Está en la página 1de 47

EJE TEMÁTICO DERECHO PENAL I

SUB EJE TEMÁTICO 1: DERECHO PENAL Y CONSTITUCIÓN.


GARANTÍAS CONSTITUCIONALES

Principio de legalidad
Se vincula a la función de garantía individual que tiene la ley penal frente al poder del Estado. Se
expresa con el aforismo nullum crimen, nulla poena sine lege, que consagra a la ley penal previa como
única fuente del derecho penal. En su aspecto material significa que el contenido de dicha ley debe
sujetarse a los límites constitucionales.

En nuestro país, se halla consagrado como garantía penal por la Constitución Nacional, en el artículo 18:
“Ningún habitante de la Nación puede ser penado sin juicio previo fundado en ley anterior al hecho del
proceso”.

De dicho principio surgen: una garantía criminal que exige que el delito se halle determinado por la ley,
una garantía penal requiere que la ley señale la pena que corresponda al hecho, la garantía jurisdiccional
exige que la existencia del delito y la imposición de la pena se determinen por medio de una sentencia
judicial y según un procedimiento legalmente establecido, la garantía de ejecución que requiere que el
cumplimiento de la pena esté sujeto a una ley que lo regule.

Asimismo, la norma jurídica reguladora del hecho delictivo y su sanción, debe cumplimentar los requisitos
de ser ley previa, escrita y estricta. Y la exigencia de ley previa consagra el principio de la irretroactividad
de la ley penal más severa, ya que es preciso que el sujeto pueda conocer en el momento en que actúa si
va a incurrir en un delito, y en su caso, cuál será la pena.

Principio de reserva
“ningún habitante de la Nación será obligado a hacer lo que la ley no manda, ni privado de lo que ella no
prohíbe”

Implica reservarles a los individuos, como zona exenta de castigo, la de aquellos hechos que por
inmorales o perjudiciales que sean, no están configurados y castigados por una ley previa a su acaecer.

Esto se logra mediante la enumeración taxativa por la ley de los hechos punibles y de las penas
pertinentes, de manera que aquéllos y éstas representen un número cerrado.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 2


Principio de lesividad
Este principio configura la base de un derecho penal liberal y tiene como regla esencial aquélla que
impide prohibir y castigar una acción humana, si ésta no perjudica o de cualquier modo ofende los
derechos individuales o sociales de un tercero, la moral o el orden público.

La necesaria lesividad del resultado constituye el principal límite axiológico externo al derecho penal,
concebido como instrumento de tutela.

Principio de privacidad
Tiene su fuente en el artículo 19 de la CN: ‘las acciones privadas de los hombres que de ningún modo
ofendan al orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, están solo reservadas a Dios, y exentas
de la autoridad de los magistrados’.

También en el artículo 18: Ningún habitante de la Nación puede ser penado sin juicio previo fundado en
ley anterior al hecho del proceso, ni juzgado por comisiones especiales, o sacado de los jueces designados
por la ley antes del hecho de la causa. Nadie puede ser obligado a declarar contra sí mismo; ni arrestado
sino en virtud de orden escrito de autoridad competente. Es inviolable la defensa en juicio de la persona y
de los derechos. El domicilio es inviolable, como también la correspondencia epistolar y los papeles
privados; y una ley determinará en qué casos y con qué justificativos podrá procederse a su allanamiento
y ocupación. Quedan abolidos para siempre la pena de muerte por causas políticas, toda especie de
tormento y los azotes. Las cárceles de la Nación serán sanas y limpias, para seguridad y no para castigo de
los reos detenidos en ellas, y toda medida que a pretexto de precaución conduzca a mortificarlos más allá
de lo que aquélla exija, hará responsable al juez que la autorice.

Consagra así una zona de intimidad que no puede ser amenazada ni lesionada por el poder estatal, e
implica, en última instancia, un respeto a la dignidad humana.

*Esta zona de privacidad comprende, el fuero interno del hombre y aquellas acciones personales que,
aun con trascendencia al exterior, no afectan el orden social, la moral pública, ni perjudican a terceros.

*Pero además la garantía se extiende a una serie de ámbitos vinculados íntimamente con la vida
privada de los individuos. En estos ámbitos, para que la privacidad pueda ser invadida legítimamente, se
requerirá orden judicial fundada, de autoridad competente, conforme jurisprudencia de la CSJN.

*También implica el derecho a que se respeten por el Estado, aquellos ámbitos privados donde sus
titulares han exhibido un interés en que así se mantenga.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 3


Principio de la non bis in ídem
Este principio prohíbe perseguir penalmente más de una vez por el mismo hecho, adquiere rango
constitucional a partir de la CADH (artículo 8) y por el Pacto de Derechos Civiles y Políticos, incorporados a
la Constitución Nacional.

El primer tratado prohíbe que el inculpado absuelto sea procesado de nuevo por el mismo hecho,
mientras que el segundo abarca la doble hipótesis del condenado y el absuelto, prohibiendo en ambos
casos que se proceda a posterior juzgamiento y sanción.

Así se asume la prohibición de nuevo juzgamiento, tanto cuando en uno anterior, sobre los mismos
hechos, ha recaído absolución, como cuando ha habido condena. Asimismo, la CSJN ha entendido que de
igual forma se vulneraría dicha garantía, no solo para el caso de cosa juzgada sino también para el
supuesto de propiciarse un juzgamiento por separado de presuntos delitos resultantes de un único hecho.

Procesalmente, a los fines de la aplicación de esta garantía se requiere la concurrencia de las tres
identidades: persona, causa y objeto.

PRINCIPIO GENERAL (CONCEPTO)


El principio general que gobierna la validez temporal de la ley penal en el sistema positivo argentino es
el que nos dice que rige la ley existente al momento de la comisión del hecho delictivo. Ello es así toda
vez que las leyes penales solo alcanzan a los hechos cometidos durante su vigencia, es decir durante el
período comprendido desde su entrada en vigencia hasta el momento de su derogación, no pudiendo
aplicarse de manera retroactiva. Este principio y su consecuente irretroactividad derivan del principio de
legalidad que exige a los fines de la imposición de una sanción penal la existencia de una ley previa que
determine el hecho punible, la sanción penal a aplicar y las consecuencias accesorias del delito. La
prohibición de retroactividad se encuentra íntimamente vinculado al significado material de dicho
principio pues en el hipotético caso de que una ley posterior declarara delictiva una conducta que en su
momento no lo era; o aplicara a una conducta anterior una pena no prevista en el momento de su
comisión se habría vulnerado materialmente la garantía de seguridad jurídica para los ciudadanos de no
poder ser sorprendidos a posteriori con una prohibición desconocida en el momento de actuar. Sin
embargo, este principio general de aplicar la ley vigente al momento en que el delincuente hizo la
materialización de su voluntad delictiva, tiene excepciones de raigambre constitucional fundadas en la
aplicación de ley más benigna, esto es la retroactividad y la ultraactividad. La validez temporal de la ley
penal exige determinar cuál es el momento de comisión del delito, a los fines de establecer cuál era ley
vigente en ese momento y en consecuencia la aplicable al caso. A diferencia de la legislación comparada
en nuestro ordenamiento jurídico no se encuentra previsto de manera expresa dicho criterio, sin
embargo, la doctrina sostiene que debería tenerse en cuenta: ‫ ـ‬En el caso de tipos de comisión: el
momento de ejecución de la acción; ‫ ـ‬En el caso de tipos de omisión, el momento en que debía realizarse
la acción omitida. Sin embargo, la determinación del momento de comisión del delito, resulta

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 4


problemática frente al caso de un “delito continuado”, es decir el formado con un solo delito a partir de
sucesivos hechos dependientes, idénticos y similares que se extienden en el tiempo; o frente a un “delito
permanente”, el cual no se concluye con la realización del tipo, sino que se mantiene, por la voluntad
delictiva del autor tanto tiempo como subsiste en el estado antijurídico creado por él. En estos casos
determinar cuál es el momento de comisión del delito resulta esencial en el caso de que, mientras se
están cometiendo los hechos se presenta una sucesión de leyes penales. Ejemplo: Juan priva
ilegítimamente de la libertad a Roberto a principios del mes de enero hasta fines marzo. En enero estaba
en vigencia una ley que no agravaba la pena por el tiempo de privación de la libertad y en marzo entra a
regir una nueva ley que agrava la pena cuando la privación de la libertad es mayor a 30 días.

En estos casos ¿Cuál es el momento de comisión del delito?


¿En enero cuando comienza la privación de la libertad? ‫ ـ‬En marzo cuando concluye la misma? ‫ ـ‬O en el
período comprendido entre los meses de enero y marzo? Y en su caso ¿qué ley debo aplicar?: ‫ ـ‬La de
enero y febrero que es más benigna o la que empezó a regir en marzo?

Ante la falta de regulación legal la doctrina se encuentra dividida buscando la solución: ‫ ـ‬Unos (Roxin,
siguiendo al Código penal alemán) sostienen que se aplica la ley vigente al tiempo de terminación del
hecho. En igual sentido se sostiene que debe aplicarse la nueva ley más desfavorable al reo existente al
momento de finalizar su actividad delictiva si aquel continuó con la comisión del delito cuando ya estaba
vigente la nueva ley menos benigna. ‫ ـ‬Otros (en posición mayoritaria) sostienen que debe aplicarse la ley
más benigna existente al comienzo de la actividad voluntaria por sobre la más gravosa vigente al
momento en que los actos delictivos dejan de cometerse. De modo que toman en cuenta el comienzo de
la actividad voluntaria. Postura compartida por Fontán Balestra, De la Rua y Zaffaroni.

PRINCIPIO DE EXCEPCIÓN
Retroactividad y Ultraactividad

El principio general de aplicación de la ley vigente al momento de la comisión del hecho delictivo no es
absoluto y reconoce dos excepciones:

• La retroactividad, que autoriza la aplicación de la ley a un hecho ocurrido con anterioridad a su


entrada en vigencia, siempre que beneficie al acusado

• La ultraactividad, que permite que la ley vigente al tiempo de la comisión del delito o en el tiempo
intermedio entre el delito y el fallo, posteriormente sustituida por otra más gravosa, siga rigiendo
para la regulación del hecho, aún después de su derogación. Estas excepciones tienen un
fundamente ―político-social, dado que carece de sentido dictar o mantener la ejecución de penas
por hechos que ya no se consideran delitos o cuando la gravedad de aquellas aparece como
desproporcionada. Y está contemplado en el art., 2° CP

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 5


Teoría del delito
Esta teoría representa un concepto analítico que proporciona un método en niveles para poder
determinar si una conducta constituye un delito, estableciendo que se debe cumplir con los requisitos de
acción, tipicidad, antijuridicidad y culpabilidad para imponer una pena.

Para desarrollar dicha teoría, en primer lugar, debemos preguntarnos:

¿Qué es el delito?
La respuesta a dicha pregunta, la obtenemos mediante la elaboración objetiva de un método dogmático
que permita determinar cuándo se está en presencia de un delito. De esta manera, evitamos que se
presente la mayor irracionalidad en el ejercicio del poder punitivo del Estado.

En base a lo anteriormente mencionado, nos queda entonces, definir delito. Podemos afirmar que delito,
según los catedráticos de la ciencia penal, es toda conducta humana, típica, antijurídica y culpable.

De esta manera, el primer elemento del delito, es la conducta, la cual debe adjetivarse en las siguientes
características

• Tipicidad
• Antijuridicidad
• La posibilidad de atribuir esa conducta típica y antijurídica (injusto penal) al o a los sindicados que
la realizan (culpables)

Es asi como se elabora un análisis progresivo y estratificado en el que no se puede pasar al siguiente
peldaño o estrato sin haber comprobado el anterior de manera exitosa. Es decir, si una conducta humana
carece de tipicidad, por ejemplo, no podríamos avanzar al siguiente peldaño.

Entonces, dentro de este desarrollo dogmático, debemos preguntarnos lo siguiente

¿Cuándo estamos en presencia de una conducta humana?

Características de la conducta

Exterioridad: aquí debemos tener en cuenta que solo las conductas humanas que trasciendan la esfera
del pensamiento (interna), pueden ser alcanzadas por el derecho penal. Esto se desprende del principio
de legalidad y, además, está plasmado en la CN en al art. 19

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 6


Persona física: solo las personas físicas pueden ser sujetos activos del derecho penal, ya que a ellas se les
puede atribuir la comisión de un hecho delictivo.

Por otra parte, la conducta como acción en sentido amplio asume dos modalidades a saber:

• Forma de acción en sentido estricto: esto implica una actividad de la persona que vulnera la
norma prohibitiva
• Omisión de hacer: es la inactividad de la norma preceptiva, es decir, una norma que manda de
manera implícita a realizar una determinada conducta.

ACLARACION:

La conducta requiere la manifestación de la voluntad orientada a un resultado y un cambio en el mundo


exterior, causado por esa voluntad del agente.

De esta manera, las posturas en torno a la conducta humana son las siguientes:

Concepción finalista de la acción (WELZEL): esta teoría encuentra su origen filosófico en Aristóteles,
quien no concebía una conducta voluntaria que no fuese orientada a un resultado. La esencia de la
conducta humana no prescinde del contenido de la voluntad, sino en la finalidad del contenido. Dicha
finalidad versa en que el hombre, gracias a su saber causal, puede prever, dentro de ciertos límites, las
posibles consecuencias de su actividad, y así proponerse diversos fines y dirigir su conducta en torno a su
plan, y con ello, la consecución de los fines. Es por esto que decimos que la actividad final es un obrar
orientado de manera consiente desde el fin.

