Está en la página 1de 29

EL PAJARO BLANCO

EMILE H É S E O S [Bélgica]
Obra en dos actos
PREMIO LEÓN CHANCEREL 1970

PERSONAJES

MALEZA: perseguido por el sueño y la realidad


SAVIA realista pero comprensivo
PASTOR con el problema del refugiado
ELCLOWN divertido, eficaz y astuto
PEDRETE
JUANITA dos amigos generosos
EL HOMBRE DEL MOLINO pobreza aparente, riqueza interior

y los indiferentes:

EL HOMBRE DE LAS ALTERAS


EL HOMBRE DEL PLASTRÓN
LA MUJER DE LAS JAULAS
LA MUJER DEL SOMBRERO
LA MUJER DEL PASTEL
EL HOMBRE DEL FUSIL
EL HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS

Todos estos personajes pueden ser interpretados por sólo dos actores que se
cambiarán de trajes o de caretas. Pueden incluso cambiarse delante del público lo
que aumentará el lado caricatural de los personajes.
La ratita y el pájaro blanco: todo hombre de buena voluntad los busca.

Cada comediante tiene un doble que es un polichinela vestido como él.


La acción se desarrolla en un bosque, cerca de la cabana del "cultivador-leñador"
Maleza y su compañera Savia Maleza. Tiene el don de leer en las hojas de los árboles.
Hace surgir de un haz de ramas unos personajes que trastornan la decoración del bos-
que y la transforman en una decoración de ciudad con dos escenas: la gran plaza
del pueblo (es donde evolucionan los actores) y a lo lejos "la colina de los Mercade-
res" el montón de haces de leña en donde evolucionan los polichinelas. Cada vez
que los clientes reclaman trigo y haces de leña el encantamiento se rompe y el
"decorado-ciudad" y los personajes del cuento desaparecen para dejar lugar al
"decorado-bosque" y a los leñadores.

- 48 -
ACTO I

I Escena

SAVIA, MALEZA.- (MALEZA ESTA SENTADO, DE UN LADO TIENE SA-


COS DE TRIGO Y DEL OTRO UN MONTÓN DE HACES
DE LEÑA. CAEN UNAS HOJAS, MALEZA LAS RECOGE
Y LAS MIRA Y REMIRA CON GRAN INTERÉS).

SAVIA.- (ENTRANDO) querría dos haces de leña y dos sacos de


trigo (MALEZA NO LE HACE CASO Y CONTINUA A
MIRAR LAS HOJAS CON INTERÉS) Yo querría dos haces
de leña y dos sacos de trigo.

(GRITANDO MUY FUERTE EN LA OREJA DE MALEZA)


¡Dos sacos de trigo y dos haces de leña! .

MALEZA.- (ENSEÑÁNDOLE UNA HOJA) Una judía en las nubes ...

SAVIA.- ¡Dos sacos de trigo! .

MALEZA.- (ENSEÑANDO OTRA HOJA) El pepinülo que se había


puesto un sombrero flexible.

SAVIA.- ¡Dos sacos de trigo! .

MALEZA.- La abeja que había prestado su aguijón a una pompa de


jabón.

SAVIA.- Maleza, yo querría dos ...

MALEZA.- ¡Las proezas del clown Augusto Julio Camembertus Xilo-


fonio! .

SAVIA.- ¡Con todas tus historias se me ha olvidado lo que venía a


buscar! .

MALEZA.- ¡Mira esta hoja! .

Ahí en el rabo empieza el más apasionante de los cuentos,


el del pastor que tenía como amigo un pájaro blanco. Un
día el pájaro se echó a volar, el pastor le siguió. El pájaro
voló más lejos, el pastor fue tras él. Llegó cerca del mar,
empezó a volar encima de las olas y se adentró en el océano,
el pastor se puso a nadar y nadó hasta desfallecer, entonces
un barco le recogió y le dejó en el puerto de una gran ciudad
que el pastor no conocía. ¡Naturalmente se perdió en la gran
ciudad!

- 49
SAVIA. Se hace tarde y aun no has empezado a trabajar. La gente
te critica, dicen que eres un soñador y que pierdes tu tiempo
con historias infantiles.

MALEZA. Las gentes critican y el pájaro canta; ¡qué idiotez! . Las gen-
tes critican y el pájaro canta ...

Mira, mira, los niños han venido. ¡Están esperando que les
cuente la historia del pastor perdido en la gran ciudad! .

SAVIA.- ¡Maleza! ¡Quisiera dos sacos de trigo! .

MALEZA. ¿Dos sacos de trigo? ¿El pastor está perdido en la gran


ciudad y tú tienes hambre? .

SAVIA.- Yo no tengo hambre, pero tus clientes quieren trigo y haces


de leña.

MALEZA. Y los niños quieren un cuento. ¡Nunca podré dar gusto a to-
do el mundo ¡.

¿Qué hacer? Cada vez que hago un haz de leña, salen de él


personajes pequeñitos y me cuentan una historia.

SAVIA.- Es verdad ... pero a condición de que yo les llame con mi


guitarra...

MALEZA.- ¿Qué esperas, mujer, para cogerla? ¿Que los niños se hayan
ido?.

SAVIA. - Amiguitos míos (DIRIGIÉNDOSE A LOS NIÑOS) tengo el


gusto de presentaros al gran Maleza, el hombre que lee en las
hojas de los árboles como en un libro de estampas.
MALEZA.- ¡Música! .

II escena — Títeres

EL PASTOR, EL HOMBRE DEL PLASTRÓN, EL HOM-


BRE DE LAS ALTERAS, LA MUJER DEL PASTEL, EL
HOMBRE DEL FUSIL, EL HOMBRE DEL MOLINO, LA
MUJER DE LAS JAULAS.
(UNA DESPUÉS DE OTRA LOS POLICHINELAS APA-
RECEN EN LOS HACES DE LEÑA Y DANDO VUELTA
A CIERTAS RAMAS PREPARADAS DE ANTEMANO

- 50
HACEN APARECER EL DECORADO DE UNA CIUDAD.
EL ELEMENTO "DECORACION-SACOS" SE CONVIER-
TE EN UN "DECORADO-CIUDAD").

PASTOR.— Señor, soy un pobre pastor perdido.

HOMBRE DEL PLASTRÓN.- ¿Quiere Vd. comprar algo? .

PASTOR.- ¡No! .

HOMBRE DEL PLASTRÓN.- ¡Hala, hala, entonces circule! .

PASTOR.— Señor ¿no ha visto Vd. por casualidad un pájaro blanco? .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- ¿Un pájaro? Y ¿qué quiere Vd. que haga yo

con un pájaro? ¡Es demasiado ligero para mí! .

(PASA LA MUJER DEL PASTEL)

PASTOR.— ¡Señor, busco un pájaro blanco! .


MUJER DEL PASTEL.— Pero, ¿no ve Vd. que llevo una tarta de pista-
cho? ¿por qué me habla Vd. de un pájaro
blanco? .

PASTOR.- Señor ...

HOMBRE DEL FUSIL.— Tengo prisa, tengo prisa ... ¡Tengo que hacer
pum pum! (GESTO DE TIRAR) (PASA EL
HOMBRE DEL MOLINO).

HOMBRE DEL MOLINO.— Por favor quisiera aceite, aceite para un molino
a la antigua. Sin aceite el molino no puede dar
más vueltas y los pájaros no cantan más.

