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Mi nombre es Juan Pablo Fernández Cardona, estoy matriculado en el curso de guitarra del
programa de psicología de la UNAD.
Para esta fase 4 voy a exponer cinco obras importantes que han sido creadas y que han sido un
icono en la música compuesta para la guitarra.
La primera:
La popularidad y la fama de la que goza hoy en día Gaspar Sanz se debe, en gran parte, a una sola
composición: el canarios. Publicado por primera vez en 1974, logrando una tremenda popularidad
a lo largo del siglo XX.
Esta pieza está interpretada por una guitarra barroca, la guitarra barroca es una guitarra de la
época barroca, un antepasado de la guitarra clásica moderna.
La segunda:
El gran vals, una pieza para guitarra escrita en 1902, por el gran guitarrista y compositor español
Francisco Tárrega (1852- 1909), tal vez sea la melodía más tocada de todos los tiempos. Aunque su
amplia fama no se deba precisamente a la pieza tocada en su forma original, sino a un corto
extracto de la misma, tomada en 1993 por Anssi Vanjoki y Lauri Kivinen de la Nokia corporación.
Esta simple y memorable melodía compuesta por 13 notas (La última de las cuales ha sido alterada
respecto a la original), se ha convertido en el más identificable famoso ringtone de todos los
tiempos. El llamado “Nokia tune” se ha globalizado de tal forma que se escucha
aproximadamente, 20.000 veces por segundo, un logro nada despreciable para una pieza
guitarrística compuesta a inicios del siglo pasado.
El gran vals al ser escrito específicamente para guitarra, posee elementos idiomáticos que lo
distinguen de otros trabajos del mismo estilo, y posee también algunos retos en la ejecución,
como mantener la fluidez y el lirismo de la melodía sin alterar el cadencioso pulso ritmo del
acompañamiento en 3/4
La tercera:
La tercera parte, Allegro Solemne, está inspirada en los bullicios de la gente en las calles fuera la
catedral. Sus hermosos movimientos melódicos de líneas se entrecruzan con cascadas de
artejidos, con armonías cambiantes. Fuertes figuras temáticas se entremezclan y en el movimiento
avanzan con variaciones originales hasta el perfecto cierre” Richard Chapman.
“Se dice que baso esta pieza (en su forma original de los movimientos, andante religioso y allegro
solemne; el preludio lo añadiría 19 años después en el Salvador) en una experiencia que tuvo al
entrar a la catedral de San Jose de Monte Video: los amplios acordes horizontales del andante
representan sus impresiones del organista tocando Bach en la catedral. El pegajoso Allegro
representa el abandono a la atmosfera tranquila y espiritual de la catedral y el regreso a la calle,
donde el ajetreo del mundo real está representado por la incesantes figuras artejiadas en semi
corcheas. En cierto modo se escucha la campana de la catedral” Richard Stover
La cuarta:
El Decamerón negro es una suite para guitarra de Leo Brouwer. Compuesta en el año 1981 para la
guitarrista estadounidense Sharon Isbin, se estrenó en 1983. Esta obra se encuentra en el nuevo
periodo compositivo de Brouwer denominada híper romanticismo. Está formada por tres
movimientos, cada uno de los cuales se corresponde a una balada: el arpa del guerrero, huida de
los amantes por el valle de los ecos y balada de la doncella enamorada.
El término “Decamerón” está relacionado con Boccaccio ya que Frobenius lo asocio con temas
recurrentes presentes en el libro del renacentista italiano por su parentesco con “el sentimiento
de lo caballeresco, la riqueza en la fantasía, la astucia y la galantería de los africanos”. Brouwer
afirma haberse basado en “el Decamerón Negro” de Frobenius para realizar la composición de su
propio Decamerón. Sin embargo, esta afirmación no se corresponde literalmente con ninguna de
las obras provenientes de Frobenius pero si podemos recoger ideas de entre varias de ellas.
La quinta: