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De la vigilancia convencional

ARTIGO ARTICLE
al monitoreo participativo*

From conventional surveillance


to participatory monitoring

Jaime Breilh 1

Abstract There is a need to transform health Resumen La necesidad de transformar el mo-


monitoring from an instrument of a superfi- nitoreo de la salud de un instrumento funcio-
cial and passive insight of health, into a tool nal al sistema dominante de poder en una her-
for critical health assessment, advocacy and ramienta del poder colectivo, y de negociación
collective empowerment; conventional health del desarrollo de la salud laboral y el bienes-
surveillance, in other words, must be convert- tar, implica la urgente transformación de la
ed to active community driven monitoring. Of- vieja vigilancia epidemiológica en un monito-
ficial information systems are usually describ- reo participativo. Debe superarse el sistema
ing isolated “disease factors” and associated convencional de información en salud, que ob-
morbidity outcomes, instead of analyzing the serva fundamentalmente los “factores de en-
generative processes that make part of the com- fermedad” y sus efectos mórbidos aislados,
plex determination of health. Subordinated so- invisibilizando los procesos de determina-
cieties have undergone a historical process of ción integrales. Este trabajo analiza el proceso
assault to human social and health rights; na- de derrota de los derechos sociales y laborales,
tional and international economic exploita- lo cual sitúa el desafío planteado en un esce-
tion and political-cultural domination have nario de profundo retroceso social y asalto a
produced an scenario of profound inequity and los derechos conquistados por los/as trabaja-
health deterioration which demand a more dores/as en años de lucha. Con el propósito de
penetrating knowledge and information of esclarecer dicho argumento, al autor comienza
health scientists and experts. In the face of those contrastando los modelos de vigilancia clási-
needs, this papers exposes the flaws of tradi- cos, algunas propuestas transicionales, hasta
tional surveillance and the potentialities of arribar al monitoreo participativo. La aplica-
new approaches of health monitoring, based ción de la categoría “perfil epidemiológico”
1 Centro de Estudios
y Asesoría en Salud (CEAS).
on the new conceptual and practical frame- permite sistematizar los dominios y dimensio-
Asturias N2402 y G. work of critical epidemiology nes del monitoreo y establecer los sujetos so-
de Vera (La Floresta), Key words Participative health monitoring, ciales de esa mirada crítica e intercultural del
Quito, Ecuador.
jbreilh@ceas.med.ec
Traditional surveillance, Critical epidemiolo- pueblo sobre su salud, mediante la construc-
* Trabajo basado en la gy, Epidemiological profile ción de una matriz de procesos críticos.
ponencia a la Conferencia Palabras-clave Monitoreo participativo, Vi-
sobre Salud en el Trabajo
y Ambiente: Integrando
gilancia de la salud, Epidemiología crítica, Per-
las Américas – Salvador fil epidemiológico
(Brasil), junio 9 del 2002.
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Breilh, J.
Introducción del Norte y del Sur el fundamentalismo liberal
nos ha arrojado hacia una absurda carrera, en
La propuesta que se expone en estas páginas es la que los países compiten, en realidad, por cual
la de transformar el monitoreo de la salud de va a llegar primero a ser el peor en términos hu-
un instrumento funcional al poder, hacia un manos para lograr la mayor tasa de explotación,
instrumento de poder colectivo para la preven- tanto del ser humano, como de la naturaleza.
ción profunda. La sociedad capitalista hace varias décadas
Es definitiva la necesidad de dar un salto dejó de ser el escenario de esa clásica explota-
desde la vigilancia convencional al monitoreo ción de la fuerza de trabajo y extracción de una
participativo y, en los momentos actuales, ese tasa de plusvalía, mediada por condiciones bá-
paso implica: comprender el escenario históri- sicas de seguridad laboral y bienestar social;
co de nuestros países y preguntarnos si lo que ahora se trata de un sistema que agudizó los
queremos hacer es vigilar pasivamente los indi- términos de la explotación y la dominación so-
cadores de la derrota de los derechos laborales cial, al punto que ha degradado la subsistencia
o más bien orientar las actividades del monito- a lo mínimo y ha creado la imposibilidad es-
reo hacia un proceso participativo de empode- tructural para una reproducción social y ecoló-
ramiento de nuestras colectividades; en segun- gica sustentable.
do lugar, implica reconocer que la vigilancia En otros textos hemos explicado cómo a
convencional de “factores de enfermedad” debe nuestro entender se llegó a este retroceso pro-
dar paso a un monitoreo de determinantes de fundo de los derechos humanos, sociales y es-
salud; y finalmente, implica buscar en casos pecíficamente laborales que ahora confronta-
concretos de aplicación el saber y la experien- mos (Breilh, 2003a e b).
cia necesarios para avanzar. En un primer momento de la sociedad exis-
A lo largo de esta breve exposición desar- tió un sujeto comunitario. Eran épocas en que
