CAPITULO 1 LECCION 7

Cuerpo|Interdependencia |Miembro |
TODO LO QUE NO SE
EJERCITA SE
ATROFIA
Hay una ley de fisiología y dice que todo lo que no
se usa, se atrofia. Cuando cumplí con el servicio
militar en mi país me fracturé el tobillo derecho y
me colocaron un yeso por dos meses. ¡No veía la
hora de librarme de ese azote! Cuando me lo
quitaron, quería pararme y salir caminando, pero
no pude. Por dos meses tuve el tobillo rígido.
Cuando quise caminar fue como si el yeso siguiera
en su sitio. No podía mover el tobillo derecho
como lo hacía con el izquierdo. ¡La recuperación
me llevó dos meses más! Si me había fracturado el
tobillo, ¿por qué se atrofiaron los músculos de la
pierna?

¿Sabes cuántas personas atrofiadas van y vienen

dentro de la Iglesia? Como el Cuerpo de Cristo es
un todo interrelacionado, si uno se atrofia afectará
al resto de las partes. Dios te dio un don, si no lo
desarrollas perdemos todos. Quizá no te importa si
tu hermano trabaja o no porque tú sirves al Señor
igual. Pero las cosas no funcionan así dentro de la
Iglesia. Más vale desarrollarte. El resto del Cuerpo
lo necesitas para que todos puedan ganar.

“Perderás todo lo que dejes de usar”.

La ley del “todo o nada”:

La ley del todo o nada es un principio que rige el funcionamiento del sistema neuromuscular.
Por ejemplo, si las fibras musculares no llegan al nivel mínimo de estimulación, no se podrán
contraer. Por lo tanto, el músculo no funcionará correctamente. ¿Te acuerdas del penal que erró
Roberto Baggio, por el cual Italia quedó fuera del campeonato Mundial de fútbol? Fue el único
tiro penal que falló en todo el campeonato, pero justo con ese perdió todo el equipo. Si tú fallas,
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 perderá todo el “equipo” llamado Iglesia. ¡Piénsalo un instante! Dios diseñó a Su Iglesia de tal
manera que nos ató a un organismo viviente y nos hizo ser interdependientes con los demás.
Hay “hermanos” que se alegran cuando cae algún miembro de la Iglesia. Es muy común la
frase: “se lo dije Pastor. Eso le pasa porque no me escuchó. ¡Ahora que ese cabezón sufra y se
aguante!”. No entiendo a la gente que se alegra por situaciones tan trágicas como esas. Pero
debes entender que la persona caída es tan miembro del Cuerpo como tú. Si pierdes un ojo,
quedarás con la mitad de la visión. La mano puede decir: “no me importa porque no soy ojo”.
¡No!.

“Todos somos interdependientes porque así lo estableció nuestro

Dios. Ese es el Cuerpo de Cristo”

Renuncia a la ceguera espiritual:

El Apóstol Pablo dice: Efesios 1:17-18.
“No ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones, para que el Dios de
nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de
él, alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado,
y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos”.

Si hasta ahora no ves el Cuerpo de Cristo, no ha visto nada. Pídele al Señor que te revele Su
Cuerpo, el lugar que ocupas y su función. Quizá estás llamado a ser rodilla y el Cuerpo anda con
esa articulación entumecida por falta de uso. Cuando debas subir una escalera te darás cuenta la
falta que te hace esa rodilla. Cuando el Cuerpo vence, ganamos todos por igual. Todo lo que
hagas como discípulo de Jesucristo será dentro del Cuerpo. Esto sólo es posible si eres un
miembro funcional.

Si vas para Miami no podrás ir sólo, debes hacerlo con tu cuerpo. Cuando trabajas en la oficina,
no envías tu boca a tu casa para almorzar. ¡No! Vas con todo el cuerpo completo para tu casa.
Esto parece un tanto descabellado, pero así piensa gran parte de la Iglesia. ¡Por eso siguen
peleándose y dividiéndose! Todo lo que haga cualquier miembro expresará la vida que hay
dentro del cuerpo. Por eso es importante entender esto.

“Somos la expresión de la vida de un organismo viviente llamado iglesia”

El Cuerpo de Cristo trasciende los límites geográficos:

Cuando voy de gira a otro país no lo hago sólo, me acompaña todo el Cuerpo de Cristo (mi
congregación). Todos los miembros van conmigo y yo me quedo con ellos en Viña del Mar. “El
aspecto geográfico, no anula la realidad del Cuerpo”.
Declara en voz alta: “soy un miembro del Cuerpo de Cristo”.
El Apóstol Pablo dice en Romanos 12:4:
“Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la
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 misma función”.

Debes aceptar la diversidad dentro de la unidad. Algunos confunden unidad con uniformidad y
no es lo mismo. Debes aceptar la diversidad.
En la Iglesia encontrarás gente gritona y otros callados. Algunos danzan hasta con los anuncios
de las actividades semanales porque les gusta eso. ¡A otros no los mueve ni una tormenta de
viento! Otros se fascinan sirviendo a los pobres, los niños y los necesitados. Otros están
contentos orando, ayunando y guerreando. Debes respetar y valorar la diversidad. Justamente
en esa diversidad reside la riqueza del Cuerpo. Esto enriquece a la Iglesia. Dios despertará dones
muy grandes. ¿Por qué hay personas que se van de ciertas Iglesias? Porque allí no valoran el don
que Dios les dio. Son congregaciones sin balance porque solo consideran dos o tres dones. Si es
una Iglesia de corte evangelístico y no puedes salir a predicar a la calle, no serás valorado. No
sirves al propósito. Todos deben tener el mismo don de evangelista. Aunque eso no es bíblico, lo
aplican igual. Los que tienen otros dones no son valorados porque es una Iglesia monstruosa, sin
diversidad o balance. Debes irte del lugar donde no valoren tu don. Debes salir de allí y buscar
alguna congregación balanceada donde sí lo hagan. Por eso es imprescindible respetar la
diversidad.

Aplicación de la lección

1.¿Qué pasa con la iglesia si se atrofia el don que Dios

puso en mi ¿

2.¿Cómo explicarías la “la ley del todo o nada” dentro

de la iglesia?

3.¿Qué es ser un miembro funcional en el cuerpo de

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 Cristo?

4.¿Por qué es importante respetar la diversidad dentro

de la iglesia?