Concepción causalista de la acción: en contraste con la concepción finalista de la acción, aquí, las
consecuencias están orientadas de manera causal, solo pertenecen a la relación final aquellas que han
sido incorporadas a la voluntad anticipadora del hecho.

Para la primera posición hoy superada, mientras que al injusto pertenecían los caracteres externos
objetivos del delito, los elementos anímicos subjetivos constituían la culpabilidad; así se incluyó lo
externo en el injusto y lo interno en la culpabilidad (teoría causal de la acción). Es así como el desarrollo
de la teoría normativa de la culpabilidad y el descubrimiento subjetivos del tipo, rompen esta concepción
del injusto, dando paso a una nueva concepción sistemática, la teoría finalista de la acción. Así se formula
la concepción personal del injusto. Al examinar los tipos penales en busca de los elementos subjetivos del
injusto, si en la tentativa, el dolo pertenece al tipo y no solo a la culpabilidad, en la tentativa, tiene que
conservar su función cuando la misma pase al estado de consumación. De esta manera, lo injusto no se
agota con la lesión del bien jurídico (resultado), sino que la acción es antijurídica, solo como obra de un
autor determinado, la antijuridicidad es siempre la desaprobación de un hecho referido a un autor
determinado.

En este punto, podemos afirmar que el injusto penal se conforma de una naturaleza mixta (objetiva y
subjetiva), debido a que el dolo y la culpa se han trasladado a la acción, integrando el tipo subjetivo que
junto con el tipo objetivo, forman el tipo complejo.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 7


De esta manera, lo ilícito requiere tomar en consideración los elementos que pertenecen a la persona que
realiza la acción. Para la teoría finalista de la acción, tales elementos son:

• El direccionamiento de la acción a un fin prohibido (dolo) en delitos dolosos


• Infraccion de deber de cuidado (delitos culposos)

En el concepto personal del ilícito, la tipicidad requerirá comprobar, no solo la lesión del bien jurídico,
sino tambien que el autor haya querido realizar la acción, por su parte, la justificación, requiere de
manera paralela:

• La autorización de la lesión del bien jurídico


• El conocimiento del autor acerca de las circunstancias que determinan dicha justificación

Habiendo definido y delimitado la conducta, podemos encuadrar el supuesto de hecho en este estrato y
pasar al siguiente nivel de análisis, es decir, determinar si este supuesto de hecho factico, encuadra o no
dentro de los delitos tipificados en el código penal

TIPICIDAD

El tipo penal es la descripción abstracta de la conducta prohibida por la norma que efectúa el legislador,
aquello en lo que el hecho consiste o supuesto de hecho, es decir por ejemplo “matar a otro”

El análisis de tipicidad, es decir, determinar si una conducta encuadra o no en un tipo, es el resultado de


una operación mental llevada a cabo por el juez. Dicha operación, permite determinar si la conducta
(objeto de examen), coincide con la descripción abstracta contenida en la ley penal. De lo contrario, si de
dicho análisis surge que el comportamiento no se adecua al tipo delictivo, entonces estamos en presencia
de la atipicidad. De esta manera, la conducta será típica o atípica según se subsuma o no en la descripción
abstracta del tipo penal.

En cuanto al tipo, se pueden distinguir dos conceptos de el

1) Tipo garantía: el mismo contiene la totalidad de los presupuestos que condicionan la aplicación de
una pena. Así la función garantizadora del tipo, en sentido amplio, deriva del principio de legalidad
“nullum crimen sine lege”, el cual segura que solo serán sometidos a castigo por la ley penal, los
comportamientos previamente descriptos en ella. Este principio le exige al legislador un uso
adecuado y preciso del lenguaje en la redacción de la ley penal, la incriminación de conductas
especificas (derecho penal de acto), y la afectación de bienes jurídicos (desvalor de acción y
resultado)

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 8


2) Tipo sistemático: en sentido estricto, es el que describe la conducta prohibida por la norma,
obtenido mediante una delimitación de sus elementos:

• Descripción abstracta del comportamiento respecto de la antijuridicidad


• La no autorización de la conducta por el orden jurídico.

ACLARACION:

En cuanto a la no autorización de la conducta por el orden jurídico, debemos tener en cuenta que por
ello, la falta de antijuridicidad no excluye la tipicidad, esto es, debido a que la relación existente entre
ambas categorías, se expresa en que la atipicidad es solo un indicio de la antijuridicidad, la cual cede ante
las causas de justificación.

Es menester mencionar que mediante la descripción objetivo subjetiva de la conducta se puede realizar la
construcción de los tipos complejos. Es por esto que en el tipo doloso la realización del tipo es querida
por el autor, de modo que coinciden los niveles que lo integran, el tipo objetivo y el tipo subjetivo. En
cambio, en el tipo culposo, no existe la correspondencia entre lo ocurrido y lo conocido y querido por el
sujeto. Es aquí donde nos adentramos en tipos dolosos y culposos y tipos complejos. Es por esto que
vamos a abordar sus concepciones:

• Tipo objetivo: comprende el aspecto externo del comportamiento humano prohibido por la
norma, que abarca no solo su descripción abstracta, sino también otras valoraciones de distinta
índole, excluyendo lo que encuentre situado en la esfera anímica del autor ya que corresponde al
tipo subjetivo.
• Tipos de pura actividad: son aquellos que solo requiere el comportamiento del autor, sin exigir
resultado ya sea potencial o efectivo, separable de aquel.

En el tipo subjetivo, en el conjunto de conductas lesivas de los bienes jurídicos se pueden distinguir dos
clases diferentes, la actitud subjetiva del autor respecto del bien jurídico, y la dirección de su voluntad. En
el primer grupo englobamos los tipos dolosos, es decir, el sujeto es consciente de su accionar y el bien
jurídico que quiere afectar. En el segundo grupo, los tipos culposos, si bien el agente no pretende lesionar
el bien jurídico, su conducta imprudente, permite la afectación del bien.

ACLARACIÓN

Si bien ambas conductas son diferentes en cuanto a su estructura, debemos tener en cuenta lo siguiente:

conducta dolosa: se dirigen por la voluntad (prohibida por la norma) de dañar el bien jurídico

conducta culposa: se limitan a infringir una norma de cuidado.

• Dichos comportamientos, al tener una gravedad distinta, se traduce en la intensidad de la pena. La


misma es inferior en los tipos culposos.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 9


Hasta aquí, hemos hablado de tipos dolosos, pero no hemos definido cuales son los mismos, es decir,
dolo directo, indirecto y eventual. Debemos tener en cuenta que la diferenciación entre los tres tipos de
dolo, se da mediante la intensidad con la que se presenten los elementos cognitivos y volitivos del mismo.

Dolo directo: se encuentra en el ámbito de la voluntad, cuando la acción o el resultado persiguen el fin
del autor

Dolo indirecto: abarca los resultados no queridos por el autor, pero aparecen unidos de un modo
necesario en la intención del sujeto (resultado final)

Dolo eventual: implica que, en ocasiones, quien realiza una conducta, conoce que probablemente se
produzca un determinado resultado, pero no deja de actuar por ello.

Antes de avanzar al siguiente estrato de la teoría del delito, se nos presenta un interrogante:

¿Qué sucede cuando existe de manera fáctica una conducta, pero hay falta de
tipo?
Ante todo, debemos saber que si bien la atipicidad de la conducta del sujeto, excluye la delictuosidad
penal de la conducta, en ocasiones puede quedar subsistente su ilicitud y por consiguiente la
responsabilidad civil accesoria.

En resumen, la atipicidad supone la ausencia de cualquiera de los elementos del tipo a saber:

1) Cuando la conducta realizada no coincide con la acción descripta en el núcleo del tipo, cuando no
se produce el resultado que este requiere o cuando a pesar de la conducta exterior y resultado
típico, no se comprueba el nexo causal entre ambos
2) Por falta del sujeto activo, pasivo o el objeto
3) Por falta de circunstancias temporales o espaciales
4) Por carencia del medio

ACLARACIÓN:

También se suscita atipicidad de la conducta del sujeto, cuando concurren defectos del tipo subjetivo, es
decir:

1) Error de tipo: recae sobre cualquiera de los elementos del tipo objetivo, ya sean facticos o
descriptivos, como así también, normativos o valorativos. Esto es así, ya que, al excluir el dolo, no
hay tipicidad dolosa, pero puede subsistir la responsabilidad penal si existe el tipo culposo, y,
además, la conducta del sujeto se adecue a este.
2) Por ausencia de elementos subjetivos del tipo (distintos del dolo)

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 10


Habiendo detectado que hay una conducta y que la conducta se adecua a un tipo penal, es decir, a la
descripción que hizo el legislador de la conducta prohibida, ya sea de comisión u omisión, avanzamos al
siguiente estrato de la teoría del delito.

ANTIJURIDICIDAD

La antijuridicidad, es como estrato analítico, donde se analizan supuestos que, a pesar de tener
circunstancias en común con los tipos penales antijurídicos, se diferencian por otras circunstancias que
los han de transformar en justificados.

ACLARACIÓN

como característica del supuesto de hecho en abstracto, la antijuridicidad general (contradicción con el
derecho) viene afirmada por la comprobación de tipicidad, mientras que la antijuridicidad especifica
(penal) implica verificar si el supuesto de hecho es merecedor de la pena.

Debido a lo anteriormente mencionado, como primera aproximación, podemos afirmar que una conducta
es antijurídica si no existe una causa de justificación que excluya la antijuridicidad del comportamiento.
Sin embargo, la admisión de una causa de justificación no implica afirmar que la conducta deba ser
valorada en forma positiva, sino que la conducta no es desaprobada por el ordenamiento jurídico, es
decir, es aceptada por este.

Una vez se verifica la inexistencia de un permiso legal como justificativo de la conducta típica, es decir,
que el hecho factico que constituye la conducta sea típico y antijurídico, estamos en presencia del injusto
penal. Es aquí donde avanzamos al último estrato de la teoría del delito, siendo este, la verificación que
indica que la conducta típica y antijurídica, es reprochable al autor, es decir no puede haber pena sin
culpabilidad.

ACLARACIÓN

Desde el punto de vista jurídico-penal, en la actualidad, el vocablo culpabilidad admite dos acepciones a
saber:

1) Se otorga un significado de garantía individual, es decir, se habla del vocablo de culpabilidad,


ubicando este dentro de un conjunto de postulados esenciales a todo el estado derecho,
operando así, como límites de la potestad punitiva. Estos se traducen en condiciones necesarias
tanto para la atribución de responsabilidad penal, como así también, para la imposición de la pena

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 11


2) En cuanto a su segunda acepción, se le atribuye un significado como categoría o elemento del
delito, concebida como una actitud anímica jurídicamente reprochable al autor respecto de la
consumación del hecho penalmente típico y antijurídico, es decir la (concepción normativa) o bien
como puro juicio de reproche al autor (concepción finalista)

Por su parte la infracción personal de la norma primaria penal requiere por un lado la capacidad personal
de evitar la conducta objetivamente desvalorada, la cual puede faltar cuando por causas de
inimputabilidad se excluya por completo la posibilidad de evitar materialmente el hecho. Además, se
necesita que sea posible conocer la antijuridicidad, lo que puede faltar por un error de prohibición
invencible, es decir, si esta falta, no se excluye la antijuridicidad sino su imputación.

El código penal argentino en su artículo 34 inc. 1, determina la inimputabilidad en base a un método


mixto (presupuesto biológico-psicológico), ya que, para eximir al agente de responsabilidad penal, exige
en primer lugar, la presencia de un presupuesto biológico, es decir, insuficiencia de las facultades
mentales, alteraciones morbosas de las mismas o insuficiencia mental. Por otro lado, dicho presupuesto
biológico debe incidir en cuanto al efecto psicológico de la inimputabilidad, lo que impide al autor, al
momento del hecho, la capacidad de comprensión de la criminalidad del acto o el direccionamiento de su
conducta.

Nota: Especial agradecimiento a Paola Mori por su colaboración en este apartado de teoría del delito

Concepto analítico de la teoría del delito: representa un concepto analítico pues se construye como un
método de análisis de distintos niveles –acción, tipicidad, antijuridicidad y culpabilidad- cada uno de los
cuales presupone el anterior.

Tales categorías del hecho punible se encuentran en orden secuencial de acuerdo a las leyes lógicas de la
anteposición y la subordinación.

Las categorías del delito


Desde el punto de vista dogmático se entiende por delito toda conducta típica, antijurídica y culpable,
señalándose así todas las características de la acción amenazada con pena cuyo estudio en conjunto es el
objeto de la teoría del hecho punible.

Se precisa la conjunción de dos clases de caracteres positivos: uno genérico que es la conducta humana, y
tres específicos: la tipicidad, antijuridicidad y culpabilidad.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 12


Es un concepto analítico y estratificado integrado por diversos
niveles
a. Frente a determinado comportamiento humano lo primero que debe hacerse es comprobar si se
adapta o no a una o varias de las descripciones contenidas en la ley penal a través de los tipos
delictivos, concluyendo dicho juicio con la afirmación de la tipicidad o atipicidad de la conducta
b. Luego –si ella contradice tanto formal como materialmente el ordenamiento jurídico- se emitirá
un nuevo juicio y se señalará que es antijurídica, o en caso contrario, si media una causa de
justificación que es conforme a derecho
c. Por último, si al autor le era exigible un comportamiento jurídico distinto del que realizó se emitirá
el juicio de culpabilidad y en caso contrario, si concurre una causa de inimputabilidad o de
exculpación- se dirá que la conducta es inculpable.