rollaremos dicha idea y refrescaremos argu- los sujetos sociales operaban en función de va-
mentos a favor del monitoreo participativo que lores de uso, que satisfacían necesidades es-
fuera propuesto desde hace varios años por al- tablecidas por conveniencia colectiva. En esos
gunos núcleos en América Latina, y a la cual tiempos ni la división sexual del trabajo, ni las
dediqué un capítulo entero de mi libro Nuevos diferencias de género, ni los contrastes étni-
conceptos y técnicas de investigación (Breilh, cos provocaron desigualdades importantes; no
1997). En los momentos actuales, esas ideas porque se hayan tratado de sociedades ideales,
vuelven a cobrar especial urgencia porque en- sino porque el grado de desarrollo exigía equi-
frentamos unos de los períodos históricos de dad para la supervivencia.
mayor necesidad de recuperación de la volun- La conquista y la instauración de la socie-
tad colectiva para defender una salud seria- dad colonial fracturó el sujeto comunitario, y
mente afectada en todo el globo, y aportar a la los atomizó en sujetos privados, guiados por
construcción solidaria de ese “otro mundo po- el afán de atesoramiento mercantil. Así fueron
sible”, que sólo podrá serlo, activando tanto al rotos el derecho igualitario y los principios
Norte como al Sur del Río Grande, a lo largo y de equidad, y junto con ellos se derrotó la con-
ancho de las Américas una gestión democrática cepción armónica del manejo de los bienes de
y contrahegemónica, como alternativa a la ge- la Naturaleza. La expropiación del oro y de la
rencia funcionalista que el modelo socioeco- tierra, y la explotación feudal de la fuerza de
nómico actual ha impuesto. trabajo fueron la base de la economía del mer-
cantilismo colonial, provocándose la primera
derrota de los derechos humanos y de la necesi-
Monitoreo de la derrota dad como eje de la construcción social. En la en-
o de la construcción de otra salud traña de esa primera etapa de la inequidad hu-
posible (Salud en el trabajo y el mana, se incubó una concentración de poder
monitoreo en el capitalismo actual) que reprodujo una triple jerarquización de la
calidad de vida y del trabajo: la de pertenencia
Tres pasos hacia la barbarie: el asalto histórico a una clase; la de pertenencia a una etnia; y la
a los derechos humanos y laborales de pertenencia a un género. Triple inequidad
social que para reproducirse requería de un Es-
Hemos insistido en que nadie duda en la tado uninacional y la uniculturalidad como for-
actualidad que en las llamadas “democracias” ma de cultura oficial.
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Ya entrada la época de nuestras repúblicas, ra más que nunca la vida humana alrededor del
sucedería la segunda gran derrota de los dere- afán productivo, y la producción alrededor del
chos humanos y de la necesidad como principio sediento cálculo de intereses de los monopo-
de definición social, cuando las mujeres y hom- lios privados, las actividades productivas me-
bres pobres perdieron el derecho a la propie- nosprecian los impactos de tal actividad sobre
dad de los bienes fundamentales de la sociedad la vida (humanidad y naturaleza), de ese modo
industrial. Aunque el llamado “sujeto obrero” el crecimiento económico está impedido de ser
logró – sobretodo en las sociedades industria- una vía de desarrollo humano. Es tan serio el
lizadas – mantener con su lucha la vigencia de retroceso de las políticas laborales y sociales or-
algunos derechos laborales, sociales y cultura- questado por el Estado neoliberal que Galeano
les básicos, aquel nuevo orden económico no se pregunta ahora con incisivo humor, si los
permitió, con todo, que la política de pleno derechos de los trabajadores no serán un “tema
empleo se extendiese a las naciones periféricas para arqueólogos”.
y se difundiesen más equitativamente los be- Y no siempre la dominación se impone con
neficios. Bajo la férula de relaciones neocolo- violencia pues ahora buena parte de la fuerza
nialistas, esas naciones se tornaron exportado- laboral acepta esas reglas del juego. De ahí sur-
ras de productos primarios y se vieron impe- ge una pregunta clave: ¿Cómo entender la pa-
didas de asumir a fondo la industrialización, radoja de una masa que se ahoga en la necesi-
con lo cual sólo un modesto porcentaje de su dad y la pobreza sin tener claridad sobre el ca-
población conquistó los derechos humanos y rácter explotador del sistema en su conjunto?
sociales del antes mencionado Pacto de la Se- Existen dos tipos principales de explicación,
gunda Posguerra (Frei Betto, 2002). En esas para autores como Negri & Hardt (2000) el
condiciones se consolidó la subordinación no cambio esencial que define la época y sus com-
sólo de los trabajadores como clase, sino de los portamientos sería el paso de una fase de do-
sujetos étnicos – indígena y afroamericano – y minio social mediante aparatos que producen
del sujeto femenino, mediante la instauración y regulan costumbres, hábitos y prácticas, hacia
de un aparato educativo y políticas culturales una sociedad en la cual los mecanismos de tal
eurocéntricas y androcéntricas. dominio se ejercen a través de los cuerpos y las
