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Historia Marítima

del Ecuador

MARIANO SÁNCHEZ BRAVO


CAPITÁN DE FRAGATA (SP)
Historia Marítima
del Ecuador
TOMO IX - Primera Parte

LA REPÚBLICA 1861 - 1883

MARIANO SÁNCHEZ BRA`


CAPITÁN DE FRAGATA (I
MARIANO SÁNCHEZ BRAVO
CAPITÁN DE FRAGATA

TOMO IX

"LA REPÚBLICA 1861 - 1883"


PRIMERA PARTE: 1861 - 1865
HISTORIA MARÍTIMA DEL ECUADOR
Tomo IX: La República 1861 - 1883 (Primera Parte)
Edición: INHIMA 2000
Autor: CPFG (sp) Mariano Sánchez Bravo
Impresión: Macformas
Corrección de pruebas: Abog. Alicia Mosquera y Lcda. Patricia Bailén
Indice alfabético: Abog. Alicia Mosquera y Sr. Jorge Chonillo
Portada: Fotografía del Malecón de Guayaquil, tomada en 1864 por Rafael Castro, fotógrafo
de la expedición española que pasó por esta ciudad en aquel año y en la que
también participó Marcos Jiménez de la Espada. Podemos apreciar la Capitanía
del Puerto y el Reloj Público sobre el edificio de la Municipalidad. Retrato del
General de Marina Juan Manuel Uraga, en la parte superior derecha.
Portada interna: Vista de Guayaquil y su rada en 1864. Fotografía del mismo Castro.

Derechos reservados.
Prohibida la reproducción total o parcial
de su contenido sin autorización del
autor.
e

PRESENTACION

Es indudable que la tarea de nuestros historiadores es ardua y esforzada, pues


el ánimo que los infunde para continuar con la investigación de nuestro pasado
marítimo va más allá de la satisfacción propia. Es el interés, más bien, por
descubrir y abrir caminos para dar libre paso a los acontecimientos pretéritos,
que nos permitan entender mucho y tanto de lo que venía siendo inexplicable.
Que lo oscuro se clarifique y que lo desconocido no lo sea más.

Antes de aquellos, menos entendíamos, porque es recién desde 1986, cuando


inicia sus labores el Instituto de Historia Marítima de la Armada del Ecuador;
que se comienza a rescatar los hechos históricos en relación a nuestro mar de
una manera metodológica, consistente y continua; investigación que el Instituto
está editando en la obra Historia Marítima del Ecuador, cuyos tomo VI y VIII
fueron publicados en 1997.

Prosiguiendo con este esfuerzo, luego de arduas tareas, se han culminado otros
tres tomos, sobre los cuales me referiré a continuación:

- El tomo III "Descubrimientos y exploraciones españolas en el Ecuador del S.


XVI", que tiene como autores al Dr. Roberto Leví Castillo y al Lcdo. Víctor
Hugo Arellano, presenta dos enfoques complementarios de esta etapa de nuestra
historia marítima. El Dr. Leví Castillo selecciona y trata acontecimientos de
gran importancia como las expediciones y exploraciones españolas al territorio
de la costa ecuatoriana, el descubrimiento del río Amazonas y la primera invasión
pirática a Guayaquil, abundando en información de crónicas españolas. El Lcdo.
Arellano analiza el mestizaje en América, el tráfico de esclavos, la cartografía
en el S. XVI, el tratado de Tordesillas, las primeras descripciones de los pueblos
de la costa ecuatoriana y los tres viajes de Francisco Pizarro.

- " La República 1861-1883" (primera parte), tomo IX, es la reciente entrega


con la que el Sr CPFG (sp) Mariano Sánchez Bravo continúa con su perenne
aporte histórico. Haciendo un enfoque objetivo de la primera administración
garciana, se concentra en los eventos marítimos acaecidos en el quinquenio
1861-1865, etapa intrincada para nuestra Patria, pues los ecuatorianos tuvimos
que soportar dos guerras internacionales con Colombia (1862-1863) y varios
conflictos internos, entre ellos el levantamiento urbinista que culminó con el
combate naval de Jambelí del 26 de junio de 1865 y que tuvo un epílogo trágico,
pues 27 distinguidos protagonistas revolucionarios fueron fusilados por orden
del propio García Moreno. El historiador en mención se apresta a seguir su
investigación y así completar el tomo, en una segunda parte, hasta finalizar con
el derrocamiento del General Ignacio de Veintimilla.

- El Sr CALM (sp) Carlos Monteverde Granados, en el tomo X "La República


1884-1925", aborda los siguientes temas navales de esta etapa: El Combate
Naval de Jaramijó, sus antecedentes, protagonistas y otros aspectos relacionados
con este episodio de nuestra historia; la Marina de Guerra ecuatoriana a fina-
les del S. XIX, la misión naval chilena y el conflicto internacional de 1910, la
Armada en la revolución de Esmeraldas, el Archipiélago de Colón y las
ambiciones de las potencias marítimas, la Armada en el desarrollo marítimo
nacional y el primer viaje de un presidente de la república, Dr. Alfredo Baquerizo
Moreno, al Archipiélago de Colón. Aquellos asuntos son categóricamente
detallados por el autor y nos clarifican los acontecimientos vividos en la
República, durante aquel periodo histórico.

Estamos seguros de que, al difundirse esta parte de nuestro pasado marítimo, al


inicio de un nuevo milenio, luego de mirar retrospectivamente, surgirá en el
lector una profunda reflexión, reconociendo el enorme sacrificio de los hombres
de mar que, acumulando las tradiciones, fueron labrando a base de esfuerzo a
lo largo del tiempo, una sólida institución, defensora de la soberanía y riquezas
marítimas de nuestra nación.

VALM ENRIQUE MONTEVERDE NIM


INDICE
CAPITULO I
García Moreno al poder 11
- Inicios de la Convención Nacional 12
- Arribo de buques peruanos 18
- Nombramiento de presidente constitucional 22

CAPITULO II
Decadencia de la Marina de Guerra 29
- Trabajos en el fuerte de Punta de Piedra 33
- Alistamiento y navegaciones de la goleta de guerra "Salado" 49
- Estudios y prácticas de los guardias marinas 58
- Intentos de enrolar al joven Madrid en la escuadra española o francesa 71
- Guayaquil vista por un extranjero en 1861 73

CAPITULO III
El Presidente y la Convención Nacional de 1861 79
- Condecoración al "Arrojo Asombroso" 90
- La Constitución de 1861 95
- Viaje del Presidente a Guayaquil 97
- Cartas a Trinité y Fabre 99

CAPITULO IV
Acontecimientos portuarios y marítimos 119
- Crucero a la costa 120
- Operación rescate 124
- Acontecimientos y disposiciones navales 125
- Continuas operaciones de la goleta "Salado" 128
- La Capitanía del Puerto de Guayaquil 131
- Adopción de reglas para evitar el abordaje 141
- Relatos varios sobre buques, repartos y personal de marina 146
- Nuevo Capitán del Puerto 154
- Expatriación del Capitán de Navío José María Vallejo 155
- Proyecto de un dique en el puerto de Guayaquil 156
- El muelle de Guayaquil 158
- El puerto de Jambelí 162

CAPITULO V
Las derrotas de Tulcán y Cuaspud 165
- El conflicto de Tulcán 166
- El conflicto de Cuaspud 175
- El conflicto desde el punto de vista naval 180
- El gran viaje 196

CAPITULO VI
Primeras expediciones armadas urbinistas 207
- La frustrada expedición de 1862 208
- Plan revolucionario para secuestrar al General Flores 211
- Prohibición de desembarco de esclavos 213
- Brotes esporádicos en Guayaquil y reclutamiento forzoso 213
- Servicio del Capitán de Navío Juan Manuel Uraga 215
- Aclaración sobre acusaciones al General Thomas Charles Wright 216
- Expedición armada urbinista de 1864 220
- Fusilamiento del General Tomás Maldonado 224
- Preparativos de la fuerza naval 229
- Muerte del General Juan José Flores 243

CAPITULO VII
Desmantelamiento de los buques y breve período de paz 251
- Uraga se separa del servicio activo 253
- Venta de la goleta de guerra "Salado" 254
- Apuntes navales 257
- Sentencia absolutoria al Capitán de Navío Francisco Gutiérrez 258
- Escándalo a bordo del vapor de guerra "Guayas" 261
- Actividades a inicios de 1865 265
- Pérdida del vapor "Bolívar" 267

CAPITULO VIII
Combate Naval de Jambelí 271
- Asalto y toma del vapor de guerra "Guayas" 273
- Arribo de García Moreno a Guayaquil 285
- Embargo del vapor "Talca" 290
- El Combate Naval de Jambelí 295
- Escape de prisioneros urbinistas 306
- Indiscriminado fusilamiento a los vencidos 306
- Fusilamiento del Dr. Santiago Viola 313
- Persecución y más ejecuciones 315
- Delegación de facultad para fusilar 320
- Los guerrilleros "Guatusos" asedian Samborondón y Vinces 322
- Ascensos en premio a los buenos servicios en campaña 324
- Recomendación de ascensos para oficiales de marina
que estuvieron prisioneros 327

CAPITULO IX
Acontecimientos posteriores al conflicto y fin de
período presidencial 331
- El vapor "Smirk" 331
4111~1~57"1141~5~~11111~1~110111

- Vapor "Washington", buena presa 333


- El vapor "Bernardino" o "Jambelí" 341
- Reclamaciones sobre goletas capturadas 343
• Acontecimientos navales después de "Jambelí" 344
- Disgusto del Capitán de Navío José Antonio Gómez 349
- El General Ramón Castilla rumbo al destierro 350
- El balance de la primera administración garciana 351
- Triunfo electoral de Jerónimo Carrión 354
- La Marina al inicio del mandato de Carrión 356

NOTAS 357
BIBLIOGRAFIA 383
INDICE ALFABETICO 387
CAPITULO I

García Moreno
al poder
GARCIA MORENO AL PODER 11

GARCIA MORENO AL PODER

Ir abían triunfado las fuerzas del Gobierno Provisorio con la toma de

id Guayaquil del 24 de septiembre de 1860. El General derrotado era


Guillermo Franco, quien huyó al exilio, y el jefe vencedor es
indiscutiblemente el Dr. Gabriel García Moreno. Es más, bajo su liderazgo se
iniciaba una nueva época política que justamente lleva su nombre: "Epoca
Garciana", y que duraría tres lustros; es muy probable que este espacio de
tiempo se hubiera extendido de no haberse producido el magnicidio del 6 de
agosto de 1875.

Terminado aquel conflicto intestino prácticamente es García Moreno quien


posee todos los poderes como Jefe Supremo de la República, a pesar de la
existencia del Gobierno Provisorio, del cual formaba parte, y se nota que los
otros miembros figuraban como simples integrantes nominales, tal es el caso
que en esos meses de transición los diferentes decretos fueron firmados por
el Dr. Gabriel García Moreno como "Jefe Supremo de la República autorizado
por S. E. el Gobierno Provisorio". (1)

Se inicia el año de 1861, y el día 2 de enero el mismo García Moreno se


dirige al General Juan José Flores, y a pesar de que manifiesta que el año
nuevo ha principiado con buenos auspicios, dice que ha descubierto una trama
que se urdía en Guayaquil para asesinarlo, acción que iba a ser premiada
con 25.000 pesos; que "al mismo tiempo Proaño y Cortés preparaban un
trastorno para elevar a Pedro Carbo y reunir otra convención". (2)

García Moreno piensa, ante esos acontecimientos, que por seguridad debe
permanecer en Guayaquil, por no tener una persona de confianza que lo
reemplace, y dice: "Pallares muy bueno para todo, menos para salir airoso en
una crisis; Gómez, el Gobernador, es hombre excelente, pero tímido, irresoluto
12 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

en política; y fuera de estos dos ninguno descuella. El señor Caamaño, a


pesar de algunos defectos de carácter, tiene energía; y yo lo colocaría en la
gobernación si estuviera él aquí".

Era gobernador de la provincia del Guayas, en aquellos momentos, el


Capitán de Navío José Antonio Gómez Valverde, quien durante el gobierno
del General Robles, al producirse el bloqueo de nuestras costas por parte de
las fuerzas peruanas se desempeñó como Comandante General de la División
de Manabí y como es lógico combatió en filas contrarias a las de García Moreno.
Mas dicho Jefe Supremo le ha permitido su concurso en aquel cargo y de
acuerdo a lo dicho le tiene ciertas consideraciones.

INICIOS DE LA CONVENCION NACIONAL

El día 10 de enero de 1861 debe reunirse la Convención Nacional, por lo


que el Gobierno Provisorio preparó un mensaje que tenía que leerse en el día
mencionado.

Capitán de Navío José Antonio Gómez Valverde, a quien el Jefe


Supremo de la República nombró Gobernador de la Provincia
del Guayas.
GARCIA MORENO AL PODER 13

Era un hecho el que aquella convención nombre como presidente interino


al Dr. Gabriel García Moreno, pero éste desea quedarse en Guayaquil para
contener a los conspiradores, por lo que decide excusarse anticipadamente.

A Flores le dice, al respecto: "Yo creo que lo mejor es nombrar Presidente


Interino a Manuel Ascásubi, que tiene energía; éste debe nombrarme
Gobernador (del Guayas), autorizándome ampliamente, y así podré hacer
frente a los turbulentos: Gómez, como Ud. sabe, está convenido a pasar a la
Capitanía del Puerto, destino que sigue vacante y no proveeré entre tanto.
Mi ambición se limita a ser útil a la Patria, y prefiero el puesto más humilde
cuando en él puedo servir con algún provecho".

El oficio de su previa renuncia dirigido al Presidente de la Convención


Nacional dice:

"Emo. señor:

"Las circunstancias difíciles en que todavía se encuentra el Ecuador, me


autorizan a tomar anticipadamente una resolución que juzgo necesaria para
la marcha regular y pacífica de la República; y es la de adelantarme a
renunciar la presidencia interina, para el caso de que la Convención Nacional
me haya honrado confiándome ese importante cargo. La conveniencia de
ahorrar el tiempo considerable que se perdiera en aguardar la noticia del
nombramiento para excusarme, y la necesidad patente que hay de mi
permanencia aquí para sostener el orden como agente de Gobierno, son los
motivos que me obligan a renunciar desde ahora el honor de ocupar la primera
magistratura.

"Sírvase V. E. poner esta comunicación en conocimiento de la Convención


Nacional, la cual se dignará contestarla favorablemente y aceptar los
fervientes votos que hago por el acierto de sus deliberaciones.

"Guayaquil, enero 2 de 1861.

"G. García Moreno

"Al Excmo. Señor Presidente de la Convención Nacional". (3)

El 7 de enero de 1861 el General Antonio Martínez Pallares, Jefe de Estado


Mayor General del Ejército, comunica al Capitán de Navío Agustín Oramas,
Mayor General de Marina, la disposición de S. E. el Jefe Supremo de la
República para que el Capitán de Fragata Lucas Rojas, cese en el destino en
que se encontraba como en servicio activo, por haber sido nombrado Ministro
Juez Marcial de la Corte Superior del Distrito de Guayaquil. Por ello le ordena
que se sirva disponer que desde el presente mes dicho Jefe pase revista entre
los jefes y oficiales retirados pertenecientes a la Marina, con la pensión que
14 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

le está señalada en sus letras de retiro, y el aumento del quince por ciento
que señala la ley a los ministros de las Cortes. (4)

Al respecto cabe mencionar que el Capitán de Fragata Lucas Rojas se


encontraba en aquellos momentos desempeñándose como Comandante de la
goleta de guerra "Salado", y que su cese en dicho destino no se produjo en
forma inmediata como se dispuso, lo que sí aconteció en marzo de aquel año,
por lo que se designó para comandar la goleta al Capitán de Corbeta Diego
Eugenio Matos.

Dr. Gabriel García Moreno, Jefe Supremo y posteriormente Presidente


Interino de la República, a pesar de su excusa anticipada.

García Moreno dice el día 5 de enero: "Tengo por casi demostrado el hecho
de que se han acercado a nuestro territorio hasta treinta jefes y oficiales, los
cuales contaban sin duda con el movimiento que aquí preparaban los agentes
de Franco y Castilla y que todavía se esfuerzan en preparar". Insiste por
tanto que la admisión de su renuncia anticipada a la presidencia de la
República es necesarísima, así como su nombramiento de gobernador de la
provincia del Guayas. (5)

Su preocupación es excesiva y pide al General Flores le remita desertores


o reclutas para llenar las bajas que nunca faltan. Quiere conseguir armas
pero sabe que es imposible conseguirlas en los Estados Unidos, pues dicho
GARCIA MORENO AL PODER 15

país se encuentra pasando por una crisis que cada vez se va acrecentando
por diferencias entre los estados. Ha sido enviado como encargado de negocios
a esa nación el Dr. Antonio Flores Jijón. (6)

Es su decisión, además, que del producto del diezmo se separe una parte
para asegurar el pago de fusiles, cañones, etc. Por otro lado piensa que pasada
la crisis norteamericana el Dr. Flores podrá negociar ventajosamente con ese
país, y dice: "Para unirnos con los Estados Unidos contra Castilla, y para
esto es necesario que el Presidente remita secretamente plenos poderes Ad
Hoc para celebrar tratados, convenciones, etc." (7)

El día 9 de enero García Moreno expresa que reunida el día 8 la Convención,


ha terminado sus funciones el Gobierno Provisorio, y es que estos últimos
decidieron convocar la misma, una vez restablecido el orden de la cosa pública,
y cuyo propósito sería el dar al país las bases constitucionales para la nueva
época que comenzaba. (8) Así también García Moreno dejaba de ser Jefe
Supremo. Los asambleístas tenían la delicada tarea de formular otra
constitución, cuya carta fundamental es muy esperada por quienes en aquellos
momentos ostentan el poder, y esperan que sea un instrumento que les facilite
gobernar, mas como veremos después el Presidente García Moreno estaba
inconforme con su contenido, y hablaba siempre de "la insuficiencia de las
leyes", lo que le impedía administrar a su antojo. (9)

"No dudo, dice García Moreno al General Flores, me hayan admitido la


renuncia, y se me nombre Gobernador... prefiero estar aquí (en Guayaquil)
hasta que el orden quede consolidado y la Convención termine sus sesiones".
Su poder traspasa los límites normales, al pedir aquello, pues sabía que la
dirección de la nación estaba asegurada para él cuando así lo decida. En
tanto los procedimientos aplicados dan a entrever su naturaleza violenta,
podemos ejemplarizar lo dicho en estas sus palabras: "Aunque me atrevo a
responder de la conservación del orden público, no dejo de reconocer que
Urbina y Franco trabajan y me obligarán a hacer juzgar y pasar por las armas
a los peores. Estoy alerta, tengo un regular espionaje y les he infundido
bastante miedo". (10)

La Convención de Quito había iniciado sus labores y las cuestiones de


primera instancia fueron la primera constitución y la elección del presidente
interino, dada la necesidad de terminar el período transitorio mediante la
consolidación de las instituciones nacionales. El General Juan José Flores
presidió la Convención cuando ésta se inauguró formalmente, el 10 de enero
de 1861. (11)

En esa misma fecha el Gobierno Provisorio envió un mensaje a dicha


Convención Nacional, el que se dio lectura a los diputados de la Nación, dando
mayor importancia en su contenido a los sucesos acaecidos durante el conflicto
intestino que terminó con el triunfo de las fuerzas lideradas por García
16 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Moreno, en instancias que se soportaba la invasión peruana. Firmaban aquel


mensaje los triunviros Manuel Gómez de la Torre, José Avilés y Rafael
Carvajal, y como Secretario General Don Roberto de Ascásubi. (12)

El General Juan José Flores, personaje importante en la época


garciana, quien presidió la Convención Nacional de 1861.

Más adelante manifiestan en forma textual lo siguiente: "El Gobierno


Provisorio cumple hoy con uno de los más importantes objetos de su misión,
el de entregar en vuestras manos el poder que recibiera de los pueblos; y
como única recompensa de sus desvelos y sacrificios sólo exige de vosotros el
bien para la Patria".

A pesar de la insistencia del Dr. Gabriel García Moreno para no ser


considerado, por el momento, para ocupar la más alta magistratura de la
República, dicha convención presidida por Flores tomó la decisión de
nombrarlo Presidente Interino del Ecuador. Sin conocer aquello el 16 de enero
escribió una carta desde Guayaquil al mismo General Juan José Flores en
los siguientes términos:

"No estoy de acuerdo con Ud. en lo relativo a mi elección. Aquí no tengo


como organizar una Secretaría General para pocos días. A pesar de su edad,
GARCIA MORENO AL PODER 17

Pallares sería el único a quien pudiere nombrar de secretario; Jefe de la


sección de guerra sería Fernández; y aquí quedaríamos. Ud. sabe la escasez
que hay de hombres útiles en esta ciudad en que nadie quiere abandonar su
almacén. Es imposible pues ejercer aquí el Poder Ejecutivo: en tal caso valdría
más la conservación del triunvirato a pesar de todos sus inconvenientes, o, lo
que es mejor, nombrar a Manuel Ascásubi como ya he indicado. Por supuesto
mi renuncia habrá sido presentada por Roberto a la Convención y debo insistir
en ella por los motivos expresados". (13)

Pero es el mismo Flores, el que por carta le había comunicado el día 11 su


nombramiento como presidente interino y la no admisión de su renuncia,
pero dicha carta la recibió el 17 de enero. (14) En ese mismo día le dice a su
cuñado Roberto Ascásubi: "No creí que hubiese unanimidad para rechazar
mi renuncia; y tanto esperaba que la admitiesen, que no había pensado en la
organización de la Secretaría General, asunto arduo en esta ciudad en que
tengo a Carvajal, Herrera, a Lazo y tantos otros jóvenes de provecho. Como
la organización es sólo para los días de mi permanencia aquí, he nombrado a
empleados para que concluida la Secretaría vuelvan a sus destinos, y son:
López Escobar, de Secretario General; el Dr. Campos, Jefe de Sección de
Interior y Relaciones Exteriores; Letamendi de Hacienda y Fernández de
Guerra y Marina. Mejores no se encuentran aquí" (15)

Finalmente, García Moreno dice que ante la unanimidad de la negativa


a de admitir su adelantada renuncia al nombramiento de presidente interino,
se ve en la necesidad de aceptar dicho cargo debido al peligro que corre la
Patria, pues se enteró de la llegada de Arauz a Túmbez el 17, con dinero para
enganchar tropas, y manifiesta "la acefalía era un peligro grave, y era preciso
evitarlo" (16)

Decidido, prestó juramento como Presidente Interino del Ecuador ante la


Corte Superior de Guayaquil, aquel día 17 de enero, y en el acto principió a
organizar el Gobierno Interino, y como ya lo había dicho nombró a Manuel
López Escobar de Secretario General, a Fernández de jefe de Sección de
Guerra, a Letamendi de la de Hacienda y al Dr. Campos de la del Interior y
Relaciones Exteriores.

Como decisión inicial y solemne la Convención Nacional de 1861 elaboró


un decreto de "Acción de Gracias" al Gobierno Provisorio por su decisiva
actuación durante el conflicto interno e internacional que culminó con el
• triunfo garciano. El decreto en mención fue aprobado en los siguientes
términos:
18 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"LA CONVENCION NACIONAL DEL ECUADOR,

Considerando:

Que es un acto de justicia conceder honores a los que han hecho grandes
servicios a la patria,

Acuerda:

Art. lo. Se vota una solemne acción de gracias al Gobierno Provisorio por
haber salvado la República del peligro en que se hallaba y hecho triunfar la
causa nacional con gloria inmarcesible.

Art. 2o. Los individuos que han ejercido el Gobierno Provisorio serán
considerados ciudadanos beneméritos en grado eminente.

Art. 3o. Sus bustos serán colocados en uno de los salones del Palacio de
Gobierno para perpetuar la memoria de tan esclarecidos patriotas.

Art. 4o. El presente decreto será registrado en todas las oficinas y


municipalidades de la República.

Comuníquese al Poder Ejecutivo para su ejecución y cumplimiento.

Dado en la sala de sesiones, en la capital de Quito, a once de enero de mil


ochocientos sesenta y uno.- El Presidente de la Convención, Juan José Flores.-
El Secretario, Pablo Herrera.- El Secretario , Julio Castro. Guayaquil, enero
18 de 1861.- Ejecútese.- Gabriel García Moreno.- S.E.- El Secretario General,
Manuel López y Escobar". (17)

ARRIBO DE BUQUES PERUANOS

El día 19 de enero de 1861 llegaron a Guayaquil los vapores de guerra


peruanos "Ucayali" y "Huaraz", los que fondearon en el río frente a la ciudad
a las diez de la noche. Al respecto el propio García Moreno le dice a don
Roberto Ascásubi: "Creería Castilla que yo ya estaría asesinado. Sus
Comandantes (de los vapores) observan una conducta pacífica después de
llevarse el chasco. Nada tema Ud. Estoy preparado para todo". (18)

Así también dirige una carta al General Flores al que le manifiesta lo


siguiente: "Por supuesto no me importa su llegada: no les temo. Pero es claro
que han venido o esperando hallar trastornado el país o creyendo que debe
alterarse el orden por cruzadas o revoluciones. Ahora sí me alegro de haber
aceptado la Presidencia Interina. No estoy alarmado por la aparición repentina
GARCIA MORENO AL PODER 19

de esos vapores que según el Comandante García, vienen de estación a este


puerto. Así que no creo necesario pedir el Batallón Babalaoyo, ni aumentar
más la guarnición antes de que sea urgente el peligro. ]Las baterías de la
Planchada y Saraguro están prestas a hacer fuego. Van a construirse hornillas
de bala roja". (19)

Como dato reservadísimo el Presidente Interino le comunica, al mismo


General en Jefe, que cree llegada la ocasión de apoderarse por sorpresa de
los buques peruanos, e indica que para hacerlo no tiene de quien fiarse, por
lo que dirigirá personalmente el ataque. Pide a Flores su opinión al respecto,
mientras que es su decisión mandar el plan con la mayor reserva. (20)

Es más, García Moreno que conoce que cada vapor peruano tiene 150
hombres incluyendo a la tripulación, dice que si sale bien de su empresa
todos lo aprobarán, y si sale mal, cree que no será fácil salir vivo, y que la
Convención dirá entonces lo que le agrade y convenga.

A pesar de las intenciones del Presidente Interino nada aconteció y aquellos


vapores peruanos continuaron en el puerto de Guayaquil sin ser molestados.
El día 23 de enero dice Flores: "Sepa Ud. que Corpancho no recibirá nuevas
credenciales, y que de aquí se tomará Castilla para molestarnos. Luego que
estén concluidas las hornillas de balas rojas, no me importa que venga toda
la escuadra. Primero perecerá el Ecuador antes que consentir en su deshonra".
*. (21)

Aquel día se menciona que el General José María Urbin.a está en el Callao
a bordo de un buque inglés y Guillermo Franco en el mismo puerto pero en
un hotel, desde donde conspiran; dos emisarios, que probablemente llegaron
a Guayaquil en los vapores de guerra peruanos, según el Presidente García
Moreno, fueron tomados presos. En fin, se teme mucho de una invasión
urbinista apoyada por el Gobierno peruano. (22)

El Presidente está decidido a no trasladarse a la capital mientras no se


arregle la cuestión peruana o regrese el General en Jefe Juan José Flores,
que como sabemos está presidiendo la Convención Nacional, mientras tanto
será Guayaquil su cuartel general y el centro de su administración. "Los
vapores viejos - dice - que vinieron hace algunos días, "Ucayali" y ""Huaraz",
han venido a guarecerse de los yankees; una fragata norteamericana está en
Paita, y en el Callao se está reuniendo una escuadrilla yankee que constará
de 14 buques, por esto han corrido con tiempo". Pero lo cierto es que son
puras deducciones personales de García Moreno, pues de dichos
acontecimientos no tiene pruebas certeras. (23)
e
García Moreno está profundamente preocupado con la crisis
norteamericana, la cual sigue paso a paso. El 23 de febrero dice a Flores que
"La disolución de los Estados Unidos avanza día a día. Con Luisiana son ya 6
HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

los estados cuya separación conocemos, y Tejas y los demás estados del sur
se preparan a seguirles para formar una confederación del sur. No he tenido
cartas de Antonio". (24) Se refería a su encargado de negocios en aquel país,
pues tenía muchas esperanzas de la ayuda que le pudieran prestar para
solucionar el problema internacional con Perú, pues el día 2 del mismo mes
había dicho: "Es certísimo que Castilla busca pendencia, no tanto para
hacernos la guerra, sino para molestarnos con bloqueo y reforzar en el Perú
su vacilante situación. Las baterías de aquí pueden hacer fuego, si bien la de
Saraguro no está concluída: He dado de plazo ocho días para que esté lista.
La de Punta de Piedra se trabaja aún y no está armada ni serviría estando
aquí los vapores. La intimación de bloqueo la recibiré como un acto de
hostilidad y haré romper el fuego contra los vapores que están aquí". (25)

Roberto Ascásubi, cuñado de García Moreno, quien es uno de sus


más fieles colaboradores.

Las circunstancias presentadas obligan al Gobierno a hacer fuertes gastos


militares, para la preparación de la defensa, lo que es preocupante, porque el
presupuesto de nuestra Patria es muy pobre. Aunque sí diremos que el
Presidente había iniciado una reforma y saneo de la economía del país, lo
que se contrapone a lo actuado y gastado hasta el momento, mas sí diremos
que pasado el tiempo el Dr. Gabriel García Moreno demostraría que el manejo
GARCIA MORENO AL PODER 21

de los caudales públicos lo hizo con acrisolada honradez y austeridad, aunque


esto no quiere decir que las finanzas del Estado se mantuvieron siempre en
perfecto orden, como para permitir una prosperidad económica.

Las cosas con los buques sureños no se complicaron, ni se produjo acto


hostil alguno. García Moreno aceptó una normalización de las relaciones con
Perú, despidiéndose el diplomático de aquel país, Dr. Manuel Nicolás
Corpancho, quien zarpó el 3 de marzo en el vapor "Ucayali". Por su lado el
vapor "Huaraz" había partido el día 2, pero tuvo que retornar a Guayaquil el
4 a pedir auxilio para el vapor "Bogotá", de la mala inglesa, que se había
varado en el bajo de Isla Verde, y volvió a zarpar en la misma fecha. (26) El
Presidente dice: "así estamos por ahora libres de peruanos", es más Nicolás
Corpancho tuvo dificultades para ser admitido como representante del Perú
ante el Ecuador, lo que provocó que Perú pretextara para no aceptar a nuestro
representante el Dr. Destruge.

Al respecto nos dice el historiador peruano Alberto Wagner de Reyna en el


tomo VII de la obra "Historia Marítima del Perú": "Al iniciarse la década
1860-70 las relaciones entre el Perú y el Ecuador eran singulares: restablecida
la paz por el tratado de 1860, firmado con el Gobierno de Franco, en Guayaquil,
el Gabinete de Lima había acreditado una legación ante él. Pero derrocado
• Franco por Gabriel García Moreno que había instaurado un gobierno
provisional en Quito, la representación diplomática peruana - a cargo de
Corpancho - no fue reconocida por la nueva administración y se hizo necesaria
una larga y dura polémica para lograrlo.

"Dificultades análogas encuentra en Lima el agente ecuatoriano Destruge


para ser aceptado en su carácter público. Finalmente, el decreto de García
Moreno de 8 de abril de 1861 que declara insubsistente el tratado de 1860, y
la protesta peruana, a que ya nos hemos referido, contra el proyecto de
incorporación del Ecuador a una potencia europea colocan a ambos países en
una situación prebélica que ni el gobierno de Castilla, próximo a su término,
ni el de Quito desean agudizar, pero que provoca los buenos oficios del Gobierno
británico a fines de 1861.

"A eso se añaden las actividades del General Urbina, el Jefe de los liberales
ecuatorianos, en el Perú. Parece que por lo menos con la tolerancia de Castilla,
sus secuaces realizan incursiones en la República del Norte, con miras a
derrocar a García Moreno, lo que hace aún más tirantes las relaciones entre
los dos países".

El 8 de marzo de 1861 B. Destruge dirige a García Moreno una carta desde


Lima para informarle lo siguiente: "Hoy llegó aquí Corpancho en el "Ucayali"
y dice que en el 23 del pasado todo se había arreglado, que ha sido recibido en
4 su carácter público y ha desaparecido todo obstáculo en las relaciones de los
dos países. Espero recibir noticia oficial para presentar mis credenciales...
22 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

me ha visitado el Ministro de Gobierno Morales y me ha manifestado empeño


en que se arreglen las cuestiones con Ecuador".

NOMBRAMIENTO DE PRESIDENTE CONSTITUCIONAL

García Moreno, Presidente Interino del Ecuador, decía el 13 de marzo "si


soy nombrado conviene prestar aquí (Guayaquil) mi juramento para continuar
desempeñando el Poder Ejecutivo hasta llegar a la capital, donde estaré
pronto, lo más pronto posible". (27)

Es así que la Convención Nacional con fecha 10 de marzo ya había verificado


el nombramiento definitivo de García Moreno como Presidente Constitucional
de la República del Ecuador, pero como es sabido en aquella época las noticias
demoraban días por la lentitud del transporte, en este caso la distancia entre
Quito y Guayaquil significaba que las noticias llegaban aproximadamente
con un retraso de seis días. Había obtenido 37 de los sufragios a su favor, yen
contra uno solo, para don Pedro Carbo, jefe del liberalismo. (28)

El 16 escribe a Flores en los siguientes términos: "No llega la posta todavía


y por consiguiente no puedo anunciar definitivamente mi salida para la

Calle García Moreno de la ciudad de Quito, en cuya capital se reunió la Convención Nacional en 1861. Fotografía captada en
1863.
GARCIA MORENO AL PODER 23

capital. Sin embargo no tardaré mucho, y Ud. vendrá a reemplazarme, si no


quiere que tengamos que sufrir algún desorden. Ahora todo marcha bien y
tranquilo, pero ¿después? el Gobernador no carece de energía, pero es algo
indeciso: el General Pallares está muy viejo, y aquí no le respetan
debidamente". (29)

Por fin el 21 de marzo dejaba Guayaquil y se ponía en camino hacia la


capital. Al arribar a Quito, tan pronto como se pudo se presentó ante los
asambleístas, era el 2 de abril de 1861, fecha en que tomó posesión de la
presidencia de la República. Aquel destacado personaje de 39 años de edad
aceptó, pues, la voluntad de la Asamblea Constituyente, quienes veían en él
al único mandatario posible para aquellas difíciles circunstancias. Recibía
una nación en parte devastada por la guerra y por consiguiente con una
economía destrozada por los urgentes gastos que provocó.

Pero aquel hombre de carácter extraordinario se mostró optimista, y ante


las atentas miradas de los representantes del pueblo, según algunos autores
expuso un brillante y profundo programa de gobierno, que era capaz de animar
a los más incrédulos cuando expresó: "Restablecer el imperio de la moral, sin
la cual el orden no es más que tregua o cansancio, y fuera de la cual la libertad
es engaño y quimera; moralizar un país en que la lucha sangrienta del bien
y el mal, de los hombres honrados contra los hombres perversos, ha durado
por espacio de medio siglo, y moralizarlo por medio de represión enérgica y
s eficaz del crimen y por la educación sólidamente religiosa de las nuevas
generaciones; respetar y proteger la santa religión de nuestros mayores, y
pedir a su influencia benéfica la reforma que las leyes y los gobiernos no
pueden conseguir por sí solos; ... sustituir las conquistas pacíficas del trabajo
y de la riqueza, a las peligrosas y absurdas teorías que en la juventud seducen
la buena fe y extravían el patriotismo; arreglar la hacienda pública sobre la
triple base de la probidad, la economía y el crédito nacionales; cuidar que el
ejército continúe siendo el escudo y la gloria de la república; cultivar las
buenas relaciones que conservamos con las potencias amigas, y defender el
honor y los derechos del estado; en una palabra, lanzar al Ecuador con mano
vigorosa en la senda de la prosperidad; he aquí los difíciles deberes que acabo
de imponerme, deberes que no esperaría cumplir, sino confiase en la protección
bondadosa de la Divina Providencia, que tanto nos favoreció en los días de
peligro, y si no contase con vuestra patriótica colaboración y con el apoyo y
simpatías del pueblo ... Feliz seré ciertamente, si me es dado cumplir las
sagradas obligaciones que he contraído, y si consigo con mis servicios la
gratitud de mis conciudadanos y la memoria de la prosperidad". (30)

Por supuesto que tan esperanzadores planes eran posibles de ser aplicados
a la acción, cuando estaba la mano vigorosa de un hombre como García
Moreno, quien como veremos infundió una actividad febril, es más mostraría
ser el individuo correcto para tales circunstancias. Pero es también humano,
y por lo tanto no es perfecto y los excesos de poder serán también notables, de
24 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

ellos nos ocuparemos a su tiempo.

Por su parte opina don Benjamín Carrión en "El Santo del Patíbulo" que
García Moreno hizo un pobre discurso, que es un esbozo de programa, que
jamás tuvo programa, que sus palabras constituyen un insulto, una falta de
respeto para los hombres de la Convención de 1861, entre los cuales supone
que hay algunos con dignidad y sentido común.

A juicio del Padre Gómez Jurado en lo moral y religioso García Moreno


encumbró a la Patria por encima de todas las naciones del mundo. (31) Así
también el historiador J.L.R., otro de sus defensores, es del criterio de que
sus oportunas medidas permitieron a la Nación lanzarse a los senderos de
una civilización de forma moderna y de carácter genuinamente cristiano, y
después le otorga el título de "Campeón del Catolicismo". (32) Efectivamente
desde el inicio de su gestión tomó contacto con el Papa Pío IX haciéndole
conocer su lealtad al Gobierno Pontificio Romano, cuya comunicación es
contestada por el Santo Padre otorgándole la bendición apostólica luego de
desearle éxitos en su cargo de Presidente Constitucional del Ecuador. Dichos
oficios se transcriben a continuación:

"A su Santidad Apostólica Pío IX, el Presidente de la República del Ecuador.

"Santísimo Padre:

"Después de la dilatada lucha que han sostenido estos pueblos por salvar
sus instituciones y nacionalidad, me ha cabido el alto honor de presidir sus
destinos, como primer Magistrado Constitucional de la República, y me
apresuro a ponerlo en conocimiento de Vuestra Santidad, con el fin de ofreceros
una prenda segura de adhesión franca y leal a vuestro Gobierno Pontificio y
al pueblo romano por cuya prosperidad y la de Vuestra Santidad no cesaré de
elevar mis fervientes votos al Dispensador Supremo de todo bien.

Vuestro humilde hijo,

Gabriel García Moreno

Rafael Carvajal

Quito, a 4 de abril de 1861"

Contestación.

"Pío IX, Papa.

"Amado hijo ilustre y varón honorable, salud y bendición apostólica.


GARCIA MORENO AL PODER 25

"Ahora poco se nos ha entregado vuestra noble carta, datada en 6 del


próximo mes de abril (lo que indica que escribió una carta privada a más de
la comunicación oficial), por la cual nos avisáis que Vos habéis sido electo
Presidente de la República ecuatoriana. Os damos las debidas gracias por
tan bondadoso oficio, pues que habéis querido hacernos sabedores de este
acontecimiento. Os suplicamos que en este vuestro cargo de Presidente
despleguéis todo vuestro cuidado, vuestra industria y autoridad, para que
allí la Iglesia Católica y su saludable doctrina goce de toda libertad, la cual
contribuye sobremanera a la felicidad temporal y tranquilidad de los pueblos.
Nos esperamos que procuréis obedecer de buena voluntad todos nuestros
deseos y pedidos; y entre tanto, amado hijo ilustre y varón honorable, os
damos con mucho amor y con todo el afecto de nuestro corazón, y como prenda
de nuestra caridad para con Vos, la bendición apostólica.

"Dado en Roma, en San Pedro, el día 24 de junio de 1861, año décimo sexto
de nuestro pontificado.

Pío IX, Papa" (34)

En contraparte a los historiadores anteriores, don Alfredo Pareja


Diezcanseco manifiesta en su "Historia del Ecuador" al explicar el
garcianismo, que "Juan José Flores encontró el apoyo que necesitaba en los
soldados venezolano-granadinos. José María Urbina, en el militarismo
nacional. García Moreno busca otra fórmula de perpetuación en el poder: su
inteligencia vió claro que la única manera de librarse de la influencia militar,
de la cual podía resultar esclavo en cualquier momento, era afirmarse en los
poderes espirituales, penetrar en la conciencia íntima, usar el misterio de la
fe como instrumento, y la amenaza del más allá como castigo. En una palabra,
valerse de la eficacia tremenda del poder religioso". (35)

Manifiesta, además, que no puede decirse que se trató sólo de táctica. El


mismo cayó en las redes del inmenso poder que llegó a crear, y terminó como
un fanático.

Aclaremos de una vez, que considerando los juicios diametralmente


opuestos de los distintos historiadores que han escrito sobre la vida y accionar
de García Moreno, unos defensores incondicionales y otros detractores
perpetuos, hacen muy difícil seguir una línea histórica imparcial, pues
aquellos que se nos adelantaron en las investigaciones al respecto, ya han
emitido su juicio equivocado o no, algunos de los cuales han llegado al
fanatismo ideológico. Por ello, quiera que quien escribe lo haga con mayor
probidad e imparcialidad y nos limitemos a narrar los hechos y a emitir los
análisis correctos sobre los sucesos de que este gran hombre ha sido
protagonista principal.
CAPITULO II

Decadencia
de la Marina
de Guerra
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 29

DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA

a nos habíamos referido en el tamo VIII de esta "Historia Marítima del


Ecuador" que al terminar el año de 1860, ante el advenimiento del
Garcianismo al poder, se nota que la Armada está completamente
descuidada, que se prefiere reforzar el Fuerte de Punta de Piedra a mantener
los tres buques de guerra que había dejado el General Guillermo Franco.

Es así que en el mes de diciembre se dice que dichos buques han sido
desarmados, notándose descuido y desinterés en su conservación. Existía
pues una escuadrilla naval conformada por las goletas "Salado", "General
Sucre" y "4 de Abril" y comandada por el Capitán de Navío graduado Juan
Manuel Uraga, pero como veremos después, ésta quedaría reducida a un solo
buque, la goleta de guerra "Salado".

A continuación nos permitimos elaborar una lista de los jefes y oficiales de


marina en servicio activo a inicios del año de 1861, con especificación de los
destinos o cargos en que se hallan, obtenida de la lectura de los distintos
documentos de la época:

CLASES NOMBRES DESTINOS

Capitán de Navío José Antonio Gómez Gobernador de la Provincia del Guayas


Capitán de Navío Agustín E. Oramas Mayor General de Marina
Capitán de Navío Juan Manuel Uraga Jefe de la Escuadrilla Naval
Capitán de Fragata Lucas Rojas Comandante de la goleta de guerra "Salado"
Capitán de Corbeta José H. Chávez Comandante del bergantín goleta "4 de Abril"
30 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Teniente de Fragata Francisco J. Castillo lo. Teniente de la goleta de guerra "Salado"


Alférez de Fragata César Guedes Goleta de guerra "Salado"
Alférez de Fragata Diego Sánchez Goleta de guerra "Salado"
Alférez de Fragata Tiburcio Lecaro Bergantín goleta "4 de Abril"
Guardia Marina Guillermo Salcedo Goleta de guerra "Salado"
Guardia Marina José Agustín Oramas Goleta de guerra "Salado"
Guardia Marina José Pallares Goleta de guerra "Salado"
Guardia Marina Daniel Cruz Goleta de guerra "Salado"
Aspirante Enrique Larroque Goleta de guerra "Salado"
Aspirante Joaquín Barrera Goleta de guerra "Salado"

Es de indicar que desde el mes de enero de 1861 se ha dejado de mencionar


a la goleta de guerra "General Sucre", de la que se dice era de 120 toneladas
y que una vez desarmada fue rematada en 4000 pesos. Por otro lado se había
dispuesto que el bergantín goleta "4 de Abril" permanezca estacionada o
fondeada frente al fuerte de Punta de Piedra, donde hará su servicio ayudando
a los trabajos de construcción y adecuación hasta la colocación de los cañones
en el lugar, como ordenó el propio García Moreno.

Embarcación menor a remo de la Marina de Guerra, por la segunda mitad del siglo XIX. El personaje ubicado más a popa
parece ser el Teniente de Fragata Francisco Javier Castillo.
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 31

Es desde meses atrás, ya en noviembre de 1860, que el propio Jefe Supremo


Gabriel García Moreno había dispuesto al General Flores la venta de los
buques de guerra en los siguientes términos: "Habiendo resuelto se proceda
a la venta de los buques "Cinco de Abril" ("4 de Abril") y "General Sucre" por
cuanto son inútiles para la guerra y es dispendioso el conservarlos, espero
que V.E. mande a entregarlos a la orden del Sr. Gobernador de la Provincia,
a quien he autorizado para proceder a la enajenación". (36) Pero aquello,
como dijimos, sólo se cumplió en forma inmediata con la goleta "Sucre", no
así con la "4 de Abril", que quedó en las condiciones expresadas hasta su
venta posterior, la que se produjo en el mismo año 1861.

Por la siguiente comunicación podemos darnos cuenta de la fecha en que


dejó de servir la goleta "General Sucre". Oficio motivado por el reclamo de
sueldos adeudados al Alférez de Fragata Manuel María Suárez.

"República del Ecuador.- Mayoría General de Marina.- Guayaquil, a 15 de


enero de 1861.- Al señor General Jefe de Estado Mayor del Ejército.

"En virtud de una nota que con fecha de ayer dirigí al señor Coronel Jefe
de la Escuadrilla, me ha contestado lo siguiente: "En contestación a la nota
de US. fecha de hoy diré a US. que el 16 de octubre resolvió S.E. el General
en Jefe del Ejército la salida de la goleta de guerra "General Sucre" con destino
a Manta; al efecto el que suscribe dio orden al Comandante de dicho buque
para que se alistara para dicho viaje; retirándose luego a Punta de Piedra,
que allí estaba cuando avistó a la "Sucre" que salía, luego que se aproximó
dicho buque el que expone pasé abordo, y el Comandante le presentó, como
Segundo del buque al señor Manuel María Suárez, a quien S.E. había
caracterizado de Alférez de Fragata a falta de oficiales y por la necesidad del
buque para su viaje, el que suscribe no extraña esta disposición verbal, porque
en esos momentos y circunstancias todas las disposiciones más o menos tenían
lugar de ese modo; de consiguiente el oficial en cuestión debe muy bien haber
sido dado de alta del 18 al 20 de octubre (de 1860), lo que puede muy bien ver
el señor Tesorero en el diario de vales por raciones; en cuanto a la fecha en
que dejó de servir dicho oficial en la mayoría debe haber una constancia. Con
lo que dejo contestada la apreciable nota de US.

"Lo que tengo el honor de transcribir a US, para los efectos que tenga
lugar; siendo de mi deber añadir que según los informes que he recibido,
constan que el Oficial Suárez fue llamado al servicio en el de Alférez de Fragata
el 18 de octubre último destinándolo a la goleta "Sucre" como primer Teniente
que pasó revista de Comisario en el mes de noviembre; y que sirvió hasta el
cinco de diciembre en que por orden superior se mandó desarmar el buque y
disminuir su dotación para proceder a su venta, con cuyo motivo fue dado de
baja el mencionado oficial, al cual creo justamente acreedor a los alcances
que tiene por el tiempo que ha servido.- Dios guarde a US.- Agustín Oramas".
32 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

General Antonio Martínez Pallares, Jefe de Estado Mayor del


Ejército. Antiguo militar que aunque de origen español fue
Prócer de la Independencia. Posteriormente rompió relaciones
con García Moreno. (Oleo de Antonio Salas - Archivo Flores)

Digamos de una vez que el Sr. Presidente de la República aprobó con fecha
4 de febrero la orden para el pago del alcance que tiene dicho oficial,
terminando así dicho reclamo.

Sólo la goleta de guerra "Salado", al mando del Capitán de Fragata Lucas


Rojas, permanecería en el Puerto de Guayaquil y armada de cañones, pero
eso sí, no muy bien atendida y con una dotación mínima e insuficiente para
el manejo que le corresponde a un buque en clase de guerra. El 2 de enero se
dio la orden de tener la nave lista para zarpar en cualquier momento, por lo
que su Comandante solicitó a la Mayoría de Marina varios artículos
considerados indispensables. Así también que se le provea de 19 individuos
de mar a saber: un 2o. Contramaestre, un 2o. Guardián con cargo, dos Cabos
de Guardia, dos Gavieros, un Condestable, cuatro Marineros de la. clase y
ocho Marineros de 2a. clase.

El 28 de enero de 1861 en atención a lo solicitado el Sr. Comandante General


de Marina dispone que el Comandante de la goleta de guerra "Salado" forme
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 33

el respectivo presupuesto de los enseres que sean absolutamente


indispensables para poner el buque en estado de salir a navegar en el momento
que sea necesario, adicionando el enganchamiento de los 19 individuos de
mar que deben componer su tripulación.
Dos días después el Mayor General de Marina solicita a la superioridad
aumentar la dotación del buque con un oficial y un guardia marina,
proponiendo para el efecto al Alférez de Fragata Diego Sánchez, de quien
dice que sus servicios, conocimientos y buena conducta lo hacen acreedor a la
consideración del Gobierno, y al Aspirante de Marina Agustín Oramas de
iguales cualidades, para que quede la goleta perfectamente lista.

El 4 de febrero S.E. el Presidente interino de la República aprobó la


propuesta efectuada por la Mayoría en favor del oficial y guardia marina
para la dotación de la goleta de guerra "Salado", quienes ya habían sido dados
de alta en dicho bajel. Eso sí, reformó el presupuesto presentado a lo
justamente indispensable, antes de aprobarlo.

El 8 de febrero se dio de alta como oficial de la guarnición del buque al


Subteniente Emilio Sachapelli.

TRABAJOS EN EL FUERTE DE PUNTA DE PIEDRA

Uno de los primeros propósitos del Dr. Gabriel García Moreno al hacerse
cargo del poder total en la República, luego del triunfo del 24 de septiembre
de 1860, fue el de asegurarse en contrarrestar cualquier contraataque que
pudiera producirse, haciendo peligrar los logros obtenidos y por lo tanto un
derrocamiento del nuevo gobierno.

Para ello decidió el Jefe Supremo mantener y costear las fuerzas militares
suficientes, adquisición de cañones y más armamento, aunque esto provocara
fuertes gastos al tesoro público. Decía, pues, que "en una guerra defensiva
las operaciones dependen de las que inicie el enemigo, puesto que las defensas
suponen el ataque; y como es natural que el enemigo intente apoderarse de
los puntos decisivos que adopte, es necesario poner en estado de defensa los
puntos que por su posición estratégica puedan llamarse decisivos, tal es por
ejemplo la situación de Guayaquil". (37)

Esto significaba la construcción de baterías en los puntos que se


consideraban más estratégicos, y en este caso estaban, según los estrategas,
Guayaquil y Punta de Piedra.

En ambos sectores se iniciaron los trabajos para la colocación de cañones,


y diremos de una vez que García Moreno exigía prontitud y ya el 13 de octubre
34 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

de 1861 decía al Dr. Antonio Flores: "Esta plaza es cada día más fuerte. Las
baterías están ya en estado de hacer fuego aún con bala roja, la línea de
reductos de la sabana, entre el río y el salado es formidable, y en el malecón
se construyen trincheras para colocar piezas de artillería en cuatro puntos
diversos. No pudiendo obtener de allá (EE.UU) cañones rayados, he hecho
rayar aquí los de bronce de 18 y 24 y uno de fierro para prueba, y el resultado
es satisfactorio y honroso para el gobierno. La línea del río será defendida
por nuestras fuerzas sutiles, remolcadas por tres vapores que calan poco. Por
último pólvora en abundancia, orden en todo, guardia nacional numerosa y
entusiasta, y sobre todo un excelente General en Jefe, que es el primer
elemento de la victoria".

El 31 de octubre, el Presidente anunciaba la culminación de las obras de


defensa en esa ciudad puerto y dice que solo se ocuparán desde ese día en
montar los cañones, a saber: 1) Del Telégrafo, dos piezas de 32; 2) La
Planchada, tres piezas de 32; 3) Saraguro, once piezas, parte de 32 y el resto
de 24, incluso dos cañones rayados de 22 y 40; 4) Cuatro cañones de grueso
calibre en el malecón con otros tantos gruesos parapetos de sacos de tierra;
5) La línea de siete reductos con ocho piezas de artillería entre Saraguro y el
Salado. Quedan además 16 cañones para lanchas, el cerro y donde convenga,

Cañón del Fuerte de Punta de Piedra utilizado en la época Garciana.


DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 35

fuera de los cañones y obuses de la brigada. (38) Para dichas obras fue
contratado Mr. Dillon, ingeniero inglés, quien se ocupó principalmente de la
construcción del reducto de Saraguro, y por su buena composición recibía un
sueldo de 300 pesos mensuales. (39)

Por supuesto que aquellas baterías de cañones servirían para intentar


rechazar a los buques de guerra hostiles que ya se han aventurado a ingresar
por el río al Puerto de Guayaquil, pero ello significaba la seguridad de entablar
combate en nuestras costas, en este caso en nuestro puerto, en donde la
población civil correría el riesgo de sufrir las consecuencias de los bombardeos
y otras acciones militares. Mas García Moreno y sus asesores militares no
consideraron el mantener una fuerza naval, por pequeña que ésta fuera, pues
sabido es que la amenaza que significa para el enemigo una fuerza naval
adversaria, protege mejor que cualquier otro medio nuestras costas y
comunicaciones. Por lo tanto, si nuestros buques de guerra derrotan a los
similares del enemigo, que intentan invadir nuestros mares y ríos,
disfrutaremos la libertad de acción y de seguridad, mientras que si no
contamos con fuerza naval, los buques enemigos entrarán tranquilamente
hasta nuestras costas y estaremos expuestos a todos los peligros. Esto nunca
fue considerado por el Presidente García Moreno que sólo se limitó a fortificar
la ciudad de Guayaquil y Punta de Piedra, y la Marina de Guerra permaneció
casi nula.

Sobre la reconstrucción del fuerte de Punta de Piedra haremos una mayor


referencia, pues en aquel tiempo su situación geográfica le daba un carácter
estratégico por el control de penetración de buques de guerra por el río Guayas
hacia Guayaquil. Es una saliente rocosa al sur de dicha ciudad y a un tercio
de distancia en la ruta a Posorja. Lo forman dos colinas, la mayor de las
cuales se conoce con el nombre de Punta de Piedra y el segundo cerro
Atahualpa de 30 metros de altura y desde donde se domina la parte
correspondiente del río. (40)

En lo que corresponde a Punta de Piedra a través de la historia, el Dr.


Octavio Latorre Tapia nos dice en su libro "La Armada del siglo XX, las dos
primeras décadas" lo siguiente: "Hay indicios de haber sido ocupada desde
tiempo prehistóricos, a juzgar por los restos de cerámica y aún se ha hablado
de un cementerio preincario en el área.

"Durante la Colonia, Punta de Piedra fue cobrando mayor importancia


conforme avanzaban los tiempos y se convirtió en un sitio fortificado para la
defensa de Guayaquil contra los piratas. Es dificil, según el estado de las
investigaciones, saber cuándo se iniciaron aquellas fortificaciones.
36 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"En 1687, cuando la toma y saqueo de Guayaquil por los piratas Jorge
D'Hout, Picard y Groignet, se cita el lugar pero sin especificar nada sobre
posibles fortificaciones.

"Durante el Siglo 18, Punta de Piedra es definitivamente un FUERTE


destinado a la defensa de Guayaquil.

"Alcedo y Herrera lo cita en el Plano de Guayaquil de 1741, sin especificar


con todo su importancia estratégica ni sus fortificaciones.

"Requena (1770) en el diseño del "Río de Guayaquil" lo llama ya "Punta de


Piedra y Fuerte.

"La expedición "Malaspina" (1789-1791) encuentra un Fuerte bien


estructurado para la defensa de Guayaquil, según consta en los mapas
levantados por la expedición.

"A iniciarse el Siglo 19, Punta de Piedra fue usada como prisión según
Chávez. Con todo, en 1816, el "Fuerte de San Carlos" de Punta de Piedra, se
enfrenta a la expedición corsaria de Brown contra Guayaquil y aunque la
resistencia es relativamente corta, es quizás la única vez en que el Fuerte
fue utilizado como tal, en una acción bélica". (41)

Volviendo al tiempo que nos concierne, el entonces Jefe Supremo García


Moreno le refería al General Flores el 12 de diciembre de 1860 que para
tener los trabajadores que se necesitan en las baterías ha tenido que conminar
con fuertes multas a las autoridades morosas. Dice también que le han ofrecido
50 hombres de la costa para Punta de Piedra, pero las obras no concluirán en
ese mes. (42) Días después se queja que los trabajos de las baterías siguen
con una lentitud que desespera, y agrega, "El Ecuador es la tierra clásica de
la inercia". (43) Efectivamente, la construcción de las baterías era cosa de
mucha paciencia y García Moreno decía que la tenía en este caso, pero que no
estaba contento con la lentitud "extraordinaria" de Dillon y Co. (44)

Para los trabajos en el Fuerte de Punta de Piedra eran enviados jornaleros


desde Machala y Santa Elena, cuyo flujo y control era constantemente
informado a las autoridades por el Capitán de Navío Juan Manuel Uraga, a
quien se había confiado la dirección de dicha obra.

El 26 de enero de 1861 el Capitán de Navío José Antonio Gómez,


Gobernador de la Provincia del Guayas, ante un pedido de bejucos y otros
materiales para los trabajos de la fortaleza de Punta de Piedra dio atención
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 37

a dicha solicitud, y con respecto a un mayor número de carpinteros requeridos


por el encargado de los trabajos de aquella batería, respondió que la Capitanía
del Puerto ya tiene órdenes para proporcionar a la Comandancia General,
jefes de baterías o encargados de las construcciones, cuantos individuos de
carpinterías juzguen necesarios para las diferentes obras. (45)

Informa además que los Jefes Políticos están instruidos para relevar cada
mes a los peones trabajadores de sus respectivos cantones. (46) Es decir que
aparentemente se nota la disposición de parte de los jefes y autoridades de
prestar toda la ayuda disponible para concluir los trabajos lo más pronto
posible, pero en la realidad ésta no es suficiente.

Se aprovecha de todo el elemento humano y de cualquier circunstancia


para enviarlos a dicho Fuerte, tal es el caso que el Jefe Político del Cantón
Machala dice un día después : "Con esta fecha remito a las Baterías de Punta
de Piedra seis hombres, de los que dos nombrados Ramón Morán y N. Maruri
señalados por sus desórdenes y conducta inmoral, merecen ser recomendados
al jefe encargado del trabajo para que los tengan constantemente en él sin
que sean reemplazados. Espero que US. (Gobernador) se servirá hacer esta
recomendación al referido jefe". (47) Así lo transmitió dicha autoridad
provincial al Mayor General de Marina, y éste a su vez lo ordenó al jefe de la
Escuadrilla Naval para el respectivo cumplimiento.

El 4 de febrero de 1861 el Capitán de Corbeta José H. Chávez, Comandante


del bergantín goleta de guerra "Cuatro de Abril", fondeada frente a Punta de
Piedra, informaba con oficio al Capitán de Navío Agustín Oramas, Mayor
General de Marina, sobre el relevo de 14 peones de Santa Elena, que habían
trabajado en dicho Fuerte, a fin de que se les reconozca sus servicios para el
pago de los salarios respectivos. (48)

El día 9 dice el Comandante Uraga que siendo de suma necesidad levar


las anclas de cuando en cuando para que no se agarren demasiado en el
fondo, y de consiguiente estar expeditos para moverse cuando se quiera o
convenga, que así se ha estado haciendo con la goleta "Cuatro de Abril" desde
que se estacionó en Punta de Piedra y continúa: "Mas acaba de comunicarme
el Comandante de dicho buque que al practicar aquella operación últimamente
le fue de todo punto imposible levantar una de las dos anclas con que está
amarrado el buque, y cree, y con fundamento, esté cogida el anda entre peñas,
y en este caso es de necesidad de un buzo para tomar el anda por la uña y
desencapillarla. En esta virtud US. se servirá poner esta circunstancia en
conocimiento de S. Sa. el Sr. General y Comandante General para que se
sirva ordenar por el órgano de US. que el Sr. Capitán del Puerto provea
inmediatamente de un buzo, como así mismo de un práctico para que esté en
mejor sitio el buque". (49)
38 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Los trabajos en Punta de Piedra son arduos y los requerimientos de


jornaleros y abastecimientos no son lo suficientemente atendidos por las
autoridades, como habíamos dicho, aún la misma goleta "Cuatro de Abril" no
es provista oportunamente de las necesidades para el servicio que está
prestando en dicho Fuerte, y por ello el Comandante Uraga pide oficialmente
el día 11 de febrero se provea con morreños (cholos del Morro) siquiera, para
el servicio de dicha goleta, pero notamos que la ayuda es insuficiente cuando
dice: "Una de las muchas consecuencias de esta irregularidad es el tener con
frecuencia necesidad de echar mano a jornaleros para la movilidad de la falúa,
cuando el único bote bueno que tiene el buque se halla en comisión en esta
ciudad (Guayaquil). Ud, sabe muy bien - dirigiéndose al Comandante Oramas
- que dicha falúa no se puede manejar con menos de ocho hombres, tanto más
en Punta de Piedra, donde corre el doble del agua que aquí. El servicio que
este buque, Sr. Mayor, está prestando donde está situado es más importante
de lo que tal vez se cree. El número de empleados que contiene manifiesta el
interés de ser lo menos gravoso al erario, aún con perjuicio no sólo de redoblar
el servicio a los oficiales, sino de que presten aquellos ajenos a su clase". (50)

A continuación me permito transcribir un oficio en el que se relata parte


del servicio que se presta desde el bergantín goleta de guerra "Cuatro de
Abril", con motivo de una pequeña disputa por la tenencia de un bote:

"República del Ecuador.- Provincia del Guayas.- Guayaquil a 12 de febrero


de 1861.- al Sr. Coronel Mayor General de Marina.

"El comandante del bergantín goleta de guerra "Cuatro de Abril" me


comunica que el Sr. Estévez, empleado del resguardo a nombre de su Jefe ha
ido a pedirle la falúa que está a bordo, y que no teniendo orden mía no se la
entregó.

"Esta circunstancia me pone en el caso de manifestar a US. para que lo


ponga en conocimiento de S.Sa. el General y Comandante General, y de S.E.
mismo lo siguiente: al recomendarme S. E. el General en Jefe de la República
y del Ejército, fuera a Punta de Piedra a inspeccionar y establecer este trabajo,
así lo verifiqué, y a mi regreso, conociendo la necesidad de un bote grande y
fuerte, grande porque por la mañana y tarde era indispensable llevar y traer
todo el personal de fuerza dedicada a la obra, fuerte porque no teniendo
marineros, sino cholos para manejarla, tanto al llegar en tierra como abordo
era sumamente expuesto por la mucha corriente, y una embarcación débil
más de una vez habría sido causa de desgracias.

"Por estas razones indiqué a S.E. el General la necesidad de proporcionarme


la falúa, y a la voz como regularmente, en esos momentos se impartían las
disposiciones, se me ordenó pidiera la falúa al Jefe del Resguardo, así lo hice,
y es éste el fundamento y la causa porque tenemos esta embarcación en Punta
de Piedra.
Capitán de Navío Juan Manuel Uraga, oficial naval de gran prestigio, que lideró los destinos de
la Marina de Guerra en la época garciana. Ascendió a General de Marina en 1869. Dos años
después el Presidente lo acusó de conspiración dejando de figurar en el servicio activo.
(Retrato al óleo, en propiedad de su descendiente Dr. Enrique Uraga Pazmiño)
Uniformes Naval y Militar
del General de Marina Juan Manuel Uraga.
(Reliquias en propiedad del Dr. Enrique Uraga Pazmiño).
Bicornio y gorra que pertenecieron al General Uraga.
(Reliquias en propiedad del Dr. Enrique Uraga Pazmiño).
Tiros y espadas del General Uraga.
(Reliquias en propiedad del
Dr. Enrique Uraga Pazmiño).
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 47

"Réstame ahora decir a US. que desearía se prorrogue este servicio hasta
que me restablezca y personalmente busque un bote aparente que pueda
reemplazar la falúa, concesión tanto más accequible cuanto que en la presente
estación por cierto no es la mejor para reparar la otra falúa.

"Consecuente con lo que dejo expuesto me lisonjeo en esperar que US.


obtendrá el objeto indicado.- Dios Guarde a US.- J. Manuel Uraga". (51)

Se presentan, además, algunos problemas en lo referente al envío de


remesas de ganado a Punta de Piedra, para la alimentación de la fuerza
laboral y tripulación de la "4 de Abril", pues tanto el comandante del buque,
Capitán de Corbeta José Chávez, como el jefe de la Escuadrilla Naval, Capitán
de Navío Juan Manuel Uraga, se quejan de la calidad de las reses, pues al
enviárseles vacas flacas se obtiene mala carne e insuficiente en cantidad.
(52)

El Comandante Uraga está enfermo y permanece en Guayaquil, por ello


manifiesta, con relación al problema del ganado: "Hasta ahora me he prestado
en obsequio del servicio a desempeñar funciones ajenas de mi carácter; y que
aún este servicio mismo prestara si no estuviera en un estado, que no puedo
pararme. Si pudiera salir no me habría sido difícil encontrar una persona
r con quien el Sr. Gobernador, o el Sr. Tesorero hubieran celebrado una contrata,
más repito postrado como estoy me es de todo punto imposible". (53) Pide por
ello que dos reses sean enviadas a Punta de Piedra para el siguiente domingo.

Por otro lado las deserciones de los jornaleros son constantes y así se
comunica para las acciones de ley que correspondan, así como para el envío
de reemplazos. Aquello se suscitó hasta con un oficial del bergantín goleta "4
de Abril", estacionado frente a Punta de Piedra pues encontrándose arrestado
el Alférez de Fragata Tiburcio Lecaro por una falta cometida, S.Sa. el General
y Comandante General le suspendió el arresto por los pocos días que le
faltaban, como se informa con un oficio del 24 de febrero, éste aprovechó la
ocasión para solicitar permiso al Comandante del buque para ir a Guayaquil,
lo que le concedió, más no retornó al término de la franquicia. Por ello el
propio Uraga lo mandó a llamar para que marchara a hacerse cargo de la
balsa en Punta de Piedra. No se presentó, lo que obligó a que el Mayor General
de Marina lo haga comparecer ante su presencia, lo que logró, poniéndolo a
órdenes del Jefe de la Escuadrilla para recibir las órdenes respectivas. (53)

En el mes de marzo arrecian las lluvias, lo que provocó la suspensión de


los trabajos de la fortaleza de Punta de Piedra, pues con los rigores de la
estación invernal han aparecido una infinidad de plagas, lo que va en desmedro
de los trabajadores por las enfermedades que comienzan a padecer. La decisión
es del propio Presidente García Moreno. El siguiente oficio pormenoriza lo
indicado.
48 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Al Sr. Comandante General del Distrito.- Guayaquil 11 de marzo de 1861.-


Señor General.

"S.E. el Presidente de la República habiendo dispuesto que en razón de la


vigorosa estación se despidan los carpinteros y peones que trabajan bajo mi
dirección en la fortaleza de Punta de Piedra, y en consecuencia habiéndome
V.S. autorizado retirarme de esta Capital, tengo la honra de participar a V.S.
que he cumplido con la anterior orden despidiendo a todos lo carpinteros y
peones de Punta de Piedra. Antes de embarcarles de acuerdo con el
Comandante de Marina Chávez he tomado todas las medidas convenientes
para la seguridad de la batería y de los materiales que han quedado bajo la
vigilancia de la guarnición.

"Primero, atendiendo a la imposibilidad física de una docena de peones


débiles y estropeados pudieran llevar sobre el cerro la parte pesada del
material de Punta de Piedra, y que en consecuencia hubiera sido forzoso
hacer dos depósitos en lugares diferentes.

"Segundo, que si todo el material hubiera sido depositado en el Cuartel de


dicho cerro, resultaría que en las noches oscuras la batería de la orilla se
quedaría sin vigilancia suficiente para proteger las construcciones hechas, y
que además habiendo la facilidad de alojar la pequeña guarnición de diez
hombres en los altos de la misma ramada que encierra todo el material y en
el centro de la batería en construcción, yo me determiné en hacer limpiar la
ramada de la maestranza de todas éstas que allí se hallaban, y en ella puse
con el mayor arreglo el material...

"Con dicho arreglo, señor Comandante General la tropa ocupando el alto


construido en la maestranza cuida al mismo tiempo, el material, la batería y
los desembarcaderos del río.

"En cuanto a la casa de la dirección, ella tiene dos cuartos y una galería,
con sus respectivas puertas y ventanas hechas con las costaneras de moral, y
llevan sus chapas y picaportes. He cerrado dichos cuartos y me he llevado a
Guayaquil sus llaves para que U.S. pueda disponer de ellas, dejándolas a mi
cargo o cualquier otro empleado que responda de ellas... A.B.S.M.- Enrique
Onffroy de Thosom. (54)

De esta manera quedaron suspendidos los trabajos de las instalaciones y


baterías del Fuerte de Punta de Piedra, a pesar del enorme esfuerzo económico
y humano que esta empresa significó. Quedaban sólo unos cuantos hombres
para la custodia del material, el resto retornó a sus lugares de origen, en
espera de que estos se reanuden.
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 49

ALISTAMIENTO Y NAVEGACIONES DE LA GOLETA DE GUERRA


"SALADO"

Estando fondeada la goleta de guerra "Salado" en "La Ría" frente a la


ciudad de Guayaquil, bajo el comando del Capitán de Fragata Lucas Rojas,
éste recibió el 18 de febrero de 1861 la orden verbal de parte del Capitán de
Navío Agustín Oramas, Mayor General de Marina, de acoderarse, mas se vio
imposibilitado de efectuar dicha maniobra, informando la novedad en los
siguientes términos: "Sin embargo de hallarse con las cadenas claras y el
práctico a bordo me encuentro en la imposibilidad de no poder dar
cumplimiento por encontrarse enteramente obstruido de balsas el lugar que
se me ha designado".

La "Salado", cuyo casco estaba forrado en cobre, lucía como arboladura el


bauprés de pino de tea con su botalón de foque, el palo trinquete con sus
respectivas vergas, mastelero, pico y crucetas, así como el palo mayor, también
de pino de tea con su botavara, etc., según descripción de su propio
Comandante, mas es de anotar que ni siquiera a este buque, que era el único
que pensaba el gobierno conservar como buque de guerra, se le daba la
atención debida, y prácticamente las autoridades lo mantenían en completo
descuido, sin proveer siquiera el mínimo de personal necesario para los
trabajos de conservación.

Aún así el 8 de marzo su Comandante recibió la orden de alistar el buque


para salir a navegar en el acto, cuando el Supremo Gobierno así lo disponga,
y también la disposición de entregar al Coronel Honorario Bouman de Mert
la jarcia trozada que haya en el buque. A lo indicado el Capitán de Fragata
Lucas Rojas contestó de la siguiente manera:

"Muy gustoso cumpliría con esta disposición (entrega de la jarcia trozada)


si no tuviese que salir a navegar, pues hay que hacer lampazos, estopa, que
no tiene la expresada ni una libra, y este artículo es de primera necesidad en
todo buque de guerra, careciendo también de tacos para la artillería que se
compone de cuatro cañones de a nueve.

"A la primera nota de US. para que prepare el buque de mi mando, nadie
mejor que esa mayoría conoce el estado en que actualmente se encuentra el
buque, sin tripulación con qué hacer los trabajos ordinarios de tesar las jarcias,
guarnir aparejos, por falta de marineros que conozcan de su profesión.

"En el último arreglo que hizo esa mayoría con acuerdo de S.E. el
Presidente, como para estar en puerto es la dotación que acompaño, y este
número no es suficiente para manejar este buque en clase de guerra que
monta cuatro cañones y tiene dos botes que tripular, el uno que necesita que
se repare con la prontitud posible se halla en poder del Comandante de la
"Cuatro de Abril". Por disposición de esa Mayoría en su nota del 23 del pasado
la dotación que se señaló se componía su totalidad de un segundo
50 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

contramaestre con cargo, un segundo guardián con cargo, un condestable, un


cocinero, dos cabos de guardia, dos gavieros y 4 marineros de la. clase que
componen un presupuesto de 186 pesos, pero el Gobierno ni esa pequeña
tripulación ha podido enganchar hasta ahora, habrá habido sus motivos para
no haber principiado el enganche.

"No sé señor cual sea la dotación que se señale, para el referido buque,
pues en el primer arreglo que hizo esta Comandancia de esos marineros se
consideró que era mucho y se hizo el arreglo que he demostrado para estar en
el puerto.

"Hoy que se me extendió la orden por esa Mayoría para que aliste el
referido buque, deseo saber cual es la dotación que se le señale, si se debe
principiar a buscar la marinería para enganchar y poder principiar los trabajos
que son necesarios para poner este buque en estado de navegar, como son
tesar jarcias, envergar velas y embarcar más lastre, pues el buque carece de
este peso para su estabilidad.

"Los pedimentos que se me ordena haga de los útiles que se necesitan


para navegar, es necesario tener la dotación arreglada para que cada oficial
de cargo pida lo que necesita como en su posición, el condestable, carpintero,
calafate, contramaestre y el número de días que sea necesario pedir de víveres,
y sin embargo, principiaré a hacer lo que se pueda con los indígenas que hay
actualmente en la expresada.

"También es de imperiosa necesidad desembarcar un cañon de a doce, que


se halla en cubierta y que hace mucho estorbo.

"La tripulación se divide en la mar en guardia de babor y guardia de


estribor, con la suficiente dotación de oficiales, guardias marinas, guardián o
contramaestre en cada guardia, y la guarnición que ayuda a halar los cabos
que le indiquen los señores guardias marinas, por consiguiente creo que US.
que es un verdadero marino (refiriéndose al Comandante Oramas) arregle la
dotación que se debe enganchar.- Dios guarde a US.- Lucas Rojas". (55)

El Gobierno había dispuesto que la goleta "Salado" zarpe con las


instrucciones correspondientes para vigilar las costas y controlar el
contrabando, del que se tenía noticia se estaba produciendo en algunos
sectores, por ello el Comandante del buque vuelve a recalcar el día 11 de
marzo que para que dicha goleta de guerra quede lista para salir a navegar,
es de imperiosa necesidad proveerla de la tripulación necesaria, aún
limitándose a la más estricta economía.

El Capitán de Fragata Lucas Rojas sugiere al Mayor General de Marina


que por la seguridad del buque y para poder realizar las diferentes maniobras
con prontitud, se le provea del siguiente personal de tripulación: "Cuatro
marineros timoneles, dos para las guardias de babor y dos para las de estribor,
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 51

porque se relevan de dos en dos horas, conforme a ordenanza.

"Doce marineros, seis para cada guardia, de babor y estribor. De estos se


nombra un tope, que se releva cada dos horas.

"Un contramaestre.

"Un condestable que lo creo de mucha utilidad". (56)

Por otro lado presenta los requerimientos de carpinteros y calafates, pero


esta vez al Capitán del Puerto de Guayaquil, que es quien los provee según lo
reglamentado. Dándose cuenta el Comandante de la responsabilidad que
gravita en él, indica a las autoridades que el número de la tripulación
requerida puede aumentar considerando que la "Salado" como buque de guerra
monta cuatro cañones, a los que hay que servir, y posee dos botes que requieren
de la necesaria dotación para tripularlo, a más de que en los patrullajes,
cuando corresponda, hay que distraer dos o tres hombres embarcándolos en
los buques contrabandistas apresados en la costa para remitirlos al puerto
que se disponga. (57)

Los oficiales de cargo del buque que habían presentado también, al


Comandante Rojas, los requerimientos necesarios para la navegación, y éste
a su vez los solicitó al Comandante Oramas para su despacho. Pero otras de
las tareas tan importantes como las mencionadas, fue el desembarco de un
cañón de a doce y de una carronada de a diez y ocho con su cureña, que se
encontraban sobre la cubierta de la goleta de guerra y que según su
Comandante representaba un estorbo, en especial para salir a navegar pues
sólo serían utilizados los cañones de a nueve. (58)

Al siguiente día nuevamente el Comandante Rojas envía una comunicación


al Capitán de Navío Agustín Oramas, para informarle de novedades en su
buque, pero en lo posterior se produce el relevo de Comandante de la goleta
de guerra "Salado", por tener el Capitán de Fragata Lucas Rojas que
trasladarse a su nuevo destino como Ministro Juez Marcial de la Corte
Superior del Distrito de Guayaquil, lo que había dispuesto el entonces Jefe
Supremo de la República Dr. Gabriel García Moreno desde inicio del mes de
enero.

Pero el principal motivo de su separación del Comando del buque se debió


a su incapacidad física temporal causada por un accidente, pues él mismo
informa lo siguiente al Mayor General de Marina: "Señor me apresuro a poner
en conocimiento de US.: que ayer a las cuatro y media de la tarde - es decir
del día 18 de marzo de 1861 - al tiempo de embarcarme para ir a tierra a
• buscar un cuero de carnero para formar dos lanadas para la artillería, al
tiempo de embarcarme caí de la última grada del portalón sobre el bote de
popa a proa y recibí un fuerte golpe al pecho derecho, que casi me quita la
respiración, pues ayer no sentía nada, pero anoche y hoy el dolor es tan agudo
52 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

que me impide casi respirar, y como el buque de mi mando se está alistando


para viajar no quiero que por mí se demore, caso en que esté listo y no poder
salir por las razones expuestas".

El Comandante Oramas sugirió al Comandante General de Marina que


se encargue del Comando del buque a su primer Teniente, Capitán de Corbeta
José H. Chávez, en su reemplazo, pero dicha autoridad se decidió por otro
oficial.

Su reemplazante en el mando fue el Capitán de Corbeta Diego Eugenio


Matos, quien continuó en forma inmediata con las tareas del alistamiento
del buque.

Dicho oficial había cursado en la Escuela Náutica de Cartagena, a la que


ingresó en 1824, culminando sus estudios en agosto de 1826, por lo que obtuvo
el grado de aspirante de marina. Seguidamente se embarcó junto a otros tres
compañeros - entre ellos Lucas Rojas, que precisamente le entregaba el
comando de la goleta de guerra "Salado", como hemos dicho - en la fragata de
guerra "Cundinamarca" para continuar sus prácticas mientras el buque
permanecía en Puerto, mas el 18 de enero de 1827 fueron transbordados
aquellos cuatro aspirantes de marina a otra unidad de guerra, en la que
zarparon con rumbo a Puerto Cabello, desde donde el buque llevó tropas
hasta la Guayra retornando el 1 de marzo. (59)

Diego Matos continuó su carrera en forma normal, y tres años después,


conformando la dotación de la fragata "Colombia", arribó a Guayaquil el 8 de
enero de 1830 luego de una larga navegación de 161 días desde Puerto Cabello.
A su llegada ostentaba el grado de alférez de fragata, mas el 1 de abril del
mismo año fueron ascendidos todos los oficiales de la "Colombia", como justo
reconocimiento al profesionalismo demostrado por aquellos durante la extensa
jornada de peligrosa navegación, entre ellos Diego Matos, quien fue promovido
al grado de alférez de navío. (60)

Matos se quedó definitivamente en Ecuador, al cual adoptó como segunda


patria, continuando en nuestra Marina, y en 1861 ya como capitán de corbeta
es llamado al servicio activo para el desempeño de su nuevo cargo.

De la misma manera, continuaba como Segundo Comandante de la goleta


de guerra "Salado" el Capitán de Corbeta José H. Chávez, quien se había
venido desempeñando como Comandante del bergantín goleta de guerra "4
de Abril", buque que se separaba de la Armada por motivo de su venta,
dispuesta por el Presidente García Moreno. Quedaba sólo en servicio la goleta
"Salado" y no había intensiones de adquirir otro buque para unidad de guerra.

En estas condiciones la "Salado" zarpó de Guayaquil bajo el comando del


Capitán de Corbeta Diego Eugenio Matos, aprovechando las diferentes mareas
para remontar el río Guayas. Una vez en el mar inició su misión de control
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 53

del contrabando, y ya el 30 de marzo escribe su primer informe en los


siguientes términos:

"Comandancia de la goleta de guerra "Salado".- Marzo 30 de 1861, a la


vela frente a Salango, distancia 3 millas.- Al señor Coronel Mayor General
de Marina.

"Señor.- Ayer a las diez del día que arribé a la Isla de la Plata, según mis
instrucciones, registré prolijamente dicha Isla. Pasando de banda en banda
por ella, y hasta las cuatro de la tarde no me fue posible encontrar algún
vestigio de contrabando. Inmediatamente me hice a la vela, dirigiéndome a
Salango, navegando toda la noche de esa vuelta encontré al rayar el día frente
a dicho puerto, a distancia de dos millas de la costa, a la Chata Nacional
"Angelita", cuyo piloto es Miguel Márquez, y registrada que fue se le
encontraron abordo de sesenta a ochenta piedras de sal grandes, y que por
confesión de su mismo piloto, durmió esa noche fondeado en Salango, y teme-
roso de los guardias que estaban en tierra se hizo a la vela en ese momento.

"Por tanto y considerándola legítimamente presa la mandó a cargo del


Alférez de Fragata César Guedes con dos individuos de tropa racionados para
diez días.

"En este mismo momento que son las diez del día procedí por ciertos avisos
a registrar la caleta que me queda al norte de Salango tres millas, y en ella
me he encontrado adentro del monte una factura, mercadería (extranjera) y
harina que no me es posible remitirla en esta misma chata, tanto porque no
cabe cuanto por el mal estado de la embarcación, y por otra parte no haber
concluido su embarque, ni arreglado el inventario ni guías para esa aduana,
pero tengo a la vista y muy cerca otra chata que la he mandado a traer con un
bote al remolque porque estamos en calma, y en ella remitir toda la carga a
flete y a cargo de un oficial.

"La sal que conduce la chata no va contada por la premura del tiempo y la
atención al embarque del otro cargamento, pero descansa en el celo y actividad
del oficial conductor, para que en esa forma forme el inventario a la hora de
entregar a la colecturía.

"Recomiendo a US. que este oficial y la tropa regresen lo más pronto posible,
por la vía de Santa Elena o por la de Manta en algún buquecito.

"Sírvase US. transmitir al conocimiento del señor General Comandante


General del Distrito lo relacionado en esta nota, y si fuese necesario al del
señor Gobernador de la plaza.

"Incluyo a US. las tres declaraciones que he tomado al Capitán y dos


marineros que navegaban en plaza en la chata, para los fines que sean
consiguiente.- Dios Guarde a US.- Diego E. Matos. (61)
54 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

En lo que corresponde al otro contrabando que no fue posible al


Comandante Matos remitirlo a Guayaquil con el Alférez César Guedes, éste
fletó la Chata "Carmencita" en la cantidad de 35 pesos y embarcó dicha carga,
nombrando para conducirla al Guardia Marina Guillermo Salcedo que zarpó
al siguiente día. Al respecto amplió su informe de la siguiente manera: "Tuve
aviso que en una caleta al norte de Salango, distancia 3 millas se encontraba
en tierra, adentro del monte un gran depósito de mercaderías, por tanto
despaché mis botes en el momento para que explorasen, efectivamente resultó
encontrarse en el monte en distintos puntos situados los efectos de mercaderías
que se comprenden en la guía que adjunto a US., procediendo a su embarco
inmediatamente abordo del buque de mi mando, varios tercios desarmados,
otros rehechos como para ser cargados en bestias, y tan desierto que no se
encontró persona alguna para tomarlo y confesionario, aunque se encontraron
rastros, sombreros y zapatos usados, botellas de mistelas abiertas, platos
con sardinas y varios vestigios que dejaban conocer la estadía de algunas
personas que custodiaban dicha carga; pues según entiendo ésta no ha sido
ni la mitad del contrabando porque hace muchos días que la conducían a
Jipijapa, según rastros de las bestias, como lo acredita también la parte que
se ha tomado, formado fuera de los tercios en desorden". (62)

La tripulación de la "Salado" también tomó un bongo varado en tierra con


su vela y abandonado, por lo que Diego Matos dispuso que éste quede abordado
para el uso del buque en los puertos bravos, para no maltratar sus botes más
de lo que estaban. (63)

El crucero de la "Salado" continuó durante todo el mes de abril con su


misión de combatir el contrabando, delito que se había venido realizando con
mucha frecuencia, aprovechando el descuido de las autoridades por las
circunstancias políticas y de continuas guerras intestinas. Por ello García
Moreno estaba decidido a reprimir aquella evasión al fisco con el mayor rigor
posible, aunque los medios disponibles eran ínfimos, pues un solo buque de
guerra era insuficiente para una costa tan extensa. En esa tarea permaneció
distraída nuestra goleta de guerra durante mucho tiempo, más no se pensaba
en su utilización para la defensa de nuestra soberanía marítima.

El buque navegó hacia el norte y vigiló las costas de la provincia de


Esmeraldas, luego de arribar al puerto de Manta, en donde ancló a las seis
de la tarde del día 8 de mayo. (64) Inmediatamente recibió dos oficios del 18
y 25 de abril, dirigidos por el señor General, Comandante General del Distrito,
General Antonio Martínez Pallares, en la que en forma urgente le pedía el
nombre del sujeto que denunció el lugar donde estaban los efectos extranjeros
apresados y remitidos a la Aduana de Guayaquil. A lo que el Comandante
Matos contestó que no conoce ni sabe el nombre ni residencia de dicho
denunciante, datos que no preguntó por ser dos los contrabandos que capturó
al mismo tiempo, y la premura en la ejecución no le permitió hacer dicha
indagación. (65)
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 55

Posteriormente la "Salado" procedió al retorno a su puerto base, arribando


a Guayaquil a las tres de la mañana del día 24 de mayo de 1861, terminando
de esa manera el crucero encomendado por las autoridades. Abordo
transportaba 10 barriles de pólvora pequeños y 9 fusiles de llaves con sus
respectivas bayonetas, que el Capitán del Puerto de Manta había remitido
para la plaza de Guayaquil. Así también cuatro indígenas que el Jefe Político
del Cantón Santa Elena había enviado para el relevo en el Arsenal, racionados
hasta el arribo por aquella Jefatura. (66)

La tripulación del buque no tuvo mucho tiempo para el descanso, pues ese
mismo día se dispuso un nuevo alistamiento para sesenta días de navegación.
Es así que aquel 24 de mayo el Comandante Matos pide al Gobierno se le
provea de 1860 raciones de armada en víveres, para consumo de la tripulación
y guarnición a razón de 31 raciones diarias. (67)

Tres días después el Capitán de Corbeta José Chávez, Detall del buque,
presentó otras necesidades con el visto bueno del Comandante, consistente
en 8 galones de aceite de linasa cocido, un barril de alquitrán dulce y 6 galones
de aceite de lámpara para la bitácora. (68)

Con el fin de atender ambos pedidos, el 29 de mayo se reunió en Guayaquil


r la Junta de Hacienda integrada por los señores: Capitán de Navío José Antonio
Gómez, Gobernador de la Provincia; Dr. Javier Espinoza, Ministro Fiscal;
José María P. Pareja, Oficial Mayor de la Contaduría Mayor; y, José María
Baquerizo, Tesorero General de Hacienda, la que decidió aprobar los pedidos
considerando la urgencia del zarpe, y se sometió lo actuado al conocimiento
de S. E. el Presidente de la República. (69)

Al respecto el Ministro de Hacienda, Sr. Aguirre, informa al Gobernador


Gómez el 1 de junio lo dispuesto por S.E. el Presidente de la República, en los
siguientes términos: "He visto S.E. la estimada nota en que US. transcribe
la del señor Comandante General de ese Distrito, sobre el abono del
presupuesto para que la goleta "Salado" haga el crucero en el presente mes y
en el siguiente, y ha dispuesto que US. remita el presupuesto indicado, como
condición indispensable para la conducta de US. que ha dispuesto para un
objeto de tal importancia". (70)

La goleta volvió a zarpar para un largo crucero de dos meses, con la misión
de vigilar las costas y reprimir el contrabando, a mas de otras instrucciones
confiadas a su Comandante. El buque se hizo a la vela una vez que se iniciaba
la vaciante del río Guayas, y a las 11 de la mañana del 4 de junio fondeó en la
boca de Matorrillos.

La "Salado" tenía como novedad la falta de tripulación, pues hasta las 6


de la tarde del día anterior la Capitanía del Puerto no le había proporcionado
los dos marineros que le faltaban, más otro marinero que en los momentos de
56 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

zarpar se quedó en tierra por asuntos del servicio, de tal manera que de los
cinco marineros de dotación sólo dos estaban abordo. Por ello el Comandante
Matos dice que con ellos "de ninguna manera podré maniobrar ni como buque
mercante, porque los diez indígenas que me acompañan son considerados
para los trabajos de cubierta. Carezco también de carpintero, y todo esto me
obliga, aunque con sensibilidad, a decir a US. (al Mayor General de Marina)
que pongo a salvo mi responsabilidad". (71)

El buque aprovechó la siguiente marea para continuar la navegación hasta


Puná, y lo hizo arrastrando el anda en razón de la escasez de marineros y
por los continuos bordos. Decidiendo esperar allí al bote que se había quedado
en Guayaquil para que después les dé alcance, con la esperanza de que le
envien al carpintero y los tres marineros. (72)

A las 6 de la tarde del siguiente día arribaron a Puná, pero tres horas
antes habían recibido a su embarcación menor conducida por el Guardia
Marina Agustín Oramas, a la altura de Chupadores, en la que solo venía el
carpintero. (73)

La navegación continuó una vez que se lo permitió la próxima marea y


pronto se hizo a la mar. Después de nueve días, en que dejó la costa sur
completamente registrada y sin novedad, arribó al Puerto de Manta. A las 9
de la mañana del 14 de junio, en donde el Comandante se puso en
comunicación con el Gobernador para ofrecerle su cooperación y servicio en
cualquier caso, de acuerdo a las instrucciones recibidas. (74) Otro objeto de
su llegada a ese puerto es el de tomar un práctico de la costa norte para
realizar un prolijo registro de algunos sitios escondidos y caletas que no conocía
el Capitán de Corbeta Diego Eugenio Matos. (75) Esa misma tarde salió a
cumplir la mencionada operación. Posteriormente el Comandante del buque
dio parte del cumplimiento de la misma y de sus intenciones futuras, a más
de mencionar el progreso demostrado por los guardias marinas embarcados
a bordo de la goleta de guerra "Salado". Transcribimos aquel documento a
continuación:

"República del Ecuador.- Comandancia de la goleta de guerra "Salado".-


Manta, Julio 2 de 1861.- Al señor Mayor General de Marina.