Es una concepción secuencial pues el peso de la imputación va aumentando a medida que se pasa de una
categoría a otra. Se trata de una ordenación sistemática que tiene la ventaja de asegurar coherencia,
racionalidad y seguridad a la aplicación del derecho penal.

La acción: es el primer elemento del delito; es la característica básica y genérica del delito. Sus rasgos
distintivos son:

Exterioridad: sólo pueden ser alcanzadas por el derecho penal aquellas conductas que trasciendan la
esfera interna de la persona, en tanto sólo a través de ellas es factible lesionar los bienes jurídicos que la
ley tutela. Este principio surge del artículo 19 de la CN.

Sujetos de acción: sólo las personas físicas pueden ser sujetos activos del derecho penal, pues sólo a ellas
se les puede atribuir la comisión de un hecho delictivo.

Formas de conducta: la conducta –acción en sentido amplio- en tanto primer elemento del delito, es
susceptible de asumir dos modalidades: bajo la forma de acción en sentido estricto, lo que implica una
actividad de la persona que vulnera una norma prohibitiva, o como una omisión, o sea una inactividad
violatoria de una norma preceptiva.

Tipo de garantía y tipo sistemático


Podemos distinguir, teniendo en cuenta el contenido, dos conceptos de tipos:

Tipo Garantía. Es el que contiene la totalidad de los presupuestos que condicionan la aplicación de una
pena. Esta función del tipo, en sentido amplio, deriva del principio de legalidad, que asegura que sólo los
comportamientos descriptos previamente en la ley penal serán sometidos a castigo.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 13


Tipo Sistemático. Es el que describe la conducta prohibida por la norma. Bacigalupo: este tipo se obtiene
mediante una delimitación de sus elementos respecto de los de la antijuridicidad, por ello, la falta de
antijuridicidad no excluye la tipicidad, siendo la tipicidad un indicio de esta última. Dentro del tipo
sistemático se han encontrado diferentes funciones:

Funciones del tipo


Indiciaria: el tipo funciona como indicio de la antijuridicidad. Coinciden en ello el positivismo jurídico, el
finalismo y algunos autores funcionalistas. Quienes afirman el valor indiciario del tipo penal sostienen que
hay conductas típicas que no son antijurídicas porque concurre una causa de justificación. A esta posición
se oponen quienes defienden la teoría de los elementos negativos del tipo, en base a la cual la tipicidad es
la base de la antijuridicidad, lo cual no obsta a que la exigencia de la tipicidad no baste para la
antijuridicidad, ya que requiere además la ausencia de causas de justificación. La tipicidad es necesaria,
pero, no es suficiente a la antijuridicidad penal. Del mismo modo que no todo hecho antijurídico es
penalmente típico, no todo hecho penalmente típico es antijurídico. Así para el positivismo jurídico, el
tipo penal es objetivo y descriptivo: es aquello en que el delito consiste. Es un indicio de la antijuridicidad.
En tanto para el finalismo, el tipo penal es objetivo-subjetivo, es un tipo complejo, es decir es aquello en
que el delito consiste, pero con un ―plus‖, la intención del agente que lo comete. El dolo y la culpa son
analizados ya en el tipo. Por eso autores de corte finalista hablan del injusto personal. -

Vinculante: resulta imposible prescindir del concepto tipificante.

Didáctica: la exigencia del tipo implica que los destinatarios de la ley penal deben tener la posibilidad de
conocer previamente a ejecutar una determinada conducta, si la misma está o no prohibida y amenazada
con una pena. Esta función junto a la pena, sirven para motivar a todos los individuos que integran la
comunidad a abstenerse de realizar el comportamiento prohibido. (Prevención general)

Limitadora: al momento de la sanción de la ley penal, el legislador selecciona de entre un conjunto de


comportamientos antijurídicos aquellas conductas que atentan gravemente contra los bienes jurídicos
con mayor trascendencia y las sanciona con pena.

La imputación objetiva del resultado


Introducción

Al hablar de la imputación objetiva, hablamos de una doctrina predominante en Europa, la cual se aplica
con un mecanismo inverso al de delitos de comisión. Es decir, mientras que en los delitos de comisión y,
frente a la prohibición de hacer algo, se mide la creación o aumento significativo de un riesgo no
permitido, en caso de los delitos de comisión por omisión, los cuales se impone evitar el resultado, se
repara en el impacto que deriva del incumplimiento del deber de actuar para disminuir el riesgo de daño.

Inicialmente se afirmaba que un resultado era el producto de una acción cuando ambos estaban unidos
por una relación de causalidad en sentido natural, es decir que la modificación del mundo exterior le era
atribuida a una persona cuando era consecuencia causal y natural de su acción. En la actualidad esta

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 14


teoría de la imputación objetiva del resultado se propone reemplazar a la teoría de la relación de
causalidad y explicar cuando un resultado se puede calificar como acción típica desde un punto de vista
objetivo. En consecuencia, para esta teoría la imputación requiere comprobar:

a. si la acción ha creado un peligro jurídicamente desaprobado

b. el resultado debe ser producto del mismo peligro: En consecuencia, un resultado solo es
objetivamente imputable cuando la acción causante -de ese resultado-ha creado un riesgo
jurídicamente desaprobado.

c. que se ha realizado en un resultado típico. Así, por ejemplo, conducir un automóvil constituye una
conducta peligrosa, pero si el autor produce lesiones corporales a otra sin infringir las normas de
tránsito y manteniéndose dentro del riesgo o peligro permitido, el resultado no le será objetivamente
imputable. Tampoco le sería objetivamente imputable un homicidio al comerciante que vende un rifle
a un cliente aparentemente normal que luego va y mata a un tercero.

El dolo. Concepto. Elementos. Clases.


Introducción

en el derecho penal, el dolo supone la intención de obrar del agente, así como también, la abstención del
“actuar” ante la obligación legal (comisión por omisión).

Sin embargo, bajo la influencia dela doctrina actual, el dolo pertenece al tipo y no a la culpabilidad, es por
ello que acarrea penas más severas. Es decir, actúa de manera dolosa quien, a sabiendas de la ilicitud de
la acción, actúa con intenciones de cometerla.

Esta contraposición se puede observar de manera más clara en dos de las escuelas penales más
modernas, donde la discusión acerca del dolo es acerca de la extensión que se le da al elemento cognitivo
del mismo, así como también su ubicación sistemática

Causalismo: Nos referimos a una escuela penal alemana que sostenía que el elemento cognitivo del
dolo comprende el conocimiento de los hechos, es decir, el conocimiento del comportamiento que se
está realizando, y el conocimiento de la antijuridicidad del hecho. En base a todo lo anteriormente
expuesto decimos que el dolo, para el causalismo, es considerado como un elemento de la culpabilidad,
categoría en la cual se evalúan la mayoría de los aspectos subjetivos del hecho punible

Finalismo: a diferencia del causalismo, en el finalismo el elemento cognitivo del dolo solo abarca el
conocimiento de los hechos (comportamiento que se realiza). Este es ubicado como elemento de la
tipicidad, conformando el tipo subjetivo de delitos dolosos. Básicamente podemos decir que el
conocimiento del comportamiento que se realiza, se separa del dolo y se concibe como elemento de la
culpabilidad.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 15


Habiendo realizado dicha diferenciación, estamos en condiciones del pasar a definir el dolo y adentrarnos
en el

DOLO (CLASES Y ELEMENTOS)

Dolo: Es menester aclarar que el código penal argentino no regula esta figura, pero cuando se hace
referencia a la misma (vocablo dolo), Lascano afirma que este consiste en el conocimiento y voluntad de
la realización del tipo penal. El autor debe saber que realiza el hecho, qué hecho realiza y las
circunstancias que lo rodean y además debe querer realizarlo. En consecuencia, dos son los elementos del
dolo:

a. Uno cognitivo
b. Otro Volitivo.

En cuanto a su clasificación el dolo puede ser:

Dolo directo: se encuentra en el ámbito de la voluntad, cuando la acción o el resultado persiguen el fin
del autor

Dolo indirecto: abarca los resultados no queridos por el autor, pero aparecen unidos de un modo
necesario en la intención del sujeto (resultado final)

Dolo eventual: implica que, en ocasiones, quien realiza una conducta, conoce que probablemente se
produzca un determinado resultado, pero no deja de actuar por ello.

LA ANTIJURIDICIDAD. CONCEPTO
Hemos visto que la teoría del delito funciona como un sistema de filtros, de manera tal que sólo cuando
comprobamos que una categoría se encuentra presente pasamos a analizar la próxima. La antijuridicidad
es nuestro tercer estrato analítico y supone la contradicción del hecho concreto con el orden jurídico
general. De este modo, al constatar que un hecho es típico sólo hemos comprobado que se ha violado la
norma primaria deducida del tipo. Sin embargo, la violación de esa norma primaria (que implica la
realización del tipo) no es suficiente para establecer la ilicitud del comportamiento, porque para que
exista ilicitud se requiere que la realización del tipo no se encuentre jurídicamente autorizada (CAUSAS DE
JUSTIFICACION). Ello es así, porque el ordenamiento jurídico no sólo contiene normas prohibitivas, sino
que también existen permisos otorgados por el legislador para realizar un hecho típico. Entonces, y como
una primera aproximación, diremos que una conducta es antijurídica si no existe una causa de
justificación que excluya la antijuridicidad del comportamiento. Sin embargo, la admisión de una causa de

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 16


justificación no implica afirmar que la conducta deba valorarse positivamente, sino sólo que la conducta
no es desaprobada por el ordenamiento jurídico y que es aceptada por éste, pero realizar otros juicios de
valor sobre el hecho excede los cometidos del derecho penal. Así, matar en legítima defensa justifica el
hecho de matar a otro, pero la muerte de una persona por otra sigue siendo un acontecimiento que no
puede valorarse como algo valioso.

Causas de justificación
Verificada la existencia de un hecho típico, es necesario analizar si esa conducta se contrapone al
derecho. Deberá analizarse si existe un permiso legal que autorice dicho comportamiento, cancelando ab
initio el delito ya que los actos justificados son lícitos.

Ejemplo: se puede citar como ejemplo al autor de un homicidio consumado bajo legítima defensa,
hablamos de un hecho típico (pero antijurídico de una causa de justificación).

Se las define como

situaciones de hecho y de derecho cuyo efecto es excluir la antijuridicidad de un hecho típico.


También se las define como “permisos concedidos por la ley” para cometer determinadas
circunstancias (hecho penalmente típico.

• Dicho de otra manera, al hablar de causas de justificación estamos hablando de

excepciones legales que autorizan conductas que generalmente serian punibles al afectar bienes
jurídicos protegidos. Esto es sin importar el origen del actuar del sujeto, es decir ya sea que el agente
actúe en el ejercicio de un derecho como lo es defender su vida, así como también, en el ejercicio de una
obligación como lo es el deber de testificar, aunque desacredite a otro

Las fuentes de la causa de justificación son dos:

La ley y la necesidad

La primera porque solo ella puede declarar lícitas ciertas acciones típicas y la segunda porque es una
determinada situación episódica reconocida por el derecho la que hace obrar al agente. La doctrina
coincide en que el fundamento de las causas de justificación radica en que en caso de conflicto entre dos
bienes jurídicos debe salvarse el preponderante para el derecho positivo Las causas de justificación tienen
como efectos:

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 17


En el ámbito penal la impunidad del hecho al suprimir la antijuridicidad de éste.

En el ámbito civil excluyen la responsabilidad civil, salvo el enriquecimiento sin causa

El Código penal contiene las causas de justificación en la parte general en el art., 34 inc., 3-4-5-6-7. y en la
parte especial.

1. Estado de necesidad Aquí se lesionan bienes jurídicos ajenos para salvar un bien propio o ajeno
que se encuentra amenazado. Este bien debe ser de mayor valor que el sacrificado. El CP inc. 3 dispone:
“No son punibles…el que causare un mal, para evitar otro mayor inminente al que ha sido extraño”. De
ahí surgen los requisitos del instituto:

REQUISITOS ESENCIALES

• inminencia del mal para el que obra o para el tercero;


• imposibilidad de evitar el mal por otros medios, de modo que el utilizado es la única forma de
evitar el peligro;

REQUISITOS NO ESENCIALES

• que el mal que se causa sea menor que el que se trata de evitar;
• que el autor sea extraño al mal mayor inminente. Es decir que no lo haya provocado;
• que el autor no esté obligado a soportarlo. Es sujeto activo toda persona que, ante la amenaza de
un peligro actual, salva un bien jurídico propio o ajeno. Es necesario que el mal menor sea causado
para evitar otro mayor, de lo contrario no estaríamos en presencia de este instituto.

El ejercicio de un derecho-autoridad o cargo El art., 34 inc., 4 CP dispone, ―No son punibles. El que
obrare en cumplimiento de un deber o en legítimo ejercicio de un derecho autoridad o cargo.

