Tension del pavimento

Para calcular las tensiones en un pavimento en una obra en construcción es necesario

considerar diversos factores, como las cargas que soportará el pavimento, las propiedades
de los materiales utilizados y las condiciones de diseño.
La carga soportada por el pavimento es uno de los factores más importantes a considerar
ya que determinará las tensiones desarrolladas en el pavimento. Las cargas pueden ser
estáticas o dinámicas y deben tener en cuenta el peso del tráfico vehicular y cualquier
carga adicional que pueda imponerse sobre la superficie de la carretera, como cargas de
transporte de materiales pesados.

La carga muerta es el peso del vehículo y cualquier carga en la carretera que permanezca
constante, como un vehículo pesado estacionado. Las cargas dinámicas, por otro lado, se
refieren a los efectos del movimiento de los vehículos, como los movimientos de carga y
descarga de camiones o el movimiento continuo de vehículos.

Una vez determinadas las cargas a las que estará sometido el pavimento, se deben
considerar las características de los materiales utilizados en la construcción del pavimento.
Los materiales típicos utilizados en la construcción de pavimentos son el hormigón y el
asfalto.

El hormigón es un material compuesto por cemento, áridos como arena y grava y agua.
Tiene la ventaja de tener una alta resistencia a la compresión, lo que lo hace apto para
soportar cargas pesadas. Sin embargo, el hormigón tiene una baja resistencia a la tracción,
lo que puede provocar grietas y fisuras en el pavimento.

El asfalto, por otro lado, es un material compuesto principalmente de betún y áridos. Es

más flexible que el hormigón, tiene mayor capacidad para absorber deformaciones y es
adecuado para soportar cargas dinámicas. Sin embargo, el asfalto puede tener una menor
resistencia a la compresión, lo que puede limitar su uso en áreas muy cargadas.

Una vez determinadas las propiedades de los materiales utilizados, se deben considerar
las condiciones de diseño del pavimento. Las condiciones de diseño incluyen aspectos
como el espesor del pavimento, el tipo de cimentación sobre la cual construir y cualquier
otra consideración específica del proyecto.

El espesor del pavimento es un factor clave para determinar las tensiones desarrolladas en
el pavimento. Cuanto más grueso sea el pavimento, mayor será su capacidad para
soportar cargas pesadas y reducir la tensión del tráfico. Sin embargo, un mayor espesor
también significa mayores costos de construcción.
La base sobre la que se coloca el pavimento también afecta las tensiones en el pavimento.
Una base fuerte y bien compactada distribuye las cargas de manera más uniforme,
reduciendo así las tensiones creadas por el pavimento. Por otro lado, una cimentación
insuficiente puede provocar asentamientos y deformaciones del pavimento.

Además de estos aspectos, también es importante considerar el clima y las condiciones

ambientales en la zona donde se construirá el pavimento. Por ejemplo, en áreas donde las
temperaturas pueden ser extremas, se debe considerar la expansión y contracción del
pavimento debido a los cambios de temperatura.

En resumen, para calcular las tensiones del pavimento en una obra es necesario
considerar varios factores, como la carga que soportará el pavimento, las propiedades de
los materiales utilizados y las condiciones de diseño. Estas consideraciones son
importantes para garantizar la durabilidad y resistencia del pavimento a lo largo del
tiempo.

Para calcular la tensión del pavimento de una obra en construcción, utilice la siguiente
fórmula:
Tensión (T) = Peso (P) / Área (A)

Dónde:

El peso (P) es el peso total de la pieza de trabajo y se puede calcular multiplicando el

volumen del pavimento por su densidad y gravedad.
El área (A) es el área total de la superficie de la carretera.
Para calcular el peso total del proyecto se debe multiplicar el volumen del pavimento por
su densidad y gravedad.

El volumen (V) de un pavimento se puede calcular multiplicando el ancho, largo y alto del
proyecto.

V = Ancho x Largo x Alto = 8m x 250m x 0.25m = 500 m³

La densidad del pavimento depende del tipo de material utilizado. Suponemos una
densidad de 2400 kg/m3.

El peso (P) de un pavimento se puede calcular multiplicando el volumen por la densidad y

la gravedad.

P = V x Densidad x Gravedad = 500 m³ x 2400 kg/m³ x 9.8 m/s² = 11,760,000 kg

Para calcular el área del pavimento (A), multiplique el ancho por el largo.
 A = Ancho x Largo = 8m x 250m = 2000 m²

Finalmente, podemos calcular la tensión del pavimento (T) dividiendo el peso total por el
área:

T = Peso / Área = 11,760,000 kg / 2000 m² = 5,880 kg/m²

Por lo tanto, la tensión del pavimento en esta obra es de 5,880 kg/m².