"Señor.- Ayer a las cinco de la tarde llegué a esta, dejando la costa del
norte desde el Pailón, recorrida y sin novedad y con el designio de recibir
alguna comunicación de US. que quisiese remitirme, más como no he tenido
ese gusto, esta noche de madrugada seguiré mi crucero para el sur, hasta el
Muerto, de donde regresaré a Santa Elena y me estaré allí el tiempo preciso
para tesar las jarcias, que están muy en banda, y podré recibir órdenes de
US.
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 57

"Me es satisfactorio avisar a US. que para evitar los inconvenientes que se
aprecian al embarcar los carpinteros de Guayaquil por no tener herramientas
como ha sucedido en el presente viaje, hemos tenido a bien, el primer Teniente
y yo que comprarla en Atacames, obsequiándolas al buque, siendo éstas las
que pueden necesitarse para cualquier trabajo del buque. Al mismo tiempo
que veo con sumo agrado los progresos en el estudio práctico de los Guardias
Marinas, de lo que me es honroso anunciárselo a US.- Dios guarde a US.-
Diego E. Matos". (76)

A su retorno, el buque después de dejar recorrida sin novedad la costa de


Manabí, bordeó la Isla del Muerto, en donde pudo notar el Comandante Matos,
que el faro de la misma tiene un servicio deficiente, y dice: "A mi salida el
mes pasado solo una hora alumbró; de las siete a las ocho y ahora que vengo
de visitarlo no he visto luz alguna, estando toda una noche a su vista a
distancia de cuatro millas al oeste". (77) A las 11 de la mañana del día 10 de
julio arribó y fondeó en el surgidero de Santa Elena, en donde la tripulación
se dedicó a tesar las jarcias. (78)

Luego de efectuada dicha tarea la "Salado" se dirigió hacia el norte hasta


arribar nuevamente al Puerto de Manta a las 0800 horas del día 18 de julio,
para una estadía muy corta, zarpando después hacia el norte para continuar
el patrullaje por la costa.

El día 3 de agosto de 1861 arribó la goleta de guerra "Salado" al Puerto de


Guayaquil, dando fondo a las 20:00 horas en el río Guayas, frente a la ciudad,
terminando con la misión encomendada sin mayor novedad. El mismo día el
Capitán de Corbeta Diego Eugenio Matos informa al señor Mayor General
de Marina, Capitán de Navío Agustín Oramas, entre otros considerandos, lo
siguiente:

"Toda la tripulación y guarnición entra en un estado de completa


salubridad, y el buque está en orden de emprender nuevo viaje a la hora que
se ordene.

"Réstame decir a US. que el 27 del pasado recalé al "Muerto" a las 11 de la


noche y sin reconocer a éste distinguí a su luz a larga distancia por lo que
acompañado de ella hice mi entrada para Punta Arena". (79) Es decir que se
había solucionado la novedad de mal servicio del faro de la Isla del Muerto.
58 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

ESTUDIOS Y PRACTICAS DE LOS GUARDIAS MARINAS

La goleta "Salado" permaneció fondeada por algún tiempo frente a


Guayaquil. Su comandante, oficiales y guardias marinas y la corta tripulación
debieron esforzarse para mantener el buque en condiciones de navegar, aún
más, que siendo éste el único buque de guerra con que cuenta la nación es
preciso conservarlo operativo, para el cumplimiento de las tareas y misiones
en el mar.

El Capitán de Navío Agustín Eugenio Oramas Izaguirre, Mayor General


de Marina se preocupó de la formación de jóvenes para contar con futuros
oficiales de marina. Pero considerando que la Escuela Náutica se encontraba
con sus puertas cerradas, y no había intención por parte del gobierno de
restablecerla, para que de esa manera puedan los alumnos recibir la suficiente
instrucción teórica que les permita dedicarse a la Marina de Guerra Nacional
o la Mercante, se decidió por la instrucción práctica de los jóvenes con
inclinación a la profesión naval.

Es de mencionar de una vez, que en los tres lustros de la época Garciana


no hubo mayor interés por parte de los gobiernos de restablecer dicha Escuela
Náutica, pues a pesar de que en 1867 el Senado y Cámara de Diputados del
Ecuador reunidos en Congreso decretaron la reapertura de la misma, ésta
nunca se llevó a la práctica. (80) Posteriormente en 1871 hubo un intento de
reabrirla, pero debido a la suma enorme del costo de los modelos y útiles para
la enseñanza teórica y práctica, el mismo que tendría un valor de 178.037
pesos, obligó al gobierno a suspender tan importante proyecto. (81) Esto
demuestra el poco interés por los asuntos del mar del gobernante y autoridades
de la época, pues para el progreso ellos estaban esperanzados en la tierra y
lo que en ella pasaba, pero sin mirar al océano.

En la década anterior al Garcianismo hubo mayor interés por el


funcionamiento de la Escuela Náutica, es así que a inicios de 1850 se dispuso
el restablecimiento de la Escuela de Pilotaje y Náutica bajo la dirección del
Capitán de Navío Juan José Valverde, aunque ésta no logró abrir sus puertas
por disposición de S.E. el Presidente de la República Coronel Manuel Ascásubi.
(82)

Durante la presidencia del General José María Urbina logró funcionar


aquella Escuela Náutica, de la cual decretó su restablecimiento en Guayaquil
con fecha 1 de abril de 1853, pero es recién el 2 de enero de 1854 la fecha en
que inició labores. Con el fin de complementar lo detallado al respecto en el
tomo VIII de esta obra, me permito aprovechar la ocasión para transcribir
los siguientes oficios, que dan razón de aquel acontecimiento incluyendo
además el listado de alumnos:

"República del Ecuador.- Comandancia General del Distrito.- Guayaquil


DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 59

a 26 de abril de 1854.- 10o. de la Libertad.-

• "Al H. Señor Ministro Secretario de Estado en los Despachos de Guerra y


Marina.

"Señor: Cumpliendo con la disposición de S.E. el Presidente de la República,


comunicada por US.E. a esa Comandancia General, en su apreciable nota de
12 del actual, señalada con el número 20, incluyo a US.H. una lista nominal
de los alumnos con que se instaló la Escuela Náutica de esta ciudad, el día 2
de enero del presente año, en virtud de la orden que a este respecto le dirigió
el 7 de diciembre del año próximo pasado, bajo el número 71, debiendo advertir
que a pesar de que los guardias marinas y meritorios no asisten
constantemente al establecimiento a consecuencia de hallarse unos ausentes
y otros ocupados varias veces en los trabajos de los buques a que están
destinados; se nota algún adelantamiento en ellos, especialmente a los
alumnos particulares, de los cuales el último que consta en la lista, presentó
examen de náutica, hace pocos días, manifestando aprovechamiento, según
lo acreditó en dicho acto.

"Por lo que toca a los ramos de enseñanza, ellos consisten en las


matemáticas, especialmente en la parte aplicable al pilotaje, por Ciscar, en
la táctica y arquitectura naval, nociones de artillería, baterías flotantes y
dibujo lineal, todo por el orden debido.

Dios y Libertad, Guillermo Franco". (83)

"Lista del número de alumnos con que abrió la Escuela Náutica de esta
ciudad el día 2 de enero del presente año.

Guardias Marinas

Francisco Campana
Pericles Peñateli
Manuel Romero
Francisco Vergara
Federico Tama
Juan Vítores

Meritorios de Primera y Segunda Clase

Francisco Vera
José María Jado
Julio Robles
Leonardo Zúñiga
Nicanor Campos
60 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Quintiliano Alarcón
Santiago Castillo
Daniel Mata

Alumnos Particulares

Agustín Tola
Horacio Miron
José Antonio Vera
Manuel M. Suárez
Roberto Feres
Joaquín Sanmartín
Ricardo Franco
Domingo Viteri

"Guayaquil, Abril 25 de 1854. El Teniente Coronel encargado de la Mayoría


de Marina, José A. Gómez" (84)

"República del Ecuador

Ministerio de Estado en el departamento de Guerra y Marina

Quito a 3 de Mayo de 1854.- 10o. de la Libertad.

Sección de Marina.

Al Señor General Comandante General del Distrito de Guayaquil.

"Con la estimable comunicación de US. de 26 del próximo pasado número


19, se ha recibido la lista nominal de los alumnos con que se abrió la Escuela
Náutica de esta ciudad el día 2 de enero del presente año. Siéndome muy
satisfactorio manifestar a US. la grande complacencia que ha tenido el
Gobierno al informarse del estado de progreso en que se encuentra el
expresado establecimiento; y espera que US. desplegará todo su celo y
patriotismo, a fin de que los alumnos sigan dando pruebas de su
adelantamiento en los diferentes ramos a que se contrae su aprendizaje, cuyo
buen resultado será de inmensa utilidad a la República y grande honor a la
Marina Nacional.

"Dios y Libertad.- Teodoro Gómez de la Torre. Es copia.- El Coronel Oficial


Mayor, Antonio José Mata" (85)

A inicios de 1856 el Gobierno contrató los servicios del profesor Francisco


Prieto para que dirija la Escuela Náutica que había dejado de funcionar tiempo
atrás. Es este mismo Director quien informa en diferentes fechas al Mayor
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 61

General de Marina sobre el desarrollo de las actividades, conducta e incluso


el rendimiento de los alumnos, la que considera muy baja. A continuación
transcribimos algunos documentos al respecto:

"Guayaquil febrero 21 de 1856.- Dirección de la Escuela Náutica al Mayor


General de Marina.- Doy parte a VS. de que es imposible tolerar la mala
conducta y la insubordinación que observan algunos alumnos en la hora de
clase; pues no solo no llevan una buena lección regular siquiera, sino que
también introducen el desorden, las malas maneras y dichos indecentes en
ellas.

"Entre estos se distinguen por su mal manejo, los guardias marinas Manuel
Bustamante y Nicanor Campos, y el meritorio Rafael Coello, los dos primeros
han tenido hoy durante las explicaciones, un gran pleito de voces y trompadas,
sin obedecer a nadie ni considerar el lugar en que se encontraban.

"Pongo en conocimiento de U. este hecho, para que se corrija debidamente,


e incluyo la lista de los asistentes con la especificación de las lecciones (f)
Francisco Prieto.

-4 LISTA DE LOS ALUMNOS QUE HAN ASISTIDO A CLASES HASTA


LA FECHA

VAPOR "MACHALA"

Guardia marina Honorio Plaza Lección malísima


Francisco Plaza malísima
Meritorio Rafael Coello muy mala
José Antonio Rodríguez id id
GOLETA "17 DE JULIO"
Guardia marina Daniel Mata buena
Manuel Bustamante regular
Meritorio Adolfo Martín id id
Jacinto Garaicoa muy mala
César Salcedo buena
Clemente Baca muy mala
Eduardo Baca muy mala
César Pareja mala
PAILEBOT "OLMEDO"

Guardia marina Nicanor Campos buena


Meritorio Darío Araujo mala
62 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

VAPOR "GUAYAS"

Guardia marina Juan Vítores buena


Francisco Mora regular
José Antonio Vera muy mala
Meritorio Ricardo Franco buena
Adolfo Hidalgo id.
Vicente Martín regular
Roberto Pérez mala
Manuel Aramburu regular
Lorenzo Castro buena

Guayaquil, febrero 21/56

"Guayaquil, 22 de julio de 1856

"Dirección de la Escuela Náutica al Sr. Mayor de Marina

"El que suscribe da parte de haber asistido al aula y dado bien sus lecciones
los "particulares" Nelson Izquierdo, Daniel Arambulo.

"No estando los jóvenes que se me ha confiado en disposición de presentarse


a exámenes, acompaño un estado de los guardias marinas, meritorios y
particulares, omitiendo los días que han faltado al aula y sus lecciones por
constar en los partes que he remitido a VS. desde el 7 de febrero del actual
hasta la fecha.

Sírvase poner en conocimiento de SS. el Sr. Cmdte. Gen. de Marina las


aptitudes y adelantos de los alumnos y la necesidad de un nuevo sistema en
el establecimiento de mi cargo para que adelantando los jóvenes agraciados,
salven mi responsabilidad. Dios y Libertad. f) Francisco Prieto"

Sigue una larga lista de 46 alumnos

"Guayaquil octubre 3 de 1856

"Dirección de la Escuela Náutica al Cmdte. Gen. de Marina

"Tengo el honor de poner en conocimiento de VS. de haberse presentado al


establecimiento los Señores:
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 63

GUARDIAS MARINAS MERITORIOS PARTICULARES


Francisco Campana José Antonio Rodríguez Roberto Pérez
Daniel Mata Guillermo Salcedo Ulises Izquierdo
Eusebio Marín (sic) César Salcedo José Antonio Franco
José Ma. Jado Juan Juvin
Adolfo Martín

"Con los que he principiado nuevamente el aprendizaje a consecuencia de


haber olvidado todo lo anterior. Su Svdor, desea se digne U. proveer de papel
y plumas para los usos necesarios.

"Dios y Libertad f) Francisco Prieto"

Durante la Presidencia el General Francisco Robles ésta logró tener 25


alumnos, más el 28 de enero de 1857 se produjo la renuncia del Director
Prieto por el decaimiento del entusiasmo y la apatía reinante entre el
alumnado, por lo que fue clausurada.

Con el siguiente oficio se informa de dicha renuncia y sobre la decadencia


a que ha llegado la Escuela Náutica por el desinterés del alumnado, lo cual
es lamentable porque no se cumplió con la finalidad de formar nuevos oficiales
en la cantidad deseada:

"Ministerio de Guerra y Marina.- Quito 28 de enero de 1857.- Al Sr.


Comandante General del Distrito de Guayaquil y de Marina.

"Dí cuenta a S.E. el Vicepresidente encargado del Poder Ejecutivo de la


renuncia que ha elevado a este despacho por conducto de US. el director de la
Escuela Náutica, Sr. Francisco Prieto, y S.E. impuesto de la decadencia a
que ha llegado dicha escuela, por falta de contracción del pequeño número de
guardias marinas y meritorios que asisten en calidad de alumnos, se ha visto
en la necesidad de aceptar dicha renuncia, puesto que el mismo director
asegura que nada de provecho puede esperarse de su continuación, porque
no hay sino tres o cuatro alumnos que asistan a la aula, y éstos manifiestan
la mayor negligencia.

"Al Gobierno le ha sido sensible informarse de este particular, porque ve


burladas las esperanzas que concibió de que ese importante establecimiento
produciría oficiales científicos y útiles, por lo mismo a la Armada Nacional.

"Al comunicar US. al Sr. Prieto la aceptación de su renuncia, se servirá


64 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

darle a nombre del Gobierno, las más expresivas gracias por el interés y la
consagración con que ha procurado llenar sus deberes.- Dios y Libertad.- f)
Gabriel Urbina.

Desde ese año en adelante no hubo intento de restablecerla, ya sea por


motivo de los conflictos intestinos, por razones de falta de dinero en el tesoro
o simplemente porque el nuevo Presidente García Moreno no tenía proyectado
su funcionamiento en aras, a lo que dicho alto magistrado consideraba como
otras obras de mayor interés para la nación.

Por lo expuesto la Superioridad Naval consideró la formación e instrucción


práctica de jóvenes guardias marinas, los que en un pequeño grupo fue
admitido a bordo de la goleta de guerra "Salado" para tal fin.

Aquellos jóvenes ansiosos de iniciar su carrera naval se embarcaron en la


goleta de guerra "Salado" desde que ésta inició el alistamiento para zarpar
en marzo de 1861, y ya el 2 de julio el Capitán de Corbeta Diego Eugenio
Matos, Comandante del buque, informaba al Mayor General de Marina desde
Manta, durante el cumplimiento de una navegación, lo siguiente: "Al mismo
tiempo que veo con sumo agrado los progresos en el estudio práctico de los
guardias marinas, de lo que me es honroso anunciárselo a US." (84)

A continuación me permito presentar una lista de los guardias marinas y


aspirantes de marina, que se encontraban realizando los estudios prácticos a
bordo de la "Salado", obtenida del análisis de las distintas comunicaciones
enviadas por el Comandante del buque y otras autoridades durante los años
1861-1862:

Guardia Marina Guillermo Salcedo


Guardia Marina José Agustín Oramas
Guardia Marina José Pallares
Aspirante de Marina Enrique Larroque
Aspirante de Marina Joaquín Barrera
Guardia Marina Daniel Cruz

De ellos, es de indicar que Guillermo Salcedo había venido sirviendo desde


1860 como guardia marina, y el 18 de octubre de aquel año fue llamado al
servicio de los buques, es decir luego del triunfo de las fuerzas garcianas. (85)

Así también José Agustín Oramas y Enrique Larroque habían conformado


DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 65

la dotación de la goleta de guerra "General Sucre" en 1860, desde su


adquisición en el mes de mayo, esto es en época del General Guillermo Franco.
El primero como meritorio de la. y el otro con el grado de meritorio de 2a.
(86) El joven Oramas es hijo del Capitán de Navío Agustín Oramas, Mayor
General de Marina, y como hemos dicho en su momento, continúa de esa
manera la tradición naval en la familia.

El 7 de octubre el Comandante de la Goleta "Salado" menciona al Guardia


Marina Daniel Cruz cuando informa de un incidente ocurrido entre éste que
se encontraba de guardia en el buque, y la tropa de la guarnición.

En lo que corresponde a los Repartos Navales y gastos que por estos se


realizan, por concepto de sueldos, incluido las pensiones a viudas y huérfanos,
en noviembre de 1861, la Comandancia General del Distrito de Guayaquil
informa lo relativo a dicho mes, con las siguientes cifras: (87)

CUERPO SUELDOS

PESOS R O
MAYORIA GENERAL DE MARINA 412
ARSENAL DE MARINA 255
GOLETA DE GUERRA "SALADO" 510 4
JEFES Y OFICIALES RETIRADOS 498 3
VIUDAS Y HUERFANOS 125 6 1/2

No consta en el cuadro la Capitanía del Puerto de Guayaquil, por


corresponder posiblemente su actividad a otro presupuesto. Escuela Náutica
no existe, notándose además una Marina muy pobre con un sólo buque. Pero
eso sí, es de mencionar que el Gobierno de García Moreno realiza fuertes
gastos para la defensa ante el temor de un posible ataque o invasión de sus
enemigos políticos, los urbinistas, pero sin considerar la necesidad de
mantener en servicio otros buques de guerra.

El 25 de noviembre la goleta de guerra "Salado" zarpó para una corta


navegación, en la que los guardias marinas tenían que aprovechar la misma
para realizar sus estudios y prácticas, la que incluía el uso de los instrumentos
de observación astronómica. Además, los oficiales deberían transmitir sus
conocimientos y experiencias a dichos jóvenes en el pilotaje, artillería,
maniobras, etc.

A las 20:00 horas el buque arribó a Punta Arenas sin novedad, sitio donde
66 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

fondeó su ancla, a fin de esperar la próxima marea para continuar la


navegación con rumbo a Santa Elena. (88)

Una vez que retornó el buque a Guayaquil, finalizada la comisión


encomendada, el Comandante Matos en su informe da noticias del
aprovechamiento de los guardias marinas, oficio que transcribimos:

"República del Ecuador.- Comandancia de la goleta de guerra "Salado.-


Guayaquil a 6 de diciembre de 1861.- Al señor Mayor General de Marina.

"Señor.- Son las nueve de la noche y acabo de fondear en esta ría con el
buque de mi mando sin novedad alguna y toda la dotación en buen estado de
salubridad y el buque pronto para si se le ordena un nuevo viaje.

"Mi comisión ha sido poco morosa por razón de expresa orden que tuve del
señor Jefe Político de Santa Elena; recomiendo a US. el estado de adelanto el
que en un viaje tan corto se encuentran los señores guardias marinas.

"Lo que tengo la honra de poner en conocimiento de US. para su


inteligencia.- Dios guarde a US.- f) Diego E. Matos". (89)

El 25 de febrero de 1862 el Ministro de Guerra y Marina dice al Comandante


General del Distrito de Guayaquil, que la separación del servio en la goleta
de guerra "Salado" dispuesta por S.E. el General en Jefe a solicitud del Alférez
de Fragata César Guedes y del Guardia Marina José Agustín Oramas, ha
merecido la aprobación del Gobierno. Por ello el jóven Oramas se desembarca.

La goleta de guerra "Salado" efectuó en adelante continuas navegaciones


para vigilar las costas, lo que era muy favorable para las prácticas de los
guardias marinas embarcados. Al siguiente año, el 14 de mayo de 1862, con
motivo del arribo del buque al puerto de Guayaquil, luego de un crucero
realizado, el Comandante detalló lo acontecido durante el mismo, y en parte
dice: "Los estudios de los guardias marinas continúan, y en prueba de sus
adelantos me es satisfactorio decir a US. que el joven José Pallares está en
estado de sufrir su exámen". (90)

Pero durante la misma jornada de navegación los Guardias Marinas José


Pallares y Daniel Cruz y el Aspirante Enrique Larroque cometieron una falta
disciplinaria, cuando teniendo licencia para saltar a tierra, el 20 de abril,
abusaron de la misma al irse al pueblo de Montecristi sin retornar a la hora
del término de aquella, por lo que el oficial que se estaba desempeñando
como lo. Teniente del buque, Teniente de Fragata Francisco Javier Castillo
originó un parte dirigido al Comandante, para informarle dicha novedad, en
el que le decía que dichos jóvenes no han aparecido hasta las ocho de la mañana
del día 21, hora en que confeccionó el parte. (91)
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 67

El asunto concluyó con la sanción para aquellos jóvenes, así lo informa el


Comandante Matos al Mayor General de Marina: "Esta falta debía ser
castigada como lo ordenan las ordenanzas de Marina - dice - más teniendo en
consideración de que estos jóvenes no están entendidos a fondo de la estrictez
que demanda el servicio, he convenido más bien, si es del parecer de US., en
que queden arrestados abordo por diez días; por consiguiente así lo he
dispuesto, salvo una disposición de US". (92)

En lo que se refiere al Guardia Marina José Pallares, éste rindió los


exámenes correspondientes para su ascenso a Alférez de Fragata, lo cual
consiguió como lo demuestra el siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Ministerio de Guerra y Marina.- Sección Marina.-


Quito, a 4 de junio de 1862.- Al Sr. General Comandante General del Distrito
de Guayaquil.

"Para los efectos legales, tengo la satisfacción de remitir a US. el despacho


de Alférez de Fragata que S.E. el encargado del Poder Ejecutivo ha tenido a
bien librar al Guardia Marina José Pallares, con vista de los documentos
remitidos por la Comandancia en Jefe del Ejército, los cuales comprueban
ser acreedor a este ascenso.- Dios Guarde a US.- Por ausencia del Ministro
de Guerra, el del Interior, R. Carvajal". (93)

Haciendo un análisis de lo relatado, es de creer que los guardias marinas


de la "Salado" tenían que estudiar las materias que estaban consideradas en
los programas de estudio de la Escuela Náutica, cuando funcionaba, de las
cuales debían rendir examen, complementadas con las prácticas en la mar.

En lo que corresponde al Aspirante Joaquín Barrera el Comandante Diego


Matos hace referencia de su mal comportamiento con una comunicación
dirigida al Capitán de Navío Agustín Oramas, Mayor General de Marina, el
4 de junio de 1862, cuando dice: "El Aspirante Joaquín Barrera que se halla
preso de orden superior abordo del buque de mi mando, está observando una
conducta indigna de su clase, y con ella desmoralizando no solo a los guardias
marinas sino a los individuos de tripulación y guarnición, y como a este
individuo no se le puede corregir con los diferentes castigos que se le ha dado,
espero que US. tomando en consideración lo perjudicial que es al servicio un
individuo de esta clase lo separe del buque que comando, porque de lo contrario
la moral y disciplina militar estarán constantemente en desorden". (94)

Tal parece que la solicitud del Comandante de la goleta de guerra "Salado",


de separar a dicho aspirante no fue aceptada por la Superioridad Naval,
dándosele otra oportunidad, ya que continuó abordo con la misma graduación.

Pero el 9 de diciembre el mismo Matos detalla desde Manta la reincidencia


68 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

de mal comportamiento de dicho joven, en los siguientes términos:

"Sensible me es anunciar a US. que el individuo Joaquín Barrera a los dos


días de nuestra salida se volvió loco de una manera tan furiosa que a cada
paso cometía desórdenes aún con las señoras de pasaje, por cuyo motivo me
vi obligado a mantenerle en la barra, y hoy antes de nuestra llegada doblando
el Cabo de San Lorenzo atropelló al centinela que lo custodiaba y se botó al
agua, que fue necesario arriar un bote para tomarlo con mucha resistencia.
Esto mismo sucedió en meses pasados según avisé a US. por una nota oficial,
y creo impropio la permanencia de éste individuo a bordo". (95)

Para terminar aquel episodio la Mayoría dispuso la baja de dicho aspirante,


en aras al ejemplo y la disciplina propios de la Marina de Guerra.

El 4 de junio de 1862 dice el Ministro de Guerra y Marina que S.E. el


General en Jefe, General Juan José Flores, ha llamado al servicio activo y
destinado a la goleta "Salado" al Guardia Marina Pablo Merino, por hallarse
comprendido en el convenio celebrado el 25 de septiembre de 1860, pero que
S.E. el encargado del Poder Ejecutivo le ha ordenado decir al General
Comandante General del Distrito de Guayaquil, que el expresado Guardia
Marina no consta en la relación de los capitulados que existen en ese
Ministerio, y que espera una aclaración para resolver dicho asunto. (96)

Es de recordar que el convenio del 25 de septiembre de 1860 se celebró


después del triunfo Garciano, acordándose reconocer a los militares
adversarios que capitularon, y así lo desearen, en sus grados y sueldos, para
que sigan sirviendo en el Ejército y Marina, pues había dicho el propio García
Moreno, que conseguida la victoria ya no hay motivos para la división entre
los hijos de una misma patria y todos deben servir en el nuevo orden (97).

El 17 de junio insiste el Ministro Daniel Salvador que en la relación que


existe en ese Ministerio, de los comprendidos en el tratado del 25 de septiembre
de 1860, no sólo constan los jefes y oficiales del Ejército, sino también los
individuos de Marina, no encontrándose en ella el Guardia Marina Pablo
Merino, y que no estima como prueba suficiente el que él halla pasado revista
en la goleta "Cuatro de Abril". (98)

Sobre la aplicación de este tratado recordemos que el 29 de enero de 1861,


el individuo Diego España, lo. guardián que fue de la goleta de guerra "Cuatro
de Abril" y que fue enganchado para el servicio de la Marina, reclamó a la
Mayoría de Marina los sueldos que se le adeudaban por los meses de julio,
agosto y septiembre de 1860, alegando ser uno de los capitulados.
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 69

Es de considerar entre los guardias marinas embarcados en la goleta


"Salado" en 1862 al joven Francisco de la Cruz Fernández Madrid y Bello
pues en un oficio enviado por aquél, con motivo de un conflicto con el
Intendente de Policía, décadas después, menciona que su ingreso se produjo
el año de 1862. Es más, don Severo Gómez Jurado en su tomo XIII de la
Biografía de García Moreno, página 270, relata que siendo dicho Presidente
amigo de la familia Fernández Madrid, le consiguió una beca para su ingreso
en 1862 a la Marina. (99) Indicaremos de una vez que al siguiente año, 1863,
consta como Alférez de Fragata abordo de la goleta de guerra "Salado", cuando
contaba 17 años de edad.

Capitán de Navío Francisco Fernández Madrid y Bello, quien se había


iniciado en la Marina de Guerra, a bordo de la goleta "Salado" como
Guardia Marina, en el año 1862.
70 HISTORIA MARTTIMA DEL ECUADOR

A inicios de 1863 el Capitán de Navío Agustín Oramas dispone que los


guardias marinas de dicho buque sean examinados, por lo que el 24 de enero
el Comandante Diego Matos le contestó lo siguiente: "En cuanto a los guardias
marinas pasarán a esa mayoría a ser examinados el día que US. indica, solo
sintiendo la falta de aprovechamiento de algunos de ellos, que no han podido
contraerse asiduamente al estudio a causa de las fatigas del servicio y de
otros deberes de mayor necesidad; así mismo me es doloroso no poder asistir
a dicho examen por la debilidad en que me han dejado pasadas enfermedades".
(100)

Por lo indicado, el 26 de enero a las 11 a.m. se procede al examen de


matemáticas de dos guardias marinas de la goleta "Salado" en la Mayoría de
Marina. Los examinadores fueron el Capitán de Fragata Lucas Rojas, el
Capitán de Corbeta José Izquierdo y el Teniente de Fragata Aurelio Bailén.
Debían concurrir al acto los jefes del expresado buque. (101)

El 6 de febrero de 1863 el Comandante de la goleta de guerra "Salado"


anuncia desde Manta que al Guardia Marina Eduardo Arrieta, se le daba de
baja del buque y ante el requerimiento de una explicación de parte del Mayor
General de Marina, por haber este joven pasado revista en el mes de febrero
habiéndosele dado de baja, el 17 de marzo informa el Jefe del bajel lo siguiente:
"En contestación diré a US. que desde Punta Arena y con fecha 2 de febrero
oficie a US., y entre otras cosas le decía que el Guardia Marina Eduardo
Arrieta que salió a tierra con permiso del Segundo ocho horas antes de nuestra
salida, con el pretexto de traer su ropa, no ha vuelto y como después hubiese
sido informado yo de que con anticipación había saltado todo lo que era de él,
lo he dado de baja, como US. verá por los documentos adjuntos.

"Por la comunicación que dirigí a US. desde Manta y con fecha 6 del mismo
mes le repito a US. que quedaba de baja en el consumo de raciones, pero no
en la revista porque no eran atribuciones mías y no podía hacerlo sin el pleno
consentimiento de la Mayoría General o Comandancia General, y que por
esta causa había convenido en que pasase la revista, para que en caso de que
fuera reconocida la deserción por la superioridad se pudiese devolver el
importe de sus sueldo a la tesorería" (102)

Mas sucede que dicho joven, Eduardo Arrieta, se presentó abordo el día 7
de marzo, con el fin de continuar como guardia marina del buque, y fue recibido
por orden verbal del Comandante General, con la consigna de que lo
mantuvieran arrestado hasta que pudiera presentarse a examen. (103)

El 16 de marzo de 1863 el Mayor General de Marina se dirige al


Comandante General de Marina en los siguientes términos: "He tenido el
honor de recibir la respetable comunicación de US., 13 del presente, en la
que se sirve transcribirme la que en 7 del mes pasado le ha dirigido el H.
Señor Ministro Secretario de Estado en el despacho de Guerra y Marina,
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 71

relativa al examen exhibido por los guardias marinas de la goleta de guerra


"Salado", cuya comunicación he transmitido al señor Comandante del
mencionado bajel, para su inteligencia y debido cumplimiento: Ordenándole
además que al Guardia Marina Arrieta lo mantenga en arresto abordo hasta
segunda orden, mientras US. disponga lo que estime conveniente".

INTENTOS DE ENROLAR AL JOVEN MADRID EN LA ESCUADRA


ESPAÑOLA O FRANCESA

La madre del Alférez de Fragata Francisco Fernández Madrid y Bello,


doña María Mercedes Hernández Bello y Puigvert, era muy amiga de los
Ascásubi, familia política del Presidente García Moreno, por lo que éste trató
de conseguir su embarque en una escuadra extranjera para que se perfeccione
como oficial de Marina. Es más, él había influido para su ingreso a la Marina,
un año antes.

Tal es así que el 29 de julio de 1863, aprovechando la presencia de la


Escuadra española, le dice al General Juan José Flores: "Le ruego que consiga
del General Pinzón (Escuadra española) que sea admitido en su Escuadra
nuestro primer marino, Madrid, para que se perfeccione en su profesión; y si
lo obtiene, sírvase arreglar con Pedro Pablo (García Moreno) el modo de que
los sueldos de Madrid sean remitidos a Europa o donde se halle, recibiendo
Pedro Pablo como su apoderado los sueldos de ese joven".

El mismo día el antiguo General Antonio Martínez Pallares le envía al


General Flores la siguiente comunicación:

"Quito, Julio 29 de 1863.- Mi querido Juan José:

"Las señoritas Ascásubi y Mercedita Bello se han insinuado conmigo para


que te escriba con objeto de que emplees tu influjo con el Jefe de la Escuadra
española, y admita a bordo de un buque al joven Alférez de Fragata Francisco
Madrid, a fin de que adelante sus conocimientos y se perfeccione en el arte de
navegar.

"Como conozco el fondo de tu corazón, tan dispuesto siempre a hacer el


bien a tus semejantes, no he tenido inconveniente alguno en prestarme a
escribirte, cumpliendo así con los deberes de amistad que profeso a esa
señorita. Supongo que el Presidente te escribirá sobre el mismo asunto, cuya
recomendación la desempeñará con más eficacia agregada a la mía, y como
este Sr. también te escribirá con extensión acerca de la política, omito yo
hablarte de ella, asegurándote que no hay qué comunicarte de interés.- Mis
cordiales saludos, tuyo de corazón.- Antonio Martínez Pallares".
72 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

El 12 de agosto, el Presidente García Moreno desde Quito insiste a Flores


cuando le dice: "Me alegro de que halla recibido usted la visita del General
Pinzón. Ojalá Madrid sea admitido abordo de los buques españoles para
perfeccionarse en su profesión".

Pero parece que aquellas gestiones no dieron resultados positivos, pues


tres días después el Presidente comunica haber solicitado por medio del Sr,
Fabre (Encargado de Negocios Francés) que el joven Madrid fuera recibido
en uno de los buques franceses, y aunque aquél se dirigió al contralmirante
que manda la Estación Naval del Pacífico, no obtuvo respuesta favorable.

Ante aquel resultado, García Moreno expresa que solo queda esperar otra
oportunidad para que dicho Alférez de Fragata de la goleta " Salado", pueda
incrementar su instrucción en una Marina extranjera.

Es importante recalcar que la Mayoría General de Marina mantuvo en el


único buque en servicio a un pequeño grupo de guardias marinas, que
permitan en el futuro contar con oficiales jóvenes lo suficientemente
preparados para su desempeño en los buques de guerra. Mas el 20 de enero
de 1864 el Presidente de la República ordenó una reducción de la dotación de
la goleta "Salado", disponiendo se mantengan en él "a dos guardias marinas
a juicio del Comandante". (104) El 12 de marzo se modifica la orden en el
sentido de que permanezca embarcado sólo un guardia marina, quien tendrá
una asignación de 23 pesos 1 real. (105)

En ese mismo año se produjo el desarme de la goleta de guerra "Salado"


para que sea vendida. Su dotación pasó al vapor de guerra "Guayas" que
había sido adquirido por el gobierno. En dicho buque constaban en la relación
nominal de septiembre de 1864 los Guardias Marinas Tomás Matos, Domingo
Ordeñana y Diego Matos. (106)

Es de mencionar que en aquel año entre los oficiales de abordo consta el


Alférez de Fragata Daniel Cruz, quien formó parte del primer grupo de
guardias marinas de la goleta "Salado", y había rendido con éxito sus
exámenes. Así también pertenecen a ese vapor de guerra los jóvenes alféreces
de fragata Manuel Silva y Ricardo Darquea, que posiblemente recibieron su
instrucción a bordo como guardias marinas y rindieron sus respectivos
exámenes.

En lo que se refiere al Aspirante Enrique Larroque, perteneciente al primer


grupo de la goleta de guerra "Salado", con fecha 14 de septiembre de 1864
S.E. el General en Jefe del Ejército tuvo a bien nombrarlo para Alférez de
Fragata habilitado, habiéndolo llamado al servicio activo y mandado se ponga
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 73

a disposición de la Comandancia General del Distrito de Guayaquil, por


razones de la invasión urbinista de aquel año. (107)

Hasta aquí lo que corresponde a la formación de los guardias marinas en


la goleta "Salado". Haremos una pausa para retomar el tema en la época que
nos hallábamos empeñados, no sin antes referirnos a que habiendo quedado
la goleta de guerra "Salado" como único buque en 1861 desaparecía la
escuadrilla como organización naval, y por tanto el Capitán de Navío Juan
Manuel Uraga había perdido su condición de comandante de la misma.

GUAYAQUIL VISTA POR UN EXTRANJERO EN 1861

Guayaquil es nuestro más importante puerto y el que durante toda la


historia de la nación ha sido el principal centro de congregación de veleros,
vapores y marinos, que le dan una característica especial y adicional a la que
brindan el río y la brisa sobre el malecón. Sus calles recorridas por gentes de
mar de distintas latitudes, han permitido siempre identificarla con el comercio
y la pujanza de los hombres de ribera.

Refiriéndonos al año de 1861, Guayaquil contaba con 15.367 habitantes, y


a ella arribó en junio de aquel año el norteamericano Friedrich Hasaurek,
quien dejó plasmado con su pluma las impresiones de su estadía en la ciudad,
lo que hoy nos permite darle el marco a nuestro relato histórico, pues ayuda
a la imaginación a trasladarse al sitio mismo de los sucesos en la época a que
nos estamos refiriendopEs así que el Sr. Julio Estrada Ycaza, distinguidísimo
historiador guayaquileño, transcribe en su libro "Guía Histórica de Guayaquil"
el relato indicado, que lo acompaña con comentarios y complementos para
mejor compresión del lector actual, del cual nos hacemos eco a continuación:

"La ciudad, vista desde el río, se presenta activa y comercial, especialmente


de noche, cuando las hileras de faroles de gas se reflejan sobre el agua. Poco
hay, de primera instancia, para advertirle al viajero que es una ciudad del
presente, por la cual debe pasar para adentrarse a regiones que todavía
pertenecen al pasado. La calle principal, llamada Malecón, se extiende como
milla y media a lo largo del río; sus grandes casas de madera con sus galerías
cubiertas de cortinas, algunas extrañamente desvencijadas por los terremotos,
como si estuviesen prontas a derrumbarse, sin advertencia previa, ofrecen
una apariencia de lo más original y grotesca. Los almacenes son tan elegantes
y de buen gusto como cualquiera de los que hay en nuestras ciudades de
segunda y tercera categoría; la luz del gas nos saluda en la noche, y un gentío
se mueve apresuradamente en el día; centenares de canoas, botes, balsas
grandes y pequeñas, y unos pequeños barcos a vela llamados chatas, van y
vienen con las mareas, trayendo al puerto la gran variedad de plantas y
74 HISTORIA MAIZITIMA DEI . ECUADOR

frutas tropicales que abundan en las riberas del Guayas y sus afluentes.
Aguadores montados en burros, con dos barriles colocados sobre una montura
de carga delante de ellos, recorren apresuradamente las calles. De noche
rompen el aire las exclamaciones llenas de vida y a veces de humor de
muchachos que ofrecen caramelos, velas de sebo, tamales (platos típicos del
país), helados, si es que hay hielo en la ciudad (se traía "nieve" de la sierra
por lo menos desde 1776; en 1861 ya existían varias fábricas de hielo) etc.
Coches y carruajes, es verdad, no se ven por ningún lugar (sólo hay dos coches
privados en la ciudad, y éstos están confinados al malecón y unas pocas calles
que lo intersectan, porque la pavimentación de las demás las vuelven
inaccesibles a los vehículos), pero las carretas de mulas traquetean de un
extremo al otro del desembarcadero. Los rieles de un ferrocarril conducen
del muelle a la aduana- lo que ciertamente no sugiere que estamos sino a
una jornada de camino de regiones que jamás han visto un vagón. Vapores
como los nuestros (su maquinaria habiendo sido fabricada en Estados Unidos)
navegan río arriba y río abajo, recordándome los de nuestra tierra; y hasta
una bomba a vapor de Baltimore resopla y ronca por las calles de la ciudad
en casos de incendio, llenando el ambiente de ruidos familiares al oído de un
norteamericano.

Vista del Malecón de Guayaquil, de acuerdo a la ilustración de un billete del Banco Internacional. La gráfica corresponde
aproximadamente al año 1860. (Julio Estrada Ycaza "Guía Histórica de Guayaquir').
DECADENCIA DE LA MARINA DE GUERRA 75

"De hecho, casi todos los adelantos modernos de Guayaquil fueron


introducidos por norteamericanos. Una compañía norteamericana ha
presentado el gas a una ciudad que necesitaba traer el carbón del exterior.
Una compañía norteamericana ha construido los familiares vapores que ahora
navegan regularmente río arriba y abajo, por el Guayas y sus tributarios. En
verdad sólo la maquinaria, como ya lo dije antes, y el casco fueron
norteamericanos; la superestructura se construía aquí; una fundición de hierro
(de L.P. Kuhn) y taller mecánico se han establecido por norteamericanos
"Las Máquinas y Fundición de Fierro" estaban ubicadas al sur de la avenida
Olmedo y al oeste de Eloy Alfaro, y hasta las dos pequeñas y bonitas casas,
que están ocupadas por las autoridades del puerto, fueron traídas de los
Estados Unidos.

Guayaquil, avenida 9 de Octubre, por 1860. Obsérvese la iglesia de San Francisco. (Julio Estrada Ycaza - "Guía Histórica de
Guayaquil").

"La parte norte de Guayaquil es llamada Ciudad Vieja y se apiña alrededor


de las faldas de un cerro en que se encuentra el hospital militar, y cuyo verdor,
especialmente en la temporada de lluvias, es agradable a la vista. La Ciudad
Nueva, que contiene todo lo que es comercio o de moda, ocupa parte de la
llanura o sabana entre el río y el estuario llamado estero Salado. Está separada
de la Ciudad Vieja por varios pequeños esteros permitiendo la comunicación
76 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

algunos puentes de madera, siempre necesitados de reparación. La total


ausencia de edificios de ladrillos o piedras es impresionante. Las casas son
de dos o tres pisos, y construidos al estilo del sur de Estados Unidos, con
balcones o galerías que se prolongan sobre las veredas y descansan sobre
pilares, para formar portales, que brindan protección contra el sol y la lluvia,
pero pocas calles están adecuadamente pavimentadas. Algunas de ellas
apenas si tienen un pasadizo de piedras para cruzar la calle en las
intersecciones, en la estación lluviosa. El Malecón y unas pocas otras calles
principales se mantienen tolerablemente limpias, pero las calles secundarias
y la parte interior de la ciudad es impactantemente sucia, y está desfigurada
por casuchas dilapidadas, sórdidas y miserables. Burros sueltos y manadas
de chivos deambulan por las calles, alimentándose de la hierba que, en la
época de lluvias, cubre las mas frecuentadas avenidas, dándole al lugar un
aspecto melancólico. La palma, la reina de la vegetación tropical, se alza
majestuosamente sobre techos y cercas de jardines sobre los cuales se
encarama el gallinazo - el silencioso y hambriento compañero de la muerte y
la putrefacción.

"En las afueras de la ciudad, las casas de los pobres son casi tan humildes
como las habitaciones primitivas que encontraremos en la selva tropical,
camino al interior del país. Sólo tienen un piso alto que descansa sobre
estantes, la planta baja es usada como cocina, u ocupada por animales
domésticos. Pisos y paredes se hacen de caña picada y el techo de bijao o de
otras hojas. La hamaca constituye el principal mobiliario; así a pocas
manzanas de las espléndidas residencias de la rica aristocracia, amuebladas
con lujo parisiense, encontramos la humilde cabaña del pobre mestizo, el
indolente habitante de la floresta tropical". (108)
CAPITULO III

El Presidente
y la Convención
Nacional de 1861
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 79

EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION
NACIONAL DE 1861

arcía Moreno cree que es indispensable que la Convención diga algo


contra el famoso tratado de Mapasingue, y dice que así la Convención
se asociará a las protestas de todo el país, y cerrará la puerta a la
probable exigencia de Castilla de que ese tratado sea sometido a la aprobación
del Cuerpo Legislativo. (109) El General Juan José Flores, Presidente de la
Convención, recibió en sentido favorable la Carta del 9 de marzo enviada por
dicho mandatario en ese sentido, y ya el 8 de abril de 1861 aquella Convención
dictó el decreto ley en que declaraba nulo y sin ningún valor al malhadado
tratado de Mapasingue, suscrito por el gobierno regional establecido en
Guayaquil y presidido por el General Franco y los plenipotenciarios peruanos.

Con dicho decreto la Convención interpretaba fielmente el sentimiento


unánime del pueblo ecuatoriano, que era de repudio para semejante
documento, firmado bajo la presión militar de las fuerzas invasoras y la
complicidad de un gobierno local que no contaba con el respaldo del resto de
la República, ni había sido elegido de acuerdo con las normas constitucionales.
Consideró de su deber, como primer paso en sus labores que iniciaba,
denunciar dicho tratado como írrito, condenando al mismo tiempo a sus
autores a la deshonra nacional. (110)

A continuación me permito transcribir los acontecimientos que siguieron


al decreto dictado por la Convención, del estudio detallado del Dr. Jorge
Villacrés Moscoso, al respecto del Tratado de Mapasingue, en su obra "Historia
Diplomática de la República del Ecuador":

"Posteriormente, la misma Convención dictó el 6 de junio de 1861, un


decreto interpretativo respecto al anterior, dando en esta ocasión, especial
énfasis al hecho en que dicho documento hubiese sido canjeado, sin la
aprobación que en este caso era de rigor, debía prestarle de acuerdo con la
Constitución, el Poder Legislativo, pues, de conformidad al artículo XXII, del
80 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Tratado de Mapasingue, las ratificaciones debían ser canjeadas en Guayaquil,


dentro de los tres días contados desde la fecha de la firma, es decir, a partir
del 25 de enero de 1860, sin perjuicio de solicitarse, opcional en su oportunidad
por los respectivos Gobiernos de las dos Repúblicas, la sanción legislativa.

"Así pues, tomando en cuenta el texto del Art. XXII, el Tratado de


Mapasingue quedaba perfeccionado por el canje de los respectivos documentos,
efectuado en el lapso de tres días, a partir del 25 de enero, quedando para
después, pero no como condición necesaria e imprescindible la aprobación de
los congresos de los dos países. Por eso el decreto interpretativo de la Asamblea
de 8 de abril, consideraba que si hubiese sido canjeado simplemente, dicho
tratado, sin la aprobación legislativa por parte del Ecuador, se hacía extensiva
una vez más su nulidad a este anormal procedimiento, con lo cual se recababa
por segunda vez en la nulidad del documento y del procedimiento de canje, si
éste se hubiese realizado.

"El decreto interpretativo dictado por la Convención Nacional el 6 de junio


de 1861, por otra parte expresaba que la resolución adoptada respecto a la
estipulación consignada en el artículo XXIII "no alteraba ni debilitaba las
relaciones de amistad que han existido, y deben existir, entre el Ecuador y el
Perú, llamados por la naturaleza y la política a celebrar tratados con el
Gobierno del Perú, en los cuales se afiancen y consoliden la íntimas relaciones
de las dos Repúblicas".

"Cuando se consideraba que había llegado el momento para iniciar


relaciones pacíficas y fraternales entre los dos pueblos, por este significativo
gesto que había hecho ostensible la Convención ecuatoriana, nuevamente el
Perú, cuyo Gobierno presidido por Castilla no se resignaba aún a comprender
las poderosas y justificadas razones que había tenido el Ecuador para
denunciar el Tratado de Mapasingue y que antes por el contrario, exigía que
el Gobierno ecuatoriano diera pleno cumplimiento, protestó, en esta ocasión
aduciendo la promulgación que había hecho el Ecuador el 29 de mayo de
1861 de la nueva Ley de División Territorial, basada en la Ley colombiana de
1824, en la cual se involucraban territorios, que el Perú los consideraba bajo
su soberanía territorial.

"El Canciller peruano doctor José Fabio Melgar, en nota diplomática datada
en Lima, el 24 de agosto de 1861, y dirigida al Ministro de Relaciones del
Ecuador doctor Rafael Carvajal, dejó consignada su protesta y entre los más
significativos párrafos de la mencionada comunicación se pueden destacar
los siguientes:

"Definida en el tratado de 25 de enero de 1860 la cuestión de límites


promovida por el Ecuador, cuando en 1856 pretendió adjudicar a sus
acreedores británicos y de otras nacionalidades europeas los territorios de
Quijos y Canelos de la pertenencia del Perú, el Ecuador no ha debido, bajo
pretexto alguno, legislar sobre el territorio de ajena y reconocida jurisdicción,
mucho más cuando el Perú ha continuado con publicaciones oficiales, poniendo

Dr. Gabriel García Moreno, Presidente Constitucional de la República.


4
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 83

en evidencia los títulos irrecusables en que descansa la demarcación territorial


que ha servido de base a sus límites, según el principio admitido por el derecho
público americano, que adjudica a las Repúblicas de América la misma
extensión territorial que tenían en la época de su emancipación salvas las
modificaciones legítimas reconocidas en los momentos de consumarse ésta".
"El Ecuador, que en las negociaciones de Guayaquil no tuvo título alguno
para oponer en contra de los derechos que sostiene el Perú; que al contestar
la reclamación diplomática que, con fecha 10 de enero del presente año, hiciera
al Gobierno de Quito el Encargado de Negocios de la República, contra la
ejecución del convenio que el Ecuador celebró con sus acreedores, puesta en
vía por el Gobierno actual de ese país, se comprometió a no disponer nunca
de territorios ajenos y a esperar que se resolviese la cuestión de límites para
disponer de los propios, sujetándose en este procedimiento a la estipulación
5o. del tratado que invocó el Encargado de Negocios; que en la última
constitución promulgada el 10 de Marzo de 1861, consignó la cláusula de que
los límites de esa República se fijarán definitivamente por tratados que se
estipulasen con los Estados limítrofes; que no ha abierto nuevas negociaciones;
que no ha publicado títulos que contrasten con los que publicó el Perú; ni
refutado de manera alguna los documentos oficiales dados a la luz por éste y
de los cuales está notificado el actual Gobierno del Ecuador por la entrega
que de ejemplares de esa publicación le hiciera el Encargado de Negocios de
la República, se ha desatendido de las prescripciones del Derecho Público de
los tratados, de su propia Constitución y de los miramientos que se deben
unas Naciones a otras, adjudicándose territorios cuyos derechos no le ha
cedido, no le cederá, ni puede ceder su legítimo soberano".
"De la lectura del preinserto documento, se observa que nuevamente el
Perú saca a relucir la tan discutida Cédula del 15 de julio de 1802 y la presenta
como un título irrecusable, cuando ya sabemos no tenía ningún valor ni
carácter territorial como pretendía el Perú hacerlo aparecer y que
invariablemente siempre había sido rechazado por el Ecuador. Pero además
de esto, el Perú en la aludida nota que comentamos, sostenía la falsa
información que el Ecuador frente a este título peruano, en las negociaciones
del Tratado de Mapasingue, no ha podido presentar ningún documento
justificativo de su pretendido derecho, cuando en verdad, es muy conocido el
hecho que el gobierno seccional ecuatoriano, que negoció dicho Tratado, no
tenía a su alcance los documentos que en otras circunstancias hubiera podido
exhibir, en razón de que los archivos nacionales se encontraban en Quito, y
esta fue la razón, que incluso los mismos negociadores peruanos aceptaron
que se consignara en el tratado, dando un plazo prudencial, incluso después
de suscrito dicho documento, para que el Ecuador si tuviera, exhiba los títulos
jurídicos justificativos de su derecho, como en otras ocasiones, particularmente
durante las conferencias previas al tratado de 1829, los representantes de la
Gran Colombia los presentaron al negociador peruano Don José de Larrea y
Loredo.
84 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Dr. Rafael Carvajal, Ministro de Relaciones Exteriores del Ecuador en


1861. Posteriormente sería nombrado Vicepresidente de la República.

"Frente a las antojadizas y audaces apreciaciones peruanas y lo que es


más, al lenguaje empleado por el Canciller peruano José Favio Melgar en su
nota que venimos de comentar, el Ministro de Relaciones Exteriores de nuestro
país doctor Rafael Carvajal, respondió mediante otra nota diplomática enviada
al dirigente de Torre Tagle, con fecha 5 de octubre de 1851, en la que vierte
entre otros conceptos muy significativos, los siguientes: "Treinta y siete años
ha que el Ecuador, desde que fue Departamento de Colombia, registra entre
sus leyes la que, demarcando sus territorios, que comprendió entre estos a
Quijos, Jaén de Bracamoros y Maynas, sin que Gobierno alguno del Perú
haya protestado contra esta demarcación en tan dilatado tiempo; siendo
circunstancia muy notable la de no ser ésta la primera vez que el Excmo.
señor Presidente actual del Perú rige, como primer magistrado, los destinos
de esa República. Como comprobación de lo expuesto le basta al infrascrito
recurrir al testimonio de V.E., permitiéndose traer a consideración los artículos
11 y 12 de la ley colombiana de 1824".
"Pero aún suponiendo que fuese de sanción reciente en el Ecuador esta
demarcación territorial, y que por equivocación y otro motivo cualquiera se
hubiese fijado los límites de esta República en territorio peruano de no
disputada propiedad, semejante ley en nada perjudicará a los derechos del
Perú, porque no prejuzgaría, ni decidiría las cuestiones territoriales entre
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 85

las dos repúblicas; puesto en una ley no es obligatoria sino para el país en
que se da, como V.E. mismo lo asevera muy acertadamente; y puesto que
existe otra ley superior, igualmente obligatoria para los dos países, con el
tratado de 22 de septiembre de 1829; tratado que dejó decididas esas
cuestiones al establecer el modo y forma con que debe deslindarse las fronteras
de las dos Repúblicas".

"Con arreglo, pues a este tratado no vacila el infrascrito en repetir las


declaraciones que deja hechas en otra de las contestaciones que van adjuntas
a ésta; a saber, que su gobierno está pronto a nombrar la comisión que en
asocio de la que nombre el de V.E. haya de hacer la demarcación de límites,
dejando al arbitraje de Chile la decisión de lo que las comisiones no puedan
determinar de común acuerdo: que el Ecuador: posee lo que antes poseía
únicamente; y que no tomará sino lo que las comisiones o el árbitro le señalen
como suyo, así como entregará lo que posee, si las comisiones o el árbitro así
lo resolvieren".

"Hallándose vigente el anunciado tratado de 1829, sin que se haya


practicado todavía la demarcación en él prescrita, el que abajo suscribe no
encuentra la razón porqué haya llamado V.E. en su protesta, territorios del
Perú los de Jaén, Napo, Canelos y Quijos, que ha poseído siempre y que
posee actualmente el Ecuador".

"Termina el doctor Carvajal su nota dirigida al Canciller Melgar,


recriminándole por la actitud de su Gobierno de negarse a reconocer al
Encargado de Negocios del Ecuador, acreditado en Lima y lo que es más aún
a contestar la carta autógrafa que el Presidente García Moreno dirigió al
Presidente del Perú con fecha 4 de abril de 1861, política que contrastaba con
la seguida por el Ecuador hacia el Perú, habiendo sido reconocido el Encargado
de Negocios peruano después que éste no ha dejado de residir en Quito, sino
por licencia temporal, y después que el Ecuador, por su conducta pacífica
unida a estos antecedentes, ha tenido fuertes motivos para considerar
restablecidas las buenas relaciones que deben existir entre los dos países.

"Frente a la altiva como categórica repuesta del Canciller ecuatoriano,


mediante la cual este funcionario destruía desde sus bases las
argumentaciones peruanas, este último país no prosiguió en su necia actitud
de protestas creando a cada paso incidentes contra el Ecuador, pero con todo
es de advertir, que el Gobierno peruano mantuvo por algún tiempo una actitud
estacionaria de reserva y mutismo frente al Ecuador, que podía en cualquier
momento agravarse y hasta degenerar en guerra entre los países, muy
especialmente por la presencia en el Gobierno del General Castilla, que,
además de profesar un odio acervo contra García Moreno, se encontraba
hasta cierto punto influenciado por los enemigos del magistrado ecuatoriano,
exiliados en el Perú, particularmente por los Generales Urbina y Franco.

"Felizmente, como consecuencia de la elección del sucesor del Mariscal


86 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Castilla, en 1863, se instalaba, en este momento, una nueva administración


en el Perú, con tendencias más pacíficas. García Moreno se aprovechó
hábilmente de la ocasión para reanudar las relaciones y ofrecer al
recientemente elegido presidente que se mostraba conciliador, explicaciones
que él había negado al gobierno del Mariscal Castilla.

"Envió un representante diplomático a Lima; y como no le costaba mucho


trabajo el repudiar un proyecto que no había tenido continuación, encargó a
este agente el tranquilizar completamente al Perú. En términos más explicitos,
que moralmente verdaderos, él decía: "El Gobierno de Ecuador no titubea en
dar al Gobierno del Perú una prueba de deferencia, y de sus prácticos puntos
de vista, autorizándonos, en decreto fuere reconocido con vuestro carácter
oficial, a declarar al Ministro de Negocios Extranjeros, y, por su órgano al
Presidente de la República peruana, que no existe, ni jamás existió, pacto
alguno para la incorporación de esta República a cualquier otra potencia;
que ella conserva intacta su autonomía, y que los esfuerzos de su Gobierno
tienen por objetivo exclusivo el mantener sus instituciones, su libertad y su
soberanía, dirigiéndola por la vía del progreso, mediante una política justa,
amigable, franca y leal, para con todas las secciones del continente americano".

"De estas explicaciones se aceptó la que convenía aceptar. Ellas no eran


verdaderas sino en el sentido de que, en efecto, no había ningún pacto. La

Plaza y fuente cerca de la Catedral de Quito (Plaza de San Francisco). Dibujo de


E. Therond según relato de Ernest Charton, 1867.
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 87

opinión pública no se dejaba engañar con eso. En cuanto al gobierno peruano,


él no deseaba más que desembarazarse de una querella, y dispuesto a vivir
en paz con sus vecinos, no titubeó en sacrificar el Tratado ajustado entre
Castilla y Franco.

"Castilla si bien es cierto, en un primer momento brindó apoyo a Urbina,


como después lo haría Mosquera, luego en forma por demás despreciable lo
abandonó.

"Habiendo dejado el mando Castilla, el nuevo Gobierno peruano se mostró


más dispuesto a llevar una política de concordia con García Moreno, cuyas
muestras elocuentes fueron sin duda el envío de una misión diplomática para
solemnizar la paz con Pinsaquí y la invitación que le hizo ostensible
igualmente el Gobierno peruano al ecuatoriano, para que acreditara una
delegación al Congreso americano, en 1864, hechos todos que disgustaron
terriblemente a Urbina, que no cesaba un instante en buscar cualquier apoyo
para terminar con García Moreno y Flores.

"Así, al tener noticias de la invitación cursada por el Perú al Ecuador para


este último certamen, Urbina decía: "Yo no lo creo - lo dudo al menos; porque
de ser cierto, pensarse que hubiesen sido invitadas también la Regencia de
México y la Capitanía General de Santo Domingo. Mas sea de esto lo que
fuere, lo que es indudable, es, que el Ecuador no podría ser, leal y legalmente
representado en esta augusta asamblea, subsistiendo el poder de Flores -
García Moreno; y es igualmente indudable que la presencia de un Ministro
representante de este Poder en dicha Asamblea sería un verdadero sarcasmo
y el mayor ridículo para la América, una prueba palpitante de que todo es
farsa en la política de nuestros días, y un estímulo más a las traiciones - un
galardón a las traiciones - un galardón a los traidores".

"Por último, el nuevo Gobierno peruano presidido por el General San


Román, con el cual el Presidente García Moreno trataba de iniciar relaciones
cordiales, para lo cual había enviado como agente oficioso al señor José
Celedonio Urrea; destacó algunos contingentes armados a la frontera con el
Ecuador, a fin de prevenir en primer término, la remota posibilidad que la
guerra iniciada entre el Ecuador y Nueva Granda pudiera extenderse hasta
sus fronteras, y en segundo lugar, evitar en lo posible que los exiliados
ecuatorianos residentes en el Perú, enemigos de García Moreno, pudieran
aprovechar esta oportunidad para atacar al territorio ecuatoriano, desde el
Perú, según se concluye del texto de la carta que dirigiera el agente Urrea
desde Lima, el 13 de abril de 1863 al General Flores, en la que se lee lo
siguiente: "El Gobierno del Perú ha estacionado en los pueblos fronterizos
con el Ecuador, tres batallones y dos regimientos, con el nombre de Ejército
de Observación. Los sucesos con Mosquera han servido de pretexto para
desprender aquellas tropas de la influencia de Castilla. A propósito de éste,
se encuentra actualmente enfermo y de alguna gravedad. Los emigrados
ecuatorianos están bien vigilados; y a mayor abundamiento de acuerdo"...
88 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Todos estos gestos del Gobierno peruano disgustaron en sobremanera a


Urbina, quien consideraba y con razón que ellos tendían a robustecer y
conservar por más tiempo el régimen garciano, que lo integraba también el
General Flores y que constituía un peligro para los intereses de América.
"Conseguido en parte el ambiente de armonía en las relaciones entre ambos
países, deseo ferviente que había sido desde el primer instante formulado
por el Gobierno ecuatoriano y convenciéndose el nuevo Gobierno que asumía
los destinos en el Perú, en la imposibilidad de continuar sosteniendo en el
futuro una tesis que había sido refutada por el Ecuador a la luz de los principios
consagrados por el Derecho Internacional, el Congreso peruano encomendó
a la Comisión diplomática de la misma que emitiera un informe acerca del
posible valor jurídico que podría tener el malhadado Tratado de Mapasingue,
impuesto por las armas peruanas, a un gobierno que no mantenía jurisdicción
sino apenas sobre una región, como era de Guayaquil, y esta Comisión después
de un concienzudo estudio del mismo, sostuvo el siguiente criterio:
"Cuando las armas peruanas llegaron a la costas del Ecuador encontraron
aquel Estado completamente anarquizado, sin gobierno legítimo ni siquiera
único, y dividido su territorio en varias fracciones, gobernadas por caudillos
que luchaban entre sí. Para terminar por medio de un arreglo las diferencias
que habían obligado al Perú a tomar las armas,era absolutamente necesario
que, previamente se constituyese en el Ecuador un gobierno general, si no
legal, que pudiese tratar en nombre de esa nación o que, a lo menos,
debidamente acreditados de los gobiernos que imperaban en las distintas
fracciones del territorio ecuatoriano; único modo posible de suplir la falta de
un gobierno legal o central siquiera y de que, el pacto que se celebrase, tuviese
un carácter verdaderamente nacional".
"Tomando en debida cuenta el importante informe de la antes referida
Comisión destacada de su propio seno y considerándolo como muy justificado
el Congreso y luego el Gobierno peruano, declararon el 28 de enero de 1863,
así como lo había hecho la Convención del Ecuador, nulo y sin ningún valor
jurídico el Tratado de Mapasingue, habiendo dictado al efecto el siguiente
Decreto-Ley, cuyo texto es el siguiente:
"El Congreso de la República Peruana en ejercicio de las atribuciones 15 y
16 del artículo 59, Título X de la Constitución.
Resuelve:
Art. lo.- Se desaprueba el tratado de paz, amistad y alianza celebrado en
nombre del Gobierno del Perú y el Departamento del Guayas; en la ciudad de
Guayaquil en 25 de enero de 1860.
Art. 2o.- El Poder Ejecutivo, en ejercicio de la atribución 11, artículo XI,
de la Constitución, tomará las disposiciones necesarias para restablecer las
nuevas relaciones entre el Perú y el Ecuador, sobre bases justas, equitativas
y honrosas para ambos países.
71■1-, -•-•••,T1114,

EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 89

"Comuníquese al Poder Ejecutivo, para que disponga lo necesario a su


cumplimiento. Dado en Lima, a veintisiete de enero de mil ochocientos sesenta
y tres.- José Silva Santisteban, vicepresidente del Senado; José María Pérez,
Presidente de la Cámara de Diputados; Francisco Chávez, Senador Secretario:
Epifanio Serpa, Diputado Secretario.

"Al Presidente de la República.

"Por tanto, mando se imprima, publique y se le dé el debido cumplimiento.


Dado en la casa de Gobierno en Lima, a 28 de enero de 1863.

Miguel San Román

José H. Paz Soldán".

"Como se habrá podido apreciar en los hechos relatados, existía al iniciarse


la primera presidencia constitucional de García Moreno, como de parte del
General Miguel San Román, la mejor buena voluntad de iniciar una nueva
etapa de amistad entre los dos países, olvidando viejas querellas". (111)

Al respecto, por el lado peruano, nos dice don Jorge Basadre lo siguiente:
"El Congreso del Perú tomó la decisión acerca de este mismo tratado con
fecha 27 de enero de 1863, es decir durante la administración de San Román
(Ley promulgada el 28 de enero). Fue la de rechazarla. La comisión diplomática
invocó para fundamentar su actitud el hecho de haberse celebrado el tratado
con un gobierno erigido en un sector del Ecuador por lo cual era solamente
una "exposición ajustada por el jefe de un partido político"; que llegó a ser
desaprobado por la Convención reunida en Quito y por el Gobierno de ese
país y que contenía "estipulaciones contrarias al honor del Perú, perjudiciales
a sus derechos y otras que pudieran serle onerosas y de funestas consecuencias
en el futuro". Como el Tratado había sido desaprobado en el país vecino,
hubiera sido necesario imponerlo por la fuerza pero los sentimientos de
probidad y de justicia del pueblo peruano le vedan emplear la fuerza en el
sostenimiento de pactos que considera ilegales". Agregó que la cláusula
relativa a los límites era inconveniente al aceptar como sujeto a duda el título
del Perú sobre los territorios amazónicos. En realidad, el texto del tratado no
había dicho que el negociador peruano albergara esa vacilación : por el
contrario, la voluntaria aquiescencia para dar oportunidad a que el Ecuador
pudiese presentar documentos invalidando la cédula de 1802 revelaba
confianza plena en la autenticidad y en la vigencia de dicho documento y
abría el camino para que los dos países cotejasen, de una vez por todas, sus
respectivos títulos históricos a la región en debate. Otras críticas de la comisión
se referían a varios artículos del tratado carentes de relación con la cuestión
de límites. La alianza defensiva entre el Perú y el Ecuador era en él perpetua
y quedaba perfeccionada de hecho por el acto de peligro; según la comisión el
pacto para esta alianza debía ser celebrado, por el contrario, de una manera
explícita, especial, detallada y temporal. El convenio entre los gobiernos en
defensa del orden en ambos países agregado al de la alianza, tampoco lo
90 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

aceptaba. La extradición de reos con la condición de que no se aplicara sobre


ellos la pena de muerte suscitaba adicional crítica por considerarla extraña e
insólita, lo mismo que el estilo y el texto de todo el tratado.

"Después de desaprobar este pacto celebrado "con el Gobierno del


Departamento del Guayas" la ley de 28 de enero de 1863 decía que el Poder
Ejecutivo debía tomar las disposiciones necesarias "para restablecer las
nuevas relaciones entre el Perú y el Ecuador sobre bases justas, equitativas
y honrosas para ambos países". (112)

CONDECORACION AL "ARROJO ASOMBROSO"

En el cuadro al óleo del Dr. Gabriel García Moreno existente en el Museo


Municipal de Guayaquil, se divisa claramente, en su pecho, la Condecoración
al "Arrojo Asombroso" creada por la Convención de 1861 en favor de los que
atravesaron el Estero Salado en 1860. Así también en los retratos al óleo del
General Juan José Flores, se puede observar que entre las tantas
condecoraciones que luce en su uniforme destaca dicha insignia de distinción.
Es más, el archivo "J.J. Flores" de Quito conserva aquella entre muchas de
dicho general, que como sabemos actuó como General en Jefe del Ejército
Garciano, que logró la victoria de Guayaquil el 24 de septiembre de 1860
contra las fuerzas del General Guillermo Franco, y que a la postre permitiría
que García Moreno obtenga el poder de la nación.

Aquel triunfo exigió un tremendo sacrificio a los soldados del Ejército de


García Moreno, pues para llegar hasta las líneas enemigas en Guayaquil
tuvieron que atravesar terrenos pantanosos, manglares y esteros, que según
los protagonistas de la jornada eran casi insuperables. Pero para asombro
del enemigo pasaron el manglar y el Estero Salado, y aún mas, transportaron
los cañones, municiones y más armamento pesado entre la enmarañada selva,
el fango y el agua del estero, cosa menos que imposible y así extenuados
combatieron a un ejército que sólo se limitó a esperar.

Cuenta el Dr. Julio Castro, quiteño que participó como secretario del
Cuartel General del Ejército garciano, que fue testigo presencial cuando al
iniciar la travesía del estero, García Moreno besó la raíz del primer mangle,
luego dice: "El que nunca hubiese atravesado ese intrincado laberinto de raíces,
troncos, ramas y lodazales, que se llama un manglar (que en los terrenos
bajos ocupa con no rara frecuencia extensiones hasta de cien y más metros
en cada orilla), jamás podrá darse cuenta de las dificultades casi insuperables
que el ejército tuvo que vencer. Las raíces de los manglares se levantan sobre
el suelo y forman una enmarañada selva sobre el pantano, y los soldados
unas veces tienen que andar sobre el follaje y otras abajo sobre el fango; unas
veces pasando por debajo de la raíces y otras de rama en rama, cayendo y
levantandose a cada instante, en un clima ardiente como el de Guayaquil, y
sin agua para mitigar la sed que causa tanta fatiga, pues pronto se agotó el
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 91

precioso líquido que venía en las cantimploras..." (113)

Aquel avance a través del manglar, así como los'combates entre las fuerzas
de Franco y García Moreno, como el triunfo de este último en Guayaquil,
está relatado en el tomo VIII de esta obra. Hubo sacrificio de parte de los
hombres del ejército victorioso y en muchos casos sus actuaciones llegaron al
heroísmo. Esto fue considerado por la convención de 1861, y el 19 de marzo
expidió un decreto para honrar el valor y patriotismo del "Ejército Libertador",
el cual transcribimos:

LA CONVENCION NACIONAL DEL ECUADOR

Considerando:

lo. Que el Ejército Nacional ha salvado la Patria en las memorables


campañas de 1860; y

2o. Que el increíble paso del Salado es un hecho de armas notables en la


historia militar de las naciones.

Decreta:
o
Art. lo. El Ejército Nacional ha merecido bien de la Patria.

Art. 2o. Los que pasaron el estero Salado llevarán una cruz al pecho en el
lado izquierdo.

Art.3o. La cruz tendrá cuatro radios dobles, ligados entre sí por la bandera
nacional; y se leerá en la orla esta inscripción: "ARROJO ASOMBROSO", y
dentro de ella llevará un castillo esmaltado. Los coroneles y generales la
llevarán en forma de placa labrada en oro y plata , con esmaltes de los colores
del iris. Los demás jefes, oficiales y soldados la llevarán pendiente de una
cinta tricolor, y el diámetro no excederá de diez líneas. Las primeras serán
de oro con esmaltes tricolores y las últimas de plata sin esmaltes.

Art. 4o. La Municipalidad de Quito presentará al Jefe Supremo, al General


en Jefe, al encargado del Estado Mayor General y a los Comandantes
Generales de las divisiones las cruces que les corresponden. La Municipalidad
de Guayaquil distribuirá las de los demás jefes y oficiales; y las
Municipalidades de Cuenca y Loja las de la tropa.

Art. 5o. Tienen opción a la cruz la parte del ejército que atacó por la llanura
de Mapasingue, los que hicieron la campaña de Babahoyo y los ciudadanos
que acompañaron al ejército hasta Guayaquil.

Art 6o. El Poder Ejecutivo extenderá los diplomas correspondientes y


resolverá las dudas que ocurran acerca de los que sean acreedores al uso de
92 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

la cruz.

Art. 7o. El Poder Ejecutivo queda encargado de la ejecución del presente


decreto.
"Comuníquese al Poder Ejecutivo para su ejecución y cumplimiento.

"Dado en la sala de sesiones, en Quito a diez y nueve de marzo de mil


ochocientos sesenta y uno.- El Presidente de la Convención, JUAN JOSE
FLORES.- El Secretario, PABLO HERRERA.- El Secretario, Julio Castro.

"Palacio de Gobierno en Quito a 5 de abril de 1861.- Ejecútese.- GABRIEL


GARCIA MORENO.- El Ministro del Interior, encargado del Despacho de
Guerra y Marina, Rafael Carvajal". (114)

La Convención deseaba con esto premiar el valor humano, pues es el "Arrojo


Asombroso" de los soldados el que inspiró esa presea que también fue conocida
como "La Cruz del paso del Salado". Si bien es cierto que algunos de los
protagonistas agraciados con la condecoración también eran los que expedían
y daban el ejecútese de aquel decreto, como lo eran el General Juan José
Flores, Presidente de la Convención que actuó como General en Jefe durante
aquel conflicto y el Presidente Gabriel García Moreno como Jefe Supremo
del "Ejército Libertador", también es verdad que hubo mucho sacrificio y
merecimiento de acuerdo a las narraciones existentes, y que para ello tenían
que contar las tropas con una buena dirección de parte de los jefes y oficiales.

Aquella medalla fue mandada a hacer a Francia y era de bella confección


como dicta su decreto, pero es recién el año de 1864 en que el Poder Ejecutivo
comienza a conferir los respectivos diplomas con dicha condecoración a los
que se hicieron merecedores, como lo demuestra los documentos que
transcribimos a continuación:

"Diplomas concediendo la Cruz de Honor a los militares que pasaron el


"Salado" el año 1860.

"En 28 de diciembre del año inmediato pasado confirió S.E. el


Vicepresidente de la República, Encargado del poder Ejecutivo, diplomas a
los Ss. Tenientes Coroneles Juan Avila y Agustín L. Guerrero, al id. graduado
Francisco Rendón, Sargento Mayor graduado Daniel Viteri, Capitanes Pedro
y Guillermo Pareja, Tenientes Francisco Parreño, Antonio Darquea, Jorge
Moreta y José Pío Ortiz, y Subteniente Marcelino Pazmiño, confiriéndoles la
Cruz de Honor decretada por la Convención Nacional de 1861 a los que pasaron
el "Salado".- Comandancia General del Distrito.- Guayaquil, enero 5 de 1865.-
Secundino Darquea.

"En 9 de marzo de 1865 confirió S.E. el Presidente de la República diplomas


a los Ss. Teniente Coronel José María Quiroz, Sargento Mayor graduado
Faustino Iturralde, Capitán efectivo Nicolás P. Vélez y Alférez José Vicente
Figueroa, de la Cruz de Honor decretada por la Convención Nacional de 1861
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 93

a los que pasaron el "Salado".- Comandancia General del Distrito.- Guayaquil,


marzo 16 de 1865.

"En 13 de marzo de 1865, confirió S.E. el Presidente de la República,


diplomas de la Cruz de Honor al Teniente Coronel graduado Ignacio Vaca y
al Sargento mayor Felix Negrete, con cumplimiento de lo prevenido por la
Convención Nacional de 1861, que comprende a los que pasaron el "Salado.-
Comandancia General del Distrito.- Guayaquil, marzo 25 de 1865.

"Agustín Lucas Guerrero, Teniente Coronel efectivo de Infantería de


Ejército obtuvo el diploma de la Cruz de Honor que le corresponde por el
honroso paso del "Salado" conferido por S.E. el Presidente de la República en
29 de agosto de 1865, y en conformidad con lo prevenido por la H. Convención
Nacional, en su decreto de 5 de abril de 1861.- La Comandancia General
tomó razón de expresado diploma el 15 de agosto de 1865.

4'

General Agustín Guerrero quien fue condecorado, por el


honroso paso del Salado en 1860, con la "Cruz de Honor".

"Manuel Santiago Yépez, Teniente Coronel propuesto para el grado de


Coronel de Infantería de Ejército, obtuvo el diploma de la Cruz de Honor que
le corresponde por el honroso paso del "Salado", conferido por S.E. el
Presidente de la República en 28 de agosto de 1865, y en conformidad con lo
prevenido por la H. Convención Nacional en su decreto de 5 de abril de 1861.-
La Comandancia General tomó razón del expresado diploma el 4 de septiembre
de 1865.
94 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Domingo Vera, Sargento Mayor efectivo de Infantería de Ejército, obtuvo


el diploma de la Cruz de Honor que le corresponde por el honroso paso del
"Salado", conferido por S.E. el Presidente de la República en 29 de agosto de
1865, y en conformidad con lo prevenido por la H. Convención Nacional, en
su decreto de 5 de abril de 1861.- La Comandancia General tomó razón en 6
de septiembre de 1865.

"Pacífico Aguirre, Teniente Coronel efectivo, Miguel Villandrando, Sargento


Mayor graduado, Pablo Nieto, Capitán graduado de Ejército, Blas Barragán,
Teniente, y Rafael Torres, Cesario Moreno y Antonio Barreiro, Subtenientes
de Infantería de Ejército, obtuvieron el diploma de la Cruz de Honor que les
corresponde por el honroso paso del "Salado" conferido por S.E. el Presidente
de la República en 5 de septiembre de 1865, y en conformidad con lo prevenido
por la H. Convención Nacional en su decreto de 5 de abril de 1861 .- Esta
Comandancia General tomó razón el 27 de septiembre del indicado año de
1865". (115)

El General Francisco Javier Salazar, izquierda, y el Coronel Manuel Santos Centeno, derecha, lucen en su pecho la
condecoración al "Arrojo Asombroso", obtenida cuando ostentaban los grados de Teniente (poronel y Sargento Mayor, por
combatir con méritos en 1860.

Recibieron además dicha condecoración otros Jefes del Ejército Garciano


y personal de tropa, entre los que podemos mencionar al mismo Dr. Gabriel
García Moreno, Jefe Supremo, al General Juan José Flores, General en Jefe,
el General Antonio Martínez Pallares, Jefe del Estado Mayor General, Coronel
Ignacio Fernández, Jefe Divisionario, Coronel Daniel Salvador, Comandante
General de la Primera División, Coronel Secundino Darquea, Idem. de la
Segunda División, Coronel Bernardo Dávalos, Comandante General de la
Caballería, Coronel José Veintimilla, Jefe del Batallón Babahoyo, Teniente
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 95

Coronel Ignacio Veintimilla, Jefe del Primer Regimiento, Teniente Coronel


Francisco Javier Salazar y Sargento Mayor Manuel A. Santos Centeno.

Por la colaboración y sacrificio de los oficiales e individuos de tropa


demostrados durante la campaña de 1860, fueron también recompensados
con ascensos aquellos que por ello se hicieron merecedores. Para ejemplarizar
lo dicho, sirve recordar lo que el 23 de enero de 1861 le escribía el Dr. Gabriel
García Moreno a su esposa Rosita Ascásubi: "A Daniel (Salvador) no podía
hacerlo General sin hacerle dar un salto ilegal, pues no era mas que Coronel
graduado. Lo mismo sucedió con Bernardo (Dávalos). Su ascenso fue pues a
Coronel efectivo; si hubieran tenido este empleo habrían pasado a Generales.
Han servido ambos muy bien; por eso han sido recompensados; yo también
he servido y para dar ejemplo a todos he querido no ser nada. Se conoce que
allá te molestan bastante" (116) tal parece que el Presidente hacía esta
aclaración a su esposa, ante reclamos de los interesados transmitidos por su
intermedio.

LA CONSTITUCION DE 1861

En 1861, la Convención Nacional presidida por el General Juan José Flores,


confeccionó la séptima carta política, la que fue promulgada el 10 de abril de
aquel año. Las características de dicha constitución con todas sus deficiencias
legales eran las siguientes:

"gobierno popular, representativo, electiva, alternativa y responsable;

"sistema bicameral, con reuniones ordinarias cada 2 años;

"religión católica exclusiva, con obligación de los poderes públicos de


protegerla y hacerla respetar;

"ejecutivo desempeñado por el Presidente, Vicepresidente a falta del


primero, que serían elegidos por sufragio universal, para períodos de 4 años;

"un consejo de Gobierno, presidido por el Vicepresidente de la República e


integrado con los Ministros de Estado, un vocal de la Corte Suprema de
Justicia y un eclesiástico y un propietario que debían dar su dictamen en
ciertos casos extraordinarios, como sanción de proyectos de ley, conmutación
de pena de muerte, etc.;

"supresión de las condiciones sociales y económicas para la ciudadanía y


para las representaciones, reduciéndolas únicamente a la edad y a saber leer
y escribir;

"agentes del Ejecutivo -gobernadores, jefes políticos- , no nombrados


precisamente por él, sino mediante "sufragio directo y secreto" de igual manera
que el Presidente de la República; y en fin,

"garantías ciudadanas de notable espíritu democrático, inclusive la


96 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

abolición dela pena capital para delitos politicos. (117)


Esta constitución había sido dictada a renglón seguido del término de una
cruenta guerra civil, la que luego del triunfo dotó al Dr. Gabriel García Moreno
de poderes omnímodos, los que practicó primero como Jefe Supremo y luego
como Presidente Interino. Ya como Presidente Constitucional se encontró
con una barrera política que le impediría gobernar. Algunos artículos de esa
carta fundamental no fueron de su agrado, en especial los que corresponden
a las amplias garantías ciudadanas y a la descentralización administrativa.
Por lo tanto García Moreno comenzó a gobernar en desacuerdo con la
constitución y como dice el historiador Oscar Efrén Reyes: para dicho
Mandatario "la Ley Constitucional de la Asamblea de 1861 quedóse en el
papel", pues consideraba que contenía un exceso de reconocimiento a la
libertad, y veremos después que estando abolida la pena de muerte por delitos
políticos, hizo caso omiso y muchos cayeron frente a un pelotón de fusilamiento,
por su orden directa.
Así también hizo caso omiso a la descentralización administrativa que
dispone dicha carta fundamental, pues prácticamente centralizó el poder,
nombrando él a los gobernadores y cercenando los atributos municipales, ya
que consideraba urgente afirmar la unidad nacional, combatiendo
precisamente el regionalismo y el departamentalismo de origen colombiano.
(118)
Dice Ricardo Pattee que había, en efecto, profunda e insubsanable antítesis
entre el genio del presidente y el de esa carta que debilitaba y encadenaba al
poder. (119) Es mas, en ella podemos observar que la protección al individuo
en el ejercicio de sus derechos políticos era extensa. El Presidente no podía
privar a un ciudadano de su libertad, imponerle pena ni expulsarle del
territorio.
Mas García Moreno estaba decidido a gobernar lejos de la constitución, si
ésta le estorbaba, y ya en el mismo mes de promulgada ésta actuaba como si
no existiera, en lo referente a los derechos y libertades del ciudadano. Por
ejemplo, decía al Dr. Manuel Vega, Gobernador de la Provincia del Azuay:
"La represión pronta, enérgica, terrible es el único medio de refrenar a los
malvados, los cuales se insolentan con el sufrimiento y confunden la paciencia
con la cobardía". (120) "Malvados" eran para él sus enemigos politicos. El 22
de mayo le aseguraba a dicha autoridad que está armado -el Gobernador
azuayo- de las facultades extraordinarias para tal fin, y que el Gobierno lo
sostendrá eficazmente.
Pero ante los procedimientos más que enérgicos del Gobernador Vega la
Convención reaccionó, y aunque aquél sólo seguía disposiciones de García
Moreno, que no debió cumplirlas, se le aplicó el peso de la Ley. Ante esto el
Presidente le dice: "Desgraciadamente sin que yo supiera con anticipación,
la Convención tomó conocimiento de una queja exageradísima contra Ud., y
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 97

sin pedir informe al Poder Ejecutivo ni a nadie, mandó se le abriera a Ud.


juicio correspondiente... se lo aviso a Ud. para que se prepare a defenderse".
(121)

El 19 de junio de 1861, sobre el mismo caso le refería al Dr. Manuel Vega


que : "La conducta de la Convención respecto a Ud. es injustificable; y por
una de mis cartas anteriores habrá visto el disgusto que esa conducta me
causó. Por lo demás yo espero en la probidad e ilustración de la Corte de ese
Distrito (Cuenca); y no dudo que Ud. saldrá bien. Por lo que toca al Gobierno,
Ud. sabe que le sostendré a todo trance; pues tengo plena confianza en la
probidad, inteligencia y patriotismo de usted". (122)

Por otro lado, el 21 de septiembre manifestaba el Presidente García Moreno


al Dr. Antonio Borrero lo siguiente: "Tenemos que oponer el plomo al oro, y
fusilar a pesar de la constitución, a los que se pongan de parte de los invasores.
Lástima fue que los convencionales no tuviesen previsión ni experiencia, y
que se convenciesen de que, en periodo de transición y de crisis, que sigue
siempre a toda revolución, se necesita un gobierno moral y fuerte para
organizar y moralizar al país". (123)

Pero lo más importante de su pensamiento se vislumbra cuando dice: "Por


eso dije entonces que la Constitución era un lazo que se ponía en el camino
en que, a mi despecho, me colocaran; pues en caso de salvar al país
comprometiendo mi responsabilidad, o dejarlo perder con la Constitución y
todo, no vacilaría en salvarlo, sacrificándome. Mi palabra será cumplida
fielmente". Entonces, la decisión de García Moreno era en este caso y en
muchos de los otros el ignorar la carta fundamental, lo cual le causaba un
conflicto de gobernabilidad y el irrespeto a las leyes y al ciudadano, al cual se
debía; y no lo comprendía a pesar de su amplia inteligencia.

VIAJE DEL PRESIDENTE A GUAYAQUIL

El Dr. Gabriel García Moreno, que como mencionamos tomó posesión, ante
los asambleístas, en Quito, de la Presidencia de la República el 2 de abril de
1861, no permaneció por mucho tiempo en la ciudad capital.Teme que ocurran
perturbaciones en Guayaquil y decide él mismo ir a controlarlas. Recela de
los alborotadores, y ya el 24 de abril está en Guayaquil, después de dos días
de camino, en donde se da tiempo para escribir una carta al General Flores
en la que le dice: "De Guayaquil no hay que temer; sin embargo creo
importante llegar allá para poner freno a los habladores... Ya verá Ud. por la
correspondencia de Destruge las disposiciones hostiles de Castilla. No importa:
la causa de la justicia siempre triunfará". (124)

Continua su marcha hacia Guayaquil y tres días después arriba a dicha


ciudad, desde donde manifiesta: "Mi llegada ha producido una impresión
98 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

indecible de sorpresa en esta ciudad; se han alegrado y unos cuatro la han


sentido". (125) A Flores le dice: "Es cierto que se ha trabajado en trastornar
el orden. Mi llegada ha producido en los descontentos el efecto de la mano
misteriosa en el festín de Baltasar". (126) Sin embargo cree, según sus
palabras, que su viaje ha sido innecesario, pues después constató que todo
marcha con regularidad en Guayaquil, no habiendo temores de trastornos,
pues precisamente era sólo eso, temores, y también rumores o falsa
información por el momento, y decide retornar a Quito, la capital y sede del
Gobierno.

Antes, había recibido de Lima el siguiente mensaje: "Hoy sale Franco para
Túmbez", pero aquello resultó exagerado, es más, fue una falsa noticia, pues
el general Guillermo Franco no se había movido de la capital peruana. De
todas maneras existe, para ellos, la posiblidad de que los urbinistas y
franquistas organicen una invasión al país para derrocarlo. Por ello le dice al
General Flores: " Sin embargo creo como Ud. que debemos proveemos de un
buen armamento, y no es por falta de órdenes mías que ha dejado de
conseguirse". (127)

El Presidente emprende el retorno a Quito el 9 de mayo de 1861, para lo


cual zarpó en el vapor fluvial "Dije" rumbo a Babahoyo. Dispone que a su
arribo le tengan bestias listas para montar al amanecer del siguiente viernes,
día que calcula llegará a dicha población, si se pudiere ya caminar por la
sabana o bien una canoa si la inundación continúa, pidiendo en ese caso que
en Sabaneta le tengan tres bestias de silla, las que serán perfectamente
pagadas. (128)

En fin, días después llegó a Quito, y el 29 de mayo escribe al Sr. Agustín


Barreiro pidiéndole haga llevar a Bodegas la mula que dejó en Quevedo,
pues resulta que era del señor Pablo Escudero, indicándole por ello que cuando
llegue allá, le haga el favor de remitirla por el correo. (129) Continua pues el
Presidente su administración en la ciudad capital.

Referente a estas actuaciones y recelos de García Moreno, que lo mantuvo


siempre en guardia, y que lo obligaba constantemente a viajar a la costa
para prevenirse de conspiraciones enemigas, sean éstas internas o como decía
él "las intenciones nefastas de Castilla contra nuestro país", quien apoyaba
abiertamente a los urbinistas que intentaban derrocarlo, se vio compelido a
una de las medidas urgentes, que su genio le dictaba, ésta fue el
establecimiento de un formidable servicio de espionaje interno, de pesquisa
política. Al respecto nos dice don Benjamín Carrión que éste fue uno de los
grandes males que el Ecuador le debe a García Moreno, y continúa: "Este
"regular espionaje" fue una de las mas siniestra instituciones garcianas.
Imbuido como estaba, desde su infancia, de las excelencias de la delación de
inspiración jesuítica, el servicio de espionaje envolvió al Ecuador... comenzó
por el espionaje político de "seguridad de orden público" y se fue extendiendo
a todos los aspectos de la vida humana..." (130)
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 99

CARTAS A TRINITÉ Y FABRE

El 6 de junio de 1861 escribía el presidente García Moreno al Dr. Antonio


Flores, su encargado de Negocios en el Imperio Francés, para entre otros
asuntos indicarle que las cartas que él había enviado a Trinité en 1859 habían
sido sustraídas de la legación francesa por Lapierre, Canciller de la misma.
Le expresa también que su propuesta en aquel año nada tenía de criminal,
puesto que como todos los hombres sensatos deseaban el orden, la moralidad
y el progreso, y que "el pueblo era quien debía decidir de su suerte en los
calamitosos días en que nos puso la perfidia de Castilla y la traición de Franco".
(131)

Comenta que Castilla fue quien indujo a Franco suscribiese la publicación


de las cartas en Lima, que Lapierre dio a Corpancho y éste al Presidente
peruano. (132) Pero cual era el contenido de las cartas enviadas dos años
atrás, y que en 1861 fueron reveladas en Lima, lo cual provocó una ola de
críticas y acusaciones de anti-americanismo. En circunstancias en que el país
se encontraba convulsionado en una guerra intestina y que la escuadra
peruana bloqueaba Guayaquil, García Moreno, integrante y Jefe Supremo
del Gobierno Provisorio de Quito, en diciembre de 1859, desesperado ante la
avalancha de contratiempos que le estorbaban comunicó al Ministro francés
en Quito, M. Trinité, los deseos de su Gobierno de propugnar un protectorado
europeo. Con la transcripción de la siguiente carta aclaramos sus intenciones:

"Quito, diciembre 7 de 1859.

"Muy señor mío:

"He visto la contestación de Ud. y la del señor Quevedo a la carta en la que


el Sr. San Quírico le manifestó mi deseo de que la República del Ecuador se
pusiese bajo la protección de Francia y de España. Ud. concibe que para dar
un paso decisivo y oficial en un asunto tan grave, era indispensable asegurarse
previamente si los representantes de las dos potencias europeas indicadas
podían aceptar lo que hiciésemos en virtud de sus instrucciones, y conocer
las condiciones para su aceptación. Pero una vez que carecen de autorización
y se han limitado a dar cuenta a sus gobiernos respectivos bajo la reserva,
aguardamos toda la respuesta, tal vez tardía, y aprovecharemos del primer
momento oportuno para entablar entonces una negociación en regla.

"Por lo que respecta a mí y aún puedo decir por lo tocante a todos los
hombres de orden, la felicidad de este país depende de su reunión al Imperio
Francés bajo condiciones análogas a las que existen entre el Canadá y Gran
Bretaña, salvas las diferencias que hubiese que introducir por la fuerza de
las circunstancias. Los que estamos cansados de luchar con el desenfreno de
la soldadesca y la turbulencia de los demagogos; los que trabajamos en vano
por contener la anarquía que nos deshonra y empobrece y vemos avanzar
rápido el torrente asolador de la raza anglo-americana, encontraríamos bajo
los auspicios de Francia, la civilización en la paz y la libertad en el orden.
100 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Bienes raros que no nos haría disfrutar la débil y extenuada España. Teniendo
la seguridad de que la enérgica voluntad del Emperador nos prestaría
cooperación y apoyo, no vacilaríamos en trabajar asiduamente por obtener
en la Convención que deberá reunirse, el triunfo de nuestros ideales; pero si
no contamos con aquella seguridad, nada podremos hacer, o al menos poco
podríamos alcanzar.
"Si Ud. creyere conveniente comunicar esta carta, enteramente reservada
y confidencial, al gobierno Francés, puede Ud. hacerlo, seguro de que no
omitiré ningún medio honroso para llegar a conseguir la prosperidad de mi
desgraciado país. Le ruego únicamente que no deje traslucir nada al señor
Quevedo, pues tengo sobrados motivos para creerlo falto de nobleza y de
lealtad.
"Aprovecho de esta oportunidad para repetirme de Ud. atto. y S.S.,
G. García Moreno
"Mr. Trinité, le chargé d' affaires de la France.- Guayaquil". (133)
García Moreno había cometido una gravísima falta, conducido quizás por
su criterio de señor colonial, como dice el historiador Alfredo Pareja
Diezcanseco. No se había aún consumado la torpeza incalificable de Franco
de la firma con el Perú del Tratado de Mapasingue, cuando en la fecha
mencionada escribe a Emile Trinité con aquella proposición también
injustificable. Es más el día 14 insiste ante el mismo encargado de Negocios
del país galo, en los siguientes términos:

"Le escribí a Ud. manifestándole francamente mis ideas sobre el


protectorado de la Francia, ideas de cuya realización me atrevo a responder
en caso de que Ud. nos apoye a nombre del Gobierno Imperial". Y el 21, aclara
al diplomado francés toda la gravedad de su propósito: "En efecto, yo no me
propongo un protectorado honorario, que sería sin duda gravoso a la Francia
(...) Se trata (...) del interés de este país que quiere librarse del azote de las
revoluciones perpetuas (...) Se trata también del interés de la Francia, pues
que ella sería la dueña de estas bellas regiones que no le serían inútiles (...)
He aquí lo que yo pienso hacer, y lo hará ciertamente tan pronto como Ud.
me de confidencialmente la seguridad de la protección del Gobierno de S.M.I.
El gobierno provisorio de Quito interrogará al pueblo si quiere unificarse al
Imperio francés, bajo el nombre que Ud. tuviese a bien indicarme de
antemano..." (134)
El colmo de sus intenciones se reflejan en lo dicho al Dr. Felipe Sarrade el
14 de diciembre de 1859: "Prefiero como Ud. la muerte o el pertenecer a una
gran potencia a ser burla de Castilla y los traidores. En toda reserva he dado
pasos decisivos con fundadas esperanzas de buen éxito". (135)
El criterio del historiador Alfredo Pareja Diezcanseco al respecto es el
siguiente: "García Moreno quería entregar el Ecuador a Francia no a causa
...i~
`111WP•PV,V)!TIT,

EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 101

del estado anárquico de 1859. Ninguna desesperación del momento le hizo


dar ese paso. Por el contrario, fue un proyecto reflexivo, de mandatario extraño
en tierra de indios que no amaba. Que Francia no haya querido recibir el
regalo es otra cosa". (136)

Y es también el historiador católico y garcianista Richard Pattee el que
dice: "No es necesario ni impugnar ni defender esta acción (...) los archivos
franceses revelan lo que algunos defensores acérrimos de García Moreno no
han querido ver: que su interés en el protectorado francés se extendió mucho
más allá de la crisis momentánea que produjo la correspondencia inicial".
(137)
Efectivamente, estando pacificado enteramente el país, todo bajo control
del Presidente García Moreno, sin siquiera existir peligro de guerra con el
Perú, y habiendo llegado en 1861 como nuevo Ministro de Francia en Quito
el Sr. Antonio Fabre, García Moreno renova sus intenciones de transformar
nuestra patria en protectorado francés, con lo cual se comprueba que no fue
el recurso desesperado por los momentos que se vivían, pues más bien al
insistir en su propósito en otras circunstancias, dan para tener la certeza de
su mal procedimiento, que si se daba hubiera significado el fin de Ecuador
como nación. Fue una tremenda falta del Presidente García Moreno, que
incluso algunos de sus acérrimos defensores la aceptan, aunque la mayoría
de ellos pretextan varias razones para justificarlo.
Es así que el 22 de junio de 1861 el Presidente Constitucional ecuatoriano
escribe al diplomático Fabre: "Y como en Francia pudiera creerse que ellas
(las cartas a Trinité) no representan sino ambición y temor, por los tiempos
angustiosos en que fueron escritas, cuando me hallaba haciendo esfuerzos
supremos para salvar a mi Patria, creo necesario escribirle para que aprecien
mejor mi sinceridad y le sea dable dar a su gobierno mejor cuenta de ella".
(138)
Y sigue: "Soy de la misma opinión que cuando escribí a Mr. Trinité, creo
que este magnífico y maravilloso país será civilizado y rico bajo el pabellón
de Francia, y que el pueblo del Ecuador se sentirá dichoso en unirse a vuestra
grande y generosa nación". (139)
Está tan decidido a llevar a cabo ese paso tan inicuo para nuestra patria,
que manifiesta que en caso de que ni el cuerpo legislativo ni el pueblo lo
secunden, dimitirá el mando y se separará para no intervenir en los negocios
públicos. Aspira además que Fabre le haga llegar su carta al Emperador
francés con esa solicitud. (140)
El mismo día 22 después de decirle por carta al Dr. Antonio Flores Jijón
que le ha pedido al Sr. Fabre consulte la voluntad del emperador al respecto,
le dispone consiga del Gobierno francés unas 2.000 armas de precisión, una
batería rayada de montaña y 2.000 vestuarios completos, fuera de algunos
cañones para defender el río de Guayaquil, obteniendo un plazo para pagar o
102 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

estipulando el pago por partes. (141)


El Presidente se excedía en sus intenciones de lograr tratos con el Imperio
francés, es así que aquel 22 de junio le escribía también a su Encargado de
Negocios en términos de favorecer a un ex oficial de marina que sirvió por
algunos años en la Armada ecuatoriana, pero que siendo de origen y
nacionalidad francesa se encontraba viviendo en aquel país, se trata del
Capitán de Fragata Juan Hipólito Soulin, y dice : "dígale Ud. a Soulin que
mande sus letra de cuartel, concedidas en 1845, para hacerlas refrendar; que
nombre un apoderado para que reciba su pensión (los sueldos se pagan
religiosamente) y que pida permiso para residir allá. No creo que nos convenga
su permanencia aquí, pues no habría en qué colocarle, (142)
Más adelante manifiesta que quiere establecer bajo la línea equinoccial
un observatorio astronómico y meteorológico, establecimiento que hará
grandes servicios a la ciencia, pues ninguno existe a cero latitud. Dice que
ese magnífico proyecto permitirá captar las simpatías del Gobierno del
Emperador francés, y por ello es su intención asociar a dicho imperio, tanto
para la estabilidad y conservación del observatorio, como para su creación.
(143)
García Moreno ofrece que Ecuador hará el gasto necesario de terreno y
edificio a más de costear la mitad de los sueldos de los empleados y de los
gastos de conservación; y pide que el Gobierno francés costee la otra mitad, y
además proporcione todos los instrumentos necesarios. Finalmente le dice al
Dr. Flores, en cuyas manos están ésta y otras negociaciones, que proponga
también que los gastos de transporte hasta Guayaquil los realice Francia, y
de esta ciudad hasta Quitó el Gobierno ecuatoriano. (144) Diremos de una
vez, que si bien es verdad que aquel proyecto no se hizo realidad en aquel
año, quedó latente y en 1872 volvió a acometer la empresa, y es el padre J.B.
Menten Astrónomo de la Politécnica, quien escogió el sitio, se ocupó de la
construcción y la traída de los aparatos, y ya en 1875, año de la muerte de
García Moreno, dicho observatorio estaba por concluirse.
Vale indicar que en aquella comunicación menciona al Sr. Wisse, a quien
espera para iniciar la carretera de Guayaquil, y dice: "Se trabajará
simultáneamente de aquí (Quito) a Latacunga, de allí a Riobamba, y de
Riobamba al Milagro. En tres años creo estará concluida o yo muerto. No hay
que pensar en ferrocarril ni en capitales: el descrédito que tiene el Ecuador
en Europa es la herencia que nos han dejado Urbina y compañía". (145) Sobre
esto último, la historia nos menciona que había de llegar otro gran hombre
para que sí pensara en el ferrocarril en forma positiva y lo hiciera realidad,
era éste el Presidente Alfaro.

Con el propósito de tener una mayor información sobre la pretendida


anexión de Ecuador a Francia, me permito transcribir algunos documentos
obtenidos por una hermana del historiador Wilfrido Loor, cuando ésta se
encontraba residiendo en Francia como religiosa oblata, valiéndose de la
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 103

influencia de R.P. León Scamps superior de la Comunidad de Oblatos, y que


posteriormente fueron traducidas del francés por el mismo Wilfrido Loor:
"Antonio Fabre, Ministro de Francia en Quito, a Eduardo Antonio
Thouvenel, Ministro de Negocios Extranjeros De Francia, en tiempo
del Emperador Napoleón III

(Traducido del francés por Wilfrido Loor)


Quito 27 de junio de 1861
El señor García (Moreno) entonces (en 1859) miembro del Gobierno
Provisorio del Ecuador, de acuerdo con sus colegas, deseaba y pedía
oficialmente la anexión de su país a Francia. (Pero cuando esto ocurría García
Moreno no gobernaba sobre toda la República; más aún) su causa parecía
que iba a ser vencida por la coalición (de los partidarios) de Guillermo Franco
apoderados de Guayaquil con los peruanos de Castilla (el Mariscal). (Ahora
las cosas han cambiado). García Moreno ha sido elegido por unanimidad
Presidente de la República, se halla en plena posesión del poder (en todo el
territorio ecuatoriano), y de acuerdo con su Gabinete, compuesto por personas
que no formaron parte del Gobierno Provisorio, nos ha renovado su petición
(de 1859, de colocar a su país bajo el protectorado de Francia).

Permítame hablarle del Presidente, joven eminentemente distinguido y


jefe de partido aristocrático, es decir del partido del orden que gobierna
(actualmente) el Ecuador. La historia de los últimos años me lo ha hecho
conocer como un hombre de bellas (felices) cualidades y de las mejores
intenciones; pero ardoroso (violento) hasta la imprudencia se arroja con
intrepidez, sin ser soldado, al fuego de combate, y en lo civil llega hasta el
desafío en defensa de la causa (que juzga buena) . Todo aquello que he podido
saber de él desde que estoy en el Ecuador es, que unos le nombran con
benevolencia (con entusiasmo) y los otros con odio (diríase que no se lo puede
juzgar con calma). Valeroso, decidido, apasionado por el bien, implacable ante
el mal, dicen de él sus amigos. Y yo me he encontrado en presencia de un
hombre de unos cuarenta años, de talla que se puede considerar alta, cuerpo
bien conformado, buenas facciones, una cabeza que ciertamente se la puede
llamar bella, mirada inteligente con esa expresión de las naturalezas
convencidas entregadas a un gran ideal: los rasgos del semblante son más
bien cortos (enérgicos), no obstante su regularidad, como se ve con frecuencia
en los caracteres firmes y decididos; la palabra clara, el lenguaje y la actitud
un poco dubitativos cuando él se preguntaba cuales podrían ser mis
pensamientos en lo relativo a sus cartas, pero luego de una franqueza y de
un abandono evidentes, cuando se convenció de mi sincera opinión de que el
Gobierno francés nada había sabido de su proposiciones (hechas tres años
antes). García Moreno es una especie de fenómeno en su país. Su naturaleza
(inquisidora), devoradora lo ha llevado muy joven a la primera magistratura,
y le permitió hacer en su niñez estudios superiores que no son comunes aquí
(en el Ecuador); es instruido más que cualquier persona, habla cinco o seis
104 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

idiomas, (ingles, francés, español, quichua, latín). Y se dice que matemático,


químico, doctor.
Su espíritu acoge con entusiasmo todo aquello que puede desarrollar la
ciencia, aquello que eleva la instrucción en el Ecuador. En sus conversaciones
lo he hallado preocupado de ideas raras y grandes.
García Moreno parece haber extrañado no haber recibido contestación del
Gobierno francés a las proposiciones que hizo en diciembre de 1859 a M.
Trinité. Cree que los documentos en que se hicieron tales proposiciones,
precisamente en razón de su gravedad, han sido trasladados al Ministerio de
las Tullerías y... no han sido conocidas ni contestadas.
¡Nuestro silencio, no indica, pues, para él desdén o rechazo! Yo persisto en
esas proposiciones, dice García Moreno. Ud. no conoce la América del Sur,
me increpa. (Este continente) es un cuerpo en disolución. Si América del Sur
cesa de ser un cuerpo compacto, de formar una unidad, esta disolución va a
tener en lo sucesivo progresos sorprendentes. Yo soy Presidente hoy día, y
parece que los Presidentes gobernamos; pero no os equivoquéis: esto sólo es
una tregua, nuestro estado normal es la revolución. La proposición que yo
hacía a Trinité cuando creía que íbamos a ser vencidos, la renuevo ahora que
estamos en el poder, porque no fue un pretexto, una rama de salud, a la que
pretendí acogerme (como el náufrago en peligro de ahogarse). Esta idea (de
unirnos a Francia) ha sido bien meditada y está fundada en un sentimiento
que creo eminentemente patriótico, porque es el único medio humano que
existe para preservar a mi país de esta disolución en la corrupción, que nos
obliga a unirnos con cualquier gran potencia europea si es que no lo
pudiésemos hacer con Francia. Con estas uniones que no pueden ser
desventajosas (para Francia), como no son las que existen entre Canadá e
Inglaterra, nosotros nos preservaríamos del mal de la anarquía: gozaríamos
del orden en la libertad. Si su Gobierno está dispuesto a aceptar la proposición
que le hago, convocaré enseguida a mis colegas (los ministros del Gabinete)
para reunir una convención que conozca y vote el pacto de unión del Ecuador
con Francia. En esa convención verá Ud. a los representantes del pueblo
(todos ciudadanos de más de 18 años que saben leer y escribir) que acogen
con entusiasmo la idea. Solamente que ahora el asunto tardará un poco más,
porque tenemos una Constitución y tenemos que comenzar por reformarla
(con los trámites que esa misma constitución prescribe).
Pág. 48. Tal ha sido el lenguaje del Presidente en presencia de su
Ministro.... Este es un testimonio magnífico del hermoso papel que juega
Francia en la civilización moderna: y a este llamamiento de pueblos lejanos
que no tienen vínculo alguno con Francia hemos respondido con desprecio y
con generosidad.
Ecuador.- A.E. Tomo V. Pág. 66 Fabre a Thouvenel.- 6 de julio de 1861
(orden no acostumbrado que reina en el Ecuador bajo la administración de
García Moreno).
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 105

Yo sólo quiero decir a Vuestra Excelencia que he encontrado a esta


República, tan largo tiempo despedazada por la guerra civil, no únicamente
en un estado de paz que podía ser efecto del agotamiento (de una larga guerra
civil), sino en un orden perfecto, bajo la dirección del jefe (García Moreno)
que los representantes del pueblo han elegido por unanimidad, y que se ocupa
por entero en fortificar la paz y en proyectos (sobre bienestar colectivo) que
suponen fe en el porvenir. Por doquier se contempla a los ciudadanos elogiar
esta nueva situación, la cual las rentas públicas llegan al tesoro y no salen
sino para el bien público, bajo la dirección de un jefe severamente probo que
vela por la moralidad de la administración.

Al mismo tiempo que la mayoría del país tiene fe en García Moreno sus
enemigos le temen, porque conocen la firmeza de su carácter. De esta suerte
todo marcha con una regularidad rara, en estos lugares (azotados por la
anarquía). Y es opinión común que el país marchará algún tiempo así lejos
del peligro de la revolución ... Tengo el honor de suscribirme humildemente
de Vuestra Excelencia...

Pág. 86... He aquí que después de tres meses de residir en la América del
Sur, no sólo absuelvo al jefe americano que en posesión cierta, y para muchos
años de un temible poder, vuelve a pedir para su país la tutela extranjera,
sino que admiro su sacrificio, que para salvar a su patria) de la anarquía y
conducirla por la ruta del verdadero progreso), le impulsa a desafiar el furor
de los tiranuelos que sueñan en succionar aún los últimos restos de la vitalidad
de un país. Y es ahora cuando comprendo y aprecio en lo que vale la respuesta
del antiguo soldado de la independencia :"¡Unirnos a Francia! es demasiado
bello. Ella no aceptará. Perecemos en nuestra propia incapacidad".

Pág. 114. Como franceses debemos estar contagiados de la confianza del


Gobierno de García Moreno que nos llama reiteradamente en la esperanza
de que sólo nosotros podemos salvar al país cuyos destinos él rige. Y debemos
responder haciendo llamamiento a todas partes para enviarles profesores,
sacerdotes, ingenieros, hermanas de la caridad.

Pág. 115. He hablado del Ecuador, y no he encontrado todavía aquí (en la


América de Sur) un extranjero, y casi me atrevería a decir ni un enemigo del
actual Gobierno, que no rinda justicia a la probidad y a la actividad que
despliega García Moreno. Esto es un hecho nuevo en la América del Sur: un
Gobierno ardoroso del bien público, que sacrifica sus comodidades personales
para hacer caminos, hospitales, escuelas y que a todo imprime una actividad
calificada de tiranía por enemigos acostumbrados a la dulce inercia ... a la
miseria y a la muerte.

Este Gobierno de García Moreno es un don que la naturaleza ha dado al


Ecuador y que le atrae la estima del mundo y la sólida riqueza. Riqueza,
palabra maldita que despierta el celo, el despecho, el odio del General Castilla,
enemigo personal de García Moreno y Flores, y que trabaja por perturbar la
obra gubernativa tan honorablemente comenzada. (pág.119)
106 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Pág.110. Este país ( Ecuador) salido recientemente de la miseria de la


guerra civil, rindió jubiloso hace pocos días la cuenta de sus entradas y gastos,
y ella muestra que en seis meses de una administración honesta y activa las
rentas públicas se han duplicado llegando a una suma que antes nunca ha
sido recaudada. Pero todo ha cambiado profundamente ante el anuncio de un
súbito ataque del Perú.
Pág. 126. García Moreno a Mr. Fabre. Guayaquil, 7 de septiembre de 1861.
No creo ni temo que el General Castilla nos haga la guerra. El Ecuador tiene
los medios suficientes para defenderse con honor, y nunca podrá olvidar el
Perú la sangrienta lección de Tarqui. Lo que Castilla hará probablemente
será comprar con el oro del guano (principal y rica fuente de riqueza)
desórdenes y conmociones, y sobre todo bloquear el puerto de Guayaquii.para
destruir la principal fuente de ingresos de la República. Al oro opondremos el
plomo y la popularidad de que goza el Gobierno, pero nada podremos hacer
contra las naves que bloqueen la ría de Guayaquil porque nos falta marina, y
los buques peruanos tendrán buen cuidado de ponerse fuera del alcance de
nuestros cañones de tierra. Si esto ocurre, ¿podemos contar con vuestra
influencia a fin de exigir del Gobierno Imperial (de Francia) que impida el
bloqueo y obligue al Gabinete de Lima a reanudar las relaciones?
Pág. 178. Fabre a Thouvenel, Ministro de Relaciones Exteriores. París
.Escribí a V. Excelencia en los primeros días de agosto que Mr. García Moreno
me había confiado la demanda que había hecho a Inglaterra (para unirse al
Ecuador). Y me dijo para excusarse que no había hecho la misma demanda a
Francia porque no sabía lo que pensaba su Gobierno a este respeCtó. Vuestra
Excelencia habrá visto por mi primera comunicación que Mr. Trinité-(a.htiguo
cónsul de Francia fallecido en Quito, cuyos papeles confidenciales de García
Moreno a Trinité habían sido robados por un agente del Perú para, hacer
daño al Ecuador) le había dicho que él había dado cuenta a su, Gobierno de
las comunicaciones que le dirigiera García Moreno, y que por-consiguiente
habiendo pasado año y medio de silencio se podía hasta cierto punto 03nfirmar
la suposición de menosprecio que había llevado ( a los adversarios) a la
publicación de las cartas robadas. Esto explica que la misma demanda que se
hizo a Inglaterra no se hizo también a Francia.
Pág. 182. Fabre a Thouvenel. Quito, 19 de noviembre de 1861. ElTresidente
(G.M) habiendo creído por un instante que Francia rehúsa acceder a Sus
deseos ( de protectorado) me ha escrito una carta bastante'triste,.. Las
amenazas del Perú no dejan de haber causado algún mal al Ecuador:.El dinero
conseguido después de un año de una administración proba e íntegra y
destinado a abrir nuevas rutas al progreso se ha gastado en preparativos de
la defensa contra el invasor. Desórdenes y malos hábitos que el Gobierno no
ha tenido tiempo de corregir han dado pretexto de lamentos a los adversarios
y han sido aprovechados para denigrar al régimen acusándolo de aprovecharse
de la ocasión del conflicto internacional para enviar al exilik e ekraas
mortíferos a cuantos no son partidarios de su Gobierno. Noobstante
„ i n0 se
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 107

ha alterado la tranquilidad pública. La impotente veleidad del Perú ha


permitido al Ecuador dar una bella lección a las repúblicas hispanoamericanas
y un hermoso ejemplo de moral al mundo...,cuando el Perú busca (como en la
fábula del lobo) un pretexto para la contienda encuentra que un año de
administración ordenada, de probidad, de economías han puesto a un país
pobre como el Ecuador en situación de responder con tales preparativos de
defensa, que el rico dilapidador (el Perú) no se siente ya lo bastante fuerte
para dar inmediato cumplimiento a sus amenazas y carece de dinero para el
ataque y aún para pagar a sus servidores en la administración. He aquí un
hecho que entusiasma y que hace un gran honor a la administración de García
Moreno.
(Y en la impotencia) el Perú nos inunda con una multitud de panfletos en
que García Moreno.y Flores, como convictos de querer vender la América del
Sur a Francia, son tratados a la manera del P. Duchéne.
Pág. 186. Mr. Fabre a S.E. García Moreno. 23 de octubre de 1861.
Cualquiera que sea nuestra respuesta definitiva la confianza que nos habéis
mostrado dará motivo a nuestros dos países a una cordialidad de relaciones
que producirá buenos frutos. Y me atrevo a decir que sin las exigencias de la
política y la sequedad de la diplomacia, en adelante habrá en el corazón de
Francia una disposición general de prestar al Ecuador todos los buenos oficios
que de ella dependen,y por consiguiente el paso de V.E. tendrá otros efectos
(más beneficiosos) y más durables que el pretexto de la guerra a que ha dado
motivo el General Castilla.
Pieza 2: S.E. a M. Fabre en 30 de octubre de 1861 (Esta carta está escrita
en castellano). Antes de recibir su carta del 23 del corriente yo había pensado
lo mismo que Ud., y de no publicar aún la exposición que ahora me ocupo en
redactar. La coincidencia de nuestras ideas ha sido preciosa y la considero
como buen augurio de éxito.
Pág. 193. S.E. Mr. García Moreno a M. Fabre. 13 de noviembre de 1861...Yo
he recibido con gratitud su carta del primero del corriente y la nota oficial del
30 de septiembre. Quedo profundamente reconocido de la benevolencia
manifestada por el Emperador (Napoleón III el pequeño) y por Mr. Thouvenel,
y espero que el vapor que debe llegar hoy día traerá noticias importantes.
Una solución pronta es sin duda preferible a la situación actual; pero prefiero
una buena solución tardía a una mala solución precipitada.

Su memoria no le ha engañado. Yo no quería solicitar los buenos oficios de


Francia sino subsidiariamente cuando el caso se hubiere presentado. El señor
Flores inquieto de saber que el Gobierno del Perú se negaba a reconocer a
nuestro agente diplomático, creyó de su deber solicitarlos (los buenos oficios),
sin tener instrucciones y sin haber recibido la más ligera insinuación de mi
parte o del Ministro. Sin embargo, no creo que esta ligereza comprometa en
nada, sea porque la mediación de Inglaterra nada tiene de seria sea porque
según lo que me ha escrito Flores la petición sólo se hizo verbalmente de
108 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

acuerdo con el señor Thouvenel. El vapor qué llega hoy día me permitirá
juzgar mejor los hechos.
Yo siento infinito verme clavado aquí (en Guayaquil) por las amenazas
(de invasión) del General Castilla y no poder conversar con Ud. largamente
en Quito (donde residía Fabre). No obstante, si Ud. lo creyere indispensable
puedo trasladarme en tres días a la Capital, y lo haré cuando llegue el
momento de actuar. Entre tanto los señores Aguirre y Carvajal le darán todos
los datos que puedan.
Pág. 195. (al reverso) Fabre a Thouvenel. 2 de diciembre de 1861. Dadnos
la seguridad de que estaréis dispuestos a protegernos, me dice el Presidente
del Ecuador, y yo y mis amigos nos exponemos a la venganza de América en
el intento de salvar a mi país (de la anarquía y conducirla por la ruta del
verdadero progreso). Nos jugaremos la vida y el honor si Francia nos anima
con su apoyo...Si el Presidente al pedirle el voto a su pueblo (en elecciones
libres) no puede anunciarle que Francia está dispuesta a acoger
favorablemente la petición, toda probabilidad de éxito está perdida, aun en
el caso de que él persista en su idea de sacrificio en la patriótica esperanza de
que abierta esta ruta (del Protectorado) Otros después de él serán más felices
que él. El pueblo que probablemente Voiaría'"si" al saber que Francia dará
favorable acogida a su petición, seguramente que votaría `i-io"'al temer verse
rechazado en sus deseos. Y no faltarán los opositores que pretendan probar
que Francia no aceptará el pedido, y que es inútil exponer en inasa (al pueblo
todo) a ese desdeñoso silencio que .después de dos' años ha infligido ya tan
triste deshonra a las cartas de M .Trinité.
El rechazo, la demora llevará,..-. al desastre ál partido aristocrático y de
Gobierno en el Ecuador y para nOsotro's (los franceSeS) será un juego tan
enfadoso como si hubiésemol prometido de anteMana dar acogida favorable
al voto popular, pues no faltarán muchisiinOs envidiosos ,que desptiés del
fracaso del voto pedido al pueblo sírPongan que nosotros hemos 'hecho un
trabajo escondido que a última horala fraéaSatio.
201. Pieza I. García Moreno a Mí'. Fabre, duayaquilj 6de noviembre de
1861. Vuestras instrucciones nos dari la Véntajadé rOmperb impedir el bloqueo
(del Perú). Pero esta ventaja sería kriásIqUe effinera'si elGobierno francés no
se digna aprobarla, trae los, inconvenientes señalados por el Almirante,
compromete precipitadamente la polítiCazdel Gobierno, Imperial que no ha
contado con la voluntad expresa' del 1r Vol deja, expuesto (como
Ministro de Francia en Quito) a recibir una desagrádable reprimenda en
recompensa del celo y generosidad con e/cual habéis tratado este asunto. De
otro lado, dos meses han transcurrido ya Mr. Thouvenel coiíoce la jactancia
del libertador Castilla y sin duda le la enviado a ticLy a Mr. de Lesseps las
órdenes necesarias, las cuales no tardarán en llegarle confirmando,
modificando o anulando vuestrak ingtriicCionea 11 ieritra4 ante, nuestra
situación (en el Ecuador) se puede "iodo Si Mosquera logra
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 109

consolidar su poder en Nueva Granada, pues entonces me sería muy sensible


ver amenazada a mi patria por el norte y por el sur sin que nadie nos favorezca.
Más, en cualquier evento yo cumpliré con mi deber defendiendo al país hasta
morir en la contienda.

Pieza II. Fabre a García Moreno. Quito a 22 de noviembre de 1861. El


Ministro (de Relaciones Exteriores de Francia) me envía copia de una carta
que dirige él al Sr. de Lesseps en la cual le pone al corriente de nuestros
asuntos más o menos en los términos que hago conocer a Vuestra Excelencia..
"en relación a la demanda de buenos oficios que Ud. ha dirigido a Francia lo
mismo que a Inglaterra contesta que no nos podía ofrecer formalmente esos
buenos oficios, pero que nosotros podemos presentar al Gobierno peruano
observaciones tendientes a prevenirle que en el caso de hostilidades contra el
Ecuador, Francia no miraría con indiferencia las medidas coercitivas que
emplease el Perú contra el Ecuador.

P.D.V.E. verá por esta narración, que el Gobierno francés no conocía aún
los documentos peruanos sino por las comunicaciones de M. de Lesseps.

No dudo que quede muy favorablemente impresionado cuando los reciba


con las comunicaciones del 6 de septiembre, porque los documentos
ecuatorianos son muy superiores, en tono, moderación y dignidad.
i
Pág. 204. Conspiración descubierta... El Perú arrebatado de sus ideales
bélicos había de procurar, según carta de Fabre a Thouvenel (4 de diciembre
de 1861) influir en personajes de alta importancia ecuatorianos para que se
levantasen en revolución provocando al mismo tiempo desembarcos en la
costa y un movimiento subversivo 'en Quito, donde se proclamaría la Jefatura
de Espinel (Marcos) el único adversario de algún volumen, que según Fabre
podría ser proclamado jefe entre los residentes en Quito. El motivo de la
conspiración se basaría en primer lugar en la presumida venta del Ecuador a
Francia. El conspirador Espinel a quien se lo buscó para apresarlo se refugió
en la Legación de Inglaterra; en esta Legación Espinel fue protegido por el
derecho de asilo, pero con indelicadeza llevó allí a toda su familia y adherentes,
y el agente o Ministro inglés decidió dejarlo escapar (es decir obligó a huir
con seguridades para su persona abandonando los demás la Legación).

Pág. 211. 12 de diciembre de 1861. Por el tratado el Perú y el Ecuador


entre el Gobierno peruano del General Castilla y el General ecuatoriano
(Guillermo) Franco, éste cedía la parte del territorio codiciada por el Perú, y
Castilla se obligaba a dar a Franco las tropas necesarias para derrotar al
Gobierno victorioso de Quito...Este contrato fue celebrado contra los preceptos
del Derecho Internacional y con menosprecio de las Constituciones vigentes
en las dos repúblicas que exigían para la validez de tales convenios la
intervención de sus respectivos cuerpos legislativos.

Fue en estas deplorables circunstancias (antes de celebrarse el tratado),


pero previendo ya las funestas consecuencias de las negociaciones entabladas
110 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

entre Castilla y Franco, que García Moreno, ahora Presidente de la República


y entonces miembro del Gobierno Provisorio de Quito, creyó de su deber
dirigirse al agente diplomático del Gobierno francés (señor Trinité) en cartas
de 7, 14 y 21 de diciembre de 1859, cartas confidenciales cuyo objeto era
solicitar para el Ecuador la protección de Francia. En la última se decía que...el
Gobierno Provisorio de Quito consultaría para este protectorado al pueblo
del Ecuador, y que estaba seguro que el pueblo (en elecciones libres) daría su
consentimiento, porque los ciudadanos se hallaban cansados de los desórdenes
de revoluciones incesantes que los llevarían a ser incorporados por la fuerza
al Gobierno del Perú.

Estas cartas (robadas por un agente del Perú a la muerte de Trinité en


Quito) y de que se hace tanto ruido se limitaban a consultar la voluntad del
pueblo, que es la fuente de la soberanía, para saber si prefería salvaguardar
la integridad de su territorio y su independencia bajo la protección de Francia
o si soportaba el fraccionamiento de su territorio y el yugo que le quisiese
imponer el jefe peruano.

Pág. 212 (continuación). Sin tomar en cuenta el estado de angustia del


Ecuador, acorralado y junto a un abismo que amenazaba engullir su
nacionalidad, su honor y su naciente civilización, un sentimiento de
americanismo quizá exagerado pero que en todo caso yo respeto, indujo a
algunas personas a la formación de un juicio severo sobre las cartas del señor
Trinité, que en definitiva no proponían otra cosa que la aplicación del sufragio
universal en el Ecuador (para decidir de su destino), y sobre el cual el General
(Guillermo) Franco se creyó autorizado a ver un crimen cometido por García
Moreno (contra la autonomía del Ecuador), autonomía contra la cual el
General Franco no había cesado de trabajar para destruirla y que obligaba,
por decirlo así, al Jefe del Gobierno ecuatoriano a poner un cuchillo sobre su
garganta para mirar como medio supremo de salud el recurso a la protección
de una potencia europea, potencia después de todo muy conocida por su
desinterés y generosidad.

Las proposiciones de García Moreno quedaron sin respuestas, y el señor


Trinité, agente diplomático francés a quien iban dirigidas moría poco tiempo
después en Quito. La causa del Ecuador (ante las embestidas del General
Franco y el Gobierno peruano) parecía perdida, pero García Moreno -y Flores
que después de 15 años de proscripción había sido colocado al frente del
ejército- no desesperaron por el triunfo de la buena causa en la República.
Sin armas, sin dinero, y teniendo que combatir al mismo tiempo contra Franco
y contra Castilla, hicieron un llamamiento al patriotismo de los ecuatorianos
y alcanzaron la victoria.

Pág. 212 (al reverso) Flores a Thouvenel. Alentado por la moderación del
Gobierno ecuatoriano Castilla rehusó recibir al representante del Ecuador
(ante el Gobierno del Perú)... y consiguió hacerse entregar la correspondencia
de García Moreno a Trinité, el agente de Francia. Y esta correspondencia fue
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 111

publicada en Lima, después de la violación del archivo de la legación francesa,


en forma acusatoria (de traición) dirigida contra García Moreno, Presidente
del Ecuador, por el cómplice del General Castilla, Guillermo Franco... Y a
continuación el Gobierno del Perú (mejor dicho Castilla) invita a los Gobiernos
americanos a unirse en una gran asamblea contra una República de tan poca
importancia como el Ecuador. Por el conocimiento de lo narrado V. E. apreciará
cual es el verdadero fin de este llamamiento a las armas contra el Ecuador
contra quien se busca levantar la cólera y la desconfianza de la América
entera...
Esto no es todo: el Ecuador no pide otra cosa que someter la diferencia a
una comisión mixta y en caso de discordia someterse a la decisión de un
tercero... y el General Castilla rehúsa acceder a este deseo, prueba convincente
de que Castilla sólo busca motivo de querella contra el Ecuador para anexarse
una parte del territorio reclamada secretamente por el Gobierno de Nueva
Granada ( es decir repartirse el Ecuador entre Perú y Nueva Granada)... El
General Castilla alega en su apoyo, el (supuesto) derecho de hacer guerra al
Ecuador: pero la causa ocasional de esta guerra, la causa inmediata de ella
es, como lo ve claramente V.E., la sustracción hecha de los archivos de la
Legación francesa de una correspondencia secreta y confidencial destinada
exclusivamente al Gobierno de Su Majestad Imperial.
La complicidad del Gobierno Peruano en el robo de las cartas es un hecho
probado, pues el Ministro de Relaciones Exteriores del Perú anunciaba al del
Ecuador, en 24 de agosto de 1861, que la autenticidad de dichas cartas escritas
por el Presidente García Moreno había sido probada judicialmente en Lima,
y declaraba ( nota oficial de 19 de septiembre de 1861) aceptar el depósito de
las cartas sustraídas para guardarlas en sus archivos... Como se ve el Gobierno
peruano se sirve de estas cartas para desencadenar el torrente de sus malas
pasiones contra pueblos que no han hecho daño alguno.
Pág. 224. Dirección Política No. 4. Ecuador 5 (sentido general de la acción
de Fabre en el conflicto del Ecuador con el Perú).

Fabre a Thouvenel. 21 de diciembre de 1861. Yo estoy enterado del espíritu


de V.E. de hacer conocer al Gobierno del Ecuador la protección que recibiría
de nosotros si llegare la oportunidad, considerar esta comunicación como
estrictamente confidencial (Anexo del despacho de 3 de diciembre de 1861.
Dirección Política No. 11). En los caso en que he actuado los he hecho con
este doble fin: lo) Convencer al Ecuador de nuestro deseo de protegerlo. 2o.)
Tener este buen deseo de un profundo secreto a fin de no dar ningún alimento
a sospechas contra Francia...Le Times ha supuesto mi protesta y la ha
publicado con el aplomo que caracteriza a los diarios.
Pág. 228. (reverso). Se autoriza a Mr. Fagan (agente diplomático inglés)
para ir al Perú a precisar e impulsar la aceptación de buenos oficios de parte
de Inglaterra.
112 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Pág. 229. Yo insinué a Carvajal (Rafael el Ministro del Interior y RR.EE.)


la idea de que nosotros (el Cuerpo Diplomático) hagamos una visita en
corporación al Presidente de la República (García Moreno) con motivo de su
retorno a Quito. En esta visita le felicitaríamos, por el órgano del Ministro de
Estados Unidos que por su grado y su ancianidad es el llamado a llevar la
palabra (para expresarle nuestro aplauso) por el modo como se desarrollan
los acontecimientos y por la energía que acaba de desplegar en Guayaquil y
porque después de un año de Gobierno ha colocado al Ecuador en estado de
tomar una actitud en que pueda imponer sus derechos. Este paso del Cuerpo
Diplomático no dejaría de tener alguna influencia (ante el Perú).
Pág. 230 (reverso). Tengo el pesar de informar a V. E. que se ha tenido
aviso de un posible asesinato contra el Presidente (García Moreno) en su
viaje de retorno de Guayaquil a Quito. Y se han tomado las medidas oportunas
para impedir el crimen. El Gobierno nada ha dicho, porque no ha querido
hacer público ese crimen ni aún a sus íntimos.

Es un hecho esta tentativa (de asesinato) cuya naturaleza es llevar las


cosas aún más adelante (para que el Perú pueda cumplir sus propósitos). El
Presidente, los que sólo en él tienen fe y las gentes que piensan sin
compromisos políticos, tienen la convicción que la única garantía en el porvenir
para su país (para que no sea desmembrado su territorio) es el firme apoyo
de un brazo extranjero.
Pág. 232. Dirección política. No. 15. Quito. Fabre a Thouvenel el 4 de enero
de 1862. Recepción del Cuerpo Diplomático por el Presidente (García Moreno).
Traducción: diario oficial y artículo de este diario.
El discurso del Ministro de Estados Unidos estuvo bueno; felicitó al
mandatario en términos bastante generosos por el mantenimiento de la paz
y las cualidades (de una buena administración) puestas en práctica por el
gobierno; pero en lugar de ser una visita de simpatía y de aprobación de los
representantes extranjeros con motivo de la crisis con el Perú, degeneró en
un puro cumplimiento del día de año nuevo.
Sigue de largo la correspondencia hasta 1868 en que Francia desechó en
forma definitiva el protectorado; sólo lo referente a 1861 y 1862 alcanza en
los archivos franceses más de 400 páginas (a que sólo damos un resumen).
En 1869 se reanuda la correspondencia pero no ya con Fabre, sino con Dulcan
y La Vallette y ahora no es ya García Moreno el que se interesa sino los
franceses en obtener ciertas ventajas comerciales, más García Moreno,.ha
perdido un poco la confianza, cree que Francia sólo piensa en sacar ventajas
y no preSta al asunto demasiado interés. (Además el peligro del Perú no tenía
ya tanta gravedad). No obstante, el volumen de la correspondencia nb deja
de ser bastante grande; una carta de 15 de mayo de 1869 que tenemos en
copia está tomada de la página 304 y pasa •a la 305. Si el gobierno, la Casa de
la Cultura u otra institución o persona trajese en microfilm-todo ese material
a l©s ecuatorianos haría mucha luz sobre la primera administración de García,
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 113


Moreno y nos daríamos cuenta del provecho que obtuvo para contener aun a
Castilla en sus pretensiones de declarar la guerra al Ecuador, y volver a una
• situación parecida de la de 1860 en la que si hemos de ser sinceros (Castilla)
no contó con la aquiescencia de la gran mayoría de su propio pueblo. Anotemos
algunos documentos interesantes, que Fabre traduce al francés, de nuestros
diarios o del Perú para remitir al Ministro de Negocios Extranjeros de su
país.

Dirección política No. 6.


Pieza anexa a la correspondencia de 19 de octubre de 1861.- Extracto de
periódicos del Perú,
Traducción:
INTERESES GENERALES
El General Guillermo Franco (Jefe ecuatoriano refugiado en el Perú) a
S.E. Sr.(José Fabio) Melgar, Ministro de Relaciones Exteriores (del Perú).
Lima, 8 de septiembre de 1861
Señor
Americano de corazón y demócrata por principio, me hallo en la obligación,
por mi honor, de revelar como ya lo he hecho ante el Cuerpo legislativo
soberano de mi propio país, el crimen monstruoso, el crimen insolente por el
cual García Moreno se convierte en el más famoso culpable de lesa
independencia en la América de Sur. Sin embargo como la Asamblea
Constituyente del Ecuador, lejos de juzgar y castigar tan vergonzosa apostasía
(contra la democracia y la libertad) se presenta ante el Continente con los
oscuros colores de la complicidad que degenera en indiferencia y silencio, a
ninguna otra persona con más justo título que al Gobierno de V.E. debo
entregarle las tres cartas autógrafas por las cuales el señor García Moreno,
que la firma, revela la espantosa resolución de inmolar la autonomía del
Ecuador solicitando su anexión al Imperio francés bajo condiciones semejantes
a las que existen entre Canadá y Gran Bretaña.

El Gobierno de V.E. que por su celo constante por la inviolabilidad de las


libertades americanas se presenta como el porta-estandarte de la democracia
continental... tomará las precauciones del caso para preservar a mi patria de
caer en el abismo donde la conducen sus actuales mandatarios.

Pág. 160. Repuesta del Sr. Melgar, Ministro de Relaciones Exteriores del
Perú. Tuve el honor de poner a la vista de S.E. el Presidente (Castilla)... los
motivos que os inducen para hacer al Gobierno del Perú depositario de las
tres cartas originales del Presidente actual del Ecuador, Dr. Gabriel García
Moreno, que pondrán en evidencia en todo tiempo el plan traidor de unir esta
República a una monarquía europea.
114 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Se debe observar que las cartas fueron robadas de la Legación francesa en


Quito, en complicidad con Castilla, y que García Moreno creía hallarse en
este dilema, el Ecuador se unía a Francia o desaparecía, aun en este año de
1861, conquistado por el Perú que buscaba para la guerra cualquier pretexto.
No se unió a Francia, pero obtuvo de este Gobierno, poderoso en aquel
entonces, que Castilla desistiese de sus propósitos de anexarse el Oriente y
Guayaquil. Una incursión en el terreno secreto de la diplomacia revelaría
cosas interesantes en el delicado asunto de las relaciones ecuatoriano -
peruanas de esta época.

En 24 de agosto de 1861 Melgar como Ministro de RR.EE. del Perú protesta


ante el Gobierno ecuatoriano por no dar validez al tratado de Mapasingue de
25 de enero de 1860, por incorporar en la Ley de División Territorial al Oriente
que el Perú reclama por suyo, y pide explicaciones por haber escrito las cartas
a Trinité que comprometen la soberanía de América.

Y en otra comunicación de la misma fecha que dirige al Gobierno de Santo


Domingo por su anexión a España y que manda circular a los gobernantes de
América se refiere en forma despectiva a García Moreno como traidor a los
principios republicanos.

Rafael Carvajal como Ministro de Relaciones Exteriores del Ecuador


contesta, que el mismo Congreso del Perú no ha reconocido la validez del
tratado de 25 de enero de 1860, que las tierra del Oriente incorporadas en la
Ley de División Territorial son ecuatorianas y siempre lo han sido, como lo
reconoce el tratado de 1829, y que la Cédula de 1802 no es nueva, que ya se la
conoció antes pero que no fue tomada en cuenta en arreglos limítrofes porque
sólo tenía valor eclesiástico y militar, como lo reconoció el mismo primer
Congreso del Perú que no dio representación a la provincia de Jaén por no
reputarla peruana. En lo que mira a la acusación de las cartas a Trinité,
Rafael Carvajal contestó así el 5 de octubre de 1861:

Ecuador, tomo V. Pág. 161. Dirección Política No. 6.

"He recibido la nota de 24 de agosto en que el Exmo. Sr, José Fabio Melgar
reclama explicaciones sobre la incorporación del Ecuador a una potencia
europea revelada en unas cartas particulares dirigidas al Sr. Trinité en 1859...
Fácil me sería responder ... si en esto no se envolviera el reconocimiento del
derecho que se arroga el Gobierno peruano para erigirse a un tiempo en
acusador y juez de un Gobierno independiente, representante legítimo de un
pueblo soberano y libre... Desde el momento que el Gobierno (del señor García
Moreno) se sometiese a dar las explicaciones que se le piden en términos
humillantes descendería al rango de la provincia peruana.

(Al reverso). La Constitución y leyes que se ha dado el pueblo ecuatoriano,


y mi Gobierno observa con fiel puntualidad, determinan la conducta que debe
seguir y la responsabilidad a que se halla sujeto ante sus jueces competentes.
Con arreglo a esta Constitución y leyes la Convención Nacional de este año
EL PRESIDENTE Y LA CONVENCION NACIONAL DE 1861 115

tenía derecho a exigir la responsabilidad del Gobierno, y sin embargo de que


se le dirigió la misma acusación fundada en las mismas cartas a que se refiere
el Excmo. Sr. Melgar no se hizo caso de ellas, poniendo con esto en evidencia
la fe que merecen la acusación y los acusadores..."

En lo que se relaciona a la circular al Gobierno de Santo Domingo, Carvajal


en la misma fecha dijo: "... Las reglas de moderación, derecho y respeto
recíproco que en las relaciones diplomáticas observan los Gobiernos civilizados
han sido violadas: y como para protestar por la anexión de Santo Domingo no
había necesidad de herir a un Gobierno que ninguna parte ha tenido (en esa
anexión) es de creerse que la protesta de que se trata no ha tenido otro objeto
que intercalar esas expresiones de una calculada y gratuita provocación. En
consecuencia el infrascrito ha recibido orden expresa de su Gobierno para
pedir explicaciones al Excmo. Sr. Melgar.

Pág. 167. Fabre a Thouvenel. Quito, 19 de octubre de 1861. La dirección


política ha debido recibir un despacho mío de 30 de julio cifrado y concebido
así: No tengo más tiempo que para deciros (porque el correo expreso se va),
que el Presidente de la República acaba de volverme a renovar su deseo de
unir al Ecuador al Imperio francés en la forma como Canadá está unida con
Inglaterra... ¡Cuánto siento señor Ministro no haber tenido la colaboración
que había solicitado (en responderme sin demora)! Si yo hubiese enviado (ya
• la respuesta) la cuestión habría terminado y no habría permitido que se formen
en su torno planes en el vacío y las desconfianzas, celos y pasiones que se
• extienden en este momento por toda América, en la cual Francia juega, aunque
lo ignore, casi el principal rol.

Adelantándonos al tiempo diremos que el 29 de febrero de 1862 el Ministro


francés Thouvenel escribía a Fabre indicándole que el Gobierno galo
desaprobaba el protectorado, y decía: "No conviene a nuestra dignidad
provocar una demostración en la cual, según nuestros puntos de vista, el
resultado es incierto". (147)

Por supuesto que García Moreno se sintió desilusionado cuando fue


informado de la resolución del Gobierno francés, y por ello expresó: "Había
esperado realizar el sueño de Bolívar, especialmente en cuanto a que las
repúblicas nacidas en España fueran regidas por un poder moral fuerte como
el de Francia. Mi sueño más preciado se ha desvanecido". (148) Terminaba
con esto las intenciones de colocar a nuestra Patria bajo el protectorado de
una potencia de la época, como lo•era Francia, lo que de producirse habría
cambiado los destinos de nuestra nación, que quizás hubiera caído en un
derrotero incierto.
e
CAPITULO IV

Acontecimientos
portuarios
y marítimos
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 119


ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS
Y MARITIMOS

egún algunos historiadores el Presidente García Moreno fue responsable


de haber conducido al país a la bancarrota por medio de empréstitos
• para gastos militares. Precisamente el 5 de octubre de 1861 se ufanaba
de contar con medio millón de pesos prestados por el Sr. Luzarraga a un
interés moderado. (149) Dinero que debía utilizarse para la defensa, pues
• está seguro que la insolencia de Castilla se funda en la revolución que los
urbinistas y franquistas le tienen ofrecida hacer en Ecuador, y que en Callao
aguardaban de vapor en vapor, noticias de aquel suceso, y dice: "Pero aquí
estoy yo, y los agentes de Franco son demasiado cobardes, y desacreditados
para atreverse a comprometer sus vidas". (150)

El Presidente tiene que estar prevenido, y la única forma es, según sus
palabras, armándose. Precisamente el 4 de octubre recibió un numeroso
armamento, y se alegra sobremanera, y con tal regocijo, que en una y otra
carta les dice a sus amigos: "Tenemos armas, 500.000 pesos, un General
célebre y valiente (Flores) y un pueblo belicoso. Con semejantes elementos y
la protección segura del cielo, la guerra será para nosotros una serie de
victorias". (151)

Según García Moreno el armamento recibido permite al Gobierno equipar


a 18.000 soldados, de lo cual resulta, de ser cierto lo expresado, el ejército
más poderoso que hasta esa fecha haya tenido nuestra Patria, ello significaba
un exceso de gastos y un endeudamiento que debilitaba la economía nacional.
Decide enviar 7.000 fusiles para el interior, de los cuales 4.000 van a bordo
del vapor fluvial "Bolívar" y el resto en el vapor "Washington". Anuncia
• también el envío de dinero, pues lo tiene por el préstamo recibido de Luzarraga,
(152)
120 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

El presidente sueña en la defensa, y es tal su entusiasmo que él mismo


decide fabricar "baterías submarinas", para lo cual pide a su esposa le envíe
pilas de Bunsen. "Haré dos ensayos -dice- saldrán buenos, pondré una docena
de máquinas de destrucción dentro del río, y que vengan los malos en mayor
número que los buenos y los moleremos a palos y los asaremos al fuego".
(153)

El 19 de octubre de 1861 escribe a su esposa Rosita Ascásubi para indicarle


que ha ido a la fundición a preparar su invento, a pesar de un sol horroroso.
"He regresado contentísimo -expresa- loco de alegría; el ensayo en tierra ha
sido felicísimo y no dudo que saldrá perfectamente el que haré ésta noche a
las 11 ó 12 en el río. En tal caso adiós escuadra peruana. En la semana
entrante tendría el río este nuevo y terrible medio de destrucción. Los estudios
que hice en París han servido ya de algo". (154)

Lo importante de lo dicho es resaltar la preocupación del Presidente por


un posible ataque a la República, sea este de las fuerzas peruanas, o de los
urbinistas apoyados por aquella nación. Aunque el 16 de noviembre de 1861
dice que "la situación interior del Perú no permitirá a Castilla mover ni un
solo soldado y la fragata "Amazonas", en la que consiste la fuerza principal
de la Marina del Perú, no está en estado de servicio. Franco y Urbina -
manifiesta- enteramente desprestigiados no podrán llevar a cabo la cruzada
que intentan ayudados e instigados por Castilla, y no pudiendo hacer otra
especie de guerra contentarse al menos con esa, la que no puede causarnos
cuidado alguno". (155)

Seguro está de que Urbina fomentado por Castilla trata de organizar una
expedición, pero las noticias que le llegan del Perú son muy satisfactorias y
que por lo pronto nada ocurrirá, y si así fuera dice que "ningún cuidado nos
puede causar aún en caso que se verifique", refiriéndose a que sus soldados
están bien armados. (156)

CRUCERO A LA COSTA

El 19 de diciembre García Moreno se dirige al Gobernador de Manabí


General Vicente González, para darle instrucciones, y entre otras cosas
dispone: "La "Salado" marcha a recorrer esa costa y, como Ud. se supondrá
por la comunicación oficial, se ha dispuesto que los sueldos sean pagados por
esa tesorería. En cuanto a las raciones me parece bien que las compras se
hagan en este lugar cada vez que venga el buque, pues de este modo serán
las provisiones mas abundantes y baratas". (157)

En efecto al siguiente día, el Comandante de la goleta de guerra "Salado"


recibió las instrucciones por escrito para el zarpe y operación, que por un
tiempo todavía no indicado tenía que cumplir con su buque y tripulación a lo
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 121

largo de la costa ecuatoriana, incluyéndose consignas especiales para tal fin.


El documento versa como sigue:

"Sr. Comandante de la goleta de guerra "Salado".- diciembre 20 de 1861.

"Estando el buque de su mando perfectamente aperado, y por consiguiente


listo para dar a la vela, lo practicará Ud. sin falta alguna en la próxima
vaciante de esta noche, observando las siguientes instrucciones:

"la. Zarpando de este fondeadero (Guayaquil) se dirigirá en derechura a


Santa Elena, donde con la brevedad posible recibirá a su bordo la cantidad
de sal que allí se le embarque para conducir a Esmeraldas.

"2a. De Santa Elena seguirá sin pérdida de tiempo al puerto de Manta


donde desembarcará al Sr. Coronel Talbot y demás personas que van con
destino a ese punto; debiéndose poner en comunicación con las autoridades
locales por lo que pueda convenir al servicio, y ofrecerles su cooperación con
el buque de su mando en caso necesario.

"3a. De Manta continuará inmediatamente su marcha hasta Esmeraldas


en donde desembarcará la sal, los fusiles y pertrechos de guerra que lleva
con este objeto; lo mismo que al oficial y catorce individuos de tropa, exigiendo
los recibos correspondientes; y también se entenderá con las autoridades de
aquella provincia con el mismo objeto que queda prevenido en el artículo
anterior.

"4a. De Esmeraldas regresará a establecer su crucero sobre toda la costa


registrando prolijamente las caletas y ensenadas para lo cual se sujetará a lo
que previene el reglamento de guarda costas de 15 de noviembre de 1836.

"5a. Durante su crucero procurará estar en el punto de Manta cada quince


días para de allí remitir los partes de las novedades que ocurran, el extracto
del diario, y recibir las nuevas órdenes que se le imparten por esta
Comandancia General.

"6a. Si por algún acontecimiento inesperado se encontrase con alguna


embarcación enemiga, o una cruzada que intentase invadir nuestro territorio,
o cometer actos de piratería, les combatirá Ud. si cree que su fuerza es
suficiente para destruirles o capturarles; mas si esto no fuere posible,
empeñando toda su inteligencia y arrojo como militar de honor, procurará
salvar el bajel y la gente siempre con dignidad; observando lo que para estos
casos previenen las ordenanzas generales en la Armada.

"7a. Como según disposición del Gobierno todos los gastos que cause el
buque de su mando durante su estación en la costa deben ser cubiertos por la
Tesorería de Manabí, inclusive los sueldos de la guarnición, Ud. se entenderá
122 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

oportunamente con aquel tesorero quien tiene las órdenes respectivas sobre
el particular; debiendo Ud. remitir siempre los documentos correspondientes
a la Mayoría General de Marina.

"8a. En fin esta Comandancia General así como el gobierno esperan de la


actividad y conocimientos de Ud. el más puntual desempeño en la presente
comisión, y si durante su viaje le ocurriesen acontecimientos que no estén
previstos en estas instrucciones, los resolverá Ud. con la circunspección y
tino que cumple un Jefe del honor y de la pericia de Ud." (158)

En cumplimiento a esas instrucciones el Capitán de Corbeta Diego Eugenio


Matos zarpó de Guayaquil con la goleta de guerra "Salado" el día 20 de
diciembre, y según el extracto del diario de navegación del buque, la
navegación se llevó a efecto con las siguientes incidencias, según las propias
palabras de su Comandante.

"El 20 a las diez de la noche estando listos nos hicimos a la vela con viento
del S.O. flojo, y conduciendo a nuestro bordo 14 individuos de tropa, un oficial,
pertrechos y armamento para Esmeraldas.

Un vaporcito navegando por uno de nuestros esteros. ("Vistas de Guayaquil" Biblioteca Municipal de Guayaquil).
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 123

"El 21 nos dirigíamos para Puná y fondeamos a las ocho de la noche. El 22


se refrescaron los víveres y seguimos nuestro viaje para afuera. El 23
amanecimos fondeados en Punta Arena; y a pocas horas levamos por principiar
la vaciante, dirigiéndonos para el Muerto, a las 8 de la noche lo montamos.

"El 26 y 27 cargamos de sales para conducir a Esmeraldas, al amanecer


en este último día nos hicimos a la vela dirigiéndonos para Manta, y el 29
dimos fondo en dicho puerto para desembarcar allí al Sr. Coronel Guillermo.
Talbot y Capitán Ignacio Aguilar, y el mismo día nos hicimos a la vela
dirigiéndonos a Esmeraldas donde dimos fondo en Coquito el 31. El lo. nos
enmendamos a la Poza, por medio de un práctico que vino de tierra, en este
día se desembarcaron la tropa de transporte, pertrechos y armamento que
conducíamos. El día 2 se procedió a la descarga de sal. El 3 se continuaba, el
4 se concluyó, y el 5 de tarde nos hicimos a la vela dirigiéndose a Súa para
refrescar nuestros víveres. El 6 llegamos a ésta.

"El 8 después de embarcar dos reses y otras especies nos hicimos a la vela
dirigiéndonos para Manta, y registrando al mismo tiempo todos lo puertos y
caletas de la costa, con muy poca vela. El 11 reconocimos al pailebot "Liebre"
al frente de los Cojimíes, y el 13 fondeamos en Manta, desde donde se
despacharon comunicaciones a la Mayoría General de Marina, y las listas de
revista al Sr. Tesorero de la Provincia de Manabí.

"El 15 nos hicimos a la vela con designio de registrar todos los puertos y
caletas del sur de esta provincia y verificándolo hasta Salango regresamos
para Manta donde fondeamos el 18. El 19 visitó el buque el Sr. General
Gobernador de esta provincia (General Vicente González), haciéndosele los
acatamientos de ordenanza. El 20 por expresa orden de dicho señor
Gobernador, y aún cuando con oposición a mis instrucciones me hice a la vela
para Santa Elena para embarcar allí un cargamento de sal para dicha
provincia porque era mucha la escasez que se tenía.

"El 22 fondeamos en las Salinas y por no haber sal en ésta no principiamos


la carga hasta el 25. El 26 concluimos. El 27 muy al alba nos hicimos a la vela
de regreso para Manta en donde llegamos el 28. El 29 se procedió a la descarga
y el 30 concluyó.

"El 31 recibí por orden oficial del Sr. General Gobernador de la Provincia
orden para recibir abordo, como recibimos, 19 individuos reclutas y dos
oficiales para conducirlos a esta plaza. el lo. de febrero nos hicimos a ta vela
dirigiéndonos para ésta, y registrando a la vez toda la costa. El 3 llegamos a
Salango para embarcar reses y plátanos. El 4 a las 8 del día salimos, y el 5 a
la misma hora estábamos E.O. con el Muerto, y a las 8 de la noche fondeamos
en Puná para asear el buque y pintarlo. (159)
124 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

OPERACION RESCATE

La goleta "Salado" permaneció dos días en Puná, pues el día 7 de febrero


de 1862 el Capitán de Corbeta Diego Matos ordenó levar anclas procediendo
a ingresar por el río hacia Guayaquil. Lo hicieron con el viento flojo y los
botes del buque al remolque. El 8 por la mañana se encontraron con el vapor
"Bolívar" a la altura de Punta de Piedra, dicho bajel estaba dirigido por el
Capitán N. Lee de origen norteamericano. Al ser interrogados por Matos
sobre su presencia y actividad en el área, se le informó que buscaban el cadáver
ahogado del señor Taylor C. Smyrk, por lo que`el comandante de la "Salado"
decidió cooperar en dicha búsqueda.

El buque de guerra se dedicó a la tarea indicada con todo lo que estaba a


su alcance, el personal totalmente alerta, en especial los vigías, es más se
disparó 7 cañonazos contra el agua, en distintos puntos, para de ese modo
conseguir que surgiere el cadáver a flor de agua, lo que no se logró. Debido a
que la "Salado" era un velero y que su arribo dependía de la dirección de la
corriente en especial, abandonó la operación y continuó navegando hasta La
Josefina, en donde dio fondo a las 12 del día debido a que comenzó la vaciante.

El Comandante terminó el informe de toda la operación en los siguientes


términos: "A las ocho que cambió la marea seguimos para adentro con viento
flojo y a las 10 dimos fondo frente a la ciudad, entrando con la tripulación en
buen estado de salubridad y el buque listo para emprender nuevo viaje, sin
novedad". (160)

Taylor Smyrk había caído a las aguas del río Guayas aproximadamente a
la altura de Monte Alto. Su cadáver fue hallado a los dos días por el capitán
Lee en la Boca de Taura. Una vez izado a la cubierta del vapor "Bolívar" fue
conducido a Guayaquil. (161)

Don Modesto Chávez Franco narra el suceso de la siguiente manera: "Allá


por los años 40 al 60 vivió un joven inglés que llegó a hacerse muy querido en
Guayaquil por su carácter alegre, amistoso, desprendido y su espíritu
emprendedor y servicial para la ciudad. Llamábase Taylor C. Smyrk. El fundó
la primera compañía de vapores fluviales. Fue bombero benemérito; llegó a
Juez de incendios.

"Viniendo de Machala el año 62, cayó o se arrojó (no se supo) al agua y


pereció ahogado. (tenía 34 años).

"Precisamente cuando a bordo se oyó la voz de: ¡"Hombre al agua"! todos


corrieron en busca de Smyrk para pedirle su auxilio, pues conocían su arrojo,
su altruismo y lo buen nadador que era. Y cuál sería el terror al saber que era
él, precisamente, el caído?
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 125

"Sus funerales fueron de lo más solemnes, concurridos y espontáneos, con


asistencia de todas las autoridades civiles y militares y más de mil
particulares, lo que en ese entonces era un cortejo enorme; y además todas
las sociedades y centros existentes, clubes, escuelas y todo el cuerpo de
Bomberos, que lo llevó en uno de sus carros. Todo el comercio cerró a la hora
del entierro. Toda nave surta en el río puso su bandera a media asta". (162)

Para culminar dicho episodio vale decir que a uno de los vapores fluviales
que navegaba por el río Guayas y afluentes se lo denominó vapor "Smyrk" en
homenaje a dicho joven. Bajel que años mas tarde participaría en algunos
combates navales, armado en guerra, entre ellos el ocurrido en Jambelí el 26
de junio de 1865.

En lo que respecta a la navegación recién cumplida por la goleta "Salado",


ante la consulta efectuada por el Comandante General de Marina sobre el
tiempo que debe durar la comisión de dicho bajel, el propio Presidente de la
República ordenó al Ministro Daniel Salvador contestar "que siendo destinado
este buque no sólo para velar el contrabando, más también para velar sobre
la seguridad de la República; no puede volver a ese puerto (Guayaquil) sino
cuando tenga necesidad de repararse, de refrescar víveres, o de comunicar
alguna cosa importante". (163)

Siendo éste el único buque disponible, la necesidad del Gobierno de hacer


vigilar las costas provocaba que las órdenes de zarpe del bajel sean muy
continuas y que los períodos de navegación sean largos. Precisamente poco
tiempo permanecería la "Salado" en el Puerto de Guayaquil, pues días después
se la destinaría para una nueva comisión.

* * *

ACONTECIMIENTOS Y DISPOSICIONES NAVALES

El 21 de enero de 1862, S.E. el Presidente de la República mediante


resolución ordenó .5(1,-ío-F"171,1*-1,_,/~rwi[ (11 41 a, ordenando que todos los
enseres que él contiene se depositen en el parque de la Plaza de Guayaquil,
formando un solo cuerpo. (164)

En cumplimiento a dicha resolución el Comandante General del Distrito


de Guayaquil y de Marina dispuso el traslado de los enseres del Arsenal de
Marina al parque de artillería de la Plaza de Guayaquil, pero algunos artículos
quedaron depositados en el almacén de Marina a cargo del Capitán del Puerto.
(165)
126 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Por otro lado informó al Presidente de las intenciones de vender la máquina


que era del antiguo vapor de guerra "Guayas", por lo que el Dr. García Moreno
ordenó al Ministro de Hacienda que dé las disposiciones que convengan para
que proceda al remate de dicha máquina, observando todos los requisitos
legales. Así lo comunica el Ministro de Guerra y Marina, Coronel Daniel
Salvador, con fecha 15 de febrero de 1862. (166) El 28 del mismo mes el
Gobernador de la Provincia del Guayas, Capitán de Navío José Antonio
Gómez, pidió que para tal fin aquella máquina sea examinada y avaluada
por los señores Mins y Piocok.

El 19 de febrero el mismo Ministro ordena al Comandante General de


Marina dé el curso debido a las nuevas letras de retiro conferidas al Capitán
de Fragata Lucas Rojas. (167)

El 24 de febrero el Coronel Daniel Salvador comunica que ha sido aprobada


por el Supremo Gobierno la disposición de S.E, el General en Jefe, relativa a
haber llamado al servicio activo y destinado a la goleta de guerra "Salado" al
Alférez de Fragata José Antonio Gómez, cuyo particular se comunicó al
Ministro de Hacienda. (168) Sobre este mismo joven oficial se envía tiempo
después el siguiente oficio, con motivo de su ascenso:

"No. 19.- República del Ecuador.- Ministerio de Estado en el Despacho de


Guerra y Marina.- Quito a 7 de abril de 1863, Sección de Marina.- Al Sr.
Comandante General del Distrito de Guayaquil y de Marina.

"Sírvase US. dar el curso correspondiente al adjunto despacho de Alférez


de Navío conferido a favor del de igual clase José Antonio Gómez.- Dios guarde
a US.- Por ausencia del Ministro de Guerra, el del Interior.- (f) R. Carvajal.
(169)

Retornamos a la última navegación de la "Salado" para transcribir un


acontecimiento narrado por el Capitán de Corbeta Diego Matos, el 25 de
enero de 1862, que con oficio se dirige al Capitán de Navío Agustín Oramas
en los siguientes términos:

"El 21 llegué a ésta (Salinas) encontrando fondeado al pailebot nacional


"El Tiempo" que ya hacía cuatro días que estaba aguardando por sal, porque
no la había, para el efecto ya se habían regresado dos chatas vacías para
Guayaquil por no haberla; advertiré a US. ante todo que a mi llegada a este
punto mandé llamar a mi bordo al Capitán del pailebot para reconocerle sus
documentos, y lo hizo con bastante resistencia, oponiéndose a tal formalidad.

"Ayer después de algunos inconvenientes se acarrearon de las pozas a la


playa unas diez balsadas, y dispuse fuese para otros buques, puesto que la
escasez en ambas provincias era grande, a tal disposición se opuso el Capitán
del pailebot, y quiso hacerse a la vela para Guayaquil, y el dependiente de la
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 127

Aduana vino y me dio parte de esa resolución: lo mandé llamar al mencionado


Capitán y desobedeció, entonces mandé al oficial de la tropa a traerlo, y con
bastante resistencia vino, presentándoseme con altivez y faltamiento, e
insistiendo, en hacerse a la vela, puesto que voluntariamente había sufrido
la estadía de ocho días sin interés; traté de calmarlo y reducirlo ofreciéndole
que hoy estaría cargado como en efecto lo está ahora que son las cinco de la
tarde para que siga su viaje esta noche, pero siempre temerario dicho Capitán
en hacerse a la vela ayer, ordené que pasase éste abordo de su buque preso,
con la custodia de dos soldados, un cabo y un guardia marina, a fin de impedir
tal resolución y que aguardase hasta hoy por la carga como en efecto ya la
tiene abordo.

"Tal acontecimiento merece que US. lo transmita al conocimiento del Sr.


Capitán del Puerto, para que sufra el castigo que merece, pues yo por la
atención de la escasez de sal en Guayaquil no procedí de una manera más
recta con este individuo".(170)

El 26 de febrero de 1862, el Coronel Daniel Salvador, Ministro de Guerra


y Marina, remitió a la Comandancia General de Marina la licencia absoluta
del servicio, conferida al Alférez de Fragata Joaquín San Martín, a fin de que
se sirva exigir los despachos para ser cancelados en dicho Ministerio. (171)

En lo que respecta a dicho Alférez es muy probable que sea hijo del General
a José de San Martín, el Protector del Sur, y de la señora Carmen Mirón y
Alayón. Así lo menciona el Dr. Fernando Jurado Noboa en su libro "La Noche
de los Libertadores", quien indica que ambos tuvieron sus encuentros en los
días en que se entrevistó con Bolívar en Guayaquil en julio de 1822. Al respecto
dice textualmente:

"Joaquín Miguel de San Martín y Mirón nació a fines de abril de 1823 y


fue bautizado en la iglesia de San Agustín, calle de San Alejo con calle de La
Cárcel, en Guayaquil el 13 de mayo. Su partida fue inscrita con sigilo en el
archivo de la logia en Lima, pues San Martín pidió a sus "hermanos" no la
dejaran ver sino a sus descendientes". (172)

Por su lado el 9 de abril del mismo año S.E. el Presidente de la República


tuvo a bien ascender a Teniente de Fragata al Alférez de Navío Aurelio Bailén,
y a Alférez de Navío al de Fragata Enrique María Vera, y dichos despachos
fueron enviados al Comandante General del Distrito de Guayaquil y de Marina
para los fines legales. (173)
128 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

El Puerto de Guayaquil en 1862. Se observa el muelle, buques, embarcaciones menores y la Capitanía del Puerto, que le dan
ese tinte marinero de siempre. Fondeada, una goleta, en el que se observa el gallardete comando.

CONTINUAS OPERACIONES DE LA GOLETA "SALADO"

Habían pasado solo pocos días del arribo de la goleta de guerra "Salado" a
su puerto base, Guayaquil, y nuevamente se disponía a zarpar en
cumplimiento a las instrucciones dadas por la superioridad. El buque bajo el
mando del mismo Capitán de Corbeta Diego Eugenio Matos se hizo a la vela
el 23 de febrero de 1862, estando embarcado como primer Teniente el de
Fragata Francisco Javier Castillo, quien se encargó de elaborar el extracto
del diario de la navegación cumplida, el que a continuación transcribimos:

"El día 23 a las dos de la tarde vino el práctico abordo y nos hicimos a la
vela con viento flojo del S.O. y fondeamos frente a Matorrillos por empezar la
vaciante a las ocho. Con la próxima marea seguimos para Puná.

"El 24 a las tres de la tarde fondeamos en ésta. El 25 permanecimos por


embarcar una res. El 26 a las siete de la noche seguimos para afuera. El 27 a
las tres de la tarde estábamos norte sur con la Isla de Santa Clara y
dirigiéndonos para Santa Elena. El 28 al medio día en calma corrientes fuertes
al N.O.

"El lo. de febrero no pudiendo atracar en Santa Elena por las calmas y
corrientes nos dirigimos a Salango fondeando en la ensenada norte. El 2 (en
este día) se embarcaron dos reses y al amanecer el 3 salimos para Manta con
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 129

e viento flojo. El 4 se reconoció la Isla de la Plata y Puerto del Callo sin novedad.

"El 5 fondeamos en Manta a las seis de la tarde dirigiéndose las


correspondientes comunicaciones al Sr. General Gobernador de la Provincia.
El 6 fondeamos. El 7 pasó en comisión al pueblo el primer Teniente para
recibir los sueldos para febrero y las raciones por dos meses más. En la noche
regresó éste con lo que se deja dicho. El 8 fondeamos. El 9 nos hicimos a la
vela a las siete de la noche con viento flojo del S.O.

"El 10 se registró la Isla de la Plata por dos embarcaciones pescadoras que


habían en ella, sin novedad. El 11 frente a Salango. El 13 fondeamos en las
Salinas de Santa Elena, y se despachó una comunicación de la Comandancia
General de Marina para recibir el relevo del Arsenal. El 15 levamos con viento
del sur, a las siete de la noche estábamos a la vela dirigiéndonos para este
puerto. El 16 a las diez de la noche estábamos E.O. con la Isla del muerto,
siguiendo para adentro. El 17 a las seis de la tarde fondeamos en Puná. El
mismo día a las 2 de la mañana levamos después de tomado el práctico y el
18 a las nueve de la mañana fondeamos en Sono por efecto de la vaciante.

"A las cuatro nos hicimos a la vela con viento flojo del norte, y a las 8 de la
noche dimos fondo frente a esta ciudad sin novedad alguna. La tripulación y
guarnición en buen estado de salud. El buque listo para emprender nuevo
viaje con ración para sesenta y ocho días.

"El buque que hace un año que lo mando experimenta que en la mar, con
viento fuerte y en todo su mejor andar de bolina corre nueve millas y hace
solamente seis pulgadas de agua en las 24 horas, creyendo que esto sea efecto
de las muchas goteras en la parte alta del buque y su cubierta por falta de los
toldos; pero en el puerto se le da a la bomba cada tres días y se le sacan dos
pulgadas de agua.

"Pasando por el dolor a mi entrada de avisar a la Mayoría General de


Marina, que el soldado Manuel Ibáñez perteneciente a la dotación del buque
de mi mando, a mi salida fue atacado por una fuerte disentería que el cinco
del presente que llegamos a Manta, pocas horas antes murió, dándosele
sepultura en el panteón de Manta arreglado a ordenanza. Este era soldado
del Batallón Quito, de la compañía de carabineros del pueblo de San Antonio
del Interior, con lo cual doy por cumplida mi comisión.- Guayaquil, marzo 19
de 1862.- Diego E. Matos". (174)

La goleta de guerra "Salado" tan pronto estuvo lista zarpó nuevamente


del puerto de Guayaquil, haciéndolo el 27 de marzo, con la misión de establecer
un crucero de vigilancia en la costa hasta la provincia norteña de Esmeraldas.
(175) Dos días después el buque arribó a la rada de la isla Santa Clara en
donde se desembarcaron pasajeros y equipos con la esperanza de efectuar
trabajos en dicho lugar. (176)
130 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

A las 6 de tarde del 6 de abril la "Salado" fondeó en Manta, pero antes


había hecho escala en la ensenada norte de Salango, habiendo el comandante
Matos informado sobre el reconocimiento efectuado a la goleta peruana
"Adelaida" y dice al Sr. Mayor General de Marina: "Que hacía veinte y cuatro
horas que se encontraba en las inmediaciones de la costa de Jipijapa y
autorizada para la pesca de tiburón de hueso, despachada por Túmbez, y
perteneciente al Sr. Somonte. Sus documentos lo acreditan, porque desde el
viaje pasado la reconocí afuera del fondeadero de Santa Elena, pero cabe a
mi deber indicar a US. que este buque no obra con honradez en su propósito."
(177)

En lo posterior realizó exploraciones a los puertos de Salango y Machalilla


y sus islotes adyacentes, no habiendo encontrado indicios de ilegalidad. El 19
de abril de 1862 dice el Capitán de Corbeta Diego Eugenio Matos que "debiendo
seguir el curso de mis instrucciones me preparaba al día siguiente para seguir
mi viaje a Esmeraldas cuando improvisadamente fui atacado de una grave
enfermedad, de la que me hallo un poco restablecido, y como tenía que entregar
a las autoridades de aquella provincia unos pertrechos de guerra y
comunicaciones, y creyéndolas de urgente necesidad tuve por conveniente
mandarlas en la goleta nacional "Teresita" a cargo de su Capitán José Roca
bajo correspondiente recibo".

En esta navegación tuvieron que lamentar otro fallecimiento, pues el


marinero Emilio Pérez murió en la tarde del 19 de abril de 1862 por obstrucción
en los intestinos. Dice el Capitán Matos que esto ocurrió a pesar de los
esmerados cuidados que le practicaron los facultativos y mujeres a quienes
lo había encargado en Manta, no omitiéndose los gastos ni diligencias que
estuvieron a su alcance. (178)

El 22 de abril el buque continuó sus recorridos de patrullaje hacia los


puertos del norte, a pesar de que el Comandante del bajel seguía mal con su
salud, navegando hasta Esmeraldas, en donde entregó al Gobernador de la
Provincia pólvora y pertrechos, luego de lo cual volvió a zarpar y después de
dejar sin novedad toda la costa norte arribó a Manta el 1 de mayo.

La goleta de guerra "Salado" terminó su comisión y arribó a Guayaquil a


las ocho de la noche del 14 de mayo de 1862, no sin antes tocar en Santa
Elena para recibir allí a los individuos relevantes del arsenal.

Pero el buque presentaba novedades, al llegar con un obenque menos del


palo trinquete, al respecto dice su Comandante que "reventó por la grandísima
falta de no tener la jarcia con alquitrán hace un año, pues la calidad del cabo
y la edad de servicio no es para tal falta: por consiguiente suplico a US. ejerza
su influencia para que del pedido que tengo hecho hace cinco meses se me
provea el alquitrán".
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 131

El Comandante Matos considera que dicha avería no impedirá que el buque


emprenda nuevo viaje, si así se lo ordenan, porque es su intención remediarla
lo mejor que se pueda. Termina su informe recordando las dolorosas
circunstancias de haber fallecido dos subordinados en los dos últimos viajes,
y dice, "debido únicamente a los ningunos recursos medicinales". (180)

No se consideraba ninguna avería como suficiente para que la goleta de


guerra "Salado" tenga un descanso más prolongado en el puerto base de
Guayaquil, debido a que la superioridad consideraba la necesidad de patrullar
las costas a más de otras comisiones, como el transporte de personal y
armamento, juzgadas como prioritarias. Es así que en la noche del 11 de
junio dicho buque zarpó con dirección a establecer un crucero sobre la costa
de Manabí por el tiempo de 60 días. (181) Pero al ser levada el ancla de
babor, ésta arboló sin el cepo por lo que quedó inútil.

Ante estas circunstancias el Comandante Matos se dirige al Mayor General


de Marina en los siguientes términos: "Al encontrarme con una sola (ancla)
para atender a la seguridad del buque me veo obligado a remitir a US. el
gálibo de dicho cepo con sus correspondientes dimensiones, a fin de que en la
fundición de Guayaquil lo hagan, y esté listo para mi regreso, porque no
siendo así no podría mantenerme anclado en esa por algunos días con solo
una ancla. Para el efecto este mismo aviso haré al Sr. Gobernador de la
Provincia de Manabí para que no trepide y libre volando el importe de dicho
cepo. Yo por mi parte suplico a US. acelere esta obra puesto que es de gran
necesidad". (182)

El 16 de junio arribó el buque al puerto de Manta y dos días después zarpó


con rumbo a Esmeraldas, no presentándose mayores novedades hasta el
retorno a Guayaquil, que se verificó el 12 de julio, sin cumplirse los 60 días
de navegación que se indicaban en las instrucciones entregadas al Capitán
de Corbeta Diego Eugenio Matos. (183)

LA CAPITANIA DEL PUERTO DE GUAYAQUIL

Las instalaciones de la Capitanía del puerto de Guayaquil


en 18621en el malecón de la ciudad a la altura de la actualcaleClemente
Ballén, a orillas del Río Guayas. Dichas oficinas habían sido inauguradas el
año de 1857, y ya en el año de 1864 el dibujante- fotógrafo Rafael Castro
integrante de la Comisión Científica Española del Pacífico (1862-66) que
recorrió todo el litoral americano e ingresó, mediante viajes de diferente
duración, en la mayor parte de sus repúblicas, a su arribo a Guayaquil
fotografió dicha edificación, por lo que actualmente tenemos aquella constancia
fotográfica (184)
132 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Como habíamos dicho, el Presidente García Moreno había dispuesto en


enero de 1861 el pasar a la Capitanía del Puerto al Gobernador del Guayas,
Capitán de Navío José Antonio Gómez, y que hasta que eso suceda, dicho
destino debería seguir vacante.

Pero es el caso que entre tanto el 19 de septiembre de 1861 nombró de


Capitán del Puerto de Guayaquil a un oficial subalterno, el Alférez de Navío
Aurelio Ballén, a pesar de que el reglamento no lo permitía.

El siguiente oficio da cuenta de lo dicho: "República del Ecuador .-


septiembre 20 de 1861.- Al Sr. General Comandante General de Marina.

"He tenido la complacencia de recibir la apreciable de US. fecha de ayer


en la que se sirve comunicarme, que he sido llamado al servicio activo de las
armas y ascendido a la clase de Alférez de Navío nombrándome Capitán del
Puerto según la nota que se ha servido US. transcribirme del H.S.M.S. de E.
en los despachos de Guerra y Marina.

"Concluyo dando a US. las más expresivas gracias, suplicándole al mismo


tiempo se sirva hacerme venir el correspondiente despacho.- Dios guarde a
US.- Aurelio Bailén".

Pero lo cierto es que Ballén se había venido desempeñando como Capitán


del Puerto en forma interina meses antes de su nombramiento, tal es que el
5 de julio informa de un desacuerdo con la Policía al Sr. General, Comandante
General de Marina, como sigue: "Revestido del poder que me da el artículo 7
de nuestras Ordenanzas Navales, mandé poner preso en la cárcel pública al
marinero nacional Manuel Merchán, desertor de la goleta "Salado", mientras
se proporcionaba una ocasión de embarcarlo en otro buque y recaudar el
dinero que debe al Tesoro. Presentóse hoy una ocasión, mandé a sacar al
individuo de la cárcel, y admírome al recibir respuesta del Alcayde, que el
oficial de guardia no permitía su salida".

El día 31 del mismo mes salió a socorrer en lo posible a los náufragos de la


goleta granadina "Yenny Lee", varada en Payana, y como los auxilios que
necesitaba la gente y embarcaciones eran de presión exhorbitante, se vio en
la necesidad de llevarse a la poca gente de esa Capitanía, dejando en su lugar
al ayudante de ella.

Es así que aquel oficial que como habíamos dicho fue ascendido a Teniente
de Fragata con fecha 9 de abril de 1862, con motivo de un incidente ocurrido
en marzo de 1863, al reportar el irrespeto hacia su autoridad por parte de un
celador de policía, dice:

"Suplico a US., señor Gobernador, se sirva ordenar al señor Jefe General


de Policía que ordene a sus subalternos me miren con el respeto que merece
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 133

una autoridad como la que el Supremo Gobierno me ha conferido.

"A pesar de ser un oficial de grado inferior ¿debo o no ser respetado? yo no


tengo la culpa, señor Gobernador de que el Supremo Gobierno me haya
nombrado Capitán del Puerto de Guayaquil contra la ley. El Supremo
Gobierno dio un nombramiento que acepté y sabré hacer respetar". (185)

En la edición del miércoles 10 de julio de 1861 del periódico nacional "La


Unión Colombiana" se publica un aviso al comercio en el que se dice que con
fecha 29 de mayo de 1861, el Capitán del Puerto de Guayaquil ha establecido
que todos los buques que estén en el puerto enarbolen tres días antes de su
salida, al palo trinquete, una bandera que anuncie que el buque se va. Esto
es con el fin de que todas las personas que tengan negocios de cualquier
especie que arreglar con el Capitán, tripulación o pasajeros del buque, lo
hagan con anticipación para no tener tropiezos a última hora. La bandera
deberá ser azul con un cuadro en el centro.

Estando el Teniente de Fragata Aurelio Ballén en las funciones de titular


de la Capitanía del Puerto de Guayaquil, con fecha lo. de.11_ ._, 0 de 1862 11
Dr. Gabriel García Moreno, Presidente de la República del Ecuador,
considerándolo necesario deéretó un re-g.-la—trié-adpara dich6 pue-rtt, el que
contenía los siguientes artículos:

"Art. lo. Todo Capitán de buque, en su entrada al río tocará precisamente


en el fondeadero de Puná, donde recibirá al guarda de Aduana y al práctico
que ha de conducir el buque al puerto de Guayaquil. Si fuere de noche, el
buque fondeará frente al Astillero; y de día continuará hasta el frente de la
Aduana donde será visitado por la Capitanía y el Resguardo. El Capitán
presentará a la Capitanía sus papeles de navegación, y al Resguardo sus
manifiestos por mayor.

"Art. 2o. Los buques ocuparán el lugar que les designe el Capitán del
Puerto, ya sea amarrándose afuera a barba de gato, ya sea acoderándose en
tierra o atracando al muelle, debiendo forzosamente, en estos dos últimos
casos, echar adentro sus botalones de foque y petifoque, botavara o cebadera.

"Art. 3o. Desde que los buques se encuentren más adentro de Santa Clara,
deberán tener izada en el trinquete una buena luz durante la noche, y a proa
un hombre encargado de la vigilancia. Y cuando estuvieren en el puerto, en
las noches que no tengan luna clara, conservarán una luz a proa para evitar
desastres con las embarcaciones menores.

"Art. 4o. Todo Capitán cuidará con esmero que las cadenas de sus anclas
estén siempre claras a fin de poderlas arriar en caso necesario y evitar
dilaciones.
134 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Unico. El Capitán que falte al cumplimiento de este artículo o los


anteriores, pagará una multa de tres sucres y veinte centavos a diez y seis
sucres, a más de los daños que causare a otros buques.

"Art. 5o. Toda comunicación, con excepción de cartas abiertas, que traiga
el Capitán, sobre-cargo o pasajeros, deberá ser entregada al Capitán del
Puerto.

"Art. 6o. Ningún Capitán permitirá comunicación alguna entre el buque


y la tierra antes de la visita de la Capitanía, bajo la multa de ocho sucres.

"Art. 7o. Se prohíbe arrojar al agua lastre o escombros sumergibles, excepto


en el punto que designe el Capitán del Puerto. Los contraventores pagarán,
veinte sucres de multa.

"Art. 80. Ningún buque podrá lastrar ni deslastrar sin permiso de la


Capitanía del Puerto, y en el lugar que ésta le determine, so pena de ocho
sucres de multa.

"Art. 9o. Ningún buque mercante podrá tirar cañonazos sin especial
permiso.

"Art. 10. La pólvora que traigan los buques mercantes para el servicio de
los cañones que tengan, se guardará en uno de los depósitos nacionales durante
la estadía del buque respectivo.

"Art. 11. Ningún buque podrá moverse del lugar que ocupe sin previo
permiso del Capitán del Puerto bajo la pena de tres sucres y veinte centavos
a diez y seis sucres de multa y del resarcimiento del daño causado, impuesta
al infractor.

"Art. 12. Todo buque izará y conservará al tope de su palo trinquete, en


los tres días antes de salir la señal número 8 del código de Maryat. Esta
precaución tiene por objeto en que haya un práctico listo para el buque, y el
que todos los que tengan asuntos concernientes a él los arreglen con tiempo
para no tener tropiezos a última hora.

"Art. 13. Todo Capitán será responsable de las averías que ocasione, a
menos que, teniendo práctico abordo, pruebe que la avería tuvo lugar por
descuido, mala maniobra o impericia de éste: en este caso será responsable el
práctico.

"Art. 14. Las pruebas que se exigen en el artículo anterior se expondrán


ante el Capitán del Puerto, el que, oyendo a las partes y testigos, resolverá lo
que considere justo, sujetándose a las leyes vigentes sobre la materia. En
caso de injusticia notoria, el agraviado interpondrá su recurso ante la
Comandancia General, la que sustanciará y fenecerá el juicio, oído el Cónsul
del agraviado o el consignatario a falta del Cónsul.
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 135

"Unico. El Comandante General para fallar, puede oír el informe de los


Jefes de Marina o de lo Capitanes de buques, surtos en el puerto.

"Art. 15. Cuando un buque necesite carenarse o calafatearse, el Capitán
lo pondrá en conocimiento del Capitán del Puerto, para que éste determine el
lugar en donde pueda verificarlo y le facilite los auxilios necesarios.

"Art. 16. Se prohíbe, absolutamente, calentar brea abordo de los buques,


operación que se hará en una balsa o embarcación a la popa del buque
respectivo. Se prohíbe, igualmente fumigar los buques con el fin de matar
ratas, etc., cuando ellos estén al costado del muelle o acoderados a tierra.
Esto debe hacerse en el lugar que designe el Capitán del Puerto.

"Por la infracción de cualquiera de estas disposiciones se impondrán


ochenta sucres de multa.

"Art 17. Los Capitanes que quieran cargar madera, lo pondrán en


conocimiento del Capitán del Puerto, para que les designe el lugar en que
deban verificarlo.

"Art. 18. Ningún Capitán podrá embarcar ni desembarcar gente en su


buque, sin conocimiento de la Capitanía del Puerto. Tanto a la entrada como
e a la salida, los Capitanes deben presentar al Capitán del Puerto una lista
exacta de su tripulación y pasajeros. En caso de contravención se pagarán
• cuarenta sucres de multa.

"Art. 19. Desde las siete de la noche no podrán atracar las embarcaciones
menores de los buques mercantes a ningún desembarcadero que no sean los
del muelle, frente a la Aduana.

"Art. 20. Las embarcaciones menores que contra lo dispuesto en el artículo


anterior se encontrasen atracadas o atracando a otros desembarcaderos con
mercancías que no hayan pasado por la Aduana, caerán en comiso con cuanto
tuvieren a su bordo, sin perjuicio de las demás penas que las leyes imponen
a los que sean aprehendidos haciendo el contrabando. Si en las embarcaciones
no hubiere mercancías se impondrá a los infractores de un sucre sesenta
centavos a ocho sucres de multa.

"Unico. Se exceptúan los casos en que por desórdenes abordo, enfermedad


violenta o avería inesperada, tengan que ocurrir a tierra en busca de auxilios;
en estos casos podrán atracar los botes al desembarcadero más inmediato al
buque que necesite auxilio, según lo permita el estado de la marea.

"Art. 21. En caso de que se anuncie incendio en tierra, los capitanes de los
buques mercantes remitirán sus embarcaciones, bien aperadas con su
• tripulación, en auxilio de la población.
136 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Unico. Si en la bahía hubiere incendio o peligro de naufragio, los capitanes


de los buques auxiliarán, inmediatamente, a la embarcación incendiada o
expuesta a naufragar.