La obediencia debida Art., 34 inc., 5

No son punibles--El que obrare en virtud de obediencia debida. Consiste en el cumplimiento de una
orden dentro de una relación de sujeción pública sin involucrar responsabilidad que puede resultar del
contenido de la orden cuya ejecución el superior ha puesto a cargo del inferior. Su tratamiento difiere
según se trate de una orden legítima o ilegítima por ser de carácter delictuoso. En el primer caso la
consumación de un hecho típico será lícito, es decir estará justificado; en el segundo caso la cuestión es
discutida inclinándose la mayoría de la doctrina por la negativa de justificante.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 18


LEGÍTIMA DEFENSA

Legítima defensa: Es la acción y efecto de defender o defenderse como consecuencia de una agresión
ilegítima previa. Puede ser:
Art. 34, inc. 6: que obrare en defensa propia o de sus derechos (ocasionándole un perjuicio a la
persona o derechos del agresor) siempre que concurran las siguientes circunstancias:

1. agresión ilegítima: la agresión es un ataque o acometimiento a una persona o sus


derechos. Puede ser un hecho, palabras o advertencias, pero siempre la amenaza debe
provenir de un ser humano sino estaríamos ante el estado de necesidad. La agresión debe
ser ilegítima, esto es sin derecho, lo que origina la necesidad de defenderse.
2. necesidad racional del medio empleado para impedirla o repelerla: la ley autoriza a
defenderse de la agresión ilegítima siempre que el medio empleado-la conducta empleado
para defenderse-sea racional
3. falta de provocación suficiente por parte del que se defiende.  De un tercero: Art., 34 inc
7., el que obrare en defensa de la persona o derechos de otro, siempre que concurran las
circunstancias a) y b) del supuesto anterior siempre que el agredido no haya provocado la
agresión; y para el caso de que la haya provocado que no haya participado en ella el
tercero defensor.

Diferencias con otras causas de exclusión de la pena


Inimputabilidad e inculpabilidad: son causales estrictamente personales e intransitivas, excluyendo la
imputabilidad o la culpabilidad solo del sujeto cubiertos por ellas

Ausencia de tipo: si un hecho no se adecua a un tipo penal, no es un ilícito penal, pero puede ser un ilícito
civil, en cambio, si la acción está justificada, no constituye ilícito ni penal ni civil ya que es conforme a
derecho

LA CULPABILIDAD (CONCEPTO)
De la evolución de esta categoría se llega a la conclusión de que “no hay pena sin culpabilidad”. De modo
que implica reconocer que la responsabilidad jurídica del delincuente no descansa solo en la naturaleza
lesiva de su comportamiento sino en su actitud espiritual de portarse de esa manera teniendo la libertad
de hacerlo de otra manera. Como categoría del delito la culpabilidad es la actitud anímica jurídicamente
reprochable del autor respecto de la consumación de un hecho penalmente típico y antijurídico. Es un
juicio de reproche a quién pudiendo actuar de otra manera elige dentro de su libertad delinquir.

Concepción normativa: señaló que un concepto puramente psicológico de culpabilidad no podía explicar
por ejemplo el fenómeno de la culpa inconsciente, justamente porque no existe una relación psicológica
entre la conducta y su autor. Se abre así por primera vez el camino a un concepto normativo de
culpabilidad: el juicio de reproche que elimina la relación psíquica. Es decir, se fundamenta en el hecho
que al autor se le puede exigir una conducta diferente conforme al derecho.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 19


Concepción finalista: preparado el campo por el normativismo, es decir comprobado que la culpabilidad
era fundamentalmente un concepto normativo no subjetivo, aparece la teoría finalista. Para Welzel, autor
de la teoría final, nunca la pura causación del resultado podía ser penalmente relevante. Según este autor
lo fundamental en orden a considerar ilícita una conducta es el desvalor de acción y no el de resultado. La
presencia del dolo o la culpa en la acción del sujeto es lo que determina que la conducta en sí, más allá
del resultado, sea jurídico penalmente desvalorado. Entonces, si el dolo y la culpa cumplen un valor tan
determinante en la constitución del desvalor de acción, es claro que debían ser trasladados del ámbito de
la culpabilidad al del ilícito (1940).

CAPACIDAD DE CULPABILIDAD: IMPUTABILIDAD (CONCEPTO)


Dos son las condiciones de la culpabilidad o atribuibilidad personal:

a. La infracción personal de una norma penal. Que a su vez requiere:


Capacidad personal de evitar la conducta penal que puede faltar por causas de
inimputabilidad.
Posibilidad de conocer la antijuridicidad.

b. La responsabilidad penal del sujeto. Según Núñez la imputabilidad es la capacidad de ser


penalmente culpable. Esa capacidad presupone madurez, salud mental y conciencia, en una
medida que habiliten al autor para comprender la criminalidad del acto y dirigir sus acciones.
Fórmula del código penal argentino Nuestro código adopta el método mixto: biológico-
psicológico (Art. 34 inc. 1º del CP). Para que pueda decirse que el sujeto es ―inculpable‖ (es decir,
que carece de culpabilidad) se exige:
1. Un presupuesto biológico:
Insuficiencia de sus facultades mentales
Alteraciones morbosas de sus facultades mentales
Estado de inconciencia (que la conciencia esté de alguna forma alterada, pero que no
sea eliminada debido a que si esto ocurre no puede decirse que hubo ―acción).
2. Que el presupuesto biológico incida sobre el ―psicológico, impidiendo al autor en el momento
del hecho la comprensión de la criminalidad del acto o la dirección de sus acciones.
Presupuestos biológicos.
3. Madurez mental: es el desenvolvimiento intelectual y volitivo suficiente para comprender la
criminalidad del acto ejecutado y dirigir las propias acciones. Esta establecida en la Ley 22.278
(Art. 1ro). Establece distintas categorías:
Menor de dieciséis años, es considerado -sin admitir prueba en contrario
inimputable.
Menor de entre 16 y 18 años: es considerado inimputable con relación a delitos
de acción privada o reprimidos con pena privativa de la libertad que no exceda
de dos años, con multa o con inhabilitación.
Mayor de 18 años: es considerado imputable.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 20


4. Salud mental: el autor goza de salud mental cuando no se encuentra afectado por ninguno de
los estados mencionados en los a, b y c del ―presupuesto biológico. Esta falta de salud mental
le impide al sujeto comprender la criminalidad del acto y la posibilidad de dirigir sus acciones.

Supuestos:

Insuficiencia de las facultades mentales: es entendida como una deficiencia mental u


oligofrenia que impide el desarrollo de esas facultades (imbecilidad, debilidad mental,
etc.). Núñez la explica como la detención, preferentemente intelectual, del desarrollo
psíquico del individuo.
Alteración morbosa de las facultades: comprende las enfermedades de la mente que
alteran o transforman las facultades mentales- ya desarrolladas por el sujeto. Abarca todo
tipo de perturbaciones patológicas de la vida mental.
Conciencia: señala Núñez que la conciencia, como característica de la capacidad delictiva,
es la cualidad psicológica que tiene el individuo de conocer y valorar sus propios estados,
ideas, sentimientos, voliciones, etc., o algo exterior. Según este autor el estado de
inconciencia constituye una causa de inimputabilidad, si alcanza el efecto psicológico a
que se refiere el inciso 1º del Art. 34, y no se refiere a la exclusión de la conciencia por
enfermedad mental, sino a la producida por una causa fisiológica (Ej. sueño, estado
hipnótico, estados afectivos profundos, etc.). Señala que el estado de inconsciencia no
debe ser imputable al autor que lo padece. Si el autor llegó al estado de inconsciencia
adrede, su responsabilidad penal se analiza en los límites de la actio libera in causa. Según
esta teoría el autor que al realizar la conducta o al producirse el resultado delictivo estaba
en estado de inimputabilidad responde penalmente si en el momento previo a su
comportamiento gozaba de capacidad de culpabilidad.

Presupuestos psicológicos:

1. Capacidad de comprensión de la criminalidad: Según Núñez la imputabilidad no solo presupone


que el autor del delito goza de salud mental y de conciencia, sino que además requiere que las posea en
una medida tal que, en el momento del hecho, tenga la posibilidad de comprender la criminalidad del
acto y dirigir sus acciones (presupuesto mixto bio- psicológico). La imposibilidad de comprender la
criminalidad del acto sólo concurre cuando el autor que sufre alteración morbosa de sus facultades
mentales o estado de inconsciencia, aún tiene posibilidad de contactar con la norma. Este contacto no
será causa suficiente para motivar al autor en la norma (carece de eficiencia a tal efecto), debido –
justamente- a falta de normalidad en sus capacidades psíquicas que provocan una deficiente
comprensión de la ilicitud del hecho.
2. Posibilidad de dirección de la conducta: La presencia de las alteraciones morbosas de las
facultades mentales o estado de inconsciencia, provoca la imposibilidad del sujeto de dirigir sus acciones.
El autor en circunstancias normales podría haber sido motivado a los fines de no infringir la norma, pero
cuando concurren estos supuestos los procesos de motivación impactan en él de forma anormal,
distorsionando o deformando su voluntad.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 21


SUB- EJE TEMATICO 2: FORMAS AMPLIADAS DE RESPONSABLILIDAD

Iter Criminis: Es la senda que transita una persona a los fines de cometer una conducta delictiva.
Introducción

Se torna imprescindibles el análisis de esta senda o estadios que la persona ha de transitar, a los fines de
establecer cuáles de estos estadios o etapas de esta “senda”, pueden caer en la órbita del ius puniendi.

La respuesta a este planteo por parte d ela doctrina ha sido dada desde dos perspectivas diferentes a
saber:

Teorías subjetivas: estas justifican el ejercicio del ius puniendi toda vez que se manifieste de alguna
manera una voluntad criminal, acentuando la punibilidad en el propósito de cometer un delito, más allá
de si logra o no el resultado o si logra de manera eficaz poner el bien jurídico en peligro.

Teorías objetivas: estas solo admiten la actividad represiva estatal cuando se ha producido un daño
efectivo o aun antes, siempre que al menos haya existido, por el accionar del autor, un peligro real e
inminente de daño para el bien jurídico.

Etapas:

Primera parte (impune)

1. Interna: comienza generalmente con una idea, un pensamiento, una planificación, etc. (estos
elementos son impunes si no trascienden esta su esfera interna.)
2. Externa: actos que no signifiquen una manifestación clara y directa de la voluntad criminal (los
actos preparatorios del delito) no es punible porque no es suficiente para demostrar que está
poniendo en peligro el bien jurídico protegido por el derecho.
Segunda parte (Punible)

1- Externa: actos que inequívocamente el autor demuestra que ha puesto en marcha la ejecución de
su plan delictivo. (Aunque no llegue a la consumación y quede en tentativa)
2- Externa: Consiste en el daño causado luego de la consumación, siempre que dicho daño haya sido
pretendido desde el principio por su autor.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 22


Iter Criminis gráfico.
ETAPA INTERNA ETAPA EXTERNA

CONDUCTA

IDEA
ACTOS PRINCIPIO DE
PREPARATORIOS EJECUCION RESULTADO

IMPUNE PUNIBLE

Ej.: Mi vecino pone continuamente la música muy alta y hace fiestas continuamente. Ya no soporto la
situación y pienso en matarlo.

ETAPA INTERNA: IDEA: Quiero matar a mi vecino. Pero las ideas y pensamientos, por el art 19, no
pueden ser castigados.

ETAPA EXTERNA: Pero decido comprar un arma de fuego Esa ya es un hecho externo (actos
preparatorios)

RESULTADO: LO MATO.

Pero si mi vecino tiene un chaleco antibalas y no muere si no que el chaleco lo protege.

En el primer caso obtengo el resultado muerte.


En el segundo caso, cuando no lo pude matar, quedo en el principio de ejecución, que es PUNIBLE.

¿Cuándo comienzo la ejecución? Cuando la víctima esta en real peligro concreto, es decir, cuando se
pone en riesgo concreto el bien jurídicamente tutelado.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 23


TENTATIVA

Se encuentra en el art. 42 CP El que con el fin de cometer un delito comienza su ejecución, pero no la
consuma por causas ajenas a su voluntad. Tiene que haber dolo directo.

Pena de la tentativa art. 44 CP.

¿Pero qué sucede si yo desisto voluntariamente de matar a mi vecino y no media ningún hecho externo
que me influya a tomar esa decisión (una alarma, alguien me empuja etc.) si no que yo reflexiono y decido
no hacerlo?

ART. 43 CP “El autor de tentativa no estará sujeto a pena cuando desistiere voluntariamente de un
delito…” Hay comienzo de ejecución y desistimiento.

Elementos de la tentativa
Del análisis del ART. 42 del código penal (tentativa), el cual conceptualiza a la misma como una pena
disminuida (ausencia de resultado lesivo), es que se desprenden los siguientes elementos considerados
elementos de la tentativa

• Objetivos: Comienzo de la ejecución


• Subjetivos: La finalidad del autor
• Falta de consumación por circunstancias ajenas a la voluntad del autor

Tipo de tentativa
• Inacabada: el sujeto no consigue el resultado típico ya que se interrumpe la realización de los
actos ejecutivos pero esta interrupción proviene de circunstancias ajenas a su voluntad. Ej. habrá
tentativa inacabada de hurto cuando se sorprenda al ladrón abriendo el cajón donde se encuentra
las cosas que desea sustraer.
• Acabada: El delito ha sido subjetivamente consumado, es decir, lo es con relación al hombre que
lo comete, pero no lo es objetivamente, ello es, con relación al objeto contra el cual se dirigía y a
la persona que hubiera perjudicado. Ej. tentativa acabada o delito frustrado de homicidio cuando
el homicida vacía el cargador del arma sin conseguir el resultado o cuando arroja una bomba y
está por un desperfecto mecánico no estalla.

Participación Criminal
ART. 45 Los que tomasen parte de la ejecución del hecho o prestasen al autor o autores un auxilio o
cooperación sin los cuales no habría podido cometerse, tendrán la pena establecida para el delito. En la
misma pena incurrirán los que hubiesen determinado directamente a otro a cometerlo.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 24


Concepto
Sentido amplio: son participes de un delito todos los que concurren en el carácter que fuere, es decir, con
esta denominación, se pretende abarcar a quienes son autores, cómplices e instigadores.

ACLARACION

Es tradición excluir de la participación propiamente dicha (arts. 45 al 49 C.P) casos en los que también se
habla de participación, pero no en sentido dogmático, es decir, casos que exceden la regulación legal de
la participación criminal. Es to es tanto en sentido amplio como en sentido estricto.