Finalmente, desde mediados de los años 80 mentes de los sujetos individuales; algo así co-
se acentuó el carácter concentrador y monopó- mo una extrapolación de la “subsunción real”,
lico de la economía y se abrió el nuevo período originalmente descubierta por Marx en el con-
de la mercantilización global. La maquinaria trol de los trabajadores por los mecanismos in-
neoliberal y sus mecanismos de recomposición ternos del proceso productivo, hacia la cultura
productiva han provocado un cataclismo eco- y los comportamientos en general; un poder
nómico social y laboral, y para sostenerse re- ...ejercido por medio de máquinas que, directa-
nuevan la estrategia del terrorismo oficial; sólo mente, organizan las mentes (en sistemas de co-
que ahora la opresión no se presenta en la for- municaciones, redes de información, etc.) y los
ma directa de las dictaduras, sino que se ejerce cuerpos (en sistemas de bienestar, actividades
a través de la administración del miedo y la in- monitoreadas, etc.) ... (Negri & Hardt, 2000).
seguridad como forma de gobierno. Comenzó Lo único que existiría ahora es una “multitud”
así la tercera y más profunda derrota de los dere- diversa y dispersa en el globo, que golpearía al
chos humanos y una polarización sin atenuan- Imperio de manera desarticulada. De acuerdo
tes de la sociedad. Es un modelo social perver- con esa lectura, los(as) trabajadores(as) se en-
so, porque aunque teóricamente se esgrime co- frentarían a un poder que está en todas partes
mo una salida a los errores del keynesianismo y y a la vez en ninguna, no tendrían frente a sí de
como un proyecto para colocar la riqueza acu- manera tangible y concreta ni a una empresa,
mulada por las empresas al servicio de la gente, ni a un Estado, como tampoco formarían un
lo que en verdad se ha montado es una maqui- sujeto social de clase y deberían más bien disol-
naria de demolición de los derechos, un meca- verse en la lucha de la multitud.
nismo institucional y jurídico para imponer Pero otros autores han desnudado los mo-
políticas de minimización de la canasta fami- numentales errores de ese tipo de análisis y han
liar a niveles de hambre e institucionalizar la rescatado una visión verdaderamente contra-
apropiación fraudulenta de los recursos estra- hegemónica (Borón, 2002). Desde esta pers-
tégicos, de los fondos de ahorro y jubilaciones pectiva la supuesta desaparición de los estados
de los ciudadanos. Al haberse constituido aho- nacionales (Mészáros, 2001) y de los de nexos
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Breilh, J.
que las empresas transnacionales conservan pueblo, interculturalmente, la manera de lo-
con éstos es sólo una ilusión pues, lejos de per- grar la humanización de los modos de trabajo
der toda territorialidad y nexo con Estados con- y consumo, de nuestras relaciones con la ma-
cretos ...las transnacionales han constituido una dre naturaleza; para potenciar los valores cul-
verdadera dictadura mundial, con un mando turales que resalten la dignidad, valoricen la
centralizado, dependiendo de sus propios Esta- cultura propia y permitan el empoderamiento
dos. Es el caso, por ejemplo, de las cien trasnacio- de la gente, con su plena participación en un
nales más importantes de la lista de la revista sistema de salud conducido por las colectivi-
“Fortune”, publicación que encontró que todas dades.
ellas se habían beneficiado de intervenciones es- La salud colectiva reúne un poderoso arse-
pecíficas de los Estados nacionales donde tienen nal de instrumentos para la comprensión de los
su base, mediante subsidios que provienen del procesos determinantes de la salud de todos los
contribuyente fiscal y del desangre del aparato grupos sociales. Nuestro aporte desde la Epide-
productivo público en beneficio de las corpora- miología Crítica Latinoamericana ha sido el de-
ciones (Corbière, 2002). sarrollar un sistema de categorías y una pro-
Los centros de poder monopólico no son puesta metodológica que permitan entender
virtuales y difusos; esa es sólo la apariencia que todas esas dimensiones de la determinación de
ofrece el carácter virtual de sus redes de comu- la salud inscritas en los modos de vida típicos
nicación instantáneas; ese es el nuevo fetichis- de cada grupo. Hemos podido demostrar que
mo de la comunicación virtual de las empresas. el perfil epidemiológico de un grupo es en de-
Aquellos centros de poder tienen una organici- finitiva el movimiento de la contradicción en-
dad y una correspondencia territorial; están tre los procesos protectores y destructivos que
enclavados en los aparatos de Estados concre- operan en su modo de vida característico, y que
tos; se respaldan en ejércitos regulares o merce- a la vez, ponen límites posibles a los estilos de
narios que tienen fuentes de financiamiento y vida individuales de las personas que lo inte-
centros de comando insertos especialmente en gran. (Se anexa la matriz de procesos críticos
los servicios de inteligencia y los ejércitos del que hemos elaborado para los(as) trabajadores
principal Estado imperialista – los Estados Uni- (as) de la floricultura para que se comprenda la