"Art. 22. El Ministro Secretario de Estado en el despacho de Guerra y


Marina queda encargado de la ejecución y cumplimiento de este decreto.

Dado en el Palacio de Gobierno en Quito, a lo. de marzo de 1862.- GABRIEL


GARCIA MORENO.- El Ministro de Guerra y Marina, Daniel Salvador. (186)

El 30 de octubre de 1862 el Comandante General del Distrito de Guayaquil


y de Marina, General Antonio Martínez Pallares ordenó al Capitán de Navío
- Gdo. Agustín Oramas prevenga al Capitán del Puerto para que todos los
buques que se declaren de un modo legal como abandonados, sean
transportados por sus dueños detrás del cerro para que allí sean quemados o
hechos pedazos. (187)

Se dispone además que los buques que se hallen en este caso y acoderados
a lo largo del Malecón de la ciudad sigan la misma suerte. (188)

Mas sucede que un buque que había servido de pontón en el malecón se


fue a pique, por lo que se previno a los dueños para que hagan todo lo posible
para dejar expedito el canal, y se dice que serán ellos los responsables de los
perjuicios y averías que sufran los buques a la entrada al puerto de Guayaquil,
siempre que colisionaren con dicho pontón, y que es de su cuenta la
conservación de la boya que se ha puesto para que sirva de señal a los bajeles
que entran. (189)

Dice, por otro lado, que la Capitanía no debe cobrar por los boletos de
matrículas que se den a los pilotos de chatas y de toda clase de embarcaciones
menores. (190)

El 3 de febrero de 1863 se informaba que el Capitán del Puerto, Teniente


de Fragata Aurelio Bailén sostuvo un conflicto con el Comandante de la goleta
de guerra "Salado" por asuntos de practicaje del buque, y es el caso de que
habiendo pedido este último un práctico de Puná para zarpar desde Guayaquil
el día 2 de enero, y al no haberse presentado, el Teniente Bailén fue abordo
para advertir al Segundo Comandante que en caso de no llegar el práctico
solicitado, él pilotearía personalmente el buque.

Pero el Comandante se hizo a la vela con su buque a las ocho de la noche,


sin dar aviso alguno, utilizando como práctico al Sr. Pío Rosado. Por ello el
Capitán del Puerto dirigió un informe al Mayor General de Marina, en la que
dice que el Comandante Matos ha demostrado una conducta irregular, y que
siendo Rosado extranjero no le concede conocimiento alguno del río. Y sigue:
¿quién sería responsable si ese hombre hubiese perdido el buque?"
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 137

Agrava la situación cuando acusa al Comandante Matos de que durante


la navegación por el río, al encontrarse a la altura de Punta de Piedra con la
barca española "María y Julia", pretendió quitarle su práctico. Y son sus
propias palabras que: "Desde el momento en que el Comandante Matos no se
cree capaz para pilotear un buque no debe impedir que el Capitán del Puerto
haga su deber, exponiendo de esa manera el único buque de guerra que
poseemos". (191)

Anexo a su informe el Capitán del Puerto envió al Mayor General de Marina


las declaraciones de tres testigos para que la Comandancia General resuelva
sobre ese caso. Es de anotar que los términos empleados por el Teniente de
Fragata Aurelio Ballén no son muy cordiales como correspondería al dirigirse
a un superior, que lo era el Capitán de Fragata Diego Eugenio Matos,
notándose en el Capitán del Puerto cierta violencia en sus procedimientos.

Tal es que el 27 de abril de 1863 el Sr. Manuel Méndez, práctico de la ría


de Guayaquil, se dirigió al Sr. Comandante General de Marina para denunciar
los excesos cometidos por el Teniente Bailén, al ser objeto de maltratos por
parte de dicha autoridad.

Por aquel motivo el General Antonio Martínez Pallares dispuso dos días
después, al Mayor General de Marina, establezca la respectiva averiguación
sumaria, por lo que procedió en tal sentido. El documento inicial de la causa
e versa como sigue:

"Agustín E. Oramas, Capitán de Navío graduado, y actualmente Mayor


General de Marina.

"Cumpliendo con la orden de S.S. el General Comandante General del


Distrito y Marina, he procedido a practicar la respectiva averiguación sobre
la queja interpuesta por el Práctico Manuel Méndez, contra el señor Capitán
de ese puerto, y habiendo hecho comparecer al querellante, y juramentado
conforme a la ley le pregunté, en qué día, a qué hora, con qué motivo fue
ultrajado por el Capitán del Puerto, expresando las circunstancias que hayan
ocurrido sobre el particular; y contestó:

"Que no recuerda el día ni la fecha pero que el acontecimiento tuvo lugar


a las ocho del día, a presencia de varias personas, pero que por ahora solo
cita como testigo a los guardas Gavino Espinoza y Manuel A. Celpa. Que el
motivo fue que estando nombrado para sacar la goleta de guerra "Salado", se
entendió con el Comandante de dicho buque para saber a qué hora debía dar
a la vela, y contestándole que a las diez de mañana, se retiró el que declara a
su alojamiento para preparar su viaje, y que las circunstancias son que estando
en su casa antes del tiempo indicado el señor Capitán del Puerto había
mandando a traerle su equipaje, y después su persona por medio de un cabo
de matrículas y dos gendármenes de policía.
13 8 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Que conducido así ante el Sr. Capitán del Puerto éste le reconvino con
acritud e inmediatamente le mandó poner en la barra, y que enseguida lo
mandó arrastrándole públicamente en la misma barra, hasta llevarlo a la
punta del muelle, para embarcarlo en el bote que debía conducirlo a bordo,
que entonces se le alivió de la prisión y fue a la goleta para cumplir con su
deber como lo hizo.

"Que no tiene más que decir y que lo dicho es la verdad en cargo del
juramento prestado, firmando con el que suscribe en Guayaquil a dos de
mayo de mil ochocientos sesenta y tres.- (f) Agustín Oramas.- (f) Manuel
Méndez". (192)

Seguidamente, el mismo día, prestaron declaración juramentada los


testigos Espinoza y Celpa, quienes confirmaron lo dicho por el Práctico Manuel
Méndez. Posteriormente el Comandante Oramas mandó a comparecer al
Teniente de Fragata Aurelio Bailén, Capitán del Puerto, a quien le hizo poner
la mano derecha tendida sobre el puño de su espada, y preguntado si bajo su
palabra de honor prometía a la República decir la verdad en lo que fuere
interrogado, dijo que sí lo promete, y preguntado sobre la acusación que sobre
él realiza el Práctico Méndez dijo que "el día cinco de abril del presente año
(1863), habiendo sido ordenado por el Comandante General de Marina, de
embarcar un práctico abordo de la goleta de guerra "Salado", ordenó
inmediatamente al Práctico Manuel Méndez que se embarcara a las seis de
la tarde del mismo día.

"Que el día siguiente, a las diez de la mañana, hora de la marea, el señor


Comandante Eugenio Matos se presentó a su oficina quejándose de no tener
el práctico abordo, y del atraso que por ello resultaba.

"Que sobre la marcha lo mandó a buscar, y en el cuarto donde habita lo


negaron. Que entonces se vio obligado a hacerlo venir por medio de la policía
lo que se verificó, preguntándole porqué había faltado a la orden dada, dijo
que porque le daba la gana, que él era hombre libre, que se embarcaría si le
daba la gana, sino, no.

"Que a esta inmensurable insolencia que tuvo lugar delante del Sr. Federico
Flores y el Teniente Salcedo, se vio obligado para dar un ejemplo y contener
al individuo, el ponerlo en la barra y mandarlo así abordo, que los señores
Flores y particularmente Salcedo, se indignaron de tanta insolencia, y el
último le aconsejó que le diera cien palos, mas él no quiso acceder". (193)

De todo lo actuado el Sr. Capitán de Navío Agustín Oramas, Mayor General


de Marina, informó el 11 de mayo de 1863 al Sr. General, Comandante General
del Distrito y de Marina , que de las averiguaciones se desprende que : "Según
las Ordenanzas Generales de la Armada los Capitanes de Puerto están
facultados para castigar con penas correccionales a los prácticos y demás
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 139

• individuos que les estén subordinados, mas como el Capitán de Puerto se


excedió en sus facultades, porque si bien pudo poner en arresto y en la barra
• si se quiere al Práctico Méndez por la falta que cometió, no ha debido de
ninguna manera mandar públicamente al individuo engrillado por todo el
muelle hasta el embarcadero, y en vista de estas razones he creído conveniente
imponer al señor Capitán del Puerto un arresto por 15 días en su propia
oficina, sin perjuicio del servicio, todo lo que pongo en conocimiento de US.
para que se digne resolver lo que estime conveniente". (194)

Antes de su sanción, pero después de excederse en el castigo con el Práctico


Manuel Méndez, el Capitán del Puerto se vio obligado a imponer un arresto
en el Cuartel de Artillería al Alférez de Navío Enrique María Vera, ayudante
de la Capitanía, también por su manifiesta mala conducta, lo que indica que
la Capitanía del Puerto de Guayaquil estaba en crisis, en cuanto a la disciplina
de sus jefes se refiere. Es así que el 13 de abril de 1863 dice la autoridad
portuaria que: "Meses hace que la conducta de ese oficial me desagradaba.
La falta de asistencia a las horas debidas, su desentendimiento en cuanto al
pequeño mecanismo de botes, guardias, etc. su total ignorancia de la Marina,
que me ha puesto en el caso de hacer sus veces infinitas ocasiones, y al fin ese
maldito vicio del licor que últimamente lo domina, me obliga a quejarme a
Ud.

"Ayer el Sr. Vera ha cometido una grave falta, que pido ser castigada.
Teniendo que cumplir con la Orden General de antes de ayer de asistir a la
Catedral a la función de Cuasimodo, ordené al Sr. Vera que no abandonase
la oficina. Cual fue mi sorpresa, cuando salí de la iglesia al encontrarle en la
oficina en un horrible estado de beodez, aquí en esta oficina respetable.

"Ordené inmediatamente su arresto en el "Artillería". Creía que había


cumplido con mi orden cuando aparece a las siete de la noche aún en peor
estado y me llenó de insultos delante de tres personas". (195)

El 25 de mayo dice el Teniente de Fragata Aurelio Ballén que estando


arrestado por su orden en su casa el Alférez de Navío Enrique Vera, por su
mala conducta relatada, y aún más, estando enfermo, le está colaborando
como ayudante el guarda del Resguardo Gavino Espinoza, pues no se dá
abasto para cumplir con su tareas.

Es evidente que el Capitán del Puerto de Guayaquil y su ayudante habían


demostrado poco profesionalismo y baja disciplina, por lo que sus cambios se
veían venir. Era necesario jerarquizar dichos cargos, por las altas
responsabilidades que representaban en el puerto.

Una vez cumplido su arresto, el teniente Ballén comunica el 30 de mayo a


la Mayoría de Marina dos novedades. La primera es la sensible muerte natural
del antiguo servidor a la patria, el Cabo de Matrícula Manuel Arce, y como es
140 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

de absoluta necesidad reemplazarlo con otro, propone para esa plaza al


individuo Simón Lino, quien según él reúne las cualidades necesarias para
el desempeño del cargo, por lo que por órgano regular pide el asentimiento
del General Antonio Martínez Pallares para proceder a contratarlo (196)

La segunda novedad se refiere al mal estado en que se encuentra el bote


de la Capitanía, y dice textualmente: "Hace varios días que por el conducto
correspondiente dirigí a la Gobernación dos pedidos para reparar el único
bote de la Capitanía que está en malísimo estado. Como dichos pedidos no se
despachan y el bote se está deteriorando visiblemente, y cada día se necesitará
más dinero para componerlo, me anticipo en advertir a US. que yo salvo mi
responsabilidad si el bote se echare a perder enteramente y haya después
que incurrir en gastos mucho mayores, que se crean originados por negligencia
de mi parte". (197) La autoridad superior dispuso se atienda el pedido de
reparar dicho bote.

El 10 de agosto de 1863, se publica un anexo en el que se indica la cantidad


de buques que han entrado y salido de los puertos de Guayaquil y Manta en
los años 1861 y 1862, el que nos da idea del movimiento marítimo ocurrido
en esos años. Aclaramos de una vez que la cantidad de bajeles no refleja
necesariamente el mayor o menor tonelaje de los mismos.

Se dice también que los datos correspondientes a la entrada y salida de los


buques en el puerto de Manta, son solo desde julio en el año 1861, pues, de
los meses anteriores no se había tenido ningún dato. A continuación
transcribimos dicho cuadro estadístico, en el que se considera la nacionalidad
de los buques:

MOVIMIENTO MARITIMO

Entrada y salida de buques a los puertos de Guayaquil y Manta.

GUAYAQUIL
AÑO 1861 AÑO 1862

NACIONALIDADES ENTRADA SALIDA ENTRADA SALIDA

Ingleses 53 52 61 61
Franceses 5 5 3 3
Españoles 15 10 8 12
Alemanes 2 2 4 4
Peruanos 170 62 142 50
Chilenos 9 10 10 8
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 141


Granadinos 1 1 1
r Centro-americanos 1 1 1
Norte-americanos 2 2 5 4
Nacionales 53 48 55 52
Italianos 1 1

MANTA
AÑO 1861 AÑO 1862

NACIONALIDADES ENTRADA SALIDA ENTRADA SALIDA

Ingleses 12 12 21 23
Peruanos 12 12 21 19
Granadinos 2 2
Nacionales 35 35 48 45
r
Quito, agosto 10 de 1863

ADOPCION DE REGLAS PARA EVITAR EL ABORDAJE

Por cuanto los gobiernos de S.M. Británica y de S.M. El Emperador de los


franceses habían formulado en 1863 un sistema de
y que estos habían propues o a as
emás naciones a a• opción e este reglamento, con el designio de que llegue
a formar parte del derecho internacional; el Gobierno del Ecuador encontró
de incontestable utilidad adoptarlo para la Marina Nacional; y hallándose
suficientemente autorizado al efecto por el inciso 3o. del artículo 66 de la
Constitución, el Dr. Gabriel García Moreno, Presidente de la República decretó
lo siguiente:

"Art. lo. La República del Ecuador adopta para su Marina el siguiente


reglamento que se pondrá en observancia desde el día lo. de junio próximo
venidero.

"Art. 2o. Los Ministros del Interior y de Guerra y Marina quedan


encargados de la ejecución de este decreto.
142 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Dado en el Palacio de Gobierno en Quito a 9 de marzo de 1863.- Gabriel


García Moreno.- El Ministro del Interior encargado del Despacho de Guerra
y Marina. R. Carvajal". (198)

Las reglas en mención, a seguirse en aquella época para precaver los


abordajes en el mar, constaban de una indicación preliminar, de reglas
relativas a las luces y de reglas concernientes a la navegación, contenidas en
20 artículos que pasamos a transcribir para tener idea clara de lo que
estipulaban los mismos:

Preliminares

"Art. 1. En las reglas siguientes, todo buque de vapor que navega


puramente con el impulso de su velas, es considerado como buque de velas; y
todo buque cuya máquina está en acción, sea cual fuere su aparejo, es
considerado como buque de vapor.

Reglas relativas a las luces y señales en tiempo de neblina

"Art. 2. Las luces mencionadas en los artículos siguientes, y no otras,


deben ser llevadas en todo tiempo desde que se pone hasta que nace el sol.

"Art. 3. Los buques de vapor, siempre que estén navegando, deben llevar
las luces siguientes:

"a. A la espiga del palo de trinquete, una luz clara colocada de manera que
sus rayos uniformes y no interrumpidos, puedan recorrer un arco horizontal
de veinte cuartas de la aguja náutica, que se cuentan desde la proa hasta dos
cuartas más a popa del través de cada costado, y que sea de una fuerza tal
que pueda ser visible cuando menos a cinco millas de distancia, en noche
oscura pero sin neblina.

"b. A estribor un farol verde establecido de manera que produzca una luz
uniforme y no interrumpida sobre un arco horizontal de diez cuartas de la
aguja náutica, que sea comprendido entre la proa del buque y dos cuartas a
popa del través de estribor, y de una fuerza tal que pueda ser visible a lo
menos a dos millas de distancia en noche oscura y sin neblina.

"c. A babor un farol rojo construido de manera que arroje una luz uniforme
y no interrumpida sobre un arco horizontal de diez cuartas de la aguja náutica,
que está comprendido entre la proa del buque y dos cuartas a popa del través
de babor, y de una fuerza que sea visible cuando menos a dos millas de
distancia en noche oscura, y sin neblina.
ilril~leg"nigrliprimevzir~owy,

ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 143

"d. Estas luces del costado deben ser provistas, por el lado interior, de un
guarda-fuego en dirección de popa a proa que tenga de largo 90 centímetros
adelante de la luz a fin de que la luz verde no pueda ser vista antes de babor,
e igualmente de estribor la luz roja.

"Art. 4. Los buques de vapor, cuando remolcan, deben, independientemente


de sus luces del costado, llevar dos luces claras y verticales al tope de sus
palos que sirvan para distinguirlos de los otros buques de vapor. Estas luces
son iguales a la luz única que en el palo de trinquete llevan los vapores
ordinarios.

"Art.5. Los buques de vela , cuando navegan a la vela o a remolque, llevan


las mismas luces que los buques de vapor con excepción de la luz clara del
palo de trinquete de que nunca deben hacer uso.

"Art. 6. Cuando los buques de vela son tan pequeños que sus luces verde
y roja no pueden ser fijadas de un manera permanente, se debe, a pesar de
ello, tener las luces encendidas sobre cubierta en sus costados respectivos
para que estén listas para mostrarlas e impedir el abordaje con cualquier
buque que se aproxime. Estas luces portátiles deben exhibirse tanto cuando
se pueda presentarlas dé tal modo que la luz verde no pueda verse de babor
y la roja de estribor.

"Para que estas prescripciones sean mas ciertas y fáciles, los faroles, deben
ser pintados exteriormente del color del fuego que contienen, y deben tener
sus guardafuegos convenientes.

"Art. 7. Los buques de vela como de vapor fondeados en una bahía, en un


canal, o en una línea frecuentada, usan desde el anochecer hasta el amanecer
una luz clara, cuya altura no exceda de 6 metros y que ilumine de una manera
uniforme y no interrumpida, a la distancia, cuando menos, de una alrededor
del horizonte.

"Art. 8. Las embarcaciones de prácticos de vela, no están sujetas a llevar


las mismas luces que se exigen a los otros buques de vela; pero deben tener al
tope del palo una luz clara visible de todos los puntos del horizonte, y además
mostrar otra luz cada cuarto de hora.

"Art. 9. Las embarcaciones pesqueras sin cubierta y toda otra embarcación


igualmente sin cubierta, no están obligadas a llevar las luces exigidas a los
otros buques; pero deben, sino están provistas de tales faroles, servirse de un
farol que tenga de un costado un vidrio verde corredizo, y del otro un vidrio
rojo corredizo también, de manera que al acercarse un buque pueda mostrarse
este farol e impedir el abordaje; teniendo cuidado de que la luz verde no se
vea de babor, ni la roja de estribor.
144 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Tanto las embarcaciones menores como las pesqueras que se encuentren


fondeadas deben mostrar continuamente una luz clara. Lo que deberá
observarse por las embarcaciones pesqueras que tengan sus redes tendidas.

"Estas mismas embarcaciones pueden además hacer uso a cortos intervalos


de una luz clara, siempre que lo juzguen por conveniente.

Señales en tiempo de neblina

"Art. 10. En tiempo de neblina, tanto de día como de noche, los buques
deben hacer oír cada cinco minutos a lo menos las señales siguientes:

"(a). Los buques de vapor en camino usarán el pito de vapor que está
colocado a proa de la chimenea a una altura de 2 metros, 40 centímetros
sobre la superficie de la toldilla.

"(b). Los buques de vela cuando están en camino deben hacer uso de una
corneta.

"(c). Tanto los buques de vapor como los de vela, cuando no están en camino,
deben hacer uso de una campana.

Reglas relativas al rumbo

"Art. 11. Si los buques de vela se encuentran corriendo el uno sobre el


otro directamente o poco mas o menos, y haya riesgo de abordaje, los dos
deben poner la caña a estribor para pasar a babor el uno del otro.

"Art.12. cuando dos buques de vela hacen rumbos que se cruzan, y los
exponen a un abordaje, si llevan amuras diferentes, el buque que tiene las
amuras a babor, maniobra de manera que no moleste el rumbo de aquel que
las lleva a estribor; y de manera que en caso en que un buque que lleva las
amuras a babor navegue de bolina, mientras que el otro vaya a un largo, este
debe maniobrar de manera que no moleste al buque que va de bolina. Pero si
uno de los dos va viento en popa, o si los dos tienen el viento del mismo
costado, el buque que va viento en popa o que tiene el otro a sotavento, debe
dejarle paso libre al otro buque.

"Art. 13. Si dos buques de vapor corren dir.ectamente el uno sobre el otro
a poco mas o menos, y que haya riesgo de abordaje, los dos pondrán la caña a
estribor para pasar a babor el uno del otro.

"Art. 14. Si dos buques de vapor siguen rumbos que se cruzan, y se exponen
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 145

a abordarse, aquel que vea al otro por estribor, maniobra de manera que no
moleste el rumbo del otro.

"Art. 15. Si dos buques, el uno de vela y el otro de vapor, siguen rumbos
que los exponen a abordarse, el buque de vapor le deja el paso libre al buque
de vela.

"Art. 16. Todo buque de vapor que se aproxime a otro buque habiendo
riesgo de abordaje, debe disminuir su andar, o pararse a raya en caso
necesario. Todo buque de vapor debe en tiempo nebuloso llevar un andar
moderado.

"Art. 17. Todo buque que pasa a otro debe dejarle paso libre al que se
queda atrás.

"Art. 18. Cuando a consecuencia de la reglas que preceden, uno de los


buques debe maniobrar de manera que no moleste al otro, este debe a pesar
de ello maniobrar según las reglas del artículo siguiente.

"Art. 19. En conformidad de las reglas precedentes, los buques deben tener
cuenta de los peligros de la navegación. Y deberán tomar en consideración
las circunstancias particulares que pueden hacer necesaria una derogación a
estas reglas, con el fin de evitar un peligro inmediato.

"Art. 20. Las reglas anteriores no pueden librar a un buque, cualquiera


que sea, ni a sus armadores. Capitán o tripulación, de las consecuencias de
omitir las luces y señales, de una falta de vigilancia conveniente, o en fin, de
una negligencia cualquiera en las precauciones previstas por la práctica
ordinaria de la navegación, o por las circunstancias particulares de la
situación" (199)

Es de darnos cuenta que estas reglas se fueron perfeccionando con el tiempo,


y ya en 1960 figuró el "Reglamento para prevenir abordajes en la mar" como
anexo del acta final de la conferencia internacional sobre "Seguridad de la
vida humana en el mar", firmada en Londres el 17 de junio de aquel año, y
editada por la "Organización Consultiva Marítima Intergubernamental"
(I.M.C.0). Entró en vigencia dicho reglamento el lo. de septiembre de 1965,
fecha desde la cual se la aplica internacionalmente. (200) Por eso la
importancia de las
,p e quizas punto de partida
ara ir a aplicando la mayoría .'e paises, hasta que con el pasar del tiempo se
adoptó un reglamento que en la actualidad es cumplido universalmente.
146 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Aquel Decreto Supremo de 1863 fue publicado en el periódico oficial "El


Nacional", y el 24 de marzo el Mayor General de Marina notifica que el Capitán
del Puerto de Guayaquil hace una petición en los siguientes términos:

"Tengo de acompañar a US. un pedido valor de 18 pesos para pagar la


impresión de 500 ejemplares del reglamento de luces que el Supremo Gobierno
ha mandado se observe en las embarcaciones mayores y menores para evitar
los abordajes.

"Reglamento que US. me incluyó en su apreciable nota del 20 del presente,


ordenándome su puntual cumplimiento.

"Como el plazo dado para empezar a cumplir tan magnífica disposición, es


hasta el lo. de junio del presente año, yo necesito con anticipación hacerlo
publicar para que en el mencionado día, se empiece a observar un reglamento
que tanto favorece a la humanidad, y que hace honor a nuestra nación".

RELATOS VARIOS SOBRE BUQUES, REPARTOS Y PERSONAL DE


MARINA

Entre las varias pequeñas averías que presenta la goleta de guerra


"Salado", el 25 de octubre de 1862 dice el Comandante Matos que al tratar de
reclabar tres tablas de la bobadilla del buque, no se lo pudo hacer debido a
que tres gambosas en que estaban afirmadas se hallaban podridas, por lo
que no consentían los clavos y que la reparación durará de 4 a 6 días con la
misma maestranza que en esos momentos tenía a bordo. (201)

Preocupado por dicha situación el Comandante Oramas se dirigió a bordo


el 29 del mismo mes y procedió al reconocimiento de los daños del buque y de
las reparaciones efectuadas, de cuyo resultado dio cuenta en la misma fecha
al Sr. Comandante General de Marina. (202)

Fue necesario una comisión conformada por el Capitán de Navío Juan


Manuel Uraga, el Capitán de Fragata Diego E. Matos, Alférez de Navío
Enrique M. Vera, el Capitán del Puerto, amén de carpinteros y calafates,
para revisar prolijamente la avería de la goleta, que era preciso reparar de
inmediato. Se ordenó el gasto de 1.000 pesos para ello. Aquel dinero fue
proporcionado por la Tesorería de la Provincia de Manabí, de acuerdo a lo
ordenado por el General Flores.

El 18 de noviembre de 1862 el Gobernador de la Provincia del Guayas,


don Vicente Piedrahíta le dice al Comandante General: "Sírvase US. ordenar
al Comandante de la goleta "Salado", que por la noche establezca una ronda
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 147

por el río que impida la salida de embarcaciones menores para cualquiera de


los ríos, al sur o al norte de esta ciudad".

El 4 de diciembre de 1862 zarpó de Guayaquil la "Salado" con rumbo al


puerto de Manta, en cumplimiento a las instrucciones dadas por la Mayoría
General de Marina. El día 9 a las doce del día llegó a su destino; en el que
permaneció algunos días. Ahí recibió a su bordo a 59 reclutas para conducirlos
a Guayaquil. (203)

Terminada su comisión en Manta, retornó el buque a Guayaquil, puerto


en el que fondeó a las tres de la mañana del 31 de diciembre, justo cuando
finalizaba el año 1862. A más de los 59 reclutas, que se desembarcaron aquel
día, trajo 280 albardas para su entrega a las autoridades militares. (204)

En el interín de la navegación se habían producido problemas disciplinarios


y el Comandante del buque lo informa como sigue: "Sensible me es anunciar
a US.- Al Mayor General de Marina - que el individuo Joaquín Barrera a los
dos días de nuestra salida, se volvió loco de una manera tan furiosa que a
cada paso cometía desórdenes aún con las señoras de pasaje, por cuyo motivo
me ví obligado a mantenerle en la barra, y hoy antes de nuestra llegada a
Manta, el 9 de diciembre - doblando el Cabo de San Lorenzo atropelló al
centinela que lo custodiaba y se botó al agua, que fue necesario arriar un
bote para tomarlo con mucha resistencia. Esto mismo sucedió en meses
pasados, según avise a US. por una nota oficial y creo impropia la permanencia
de este individuo abordo". (205)

Posteriormente dicho individuo intentó prender la Santabárbara del buque,


pero fue sorprendido en los preparativos, por lo que Matos indica que su
estadía es perjudicial e impropia para la moral de los jóvenes marinos y
contraria a los intereses de la nación, por lo que a su arribo a Guayaquil
ejecutó el desembarco del mismo, e informó a las autoridades los pormenores
del suceso.

La decisión del Comandante General consistió en aceptar lo resuelto por


el Comandante del buque, disponiendo se le entregue todas sus pertenencias
bajo el correspondiente recibo.

El 14 de enero de 1863 el Capitán de Navío Agustín Oramas, Mayor General


de Marina, menciona a Ayo a,n) '1.'` el '5 '1~1) cuando en
comunicación dirigida al Comandante Tenera el Distrito y de Marina
acompaña la nómina de los sueldos que han devengado cuatro individuos
extranjeros, durante un viaje hasta Guayaquil abordo de la re=
06) A continuación transcribimos dicho anexo:
148 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

GOLETA DE GUERRA "MACHANGARA"

LISTA DE MARINEROS EXTRANJEROS QUE TRABAJARON EN


EL SERVICIO DE LA EXPRESADA

NOMBRE PATRIA EMBARCO DESEMBARCO SUELDO ALCANCE

José D. Fernández Centroamérica Diciembre 3 Enero 8 $ 14 $16- 2 re


„ „ 14 ” "
M. Francisco Espinoza Peruano
Pascual Baldebrito Chileno Diciembre 15 " 14 $ 11
Damián Dias Granadino 14 "

SUMAN $ 54- 4re.


El Comandante

D.A. de Lamota

Aunque resulta insólito creer que en la dependencia de una de las más


altas autoridades de la Marina de Guerra se produzcan continuos robos,
sucedió así. La falta de una puerta en dicha oficina, ubicada en el edificio de
la Gobernación , facilitaba a los "amigos de lo ajeno" el cumplimiento de dicho
mal propósito. De ello da cuenta el Capitán de Navío Agustín Oramas con el
siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Mayoría General de Marina .- Guayaquil. a 29


de enero de 1863.- Al Sr. General Comandante General del Distrito y de
Marina.- Señor General.

"Tengo el sentimiento de anunciar a US. que por la poca seguridad de la


oficina de mi cargo, se notan constantemente varios robos de los útiles y
elementos que pertenecen al servicio; tales como haberse sustraído en diversas
ocasiones dos silletas, un anteojo largavista en buen estado, un libro
Reglamento de cargos víveres y pertrechos para los buques de guerra, el Código
de Comercio, el Código Civil; y últimamente el libro copiador de
comunicaciones con las autoridades subalternas, en donde estaban copiadas
las instrucciones libradas al Comandante de la goleta de guerra "Salado",
con más otras menudencias como tintero, plumas, escobas, etc., y como el
daño que dejo referido no puede ser remediado sino poniendo una puerta
para asegurar el local de mi oficina, en la que hay algunas cosas de valor que
pueden ser sustraídas, lo pongo en conocimiento de US. para que si lo tiene a
bien se sirva entenderse con el Sr. Gobernador de la Provincia para que me
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 149

procure la seguridad que preciso en la oficina de mi cargo; pues de otra manera


queda desde hoy a salvo la responsabilidad que gravita sobre mí.- Dios guarde
a US.- Agustín Oramas".

En enero del mismo año la Comandancia General de Marina pone en


conocimiento del Supremo Gobierno el nombramiento de Jefe de las Baterías
de la plaza de Guayaquil en la persona del Teniente Coronel Juan Avila, y la
disposición para que el Capitán de Corbeta José Izquierdo se ponga a sus
órdenes, a fin de que cuide de la conservación y reparo de los parapetos y
fortificaciones de Saraguro. (207)

Con nota del 23 de enero de 1863 la Mayoría General de Marina ordenó


que la goleta "Salado" se prepare para darse a la vela cuando así se disponga.
A lo que Matos contesta: "El martes de la semana entrante estaré
completamente listo", y ya el 6 de febrero de 1863 se anunció su arribo al
puerto de Manta en donde al momento el Comandante Matos ofreció sus
servicios al Gobernador de la Provincia de Manabí y al Comandante de Armas,
para el buen orden del lugar. (208)

Pero la indisciplina no era ajena al personal de dicho buque, y al respecto


el Comandante envió el siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Comandancia de la goleta de guerra "Salado.-


Manta, 17 de marzo de 1863.- Al Sr. Mayor General de Marina.- Señor.

"He recibido la apreciable nota de US. fecha de ayer en que me informa de


que S. Sa. el Sr. General Comandante General de Marina, está sumamente
escandalizado por los repetidos desórdenes de los oficiales de Marina y en
particular de la goleta de guerra que comando, a la verdad señor estoy
profundamente quejoso de algunas faltas cometidas, y me es sensible tanto
más, cuanto que me están subordinados y solo yo soy el responsable ante el
Gobierno y el público; pero ofrezco a US. solemnemente que en adelante no
consentiré el más pequeño desvío del orden y de la moral a todos los que me
están subordinados.

"Quedo entendido del estricto cumplimiento que debo darle a la Orden


General del 9 de septiembre del año anterior, seguro de que US. y el Sr.
General quedarán satisfechos de la moralidad y cumplimiento de sus deberes
de mis súbditos.
150 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Réstame decir a US. que quedo comunicado de la orden de arresto al


Capitán Castillo por US." (209)

Como en una nota del Comandante General de Marina, del 7 de marzo de


1863, se dice que es llegado el tiempo de que vengan de la costa los relevos
para la dotación de la goleta de guerra "Salado" y Capitanía del Puerto de
Guayaquil, el Comandante Oramas se dirigió al Comandante del Batallón
"Milicias de Marina" en el Morro, pidiéndole el contingente respectivo de
indígenas para tal fin.

El 26 de marzo el Capitán de Fragata Diego Matos comunica al Capitán


de Navío Agustín Oramas, que el Práctico que condujo el buque hasta punta
Arenas, naufragó con su bote al retorno, y que las comunicaciones y
documentos que con él envió a la mayoría se perdieron en el percance. (210)

El 11 de abril, a las nueve de la mañana arribó el buque al puerto de


Manta, y al siguiente día se hizo a la vela con rumbo a Esmeraldas. (211) El
día 27 al retornar a Manta informa el Comandante que tenía a bordo 7
individuos de tripulación y guarnición enfermos con fuerte calentura, pero
que ya están convalecientes, y que pasó por el dolor de dar sepultura en
Mampiche al soldado Manuel Muñoz que había muerto el 23 atacado por
grave enfermedad. Trae además a bordo al oficial enjuiciado en Esmeraldas
y un soldado de aquella guarnición que lo remiten por males incurables. (211)

Por otro lado indica que apresó correccionalmente en su buque al cocinero


de la goleta nacional "Paquete del Sur", por haber hecho armas contra el
Capitán, amenazando con pegarle. (212)

* * *

De la mencionada goleta de guerra "Machángara" nada se dice, es decir no


se la ve figurar, tal es que el 11 de agosto de 1863 el Coronel Daniel Salvador,
Ministro de Guerra y Marina, dice textualmente en su informe dirigido a las
Cámaras Legislativas del Ecuador que: "El estado no necesita con urgencia,
ni puede sostener una flotilla de consideración: Por esto se ha limitado el
Gobierno a conservar la goleta "Salado" armada en guerra y destinada a
impedir el contrabando. La Mayoría de Marina se ha suprimido a última
hora por no ser ya necesaria". (213)

Podemos darnos cuenta de que

, y que una gran parte de los recursos eran destinados a la


defensa terrestre. Pero eso si, cuando el peligro venía por el mar se improvisa
buques y se llama a los oficiales navales para mantener el mandato
presidencial. Eso lo veremos más adelante.
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 151

A continuación detallaremos una relación de Generales y de Jefes y


Oficiales Navales que se hallan en servicio activo o con licencia absoluta, con
expresión de los destinos en que están, según anexo al informe de'

CLASES NOMBRES DESTINOS

General en Jefe Juan José Flores Comandante en Jefe


General Antonio Martínez Comandante General de Marina
Pallares
* * *
Coronel Daniel Salvador Ministro de Guerra y Marina
Capitán de Navío-Gdo. Francisco J. Martínez Edecán de Gobierno •
* * * * *
Capitán de Navío-Gdo. Agustín E. Oramas Mayor General de Marina I"
Capitán de Ejército Bernardo Lafuente Ayudante de Mayoría
Teniente de Fragata Aurelio Ballén Capitán del Puerto de Guayaquil#
Alférez de Navío Enrique María Vera Ayudante de Capitanía ,/
Capitán de Ejército Zenón Balda Capitán del Puerto de Manta/
Capitán de Fragata Diego E. Matos Comandante goleta "Salado",
Teniente de Fragata Francisco J.Castillo "2o. Comandante!'
Alférez de Navío José Antonio Gómez Goleta de guerra "Salado"
Alférez de Fragata Francisco Fernández Madrid Goleta de guerra "Salado"/

Capitán de Fragata Lucas Rojas Ministro Juez Marcial de


la Corte Superior de Guayaquil
Alférez de Fragata Joaquín San Martín Licencia absoluta

Quito, junio 8 de 1863

También en el mismo anexo consta el Capitán de navío José María Vallejo


en la relación del depósito de inválidos del Distrito de Guayaquil con una
pensión de 1266 pesos y 3 reales, quien durante la Revolución del 6 de marzo
de 1845 sufrió la pérdida de una pierna, pero a pesar de ello continuó sirviendo
por cuatro lustros más en la Marina de Guerra, aunque de manera
intermitente.

En cuanto a la relación nominal de los Generales, Jefes y Oficiales de


Marina en uso de letras de cuartel y retiro se detalla a los siguientes:
152 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

CLASES NOMBRES PENSIONES


Ps. rs.
General de Div. Tomás C. Wright 1999 - 4
General de Brig. Leonardo Stagg 1466 - 5
Capitán de Navío Juan H. Soulín 960
Capitán de Corbeta José H. Chávez 300
Teniente de Fragata Felipe Radiche 150
Alférez de Fragata Pedro Elizalde 105
Alférez de Fragata Roberto Martínez 105

Quito, junio 8 de 1863

Por último se publicó una lista de oficiales fallecidos con los nombres de
los deudos que gozan de pensión, entre los cuales constan los de los siguientes
marinos:

NOMBRES POR QUIENES GOZAN PENSIONES


Ps. rs.
Mercedes Decimavilla Por su esposo, General Juan Illingworth 363 - 6
Angela Menéndez Por su esposo, Capitán de Navío Juan Valverde 633
Luisa Sono Por su esposo, Capitán Fragata Francisco Reina 308 - 2
Isabel Elizalde Por su esposo, Teniente Fragata José Pío Vallejo 49 - 7
Carmen Mirón Por su hijo, Alférez de Fragata Matías Pérez 139 - 4
Carmen Casanova Por su hijo, Guardia Marina Fco. Florencia 180
Rosario Córdova Por su esposo, Capitán de Corbeta José
María Muñoz 199 -7

Quito, junio 8 de 1863


ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 153

Capitán Zenón Balda, Capitán del Puerto de Manta.


En cuanto a las dotaciones completas con que cuenta la Marina en 1861 se
dan los siguientes datos: La goleta de guerra "Salado" tiene a su bordo un°
stribuidos como sigue: un Capitán de Fragata, un
Teniente de Fragata, un Alférez de Navío, un Alférez de Fragata, tres guardias
marinas, tres oficiales de mar, tres marineros contratados, tres marineros de
la. clase, cuatro marineros de 2a. clase, nueve grumetes y una guarnición
embarcada conformada por un subteniente, un cabo lo. y 10 soldados. (214)
advirtiéndose que dicha guarnición pertenece a uno de los cuerpos
estacionados en Guayaquil.

La Capitanía del Puerto de Guayaquil contaba con un Teniente de Fragata,


un Alférez de Navío, dos cabos matriculados y seis cabos de la. clase. La
A- .5.- I'i.,(15;. .0(.19 ,191f:-11)5v1.,--T'ezzi To).11,,S> , un cabo
matriculado y dos cabos de 2a. clase. Además el faro de Santa Clara tenía
una dotación de tres guarda faros. (215)

Sobre la legislación militar se dice que las Ordenanzas Españolas están


vigentes en la República, y que ello ha llegado al extremo no razonable de
impedir las reformas en los puntos que nuestras instituciones hacen inútiles
• o impracticables, así como en los que se resisten del tiempo remoto y no muy
ilustrado en que fueron fijados. A esta clase pertenecen las disposiciones
penales y las de enjuiciamiento. Las primeras, se informa, contienen penas
tan repugnantes que aún a los hombres menos cultos horroriza la idea de
que ellas hayan podido alguna vez ejecutarse. Comenta el Ministro Daniel

1
154 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Salvador: "Tal es el efecto de la época de lenidad y de ilustración en que


vivimos, y tales fueron también aquellos tiempos en que la atrocidad del
tormento y los horrores de la mutilación o de la hoguera deshonraban la
ciencia de las leyes y desacreditaban la humanidad. Sin embargo estas penas,
que no se aplican ni pueden aplicarse, en el día, se hallan rigiendo en el
nombre, y los vacíos que forma su exageración, deja a la mano arbitraria del
hombre la imposición de castigos que solo debiera ordenarlos la ley". (216)

NUEVO CAPITAN DEL PUERTO

El 1', 1Sr. Comandante General del Distrito de Guayaquil


y de arana anunció el nombramiento de
en la persona del 11.11111171Ta o no , en reemplazo del
Teniente de Fragata Aurelio Bailén, en virtud de quedar suprimida la Mayoría
General de Marina, por tanto de haber cesado en dichas funciones el primero
de los nombrados.

El Comandante Oramas procedió, a encargarse de su nuevo destino, el


cual recibió con las formalidades debidas, y bajo un prolijo inventario. Pero
con•, fecha 2 de agosto se dirige al Comandante General del Distrito de
Guayaquil y de Marina, que lo era el Coronel Secundino Darquea, quien
había reemplazado en esos días al General Antonio Martínez Pallares, para
informarle que "el Sr. Capitán del Puerto saliente no ha vuelto a aparecer
mas a la oficina desde que me hice cargo de ella, sino por breves momentos
que no me daban tiempo para entenderme con él en los delicados asuntos
que tiene pendientes" (217)

Lo cierto es que
re ellas que tiene pendiente los sueldos
e los prácticos, recaudados por el mes de junio hasta el 12 de julio, de que no
ha dado cuenta alguna y los interesados reclaman con justicia sus haberes.

Por otro lado el Oficial encargado de la administración del Faro de la Isla


Santa Clara denunció que en el mes de julio en vez de dos barriles de aceite
que mensualmente se remiten para el alumbrado de la farola, el Sr. Ballén le
mandó uno, quedándose con los 40 pesos, valor del barril que no remitió, y
que cuya falta de aceite ha tenido en total oscuridad al faro por algunos días.
A más que los encargados del cuidado se han ayudado con las grasas que han
podido sacar de la pesca realizada. También estos se quejan de que han sido
mal asistido en su alimentos, y que el Teniente Ballén se ha quedado con sus
sueldos, correspondientes al mes de junio, los que sacó puntualmente de la
Tesorería de la Provincia.
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 155

Y en ese orden hay otras reclamaciones de mas o menos importancia de


las que tiene que rendir cuentas, pero según se dice el Teniente Bailén ha
eludido presentarse a la Capitanía del Puerto, es más, trata de fugar. El
Comandante Oramas dice lo siguiente: "Me ha sido preciso aunque con
sentimiento adoptar la medida de pasar una nota al Sr. Capitán del vapor
británico "Guayaquil", en cuyo bajel estoy informado positivamente y aún
asegurado por el mismo Ballén que pretendía ausentarse de este país para
Panamá.

"Dicha nota contiene la prohibición de que el Capitán lo admita a su bordo;


y también he dirigido otra comunicación al señor agente de la compañía de
vapores británicos en el Pacífico, suplicándole no le den pasajes en el
"Guayaquil", que está próximo a zarpar de este puerto para el del Istmo".
(218)

Tal parece que el Teniente de Fragata Aurelio Ballén culminó pésimamente


su gestión, lo que sumado a los continuos incidentes ocurridos durante el
tiempo que se mantuvo como Capitán del Puerto, dieron lugar a que las
autoridades procedan con el rigor que corresponde a dichos casos.

EXPATRIACION DEL CAPITAN DE NAVIO JOSE MARIA VALLEJO

Sabido es que el Capitán de Navío José María Vallejo, antiguo y distinguido


Marino de nuestra Patria, es un adversario del Presidente García Moreno, y
que formando parte de los gobiernos marxistas combatió en las filas contrarias
a las del actual Gobierno. Que sigue luchando junto a Urbina y Robles con el
único fin de derrocar al mencionado Mandatario.

Parece ser que su presencia incomodaba a García Moreno, más aún cuando
se sabía que Urbina preparaba una expedición al país, por lo que ordenó en
forma tajante se lo obligue a salir del territorio nacional.

La disposición llegó al Capitán de Fragata Diego Eugenio Matos, para su


cumplimiento, quien de lo actuado comunica con el siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Comandancia de la goleta de guerra "Salado".-


Guayaquil. (...) Mayo de 1863.- Al señor. General Comandante General del
Distrito y Marina.- Señor.

"De conformidad con lo que previene la nota del Sr. Gobernador de la


Provincia, que US. se sirve transcribirme en su apreciable fecha de ayer, he
notificado al Sr. Coronel José María Vallejo en presencia del Segundo
Comandante del buque que comando y del Alférez de Navío José Antonio
156 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Gómez, para que esté entendido que debe salir del territorio de la República
en el próximo vapor, y que no podrá volver a ningún punto de ella sin obtener
antes el correspondiente pasaporte.

"Tengo el honor de comunicar a US. el cumplimiento de esta disposición


para su inteligencia y fines consiguientes.- Dios guarde a US.- Diego E. Matos".
(219)

PROYECTO DE UN DIQUE EN EL PUERTO DE GUAYAQUIL

En el diario de Guayaquil "La Unión Colombiana" del 12 de enero de 1863


se dice que hace muchos años los señores Millán, Ballén y compañía pensaron
en establecer un dique en este puerto, y más adelante manifiestan su deseo
de que si aquellos no se hallan en disposición de llevar a cabo el pensamiento
que concibieron, algunos de los capitalistas de dicha ciudad piensen
detenidamente sobre las ventajas que un dique les proporcionaría, y que
cuanto antes emprendan en su construcción. (220)

Pero lo cierto es que este intento se inicia dos décadas atrás, con la firma
Pohlemus, Mickle y Santistevan, quienes solicitaron la autorización para
instalar un dique seco, que le fue concedida, precisamente, en 1842. Mas no
se llevó a cabo la obra. (221)

Años después, en la administración de Vicente Ramón Roca, el Congreso


aprobó la construcción de un dique de carena, según decreto del 28 de octubre
de 1848, el cual contenía los siguientes artículos:

"Art. 1. Se construirá un dique en el puerto de Guayaquil.

"Art. 2. El Poder Ejecutivo oyendo el informe de aquella Gobernación o el


de alguna otra persona inteligente, designará el paraje donde deba abrirse el
dique.

"Art. 3. Queda autorizado el Poder Ejecutivo para convocar a dos individuos


o compañías que por su cuenta particular quieran encargarse de esta empresa.

"Art. 4. Concluido el término que el Poder Ejecutivo tenga a bien estipular


con los empresarios, quedará el dique de cuenta de la Nación, debiéndose
enterar en Tesorería sus productos, y correr desde entonces de cuenta de ella
los gastos de reparación.

"Art. 5. Si ningún particular o compañía quisiese tomar a su cargo esta


obra, se mandará ejecutar por el gobierno, destinado para ella los fondos
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 157

siguientes: lo. el trabajo de los presidiarios de la cárcel de Guayaquil; 2o. La


mitad de los derechos de piso y tonelada".

Mas al no presentarse empresarios que se interesen en dicha construcción,


la legislatura expidió otro decreto similar, al año de aprobado el primero.

El Ministro de Gobierno llegó a dar las instrucciones del caso para que el
Gobernador de la Provincia convocase a licitadores, pero no hubo resultado.
(222)

Es recién en 1855 en que apareció un interesado: Don Juan Francisco


Millán. Por decreto legislativo del 10 de noviembre de aquel año se le concedió
privilegio por 50 años, para construir y mantener en Guayaquil, un dique
seco. (223)

Teniendo los señores Millán, Bailén y compañía la exclusiva para


construirlo, hicieron venir el diseño según el cual debía hacerse la obra. Pasado
el tiempo en que debía iniciarse los trabajos, se dirigieron aquellos al Congreso
pidiendo se les prorrogue el plazo por un año más para comenzarlos. (224)

Ya en 1863 podemos leer en el diario mencionado lo siguiente: "Cuatro


años, mas o menos, hace que este segundo plazo se cumplió y no tenemos
noticia de cuando empezará el trabajo". (225) Lo cierto es que quizá lo costoso
de la obra, o tal vez los obstáculos de otro orden, habrían de convencer a los
señores Millán, Ballén y compañía de abandonar el proyecto.

Al siguiente año los hermanos José e Ignacio Veintimilla, ambos coroneles


del Ejército, solicitaron al Senado y Cámara de Diputados les concedan el
privilegio para la construcción de un astillero de grande escala en el puerto
de Guayaquil. Para ello se dio un decreto legislativo el 22 de octubre, mas al
siguiente día lo objetó el Presidente García Moreno. Fue necesario, por tanto,
una reforma al mismo para que el 28 de octubre se ponga el ejecútese.

Se permitía pues a los señores José e Ignacio Veintimilla y compañía el


establecimiento a su costa, en el puerto de Guayaquil, de un astillero de
grande escala de la clase conocida con el nombre inglés Dry-Dock, para la
construcción y reparación de buques de vela y de vapor, y se les concedía un
privilegio por 60 años para que ninguna otra persona pueda establecer en
dicho puerto astilleros de igual naturaleza. (226) Aquel astillero pasaría a
ser propiedad del Gobierno al vencerse el plazo del privilegio. El proyecto
quedó en decreto, pues la. obra tampoco se efectuó.
158 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Coronel Ignacio de Veintimilla, quien junto a su hermano José


solicitaron el privilegio para la construcción de un astillero en
Guayaquil. Llegó al grado de General.

Don Julio Estrada Ycaza nos dice al respecto: "El 12 de noviembre de 1870
don Juan Bautista se interesa en la construcción de un "dique firme" y pide
privilegio por 40 años. Y casi tres años más tarde, el Congreso facultó al
Ejecutivo, para que, asegurando las ventajas posibles en favor de la nación, y
previo examen de las propuestas de los señores Wilson y Bunster y F. Riso
Patron, y de los pormenores que den acerca de los ferrocarriles aéreo y
marítimo, puedan concederles el privilegio que solicitan, hasta por veinte
años. El ferrocarril aéreo se refiere quizás a algún tren elevado para tráfico
urbano. Lo de "ferrocarril marítimo" bien pudo ser traducción literal del
término inglés aplicable al vagón especial, que servía para botar al agua a
las embarcaciones menores; tal vagón tiene ruedas, que corre sobre rieles,
siendo jalado con un cabrestante. Pero tampoco prosperó este proyecto.

"También Pedro Carbo se interesó en un dique seco que consideraba


necesaria mejora y complemento de los astilleros. Pero ni con su prestigio
pudo vencer "la jettatura" que siempre acompañó a estos proyectos". (227)

EL MUELLE DE GUAYAQUIL

Previo a referirme a un conflicto ocurrido en enero de 1863 entre el Capitán


del Puerto, Teniente de Fragata Aurelio Ballén, antes de ser reemplazado
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 159

por el Capitán de Navío Agustín Oramas, y el Sr. Antonio Pérez,


administrador dell~Tlfpor queja de este último, transcribimos una relación
histórica sobre La construeció~1 rigt1~1~~MIT~
aprovechando el excelente trabajo de don Julio Estrada Ycaza en su libro "El
Puerto de Guayaquil - 2".

"En 1651 estaba haciendo Mateo Malaver un tejamar en la Marina, según


ya se mencionó. Se proponía hacerlo de 16 pies de calle y 5 pies de trinchera,
y terminarlo a mediados del 52. Por la descripción y el hecho de ser un
particular, sólo cabe pensar que se trataba de hacer un espigón que serviría
de muelle. Mas no nos atrevemos a llamarlo abiertamente así. En 1657 se lo
reparaba. •
"El primer muelle propiamente dicho, lo tuvo Guayaquil gracias a la
iniciativa y dinamismo ejemplar de Vicente Rocafuerte. Desde junio de 1840
le anunciaba a Flores su propósito de construirlo. Del comercio obtuvo un
préstamo de 3.600 pesos, a lo cual agregó lo que pudo recoger en otras fuentes
y construyó el muelle, en menos de 1 año. En 1842 ya lo tenía dotado de un
pequeño ferrocarril hasta los depósitos de aduana y de unas pequeñas grúas.

El muelle de Guayaquil construido por la firma Antonio Pérez y Compañía, cuya obra la iniciaron en 1857.
(Archivo Arq. Melvin Hoyos G.)
160 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"No podía pedirse mucho de un muelle hecho con recursos limitadísimos;


no duró sino poco más de una década: Pero era un ejemplo que tenía que ser
imitado. El segundo muelle ya se debe enteramente al esfuerzo privado; lo
construyó la firma de Antonio Pérez y Cía., a la cual, por Decreto Legislativo
del 24 de octubre de 1856, se le otorgó privilegio, por 40 años. La obra fue
iniciada el 21 de abril de 1857.

"El Gobernador de la Provincia confirmaba, en informe del 27 de diciembre


de 1860 la existencia del "muelle construido por particulares donde los buques
de todo porte atracan... y hacen su descarga con la mayor facilidad y en pocos
días; ha desaparecido pues, ese sistema antiguo de balsas, dispendioso y
tardío... Una observación parecida hizo un viajero en mayo de 1868:
"Guayaquil posee un excelente muelle; los vapores en la marea llena atracan
a él".

"El promotor, don Antonio Pérez, Cónsul de Colombia, fue administrador


muy severo, pero también fue filántropo. Falleció cuando aún estaba en plena
vigencia la concesión que se le había otorgado a su firma. En virtud del
testamento por él otorgado, las utilidades que le correspondían en la sociedad,
se entregaban al obispado de Guayaquil para efectuar repartos diarios a las
mujeres y viudas pobres. La Conferencia de San Vicente Paul obtuvo la
expedición del Decreto del 11 de diciembre de 1865 para que se le entregasen
a ella los fondos pero luego se le derogó el 24 de noviembre de 1867, para que
tuviese plena vigencia la disposición testamentaria.

"Después de muchos años de servicio, el uso del muelle y las obligaciones


de los empresarios fueron objeto de un Reglamento que dictó Gabriel García
Moreno, el 20 diciembre de 1871. Al año siguiente se le concedía permiso a
don Federico Franco para construir otro muelle al lado del estero del primer
puente, con una capacidad de uno a tres buques de alto bordo. El plazo de la
concesión fue así mismo de 40 años, al cabo de los cuales, como en el caso
anterior, el muelle pasaría a ser propiedad del Estado. Don Pedro Pablo García
Moreno, hermano del Presidente y acaudalado exportador de cacao, obtuvo
el mismo año permiso para construir un tercer muelle "por el segundo estero".

En 1886 se decidió ampliar el pequeño ferrocarril del muelle


continuándoselo hasta la Aduana. Para ello se celebró nuevo contrato con los
mismos empresarios del Muelle, Antonio Pérez y Cía.

"Al vencer la concesión original, el 30 de noviembre de 1896 -poco después


del incendio de tan ingrata memoria- el muelle revertía al Estado. El gobierno
nombró una comisión para recibirlo, integrándola con don Francisco García
Avilés, don José A. Marín y don M.G. Hurtado. Por supuesto el tiempo no ha
había pasado en balde; los comisionados lo encontraron en estado ruinoso y
dejaron constancia de ello en su informe de diciembre 2". (228)
ACONTECIMIENTOS PORTUARIOS Y MARITIMOS 161

El 12 de enero de 1863 el mayor General de Marina recibía una


comunicación del General Antonio Martínez Pallares, en la que se refiere a
una queja de los señores empresarios del muelle, en contra del Capitán del
Puerto de Guayaquil. Consultada al respecto esta última autoridad dijo en
su defensa lo siguiente:

"Me ha causado gran sorpresa la nota de US. de ayer, con respecto a la


queja que los señores Antonio Pérez y compañía han elevado al señor General
Comandante General. Tengo la satisfacción de decir a US., que en los 20
meses que tengo la honra de ocupar este puesto, he corrido yo personalmente
con la amarrada al muelle de casi todos los buques que han llegado en este
tiempo, y no le concedo a ninguno de los socios o representantes de la sociedad
Antonio Pérez y compañía tan profundos conocimientos, que puedan tachar
una faena hacha por mí, que tengo 23 años de práctica marinera y que he
amarrado muchos buques en infinitos muelles.

"Los señores Antonio Pérez y compañía mirando duramente sus intereses


no cuidan de las averías que los buques pudieran hacerse, y quisieran que
cupieran 20 en el muelle apiñándolos a media vara de distancia.

"Esto podría hacerse tal vez, si esos señores hubieran cumplido el contrato
que celebraron con el Gobierno de construir un muelle sólido, bien construido
de maderas incorruptibles y no un armado de maderas podridas sujetas con
4 clavos y unas tantas cuñas, en donde para arrimar los buques se necesita
gran precaución dejando cierto espacio entre ellos para que con el flujo y
reflujo no tesen demasiado las amarras, hagan romper una estaca y de allí
una avería.

"El vapor "Peruano", siempre que llega, al acostar al muelle rompe estacas
por el mal estado en que están. Hay una quebrada a flor de agua en la bajamar,
que está muy saliente e inutiliza una porción del muelle, pues los buques
corren peligro de clavarse en el fondo.

"Hace meses he advertido esto a los tres empresarios y no han tomado la


menor providencia.

"Los señores Antonio Pérez y compañía debieran en vez de quejarse, serme


agradecidos por el cuidado que tengo de su muelle, y en cuanto al artículo 2o.
del reglamento del puerto, yo lo hago conservar debidamente puesto que fui
yo quien hizo ese reglamento y puse ese artículo a beneficio del muelle para
que cupieran cuantos buques fuera posible.

0 "Espero que US. se servirá hacer saber estas razones al señor General
Comandante General expresándole el sentimiento que tengo de que los señores
Antonio Pérez y compañía lo distraigan de sus atenciones con quejas
absurdas". (229)
162 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Aunque el teniente de Fragata Aurelio Ballén ha provocado algunos


entredichos con autoridades, empresarios y empleados, al extremo que recibió
en algún momento un arresto y posteriormente fue impedido de abandonar
el país ante sus intenciones de evadir cuentas por su mala administración, y
que en este último caso también es protagonista de incidentes, es nuestra
intención por ahora que se analice la comunicación transcrita, porque en ella
se detallan las condiciones en que se encuentra el muelle del puerto de
Guayaquil en 1863 a más de observar la rutina, control y reglas que lo rigen.

EL PUERTO DE JAMBELI

Desde el 22 de mayo de 1861, mediante ley, se señala el término de 2 años


para la apertura del puerto de Jambelí, pero dicho tiempo fue insuficiente
por falta de fondos. Por ello, considerando que la facultad de abrir y cerrar
puertos corresponde al Poder Legislativo amparados en el artículo 39,
atribución 16 de la Constitución, el Senado y Cámara de Diputados del
Ecuador reunidos en congreso decretaron con fecha 15 de septiembre de 1863
la prórroga de dos años más al términos concedidos para la apertura de dicho
puerto. (230)

García Moreno, consciente de la importancia de aquel puerto, dictó el


ejecútese del decreto con fecha 21 de septiembre del mismo año. Era pues
importante mantener un puerto más al sur de Guayaquil, y es de pensar que
las continuas intentonas de los urbinistas de ingresar desde el Perú, con una
expedición armada, hacían apurar el establecimiento del mismo por razones
de defensa, pero el estilo del Sr. Presidente de armar bajeles a última hora,
sin mantener una pequeña marina de guerra disuasiva para el control
marítimo y de las costas, no era lo más aconsejado.
CAPITULO V

Las denotas
de Tulcán
y Cuaspud
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 165

LAS DERROTAS DE TULCAN


Y CUASPUD

lfredo Pareja Diezcanseco se refiere a las "locuras de Tulcán y Cuaspud",


aduciendo que fueron la precipitación, vanidad personal y soberbia del
presidente García Moreno los que le indujeron a acometer esos lances.
(231) El propio escritor e historiador argentino don Manuel Gálvez que se
cuenta entre los defensores del discutido mandatario, expresa textualmente:
"A García Moreno los cuarenta años- cumplidos el 25 de diciembre de 1861-
van a conducirle a uno de los grandes errores de su vida, acaso el mayor de
todos: va a meter a su patria, al Ecuador arruinado y desarmado, en una
guerra que será por fuerza desastrosa". (232) Se refiere a que fue el mayor
error de su vida, después del de las cartas a Trinité, pero que éstas las escribió
en momentos de desesperación, creyendo así salvar su Patria.
"Pero ahora - prosigue - en 1862, y después de todo lo que ha sufrido su
patria, ¿Cómo explicar que la conduzca a la guerra, por su propia iniciativa,
cuando nadie la provoca, cuando el mínimo incidente que la origina
-refiriéndose a la de Tulcán- puede arreglarse fácilmente?. No hay justificación
para García Moreno. Ni explicación siquiera". (233)
Por su parte el estadounidense Ricardo Pattee, admirador y biógrafo de
García Moreno, asegura que la política internacional de éste con respecto a
Colombia constituyó uno de los aspectos menos alentadores de su
administración. Y dice: "Precipitación, impaciencia y cierta petulancia no
ajena al temperamento quisquilloso del Presidente, le indujeron a ir al extremo
en su esfuerzo de defender la integridad nacional, resistir las incursiones
colombianas y castigar a quienes durante diez años habían venido hostigando
sin misericordia al Ecuador". (234)

El propio Oscar Efrén Reyes escribe en una de sus obras: "Dos veces en
menos de dos años (de julio de 1862 a diciembre de 1863), sufrió catastróficas
166 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

derrotas en guerras con Colombia, que él mismo provocó". (235)

Benjamín Carrión en su polémico libro "García Moreno, el Santo del


Patíbulo" al referirse a la guerra de Tulcán dice: "Celos y amores, según la
bella expresión pronunciada por el Diputado Endara en el Congreso
ecuatoriano, fueron los que movieron al apasionado proyecto, para lanzarse
a la aventura más descabellada, más vergonzosa y más ridícula de nuestra
historia". (236)

Pero es que, dígase como se diga, casi todos los historiadores coinciden en
que la política internacional de García Moreno con respecto a Colombia, fue
catastrófica. Nuestro país tuvo que soportar dos guerras con aquel país en
apenas año y medio. Su carácter violento fue la chispa que inflamó dichos
conflictos, de los que nos vamos a referir a continuación.

EL CONFLICTO DE TULCAN

En el país del norte, donde están ocurriendo continuas guerras intestinas


entre liberales y conservadores, se había est ecido un sistema federal, y es
cuando se lo llama Confederación Granadi El General Tomás Cipriano
Mosquera fue elegido Gobernador del Cauca, y éste se levantó en armas contra
el Gobierno Central, habiendo separado al Cauca de la Confederación el 8 de
mayo de 1860.
Se produce el término de la presidencia de Ospina, y al no reunirse el
Congreso para efectuar los escrutinios, entregó el mando al Procurador de la
Nación doctor Calvo. Es ante este desconcierto que Mosquera resuelve atacar
Bogotá, entrando en dicha ciudad el 18 de junio de 1861, y como dice don
Benjamín Carrión: "Entró en la capital ese día, tomó presos a los magistrados,
desterró a algunos obispos politiqueros, ordenó la salida del delegado
apostólico, exaltado partidario de los conservadores. Y sobre todo, expulsó a
los jesuitas, a quienes consideraba sus más encarnizados enemigos. Adoptó
una ley del Patronato, llamada entonces de Tuición para poder disponer de
su amaño del clero y de la iglesia, y retó a los conservadores en todos los
terrenos". (237) Pronto dará al país el nombre de Estados Unidos de Colombia,
mientras los conservadores seguirán llamándolo Confederación Granadina.

Es que estos últimos, aunque han perdido la capital, continúan la lucha y


eligen Presidente de la República al General Julio Arboleda. Este jefe ha
huído luego de ser derrotado, vuelve a entrar en Nueva Granada por la
frontera sur y se pone al frente de las fuerzas de Pasto y de Antioquía.

La guerra civil es cruenta, y las acciones tienen lugar, sobre todo, en la


frontera con Ecuador. Existían en aquellos momentos la Confederación
Granadina que defendía Arboleda y los Estados Unidos de Colombia bajo el
mando de Mosquera.
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 167

Ambos enviaron misiones diplomáticas al Ecuador, pues interesaba mucho


a las dos facciones la amistad del Gobierno de García Moreno. Llegaron
aquellos a Quito con la misión de atraerse al Presidente para conseguir, si no
una intervención favorable, por lo menos una neutralidad benévola. (238)

Dice Benjamín Carrión que por razones de afinidad ideológica y de


frecuencias sociales, el representante del General Arboleda, don Arcesio
Escobar, comenzó a ganar la partida. Que García Moreno sabía que con
Arboleda triunfante en la Confederación Granadina, era más fácil obtener
apoyos en su lucha de todas las horas contra Urbina, muy amigo,
correligionario y favorecido por Mosquera. (239)

* * *

A Urbina se le acusó de alianza indigna con Mosquera para e


I.(1.1LE--si Pues de las cartas cruza as entre
e eneral José María Urbina y el General Cipriano Mosquera, sus enemigos
tomaron maliciosamente ciertos pasajes o párrafos, para presentarlos aislados
y hacer parecer que aquello ocurría.

Tal es así que en una carta del 14 de febrero de 1862, que Urbina envía
desde Lima, no se dio a conocer o se excluyó el penúltimo párrafo en el que
estaban condensados los verdaderos móviles de quien escribía, y constituye
por sí solo una refutación. Veamos lo que dice literalmente:

"Nada debo decir a Ud. (General Mosquera) sobre la idea del


restablecimiento de Colombia y la adopción de la forma federal; porque mis
anhelos limitarán a ver separados de la escena pública a los dos hombres que
tienen en inquietud y alarma incesante a la América del Sur. Donde este
triunfo se haya alcanzado, allí creeré terminada mi misión, y obedeceré la
voluntad de la mayoría de mi Patria, que, por cierto, no será de la escuela
Jesuítica y colonizadora que encabezan García Moreno y Flores". (240)

Es verdad que a pesar de lo dicho por Urbina, Mosquera le insistió sobre


su idea de la Confederación Colombiana con su carta del 26 de mayo de 1862,
en la que manifiesta: "Todas las cuestiones que surgen hoy en el país que fue
Colombia, para evitar la conquista o la perpetuidad de los mandarines, se
resuelven con la reaparición de Colombia". (241)

Es por esa carta y por aquellas intenciones que Urbina decidió cortar su
correspondencia con el General Cipriano Mosquera. Dicho proyecto no le
interesaba, y lo desechó porque amenazaba a la autonomía del país. Con ello
dejamos aclarado la verdadera relación entre estos dos Generales, y así
quedan las cosas por el momento.
168 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Mientras tanto en Quito están ocurriendo sucesos de otra índole, pero que
los mismos van a afectar las relaciones del Presidente ecuatoriano con el
General Arboleda. Se trata de la amistad, y según muchos, amores entre
García Moreno y la Sra. Virginia Klinger, que se ven complicados por la
intromisión del representante de Arboleda, Arcesio Escobar. Veamos como lo
relata don Manuel Gálvez:
"García Moreno mantiene una amistad íntima con los señores Carlos y
Juan Aguirre. Uno de ellos, Carlos, es su Ministro de Hacienda. Noche a
noche, reúnese con sus amigos y sus esposas, Virginia y Leonor Klinger, ambas
hijas de un coronel francés que había servido al Ecuador. A estas tertulias
suele acudir el granadino Arcesio Escobar, que está a cargo de la oficina del
representante de Arboleda. Escobar es un joven elegante y simpático y además
poeta. Pero entre sus méritos no figura la discreción. Molesta a García Moreno
con sus insistencias para que adopte disposiciones rigurosas contra los
partidarios de Mosquera que viven en el Ecuador. Llega hasta provocar
discusiones en la tertulia, que originan "verdaderos escándalos". Por todo
esto, García Moreno le tiene antipatía. Un historiador, fanático partidario
del Presidente, dice: "Con el fin de prevenir tan sensibles desmanes, púsose
varias veces en observación al mismo Presidente, logrando así estorbar la
entrada al descomedido secretario".
"¿No es nada más que eso lo que tiene tan irritado a García Moreno contra
el representante de Arboleda? Los enemigos de García Moreno
-contemporáneos y póstumos- dicen que hay algo más grave. Afirman que él
anda en amores con la dueña de casa, Virginia, y que tiene celos del joven
Escobar. En el Ecuador siempre ha habido quien creyera en esos amores, sin
que exista el menor testimonio sobre su veracidad. Hasta se cuenta que, en
un rapto de celos, García Moreno llega a herir con un estilete a Virginia.
Juan Montalvo ha escrito sobre este motivo un relato fantástico: García
Moreno habría llevado a una casucha de los arrabales a la joven herida y
sacado de sus casas, por engaños, a un médico y a un practicante para que la
atendieran. La joven habría permanecido allí algunos días, hasta su curación.
Andrade afirma que el practicante, el más tarde médico doctor Camilo
Casares, le contó estas cosas a Montalvo, durante un viaje a Chile. Pero la
palabra de Montalvo no merece fe ninguna. Tan grande es su talento como
su falta de escrúpulos. Pocos deslenguados ha habido como él. Por otra parte,
su estilizado relato, en el que a nadie nombra, parece más fantasía que exacta
expresión de la realidad. Y aún cabe observar algo sobre la edad del
protagonista. Montalvo, cuya anécdota aparece en 1866, la da por ocurrida
cuando el médico que en ella interviene, entonces de nombradía, era sólo un
practicante. Esto permite creer que el suceso, de ser cierto, ha acontecido
más de veintiséis años atrás, pues por diversos motivos - matrimonio reciente
de García Moreno, sus destierros, sus viajes, su acción política-, no ha podido
serlo después de 1846.
"Dejando aparte la historia de Montalvo, ¿puede creerse en los amores de
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 169

• García Moreno con Virginia Klinger? Que él es capaz de una pasión, no cabe
duda. Hasta es posible que sienta algún amor por aquella dama. Pero,
4, ¿podemos deducir que los amores tuvieron realización material? Analicemos
la situación de García Moreno. Es el Presidente de una pequeña República,
cuya capital no tiene más de ochenta mil habitantes. Esto significa que todos,
en Quito, le conocen. Y le conocen, no sólo físicamente, sino como un católico
fervoroso y apasionado, como un gobernante que ha empezado una gran obra
de moralización. ¿Con qué derecho podía exigir moralidad a los sacerdotes y
a los ciudadanos en general, si él casado y creyente, moralista acérrimo, fuese
el primero en pecar? García Moreno puede sentir una pasión por una mujer
pero él tiene otras pasiones mucho más fuertes: la moralización del país, la
salvación del Ecuador. De esto se deduce: que sus conveniencias como hombre
y gobernante están en no tener amores culpables, los que no tardarían en ser
conocidos por el país entero; que todas las circunstancias le impiden llevar a
término una aventura, pues, dada su situación, le sería imposible encontrar
dónde esconderla; y que la elevada posición social de la dama, lejos de favorecer
el cumplimiento amoroso, es otro obstáculo importante. Y, por otra parte,
debe recordarse como en Paita, cuando tenía treinta y dos años, rechazó con
enojo la propuesta de Ricardo Palma de conquistar a dos chicas, al parecer
no difíciles; y cómo en París, cuando tenía treinta y cinco años y su mujer no
estaba a su lado, rechazaba a las busconas. Quien resiste a las tentaciones
allí donde es un desconocido - lo que representa la impunidad - y en la época
del hombre en que son más fuertes las pasiones y los instintos, ¿cómo no ha
de resistirlas en Quito, con su mujer al lado y con los peligros de que su
pecado pueda descubrirse, puesto que es el Presidente de la República?.

"Todo esto no quita que él guste de la conversación y la amistad con Virginia.


Muy probablemente exista entre ellos una amistad sentimental, acaso un
flirt. Ella es una de las pocas mujeres cultas de Quito y tiene inteligencia en
alto grado. Hasta es posible -repitámoslo- un amor espiritual entre ellos.
Esto no constituye un pecado. Cualquiera puede enamorarse, y mientras no
se hagan tentativas para pecar, ni se tengan pensamientos impuros, no existe
el pecado. El gran católico, el hombre austero que es desde hace años García
Moreno, puede aceptar una situación semejante sin incurrir en grave falta.
Pero cabe una pregunta: esa amistad sentimental, o ese amor espiritual,
¿pueden ocasionar celos? Claro que sí. La amistad profunda, el amor de los
espíritus, ocasiona tan fuertes celos como la pasión puramente carnal.

"Por estos días de marzo de 1862, García Moreno va a adoptar varias


disposiciones contra Escobar y la Confederación Granadina, que sus enemigos
atribuirán a celos. Cárdenas, el 27 de marzo, le escribe a Arboleda: "Nuestro
cónsul fue desconocido con chocante descortesía, negándose el Ministro de
Relaciones Exteriores a recibirle una protesta". En la misma carta le cuenta
• cómo por noticias de Quito, sabe que el 14 de marzo el cónsul general "fue
despojado del archivo empleándose para ello la fuerza". Semanas después,
García Moreno da órdenes para prender a Escobar, que se esconde. Más tarde,
en junio, un día que el granadino sale de su escondite, es detenido en la plaza
170 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

principal, en el portal de Salinas. Dícese que el pasar delante de la casa de


Aguirre, Virginia, enterada del acontecimiento y resuelta a salvar al preso,
consigue del oficial que lo custodia mediante un ardid, que le permita entrar
por un momento, de lo cual se vale para hacerlo huir por los fondos a una
propiedad vecina, desde donde va a asilarse a la Legación Británica.

"Pero, aún cuando los celos existan, ¿es posible que García Moreno se deje
dominar por ellos hasta llevar a su país a una guerra? Los celos, de ser ciertos,
se refieren a un empleadillo del consulado granadino. No al presidente del
Estado vecino, ni siquiera a su representante diplomático. ¿Puede ser tan
loco un hombre como para culpar a un gobierno o a un país entero de lo que
ha hecho un empleadillo del consulado? Que ese grano de arena contribuye a
poner a García Moreno en contra de Arboleda, no hay inconveniente en creerlo
y en el supuesto de la existencia de los celos. Pero es ingenuo, ridículo y
grosero imaginar algo más en un espíritu tan serio como del Presidente
ecuatoriano". (242)
Igual que Manuel Gálvez los historiadores Berthe, J.L.R. y Severo Gómez
Jurado, S.I. rechazan la consumación de una pasión amorosa con aquella
señora de la aristocracia quiteña. Pero dice Benjamín Carrión: "Mas bien el
ilustrísimo señor Arzobispo Pólit le permite algún pequeño desliz, lo mismo
que el señor Robalino Dávila quien, dice el Reverendo Padre Gómez Jurado,
"se arrepintió notablemente de haber dado crédito, hasta cierto punto, a tantas
calumnias contra la honestidad de García Moreno". (243)

Pero el mismo Carrión manifiesta: "PUES BIEN: nosotros encontramos


totalmente verosímil y desde luego, nada deshonrosa para el señor García
Moreno y la señora Klinger, la versión de que se amaron en todos o en
cualquiera de los estadios del amor. Porque nosotros no admitimos que a
García Moreno se le arrebaten los atributos humanos, para dejarlo solo con
su categoría arcangélica. García Moreno fue un hombre. Hombre de carne y
hueso. De espíritu y sangre". (244)

"Mientras tanto, para ofender a Escobar, reconoció al representante de


Mosquera, doctor Manuel María Castro el 22 de febrero de 1862, pocos días
depués de haber recibido la carta doctrinaria y conminatoria del Ministro de
Arboleda... Las cosas se presentan, así, demasiado claras y evidentes. "Celos
y amores", según la bella expresión pronunciada por el Diputado Endara en
el Congreso ecuatoriano, fueron los qué movieron al apasionado proyecto,
para lanzarse a la aventura más descabellada, más vergonzosa y más ridícula
de nuestra historia". (245)
Se refería dicho autor al conflicto de Tulcán, pues dice que el incidente
inicial, que según otros lo provocó, es insignificante como para ser motivo
suficiente para inducir una guerra. Que ante el pedido de explicaciones a
Arboleda, éstas tardan pero llegan y que son completamente aceptables. Las
da el Coronel Francisco Zarama, Jefe Militar de Pasto, prometiendo elevar la
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD, 171

reclamación de García Moreno al Supremo Gobierno de la Federación, es


decir a Arboleda. (246)

García Moreno - continúa - no estaba dispuesto a dejarse satisfacer por


nada ni por nadie. Que antes de "empuñar la espada" se comunica con el
Gobierno de los Estados Unidos de Colombia, o sea con los liberales de
Mosquera, dándole cuenta del "incidente fronterizo" y anunciando que va a
proceder contra Arboleda en guarda del honor ecuatoriano atropellado en la
frontera "porque es notorio que el gobierno de V.E. no cuenta con los medios
de someterlas -a las fuerzas conservadoras- al cumplimiento de tan
incuestionable obligación". (247)

En definitiva para Benjamín Carrión lo que había ocurrido era un incidente


pretexto, que en realidad fue la aventura de amor y celos la que entre
bastidores indujo a la venganza del mandatario que terminó en la derrota de
Tulcán.

Don Ricardo Pattee en su obra "Gabriel García Moreno y el Ecuador de su


tiempo" efectúa un relato detallado de los sucesos hasta la culminación del
conflicto en Tulcán, que transcribimos a continuación:

"La situación fronteriza que provocó las represalias de García Moreno era
más o menos la siguiente, depurando lo más posible el testimonio de testigos
oculares y de los partícipes que figura en los partes oficiosos. Después de la
rimera ocupación de Popayán en 1861, el Sr. Zarama y el General Erazo,
ue habían acompañado a Arboleda, tornaron al sur, el primero como Jefe
ivil y Militar de aquellas lejanas provincias, y el segundo como comandante
e armas de Túquerres. Necesaria era la constante vigilancia de estos jefes,
orque a despecho de las reclamaciones frecuentes con que ocurría al Gobierno
el Ecuador el encargado de negocios de la Confederación Granadina en Quito,
s revolucionarios emigrados en Tulcán, no cesaban de pasar y repasar el
archi, manteniendo en perenne inquietud a los pueblos comarcanos.

"Los heChos inmediatos en la forma más escueta fueron los siguientes: Un


al Matías Rosero, después de haber batido a una partida enemiga en Yaramal,
en territorio neogranadino, siguió a los que huían hasta la frontera
ecuatoriana. Estaba de jefe militar en Tulcán, Vicente Fierro, quién presenció
el avance de los legitimistas colombianos persiguiendo a los derrotados.
Ocurrió entonces el incidente que produjo tan graves consecuencias. Fue
herido Fierro por los granadinos en el curso de la refriega. Hasta aquí la
versión aceptada y comprobada. Luego vienen las contradicciones. He aquí,
brevemente, la justificación alegada por cada parte. Según la autoridad
ecuatoriana y los notarios que tomaron el testimonio a raíz del acontecimiento,
Matías Rosero maltrató e hirió alevosamente a la primera autoridad militar
de este cantón ecuatoriano, Vicente Fierro. El mismo Fierro, en carta fechada
en Tulcán el 26 de junio de 1862, ofrece una exposición pormenorizada de los
sucesos. "Sospeché el día 19 que habría alguna función de armas y salí con la
172 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

pequeña guarnición de 20 fusileros, sin municiones y diez lanceros de a pie a


guardar la línea". Luego, según este oficial, unos cuantos prófugos se
internaron en el Ecuador, buscando refugio de sus perseguidores. "En el
instante apareció el oficial ospinista Matías Rosero seguido de una veintena
de hombres que venían precipitadamente dando fuego al pasar la línea. Creí
comprometida mi escolta... la retiré donde no tuviera peligro, solo y desarmado
me dirigí donde el oficial que ya con los suyos en mucho mayor número, estaba
en nuestro territorio. Le dije que era yo el jefe ecuatoriano de la línea, que
estaba él en territorio ecuatoriano violándolo y que no le era permitido
perseguir a los asilados en territorio neutral y le intimaba volver atrás. Me
contestó con reconvenciones contra nuestro Gobierno -le contesté-. Hablando
estaba, cuando, sin esperarlo, recibí del expresado oficial un golpe de sable
en la cabeza. Me estreché contra él para evitar los golpes, echándole en cara
la fealdad y cobardía de su acción y volví la cabeza atrás, creyendo ver un
soldado mío para mandarle hacer fuego. Rosero aprovechó de este instante
para repetirme un golpe más fuerte entre la cabeza y la mano. Un soldado de
los suyos en el mismo acto, me clavó la bayoneta en el codo del brazo sano.
Otros muchos golpes recibí por la espalda, Creyéndome sin duda moribundo,
mi agresor se precipitó con toda su tropa sobre mi escolta, la persiguió con un
fuego vivo más de una legua dentro de nuestro territorio.

"El jefe colombiano de las provincias del sur, José Francisco Zarama,
respondió a las reclamaciones del Gobierno de Quito, el 30 de junio en estos
términos: "Una banda de facciosos, de los que se han estado organizando
constantemente en territorio vecino, se internó en el nuestro y atacó la fuerza
de la confederación ... derrotada aquélla, pasó la línea y continuó haciendo
fuego sobre nuestros soldados apoyándose en un destacamento ecuatoriano
con cuyo motivo, los oficiales granadinos, olvidándose las precisas y reiteradas
órdenes que tienen, continuaron la persecución algo más allá de la frontera.
En el calor del acontecimiento, ocurrieron las heridas del Cindte. Fierro.

"En un estudio posterior, en que se pretende explicar los hechos de aquella


fecha, desde el punto de vista colombiano, se alegó que los sucesos que nos
hemos venido refiriendo, no tuvieron lugar en el Ecuador sino en Nueva
Granada, en un sitio llamado Taya, en donde "después de haber sido batidos
en Yaramal, se hicieron fuertes los derrotados, protegidos por Vicente Fierro,
Jefe Militar de Tulcán. En la refriega, el mayor Rosero, Jefe de las fuerzas
granadinas hiere a Fierro, quien no tenía distintivo alguno que demostrara
ni su nacionalidad ni la autoridad ejercida por él en su país.

"Que sepamos, no existe relato absolutamente veraz, de este incidente. De


todo lo que hemos podido examinar se saca en limpio que Rosero fue el agresor;
Fierro la víctima y que aparentemente en la perturbación del momento, que
necesariamente acompañaba la contienda, resultó difícil fijar con entereza la
responsabilidad. García Moreno, enconado, pidió la destitución del
Comandante Erazo que dirigía la partida de victoriosos y la entrega de Rosero
a la justicia ecuatoriana. Mientras se esperaba la decisión de Julio Arboleda,
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 173

García Moreno despachó tropas a la frontera bajo el mando del Coronel Daniel
Salvador. La situación se hizo más tirante gracias al interés de Mosquera en
dar la razón al Ecuador, contribuyendo así a debilitar a Arboleda, a quien
miraba como rebelde. Arboleda no permitió efectivamente, que se diera una
explicación cabal a García Moreno. Ambas partes se preparaban para las
hostilidades. El jefe colombiano detuvo al emisario ecuatoriano Napoleón
Aguirre que llevaba una memoria para el Coronel Zarama. Una invitación a
conferencia dada por Arboleda fue desoída. El 31 de julio los ejércitos se
encontraron frente a frente. Los colombianos contaban con el doble de la
fuerza de los ecuatorianos.

"García Moreno, al decir del mismo Arboleda, "se arrojó sobre nosotros
con un valor digno de mejor causa... se replegó, sin embargo, con dignidad".

El final de este episodio puede resumirse en las palabras de uno de los


colombianos que participan: "A este tiempo el señor García Moreno que se
había retirado hacia el norte con otros compañeros, mandó a decir al
Comandante en Jefe que estaba rendido y se entregaba. Entonces el General
Arboleda mandó una comisión a traerlo; pero el Coronel Erazo y el Mayor
Matías Rosero que seguían en su persecución, lo encontraron primero y le
hicieron rendir las armas. Estos jefes y la comisión que se le había mandado,

General Julio Arboleda, Presidente de la Confederación Granadina, quien como


General en Jefe de su ejército combatió contra las fuerzas ecuatorianas
lideradas por el propio Presidente Gabriel García Moreno, en 1862.
174 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

lo condujeron hasta el pueblo y presentaron a Arboleda quien lo puso


inmediatamente en libertad". El Sr. Arboleda, generoso con García Moreno,
quiso entrar sin demora en negociaciones y así fue que no perdió tiempo en
llegar a entenderse con el Presidente ecuatoriano. "Con hombre de punto y
valor como el Sr. García Moreno cualquier negociación es fácil. Ya he dirigido
un oficio al Gobierno del Ecuador dándole parte de la victoria; aguardo un
plenipotenciario para tratar".

"Arboleda y García Moreno trataron directamente, llegándose a firmar


dos convenios: el primero llamado simplemente Artículo Adicional, por
considerarse una aplicación del Tratado de 1857; y el segundo, de carácter
reservado, que comprometía a los contratantes a cumplir ciertas obligaciones
bajo la palabra de honor de ambos. Este convenio secreto es de importancia
en vista de la situación respecto de Mosquera. Como se observará al dilucidar
la complicada trama en que estaba envuelto Mosquera, el Presidente
ecuatoriano buscaba el medio de asegurarse la ayuda del sector colombiano
más adicto a sus principios. El primer tratado de carácter público establecía
las condiciones bajo las cuales se esperaba reorientar la política de ambas
repúblicas hacia la paz. Se hizo hincapié en la necesidad de observar el tratado
de julio de 1856, mandó ejecutar en 1857 y que garantizaba la paz. Recuérdese
que García Moreno trataba en este caso con Arboleda en nombre del gobierno
legítimo de Nueva Granada. Decía el Artículo IV que, si a pesar de las
providencias que tomen el uno y el otro gobierno, en cumplimiento de aquel
tratado, para impedir eficazmente que los asilados de una nación perturben
el orden y la paz de la otra, los dichos asilados cometieron este delito, los
culpables perderán, ipso facto, el derecho de asilo y serán entregados a las
justicias de la nación ofendida sin aguardar a que los reclamen. En el quinto
artículo los dos gobiernos se comprometieron mutuamente a defender la
integridad del territorio de sus respectivos Estados. Este tratado, que es
adicional al anterior de amistad, comercio y navegación, fue firmado por Rafael
Carvajal y Julio Arboleda en Tulcán, el 8 de agosto de 1862. No nos extraña
que haya escrito el Vicepresidente, Don Mariano Cueva, el 20 de agosto, que
con las tropas inexpertas con que contaba el Ecuador y el revés tan grave que
había sufrido el ejército nacional "mucho es que, en tales circunstancias,
tengamos hecho un tratado que en nada nos deshonra".

"En la misma fecha se firmó el tratado secreto que dependía únicamente


del honor de los contratantes. "Los infrascritos, Gabriel García Moreno,
Presidente de la República del Ecuador y Julio Arboleda, General en Jefe de
los ejércitos de la Confederación granadina, hemos celebrado y ofrecemos
cumplir bajo la garantía de nuestra palabra de honor, el convenio siguiente".
Así reza el preámbulo de este importante documento. No fue un tratado en el
sentido oficial, sino convenio personal entre los dos jefes. Los artículos
establecían que García Moreno haría entregar a Arboleda "cuatro mil fusiles
o rifles nuevos y buenos con sus bayonetas: doscientos mil cartuchos de pólvora
embalados para los mismos; cuatro cientos mil fulminantes; dos mil vestidos
completos para la tropa; cien quintales de nitro y cien mil pesos de a ocho
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,

LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 175

décimos por partidas de seis mil pesos mensuales cada una. El precio de los
artículos de guerra será fijado previamente". Los Artículos II y III fijan con
precisión las condiciones bajo las cuales se entregarían este dinero y los
artículos de guerra. La cantidad estipulada se entregaba en calidad de
empréstito. Como el gobierno ecuatoriano se hallaba endeudado para con el
de Nueva Granada, este dinero sería deducido de la totalidad. García Moreno
se comprometió además a cumplir lo estipulado a la mayor brevedad,
entregando los pertrechos en Ibarra y Tulcán. Finalmente, después de algunos
detalles más acerca de los trámites y el procedimiento para el cumplimiento
de lo arriba mencionado, los dos gobiernos se comprometieron "a prestarse
mutuamente y con buena fe, con generosidad e hidalguía, todos los auxilios
que sean necesarios" para conservar el gobierno legítimo que prevalecía en
cada región.

"Apenas negociados estos dos tratados, García Moreno se vio obligado a


pasar a Guayaquil a sofocar un levantamiento inspirado por Urbina. Los
años de 1862 y de 1863 fueron de extrema agitación en toda la República,
repitiéndose, como veremos en un capítulo posterior, los conatos de rebelión
y especialmente la amenaza de una invasión de las fuerzas urbinistas. García
Moreno se encontró envuelto de numerosas complicaciones que le
incapacitaron para cumplir en toda su extensión lo pactado. No es cierto que
no hiciera nada para llevar a efecto lo acordado. Llegaron muchos pertrechos
a Tulcán, entregándose al comandante de armas, coronel Yépez. Sin embargo,
justo es reconocerlo, que García Moreno no cumplió este tratado en toda su
amplitud, provocando nuevamente la animosidad de Julio Arboleda, quien
hizo manifestaciones de enemistad sobre la frontera ecuatoriana. Obligado
por la presión de los mosqueristas, Arboleda se retiró, para caer asesinado el
12 de octubre. La desaparición del jefe debilitó de tal manera la causa
legitimista que hizo posible el fácil triunfo de Mosquera". (248)

EL CONFLICTO DE CUASPUD

1863 fue un año de desacuerdo y tensiones entre el General Tomás


Mosquera y el Presidente ecuatoriano. Por supuesto que Mosquera ya manda
en toda Colombia. Don Alfredo Pareja Diezcanseco narra los sucesos como
sigue:

"En verdad, Mosquera estaba haciendo un ejemplar y progresista gobierno


liberal en Colombia. Pero es verdad también que sus intensiones sobre nuestro
país fueron aviesas.

"García Moreno ignoraba entonces que el General Mosquera andaba en


tratos con el Perú para una división del Ecuador. Pero sí sabía que su propósito
era que entráramos en la Confederación Granadina como tres grandes
provincias -Quito, Guayas y el Azuay, los tres viejos departamentos de nuestra
primera estructura política - y no como un estado unido. Y, sobre todo, sabía
176 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

que había comenzado a entenderse con su enemigo el General José María


Urbina para debilitar el gobierno conservador del Ecuador y llevarlo a su
liquidación.

"Esto debe haber irritado a García Moreno. Sin embargo, nada estaba aún
perdido. Nada había que arriesgar inútilmente. Mosquera invitó al dictador
a conferenciar en la frontera. Aceptó García Moreno, indicando que acudiría
después del 15 de agosto, porque prudentemente solicitó el consentimiento
del Congreso. Pero al aceptar la invitación, advirtió que la fusión del Ecuador
en la Confederación Granadina era imposible.

"Mosquera tardó mucho en llegar a la frontera. ¿Por qué? Probablemente


por situaciones políticas internas. El mismo García Moreno lo creyó así: en
carta a Juan José Flores, del 26 de agosto, dice: "Yo creo más probable que el
retardo de Mosquera proviene de sus ocupaciones con la legislatura del Estado
del Cauca, que tanto ha tardado en instalarse..."