(PASA LA MUJER DEL SOMBRERO)

PASTOR.— Señora, un momento, busco un pájaro blanco ...

(PASA EL HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS)

HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS.- ¡Ultimas noticias! ...

PASTOR.- Señor, señor, estoy perdido en esta ciudad ...

HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS.- ¿Cuentan su aventura en los periódicos? .

PASTOR.- No lo sé, no los he leído.

- 51 -
HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS.- ¡Entonces su historia no es verdad! . ¡Ulti-
mas noticias, últimas noticias! ...

MUJER DEL SOMBRERO.— ¡Qué vergüenza, en nuestra época, perder el


tiempo buscando un pájaro blanco! .
PASTOR.- (A LA MUJER DE LAS JAULAS) Señora, busco un pájaro
blanco.
MUJER DE LAS JAULAS.- En mi trastienda tengo una jaula, con el pájaro
que Vd. busca.
PASTOR.— ¡Oh! señora, ¡por favor! suéltelo Vd. Sin él no puedo
encontrar mi camino.
MUJER DE LAS JAULAS.- ¿Soltarlo? ¡Yo le vendo a Vd. mi pájaro! . Pe-
ro tiene que traerme dos monedas de plata.

PASTOR.— Pero ¡si no tengo ni un céntimo!

MUJER DE LAS JAULAS.— ¡Pues entonces se fastidia y se queda sin él! .

III escena — Actores y decorado del bosque

VOCES.— ¡Dos sacos de trigo, tres haces de hojas, un saco de trigo,un


haz de leña, dos sacos de trigo, dos haces, tres sacos de
trigo! ...
MALEZA.— Andad y coged lo que hay en el almacén (A LOS NIÑOS)
No podré llegar a contaros toda la historia, tengo que ir a
preparar sacos, ¡qué lata! . Cuando digo a la gente que leo
todas esas historias en las hojas de los árboles, se burlan de
mí.

¡Las hojas! . Si todo lo más sirven para abonar la tierra del


jardín, me dicen. Y añaden, obstruyen las cloacas, atascan
los desagües, ensucian las aceras. ¡Bah! amiguitos míos, las
hojas son verdaderas maravillas. Todas distintas, de todas
formas, de todos colores; unas con nervaduras, otras denta-
das, algunas listadas, redondas como bolitas, puntiagudas
como flechas, en forma de corazón o de trompo ... y siem-
pre llenas de palabras, de música, de imágenes ...
VOCES.— Un haz de hojas, un saco de trigo, dos sacos de trigo, dos
haces de leña, un saco de trigo, tres haces de leña, un saco
de trigo, tres haces de leña, un saco de trigo, dos sacos de
trigo, dos haces de ramas.

- 52 -
MALEZA.- Ya va, ya va, ya va, ya va, ¡qué lata! . Quisiera no oir nunca
más lo que los demás no oyen, no ver lo que los demás no
ven, no tener que pelearme para que me crean; poder sem-
brar, plantar, recoger la cosecha, como un hombre cualquie-
ra, y descansar como un hombre cualquiera. ¡Pues no señor!
Las hojas caen en mis campos y caen sobre mi cama cuando
duermo. Una historia se termina y otra empieza.

SAVIA.— No digas eso Maleza, si tus personajes nos encantan. ¡ La pri-


mavera que brota de tus hojas caídas y arrugadas es también
la que hace crecer el trigo! .

Vamos primero a encontrar de nuevo tu pastor, luego te


ayudaré a llenar los sacos. No podemos dejar a nuestros
amiguitos decepcionados.

MALEZA.- ¡Música!

IV escena — Títeres

EL PASTOR, EL CLOWN, EL MOLINERO.-


(EL PASTOR HA CONSTRUIDO UNA CABANA SOBRE
LA COLINA DE LOS MERCADERES, UN CLOWN SE
PASEA, TOCANDO LA TROMPETA EN UNA CAFETERA
VIEJA Y MARCANDO EL PASO AL RITMO DE LOS
PLATILLOS QUE LLEVA ATADOS A SU POSTERIOR;
LLEVA CAMPANITAS EN LAS MUÑECAS Y EN LOS
TOBILLOS).

CLOWN.— ¡Rayos y truenos de música! ¡Un hombre que acampa en el


centro de la ciudad! ¡Eso es algo poco común! .
Buenos días señor, permítame que me presente; yo soy
Augusto, Xilofonio, Julio, Camembertus que tiene una cabeza
azafranada, pies en forma de cactus y el resto cubierto de
pulgas, pulgas sabias naturalmente. Mire Vd. mi trompeta
de la mañana y mis platillos de suspensión ulterior.

Si me lo permite, Noble Señor, Augusto, Xilofonio, Julio


Camembertus va a interpretar para Vd. la pulga que sabe
saltar sobre el pulgar, seguido del saínete de la pulga juglar
con capacete.

(HACE UNAS CUANTAS FANTASÍAS Y DESPUÉS TIEN-


DE SU SOMBRERO AL PASTOR)¿No tendría Vd. algunas
monedas para mí?

53 -
PASTOR.- No tengo nunca un céntimo en el bolsillo.

CLOWN.- ¡Muy bien! ¡Si no tienes dinero eres mi amigo! Pero ¿qué
haces en esta cabana en medio de la ciudad? .

PASTOR.- Busco un pájaro blanco.

CLOWN.- ¿Un pájaro blanco? ¡Rayos y truenos de música! .

PASTOR.- Por querer seguirlo me he perdido y sólo él puede ayudarme


a encontrar mi camino. La mujer de las jaulas me ha dicho
que ella lo había capturado, que lo tenía encerrado en una
jaula y que sólo me lo daría a cambio de dos monedas de
plata.

CLOWN.- ¡Rayos y truenos de música! .

MOLINERO. (PASANDO). Quisiera aceite, aceite para un molino, para un


molino a la antigua. Sin aceite el molino no puede dar vuel-
tas y los pájaros no cantan más.

CLOWN.- ¡Dos monedas de plata! . Aunque venda todos mis instru-


mentos, no podré reunirías jamás. ¿Y si vendiese mi ratita
sabia? (SE QUITA EL SOMBRERO: UNA RATITA SACA
LA CABEZA POR ENCIMA DEL ALA) No, mi ratita pre-
ciosa, no te venderé, no tengas miedo, tú eres mi amiga.
Pero dime ¿conoces por casualidad el camino que lleva a la
cabana de este Noble Señor? .

(LA RATITA HACE QUE NO CON LA CABEZA). ¡No lo


conoce! . ¿Sabes dónde está el pájaro blanco? .

(LA RATITA LE TIENDE UNA JUDIA) ¿Por qué me de-


vuelves la judía que te he dado para tu desayuno? ¿Se la
ofreces a este Noble Señor? ¿Qué quieres que haga con
ella?.

(LA RATITA SEÑALA EL SUELO, EL CLOWN SE ARRO-


DILLA Y LA RATITA EMPIEZA A ARAÑAR EL SUELO).

Si yo te comprendo bien, el Noble Señor debe plantar su


judía en este agujero. ¿Es eso verdad? .

(LA RATITA HACE QUE SI CON LA CABEZA).

