario al Agua regulada en la Ley de Recursos Hídricos tanto en su regulación como aplicación o será una ley más de letra y papel.
Por ello la presente investigación se centra en un Análisis minucioso del
contenido normativo del Artículo 7 – A denominado Acceso al Agua Potable, así como el principio de progresividad inmerso en el texto normativo mencionado a través de la identificación de las Obligaciones del Estado al proveer mejor acceso al agua y los posibles problemas que pueda traer estos en nuestro ordenamiento jurídico peruano; así como, la falta de precisión en las obligaciones que tendría el Estado para desarrollar un manejo sostenible de dicho recurso hídrico.
Teniendo en cuenta que la aceptación del acceso al agua ya está aceptada
e institucionalizada en nuestra Constitución Política del Perú otorgándose un carácter de derecho nominado a esta figura jurídica del agua. Siendo ello material de análisis de la presente investigación y las polémicas que generará y podría generar con el pasar del tiempo.
Entonces, el derecho al agua que trae consigo características y una
protección especial, ya que nuestra legislación peruana en el día a día ve nuevas perspectivas de constitucionalización, nuevos alcances doctrinarios jurídicos y la visión del derecho en nuestro ordenamiento jurídico, se ve enriquecido e influenciada más por la doctrina y legislación internacional.
1.1.2 FORMULACION DEL PROBLEMA
¿Como influye el Derecho de acceso al agua potable establecido en la
Constitución Política del Perú en el derecho de uso primario del agua en el distrito de Huayucachi el año 2018?