Gabriel García Moreno. Fotografía auténtica, tomada pocos meses antes de


su muerte. El Ecuador, durante su primera administración tuvo que afrontar
dos guerras con los vecinos colombianos.
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 177

"Mientras tanto, García Moreno quiso lograr un tratado con Venezuela


para frenar las ambiciones del Presidente granadino, pero todo quedó en
proyecto. Volvió también los ojos al Perú, para solicitar a su Gobierno un
empréstito de quinientos mil pesos, necesarios para hacer la guerra a
Colombia. Parece que un plenipotenciario de Mosquera en Lima intervino
para impedir este negocio. Por lo demás, y por sobre todo, al Perú no le
convenía ayudar al Ecuador, sino, por el contrario, cooperar a su ruina.
Resultaba, pues, ingenua la negociación.

"Y he aquí que el 15 de agosto de 1863, Mosquera, desde Pasto, lanzó una
proclama a los caucanos, en la que condenaba rudamente al gobierno teocrático
del Ecuador, mientras que la agitación en favor de Urbina crecía. Es posible,
pues, que el Presidente colombiano haya querido provocar la subversión en
nuestro país, para realizar sus sueños de unión con un gobernante liberal,
como Urbina, o bien, simplemente, para producir el caos ecuatoriano y la
anexión de territorios por la fuerza.

"El 2 de septiembre el Congreso del Ecuador acordó rechazar la proclama


de Mosquera y se pronunció porque García Moreno no acudiese a la entrevista.
Entonces , fue designado como plenipotenciario Antonio Flores Jijón, muy
joven por esos días, hijo del General Juan José Flores. Flores negoció
hábilmente, con sagacidad y buen juicio. Y pudo conseguir que se aprobase
en principio un tratado, por el que las partes garantizaban la integridad
territorial de la antigua Gran Colombia y se comprometía a arreglar de común
acuerdo los límites pendientes con los Estados vecinos. Se convenía también
en invitar a Venezuela para formar entre los tres países una alianza o
confederación, apoyarse mutuamente, uniformar el sistema de aduanas y
establecer un código internacional que regulase las relaciones
grancolombianas, advirtiéndose que los tres Estados conservarían su plena
soberanía. Todo esto habría de ser ratificado por los congresos respectivos y
por una asamblea de plenipotenciarios grancolombianos.

"El joven diplomático alcanzó, sin duda, un verdadero éxito. El ideal de


Bolívar renacía.

"¿Eran entonces falsas las aviesas intenciones que se atribuían a Mosquera?


¿Era simplemente que el granadino quería ganar tiempo o que la sublevación
de Urbina nacía fracasada? En el estado actual de nuestra documentación
histórica, ninguna cosa definitiva puede afirmarse.

"Mientras así triunfaba la gestión de Flores, cuando parecía ya alejado el


peligro de una integración en Colombia del Ecuador dividido, el periódico
oficial ecuatoriano, "La Nación", publicaba protestas de ciudadanos contra
toda idea de unión. El 21 de septiembre, tres días antes de la primera reunión
de Antonio Flores con el plenipotenciario de Mosquera, el Congreso del
Ecuador, bajo la inspiración de García Moreno, declaró al país en estado de
defensa y otorgó al Presidente poderes extraordinarios.
178 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"El Gobierno de Ecuador se preparaba febrilmente para la guerra.

"Pero sigamos viendo cómo se desarrollaron los sucesos. Mosquera protestó


porque García Moreno no acudía a la entrevista prometida y advirtió que
estaba decidido a suspender las negociaciones y hasta las relaciones con el
Ecuador, si el tratado proyectado en Pasto con Flores no se firmaba en un
plazo de veinticuatro horas.

"La respuesta de García Moreno se parece a un ultimátum de vencedor a


vencido: satisfacción plena por los ultrajes inferidos en la proclama del 15 de
agosto- de lo que ya habíase prescindido, desde el momento en que Antonio
Flores negoció el Acuerdo-; retiró de las fuerzas colombianas y ecuatorianas
a cierta distancia de la frontera; ¡pago de perjuicios por el saqueo de Tulcán
y empréstito forzoso a ecuatorianos, hechos en la época de Arboleda, y una
indemnización por los preparativos bélicos del Ecuador al ponerse en estado
de defensa!
"Flores regresó a Quito. Toda negociación quedó rota. Colombia declaró
suspendidas sus relaciones con nosotros. Prácticamente, el conflicto había
estallado". (249)

El 30 de septiembre de 1863 el Comandante General del Distrito del Guayas


y de Marina envía la siguiente comunicación al Gobernador de la Provincia,
que lo era don Vicente Piedrahita:

"Señor, he publicado en la Orden General del día y hecho trascendental a


quienes corresponde en el Distrito de mi mando, la respetable circular de
US.H. fecha 22 del actual No. 30, declarando el ejército en campaña, y
previniendo al mismo tiempo, todos los delitos militares sean juzgados en
consejo de guerra verbal, y particularmente el de deserción que serán
castigados con la pena de muerte, conforme lo previenen las ordenanzas."
(250)
Dice Pattee que la diplomaciá del General Mosquera era una cosa
misteriosa que mientras el emisario ecuatoriano Dr. Antonio Flores, buscaba
la manera de acercarse a Mosquera, recibiendo del caudillo colombiano una
invitación para entrevistarse en Túquerres, el Ministro de Relaciones
Exteriores de Colombia le avisaba oficialmente que no tendría trato ni
comunicación con él. Si por una parte se le convidaba al diplomático
ecuatoriano a una conferencia y por otra se le negaba toda comunicación.
¿Qué pretendía el General Mosquera? pregunta "El Correo del Ecuador", si
no era humillar al Gobierno de Quito. El Comandante ecuatoriano, Agustín
Lucas Guerrero fue arrojado de la presencia de Mosquera con denuedos e
insultos al entregarle una carta del Gobierno ecuatoriano. (251)
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 179

Carrión no piensa como Pareja Diezcanseco, en lo que respecta a los tratos


de Mosquera con el Perú para dividirse nuestra Patria, y a pesar de que se
pregunta si a esas alturas de 1863, el Presidente García Moreno ya conocía
el plan mosquerista de crear el estado del Cauca, que fue consignado en el
Tratado de Esponsión entre él y el Gobierno del Presidente del Perú, Mariscal
Castilla, suscrito en Popayán el 16 de septiembre de 1859, se vale de la
apreciación del Arzobispo de Quito, don Manuel Pólit, para insinuar que sí
conocía al respecto, y dice:

"El señor arzobispo de Quito don Manuel María Pólit Lazo - apasionado
panegirista de García Moreno - informa que ese "negro y abominable convenio"
por el que se creaba el Estado del Cauca, tomando la mitad del Ecuador para
la nueva entidad y dejándole la otra mitad al Perú, pero cercenándole
igualmente a la Nueva Granada los actuales departamentos de El Valle, El
Cauca y Nariño - como la tercera parte de la actual Colombia -.

"Cuyo borrador se halló entre los papeles de Mosquera y se divulgó en


1867 depués de su caída, debiendo de haberlo conocido ya antes García
Moreno, probablemente por medio del Ministro del Ecuador en el Perú, Dr.
Vicente Piedrahíta. Pues el texto auténtico del mismo convenio existía, de
puño y letra de Mosquera, firmado por él y por Selaya; se conservaba en los
archivos de Lima, secreto hasta que lo publicó don Luis Ulloa, presentando
aún la fototipia de este famoso convenio, baldón eterno de sus autores. Verdad
es que el mismo General Castilla, según parece, no se atrevió a ratificarlo, y
toda la infamia quedó pesando sobre el General Mosquera.

"El eminente prelado, cuyo testimonio es fehaciente para mí, no advierte


que el convenio o "esponsión" Mosquera-Selaya era para crear el Estado del
Cauca; y que una vez que Mosquera derrotó a los conservadores de Arboleda
y Canal, se adueñó de Bogotá, e hizo crear en Río Negro la Confederación de
los Estados Unidos de Colombia, ya para nada se acordaba de aquella
"esponsión", nulificada además por la desaparición de una de las partes
contratantes; el supuesto Estado del Cauca. No advierte también, como la
mayor parte de los historiadores, que si había traición de Mosquera, lo era en
especial contra la Nueva Granada, a la que desmembraba en una porción
sustancialísima, con ciudades tan importantes como Cali, Popayán y Pasto...
Y que la parte del Perú en el asunto, era la del vecino poderoso que, en pago
de su alianza y apoyo a la nueva creación política, recibe una rica tajada:
nada menos que Guayaquil la eterna ambicionada, la costa íntegra y la
provincia de Loja...

"Lo valioso de la apreciación del señor arzobispo, radica en que supone - o


sabe - que García Moreno, a la altura de estos años trágicos de sus guerras
desastrosas con Colombia, debió haber conocido la existencia de aquel pacto;
lo cual plantea numerosos problemas históricos, de difícil solución.

"Pero, existe un detalle histórico que da toda la razón al eminente arzobispo,


180 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

cuando afirma que García Moreno sí conoció la "esponsión", Mosquera-Selaya


de 1859. Y es éste. En una carta que con fecha 14 de octubre, dirige desde
Quito al Gobernador de Guayaquil doctor Vicente Piedrahíta, acaso su
colaborador más eminente y sano - por lo cual no pudo soportarle largo tiempo
- le dice lo siguiente en relación con las cosas de Colombia, que había llegado
a su período de mayor gravedad:

"Opino enteramente con Ud. en lo relativo a Mosquera y al resultado de


las operaciones. Los pastusos están más entusiastas todavía que nosotros, y
a una señal dada arderá en guerrillas todo el territorio de Pasto. Yo creo que
la formación de un Estadito independiente, nuestro cliente y aliado, prepararía
mejor la anexión de Pasto que el reclamo de límites cedido en todos los tratados
desde 1832. Pero eso dependerá de los acontecimientos: lo que importa es
arrojar a los rojos al otro lado de Juanambú".

"¿Los "estados satélites", son una invención de Stalin o Krushchev? No,


señores: eso ya estaba descubierto por los genios suramericanos: Mosquera,
queriendo crear el Estado del Cauca; García Moreno, pretendiendo crear el
Estado de Pasto...

"Al final de esta carta extraordinaria, de un valor indecible, se declara la


verdad integral , sin mixtificaciones. Dice García Moreno a Piedrahíta:

"El doctor Castro, el plenipotenciario de Mosquera, llegó ayer, nadie lo ha


saludado y yo no lo recibiré. El sábado 17 pediré al Congreso facultad para
declarar la guerra." (252)

García Moreno tenía la esperanza de obtener la ayuda peruana para el


conflicto que se avecinaba o por lo menos la neutralidad, para evitar que el
Perú amenazara al Ecuador en la frontera meridional. Ya el 7 de octubre de
1863 escribía al enviado del Ecuador en Lima, Sr. Celedonio Urrea: "Si quiere
el Perú ayudarnos, sea en buena hora; si no lo quiere no importa. Mi deber
era buscar aliados, pero mi esperanza se fundaba únicamente en nuestros
recursos, en la justicia de nuestra causa y en Dios que la protege".

Pero debido a ningún acuerdo conseguido, buscó otra fuente de ayuda: los
conservadores de Colombia. García Moreno propuso al General Leonardo
Canal, Jefe conservador colombiano, que se allegase para un acuerdo. El 13
de noviembre lo aceptó este jefe, enviando al Dr. Vicente Cárdenas para
ajustar el convenio definitivo que fue firmado el 4 de diciembre. (253)

EL CONFLICTO DESDE EL PUNTO DE VISTA NAVAL

El 20 de septiembre de 1863 dice don José Moreira, desde Montecristi, al


General Flores lo que sigue: "Ayer estuve abordo de la "Salado" a hablar con
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 181

Matos, sobre varias cosas. Supe que se pudiera bloquear Tumaco, etc. Esta
medida me parece excelente y urgente. Además de evitar la presta
introducción de recursos para Mosquera podemos obtener pronunciamiento
en nuestro favor e impedir que se lancen partidas a perturbar esta provincia.
Se me ha asegurado que la gente decente de Panamá es amiga de nuestra
causa, y que allí aborrecen al Gobierno y autoridades mosqueristas, que
pensaban en ayudarnos.
"Le encarezco realice pronto la expedición sobre Tumaco y me avise con
anticipación la salida de la flotilla para prepararme a enviar unos dos o tres
individuos en la "Salado", que debería tocar aquí un cáncer que se pronuncia.
Sospecho que el Sr. U. Plaza, pariente de la Santos, educado en la Nueva
Granada y rojo y Mosquerista, que hace dos años vino a Charapotó a establecer
una enseñanza de niñas, trabaja con esos menguados a disponer los ánimos
para abrir camino a los mosqueristas en esta provincia. Se han corrido
algunos.. y no dudo que se halla en Charapotó en disposición de concentrar
una expedición granadina.
"Nada se me ha ordenado para fortalecer esta provincia. Y aunque tengo
las facultades necesarias generales, deseo que U. particularmente me indique
lo que debo hacer en todos los casos.

"Una carta de Guayaquil, refiriéndose a Dávalos asegura que se había


sorprendido una comunicación del Presidente del Perú, General Pezet,
a.gstá.q,uieto.jí,„&s.p~,ezlgf
para entonces obrar de acuerdo y
simu taneamente. Es menester saber lo que hay de cierto en esto y espero
que U. me comunicará después de bien averiguado".
Desde el 27 de octubre el Consejo de Gobigrno habíA autoriz4,Ikmásif
tjecaíVo a declarar la guerra a Colombil Como sabemos nuestra Armada
contaba sólo con la goleta dé guerra "Saladcf, al mando del Capitán de Fragata
Diego Eugenio Matos, y en ese estado nos sorprendió la gal"ffligt
ahecha por Colombia el 2 de nova 0- •.;
• an,,,e. ,

Como hemos dicho se desempeñaba como Gobernador de la provincia del


Guayas don Vicente Piedrahíta, quien con actividad contagiosa prepara en
menos de una semana la expedición que marchó a Tumaco. Se equipa
aceleradamente la 1~1111101etnominada antiguamente Clorinda María
y que había sido comprada por el Gobierno; en tres días de trabajo, incluso
las noches, con 50 carpinteros, estaba artillada y lista para el zarpe ... Gracias
pues, al doctor Piedrahíta, se logró preparar la flotilla en sólo seis días de
incesante esfuerzo. Y el 24 de- rgóWetibre salían del p~111~P~PTs
occ les el indicado auxilio naval para el Ejército, compuesto de las goleta
nattrgs-Ghatasannad~guerra y dos embarcaci~
a transportes. Llevaban, por todo, 12 cañones y 300 hombres de desembarco
al mando del Coronel Veintimilla, designado jefe de la expedición. (254)
182 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

El Capitán del Puerto de Guayaquil, Capitán de Navío Agustín Oramas


había informado al Gobernador Piedrahíta, dos días antes del zarpe, sobre el
avalúo realizado para adquirir la goleta "Clorinda María", y la conveniencia
de comprar dicha nave antes que fletarla para la expedición, por las razones
que indica en el siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Capitanía del Puerto.- Guayaquil, a 22 de


noviembre de 1863.- Al Sr., Gobernador de esta provincia.

"Tengo el honor de corresponder a la apreciable nota de US. fecha de ayer


diciéndole que el justiprecio hecho por la goleta nacional "Clorinda María" de
la propiedad del Sr. Joaquín Olguín, ha sido practicado con perfecto
reconocimiento del buque, según consta del acta que acompañé a US., cuyas
firmas son todas de responsabilidad.

"El dueño del bajel está pronto a hacer su venta al gobierno por los siete
mil pesos (S/.7.000) en que está avaluado; y no conviene en fletamiento alguno
porque para armar el buque en guerra como se está haciendo, tiene que sufrir
daños cuya reparación sería costosa en esta virtud, pues soy de opinión que

Vicente Piedrahíta, Gobernador de la Provincia del Guayas, quien coordinó la


preparación de la expedición naval que marchó a Tumaco, durante el conflicto
de 1863.
TrITTIT~L~P511Z~7, -7k-mfr«,"~-

LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 183

en vez de fletar el buque, sea comprado para el servicio del Gobierno, porque
siempre será necesario, y en el último caso cuando no sea útil puede venderse
con estimación, con pequeña pérdida que sería menor que el canon mensual
del buque.

"Lo que dejo expresado en mi sentir, mas US. podrá entenderse para este
arreglo con el dueño de la goleta, la que está preparándose con toda actividad
en su armamento de guerra para ponerle en actitud de marchar al punto que
se le destine.- Dios guarde a US. (f) Agustín Oramas".

Al respecto, Piedrahíta transmitió al Capitán del Puerto la orden del


Gobierno de fletar dicha nave, por lo que dispuso proceda al avalúo para tal
fin y no como se había procedido.

Como era costumbre durante la época Garciana se improvisaba una vez


más la fuerza naval. Del anterior y siguientes oficios podemos darnos cuenta
el apuro con que se hacía la adquisición o fletamiento de las naves para
armarlas en guerra y dotarlas de oficialidad, tripulación y guarnición, a fin
de que con la premura del caso zarpar transportando al ejército y armamento
a la zona del conflicto:

"República del Ecuador.- Capitanía del Puerto.- Guayaquil a 25 de


noviembre de 1863.- Al Sr. Gobernador de esta provincia.- Señor

"Cuando me fue entregada la respetable nota de US. fechada el 24 de los


corrientes, era muy tarde, y sin embargo de las avanzadas horas en que la
recibí, procuré con toda actividad cumplir con todo lo que US. me previene en
su citada comunicación:

"Para esto, pues traté de buscar dos capitanes de buques, inteligentes, con
el fin de que determinaran el precio que por el fletamento debía pagarse al
dueño de la goleta "Clorinda María", ahora, armada en guerra, llamada
"Guayas"; y ninguno de los peritos quisieron desempeñar esta comisión, ya
porque ninguna objeción tenían, y ya porque no estaba en sus facultades
estimar el fletamento en tal o cual cantidad.

"Una vez que éste es un convenio que debe celebrarse entre las partes
contratantes. Yo por mi parte para llenar los deseos de US., he ofrecido al Sr.
Olguín, dueño del buque, doscientos pesos ($200) por arrendamiento mensual
y ha dicho que su intención no ha sido fletarlo, sino venderlo; pero que si se le
obliga al primer caso, no podría darlo por menos 500 pesos, en virtud de las
razones que de antemano tiene egresadas y que he comunicado a US.
oportunamente.

"En cuanto al avalúo de las chatas no pudo practicarse, porque como he


dicho antes, la orden de US., para el efecto, me vio en los momentos de las
más complicadas pasiones para el despacho de la flotilla, que debía salir en
aquella misma noche, como sucedió; y esta operación debió haberse efectuado
184 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

con anticipación, antes de refaccionarse dichas embarcaciones: No obstante


se ha verificado el avalúo de una de ellas, cuyo documento debe estar ya en
poder de US.

"Dejo así satisfecha la apreciable nota de US. a la que me contraigo.- Dios


guarde a US.- (f) Agustín Oramas". (255)

En tales circunstancias el Gobierno consideró reabrir la Mayoría General


de Marina, disponiendo por lo tanto que el Capitán de Navío Agustín Oramas
entregue la Capitanía del Puerto de Guayaquil al Ayudante del Puerto, Alférez
de Navío Enrique María Vera, así lo hizo, pero es de indicar que para tal
cargo se nombró en forma inmediata al Capitán de Navío José Antonio Gómez
Valverde quien a su vez habría sido relevado de la Gobernación de Guayas
por don Vicente Piedrahíta, tiempo atrás.

Por su parte el Capitárle Navío Agustín Oramas tomaba nuevae


posesión de la Mayoría General de Marina* pero él propone al Goffirrio
mantenerse también como Capitán del Puerto, es decir con ambos cargos,
como es fácil deducir del siguiente oficio lo que no es aceptado:

"República del Ecuador.- Capitanía del Puerto.-Guayaquil, a 27 de


noviembre e 1863.- Al Sr. Jefe Superior Civil-y Militar.

"Señor , tengo el honor de corresponder a la apreciable nota de US. fecha


de ayer, diciéndole que cumpliendo con lo que en ella se me previene, he
entregado la Capitanía de Puerto que estaba a mi cargo, al señor Ayudante,
quien está funcionando con las formalidades debidas; pero séame permitido
anunciar a US. que cuando recibí del Supremo Gobierno mi nombramiento
de Capitán de este Puerto, no fue interinamente, sino en propiedad como
puedo comprobarlo con la nota oficial que al efecto se me pasó.

"Por otra parte estamos dispuestos como estoy para servir a mi patria y
mucho más en las actuales circunstancias deseo también propender a hacer
ahorros al Tesoro Nacional; y por tanto propongo a US. que encontrándome
suficiente y apto, me comprometo a desempeñar con puntualidad la Mayoría
General de Marina y la Capitanía del Puerto, bajo la inmediata inspección
de US. de éste resulta la ventaja de que ambas oficinas estarán bien servidas,
ahorrando el sueldo de un ayudante que precisamente tendría que darse al
encargado de la Capitanía.

"Sírvase US. pues resolver lo que estime conveniente sobre el contenido


de la presente nota.- Dios guarde a US.- (f) Agustín Oramas". (256)

Habíamos dicho que el 24 de noviembre zarparon de Guayaquil los buques


rumbo a las costas colombianas, y del informe oficial del jefe de la expedici
¡Coronel Veintilnillá, se obtienen más pormenores sobre el viaje:

El 27 del mismo mes arribaron a Santa Elena y el 30 a Esmeraldas...


LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 185

Como las lanchas armadas en guerra ligeramente, se deterioraron en la


navegación, tuvo necesidad el Coronel Veintimilla de pedir al Gobernador de
aquella provincia la goleta mercante `01.1.1"ue se hallaba en aquel
puerto la que armaron con dos pequeños cañones, y dejando allí la lancha
No.3 por estar casi inútil, se hicieron a la vela el 4 de diciembre, con dirección
a la Tola, en cuyo puerto recibió 150 voluntarios. (257)

Pero, ¿qué había sucedido con el conflicto en el frente terrestre? Juan José
Flores, General en Jefe del Ejército ecuatoriano, penetró en territorio
colombiano el 22 de noviembre al mando de algo más de 4.000 hombres para
enfrentar al ejército de Mosquera.

El Coronel Teodoro Gómez de la Torre, en sus memorias, publicadas en el


boletín de la biblioteca nacional, de noviembre y diciembre de 1920, cuenta
la historia del fracaso de las gestiones de paz en la frontera, de la siguiente
manera:

"El rompimiento parecía inevitable porque no se cuidó de conjurar la


tempestad que se presentó. A última hora se despachó de Quito una comisión
de paz con el doctor Antonio Flores, se llamó al servicio las guardias nacionales,
designando de General en Jefe al de igual clase Juan José Flores, y se me
llamó al servicio nombrándome jefe militar de la frontera del Carchi. No
pude excusarme de esta cuestión nacional, y en el mes de agosto me trasladé
a Tulcán, no porque creía vencer sino porque podía influir en un tratado de
paz. Estando la razón de nuestra parte y teniendo íntimas y estrechas
relaciones con el General Mosquera, presidente de Colombia, tenía facilidad
para coadyuvar al tratado definitivo de paz. Mis esperanzas no fueron
burladas, porque el tratado se celebró en Pasto, para ratificarse en Tulcán en
una entrevista personal de los dos Presidentes, en la hacienda Santa Rosa
del Carchi. El General Mosquera se trasladó a Ipiales con este objeto, y aunque
el equipaje de García Moreno vino de Tulcán, nunca llegó a salir de Quito con
pretexto falso, porque había acordado con los conservadores colombianos
asilados en el Ecuador la continuación de la guerra, con el ofrecimiento de
éstos de apoyarlo en un levantamiento general en Colombia y particularmente
en el Estado de Antioquía. A mí nada se me avisó como a jefe de frontera,
pero entiendo que al comisionado doctor Flores se le pidió oportunamente el
aviso, porque ya rehusó ir a Ipiales y regresó para Ibarra. En virtud de este
antecedente, el Gobierno del Ecuador sin previa declaratoria de guerra, ordenó
la invasión de Colombia, y el General en Jefe se presentó en Tulcán con todo
el Ejército, fuerte de más de cuatro mil hombres, en su mayor parte de milicias
nacionales llamadas ocasionalmente al servicio. Yo me opuse con razones
186 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

incontestables a esta guerra, porque era conocido su mal resultado, pero nada
conseguí y el ejército pasó el Carchi. Yo hice un posta al General Mosquera
con proposiciones de paz, previa autorización competente, y contestó
aceptándola y autorizando al señor Fernando Gaviria para que se entendiese
conmigo. Todo estuvo arreglado y convenido, pero desgraciadamente surgió
una cuestión de capricho: Mosquera exigía a Flores que, en su calidad de
invasor, oficialmente solicitara la paz; y éste replicaba al colombiano que,
como provocador de la guerra, la iniciara". (258)

Dice don Alfredo Pareja Diezcanseco: "El 6 de diciernl"'se libró la batalle


111 Nuestras fuerzas e a a pesar del coraje de que

ores, a a vanguardia, hizo ga a, pues su ejérci o, si numeroso, había sido


apresuradamente reclutado, el problema de los abastecimientos tratado con
mucho descuido y las posiciones mal escogidas, debido a la astucia con que
obró Mosquera, al atraer a unos pantanos ocultos, donde fue inutilizada la
caballería ecuatoriana, que, según el propio caudillo colombiano, era admirable
y el arma en la cual Flores tenía más experiencias". (259)

En cambio Pattee nos da su versión: "La batalla sobrevino el 6 de diciembre:


contienda decisiva que despejó el ambiente de mutuo recelo y desconfianza
entre los dos gobiernos: La batalla resultó desastrosa para las armas
ecuatorianas. El Correo del Ecuador se apresuró a ofrecer una explicación de
la derrota:

"El descalabro que han sufrido nuestras fuerzas no es, pues, debido a la
inteligencia, táctica y pericia militar del Gral. Mosquera, ni al valor de sus
guardias colombianas, sino a un fatal accidente, al pánico que naturalmente
se apodera de los cuerpos indisciplinados y bisoños de todo los países de la
tierra. El triunfo de Cuaspud es pues (para Flores) un acontecimiento
inesperado y debido únicamente al desorden de dos o tres cuerpos de gente
bisoña".

"Los oficios del Gobierno que admitían la derrota expresaban la esperanza


de que fuera posible recuperar lo perdido. "El Gral. Mosquera que ha perdido
en la jornada del 6 más de la tercera parte de su ejército, ha contramarchado
a Túquerres, lo que nos da sobrado tiempo para reorganizar nuestras fuerzas
de reserva y las dispersas que instantáneamente se van reuniendo en
considerable número en Ibarra". La confusión prendió inevitablemente en el
pueblo ecuatoriano. El Gobierno se ocupó activamente en alentar a los
habitantes y organizar la defensa. Mientras tanto, los conservadores
colombianos se habían alzado; y Mosquera prefirió arreglar la paz a continuar
la guerra: Menester es consignar que Mosquera actuó después de Cuaspud
con toda benevolencia y generosidad. El armisticio fue firmado a fines de
diciembre, concretándose los preliminares de un convenio. De Quito, García
Moreno escribió al General Flores, "sea que consiga una paz honrosa, sea
que en el caso contrario convenga continuar la guerra, no hay duda de que el
armisticio es ventajoso". El Presidente informó a Flores, además, de la
'1"'"Tieli~.0nrirzw•tilr1."9"-''4""—Ir:151•111PrTu119~~991111~,
r 147391!m.”plle

LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 187

confusión que ocasionaba la llegada a Quito de los dispersos a raíz de Cuaspud.


"Malísima ha sido la llegada de esa multitud de dispersos y jefes y oficiales
comprometidos a no tomar las armas, todos los cuales han trabajado en
difundir el temor en todas las clases de la sociedad con sus exageraciones y
cuentos de la batalla". El 28 de diciembre, ya finalizándose las negociaciones,
García Moreno comunicó a Flores su convicción de que "una paz honrosa es
preferible a la victoria más brillante. Si la paz fuera humillante, la rechazaré
y continuaré la guerra hasta vencer o morir. Proceda usted en consecuencia
a celebrar el tratado de paz y firmado que sea, aguardaré aquí al Gral.
Mosquera para darle un abrazo de sincera reconciliación". García Moreno,
fatigado por tantas contrariedades y contratiempos, se inclinaba una vez
más a la renuncia para "volver a mi estudio favorito de ciencias".

"José María Urbina, informado de la jornada fatal para el Ecuador, no


pudo dejar de exclamar en carta a Mosquera, "que esta sangre, Gral., ya que
ha sido derramada porque usted no podía evitarla, no sea inútil al Ecuador,

General Tomás Cipriano Mosquera, Presidente colombiano que en


1863 venció con sus tropas, en Cuaspud, al General Juan José Flores.
188 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

a Colombia y a la América. Y no lo será, no puede serlo, siendo usted el


vencedor de Cuaspud".

"La victoria seguida por la manifestación de magnanimidad de Mosquera


cambió por completo el aspecto de las relaciones entre Urbina y el Jefe
colombiano. El Tratado de Pinsaquí se firmó el primero de enero de 1864,
obteniendo el Ecuador una paz sumamente honrosa, sin sacrificio alguno por
la derrota sufrida. Dos días más tarde, Mosquera dirigió una comunicación a
Urbina: "Cuando comenzaron las hostilidades del Ecuador con los Estados
Unidos de Colombia, escribí a usted una carta manifestándole que era
conveniente que usted viniese a mi cuartel general, que como jefe del partido
liberal del Ecuador se uniera con los liberales de Colombia, así como los
conservadores de ambas repúblicas se habían armado para hacernos la guerra.
Hoy que las circunstancias han cambiado notablemente, creo mi deber decir
a usted que ya no es el caso de que hablé a usted en mi carta, pues como
sabrá usted, después de la batalla de Cuaspud, hemos celebrado una paz
honrosa para ambos pueblos y yo no podría, después de este acto, continuar
las hostilidades contra el Ecuador". La volte face de Mosquera fue un golpe
mortal para el Gral. Urbina. Mosquera llegó a aconsejarle que se reconciliara
con sus enemigos del Ecuador. Desde Paita, fecha 16 de enero de 1864. Urbina
dirigió al colombiano una carta larguísima, llena de encono y rencor, echándole
en cara su abandono de la causa llamada por los liberales "americana". (260)

El 14 de diciembre de 1863, el Secretario del Interior y de RR. EE. de los


Estados Unidos de Colombia, le había escrito y enviado una carta al señor
Coronel José de Veintimilla, con la que reclama al Jefe militar ecuatoriano
por la toma de la plaza de Tumaco y le exige rendición luego de informarle
del triunfo de Cuaspud, ocurrido el 6 de diciembre, lo transcribimos
seguidamente:

"Estados Unidos de Colombia.- Poder Ejecutivo Nacional.- Secretaría del


Interior y RR.EE.- Tulcán a 14 de diciembre de 1863.- Al Sr. Coronel José
Veintimilla , Comandante de la Escuadrilla Nacional.

"Desde que en el campo de batalla de Cuaspud se tomó la correspondencia


de U. al señor Flores y en especial la carta fechada en Guayaquil a 18 de
noviembre último, se supo que venciendo muchas dificultades estaba armando
U. unas chatas para invadir por Tumaco el territorio de Colombia.
Posteriormente se ha sabido que en actitud hostil se ha presentado U. en
dicho puerto con la escuadrilla de su mando; y con tal motivo el Presidente de
la Unión me ha ordenado intimar a U. y a las fuerzas que comanda, rindan
las armas a las autoridades del país, en caso de que al recibo de ésta hubiesen
ocupado las islas de Tumaco u otro punto del territorio de Colombia, bajo la
inteligencia de que si así no se verifica , serán tratados como bandidos y
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 1891

piratas, por cuanto se han introducido a viva fuerza en el territorio de los


Estados Unidos de Colombia sin previa declaración de guerra y sin guardar
las demás reglas que aconsejan los principios de Derecho de Gentes, y que se
observan invariablemente entre las naciones civilizadas del mundo cristiano.

"El señor Coronel debe saber a la fecha que el día 6 de los corrientes fue
batido, derrotado y completamente destruido todo el ejército del Ecuador en
la gloriosa batalla de Cuaspud, habiendo quedado en poder del de Colombia,
más de 300 jefes oficiales y más de 3000 individuos de tropa, más de 3.500
fusiles, todo su tren de artillería, municiones, bagajes y equipos, pues apenas
pudo escaparse del campo de batalla el Excelentísimo Señor General Juan
José Flores, General en Jefe del Ejército derrotado, con poco menos de 300
hombres de a caballo y que lo abandonaron en su mayor parte en las montañas
de Guaca.

"El Presidente de La Unión después de esta memorable batalla ha tratado


sin embargo con benignidad a todos los prisioneros de guerra, habiendo puesto
en libertad a todos los individuos de tropa, para que permanezcan con mayor
comodidad y concedió pasaporte a todos los jefes y oficiales para que regresen
a sus casas. Por el cual se han comprometido a no tomar armas contra el
Gobierno de los Estados Unidos de Colombia, hasta que sean debidamente
canjeados o hasta que se firme el correspondiente tratado de paz entre las
dos Repúblicas.

Por tanto el Gobierno de Colombia espera del Señor Coronel Veintimilla


que se ahorrarán por su parte sacrificios inútiles de que habrá de responder
muy pronto el Gobierno del Ecuador, y en escala triple, respecto a los que se
causen para recuperar la isla de Tumaco y demás puntos del litoral que
hubiesen ocupado las fuerzas de su mando, si no se cumple inmediatamente
lo prevenido en esta intimación.

"Me suscribo del Señor Coronel, atento y seguro servidor.- (f) Manuel de J.
Lecij amo".

Se produjo posteriormente el abandono de la plaza de Tumaco por parte


de las fuerzas de Veintimilla, posiblemente al comprender que la causa estaba
perdida por el desastre de las tropas ecuatorianas de Cuaspud. Pero aún así,
pequeños grupos armados quedaron en algunos puntos de la costa colombiana,
sin nada conocer, quizás por el apresuramiento con que la escuadrilla retornó
a aguas ecuatorianas.

A pesar de que García Moreno se acogió a la benevolencia y generosidad


de Mosquera, años después, en 1870 cuando aquel sufría el destierro de su
patria y se asilaba en Perú, el Presidente ecuatoriano se apresuró a escribirle:
"Si Ud. viene a las aguas del Ecuador, por un momento que sea, se hallará
190 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Coronel José de Veintimilla, quien comandó la expedición naval que zarpó de


Guayaquil el 24 de noviembre de 1863, y que se tomó exitosamente la plaza
colombiana de Tumaco.

sometido a la jurisdicción de nuestras leyes y será inmediatamente preso,


juzgado y obligado a sentir las consecuencias. Por lo mismo que Ud. es enemigo
de mi patria, debo ser generoso en cuanto lo permitan la dignidad y la justicia;
y lo soy, al anunciar a Ud. lo que tendré que hacer, si Ud. se presenta en
nuestras aguas. Reflexione Ud. y resuelva".

El anciano general de Colombia, se sorprende y se dirige a su Gobierno:

"El señor Gabriel García Moreno, Presidente de la República del Ecuador,


olvidando la generosidad con que puse en libertad, como cuatro mil prisioneros
de tropa y quinientos jefes y oficiales, a quienes vencí el 6 de diciembre de
1863, pertenecientes al ejército invasor que envió García Moreno, fuerte de
nueve mil hombres y mandados por el distinguido General en Jefe Juan José
Flores, y que tuvo en la batalla de Cuaspud seis mil quinientos hombres y yo
solamente cuatro mil soldados". (261)

Es que García Moreno no estaba acostumbrado a olvidar las humillaciones.


Pero la que más herida quedó después de aquellas derrotas, en Tulcán y
Cuaspud, fue nuestra patria, gracias a la falta de tino de nuestro mandatario
quien por su ligereza y capricho la condujo a una deplorable situación. Pues
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 191

tenemos que aceptar que García Moreno conocido por algunos historiadores
como un civilista de su tiempo, por el simple hecho de no tener un grado
militar, incursionó en fuertes gastos militares, en ésta y otras ocasiones. En
este caso, improvisó un ejército tan numeroso, cuyo costo superó en forma
desproporcionada a las cifras que se arrojaron en esos dos años para
instrucción de obras públicas, y el país sufría por el deterioro económico.
Razón tiene don Benjamín Carrión cuando expresa: "Cabe hacer notar como
el presidente más culto de la historia ecuatoriana, el sabio, el intelectual
supremo, de un presupuesto de 400.000 pesos, solo destina 11.000 a la
instrucción pública (1862); las tres cuartas partes al Ejército y gastos
militares". Y digo yo, por causas injustas.

Pero retornemos al campo naval de la contienda, porque tal parece que


días después aun no se conocía en las costas la derrota del 6 de diciembre, ni
que el puerto de Tumaco ha sido recuperado por lo liberales colombianos.
Pues por el largo informe del Capitán Gregorio Barrera sacamos aquella
conclusión sin olvidarnos del pacto firmado con los conservadores granadinos.
Es más, aparece nuevamente en escena la
que habíamos mencionado anteriormente. Transcribimos para a in dicha
comunicación:

"República del Ecuador.- El oficial en comisión .- Esmeraldas, enero 26 de


1864.- Al Sr. Gobernador de esta provincia.- Señor

"El 15 de diciembre del año pasado, su señoría el Sr. Coronel Comandante


General Jefe de Operaciones sobre el Litoral de la Nueva Granada me ordenó
pasase a bordo de la goleta "Machángara", para que unido con el Comandante
de dicho buque nosnriénilltirCra y tomáramos un Pailebot que se
había presentado a la vista del puerto de Tumaco y lo condujéramos a dicho
puerto.

"A las tres de la tarde ese día tomamos dicho Pailebot y me trasladé a su
bordo con ocho infantes, el contramaestre de la "Machángara" y dos marineros,
ordenando al comandante de dicho buque que quitasen del Pailebot toda su
tripulación.

"Desde ese momento, señor Gobernador, dirigimos nuestro rumbo sobre


Tumaco pero la impetuosidad de las corrientes, los vientos enteramente por
la proa, y el muy poco andar del buque me condujeron contra la isla de la
Gorgona.

"La falta de víveres, agua y leña, de cuyos tres artículos carecíamos ya


veinte y cuatro horas, me obligaron a arribar a la rada de San Quianga, en
cuyo puerto y con unos reales que presté al pasajero P. González que venía
en dicho buque ordené al contramaestre para que con 4 hombres pasase a
192 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

tierra a proveerse de los víveres necesarios para seguir nuestra marcha.

"El martes 22 cuando ya nos hallábamos listos nos hicimos a la vela sobre
el mismo puerto de Tumaco, mas no nos fue posible remontar el bajo de
Guascaona, y tuvimos que regresar al mismo punto de donde salimos para
tomar nuevas providencias... A las once de esa misma noche el señor
Comandafite José María Arroyo y el señor Mayor Manuel Salvador Quiñonez
se me presentaron en la playa con cuarenta hombres armados propuestos a
batirme creyéndome un buque enemigo, mas las juiciosas reflexiones del señor
Mayor Quiñonez embarazaron dicho rompimiento que a la verdad hubiesen
sido luctuosas para nuestra patria; pues yo me encontraba con mis ocho
individuos de tropa ya listos para sostener el honor nacional con mi vida y mi
sangre.

"Después de este raro acontecimiento y habiéndonos reconocido unos y


otros tuve la satisfacción de que estos dos jefes me tendieran sus brazos y me
reconocieran como un soldado que defendía la causa común.

"Desde ese momento señor Gobernador fui protegido en todo y por todos
por dichos jefes, mientras tanto tuviese contestación de la comandancia
General a quien me había dirigido, fui invitado por estos señores a marchar
a la plaza de Iscuandé dejando el buque perfectamente y guarnecido. El viernes
lo. de enero a las siete y media de la noche me fue devuelta la nota que había
dirigido a la Comandancia General, y con ella la noticia de que la división
había evacuado la plaza de Tumaco muchos días ha y que los enemigos se
encontraban en el pueblo de tierra firme a dos días de distancia de nosotros
en nuestra persecución.

"Este inesperado acontecimiento nos obligó a tomar medidas serias, y con


30 hombres mal armados y mal municionados nos lanzamos a la costa el día
sábado 2 a las dos de la tarde.

"A las once de esa noche pusimos el pie en la cubierta del Pailebot... A las
cinco de la mañana del día domingo 3, nos hicimos a la vela y marchamos
sobre la playa de Los Reyes, y tan luego como amaneció saltamos en tierra
para buscar embarcaciones menores y poderlas cargar, más la falta de éstas
nos privó de nuestros deseos.

"Al amanecer el día lunes a las dos de la mañana el señor Comandante


Arroyo, los señores Mayores Quiñonez y Paredes y yo, resolvimos en vista de
nuestra situación marchar en busca de las playas ecuatorianas, en esta virtud
nos hicimos a la vela y seguimos el rumbo conveniente. El sábado 9 a las ocho
de la mañana la guardia que yo mandaba se me presentó armada a la puerta
de la cámara pidiéndome los botara en tierra o los llevara a la Buenaventura
pues no querían seguir adelante y sin esperar contestación tomó el Sargento
Pablo Espinosa a Eugenio Orellana de la mano y lo colocó en el timón dándole
orden a que pusiese el rumbo a donde él le había dicho y que si no lo hacía le
daría dos balazos, fue necesario mientras descubría si entre la tropa habían
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 193

algunos leales usar de prudencia y nos dirigimos a la isla de la Gorgona.

"En dicha isla el señor Comandante Arroyo hizo saltar en tierra un fardo
de pantalones hechos que el contramaestre le había dicho habían a bordo, y
de éstos repartió a cada uno a tres pantalones, poniendo a bordo el restante.

"El lunes 11 me dijo el Sr. Comandante Arroyo que el día siguiente pasarían
por el sentimiento de separarse de nosotros y viendo yo que ausentes estos
señores quedaba enteramente expuesto, resolví por última vez pedirle treinta
o cuarenta pesos y la gente necesaria para marchar a tierra en busca de los
víveres que necesitaba para ponerme en marcha.

"Conociendo que dicha comisión era ardua, y que ningún otro sino yo debía
desempeñarla lo comuniqué al contramaestre, más éste se opuso a que yo
fuese haciéndome presente que el buque estaba a mi cargo y que no lo debía
desamparar. Que él marcharía a dicha comisión y la desempeñaría a mi
satisfacción.

"A las cuatro de la tarde del día lunes marchó la comisión quedando a
estado de regresar al día siguiente, como debía de suceder, pasó el martes y
no vino, el miércoles resolvimos marchar sobre la playa de Los Reyes en
busca de ellos, mas a las ocho o diez de ese día se nos presentaron los peones
que fueron en el bote y nos dijeron que la gente tan luego como saltó en tierra
se unió a los enemigos.

"Este raro acontecimiento nos obligó a salir inmediatamente; pues nos fue
fácil creer que tuviesen algunas miras sobre nosotros.

"A los dos días de habernos vuelto a reembarcar, supimos por los marineros
que el contramaestre cuando el día lunes estuvo acomodando en el buque
para recibir lastre, había abierto algunos bultos y qúe de ellos estaba un
cajón de camisas abierto; inmediatamente lo hice poner sobre cubierta y lo
hice presente a todos, lo mandé clavar y poner en seguridad. Sospechoso de
mayor cosa nos pusimos a inspeccionar algunos cajones que contiene la cámara
y en ellos encontramos dos camisas, media docena de pañuelos de algodón y
unos pantalones de género de los mismos que había repartido el Sr.
Comandante Arroyo. Tuve noticias de que el 8 en la noche había dicho
contramaestre abierto una caja de coñac y había tomado con los presos y la
guarnición, y que había repartido a todos muchos cigarros.

"Por todos estos acontecimientos pido a US. se sirva mandar seguir una
información sumaria y que declaren todos los individuos que se encuentran a
bordo.. sin más objeto que salvar la responsabilidad de mi Gobierno y la mía.

"Hago presente al Sr. Gobernador que el referido Pailebot no puede seguir


viaje a consecuencia de su mal estado, y que para asegurar del mejor modo
posible los intereses que hay a su bordo, se depositen en esta aduana hasta
que el Supremo Gobierno resuelva lo conveniente; pues de este modo creo se
194 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

eviten la destrucción de dichos efectos.

"Los presos de que hablo a US. se llaman Gaspar Cobos, Manuel Sárria y
Angel María Gómez, tomados en Iscuandé por el señor Coronel Arroyo por
encontrarse con armas defendiendo una causa que se oponía a la nuestra...
Dios guarde a US.- el Capitán Gregorio Barrera". (262)

De esta comunicación podemos deducir que es muy probable que la "causa


común" de que se habla, se deriva de lo acordado entre los conservadores
granadinos y conservadores ecuatorianos, y que por tanto los enemigos de
ambos son los liberales de Mosquera. Culmina así un conflicto más, luego del
tratado de paz que se firmó con los representantes de los Estados Unidos de
Colombia, a pesar de que para algunos combatientes se había dilatado, como
el caso de los que navegaban en la goleta de guerra "Machángara" y en el
Pailebot mencionado, quizás por la falta de comunicación de los jefes con los
marinos y soldados que actuaban en las zonas marítima y costera.

Todo había terminado pero había grupos de combatientes diseminados en


algún sector de la costa, los que habían desembarcado de las goletas "Salado"
y "Guayas" y de las embarcaciones de transportes, y con el fin de procurar el
retorno de los mismos el Gobierno dispuso se contrate al vapor "Talca" de la
compañía de Vapores del Pacífico.

El Gobernador de la provincia de Guayaquil, Dr. Vicente Piedrahíta


procedió a celebrar un contrato con dicha compañía, la que al momento tenía
como agente al Sr. Adrián Harman, para cumplir la navegación que permita
encontrar y conducir hasta Guayaquil a los individuos indicados. El contrato
estipulaba lo siguiente:

Art. lo. El vapor inglés "Talca" surto en este puerto de Guayaquil, se


obliga a salir a las cinco de la mañana de este día lo. de enero de 1864 con
destino a la Ballenita y Manta, con el objeto de transportar de uno u otro de
estos puertos los individuos de tropa que se hallen en ellos procedente de las
goletas nacionales "Salado" y "Guayas", y las de transporte, y se compromete
a conducirles a este puerto de Guayaquil. Si los individuos relacionados no
estuviesen en la Ballenita ni en Manta en este caso el "Tglta
oosta~ttr~~ sme a fira y seis hor
ref
navegación a cc:Mr desde que salió de Guá, • n cualquier punto de la,
costa dentro de la distancia recorrida en el tiempo fijado en que encuentre
los individuos relacionados los tomara a su bordo, con tal que estén en tierra
y los conducirá al puerto de Guayaquil.

Art. 2o. Después de haber tocado los puertos de la Ballenita y Manta y


después de haber recorrido la costa por treinta y seis horas el "Talca" regresará
r

LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 195

para el puerto de Guayaquil haya o no encontrado a los individuos de tropa


que está encargado de conducir.

Art. 3o. El Sr.Gobernador de Guayaquil por sí y a nombre del Gobierno


del Ecuador se obliga a pagar al señor Harman como agente de la compañía
de Vapores en el Pacífico, mil pesos, moneda corriente por cada veinte y cuatro
horas empleadas en este viaje, tanto de ida como de regreso haya o no
encontrado los individuos de tropa que se obliga a conducir, en el caso de
hallarlo dentro de los términos y lugares designados.

Art. 4o. El señor Gobernador se obliga también a entregar al Sr. Harman


a buena cuenta del fletamento estipulado dos mil pesos de contado, cuya
entrega tendrá lugar el día de hoy; y por lo que respecta al mayor alcance se
obliga a pagarle al expresado Harman al regreso del vapor "Talca" en este
puerto de Guayaquil.

Art. 5o. Al fiel cumplimiento de lo pactado firmamos este contrato por


duplicado en la ciudad de Guayaquil el lo. de enero de 1864.- Dr. Vicente
Piedrahíta.- Adrián Harman. (263)

Con fecha 13 de abril de 1864 el Presidente Gabriel García Moreno,


comunica al Gobernador de la provincia de Guayaquil, que con fecha 6 el
Supremo Gobierno nombró al Sr. Capitán de Navío Juan Manuel Uraga
Ministro Plenipotenciario Ad.hoc. para el canje de las ratificaciones del
Tratado de Pinsaquí en la ciudad de Panamá. (264)

Por ello le ordena a Vicente Piedrahíta le entregue por la Tesorería de su


provincia la cantidad necesaria para el pasaje de ida y vuelta y además
trescientos pesos para los gastos durante los días que permanezca en el Istmo.
(265)

El Capitán de Navío Juan Manuel Uraga regresó de su comisión al mes de


haber salido del puerto de Guayaquil, y como reclamó a la Tesorería indicada
el pago de las pensiones de los meses de abril y mayo, el Tesorero de Hacienda
pide al Gobernador, con fecha 16 de junio de 1864, se digne consultar al
Supremo Gobierno, si durante el mes que empleó en su comisión se le debe
abonar también la pensión, no obstante los 300 pesos que se le dio para sus
gastos. (266)

Es de notar que el Capitán de Navío Juan Manuel Uraga quien había


egresado de la Escuela Náutica y que como Capitán de Navío sirvió durante
el Gobierno del General José María Urbina como Comandante del vapor de
guerra "Machala" (1853) y posteriormente como Comandante del bergantín
goleta de guerra "17 de Julio" (1854-1855), sirvió constantemente en los
gobiernos que presidió el Dr. Gabriel García Moreno, transformándose en
196 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

hombre de confianza de dicho mandatario, y que incluso participó en algunos


conflictos para repeler las incursiones armadas lideradas por Urbina, su
antiguo amigo y compañero de armas, como veremos más adelante, pero
posteriormente cayó en desgracia y aquella confianza se desvaneció.

EL GRAN VIAJE

Así titula el libro editado conjuntamente en 1998 por la Embajada de


España, Agencia Española de Cooperación Internacional, CICAME y ediciones
ABYAYALA, en el que se relata la ejecutoria de la comisión científica española
del Pacífico (1862-66) que recorrió todo el litoral americano e ingresó, mediante
viajes de diferente duración, en la mayor parte de sus repúblicas, y que según
Miguel Angel Cabodevilla, organizador del relato que tiene como hilo
conductor el diario de Marcos Jiménez de la Espada, aunque no se pretendiera
así en el momento de su preparación, lo cierto es que Ecuador, por azares de
las circunstancias, que las explica, pasó a ser punto clave en la ejecución de
dicha comisión científica. (267)

La expedición al Pacífico fue planificada desde 1860 por el Gobierno


español, en épocas del reinado de Isabel II, como una operación militar y
política. Pero ésta se la calificó como "envío innecesario y tan ocasionado a
peligros". (268) Pues es verdad que atendía a propuestas de diplomáticos
españoles en varias repúblicas americanas: "Enviar buques de guerra para
defender los intereses españoles en la zona, favorecer el comercio y estrechar
los lazos políticos con las antiguas posesiones coloniales". (269)

Dice el misionero capuchino Miguel Cabodevilla que "muy pronto se vio la


inoportunidad del viaje, realizado en un delicado momento para las relaciones
de España con las repúblicas americanas a causa de los conflictos de México
y Santo Domingo. El intento español, que resultó fallido, por recuperar parte
de su poder o influencia en el mundo americano, en un momento en que
ingleses y franceses se hacían presentes en el Caribe aprovechando la guerra
civil norteamericana, está en la base de esta empresa marítima.

Sólo en un segundo momento se pensó en añadir una Comisión Científica


a la expedición política- militar, tal "como lo practican las naciones cultas",
por interés científico y honra nacional. Se trata de recoger toda clase de
minerales, plantas, animales, y otros objetos para su estudio y propagación
en España a imitación de otras potentes instituciones como el British Museum
o el Jardín des Plantes. Por tanto, como quedó muy claro a lo largo de toda su
trayectoria, la Comisión científica era algo secundario y añadido a la planteada
campaña militar, estuvo siempre sujeta a los movimientos de la Armada y
condenada a su inmovilidad o a sus prisas, así como a los conflictos
resentimientos que provocó la actuación de los marinos españoles con la
ocupación de las islas Chinchas". (270)
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 197

Esta Comisión científica que acompañó a la Escuadra Naval española,


destinada a recorrer las repúblicas americanas del Pacífico desde 1862, en
las fragatas de guerra "Resolución" y "Triunfo" y en la goleta "Covadonga",
estuvo conformada por:
Patricio M. Paz, Presidente de la Comisión que presentó su renuncia en
1863; Fernando Paz y Amor, Encargado de la Geología y Entomología, falleció
en San Francisco de California en 1863; Bartolomé Puig y Galup, encargado
de los trabajos de taxidermia y conservación; Rafael Castro Ordoñez, dibujante
y fotógrafo; Francisco de Paula Martínez y Sáez, Secretario y Encargado de
los estudios sobre mamíferos y reptiles acuáticos, peces, etc. tras la renuncia
de Paz y la muerte de Amor fue el Presidente Interino de la Comisión
Científica. (271)
Así también, Marcos Jiménez de la Espada, responsable de la investigación
sobre aves, mamíferos y reptiles. Además destacó por sus trabajos en los
volcanes andinos y sus observaciones geográficas antropológicas e históricas;
Manuel Almagro y Vela, médico militar cubano, encargado de los estudios
etnológicos y antropológicos, redactor de la memoria oficial sobre la expedición;
y Juan Isern y Batlló; responsable de estudios botánicos, contrajo en el oriente
ecuatoriano una enfermedad que le costó la vida. (272)
Los buques zarparon de Cádiz el 10 de agosto de 1862, y en el transcurso
recorrieron Brasil, Río de la Plata, Costa Patagónica, Islas Malvinas, Chile,
Perú, Ecuador, Panamá y California (EE.UU).
La comisión pisó por dos veces tierra ecuatoriana. La primera en 1863
estuvieron en Guayaquil, apenas de paso hacia California. Pero en 1864
después de problemas internos, renuncias y el fallecimiento de Amor, se
reunieron en Guayaquil cuatro expedicionarios bajo la dirección de Francisco
de Paula Martínez para emprender lo que aquellos denominaron el Gran
Viaje. (273) Pues "los científicos estaban tan amargados por los sinsabores
de su postergación a las necesidades e incluso caprichos del Jefe Naval de la
Escuadra, que desde abril de 1864 insistieron ante las autoridades de Madrid
en realizar un recorrido hasta el Amazonas, partiendo desde las costas
peruanas o ecuatorianas, según lo permitieran los acontecimientos políticos.
Libres de trabas externas querían afrontar un trayecto largo, penoso y audaz,
con tan escasos recursos como inagotables ilusiones, en aras de la ciencia".
(274)
A finales de julio de 1864 fueron autorizados para el inicio del viaje, pero
éste debía comenzar desde Guayaquil, pues el Perú había declarado la guerra
a España por la captura de la Isla Chinchas por parte de la Escuadra de la
expedición. (275)
Es así que solamente cuatro expedicionarios iniciaron la excursión desde
Guayaquil para atravesar los Andes hacia Quito y atravesar después la selva
amazónica. Ellos son Francisco de Paula Martínez, Marcos Jiménez de la
198 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Espada, Manuel Almagro y Juan Isern. Intrépidos viajeros y protagonistas


de la aventura que sólo terminó en España el 18 de enero de 1866. (276)

Es de recalcar que el fotógrafo -dibujante Rafael Castro y Ordoñez,


madrileño, había realizado más de 1000 placas de cristal, de las cuales en la
actualidad se conservan 300 y que son representativas de todo el viaje. Este
abandonó la expedición en el puerto de Guayaquil en 1864, por tanto no
podemos contar con imágenes andinas, quiteñas o amazónicas. Pero existen
5 fotografías de la ciudad de Guayaquil tomadas en aquel año, que son
verdaderas joyas gráficas de aquel puerto, y que en 1998 fueron expuestas
como parte de una exposición fotográfica producida por el Museo Nacional de
Ciencias Naturales de España. Es más, en dichas circunstancias y mientras
duró el evento, se puso en circulación el libro "El Gran Viaje". (277)

Castro, el autor de las imágenes, se suicidó en Madrid en diciembre de


1865. (278) Actualmente quedan aquellas fotografías impactantes sobre el
puerto de Guayaquil de 1864, que con la venia del autor y del Museo indicado,
me permito reproducir en este libro para deleite del lector.

De aquel mismo libro nos permitimos transcribir lo correspondiente a


Guayaquil y la salida hacia los Andes, relatado por los viajeros en aquel año
de 1864.

"Desde el río, Guayaquil tiene un aspecto muy bonito y original, pero en el


interior de la población se nota con desagrado lo sucio de las calles, donde
pacen, sueltos, cerdos, gallinas y asnos. Lo vetusto de sus casas de madera y
embarrado, numerosos y fétidos pantanos, son continuas causas de graves
enfermedades. Añádanse a estas circunstancias, una temperatura sumamente
cálida y sofocante, frecuentes y copiosas lluvias durante siete meses, enorme
plaga de toda clase de insectos incómodos, y se comprenderá sea Guayaquil
una de la ciudades más desagradables del mundo. Solamente la riqueza de
sus producciones y ser el único puerto de la República, unido por camino al
interior, ha podido hacer prosperar esta ciudad. Su población parece ser de
20.000 almas, compuesta de negros, mulatos, blancos e indios diferentes a
los quichuas, probablemente oriundos de la nación Cara que habitaba esta
parte del Pacífico.

"El principal artículo de riqueza de la provincia de Guayaquil es el cacao;


sigue a éste la madera, tabaco, café, azúcar, aguardiente de caña y goma
elástica; estos renglones se exportan para Europa y puertos del Pacífico. Por
el de Guayaquil entra la totalidad de los artículos extranjeros que se consumen
en la república.

"Deseando realizar alguna excursión larga por el río estuvimos haciendo


algunos arreglos y viendo la manera de alquilar una balsa para instalarnos
en ella y hacer las excursiones. Dispuesta ya, aunque con mil dificultades la
balsa, salimos en ella a las 9 de mañana pero no pudimos aprovechar la
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 1991

marea hasta el anochecer que era entrante y nos empujó mientras duró;
entonces había que amarrarla pues si no, con la vaciante, se desandaba lo
que habíamos ganado. El número de lagartos es considerable, en la variante
que permanecen varados en el fango tomando el sol en número extraordinario.
Es difícil acertarlos con escopeta. A veces se ven cerca de la balsa y aun se
notan por el olor almizclado fuerte que despiden. Estuvimos a ver a pescar
lagartos. Se hace esto del modo siguiente y con una facilidad extraordinaria.
Se toma una vara larga a la que se ata un lazo de cuero con hoja de plátano
retorcida, de manera que quede un hueco en el lazo en la proporción
conveniente para que pueda entrar el lagarto. Un hombre tiene la vara de
manera que el lazo se meta algo en el agua; otro tiene la extremidad de éste,
mientras que un tercero echa a volar un pato, amarrado a una cuerda, cerca
de la orilla. Al ver al ave los lagartos se precipitan desde lejos y no es raro el
que uno venga, de manera que el hombre puede poner el lazo para que entre
la cabeza. Al gritar los hombres se espanta el cocodrilo y queda enlazado,
haciendo esfuerzos para escapar pero en vano a no ser que el lazo se rompa.
Cuando está cansado tiran de éste y lo sacan a la playa. Por detrás lo dominan
con un martillo o hacha, en cuya ocasión da enormes resoplidos y después un
olor fortísimo de almizcle. De este modo toman con facilidad a los lagartos

Fotografía del Malecón de Guayaquil, tomada por el fotógrafo - dibujante Rafael Castro en 1864, cuando conformaba la
expedición científica española, bajo la dirección de Francisco de Paula Martínez.
200 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

que están cebados, es decir, que persiguen al hombre, de los que hay allí
frecuentes ejemplos.

"Día 15 de noviembre de 1864. Son las cuatro en punto de la tarde. Salimos


en el vapor del río "Washington" Isern, Pancho, D. Juan A., Joaquín, los tres
perros y yo. El vapor es el más cómodo y más bonito de los que hacen la
carrera a Bodegas (Babahoyo). ¡Qué pasajeros!; los de primera (sobre la
toldillo), de color más o menos moreno, amarillento, enfermizo, completaban
con sus trajes ese tipo de retratos de prendería, tan común en Guayaquil.
Abajo, sobre cubierta, la reunión es más pintoresca; zambos, cholos (mestizos
de indio y blanco), el triste chino de repugnante fisonomía, indios, etc. Hay
entre ellos una india del tipo más hermoso que he visto en esta raza. Es pura,
color ámbar, ojos negros y vivos, nariz aguileña aplastada, sin embargo, hacia
la base; frente estrecha, pelo negro y fino como untado de aceite. Se ha abierto
el pelo por el centro de la cabeza y se lo ha recogido en un moño, del que
cuelga un penacho que le da mucho carácter. Tienen sus movimientos una
fisonomía virgen y salvaje; cuélganle de las orejas dos aretes de chapas,
anchos, labrados como rayos de sol, y brillan ardientemente sobre el color de
su tez. Así debían ser las joyas de las concubinas de Atahualpa.

"El cielo está cubierto, la temperatura suave; la vegetación rica, apiñada y


viciosa de los trópicos, esmalta las orillas movibles del Guayas, pobladas de
cedros y cocos y cubiertas de vegetación hasta la cima. Corren tranquilas y
verdosas las aguas del Guayas (empieza la marea creciente); sobre la superficie
flotan las islas formadas por ninfeas entrelazando sus raíces y esparciendo
graciosamente por el río sus flores azules. Sobre el verde de los janeiros, o
sobre la sucia ciénaga de sus bordes, se destacan como puntos blancos las
garzas que buscan por allí su alimento. Algún que otro lagarto aparece varado
en las orillas como tronco podrido arrojado al acaso.

"El Guayas se estrecha o se ensancha gradualmente. Es coquetón en su


anchura o en sus graciosos movimientos. El vapor sigue siempre la costa,
que se derrumba y está cortada en barrancos. Esta es la que pierde tierra; la
opuesta, defendida por extensos bajos (la izquierda generalmente), es la que
va ganando terreno ayudada de los mangles y janeiros. A las seis apareció
sobre una sombría faja de nubes la nevada cima del Chimborazo. El corto
crepúsculo de la línea no permitió gozar mucho de la risueña perspectiva. El
Chimborazo brilla como un lago en el cielo, como esas altas nubes que recogen
los últimos rayos del ocaso. Al mencionado aspecto de las primeras, sucedió
el fantástico que presentaban las sombras.

"Millares de luciérnagas inundaban los matorrales de las márgenes,


complicados con las aisladas luces de las casas sembradas en el bosque. Las
lisas surcaban las aguas como brillantes exhalaciones.

"Al acercarnos a la orilla buscando la canal en las revueltas del río, multitud
de mariposas y otros insectos venían a lucir sus alas en las luces del barco y
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 201

Otra fotografía del Malecón de Guayaquil, tomada de'norte a sur por Rafael Castro en 1864. Se observa la Casa Consistorial,
y sobre su techo el reloj público. A su derecha el edificio de la Gobernación, en donde funciona también la Mayoría de Marina.

los mosquitos aprovechaban estos instantes con bastante pena nuestra. A


las ocho salió la luna y la melancolía baña con sus plateados nimbos el sombrío
paraje del río. Una ráfaga de luz cortaba siempre la superficie del agua y
parecía un puente de oro de una a otra margen. Las majestuosas sombras de
los árboles, que a la vez que se destacan atrevidas sobre el pálido horizonte,
se reflejan en las dormidas aguas. La fresca y húmeda brisa que se desliza
sobre ellas sin moverlas, la luz de la luna emanando del cielo, que ilumina la
dormida naturaleza. ¡Oh noche majestuosa y sublime! ¿Podrá alguna vez mi
alma armonizar con su majestad y grandeza?

"Llegamos a Bodegas a las once y media; buscamos a Almagro que se había


adelantado a nosotros por las cargas. Nos dicen que había acampado en tienda
al otro lado del río; paso allá en una canoita que parecía una vaina de
habichuela, donde me era imposible permanecer de pie. Le encuentro dormido
en su tienda de fotografía entre unos banquetes. Trasladamos allí nuestro
equipaje y a cosa de las diez nos dispusimos a dormir. Tendí por el suelo tres
pellones, formé cabecera con algunas prendas de ropa y me cubrí con un
202 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

poncho. Mi alcoba era una hamaquita estrecha, colocada debajo de unos


árboles de poca altura. A poco de acostarme comenzó una garúa que
condensándose gradualmente sobre las hojas bajaba de una en otra
produciendo un ruido propicio al sueño. Algunas llegaban hasta mi cama.
Multitud de insectos nocturnos ayudaban a arrullarme, y de cuando en cuando
se oían las campanas del reloj de Bodegas. Parecían en el sonido almireces de
boticario; jamás oí campanas más raras.

"Hicimos en Bodegas los preparativos del viaje a la Sierra; necesitábamos


más de cincuenta bestias para transportarnos con el material hasta Quito,
distante 100 leguas; pero nosotros en vez de ir por el camino directo, hicimos
varios rodeos para visitar la ciudad de Riobamba y cercanías del terrible
volcán Sangay; practicamos ascensiones en los célebres nevados Chimborazo,
y el de Cotopaxi, coronado este último por un bellísimo volcán.

"Días 16 y 17 de noviembre. Abrí los ojos con el alba. Todo estaba


humedecido por la garúa y brillaba como un esmalte fresco. Los pájaros
aturdían materialmente con sus cantos. Creí pasar de un sueño a otro, pero
no; era una deliciosa realidad. ¡Que efecto produce, acostumbrado como uno
está a dormir en hoteles, echar las primera mirada, después de un sueño
tranquilo, a una naturaleza exótica! Sobre la novedad de los objetos, su belleza.
Tomamos nuestras escopetas; Pancho estaba ya que no podía contenerse.
Matamos como unas doce especies de pájaros.

"El sitio donde hemos dormido se llama Elvira, es célebre en los fastos
modernos del Ecuador. Pertenece al General Flores y la habita actualmente
un hijo suyo. Pasamos el día en preparar lo cazado y arreglar las cargas.
Decía Almagro que nos marcharíamos a la una; pero no pudo ser, por falta de
bestias, y se decidió marchar en seguida. Yo deseaba también dejar la casa
del Sr. Flores, a quien no vi y quien no tuvo siquiera la política de invitarnos
a comer, después de haber hecho esa oferta a Almagro.

"Pasamos las cargas al otro lado del río, las colocamos en la calle y buscamos
adonde trasladarlas; ¡vano intento! En Bodegas, un pueblo que es la entrada
del Ecuador, lleno siempre de arrieros, de pasajeros, de movimiento y tránsito,
no tienen un hotel, una posada donde dormir. Nos resolvimos a acostarnos
en la calle. Extendí una manta y me eché junto a las cargas, al raso, como un
granuja; ¡que vida! A las ocho de la noche todavía no habíamos comido; busqué
donde; solo encontré un figón de chinos, donde nunca falta que mascar; pero
¡que figón! Es necesario tener el hambre y la necesidad que yo sentía, para
resolverse a tomar algo en aquel sucio lugar. Era un cajón de azúcar, habitado
algún tiempo ya por las comadres, ese cajón dividido en dos, en una división
la cocina con una mesa, en la otra la tienda con otra mesa, en ésta comía y
bebía la gente baja, en la otra los caballeros. Barren el sitio que uno deja con
una escoba y así lo limpian de migas y restos. Los chinos (son) tan sucios
como su camisa, pero había uno en la cocina que se ocupaba en limpiarse los
dientes.
LAS DERROTAS DE TULCAN Y CUASPUD 203

"El café no era malo y el azúcar lo sirven en una cajita como aquellas en
que se conserva el betún de botas. La comida, aunque mala y sucia, era a lo
menos barata. Es una deshonra el estado en que se encuentra Babahoyo: no
da comodidad ninguna al viajero, ni por dinero ni por hospitalidad. Debían
subsanar estas desventajas, porque realmente se le trata a uno hasta con
grosera indiferencia por las personas que se dicen amigas, y esto es por cierto
bien extraño en una ciudad de América. En cambio me proporcionó la ocasión
de encontrarme en la situación más original de mi vida. Todo lo aguanto
contento, tomándolo como un introito de mi viaje al Napo. Traté con un arriero
unas mulas para mi carga, convinimos en cuatro pesos y medio cada una; a
los cinco minutos me dijo que ya no quería menos de cinco: Así es esta gente
india, desconfiados, volubles, cobardes; las mismas cualidades que tiene
buenas (sencillez y timidez), no sirven más que para que abusen de ellos las
gentes de mala fe. En cambio no distinguen a quien les trata bien del que les
trata mal.

"Nos alojamos en una balsa que dividida en compartimientos sirve de hotel.


Los cuartos no tiene más que el suelo y paredes. Gracias a que llevábamos
cama y mosquitero. Me bañé en un sucio tablado agujereado, encima del río.
Las casas están hechas sobre pilares de madera, pues el pueblo se inundó en
tiempos, en cuya época andan los habitantes en canoas. Numerosos indios
cargueros atraviesan por el pueblo con sus recuas y vienen a tomar fletes
cerca de las orillas del río donde un comisionado, llamado Lucero, luce sus
habilidades para contratarlos, según las condiciones de la carga y la voluntad
de los indios. Se ven éstos por las calles en gran número, pues sin embargo
del frío dicen que no usan más que un sombrero de fieltro, una especie de
saco o poncho de lana blanca, calzón; pie y pierna desnudos. Estuvimos en la
iglesia que tiene, como la mayor parte del Ecuador, un sello de antigüedad y
falta de aseo, que indica la miseria de los pueblos pequeños.

"El comercio de este pueblo recuerda el de nuestras aldeas. Lástima es


que tan preciosos paisajes y hermosa vegetación no esté mejor presentada; a
ellas es necesario volver con entusiasmo los ojos para que se borre la mala
impresión que produce este pueblo.

"A las dos de la tarde salimos por fin de Bodegas, bajo un sol abrasador; el
camino era deliciosísimo, por los bosques que lo adornaban. Las cargas se
caían a cada momento y había necesidad de arreglarlas. Aconsejo al que viaje
por aquí que no deje de entenderse con un arriero que las arregle y las cuide
aunque le salga más caro. Las cargas se llaman chullas cuando son de un
solo bulto y lo que se pone encima de ellas, sea de dos tercios de chulla,
sobornal o soborné. Los sobornés dan lugar a continuas cuestiones con los
arrieros, que no quieren cargar sus mulas ni con una onza más. Los pobres
animales no descansan ni un solo día, pues al llegar el término de un viaje
vuelven a fletarlos inmediatamente. Dormimos en la Mona.

"Se va a Palo Largo. De noche me despertó una algarabía extraña que se


204 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

sentía en el bosque; eran los pájaros vete a trabajar, en estas palabras


continuamente, juntos todos y en un tono muy subido.

"El Cotopaxi se dejaba sentir como una tempestad lejana.

"Por más que hicimos no encontramos caballos, pues por motivo de la guerra
o pronunciamiento de Urbina estaban escasos. Ningún propietario se ve libre
de que lo empleen, sin pagarle, su mejor caballo y los tiene escondidos, de
modo que se encuentra el viajero parado, sin tener más recursos que los que
quieran las autoridades. Hasta las 5 no encontramos quien nos cediese
caballos. Lo hizo el alcalde del pueblo dándonos de los que tenían agarrados
para mandar a Guayaquil de las haciendas del término". (279)

Sin referirnos a la aventura que representó el viaje hasta Quito, diremos


que ya en la capital de la República, los expedicionarios Almagro, Isern y
Martínez fueron a visitar a inicios de diciembre al Presidente García Moreno.
Dice éste último: "Nos recibió bien; hablamos de excursiones al Pichincha,
Antisana, etc." (280) Es que García Moreno había ascendido al volcán
Pichincha en 1845, acompañando a Sebastián Wisse, y bajado hasta su cráter,
por lo que dicha visita debió ser muy agradable para el mandatario
ecuatoriano.
CAPITULO VI

Primeras expediciones
armadas urbinistas
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 207

PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS


URBINISTAS

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destierro; y ya que dicho mandatario procedía con mano férrea contra
todos aquellos que perturbaban el desarollo de su administración, las
invasiones armadas del oposicionista en el ostracismo tomaron características
por demás violentas.

Es verdad pues que García Moreno procedía - y así está en la historia -


contra revolucionarios y conspiradores con una severidad rara vez suavizada
por clemencia o compasión. Su temperamento colérico y violento y su profunda
inteligencia no permitieron el éxito de sus adversarios, en su afán de
derrocarlo.

Ricardo Pattee, en su obra citada, clasifica a los liberales de acuerdo a la


forma como estos combatían al régimen. Habla de los grandes hombres del
liberalismo auténtico en la primera época Garciana, como ser Pedro Moncayo,
Marcos Espinel, Miguel Riofrío y sobre todo Pedro Carbo. Menciona también
al liberalismo católico o cuencano liderado por don Antonio Borrero. Pero
dice que el elemento opositor desterrado ocupa otra categoría, y que a la
cabeza de ellos figura José María Urbina, quien se constituyó en la mayor
preocupación del régimen.

Se refiere a los primeros como de pura estirpe, son ellos Carbo, Borrero,
etc. quienes no encontraron dificultad alguna en oponerse al Gobierno, no
sufriendo ni la coacción ni el destierro. En cambio que Urbina asumió fórmulas
armadas, a diferencia de las controversias ideológicas que se verificaban en
el país.
208 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Pero es que siendo el Presidente un hombre vehemente y duro, como es


lógico, los liberales que lo combatían con la palabra o con el escrito ni siquiera
inmutaban al personaje, el verdadero peligro era Urbina, Robles y otros, que
desde el destierro representaban una verdadera amenaza para su estabilidad.
¡a esos había que reprimir!

LA FRUSTRADA EXPEDICION DE 1862

Urbina había fijado su residencia en el puerto boliviano de Cobija, y era


su propósito mantenerse - según sus palabras - en retiro, sin mezclarse en
los asuntos políticos de su patria Ecuador. Pero sucesos importantes en su
patria lo hicieron cambiar de idea: uno de ellos lo menciona en la siguiente
carta:

"Allí en Cobija - dice el general Urbina en marzo de 1864- permanecería


aún, y hasta tranquilo y satisfecho, ciertamente, - aunque privado por
temporadas de lo único que hace mi felicidad y contento, - la presencia de mi
familia, - si el odio implacable con que me honra el Sr. García Moreno, y un
espíritu de mezquindad, venganza de parte del General Flores, no les hubiera
cegado hasta el punto de caracterizar el tiránico poder que ejercen en el
Ecuador, arrancando a mi mujer,-señora incapaz, como todos lo conocen y
repiten de descender de su alto merecido lugar y rango de verdadera Señora,
al de conspirador o revolucionario de cuarteles; - arrancando, digo, a mi mujer
con cuatro hijos tiernos, de la casa en que hacía sólo veinte horas que había
muerto y en que aún permanecía el cadáver de su respetable madre, para
expulsarla al Perú, como lo hicieron..." (281)

Pero aquella no fue la única razón para dejar su retiro de Cobija, eran
también los graves sucesos políticos los que motivaron su decisión, así lo
expresa al respecto en el siguiente escrito:

"No hubiera dejado mi retiro si la voz de alarma dada a América en esos


días, por el mismo Gobierno de Perú, con motivo del famoso pacto de traición
contenido en las cartas del Presidente ecuatoriano García Moreno, al Ministro
Francés en Quito, Mr. Trinité, que acababan de ser descubiertas, y las
vehementes y reiteradas insinuaciones que, de diversas personas y de distintos
lugares, se me dirigieron, no me hubiesen impuesto el deber de abandonar
ese retiro y prestarme a concurrir con mis esfuerzos a la grande obra, cuya
sinopsis para mí era ésta: devolver a mi familia su patria, a mi patria su
soberanía, y a la América su seguridad".

"Salí en efecto de Cobija - agrega el General Urbina- y pasé a donde se me


llamaba invocando tan santos deberes; al punto de donde había partido esa
digna voz de alarma; a Lima... Además, lo diré con franqueza, ya dudaba,
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 209

mi espíritu se resistía a creer en la existencia del crimen que se imputaba al


Presidente ecuatoriano. El señor García Moreno había tenido ya la desgracia
de manchar su nombre y comprometer la paz y la independencia de su patria,
con escandalosas y trascendentales traiciones durante la guerra con el Perú,
y había cometido también otra inicua traición a las leyes, a la voluntad, a los
intereses, a los derechos, a la historia y al porvenir del Ecuador, sometiéndolo
nuevamente a la espada del General venezolano don Juan José Flores, quien
como todos saben, hacía quince años que había sido expulsado por el pueblo,
después otros quince de incesante y sangrienta lucha en que la República
defendía sus derechos, su libertad, su ser, y Flores la usurpación, la barbarie,
la tiranía; por lo cual y por su pacto traidor con la España en 1846 y su
invasión pirática en 1852, leyes justas y necesarias, la opinión unánime del
país y el voto de las demás repúblicas del Pacífico, le cerraban las puertas del
Ecuador. Mas, aunque tales traiciones del Sr. García Moreno, eran por cierto,
execrables, como lo es toda traición, al menos no afectaban sino exclusivamente
al Ecuador; es decir, a uno sólo de los miembros de la gran familia americana,
no a todos; y eran traiciones cuyo nacimiento y fines tenían su razón de ser,
siquiera sea en la ambición y otras aciagas pasiones del Sr. García Moreno;
en tanto que la entrega del Ecuador a la Francia era una traición que hería
de muerte a la América toda, y contrariaba la misma ambición de García
Moreno, haciéndole descender del alto puesto, -aunque tiránico y usurpado, -
de Presidente de un pueblo libre, al de vasallo, despreciado, como sin duda lo
habría sido aún del mismo soberano a cuyas plantas se prosternaba".

"No podía, pues, resolverme a ver, ni aún bajo el prisma de la enemistad,


otro Presidente Santana en el Presidente García Moreno, y quise que mi
propia y material vista me sacara de tan angustiosa duda, antes de abandonar
definitivamente mi propósito de no volver a la vida pública. En efecto; apenas
llegado al Callao, pedí que se me trajesen a bordo las memorables referidas
cartas del Sr. García Moreno. Me las trajeron, y leí... ¡ Eran autógrafas! y se
estipulaba en ellas que el Ecuador sería colonia francesa, en los mismos
términos en que el Canadá lo es de la Gran Bretaña o en los que el Ministro
Francés tuviese a bien señalar!! "

"Mis generosas dudas fueron disipadas. Mi patria estaba vendida, y era


incontestable, inminente el peligro que amenazaba a la América, herida ya
con el sacrificio de la República Dominicana y la invasión de México, cuyos
atentados, promovidos y consumados a la sombra y con el apoyo de traiciones
iguales a la del Presidente ecuatoriano, coincidían con ésta en tiempo, medios
y objetos..." (282)

Dice Destruge, que el General Urbina se trasladó a Lima a fines de 1861,


llamado por cuantos allí residían, dispuestos a unificar sus esfuerzos contra
un gobierno que de semejante manera atentaba contra la nacionalidad
ecuatoriana. (283)
210 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

En la capital peruana existía un gran núcleo de liberales que, como los


que habían quedado en el Ecuador, reconocían al General Urbina como Jefe
del Partido - continúa Destruge - ellos le comprometieron para que efectuara
una expedición armada que permita derrocar al gobierno de García Moreno.
Urbina aceptó el encargo y dirigió los preparativos para tal fin, trasladándose
a Paita en los primeros meses de 1862. (284)

La sociedad "Independencia" constituida en Lima por muchos ecuatorianos


y otros americanos, ayudó eficazmente al General Urbina, y uno de sus
miembros, el acaudalado Antonio Millán compró el vapor "Nueva Granada"
a la compañía Inglesa de Vapores, que cambió su nombre por el de
"Bernardino" para efectos de la expedición. (285)

El Coronel José de Veintimilla, que se encontraba en Lima, conoció de los


preparativos de la expedición. Por lo que fletó el vapor "San Carlos", con el
objeto de llevar a Ecuador en forma personal la noticia de dicho proyecto. El
15 de octubre el Ministro de Hacienda dispuso el pago de 14.300 pesos por el
flete de aquel vapor. Suma elevada para el época. (286)

En conocimiento de la expedición el Presidente García Moreno se apuró


en dictar el siguiente decreto:

"Gabriel García Moreno.


Presidente de la República del Ecuador,
Considerando:

"Que, amenazada la República por una invasión de piratas y bandidos, es


indispensable organizar la fuerza permanente y la guardia nacional de la
manera más conveniente para exterminarlos.

DECRETO:

"Art. lo. La División de operaciones en la costa se compondrá de los


batallones Número lo., Número 2, Babahoyo, Milagro, de los regimientos de
lanceros números lo. y 3o., de la brigada de artillería y de los cuerpos de
guardia nacional de las provincias litorales.

"Art. 2o. La División de reserva en el interior, constará de los batallones


de veteranos número 3o., 4o y 6o, del regimiento de lanceros número 2o. y de
los cuerpos de la guardia nacional movilizada o que se movilice en las
provincias interiores

"Art. 3o. El Ministro de la Guerra y el General en Jefe, quedan encargados


de la ejecución de este decreto.

Dado en el Palacio de Gobierno en Quito, a 12 de octubre de 1862.- Gabriel


PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URB1NISTAS 211

García Moreno.- El Ministro de Guerra y Marina.- Daniel Salvador". (287)

Por su lado el Ministerio de Relaciones Exteriores dirigió una circular a


las legaciones y consulados acreditados en el Ecuador, a las cancillerías
extranjeras, etc. anunciándoles la expedición y que había sido declarada
pirática por el Gobierno ecuatoriano. (288)

El vapor "Bernardino" zarpó del Callao el 30 de septiembre de 1862,


conduciendo alguna gente para la expedición, que debía quedar organizada
definitivamente en Paita. Pero tal parece que las autoridades del Gobierno
peruano decidieron impedirla y dispuso el retorno del buque al Callao, en
donde fue detenido. Fracasando de esta manera dicho proyecto. (289)

En Ecuador, en pleno conocimiento de las autoridades, se publicó la noticia


alentadora para ellos, de la extinción del peligro de una invasión armada,
como lo dice el Ministro del Interior en el siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Ministerio de Estado en el Despacho del Interior.-


Quito a 24 de octubre de 1862.- Excelentísimo señor Presidente de la Corte
Suprema".

"Por el adjunto número extraordinario de "El Nacional", se instruirá


Vuestra Excelencia, de que la pirática expedición capitaneada por los Ex-
Generales Robles y Urbina, ha sido completamente desbaratada en el Callao
y que la República vuelve en consecuencia a disfrutar completamente de la
paz y tranquilidad de que tanto necesita para adelantar en las vías de progreso
que se ha propuesto llevar a cabo el Supremo Gobierno.- Dios guarde a Vuestra
Excelencia.- R. Carvajal". (290)

PLAN REVOLUCIONARIO PARA SECUESTRAR AL GENERAL


FLORES

Es muy posible que los urbinistas hallan tratado de secuestrar al General


Juan José Flores, General en Jefe del Ejército ecuatoriano, con la intensión
de presionar militarmente al gobierno de García Moreno. Un rehén de esa
categoría en cualquier otra circunstancia hubiera sido favorable a los intereses
revolucionarios, pero consideramos que no en ésta, conociendo quien ejercía
la Presidencia de la República, de impredecible accionar, quien a lo mejor no
hubiera cedido a ninguna petición del adversario. Una carta escrita por el
Encargado de Negocios del Ecuador en Lima de los pormenores del suceso y
las acciones que tomó para reprimir a Urbina y sus colaboradores en Perú:

"Señor General don Juan José Flores.- Lima, julio 24 de 1863.- Mi querido
212 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR •

amigo y General.

"Mucho me ha impresionado la noticia que Ud. me comunica en su


apreciable de 13 del corriente, sobre el espantoso plan concebido por los
enemigos del orden público, de apoderarse de la persona de Ud. por medio de
cuatro hombres desalmados, embarcarle en el vapor "Washington" y
arrancarle orden para la entrega de los cuarteles. Nunca creí que en nuestro
país los conspiradores se avanzaran hasta el extremo de proyectar crimen
tan horrible. Pero la providencia que vela por la suerte del Ecuador ha salvado
a Ud., debemos felicitarnos los ecuatorianos porque la existencia de Ud. es
necesaria para la conservación de la tranquilidad pública".

"Inmediatamente que recibí su estimable, pasé a hablar con el General


Canseco: Puse en su noticia aquel desagradable acontecimiento; le manifesté
la imperiosa necesidad de internar a Urbina y demás emigrados ecuatorianos
residentes en los pueblos limítrofes al Ecuador. Manifesté acceder a mi
solicitud, y quedó en acordar con el Ministro lo conveniente para que por el
presente vapor se libraran las órdenes necesarias para que se realizara dicha
internación".

"Temo mucho que no se haga efectivo ese ofrecimiento, porque Ud. debe
calcular que en el día es preponderante en el Perú la influencia del General
Castilla en todos los asuntos que conciernen a la alta pública".

"En la fecha en que Ud. reciba la presente es probable que haya pasado
por Guayaquil el General Pezet a quien se le aguarda en esta capital, conforme
a sus últimos ofrecimientos, para el 2 del mes entrante. Habría sido bueno
que a su llegada a Guayaquil se hubiese esmerado las manifestaciones que
corresponden al Jefe de una República vecina".

"El 26 del corriente sale la Escuadra española con dirección a ese puerto:
Se compone de las fragatas "Resolución" y "Triunfo" de 44 cañones cada una,
y de la corbeta "Covadonga", a las órdenes del Almirante Pinzón".

A pesar de que los españoles al principio fueron recibidos con alguna


frialdad por los limeños, posteriormente les han dado bastantes pruebas de
cordialidad. Le remito algunos impresos.

"Reciba mil afectos de Manuelita: Particípelos a mi señora Mercedita; y


ocupe a su adicto amigo y S.S.- (O José.
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 213

PROHIBICION DE DESEMBARCO DE ESCLAVOS

"Como asunto curioso, pero histórico, cabe indicar que el Ministro del
Interior transmitió a las autoridades la prohibición del Presidente de la
República, Dr. Gabriel García Moreno, relativa a impedir el desembarco en
nuestras costas de algunos esclavos que habían sido liberados en los Estados
Unidos de Norteamérica. Por ello el Capitán de Navío Agustín Oramas,
Capitán del Puerto de Guayaquil, informa al Gobernador de la provincia, con
fecha 14 de agosto de 1863, lo siguiente: "Tócame decir a US. que en
cumplimiento de mi deber desplegué toda vigilancia para cumplir
puntualmente con lo prevenido en la comunicación preinserta", (291)

En Estados Unidos de Norteamérica se había producido la secesión de los


Estados del Sur. En diciembre de 1860 Carolina del Sur se separó de la Unión
y, a comienzos de febrero se le habían unido Misisipí, Florida, Alabama,
Georgia, Luisiana y Texas. En Montgomery, Alabama los 7 estados
separatistas decidieron en febrero de 1861, formar los Estados confederados
de América (292)

Posteriormente Virginia, Arkansas, Tennessee y Carolina del Norte


también se retiraron de la Unión. Estalló pues la guerra civil entre la Unión
y los Estados Confederados, y en el interín, en enero de 1863 el Presidente
Abraham Lincoln (1809-1865), para quien el principal motivo para instigar
la guerra fue salvar la Unión, promulgó el decreto de Emancipación de los
Esclavos. (293)

Según las cartas de García Moreno, notamos su interés por conocer sobre
la secesión de los estados y la guerra civil en dicho país del norte, y así lo
comenta a sus destinatarios. Enterado pues de la supresión de la esclavitud
ocurrida en enero de aquel año, dispuso se impida el arribo a nuestra patria
de aquellos que en tal condición de libertos huían de aquel conflicto intestino.

BROTES ESPORADICOS EN GUAYAQUIL Y RECLUTAMIENTO


FORZOSO

La ciudad de Guayaquil fue teatro de una sucesión de intentonas y conatos


que sembró la alarma en aquella comarca y obligó a García Moreno a usar la
fuerza para repelerlos.

Siendo el principal puerto, y el único de su clase en la República, la


consecución de los propósitos revolucionarios en la ciudad podría causar graves
inconvenientes para el gobierno central. "Antes de Cuaspud, en septiembre
de 1863, hubo brotes esporádicos, sin consecuencias importantes para la paz
214 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

general. El General Juan José Flores reprimió esta nueva revuelta, aprehendió
a los culpables e impidió que el urbinismo guayaquileño se adueñara del
poder". (294)

El 27 de octubre de 1863 los guayaquileños que se hallaban en las calles


de la ciudad, se vieron sorprendidos por un disparo de cañon efectuado desde
la goleta de guerra "Salado", y por un despliegue de tropas en guerrillas,
evolucionando a toque de corneta por los lugares más públicos. Se trataba de
una celada en que los ciudadanos fueron violentamente aprehendidos y
llevados a los cuarteles, suponiéndose que se trataba de un reclutamiento
forzoso para alistarlos con motivo del conflicto con Colombia, que como hemos
visto culminó con el combate de Cuaspud el 6 de diciembre de 1863.

"Entre los acuartelados se hallaban algunos ciudadanos chilenos, por lo


cual el Cónsul de ese país, Juan A. Gutiérrez protestó ante el Gobernador de
la Provincia el día 28, a quien le dice: "Ayer a las cinco de la tarde varios
chilenos jornaleros... atraídos por el disparo de cañón que hizo el Pailebot
"Salado"... fueron maltratados y empujados a los cuarteles, desgarrándoles
sus vestidos para asegurarles como famosos criminales". (295)

Fotografía del Malecón de Guayaquil, captada de sur a norte por el mismo Castro en 1864. Observamos que en aquel año ya
se tomaban en la ciudad retratos de ambrotipo y fotografías.
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 215

El Cónsul al tener noticias del hecho, y por ser las ocho de la noche, deshoras
para acudir al Gobernador, se acercó al Comandante General del Distrito y
le pidió la libertad de los chilenos acuartelados. Dicha autoridad le indicó
que la medida emanada por mandato superior no exceptuaba nacionalidades,
dejando a salvo a los cónsules para hacer los reclamos que estimen
convenientes. (296)

Ante estas circunstancias pidió la libertad de los chilenos y se le prometió


hacerlo al siguiente día. Pero el 28 continuaban estos retenidos en los
cuarteles, y entre ellos Lorenzo García, cuyo certificado de nacionalidad había
sido objetado por el Gobernador por contener la expresión "renovada".

El Cónsul Gutiérrez dice al respecto: "Cuando un certificado se envejece,


este consulado la renueva y recoge el viejo y al hacerlo pone a la cabeza del
nuevo certificado, renovado: esta explicación le hará comprender a Ud. que
esa palabra "renovada" en nada desvirtúa el certificado de Lorenzo García
firmado por mí y sellado de oficio como todos los demás.