(AL PASTOR) Tenga Vd. un cuidado muy especial con esa


judía Señor. Augustito, Xilofinito, Julianito, Camemberti-
nito tiene seguramente alguna idea interesante detrás de los
bigotes. Yo voy corriendo a buscar a Pedrete y entre los dos,

54 -
perdón entre los tres ¡me olvidaba de Augustito, Xilofinito,
Julianito, Camembertito! entre los tres, decía, conseguire-
mos devolverle el pájaro blanco (EL CLOWN SE MARCHA
CORRIENDO Y GRITANDO) ¡Pedrete! ¡Pedrete! .

V escena — Actores

EL CLOWN, PEDRETE, JUANITA, EL HOMBRE DEL


FUSIL, EL DE LOS PERIÓDICOS, LA MUJER DEL PAS-
TEL, LA DEL SOMBRERO, EL MOLINERO.

(SE OYE RUIDO DE PASOS, DESPUÉS EL CLOWN SIN


ALIENTO APARECE EN ESCENA, LLEVA EL MISMO
VESTIDO QUE EL POLICHINELA).

CLOWN.- ¡Pedrete! ¡Pedrete! .

PEDRETE. (ENTRANDO). Augusto, Xilófono, Julio Camembertus qué


contento estoy de verte. Anda, pronto, ¡tócame la obertura
del Geranio que bebió demasiado ron! .

CLOWN- Ahora es imposible.

PEDRETE. ¡Oh! .

CLOWN. - Escúchame. He encontrado en la Colina de los Mercaderes


a un pastor que viene de muy lejos. Quiso seguir a su amigo,
un pájaro blanco, y se ha perdido. Sólo este pájaro puede
ayudarle a encontrar de nuevo su camino. La mujer de las
jaulas lo ha capturado pero no quiere devolvérselo si no le
da a cambio dos monedas de plata. No las tiene. Es menester
encontrar este dinero lo antes posible.

PEDRETE. - Pues es muy sencillo. Tú vas a hacer uno de tus números y


yo pasaré el sombrero para recoger dinero de la gente que
pasa.

CLOWN.- ¡Venid, venid, nobles señores! . Voy a interpretar: los pan-


talones de la calabaza que llevaba los tirantes de franela! .
(PASAN LOS PERSONAJES MENCIONADOS AL PRINCI-
PIO Y SOLO SE PARA JUANITA).

JUANITA.- Yo no tengo ni un céntimo, pero si sabes cantar y Augusto,


Xilofonio, Julio, Camembertus quiere tocar el violín, yo
puedo bailar y quizás tengamos más éxito.

- 55 -
MOLINERO. (PASANDO). Yo quisiera aceite, aceite para un molino anti-
guo. Sin aceite el molino no puede dar vueltas y los pájaros
han dejado de cantar.

(EL CLOWN SACA UN VIOLIN DE DENTRO DE SU


PANTALÓN, LO AFINA, JUANITA SE PONE A BAILAR
Y PEDRETE CANTA:

REFRÁN: ¡Ay! pajarito blanco — mi pajarito


que te fuiste volando — y te has perdido!
Tu pico es de brillantes — de mil colores
y tus alas son nieve — y amor y flores.
Cuando vuelas ligero — sobre el desierto
se llena de jardines - el suelo muerto.
Eres rosa, caricia, —fruta, color,
plumas de seda pura — cariño, amor.

REFRÁN: ¡Ah! pajarito blanco - mi pajarito,


que te fuiste volando - y te has perdido!

Tus ojos son estrellas — centelleantes


que parecen torrentes — de diamantes
son ríos caudalosos — que van al mar
y sus plumas al viento — dejas flotar
¡Ay! pajarito — el más blanco de todos
¡el más bonito! .

Sin ti nada me importa — ni nada quiero,


eres mi bien, mi guía — y mi lucero.

REFRÁN: ¡Ay! pajarito blanco donde te has ido


ya no vuelas ni cantas ya te he perdido!
¡Ay! pajarito
Ya no tengo cabana,
ni tienes nido! .

(PASAN TODOS LOS PERSONAJES, SE SIENTAN UN


MOMENTO Y ESCUCHAN, PERO SE MARCHAN SIN DE-
JAR NI UNA PERRA).

JUANITA. - ¿ Se han ido sin dar nada! .

CLOWN.- Esperadme aquí un momento. Voy hasta la colina de los


Mercaderes.

- 56 -
VI escena — Títeres

EL CLOWN, EL HOMBRE DE LAS ALTERAS, EL DEL


PLASTRÓN Y EL PASTOR.

CLOWN.- Aviso a todos los fuertes, a todos los ricos de la ciudad, si no


dais enseguida una moneda de plata, vendrá una tempestad
tremenda, el mar inundará el puerto y moriremos todos
ahogados. Que todos los ricos, todos los poderosos echen
una moneda de plata en mi sombrero. Las tiraré la mar y se
apaciguará. Nobles ricos, nobles poderosos de nuestra ciu-
dad, el mar está enfadado con vosotros, ¡dadme una moneda
de plata, si no queréis morir todos ahogados! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- ¡Qué historia de locos! .

HOMBRE DEL PLASTRON.- De locos o de no locos yo prefiero tomar mis


precauciones. ¡Albañiles, a trabajar! ¡Quiero
una torre de 5 metros! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS. Albañiles, ¡yo quiero una torre de 6 metros! .

HOMBRE DEL PLASTRON.- ¡Yo la quiero de 7 metros! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS. ¡Yo la quiero de 8 metros! .

HOMBRE DELPLASTRON.- ¡Yo de 9! .


HOMBRE DE LAS ALTERAS. ¡Una torre de 10 metros! .
HOMBRE DELPLASTRON.- ¡Una torre de 11 metros! .
HOMBRE DE LAS ALTERAS. ¡De 13 metros! .
HOMBRE DEL PLASTRÓN- ¡De 14 metros! .
HOMBRE DE LAS ALTERAS. ¡De 15 metros! ¡Una torre de 15 metros!

(LAS DOS TORRES SE ELEVAN A TODA VELOCIDAD).

CLOWN.- ¡Estáis locos! . ¡Era una broma! . Pararos ya.


HOMBRE DE LAS A L T E R A S . - ¿Lo ves? Ya te lo había dicho.
HOMBRE DEL PLASTRÓN.— Broma o no, prefiero tomar mis precauciones.

- 57 -
HOMBRE DE LAS A L T E R A S . - ¡Albañiles! ¡Una torre de 15 metros! . No
quiero que la mía sea más baja que la del vecino.
(EL HOMBRE DEL PLASTRÓN Y EL DE LAS
ALTERAS SE VAN A SU CASA. EL CLOWN
SE DIRIGE HACIA LA CABANA DEL PAS-
TOR).

VII escena — Títeres

EL CLOWN, EL PASTOR.

CLOWN.- Buenos días pastor.

PASTOR.- Buenos días Augusto, Xilofonio,, Julio, Camembertus.

CLOWN.— ¡Rayosy truenos de música! . ¡No me va Vd. a decir que es


la judía de Augustinito, Xilofonito, Julianito, Camember-
tito, que ha crecido tantísimo! .

PASTOR.— Lo cuido muy bien y con todo mi corazón; será grande y el


pájaro blanco lo verá de lejos. Conozco bien a mi pajarito
blanco, no se posa sino sobre plantas verdes; en este puerto
no hay más que antenas, chimeneas y cables eléctricos.

CLOWN.— ¡Según mi opinión esta judía tendrá unos seis metros de


altura! .

PASTOR.— Soy pastor, pero sé cuidar la tierra. Cuando encontréis mi


pajarito blanco, él sólo vendrá a posarse en mi judía.

CLOWN.— Confía en nosotros. Lo encontraremos. Hasta pronto y cui-


da tu judía con muchísimo cuidado.

PASTOR.— Hasta pronto Augusto, Xilofonio, Julio, Camembertus, y


¡gracias por todo lo que hacéis por mí! .

VIII escena — Actores

JUANITA, CLOWN, HOMBRE DE LAS ALTERAS CON


LA INTERVENCIÓN DEL HOMBRE DEL PLASTRÓN
(TÍTERES).
CLOWN.— Vuelvo con las manos vacías; el hombre de las alteras y el
del plastrón tienen sacos llenos de monedas de plata pero

- 58 -
son más que avaros. Habrá que ser astuto muy para sacarles
una.

JUANITA.- ¡Tengo una idea! . La pasión del hombre de las alteras es


jugar a las cartas.Pedrete tú podrías jugar con él.

PEDRETE.- Yo tengo muy poca suerte y el hombre de las alteras gana


siempre.

JUANITA.- ¡Claro, como que hace trampas! .

PEDRETE.- Me hace falta algo que apostar.

CLOWN.- Apuesta mi violín contra una moneda de plata. Como él está


seguro de ganar, aceptará. Voy a buscarle.

(SALE ENTRE BASTIDORES, LUEGO SE VE EL CLOWN-


POLICHINELA ENTRAR EN LA TORRE DEL HOMBRE
DE LAS ALTERAS Y SALIR CON EL. LUEGO ENTRAN
LOS DOS EN ESCENA).

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- (AL VER A PEDRETE SUELTA UNA CARCA-


JADA) ¿Entonces eres tú el mocoso que quiere
jugar con Ganasiempre? ¿Sabes tú que Gana-
siempre no pierde jamás? (SUELTA UNA NUE-
VA CARCAJADA). Trae una mesa. ¿Qué vas a
apostar? .

PEDRETE.- Este violín.

HOMBRE DE LAS ALTERAS.— ¿Nada menos ni nada más? . Para que veas que
no tengo miedo de un chisgarabís como tú, ahí
va una preciosa moneda de plata bien relucien-
te. Pero no tengo ningún miedo, no será un
mozuelo como tú quien se la lleve. Esa es la
baraja. ¡Qué cartas tan grandes y tan hermosas! .
Vaya chisgarabís, me gusta jugar con cartas
grandes ... ¡veo mejor para hacer trampas! .
(SE PONE A REÍR) ¡Anda juega! . Ahora tú,
ahora yo, ahora tú, ahora yo ... Bueno, has
ganado la primera mano.

(EL HOMBRE DE LAS ALTERAS JUEGA


RUIDOSAMENTE, HACIENDO MUCHOS GES-
TOS Y EXCLAMACIONES. NO DEJA CASI
TIEMPO A PEDRETE DE MIRAR SUS CAR-
TAS). Me toca a mí, me toca a mí, me toca a
mí, ¡he ganado! .

- 59 -
PEDRETE.- ¿Está Vd. seguro? . Yo tenía una dama y Vd. ...

HOMBRE DE LAS A L T E R A S . - Nada de eso, nada de eso. A ti te toca barajar.


No, mejor barajo yo mismo (SACA OSTENSI-
BLEMENTE UN REY QUE COLOCA JUNTO
AL PIE DE LA MESA, DESPUÉS DISTRIBUYE
LAS CARTAS MIENTRAS TANTO EL CLOWN
COGE EL REY Y LO CAMBIA POR UN DOS)
Ahora tú, ahora yo, ahora tú, ahora yo, y ahora
a ver ¿cuál es tu carta? ¡Un tres! y yo ¡un
rey! (ES LA CARTA QUE HA COGIDO DEL
SUELO) ¿Un rey? ¿un rey? pero ¡de dónde
ha salido este dos! ¡Yo creía que había puesto
aquí un rey! .

CLOWN.- ¡Bravo Pedrete! ¡Has ganado!.

HOMBRE DE LAS A L T E R A S . - Si yo no pierdo nunca ...

CLOWN.- Pues hoy Vd. ...

HOMBRE DE LAS A L T E R A S . - ¡Ni hoy, ni nunca! .

CLOWN.— ¡Ah! muy bien, si es así y se empeña en hacer el malo, no


le cantaré nunca más la canción de "la morcilla negra que
se había puesto cascabeles y se hacía pasar por una serpiente
de cascabel".

(EL HOMBRE DE LAS ALTERAS SE PONE A LLORAR).


Vaya, vaya. Esta noche iré a cantarle la canción de la mor-
cilla, no llore más. Total no es tan terrible perder una pie-
cecita de plata cuando se tienen tantas como Vd.

HOMBRE DE LAS ALTERAS.— ¡Tome su pieza y no olvide venir esta noche a


cantarme el aire de "la morcilla"! .

CLOWN.- ¡Prometido! .

(EL HOMBRE DE LAS ALTERAS SE MARCHA Y EL


CLOWN HACE UNA CABRIOLA).

HOMBRE DEL PLASTRÓN.- (POLICHINELA) (DESDE ARRIBA DE LA


TORRE). ¡Socorro, socorro! . ¡No me atrevo a
bajar! . ¡Tengo un vértigo tremendo! . ¡Esta
torre es demasiado alta! .

PEDRETE Y JUANITA.— Un momento, un momento. ¡Vamos a ayudarle! .

CLOWN.— Quietos vosotros dos. ¡Dejad hacer a Augusto Xilofonio, Ju-


lius, Camembertus, el clown volatinero! (SALE DE LA
ESCENA).
- 60 -
IX escena — Títeres

CLOWN, HOMBRE DEL PLASTRÓN (TÍTERES) CON LA


INTERVENCIÓN DE JUANITA Y PEDRETE (ACTORES).

(EL CLOWN - POLICHINELA APARECE, LANZA UNA


CUERDA A LO MAS ALTO DE LA TORRE Y SUBE POR
ELLA).

CLOWN.- (AL HOMBRE DEL PLASTRÓN) Agárrese bien a mí y no


me suelte (BAJAN DEJÁNDOSE DESLIZAR POR LA
CUERDA).

HOMBRE DEL PLASTRÓN.- (CASI ABAJO). Gracias Augusto, Xüofonio,


Julio,Camembertus! ¡Le debo la vida! .

CLOWN.— Me debe Vd. una moneda de plata y nada más.

HOMBRE DEL PLASTRÓN.- Déjeme Vd. abajo y no hablemos más de ello.

CLOWN.— ¿Ah sí? ¡Pues lo subo otra vez! .

HOMBRE DEL PLASTRÓN.- ¡No, no! ¡Compasión! Le daré la moneda.

(EL CLOWN EMPIEZA A BAJAR). Una moneda de metal.

(EL CLOWN EMPIEZA A SUBIR)

CLOWN.— ¡Si no me da una moneda de plata le subo de nuevo hasta


arriba! .
HOMBRE DEL PLASTRÓN.- ¡Basta, basta! . Le daré todo lo que quiere, lo
prometo.

(EL CLOWN DEJA AL HOMBRE DEL PLASTRÓN ABA-


JO DE LA TORRE).

Aquí está su moneda de plata.

CLOWN.- ¡Gracias! . Y acuérdese de que Augusto, Xüofonio, Julio,


Camembertus está siempre a su servicio. La próxima vez le
bajaré a Vd. gratis.