Estamos en condiciones de afirmar que los siguientes casos a saber, quedan excluidos de la participación
criminal

Participación necesaria (mal llamado codelincuencia): se presenta cuando la figura delictiva requiere
como elemento del delito la intervención punible de dos o más personas.

Ejemplo: asociación ilícita

Encubrimiento: el encubrimiento tiene independencia funcional, es decir, no necesariamente significa


una contribución al delito, por lo tanto, es una categoría delictual autónoma.

Cooperación intencional en hipótesis en las cuales surge la comisión de un delito para una sola persona
de las que intervienen: existen ciertos casos en los que para que se configure el delito para una de las
personas, debe existir otra que, sin realizar una conducta delictiva, concurra con el sujeto activo en la
realización del hecho. Estos supuestos son:

• Si uno de los intervinientes es la víctima del delito (art. 130, segundo párrafo C.P)
• Si la ley deja impune a quien realiza la conducta, castigando a quien se encuentra como garante de
la no realización de aquella (art. 281 C.P)
• Delitos cometidos por la prensa (art. 49 C.P)

Sentido restringido: quienes sin ser autores (o coautores), toman participación (de cualquier tipo) en el
delito en cuestión (cómplices necesarios, secundarios e instigadores)

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 25


Principios comunes a la participación en sentido amplio
Exterioridad: solo se puede participar en un hecho exteriorizado (art. 19 CN)

Comunidad de hecho: Debe existir un hecho en común en el que contribuyan o presten


participación varias personas. Sin embargo:

a) El hecho común no debe ser indefectiblemente unitario desde el punto de vista jurídico, en
sentido de que diversas conductas deban siempre converger hacia una misma figura delictiva
b) La participación exige desde el punto de vista material de la unidad del hecho, un concurso de
contribuciones al hecho. No requiere, sin embargo, un concurso de acciones, es decir, basta un
aporte físico ejecutivo del hecho para sustentar un concurso de delincuentes.

Convergencia intencional: para que exista participación debe existir una contribución consciente
hacia un hecho en común.
Esta convergencia puede darse de forma concomitante al desarrollo mismo del hecho, o haberse
dispuesto con anterioridad, pero nunca con posterioridad.

Irreductibilidad: las características de la participación se reducen a cooperar o colaborar en un


hecho jurídicamente unitario, de forma intencional.
En estos límites debemos analizar la participación de cada uno de los partícipes de acuerdo a
nuestra calificación legal, es decir, autor, coautor, instigador, participe primario o secundario.

Tipos de Autoría
• Autoría directa o individual: comete el hecho por sí mismo
• Coautoría: Los que de común acuerdo ejecutan el tipo, de forma tal que poseen conjuntamente el
impero del hecho
• Autoría mediata: el sujeto que realiza la conducta típica funciona en realidad como una
herramienta de otro que lo dirige (autor inmediato)
• Participe o Cómplice: personas que colaboran o prestan ayuda dolosamente al autor o coautores
a cometer el hecho punible sin tener dominio del mismo.
• Partícipe necesario (o Cómplice primario): art. 45 CP el que presta una colaboración o ayuda
indispensable sin la cual el delito no habría podido cometerse y al cual la ley castiga con la misma
pena que corresponde al autor. EJ: Quien entrega los planos de un banco para que otro lleve
adelante el robo, es partícipe necesario de ese robo.
• Participe o Cómplice secundario: el que presta una colaboración o ayuda, pero de carácter o
naturaleza no indispensable si no hubiera prestado ayuda el delito se podría haber consumado de
todas formas. Ej. Si yo le prometo a alguien que voy a guardar el dinero que obtenga de un
secuestro, yo seré participe secundario.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 26


• Instigadores: personas que determinan directamente a otro (ejerciendo sobre este una influencia
psicológica) a cometer un delito es decir que esta persona (la que comete el delito) no estaba
dispuesta a realizarlo hasta que el instigador lo convenció.
• Encubridor: una persona (sin tener participación en un hecho delictivo cuya comisión conoce.

Actúa (encubridor)
Auxiliándole para que se aprovechen de los efectos del delito.
Desarrollando una actividad de ocultamiento de los instrumentos y efectos del mismo
O ayudando a los responsables del delito a eludir la acción de la Justicia.

Concurso de delitos
• Concepto: varias violaciones penales cometidas por una persona con su conducta. Esta conducta
viola la norma
• Concurso aparente (conducta impropia o concurso de tipos) respecto a un mismo hecho aparecen
2 figuras legales que pretenden regirla simultáneamente, pero la aplicación de una de ellas
determina la inaplicabilidad de la otra.
• Conducta Autentica o propia: cuando el sujeto comete varias violaciones y su conducta encuadra
en varias figuras que no se superponen entre sí.

Ej. Si yo rompo una puerta, amenazo una persona y me apodero, teóricamente hago 3 cosas
diferentes, pero…sin embargo eso es 1 robo. Eso es un concurso aparente. APARENTEMENTE realicé
varias cosas cuando en realidad hice una sola.

• Concurso ideal: reunión de varias violaciones penales cometidos a través de un solo hecho o
acción. (Por ejemplo, delito de estafa y falsificación.)
ARTICULO 54.- Cuando un hecho cayere bajo más de una sanción penal, se aplicará solamente la que fijare pena mayor. (principio absorción de la pena: la
pena mayor absorbe la menor)

• Concurso real: reunión de varias violaciones penales cometidas a través de diversos hechos,
acciones o conductas independientes. (Ej. un ladrón decide robar un banco. Mientras escapa, se
enfrenta con un policía, al que le quita la vida. El ladrón ha cometido por lo menos dos tipos penales: el
robo y el homicidio. Ya en el juicio penal, para efectos de simplicidad procesal, se hace un solo juicio
donde se le imputan ambos delitos, formando así un concurso real.)
ARTICULO 55 CP.- Cuando concurrieren varios hechos independientes reprimidos con una misma especie de pena, la pena aplicable al reo tendrá como
mínimo, el mínimo mayor y como máximo, la suma aritmética de las penas máximas correspondientes a los diversos hechos. Sin embargo, esta suma no podrá
exceder de (50) cincuenta años de reclusión o prisión. (Principio de combinación de penas. La pena se forma mediante acumulación de todas)

• Delito continuado. Aquel que se realiza a través de una serie de actos delictivos considerados
“Unidad delictiva” varios delitos considerados como uno solo.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 27


Elementos

a. pluralidad de hechos;
b. la dependencia de los hechos entre sí, y
c. su sometimiento a una misma sanción legal.
Por ejemplo: el cajero de la empresa que durante un largo periodo de tiempo se apodera diariamente de una pequeña cantidad,
no comete cientos de hurtos, aunque cada acto aislado por él realizado sea un hurto, sino un solo delito continuado de hurto.

En resumen: tanto en el delito continuado como en el concurso real de delitos, concurren una pluralidad
de hechos, sin embargo, una y otra figura se diferencian principalmente porque en el delito continuado
los hechos son dependientes y rige el principio de la pena única.

Sistema de punición- Punibilidad. Distintas clases

Punibilidad:
En sentido amplio: Condiciones en las que la ley hace depender la operatividad del castigo penal de
hecho delictivo. Es la posibilidad de aplicar una sanción Penal. En este marco quedan incluidas las
categorías que integran el concepto analítico del delito (acción, tipicidad, antijuridicidad y culpabilidad).
Esto es, por que como elementos que caracterizan al hecho punible, no se presentan más que como
presupuestos que subordinan la punición.

En sentido restringido: comprende el estudio de aquellas condiciones de las que la ley hace depender la
operatividad del castigo penal de los intervinientes en un hecho, que, por ser típico, antijurídico y
culpable, es un delito

Rasgos fundamentales de la punibilidad

• Revisten carácter subjetivo: solo se refieren a la posibilidad de sancionar a determinados


intervinientes en el delito, sin afectar la relevancia jurídico penal (la cual beneficiaria con su
impunidad a todos los partícipes)
• Su concurrencia no afecta la existencia del delito: esto es, aunque no se pueda aplicar la sanción
penal merecida, no deja de existir una acción penal típica, antijurídica y culpable
• Se inspiran en criterios político criminales que el legislador ha priorizado por sobre el interés
público en el castigo penal, los que difieren esencialmente de los que informan la infracción de la
norma primaria y su reproche individual

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 28


Condiciones que imposibilitan la operatividad de la punibilidad

Condiciones de carácter personal:

a) causas personales de la exclusión de la pena

(Ej. Excusas absolutorias art. 185CP. - Están exentos de responsabilidad criminal, sin perjuicio de la
civil, por los hurtos, defraudaciones o daños que recíprocamente se causaren: 1. Los cónyuges,
ascendientes, descendientes y afines en la línea recta; 2. El consorte viudo, respecto de las cosas de la
pertenencia de su difunto cónyuge, mientras no hayan pasado a poder de otro;3. Los hermanos y
cuñados, si viviesen juntos. La excepción establecida en el párrafo anterior, no es aplicable a los
extraños que participen del delito.)

b) causas personales de levantamiento de la pena que sobrevienen al delito

(ej. Extinción de la pena por el perdón del ofendido. Prescripción de la pena, muere del condenado,
etc.)

Condiciones de naturaleza procesal: Son aquellas en que impiden el inicio o persecución de un proceso
penal (por ej. Desafuero, los requisitos de necesidad de renuncia en los delitos de acción pública
dependiente de instancia privada.)

Acción Penal

Concepto: Forma jurídica mediante la cual se excita el deber del Estado de aplicar la sanción establecida
por la ley al partícipe de un hecho típico y antijurídico.

Acción penal Pública Por regla la acción penal es pública y se ejerce de oficio

El Ministerio Publico es el encargado de promoverla

Privadas a) de oficio

b) a instancia de parte

Caracteres
De la acción pública (art. 71)

1- Oficiosidad (promovida por el órgano habilitado)


2- Legalidad
3- Indivisibilidad

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 29


De la acción promovible a instancia privada. (Art. 72)

1- Una vez invocada es irrevocable


2- Es divisible objetivamente

De la acción privada (art 73)

1. Carece de oficiosidad
2. Carece de legalidad (el agraviado decide ejercer la acción)
3. Divisibilidad

Extinción de la acción penal

• Muerte del imputado


• Amnistía
• Prescripción
• Renuncia del agraviado
• Oblación voluntaria de la multa
• Suspensión del juicio a prueba
• Avenimiento.

Avenimiento: art. 132 CP el acuerdo debe ser presentado con total libertad. Causa extintiva que
funciona respecto de delitos contra la integridad sexual, en los casos en donde hay una especie de
relación afectiva entre el autor y la víctima. La victima para solicitar el avenimiento debe tener más de
16 años.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 30


SUB EJE TEMÁTICO 3: PENAS Y MEDIDAS DE SEGURIDAD

3.1-PENAS. CONCEPTO. TEORÍAS ABSOLUTAS Y RELATIVAS. CARACTERIZACIÓN Y ALCANCE.


INDIVIDUALIZACIÓN DE LA PENA. DISTINTAS ETAPAS O FASES. CLASES. CONCEPTO

INTRODUCCIÓN

El ordenamiento jurídico positivo vigente contempla dos modos distintos de reacción coercitiva frente a
un hecho antijurídico a saber:

• Cuando se puede hacer responsable al autor porque el evento le es penalmente reprochable,


procede la aplicación de la pena
• En cambio, cuando esto no sucede, es decir, cuando no le es penalmente reprochable el evento al
autor, pero este revela un grado de peligrosidad, para interferirla, podrá ser aplicada la medida de
seguridad del art. 34 inc. 1 del C.P (sistema de doble vía)

ACLARACION: El termino doble vía hace referencia a nuestro sistema legislativo, en contraposición con
los sistemas de única vía o monistas que, o solo contemplan penas, o solo contemplan medidas de
seguridad.

CONCEPTO DE PENA

En sentido formal la pena constituye con el que el derecho penal amenaza para el caso de que se realice
una conducta considerada como delito. Cuando se habla de mal, debemos entender que se debe a que su
aplicación redunda en la restricción coercitiva de derechos del autor del delito.

Sin embargo, que la pena sea un castigo, no quiere decir que su función sea la retributiva. Si bien no deja
de tener un claro significado de retribución, por otra parte, la idea de retribución es la que permite
diferenciar la sanción penal de las respuestas reparatorias civiles.

TEORÍAS ABSOLUTAS Y RELATIVAS (SOBRE EL FUNDAMENTEO Y FIN DE LAS PENAS). CARACTERIZACIÓN


Y ALCANCE.

Teorías absolutas o retributivas Esta teoría deriva de la ley del talión y considera a la pena como
respuesta o retribución al delito cometido. Es decir, se causa un mal-pena-al autor de un ilícito a los fines
de compensar el mal ocasionado por él. Se orienta en consecuencia hacia el pasado.

Ventaja: Así se garantiza el respeto de la dignidad del hombre, la pena es la retribución del injusto
cometido, representando un fin en sí mismo.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 31


Desventaja: el Estado no logra alcanzar la idea metafísica de justicia, pues la pena se limita a la retribución
por el delito cometido, y no previene nuevos delitos. Y que no sirve para dar respuestas a ciertas causas
de delitos donde el autor es un ser débil, precisado de ayuda y frecuentemente maltratado

Teorías relativas o preventivas


La pena se orienta hacia el futuro ya que su función no se limita a ser una respuesta al delito cometido,
sino que busca prevenir nuevos delitos dirigiéndose a sus posibles autores para que no los cometan. La
pena no es un fin en sí mismo, sino un medio para prevenir futuros delitos. Ahora bien, ese objetivo
puede lograrse dirigiéndose a la comunidad toda como sostienen las concepciones de prevención general;
o solo al autor del delito como refieren las concepciones de prevención especial.