dos; las fuerzas policiales conforman aparatos utilidad del perfil epidemiológico en el estudio
represivos que subyugan toda movilización en y monitoreo de la salud de dicho grupo).
defensa del trabajo o el ecosistema; y finalmen- En la medida en que un sistema social co-
te, la hegemonía y el control cultural también mo el presente instituye la proliferación y pro-
se ejercen desde maquinarias, medios de co- fundización de formas de inequidad y el consi-
municación y aparatos culturales, cuyos cen- guiente deterioro de los derechos humanos en
tros de conducción radican en dicho Estado. esos modos de vida de los trabajadores, enton-
En un escenario de esas características es ces se instituyen mecanismos de deterioro de
urgente e inevitable activar un pensamiento su salud, que afectan sistemáticamente los pa-
crítico acerca de los problemas de la salud en el trones fisiológicos y las normas de reacción ge-
trabajo, y para eso es indispensable recuperar nética de los organismos y funciones fisiológi-
una ideología emancipadora. La perspectiva cas de sus integrantes, apareciendo entonces
desde la cual nosotros trabajamos es la del neo- patrones de morbilidad y un sobre-envejeci-
humanismo popular, y es con base de ese pen- miento en esa población. Por el contrario, cuan-
samiento que empujamos un paradigma dis- do se abren posibilidades de disfrute de una
tinto de las ciencias de la salud y de las técnicas equidad que permite la satisfacción de los de-
como el monitoreo. rechos, con lo cual se potencian los soportes
No tiene sentido seguir con esa inocua y re- personales y familiares, así como las defensas y
duccionista vigilancia epidemiológica que se posibilidades fisiológicas, entonces se eleva la
brinda ingenuamente para vigilar, sin cuestio- calidad de vida fisiológica y genética, y apare-
nar, los efectos de la derrota coyuntural de los cen patrones de salud mental y física, así como
trabajadores en el mundo. Tenemos que poner mejores índices de sobrevivencia. La vida y la
en marcha todo el arsenal científico y tecnoló- salud de las(os) trabajadoras(as) dependen de
gico forjado por muchas generaciones de cien- ese movimiento entre los procesos que nos
tíficos y profesionales de la salud colectiva, ac- protegen y los que nos deterioran, y el desar-
tivar todos los núcleos del saber, todas las bases rollo de todos ellos depende de la capacidad de
de datos, para desentrañar, junto con nuestro disfrute de los derechos humanos.
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En esta concepción que estamos defendien- lógica; el fundamento del monitoreo es la epi-
do no hay cabida para una noción ingenua o demiología crítica y la construcción intercultu-
puramente natural de los procesos biológicos, ral y planeación estratégica de los procesos crí-
pues éstos no son puramente biológicos sino ticos del monitoreo.
socio-biológicos y, en última instancia, expre- En tercer lugar desde el punto de vista de la
san en nuestros cuerpos lo que sucede en el or- gestión, o de las implicaciones para la acción, la
den social. No hay cabida, tampoco, para la no- vigilancia clásica se concibe verticalmente des-
ción de la salud como algo esencialmente per- de el aparato del Estado, implicando una posi-
sonal y que depende primordialmente de me- ción pasiva de los(as) trabajadores(as) y en el
didas curativas y de todo este conjunto de pro- mejor de los casos una colaboración marginal
cesos del perfil epidemiológico se desprenden por parte de la gente; este enfoque se realiza ba-
las dimensiones y contenido que deben abarcar jo una lógica centralizada, que conlleva además
el monitoreo de la salud de los trabajadores. en la práctica una mayor ineficiencia y costos,
Por lo dicho, no podemos encerrarnos en el cobertura limitada, un flujo apenas ascendente
simple perfeccionamiento técnico de la llama- de la información y una construcción sólo aca-
da vigilancia, sino ir hacia una construcción démica del conocimiento. Mientras que en el
distinta de un verdadero sistema de inteligen- modelo contrahegemónico, el monitoreo es
cia social, construido participativamente sobre parte de una gestión cuyo eje es la planeación
la salud y sus determinantes. estratégica y el control colectivo de la gestión.
Un desarrollo detallado de nuestra propues-
ta – para cuyo análisis detenido remitimos al
lector a varios escritos anteriores (Breilh, 1997; El monitoreo como elemento
1999a e b; 2002) – rebasa los límites de esta pre- de un paradigma renovado de gestión
sentación sucinta, pero caben aquí destacarse
tres puntos que consideramos deben resolverse La gestión colectiva: definición
en el camino de implementar el nuevo modelo: de sujetos, necesidad, calidad y control
a) contrastar con claridad el modelo clásico de
vigilancia con el monitoreo; b) integrar el mo- Con la finalidad de remontar los estrechos
nitoreo en un paradigma renovado de gestión límites de una gestión tecnocrática, hemos pro-
en salud; y c) incorporar en el modelo de cono-
cimiento la construcción intercultural como ve-
hículo de una participación colectiva.
Figura 1
Diagrama de perfil epidemiológico.
Vigilancia de factores
de enfermedad versus monitoreo Perfil Epidemiológico
de determinación de la salud