Pero hoy tengo que salvar a un hombre que se ha perdido


en nuestra gran ciudad y que necesita esa moneda de plata.

(EL CLOWN - TÍTERES DESAPARECE Y EL CLOWN -


ACTOR ENTRA EN ESCENA TIRANDO AL AIRE LAS
DOS MONEDAS Y HACIENDO CABRIOLAS).

- 61 -
X escena — Actores

PEDRETE, JUANITA, HOMBRE DEL MOLINO, CLOWN,


HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS, MUJER DE LAS JAU-
LAS (PERSECUCIÓN DE TÍTERES).

CLOWN.— ¡Ahí están las dos monedas! .

JUANITA.— Vamos a casa de la mujer de las jaulas.

HOMBRE DEL MOLINO.- (PASANDO) Quisiera un poco de aceite, de


aceite para hacer andar un molino de modelo
antiguo. Sin aceite el molino no rueda más y
los pájaros no pueden cantar.

HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS.-Ultimas noticias. La judía de la Colina de los


Mercaderes alcanza la altura nunca vista de ¡23
metros! .

JUANITA.- ¿Vienes Augusto, Xilofonio, Julio, Camembertus? ¡Vamos


a comprar el pájaro! .

CLOWN.— Voy a avisar al pastor. Debe de estar muy impaciente. Vo-


sotros dejáis volar al pájaro y nosotros lo esperaremos en la
Colina de los Mercaderes (EL CLOWN SALE).

PEDRETE.- (A LA MUJER DE LAS JAULAS). Señora venimos a com-


prar el pájaro blanco.

MUJER DE LAS J A U L A S . - ¿Qué dinero llevas en tu cartera? .

PEDRETE.— No tengo cartera, pero tengo dos monedas de plata en este


bolsillo.
JUANITA.— Enséñamelas, Pedrete.

(LA MUJER DE LAS JAULAS LES DA UNA JAULA CON


UN PAJARO).

JUANITA.— ¡Este pájaro no es blanco! .

MUJER DE LAS JAULAS.— Es el más blanco que tengo.

PEDRETE.- Hemos dado dos monedas de plata para comprar un pájaro


blanco.
MUJER DE LAS JAULAS.- ¡Trato hecho! . Coged éste. Miradlo de cerca,
es blanco.

- 62 -
JUANITA.- ¡Es gris sucio! .

PEDRETE.- (SE GUARDA LAS MONEDAS). Adiós señora. Ven Juani-


ta (DEJAN LA JAULA).

MUJER DE LAS J A U L A S . - ¡Ladrones! ¡Ladrones!. ¡Estos pillos me deben


dos monedas de plata! Han tenido la audacia de
no querer la mercancía ... (LOS NIÑOS SE ES-
CAPAN, PERSEGUIDOS POR LA MUJER DE
LAS JAULAS, EL HOMBRE DE LOS PERIÓ-
DICOS, EL DEL FUSIL, LA MUJER DEL PAS-
TEL, LA DEL SOMBRERO (ACTORES Y
TÍTERES).

XI escena — Actores

VOCES, MALEZA, SAVIA.

(TODOS LOS PERSONAJES DESAPARECEN).

VOCES.- Un saco de trigo, un haz de leña, tres sacos de trigo, cuatro


haces de hojas, un haz de leña, dos sacos de trigo ...

MALEZA.- ¡Qué lata, qué lata, qué lata! . ¡Perdónenme por favor! .
Tengo que preparar diez haces de leña y diez sacos de trigo

SAVIA.- Pues los niños están esperando el fin de tu historia. El pastor


se impacienta y tiene que encontrar su pájaro blanco. ¡Qué
tus clientes esperen un poco! .

¡Bastante han esperado mujer! ¡Hasta pronto! .

MALEZA.-
XII escena

(SOLA SE DIRIGE A LOS NIÑOS)

SAVIA.- Amiguitos, sobre todo no os enfadéis con Maleza, tiene su


trabajo, pero lo malo es que no podemos continuar la histo-
ria sin él. Y no podemos ayudarle a hacer y atar los sacos y
los haces. ¡Es todo un arte difícil! . Los nudos que haríamos
en su lugar estarían ciertamente mal hechos. Y a Maleza le
gusta el trabajo muy bien hecho y también a su clientela ...
¿Qué podríamos hacer? . ¡Ah! ¡Tengo una idea! . Para ani-
marle y que acabe prontito su quehacer vamos a cantar la
canción del pájaro blanco.

- 63 -
El refrán es así: (LO CANTA SOLO).

¡Ay! pajarito blanco - m i pajarito ya no vuelas ni cantas -


ya te has perdido.

Ahora todos juntos (CANTAN EL REFRÁN) (ELLA


SOLA)

Tu pico es de brillantes - de mil colores


y tus alas son nieve — y amor y flores.
Cuando vuelas ligero — sobre el desierto
se llena de jardines — el suelo muerto.

(TODOS) ¡Ay pajarito blanco — mi pajarito


Que te fuiste volando — y te has perdido!

(ELLA) Tus ojos son estrellas — centelleantes


que parecen torrentes — de diamantes
son ríos caudalosos — que van al mar
y tus plumas al viento — dejas flotar.
¡ Ay pajarito — el más blanco de todos
Y el más bonito! .
Sin tí nada me importa — ni nada quiero
eres mi bien, mi guía — y mi lucero.

(TODOS) ¡Ay pajarito blanco - mi pajarito


que te fuiste volando - y te has perdido!

(ELLA) Eres rosa, caricia — fruta, color,


plumas de seda pura — cariño, amor.
¡ Ay pajarito — ya no tengo cabana,
ni tienes nido! .

(TODOS) ¡ Ay pajarito blanco — mi pajarito


ya no vuelas ni cantas —ya te has perdido!

ACTO II

I escena — Actores

MALEZA, SAVIA.
MALEZA. Muchas gracias a todos. ¡Qué bien habéis cantado! Ya el
trabajo se terminó. Ahora a buscar al pájaro blanco. ¡Ya
veréis como terminamos por encontrarlo! ¡Música! .

- 64
II escena — Títeres

HOMBRE DE LAS ALTERAS, DEL PLASTRÓN, CLOWN,


PASTOR, CON EL PASO DEL HOMBRE DEL PERIÓDICO
(ACTOR).

HOMBRE DEL PERIODICO.- ¡Ultirnas noticias! . La judía de la Colina de los


Mercaderes alcanza ya los 100 metros.

(DEL LADO DE LOS TÍTERES SE VE A LA JUDIA CRE-


CER, CRECER... EL PASTOR Y EL CLOWN LA CONTEM-
PLAN CON ADMIRACIÓN, EL HOMBRE DE LAS ALTE-
RAS Y EL DEL PLASTRÓN, SE ACERCAN A LA PLANTA).

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- Como soy el hombre más fuerte de estos con-
tornos, declaro que la judía ¡me pertenece! .

HOMBRE DEL PLASTRON.- Como soy el hombre más rico de este país, decla-
ro que la judía ¡me pertenece! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- El más fuerte! .

HOMBRE DEL PLASTRON.- El más rico! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- El más fuerte! .

HOMBRE DEL PLASTRÓN.- El más rico! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- El más fuerte! .

HOMBRE DEL PLASTRON.- El más rico! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- A cada uno la mitad de la judía.


HOMBRE DEL PLASTRON.- De acuerdo. A cada uno la mitad de la judía. En
cuanto a estos dos hombrecitos, ¡ya no están
en su casa! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- ¡Eh! , estáis en nuestra casa y lo mejor que po-
déis hacer es salir corriendo.