Prevención general: Su tarea preventiva se dirige a la colectividad y no al autor del delito procurando
evitar que surjan delincuentes de la sociedad. Pero tal cometido puede procurarse positiva o
negativamente

Prevención general negativa: El delincuente sirve de intimidación social, es decir el sujeto condenado es
utilizado como objeto social, a los fines que la sociedad no delinca al sentir el temor de que le ocurra lo
mismo que a éste. Se basa en la coacción que la ley provoca de modo general que se ve individualizada en
cada sujeto al momento en que se dicta sentencia, que les puede ocurrir lo mismo que éste. El primer
exponente fue Feuerbach, el que sostenía que la pena tenía efecto intimidatorio hacia la sociedad, que se
hacía efectivo al aplicarse la pena en concreto a un sujeto determinado. Las críticas de las que fueron
susceptibles estas teorías radican en el hecho que en primer lugar el efecto de coacción o intimidación no
está demostrado, si esto fuera así los sujetos que observan la condena de diversos autores de delitos, no
cometerían ilícitos. Prevención general positiva (o integradora) Se denomina positiva por oposición a la
anterior, porque entiende que, aunque la pena se dirige a la colectividad para que no delinca, lo hace de
manera positiva.

Ahora bien ¿cómo actúa positivamente la pena?


Alentando la inviolabilidad del ordenamiento jurídico ante la comunidad jurídica y así reforzar la
confianza jurídica del pueblo. Esta teoría busca reafirmar la norma. El máximo exponente resulta ser
Jakobs, el cual entiende que, al imponerse una pena al autor del delito, lo que se produce es la
reafirmación de la norma. La idea de la misma es que cuando el sujeto delinque comunica socialmente
que la norma no está vigente, al aplicársele la sanción impuesta por la misma, el ordenamiento emite
como mensaje que, al aplicar la pena, la norma si está vigente. A esta teoría se le critica el hecho que
utiliza al sujeto penado como medio para reafirmar el sistema, se antepone claramente el sistema antes
que el sujeto, ve al sistema penal como medio de estabilización del ordenamiento, dejando de lado la
proporcionalidad de la pena. Ventajas de la prevención general negativa radica en la dimensión

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 32


comunicativa representada por la concepción normativa, que exige disposiciones precisas para que el
ciudadano pueda motivarse debidamente cosa que no sucede con los pronósticos de peligrosidad de la
prevención especial. En tanto en la prevención general positiva lo será la eficacia de su incidencia en la
sociedad. Ambas modalidades autorizan la sanción aun cuando no haya peligro de repetición de hechos,
como sucede por ejemplo con el delincuente ocasional para evitar que ello incite su imitación. En cuanto
a las desventajas como toda teoría preventiva la prevención puede llevar a una instrumentalización del
hombre atentando contra su dignidad al exigir sanciones que no tengan ninguna proporción con la
magnitud de lo injusto y la culpabilidad. Y en relación a la prevención general positiva si bien es bueno
que la evitación de futuros delitos se intente por el ―miedo a la pena‖ debe tenerse especial cuidado de
que ello no lleve a excesivas injerencias del derecho penal en el ámbito interno del ciudadano.

Prevención especial La intervención estatal no se dirige ya a la generalidad de las personas, sino al


delincuente, es decir busca prevenir futuros delitos por parte de quién ha cometido el sancionado. Su
tratamiento se desarrolla en la etapa de ejecución de la pena idea que junto con el de resocialización
definen el medio y el objeto perseguido por esta modalidad. La pena se entiende como educación del
autor para lograr su reinserción social y como seguridad social tendiente a lograr que el penado no vuelva
a delinquir. Algunas críticas que se le realizan a estas teorías recaen en el hecho, en primer lugar, no está
demostrado que quien sufrió el estigma del cumplimiento de una pena, no vuelva a delinquir, de hecho,
la realidad demuestra que un alto porcentaje se convierte en reincidente. Esta concepción reposa en la
idea de un estado social intervencionista que admitiendo una suerte de corresponsabilidad de la sociedad
en el delito se hace cargo del delincuente. No se busca sustituir los valores del sujeto‖ sino ampliar las
posibilidades de la participación en la vida social, una oferta de alternativas al comportamiento criminal,
pretendiendo que en el futuro el sujeto lleve una vida sin cometer delitos.

Teorías mixtas o de la unión: Combina las dos anteriores superando sus críticas y desventajas. Entienden
que son fin de la pena tanto la retribución, prevención especial y prevención general. El fin esencial de
toda pena es la prevención. Ante un conflicto debería prevalecer el fin preventivo especial sobre el
preventivo general, modo contrario éste excluiría los efectos preventivos especiales. Entiende que los
fines de la pena pueden verse reflejados del siguiente modo: -

conminación penal: preventivo general –

determinación de la pena: tener en cuenta en la misma medida el fin preventivo especial y general. (tiene
que ser proporcional al daño causado: retributiva)

ejecución de la pena: preventivo especial tendiente a la resocialización del condenado. Sostiene que en
cada fase debe realizarse una ―ponderación diferenciada y que en la pena no puede jugar el concepto
retributivo, pero ello no puede llevar a dejar de lado el principio de culpabilidad, a los fines de limitar la
pena, le pena debe resultar proporcional a la culpabilidad del sujeto.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 33


INDIVIDUALIZACIÓN DE LA PENA. DISTINTAS ETAPAS O FASES.
Para individualizar la pena aplicable al reo, el juez cuenta no solo con la información de la causa, y las
pruebas del juicio, sino que está obligado a tener un conocimiento directo del delincuente que está
juzgando a fin decimos de determinar cuál es la pena específica que corresponde al mismo. En tal sentido
podrá tener en cuenta las circunstancias mencionadas en el ARTICULO 41.- A los efectos del artículo
anterior, se tendrá en cuenta:

1. La naturaleza de la acción y de los medios empleados para ejecutarla y la extensión del daño y del
peligro causados
2. La edad, la educación, las costumbres y la conducta precedente del sujeto, la calidad de los
motivos que lo determinaron a delinquir, especialmente la miseria o la dificultad de ganarse el
sustento propio necesario y el de los suyos, la participación que haya tomado en el hecho, las
reincidencias en que hubiera incurrido y los demás antecedentes y condiciones personales, así
como los vínculos personales, la calidad de las personas y las circunstancias de tiempo, lugar,
modo y ocasión que demuestren su mayor o menor peligrosidad. El juez deberá tomar
conocimiento directo y de visu del sujeto, de la víctima y de las circunstancias del hecho en la
medida requerida para cada caso. En nuestro ordenamiento jurídico, el acto judicial de fijar la
condena (individualización de la pena) es un procedimiento intelectual y razonado del juez para
adecuar la ley al caso concreto.

1. Primera etapa. Individualización legal. El legislador cuando crea la ley, al tiempo que define la
conducta típica reprochable, deja establecida las sanciones que a las mismas han de
corresponderle. Éstas en algunos países son fijas y en otros casos como en el nuestro están
conminadas entre un máximo y un mínimo-indeterminación legal relativa-. En esta fase mediante
la desaprobación legislativa de ciertas conductas se busca alcanzar dos finalidades preventivas:

Prevención general mediante la amenaza explícita de la sanción ‫ـ‬

Prevención especial de manera accesoria, al disponer una exención de pena, como en el caso de la
tentativa desistida, por entenderse que el sujeto sintió los efectos de la prevención general.

2. Segunda etapa. La individualización judicial. Corresponde aquí al juez en función de las pautas
establecidas por los arts. 40/41 CP individualizar que pena será la que se le aplique al reo en el
caso concreto, tanto en su especie como en su cantidad. Si la pena fuere de multa se tomarán en
cuenta además las pautas del art., 21/22 bis del CP. 3.

3. Tercera etapa. Individualización ejecutiva de la pena. En esta etapa, se ejecuta efectivamente la


pena en la modalidad prevista en la sentencia. Previsto por la ley 24.660 y sus reglamentaciones.
Judicialmente está a cargo de un juez de ejecución penal, quien tiene a su cargo el control,
autorización y toda resolución que sea de su competencia desde el día que el condenado ingresa

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 34


al instituto carcelario hasta su egreso definitivo. Su principal función es garantizar al interno el
cumplimiento de normas constitucionales, tratados internacionales con jerarquía constitucional y
en general, los derechos no afectados por la condena o por la ley.

CLASES DE PENAS
Según la naturaleza de los bienes que afecta

Pena de muerte: priva de la vida al condenado. Abolida en nuestro país.

Penas corporales o aflictivas: causan dolor, aflicción o incomodidad al cuerpo humano. Prohibidas en
nuestro ordenamiento jurídico.

Penas privativas de la libertad: privan de la libertad ambulatoria mediante encierro (reclusión, prisión o
arresto), obligación de residencia en un lugar (deportación).

Penas pecuniarias que afectan el patrimonio del condenado, ej., multa.

Penas impeditivas o privativas que incapacitan para el ejercicio de derechos, empleo, cargo o profesión,
ej., inhabilidad.

Penas humillantes que, por su efecto degradante o depresivo, afectan el honor de la persona que la
padece, ej., retractación, sujeción a vigilancia de autoridad, etc.

Clasificación de las penas en el código penal argentino

1. Por su naturaleza o el bien jurídico afectado:

a. Penas restrictivas de la libertad: en donde el mal consiste en una limitación de la libertad


ambulatoria del condenado. Tal el caso de la prisión, la reclusión y la expulsión del país.
b. Penas pecuniarias: la coerción penal recae sobre el patrimonio del condenado, tal el caso de la
multa y el decomiso.
c. Penas impeditivas o privativas: que importan la pérdida, la imposibilidad de ejercer o la
suspensión de empleo, cargo, derecho o profesión, tal el caso de la inhabilitación.
d. Penas humillantes: que afectan el honor del condenado, tal la retractación en las calumnias e
injurias.

2. Según la forma en que se encuentran conminadas por la ley:

a. Penas conjuntas: las sanciones deben imponerse acumulativamente las que aparecen unidas en su
redacción legal con la conjunción.
b. Penas alternativas: en cuyo caso la aplicación de una excluye a la otra y están separadas por la
conjunción.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 35


3. Por su divisibilidad:

a. Penas divisibles: permiten al juez seleccionar la que considere adecuada entre sus máximos y sus
mínimos fijados por la ley.
b. Penas indivisibles: establecen una magnitud única sin posibilidad de graduación como las penas
perpetuas.

4. Por su duración:

a. Penas perpetuas: en principio se aplica mientras viva en condenado, aunque en nuestro país por el
beneficio de la libertad condicional puede cesar. Tal el caso de la reclusión o prisión perpetua y la
inhabilitación absoluta.
b. Penas temporales: duran un tiempo

5. Penas principales y accesorias

a. Pena principal: se aplican por sí misma sin depender de la aplicación de otra pena
b. Pena accesoria: su aplicación está subordinada a la imposición de una pena principal. Ej.
inhabilitación accesoria.

6. Por su gravedad-art., 5 CP.

a. Reclusión
b. Prisión
c. Multa
d. inhabilitación

Históricamente la diferencia entre reclusión y prisión se encuentra en la diferencia entre crímenes y


delitos. La reclusión aplicaba a los primeros e implicaba un carácter infamante para el reo, la prisión
aplicaba a los segundos. Hoy en día la única diferenciación es en cuanto a un tratamiento individualizado
en la ejecución de las mismas: ej., libertad condicional-art., 13 CP

En lo que respecta a la inhabilitación ésta puede ser

a. absoluta: la que, conforme al art., 19 CP importa: -la privación del empleo o cargo público que
ejercía el penado, aunque provenga de elección popular. -la privación del derecho electoral-voto- -la
incapacidad para obtener cargos, empleos y comisiones públicas -la suspensión del goce de toda
jubilación, pensión, retiro,
b. especial: se trata de una sanción impeditiva que presupone la vinculación del delito con el
derecho, cargo, empleo o actividad para el que se inhabilita. Art., 20 CP. Ej., la inhabilidad de conducir si
las lesiones se causaron en un accidente automovilístico.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 36


LA REINCIDENCIA. CONCEPTO. EFECTOS. CONDENA DE EJECUCIÓN CONDICIONAL. CONCEPTO Y
FINALIDAD. REQUISITOS. CONDICIONES PARA SU APLICACIÓN. REVOCACIÓN DEL BENEFICIO.
CONCEPTO.

La reincidencia en el derecho penal, como significado amplio del término, es la reiteración o repetición de
conductas delictivas. Es caer nuevamente en el delito. De modo que aquel que ha sido juzgado por un
delito vuelve a delinquir. En otras palabras, es una condición del sujeto que no se cancela, revoca o
prescribe.

ACLARACIÓN: no confundir reincidencia con reiteración, ya que esto último, tiene significado cuando
varios delitos son juzgados de una vez, lo que da lugar a un concurso de delitos

ARTICULO 50.- Habrá reincidencia siempre que quien hubiera cumplido, total o parcialmente, pena
privativa de libertad impuesta por un tribunal del país cometiere un nuevo delito punible también con esa
clase de pena. No dará lugar a reincidencia la pena cumplida por delitos políticos, los previstos
exclusivamente en el Código de Justicia Militar, los amnistiados o los cometidos por menores de dieciocho
años de edad. La pena sufrida no se tendrá en cuenta a los efectos de la reincidencia cuando desde su
cumplimiento hubiera transcurrido un término igual a aquél por la que fuera impuesta, que nunca
excederá de diez ni será inferior a cinco años.