"Al pedir al Sr. Gobernador que sean inmediatamente puestos en libertad


Lorenzo García y todos los chilenos retenidos en los cuarteles, es el caso de
llamar su atención a la inconveniencia de ejercer en ciudadanos de Chile
actos como los ha presenciado ayer esta población y de que ha sido teatro
esta ciudad.

"Los chilenos en el extranjero solo pueden ser aprehendidos cuando


infringen las leyes del país que los hospeda, y si alguna vez el Ecuador tiene
necesidad de llamar a sus nacionales al servicio de las armas por las medidas
que ha presenciado esta población, el infrascrito espera que sus certificados
serán, respetados puesto que al conferirles a sus nacionales de orden de su
Gobierno y revestidos con el sello consular, no es para que sean atropelladas
las personas a quienes resguarda.

"Grato será al infrascrito recibir de US. una contestación pronta y


tranquilizante, cual cumple a las amistosas relaciones que felizmente existen
entre Chile y Ecuador". (297)

SERVICIO DEL CAPITÁN DE NAVIO JUAN MANUEL URAGA '

El 20 de octubre de 1863, el Dr. Gabriel García Moreno firmó el ejecútese


de un decreto expedido por el Congreso ante la solicitud del Capitán de Navío
Graduado Juan Manuel Uraga, que presentó los documentos para que se le
habilite el tiempo transcurrido desde 1827, en que entró al servicio de la
marina en calidad de Alumno Aspirante, hasta 1848 que pidió y obtuvo su
licencia absoluta.
216 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Este documento es muy interesante, ya que de acuerdo a la fecha que


consta en los documentos de su ingreso a la Escuela Náutica, había entrado
a la misma el 8 de julio de 1828 cuando tenía 13 años de edad, como lo
habíamos publicado en un libro anterior. (298)

Pero parece que su primer ingreso lo efectuó año y medio antes, y de ser
así, don Camilo Destruge tiene razón cuando en su libro "Album biográfico
ecuatoriano" indica que ingresó el lo. de enero de 1827, permaneciendo en la
institución más de 30 años. (299)

El Congreso decretó aprobando lo solicitado por Uraga, e indica en el mismo


que su antigüedad le será considerada desde dicho año de 1827. Cabe aclarar
que a aquel lapso habría que sumársele los años que sirvió en las décadas de
1850 y 1860, para obtener el tiempo que realmente sirvió en la marina hasta
su último retiro.

ACLARACION SOBRE ACUSACIONES AL GENERAL THOMAS


CHARLES WRIGHT

En su primer período presidencial García Moreno tuvo que soportar


continuos brotes de conspiración interna y externa. Aquello le preocupaba, y
en algunas ocasiones tuvo que intervenir personalmente para aplacar dichos
movimientos subversivos.

El 20 de marzo de 1864 se urdió un complot de alcance mayor encabezado


por el Dr. Marcos Espinel y apoyado por otros ecuatorianos conocidos, entre
ellos Javier Endara y Mariano Mestanza. El 23 de marzo de 1864 "El Correo
del Ecuador" informa ampliamente sobre el alcance y propósito de este
movimiento. Pattee dice al respecto:

"Estrechamente ligado a Mosquera, quien todavía se interesaba en la


política de la República vecina, los jefes de la presunta revolución lanzaron
una diatriba contra García Moreno y el Concordato, diatriba llena de frases
libertarias y mueras al sistema prevaleciente. Terminaron invocando el brazo
protector de Mosquera, colocándose bajo el poderoso patrocinio. Estaba
envuelta en este intento contra el gobierno, la esperanza de obtener el apoyo
de Mosquera y la eficaz ayuda de Urbina. Fracasó, y los conspiradores, tras
condenados por traición, apelaron al Tribunal Supremo de la nación. Este
tribunal declaró sin lugar la acusación, en vista de que se trataba de una
conspiración que no se había consumado, o sea que quedó desvirtuada por
carencia de efecto. El intento para derrocar al Gobierno constituido no
conllevaba ninguna sanción, de suerte que los procesados se vieron librados
de toda responsabilidad. La Corte Suprema ha declarado que los procesados
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 217

por delito de traición deben ser juzgados únicamente como sindicados de


tentativa de rebelión, es decir, de un acto que no tiene pena según el código
penal, sino en el caso de que la rebelión se hubiese consumado". (300)

Había otro preso, y de importancia, acusado de conspirador, se trataba del


prestigioso General Thomás Charles Wright, de quien dice don Alberto Wright
Vallarino en su libro titulado "Destellos de Gloria": "García Moreno,
mandatario enérgico, trataba de imponer su voluntad a cualquier precio, y
eso Wright, guayaquileño por adopción, no lo puede permitir y entra en todas
las conspiraciones que se traman desde 1862. García Moreno le tiene puesta
la vista, pues sabe del prestigio del General irlandés en la ciudad de Guayaquil
y en el Ejército y la Marina..." (301)

Lo cierto es que, en esta ocasión, Wright fue tomado preso y llevado al


cuartel al mando del Teniente Coronel Juan Avila. El día 11 de abril de 1864
se presentó al mismo el Presidente García Moreno, con el objeto de efectuar
un careo entre Wright y dos Sargentos que denunciaban a dicho Jefe de
haberles hablado para una revolución. (302)

General de División Thomas Charles Wright, con su uniforme naval. En 1864 acusado de
conspirador por el mismo Presidente de la República, fue tomado preso e investigado.
218 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Durante el careo en presencia del Presidente de la República, los sargentos


sostuvieron que el hecho había tenido lugar en una casa o cuarto por la calle
de "Carrizal". (303)

Ante esta circunstancia, Tomás C. Wright hijo, que se hallaba presente en


el careo, y estaba seguro de la falsedad de la imputación hecha a su padre,
pidió que los dos sargentos, uno a uno, fueran enviados a señalar el cuarto o
casa en que aludían haberse visto con el General. El Teniente Coronel Avila
accedió al pedido con la anuencia del Presidente de la República.

Fueron enviados los Sargentos, por separado, a aquella diligencia, y cada


uno de ellos designó cuartos y casas diferentes, lo que evidenció que aquellos
habían calumniado al General Wright, por lo que García Moreno luego de
observar en forma personal todo lo actuado, dispuso el inmediato castigo a
uno de los sargentos. (304)

Pero el Presidente no quedó contento con lo actuado, pues siguió dudando


de la lealtad de Wright hacia el Gobierno, por lo que dispuso su destierro. Así
lo manifiesta en el siguiente oficio:

"Excelentísimo señor General Juan José Flores.- Guayaquil, abril 13 de


1864.- Mi distinguido amigo:

"Me alegro de que por allí esté todo tranquilo. Por todo lo descubierto de la
revolución última se conoce que era enteramente local y provincialista, dirigida
a separar por de pronto de la Sierra a Guayaquil; no es extraño por lo tanto
que no haya tenido ramificaciones en aquella provincia.

"Con la salida de 26 presos al interior y la expulsión de Wright se restablece


la paz y acabará de consolidarse con la separación de todos los revoltosos.

"Nada se sabe del "Bernardino", es probable que al haberse frustrado la


revolución han impedido que vengan los que se hallaban a bordo; pues queda
en claro por lo tanto que la perfidia peruana es ahora la misma que durante
el mando de Castilla.

"Pido a Carvajal me remita a Rendón y a Villa para colocarles en esta


guarnición. Sírvase recibir con la señora los afectuosos recuerdos de mi madre,
Pedro Pablo y la familia la invariable voluntad de un sincero amigo y servidor.-
(f) Gabriel García Moreno".

El testimonio del destierro de Wright lo da don Manuel Carbo, cuando


dice al mismo Flores: "Nuestro amigo el General Wrigth saldrá hoy de
Guayaquil en el vapor del sur, pues así parece lo ha exigido el Presidente con
una fianza. Parece que dicho amigo se ha vindicado de la acusación que le
hicieron dos sargentos, y que a estos les han castigado con palos.
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 219

Mas adelante expresa: "Yo he dudado mucho que el General Wright pudiese
meterse en una revolución a favor de Urbina, porque esto no es natural, y
siento los trabajos que pasa dicho amigo después de los pasados antes, y
mucho más a su edad".

La preocupación de Tomás C. Wright hijo, quien tenía algo más de 30


años, no termina allí, y el 24 de mayo solicita al Comandante General del
Distrito de Guayaquil mande que el Sr. Teniente Coronel Juan Avila, con las
formalidades legales, declare o certifique al tenor sobre cinco preguntas
relacionadas a dicho careo, para aclarar ciertos particulares referentes a su
ya anciano padre. Aquél compareció a declarar con juramento y aceptó la
veracidad de todas las diligencias llevadas a cabo el 11 de abril de 1864. (305)

El General Wright no dejará de tener problemas con García Moreno, en lo


posterior. Es recién el inicio de un largo capítulo de enemistad, que solo
culminará con el fallecimiento del protagonista de "Malpelo".

Thomas Wright, hijo, asumió la defensa de su padre para aclarar su no


participación en la conspiración contra García Moreno.
220 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Incluso uno de los hijos del General Flores escribe una carta el 28 de abril
de 1864, desde la hacienda "La Elvira", la que firma con el nombre de Juan,
y entre otras cosas dice a su padre:

"Me he olvidado decirle que el General Wright en una conferencia privada


que tuvo conmigo me dijo "que era cierto que él pensaba ponerse a la cabeza
de la revolución, cuando toda estuviera hecha, pero que era con el objeto
principal de salvar a U. y a su familia, como de proteger a los demás amigos.
Créamelo por mi palabra de honor que éste ha sido mi pensamiento", dijo.
Añadió que eso no se lo podía decir al Sr. García Moreno, etc.

"Le encargo guarde la reserva de todo lo que le refiero. para mí el Sr.


Wright está devorado de ambición o sediento de oro, además del resentimiento
con US. y el Presidente, porque no le han dado la Comandancia General de
Guayaquil".

EXPEDICION ARMADA URBINISTA DE 1864

Entre los meses de junio y julio de 1864 se hacen más frecuentes las
insurrecciones urbinistas ya no solo en Guayaquil, sino tambien en diversos
lugares del país. Figuran entre los revolucionarios Marcos Espinel y sus
partidarios, los que el 11 de junio habían sido indultados por la justicia por
segunda ocasión, considerando que el hecho revolucionario no se había
consumado.

El 5 de junio los revolucionarios atacan Montecristi, capital de la provincia


de Manabí, y según Manuel Gálvez fueron derrotados, mencionando además
que uno de los jefes del movimiento era el joven Eloy Alfaro, que había ido al
Perú a pedir instrucciones a Urbina, y al retornar a Manabí se encontró con
que el movimiento ya había empezado. (306)

Pero Destruge no está de acuerdo en lo que a la derrota de los


revolucionarios se refiere, más bien trata de probar en su obra "Urbina el
Presidente" que las autoridades falsearon la verdad, acogida después por
algunos historiadores. Su versión de los acontecimientos es la siguiente:

"En Manabí debía encabezar la revolución el Coronel Albán, a quien


secundaban el joven Eloy Alfaro, ardiente partidario de Urbina, y otros
patriotas.

"El General Urbina había escrito a los de Manabí que no efectuaran


movimiento alguno hasta conocer el resultado del que debía hacer Maldonado
en Quito. Pero Alfaro había dado ya el 5 de junio, una sorpresa y vencido en
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 221

el sitio "El Colorado" a una compañía de artilleros enviada como refuerzo


desde Guayaquil; y pasando luego a Monte-Cristo, tomó preso al Gobernador
que lo era el coronel don Francisco J. Salazar.

"Como el Coronel Albán era el jefe del movimiento y resolvió seguir las
instrucciones del General Urbina, entró en capitulaciones con Salazar, quien
fue puesto en libertad, comprometiéndose a dar garantías, a todos y no
perseguir a persona alguna de las complicadas en el movimiento. Alfaro se
apresuró a salir del país, no confiando en lo ofrecido por Salazar, y se trasladó
a Panamá.

"Ahora, para que se vea como se falseó la verdad de lo sucedido, diremos


que en oficio del 18 de junio decía el Ministro de lo Interior, doctor Pablo
Herrera, al Gobernador de Guayaquil:

Eloy Alfaro Delgado, quien muy joven inició sus acciones revolucionarias,
venciendo el 5 de junio de 1864 al Coronel Francisco Javier Salazar en el
sitio "El Colorado".
222 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"En la provincia de Manabí ha estallado un movimiento de sedición, que


ha turbado momentáneamente el orden público, tomando preso al Gobernador
de ella; pero, últimamente, los facciosos han implorado la clemencia al
Gobierno, solicitando un indulto o amnistía; por manera que, a la fecha, se
habrán restablecido completamente la paz y tranquilidad de la enunciada
provincia.

"El mismo ministro, en oficio del 22, decía al Gobernador del Guayas: "El
Gobernador de Manabí ha puesto en conocimiento del Supremo Gobierno,
que el movimiento revolucionario que estalló en esa provincia, ha terminado
completamente, por rendición de los sediciosos".

"Esto nada tiene de admirable; nos falta aun mucho que ver en este sentido;
y es menos de admirar que así se desfigure la verdad, ante algo mucho más
grave: la falta de cumplimiento a la palabra empeñada, por parte del
Gobernador de Manabí; quien, inmediatamente, se dio a perseguir y a fusilar".
(307)

Como prueba de la conspiración en marcha, agentes del Gobierno lograron


interceptar una carta enviada desde Lima por Pedro Espinel al General
Guillermo Franco, en la que se califica de secretos los pasos dados por parte
de los emigrados en Perú para el inicio de la revolución en el Ecuador. La
transcribimos a continuación:

"Lima , 12 de junio de 1864.- General Guillermo Franco.- Mi estimado


General y amigo:

"Vengo a recordar los preciosos conceptos emitidos por U. en la última


consideración que allí tuvimos.

"La mano europea que se adivinaba pesa ya sobre nosotros, pero no pesaría
tan fuerte, ni tan destructora la vislumbraría yo, si no la impulsasen los dos
grandes traidores que para desdicha de su patria y vergüenza de la América
mandan en el Ecuador. ¿Y qué hacemos? ¿Cómo nos salvaremos?. He aquí el
objeto de esta carta.

"La opinión del Perú no es favorable sino exaltada y fanática, si se me


permite la expresión, por la buena causa del Ecuador; todos los elementos
pueden sin dificultad conseguirse, pero es necesario saber como se emplean.
Yo me he ofrecido a escribir a US. pidiéndole informes y lo hago exigiéndoselos
lo más detallado posible. Aquí se duda del perfecto acuerdo entre US. y los
Srs. Robles y Urbina, esto puede ser (y yo lo creo) manejos y voces insidiosas
de los enemigos de la buena causa; mas de todos modos es preciso que aquí
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 223

sepamos clara y terminantemente la verdad, además la identidad perfecta


de opiniones entre todos los emigrados es indispensable. Igualmente es preciso
saber con quien podríamos entendernos en Guayaquil; en este mismo sentido
se le ha escrito al Gral. Urbina y US. debe acordarse con él.

"Los pasos que aquí se dan son secretos porque Flores tiene espías y un
delato oportuno nos haría mucho daño.

"Tengo el gusto de acompañarle un artículo que publiqué aquí, vindicando


a mi patria de las calumnias que dos colombianos espurios le prodigan.

"Tengo la satisfacción de haber conseguido plenamente mi objeto pues el


club "Los Hijos del Pueblo" reunido en gran comisión los declaró traidores a
la América y se vieron forzados a retirarse de la redacción del Mercurio.

"Aunque no tengo el honor de conocer al Gral. Urbina, sírvase US.


presentarle mi respetuosa adhesión, mis respetos a su Sra. y niñas c.p.b. y
mis protestas de afecto a Campuzano y demás guayaquileños y US. sírvase
contestarme cuanto antes le sea posible y créame siempre".

"Su afmo. Amigo y S. Y. B. S. M.- (f) Pedro Espinel".

El siguiente mes, el General Juan José Flores recibió una carta de su


amigo Manuel Baños, quien desde Lima le informa sobre los movimientos de
los urbinistas en Perú, la misma que reza lo siguiente:

"Callao, Julio 11 de 1864.- Sr. General Juan José Flores.- Mi estimado


General.

"Recibí su muy apreciada fechada lo. del pte. y como siempre alerta a las
operaciones de los contrarios de mis simpatías, a más de lo que el amigo
Lecaro anuncia a U. añado que en el vapor del 9 ha llegado a éste como
comisionado de los señores de Paita un señor Campuzano, el cual está en
negociaciones con este Gobierno, tratando no se que, más tarde se podrá
saber y al momento lo pondré en su conocimiento.

"El "Bernardino" no está en buen estado. Hoy nada menos he hablado con
su Capitán, que es José Marcos, y me ha dicho lo que arriba digo y que piensan
componerlo tan pronto como el Gobierno les dé un dinero que tiene que
entregar a Campuzano.

"Aquí señor. La opinión general con referencia a Uds. (de los peruanos) es
titularlos traidores a la Patria, porque no les ayudan a pelear con los españoles,
224 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

y esto es de lo que se valen los demás señores que hay en Paita para sacar lo
que desean.

"Dispense lo dilatado y mande como guste a su muy consecuentemente y


S.S.Q.B.S.M.- (f) Manuel Baños". (223)

FUSILAMIENTO DEL GENERAL TOMAS MALDONADO

En Quito maduraba también la idea de la conspiración, siendo el General


Manuel Tomás Maldonado el principal comprometido para efectuar el
movimiento de insurrección en dicha capital, mas las autoridades descubrieron
aquel proyecto y Maldonado tuvo que fugar.

Aquella revolución que debió iniciar el 23 de junio de 1864, y que siendo


descubierta a tiempo, es detallada en una circular emitida por el Ministro
del Interior, la que transcribimos a continuación:

"No. 34.- República del Ecuador.- Ministerio de Estado en el Despacho de


lo Interior.- Quito, á 24 de junio de 1864.- Circular.- Al Sr. Gobernador de la
provincia del Guayas.

"Ayer por la noche debió estallar en esta Capital, una de esas revoluciones
que más deshonran la historia de las repúblicas Hispano-americanas.

"Los reos de la revolución sofocada en Marzo, en Guayaquil, así como los


traidores que favorecieron la invasión de las tropas colombianas en la pasada
guerra, acababan de ser indultados, completa y generosamente, por el
Gobierno; y el primer uso que han hecho de su libertad, ha sido entrar en
una conspiración con el objeto de asesinar al Jefe del Estado (0) y colocar de
Jefe Supremo al ingrato General Manuel Tomás Maldonado, traidor a cuantos
gobiernos ha tenido la República.

"La revolución estaba preparada para las once de la noche, hora en que el
Capitán Juan Gómez Cox, encargado de la guardia del cuartel del Número
2o. y del parque de la plaza, debía traidoramente amarrar a sus jefes y
compañeros, y armar a los asesinos y salteadores (sic) que vinieron de
Guayaquil y existe en ese cuartel; al mismo tiempo que los indultados debían
acometer al Presidente, quien, como todos saben, no tiene jamás guardia, y
pagar a puñaladas su reciente generosidad".

"Prevenido el Presidente a tiempo, dictó desde la mañana las disposiciones


oportunas para escarmentar sangrientamente a los conspiradores; y se
procedió con tanta cautela, que ellos continuaron preparándose para la noche,
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 225

en la falsa confianza de que no estaban descubiertos. Mas, al anochecer, quiso


evitar la efusión de sangre; y, en vez de aguardar a los traidores, mandó
prender al oficial de guardia, que ha hecho ya revelaciones suficientes; al
General Maldonado, que huyó despavorido al primer asomo de peligro; a los
reos indultados, de los cuales están presos algunos; y a otros que no han
cesado de conspirar hace tiempo, abusando de las consideraciones con que
han sido tratados inmerecidamente".

"Lo que acaba de suceder, manifiesta la inutilidad completa y el peligro de


la clemencia, cuando se emplea en favor de hombres incapaces de todo
sentimiento noble. El Gobierno está, pues, resuelto a emplear en adelante
toda la fuerza de que está investido por la constitución y las leyes, para
escarmentar, de una vez, a los reos incorregibles; y, como es probable que en
la provincia del mando de US. el proyecto descubierto tenga cómplices y
auxiliadores, el Presidente me ordena que prevenga a US., procure
descubrirlos y remitirlos a esta Capital, sin pérdida de un sólo momento. Es
tiempo ya de que el país, que anhela por el orden y la paz, a cuya sombra
hace cada día mayores progresos, descanse tranquilo y libre de las asechanzas
de un corto número de traidores".

"Por lo demás, el Gobierno responde de la conservación del orden; porque


cuenta con la opinión pública, con la cooperación eficaz de todos los hombres
sensatos y con la lealtad de los empleados y del Ejército, en el cual los traidores
apenas han podido hallar un traidor que venda su honor a precio infame.- Lo
que comunico a US. para su conocimiento y demás fines.- Dios guarde a US.-
Pablo Herrera". (308)

tElEl historiador Camilo Destrugue, nacido en 1863, asegura que estuvo entre
s que escucharon algunas veces decir al General Juan Manuel Uraga que
Presidente García Moreno no abandonaba jamás la idea del asesinato;

te
ue durante el sueño prorrumpía en gritos de ¡me matan! ¡socorro! y saltaba
l lecho despavorido. En cuanto a lo de las guardias refería que durante una
poca se hacía guardar el sueño por cuatro centinelas colocados en las cuatro
quinas del lecho... y aún de ellos desconfiaba..." (309)

Dice don Pedro Moncayo en su "Historia del Ecuador" que el General


Maldonado era bastante indiscreto, y que confiando más de lo necesario en
su prestigio, hablaba sin reboso del Gobierno. "García Moreno - sigue Moncayo
- que no necesitaba de consejos para entregarse a sus arranques de ira y
venganza, una noche dio orden para aprehender a Maldonado; éste lo supo y
se puso en salvo, fugándose para la costa, con el objeto de pasar al Perú..."
(310)

Efectivamente, el General Maldonado había escapado por el camino de


Latacunga hacia Santo Domingo de los Colorados hasta llegar a Balzar.
Precisamente fue en aquella parroquia del Cantón Daule, en donde lograron
226 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

aprehenderlo, y luego de conducirlo a Guayaquil fue remitido con escolta a la


ciudad de Quito.

Lo cierto es que Maldonado había demostrado deslealtad para con los jefes
de los distintos Gobiernos en que había servido. Se sublevó contra Ascásubi
en septiembre de 1851; siendo comandante de la plaza de Quito, abandonó al
Presidente Noboa y se adhirió a Urbina. En abril de 1859 Maldonado fue
convencido para incitar a su División a la rebelión contra Robles, y así lo
hizo. Se pasó a las filas garcianas, ahí está lo malo, fue aceptado por García
Moreno a pesar de conocer su regularidad para volverse en contra de quienes
servía. Es que las circunstancias no dejaban otra alternativa. Era necesario
en su momento para obtener la victoria, la que permitiría derrocar a Robles
primero y luego al General Franco.

Maldonado era un General guayaquileño cuya carrera se alimentaba de


la política. Dice Pattee que según un testimonio, "trató de conspirar en víspera
de la Batalla de Cuaspud; trató de conspirar en Otavalo, después del Tratado
de Pinsaquí y trató de conspirar en Quito, revelando los cuerpos de la
guarnición". (311)

Este último autor transcribe un relato aparecido en la publicación "Dios y


Patria", titulado "El fusilamiento del General D. Manuel Tomás Maldonado
en 1864", para hacer notar que García Moreno procuró dejarlo en libertad.
Dicho relato corresponde a dos personas que acompañaban a este General en
la hacienda "Hacho", cerca de Balzar, antes de que fuera aprehendido, y es
como sigue:

"Media hora más o menos antes de caer preso el General Maldonado, recibió
de manos de un montubio un papel firmado por el teniente Justo Robalino en
que le decía: "Señor Gral. el señor comandante Veintimilla que manda la
escolta que le busca a usted me encarga decirle en nombre de S.E. el Sr.
Presidente García Moreno que se esconda o fugue lo más pronto que pueda,
porque si ahora cae preso, sin remedio será fusilado". El Gral. Maldonado
leyó el papel, se rió a carcajadas, lo estrujó y lo arrojó -y con una exclamación-
a fe de Maldonado, aunque yo conspire cien veces tendrá que perdonarme el
loco del Presidente. Si no me hizo fusilar por lo de Cuaspud, no me fusilará
más nunca. El bruto del General Mosquera fue llamado por mí, le hice triunfar
en Cuaspud, entrar en Ibarra y sale con la tontera de Pinsaquí. Mosquera
debe tener mis cartas como tengo las de él. Y como uno de sus mejores amigos
le instaba a huir, Maldonado contestó: "Cobarde, húyase usted, lo que es a
mí el loco es imposible que me haga fusilar". Y cayó preso. En Guaranda,
Veintimilla dio oportunidad a Maldonado para la fuga, y Maldonado,
encarándose a Veintimilla dijo: "Oiga, comandante, no fugo porque no me da
la gana, sepa que García Moreno no puede fusilarme nunca". En Ambato, de
acuerdo con Veintimilla, un caballero Holguín presentó a Maldonado caballos
y guías para la fuga y el General lo desechó; la gran señora Isabel Vaca,
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 227

General Manuel Tomás Maldonado, fusilado el 30 de agosto de


1864 por orden del Presidente Gabriel García Moreno. Fue su
aliado desde 1859.

esposa del General Gabriel Urbina, en medio de un banquete a Veintimilla,


presentó a Maldonado caballo, dinero y guías. Veintimilla dejó a Maldonado
sin centinelas ni guardia como una hora, la señora Vaca hasta se arrodilló
llorando ante Maldonado instándole a la fuga tan oportunamente preparada,
y él, desechándola, entró al banquete, sentándose junto a Veintimilla. Este,
encolerizó ya, dijo: "General, sin peligro mío, quise que usted se diera la
libertad y usted la rechaza". Y al punto hizo venir la escolta y calzar los
grillos al Gral. Maldonado y lo condujo a Quito". (312)

Destruge nos narra el fusilamiento de Maldonado de la siguiente manera:

"El lunes 29 de agosto llegó Maldonado a Quito, y fue puesto


inmediatamente en capilla.

"Poco después -dice Moncayo- García Moreno fue a visitarlo y estuvo


encerrado con él dos horas.- ¿Qué pasó? - Nadie lo sabe; pero se presume que
la entereza inquebrantable de Maldonado, puso al tirano en estado de llevar
adelante sus propósitos sanguinarios".
228 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"No se pensó siquiera en llenar las fórmulas de un juicio; y al día siguiente,


30 de agosto, fue llevado al patíbulo, sin que valieran las grandes influencias
que se pusieron en acción para salvarle la vida: García Moreno se mostró
inexorable.

"Ya estaba en prisión Juan Borja, el amigo predilecto de Maldonado;


cargado de hierros, extenuado por lo sufrimientos físicos y morales de un
largo martirio; próximo a la muerte... Y ese día 30 de agosto fue sacado de su
prisión; creyó él que era para fusilarle junto con su amigo y se alegró, porque
iban a poner término a su cruel martirio. Pero le habían llevado nada más
que a presenciar el fusilamiento de Maldonado, que hasta ese punto se
extremó en ese día terrible el refinamiento de la crueldad.

"¿Pero acaso fue ésto lo único? Llegaba ya Maldonado al lugar del suplicio,
cuando se presentó su esposa, que se hallaba en cinta; y loca de dolor, se
arrojó a los brazos de su marido. La escena era conmovedora; pero esa triste
y desolada esposa, fue arrancada violentamente de los brazos de su
esposo...luego sonó una descarga: una venganza más ensangrentaba las
páginas de la administración de García Moreno". (313)

El Ministro de Guerra y Marina, General Antonio Martínez Pallares, se


había negado a firmar la orden de fusilamiento de Maldonado, y renunció el
empleo. Por ello fue reemplazado por Manuel de Ascásubi, cuñado del
Presidente.

Por su lado Urbina, que estaba liderando la expedición revolucionaria se


esforzó en penetrar desde el Perú y tomó el camino de Celica con una pequeña
columna para atacar por Loja a las fuerzas del Gobierno. Para ello contaba
con los pronunciamientos que debían efectuarse en Cañar, Azoguez, Cuenca,
etc., los Generales Guillermo Franco y León avanzaron hasta el Cantón
Machala, aunque con pocos hombres, pero parte de la población se les unió.

García Moreno en manifiesto del 10 de septiembre de 1864 se refería al


profundo malestar que amenazaba al país las repetidas revoluciones.
Afirmaba que el reposo, la propiedad y las vidas se encontraban diariamente
amagadas desde marzo último por dichas tentativas, sin cesar renacientes,
"de un corto número de criminales alentados por el oro y sobre todo por la
falta de represión debido a la insuficiencia de las leyes". (314)

El Gobierno acumuló gran número de tropas en la frontera, desde Loja


hasta Santa Rosa, cubriendo todos los puntos accesibles. Para Jefe de
Operaciones por el lado de Loja fue designado el Coronel.José de Veintimilla,
y la campaña por el lado de Santa Rosa debía dirigirla personalmente el
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 229

General en Jefe del Ejército, General Juan José flores.

"García Moreno -decía el doctor Pedro Moncayo- dio orden al General Flores
para que aprestara las fuerzas y los elementos necesarios para debelar la
invasión. Flores contestó al Gobierno el estado de postración en que se hallaba
y la imposibilidad de desempeñar esa comisión. García Moreno le contestó
que "si tenía miedo le avisara para ir él personalmente". En vista de esta
contestación, Flores partió a la campaña. Allí se le agravó la enfermedad; y
al determinarse a volver a Guayaquil, desfallecieron sus fuerzas y murió el
lo. de octubre de 1864, a las once de la noche". (315)

Otro error de actuación por parte de García Moreno. Acto deshumano


podríamos decir. Tenemos en nuestras manos una decena de oficios enviados
por Flores durante dicha campaña, y se observa en ellos su firma emanada
de una mano temblorosa, y la tinta es apenas visible, como de alguien que no
podía apretar la pluma para escribir su nombre, lo que denota su quebrantada
salud. Cobarde Flores, nunca, de cualquier otra cosa puede acusársele, menos
de cobardía. Sabemos que era valiente y sereno en los combates, y un entendido
militar. El Presidente le debía mucho y con su muerte algo más.

Retomando el tema, es de decir que el 14 de septiembre, Flores recibió en


Guayaquil un oficio del Ministerio de Guerra y Marina con la siguiente
instrucción:

"En mi comunicación de fecha 31 de agosto último, número 49, dije a V.E.


que el Jefe de la Nación declara fuera de la ley a todos los extranjeros que
hayan tomado parte de la invasión fraguada por el General Urbina; y hoy, ha
dispuesto S.E. le prevenga que dichos enganchados deben ser ejecutados en
el campo de batalla donde fueren tomados prisioneros".

A pesar de su postrada salud el General Flores organizó en Guayaquil


una fuerza de cerca de mil hombres, la que fue despachada de esa plaza el 21
de septiembre, en varios buques de guerra o armados en guerra, y el 26 salió
dicho General en Jefe a ponerse a la cabeza de sus fuerzas.

PREPARATIVOS DE LA FUERZA NAVAL

falli[1 de guerra "Guayas" ex-"Clorinda María" no duró mucho tiemply


p pues terminado el conflicto con Colombia dejó de prestar servicio
n nues ra Armada, por lo que al iniciarse el año de 1864 la goléta "Salado"
es la única unidad de guerra con que cuenta la nación.

El 20 de enero de 1864 el Presidente de la República, Dr. Gabriel García


Moreno, ordena que el personal de la goleta de guerra "Salado" sea reducido
230 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

a un primer comandante que lo será el Teniente de Fragata Francisco J.


Castillo, a un segundo que lo será el Alférez de Navío José Antonio Gómez, a
dos guardias marinas a juicio del comandante del buque, a un cocinero, a un
marinero contratado, a cuatro marineros de primera clase y a ocho grumetes,
quedando de baja el Capitán de Fragata Diego Matos, el Alférez de Fragata
Francisco Fernández Madrid, un guardia marina, el segundo carpintero sin
cargo, el segundo calafate sin cargo, un marinero contratado, otro de primera
clase y dos de segunda. (316)

El 27 de enero de 1864 se informa que por haber sido admitida la renuncia


del señor Capitán de Navío José Antonio Gómez, que desempeñaba la
Capitanía del Puerto de Guayaquil, S.E. el Presidente de la República ha
tenido a bien nombrar para que le subrogue el Coronel Graduado José Fabre.
(317)

Con fecha lo. de marzo de 1864, el Jefe de la nación resolvió que se suprima
la Mayoría General de Marina, ordenando que el Capitán de Navío Agustín
Oramas, que se desempeñaba como Mayor de Marina, ocurra por sus letras
de retiro. Se dispuso además que el Alférez de Navío Francisco Fernández
Madrid (o Feo. Madrid como se lo llamaba) sea destinado de segundo
comandante de la goleta de guerra "Salado", debiendo darse de baja en ese
destino al de igual clase José Antonio Gómez. (318)

El 12 de marzo del mismo año, el Gobierno dispuso que la goleta "Salado"


se componga del siguiente personal, indicando las asignaciones mensuales
correspondientes. (319)

CANTIDAD GRADO ASIGNACION

1 Teniente de Fragata 73 pesos 1 real


2 Alféreces de Navío 53 pesos 5 reales (c/u)
1 Guardia Marina 23 pesos 1 real
2 Contramaestres 33 pesos 5 reales
2 Cocineros 19 pesos 5 reales
5 Marineros contratados 25 pesos 5 reales (c/u)
5 Soldados 13 pesos 5 reales (c/u)

En lo que respecta a la Mayoría de Marina, la supresión de ésta causó


depresión en quien por algunos años fue jefe de la misma, el Capitán de
Navío Agustín Oramas, e incluso amenazó con suicidarse por razones
económicas. Así lo manifiesta en la siguiente carta al General Flores:
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 231

"Guayaquil, mayo 9 de 1864.- Excelentísimo Sr. General Juan José Flores.-


Mi querido General y amigo.

"Pienso que cuando llegue ésta a sus manos le encontrarán descansando


de las fatigas del viaje, en el cual he deseado vivamente que no haya sufrido
novedad alguna, pues cualquier daño tenido me sería lastimoso.

"Bien, pues, luego de saludarle con el afecto que le profeso y deseándole


toda clase de ventura sigo a hablarle de un asunto que me pertenece.

"La Mayoría de Marina de que yo era el Jefe, ha sido suprimida y por


tanto he quedado sin destino o mejor dicho en la calle; esto no lo lastimo por
mí, porque al fin soy hombre, pero sí por mi numerosa y dilatada familia, que
apenas contaba con mi mezquino sueldo para vivir miserablemente; pero
más que todo, me duele haber perdido cuarenta años de mi edad florida
consagrados a la Patria, sufriendo amarguras y reveses continuos sin
recompensa alguna, porque no he tenido quien me proteja y de todos he sido
abandonado; de manera que de mis sacrificios lo que he cosechado son funestos
desengaños.

"Ahora pues yo que siempre he sido fiel amigo de US. cuya lealtad será
imperecedera, tócame recordarle todo lo que he sufrido por esta causa; y es
tiempo pues de que US. no me olvide, dejando en abandono a mi pobre familia,
porque si ella queda reducida a la mendicidad, estoy resuelto a suicidarme.

"Quisiera, pues que US. hablara con el Presidente para que me restituya
a la Capitanía del Puerto, cuyo destino me pertenece por mil títulos y esto
puede fácilmente arreglarse pasando al Coronel Fabre a la Comandancia del
Resguardo que muy bien puede desempeñar, mientras que no la Capitanía
porque le faltan los conocimientos de Marina; de esta manera me parece que
todo quedaría arreglado y bien atinadas las disposiciones del Gobierno".

"Consérvese bien y créame siempre su decidido amigo y S.S. (f) A. Oramas".

Al producirse la invasión del General José María Urbina con la intención


de derrocar al Presidente García Moreno o. o. om ró el ,;®o
e proiedacl ingles el que fue entrega • o por e apitán Geo am ers al
pi an de raganiego Matos, con formal inventario, el 8 de septiembre
de 1864. (320) Inmediatamente se procedió a armarlo en guerra con los
cañones y colisas necesarias, dándole el nuevo nombre de ailiNIMM
MUR
En ese mismo mes se proveyó al vapor "Guayas" de la siguiente dotación
de oficiales, incluyéndose en el cuadro el número de tripulantes con el que
contaba.
232 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

GRADO NOMBRE DESTINO

Capitán de Fragata Diego E. Matos Comandante


Teniente de Fragata Miguel Núñez 2o. Comandante
Alférez de Navío Feo. Fernández M. Guardia y servicios
Alférez de Navío José Antonio Gómez Guardia y servicios
Alférez de Navío Diego Sánchez Guardia y servicios
Alférez de Fragata Tiburcio Lecaro Guardia y servicios
Alférez de Fragata Manuel Silva Guardia y servicios
Alférez de Fragata Daniel Cruz Guardia y servicios
Alférez de Fragata Ricardo Darquea Guardia y servicios
Guardia Marina Tomás Matos Guardia y servicios
Guardia Marina Domingo Ordeñana Guardia y servicios
Guardia Marina Diego Matos Guardia y servicios
Ingenieros Máquinas
40 Individuos de tripulación que incluyen contramaestre, guardianes, fogoneros,
carboneros, timoneles e indígenas.

Ante la prioridad de organizar una escuadrilla naval para emprender la


campaña armada contra los revolucionarios liberales, el General Flores
consideró necesario el nombramiento de un jefe naval que la dirija, y aquél
recayó sobre el Capitán de Navío Juan Manuel Uraga. Con la siguiente
comunicación se dan noticias al respecto:

"República del Ecuador.- Comandancia General del Distrito.- Guayaquil


a 12 de septiembre de 1864.- Al señor Gobernador de esta provincia.

"Ayer tuvo a bien el Exmo. Sr. General en Jefe del Ejército, en uso de la
autorización de que se halla investido, llamar al servicio activo de las armas
al Sr. Capitán de Navío graduado Juan Manuel Uraga, nombrándolo jefe de
la Escuadrilla y de todas las fuerzas de mar.

"Lo que me es satisfactorio participar a US. para los efectos consiguientes.-


Dios guarde a US.- (f) Secundino Darquea". (321)

- La Fuerza Naval estaba compuesta por el vapor de guerra "Guayas", al ,


mando del Capitán de Fragata Diego Eugenio Matos, y la goleta de guerra*
"Salado" comandada por el Teniente de Fragata Francisco J. Castillo, mas
posteriormente se la pone al mando del Capitán de Fragata Lucas Rojas.
Pero también fueron armados en guerra el vapor Smyrk, a cuyo buque fue
asignado para comandarlo el Alférez de Navío Diego Sánchez, quien por lo
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 233

tanto dejaría de constar en el vapor "Guayas"; el vapor "Washington", y el


bergantín "General Sucre", bajel que al mando del Capitán de Corbeta José
Izquierdo había estado en campaña en las costas de Manabí, en los meses de
julio y agosto, con motivo del movimiento revolucionario que estalló en aquella
provincia. (322)

Se prepararon además algunas lanchas cañoneras, entre ellas la lancha


No. 1, ésta al mando del Guardia Marina Tomás Matos.

Como dato interesante me permito detallar el inventario del material con


que contaba la lancha No. 1, entregado al Comandante Guarda Parque el 5
de octubre, cuando había concluido el conflicto.

1 cañón con sus respectivos palanquines, plomadas y bragueros


3 cuñas
1 atacador con su lanada
1 chifle y su hacija
19 balas de a "4" reforzadas
2 tarros de metralla de id.
1 bota fuego
1 Santabárbara de bronce
54 tacos
8 chuzos
2 baldes
1 farol
4 remos
2 espeques
2 pipas de aguada
4 estrobos de bogas
22 brazas de cabo para cuaderna
1 caldero
2 cajones de cartuchos embalados con 18 tiros cada uno
8 paquetes de pólvora de rifle
200 fulminantes
4 libras de pólvora de seva
6 mechas
1 lazo de filástica
1 bandera nacional
22 cartuchos de cañón sueltos
1/2 galón de alquitrán
1 canalete
4 cabillas de palo
1 asta de bandera con su driza
1 barril vacío
2 rasquetas triangulares
2 escotas
2 pedazos de piolas
234 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

El ayudante de Guarda Parque, José María Alarcón, dice el mismo día


que confrontando con los pedidos, el Guardia Marina Matos devolvió de menos
una bala de a "4", tres tacos de filástica, tres cartuchos de a "4". Así también
que recibió varios artículos los cuales no habían sido entregados al mismo
(323)

Para conducir y servir dichos buques en aquella campaña contra el


adversario, fue necesario un e
de hombres tecnicos que conozcan el sistema de propulsión a
vapor, e man ería experimentada en las faenas de la navegación, y quizás
lo más importante, oficiales líderes que comanden los bajeles y sus
tripulaciones.

Labor que cumplió con esmero el General Flores, a pesar de la enfermedad


que padecía, asesorado por los jefes navales, en especial el Comandante Uraga,
desde que fue nombrado jefe de la Escuadrilla Naval. Fueron necesarios pocos
días para que el personal incorporado a la Marina de Guerra esté listo para
zarpar.

Este es un fenómeno muy repetido en aquellos tiempos, sobre todo en los


tres lustros del período garciano, en que se decía no necesaria una fuerza
naval, pero los constantes conflictos internos y aún internacionales, como las
guerras con Colombia y España, desmentían aquel parecer. Llegado el
momento se formaba una fuerza naval, que como es lógico era precaria por lo
improvisado.

Es más, el formarla tenía un enorme costo para el erario nacional.

Se fletaban vapores, los marinos de guerra cobraban sus haberes, se


adquiría nuevo armamento y mas materiales para la guerra. Y como sabemos,
la premura hacía que se cancelen valores con sobre precios en muchos casos.

Es así que el 1 de septiembre se dice que siendo necesarios los servicios


del Teniente de Fragata Miguel Núñez en las presentes circunstancias, el
excelentísimo General en Jefe del Ejército tuvo a bien llamarlo al servicio
activo y fue destinado al vapor de guerra Guayas. (324) cuatro días después
el Alférez de Fragata Tiburcio Lecaro fue incorporado al mismo buque. (325)
El día 6 fue llamado al servicio activo el Capitán de Corbeta José Izquierdo
para que continúe al mando del bergantín "General Sucre", luego de la
campaña en Manabí. (326)

El día 9 de septiembre el General Flores dice lo siguiente: "Habiendo


necesidad de contratar algunos maquinistas y marineros para el servicio de
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 235

la Escuadra, he ordenado que se les abone además de sus sueldos tres y


cuatro reales de ración, según conste en las listillas de consumo que presenten
los jefes de los buques; pues la necesidad que hay de estos individuos, sin los
cuales no podría organizarse la expedición, hace que se le conceda lo que
ellos solicitan. Estas raciones que no son deducibles del sueldo son solamente
durante la campaña, excepto los maquinistas del vapor "Guayas", que seguirán
gozando de los tres reales diarios de ración fuera de sus sueldos por el término
que dura la contrata celebrada con ellos". (327)

El 14 de septiembre Enrique Larroque y Ricardo Darquea fueron


nombrados para alféreces de fragata habilitados, y para guardia marina el
joven Domingo Ordeñana, y destinados a los buques de guerra. (328)

La ardua labor de reclutar personal naval prosiguió, y el Capitán de Ejército


César Guedes que había sido llamado en agosto de gingara que se
desempeñe en el parque de la plaza de Guayaquil, pasó a servir en el vapor
de guerra "Guayas" en el mes de septiembre, con el grado de Teniente de
Fragata, por lo que el Alférez Licenciado José María Alarcón lo reemplazó
como Ayudante de dicho parque. (329)

El 17 de septiembre el General Juan José Flores tuvo a bien llamar al


servicio activo al Alférez de Fragata Abelardo Cucalón. (330) Dicho oficial se
embarcó en el vapor "Guayas", buque en el que sirvió hasta el 26 de octubre,
-vez
.. que no eran necesarios sus servicios por haber finaliza paña
. (331)

En lo que corresponde al servicio de máquinas del vapor "Guayas", fue


contratado como primer maquinista el Sr. Williams Kenedey con una paga
de 300 pesos mensuales, mas por insinuación del General Flores se embarcó
en dicho buque de guerra, para marchar a la campaña de Machala, el Sr.
Guillermo Berry, tanto con el objeto de hacer algunos reparos a la máquina,
como porque no se tenía confianza en el maquinista. Diremos de una vez que
para verificar la marcha dejó cerrado su taller, a virtud de una gratificación
que le ofreció el General en Jefe, pagaderos a su retorno, porque se perjudicaba
en su trabajo. Efectivamente a su regreso presentó una planilla de 200 pesos
que le hubo de ser cancelada por orden del Coronel Secundino Darquea,
Comandante General del Distrito y de Marina. (332)

Hubo necesidad también de contraer personal extranjero para servir en


los cañones y colisas de los buques, a falta de artilleros conocedores del
manejo de aquellas piezas, en las circunstancias apremiantes. Suponiéndose
que hubo falta de tiempo para adiestrar a nuestro marinos en el disparo, por
lo que el General Juan José Flores efectuó los siguientes contratos entre el
14 y 20 de septiembre:

Para el vapor de guerra "Guayas" se comprometieron a mandar una colisa


236 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

cada uno por la paga individual de 150 pesos el primer mes y 100 pesos el
siguiente mes, los señores Carlos Bessine, Gregorio Henri y Juan Henrique
Mouton. (333)

De igual manera, para el s señores Basilio


Caraballo y Sebastián Pieruzzini se comprometieron a mandar un cañón cada
uno por la paga de 100 pesos mensuales, y el Sr. C.G.E. Spaerer para el
mando de otro cañón, por 60 pesos adelantados, que es la suma que se le
abonará mensualmente. (334)

Los gastos no paran y el 15 de septiembre dice el General Juan José Flores


lo siguiente, en comunicación dirigida al Gobernador de la provincia: "Cuando
emprendí mi primera operación a Machala y armé en guerra el vapor
"Washington" ofrecí a su Capitán una justa remuneración. Al presente que
vuelvo a necesitar dicho vapor para la operación decisiva, debo cumplir mi
promesa, por lo que suplico a US. se sirva disponer se satisfagan al enunciado
Capitán 100 pesos del tesoro". (335)

El mismo Flores dispone el 19 de septiembre el pago de 25 pesos mensuales


al señor Antonio Panelo por su enganchamiento en uno se los buques de
guerra. (336) El mismo día es contratado el ciudadano extranjero Serafín
Romero para que preste sus servicios en la goleta de guerra "Salado" con el
sueldo de 400 pesos mensuales. (337)

El Coronel Secundino Darquea dice al mismo Gobernador que el Alférez


de Fragata Ramón Talavera fue incorporado a la fuerza naval para prestar
sus servicios en el bergantín "Gustavo", por lo que es de suponer que aquel
bajel también formó parte de la escuadra que zarpó a la zona del conflicto.
Con fecha 8 de octubre fue dado de baja de dicho destino. (338)

El 17 de septiembre García Moreno se dirige desde Quito al comandante


en jefe con el siguiente oficio, a pesar de que la Escuadrilla Naval con las
fuerzas del Gobierno no zarpaba todavía:

"Quito, septiembre 17 de 1864.- Sr. General Juan José Flores .- Mi


distinguido amigo:

"Conservaré la carta confidencial de US. para que disentamos en la calma


de la amistad, cuando nos veamos, y así convenga US. de que he tenido razón.

"Considero que a la fecha estará destruida, tomada o ahuyentada la


escuadrilla de Urbina. Logrado esto, habré que destruir la facción de Machala.
Por el norte se anuncia nuevo enganche, pero esto no me da cuidado.

"La carta de Parra, las nota a US. son la parte más cómica de la triste
historia de Urbina.
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 237

El General José María Urbina no se daba descanso en su intentos


revolucinarios para derrocar al Presidente, y en 1864 lideró una
expedición armada. Fracasada la misma intentó otra al siguiente año.

"La ida de Veintimilla con 122 lanzas a Alausí calmará los temores de los
S.S. de Cuenca.

"Tengo casi seguridad de que los pasquines salen de la botica de Fuentes:


nada más fácil que asegurarse de esto, primero examinando todo; y si nada
se encuentra, prendiendo a Fuentes y más agentes, el silencio sería entonces
el mejor comprobante de que de allí salen los pasquines.

"Reciba los fines rendidos de Rosita y la familia y mande a su afmo. Amigo


y S.S.- (f) G. García Moreno".

Dos días después, el Gobernador de la provincia del Azuay, don•Benigno


Malo, emitió un decreto tendiente a cortar toda comunicación y comercio con
los revolucionarios establecidos en Santa Rosa y Machala, el que transcribimos
a continuación:
238 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

BENIGNO MALO, GOBERNADOR DE LA PROVINCIA

CONSIDERANDO:

"Que los enemigos de la República se han situado en los pueblos de Machala


y Santa Rosa, desde donde trabajan por cundir la inmoralidad en esta
provincia, y siendo un deber sagrado de las autoridades dictar las providencias
más enérgicas para conservar el orden público.

DECRETO:

"Art. 1o. Se prohíbe a los habitantes de esta provincia toda comunicación


y comercio con los pueblos de Santa Rosa y Machala, y los que fueren
sorprendidos en sus viajes o en sus correspondencias por escrito serán
multados en la cantidad de 25 a 500 pesos, sin perjuicio de ser juzgados como
conspiradores y sediciosos en consejo de guerra verbal.

"Art. 2o. Se declaran decomisables las cargas y las bestias que se hallen
en viaje para Machala o Santa Rosa, siendo el decomiso en favor de la personas
que las aprehendan quienes darán cuenta a la Gobernación para la aprobación
de los efectos y bestias decomisadas.

"Art. 3o. La persona que consignare ante la Gobernación las


comunicaciones que se dirijan de esta ciudad a Machala o Santa Rosa, o al
contrario, recibirá una gratificación de dos a seis pesos, según la importancia
de las comunicaciones.

"Art. 4o. Los señores jefes y tenientes políticos, el comisario de policía y


los jueces parroquiales, quedan encargados de la estricta observación de este
Decreto.

Dado en la sala de Despacho en Cuenca a 19 de septiembre de 1864. (f)


Benigno Malo"

Desde la Capital de la República, el Sr. Rafael Villamar da información al


General Flores sobre ciertas acciones revolucionarias, con la siguiente carta:

Quito, septiembre 21 de 1864.- Excelentísimo Sr. General Juan José Flores.-


Mi respetado General.

"Conozco que distraigo la atención de V.E. con mis cartas, pero no puedo
dejar de saludarlo siquiera, ya que me hallo separado de V.E. en la época en
que quisiera morir a su lado.

"Mucha inquietud hay en los habitantes de esta Capital con respecto a la


PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 239

invasión de Urbina; unos porque aman a su patria y ven su completa


destrucción en llegando a dominarla el más ruin de los tiranuelos, y otros
porque esperan medrar en la revuelta. Sin embargo, pocos, muy pocos, son
los que se manifiestan abiertamente por los invasores, aunque con frasecillas
y circunloquios estudiados.

"Hasta la fecha creemos que se habrá terminado la odiosa cuestión de


Machala, y ojalá no haya motivo de derramamiento de sangre. En el norte
continúan Vélez y Auz enganchando gente, sin que les haya servido de
escarmiento la última ocurrencia; pero esos bribones están sostenidos por los
de Quito. Anteayer ha salido una posta de la casa de los Endara, hacia el
norte; pero se ignora a donde va. Esto me lo ha dicho una mujer de la casa.

"Los amigos de V.E. lo esperamos aquí después del verano y quisiéramos


que no volviera a salir de Quito.

"Adios, mi general, que la Providencia conserve a V.E. por largos años,


son los votos de su admirador y humilde súbdito. (f) Rafael Villamar".

Estando listas las fuerzas navales y militares, los buques con las tropas
del Gobierno zarparon de Guayaquil el día 21 de septiembre. Lo hicieron el
vapor de guerra "Guayas", la goleta de guerra "Salado", el vapor "Washington",
el vapor "Smyrk" y el bergantín "General Sucre", así como algunas lanchas
cañoneras. Pero antes, el 14 de septiembre, el General Juan José Flores había
recibido en el mismo puerto las últimas instrucciones emanadas del Presidente
García Moreno, transmitidas por el Ministro de Guerra y Marina con un
oficio que dice:

"En mi comunicación de fecha 31 de agosto último, número 49, dije a V.E.


que el Jefe de la Nación declara fuera de la ley a todos los extranjeros que
hayan tomado parte en la invasión fraguada por el General Urbina; y hoy, ha
dispuesto S.E. le prevenga que dichos enganchados deben ser ejecutados en
el campo de batalla donde fueren tomados prisioneros". (339)

De acuerdo a una comunicación enviada por el jefe de la Escuadrilla,


Capitán de Navío Juan Manuel Uraga, al General Flores, un buque, que
probablemente es el vapor de guerra "Guayas", y la goleta de guerra "Salado"
se aprestaban a retornar a Guayaquil para transportar al Comandante en
Jefe hasta Santa Rosa. Es la siguiente:

"Jambelí a 23 de septiembre, a las 7 de la mañana.- Excelentísimo Sr.


General.

"En este momento recibo a Mr. Guim a quien hago seguir a esa para que a
la vez ponga a US. al corriente de todo. Urbina debe haber ocupado hoy o
mañana Loja; los buques me dice Guim están desarmados en Tumbez, así es
240 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

que he dispuesto regrese el buque y la goleta "Salado" para que se embarque


US. para venir a Santa Rosa, salvo su parecer yo he creído conveniente
reconocer Jambelí y asegurarme de la realidad, y entonces regresar a
Guayaquil para transportarlo a US.

"No tengo más tiempo que para saludarlo.- Dios guarde a V.E., un
afectísimo amigo. (f) Juan Manuel Uraga".

El día 26 salió el General Flores aunque en estado de postración, a bordo


del vapor "Guayas", buque comandado por el Capitán de Fragata Diego Matos,
a ponerse a la cabeza de su división para dirigir las operaciones.

Para darnos cuenta de los gastos que significaban al Gobierno el mantener


aquella campaña, a continuación transcribimos el siguiente oficio:

"Tesorería de Hacienda.- Guayaquil, a 28 de septiembre de 1864.- Al señor


Gobernador de la Provincia.

"Para que se sirva US. elevarlo al conocimiento del Supremo Gobierno


remito a US. el presupuesto de gastos de esta Provincia correspondientes al
presente mes, en el cual no constan los ocho mil pesos que antes se
presupuestaban para el banco particular, para la amortización de billetes
del Gobierno y los dos mil pesos del señor Diego Noboa; y se ha aumentado
con los sueldos de los batallones "Guayas" y "Babahoyo", con los del Regimiento
No. 5, con los del Escuadrón "Yaguachi", de la columna de operaciones de
Daule, de la columna de Infantería de Balao, de la línea reductos, del vapor
"Guayas", de las lanchas cañoneras y de varios jefes y oficiales en comisión.

"Para gastos eventuales, y para los que exige la conservación del orden
público que tenga por conveniente prevenir US. en virtud de las facultades
de que se halla investido, no se puede señalar cantidad alguna; y se abonará
lo que resulte.- Dios guarde a US.- Por el Sr. Tesorero, Rafael Arias". (340)

Si bien es cierto que dicha comunicación no nos permite visualizar el


derroche de dinero en su gran dimensión, es fácil darnos cuenta que en el
período garciano que tuvo que soportar conspiraciones a cada momento,
prevenir insurrecciones, espiar sospechosos y combatir a los enemigos, pasó
por graves momentos que conllevaron a descalabros económicos a la Nación;
pues la crisis que hubo de soportar se inicia desde antes de la toma de
Guayaquil por García Moreno, y el conflicto de 1864 no fue la excepción.
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 241

Otro buque fue alistado para zarpar con rumbo a las aguas de Jambelí, se
trata del vapor "Bolívar", pero una avería en su caldera impidió el
cumplimiento de aquel cometido. Las siguientes comunicaciones dan cuenta
del incidente:

"Guayaquil, septiembre 27 de 1864.- Excelentísimo Sr. Juan José Flores,


General en Jefe del Ejército.- Mi querido General y amigo.

"De anoche acá no ha ocurrido incidente alguno que altere el orden público
ni la marcha normal que sigue el país.

"Y acaba de llegar el correo de Quito y las noticias que trae tampoco son
alarmantes sino más bien satisfactorias, como se lo harán conocer las
comunicaciones que le remito.

"El vapor "Bolívar" no puede salir por una avería que tiene en la máquina
apresurándose a repararla; dice que estará en estado de marchar dentro de
seis días. En este estado he dispuesto que las aguas, que era lo único que
llevaba el "Bolívar" se trasborde a la chata que lleva el carbón de piedra, y
que sale en esta marea.

"Sin más por ahora y deseándole US. todo fuero de comodidad, me suscribo
como siempre su muy adicto e invariable amigo.- (f) Miguel García Moreno".

"Guayaquil, septiembre 27 de 1864.- Mi querido General.

"Tengo la satisfación de dirigirme a Ud. anunciándole que de ayer a hoy


no ha ocurrido ninguna novedad; pues anoche he vigilado la plaza hasta el
amanecer y he encontrado que el servicio se hace como se debe.

"Mucho extraño la ausencia de Ud. Y por lo mismo espero que se venga


pronto terminando con el buen éxito que es probable sus operaciones.

"Las fracciones de los cuerpos que quedaron aquí, las tengo organizadas y
no dude Ud. que con ellas conservaré el orden hasta su regreso.

"Hoy he remitido a Quito al negro Samaniego y a Vargas de Samborondón


con las seguridades correspondientes.

"No sé si de mala fe, regresó el vapor "Bolívar" de la puntilla asegurando


que se le había roto la caldera; pero inmediatamente he ordenado que lo
reconozca un práctico y se proceda en el acto a su composición, para obligar
al Capitán a que salga aunque sea esta noche.

"Deseo que lo pase Ud. bien y que mande como guste a su muy decidido
242 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

amigo y obediente servidor.- (9 S. Darquea".

El mismo Gobernador de la Provincia del Guayas, don Miguel García


Moreno, previene al General Flores, con un oficio, para que tome precauciones
ante posibles intenciones del enemigo:

"Guayaquil, septiembre 29 de 1864.- Excelentísimo Sr. General Juan José


Flores.- Mi querido General y amigo:

"El orden sigue inalterable en esta plaza. Corren vagos rumores de que
Robles ha ido a Paita a traer dos vapores que se conservan ocultos en no se
que ensenada para asaltar nuestra escuadrilla y hacerla pedazos. Se dice
así mismo que los facciosos han obstruido los canales de los ríos para que
encallen los vapores, o cualesquiera otra clase de nuestras embarcaciones en
los manglares que han arrojado de dichos canales. Aunque lo primero me
parece un cuento, lo segundo puede ser verosímil, más en cualquiera de los
casos creo de mi deber darle aviso de todo por insignificante que sea, para
que US. con su acertado discernimiento aprese dichos avisos.

"Le remito la correspondencia de Cuenca, que la abrió el Coronel Darquea,


sin duda autorizado por US., la de Quito, la de Europa y otras tantas cartas
diferentes que le instruirán a US. de todos los asuntos que le concerniesen y
en especial el de las operaciones sobre Urbina.

!No ocurriendo otra cosa por ahora, quedo como siempre su muy adicto e
invariable amigo.- (9 Miguel García Moreno".

Destruge nos narra los acontecimientos del conflicto como sigue:

"Todas las fuerzas del Gobierno fueron desembarcadas y dirigidas sobre


Machala; y como el General Franco contaba con muy reducidas tropas, mal
armadas, resolvió desocupar la plaza, y lo efectuó el 27 de septiembre;
retirándose a Santa Rosa, como punto, en su concepto, más defendible y más
ventajoso para la resistencia.

"El Coronel José Martínez de Aparicio, nombrado jefe de operaciones sobre


la frontera, fue despachado, el día 29, con su división y con orden de
desembarcar en el punto llamado "Cargadero". Efectuado el desembarco
pernoctaron allí las tropas del Gobierno hasta la una de la mañana del día
30, que emprendieron la marcha sobre Santa Rosa, por el camino del Jubones;
en la pampa de Barranco Blanco se les reunió la caballería, mandada por el
Mayor Iturralde y también los granaderos del Guayas, a las órdenes del Mayor
Juan León Arcia.

"Las fuerzas del coronel Franco estaban a la entrada de la población y en


una pequeña montañuela; y aunque inferiores en número, se hallaban
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URB1NISTAS 243

dispuestas a combatir hasta lo último.

"A las nueve del día, apareció la división del Coronel Martínez de Aparicio,
con la que iba también el General Flores con su escolta de honor. Se rompieron
simultáneamente los fuegos, y se empeñó un reñido combate, que se sostuvo
sin desmayar hasta las doce y media del día.

"Dice el jefe de operaciones en su parte que el enemigo disputó palmo a


palmo sus posiciones. ¿Y no podía ser de otra manera? toda vez que estaban
a la cabeza de esas pocas fuerzas, hombres como Franco y León, que eran de
aquellos que bien merecían su fama de valientes. Es lo cierto que los
expedicionarios sostuvieron sus posiciones mientras les duró el pertrecho; y
luego, a falta de él, mientras una parte luchaba al arma blanca protegiendo
la retirada, la otra actuaba con serenidad haciendo sus últimos disparos,
hasta abandonar la población y ganar la frontera.

"Costumbre ha sido en muchos jefes exagerar y aun falsear los hechos en


sus partes; esto lo hemos visto en multitud de documentos de esa especie.
Pero hay ciertas afirmaciones que no debieron ser consignadas; y una de
ellas, es la que hallamos en la parte del coronel Martínez de Aparicio sobre
que los generales Franco y León fugaron desde el principio del combate...
¿Fugar el General Franco desde el principio del combate? ¿Fugar ese valiente
como el que más; siendo así que acostumbraba, en la derrota, hasta quedarse
luchando sólo para proteger la retirada de los suyos?... El mismo Coronel
Martínez se contradijo en su parte; pues confesó que los expedicionarios habían
defendido palmo a palmo sus posiciones.- ¿Y lo hubieran hecho así, de haberse
visto abandonados por su jefes?". (341)

El día 2 de octubre informa desde Machala el Coronel José Martínez


Aparicio al General Vicente González, Jefe de Estado Mayor del Ejército,
que los buques "Guayas" y "Salado" con sus respectivas guarniciones quedan
en ese fondeadero preparándose para realizar una explotación sobre Túmbez,
tan luego como se reúnan con las fuerzas de Balao, que se esperan de un
momento a otro.

MUERTE DEL GENERAL JUAN JOSE FLORES

"El 10 de agosto de 1865, Francisco Javier Salazar, en su informe dirigido


a los honorables legisladores, se refiere a la invasión urbinista de 1864 y a la
muerte del General en Jefe, General Juan José Flores, con las siguientes
palabras:

"... Con motivo de la invasión efectuada en 1864, compró (el Gobierno) el


244 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

vapor "Anne" de propiedad inglesa; y, con el nombre de "Guayas", lo armó en


guerra y destruyó a los invasores; aunque a costa de la preciosa vida del
ínclito General en Jefe, héroe de la independencia y fundador de la República.
Atacado este ilustre General de una violenta enfermedad, permaneció en su
puesto hasta conseguir la victoria, y exhaló el último aliento a bordo del vapor
"Smyrk" en medio de las olas entonces agitadas del golfo de Jambelí. Este
acontecimiento llenó a la Patria de angustia y la cubrió de luto". (342)

Pero es el mismo Presidente García Moreno, quien a pesar de no ser sensible


ante las dolencias del Comandante en Jefe, al haber insinuado que por temor
disimulaba su estado de postración, el que a su muerte manifiesta en su
mensaje al Congreso lo siguiente:

"Una calamidad nacional sobrevino sin embargo y reanimó las esperanzas


de los vencidos el General en Jefe de esclarecida e imperecedera memoria,
falleció de la enfermedad que adolecía, agravada por las políticas de la
campaña y los sufrimientos de la navegación; y su muerte, profundamente
sentida por los buenos ciudadanos, creyeron los enemigos irreconciliables de
su Patria que el Gobierno quedaba sin apoyo y el país sin defenderse". (343)

En esas palabras el Presidente saca ventaja del momento sentido para


increpar a sus adversarios, o por lo menos para demostrar a los honorables
su capacidad política y militar. Eso no es nuevo, como no lo es, su criterio
cambiante sobre Flores pues en 1855, García Moreno decía: "¡Cuando morirá
este hombre funesto, causa de tantas desgracias! cada día aborrezco más a
Flores". (344) En 1864, en cambio, decretó grandes honores a su memoria y
escribía al hijo de aquel, Antonio Flores Jijón, la siguiente condolencia: "No
me conformo no tengo fuerzas para resignarme con la irreparable pérdida
(...). Cada día que pasa hará sentir al país con mayor viveza el vacío que ha
dejado el General (...). nada encuentro en el mundo que reemplace al amigo
fiel, decidido, previsor, sagaz, conciliador, inteligente, instruido y
experimentado que he perdido". (345)

A pesar de que el historiador Camilo Destruge presenta dudas sobre la


versión de que el General Flores había fallecido de una enfermedad a la orina,
porque dice que son muchos los que sostienen que fue herido de gravedad en
el combate de Santa Rosa, que fue retirado inmediatamente del campo de
batalla y se le embarcó casi agonizante, no estamos de acuerdo con él, pues
somos poseedores de una copia del documento en la que el Notario Noveno
del Cantón Guayaquil, Dr. Thelmo Torres Crespo, da fe el 31 de marzo de
1978, que la fotocopia es exacta al documento original que se le exhibe. En
aquel manuscrito, fechado 14 de junio de 1824, y emitido en Pasto, el Capitán
Cirujano de 2a. clase Miguel Hernández certifica a pedimento verbal del Sr.
Coronel Juan José Flores sobre su estado de salud, y dice que padece de una
enfermedad crónica que nos abstenemos de mencionar en este estudio.
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 245

Aquella enfermedad lo acompañaría toda la vida, y terminó con aquél el


lo. de octubre de 1864 a bordo del vapor "Smyrk". Desgraciadamente pasarían
muchas décadas para que se descubriera la medicación eficaz para combatir
dicho mal.

Don Benjamín Carrión relata sobre su fallecimiento como sigue: "El lo. de
octubre de 1864 empeoró de su grave enfermedad a las vías urinarias, el
General Juan José Flores va a combatir con las tropas de Urbina en la región
de Machala y Santa Rosa. Se agrava. no puede desembarcar siquiera. Sus
oficiales y la tropa, van a tierra. Baten a las gentes de Urbina y regresan
donde se halla el anciano moribundo; éste, alcanza a preguntar por los
resultados de la acción, y cuando sabe que los suyos han triunfado, el veterano
de cien luchas muere satisfecho invocando -lo cuentan sus biógrafos- a la
virgen de las Mercedes, Patrona de los ejércitos". (346)

El 2 de octubre de 1864, informa el General Vicente González Jefe del


Estado Mayor del Ejército, desde su cuartel General, boca de Machala, abordo
del vapor "Guayas", que en el Vapor "Smyrk" fue conducido hasta Guayaquil
el cadáver del General Juan José Flores.

Según Destruge, el cadáver fue colocado en el departamento de la casa de


la Gobernación. Que el doctor José Illescas fue el encargado de efectuar el
embalsamiento, y a nadie, enteramente a nadie se permitió la entrada; que
las puertas permanecieron cerradas y con centinelas al exterior, hasta
terminada la operación y dejar colocado el cadáver en el féretro. (347)

Alfredo Pareja Diezcanseco dice: "Al fin y al cabo Flores, contradictorio, es


una expresión cabal de nuestros primeros años tumultuosos. Vigilante de
nuestras fronteras, desde el Carchi al Macará, generoso con los vencidos, y a
veces tan enfermo de poder y resentimientos, que la Patria le importa menos
que un deseo cualquiera de la ambición que le esclavizaba. Flores, en nuestra
historia, va y viene con la tormenta de los hechos caóticos de nuestros primeros
años de aprendizaje republicano". (348)

El historiador argentino don Manuel Gálvez manifiesta en su obra que


García Moreno debe haber estado bien arrepentido por la forma desmesurada
como le combatió 17 años atrás. Que Flores ha sido muy atacado, pero que es
falso que hubiese sido un tirano, pues solo puede reprochársele lo poco que
hizo durante su gobierno. (349)

El propio Juan Montalvo escribió sobre él, -lo que sigue: "Flores, soldado
de Colombia, valiente de primera clase en los combates; Flores, condecorado
por Bolívar; Flores, héroe del Portete, dueño del afecto de la aristocracia de
Quito; fundador de la República, lleno de fama, talento, prestigio y valor".
(350)
246 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Cuando las tropas del Gobierno entraron a Santa Rosa, como vencedores
se produjeron saqueos, y en un oficio escrito por el propio García Moreno,
quien se había trasladado a Guayaquil, para atender personalmente a la
campaña con el carácter de comisionado del Gobierno e investido de facultades
extraordinarias, se da testimonio de aquel mal comportamiento. Lo
transcribimos:

"República de Ecuador.- Comisión del Gobierno Supremo.- Guayaquil, a


26 de diciembre de 1864.- Al Sr. Gobernador de esta Provincia.

"Vuelvo a dirigirle a US. la nota de los efectos cuyo valor reclama el Sr.
Millet, por haberlos perdido en el vergonzoso saqueo a que se abandonó
nuestra caballería el 30 de setiembre, al tomar el pueblo de Santa Rosa. Es
indudable, señor Gobernador, que hubo saqueo; y, aunque no sean bastante
claras las pruebas aducidas por el Sr. Millet, es también indudable que su
propiedad fue atacada; como lo es, que debe resarcírsele a costa del cuerpo
que inició el saqueo. El Estado debe pagar; pero sacando el dinero del culpable;
y aquí, los culpables son, principalmente, los jefes y oficiales de la caballería,
que debieron impedir y no impidieron el desorden.

"Sírvase, pues, US. ordenar se pague, en el día, al Sr. Millet, la suma de


1.293 pesos y 2 reales, en moneda corriente; y que esta suma sea reintegrada,
reteniendo mensualmente la tercera parte del sueldo de los jefes y oficiales
de la caballería, que fueron a Santa Rosa, al mando del Comandante José
María Quiroz, incluso este mismo jefe.- Dios guarde a US.- G. García Moreno".
(351)

En lo concerniente a la campaña por el lado de Loja, el mismo autor detalla


lo siguiente:

"Ya dijimos que el Coronel Veintimilla disponía de numerosas tropas con


las que pudo cubrir todos los pasos de la frontera por el lado de Loja.

"El General Urbina tomó la vía de Celica, llevando consigo una parte de
sus pequeñas fuerzas, y poniendo la otra bajo el comando del General
Raimundo Ríos.

"Según comunicación de la autoridad política de Alamor, llegó la expedición


a esa parroquia, en número de trescientos hombres, el 19 de septiembre; y al
tener aviso de esta ocurrencia, las autoridades de Loja hicieron avanzar
PRIMERAS EXPEDICIONES ARMADAS URBINISTAS 247

inmediatamente a Saraguro las fuerzas acantonadas en Zaruma, sin


desamparar este pueblo, pues tenían tropas más que suficientes; y, al mismo
tiempo se movilizaban en combinación las que guarnecían la ciudad de Loja.

"La alarma llegó a la ciudad de Cuenca y la de las autoridades subió de


punto al observar indicios de movimientos dentro de la ciudad, en la noche
del 23 de septiembre.

"Hacia el 30 del mismo mes estaban reconcentrados en Cuenca unos mil


hombres; y en los primeros días de octubre se pusieron en marcha con dirección
a Loja, para reforzar esa frontera.

"Entre tanto, la columna expedicionaria había proseguido sus operaciones


y ocupado Celica el 23 de setiembre. Esa reducida fuerza tenía en jaque a las
autoridades de Loja y Cuenca y producía un movimiento de tropas tal, que
parecía se trataba de una gruesa y poderosa expedición, Urbina esperaba el
movimiento que debía estallar en algunos puntos para, una vez distraído el
enemigo y repartidas sus fuerzas, obrar en consecuencia. Por lo mismo, y en
espera de esos movimientos, operaba en el sentido de engañar a los del
gobierno; y así, desocupado Celica y retrocediendo, logró que no les quedara
duda de que iba en retirada por Cazadero hacia Tumbes; de tal manera que
a mediados de octubre, daban como desaparecida la expedición.

"Pero los Generales Urbina y Ríos, reuniendo sus fuerzas -trescientos


cincuenta hombres- permanecieron todavía en Zapotillo, donde se les reunían
algunos de los que combatieron en Santa Rosa el 30 de septiembre, de cuya
acción y su resultado había tenido ya aviso el General Urbina.

"El 10 de noviembre, a la una de la tarde, vino a producirse un movimiento


revolucionario en Cañar. Las fuerzas sublevadas atacaron a las del Coronel
Carlos Ordoñez, derrotándolas con graves pérdidas; y este jefe voló a Cuenca
con la noticia de lo sucedido. Inmediatamente se comunicó el suceso a Loja,
pidiendo que, en el acto, se despachara el número con las más fuerzas que
pudieran agregársele, pues se esperaba un ataque a la ciudad.

"Y, en efecto, si los sublevados, procediendo con mayor cordura no se


hubieran entretenido en otras cosas y atacado de seguida la plaza de Cuenca,
habrían tomado distinto rumbo los acontecimientos. Pero perdieron el tiempo;
dieron lugar a que las autoridades tomaran sus medidas y levantaran las
fuerzas para resistir; y, por último, a que el Coronel Veintimilla acudiera en
auxilio de Cuenca con bastantes tropas, sin descuidar por eso la frontera. De
manera que cuando, el 16, atacaron la plaza, nada más que con ciento
cincuenta hombres, ya los ocupantes de ella se hallaban en estado de buena
defensa; y, aunque atacaron valerosamente, fueron vencidos después de un
combate de dos horas...
248 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"En vista de este resultado y de que, en Guayaquil tampoco se había


producido el movimiento que se esperaba, el General Urbina resolvió retirarse
hacia Túmbez; pero sin desistir enteramente de la campaña; y, antes bien,
con el propósito de volver a ella mejor preparado.

"Regresó, pues, a su residencia de Paita, donde vivía su familia; y allí


continuó ocupándose de los preparativos para una nueva expedición". (352)

A continuación nos adelantamos a transcribir la relación de jefes y oficiales


de Marina en servicio activo, que figuran a partir del segundo trimestre de
1865, cuyos pormenores se irán detallando en el capítulo siguiente:

GRADO NOMBRES DESTINOS

Capitán de Navío Gdo. Agustín E. Oramas Mayor General de Marina


Capitán de Navío Gdo. Francisco J. Martínez Capitán del Puerto de Guayaquil
Capitán de Fragata Diego E. Matos Comandante del vapor "Guayas"
Teniente de Fragata César Guedes Segundo Teniente del id.
Teniente de Fragata Francisco Mora Ayudante de la Capitanía
Alférez de Navío José Antonio Gómez Vapor de guerra "Guayas"
Alférez de Navío Francisco Madrid Vapor de guerra "Guayas"
Alférez de Navío Diego Sánchez Vapor de guerra "Guayas"
Alférez de Navío Manuel Silva Vapor de guerra "Guayas"
Alférez de Fragata Daniel Cruz Vapor de guerra "Guayas"
Alférez de Fragata Ricardo Darquea Vapor de guerra "Guayas"
CAPITULO VII

Desmantelamiento
de los buques y breve
período de paz
DESMANTELAMIENTO DE LOS BUQUES Y BREVE PERIODO DE PAZ 251

DESMANTELAMIENTO DE LOS BUQUES Y


BREVE PERIODO DE PAZ

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vapor
de la goleta e guerra ._
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e inclusive se ordenó 1
, como veremos má delante, es
quedaría como único buque de guerra de la Nación.
En lo que corresponde al personal de oficiales y tripulación, quedaron los
exclusivamente necesarios para servir en el vapor de guerra "Guayas". Es
así que el 28 de octubre se dice que el Sargento Mayor graduado José Antonio
Navarrete, que se hallaba empleado en uno de los cañones del Malecón de
Guayaquil, y el Alférez de Fragata Abelardo Cucalón en el vapor de guerra
"Guayas", fueron dados de baja en sus destinos, el primero el día 8 y el segundo
el 26 de octubre de 1864 (353)
El día 27 de octubre fue dado de baja en el vapor "Guayas" el Capitán de
Fragata Diego Eugenio Matos, encargándose del mando el Capitán de Navío
graduado Francisco J. Martínez, y destinando al mismo buque, de orden del
excelentísimo Sr. Comisionado del Gobierno Supremo (Dr. Gabriel García
Moreno), al Alférez de Navío Diego Sánchez. (354)
Pero dos días después hay una rectificación en lo que corresponde al
comando de dicho buque, pues en la orden General del 29 de octubre se publica
que por disposición de S.E. el Comisionado del Gobierno Supremo, volverá a
hacerse cargo del mando del vapor de guerra "Guayas" el Capitán de Fragata
Diego E. Matos, y el Capitán de Navío graduado Francisco Martínez regresará
a desempeñar el destino de Capitán del Puerto de Guayaquil. (355)
En la misma Orden General se dispone que el Comandante Matos presente
a la Comandancia General del Distrito de Guayaquil y de Marina, un
inventario de lo útiles que tenía el "Guayas" al tiempo que se lo compró, y
252 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

que inserte lo que haya tomado posteriormente, ya sea del Parque o de la


Tesorería. (356)
El 11 de octubre había sido destinado a la Capitanía del Puerto, de
Ayudante, el Alférez de Navío Francisco Mora, quedando de baja el de igual
clase Enrique María Vera que desempeñaba aquel cargo.

Todo el personal de los demás buques fueron dados de baja por ser ya
innecesarios sus servicios, una vez que se les cancelaron los haberes, a que
tenían derecho de acuerdo a sus nombramientos o contratos, en virtud de
haber sido desbaratada la facción que ocupó una parte de la costa oriental.

El 7 de noviembre se da de baja en la goleta "Salado" al Capitán Alejandro


Antonio Urueta, y siendo ya innecesaria la guarnición en dicho buque, puesto
que se halla desarmada y acoderada, se dispone que pasen, los que existen
en el bajel, a incorporarse al cuerpo al que pertenecen. (357)

El mismo día se publica que debiendo ausentarse a desempeñar una


comisión en la costa oriental el Sr. Coronel Juan B. Pereira, Contralor del
Hospital Militar, se encargará interinamente de dicho destino el Capitán de
Fragata Lucas Rojas. (358) En una comunicación posterior del día 19, se
informa que el Supremo Gobierno aprobó dicho nombramiento, por haberlo
así dispuesto el excelentísimo Sr. Comisionado del Gobierno Supremo. (359)

Se dice también que el Coronel Pereira falleció, por lo tanto el Tesorero de


Hacienda manifiesta textualmente: "Esta comunicación revela pues que el
Sr. Rojas ha sido nombrado contralor del Hospital durante la ausencia del
Sr. Coronel "finado" Juan B. Pereira y de consiguiente no tiene derecho para
figurar como Jefe de la "Salado" con un sobre-sueldo y ración de Armada
gratis. Siendo su comisión en tierra, no puede ganar de los que la ley concede
a los marinos embarcados, es por esto que me dirijo a US. a fin de que en
cumplimiento de la orden citada, ordene la baja de la raciones (dice al
Gobernador de la Provincia del Guayas) en la goleta "Salado" del Sr. Rojas,
así como la devolución de las que ha estado percibiendo indebidamente, pues
creyendo como cree el que suscribe que este pago es ilegal se abstendrá de
pagarlo en lo sucesivo, protestando de él" (360)
Como dato interesante y de atracción cabe mencionar que en la Orden
General del 10 de noviembre de 1864 se publica lo siguiente en su artículo
2o: "Mientras regresa el Excelentísimo señor Comisionado del Gobierno
Supremo (Dr. Gabriel García Moreno), las bandas de los cuerpos de la
guarnición romperán la retreta y asamblea en frente de la casa de habitación
del que suscribe (en referencia a la casa del comandante General del Distrito,
Coronel Secundino Darquea)" (361)
DESMANTELAMIENTO DE LOS BUQUES Y BREVE PERIODO DE PAZ 253

URAGA SE SEPARA DEL SERVICIO ACTIVO

, es ecir dejó de existir aquella Escuadrilla que había si s o organizada


e usivamente para la campaña en Machala contra las fuerzas urbinistas.
Estaba demás pues la permanencia de un jefe para la misma, que lo era el
Capitán de Navío Graduado Juan Manuel Uraga, el mismo que con fecha 26
de octubre dice: "Desde el momento en que quedó reducida la Escuadrilla al
de hecho naturalmente desaparece el carácter con que me
invistió S.E. el General en Jefe en uso de las facultades con que estaba
investido; sin embargo con el objeto de dejar lo mejor posible organizada la
dotación del "Guayas" he perseverado algunos días más; y al efecto el Capitán
de Fragata Diego E. Matos como Comandante de dicho buque quedará con el
Teniente de Fragata Miguel Núñez como segundo para dotación de guardias
y demás servicios el Alférez de Navío Francisco Madrid y el de igual clase
José Antonio Gómez el de id. Diego Sánchez; los alféreces de fragata Tiburcio
Lecaro, Manuel Silva, Daniel Cruz y Ricardo Darquea y los guardias marinas
Tomás Matos, Domingo Ordeñana y Diego Matos; Ingenieros los que dí cuenta
a Ud. el día de ayer y en cuanto a tripulación ésta constará de cuarenta
individuos inclusive contramaestre, guardianes, fogoneros, carboneros,
timoneles e indígenas, arreglo que someto a la consideración de Ud.

"Réstame ahora decir a Ud. que sin embargo de separarme como


naturalmente debo hacerlo, Ud. puede estar cierto de que no perderé de vista
este buque, mientras esté en este puerto, y si necesaria fuera su salida le
acompañaré y el Supremo Gobierno igualmente puede descansar cierto de
que en cualquier circunstancia mis débiles servicios le pertenecen como le
pertenece a su patria el que suscribe".

Con fecha 7 de noviembre Uraga es separado del servicio activo, siendo


destinado como Jefe General de la Policía, él preocupado por el estado en que
se encuentra el "Guayas", dirige días después el siguiente oficio:

"Jefatura General de Policía.- Guayaquil a 16 de noviembre de 1864.- Al


Sr. Comandante General del Distrito.

"Atendiendo a las circunstancias, como comprendiendo la importancia a


la vez que los sacrificios que ha tenido que hacerse para obtener el vapor
"Guayas", no solo creo de mi deber sino de imperiosa necesidad llamar la
atención de US. a este respecto: este buque Señor, es notorio el estado de
desnudez en que le dejaron al vendérnoslo; y este buque señor, como
cualesquiera otro, sin lo precisamente necesario no podrá conservarse útil y
acabará por correr la misma suerte que la fragata "Colombia", el "Machala"
y otros.

"No habrá una sola persona que desconozca que como ahora otras ocasiones
con esta fuerza es con la que se ha salvado de las diferentes crisis en que se
ha visto casi sumido el país, casos muy recientes tenemos, US. sabe como
254 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

todos que desde el momento en que los emigrados ecuatorianos pudieron


disponer del "Bernardino", sin más que eso nos han tenido en constante
alarma, sino al Gobierno al pueblo, o mejor dicho a la Nación. ¿Y por qué?
Por no tener el Gobierno un buque con que hacerse respetar, y tan cierto es
esto que a la primera noticia que recibieron los emigrados de que armábase
el "ANNE", abandonaron el "Bernardino" en vista de hechos semejantes, no
comprendo se desatienda a la conservación como es debido del Vapor "Guayas"
sin perder momentos, tanto más estando tan próximo el invierno que dificulta
no solo hacer los indispensables reparos que exige, sino su deterior sino se la
preserva anticipadamente.

"Preciso es pues Sr. Comandante General empezar por preparar la parrilla


en que debe entrar el buque, para empezar por preservar los fondos del buque;
preciso es pues, Sr. hacerles las comodidades interiores para poderse habitar;
preciso es hacerle otros muchos reparos sin los cuales mañana no será ni lo
que es ahora; por la poca fuerza de su máquina es indispensable un completo
velamen; por falta de los botes necesarios para su servicio este no solo se ve
interrumpido, sino el mismo buque comprometido, por falta de tripulación se
ha encontrado y se encuentra igualmente no solo comprometido sino expuesto
a perderse, cuando menos malgastarse; señor, téngase siquiera medianamente
como es debido o nos encontraremos muy luego como viejos "Bernardinos".

"A estas observaciones me impelen las ya marcadas negativas aún con


frívolas peticiones; a ello me obliga Señor, cumplir como dejo dicho como un
deber y preservar a la Nación de sacrificios, cual lo que acaba de hacer la
Inglaterra y otras potencias europeas, la deben exclusivamente a sus fuerzas
navales; en fuerza de esta verdad, aunque por pocos días el viejo "Bernardino"
dominando nuestros puertos, cuántos males nos ha causado; el sacrificio de
nuestro Tesoro y algunas vidas ha sido la consecuencia; preciso es pues, Sr.
Cmdte. Gen. que sin perder un momento se solicite la autorización del
Supremo Gob. para que el Vapor "Guayas" sea atendido con preferencia a
otro cualquier sacrificio; en la inteligencia de que este es uno de esos gastos
excepcionales que no puede sujetarse a presupuesto por ser casi impracticable,
determinan cuando es indispensable hacer.- Dios guarde a US.- (f) Juan
Manuel Uraga".

VENTA DE LA GOLETA DE GUERRA "SALADO"


Tal parece que la Mayoría General de Marina fue habilitada nuevamente,
pues en octubre de 1864 se ve figurar como titular de aquel cargo al mismo
Capitán de Navío graduado Agustín Oramas, y como tal, el 14 de dicho mes
y año recibió la orden del Sr. Coronel Comandante General del Distrito y
Marina, para prevenir al Capitán de Fragata Lucas Rojas, Comandante de
la goleta de guerra "Salado", para que al siguiente día por la mañana, sin
falta alguna, proceda a acoderar la goleta de su mando en la punta norte del
muelle de la ciudad de Guayaquil, amarrándola con toda la seguridad para
evitar algún peligro. (362)
DESMANTELAMIENTO DE LOS BUQUES Y BREVE PERIODO DE PAZ 255

Le da también las siguientes instrucciones: "Tan luego como esté la goleta


en el lugar designado, procederá Ud. a su completo desarme de guerra
mandando toda su artillería, armamento de toda clase y municiones al parque
de esta plaza, bajo un formal inventario que remitirá Ud. a esta Mayoría con
el correspondiente recibo al pie para la debida constancia.

"Para esta operación que se hará con la prontitud posible, pedirá Ud. al
Jefe de Artillería los auxilios personales y materiales que fueren necesarios
para activar los trabajos, descansándose para esto en la pericia y contracción
de Ud.

"Así mismo desarmado como debe quedar el bajel de su mando formará el


inventario general del estado en que queda, bien expresado y exacto por sus
respectivas ramas; cuyo documento que es urgente mandará Ud. prontamente
a esta Mayoría". (363)

que el señor Comisionado del Supremo Gobierno,


Dr. Gabriel García Moreno, dispuso que la aikkiat~i~.
con las formalidades legales. (364)

El 22 de octubre el Alférez de Navío Francisco Mora, Ayudante de la


Capitanía del Puerto de Guayaquil, en representación del Capitán del Puerto
que se encontraba ausente, y los maestros mayores de carpinteros y calafates,
Cayetano López y Tomás Herrera, respectivamente, pasaron a bordo de la
goleta de guerra "Salado", en donde se encontraban el Capitán de Navío
Agustín E. Oramas y el Capitán de Fragata Lucas Rojas, Comandante de
dicho buque, y procedieron al avalúo del mencionado bajel, el que habiéndose
examinado prolijamente, tanto en su casco, arboladura, amarras y aparejos,
lo justipreciaron en la cantidad de diez y seis mil pesos, incluyéndose los dos
botes en estado de reparación. De todo lo actuado se firmó un acta. (365)

Con fecha 25 de octubre se legalizó el inventario general de la goleta de


guerra "Salado", con las firmas del Comandante, Capitán de Fragata Lucas
Rojas y del detall Alejandro A. Urueta. En el mismo se pormenoriza todo lo
relativo a las siguientes partes:

Casco exterior del buque, clavado y forrado en cobre.

Casco interior: molinete de patente, serviolas completamente seguras


con arbotantes, cubierta de pino con 19 claraboyas, etc.

Primera cámara: charolada y dorada, un sofá en semicircunferencia


forrado en terciopelo, cuatro espejos grandes, una mesa redonda, etc.

Segunda cámara: con siete cuartos y sus camarotes, dos jardines, dos
mesas grandes de caoba, etc.

Cocinas y sus útiles: empedrada y forrada en zinc, un fogón de fierro


256 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

con sus dos chimeneas de puerto y mar, dos calderos grandes de fierros,
etc.
Rancho de proa: dos bancos de firme, una mesa, etc.
Arboladura: Bauprés de pino de tea con su botalón de foque; palo
trinquete con sus respectivas vergas, masteleros, pico y cruceta; palo
mayor de pino de tea, etc.
Maniobra de babor y jarcias muertas.
Velamen pendiente: un petifoque, un foque, una trinquetilla, un juanete,
un velacho, un trinquete cuchilla, una mayor, un toldo de proa, un toldo
de combés y un toldo de popa.
Velamen de repuesto.
Amarras: dos anclas con peso de 10 quintales cada una, un anclote
grande del buque, un anclote chico del bote, una zarpa, una uña del
diablo y su bosa, 240 brazas de cadena, etc.
Aguada: dos tanques de fierro de 100 galones cada uno, un tanque de
fierro de 300 galones, tres pipas, etc.
Utiles de navegación.
Otros efectos de abordo.
Embarcaciones menores: un bote en regular estado, y otro de pino barado
en mal estado. (366)
En ese mismo día el Coronel Darquea dispone al Gobernador de la Provincia
se de cumplimiento a lo dispuesto por García Moreno, en cuanto a la "Salado".
Lo hace con el siguiente oficio:
República del Ecuador.- Comandancia General de Distrito.- Guayaquil a
25 de octubre de 1864.- Al Sr. Gobernador de esta Provincia.
"Habiendo dispuesto S.E. el Presidente de la República que se venda la
goleta de guerra "Salado"; tengo la satisfacción de remitir a US. el inventario
y avalúo de dicho buque a fin de que se sirva disponer que sea vendido con
las formalidades debidas, con cuyo objeto se encuentra acoderado en el muelle
de este Puerto.- Dios guarde a US.- (f) S. Darquea". (367)
El 26 de noviembre ante un nuevo avalúo, éste disminuye en su precio
como lo dice el Capitán del Puerto con la comunicación que transcribimos:
"República del Ecuador.- Capitanía del Puerto.- Guayaquil, noviembre 28
de 1864.- Al Sr. Gobernador de la Provincia.
DESMANTELAMIENTO DE LOS BUQUES Y BREVE PERIODO DE PAZ 257

"Acompaño a US. el avalúo practicado el 26 del presente a la goleta de


guerra "Salado" y sus enseres, según inventario, por los señores Capitán de
Fragata Diego E. Matos, Capitán de buque mercante Manuel Erisuma,
maestros mayores de carpinteros y calafates Santiago Pasos y Tomás Herrera
y el que suscribe Capitán del Puerto, cuyo avalúo asciende a la cantidad de
doce mil cuatrocientos noventa y cinco pesos.- Dios guarde a US.- (f) F. J.
Martínez.- (368)

Finalmente el buque es entregado en venta al Sr. José J. Olguín, con fecha


lo. de diciembre de 1864, quien manifiesta que recibió la "Salado", de acuerdo
al inventario, pero de menos un juanete, y que la Mayor se halla sin algunos
pedazos de paño, los que que en épocas anteriores a la fecha le habían quitado
para componerla. (369) Termina de esta manera una transacción, que dejaba
a nuestra Armada sin el concurso de un buque, que había hecho historia
durante algunos años.