CLOWN.- No tienen Vds. derecho de hacer esto. Esta planta no les


pertenece. Sólo el pastor la ha cuidado, con amor. ¡Cuanto
más la quería, más crecía! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- Se os ha dicho que os marchéis. ¿Qué esperáis? .

- 65 -
HOMBRE DEL PLASTRON.- ¿Esperáis que el hombre del fusil venga a echa-
ros por la fuerza? .

CLOWN.— (AL PASTOR). Vente. No tenemos fuerza para discutir con


estos dos miserables.

(PASA EL HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS).

HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS.-El pastor ha sido expulsado de la Coüna délos


Mercaderes. En cuanto ha abandonado la judía
prodigiosa, la planta ha empezado a mustiarse
(SOBRE LA COLINA SE VE LA JUDIA QUE
SE ACHICA RÁPIDAMENTE).

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- Volved, por Dios, volved.


HOMBRE DEL PLASTRON.- ¡Volved, volved! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- (AL PASTOR) ¡Te nombro guardia de la judía! .


HOMBRE DEL PLASTRÓN. - ¡Te pagaré para que hagas compañía a esta no-
ble planta! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- ¡Te decoro y te nombro Gran Maestre de la Or-


den de la Gran Judia! .

HOMBRE DEL PLASTRON.- ¡Yo te impongo la Medalla de la Gran Judía


Florecida! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- ¡Haz buena guardia! .

HOMBRE DEL PLASTRÓN.- ¡No te marches sin nuestro permiso! .

(EL HOMBRE DE LAS ALTERAS Y EL DEL PLASTRÓN


SE METEN EN SUS RESPECTIVAS TORRES; PASA EL
HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS).

HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS.-El hombre de las alteras y el del plastrón han


vuelto a llamar al pastor y la judía se revigoriza
a simple vista.

CLOWN.- Juanita y Pedrete han ido a comprar el pájaro blanco, ¡de-


ben haberlo soltado ya! .

PASTOR.- ¡Qué importa ya! . El hombre del plastrón y el de las alte-


ras no me dejarán marchar.

CLOWN. No te preocupes. Voy a encontrar a mis amigos y ya verás


como te sacamos de este mal paso (BAJA POR LA COLINA).

- 66 -
III escena — Actores

PEDRETE, JUANITA, CLOWN.

(ENTRAN JUANITA Y PEDRETE).

JUANITA.— Augusto, Xüofonio, Julio, Camembertus ha olvidado su


sombrero ...

PEDRETE.— Mira, Agustinito, Xilofinito, Julianito, Camembertito nos


llama.

JUANITA.- ¿Qué quiere decirnos Augustinito, Xilofinito, Julianito,


Camembertito? .

PEDRETE.— Nunca conseguiremos comprenderlo.

(ENTRA EL CLOWN).

JUANITA.— Augusto, Xüofonio, Julio, Camembertus, ¡llegas a punto! .

CLOWN.- ¿Y el pájaro blanco? .

PEDRETE.— ¡El pájaro que la mujer de las jaulas quiere vendernos es

gris! .

CLOWN.— ¡La sinvergüenza! .

JUANITA.— Augustinito, Xüofonito, Julito, Camembertito quiere decir


algo.
CLOWN.— ¿Qué pasa Augustinito, Xüofonito, Julito, Camembertito?
(LA RATITA SACA DEL SOMBRERO UNA BARAJA Y
MUEVE LA CABEZA DE IZQUIERDA A DERECHA).
¿Quieres decir que no es jugando a las cartas con el hombre
de las alteras que encontraremos el pájaro blanco? .

(LA RATA SACA UN PEDAZO DE CORDEL Y UNA MO-


NEDA Y MENEA LA CABEZA DE DERECHA A IZQUIER-
DA).

¿Que no es haciendo favores contra dinero que encontrare-


mos al pájaro blanco? .

(LA RATA SACA DEL SOMBREROUN PAÑUELO, HACE


EL GESTO DE SONAR AL CLOWN Y LUEGO RÍE).

- 67 -
¡Ah! ¡Ya comprendo! . Tenemos que ayudar a la gente
sin esperar nada de ella, únicamente por bondad ... es así
como encontraremos el pájaro blanco. ¿Es ésto? .

(LA RATA HACE GRANDES SIGNOS AFIRMATIVOS


CON LA CABEZA).

Creo que Augustinito, Xilofonito, Julito, Camembertito,


tiene razón. Hemos conseguido procurarnos dos monedas de
plata jugando a las cartas y haciéndonos pagar el favor. De
verdad no es muy bonito que digamos.

PEDRETE. El hombre de las alteras había hecho una trampa.

JUANITA.- ¿Y por qué el hombre del plastrón había construido una


torre tan alta? .

CLOWN.- Entonces, ¿no estáis de acuerdo con Agustinito, Xilofonito,


Julianito, Camembertito? .

JUANITA.- ¡Nunca hemos dicho eso! .

PEDRETE. Yo creo que tiene razón. Busquemos qué personas pueden


esconder el pájaro blanco y seamos serviciales con ellas.

CLOWN.- ¿Quién es el primer sospechoso? .

JUANJ.TA.- La mujer de las jaulas, naturalmente.

PEDRETE. ¿Qué podríamos hacer? .

CLOWN.- Mirad. Se ha olvidado una jaula en esa pared.

JUANlTA.- Pues anda, ya está.

PEDRETE. Pero ve tú a devolvérsela Augusto, Xilofonio, Julio, Camem-


bertus; porque si nos ve, volverá a hablar seguramente del
pájaro gris.

IV escena — Actores

CLOWN, MUJER DE LAS JAULAS, PEDRETE, JUANITA,


EL HOMBRE DEL MOLINO.

(EL CLOWN SE DIRIGE HACIA LA MUJER DE LAS


JAULAS)

68 -
CLOWN. - Señora, le traigo su jaula.
MUJER DE LAS JAULAS.- Especie de payaso mal pintado, ponga Vd. esta
jaula en donde la ha cogido. ¿No ve Vd. que es
una jaula-trampa? . ¡La quita Vd. de la pared jus-
to en el momento en que un jilguero iba a
entrar! .

CLOWN.— Perdóneme Vd. señora, voy a poner otra vez la jaula en el


mismo sitio.
MUJER DE LAS JAULAS.- Es tarde ahora, ¡el jilguero se ha ido! . ¡Tengo
muchas ganas de encerrarle a Vd. en su sitio ¡.
(COGE UN COGE MARIPOSAS Y SE PONE A
PERSEGUIR AL CLOWN).

PEDRETE.- Augusto, Xilófono, Julio, Camembertus está ocupado para


un rato, vale más que continuemos sin él.

JUANITA.- ¡Mira! . Una vaca entra en casa del hombre de las alteras.
¡Va a estropearlo todo! .

PEDRETE.- Y el hombre del plastrón se ha olvidado una chaqueta en la


calle. Corro a llevársela.

JUANITA.- Durante este tiempo voy a hacer un dulce para la mujer del
pastel.

PEDRETE.- ¡Qué buena idea! .


(PASA EL HOMBRE DEL MOLINO; EMPUJADO POR
LA MUJER DE LAS JAULAS QUE PERSIGUE SIEMPRE
AL CLOWN).
HOMBRE DEL MOLINO.- Yo quisiera aceite, aceite para un molino an-
tiguo que no puede andar sin él. Como no anda
los pájaros no cantan.

