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Es corriente en nuestros tiempos, como lo ha sido en otros muchos periodos de la historia del

mundo, suponer que los más sabios de entre nosotros han visto a través de todos los entusiasmos de
épocas anteriores y se han dado cuenta de que no queda nada por lo que valga la pena vivir. Los
que sostienen esta opinión son verdaderamente desgraciados, pero están orgullosos de su desdicha,
que atribuyen a la naturaleza misma del universo, y consideran que es la única actitud racional para
una persona ilustrada. Se sienten tan orgullosos de su infelicidad que las personas menos
sofisticadas no se acaban de creer que sea auténtica; piensan que el hombre que disfruta siendo
desgraciado no es desgraciado. Esta opinión es demasiado simple; indudablemente existe alguna
pequeña compensación en la sensación de superioridad y perspicacia que experimentan estos
sufridores, pero esto no es suficiente para compensar la pérdida de placeres más sencillos.
Personalmente, no creo que el hecho de ser infeliz indique ninguna superioridad mental. El sabio
será todo lo feliz que permitan las circunstancias, y si la contemplación del universo le resulta
insoportablemente dolorosa, contemplará otra cosa en su lugar. […] Pretendo convencer al lector
de que , por mucho que se diga, la razón no representa ningún obstáculo a la felicidad; es más, estoy
convencido de que los que, con toda sinceridad, atribuyen sus penas a su visión del universo están
poniendo el carro delante de los caballos: la verdad es que son infelices por alguna razón de la que
no son conscientes, y esta infelicidad les lleva a recrearse en las características menos agradables
del mundo en que viven.

Bertrand Russell, La conquista de la felicidad, Mondadori

1. Haga un comentario de texto del fragmento que se propone contestando a las preguntas
siguientes: a) enuncie el tema del texto (5 puntos); b) detalle sus características lingüísticas y
estilísticas más sobresalientes (10 puntos); c) indique qué tipo de texto es y justifíquelo (5
puntos).
2. Redacte un resumen del contenido del texto. (10 puntos)
3. Elabore un texto argumentativo a favor o en contra de la idea de que en nuestra sociedad
actual es más fácil ser feliz que en tiempos pasados. (10 puntos)

Presentad vuestros ejercicios escritos a ordenador con un procesador de textos. Usad, por favor, letra
Arial o Times New Roman punto 12 e interlineado 1,5. La fecha límite de entrega es el próximo
viernes 20 de marzo hasta las 12 de la noche. Debéis enviarme el trabajo por correo electrónico.

NOTA SOBRE LA CALIFICACIÓN

Como podéis apreciar, la puntuación está constituida por 4 bloques valorados con 10 puntos cada
uno: tema + tipología, análisis del texto, resumen, argumentación. La calificación final será la suma
de las puntuaciones dividida entre 4. Formará parte de la nota asignada a la expresión escrita (10%).
Es un ejercicio obligatorio. Si no lo presentáis, vuestra nota será un 0. El siguiente ejercicio de
expresión escrita, la valoración crítica de “Soldados de Salamina” será, pues, un ejercicio voluntario
que hará media con esta actividad. Os recuerdo que habíamos convenido entregar la valoración el día
del control de lectura, es decir, el jueves 2 de abril.
1. Haga un comentario de texto del fragmento que se propone contestando a las preguntas
siguientes:
a) enuncie el tema del texto (5 puntos);

El tema del texto es la presunta incompatibilidad entre la razón y la felicidad. /


El tema del texto es la pretendida incapacidad de los sabios para ser felices.

b) detalle sus características lingüísticas y estilísticas más sobresalientes (10 puntos);

Este texto de Bertrand Russel es un fragmento de su obra ensayística La conquista de la