La distinción se establece primero por la forma


de concebir el objeto salud. Mientras la vigilan- Sociedad Procesos Protectores Procesos Destructivos
general
cia convencional concibe al objeto salud como
un proceso esencialmente individual (casos),
que se asume por el efecto negativo (enferme-
Modos de vida
dad); en cambio el monitoreo comprende los (Grupos)
procesos críticos de una colectividad (determi-
nantes protectores y destructivos de la salud),
que se dan en modos de vida grupales y dentro Estilos de vida
de estos las expresiones en los estilos de vida fa- (Individuales)
miliares personales y las condiciones de los or-
ganismos y psiquismo individuales (Figura 1).
En segundo lugar, mientras la vigilancia Organismo Fisiología Fisiopatología
convencional interpreta la génesis de las enfer- Psiquismo Bienestar & Decisión Malestar & Fracaso
medades desde una visión empírica reduccio-
nista, enmarcada en el paradigma positivista,
que sólo le permite llegar a la prevención etio-
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Breilh, J.
puesto debatir mecanismos para enlazar la ges- las distintas perspectivas o sujetos que entran
tión del conocimiento institucional con la ges- en interacción (autenticidad expresiva) (Haber-
tión colectiva del saber. Dicho enlace tiene fun- mas, 1998; Ayres, 1997).
damentos teóricos e implicaciones prácticas pa- Una gestión en la que converjan un pensa-
ra la gestión en su conjunto. miento crítico sobre la gestión y una población
Los avances de las ciencias administrativas organizada e informada adquieren un poder
aplicadas al desarrollo y las nuevas teorías so- decisivo para transformar los problemas y para
bre la gestión – y la gerencia como una de sus mantener un proceso de avance del conoci-
herramientas – han determinado la creciente miento y del saber. Y la planeación del saber
necesidad de discutir las articulaciones entre el juega un papel clave tanto en la construcción
esfuerzo social y la gerencia. Y aquí vuelve a de dicho pensamiento crítico, cuanto en el im-
aparecer la necesidad de un debate esclarecedor. pulso de una participación informada.
Hemos sostenido en varias oportunidades La gestión colectiva puede canalizarse bási-
que el monitoreo participativo constituye, jun- camente a través de tres mecanismos: la pla-
to a la planeación estratégica y al control so- neación estratégica; el monitoreo estratégico; y
cial, un pilar de una gestión innovadora de la el control social sobre la gestión (Figura 2).
salud. La planeación estratégica es el proceso de
En el campo del desarrollo social nos ve- construcción de un proyecto colectivo, con au-
mos avocados a abrir la gestión a la colectivi- tarquía y claridad de objetivos estratégicos, en
dad y enlazar no sólo conceptualmente sino un escenario de inequidad social y bajo un es-
técnicamente los procesos de la gestión del co- tructura de poder (de clase, género y etno-cul-
nocimiento. tural). Es un movimiento de gestión del saber
En esa misma dirección, vale recordar los y de intervención organizada de dicho colecti-
criterios de validez de cualquier discurso del vo en busca de metas sociales democrática-
conocimiento, denominados por Habermas mente definidas. Ese movimiento implica va-
como “niveles de validación intersubjetiva”: rios momentos que no se realizan de manera
a) la capacidad del discurso para favorecer la lineal o mecánica, pero cuyo desarrollo va gra-
implementación de condiciones favorables pa- dándose según las demandas de intervención y
ra el éxito de proyectos sociales definidos y ac- gestión del saber: 1) momento de construc-
ciones legítimas a los mismos (validez norma- ción de una matriz de procesos críticos (en la
tiva); b) la proposición de enunciados que pue- que se formulan los elementos del perfil epi-
dan ser compartidos por distintos sujetos (va- demiológico sobre los que se enfoca el conoci-
lidez proposicional); y c) su capacidad para es- miento y la acción; relacionados a grupos cla-
tablecer una comunicación efectiva y expresar ve y situados en un territorio social y ecosiste-
ma; 2) un momento explicativo en el que se es-
tablecen las relaciones determinantes y proce-
sos generativos de aquellos procesos críticos;
Figura 2 3) un momento político en que se esclarecen
Secuencia del disenõ participativo. los lineamientos y agenda de la acción, y se
analizan las fuerzas involucradas (favorables y
antagónicas); 4) un momento de análisis pro-
piamente estratégico en el que asumen las pri-
Matriz de procesos críticos (necesidad) oridades y las líneas de acción; 5) un momen-
to operativo.
El monitoreo participativo es la mirada per-
manente de la colectividad organizada sobre
Plan básico de monitoreo (calidad)
los procesos de los que dependen su bienestar,
su funcionamiento democrático y la reproduc-
ción de sus conquistas materiales, culturales y
Matriz de intervención, humanas. El monitoreo se realiza sobre indi-
contraloria social y evaluación cadores o procesos trazadores de cada uno de
(control) los dominios, dimensiones, determinantes es-
tructurales, procesos generativos y procesos es-
pecíficos de salud de los grupos involucrados
(ver matriz de procesos de intoxicación).
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El control social es participación concreta seguimiento de la construcción del proyecto
del pueblo organizado en la evaluación y ajuste colectivo y de los obstáculos que enfrenta. En
de los procesos en su conjunto, y en los escena- el marco de este monitoreo no puede enfocarse
rios de toma de decisiones, sobretodo en aque- solo la morbi-mortalidad sino el conjunto de
llos en que se decide sobre la asignación de re- los procesos de la matriz: procesos estructura-
curso y presupuestos. Dicha posibilidad se ejer- les, procesos generativos y, a la luz de aquellos
ce por medio de diversos canales y tanto en es- procesos específicos de la salud (no sólo de la
pacios locales, como regionales, cuanto nacio- enfermedad). Ver ejemplo de la matriz de into-
nales. Existen experiencias tanto en el país, co- xicación en la agroindustria florícola.
mo en otras sociedades latinoamericanas –
Brasil, Uruguay, Argentina, Venezuela y otras – La interculturalidad en la construcción
que demuestran que la participación del pue- de la “inteligencia popular”
blo no sólo contribuye a frenar la corrupción
estructurada que campea, ni sólo insume efi- En otro trabajo expusimos ampliamente la
ciencia en la gestión, sino que aporta en una importancia de la intersubejtividad en el de-
verdadera recomposición de la política. sarrollo del modelo praxiológico que propo-
nemos, en el marco del realismo dialéctico. Y
La gestión colectiva: como lo dijéramos entonces, nuestro análisis
¿Quiénes y cómo definen la necesidad, epistemológico implica un doble movimiento.
la calidad y el control de los Por un lado, la búsqueda consciente de articu-
procesos en un espacio laboral? lación de la epidemiología crítica a un modelo
de desarrollo emancipador; es decir, la procura
Son tres los parámetros básicos que definen de una configuración epidemiológica instru-
el carácter de una gestión: la necesidad; la cali- mental a dicho modelo – tarea que conlleva
dad y el control. (Figura 3) la construcción de una praxis orientada hacia
En la planificación normativa y en las enti- la equidad, contra el poder hegemónico y por
dades donde se impone una gestión vertical, la reestructuración y fortalecimiento de una
son los representantes del poder los que termi- construcción colectiva del saber. Una forma de
nan definiendo en última instancia lo que se ejercer la intelectualidad orgánica – en el sen-
necesita, la calidad de las acciones que se tolera tido gramsciano –, que se oponga a la desco-
y las formas de control de la gestión y su finan- munitarización e instrumentalización funcio-
ciamiento. Bajo esa perspectiva el monitoreo nal de dicho saber. En ese sentido, tiene que ser
solo es una vigilancia de los efectos de la acción un movimiento doblemente concatenado, tan-
del aparato institucional y de algunas de las to con la totalidad social, como con la locali-
funciones que realiza. En cambio bajo una ges- dad (Breilh, 2003b).
tión participativa y la planeación estratégica, el La interculturalidad es una relación estraté-
monitoreo es la mirada de la colectividad y el gica o dialógica entre culturas (dependiendo de

Figura 3
Parámetros básicos.

Planeación estratégica Necesidad

Monitoreo participativo Calidad

Control social Control


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Breilh, J.
las relaciones sociales entre los sujetos involu- to de generación del conocimiento (es el movi-
crados), con objeto y propuesta global integra- miento de génesis de productos del conoci-
dos, para construir contraconstruir/reconstruir miento, que incluye la elaboración de concep-
en el conocimiento de los procesos de la reali- tos y la realización de un método, mediante la
dad. La interculturalidad presupone equidad formulación de descripciones y explicaciones
de derechos; reconocimiento y respeto por la en un escenario práctico), cuanto el de repro-
cultura de los(as) otros(as); así como reconoci- ducción del conocimiento (Figura 4).
miento de características sociales y metas estra- Pero además de la producción de conoci-
tégicas socialmente compaginadas. miento la planeación del saber incluye la ges-
Sobre la base de un trabajo intercultural se tión del conocimiento, que es la forma conciente
puede construir un multiculturalismo crítico y y planificada de uso y administración del co-
democrático, que involucra un programa, po- nocimiento de monitoreo producido. El moni-
líticas y movimiento nacido del reconoci- toreo no es otra cosa que una gestión de saber
miento de la diversidad y derechos culturales. estratégica y enfocada en la evaluación de ca-
Es la integración de varias culturas, por me- lidad (Figura 5).
dio del análisis intercultural, y en medio de En el proyecto EcoSalud que lleva adelante
una visión cultural solidaria, para la construc- el CEAS, se ha iniciado el proceso de construc-
ción de un proyecto común de democratiza- ción intercultural integrando saberes. Desde el
ción y equidad. lado comunitario mediante el aporte del cono-
La construcción intercultural del saber y de cimiento ecológico y la elaboración de mapas
un sistema de monitoreo no se reduce a que el comunitarios; bioensayos simplificados; y el
sujeto académico o el experto técnico capten y saber epidemiológico popular, registrado tam-
replanteen las evidencias constatadas y cons- bién mediante mapas de procesos destructivos
truidas desde otras culturas y otras formas de reconocidos por la colectividad. El conocimien-
producción de conocimiento, es más bien un to académico aportará los elementos que se
desafío para perfeccionar un proceso intercul- describen más abajo al hablar de la interdisci-
tural que permita, como diría Walsh (2001), plinaridad.
la traducción recíproca de conocimientos, la Gramsci puso de relieve hace muchos años
construcción conjunta del objeto de transfor- la importancia de la relación entre la colecti-
mación y del marco interpretativo, la aparición vidad organizada y sus intelectuales, y habló
de nuevas formas de análisis y la aparición de de que un proceso emancipador arranca sólo
conceptos renovados. Solo así podremos supe- cuando los intelectuales se hacen pueblo y el
rar el eurocentrismo e iluminismo que han ins- pueblo se encarna en un pensamiento emanci-
pirado la tarea de los “expertos occidentales” y pador de su intelectualidad. Una relación que
podremos construir un saber evaluador de la debemos sopesarla con atención pues cualquier
realidad en salud. relación entre un grupo de intelectuales y una
La pregunta correcta no se refiere a si po- población constituye una relación emancipa-
demos combinar en la producción de conoci- dora. Si el vínculo es entre una colectividad ca-
miento, la ciencia y el sentido común, sino in- rente de una actitud y pensamiento emancipa-
terrogarnos sobre la posibilidad de integrar el dor y un grupo de “expertos” con una mentali-
conocimiento académico con los otros sistemas dad funcionalista, lo mejor que puede aconte-
de saber complejos y altamente sistematizados cer es un proceso reformista o una activación
que resumen o acumulan una sabiduría funda- intrascendente. Mientras que si el vínculo se da
mental, tanto en la dimensión filosófica como entre una colectividad con un pensamiento
más factual e instrumental. De lo que se trata emancipador y una organización solidaria, y
es triangular el poder de observación y explica- unos expertos con un pensamiento y actividad
ción de esas fuentes en los proyectos de acción científica contrahegemónica, entonces si des-
concretos que llevamos adelante para impulsar pegan acciones con un profundo impacto trans-
el desarrollo humano. formador.
El movimiento del conocimiento evaluador Para dar vida a esa relación planteada el
de la calidad de la salud en una colectividad en- CEAS aplica este modelo al monitoreo partici-
tonces tendría varios momentos y espacios de pativo de la floricultura en una de las más im-
realización, e implicaría el interjuego de diver- portantes regiones de producción de flores cor-
sas lógicas. La producción del conocimiento de tadas del mundo. Sistema cuya explicación re-
monitoreo a su vez involucra tanto el momen- basaría los límites de este exposición y cuyos li-
945

Ciência & Saúde Coletiva, 8(4):937-951, 2003


Figura 4
La construcción participativa del saber.