V escena — Títeres

PEDRETE, EL HOMBRE DE LAS ALTERAS, EL DEL


PLASTRÓN (PEDRETE DESCUELGA UNA CHAQUETA
QUE CUELGA EN EL EXTERIOR DE UNA TIENDA Y
LA ENTRA DENTRO, DESPUÉS ECHA FUERA A LA
VACA. PASA EL CLOWN PERSEGUIDO POR LA MUJER
DE LAS JAULAS).

- 69 -
HOMBRE DE LAS ALTERAS.- ¿Estás loco? ¿Qué haces? .
PEDRETE.— Echo fuera esta vaca, porque lo va a estropear todo en su
casa.
HOMBRE DE LAS ALTERAS.— ¿No ves que es una vaca que acabo de comprar
para mi desayuno? .
PEDRETE.— Lo siento mucho ...
HOMBRE DEL PLASTRÓN.— ¿Quién es el atontao que ha metido en la tienda
esta chaqueta llena de polilla? .
HOMBRE DE LAS ALTERAS.— Es este tunante sinvergüenza, vamos a darle una
paliza que le deje un recuerdo (EMPIEZA A
PERSEGUIRLE).

VI escena — Actores

JUANITA. LA MUJER DEL PASTEL.


(PASA LA MUJER DEL PASTEL).

JUANITA.- (ENTRANDO CON UN DULCE). Señora, he preparado este


postre, espero que me hará Vd. el favor de probarlo.
LA MUJER DEL PASTEL.- ¡Oh! qué gentileza (SE COME EL POSTRE)
¡Ay! pero qué mala idea. ¡Traerme un dulce y
estoy a régimen! . Esto va a hacerme engordar.
¡Has querido burlarte de mí! . ¡Estúpida! .
(JUANITA DA UN EMPUJÓN AL PASAR CO-
RRIENDO AL HOMBRE DE LOS PERIÓDI-
COS, Y ESTE EMPIEZA A PERSEGUIRLA
JUNTO CON LA MUJER DEL PASTEL HASTA
LA COLINA DE LOS MERCADERES).

VII escena — Actores

PEDRETE, CLOWN, EL HOMBRE DEL MOLINO, LA


MUJER DEL SOMBRERO (EN LA ESCENA PEDRETE Y
EL CLOWN).
PEDRETE.- ¡Uf! . Hemos conseguido escaparnos otra vez.

- 70 -
CLOWN." ¡No por mucho tiempo! .

(PASA EL HOMBRE DEL MOLINO)

HOMBRE DEL MOLINILLO.— Quisiera un poco de aceite, aceite para un moli-


no antiguo que no puede andar sin él. Si el
molino no anda los pájaros no cantan.

PEDRETE.— Yo creo que Juanita no ha tenido más suerte que nosotros


con la mujer del pastel. Ocupémonos del sospechoso núme-
ro cinco: ¡la mujer del sombrero! .

CLOWN.— Vamos a transformarla en una vedette, va a estar encantada.

(ENTRA LA MUJER DEL SOMBRERO).


CLOWN.— Estamos a tus pies, estrella del firmamento.

PEDRETE.— Un autógrafo, señorita, por favor.

CLOWN.— ¡Todos los periódicos hablan de Vd.! .

PEDRETE.— Qué felicidad tan grande poder saludar a una vedette tan
importante.

CLOWN.— ¡Súbase a nuestras espaldas para que la llevemos en triunfo! .

(LA IZAN SOBRE SUS ESPALDAS, JUSTO EN ESTE MO-


MENTO ENTRAN EN TROMBA: EL HOMBRE DE LAS
ALTERAS Y JUANITA. DEL SUSTO PEDRETE Y EL
CLOWN DEJAN CAER LA MUJER DEL SOMBRERO
QUE ENFADADA SE JUNTA A LOS PERSEGUIDORES
QUE CORREN EN TODAS LAS DIRECCIONES EN LA
ESCENA Y SOBRE LA COLINA DE LOS MERCADERES.
VUELTAS, REVUELTAS, SALTOS, ETC.)

VIII escena - Títeres

HOMBRE DEL FUSIL, DE LOS PERIÓDICOS, JUANITA,


CLOWN, PEDRETE, EL HOMBRE DE LAS ALTERAS,LA
MUJER DEL SOMBRERO, LA DE LAS JAULAS, EL
HOMBRE DEL PLASTRÓN, LA MUJER DEL PASTEL.

(EL HOMBRE DEL FUSIL VA DE UN LADO A OTRO,


SIN PARAR, TIENE MUCHO CALOR, JUANITA ENTRA
CON UN VASO EN LA MANO Y LO PRESENTA AL HOM-

- 71 -
BRE DEL FUSIL. EN ESTE MOMENTO LLEGA EL DE
LOS PERIÓDICOS).

HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS.- ¡No le da vergüenza beber, cuando su obligación


es hacer pum pum! .

HOMBRE DEL F U S I L . - ¿Y a Vd. qué le importa? . ¿Quién le manda me-


terse en camisas de once varas? .

(EMPIEZAN A PERSEGUIR AL HOMBRE DE LOS PERIÓ-


DICOS; EN ESTE MOMENTO APARECEN EL CLOWN Y
PEDRETE QUE HACEN UN QUIEBRO MIENTRAS QUE
EL HOMBRE DE LAS ALTERAS, LA MUJER DEL SOM-
BRERO, LA DE LAS JAULAS, POR UN LADO, Y POR EL
OTRO EL HOMBRE DEL PLASTRÓN Y LA MUJER DEL
PASTEL SE CAEN SOBRE EL HOMBRE DE LOS PERIÓ-
DICOS).

HOMBRE DEL F U S I L . - ¡Todo el mundo al calabozo! ¡Saldréis cuando


os hayáis calmado! .

¡Ala! ¡enfila! ¡un dos, un dos ...! .

IX escena — Actores

CLOWN, PEDRETE, JUANITA, HOMBRE DEL MOLI-


NO.

CLOWN.- ¡Uf! ¡De buena nos hemos librado! .

PEDRETE.- ¡Juanita! Ven, ya no hay peligro.

JUANITA.- (ENTRANDO) ¿Dónde están? .

PEDRETE.— El hombre del fusil los ha encerrado en el calabozo esperan-


do que se calmen.

CLOWN.— Augustito, Xilofinito, Julito, Camembertito, con tu idea de


hacer favores ¡vaya la que has armado! .

(LA RATA HACE QUE NO CON LA CABEZA).

HOMBRE DEL MOLINO.- (PASANDO) Yo querría aceite, aceite para un


antiguo molinillo que no puede andar sin él. Y
si el molino no anda los pájaros no cantan.