EFECTO

La reincidencia como tal, produce efectos que influyen en la situación del condenado, aparejándole
condiciones desventajosas, las cuales se pueden ver expresadas en los siguientes artículos a saber:

art. 14 C.P. El reincidente no tiene el beneficio de la libertad condicional.

art. 27 C.P. En el caso de quién tenga condena de cumplimiento condicional, quien reincida perderá
también el beneficio y deberá cumplir de manera efectiva la condena en suspenso de la que gozaba.

art. 41 C.P. La reincidencia es una pauta que el juez toma en cuenta a los fines de la individualización de la
pena.

CONDENA DE EJECUCIÓN CONDICIONAL. CONCEPTO Y FINALIDAD. Es condenación condicional la


condena dictada a pena privativa de la libertad de corta duración, suspendiéndose en el mismo
pronunciamiento su efectiva ejecución, con un plazo en que el condenado deberá observar ciertas
conductas y abstenciones. La finalidad perseguida por este instituto es la redención del delincuente no
habitual, otorgándole el beneficio como estímulo para su esfuerzo de reinserción a la vida normal, bajo la
condición determinante de que no cometa otro delito durante el tiempo de prueba. Si comete un nuevo
delito dentro del plazo legal, sufrirá íntegramente la pena que estaba suspendida junto con la del último
delito. El código dispone su procedencia para los casos de condena a pena de prisión (no de reclusión)
que no exceda de tres años, excluyendo las penas de multa e inhabilitación.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 37


REQUISITOS. Para el juez es facultativo conceder el beneficio. Pero para que lo disponga la ley exige como
requisito que se trate de una primera condena a la especie de prisión no mayor de tres años. El
significado de primera condena comprende tanto una primera condena sufrida por el sujeto, como una
segunda condena después de transcurrido el término legal de 10 años si ambos delitos fuesen dolosos, u
8 cuando uno de ellos fuese culposo. En ambos casos a partir de que la sentencia quedó firme-art., 27 CP.

CONDICIONES PARA SU APLICACIÓN. Para la procedencia de la suspensión de la ejecución penal, el juez


deberá fundar bajo pena de nulidad su decisión. Los fundamentos consisten en la valoración que haga el
juzgador en la misma sentencia, de circunstancias subjetivas y objetivas que demuestren la
inconveniencia de aplicar efectivamente la privación de libertad-art., 26 CP-. Las circunstancias que
deberá valorar el juez, son las relacionadas al sujeto: su personalidad moral, actitud posterior al delito,
motivos que lo impulsaron a delinquir; y con respecto al hecho la naturaleza de éste.

REVOCACIÓN DEL BENEFICIO. La suspensión de la ejecución de la pena será revocada si el condenado no


cumple con las condiciones impuestas. Tanto puede ser la comisión de un nuevo delito dentro del
término de 4 años; como el incumplimiento persistente o reiterado de las reglas de conducta que el reo
debe observar cabalmente durante el tiempo ordenado-art., 27

DERECHO PENAL PENITENCIARIO. LEY DE EJECUCIÓN DE LA PENA PRIVATIVA DE LA LIBERTAD.


PROGRESIVIDAD DEL SISTEMA PENITENCIARIO. PRINCIPIO DE RESOCIALIZACIÓN. PERÍODO DE LIBERTAD
CONDICIONAL Y ASITIDA. ALTERNATIVAS PARA SITUACIONES ESPECIALES. DERECHO PENAL
PENITENCIARIO. LEY DE EJECUCIÓN DE LA PENA PRIVATIVA DE LA LIBERTAD.

El derecho penal penitenciario es el conjunto de normas que determina los modos de cumplimiento de
la condena. La sentencia penal es declarativa, no ejecutiva por lo que es este derecho el que regula como
etapa final, la efectiva aplicación del derecho penal. La ley que lo regula es la N° 27.375 (EX 24.660).
Conforme a la misma se denomina

INTERNO: a toda persona condenada o sujeta a medida de seguridad que aloje en instituciones previstas
en la ley. Este interno podrá ejercer todos los derechos que no estén afectados por la condena, ley o
reglamento. Específicamente tendrá derecho a: instalaciones sanitarias para su higiene, asistencia médica
y espiritual, alimentación adecuada, educación, trabajar, mantener relaciones familiares y sociales, etc.
Correlativamente debe cumplir con todos los deberes que su situación le permita y con las obligaciones
que su condición le impone. Particularmente deberá acatar las normas de conducta para que la
convivencia resulte ordenada.

LEY DE EJECUCION DE LA PENA PRIVATIVA DE LA LIBERTAD

Dicha ley ha unificado la ejecución de la reclusión y de la prisión. De modo que la modalidad particular
de ejecución penal no depende ya de la clase de pena impuesta, sino que es un resultado de la
individualización administrativa del tratamiento. Pero la unificación no ha borrado la diferencia ejecutiva

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 38


entre ambas penas privativas de la libertad, lo que determina que la reclusión siga siendo más severa que
la prisión.

PROGRESIVIDAD DEL SISTEMA PENITENCIARIO. En este sentido dice la ley:

ARTICULO 6º — El régimen penitenciario se basará en la progresividad, procurando limitar la


permanencia del condenado en establecimientos cerrados y promoviendo en lo posible y conforme su
evolución favorable su incorporación a instituciones abiertas, semi abiertas, o a secciones separadas
regidas por el principio de autodisciplina. Las acciones a adoptar para su desarrollo deberán estar
dirigidas a lograr el interés, la comprensión y la activa participación del interno. La ausencia de ello será
un obstáculo para el progreso en el cumplimiento de la pena y los beneficios que esta ley acuerda. El
régimen penitenciario aplicable al condenado, cualquiera fuese la pena impuesta se caracteriza por la
progresividad y constará de los siguientes períodos:

1. de observación: que consiste en estudios médicos-psicológicos-sociales y en la formulación del


diagnóstico y pronóstico criminológico, confeccionando así la historia criminológica que se mantiene
actualizada a medida que se avanza en la ejecución de la pena.
2. de tratamiento: el que será progresivo y tendrá por objeto el acrecentamiento de la confianza
depositada en el interno y la atribución de responsabilidades. El periodo de tratamiento se desarrollará
en tres (3) etapas o fases:
Fase 1. Socialización. Consistente en la aplicación intensiva del programa de tratamiento
propuesto por el organismo técnico-criminológico tendiente a consolidar y promover los factores
positivos de la personalidad del interno y a modificar o disminuir sus aspectos disvaliosos.
Fase 2. Consolidación. Se iniciará una vez que el interno haya alcanzado los objetivos fijados en el
programa de tratamiento para la fase 1. Consiste en la incorporación del interno a un régimen
intermedio conforme a su evolución en dicho tratamiento, en el que tendrá lugar una supervisión
atenuada que permita verificar la cotidiana aceptación de pautas y normas sociales y la posibilidad
de asignarle labores o actividades con menores medidas de contralor.
Fase 3. Confianza. Consiste en otorgar al interno una creciente facultad de autodeterminación a
fin de evaluar la medida en que internaliza los valores esenciales para una adecuada convivencia
social, conforme a la ejecución del programa de tratamiento.

3. De prueba. Que comprende: la incorporación del condenado a establecimiento abierto, la


posibilidad de obtener salidas transitorias de establecimiento, la incorporación al régimen de
semilibertad.
4. De Libertad condicional. El juez de ejecución o el competente podrá otorgar este beneficio
cuando se reúnan los requisitos fijados por el CP, previo informe del organismo técnico-
criminológico y del consejo correccional del establecimiento

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 39


PERÍODO DE LIBERTAD CONDICIONAL Y ASITIDA: La libertad asistida (art. 56 C.P) permitirá al condenado
el egreso anticipado 6 meses antes del agotamiento de la pena temporal. La incorporación del condenado
al régimen de libertad asistida será decidida por el juez de ejecución penal a pedido del interesado y
previo informe del organismo técnico-criminológico y del consejo correccional. Las exigencias para su
concesión son mayores que en la libertad condicional. Será necesario:

• que el condenado no lo esté por algún delito no incluido en el artículo 56 bis-ej., homicidio
agravado o delitos contra la integridad sexual y sin la accesoria del artículo 52 del Código Penal
• que el condenado posea el grado máximo de conducta susceptible de ser alcanzado según el
tiempo de internación.
• el beneficio será denegado si el egreso puede constituir un grave riesgo para el condenado, la
víctima o la sociedad.
• Al implementar la concesión de la libertad asistida, se exigirá un dispositivo electrónico de control,
el cual sólo podrá ser dispensado por decisión judicial, previo informe favorable de los órganos de
control y del equipo interdisciplinario del juzgado de ejecución. El condenado incorporado al
régimen de libertad asistida deberá cumplir las siguientes condiciones:

Presentarse, dentro del plazo fijado por el juez de ejecución o juez competente, al patronato de liberados
que le indique para su asistencia y para la supervisión de las condiciones impuestas.

Cumplir las reglas de conducta que el juez de ejecución o juez competente fije, las cuales sin perjuicio de
otras que fueren convenientes de acuerdo a las circunstancias personales y ambientales del condenado,
podrán ser:

a) Desempeñar un trabajo, oficio o profesión, o adquirir los conocimientos necesarios para ello;

b) Aceptar activamente el tratamiento que fuere menester;

c) No frecuentar determinadas personas o lugares, abstenerse de actividades o de hábitos que, en


el caso, se consideren inconvenientes para su adecuada reinserción social. Salvo expresa
indicación en contrario, siempre regirá la obligación señalada en el inciso a) de este apartado.

Residir en el domicilio consignado en la resolución judicial, el que podrá ser modificado previa
autorización del juez de ejecución o juez competente, para lo cual éste deberá requerir opinión del
patronato respectivo. IV. Reparar, en la medida de sus posibilidades, los daños causados por el delito, en
los plazos y condiciones que fije el juez de ejecución o juez competente. Estas condiciones regirán a partir
del día de egreso hasta el de agotamiento de la condena. Cuando el condenado en libertad asistida
cometiere un delito o violare la obligación que le impone el apartado I del artículo 55, la libertad asistida

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 40


le será revocada y agotará el resto de su condena en un establecimiento cerrado. Si el condenado en
libertad asistida incumpliere reiteradamente las reglas de conducta que le hubieren sido impuestas, o
violare la obligación de residencia que le impone el apartado III del artículo 55, o incumpliere sin causa
que lo justifique la obligación de reparación de daños prevista en el apartado IV de ese artículo, el juez de
ejecución o el juez que resultare competente deberá revocar su incorporación al régimen de la libertad
asistida. En tales casos el término de duración de la condena será prorrogado y se practicará un nuevo
cómputo de la pena, en el que no se tendrá en cuenta el tiempo que hubiera durado la inobservancia que
dio lugar a la revocación del beneficio. Por su parte la libertad condicional es el período durante el cual el
condenado sale del encierro, quedando sometido a una serie de obligaciones. Importa una suspensión
condicional del encierro que se cumple como pena o medida de seguridad. La autoridad judicial que
impuso la condena, previo informe de la dirección del establecimiento penitenciario sobre la conducta del
interno evaluará si concede o no el beneficio. En cuanto al tiempo que debe transcurrir para peticionarlo,
hay diversas situaciones:

-el condenado a reclusión o prisión perpetua, debe haber cumplido 20 años de condena
-el condenado a reclusión o prisión de más de tres años, 2/3 de aquella
El condenado a reclusión por 3 años o menos, un año
El condenado a prisión por 3 años o menos, 8 meses
Si hubiera correspondido la aplicación de la accesoria de reclusión por tiempo indeterminado, 5
años de cumplimiento de esta

A los efectos del cómputo de la condena se computa el tiempo de prisión preventiva. Es decir, cada dos
días de prisión preventiva, se computa uno de reclusión y uno a uno para la pena de prisión (art. 24
C.P). esto significa que el simple encierro preventivo se le asignan los efectos correctivos del régimen
carcelario.

Sin embargo, para que ese tiempo integre el computo de termino a los fines de la libertad condicional,
la prisión preventiva tiene que haberse cumplido en un establecimiento sometido a una dirección
administrativa que pueda informar sobre si el detenido cumplió con el reglamento.

El beneficio será otorgado bajo las siguientes condiciones:

1. Residir en el lugar que determine el auto de soltura;


2. Observar las reglas de inspección que fije el mismo auto, especialmente la obligación de
abstenerse de consumir bebidas alcohólicas o utilizar sustancias estupefacientes;
3. Adoptar en el plazo que el auto determine, oficio, arte, industria o profesión, si no tuviere
medios propios de subsistencia;
4. No cometer nuevos delitos;
5. Someterse al cuidado de un patronato, indicado por las autoridades competentes;

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 41


6. Efectivo sometimiento a los modos de vigilancia impuestos, es decir, presentarse en los
tribunales cada 30 días, comunicar todo cambio de domicilio ya sea temporario o permanente,
así como también la no ingesta de bebidas alcohólicas ni estupefacientes.

ACLARACION:

Estas condiciones rigen hasta el vencimiento de los términos de las penas temporales y en las perpetuas
hasta 5 años, a contar desde el día de la libertad condicional

Estas condiciones, a las que el juez podrá añadir cualquiera de las reglas de conducta contempladas en el
artículo 27 bis, regirán hasta el vencimiento de los términos de las penas temporales y hasta diez (10)
años más en las perpetuas, a contar desde el día del otorgamiento de la libertad condicional.

Revocación del beneficio de libertad condicional

La libertad condicional será revocada cuando el penado cometiere un nuevo delito o violare la obligación
de residencia. En estos casos no se computará, en el término de la pena, el tiempo que haya durado la
libertad. La misma es resuelta por el juez a cargo de la ejecución de la pena, si se debe a que el penado
violo el deber de residencia, porque está en juego nada más que un asunto de incumbencia. En cambio, si
la causa de revocación del beneficio fue un nuevo delito, es aplicable el art. 58 C.P. aquí debemos tener
en cuenta que, en principio, es competente el juez del nuevo delito en la pertinente sentencia
condenatoria, si este juez no lo ha hecho, es competente el juez que haya aplicado la mayor pena.

ACLARACION

La violación de los incisos 2,3 y 5 del art. 13 carece de efectos revocatorios respecto de la liberación, pero
si el tribunal así lo decide, puede tener incidencia sobre el computo de la condena.

ALTERNATIVAS PARA SITUACIONES ESPECIALES

INTRODUCCIÓN

El C.P establece que la prisión que no exceda los 6 meses, puede hacerse cumplir por simple detención
domiciliaria cuando se trate de mujeres honestas o de personas mayores de 60 años o personas delicadas
de salud.

En concordancia, la ley 24.660, en su art. 32, dispone que le juez de ejecución o juez competente, confiara
la supervisión de la detención domiciliaria al patronato de liberados. En caso de no existir aquel, se
encarga de la supervisión, un servicio social calificado, pero en ningún caso va a estar a cargo de
organismos policiales o de seguridad

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 42


1. Prisión domiciliaria. El ARTICULO 10 CP en concordancia con el art., 32 de la ley 27.375 (EX
24.660) dispone: Podrán, a criterio del juez competente, cumplir la pena de reclusión o prisión en
detención domiciliaria:
a. El interno enfermo cuando la privación de la libertad en el establecimiento carcelario le
impide recuperarse o tratar adecuadamente su dolencia y no correspondiere su alojamiento en un
establecimiento hospitalario;
b. El interno que padezca una enfermedad incurable en período terminal;
c. El interno discapacitado cuando la privación de la libertad en el establecimiento carcelario
es inadecuada por su condición implicándole un trato indigno, inhumano o cruel;
d. El interno mayor de setenta (70) años;
e. La mujer embarazada;
f. La madre de un niño menor de cinco (5) años o de una persona con discapacidad a su
cargo.

Asimismo, la ley 27375 (EX 24660) en su art., 33 dispone que la detención domiciliaria debe ser dispuesta
por el juez de ejecución o competente y supervisada por el patronato de liberados o un servicio social
calificado de no existir aquel.

EN NINGUN CASO, LA PERSONA VA A ESTAR A CARGO DE ORGANISMOS POLICIALES O DE


SEGURIDAD

Al implementar la concesión de la prisión domiciliaria se exigirá un dispositivo electrónico de control, el


cual sólo podrá ser dispensado por decisión judicial, previo informe favorable de los órganos de control y
del equipo interdisciplinario del juzgado de ejecución.

(ART 34): El juez de ejecución o juez competente revocará la detención domiciliaria cuando el condenado
quebrantare injustificadamente la obligación de permanecer en el domicilio fijado o cuando los
resultados de la supervisión efectuada así lo aconsejaren o cuando se modificare cualquiera de las
condiciones y circunstancias que dieron lugar a la medida.

2. Prisión discontinua y semidetención. El juez de ejecución o competente, a pedido o con el


consentimiento del condenado, podrá disponer la ejecución de la pena mediante la prisión
discontinua y semidetención.

La prisión discontinua consiste en la permanencia del condenado en una institución


basada en el principio de autodisciplina por fracciones no menores de 36 hs, procurando que ese período
coincida con los días no laborables de aquel.

La semidetención consiste en la permanencia ininterrumpida del condenado en una


institución basada en el principio de autodisciplina durante la fracción del día no destinada al
cumplimiento de sus obligaciones familiares, laborales o educativas y admite dos modalidades: la prisión
diurna-entre las 8 y las 17 y la prisión nocturna entre las 21 y las 6.

Tales instituciones resultan procedentes cuando (art., 35 ley 27.375):

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 43


“El juez de ejecución o competente, a pedido o con el consentimiento del condenado, podrá disponer la
ejecución de la pena mediante la prisión discontinua y semidetención cuando, no encontrándose incluido
en los delitos previstos en el artículo 56 bis”

a. Se revocare la detención domiciliaria;


b. Se convirtiere la pena de multa en prisión, según lo dispuesto en el artículo 21, párrafo 2 del
Código Penal;
c. Se revocare la condenación condicional prevista en el artículo 26 del Código Penal por
incumplimiento de las reglas de conducta establecidas en el artículo 27 bis del Código Penal;
d. Se revocare la libertad condicional dispuesta en el artículo 15 del Código Penal, en el caso en que
el condenado haya violado la obligación de residencia.

3. Trabajos para la comunidad. art. 50 a 53 ley 27.375- En los casos de los incisos c) y f) del artículo
35 ley 27.375, cuando se presente ocasión para ello y el condenado lo solicite o acepte, el juez de
ejecución o juez competente podrá sustituir, total o parcialmente, la prisión discontinua o la
semidetención por la realización de trabajo para la comunidad no remunerado fuera de los
horarios habituales de su actividad laboral comprobada. En tal caso se computarán seis horas de
trabajo para la comunidad por un día de prisión. El plazo máximo para el cumplimiento de la pena
con esta modalidad de ejecución será de dieciocho meses. El juez de ejecución o juez competente
confiará la organización y supervisión del trabajo para la comunidad del artículo 50 a un patronato
de liberados o a un servicio social calificado, de no existir aquél. En caso de incumplimiento del
plazo o de la obligación fijada en el artículo 50, el juez de ejecución o juez competente revocará el
trabajo para la comunidad. La revocación, luego de practicado el cómputo correspondiente,
implicará el cumplimiento de la pena en establecimiento semiabierto o cerrado. Por única vez y
mediando causa justificada, el juez de ejecución o juez competente podrá ampliar el plazo en
hasta seis meses. El condenado en cualquier tiempo podrá renunciar irrevocablemente al trabajo
para la comunidad. Practicado el nuevo cómputo, el juez de ejecución o juez competente
dispondrá que el resto de la pena se cumpla en prisión discontinua, semidetención o en un
establecimiento penitenciario.

MEDIDAS DE SEGURIDAD. CONCEPTO. LA EJECUCIÓN DE LAS MEDIDAS DE SEGURIDAD. DURACIÓN DE


LAS MEDIDAS Y CESE DE ELLAS.

INTRODUCCION

A diferencia de las penas, las medidas no se imponen como realización de una amenaza legal prevista
para reforzar un mandato o prohibición dirigido a los ciudadanos. En cambio, la medida es un tratamiento
que no responde a los mecanismos de conminación legal. Es decir, las penas y las medidas no se
diferencian en el fin, sino en la limitación. Las penas deben estar ligadas a la culpabilidad y respetando el
principio de reserva penal serna determinadas, pero las medidas de seguridad que se vinculan con la

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 44


afección que le dan origen, son indeterminadas, es así que el código penal, al referirse a su cese exige que
haya desaparecido el peligro de que se dañe así mismo o a los demás, o hasta que se comprobase la
desaparición de las condiciones que lo hicieren peligroso

CONCEPTO

Son los medios de que dispone el derecho penal moderno, distinto de las penas y que cumplen una
función de prevención especial. Es otra forma de reacción penal dirigida a aquellos sujetos inimputables
o en los cuales la pena no ha cumplido el efecto esperado. Su fundamento no descansa en la culpabilidad
del sujeto (como en las penas), sino en la peligrosidad del sujeto como posibilidad de causar un daño a sí
mismo o a los demás y que jurídicamente está incapacitado para ser receptor de pena precisamente
porque falta en los requisitos de la culpabilidad.

CLASES

En nuestro derecho penal positivo existen tres clases de medidas de seguridad:

educativas, también llamadas tutelares se aplican a los menores buscando completar su educación y en
ciertos casos propender a su reeducación. Consisten en su internación en un establecimiento de
corrección. Hay tres situaciones en nuestro derecho:

a. Menor de 16 años: son inimputables. El juez previo estudio de la personalidad podrá decidir
internar al menor en un establecimiento adecuado; o si tiene una familia que lo contiene puede
suponer que el ilícito fue solo un episodio en la vida del menor y disponer que aquel permanezca
con su familia, aunque puede disponer alguna restricción.
b. Mayor de 16 años y menor de 18. Hay dos situaciones:
1. 1-No son punibles cuando el delito imputado es de acción privada o está amenazado con
pena privativa de la libertad menor de 2 años en su máximo, con multa o inhabilitación
quedando sometidos al mismo régimen que los que no hay llegado a 16 años.
2. 2-Los que no estén sometidos a las excepciones antes mencionadas, se los somete a
proceso y se los dispone provisionalmente con el fin de analizar la personalidad y el
ambiente donde se encuentra el menor. Luego de la declaración de responsabilidad,
antes de dictar sentencia definitiva, el juez deberá esperar que haya cumplido 18 años y
que haya estado sometido a un tratamiento tutelar no menor a 1 año, recién podrá dictar
la sentencia condenatoria aplicando una pena. También puede considerar innecesario
condenarlo y absolverlo.
c. Mayor de 18 años: son punibles, es decir plenamente responsables y están asimilados a los
mayores.

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 45


En este tipo de medidas el cese está representado por el paso de la minoridad a la mayor edad. El art.,
525 del código procesal penal de Córdoba dispone:

Artículo 525.- CESACION. Para ordenar la cesación de una medida de seguridad o tutelar, el Tribunal
deberá oír al Ministerio Público, al interesado, o cuando éste sea incapaz, a quien ejercite su patria
potestad, tutela o curatela, lo mismo que en su caso, al Consejo Provincial de Protección al Menor.
Además, en los casos del artículo 34, inciso 1 del Código Penal, deberá requerirse el informe técnico
oficial del establecimiento en que la medida se cumpla y el dictamen por lo menos, de dos peritos.

Curativas, son eminentemente terapéuticas cuyo fin es la curación o mejoramiento de la salud mental,
ej., la internación en un nosocomio o en un tratamiento ambulatorio-art., 34 inc., 1 CP-. Al estudiar las
condiciones y consecuencias de la imputabilidad, se hizo referencia a la falta de salud mental por
insuficiencia en las facultades mentales, alteración morbosa de las mismas o inconsciencia. El autor que
en el momento del hecho por alguna de estas causas no puede comprender la criminalidad de los actos o
dirigir sus acciones, o será punible, pero se le podrá aplicar una medida de seguridad de este tipo. Este
tipo de medidas de seguridad pueden ser:

a. La internación manicomial: el art., 34 inc., 1 párrafo 2° CP dispone que ―En caso de enajenación, el
tribunal podrá ordenar la reclusión del agente en un manicomio, del que no saldrá sino por resolución
judicial, con audiencia del ministerio público y previo dictamen de peritos que declaren desaparecido
el peligro de que el enfermo se dañe a sí mismo o a los demás. Es una medida facultativa del juez quien
puede considerar no necesaria su imposición cuando el enajenado no presenta un peligro para sí o
para los demás. Si bien no se requiere de dictamen de un perito para imponerla, si es necesario aquel
para hacerla cesar. La medida cesará por resolución judicial con audiencia del Ministerio público y
previo dictamen de perito que declare desaparecido el peligro de que el enfermo se dañe a sí mismo o
a los demás, de lo que surge que tiene una duración indeterminada.
b. La internación en un establecimiento adecuado: el art., 34 inc., 1 última parte dispone que ―En los
demás casos en que se absolviere a un procesado por las causales del presente inciso, el tribunal
ordenará la reclusión del mismo en un establecimiento adecuado hasta que se comprobase la
desaparición de las condiciones que le hicieren peligroso. Los demás casos a que hace referencia este
art., son los estados de inconsciencia-ebriedad o toxicomanía-. Claramente la medida se mantiene
hasta que se comprueben la desaparición de las condiciones que lo hicieron peligroso, y si bien nada se
dice sobre la forma de esa comprobación, se deduce que ello debe verificarse por resolución judicial
con audiencia del Ministerio Público y previo dictamen de peritos como en el caso anterior.

Eliminatorias, se aplican a reincidentes y habituales que tienden a lograr un mejoramiento de la conducta


del interno- art., 52 CP-. Se impone a delincuentes imputables y consiste en la reclusión por tiempo
indeterminado (o perpetua en la de incorregibles) en un establecimiento especial nacional.

Presuponen el cumplimiento de la pena establecida en la última condena y el transcurso de 5 años más


con la especial consideración del grado de peligrosidad del condenado en el cumplimiento de los
requisitos establecidos por el art., 53 CP

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 46


DURACIÓN DE LAS MEDIDAS Y CESE DE ELLAS

Por regla, las medidas de seguridad son indeterminadas. En nuestro derecho no existe un único termino
de duración, sino que cada medida posee una característica particular por la que se produce su cese.

Medidas curativas:

• dependen de la desaparición de la causa que le dio origen


• Debe establecerse la desaparición del peligro
• Cesan únicamente por resolución judicial de la autoridad que impuso la medida
• Puede ser de oficio o a pedida de parte y con audiencia

medidas educativas

• La regla de cese el paso del autor del ilícito de la minoridad a la adultez y lo dispuesto en la ley
para los distintos grupos etáreos

Medidas eliminatorias

• Presuponen el cumplimiento de la pena establecido en la última condena y del trascurso de 5 años


más con la especial consideración de la peligrosidad del condenado en el cumplimiento de los
requisitos del articulo 53 C.P

-TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- pág. 47

También podría gustarte