UNIVERSIDAD CATOLICA REDEMPTORIS MATER

Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales

Métodos de Resolución Alterna de Conflictos

Nombre: Ximena de los Ángeles Sánchez Manzanares

Fabio Manuel Ayerdis Olivero
Fernando Mojareth Suarez Olivas
Camilo Fernando Quintanilla Rocha

Tema: DIRAC – Dirección de Resolución Alterna de Conflictos

Docente: Iván Ortega Gurdián

Fecha: 07 de marzo, 2023

 DIRAC
DIRECCIÓN DE RESOLUCIÓN ALTERNA DE CONFLICTOS

En la sociedad los conflictos y roces forman parte de la vida diaria, lo que genera
enfrentamientos e intereses contrapuestos entre las personas en general, quienes
deben aprender a solucionarlos de una forma pacífica, sin que medie la violencia ni
otros factores destructivos de la calidad humana.
Desde el año 2005, Nicaragua, cuenta con una Ley de Mediación y Arbitraje (Ley 540),
la que representa un medio de participación ciudadana en la búsqueda de soluciones
a los conflictos que surgen por la diferencia de opinión entre as personas ante
determinada situación, fomenta la creación de una cultura de paz basada en la relación
armónica de los sujetos, lo que hace innecesario, acudir a la justicia forma.

Tradicionalmente la forma utilizada para la solución de conflictos ha sido a través de

los órganos jurisdiccionales integrado por expertos jurídicos, que emiten un dictamen
resolutivo según criterio y aplicación de nomas jurídicas. Este mecanismo, se ha
caracterizado por ser adversarial, resolutivo, desarrollado bajo el esquema
ganador/perdedor, formal y de escueta participación e incidencia de las partes en el
proceso y resolución del conflicto.

En la búsqueda evolutiva, la humanidad para poder subsistir o defender sus derechos

básicos, ha creado distintos métodos o formas de resolver los conflictos que se
presentan. El origen de la resolución alterna de conflictos está íntimamente ligado con
la necesidad de los disputantes de participar directamente en la búsqueda de
soluciones integrales a sus conflictos. En este contexto, los medios alternos son una
opción diferente a las tradicionales.

La Dirección de Resolución Alterna de Conflictos es una entidad dependiente de la

Corte Suprema de Justicia, de competencia nacional y de carácter administrativo,
encargada de dirigir, regular, promover y supervisar la aplicación y uso de los
métodos de resolución alterna de conflictos.

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Misión DIRAC:
Brindar servicios especializados de mediación, conciliación y arbitraje de manera
imparcial, rápida, confidencial y gratuita a las personas naturales y jurídicas, que
buscan resolver sus conflictos en materia civil, propiedad, mercantil, penal, familia y
en cualquier otra cosa que la ley establezca; asimismo, se encarga de acreditar y
supervisar a los Centros Administradores de Métodos de Resolución de Conflictos, y
de esta manera, se promueve el acceso a la justicia, a una cultura de paz y de seguridad
jurídica.

Visión DIRAC:
Ser reconocida a nivel nacional como una dirección de la Corte Suprema de Justicia
fortalecida y ampliada en la prestación de sus servicios, los que se distinguen por su
alta calidad, transparencia, legalidad, eficiencia, eficacia y un enfoque de mejora
continua, desarrollando servidores públicos altamente calificados con vocación de
servicio y calidez humana.

Antecedentes:
La DIRAC gestionó la firma de un Convenio de Cooperación Interinstitucional con el
Institute for Mediation and Conflict Resolution (IMCR) de Nueva York, Estados
Unidos.

En base a los términos de dicho Convenio se ha logrado un valioso apoyo en relación

a los cursos de capacitación en mediación y arbitraje.
De igual manera ha establecido coordinaciones de colaboración con la Escuela
Judicial, Defensoría Pública, Programa de Facilitadores Judiciales Rurales,
Procuraduría General de Justicia, Ministerio Público, Policía Nacional, Programa de
Ordenamiento de la Propiedad (PRODEP) y Asociación de Capacitadores en
Mediación (Acapem).