- 72 -
PEDRETE.- Augusto, Xilofonio, Julio, Camembertus, ¿no tienes en tu
sombrero una botellita de aceite? .
CLOWN.- ¡Sí! ¿Por qué? .
PEDRETE.— ¡Hace tiempo que habríamos debido de dar un poco de acei-
te a este pobre viejo! .
JUANITA.— ¡Qué contento estará cuando su molino esté bien aceita-
do! .
CLOWN.- (CON LA BOTELLITA EN LA MANO). He aquí con qué
hacer ronronear el molino de este buen hombre (RÍE).
PEDRETE, JUANITA Y EL CLOWN.
(GRITAN JUNTOS). ¡Ohé! ¡hombre del molino! ¡Tene-
mos aceite! (ENTRA EL HOMBRE DEL MOLINO RA-
DIANTE DE ALEGRÍA).
CLOWN.— Le pedimos perdón de no habérselo dado antes, pero estába-
mos muy ocupados buscando un pájaro blanco (VIERTE
EL ACEITE).
(EL HOMBRE DEL MOLINO, DA VUELTAS A LA MANI-
VELA Y UN CANTO DE PAJARO SALE DEL UTENSILIO.
JUANITA, PEDRETE Y EL CLOWN APLAUDEN. EL
HOMBRE DEL MOLINO SACA CON PRECAUCIÓN EL
CAJONCITO, METE LA MANO Y SACA EL PAJARO
BLANCO. (ESTUPEFACCIÓN) SE LO DA A JUANITA).

JUANITA.- Gracias, gracias señor.

PEDRETE.— ¡Suéltalo! Irá a posarse sobre la judía del pastor.

(JUANITA LO SUELTA HACIA EL INTERIOR; DESPUÉS


SE VE VOLAR EL PAJARO POLICHINELA HACIA LA
JUDIA EN LA COLINA DE LOS MERCADERES).

X escena. Todos los polichinelas

Y LA INTERVENCIÓN DE LOS ACTORES CLOWN,


JUANITA Y EPDRETE.
(EL HOMBRE DE LAS ALTERAS Y EL DEL PLASTRÓN
SALEN DE SU TORRE Y SE DIRIGEN HACIA LA CA-

- 73 -
BAÑA DEL PASTOR. EN LA ESCENA PEDRETE, JUANI-
TA Y EL CLOWN MIRAN ANSIOSAMENTE).

CLOWN.- ¡Señores! ¡Déjenlo marchar! .

PEDRETE.— ¡Tiene que volver a su tierra ¡.

JUANITA.— Ha encontrado por fin su guía, ¡el pájaro blanco! .

HOMBRE DE LAS ALTERAS.- ¡Nada de esto! ¡es el guardián! ¡Nosotros le

hemos decorado! .

HOMBRE DEL PLASTRÓN.- Para esto lo pagamos.

CLOWN.— ¡Vuestro dinero le importa un pepino! .

PEDRETE.— ¡Quiere volver a su pueblo! .

JUANITA.— A su rebaño.

PEDRETE.— Sus prados verdes ...

CLOWN. - Su riachuelo ...

HOMBRE DE LAS A L T E R A S . - Es guardián ...

HOMBRE DEL PLASTRÓN.- ¡Y guardián se quedará! .


HOMBRE DE LAS A L T E R A S . - ¡Eh! ¡Eh! ¡Buenas gentes! ¡Venid a ayudar-
nos! .

HOMBRE DEL PLASTRÓN.- ¡Quieren robarnos nuestra judía! .

(LLEGAN EL HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS, EL DEL


FUSIL, LA MUJER DEL SOMBRERO CON UNA SOM-
BRILLA, LA DEL PASTEL CON UN RODILLO DE COCI-
NA, LA MUJER DE LAS JAULAS CON UNA RED. EN LA
ESCENA EL HOMBRE DEL MOLINO DA VUELTAS
A LA MANIVELA. AL SON DE LA MÚSICA LOS ASAL-
TANTES BAILAN Y LA JUDIA ONDULA EN TODOS LOS
SENTIDOS.

EL PAJARO BLANCO LLEVA UNA PINZA EN EL PICO.


CON ELLA AGARRA LA PUNTA DEL TALLO DE LA
JUDIA, LO SEPARA DEL PALO QUE MANTIENE LA
PLANTA, Y VOLANDO ENREDA EN EL SÓLIDAMENTE
A LOS ASALTANTES. EL TALLO ESTARA CONTINUA-
DO POR UN CORDEL QUE SALDRÁ SEGÚN EL PAJARO
VAYA TIRANDO).

- 74 -
HOMBRE DEL PLASTRÓN.- A m í no! ¡Soy el más rico del pueblo! .

HOMBRE DE LAS A L T E R A S . - A mí no! ¡Soy el más fuerte! .

MUJER DE LAS J A U L A S . - A mí no! ¡Yo vendo pájaros! .

HOMBRE DE LOS PERIÓDICOS.- A m i n o ! ¡Eso no lo dice el periódico! .

HOMBRE DEL F U S I L . - A mí no! ¡Yo tengo un fusil! .

MUJER DEL PASTEL.- A mí no! ¡Yo sigo un régimen! .

MUJER DEL SOMBRERO. A mí no! ¡Yo soy una vedette! .

(EL PAJARO BLANCO, CUANDO HA CONSEGUIDO


REDUCIR A LA IMPOTENCIA A TODOS LOS RECALCI-
TRANTES, VA A POSARSE SOBRE LA ESPALDA DEL
PASTOR QUE ES EL ÚNICO QUE HA QUEDADO LIBRE
DEL TALLO DE LA PLANTA. AL SON DE LA MÚSICA
DESCIENDE MAJESTUOSAMENTE DE LA COLINA Y
HACE SU ENTRADA EN ESCENA CALUROSAMENTE
APLAUDIDO POR JUANITA, PEDRETE Y EL CLOWN).

EL PASTOR.- ¡Muchísimas gracias queridos amigos! .

(MIENTRAS LOS TRES CORREN HACIA EL PASTOR,


EL HOMBRE DEL MOLINO, DESAPARECE ANDAN-
DO DE PUNTILLAS).

PEDRETE. - No es a nosotros que debes dar las gracias, pero al buen


hombre del molino.

JUANITA. - ¡Se ha ido! .

CLOWN. - ¡Era un mago! .

PASTOR.- Si alguna vez le encontráis, le daréis las gracias en mi nom-


bre. Yo tengo que marcharme, el camino será muy largo.
Pero no quiero separarme de vosotros sin haber dado las
gracias a Augustinito, Xilofonito, Julito, Camembertito
(SE ACERCA AL SOMBRERO Y DA LA MANO A LA
RATITA). ¡Muchísimas gracias mi buena ratita! .

(AL CLOWN) ¡Cuídala bien ¡ ¡Hasta la vista! .

(EL PASTOR Y EL PAJARO BLANCO SE MARCHAN).

- 75 -
CLOWN.- (RECOGIENDO TODAS SUS COSAS). Y ahora voy a in-
terpretar la canción "del gusanito que comía zanahorias en
invierno".

(COREOGRAFÍA DE LOS TRES HÉROES).

XII escena — Actores

VOCES, MALEZA, SAVIA.

VOCES.- (TODOS LOS PERSONAJES HAN DESAPARECIDO) Un


saco de trigo, dos haces de leña, dos sacos de trigo, tres ha-
ces de leña, un haz de leña, tres sacos de trigo, dos haces de
leña.

MALEZA. Ya voy, ya voy, ya voy ...

Era tiempo de encontrar el pájaro blanco, mi almacén vuelve


a estar vacío. El trabajo espera, se ha terminado el recreo.

Pero, no lo olvidéis, cuando encontréis hojas en el bosque,


admiradlas, ¡son tan bonitas! .

SAVIA.- Y cuando veáis un pájaro blanco en el cielo, saludadle, ¡es


un amigo! .

SAVIA Y MALEZA.- ¡Hasta la vista! .

TELÓN

~ 76 -

También podría gustarte