Planeación del saber

(A) Producción (B) Gestión

Generación Reproducción Institucional De la colectividad


y gerencia del
conocimiento

Conocimiento Otro saber

Académico
("Occidental")

Ciencia de lo Concreto
Sistemas Míticos

neamientos fueron expuestos audiovisualmen- Para abreviar la explicación de construc-


te. Eso es lo que se está tratando de desarrollar ción interdisciplinaria en el proyecto EcoSalud
mediante los sistemas organizativos y de ges- se expone a continuación un cuadro donde pue-
tión que hemos explicado. den reconocerse las contribuciones especializa-
Nuestros esfuerzos representarán el lado das (Cuadro 1).
humano de la globalización que tendrá que se- Es decir la mirada sobre lo complejo re-
guir alimentándose del talento, la experiencia y quiere de la contribución de las distintas mi-
la tenacidad del trabajo que hacemos en Norte, radas académicas que dejamos expuestas, y de
Centro y Sur América gentes que junto a nues- éstas con las miradas surgidas de la sabiduría
tros pueblos cultivamos esa “otra salud posi- de las y experiencia de las colectividades. Claro
ble” que refleja la victoria de las fuerzas de la está, y como dijéramos antes, la coherencia del
vida sobre las fuerzas de la muerte. metadiscurso crítico que así puede construirse
debe ser el sentido emancipador. En otras pala-
La interdisciplinaridad crítica bras, desde una perspectiva crítica tendríamos
que integrar los elementos críticos emancipa-
Mas también en el lado académico la com- dores de todas las miradas y así conformar una
plejidad de nuestros objetos de conocimiento metacrítica del sistema social imperante y de la
requieren la mayor parte de veces una coordi- determinación de la salud.
nación interdisciplinaria. En el caso del ejemplo que hemos utilizado
La interdisciplinaridad es una relación si- de la floricultura, los ámbitos del problema re-
métrica, activa de colaboración sistemática en- basan las fronteras de una región y se abren al
tre disciplinas alrededor de una construcción/ contexto internacional, motivo por el cual se
deconstrucción/contraconstrucción de objeto abre la perspectiva del monitoreo al nivel inter-
de estudio. nacional (Figura 6).
946

Breilh, J.
Figura 5
Elementos para una construcción democrática de la gerencia en salud.

Planeación del saber

Gestion del conocimiento Gestión colectiva


(Espacio institucional) (Espacio de la colectividad)

• Generación colectiva • Determinantes económicos,


(general o por grupos culturales, y políticos
homogéneos – comunidades (Análisis contextual)
Construcción
de práctica)/individual
social de la
de un modelo de conocimiento
gerencia
flexible e interactivo; innovador;
formal/informal

• Estrategia de vigorización
de la producción y uso de
conocimientos (ambiente • Planeación estratégica
del conocimiento) • Monitoreo
• Control social
• Red de acceso/
Uso de conocimientos

• Representación (bases datos


– cualitativos/cuantitativos)

• Inserción (en productos/servicios)

• Transferencia de conocimientos/
prácticas

• Uso en decisiones

• Crescimiento cultural e incentivos

• Sistema de evaluación
(impacto y funcionalidad)

Finalmente, para ilustrar sobre la necesidad to duro y de lo que es una intervención eficaz;
de que la observación epidemiológica aborde no quiere ser apenas un nuevo arreglo de vie-
todos los dominios y dimensiones que hacen jas ideas y fórmulas funcionalistas, vestidas con
parte de la salud como objeto multidimensio- el ropaje seductor de una tecnología de punta
nal y contradictorio exponemos la matriz de (Breilh, 2003).
procesos críticos (Cuadro 2) que hemos em- Nuestros esfuerzos representarán el lado
pleado para organizar nuestro trabajo de inves- humano de la globalización que tendrá que se-
tigación e intervención. guir alimentándose del talento, la experiencia y
En definitiva, creemos que podríamos apli- la tenacidad del trabajo que hacemos en Norte,
car a la discusión sobre el monitoreo lo que di- Centro y Sur América gentes que junto a nues-
jéramos para la epidemiología en general: ...la tros pueblos cultivamos esa “otra salud posi-
Epidemiología crítica va en busca de una nueva ble” que refleja la victoria de las fuerzas de la
visión de la ciencia, de lo que es el conocimien- vida sobre las fuerzas de la muerte.
947

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Cuadro 1
Hacia una interdisciplinaridad crítica.