APUNTES NAVALES

En los meses de febrero, septiembre, octubre, noviembre y diciembre de


1864 el Gobernador de la Provincia de Pichincha deja constancia que Leonardo
Stagg, General de la Armada, en uso de letras de cuartel, consta en las hojas
de supervivencia y que reside en la ciudad de Quito. (370) Dicho alto oficial
naval de 67 años de edad que sirvió en la Marina de Guerra Ecuatoriana
desde 1830, cuando llegó en la fragata "Colombia", y que compartió el destierro
con su suegro, el General Flores, desde 1845, luego de la Revolución Marxista,
había retornado al país después del triunfo garciano de 1860, y ya el 4 de
diciembre de aquel año se lo reinscribió en la lista militar. Desde entonces,
por su edad, se mantuvo en servicio pasivo.

Por otro lado el 14 de diciembre de 1864 se dispone al Gobernador de la


Provincia del Guayas se sirva ordenar se le satisfagan al Alférez de Fragata
Enrique Larroque los sueldos que ha devengado abordo del vapor de guerra
"Guayas" desde el 14 de septiembre último, en que fue llamado al servicio,
hasta el 17 de noviembre en que fue dado de baja. (371)

En ese mismo día, 14 de diciembre, manifiesta el comandante del vapor


de guerra "Guayas", que en días pasados, cuando le ordenó el Capitán de
Navío Juan Manuel Uraga alistar la lancha "Machala" para salir en busca
de las canoas perdidas, hizo que el oficial que la comanda presente un pedido
para calafatear la cubierta, en el supuesto que llueva mucho, y porque nunca
fue calafateada desde que le pusieron la cubierta los enemigos, cuando la
armaron en guerra (372)

En lo que respecta al primer maquinista del vapor de guerra "Guayas",


Sr. Welliams Kenedey el Comandante General de Marina le dice al Sr. Capitán
258 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

de Navío Agustín Oramas, Mayor General de Marina, el día 20 de diciembre,


que siendo muy gravosa al erario nacional la renta de 300 pesos mensuales
que se le paga, desde el día 12 del mismo mes se le propuso la renovación del
contrato con la suma de 200 pesos, lo que no aceptó, por lo que el Gobernador
declaró terminado el mismo. Por su parte el excelentísimo Sr. Comisionado
del Supremo Gobierno aprobó lo actuado. Ante ello Oramas recibió la orden
de dar de baja al Sr. Kenedey. (373)

Del 27 de diciembre el Comandante del vapor de guerra "Guayas", Capitán


de Fragata Lucas Rojas, con motivo del contrato de los marineros Rufino de
los Santos y José Moreira, para que presten sus servicios a bordo, previene al
Sr. Gobernador para no confundir a los marineros contratados con marineros
enganchados, pues los primeros son voluntarios a servir el tiempo que le
convenga, y sigue, "porque en contratos no se limitan sino puramente a servir
por veinte pesos sin enganche, sucediendo lo contrario con los segundos, porque
estos exigidos por sus enganches, se ven en la necesidad de servir forzosamente
el tiempo por el que se hayan comprometidos. (374)

A continuación nos permitimos transcribir una comunicación, en la que se


detalla una novedad con respecto a una de las velas del vapor de guerra
"Guayas".

"República del Ecuador.- Comandancia General del Distrito.- Guayaquil,


a 31 de diciembre de 1864.- Al Sr. Capitán de Navío graduado, Mayor General
de Marina.

"Puesto que la redonda nueva sin relinga, no es útil para el vapor de guerra
"Guayas", la que se trasladó de la goleta "Salado", según lo asegura el
comandante de dicho buque en la nota que US. se sirve transcribir con fecha
29 del presente, y lo afirma el Sr. Capitán de Navío Graduado Juan Manuel
Uraga, quien tiene perfecto conocimiento de los útiles que son necesarios
para el servicio de dicho buque; puede US. facultar al jefe del vapor "Guayas"
para que de esta vela se haga el toldo del combés indicado en la nota que
contesto.- Dios guarde a US.- (f) S. Darquea.- (375)

SENTENCIA ABSOLUTORIA AL CAPITAN DE NAVIO FRANCISCO


GUTIERREZ

En el tomo VIII de esta obra se menciona el establecimiento de un sumario


por actos de piratería en julio de 1860, en el interín de la guerra intestina
que lideraban García Moreno del Gobierno Provisorio, por un lado, y el General
Guillermo Franco, Jefe Supremo de la provincia del Guayas, por otro. Es que
al producirse saqueos en Bahía de Caráquez por parte de las fuerzas
franquistas, el Comandante y la dotación de la goleta de guerra "5 de abril"
se vieron seriamente inmiscuidas, por lo que Franco dispuso al Comandante
General de Marina mande a instruir el correspondiente sumario al Capitán
DESMANTELAMIENTO DE LOS BUQUES Y BREVE PERIODO DE PAZ 259

de Navío graduado Francisco Gutiérrez, indicando que deben declarar en él


toda la dotación, y los más que por el curso de la causa se citen y hagan
necesaria, hasta poner en claro los hechos. Al Capitán de Fragata Lucas
Rojas se lo designó para que instruya aquel sumario. (376)

Al producirse el triunfo garciano contra las fuerzas franquistas, el 24 de


septiembre de 1860, Gutiérrez y otros abandonaron el país, por lo que la
causa quedó suspensa.

Lo cierto es que transcurrieron más de cuatro años para que el Comandante


Gutiérrez regrese a Guayaquil, motivado por la muerte de un familiar muy
cercano. Aprovechó aquél para vindicar su honor y dejar su nombre limpio de
toda acusación, pidiendo se prosiga con la causa hasta que se emita sentencia,
pues de acuerdo a la Orden General del 22 de noviembre de 1864, el Juez
Fiscal Lucas Rojas hace todavía referencia a la acusación y sumario a oficiales
del Ejército y Marina por asaltos y sedición en Manabí. Es decir la causa
estaba latente. Por ello el Comandante Gutiérrez envía el siguiente oficio:

"Señor Comandante General del Distrito y de Marina.

"Francisco Gutiérrez, Capitán de Navío graduado sin letras de retiro por


no estar calificado, ante US. con el debido respeto y usando el derecho que la
ley me concede digo:

"Que en el año de 1860 en los meses de julio y agosto, salí de esta ría en
una comisión a la Prov. de Manabí mandando el bergantín goleta de guerra
"5 de Abril" conduciendo una división de Ejército a órdenes del Sr. General
Raimundo Ríos a quien iba subordinado. Por entonces se cometieron algunos
excesos en Bahía de Caráquez por una columna de esas tropas al mando de
los señores Coronel José Ma. Cornejo y Sargento Mayor José Cruz; excesos
punibles en lo que no he tenido participación alguna, si no que movido por un
sentimiento de compasión hacia ese vecindario me presté a admitir a bordo
del buque que comandaba para conducir a esa ciudad unos cuantos efectos, a
fin de ponerlos a cubierta del pillaje de la soldadesca.

"Llegado a este puerto lo puse todo a disposición del Sr. General Guillermo
Franco, Jefe del Gobierno. El procedimiento de las tropas de dicha columna
era escandaloso y naturalmente produjo alarma; mas como yo había conducido
aquellos efectos, se me sumarió; siguiendo una causa para vindicarme.

"Cuando tuvo lugar la jornada de 24 de septiembre que me hizo salir del


país, del que he estado ausente hasta ahora, que por un acontecimiento
doloroso de familia he regresado a él. Como mi honor permanece en duda y
está en mi deber buscar los medios legales de purificarlo; recurro a la
integridad de Ud. Para que se sirva mandar la prosecución de mi mencionada
causa, pues no es posible pasar en silencio las siniestras o equivocadas
conjeturas que injustamente manchen mi reputación.
260 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Con tal intento a Ud Pido y suplico se digne resolver conforme lo solicito


por ser de estricta justicia.- Guayaquil, abril 5 de 1865.- (f) Francisco
Gutiérrez". (377)

Por su parte el Coronel Secundino Darquea, Comandante General del


Distrito y Marina, pide se continúe con la causa dirigiéndose con oficio al
antiguo Juez Fiscal que la inició:

"Comandancia General del Distrito.- Guayaquil, 18 de abril de 1865.- Al


Sr. Capitán de Fragata Lucas Rojas, Contralor del Hospital Militar de esta
plaza.

"Habiendo dirigido a esta Comandancia General el Capitán de Navío Grad.


Francisco Gutiérrez la solicitud que remito a Ud. pidiendo la prosecución de
la causa que se le siguió el año de 1860, antes de que fuera tomada esta plaza
por el ejército del Gobierno Provisorio, acusándole de varios excesos cometidos
en la Bahía de Caráquez, y siendo Ud. El que fiscalizó entonces dicho sumario;
se servirá Ud. Proceder a su continuación en el menor tiempo posible,
adquiriendo al efecto los datos que conduzcan al esclarecimiento del hecho y
sirviéndole de auto cabeza de proceso la mencionada solicitud.- Dios guarde
a Ud.- Secundino Darquea". (378)

Mateo Feraud, quien llegó a ostentar el grado de Teniente de Fragata, y lo vemos


figurar en las décadas del 50 y 60 del siglo XIX, retirado de la Armada se dedicó a
la Marina Mercante. Fue Ayudante de la Capitanía del Puerto de Guayaquil. Falleció
en su ciudad natal, Guayaquil, en 1893.
DESMANTELAMIENTO DE LOS BUQUES Y BREVE PERIODO DE PAZ 261

Efectivamente, el juicio fue reiniciado, y en él prestaron declaraciones el


Alférez de Navío José Antonio Gómez, el Alférez de Fragata Mateo Feraud y
el Guardia Marina Pablo Merino, entre otros oficiales, formándose un total
de 85 páginas de lo actuado.

El Juez Fiscal resolvió el proceso y el 19 de agosto el Consejo de Guerra de


Oficiales Generales estudió la causa seguida contra el Capitán de Navío
graduado Francisco Gutiérrez, acusado del delito de saqueo cometido en Bahía
de Caráquez aquel año de 1860, y se pronunció por la sentencia absolutoria.
(379)

El pronunciamiento de dicho Consejo fue sometido en consulta a la


excelentísima Corte Suprema, con arreglo a lo que previene el artículo 77 de
la Ley Orgánica Militar, para su respectiva aprobación, como última instancia.
(380)

Se resuelve de esta manera la causa seguida contra el Comandante


Gutiérrez, pero no consta en los años posteriores el que halla regresado al
servicio activo de la Armada.

ESCANDALO A BORDO DEL VAPOR DE GUERRA "GUAYAS"

on motivo de una celebración se reunieron a bordo


del vapor de guerra "Guayas" autoridades militares, así como jefes y oficiales
del Ejército y Marina. Además estuvo presente la banda de músicos, con
cuyos miembros immili lo que provocó un sumario para aclarar
los hechos. Con e siguiente o icio se daban las primeras disposiciones al
respecto:

"República del Ecuador.- Mayoría General de Marina.- Guayaquil, febrero


8 de 1865.- Al señor Comandante del vapor de guerra "Guayas".

"El Sr. Coronel, Comandante General del Distrito y de Marina acaba de


ordenarme prevenir a Ud. que inmediatamente mande que el primer o segundo
Teniente del buque de su mando proceda a instruir con la brevedad posible el
correspondiente sumario, sobre el escandaloso desorden ocurrido en la noche
de ayer en el mencionado bajel, a fin de descubrir sus autores y los motivos
que dieron lugar al estropeo de los individuos de la banda de música y la
pérdida de algunos instrumentos.- Dios guarde a Ud. (f) Agustín Oramas".
(381)

En cumplimiento a aquella orden el Capitán de Fragata Diego Eugenio


Matos, Comandante del "Guayas", nombró al siguiente día al Teniente de
Fragata César Guedes, 2o. Teniente del buque, para fiscalizar el sumario a
instruirse contra los autores de la riña ocasionada aquel día 7, y para tomar
262 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

las debidas indagaciones para descubrir los hechores de dicho estropeamiento.


Por lo tanto dice: "Mando se sirva instruir el sumario ya indicado con la
brevedad posible, nombrando para el efecto al Aspirante Antonio Vergara
para que actúe como escribano; adjuntando a Ud. la nota orden de la Mayoría
General de Marina para que le sirva de cabeza de proceso". (382)

Sin perder tiempo, en la misma fecha de su nombramiento el Teniente de


Fragata César Guedes, en su calidad de Fiscal procedió a instruir la respectiva
sumaria averiguación sobre el desorden ocurrido a bordo del vapor de guerra
"Guayas" en la noche del 7 de febrero de 1865, compareciendo ante él, el
Aspirante Antonio Vergara, a quien hizo juramentar en debida forma para
su desempeño en el cargo de escribano.

Seguidamente acudió a declarar el Comandante del buque, quien dijo que


se llamaba Diego Eugenio Matos, natural de Cartagena de Indias, de edad
de cincuenta y un años, de religión católica, apostólica y romana. Preguntado
sobre lo ocurrido dijo: "Que a consecuencia de ser el día del natalicio del
Alférez Ricardo Darquea que pertenece a la dotación del buque de mi mando,
éste, se festejó abordo con mi permiso y el de la Comandancia General,
embarcando al efecto la música del Batallón No. 1, y asistiendo varios jefes y
oficiales, en particular su señoría el Sr. Coronel Comandante General; que
un poco después de la comida, como a las siete y media de la noche, se regresó
a tierra el Sr. Coronel Comandante General Secundino Darquea con algunos
jefes y el que declara.
"Que dejando en tierra al Sr.Coronel Comandante General, se regresó
abordo el que declara y preguntó al Alférez Darquea que hasta que hora era
que tenía permiso para tener la música abordo, y éste le contestó en unión
del Capitán Antonio Darquea que el permiso era hasta la hora que ellos
tuvieron por conveniente; que ésta pregunta la hizo a consecuencia de que
tuvo orden de S.S. el Sr. Coronel Comandante General, para que saltase la
música; pero que encontrando una fuerte resistencia suplicatoria, por parte
de muchos jefe oficiales, y en particular el Mayor , el Capitán, el Teniente y
el Alférez Darquea (hermanos), tuve que ser condescendiente, en la suposición
de la indulgencia del Sr. Coronel Comandante General que tenía por ese día
lo haría acceder a que la música demorase un poco más, y suponíendome al
mismo tiempo que la reunión se componía como realmente era de jefes y
oficiales de moderación y orden, me retiré a mi camarote a dormir, más
reconociendo que era imposible poder dormir se fue para tierra otra vez, en
unión del Comandante Rodríguez, y dejando al Segundo encargado para que
conservase el orden y vigilancia.
"Que al día siguiente regresó abordo y el Segundo del buque le dio parte
de haber habido después de mi ida a tierra un escándalo, debido a la grande
insubordinación del Músico Mayor de la banda, porque deseando el Capitán
Antonio Darquea que tocasen una pieza a su despedida, se opuso el referido
Músico Mayor diciendo que no tocaba más, aunque se lo mandase un General,
DESMANTELAMIENTO DE LOS BUQUES Y BREVE PERIODO DE PAZ 263

y fue esto lo que motivó para que (según el parte que me dio) le diese de
golpes el Capitán Antonio Darquea, y según tiene noticias se hallaban
presentes el Segundo del buque, el Teniente Coronel Ignacio Navas, el de
igual Clase graduado N. Rendón y el Sargento Mayor graduado Faustino
Iturralde". (383)

Debido a que el vapor de guerra "Guayas" tuvo que zarpar el mismo día 9,
no se pudo seguir tomando las declaraciones, pero a su retorno a Guayaquil,
el 14 de febrero fue llamado a declarar el Teniente de Fragata Miguel Núñez,
Segundo Comandante del vapor de guerra "Guayas", quien compareció, y
luego de poner la mano derecha sobre el puño de su espada prometió bajo
palabra de honor decir la verdad en todo lo que supiere y fuere preguntado.

El declarante dijo ser natural de Guayaquil, de treinta y ocho años de


edad, de religión católica, apostólica y romana, y Segundo del buque. Sobre
el escándalo abordo detalló lo siguiente:

"Que en los momentos en que estaba presidiendo la mesa con los oficiales
del buque y algunos de tierra, todos fueron de opinión que la banda tocase
una pieza, durante que permanecían en la mesa, para cuyo efecto subió a la
cubierta a invitar al Músico Mayor para que tocase el Teniente Bernardo
Darquea, y negándose a ello el Músico Mayor, diciéndole que no tocaba, bajó
inmediatamente a la cámara a dar parte de lo ocurrido, entonces el Capitán
Antonio Darquea acompañado del declarante y algunos oficiales subieron a
la cubierta, e intimándolo nuevamente el Capitán Darquea para que tocase,
volvió a contestar que no tocaba; que entonces el Capitán Darquea volvió a
exigirle que tocase, pues que se lo mandaba él que era su Capitán y que debía
obedecerle, como que era su superior.

"La contestación del Músico Mayor fue negarse por segunda vez, diciendo
que no tocaba aunque se lo mandase él o que fuera general, insubordinándose
con todos los demás músicos, dando el mal ejemplo con este acto a todos los
demás, y siendo además contra la moral y disciplina del Ejército.

"Que después de este acontecimiento, irritado sobre manera el Capitán


Darquea lo tomó por el brazo, dándole un empujón, y que a la mucha
resistencia que él hacia lo largó; cayendo sobre una de las barandillas de la
toldilla, en que se lastimó un ojo.

"Que al momento de este acontecimiento acudió el que declara y algunos


oficiales a contener el desorden, lo que quedó perfectamente establecido.

"...Que después del acontecimiento que deja indicado tocó la banda, sin
que faltase ninguno de sus instrumentos, pero que ignora si después que
saltasen a tierra los hayan botado o perdido por una indigna venganza del
Músico Mayor, o por un escándalo que se formó entre ellos en los momentos
que pisaban tierra. '
264 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Que se hallaban presentes a bordo en la noche del siete del presente (diez
de la noche) los señores Tenientes Coroneles graduados Ignacio Navas y
Francisco Rendón, lo mismo que el Sargento Mayor graduado Faustino
Iturralde y algunos oficiales del buque". (384)

Posteriormente declararon los Tenientes Coroneles Ignacio Navas y


Francisco Rendón, quienes difieren de las declaraciones anteriores, cuando
manifestaron que la banda de músicos luego de la riña saltaron a tierra sin
tocar otra pieza musical, aunque coinciden en que no vieron que hayan perdido
instrumento alguno.

El 22 de febrero del mismo año presentó su declaración el Alférez de Navío


José Antonio Gómez, natural de Guayaquil, de 28 años de edad y oficial del
vapor de guerra "Guayas", quien manifestó que en el momento del desorden
se hallaba en la cámara con varios oficiales y que cuando subió a cubierta ya
se había formalizado todo. Que la banda tocó nuevamente antes de saltar a
tierra.

Seguidamente compareció el Alférez de Navío Francisco Madrid (Francisco


Fernández Madrid Bello), natural de Quito, de 20 años de edad, católico,
apostólico y romano e igualmente embarcado en dicho vapor, quien manifestó
que nada tiene que decir pues en ese momento descansaba, en su camarote,
que cuando subió a cubierta estaba todo tranquilo, pero que oyó decir que
uno o dos de los músicos habían botado intencionalmente sus instrumentos
al agua.

Finalmente el 23 de febrero compareció el homenajeado, Alférez de Fragata


Ricardo Darquea, quien poniendo la mano derecha tendida sobre el puño de
su espada, dijo ser natural de Tacunga, de 18 años de edad, de religión católica
y actualmente embarcado en el vapor de guerra "Guayas".

Aquél declaró lo siguiente: "Que la noche se festejaba en reunión de muchos


jefes y oficiales por ser el día de su natalicio y que para cuyo efecto había
obtenido permiso del Jefe del buque y éste de la Comandancia General, y que
cuando estaban a la mesa su hermano el Teniente Bernardo Darquea, había
subido a instarle a los músicos tocaran alguna cosa, y que entonces había
bajado a la cámara y le había comunicado a su hermano Antonio Darquea
que los músicos no querían tocar en ese mismo momento, se levantó Antonio
Darquea y subió a cubierta, y diciéndoles de un modo amistoso que tocaran,
la contestación fue que no lo hacían, que entonces por segunda ocasión les
intimó que tocaran, pues que era un superior que lo mandaba y que insistiendo
los músicos en su propósito dijeron que no tocaban aunque lo mandase él o
fuera General, que luego Antonio Darquea le pegó un bofetón, que el
Comandante Navas y otros acudieron al momento y todo se tranquilizó..."
(385)

El mismo día concluyó aquel proceso, pasando el Fiscal a entregarlo al Sr.


Coronel Comandante General del Distrito, para que decida sobre las sanciones
DESMANTELAMIENTO DE LOS BUQUES Y BREVE PERIODO DE PAZ 265

a imponerse por aquel caso de indisciplina, ocurrido dentro de un buque de


guerra, lo que indudablemente se debía de hacer apegado a los reglamentos
para que impere la justicia muy necesaria en nuestra Marina.

ACTIVIDADES A INICIOS DE 1865


El 13 de enero de 1865 el Coronel Manuel de Ascásubi, Ministro de Guerra
y Marina, notifica al Comandante General del Distrito del Guayaquil que
S.E. el Vicepresidente de la República, Encargado del Poder Ejecutivo, libró
al Alférez de Fragata habilitado Manuel Silva el despacho en forma de su
clase.(386)
Un día después, el Capitán de Fragata Juan María Doyle solicita al
Supremo Gobierno se le expidan nuevas letras de retiro, de conformidad con
las que obtuvo el año de 1845, haciendo mérito para ello del certificado de
Tesorería que acompaña a su solicitud. (387)
El 20 de enero el Comandante General del Distrito de Guayaquil y de
Marina, Coronel Secundino Darquea, comunica para los fines legales que
con fecha 19 del mismo mes fue dado de baja del vapor de guerra "Guayas" el
Alférez de Fragata Tiburcio Lecaro. (388)
La decisión de aquella autoridad estuvo basada en el parte del Comandante
de dicho vapor, en que dice que aquel oficial es indigno del empleo que obtiene
y comete diariamente faltas que no han sido posible reprimirlas. Por aquello
el 28 de enero S.E. el Presidente de la República aprobó la baja del Alférez
Lecaro. (389)
El Teniente de Fragata Francisco Mora, Ayudante de la Capitanía del
Puerto de Guayaquil, informa al Gobernador el retiro de algunos útiles del
antiguo vapor "Guayas" de la bodega que servía de depósito de los mismos.
Se refiere al vapor construido en los Astillero de Guayaquil en los años 1840
y 1841 y que prestó servicios en nuestra Armada hasta el año 1858.
A consecuencia de haberse desocupado aquella bodega, entregó las llaves
el día 23 de enero al Sr. Miguel Gómez, recomendado de los dueños de la
misma. Las pocas existencias que quedaban del ex "Guayas" fueron
depositadas en el patio de la Casa de Gobierno. (390)
El 31 de enero se dice que un bote del vapor de guerra "Guayas", se halla
en mal estado y que para refaccionarlo son necesarios 37 pesos 2 reales. (391)
El 6 de febrero el Capitán del Puerto de Guayaquil, Capitán de Navío
Francisco J. Martínez, puso en conocimiento del Gobernador de la Provincia
que la chalupa peruana "Francisca" ancló en el Puerto procedente de Túmbez
a cargo de su patrón Jacinto Benítez, conduciendo al Sr. Gabriel Ordinola, el
que fue arrestado por haber saltado antes de la visita de dicha Capitanía,
266 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

pues pudo haber abandonado el buque en forma clandestina para entregar


cartas o por algún contrabando. (392)

Tres días después el Coronel Secundino Darquea ordena al Capitán de


Navío Agustín Oramas, Mayor General de Marina, suspenda el curso de la
causa que se sigue al contramaestre del vapor de guerra "Guayas" Jorge
Williams, y que se remita el sumario a la Comandancia General para su
archivo. (393)

El 11 de febrero S.E. el Presidente de la República expidió los despachos


del Alférez de Navío a favor del Alférez de Fragata Manuel Silva, y el 18 del
mismo mes tuvo a bien ascender a Teniente de Fragata efectivo al graduado
Francisco Mora. (394)
El vapor de guerra "Guayas" había zarpado para transportar hasta
Machala y Santa Rosa a dos compañías del Batallón No.1, que debían reforzar
aquellas guarniciones, arribando de retorno al puerto de Guayaquil el 13 de
febrero, sin novedad. (395)

El 24 de febrero el Capitán del Puerto de Guayaquil transmite su


preocupación al Gobernador, sobre los materiales que hacen falta para el
buen funcionamiento del faro de Santa Clara, en los siguientes términos:
"Con fecha 21 del presente remití a la Comandancia General del Distrito un
pedido para que se proveyera del Tesoro Público, para la compra de seis
candiles, dos alcuzas (barriles para almacenar aceite) y seis vidrios para el
faro de la Isla Santa Clara, y como ya se halla sometido a esta Gobernación,
me dirijo a US. con el objeto de que se sirva ordenar su pago, pues son estos
útiles de urgente necesidad, y se puede aprovechar de la embarcación que se
despacha hoy para la Isla con los víveres y otros útiles, remitiéndose también
lo que se pide para la refacción de dicho faro, pues como encargado que soy de
su conservación, tengo necesidad de que ese establecimiento se halle en el
mejor estado posible de servicio, quedando a cubierta mi responsabilidad por
lo que pueda suceder por falta de los útiles que se piden para su refacción y
buen servicio". (396)
El Capitán de Fragata Diego Eugenio Matos, Comandante del "Guayas",
pidió 20 tubos para el uso de las caldéras del vapor de guerra, y un quintal de
estopa blanca para utilizarla en las mismas. A lo que el Sr. Presidente de la
República dispuso, el 5 de abril, que dicho jefe le informe si están en uso los
tubos que vinieron de Panamá, y que dé una razón del diámetro de los que
necesita, para hacer el pedido indicado. (397)

El 18 de abril el Coronel Secundino Darquea le dice al Sr. Capitán de


Navío Mayor General de Marina, que puede el Comandante del vapor de
guerra "Guayas" proceder a la operación que desea en la máquina, y
practicarla en lo sucesivo una vez todos los meses, a fin de que ella se encuentre
siempre lista y sin ninguna oxidación que le impida su libre ejercicio.(398)
DESMANTELAMIENTO DE LOS BUQUES Y BREVE PERIODO DE PAZ 267

e Debido a que el Capitán del Ejército César Guedes pidió al Supremo


Gobierno despacho de oficial de Marina, por hallarse sirviendo en el vapor de
t guerra "Guayas", el 11 de abril resolvió el Sr. Presidente de la República que
es justo su reclamo y se sirvió librarle el de Teniente de Fragata, que es el
que corresponde a su graduación (399)

PERDIDA DEL VAPOR "BOLIVAR"

El día 21 de abril de 1865 el Presidente de la compañía de vapores de la


ría de Guayaquil, se presentó en la Capitanía del Puerto para informar la
faltal noticia del varamiento y destrucción del vapor "Bolívar".(400)

El acontecimiento fatal tuvo lugar a la una de tarde del 20 del mismo mes,
perdiéndose dicho buque cuando efectuaba la travesía entre la Isla Verde y
Puná. Según el Capitán de Navío Francisco J. Martínez, aquel accidente fue
a consecuencia de haberse reventado la caldera, la que a lo mejor no se
encontraba en muy buen estado, aunque no descarta otra ocurrencia fortuita,
y que el buque fue despachado en debida forma por la Gobernación de la
provincia para seguir viaje al pueblo de Machala. (401)

En su informe el Capitán del Puerto de Guayaquil comunica al Sr. Coronel


• Comandante General, lo siguiente: "Este acontecimiento es ciertamente
lamentable, ya por la falta que hace el expresado vapor para el tráfico de esta
ría, y ya por las desgracias que se han hecho sentir en las personas que
conducía, siendo la más notable el haberse ahogado una mujer que iba de
segundo pasajero, la cual fue encontrada por la actividad del Capitán y ha
quedado sepultada por disposición del mismo en el pueblo de Puná. El Sr.
Ramón Andrade con una contusión en el brazo, y el hijo del Sr. Game con dos
contusiones, una en el brazo y otra en una pierna, habiéndose salvado las
demás personas sin ninguna novedad". (402)

Ante esa adversidad se dispuso la salida del vapor "Washington", el que


zarpó con prontitud llevando a bordo al Presidente de la compañía propietaria
del vapor "Bolívar", con el objeto de salvar la carga que se pudiera. (403)

El "Bolívar" fue encontrado enteramente inútil varado en la playa de


Bocana. Luego de lo cual retornó el vapor "Washington", arribando a
Guayaquil en la madrugada del 23 de abril, trayendo a bordo parte de la
máquina del "Bolívar", así también el cargamento que pudo salvarse. (404)

El Capitán de Navío Graduado Francisco Javier Martínez, Capitán del


Puerto de Guayaquil, informó al Gobernador de la Provincia que el 24 de
268 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

marzo de 1865 llegó al puerto el bote peruano "Ola" procedente de Túmbez,


conduciendo clandestinamente al señor Mateo Feraud, quien se había
desempeñado hasta el año de 1860 con el grado de Teniente de Fragata de
nuestra Armada, es decir en la época urbinista, el mismo que fue transbordado
a una canoa a la altura de Montealto, y que como el artículo 18 del reglamento
del puerto previene que los Capitanes presenten a la Capitanía del Puerto
una lista exacta de su tripulación y pasajeros; y no habiendo llenado este
requisito el señor José Velásquez, piloto del mencionado bote, dispuso que la
embarcación quede encargada hasta que aquél indemnice 50 pesos de multa,
siendo también apresado. (405)

Del mismo modo puso el acontecimiento en conocimiento de la Jefatura


General de Policía, a fin de que sean tomadas las indagaciones debidas y
proceda conforme a justicia.

En el mes de mayo, dice la misma autoridad portuaria, que el 26 de abril


fue despachada la embarcación con los víveres, aguada y aceite para el faro
de la Isla de Santa Clara, la misma que regresó el 2 de mayo con el timón y la
vela rota, razón por la cual no pudo llegar al lugar donde fue destinada. (406)

El Capitán del Puerto explica que antes del zarpe, le dio al Piloto la mitad
de su flete para que se aliste, y que no le pareció justo obligarle a la devolución
del dinero, porque el viaje fue frustrado de manera fortuita. Es más dice que
al dueño de otra chata que zarpó en su lugar, con dicho cargamento, se le
debe cinco pesos. (407)

El 12 de marzo el Comandante General del Distrito de Guayaquil y de


Marina dio parte al Ministro Manuel de Ascásubi, que el Subteniente Mario
Valencia del Batallón No.1 y el Guardia Marina Diego B. Matos del vapor de
guerra "Guayas", han sido dados de baja de sus destinos, por haberse hecho
indignos de la confianza del Gobierno Supremo. Cinco días después estas
medidas fueron aprobadas por S.E. el Presidente de la República y
comunicadas a los Ministerios de Guerra y Marina y de Hacienda para los
efectos legales. (408)

Tal es así que e 18 de mayo dice el Capitán de Navío


gustín I ramas lo siguiente: "Con fecha 7 del pasado, según autorización
anterior del Supremo Gobierno, se contrataron para el servicio del vapor de
guerra "Guayas" siete marineros extranjeros que hacen de tisoneros, fogoneros
y timoneles, cada uno por el término de tres meses, en virtud de haber
terminado sus contratos los anteriores. Los nuevos contratados son: Manuel
Miranda, Juan Marieta, Fernando Franco, José Herreira, Pedro Ramos,
Francisco Alvarez y Bartolomé Saucedo". (409)
CAPITULO VIII

Combate Naval
de Jambelí
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 271

COMBATE NAVAL DE JAMBELI

uego de la fracasada invasión de 1864 el General José María Urbina


retornó a su residencia de Paita, en donde vivía con su familia. Y allí
continuó ocupándose en los preparativos de una nueva expedición con
el único fin de derrocar al Gobierno de García Moreno y hacerse cargo del
poder en Ecuador.

y siendo su proyecto continuar dominando arbitrariamente al país, por


intermedio de alguna persona de su conveniencia resolvió • or tanto imponer
la candidatura de
410)

Mas desde los primeros días de febrero, las autoridades del gobierno
estaban sobre-aviso de que los emigrados ecuatorianos preparaban una nueva
expedición y decidieron tomar algunas medidas, como las que se dispone en
el siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Comandancia General del Distrito.- Guayaquil,


a 10 de febrero de 1865.- Al Sr. Capitán de Navío don Juan Manuel Uraga.

"Habiendo recibido aviso de que los emigrados ecuatorianos que se


encontraban en la República del Perú, han desaparecido repentinamente del
puerto de Túmbez, donde se hallaban reconcentrados; y recelándose de que
este movimiento tenga por objeto alterar el orden en algunos de los pueblos
de nuestro territorio, he resuelto enviar, en el vapor de guerra "Guayas", que
zarpará esta noche del puerto, dos compañías del número lo. para reforzar
la guarnición de la costa oriental; y una batería de la Brigada de Artillería
para guarnecer el buque. Y como US. no ha desmentido el patriotismo y
272 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

decisión que tiene por la presente causa, espero que, tomando el mando de
estas fuerzas, las conduzca, haga desembarcar una compañía en Machala y
otra en Santa Rosa, en caso de que así conviniere a las circunstancias; pues,
de lo contrario, dejo al juicio y pericia militar de US. hacer el desembarque
en el puerto que U. lo estime conveniente.- Dios guarde a US.- Secundino
Darquea". (411)

El Capitán de Navío graduado Juan Manuel Uraga, es un oficial de enorme


influencia ante el Gobierno, es decir, es el marino de confianza del Presidente,
tal es, que no desempeñando cargo alguno en la Marina de Guerra y siendo
Jefe General de Policía en Guayaquil, el lo. de febrero de 1865 se dirige al
Sr. Capitán de Navío graduado Agustín Oramas, Mayor General de Marina,
en los siguientes términos: "Al ofrecer el infrascrito, por el órgano
correspondiente, al Supremo Gobierno no perder de vista la seguridad del
vapor de guerra "Guayas" y, de consiguiente, sus necesidades, no puede
prescindir de un acto de justicia y de suma necesidad, cual es el de que
proponga para Alférez de Navío efectivo, al de Fragata Manuel Silva, que
actualmente se halla al mando de la balandra al servicio del Gobierno.

"Conocidos son los conocimientos técnicos y prácticos de este oficial, como,


así mismo, su buena conducta y leal comportamiento para que me detenga
en enumerarlos. En esta virtud, US. se servirá, inmediatamente, ponerlo en
conocimiento de S. Sa. el Comandante General, para que, si lo estima
conveniente, eleve la correspondiente propuesta al Supremo Gobierno". (412)
Como podemos darnos cuenta Uraga daba órdenes desde un destino que no
era el adecuado para hacerlo. Diremos de una vez que dicha propuesta fue
acogida, pues diez días después Manuel Silva fue ascendido al grado de Alférez
de Navío efectivo, y continuó con su colocación en el vapor de guerra "Guayas".

Días después, el 12 de febrero, en circunstancias en que el Jefe Político del


cantón Machala comenzó a notificar a los comprendidos en la revolución del
7 de agosto, para que se presenten ante el Gobernador del Guayas, en el
término de la distancia, entre los que se encontraba el Sr. Eusebio Avila,
quien procedió en forma dócil a la intimación, sacando su pasaporte y enviando
su equipaje a la chata de Manuel Escalante, que zarpaba ese día para
Guayaquil, y estando en espera de la hora de salida, el Coronel Lara recibió
la orden del Capitán de Navío Uraga de abordo del vapor "Guayas", de tomarlo
y remitirlo preso. Dice dicho Jefe Político al Gobernador del Guayas: "El
Coronel Lara, no obstante haberle manifestado yo que Avila iba a presentarse
a US. tuvo que cumplir con lo mandado por el Coronel Uraga". (413)
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 273

Pero lo cierto es que preocupaban al Gobierno los avisos recibidos de la


costa oriental, en el sentido de que los emigrantes ecuatorianos residentes
en Túmbez tratan de hacer una nueva invasión, y a fines de febrero el Coronel
Secundino Darquea dispuso al Gobernador de la Provincia del Guayas, se
conserven tres espías en el estero salado, recomendándole "se sirva disponer
que el Tesoro nacional les abone dos reales diarios de raciones a cada uno de
ellos, mientras se sepa el motivo de la súbita desaparición de los emigrados".
(414)
El Coronel Secundino Darquea, Comandante General del Distrito de
Guayaquil, era de la opinión de que "la invasión era difícil que se efectuara
por la impotencia y falta de recursos en que se encontraban los emigrados
para acometer una empresa semejante". Sin embargo, como hemos dicho, se
inició la acumulación de fuerzas en Santa Rosa y Machala, y se ordenó al
Jefe Político del cantón Machala que enviase a Guayaquil, con el carácter de
confinados, a todos los que estaban sindicados de haber tomado parte en la
revolución del 7 de agosto de 1864, y a cuantos resultaran sospechosos de ser
desafectos al Gobierno. Y no solo esto, sino que, al ser más serias las noticias
que recibían, organizaron las fuerzas de guardias nacionales y, apuraron las
providencias para la defensa, e incluso se dictaron medidas rigurosas que
pusieron a Guayaquil como en estado de sitio. (415)

ASALTO Y TOMA DEL VAPOR DE GUERRA "GUAYAS"


En 1865 el Capitán de navío Agustín Oramas continua como Mayor General
de Marina. Así también el Capitán de Navío Francisco Martínez y el Teniente
de Fragata Francisco Mora como Capitán del Puerto de Guayaquil y Ayudante
de la Capitanía, respectivamente. El Capitán de Navío Juan Manuel Uraga,
Jefe General de Policía, es llamado a cumplir comisiones cuando por las
circunstancias se requiera de sus servicios en la Marina de Guerra, como el
expresado en el oficio del 10 de febrero.
Siendo 11
sigue comandado por el Capitan de Fragata Diego Eugenio Matos, y
orman parte de la dotación de oficiales los Tenientes de Fragata César
Guedes, segundo de abordo, y Miguel Núñez; los Alféreces de Navío José
Antonio Gómez, Francisco F. Madrid, Diego Sánchez y Manuel Silva; y los
Alféreces de Fragata. Daniel Cruz y Ricardo Darquea, así también algunos
guardias marinas, entre ellos Diego Matos.

e a compañia e navegación por vapor del Guayas,


cuyo Presi ente era Mateo Palmer Game, ciudadano de los Estados Unidos
de Norteamérica residente en ese puerto, para efectuar su acostumbrada
navegación hasta Babahoyo. Dicho bajel, del porte de 100 toneladas mas o
menos, permaneció dos días en su destino, zarpando de dicho lugar al tercer
274 HISTORIA MARTIIMA DEL ECUADOR

día, para emprender su viaje de retorno a Guayaquil, con pasajeros y fletes,


pero en el trayecto tocaron en la Isla de Guare para tomar leña. (416)

Los revolucionarios urbinistas habían planificado apoderarse de dicho


vapor fluvial con el fin de dirigirse hasta Guayaquil, en cuya ría estaba
fondeado el buque de guerra del Gobierno y tomarlo por asalto, para el efecto
se habían puesto de acuerdo con el Capitán del "Washington", don Francisco
Modesto Game, quien entregó el buque al atardecer del día 31 de mayo a un
grupo armado, precisamente en la Boca de Guare. (417)

Es así que en forma rápida y sin violencia se embarcaron los urbinistas


liderados por el Comandante José Marcos Tejada, quienes en conocimiento
del arribo del vapor lo habían estado esperando. Dice Destruge que Marcos
había reunido cuarenta individuos, peones de las haciendas, y con estos y
algunos jóvenes que se le unieron tomaron posesión de la nave, en cuanto se
acoderó al barranco. (418) Los acompañaba en dicha acción el joven Juan
Bohórquez.(419)

La hacienda en donde se efectuó el asalto al vapor "Washington" era


propiedad del Sr. Agustín Tola, quien temeroso de que se le haga alguna
acusación, por no haber podido evitar el suceso, y porque un hermano suyo
haya tomado parte en aquel acontecimiento, pidió asilo en el Consulado
General del Perú en Guayaquil, cuyo Cónsul era el Sr. José Plácido Roldán,
a quien manifestó además su deseo de salir del país. Aquel diplomático se
dirigió al Gobernador con fecha 12 de junio para solicitarle la expedición del
correspondiente pasaporte, con el fin de que el Sr. Tola, pueda zarpar en el
próximo vapor rumbo al sur. (420)

A continuación me permito transcribir un oficio firmado por el Presidente


García Moreno, de esos raros con los que en ocasiones nos encontramos los
historiadores, porque nos desconciertan. Pues en él dice seis días después,
que el "Washington" ha sido recuperado, lo cual nunca aconteció. A lo mejor
fue mal informado, y es mas, el documento es originado en Guayaquil, cuando
él todavía no había arribado al puerto:
fo,
República del Ecuador.- Comandancia en Jefe del Ejército.- Plaza de
Guayaquil, a 6 de junio de 1865.- Al Sr. Coronel Comandante General del
Distrito.
"Habiendo sido entregado el vapor "Washington" por su Capitán, el Sr.
Francisco Game a los piratas en la Boca de Guare, sabe US. que pasó a formar
la escuadrilla de los facciosos, y que fue tomado por el Sr. Coronel F. J.
Martínez en buena guerra; por lo cual, y mientras que S.E. la Corte Suprew
resuelva conforme a sus atribuciones, si es una presa legítima, ordenó a US.
que dé las órdenes convenientes par que se conserve secuestrado en la
Capitanía del Puerto, entre tanto se resuelva a quien pertenece.- Dios guarde
a US.- (f) Gabriel García Moreno". (421)
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 275

Dice don Benjamín Carrión que el Comandante José Marcos había obtenido
en arriendo el pequeño vapor fluvial "Washington", antes de tomarlo. (422)
Así también don Manuel Gálvez manifiesta que dicho vapor fue entregado
por su Capitán mediante mil pesos al contado y diez mil a pagar. (423) Había
pues el consentimiento, por lo menos del Capitán Francisco Game, lo que
posteriormente le traería grandes dificultades a su padre, Presidente de la
Compañía propietaria del Bajel, que le impediría recuperarlo cuando el
Gobierno lo capturó y declaró buena presa.

Posesionados del "Washington" los revolucionarios al mando del


Comandante Marcos navegaron hasta la altura de la ciudad de Guayaquil,
en cuya ría se encontraba fondeado el e. " " ideo ,.a-.'
'Linar por abordaje a dicho buqu en la noche del mismo día 31 de mayo.

De acuerdo a un informe enviado al Gobernador de la Provincia del Guayas


los acontecimientos fueron narrados así: "Una partida de piratas capitaneados
por José Marcos y Juan Heredia (Capitanes de Fragata), asaltó el vapor de
guerra "Guayas" a las once y media de la noche, embarcada en el mercante
"Washington" que hacía la carrera de esta ciudad a la de Babahoyo, de acuerdo
con su Capitán Game, el mismo que el año pasado traicionó con el vapor

Comandante José Marcos Tejada. Lideró la toma de los vapores "Washington"


y "Guayas" en favor de la revolución urbinista.
276 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Bolívar", entregándolo a los facciosos que hicieron la revolución en Machala.

"La sorpresa la dieron apegándose al vapor "Guayas", con el pretexto de


que el "Washington" estaba a punto de perderse y que a bordo traían a S.E. el
Presidente de la República, con cuya noticia la tripulación y guarnición del
buque de guerra se contrajo mas bien a querer salvar al vapor que atender a
su propio buque, cuando aprovechando este descuido o confusión, se lanzaron
sobre él los bandidos, y haciendo varios tiros de revólver sobre la gente que
estaba desprevenida, tomaron el buque, asesinando a su Comandante y
sacaron inmediatamente del río a remolque al 'Washington".

"A la fecha se sabe que el "Guayas" ha pasado en derechura a Paita, sin


duda para recoger a los emigrados que se encuentran en Túmbez y ese punto,
y lanzar una expedición bien sea sobre la costa oriental o esta ciudad, y que
el segundo se halla dominando el río de la parte de afuera haciendo la travesía
a Puná y a la costa de Balao, asaltando las embarcaciones menores a las que
les han quitado las velas de navegar, por cuya razón ha caído también en
poder de ellos el correo, que salió de esta ciudad (Guayaquil) el 3 del presente,
con dirección a esa..." (424)

El Subteniente Gaspar Alamiro Plaza, posteriormente Coronel de la


República, testigo presencial de la mayor parte de la campaña revolucionari
de aquel año, nos dice: "El Comandante José Marcos Tejad
del citado 's-rá-01—"Girayas", con los pocos
inco7n7ágrinan, e intimó rendirse a los tripulante Al oir es o e je e s e vapor
"Guayas", Comandante Diego Eugenio Matos, ordenó a sus subordinados
hacer fuego a los asaltantes, quienes sin detenerse coparon al "Guayas",
teniendo que lamentar la muerte de dicho Comandante, con lo que lograron
rendir la tripulación, pasando a formar parte de la huestes patriotas la
tripulación vencida.

"Los valerosos patriotas tomaron en cuenta que los Generales José María
Urbina, Guillermo Franco y Francisco Robles, venían en el vapor "Bernardino",
resolvieron levar ancla y dirigirse a las costas de Santa Rosa y del Perú con
el objeto de encontrar dicha nave, y efectivamente se encontraron los tres
vapores en el histórico Jambelí, cerca de Santa Rosa, donde anclaron, dándole
el mando de la flota de guerra al señor General don Francisco Robles. En
unión del Comandante José Marcos Tejada y don Francisco Modesto Game y
de los Capitanes de Fragata doii José Robles y don Domingo Lamota y del
señor Coronel (Capitán de Navío) José María Vallejo con su hijo don Ventura
Vallejo, este último Mecánico; unos pocos patriotas tripulaban los ya citados
improvisados vapores de guerra". (425)

El saldo trágico de la toma del "Guayas" fue la lamentable muerte del


Capitán de Fragata Diego Eugenio Matos, Comandante del buque, y del
cocinero de abordo. El 5 de junio de 1865 el Coronel Secundino Darquea daba
parte de este hecho al Ministro de Guerra y Marina en los siguientes términos:
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 277

1 "Sensible me es participar a US. que en el asalto que dieron los revoltosos al


vapor de guerra "Guayas" la noche del 31 del pasado, han asesinado al Capitán
de Fragata Diego Eugenio Matos, Comandante de dicho buque, y el cadáver
lo han saltado en la Puná, cuyo párroco ha mandado dar sepultura ".(426) El
Ministro Manuel de Ascásubi le contesta el día 12 que aquel asesinato ha
sido comunicado al Supremo Gobierno, es decir García Moreno fue puesto al
tanto del suceso. (427)

El resto de oficiales que se encontraban a bordo del "Guayas", cuando


fueron sorprendidos por los revolucionarios, fueron tomados prisioneros, y
según algunos informes recibieron maltratos. Eran ellos los Tenientes de
Fragata César Guedes y Manuel Silva, el Alférez de Fragata Ricardo Darquea
y el Guardia Marina Diego Matos. (428) Vale hacer notar que Manuel Silva
consta a la fecha como ascendido a Teniente de Fragata, a solo cuatro meses
de ser reconocido como Alférez de Navío.

Tres días después de la toma del "Guayas" se dispone a otro de los oficiales
del buque, que se quedó sin colocación, comande el vapor "Smyrk", el que por
las circunstancias fue armado en guerra. Dicho oficial no estuvo abordo cuando
aconteció aquel suceso. Se lo hace con el siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Comandancia General del Distrito.- Guayaquil


a 3 de junio de 1865.- Al Sr. Alférez de Navío Diego Sánchez".

"Debiendo ocuparse en las actuales circunstancias el vapor "Smyrk" en


servicios del Gobierno, y hallándose Ud. en la actualidad sin colocación por
no existir el "Guayas", al que pertenecía, he tenido a bien nombrar a Ud.
Comandante de dicho vapor, a fin de que tome el mando de él, durante el
tiempo que corra de cuenta de la Nación.- Dios guarde a Ud.- (f) S. Darquea.
(429)

En conocimiento de la toma del vapor "Washington" el Sr. Mateo Palmer


Game, Presidente de la compañía propietaria del bajel, procedió al siguiente
día del suceso, es decir el lo. de junio, a zarpar en un bote abierto, dirigiéndose
río abajo para exigir la devolución del buque, y según sus declaraciones, llegó
bastante cerca de éste para ser reconocido de abordo, llamó y el vapor con
toda la fuerza de su máquina viró y siguió río abajo, impidiendo que él pudiera
abordarlo, a pesar de los esfuerzos para hacerlo así.

Ante aquello el Sr. Mateo P. Game compareció ante el Cónsul de los Estados
Unidos de Norteamérica en Guayaquil, el día 7 de junio, por ser ciudadano
de ese país, y presentó su protesta contra toda persona o personas a quienes
concierna, sea directa o indirectamente el ultraje hecho a su compañía al
tomar a la fuerza el vapor contra su voluntad y consentimiento. Que todas
las pérdidas, daños, costos, cargos, gastos, detrimentos que se hallan sucedido
o puedan suceder a dicho vapor "Washington", a su cargamento o pasajeros,
por efecto del referido ultraje, serán y deben ser soportados por aquellos a
278 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

quienes en derecho corresponda. Transformándose aquello en una protesta


diplomática cuando el Cónsul L.V. Prévost se dirigió a las autoridades
ecuatorianas para transmitir la misma con el carácter de instrumento público.
(430)

Por su parte el Cónsul peruano, Sr. José Plácido Roldán, ante la petición
del Gobernador de la Provincia del Guayas, ofició al Prefecto de Piura,
informándole, el lo. de junio, de los acontecimientos ocurridos en la ría de la
ciudad de Guayaquil el día 31, con los vapores "Washington" y "Guayas", y
de la posibilidad de que estos se dirijan a los puertos de Túmbez y Paita, a fin
de que con conocimiento de los hechos, pueda dictar sobre ellos las medidas
que el derecho internacional prescribe, e impida que los emigrados
ecuatorianos ejerzan hostilidades contra el litoral de nuestra República. (431)

El 4 de junio Juan Arias, comandante del Batallón Marina, da noticias de


las posiciones de los vapores "Guayas" y "Washington" con el siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Comandancia del Batallón Marina.- Morro, a 4


de junio de 1865.- Al Sr. Comandante General del Distrito.

"En esta fecha, se acaba de recibir, no de un modo verosímil, que el vapor


"Guayas" ha sido asaltado en esa ría por una partida de hombres armados; y
en esta misma fecha se ha informado a esta Comandancia, que el referido
vapor se encuentra anclado un poco más abajo de Puná-Vieja, y que el vapor
"Washington" está fondeado frente a Mondragón después de haber quitado a
varias embarcaciones sus marineros y velas, dejándolas solo con los pilotos.

"Deseando esta Comandancia saber el motivo de la toma de aquel buque,


y el movimiento político del gobierno constituido de la Nación, porque no
sabemos nada con evidencia, y está este pueblo lamentando tan fatal
acontecimiento, para ponerse en guardia.

"Todo lo arriba relacionado, me ha puesto en el deber de dirigirme a US.,


comunicándole que desde esta misma fecha, se ha dictado la medida de no
permitir la salida de ninguna embarcación de estos puertos, a fin de que no
corran la misma suerte que las que han sido tomadas anteriormente.- Dios
guarde a US.-(f) Juan Arias". (432)
En conocimiento de los últimos sucesos don A. Barreiro, Gobernador de la
Provincia de Los Ríos, se puso sobre las armas con la compañía que tenía
acuartelada en Babahoyo y con los voluntarios que pudo reunir. Además dio
órdenes a todos los cantones de la provincia y al Coronel Flores, que reúnan
los regimientos, y para que se envíe a Babahoyo la fuerza que se vaya
formando.(433)

El 2 de junio le dice al Comandante General del Distrito, que en ese mismo


día tendrá armado un cuerpo respetable para reforzar la guarnición de
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 279

Guayaquil, pero le pide que le envíe elementos de guerra para armar el cuerpo
de reserva, que aquél le previene la forme. (434)

A pesar de que el Coronel Secundino Darquea, Comandante General del


Distrito de Guayaquil, comunicaba que de acuerdo a informes dados por
tripulantes de algunas embarcaciones menores, el vapor "Guayas" pasó en
derechura a Paita tan luego como fue capturado por los "piratas", y que el
"Washington" se encontraba cruzando de la Puná a las costas de Balao
"asaltando las embarcaciones menores quitándoles hasta las velas, y
transbordando al vapor los cholos que navegan en ellas para aparentar que
tienen fuerza a bordo, y saltando en tierra para robar ganado, como lo han
hecho en la Puná con el objeto de proveerse de recursos". (435) Lo cierto es
que el "Guayas" no avanzó hasta Paita, sino que se quedó en la ensenada de
Montera, pues "ese vapor no avanzaba nada contra el viento y no era el caso
de que gastaran todo el carbón de que disponían". Y según Camilo Destruge,
de allí escribieron al General Urbina, invitándole a reunirse con ellos, cuanto
antes, a fin de operar sobre Jambelí lo más pronto, pues las autoridades de
Túmbez amenazaban desarmar la expedición que se organizaba. (436)
El General Urbina envió adelante al coronel Pedro Camposano, mientras
terminaba él ciertos arreglos para la misma expedición. Le despachó, pues,
de Paita, el 5 de junio, dándole las siguientes instrucciones:

lo. Su mando, hasta mi llegada, lo ejercerá sobre las fuerzas de tierra; y ,


en cuanto al de las navales, inclusive los movimientos de los buques que
pudieran ocurrirse, y no estar señalados en las presentes instrucciones y en
las que, con esta misma fecha, se comunican al comandante de las fuerzas
navales obrará de acuerdo con éste.

2o. De conformidad con lo que se previene a dicho Sr. Comandante de la


Escuadrilla, hará que, inmediatamente que se hayan recibido y transbordado
al vapor "Guayas" las armas, municiones y víveres que conduce el bergantín
"Nueve de Octubre", salga el vapor de Mancora y, sin extravío ni demora de
ningún género, siga su marcha hasta ponerse a la vista de Guayaquil, debiendo
llevar en convoy al 'Washington", desde el punto de la ría en donde encontraren
á este. Si se creyere conveniente, podrá dejarse al "Washington" en el fondeadero
de Sono, o traerlo a este fondeadero, al regresar, luego que se hayan dejado
ver los dos vapores frente a Guayaquil.

3o. Recoger las gentes que se presenten en Sono y en la costa de la Josefina;


y, regimentándola y disciplinándola cuanto sea posible, será ésta la obra a
que el Sr. Coronel Camposano deberá consagrarse con vivo esmero.
4o. En cartas particulares a su nombre o de oficio en el mío, podrá y deberá
dirigirse a los patriotas que conoce, de los pueblos de Naranjal, Taura,
Yaguachi y Milagro, exigiéndoles el llamamiento de los hombres a las armas,
la venida de estos a Sono, la remisión de ganado en el número preciso, y el
280 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

cumplimiento de cuanto en la carta que condujo el Comandante Heredia para


los amigos de Taura.

5o. Por el conducto y medios que sean más seguros, pondrá en conocimiento
de los patriotas de Guayaquil que se hallan en relación con nosotros, que yo
estaré en la Josefina del 7 al 8 (Agosto), con las fuerzas de Machala y Santa
Rosa, y les pedirá la remisión de recursos pecuniarios.

6o. Como el pueblo de Taura no ofrece desconfianza de ningún género,


tampoco debe tenerla al prevenir que, a mi llegada, debo encontrar reunidos y
disponibles los cien caballos con sus respectivas monturas, que fueron pedidos
en las cartas aludidas.

7o. Si, lo que no es de suponer, Taura hubiese sido ocupado por fuerzas de
los traidores a la patria, las operaciones se limitarán, mientras yo llegue, a
mantenerse en el río, de conformidad con lo que, para este caso, se indica en
las instrucciones que se dictan al Jefe de la Escuadrilla con quien obrará de
acuerdo en los casos imprevistos.

80. Si se presentare cualquier Agente Consular o el Sr. Game o cualquier


otro, a nombre y con notas de aquellos, ya sea pidiendo la devolución del
"Washington", ya con cualquiera otra gestión semejante, se limitará a
permitirles el pase a mi cuartel general, siempre que fuese después del 8; y a
contestar que se dirigen a mí, para dar lugar a que yo llegue.- Paita, junio 5
de 1865.- J. M. Urbina". (437)

El 7 de junio dice el Coronel Darquea: "Por lo demás el gobierno debe


confiar en que sabré mantener el orden a todo trance, aunque sea con pequeña
fuerza que guarnece esta plaza, y que rechazaré cualquier invasión que lancen
los revoltosos; para cuyo fin he organizado un cuerpo de milicias constantes
de doscientas plazas, acuartelando el batallón "Guayas" y aumentándolo con
nueve hombres que han venido de Milagro, cuarenta y siete de Babahoyo y
veinte y nueve de Daule, y he puesto listas para hacer fuego en el acto que
sea necesario las baterías de Saraguro, la Planchada, el Telégrafo, los cañones
del malecón y los reductos de la Sabana". (438)

Es el mismo Darquea quien dice que el día 8 navegaron los vapores


"Guayas" y "Washington" hasta Punta Gorda, distante tres millas de
Guayaquil y que regresaron con la marea sin hacer amago alguno que
demuestre tener miras de efectuar algún ataque. (439)

Seguidamente dicha autoridad manifiesta textualmente: "Según se cree,


el objeto con que hacen su excursión por el río, es por si consiguen algún
pronunciamiento de los pueblos; pero aseguro a US. H. (el Ministro de Guerra
y Marina) que las esperanzas de los revoltosos quedarán burladas porque se
han tomado las medidas necesarias para evitarlos, y aún para que carezcan
de todo recurso en caso de que salten en tierra por la parte del sur del río, que
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 281

es la única que dominan, con cuyo objeto se ha mandado a retirar del pueblo
de Taura y sus inmediaciones todo el ganado que haya, y venir a esta plaza
por tierra la guardia nacional de ese pueblo con los caballos que se encuentren.

"Igual medida se ha prevenido que tomen las autoridades de los demás


pueblos de la Costa; así es que dentro de pocos días tocarán con la
desesperación al no poder proporcionarse los víveres y recursos necesarios
para su mantenimiento. Hasta hoy (9 de junio) que son las tres de la tarde,
no hace señal alguna el telégrafo anunciando la aparición de los buques; de
manera que no se sabe el paradero de ellos". (440)

El día sábado 10 de junio los marineros del vapor "Washington" Pablo


Domínguez y Santiago de la Cruz, desertaron y fugaron del bajel mientras se
encontraba fondeado en el puerto de Puná Vieja, y llegaron al Morro, en
donde se presentaron ante Juan Arias, Comandante del Batallón de la Guardia
Nacional de Marina, ante quien declararon que el día ocho fueron de boga en
un bote a la Puná, que allí supieron que el martes 6 subió el vapor "Guayas"
con dirección a Guayaquil, y que el miércoles volvió a bajar hasta la altura de
la boca de Jambelí y que de allí volvió a arribar al puerto de la Puná,
averiguando si habían visto pasar al vapor "Washington" para abajo o si
sabían que se hubiera vuelto para Guayaquil o lo hubieran tomado prisionero,
que mientras hacían todas estas correrías el vapor "Washington" se mantenía
en el estero de Puná Vieja, por cuya razón no se había reunido hasta el día
diez. (441)

También informaron a dicho Comandante que han conocido abordo a los


individuos de la tripulación e insurgentes y le entregaron una lista de aquellos,
la que fue remitida al Gobernador de la Provincia del Guayas. Declararon,
además, que diariamente se quiere dar de puñaladas, insultándose unos a
otros, y la mayor parte se creen engañados, pues hasta ahora no asoma
ninguna revolución en Guayaquil a su favor, por lo cual se ven enteramente
desgraciados. (442)

Cada vez que entran en altercados -continúan- el Capitán de Fragata Juan


Heredia los llama al orden, haciéndoles mil promesas y ofreciéndoles que
solo aguardan la Armada que viene de Paita para dirigirse a la ciudad de
Guayaquil, que en el acto habrá un pronunciamiento general y entrarán sin
dar un solo tiro. (443)

Todo lo declarado fue informado a las autoridades de la ciudad de Guayaquil


para que se tomen las precauciones del caso.

El estado en que se hallaba la República impactó en muchos sectores, tal


es que al ser despachada por el ayudante de la Capitanía del Puerto de
282 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Guayaquil, Teniente de Fragata Francisco Mora, la embarcación que conducía


los víveres para los empleados del faro de la Isla Santa Clara, no los
encontraron, pues habían abandonado sus puestos de trabajo, por lo que el
bote tuvo que regresar con su carga. El piloto de la misma informó la novedad
a la autoridad portuaria, quien solicitó al Gobernador que como los víveres
son comprados por cuenta del Gobierno, y parte de ellos se han perdido, se
reciba solo los sobrantes, con fines de descargo ante el Tesorero de la Provincia.
(444)

Había preocupación en las autoridades de gobierno para proteger el


comercio marítimo, y al no contar la Nación con buque de guerra alguno en la
actualidad, se ofició a los diferentes cónsules acreditados en Guayaquil, para
que hagan trascendental a los buques de guerra de las respectivas naciones,
con estación en el Pacífico, la protección del comercio exterior, en particular
de los buques de bandera extranjera que entran a los puertos ecuatorianos.

Algunos buques mercantes surtos en Guayaquil fueron impedidos de


zarpar, para evitar que ayuden a los revolucionarios embarcados en los
vapores "Guayas" y "Washington", o en su defecto para que estos no abusen
o se aprovechen de los mismos con el fin de aprovisionarse.

Las disposiciones emanadas para tal fin, provocaron el reclamo de los


capitanes de las naves extranjeras por intermedio de sus respectivos cónsules.

Es así que el 14 de junio protesta don José Plácido Roldán, Cónsul del
Perú, con una comunicación dirigida al Gobernador de la Provincia del Guayas,
que en parte dice: "Desde el 10 del corriente, está detenida en la ría de este
puerto, la barca de mi nación, "Sol de Lima", sin poder hacerse a la vela,
habiéndose negado a su consignatario la licencia de salida, después de corridas
las diligencias de estilo y cerrado su registro, conforme al decreto de la
Gobernación, fechado el día anterior.

"Igual detención están sufriendo, cargados de fruta, los pailebots peruanos


"Margarita de Paita" y "San Jacinto"; y también listos a tomar carga otras
dos embarcaciones del Perú, que son el buque "San Nicolás" y la balandra
"Jorge Juan".

"Como aquella disposición la considero muy transitoria, en razón de las


circunstancias en que se encuentra esta plaza, he hecho esperar, día por día,
a sus capitanes, que se les franquease el permiso que habían pedido. Mas,
siguiéndole, en su demora, grandes perjuicios, según me lo han manifestado,
y hasta la salud del Capitán de la "Sol de Lima", se me hace ya indispensable
dirigirme a S. Sa., para que se digne permitir la salida del puerto a las
embarcaciones expresadas..."

Dos días después Mr. J. E. Harman, Cónsul de S. M. Británica, pone en


conocimiento del mismo Gobernador que el Capitán de la goleta inglesa
~111•11.
11110 /~tr"'"15"9"i

COMBATE NAVAL DE JAMBELI 283

"Eduardo", notificó a su consulado, que estando listo su buque para zarpar,


las autoridades competentes le negaron la licencia correspondiente, por lo
que dicho Capitán ha presentado una protesta en su consulado, para salvar
su responsabilidad y perjuicios.
Mr. Harman manifiesta que este acto es en contravención de los tratados
xistentes entre esta Nación y Gran Bretaña, y que por consiguiente lo
comunicó al Ministro en Quito para que dé las instrucciones del caso.
En fin, el comercio exterior está detenido, a causa del conflicto interno, lo
que indudablemente podría provocar desconfianza en los importadores y
exportadores, con la consecuente recesión de nuestra economía.

El 16 de junio el Coronel Secundino Darquea dirige al Ministro de Guerra


y Marina, Coronel Manuel de Ascásubi, su oficio No.237 en el que le informa
que nada de particular ha ocurrido en la plaza de Guayaquil, a pesar de que
los "buques piratas" -refiriéndose a los vapores "Guayas" y "Washington"- se
hallan fondeados en la boca de Santay, y que estos se encuentran sin hacer
movimiento alguno, ni poder efectuar un desembarco por carecer de tropas.
(445)
El Ministro le sugiere, no obstante la impotencia en que se encuentran los
piratas, no cese la vigilancia, la actividad en disciplinar los cuerpos y de que
el servicio de campaña se haga con el rigor que previene las ordenanzas; así
como de que se les haya suministrado el armamento, vestuario y equipo
necesario para maniobrar en un caso dado, persuadiéndose que "los bandidos"
no osaran un desembarque, puesto que no han encontrado prosélitos que
secunden sus miras de devastación. (446)
Tres días después dice Darquea a la misma autoridad: "El 17 por la tarde
levaron anclas y desaparecieron del río, infiriéndose que este movimiento lo
han hecho para trasladarse a Jambelí, sin duda con el objeto de atacar a
Machala y Santa Rosa o de desembarcar en la costa de Manabí". (447) Dice
Camilo Destruge, al respecto, que había llegado el momento de que así lo
hicieran, toda vez que la expedición terrestre se aproximaba a Machala. (448)
Siguiéndole el rastro a los vapores; Juan Arias informa desde el Morro,
que había arribado a ese puerto José María Jiménez, en su embarcación
procedente del de Balao, quien aseguraba que el día domingo 18 de junio
anclaron en el puerto de Puná la fragata "Apurinac" y un vapor, pertenecientes
a la escuadra peruana, y que también vio que los vapores "Guayas" y
"Washington" estaban fondeados entre la boca de Balao y la de Baba, muy
cerca de la costa.(449)
284 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Dice don Camilo Destruge que: "Los Generales Urbina y Robles llegaron
con las fuerzas expedicionarias en el vapor "Bernardino" cuya devolución
había conseguido el primero.

"Una vez en Jambelí, Urbina distribuyó la mitad de sus fuerzas entre el


"Bernardino" y el "Guayas"; embarcó la otra mitad en el "Washington", y
partió con ella hacia Zarumilla, para operar por tierra sobre Santa Rosa,
cuya plaza estaba defendida por fuerzas veteranas al mando del Teniente
Coronel Celestino Lara.

"Siguiendo de Zarumilla adelante, encontró en Popayal al Coronel José


María Erigoyen, quien había salido de Túmbez, con treinta o cuarenta
hombres, burlando la vigilancia de las autoridades.

"Las fuerzas disponibles allí reunidas, las dividió Urbina en dos columnas;
designó para primer, segundo y tercer jefe de una, a los coroneles José María
Cornejo y José Sotomayor y Nadal y al Comandante Antonio Suárez; y de
primer y segundo jefe de la otra a los comandantes Lautaro Lamota y Luis
Medina (asimilado). Iban también entre los expedicionarios los coroneles Pedro
Camposano, Juan Antonio Robinson, Pedro Jaramillo y Ramón Cornejo; los
comandantes Julio Lavayen, Rafael Real, Gregorio Rodríguez, Pablo Chica
Cortázar, Pedro Ruiz y José Villao, así como muchos oficiales; todos los que
formaron una columna: Un pequeño piquete de caballería, lo mandaba el
Comandante Juan Manuel Campuzano.

"El 17 de junio tenía aviso la autoridad política de Machala, de haber


llegado los expedicionarios al punto llamado "Potrero", y se apresuró a
comunicar el suceso a Guayaquil; y dictó las medidas de resistencia.

"Al aproximarse a Santa Rosa, el General Urbina envió a intimar la


rendición; pero el parlamentario, que lo era el Comandante Lavayen, fue
recibido a tiros; y, en vista de tal felonía, se dispuso el ataque.

"No sumaban doscientos hombres los expedicionarios, y los defensores de


la plaza pasaban de trescientos. Atacaron las fuerzas de Urbina, con ímpetu
por dos puntos; los recibieron los del gobierno a pie firme; se empeñó una
lucha muy bien sostenida por ambas partes; se luchaba a brazo partido; y al
cabo de una hora, el heroísmo de las fuerzas liberales era premiada con el
más completo triunfo. Lautaro Lamota se distinguió por su brillante
comportamiento, y como él los comandantes Cornejo, Cortéz y Jaramillo, que
resultaron heridos.

"Ocupada la plaza de Santa Rosa por el general Urbina, se le reunió allí el


General Guillermo Franco, quien fue despachado con cien hombres sobre
Machala, cuya población ocupó casi sin resistencia".(450)

Por su lado el Coronel Gaspar Alamiro Plaza, en su relato de la Revolución


COMBATE NAVAL DE JAMBELI 285

Urbinista de 1865 nos dice: "El veintitrés de junio de mil ochocientos sesenta
y cinco se unieron en el caserío de Gualtaco a los patriotas revolucionarios,
comandados por los generales Urbina y Franco, los jóvenes subtenientes
Gaspar Alamiro Plaza, Julián Indaburu Bodero, Juan Francisco Mariscal y
Enrique Larroque, coincidiendo que ese mismo día, se incorporaron a la
revolución los valientes y denodados jefes Coronel José María Cornejo,
tenientes coroneles Ramón Cornejo, Pedro Jaramillo, Lautaro Lamota, Julio
Lavayen, Miguel Saona, sargentos mayores N. Sinchez y N. Aguilar y unos
ciento noventa entre jefes, oficiales y muy pocos soldados que vinieron de
Túmbez, acampando en Chacras y terminando su marcha en Gualtaco". (451)

Cabe indicar que el joven Plaza había sido llamado a las filas del Ejército
Constitucional, aunque él decidió después cambiarse al bando revolucionario.
Con una comunicación del Comandante General del Distrito de Guayaquil
del 26 de mayo de 1865 se da noticia al respecto: "El que se suscribe, hubo a
bien, con fecha 24 del actual llamar al servicio activo de las armas al
Subteniente Gaspar Alamiro Plaza, que se hallaba sin colocación en el Ejército,
destinándole al Batallón No. 3 para que llene una de las vacantes de su clase".
(452)

62 años después de esta revolución urbinista, es decir en 1927, siendo


coronel retirado, escribió sobre dichos acontecimientos y los entregó como
memorias tardías al Director de la Biblioteca Municipal de Guayaquil, don
Modesto Chávez Franco, la que tituló "Relación histórica y política del
movimiento llevado a cabo en la noche del 31 de mayo de 1865, frente a la
ciudad de Guayaquil". A pesar del título, sus escritos abarcan todo el conflicto,
y con la garantía de ser protagonista, por haber actuado personalmente en
esa acción de armas.

ARRIBO DE GARCIA MORENO A GUAYAQUIL

En cuanto el presidente Gabriel García Moreno, que se encontraba en


Chillo, recibió las primeras noticias de lo sucedido en el río Guayas, de parte
de su hermano Miguel, Gobernador de la Provincia, se apresuró a emitir tres
decretos ejecutivos, los que fueron remitidos con circulares del 6 de junio,
marcados con los números 7, 8 y 9; declarando, en el uno, piratas a los que
cometieron el atentado de asaltar, en el río Guayas, al vapor de guerra
"Guayas", y así se lo comunicó a los países amigos; en el otro declarando al
Ejército en campaña; y en el último, encargando el ejercicio del Poder Ejecutivo
a S.E. el Vicepresidente de la República, por tener que trasladarse a Guayaquil
para dirigir las acciones bélicas, con el fin de someter a los revolucionarios
urbinistas. (453)

El primer decreto, emitido por el Dr. Gabriel García Moreno desde la


capital, reza lo que sigue:
286 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Gabriel García Moreno, Presidente de la República

Considerando,

"lo. Que en la noche del 31 de mayo al lo. del corriente, cincuenta


salteadores embarcados en el vapor mercante "Washington" abordaron y
tomaron por sorpresa al vapor nacional de guerra "Guayas", asesinando la
guarnición.

"2o. Que semejante atentado a más de dirigirse a la subordinación del


orden y de las instituciones existentes, constituyen conforme a la legislación
patria, un verdadero acto de piratería.

"3o. Que la primera condición de la existencia de toda sociedad humana


es la represión pronta y eficaz del crimen.

DECRETO

"Art. lo. Son piratas los asaltantes y detentadores del vapor mercante
"Washington" y del vapor de guerra "Guayas", y en consecuencia pueden ser
perseguidos y tomados por todo buque de guerra extranjero en las aguas
nacionales.

Miguel García Moreno, hermano del Presidente y Gobernador de la


Provincia del Guayas en 1865, año de acontecimientos revolucionarios.
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 287

"Art. 2o. Los piratas serán juzgados en consejo de guerra verbal y se les
impondrá la pena señalada en el código penal, exceptuando los que
arrepentidos de su crimen, invoquen espontáneamente la generosidad del
Gobierno.

"Art. 3o. Los que intenten en cualquier punto de la República favorecer


con trastornos las miras anárquicas de los piratas, serán igualmente juzgados
en consejo de guerra y castigados con la pena capital, siempre que figuren
como caudillos, jefes u oficiales de sus partidarios. Se exceptúan del mismo
modo los que voluntariamente invoquen la clemencia del gobierno,
abandonando las filas de los bandidos.

"Art. 4o. El Ministro de Guerra y autoridades y jefes del Ejército y de la


Guardia Nacional quedan especialmene encargados de la ejecución de este
decreto.- Dado en Quito, a 6 de junio de 1865.- G. García Moreno.

"El Min. de Guerra y Marina, Manuel de Ascásubi".

El mismo día emitió el decreto entregando el poder ejecutivo al


Vicepresidente Rafael Carvajal, y es en realidad este último quien dictó el
decreto declarando el Ejército en campaña, como se demuestra a continuación:

Rafael Carvajal, Vicepresidente de la República encargado del


poder ejecutivo.

Considerando:

"Que la paz de la República se halla seriamente amenazada por el atentado


que ha tenido lugar en la ría de Guayaquil en la noche del 31 de mayo último
y siendo deber del gobierno tomar las medidas necesarias para conservar el
orden,

Decreto:

"Art. lo. Se declara el Ejército en campaña y el Excmo. Sr. Dr. Gabriel


García Moreno a quien el Ejecutivo ha tenido a bien encargar el mando del
Ejército, ordenará que los cuerpos que lo componen, hagan el servicio según
se previene en el Art. 7o. de las ordenanzas generales del ramo.

"Art. 2o. Los reos de delitos de deserción, serán juzgados en juicio verbal
con arreglo a las disposiciones del decreto legislativo del 28 de abril del año
anterior.

"Art. 3o. El Ministro Secretario de Estado en el Despacho de Guerra y


Marina queda encargado de la ejecución de este decreto.

"Dado en Quito, a 6 de junio de 1895.

F) R. Carvajal
288 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

El Ministro de Guerra y Marina, Manuel de Ascásubi".

Según Ricardo Pattee, García Moreno se encontraba enfermo. (454) Pero


Camilo Destruge manifiesta que salió de Quito, sin dejar que trasluciera lo
sucedido, pues en el decreto encargando el poder ejecutivo se alegaba que lo
hacía para trasladarse a Guayaquil por la necesidad de reparar su salud en
dicho puerto. (455)

Lo cierto es que el Presidente salió inmediatamente de la ciudad de Quito,


y con la fortaleza y presteza que lo caracterizaba marchó hacia Guayaquil. El
recorrido de las muchas leguas de camino áspero y accidentado entre la sierra
y la costa lo hizo con velocidad increíble, que en dos días y medio ya se
encontraba en Babahoyo.

En lo que respecta a su energía y valor, uno de sus biógrafos dice sin


exagerar:

"De una constitución de hierro, dice, recorría cuarenta o cincuenta leguas


de caminos, horribles, en veinticuatro horas sin cansarse y si el caballo moría
él andaba a pie aún diez leguas más. Llegaba a su casa, descansaba una
hora, y quedaba en aptitud de emprender en otra expedición igual.- Era
valiente hasta la temeridad; arrastraba las balas como los peligros de
cualquier género. Todo lo que era extraordinario, tenía para él un atractivo
irresistible. Bajaba el cráter de un volcán, con la mayor tranquilidad; y, sin
turbarse en modo alguno, ponía los pies sobre un abismo.- Su frugalidad fue
muy conocida. Resistía el hambre y la sed durante horas y aún días; comía lo
que podía; sucediendo que, durante un viaje de Quito a Guayaquil se alimentó
solo de pan que llevaba consigo, y este pan lo comía al galope de su caballo.-
Dormía muy poco, y muchas veces para vencer el sueño, metía los pies en el
agua helada... resistía a todo: al tiempo a la lluvia, al huracán, al torrente, al
abismo ... Nada temía; y, como dice Mr. Hanssaurck, era indudablemente el
hombre mas valiente del Ecuador, y probablemente de la América española,
y siempre dispuesto al sacrificio de su vida". (456)

En Babahoyo lo esperaba el vapor "Smyrk", en el que se embarcó sobre la


llegada, y ya el día 9 de junio por la mañana desembarcaba en Guayaquil,
como podemos apreciar en el siguiente oficio, que el Coronel Secundino
Darquea dirige el 9 de junio de 1865 al Coronel Pablo Julián Franco, Jefe
Político del Cantón Daule.

"En este momento que son las ocho de la mañana (del día 9), acaba de
llegar (a Guayaquil) el vapor "Smyrk" trayendo a su bordo a S.E. el Presidente
de la República, quien dispone que haga US. tomar a todos los individuos
sospechosos que existan en ese cantón, y los remita a esta plaza con la
seguridad debida". (457)

Al respecto de aquel viaje el historiador don Manuel Gálvez nos dice lo


COMBATE NAVAL DE JAMBELI 289

* siguiente: "García Moreno se encuentra en Chillo, enfermo del hígado , al


recibir las noticias de estos sucesos, salta del lecho, redacta varios decretos y
el 6 de junio monta a caballo. Le acompaña su ayudante. Y hace tres días
cabalgando bajo la lluvia y el sol y aún de noche, los trescientos kilómetros
que le separan de Guayaquil". (458)

Una vez en esta ciudad, se puso al corriente de la situación y procedió en


el acto a tomar medidas y dictar disposiciones con la prontitud que le era
peculiar. Los urbinistas dominan en el Consejo Provincial, desde donde
preparan el apoyo a la revolución, mas cuando saben de la llegada de García
Moreno los consejeros se dispersan, y por lo menos queda claro que brotes
insurgentes en Guayaquil no habrán. Además procedió a conseguir dinero y
lo obtuvo del Consejo Provincial del Guayas, de amigos, parientes y
comerciantes.

El 10 de junio el Presidente promulga otros tres decretos: El que reconoce


el estado de guerra; el que nombra a él "Jefe del Ejército en Campaña"; y el
que declara "pirática" la invasión. Sofoca dos motines en lugares próximos a
la ciudad. Precisamente el 11 de junio el Coronel Darquea, dice al Jefe Político
del Cantón Daule, que "habiéndose sabido que en la parroquia de
Samborondón existen unos 40 revoltosos, de aquellos que formaron su motín
la noche del 9 de junio; dispone S. E. el Presidente de la República que US.
acuartele inmediatamente una columna de 60 a 80 hombres para obrar sobre
ellos, según la combinación que se formará al efecto y que será comunicada a
US.; advirtiéndole que la tropa destinada a este objeto debe ser de la mayor
confianza de US., que mientras se emprenda en las operaciones tenga mucha
vigilancia para evitar una sorpresa". (459)

En los días siguientes, el presidente García Moreno permaneció impotente


a sabiendas de que los vapores adversarios, armados en guerra, tenían libertad
de movimiento por carecer el gobierno de buques de guerra que se les oponga,
e incluso, como hemos dicho, el "Guayas" y el "Washington" se acercaron a la
ciudad de Guayaquil hasta una distancia de tres millas del puerto.
Posteriormente estos bajeles fondearon en la boca de Santay, en donde
permanecieron hasta el 17 de junio.

Al respecto, el día 14 escribe el Dr. García Moreno a su amigo, doctor


Felipe Sarrade, lo siguiente: "Gozamos aquí de tranquilidad y orden, a pesar
de que están a dos leguas abajo los dos vapores piratas y el "Bernardino" que
se les unió ayer con el valiente Urbina. El "Washington" no está armado; el
"Bernardino" es semejante a un sifilítico que se deshace; no tienen allí sino el
"Guayas"; y por los inforitnes del capitán del vapor inglés "Paita", la fuerza
total no llega a doscientos hombres. Aunque tuvieran el triple, la intentona
no puede ser más ridícula; se conoce que Urbina ha venido esperando
traiciones y movimientos interiores; pero Dios mediante se llevarán un chasco.
Una montonera que se apoderó de Samborondón indefenso, fue corrida y
dispersada ayer, de modo que de aquí a Bodegas el río está expedito". (460)
290 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

García Moreno fue muy hábil en su actuación, pues se adelantó para


impedir el que se produzcan los movimientos interiores, que lo hubieran
derrocado indefectiblemente. Precisamente la debilidad de Urbina residió en
la falta de esos apoyos, producto de la operación de limpieza ejecutada por
las tropas de gobierno, especialmente en la Provincia del Guayas.

En ello se halla empeñado, y el 17 de junio dispone el Coronel Darquea al


Teniente Coronel José Dionisio Ronquillo lo siguiente: "Al regreso del vapor
"Smyrk" que sale hoy de este puerto con dirección a Babahoyo, se vendrá US.
a esta plaza para que pase inmediatamente a hacerse cargo de la Comandancia
Militar del Cantón Daule y levantar toda la fuerza que le sea posible; bien
sea para atender a esta plaza (Guayaquil) o proteger a la provincia de Manabí"
(461)

El que los vapores urbinistas hallan zarpado el día 17, desapareciendo del
río, preocupó a García Moreno, y se empeñó en averiguar el rumbo que
tomaron y las intenciones que llevaban. El mismo día ofició al Coronel Darquea
para aquel fin:

"No. 3.- República del Ecuador.- Comandancia en Jefe del Ejército.-


Guayaquil a 17 de junio de 1865.- Al Sr. Coronel Comandante General del
Distrito.

"Sírvase US. disponer que por la Capitanía del Puerto, y con prontitud se
reciba declaración jurada al práctico y al capitán del bergantín que acaba de
arribar de Liverpool, sobre la situación de los buques piratas, su tripulación,
las propuestas que le hicieron, y sobre los demás particulares que sepan.-
Dios guarde a US.- (f) G. García Moreno. (462)

Como hemos detallado, después se le informó que el piloto de una


embarcación, que arribó al Morro, vio a dichos buques el día 18 de junio
fondeados entre la boca de Balao y Baba.

EMBARGO DEL VAPOR "TALCA"

Si bien García Moreno no había encontrado inconvenientes para organizar


las tropas; con las cuales comenzó a combatir a los rebeldes urbinistas, no
hallaba forma de conseguir buques para, armados en guerra, salir a buscar
al adversario en aguas del golfo de Guayaquil. Pero pronto se presentaría
una feliz coincidencia que hizo saltar de júbilo al Mandatario. Estaba próxima
la llegada de un vapor marítimo de la compañía inglesa de vapores. Al
comunicárselo así el Capitán del Puerto de Guayaquil, Capitán de Navío
Francisco Martínez, decidió apoderarse del mismo para armarlo en guerra.
Así se lo dice a su cuñado Roberto Ascásubi en carta del 19 de junio:
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 291

"El río está libre de piratas. Anteanoche se fueron y ayer siguieron a Puná
por fuera. Pronto sabremos si han ido a Jambelí o Túmbez. Hoy llegará el
vapor "Talca", lo tomaré a flete, lo armaré e iré con él y otro buque en busca
de ellos. Urbina cae en mis manos sin remedio". (463)

Lo cierto es que a su llegada a Guayaquil, el Presidente no encontró buque


alguno en el puerto a excepción del "Smyrk", que lo transportó desde Babahoyo.
En un principio su desesperación le había inducido a pensar salir en dicho
vaporcito fluvial, con cien hombres y dos cañones. A su esposa se lo escribe el
9 de junio, y agrega: "No necesitamos tanto para tomar el "Washington".
Pero ha comprendido su temeridad, tal vez al enterarse de las fuerzas de
Urbina, y decide esperar. (464)

Por fin, ese día ha llegado, pues el 19 de junio de 1865 fondea en Guayaquil
el "Talca", vapor mercante de la Real Compañía Inglesa de Vapores, de la
Mala Real, como se decía. Es un vapor marítimo de gran tamaño y de tonelaje
considerable para aquel entonces. De una velocidad superior a los buques
con que cuenta el General Urbina.

García Moreno no piensa dejar pasar esa oportunidad, y al término de la


distancia se presenta ante Mr. J. Harman, Vicecónsul de su Majestad
Británica, a quien le propone comprarlo o fletarlo por cuenta del Gobierno
para salir a combatir a las fuerzas urbinistas. Igual proposición hizo a Mr.
George Chambers Stocks, Capitán del vapor, pero de ambos recibe reiteradas
negativas. (465)

Ante aquello, en la mañana del día siguiente es decir el 20 de junio notificó


al Capitán Chambers por la Capitanía del Puerto y por escrito, que el "Talca"
quedaba embargado de orden superior por necesitarlo el Gobierno. (466)

Acto seguido se dispone a artillar el buque -aunque el mismo tenía cañones


para defenderse de los piratas- y cuando envía trabajadores para esa tarea,
el Capitán Chambers no cede aunque cediera el Vicecónsul, pues se siente
directamente responsable de su nave. Arría el pabellón ecuatoriano y lo
sustituye nuevamente con el inglés; y con el ánimo de zarpar echa a los
trabajadores y marinos nacionales que se encontraban a bordo. (467)

"Sábelo García Moreno -relata Robalino Dávila- y acude al punto; habla al


Capitán sobre Ley de Angarias y Derecho Internacional; mas el inglés erre
que erre, responde que no entregará el barco sino después de muerto...
Fulmina entonces el Presidente con sus "terribles y relampagueantes ojos"
al viejo lobo de mar, lo amenaza con el fusilamiento inmediato y con
amortajarle en su propio pabellón ... El autoritario magistrado al frente de
una escolta toma posesión del "Talca". (468)

Pero se presentó otra casualidad, el mismo día 20 de junio arribó la fragata


de guerra "Blanca" de la Armada Española, al mando del Comandante Juan
292 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Bautista Topete. El presidente García Moreno cree que la providencia le ha


traído otro apoyo, y le escribe a su esposa el día 21 lo que sigue: "... He tenido
que tomar por la fuerza un vapor inglés, el cual saldrá probablemente mañana
con los elementos necesarios para tomar a Urbina; y la fragata española de
guerra, que llegó ayer, irá a tomar al "Washington". (469)

Demasiado optimismo, García Moreno se equivocaba esta vez, pues el


Vicecónsul Británico se adelantó para pedir la protección de dicha fragata
española en favor de los intereses de su nación, aduciendo el apresamiento
arbitrario del vapor "Talca" por fuerzas ecuatorianas. Lo hace con la siguiente
comunicación:

"Fragata de S.M.C. "Blanca" -El Cónsul de S.M.C. en ese puerto me


comunica en este día lo siguiente- "El Vicecónsul de S.M.B. me dice en esta
fecha lo siguiente -Tengo la honra de dirigirme a US. para pedir la protección
de la fragata de guerra española "Blanca" llegada hoy a este puerto en favor
de los intereses británicos amenazados por este Gobierno- El vapor inglés
"Talca" ha sido apresado por fuerzas ecuatorianas y se le destina al servicio

Mr. George Chambers Stocks, Capitán del vapor 'Taloa". Se opuso


tenazmente a la entrega de su buque, pero finalmente tuvo que ceder
ante el autoritario Presidente.
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 293

activo del Gobierno contra los deseos expresos de los agentes que no se
consideran con bastante autorización para efectuar esta venta o un fletamiento
con aquel objeto -La Gran Bretaña, nación amiga de la España, no tiene
ahora un buque de guerra en este puerto, que proteja por la fuerza los intereses
de sus súbditos. Por este motivo me veo en la necesidad de dirigirme al señor
Cónsul de S.M.C. para que de acuerdo con el Comandante de la fragata , obre
como obraría mi gobierno con el suyo en igualdad de circunstancias -Aprovecho
la oportunidad para reiterar al señor Cónsul las seguridades de mi mas
distinguida consideración- J. Harman V.C. de S.M.B.

"En su consecuencia ruego a US. se sirva manifestarme en qué derecho se


ha fundado su autoridad para tomar una medida que violando a mi entender
el derecho internacional, me coloca a mí, deseoso de no mezclarme en los
asuntos políticos del país, en una situación difícil, pues con sentimiento debo
añadir a US. que a no estar cierto de la justicia que le asista, me vería obligado
a prestar al pabellón inglés el auxilio que reclama del de una nación amiga.

