UNIVERSIDAD DE MEXICO
(---1 la feria de
! !
'---- - - - - - - - - - - - -
) un idad
-~
ALFO SO REYES
Lo DIRÉ yo también: La de Al-
fonso Reyes ha sido una pér-
dida irreparable. Pero quiero de-
cirlo, no porqne ésa sea la frase
m;ís a mano, la que menos compro-
mete; sino, al contrario, con plena
conciencia de lo que· ta I expresión
significa.
EN LA DIGNIDAD DE LA
CULTURA
HA SIDO una pérdida irreparable
para la dignidad de la enl-
tura mexicana. Él era nuestra ban-
dera viviente contra la mediocri-
ciad que tanto 1I0S agobia; el cs-
tÍmulo que incitaba hacia los cami-
nos de la inteligencia humanística:
el maestro que ennoblecía nuestro
paisaje espiritual.
los-d-í-a-s"'
EN L\ i\HSlóN DE
HISPANOAMÉRICA
HA SIDO uua pérdida irrcpara-
ble para quienes luchan. cu
los terrenos m;ís nobles, por la
h ispanoalllericana.
como él supo descubrir la verdadn;1
N aclie
misión de nuestro continente; lIa-
die la fomentó con mayor brío. co-
tidianamente, con I.alllaiía eficacia
profunda.
Illlar ptTCllllclllcllle tluesl ro aprell-
dizajc. Si ya llU se llIuen' su pluma.
vastos y din;ímicos son ell sí sus k-
g-ado.s i 111 perecederos.
Sl! RAI.(>N AMOROS.'\
N0 FUE la suya IIl1a razón fría:
sÍ, IIna razón amorosa; una ra-
zón que sabía ele las razones del
corazón y que en ellas alcanzó
a sustentar su vigencia. Pensó y amú
como pocos; como pocos mantuvo
siempre un precioso equilibrio en-
tre la serenidad y la pasión legíti-
ma, entre el rigor y la entrE'ga.
EN LA AMISTAD GENEROSA
HA SlDD una pérdida irrepar~bl(:'
para nosotros, sus amigos.
agradecidos partícipes de muchas
horas suyas en las que él solía
derramar su voz generosa para la
cordial devoción de cuantos, des-
pués de apurar en sus lihros incon-
tables lecciones, teníamos el privi- --,~¡¿-......,----
legio de Sil cercanía personal, que
juntaba en una sonrisa la sabidllría,
la gracia, la honradez, la delicadeza.
el dllido interés por los dem;ís.
Nt:ESTIC\ FIDELIDAD
su PERENNIDAD 0J'SERVE.\IOSsu e j :'lIl p l o . Vivifi-
Ei\' TODOS esos ;ímbitos, lo hemos
C qllemos su cnsenanza. Tratc-
I
mos de ser fieles a los valores que
perdido, y no podremos recu- él reprcsent<'J y enalteciú. Éste ,
perarlo ... Pero no lo hemos per- será lIuestro mejor tributo a SIl 111('-
dido del todo. Si ya no de sus mona.
labios, de sus letras habd de conti- I
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