felicidad. En él, el autor se vale de la contraargumentación para desmentir la presunta
incapacidad de los hombres sabios para experimentar felicidad. Además de este argumento,
recurre a un aforismo (están poniendo el carro delante de los ojos) y al argumento de causa en
las últimas líneas del fragmento (los sabios son infelices por algún otro motivo inconsciente).
Siguiendo el análisis en este plano pragmático, debemos decir que se trata de un texto claro y
preciso, dirigido a un receptor culto, pero que se trata de un texto divulgativo: no exige del
receptor conocimientos especializados. En cuanto a las variedades de la lengua, se emplea el
código elaborado (nivel culto de la lengua) y el registro formal. El texto cumple con las
propiedades textuales: presenta adecuación, pues está bien construido atendiendo a su situación
comunicativa; presenta coherencia, pues está dotado de sentido en sus diversos niveles (texto-
oración-enunciado) y responde al concepto de progresión temática; y también posee cohesión, es
decir, está bien construido desde el punto de vista sintáctico. Entre los recursos de cohesión
empleados en el texto destacan, entre otros, la recurrencia (el hombre que disfruta siendo
desgraciado no es desgraciado; superioridad - superioridad), la deixis anafórica (pero esto no es
suficiente) o la sustitución por sinónimos (desdicha – infelicidad). En este fragmento, la
modalidad argumentativa es muy evidente, por lo que las funciones del lenguaje predominantes
son la expresiva y la apelativa. El autor muestra explícitamente su opinión con fórmulas como
personalmente, no creo que; lo cual es un rasgo de la función expresiva del lenguaje. La
apelativa también aparece de forma notoria en pretendo convencer al lector de que; el autor
manifiesta su voluntad de persuadir al lector. El carácter expositivo, que también posee el texto,
le lleva a proporcionar información sobre la realidad: este uso de la función referencial se
apoyará, además de en la modalidad oracional enunciativa que domina el texto, en el uso de
recursos propios de la expresión objetiva. Por último, se aprecia en este fragmento una voluntad
de cuidar el estilo, por lo que hablamos también de la presencia de la función poética del
lenguaje.
En el nivel morfológico, es llamativo que el texto comience utilizando la primera persona del
plural con valor asociativo (nuestros tiempos; de entre nosotros). El autor incluye al receptor
empleando así un recurso de la retórica clásica, la captatio benevolentiae, que consiste en iniciar
una argumentación procurando, en primer lugar, atraer la atención del receptor. Aunque en el
texto predomina la tercera persona (relacionada con la función referencial del lenguaje), es
llamativo el contundente uso de la primera persona del singular para la expresión de la
subjetividad (creo; pretendo; estoy convencido). En cuanto a los tiempos verbales, predomina el
presente de indicativo con valor actual (están poniendo), habitual (el hombre que disfruta) y,
especialmente, con valor atemporal, en determinadas expresiones en las que se quiere dar
carácter de verdad a la opinión (la razón no representa).
Las oraciones, como ya hemos comentado presentan la modalidad enunciativa. A pesar de su
claridad, la sintaxis del texto es compleja. Aparecen ejemplos de coordinación copulativa (…y
consideran…) y adversativa (…, pero están orgullosos…). La necesidad de relacionar
argumentos lleva a este tipo de textos a emplear también diferentes tipos de oraciones
subordinadas. Destacan las subordinadas sustantivas (consideran que…; no creo que…), pero
aparecen ejemplos también de subordinadas adverbiales consecutivas (se sienten tan
orgullosos…que…), concesivas (por mucho que se diga) o condicionales (si la contemplación del
universo le resulta…).
No obstante, consideramos que en este nivel sintáctico, los rasgos más destacados están
relacionados con la voluntad de precisión y con la búsqueda de fuerza argumentativa mediante el
empleo de recursos relacionados con la objetividad. Empezando por esto último, en el texto
abundan las oraciones copulativas; los ejemplos son muchos (Es corriente…; …están
orgullosos…; …esta opinión es…; …no son conscientes…). Las oraciones atributivas o
copulativas son las que se emplean en las definiciones; en este texto refuerzan la función
apelativa porque hacen que la opinión se presente como un hecho objetivo. El texto (y este es un
rasgo típico de textos científicos) pretende ser riguroso y preciso, por lo que su autor recurre a la
utilización de diferentes tipos de construcciones adjetivas: adjetivos (corriente), sintagmas
adjetivales (más sabios), sintagmas preposicionales como complementos del nombre (tan
orgullosos de su infelicidad, la pérdida de placeres más sencillos) y, especialmente, las
proposiciones subordinadas adjetivas, de las que existen numerosos ejemplos en todo el texto
(Los que sostienen esta opinión…;…perspicacia que experimentan…;…el hombre que
disfruta…).
El tema del texto y su carácter argumentativo motivan que en el nivel semántico destaquen
los sustantivos abstractos (perspicacia, superioridad, desdicha) y los adjetivos valorativos
(agradables, simple, sofisticada). Abundan también los verbos y locuciones verbales
relacionadas con el pensamiento (se han dado cuenta, piensan, creo). El léxico del texto podría
ser agrupado en un campo asociativo relacionado con la felicidad (felicidad, infelicidad,
desdicha, desgraciado, disfruta, sufridores, placeres, infeliz, dolorosa, penas, agradables)

c) indique qué tipo de texto es y justifíquelo (5 puntos).

Se trata de un texto humanístico-ensayístico, respectivamente, porque trata un tema relacionado


con disciplinas como la filosofía o la psicología y porque lo hace con voluntad de estilo, sin el
rigor de un estudio y dirigiéndose a un destinatario no especializado. En cuanto a las
modalidades, el texto presenta una serie de ideas y las justifica, por lo que podemos decir que es
un texto de modalidad expositivo-argumentativa.

2. Redacte un resumen del contenido del texto. (10 puntos)

[Propuesta]
Las personas ilustradas afirman que el conocimiento no es compatible con la felicidad. Se sienten
orgullosos de su desdicha porque consideran que se deriva necesariamente de su sabiduría. Pero
la dicha no es incompatible con la razón, por lo que el verdadero sabio debería poder encontrar
motivos para ser feliz.

3. Elabore un texto argumentativo a favor o en contra de la idea de que en nuestra sociedad


actual es más fácil ser feliz que en tiempos pasados. (10 puntos)

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