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La Dirección de Resolución Alterna de Conflictos (DIRAC), cuenta con 5 Salas de
Mediación Civil y de Familia con 11 mediadores, ubicadas en su sede central y 2
mediadores en materia de familia en dos departamentos. 24 salas de mediación penal
ubicadas en las Delegaciones y Distritos de la Policía Nacional con 20mediadores, de
estas son 11 salas ubicadas en Managua y 8 en las cabeceras departamentales.
Totalizando 30 Salas de Mediación y 31 Mediadores al servicio de los usuarios que
requiere de los servicios que brinda la institución.

Objetivo General:
Contribuir al acceso efectivo a la justicia de las personas en general, en especial
aquellas en condición de vulnerabilidad a través de los servicios de mediación,
conciliación y cualquier otro método de solución de conflictos que brinda la
institución, para posibilitar la solución de los conflictos de manera rápida,
confidencial, con calidad y calidez, a fin de evitar la judialización de las controversias,
al tiempo de promover el diálogo y la negociación en la forja de una “Cultura de Paz”.

Objetivos Específicos:
1. Prestar el servicio de métodos alternos de solución de conflictos con
profesionalismo, de forma rápida, confidencial, con calidad y calidez a las
personas en general, en especial aquellas en condición de vulnerabilidad.
2. Avanzar en la cobertura de los servicios de la DIRAC a nivel nacional en
cumplimiento al Plan Decenal del Poder Judicial.
3. Promover y difundir los métodos alternos de solución de conflictos a través de
la capacitación, los medios de comunicación y otras estrategias para sensibilizar
y potenciar su utilización y contribuir al cambio de paradigma: de una cultura
de litigio a una cultura de diálogo y paz.
4. Acreditar y supervisar a los Centros a los Centros Administradores de MASC
conforme la ley de la materia.

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Organigrama:

Marco Jurídico:

La DIRAC fue creada de conformidad con los numerales 1, 14, 164 de la Constitución
Política (año 2000) y los numerales 2, 16 y 64 de la Ley Orgánica del Poder Judicial,
para concretizar los fines y objetivos de la aplicación de la ley 278 Ley de la Propiedad
Reformada, Urbana y Agraria, que en su artículo 50 establece la mediación (o
conciliación) y en el artículo 59 el arbitraje, para la solución de los conflictos relativos
a la propiedad originados en las circunstancias que se establece en el artículo 1 de la
misma.

La Ley No. 260, Ley Orgánica del Poder Judicial, promulgada en 1998 que en su art.
94 prevé la mediación en los procesos de familia, civiles, mercantiles, agrarios y
laborales, en la que se dispone: “En todos los casos en que se presenten demandas de
Familia, Civiles, Mercantiles, Agrarias y Laborales en los juzgados respectivos, previo
a cualquier actuación o diligencia, el juez convocará dentro del sexto día a un trámite
de mediación entre las partes, las que podrán estas asistidas por abogados…”

La Ley No. 406, Código Procesal Penal, señala el uso de la mediación previa o durante
el proceso, para casos como faltas, delitos imprudentes o culposos, delitos

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 patrimoniales entre particulares sin violencia o intimidación y delitos sancionados con
penas menos graves.

Esta ley también contempla la posibilidad de que se establezcan centros de mediación y

arbitraje, privados y públicos, cuyos servicios podrán ser a título oneroso o gratuito y
esto da la oportunidad a las personas que tienen problemas que puedan ser mediados,
de poder acudir a estos centros y resolver su conflicto de manera extrajudicial sin tener
que llegar a los juzgados, donde se les dicta una sentencia y siempre habrá un ganador
y un perdedor. De esta forma se estará brindando servicios a la población que
contribuirá a descongestionar los despachos judiciales. A su vez otorga a DIRAC la
facultad de acreditar a dichos Centros Administradores de Métodos de Resolución de
Conflictos.

En el año 2014 con la entrada en vigencia de la última reforma a nuestra Constitución

Política, específicamente en el Art. 160, se dispone que la administración de justicia
reconoce la participación ciudadana a través de los líderes tradicionales de los pueblos
originarios de la Costa Caribe y los Facilitadores Judiciales en todo el país, como
métodos alternos de acceso a la justicia y resolución alterna de conflictos, todo de
conformidad con la ley.

Con esta disposición Constitucional, se institucionaliza una de las opciones que ofrece
el Poder Judicial como son los Facilitadores Judiciales que también brindan el servicio
de mediación conforme lo dispuesto en las Leyes de la materia.

La Ley 902, Código Procesal Civil de Nicaragua, publicada el 9 de octubre del presente
año y que entrará en vigencia en octubre del próximo año, se reconoce a la Dirección de
Resolución Alterna de Conflictos como entidad rectora de los Métodos RAC, al señalar
que es la que autoriza y supervisa a los Centros Administradores de Métodos de
Resolución Alterna de Conflictos; y que el uso de dichos métodos se hará en nuestra
Dirección y los centros mencionados.

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La variedad de leyes en las que se contempla el uso de algún método alterno de
resolución de conflictos, demuestra una marcada tendencia del Poder Legislativo,
compartida y promovida igualmente por el Judicial y el Ejecutivo, de abrir espacios de
diálogo y concertación que permitan a la población contar con mecanismos pacíficos,
creativos, rápidos y eficientes para la solución de sus conflictos.

Ley 540, Ley de Mediación y Arbitraje, publicada el 24 de junio del 2005, en la Gaceta,
Diario Oficial Nº 122, que en su Art. 1 establece: "Toda persona natural o jurídica
incluyendo el Estado, en sus relaciones contractuales, tiene el derecho a recurrir a la
mediación y al arbitraje, así como otros procesos alternos similares, para solucionar sus
diferencias patrimoniales y no patrimoniales, con las excepciones que establece la
presente Ley".

Deberes de la persona mediadora:

Cumplir con las normas éticas establecidas por el marco jurídico que rige la
DIRAC.
Excusarse de intervenir en los casos que le represente conflictos de intereses.
Informa a las partes sobre la mediación, así como sus derechos y de los efectos
legales del mismo.
Informar a las partes del carácter y efectos del acuerdo de mediación.
Ser imparcial hacia todas las partes. No participar como asesor, testigo, árbitro
o abogado en procesos judiciales posteriores, referidos al mismo asunto en el
cual ha actuado como mediador.
Mantener la confidencialidad sobre lo actuado en la mediación.

Habilidades y destrezas de las mediadores y mediadores:

Comprender y aplicar las etapas de la mediación.
Facilitar la comunicación y saber escuchar.
Ayudar a controlar las emociones de las personas.
Equilibrar el poder.

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Saber parafrasear y reenfocar las posiciones de las personas.
Evaluar e identificar intereses y necesidades.
Empatía, es decir, asistir a las personas a reconocer y comprender sus
necesidades e intereses.
Elaborar opciones a través de lo sugerido por las partes.
Redactar acuerdos y saber remitir a otros servicios.

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 CONCLUSIÓN

La DIRAC es una institución que vino a aliviar la congestión judicial presente en el

sistema al solucionar problemas mediables o conciliables, evitando así que casos de
solución relativamente fácil saturen el sistema siendo realmente efectivo brindando
asesoramiento y acompañamiento a las partes de manera imparcial, gratuita y segura.
Beneficiando a la comunidad y a la sociedad en sí, consideramos importante la
existencia de esta ya que busca soluciones negociadas a problemas del día a día tales
como deudas, demás conflictos civiles y penales (menos graves).

Nos parece importante la tarea de los facilitadores judiciales ya que al estar presente
en la comunidad ayudan desde dentro de esta a los problemas comunes presentes en
esta como deudas menores, conflictos entre adolescentes, problemas relativos a
propiedades y cosas por el estilo. Asesorando a los miembros de esta y dando solución
a este tipo de problemas.

De igual manera, recalcamos la importancia que tiene el hacer de conocimiento de

todas las personas las ventajas que tiene el resolver los conflictos a través de un
método alterno, consideramos que en nuestro país se minimiza el alcance que pueden
tener los mismo y es por ello que las personas acuden ante la vía judicial, creyendo
que únicamente por dicha vía se tendría un resultado favorable, cuando queda claro
que a través de los métodos alternos se busca dicho resultado en donde ambas partes
que se encuentran en conflicto se beneficien del mismo, dejando a un lado la teoría de
que siempre hay un ganador y un perdedor.