Dominio Proceso Crítico Disciplina


Lógica estructural determinante:

• Productiva Recomposición agroindustrial Economía agrícola


• Consumo Sistema de comercio internacional Economía
• Estado Desregulación Sociología
• Condiciones geoecológicas Pérdida de biodiversidad Ecología
Particular (obreros flores)

• Modos de vida y sus cambios Sistema productivo Economía agrícola,


y tipología tecnológica sociología

• Impactos culturales Transformación de cultura Antropología


agrícola tradicional
a cultural agro empresarial.
Modificación de patrones

• Formas organizativas Cambio de organización comunal Sociología, antropología

• Relaciones ecológicas Dinámica de los plaguicidas en el ecosistema Ecología


Perfiles de exposición y manejo ecológico Antropología, ecología,
epidemiología
Singular (estilos de vida) Procesos críticos de exposición Antropología,epidemiología
Estudio de los impactos humanos Epidemiología, laboratorio
(genotípicos y fenotípicos) clínico

Figura 6
Elementos para el monitoreo en ámbito internacional.

Floricultura: campos para investigación/monitoreo/certificación

Práctica empresarial
Condiciones de producción
Naturaleza y lógica: Trabajadores
Concentradora
(monopólica)
vs.
Redistributiva
Mercado (comércio)
Consumidores

Medio ambiente
(Manejo del ambiente, ecologia)

Acción internacional
Breilh, J.

948
Cuadro 2
Matriz de procesos críticos del perfil de intoxicación.

Dominios Dimensiones Determinantes estructurales Procesos generativos Procesos esp. de salud

Destructivos Protectores Destructivos Protectores

GLOBAL Lógica determinante

• Productiva • Recomposición • Producción justa y


ecológica
• Flexibilización • Maneo ecológico integrado

• Modelo de producción
y tecnológico de
la revolución verde

• Consumo • “Flor perfecta” • Consumo de flor justa y


ecológica

• Estado • Desregulación • Códigos protectores,


nacionales e internacionales

Condiciones geoecológicas • Distribución antitécnica • Asignación planificada


de uso de suelos de uso de suelos

• Deterioro de suelos • Protección composición


de suelos

• Pérdida de biodiversidad • Protección biodiversidad

(continua)
Cuadro 2 (continuación)

Dominios Dimensiones Determinantes estructurales Procesos generativos Procesos esp. de salud

Destructivos Protectores Destructivos Protectores

PARTICULAR Modos de vida

• Patrones de trabajo • Distribución de procesos • Deterioro mental y


nocivos por áreas: fisiológico del trabajador/a
Modelo productivo; MIP;
Subsunción o falta control Monitoreo y uso
del trabajador; focalizado de plaguicidas;
Alta exigencia cíclica y Organización y cogestión;
no periodos adecuados Equipo de protección (para
de reposo; tóxicos, térmica y ruido);
Extremos y fluctuación Programa técnico de
térmica; hidratación;
Deshidratación; Ejercicio físico cotidiano;
Movimientos repetitivos; Equipamiento ergonómico;
Forzamientos posturales; Programación de tareas
Transporte pesos; acorde con condiciones
Inadecuación ergonómica especiales de género
de puestos; (ejemplo: embarazo);
Ruido / vibraciones; Transporte seguro
Exposición / imposición
a plaguicidas

• Patrones de consumo • Limitación y deformación Régimen de reposo diario • Alta emisión y empleo de
alimentaria y periódico; sust. de capacidad de daño:
Perfeccionamiento Persistencia;
y educación continuada Bioacumulación;
Biomagnificación;
• Cosmovisión y perfil • Conformismo; pérdida Identidad personal y Potencialidad de
de subjetividad de identidad colectiva; transporte
Conciencia ecológica • Rutas de absorción
y social solidaria (ingestión, inhalación,
dérmica)
• Formas organizativas • Alineación, Organización y • Formas/grados de acción • Normas protectoras y
no organización participación conciente de tóxicos: modalidades del código
de conducta:
• Relaciones ecológicas • Contaminación Manejo ecológico Dosis: ALTA | BAJA  Sistema de seguridad
particulares


y protección;


Mecanismo: Nutrición adecuada;


PERMANENTE Régimen de reposo y
CRÓNICO  ejercicio físico protector
EVENTUAL • Perfil psico-comunitario

 y cultural protector


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Ciência & Saúde Coletiva, 8(4):937-951, 2003
Breilh, J.

950
Cuadro 2 (continuación)

Dominios Dimensiones Determinantes estructurales Procesos generativos Procesos esp. de salud

Destructivos Protectores Destructivos Protectores

SINGULAR Estilos de vida • Procesos críticos


de exposición

• Prácticas cotidianas • Prácticas cotidianas


contaminantes y protectoras y saludables
deteriorantes

Procesos genotípicos • Procesos toxicocinéticos • Fisiología protectora: • Procesos toxicodinámicos:


y fenotípicos
Biotransformación Reservas Bioacumulación;
P. Detoxificadores Daño ADN (mutagénesis,


 P. Inmunológicos carcinogénesis,


teratogénesis);


Circulación Iniciador Perfil psico-familiar Deterioro hepático
tóxico protector (hepatitis);

 Daño renal



gromerulonefritis;


Deterioro respiratorio;
Fijación tisular Deterioro gastro-intestinal;
Inmunodisfunción:
Sensitivización
inmunológica,
Hiperergias;
Dermatosis;
Deterioro neurológico;
Deterioro salud
reproductiva

• Dependiendo de la dosis
y la frecuencia deviene
procesos de:

INTOXICACIÓN AGUDA

INTOXICACIÓN CRÓNICA
951

Ciência & Saúde Coletiva, 8(4):937-951, 2003


Referencias bibliográficas
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