"Ruego a US. encarecidamente se sirva contestarme tan pronto como le


sea posible - dios guarde a US. in.a." - "Abordo de la fragata de S.M.C. "Blanca"
en el puerto de Guayaquil a 21 de junio de 1865- Juan Bautista Topete- Señor
Gobernador de la Provincia". (470)

Don Miguel García Moreno, Gobernador de la Provincia del Guayas dio


un larga y detallada explicación al comandante español, con el siguiente oficio:

"He tenido la honra de recibir la nota de ayer de US. en la que se sirve


transcribirme la que por medio del Cónsul de S.M.C. le ha dirigido el
Vicecónsul de S.M.B. para pedirle la protección de la fragata que US. manda,
fundándose en el embargo del vapor mercante "Talca" - Antes de manifestar
a US. el derecho de que dimana esa medida no violadora, sino conforme con
los principios del derecho internacional, y con la práctica de la naciones, me
permitirá US. que rectifique la inexactitud con que el señor Vicecónsul se ha
expresado al decir que el "Talca" ha sido apresado por fuerzas ecuatorianas.
La sencilla narración de los hechos bastará para evidenciar y corregir esta
inexactitud -El día 19 en que llegó el "Talca", el Comandante en Jefe del
Ejército se entendió con el señor Vicecónsul y el Capitán de aquel vapor para
comprarlo o fletarlo por cuenta del Gobierno para el transporte de tropa; y en
virtud de la negativa reiterada y absoluta de ellos, se notificó al Capitán
Chambers en la mañana del 20, por la Capitanía del Puerto y por escrito, que
el "Talca" quedaba embargado de orden superior por necesitarlo el Gobierno,
sin que para tal notificación se haya empleado fuerza alguna. Como mas
tarde el Capitán citado intentó separar del muelle su buque, hizo indispensable
la colocación de uná guardia para que no fuesen burladas las órdenes de la
autoridad. Así, ha habido detención y embargo, más no apresamiento; pero
es problable que esta grave inexactitud del lenguaje dependa del poco
conocimiento de nuestro idioma, que debe suponerse en un extranjero, y de
ningún modo de la voluntad del señor Vicecónsul- Pasando ahora como US.
294 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

desea a manifestar el derecho en que se funda el embargo del "Talca", haré


presente a US. que el Gobierno del Ecuador no ha hecho mas que lo que todo
gobierno habría hecho en circunstancias análogas; no ha hecho mas que ejercer
el derecho de Angarias. Y lejos de que este derecho sea desconocido o contrario
al derecho internacional, lo admiten y reconocen los autores de mas nombradía
y hacen uso de él todos los gobiernos cuando se ven en la necesidad de usarlo
-Para no acumular, citas que la ilustración de US. hace innecesarias, me
limitaré a copiar las siguientes- Bello cuyos "principios de derecho
internacional" están designados como texto por el Consejo de Universidad o
Instrucción Pública de España, dice lo siguiente

"De aquí proceden también las Angarias, o el servicio que deben prestar a
un gobierno los buques anclados en sus puertos, empleándose en transportarle
soldados, armas y municiones, cuando se ofrece alguna expedición de guerra,
mediante el pago de cierto flete y la indemnización de todo perjuicio. Ninguna
embarcación puede excusarse de las augurias bajo pretexto de dignidad o de
privilegio particular de, su nación" - Entre las cargas a que está sujeto el
comercio neutral, se cuenta el embargo forzado de sus buques para las
expediciones de guerra: sobre lo cual solo tengo que remitirme a lo dicho en
la primera parte de esta lecciones". -Filmore enseña -Comentaries upon
internacional law - Part. 9. cap. 3, núm. 28 — "Hay otra medida que participa
también de carácter beligerante, aunque estrictamente hablando sea ejercida
en tiempo de paz, llamada por los franceses le droit d' Angarie. Es un acto del
Estado por el cual los buques tanto extranjeros como del país que están dentro
de la jurisdicción del Estado son tomados y compelidos a transportar soldados,
municiones u otros instrumentos de guerra, o en otros términos, compelidos
para convertirse en partes contra su voluntad entrando en hostilidades
directas contra un poder con quien están en paz. Cita a Hautefenille (Desdroits
le des devoirs des Nations neutres). Luccenius (De Jure Mar). Azuni (Dorit
Maritime de 1' Europe), Mussé (Droit Commercial).

"No es distinta la doctrina del Wattel, quien dice: (Derecho de gentes, lib.
2o, cap. 9 & 121) "Del mismo modo, si una nación tiene una necesidad urgente
de embarcaciones, carros, &a. puede servirse de ellos de grado o por la fuerza,
con tal que los extranjeros no tengan la misma necesidad. Pero como no tiene
más derecho a estas cosas que el de la necesidad, debe pagar el uso que haga
de ellas, si tiene con qué. La práctica de la Europa es conforme con esta
máxima, porque se retienen las embarcaciones que se hallan en el puerto;
pero se paga el servicio que se saca de ellas".

"Y no se crea que este derecho esté en desuso. Se reconoce expresamente


en los diferentes tratados hechos entre los Estados Unidos y las Repúblicas
Hispano-americanas; y en el artículo octavo del celebrado con el Ecuador, se
dispone que no ejerza sin una suficiente indemnización. En la guerra de 1854
y 1855 entre la Rusia y las potencias aliadas, éstas aprovecharon de ese
COMBATE NAVAL DE JAivIBELI 295

derecho varias veces; y lo seguirán ejerciendo todos los gobiernos cuando una
necesidad urgente, imperiosa, inevitable los obligue a ejercerlo.- Y tal es la
que fuerza a mi Gobierno a disponer del "Talca" para transportar tropas por
pocos días. Las guarniciones de Machala y Santa Rosa que luchan contra la
gavilla de criminales y aventureros que ha invadido nuestro territorio por el
lado de Túmbez y avanzado hasta el río Jumon, serían destruidas si no las
socorriésemos con prontitud, y para auxiliarlas ni hay otro buque de vapor,
sino el "Talca", como US. lo sabe muy bien.

"Terminaré esta contestación explicando al señor Comandante, que hoy


por error de un subalterno se varió la bandera sin orden de autoridad alguna;
pero reconocido que fue el error, se corrigió como era debido. Asimismo tengo
la honra de agregar, que los agentes de la Compañía de Vapores del Pacífico,
han convenido en vender el "Talca" al Ecuador, y han ajustado y redactado
las condiciones del contrato -Dios guarde a US. mucho más.- Miguel García
Moreno.- Al señor Comandante de la fragata de S.M.C. "Blanca".(471)

Sobre lo indicado en el último párrafo de la comunicación, Camilo Destruge


dice que García Moreno "consiguió por fin, que los agentes de la Compañía
Harman y Medina, aceptaran un contrato, mediante el cual entregaría el
Gobierno del Ecuador veinte mil libras esterlinas que se considerarían como
valor del flete, si la compañía residente en Londres se negaba a vender la
nave, cuyo predio se había fijado de antemano, para el caso de aceptación".
(472)

Según Benjamín Carrión el precio de venta del "Talca" sería de cincuenta


mil libras esterlinas, "casi el valor de todo el presupuesto nacional". (473) El
que se levantaría mediante un empréstito local.

Lo importante y real es que el "Talca" quedó en poder del Gobierno a como


dio lugar. Aunque para ello se utilizó el dinero de la arcas fiscales, pues más
pudo la arrogancia, la sed de venganza y el derroche, que el análisis
concienzudo de una buena estrategia, pues simplemente García Moreno no
quería dejar demorar un día más, aún a costa de la fortuna indicada. El
mismo Presidente dice: "Conseguí el 20 del presente el vapor "Talca" con la
mayor dificultad y enormes sacrificios y graves disgustos que no terminaron
sino hasta el 24". (474)

EL COMBATE NAVAL DE JAMBELI

El vapor "Talca" fue artillado con cuatro cañones, en igual número de días,
de forma tal que el 25 de junio ya estaba listo y con la tropa a bordo. El
"Smyrk" contaba con dos cañones. Para éste último fue destinado a comandarlo
el Capitán de Navío Francisco J. Martínez, quedando de Segundo en el mando
el Alférez de Navío Diego Sánchez.
296 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

El Capitán de Navío graduado Juan Manuel Uraga que fue nombrado


Jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Mar y Tierra en dicha campaña,
tendría la retención del mando del vapor "Talca". Constan también como
embarcados en dicho bajel el Alférez de Fragata Tiburcio Lecaro y el
Guardiamarina Tomás Matos.

García Moreno, como buen cristiano, no se olvidó de la parte espiritual, y


con el siguiente oficio designó personalmente a un capellán para la campaña
que estaba por iniciar:

"No.7.- Comandancia en Jefe del Ejército.- Plaza de Guayaquil a 24 de


junio de 1865.- Al Sr. Coronel Comandante General de este Distrito.

"Con esta fecha he nombrado Capellán de la Fuerza Expedicionaria al


Presbítero Juan E. García Vernaza; lo que tengo la honra de comunicar a
US., para que se sirva hacerle reconocer por la Orden General de esta fecha.-
Dios guarde a US. (f) G. García Moreno". (475)

La lista de jefes y oficiales de la Fuerzas de Mar y Tierra para dicha


campaña, embarcado en los vapores "Talca" y "Smyrk" a las órdenes del señor
Comandante en Jefe, era la siguiente:

Comandante en Jefe del Ejército, Gabriel García Moreno.


Sargento Mayor Edecán de S.E., José Murgueito.
Capitán id. de id. Antonio José de Sucre.
Subteniente id. de id. Domingo Morán.
Sargento Mayor efectivo escolta de id., Juan León Arcia.
Capitán graduado de Milicias id. id. Francisco Macine.
Capitán graduado de Ejército id. id. Pedro Moncada.

ESTADO MAYOR

Capitán de Navío graduado, Juan Manuel Uraga.


Adjunto Celador de Policía, Juan Gualberto Vera.
Id. id. Gaspar Gutiérrez.
Id. id. Tranquilino Montealegre.

BRIGADA DE ARTILLERIA
Teniente Coronel efectivo, Manuel Sixto Arévalo.
Sargento Mayor graduado, Guillermo Pareja.
Capitán graduado, Francisco Parreño.
Teniente, Antonio Murrieta.
Subteniente, Manuel Bermeo.
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 297

BATALLON GUAYAS
Coronel efectivo, José Martínez de Aparicio.
Sargento Mayor id., Marcelino Maridueña.
Id. id. id., José Gutiérrez.
Id. id. graduado Santiago Pazos.
Id. id. id. Baldomero Haz.
Capitán efectivo, Estanislao Andrango (herido).
Id. Modesto Alvarez.
Id. José Mercedes Brito.
Id. graduado Joaquín Pástor.
Teniente, José Espinoza.
Id. Víctor Villalobos.
Id. Manuel Lombaida.
Id. Manuel Luna.
Subteniente, Juan Ignacio Junco.
Id. Vicente Alvarado
Id. Manuel Carvajal.
Id. Manuel Mosquera.
Id. Manuel Felipe Cucalón.
Id. Manuel Peñafiel.
Id. Basilio Camargo.
Id. Casimiro Engracia.
Id. Domingo Castillo.
Id. Servilio Morlás.
PRIMER REGIMIENTO LANCEROS
Teniente Coronel efectivo, José María Quiroz.
Capitán id. Darío Capelo.
Alférez Manuel Egüez.
Id. José Vicente Figueroa.
Id. Mariano Guerrero.
CUERPO DE MARINA
Capitán de Navío graduado, Francisco Javier Martínez.
Alférez de Navío Diego Sánchez.
Id. de Fragata Tiburcio Lecaro.
Id. de Id. Tomás Matos.
Cabo de resguardo, Gabino Espinoza.
298 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Matrícula de Capitanía, Pedro Antiche.


Triconel voluntario, Santiago. (476)

Aquella nómina fue detallada un día después del Combate Naval de


Jambelí, por el Comandante Uraga, es decir el 27 de junio de 1865. En ella
podemos notar que dicho Capitán de navío tiene como ayudantes en el Estado
Mayor a tres celadores de Policía. se supone que fueron escogidos, como de su
confianza, por desempeñarse aquél, hasta el momento de su nombramiento,
con el cargo de Jefe General de Policía.

Los adversarios urbinistas, por su lado, liderados por el General José María
Urbina, habían logrado armar dos vapores fluviales y adueñarse de un vapor
de guerra del Gobierno, a más de dos pequeños veleros. A continuación
detallaremos la fuerza naval revolucionaria, así como la nómina de los jefes
y oficiales de Marina participantes:

FUERZA NAVAL REVOLUCIONARIA


Vapor de guerra "Guayas"
Vapor "Washington"
Vapor "Bernardino"
Dos bajeles a vela

JEFES MILITARES Y OFICIALES DE MARINA INSURGENTES


General José María Urbina, General en Jefe
General Guillermo Franco
General de Marina Francisco Robles, Comandante en Jefe de la Escuadrilla
revolucionaria embarcado en el vapor "Bernardino".
Capitán de Navío José María Vallejo
Capitán de Fragata José Marcos Tejada, al mando del vapor de guerra
"Guayas"
Capitán de Fragata José María Robles, probablemente Comanda el vapor
"Bernardino"
Capitán de Fragata Juan Heredia, al mando del vapor "Washington"
Alférez de Navío José Antonio Gómez
Alférez de Navío Abelardo Gómez
Alférez de Fragata Enrique Larroque
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 299

No faltó una proclama de García Moreno a sus tropas antes de zarpar, y


ésta la dio el 24 de junio en los siguientes términos: "Muy pronto el castigo
ejemplar de los piratas dejará tranquilos a los hombres de bien". Agrega que
tendrá la honra de acompañarlos, para ser testigo de su valor y de su
disciplina. Sólo siente que hayan de combatir contra enemigos indignos, contra
"viles piratas y asesinos, contra lo más abyecto y lo más infame".

El 25 de junio a las siete de la noche, levaron anda los buques del Gobierno.
En el vapor "Talca" iba embarcado el Dr. Gabriel García Moreno, en su
condición de Comandante en Jefe del Ejército. A continuación transcribimos
el oficio con que el Coronel Darquea dio cuenta al Ministro de Guerra y Marina,
de la salida de la expedición:

"R. del E.- Comandancia General del Distrito.- Guayaquil, a 26 de junio de


1865.- Al H. Sr. Ministro de Guerra y Marina.

"Tengo la honra de participar a U.S.H. que, a las siete de la noche del día
de ayer, zarpó de este puerto una expedición, al mando del Excmo. Sr.
Comandante en Jefe del Ejército, sobre los piratas que se encuentran en la
boca del Jambelí. La flota destinada a este objeto, se compone de los buques
"Talca" y "Smyrk", que lleva a su bordo, el primero, 160 hombres del batallón
"Guayas", 50 del primer Regimiento Lanceros y 32 artilleros para servir las
cuatro piezas de artillería de grueso calibre que se han colocado en él; y el
segundo, 50 soldados del "Guayas" y 15 artilleros; todos bien armados y
municiados, con la correspondiente dotación de jefes y oficiales. La fuerza
expedicionaria marcha con el júbilo y entusiasmo propios del más acendrado
patriotismo y de la causa que defienden; así es que, hoy, que será el día de
batirse con el enemigo, alcanzarán, indudablemente, nuestras armas, un
espléndido triunfo; porque así es de esperarlo del valor que caracteriza a
cada uno de los individuos que forman tan honrosa expedición.

"Esta plaza continúa con el mayor orden, pudiendo asegurar a U.S.H. que
se conservará en el mismo estado, hasta que se disipen los motivos que la
alarmaron; pues se han tomado todas las medidas que demandan las
circunstancias, y se redobla cada día la vigilancia, a fin de que no sea alterada
la paz.

"Cualquiera que fuese el resultado de la expedición y las ocurrencias que


tengan lugar posteriormente, cuidaré de participar a U.S.H. por la posta,
para conocimiento del Supremo Gobierno, a quien se servirá U.S.H. orientar
del contenido de la presente nota.- Dios guarde a U.S.H.- S. Darquea". (477)

Los revolucionarios se quejaban por las cercanías de Jambelí, de la falta


de carbón para la propulsión de sus vapores. (478) Suceso lamentable si se
considera que se aproximaba el momento del encuentro definitivo con el
adversario.
300 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

General Guillermo Franco, uno de los líderes de la revolución


urbinista de 1865.

Estando ocupada Machala por el General Franco, el General Urbina se


embarcó en la madrugada del 26 de junio con unos cien hombres en Santa
Rosa, a objeto de bajar hasta Jambelí y reforzar la flotilla expedicionaria,
para luego emprender en otras operaciones. Pero no habían recorrido aún
mucha distancia las chatas que lo conducían, cuando ya con la claridad del
día oyó tronar los cañones hacia la parte de Jambelí. La preocupación del
General revolucionario fue inmensa pues el número de hombres que había
en la flotilla era reducido. Estaba muy sorprendido, además, porque la certeza
de que García Moreno no disponía de un solo buque de guerra, le daba
confianza para el éxito de su escuadrilla.

Es decir, la sorpresa se había producido, las fuerzas del Gobierno habían


conseguido el "Talca", vapor caletero a ruedas de mayores características
que las naves adversarias, y que acompañado por el "Smyrk" arremetieron
contra los buques de Urbina. Camilo Destruge nos narra a continuación dicho
encuentro naval:

"Eran las siete de la mañana del 26 de junio cuando, de improviso, se


presentó el "Talca" a la vista de los expedicionarios avanzando directamente
sobre las naves fondeadas en Jambelí.

"En el "Bernardino" se hallaba el General Robles; pero no disponía sino de


unos pocos hombres de combate; y en el "Guayas" permanecía el Comandante
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 301

Marcos, con algo menos de cuarenta hombres.

"No es exacto que el General Urbina y los suyos supieran lo que había
estado sucediendo en Guayaquil; pues no les había llegado aviso alguno, ni
podía llegarles, dada la constante y estricta vigilancia del Gobierno; porque,
precisamente, García Moreno contaba con la sorpresa para el éxito del golpe
que había preparado. Tan cierto es lo que decimos, que, de haber tenido aviso
los expedicionarios, ni el General Urbina hubiera distraído toda su gente en
la campaña terrestre, ni los buques hubieran permanecido tranquilamente
fondeados y sus tripulantes descuidados.

"En la relación del señor Andrade encontramos que dice con toda exactitud:
"Marcos divisó primero al "Talca" y vio que enarbolaba bandera inglesa. Días
antes habíanle visto pasar; pero- ¿Cómo hubieran presumido que regresaría
contra ellos?... En efecto; y la pregunta se absuelve con el hecho verdadero
que dejamos afirmado; esto es, que nada sabían sobre las negociaciones
respecto al "Talca" y menos del éxito obtenido en ellas por García Moreno.

"El Comandante Marcos dejó que el "Talca" se pusiera a tiro, disparó sobre
él un cañonazo; pero el "Talca" abrió también los fuegos de su gruesa artillería;
los disparos fueron tanto más certeros, cuanto que se hacían sobre una nave
que no se movía; y uno de ellos le abrió un boquete a flor de agua... El
Comandante Marcos bajó a la santa bárbara resuelto a volar su buque junto
con el "Bernardino", al cual logró acoderarse; pero encontró ya inundado todo;
y entonces volvió a cubierta para vender cara la vida.

"El General Robles que, como hemos dicho, no tenía gente de combate en
el "Bernardino", cuando vio que toda resistencia era inútil, que todo estaba
perdido, se embarcó en una chalupa, se dirigió hacia el puerto de Jelí, se
trasladó al "Washington" e iba a seguir adelante, cuando llegaron al mismo
punto las pesadas embarcaciones en que venían el General Urbina y su
gente ... Acaba Robles de poner en conocimiento de Urbina, que se hallaba en
tierra con la mayor parte de su pequeña columna y el "Washington" acoderado
al barranco, cuando de pronto, apareció el "Smyrk", al mando del Coronel
Francisco J. Martínez. Perdido todo en Jambelí, era inútil hacer resistencia
con un puñado de hombres; tanto más, cuanto que en ese punto podían verse
atacados por mayores fuerzas, abrumados por el número. Se internaron, pues
en el bosque y el "Smyrk" regresó a Jambelí con el "Washington"...

"Se hundía el "Guayas" cuando el "Talca" se le fue encima, al abordaje. La


resistencia fue desesperada; pero sucumbieron esos pocos valientes mandados
por Marcos y Heredia; sucumbieron haciendo prodigios de valor... Por su
desgracia no alcanzaron el objeto de morir luchando; quedaron muchos con
vida, y ellos sabían lo que era caer con vida en manos de García Moreno..."
(479)
302 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Capitán de Navío Francisco Javier Martínez. Jefe Naval que se


desempeñó en distintos cargos durante el periodo garciano. Esta vez,
es designado Comandante del vapor "Smyrk", con el que combatió el 26
de junio de 1865.

Pero qué había pasado con las fuerzas urbinistas, en tierra, en el momento
del combate. Don Alamiro Plaza nos narra lo siguiente: "El día veintiseis de
junio, en el momento en que se pasaba en la pampa un riachuelo en donde
daba el agua arriba de la cintura, como a las nueve de la mañana, se oyeron
varias descargas de fusilería y algunos tiros de cañon; esto hizo que las fuerzas
revolucionarias trataran de llegar cuanto antes a la población de Machala;
pero cual la sorpresa, cuando al llegar a las goteras de la población, a las
cuatro de la tarde mas o menos, el atrevido General don Guillermo Franco,
con lanza en mano, entró solo a la población; y se informó en ella de que el
Coronel Melitón Vera, la había desocupado; así mismo, se impuso de que el
doctor Gabriel García Moreno, había hechado a pique al vapor "Guayas" y
tomado el vapor "Bernardino", en Jambelí; y en Jelí, el vapor "Washington",
es decir la armada de la revolución.

"Esta terrible y fatal noticia, obligó al General Franco a contramarchar a


Santa Rosa, en donde se llegó cansado por la noche, un poco cerca del puerto
del Pital, y en este lugar montañoso, no pudiendo avanzar, se quedaron a
dormir, el señor Comandante N. Sinchez, Mayor N. Aguilar y el Capitán G.
Alamiro Plaza y un soldado de apellido Rocafuerte.
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 303

e "En la madrugada del día veintisiete de junio, el Capitán G. Alamiro Plaza,


dijo a sus dos compañeros, que se hacía necesario avanzar al puerto y de allí
• seguir a Santa Rosa, para incorporarse a sus respectivas columnas; mas esto
no lo aceptaron, emprendiendo el Capitán G. Alamiro Plaza solo la marcha; y
al llegar al puerto Pital, notó que del otro lado del río habían soldados
uniformados del Gobierno; y esto hizo, que se metiera a la montaña y
continuara su marcha dejando el río a la derecha hasta que salió al frente de
Santa Rosa y pasando un puente de palo y sin ser visto corrió y pudo salvarse
en la casa de paredes de caña, en que vivía la señora doña Zoila Cuesta de
Sánchez, esposa del Señor Coronel don Mariano Sánchez Rendón.

"Mas tarde este señor, más o menos a las nueve de la mañana le dijo al
Capitán Plaza; que las fuerzas del Gobierno en el puerto Pital, habían
apresado a sus compañeros Sinchez y Aguilar, a quienes les estaban
remachando grillos en el cuartel en que estaban presos".

Al siguiente día del combate el Sr. Capitán de Navío Juan Manuel Uraga,
como Jefe de Estado Mayor General dirigió un informe detallado de la acción
naval al Ministro de Guerra y Marina, que lo transcribimos para conocer su
versión de los hechos:

"República del Ecuador.- Estado Mayor General de la Escuadrilla.-


Guayaquil, 27 de junio de 1865.

"Al H. señor Ministro de Estado en el Despacho de Guerra y Marina.

"Nombrado por S.E, el Comandante en Jefe del Ejército, Jefe de Estado


Mayor de las fuerzas destinadas a combatir los buques armados por el ex-
general Urbina y situados en la boca de Jambelí, me cabe la honra de dar
cuenta al Gobierno, por el respetable órgano de US.H. de las operaciones que
tuvieron lugar en la expedición.

"A las siete de la noche del domingo 25 zarpó de este puerto la fuerza
compuesta de los vapores "Talca" y "Smyrk", el primero montaba un cañón
giratorio en proa, de a 18, uno rayado de a 24 al centro y dos de pequeño
calibre en batería, treinta y dos individuos de tropa de artillería, cincuenta
del batallón Babahoyo, otros tantos del batallón Guayas y del lo. Regimiento
y veinte individuos más entre ingenieros y tripulación; el segundo montando
dos cañones de pequeño calibre, cincuenta individuos del batallón Guayas,
diez y seis más entre ingenieros y marineros y dos cañones de pequeños calibre.

"A la siete de la mañana del 26 se avistó el vapor "Guayas" afuera de la


boca de Jambelí".
304 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Entre las órdenes de S.E. era la primera perseguir aquel vapor, hasta
tomarlo; por lo que nos dirigimos sobre él, recibiendo los fuegos que nos rompió
a gran distancia con el cañón rayado que montaba a popa.

"Tanto por descubrir la causa de sus disparos, cuanto por aguardar al


"Smyrk", hicimos alto; y al tiempo que éste se nos juntó, el "Guayas" hizo
rumbo a la boca de Machala, dejando comprender que su objeto era
incorporarse a los otros buques que probablemente estaban adentro.

"S.E. dispuso entonces continuar la marcha sin atender a los disparos de


cañon del "Guayas". cuando éste hubo llegado a la boca, indicada, se dirigió
al vapor "Bernardino" situado a la orilla opuesta, y se unió a él mura con
mura. La ocasión no podía ser mas oportuna para dar la carga, y S.E. la
ordenó al momento. Después de cinco tiros de cañón, se dio el abordaje; y
media hora de combates nos hizo dueños de los dos buques "Guayas" y
"Bernardino", cuyas dotaciones se defendieron con el valor de la desesperación.
Sin embargo de haberles abandonado su Almirante, el General Robles,
huyendo en un bote vergonzosamente hasta Santa Rosa.

"En ese momento se nos incorporó nuevamente el vapor "Smyrk" a órdenes


del Capitán de Navío graduado Francisco Javier Martínez, a quien S.E. ordenó
ir a tomar al vapor "Washington" que se supo estaba en Jelí cerca de Santa
Rosa. Dos horas después regresó el "Smyrk" convoyando al "Washington",
abordo del cual habían estado los ex-generales Urbina y Robles con otros
jefes enemigos, todos los cuales huyeron despavoridos al primer disparo del
"Smyrk".

"Mientras tenía lugar la captura del "Washington", dispuso S.E. salvar al


"Guayas", que se iba sumergiendo por la popa, a causa de una bala de cañón
recibida a flor de agua y no fue posible evitar el completo hundimiento del
buque.

"Así ha terminado para gloria del país y escarmiento de los malos


ecuatorianos, la expedición naval dirigida contra los piratas; pretender señalar
las acciones heroicas de los señores jefes, oficiales y soldados que harán eterna
la jornada de Jambelí, sería muy difícil. Baste el decir que el valor sin ejemplo
del jefe había pasado al alma de todos los que le acompañaban. De hoy en
adelante el Ecuador sabe lo que puede esperar de sus hijos, cuando se trate
de vengar su honra o defender su libertad.

"En lista separada acompañó a US.H. una razón de los señores jefes y
oficiales que tomaron parte en la acción; todos merecen la gratitud de la
Patria y del Gobierno, pero un deber de justicia me obliga a recomendar a la
consideración de todos los valientes a los señores Coronel José Martínez de
Aparicio, Teniente Coronel José María Quiroz, Cirujano Comandante José
Illescas, Teniente Coronel Manuel Sixto Arévalo, Sargento Mayor Marcelino
Maridueña, Sargento Mayor graduado Santiago Pazos, Sargento Mayor
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 305

• graduado Baldomero de Haz, Capitán Guillermo Pareja, Estanislao Andrango


(herido), Capitán graduado Francisco Parreño, Capitán Darío Capelo, Capitán
Pedro Moncada, Sargento Mayor graduado Juan León Arcia, Teniente Manuel
Lombaida, Teniente Antonio Murrieta, Subteniente Basilio Camargo,
Subteniente Casimiro Engracia y Alférez José Vicente Figueroa. Son dignos
de igual mención honrosa los celadores de policía Juan Gualberto Vera,
Tranquilino Montealegre y Gaspar Gutiérrez.

"Hemos tomado al enemigo cuatro buques, dos de vapor y dos de vela y


destruido el "Guayas": Nos hemos apoderado de todos sus elementos de guerra
entre ellos doscientos sesenta fusiles encajonados, cien id. sueltos, seis cañones
de varios calibres en los buques, seis barriles de pólvora, ocho cajas paquetes
y un indeterminado número de correajes, y además tomamos los papeles y
equipajes de sus jefes. Hemos libertado los jefes, oficiales y ciudadanos que
heridos y prisioneros iban a ser metrallados en el acto en que recobraron su
libertad.

"US.H. y el Supremo Gobierno sabrán apreciar lo que han hecho los marinos
y soldados del Ejército Nacional.

"Dios guarde a US.H.- Juan Manuel Uraga". (480)

Es de resaltar que el presidente García Moreno tuvo en el Capitán de


Navío Juan Manuel Uraga a un experto marino, que contribuyó enormemente
a la consecución del triunfo, por sus acertadas ejecuciones en el momento del
combate. Tal es que el Presidente lo ascendió verbalmente a bordo del vapor
"Talca" en el acto de la victoria, el mismo día 26 de junio. Y dos días después
lo haría con el siguiente oficio:

"No. 9.- República del Ecuador.- Comandancia en Jefe del Ejército.- Plaza
de Guayaquil a 28 de junio de 1865.- al Sr. Coronel Comandante General del
Distrito.

"Sírvase US. mandar publicar por la Orden General de este día que el
Capitán de Navío graduado Juan Manuel Uraga, fue ascendido por mí a
Capitán de Navío efectivo en el acto de la victoria, por su buen comportamiento
en la ejecución de mis órdenes, para el abordaje del "Guayas".- Dios guarde a
US. (f) Gabriel García Moreno". (481)

Benjamín Carrión resalta la actuación de Uraga en el combate cuando


dice: "El valor y la pericia del Capitán de Navío ecuatoriano Juan Manuel
Uraga que, según el informe fidedigno del señor García Moreno, fue el que
dirigió en realidad, la acometida del "Talca" y ordenó el disparo contra el
"Guayas". (482) Se refería al impacto a flor de agua contra dicho buqüe que
terminó por hundirlo. Es decir aquel marino fue factor importante para el
* triunfo conseguido.
306 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

ESCAPE DE PRISIONEROS URBINISTAS

El día 26 de junio, mientras se producía el Combate Naval de Jambelí,


don Juan Arias, Comandante de la Guardia Nacional de Marina, apresó en
el Morro a diez individuos y los envió en una embarcación por la vía del
estero Salado hacia Guayaquil, pues éste conocía que los buques urbinistas
se hallaban fondeados en la boca de Jambelí, mas no de que estaba ocurriendo
aquel combate.

Cinco soldados tenían el encargo de conducirlos hasta entregarlos al


Coronel Secundino Darquea, Comandante General del Distrito, pero los
prisioneros lograron armarse con navajas marineras, cuchillos y palos de
leña, dominando a los soldados de la escolta, luego de lo cual ordenaron al
piloto para que los dejara en tierra saltando aquellos en la isla de Palo Santo,
jurisdicción de Chongón.

Los conductores retornaron al Morro y ante la sorpresa de su jefe relataron


lo acontecido. Don Juan Arias dice que en el momento de su liberación los
prisioneros habían invocado el nombre del General Franco, y que apenas
tuvo conocimiento del suceso, sin pérdida de tiempo ofició al Teniente Político
de Chongón para que los haga perseguir y buscar en todas direcciones hasta
su recaptura, "a fin de que puedan llegar ante US.(Coronel Darquea) y se les
imponga el castigo que merecen".

Informa también textualmente: "En esta fecha (27 de junio) acaba de llegar
de Pagua, Santos Banchón, quien me informa que al Sr. Dr. Idelfonso Coronel
le escribieron de Balao que las fuerzas que existían en Machala y Santa Rosa
se habían pronunciado en favor de los piratas, y que éstos ya se encontraban
en posesión de aquellos pueblos. Sin embargo de tan alarmante noticia esta
Comandancia no puede creer que haya sucedido tan desgraciado
acontecimiento".

INDISCRIMINADO FUSILAMIENTO A LOS VENCIDOS

Aquel triunfo de las fuerzas del Gobierno se vería empañado por la crueldad
y venganza con que actuó García Moreno. Habían caído en sus manos 45
prisioneros urbinistas, de ellos 27 serían pasados por las armas de la forma
más simple y brutal.

Pero no los fusiló a todos juntos, quería verlos padecer, lo fue haciendo
poco a poco. El propio historiador Manuel Gálvez, apologista parcializado del
Presidente dice: "Ha triunfado García Moreno, pero ahora va a manchar su
triunfo. Sinceramente convencido de que hace justicia, manda fusilar a los
veintisiete prisioneros que fueron tomados por la fuerza. Lo peor es que no
los fusila a todos juntos, lo que podría explicarse como un rapto de rabia o de
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 307

s venganza; dos son ejecutados enseguida de caer presos; doce o quince a la


tarde; y el resto, al día siguiente. Eso sí todos en el barco. El mismo interroga
a los presos y los condena o los absuelve. Quienes merecían la muerte eran
Urbina y Robles, así como la media docena de oficiales que fusiló, uno de los
cuales se llama Darío Viteri. Pero veinte, por lo menos, de sus víctimas, no
debieron morir. Algunos pelearon por un sueldo; otros, arrastrados o
engañados. García Moreno ha querido terminar de una vez con las
revoluciones, pacificar a su país, amedrentar a los ambiciosos. Mas no debió
castigar a la morralla sino a los jefes; y no teniéndolos, sólo a tres o cuatro
oficiales". (483)

No, no fueron justos tan horrendo crímenes en las personas de 27


prisioneros de guerra civil, rendidos y a merced de un vengador, a quien
nadie puede contradecir, porque es él único juez y ejecutor que interroga a
los vencidos, en falsos y rápidos consejos de guerra, que no dan tiempo a
meditar para la sentencia. De qué justicia podemos hablar cuando sus
penetrantes y desorbitantes ojos claman venganza.

En García Moreno hay una vocación temperamental a la crueldad, al


espíritu de castigo, un gusto por la tortura y por la muerte. Está transformado
en un hombre siniestro, porque tiene que implantar un reinado de terror. El
propio Luis Robalino Dávila, muy afecto a García Moreno dice:

r "Está lleno de odio, del odio intenso que se exhala de las guerras civiles. El
odio es en su alma una reina absoluta que domina todo. Y sigue el castigo
implacable. Organiza un simulacro de consejo de guerra verbal y sumario. A
bordo del mismo "Talca", fusila al Comandante José Marcos y a Juan
Bohórquez. Lleva consigo, de regreso ya, 25 prisioneros más; desembarca en
la isla de Puná y da muerte a 12, entre ellos al hijo del Coronel José María
Vallejo, adolescente que acompañaba al viejo e inválido soldado para ayudarlo
a soportar su cojera; sigue hacia el puerto y, en un recodo del río, Punta de
Piedra, salta otra vez a tierra y mata a 13 más, incluyéndose en ellos al
Coronel Vallejo y Darío Viteri". (484)

Hagamos un paréntesis para referirnos a la legalidad o no de la pena


capital en nuestro país en aquellos tiempos, pues la constitución prohibía la
pena de muerte por delitos políticos, por ello el Presidente se refería a la
imposibilidad de gobernar por "insuficiencia de las leyes".

Es tal, que el 15 de febrero de 1865 el Secretario de Estado de su Majestad


Británica, se dirigió al despacho del Ministro del Interior para consultarle:
¿Cuáles son los crímenes que en el Ecuador se castigan con la pena de muerte?.
Luego de lo trámites que corresponden, por vía de la Corte Suprema, presidida
308 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

por el Dr. Pedro José de Arteta, se contestó lo siguiente:

"El Fiscal, en vista de los puntos a que se contrae la nota oficial que precede,
dice: que los delitos castigados, según nuestra legislación con pena de muerte
son, el de traición contra la República, cuando ésta se hallare en guerra con
otra u otras naciones; el de falsificación de moneda; el de homicidio voluntario,
o en riña provocada por el homicida; el de pirata con respecto al jefe o
comandante del buque; el de incendiario de casas, fortaleza, &, el de
reincidencia por tercera vez en los delitos a que el código penal impone diez
años de obras públicas; el de cobardía en acción de guerra, deserción en
campaña, rebelión y motín militar, conforme a las ordenanzas de Ejército,
declaradas vigentes por el decreto legislativo de 28 de abril del año
anterior".(485)

Entonces en qué se basó el presidente García Moreno para legalizar los


fusilamientos. Sencillo, apenas conocido el inicio de invasión urbinista firmó
dos decretos, en Quito y Guayaquil con que declaraba "pirática" a la expedición.
Con ello creía tener las armas suficientes para lograr lo que depués sucedió.
Es decir los fusilamientos fueron premeditados y pensados desde el 6 de junio
en que firmó el primer decreto.

Pero observamos que según la vista fiscal el delito de piratería es castigado


con respecto al jefe o comandante del buque, es decir su intención fue la de
capturar a Urbina, Robles y Franco y pasarlos por las armas. De ahí viene la
pregunta: ¿Por qué al resto? Cuando no logró su propósito principal. ¿En qué
se amparó para disponer de la vida de los vencidos? No sabemos, mas si
fueron dictámenes de su conciencia, estamos ante un alterado personaje que,
sin recibir ni aceptar asesoría de nadie, se transformaba en un peligroso
absolutista.

En lo que respecta a "rebelión y motín militar", no corresponde, porque no


se trataba de soldados de gobierno, o leales al régimen, alzados contra la
autoridad legítima, se trataba de adversarios políticos en actitud
revolucionaria, es decir era un conflicto interno, una guerra civil, que es
distinto. Pero para que dar más explicaciones ni efectuar más análisis al
respecto, si lo único que quería García Moreno era un aterrador escarmiento
al adversario. Que le teman los que escaparon de sus manos justicieras. Para
que Urbina y los suyos corran sin la esperanza de regresar, al saber del terror
que producía en cada fusilamiento.

El Profesor cubano Roberto Agramonte, es autor de una biografía de García


Moreno, que mas bien es un estudio de la personalidad del personaje,
analizada por un psiquiatra, que lo es el autor. Para el historiador Manuel
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 309

Gálvez es ésta una obra muy injusta. (486) En ella dice Agramonte:

"El dictador ecuatoriano es un frío de ánimo, un sadista que afirma en el


crimen su personalidad, un hombre capaz de andar sobre cadáveres. El mismo
formuló su máxima de conducta, en esta frase: "Mis enemigos están en el
deber de matarme, porque de lo contrario los extermino". (487)

Pero no creemos que Urbina, su adversario, haya querido asesinarlo, porque


oportunidades tuvo cuando cayó como su prisionero y no lo hizo. Sin duda el
caudillo liberal se estaba midiendo, esta vez, con aquél que disponía "la
represión pronta, enérgica, terrible", según propias palabras del presidente
García Moreno, y Urbina sabía de lo que era capaz.

El Sacerdote jesuita S. Gómez Jurado justifica la aplicación de la pena


capital, después del combate de Jambelí, cuando dice: "El audaz y patriota
Presidente extirpó la funesta plaga, fusilando a una treintena de insignes
malhechores y causando el desaliento y la enmienda en otros, hasta el punto
de que su segunda presidencia fue un sexenio de oro... "Más adelante
manifiesta: "Supongamos que García Moreno, movido de una falsa compasión

Capitán de Navío José María Vallejo, fusilado por orden de García


Moreno, después del Combate Naval de Jambelí, en la madrugada
del 27 de junio de 1865.
310 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

o temeroso de ser llamado tirano, se hubiese inhibido de hacer aquella limpia:


¿Quién no ve que los generales Urbina, Robles, Franco, Maldonado,
Veintimilla, don Eloy Alfaro, don David Campoverde y otros muchos, alentados
por la impunidad, habrían multiplicado las revoluciones sangrientas?..." (488)

De acuerdo está con los fusilamientos, y los apoya aquél que como religioso
está en la obligación de inculcar los diez mandamientos, uno de los cuales
dice "no matarás".

De igual manera piensa el historiador, Reverendo Padre José María Le


Gouhir, (J.L.R.) cuando expresa que "venían aquellos forajidos armados a
expensas del Gobierno peruano, en buques arrebatados a la Armada Nacional;
y su causa estaba manchada, entre otros crímenes con la sangre del Jefe de
la Escuadra" (489) Pero que podemos esperar de quien manifiesta que el 30
de agosto de 1864, el pelotón de ejecución "disparó contra un ingrato, contra
un traidor, contra un revolucionario reincidente, contra un reo perdonado y
perentoriamente amenazado..." al referirse a la ejecución del General
Maldonado. Pero vale indicar que Le Gouhir acepta el que en ambas
ejecuciones capitales no "hubo forma de juicio conforme a la ley". (490)
Entonces que justificamos. No, no es suficiente el comparar las ejecuciones
con las que presumiblemente ordenaron otros mandatarios, ni el decir mató
menos que otros, para que aquellos asesinatos se legalicen ante la historia
¡nunca!

Por su parte el historiador Ricardo Pattee manifiesta que ésta "es la


ejecución en masa más numerosa de todo el periodo garciano. El
derramamiento de sangre ocasionado por esta triste jornada ha sido punto
flojo de la defensa cerrada que a veces se ha querido hacer de García Moreno".
(491) Pattee es defensor de la personalidad del Presidente, por eso dice:

"No encontramos del todo aceptable el epíteto que le aplica uno que ha
historiado la época, de "raptus epileptoide". Nos inclinamos a considerar a
Jambelí como la culminación de un largo proceso político en que estaban en
juego los principios más graves de la estructura y sistemas nacionales. Jambelí
completó el ciclo de revoluciones promovidas por Urbina, cuyo éxito hubiera
significado el desmoronamiento del Estado soñado por García Moreno". (492)

Nosotros si estamos de acuerdo, Sr. Pattee, sin peros que valgan, con
Monseñor Federico González Suárez en que la inmolación de tantas víctimas
fue obra de severidad exagerada porque de propias palabras de García Moreno
deducimos que él estaba muy claro que fusiló a pesar de que la Constitución
y las leyes de nuestra patria no le autorizaban esa barbarie, cuando dice a los
honorables senadores y diputados:

"A vosotros os toca declarar si he cumplido con el primero de mis deberes,


salvando la Patria, sus instituciones e intereses a pesar de la trabas que me
lo impedían; y os corresponde también corregir nuestra defectuosas
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 311

Constitución y leyes, fortificando el poder con los medios indispensables de


represión..." (493)

Es decir que el mandatario primero dispuso de las vidas de sus adversarios


y luego pidió al Congreso que legisle a favor de la pena capital, para reprimir,
cuando ya reprimió. Los Senadores, Legisladores, Ministros Jueces y más
autoridades nada pueden reprocharle so pena de caer en el cadalso, como
aquellos que se atrevieron a contradecirle. Estamos ante la presencia de un
temido dictador al que solo Urbina, Robles y los urbinistas se le oponen. Los
que lo hacen y están en su presencia corren el riesgo de sus vidas. Veremos
después sobre las prisiones ordenadas a los generales Wright y Uraga, sus
íntimos colaboradores, por el hecho de oponerse a la injusticia.

El Coronel Gaspar Alamiro Plaza, en su relación histórica nos dice:


"Veintisiete han sido pasados por las armas, como piratas, por orden de Gabriel
García Moreno. Se reproducen los nombres de esas víctimas heroicas, porque
es preciso que queden grabadas en la memoria del pueblo ecuatoriano: Fueron
José Marcos Tejada y Juan Bohórquez, fusilados en la proa del vapor ingles
"Talca" y arrojados al mar; Coronel José María Vallejo y su hijo Ventura
Vallejo, mecánico; capitanes de fragata, José María Robles y Domingo Lamota;
Joaquín Franco, Carlos María Franco, José Acosta, José Sea, Nicanor Vásquez,
Ambrosio Baquerizo, N. Palma, Manuel Vera, Cayetano Fuentes, Darío Viteri,
Lorenzo Balanzátegui, Rafael Vaca, Eusebio Romero, Juan Mariscal, Juan
Mena y seis más, cuyos nombres se ignoran; estos fusilamientos tuvieron
lugar, dos en el vapor inglés "Talca", en Jambelí, el día veintiséis de junio de
mil ochocientos sesenta y cinco; y los demás entre Puná y Punta de Piedra, el
veintisiete de junio del citado año". (494)
En el mismo relato, don Gaspar Alamiro Plaza nos narra un episodio
durante los fusilamientos, en que al tocarle el turno a los alféreces de navío
Abelardo y José Antonio Gómez, y resultar estos hermanos de madre del
Capitán de Navío Francisco Javier Martínez, Comandante del vapor "Smyrk",
se produjo un acto aparentemente humanitario de parte del presidente García
Moreno:

"El veintiséis de junio de mil ochocientos sesenta y cinco, al amanecer en


Puná el señor García Moreno, en el vapor "Talca" y demás vapores que
componían su escuadrilla, en ese momento en que ordenaba conducir a tierra
en una lancha para ser fusilados al señor Coronel José María Vallejo y algunos
más, iban entre estos dos jóvenes hermanos llamados Abelardo y José Antonio
Gómez, hermanos maternos del valiente Coronel don Francisco Martínez
edecán del señor Director de la Guerra García Moreno; y al notar este señor
que a su Edecán se le salían las lágrimas, le preguntó ¿Martínez, que es eso,
por qué llora usted? éste el contestó: "Excelentísimo señor, este triunfo es
duelo para mí, puesto que en esa lancha van para ser fusilados mis dos
312 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

hermanos de madre". Entonces el señor don Gabriel García Moreno ordenó


que regresaran de la lancha únicamente a estos dos jóvenes, y se los entregó
al Coronel don Francisco Martínez diciéndole: "La restitución de sus dos
hermanos equivale a la obtención de su inmediato ascenso a general". (495)

Como punto de orden, me permito aclarar que esto debió suceder al


amanecer del 27 de junio en Punta de Piedra, sitio en que fue fusilado el
Capitán de Navío José María Vallejo.

De acuerdo a lo que registra una crónica -los condenados estallaron de ira


antes de su fusilamiento. El Capitán de Fragata José María Robles saltó de
la fila y le gritó: "¡Tirano, los liberales sabemos morir! ¡ya lo verás!" García
Moreno se alzó de hombros. El Capitán de Navío José María Vallejo enloqueció.
Saltó, a su vez, fuera de la fila y gritó, con una voz que pareció cruzar la vida
de eternidad a eternidad: "¡Maldito tirano, te emplazo para los quintos
infiernos!". (496)

Don Camilo Destruge nos narra así los fusilamientos: "El Comandante
Marcos fue fusilado en el instante de caer prisionero y con él un valiente
llamado Juan Bohórquez: fueron colocados junto a la borda. sonó una descarga,
fueron certeros los disparos y los cadáveres cayeron al mar para pasto de los
peces... Pero, esto era solamente el comienzo de la matanza de los prisioneros.

"La escuadrilla hizo rumbo a la Puná; allí bajó a tierra García Moreno;
pidió la lista de los prisioneros; mandó que los fueran desembarcando; y, a
medida que llegaban a tierra se los iba pasando por las armas. Cayeron allí,
víctimas de la más feroz carnicería, el Comandante José María Robles, marino
de muy buenas ejecutorias, Buenaventura Vallejo, hijo del Coronel José María,
Joaquín Franco, José Acosta, José Leal, Nicanor Vázquez, Ambrosio
Baquerizo, M. Palma, Manuel Vera y Cayetano Fuentes, todos pertenecientes
a la expedición; y, además, un pobre individuo natural de la isla.

"Al hijo del Coronel José María Vallejo, le hizo fusilar a la vista de su
padre, suspendiendo la ejecución de éste para que primero presenciara la del
pobre joven, que se había agregado a los expedicionarios con el solo fin de
servir a su padre, inválido, falto de una pierna que había perdido el 6 de
marzo de 1845.

Continuó la expedición hacia Guayaquil; pero hizo alto en Punta de Piedra


y allí fueron desembarcados y fusilados en el acto, Domingo Lamota, Darío
Viteri, Rafael Vaca, Eusebio Romero, Lorenzo Balanzátegui, Carlos M. Franco,
Juan Mena, Juan Mariscal; y, por último, el Coronel José María Vallejo, a
quien había reservado no sólo la muerte de su hijo, sino también la de sus
compañeros". (497)
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 313

FUSILAMIENTO DEL DR. SANTIAGO VIOLA

El 28 de junio, ya en Guayaquil, García Moreno dicta el siguiente bando o


edicto: "Cárcel a los que se encuentren llorando por las víctimas de Jambelí,
pues todos deben bendecir a Dios por el triunfo". (496) Así lo cuenta en su
obra don Manuel Gálvez, aunque atribuye el mismo a una versión de sus
enemigos, con lo cual concuerda don Robalino Dávila.

Alfredo Pareja Diezcanseco dice lo siguiente, y con ello concordamos: "Y


que se entienda bien lo que el autor critica: no el derecho del mandatario a
mantener el orden y a luchar por la estabilidad de su poder o sus ideas: pero
si la insensata y perversa crueldad de sus métodos, porque éstos sólo se pueden
calificar como los califica cualquier código moral; como crímenes". (497)

Es que una vez en Guayaquil, y al tiempo de fondear sus buques en el


puerto, junto con sus presas y prisioneros, su primera providencia fue escribir
de su puño y letra la siguiente orden:

"No. 8.- República del Ecuador.- Comandancia en Jefe del Ejército.- Plaza
de Guayaquil, a 28 de junio de 1865.- Al señor Coronel Comandante General
del Distrito.

"Por una carta sorprendida en la toma del "Guayas" y reconocida por el


Dr. Santiago Viola, queda fuera de duda que el agente de la correspondencia
de los piratas en esta ciudad era aquel doctor, cuya conducta anterior le había
hecho conocer como enemigo infatigable del orden y del Gobierno. Tengo que
cumplir el deber penoso de cumplir con las Ordenanzas Militares, y mandarlo
pasar por las armas, en este día a las cinco de la tarde.- US. se servirá dar
órdenes necesarias para el puntual cumplimiento, y dar cuenta luego que
sea cumplida.- Dios guarde a US.- G. García Moreno". (498)

Cabe indicar que en la margen izquierda del oficio, el Coronel Darquea


deja constancia de su conocimiento escribiendo: "Orden para el fusilamiento
de Viola", según consta en el original archivado en la Biblioteca Municipal de
Guayaquil.

Es muy dudoso el que dicha carta haya sido encontrada en el vapor de


guerra "Guayas", en el poco tiempo transcurrido entre la toma y el
hundimiento de dicho buque. El mismo Camilo Destruge manifiesta que
García Moreno no decía la verdad al respecto, porque la carta llegó a sus
manos por efecto de una negra traición, y que otro recibimiento hubieran
tenido los gobiernistas en Jambelí, de haber llegado ese aviso a su destino.
Lo explica de la siguiente manera:

"Mientras García Moreno se ocupaba en Guayaquil de conseguir y armar


el "Talca" para sorprender a los expedicionarios, los liberales de Guayaquil
314 HISTORIA MARITTMA DEL ECUADOR

buscaban el medio de burlar la vigilancia establecida por las autoridades y


dar aviso oportuno al General Urbina del golpe que le amenazaba.

"El doctor Santiago Viola, patriota argentino que residía desde hace muchos
años entre nosotros y había tomado carta de naturalización, aunque recobrado
su nacionalidad al subir García Moreno al poder; el doctor Viola, decimos
creyó encontrar el medio seguro de enviar noticias al General Urbina, de
quien era amigo y correligionario.

"Vivía en esta ciudad un hombre de color llamado Claudio Espinel que


guardaba o parecía guardar mucha gratitud al doctor Viola por motivos
poderosos. De este individuo se valió para que fuera el conductor de una
carta en la que relataba a Urbina lo sucedido con el "Talca" y la expedición
que preparaba García Moreno.

"Pero la carta fue a parar a manos del Presidente: Espinel había traicionado
la confianza en él depositada... García Moreno leyó el mensaje, lo guardó y no
dijo una palabra, reservándose para proceder a su regreso de la expedición".
(499)

García Moreno hizo que llevaran a Santiago Viola a su presencia, y lo


acusó de haber servido de agente urbinista durante la invasión de Jambelí.
Le mostró la referida carta, para acto seguido exigirle que responda a la
acusación de complicidad.

Dicen algunos autores, que le preguntó "¿Qué pena merece un extranjero


que interviene en los asuntos políticos del país y auxilia a los revolucionarios?
a lo que contestó en forma serena: "De acuerdo con los procedimientos de
usted la pena de muerte". Con lo que García Moreno terminó la entrevista,
poniéndose en pie y diciendo: "Acaba usted de dictar su propia sentencia".
(500)

En el supuesto caso de que Viola hubiera dado otra respuesta, dudamos


de que García Moreno lo habría perdonado: Es mas, indudablemente que las
altivas palabras del argentino lo pusieron fuera de sí. Estas pequeñas cosas
eran las que no perdonaba jamás, porque herían su vanidad.

Dice Pareja Diezcanseco: "Febrilmente, pues preparó esta nueva escena


de muerte. Intervinieron en favor de Viola el Cuerpo Consular y distinguidas
personas de la vida social guayaquileña. La madre de García Moreno, anciana
y enferma, se hizo conducir en litera hasta el despacho de su hijo, en la
Gobernación de la Provincia, y le imploró la vida del sentenciado. "Madre -le
repuso- pídeme lo que quieras, pero no un acto de debilidad que perdería al
país". La anciana tuvo que volverse a rogar a Dios por el alma de su hijo.

"¿Era que el perdón perdería realmente al Ecuador? Ningún crimen salva


COMBATE NAVAL DE JAMBELI 315

nada, y la muerte dada por el hombre sólo venganza y violencia consigue.

"Viola estaba encadenado. Poco antes de morir, pidió la gracia que le


dejaran las manos libres para escribir una carta de despedida a algún amigo
o a su familia: mas no le fue concedido el postrer deseo". (501)

No valieron, pues, los empeños de las personas más connotadas, como le


fueron las súplicas del Obispo doctor Tomás de Aguirre, quien le sugiere que
esa ejecución es contraria a la ley y a la Constitución. García Moreno le
contesta que siendo imposible salvar al país de la anarquía tratando de
gobernar según la Constitución, él gobernará según sus opiniones jurídicas y
la pública necesidad. (502)

La versión de don Gaspar Alamiro Plaza, sobre esto último es la siguiente:


"El señor Obispo doctor don José Tomás Aguirre, fue a la casa del señor
doctor Gabriel García Moreno, quien se encontraba acompañado de varias
personas amigas y entre ellos un sacerdote de la Compañía de Jesús y pidió
se sirviera perdonarle la vida al señor doctor Santiago Viola, en vista de la
consternación en que se encontraba la ciudad en virtud de los fusilamientos
anteriores. A esto el señor García Moreno, le dijo al sacerdote que estaba allí
presente ¿Qué le parece a usted Padre? Y éste le contestó: Señor García,
cuando un dedo de la mano está con gangrena es preferible cortar la mano
antes que perder el brazo. A lo que volvió el Señor García Moreno hacia el
señor Obispo don José Tomás Aguirre; y le dijo: Ya lo oye Usted. El Obispo,
se retiró contrariado al oír tal repuesta". (503)

Mientras tanto, no se le permite a Viola ser visitado. Rechaza al Sacerdote


que le designan. A la hora fijada para su ejecución, lo llevan a la Sabana
Grande de Guayaquil, y lo acribillan a tiros por la espalda. Se le negó cristiana
sepultura por no haber querido confesarse, y a nadie se le permite asistir a
su entierro. (504) Es que era masón y los masones según los fanáticos no
tienen derecho al descanso eterno. Se cierra así otro escandaloso acto macabro.
que conmovió a muchos, no así al Presidente.

PERSECUCION Y MAS EJECUCIONES

Aunque casi la totalidad de los historiadores no lo mencionan los


fusilamientos continuaron. Es decir, no son solo 28 las víctimas a lo largo del
conflicto, hubo otras durante la persecución de los vencidos. Hemos hecho un
esfuerzo buscando entre documentos y algo encontramos al respecto.

El 29 de junio García Moreno comunica la huida de los urbinistas hacia


Túmbez con el siguiente oficio, redactado a su estilo:
316 HISTORIA MARITLMA DEL ECUADOR

"No. 10.- Comandancia en Jefe del Ejército.- Plaza de Guayaquil a 29 de


junio de 1865.- Al Sr. Coronel Comandante General del Distrito.

"Tengo la honra de comunicar a US. que los facciosos que habían ocupado
Sta. Rosa, han huido a Túmbez despavoridos con la noticia de la victoria de
Jambelí, dejando tranquilos a los habitantes de ese pueblo, según lo verá US.
por la adjunta que se servirá transmitir a las autoridades subalternas.- Dios
guarde a US.- G. García Moreno. (504)

El Comandante en Jefe del Ejército respaldaba lo dicho en un informe


enviado a su persona desde la Comandancia de Operaciones de la Costa
Oriental, asentada en la ciudad de Machala, el que transcribimos a
continuación:

"República del Ecuador.- Comandancia de Operaciones de la Costa


Oriental.- Machala a 27 de junio de 1865.- Al Excelentísimo señor Comandante
en Jefe del Ejército y Marina.- Señor.

"En esta misma fecha y por la posta el Sr. Luis García de Santa Rosa le
dice al Sr. Jefe Político de este cantón lo que a V.E. copio literalmente.

"El Sr. Comandante Pacífico Aguirre está enfermo e imposibilitado para


escribir a Ud. personalmente, y me encarga comunicarle, que todas las fuerzas
de Urbina que ocupaban este pueblo, así como las que regresaron anoche de
aquél, se han marchado inmediatamente para Túmbez; de manera que tiene
Ud. la población enteramente sola, con cuyo motivo pueden entrar las tropas
del Gobierno sin novedad. Sírvase hacer propio de esta circunstancia
importante inmediatamente a la Escuadra.- Dios guarde a US.- Luis García".

"Lo que tengo el placer de comunicar a V.E. esta noticia para los fines que
tenga por convenientes.- Dios guarde a V.E.- Melitón Vera.- Es fiel copia .-
Guayaquil, junio 29 de 1865.- Rafael Jaramillo.- Secretario". (505)

Ante aquel anuncio, García Moreno decidió marchar a Santa Rosa con el
fin de consolidar la recuperación de dicho pueblo, pues también se le informó
que el Sargento Mayor José María Almeida, segundo jefe del Batallón No. 3,
estaba ocupando aquella parroquia Y reuniendo a los soldados del Gobierno,
que se encontraban dispersos a consecuencia de la derrota que habían sufrido.
(506) Pero antes, el Comandante en Jefe del Ejército, que lo era el mismo
Presidente, lanzó desde Guayaquil una proclama, con fecha 30 de junio, la
que en parte dice: "¡Compatriotas! os felicito, por la brillante victoria con que
el Dios de los Ejércitos ha premiado vuestro denuedo asombroso. La República
está salvada por vuestro irresistible esfuerzo. Nuestras aguas están ya libres
de piratas; y los que se atrevieron antes, a hollar Santa Rosa, corrieron
despavoridos al solo anuncio de vuestra presencia. Falta solamente que a los
que se hayan ocultado en los bosques o hayan vuelto a continuar la existencia
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 317

de salteadores, los extermine el brazo de la justicia envueltos en su propia


sangre. De hoy más, el patíbulo del malvado será la mejor garantía del hombre
de bien". (507)

Salió pues de Guayaquil el doctor García Moreno y marchó con rumbo a


Santa Rosa, con el objeto de restituir la confianza de los habitantes de aquel
lugar. Llevó consigo al Batallón Guayas y un escuadrón de caballería,
arribando el día 2 de julio. Tres días después dice el Coronel Secundino
Darquea: "Su. E. el Comandante en Jefe del Ejército regresó dejando
completamente pacificado esos pueblos y con la guarnición que ha considerado
necesaria". (508)

Al respecto, don Gaspar Alamiro Plaza nos relata de la llegada del


Presidente y del fusilamiento de otros dos soldados urbinistas, y él mismo
fue puesto en capilla, pero por circunstancias del destino obtuvo el perdón,
salvándose de una muerte casi segura. En dicha relación, don Gaspar se
menciona con el grado de capitán, y lo hace en tercera persona. La
transcribimos a continuación:

"El día dos de julio de mil ochocientos sesenta y cinco, por la mañana, de
regreso de Guayaquil, llegó a Santa Rosa el señor García Moreno, e
inmediatamente, ordenó traer a su presencia al Comandante N. Sinchez y al
Mayor N. Aguilar, que estaban presos en el cuartel y que pertenecían a las
fuerzas revolucionarias de los generales Urbina, Franco y Robles, los increpó
duramente y ordenó ponerlos en capilla para ser fusilados a las cinco de la
tarde del mismo día, como efectivamente, fueron ejecutados en el cementerio
de Santa Rosa, habiéndolos confesado un sacerdote colombiano.

"En este mismo día dos de julio en las primeras horas de la noche, fue una
escolta, al mando de un oficial, a casa del señor don Mariano Sánchez R., de
quien solicitó, por orden del señor García Moreno, la entrega del Capitán
Gaspar Alamiro Plaza, quien se encontraba asilado en su casa. El señor
Coronel Mariano Sánchez Rendón, contra sus sentimientos humanitarios y
de la amistad, tuvo que cumplir la citada orden, y el Capitán G. Alamiro
Plaza fue conducido preso al cuartel en donde le pusieron un centinela,
permaneciendo en este lugar hasta el día siguiente y a las dos de la tarde del
día tres de julio, que fue conducido en medio de una escolta, al puerto del
Pital; y embarcado a bordo del vapor fluvial "Smirk", continuando preso con
centinela. Más tarde, a eso de las seis de la tarde, se embarcó el señor don
Gabriel García Moreno, acompañado de su Edecán y algunos jefes de alta
graduación y el sacerdote colombiano que también lo acompañaba en esta
sangrienta campaña, e inmediatamente el vapor abandonó el puerto del Pital
y llegó a Jambelí, como a las ocho de la noche, con una luna muy clara. En
este mismo momento, el señor García Moreno llamó al Capitán Gaspar
Alamiro Plaza, le hizo ver los palos que sobresalían del mar, del vapor de
guerra "Guayas" que había echado a pique el día veintiséis de junio de mil
318 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

ochocientos sesenta y cinco; y le dijo que en ese lugar había hecho fusilar a
sus compañeros José Marcos Tejada y Juan Bohórquez. Seguidamente le
ordenó retirarse al lugar donde estaba sentado. Acto continuo el vapor dio
andar y comenzó a hacer la travesía del golfo para llegar a Puná, con un mar
fuertemente agitado, llegando a este lugar, el día cuatro de julio de mil
ochocientos sesenta y cinco, a las cinco mas o menos de la mañana. En este
momento volvió el señor García Moreno a llamar al Capitán Gaspar Alamiro
Plaza; y señalándole la playa, le dijo que en ese lugar había hecho fusilar al
Coronel José María Vallejo, a su hijo y a otros más; (Vallejo fue fusilado en
Punta de Piedra y no en Puná, como dice don Alamiro Plaza); siguió andando
el vapor y llegó mas o menos a Punta de Piedra, a las ocho de la mañana. En
este lugar hizo alto el vapor; y en este momento, se le puso una escolta al
Capitán Gaspar Alamiro Plaza, se le acercó el Sacerdote, con el objeto de
confesarlo; pero como los valientes señores Coronel don Juan Manuel Uraga,
doctor y Coronel don José Illescas y coronel don Pacífico Aguirre, amigos
íntimos y correligionarios del señor García Moreno, interpusieran su gran
influencia con el señor García Moreno, providencialmente consiguieron el
perdón del condenado a muerte. En este mismo momento el señor García
Moreno, llamó al Capitán Gaspar Alamiro Plaza y le dijo, que en esa playa
había hecho fusilar a varios de sus amigos; y que si a él lo había perdonado,
era porque había sido enterado de lo que había pasado y por ser aún muy
niño; pero que si a su tío el General Guillermo Franco no lo había hecho

Santa Rosa, provincia de El Oro, pueblo que fue escenario de violentos combates durante la revolución urbinista de 1865.
(Dibujo de Vignal, según un croquis de Wiener).
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 319

fusilar, era porque había desaparecido en precipitada fuga de Santa Rosa,


para el Perú; pero que no pasarían ocho días más en ser fusilados por su
orden, en virtud de que el señor Coronel don Antonio Martínez de Aparicio,
indudablemente tenía que tomarlos en Túmbez, tanto a él como a los generales
Urbina y Robles y algunos más.

"Este episodio tuvo lugar el día cuatro de julio de mil ochocientos sesenta
y cinco, fecha en que el Capitán Gaspar Alamiro Plaza cumplía diez y siete
años de edad. Saltó al medio día en Guayaquil, completamente libre, en donde
el señor doctor Manuel Bravo, en unión de muchas personas, lo recibieron en
el muelle, frente a la casa de Acevedo, llevándolo primeramente a almorzar a
un hotel; y seguidamente lo condujeron a casa de su señora madre doña María
Gertrudis Cevallos y Zevallos quien lo recibió con un placer indecible; y al
propio tiempo agradeciendo afectuosamente a todas las personas que tuvieron
la amabilidad de llevarle su hijo a su casa". (509)

El 5 de julio de 1865 García Moreno dirije un oficio a su cuñado Manuel de


Ascásubi, Ministro de Estado en el Despacho de Guerra y Marina, para
conocimiento del Supremo Gobierno, en el que indica que la paz está
restablecida y consolidado el orden con el severo castigo de los piratas y
traidores. Continua textualmente: "Hoy he regresado de Santa Rosa, después
de convencerme de que no quedan enemigos que combatir; y en el acto he
ordenado cese el servicio de campaña y regresen a sus hogares los leales
soldados de la Guardia Nacional, con excepción de la que vino de Guaranda
que seguirá en servicio por algunas semanas más, y con excepción también
de los que andan cazando por los bosques a los salteadores de Las Ramas".

Rafael Carvajal, Vicepresidente de la República, encargado del Poder


Ejecutivo, fue informado al respecto por el Ministro, y este último se apresuró
a contestar el día 11 de julio, al Comandante en Jefe del Ejército, a quien
entre otros considerandos le dice: "Tan plausible acontecimiento es debido a
la especial protección de la providencia, y a la pericia con que V.E. ha
conducido a la victoria a los soldados de la Patria, y al valor y denuedo con
que han combatido, dando V.E. el primer ejemplo, en la memorable Batalla
Naval de Jambelí".

Al siguiente día, Rafael Carvajal emitió el siguiente decreto:

"Rafael Carvajal
Vicepresidente de la República,
Encargado del Poder Ejecutivo.
"Hallándose restablecida la paz en toda la República.
320 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

DECRETO

"Art. lo. El Ejército cesará en su servicio de campaña y los cuerpos


estacionados en los diversos puntos de la República se considerarán en
guarnición.

"Art. 2o. El Ministro Secretario de Estado en el Despacho de Guerra y


Marina queda encargado de la ejecución de este decreto.

"Dado en Quito a 12 de Julio de 1865.- R. Carvajal. El Ministro de Guerra


y Marina.- Manuel de Ascásubi.

"Es copia.- El Jefe de Sección.- Ramón Zambrano".

DELEGACION DE FACULTAD PARA FUSILAR

Dice don Camilo Destruge que "el vértigo se había apoderado de García
Moreno; la locura de la destrucción llegó en él hasta el frenesí. Ya no se
contentó con elegir tales y cuales víctimas y disponer personalmente de sus
vidas. Delegó esa terrible y discrecional facultad a jefes que podían llevar
muy lejos los horrores del exterminio. Se ordenó la matanza en despoblado,
el fusilamiento arbitrario en los campos". (510) Para demostrarlo
transcribimos el siguiente documento.

"No. 18.- República del Ecuador.- Comandancia en Jefe del Ejército.-


Guayaquil, a 8 de julio de 1865.- Al Sr. General Comandante General del
Distrito.

"Sírvase US. disponer que el Capitán Eugenio Tola marche en comisión al


otro lado de esta ría con el objeto de perseguir y aprehender a los salteadores,
ordenándole, pase por las armas a todos los salteadores que aprehenda.- Dios
guarde a US.- G. García Moreno". (511)

Se debía, pues, perseguir al enemigo, capturarlo y luego de ello eliminarlo.


No se contentaba, ni le pasaba por su cabeza el que aquél podía morir
combatiendo. No hubo nobleza en el campo de batalla de su parte, porque
había que pasar por las armas a quienes por desgracia hayan pertenecido al
bando urbinista, en los mismos sitios donde fuesen capturados, sin fórmula
de juicio. ¡Al diablo las acciones sumarísimas! los bandidos no merecen nada,
ni los ampara la Constitución. Así pensaba García Moreno. Era su reinado
de terror en pleno. Con la siguiente orden disponía el asesinato y garantizaba
la impunidad al militar que la cumpla:

No- 23.- República del Ecuador.- Comandancia en Jefe del Ejército.-


Guayaquil, a 10 de julio de 1865.- Al Sr. General Comandante General del
Distrito.
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 321

"Sírvase US. impartir las órdenes respectivas a todas las autoridades


subalternas del Distrito de su mando, previniéndoles que persigan eficazmente
a todos aquellos que hayan pertenecido al bando de los facciosos y piratas, y
que anduviesen convertidos en salteadores, sean pasados desde luego por las
armas, en los lugares donde fueren tomados, a fin de que no sólo quede
restablecida la paz de la República, sino también afianzada la propiedad y la
seguridad individual.- Dios guarde a US. G. García Moreno". (512)

Por supuesto que aquellas órdenes por terribles que sean, tenían que ser
cumplidas. Nadie podía negarse a sus caprichos, so pena de caer en desgracia.
Hubieron, en distintos momentos del garcianismo, coroneles y generales que
recapacitaron por aquellos excesos, pero por ello se ganaron el desafecto y la
ira del Presidente, a extremo de peligrar sus vidas.

El día 19 de julio 1865, el General Secundino Darquea informa del


cumplimiento de sus órdenes, cuando dice: "Señor.- Para conocimiento del
Supremo Gobierno tengo la honra de remitir a US.H. el sumario seguido en
el cantón Daule contra Tomás Farías que plegó con los facciosos en
Samborondón, y que habiendo sido tomado fue pasado por las armas en este
pueblo por disposición de S.E. el Comandante en Jefe del Ejército". (513)

A leguas se nota que a Farías lo pasaron por las armas antes o luego de un
remedo de acción sumaria, redactada para justificar lo injustificable, el
asesinato.

Eso sí, García Moreno era impredecible y cambiante en sus decisiones,


por lo que algunos prisioneros tuvieron suerte y se le siguió el correspondiente
sumario. Tal es el caso del Alférez de Fragata Daniel Cruz, sobre quien dispone
las acciones respectivas con el siguiente oficio:

"No. 28.- República del Ecuador.- Comandancia en Jefe del Ejército.-


Guayaquil, a 11 de julio e 1865.- Al Sr. General Comandante General del
Distrito.

"Por cuanto tengo denuncia de que el Alférez de Fragata Daniel Cruz, que
se halla preso por orden mía en la artillería, tomó servicio en la fila de los
facciosos a bordo del "Washington", ordeno a US. que lo ponga en seguridad
con un par de grillos, y que le mande seguir el correspondiente sumario
recibiendo las declaraciones de los prisioneros y más personas que sean
salteadoras y lo remita a la capital a la brevedad.- Dios guarde a US. G.
García Moreno". (514)

Efectivamente, se le instruyó el respectivo sumario, y es recién el 12 de


agosto de 1865 que el General Vicente González, Comandante General del
Distrito de Guayaquil, dice: "Se halla concluido el respectivo sumario (seguido
al Alférez de Fragata Daniel Cruz), y cumplo con el deber de adjuntarlo a la
322 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

presente nota, a fin de que US.H. (el Ministro de Guerra y Marina) se sirva
ponerlo en conocimiento de S.E. para que resuelva lo que estime conveniente".
(515)

Es decir, el Alférez Cruz tuvo la suerte de un legal tratamiento, que debió


ser aplicado a todos cuantos cayeron prisioneros, para evitar de esa manera
tantos crímenes de Estado, que la verdadera historia hoy juzga.

LOS GUERRILLEROS "GUATUSOS" ASEDIAN SAMBORONDON Y


VINCES

Don Camilo Destruge dice que "por esa época se habían puesto en armas
unos valerosos guerrilleros, a los que se dio el nombre de "Guatusos", a causa
de que fue el punto llamado "Los Guatusos", en Samborondón, el primer lugar
donde se reunieron para emprender en su campaña:

"Los mandaba el Comandante José Layana, quien no vaciló en lanzarse a


la guerra guerreada, a pesar del fracaso que en ella habían sufrido los
anteriores guerrilleros que, al mando de Justo Cantos habían comenzado su
campaña por la sublevación de una compañía de guardias nacionales de la
parroquia de Las Ramas, efectuada a fines de octubre de 1864.

"En los primeros días de junio de 1865, organizada ya una columna, los
Guatusos ocuparon la plaza de Samborondón; y de Vinces les venía enseguida
un refuerzo a cuya cabeza se había puesto Eugenio Manjarrés y Gabriel
Vásquez; comenzando entonces una campaña llena de incidentes y peripecias;
una campaña como todas las de esa especie cuando llegan a formalizarse;
como había sido la de Navas en 1835-1836; como fue más tarde la de los
guerrilleros liberales llamados "Chapulos" (porque iniciaron su acción en el
punto llamado "Chapuletos") y que lucharon desde 1886 hasta fines de 1887.

"Gran actividad y buen número de fuerzas tuvo que desplegar el Gobierno


para la persecución de los "Guatusos", a cuya empresa fueron dedicados jefes
a propósito, como el mismo Coronel Navas, el famoso guerrillero, el Coronel
Pablo Julián Franco y otros". (516)

Don Francisco Arboleda da razón de las actividades de los guerrilleros en


el cantón Vinces, nuevo dolor de cabeza para el Gobierno, con el siguiente
oficio:

"República del Ecuador.- Jefatura y Comisaría del Cantón. Vinces a 30 de


junio de 1865.

"Al señor Gobernador de la Provincia.


COMBATE NAVAL DE JAMBELI 323

"Como anuncié a US. en mi nota anterior, la facción que mandan Layana,


Manjarrés y Vásquez, penetró a esta población a las once del día con doscientos
veinte hombres de infantería y caballería, según la relación verídica de las
personas que los contaron, en el término que los bandidos permanecieron en
la hacienda del señor P. P. García Moreno, distante ocho cuadras de este
pueblo, y fueron rechazados y puestos en completa derrota después de media
hora de crudo combate. El buen éxito que las armas del Gobierno han obtenido
el día de hoy, se debe exclusivamente al denuedo y bizarría del malogrado
Mayor Boza que murió luchando contra cinco y en los momentos mismos de
la derrota, y al valor del Capitán José María Córdoba, de los subtenientes
José Peña y Salvador Cadena. Es notable que treinta hombres del Gobierno,
hayan bastado para derrotar a doscientos veinte facciosos que huyeron
despavoridos al ver muertos a cuatro de sus compañeros. En este combate
desigual se han portado los soldados con la bravura digna de la causa que
defienden, haciéndose notable el sargento Icaza, el cabo Regalado y los
soldados José Alvarado y Catalino Vera.

"Por los avisos que he recibido hasta este momento que son las cuatro y
media de la tarde, los facciosos dispersos se han reunido en diferentes puntos,
y es de esperar que intenten un nuevo asalto. US. en vista de lo relacionado
se apresurará a mandarme un competente refuerzo para perseguir a los
montoneros en los lugares a donde hayan ido a refugiarse.

"Por nuestra parte sólo ha sido muerto el Mayor Boza y contuso Catalino
Vera.

"Dios guarde a US.- Francisco Arboleda". (517)

Cinco días después dice el Coronel Secundino Darquea lo que sigue: "Me
es honroso asegurar a U.S.H. que en todo el Distrito de mi mando reina el
más perfecto orden y que no existe sino el motín que se levantó en
Samborondón, el que anda huyendo por los montes a consecuencia de la
persecución que se le hace con fuerzas veteranas remitidas de ésta plaza
(Guayaquil) bajo la dirección de buenos jefes; así es que dentro de pocos días
quedará exterminada esa facción y tomados la mayor parte de los revoltosos;
pues hoy mismo he recibido un posta del Sr. Coronel Pablo J. Franco
anunciando la captura de uno de ellos y la constancia con que les persigue en
combinación con los demás jefes a fin de conseguir el objeto indicado". (518)

El Gobernador de la Provincia de Los Ríos había dicho que no tiene fuerzas


para proteger a Vinces, por lo que de Guayaquil se envió el lo. de junio una
compañía del Batallón No. 1, compuesta de 60 hombres a órdenes del Teniente
Coronel Manuel S. Arévalo, y 25 individuos de caballería al mando del Coronel
Habacúe Franco, a fin de que con esa columna hostilicen a los facciosos y los
persigan en todas direcciones, obrando de acuerdo con el Coronel Pablo Juliano
Franco que se hallaba en Samborondón, hasta conseguir la completa
324 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

pacificación de esos pueblos, bien sea aprehendiendo a los cabecillas o


dispersándolos completamente. (519)

Destruge continua su narración al respecto: "Larga fue esta campaña; larga


y agitada, al punto de que, vista la imposibilidad de acabar con los guerrilleros
por medio de las armas, se apeló a los medios de conciliación.

"Por medio del Coronel Arévalo, amigo de Layana, se consiguió que éste y
muchos, la mayor parte, se acogieran a un indulto; y el 30 de agosto se
presentaron y depusieron las armas. Y sin embargo de haber mediado la
formalidad de un compromiso y de un indulto, Layana fue puesto en dura
prisión y no obtuvo su libertad, mediante fianza, hasta el 6 de octubre.

"No dieron menos que hacer los guerrilleros del Comandante Castellanos,
hábil en esa clase de campañas, y de valor bien acreditado.

"Esa partida se presentó, después del combate en Dos Esteros, el 18 de


septiembre al coronel Franco, acogiéndose al indulto. Castellanos vino a
Guayaquil y se presentó al Comandante General; fue también puesto en
prisión, y recobró la libertad el 18 de octubre.

"El resto de los guerrilleros se dispersó en distintas direcciones; se les


persiguió activamente; unos fueron capturados y fusilados, y pocos lograron
escapar.

"Parece ser que, después de tanta sangre como se había derramado en


numerosas ejecuciones sin fórmulas de juicio, se había aplacado la sed de
venganza en el presidente García Moreno, cuando salieron con vida muchos
de los aguerridos "Guatusos" de Layana y Castellanos". (520)

ASCENSOS EN PREMIO A LOS BUENOS SERVICIOS EN CAMPAÑA

El Dr. Gabriel García Moreno, Presidente de la República y Comandante


en Jefe del Ejército durante la campaña de Jambelí, decidió recompensar a
los jefes y oficiales del Ejército, Marina y Guardia nacional, por el destacado
desempeño durante la campaña de Jambelí contra las fuerzas urbinistas.

Consideró aquél que el triunfo en las aguas de Jambelí el 26 de junio de


1865 fue gracias al esfuerzo y lealtad de quienes conformaban las fuerzas del
Gobierno. Estaba contento en medio de tanto desangre, y el día 6 de julio se
dio tiempo para escribir con su puño y letra una comunicación dirigida al
Comandante General del Distrito de Guayaquil, con la que ordenaba publicar
dichos ascensos por la Orden General del mismo día, para que gocen de sus
empleos, grados y honores.

En aquella comunicación detalló él mismo, los nombres de los ascendidos,


COMBATE NAVAL DE JAMBELI 325

N
el grado o empleo con que participaron en el conflicto, y finalmente la jerarquía
a la que fueron ascendidos. En el documento es fácil apreciar su propia letra,
la que comparando es igual a la de su firma. Podemos deducir de aquello que
García Moreno era incapaz de aceptar influencias en dichos casos, aunque sí
asesoramiento, pero que la decisión final fue suya.

El original del mencionado documento, lo podemos encontrar en el Archivo


Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil, para el análisis meticuloso
de su autenticidad. Lo transcribimos a continuación:

"No. 16.- República del Ecuador.- Comandancia en Jefe del Ejército.-


Guayaquil, a 6 de julio de 1865.- Al Sr. Coronel Comandante General.

"En premio de los servicios de la presente campaña, he tenido a bien


conceder los ascensos siguientes, bien entendido que los generales y coroneles
serán propuestos a la próxima Legislatura:

NOMBRE DE LOS ASCENDiDOS GRADO O EMPLEO ASCENSO

Secundino Darquea Coronel Efectivo General


José Martínez Aparicio Coronel Efectivo General
Juan Manuel Uraga Capitán Grdo. de Navío Capitán Efec. de Navío
Francisco Martínez Capitán Grdo. de Navío Capitán Efec. de Navío
Manuel Santiago Yépez Teniente Coronel efectivo Coronel Grdo.
Juan Avila Teniente Coronel efectivo Coronel Grdo.
Manuel Sixto Arvelo Teniente Coronel efectivo Coronel Grdo.
José María Quirós Teniente Coronel efectivo Coronel Grdo.
Marcelino Maridueña Sargento Mayor efectivo Teniente Coronel Grdo.
Juan León Arcia Sargento Mayor efectivo Teniente Coronel Grdo.
José Murgueitio Sargento Mayor efectivo Teniente Coronel Grdo.
José Gutiérrez Sargento Mayor efectivo Teniente Coronel Grdo.
Guillermo Pareja Sargento Mayor graduado Sargento Mayor efectivo
Santiago Pazos Sargento Mayor Sargento Mayor efectivo
Baldemiro Haz Sargento Mayor Sargento Mayor efectivo
Dario Capelo Capitán efectivo Sargento Mayor Grdo.
Antonio José de Sucre Capitán efectivo Sargento Mayor Grdo.
Estanislas Andrage Capitán efectivo Sargento Mayor Grdo.
Modesto Alvarez Capitán efectivo Sargento Mayor Grdo.
José Mercedes Brito Capitán efectivo Sargento Mayor Grdo.
Francisco Parreño Capitán graduado Capitán Efectivo
Joaquín Pástor Capitán graduado Capitán Efectivo
Pedro Moncada Capitán graduado Capitán Efectivo
Antonio Murrieta Teniente Capitán Graduado
José Espinoza Teniente Capitán Graduado
Víctor Villalobos Teniente Capitán Graduado
Manuel Lombeida Teniente Capitán Graduado
326 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Manuel Luna Teniente Guardia Nacional Veteranizado en su empleo


Domingo Durán Teniente Capitán graduado
Manuel Bermeo Subteniente Teniente
Domingo Castillo Subteniente Teniente
Servilio Morlás Subteniente Guardia Nacional Veteranizado de Subteniente
Manuel Egüez Alférez Teniente
Vicente Figueroa Alférez Teniente
Mariano Guerrero Alférez Teniente
Diego Sánchez Alférez de Navío Teniente de Fragata
Tiburcio Lecaro Alférez de Fragata Alférez de Navío
Tomás Matos Alférez de Fragata Alférez de Navío
"Quedan veteranizados en sus grados y empleos, los siguientes oficiales de la Guardia Nacional;
Francisco Mazines Capitán Grdo. de milicias, veteranizado de Capitán
graduado.
Manuel Luna Incluido en la lista preinserta
Juan Ignacio Junco Veteranizado de Subteniente
Vicente Alvarado Veteranizado de Subteniente
Manuel Carvajal Veteranizado de Subteniente
Manuel Mosquera Veteranizado de Subteniente
Basilio Camargo Veteranizado de Subteniente
Casimiro Engracia Veteranizado de Subteniente
Servilio Morlás Incluido arriba

"Sírvase US. publicar estos ascensos por la Orden General de este día,
para que gocen de sus empleos, grados y honores los ascendidos, mientras
vengan los despachos que hoy pido al Ministerio de Guerra y Marina.- Dios
guarde a US.- G. García Moreno" (521)

El Capellán de la Fuerza Expedicionaria del Gobierno, Presbítero Juan


García Vernaza, quien, según don Gaspar Alamiro Plaza, era de origen
colombiano, recibió por sus importantes servicios el título de Capellán de la
Artillería, por orden del mismo Presidente, quien dispuso textualmente el 6
de julio al Coronel, desde ese día General, Secundino Darquea, lo siguiente:
"En consideración a los servicios importantes que ha prestado el presbítero
Juan Evangelista García Vernaza en su calidad de Capellán de la Fuerza
Expedicionaria durante el Combate de Jambelí, he tenido a bien disponer,
en uso de las facultades de que me hallo investido, que continúe desempeñando
aquel empleo, y en lo sucesivo con el título de Capellán de la Artillería. Lo
que comunico a US. para su inteligencia". (522)

En lo que corresponde al Subteniente Vicente Alvarado, se dice que S.E. el


Comandante en Jefe creyendo que era de milicias lo veteranizó en su clase
en los ascensos que confirió, pero informado posteriormente que su empleo
era de Ejército, ordenó por comunicación fechada el 11 de julio, que fuese
reconocido como Teniente de la misma arma. (523)
COMBATE NAVAL DE JAMBELI 327

RECOMENDACION DE ASCENSOS PARA OFICIALES DE MARINA


QUE ESTUVIERON PRISIONEROS

Habíamos mencionado que al ser tomado el vapor de guerra "Guayas" por


los revolucionarios urbinistas, el 31 de mayo, cuatro oficiales navales del
buque fueron capturados y tratados como prisioneros, permaneciendo en el
mismo hasta su liberación por parte de las fuerzas del Gobierno, el 26 de
junio, luego del Combate Naval de Jambelí, en que dicho vapor fue echado a
pique.

El capitán de Navío Juan Manuel Uraga, ya reincorporado a la Jefatura


General de Alta Policía, se dirigió por escrito al Comandante General del
Distrito, con fecha 12 de julio de 1865, para en obsequio a la justicia y en
cumplimiento de su deber como Jefe de Estado Mayor de la Fuerza
Expedicionaria, recomendar al Supremo Gobierno, por ese órgano regular,
los ascensos inmediatos a los oficiales de Marina, que hallándose abordo del
"Guayas" fueron sorprendidos por el vapor "Washington" y tomados
prisioneros hasta el triunfo de las fuerzas del Gobierno. (524)

Dice Uraga que aquellos fueron además enteramente saqueados y robados


"por dichos facciosos". Son ellos los Tenientes de Fragata César Guedes y
Manuel Silva, para quienes propone el ascenso a Capitán de Corbeta; al Alférez
de Fragata Ricardo Darquea el de Alférez de Navío; y al Guardia Marina
Diego Matos el grado de Alférez de Fragata. (525)

El General Secundino Darquea transmitió esa solicitud al Supremo


Gobierno, pero aquellos ascensos fueron negados por las razones que se
explican en el siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Ministerio de Estado en el Despacho de Guerra y


Marina.- Quito, a 9 de agosto de 1865.- Sr. Comandante General del Distrito
de Guayaquil.

"Habiendo dado cuenta en el Despacho del Supremo Gobierno, con la


estimable nota de U.S. de fecha 2 del corriente, No. 295, en la que transcribe
el oficio pasado a esa Comandancia General por el Sr. Coronel Uraga, el 12
del anterior, recomendando, para sus inmediatos ascensos, a los Tenientes
de Fragata César Guedes y Manuel Silva, al Alférez Ricardo Darquea, y al
Guardia Marina Diego Matos, S.E. el Presidente del República ha dispuesto
diga a U.S. que la lealtad de que hace mérito el Coronel Uraga en su propuesta,
no es un título para conferir ascensos; pues no han hecho otra cosa que cumplir
con su deber; que dichos oficiales están suficientemente recompensados,
conservándolos en sus destinos; porque la tripulación y guarnición del
"Guayas" no hizo resistencia alguna, cuando fueron asaltados por el
"Washington", Dios guarde a U.S.- Francisco J. Salazar". (526)
328 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Considerando no necesaria su presencia o por lo menos imprescindible, el


Dr. Gabriel García Moreno emprende el retorno a Quito, a cuya capital arriba
el 16 de julio de 1865. Allí ordenó una solemne misa en la Catedral, en acción
de gracias por el éxito de su campaña. Para ello le pide al nuncio apostólico la
oficie. Monseñor Tavani, que probablemente no estaba de acuerdo con tantas
ejecuciones, le contestó que su Ministerio es de paz, y se excusó.

El Presidente se disgustó, e indignado dispuso que se le cierren las puertas


de la Catedral al representante del Papa, es decir que Monseñor no podía
ingresar a su propia y universal iglesia. Ironías de la vida, aunque no
sorprendente en la historia, cuando de las actuaciones de García Moreno se
trata.

El mismo día 16, Carvajal entregó el poder a García Moreno emitiendo el


siguiente decreto:

"Rafael Carvajal, Vicepresidente de la República, encargado del Poder


Ejecutivo.

"Habiendo regresado a esta Capital el Excmo. Sr. Presidente de la


República.

"Decreto,

Art. Unico: El Excmo. Sr. Presidente de la República reasume desde hoy


el ejercicio del Poder Ejecutivo.

"Dado en Quito, a 16 de julio de 1865

"Rafael Carvajal

"El Ministro del Interior, Pablo Herrera".


CAPITULO IX

Acontecimientos
posteriores
al conflicto y fin de
período presidencial
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 331

ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL
CONFLICTO Y FIN DE PERIODO
PRESIDENCIAL

videntemente que habiendo perdido la Marina ecuatoriana su único


buque de guerra, el vapor "Guayas", al terminar el conflicto interno de
1865 sólo quedaban algunos buques mercantes y fluviales, que por las
circunstancias fueron tomados y armados en guerra por el Gobierno y por los
urbinistas, pero finalmente todos quedaron en poder de las fuerzas
constitucionales. Son estos los vapores "Talca", "Smyrk", "Washington" y
"Bernardino" a más de los bajeles de propulsión a la vela.

Estos buques tuvieron diversas suertes, empezando que los dos primeros
tuvieron que ser devueltos a sus dueños originales, una vez que culminó el
conflicto. En cambio el "Washington" , "Bernardino" y más bajeles urbinistas
fueron considerados buena presa, pasando a ser propiedad de la Nación, todo
esto en medio de duras reclamaciones de parte de quienes se vieron
perjudicados. Iremos analizando uno a uno los diferentes casos.

EL VAPOR "SMYRK"
Como habíamos mencionado, el Dr. García Moreno retornó a Guayaquil el
día 5 de julio, de su ulterior campaña, para dejar pacificado Santa Rosa y
pueblos aledaños, lo hizo en el vapor "Smyrk". (527) Aquel buque llevaba su
nombre en honor al joven Taylor C. Smyrk, fundador de una de las compañías
fluviales, cuyos buques navegaban en nuestros ríos, y quien murió ahogado
en aguas del río Guayas, luego de caer de cubierta el día 7 de febrero de 1862.
Según don Camilo Destruge el "Smyrk" pertenecía a la empresa propietaria
del vapor "Washington", y si es así, a la compañía de navegación por vapor
del Guayas, presidida por el mismo Mateo Palmer Game. (528)
332 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

El mismo día de su arribo, el Dr. Gabriel García Moreno dispuso se lo


devuelvan a su armador o propietario, por lo que el Capitán de Navío Francisco
Javier Martínez procedió a cumplir dicha orden en forma inmediata, y lo
comunica con el siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Capitanía del Puerto.- Guayaquil, a 6 de julio de


1865.- Al señor Coronel Comandante General del Distrito.

"Pongo en conocimiento de US. que, con fecha de ayer, fue entregado el


vapor "Smyrk" que estaba a mi cargo, por orden de S.E. el Comandante en
Jefe del Ejército; como también, haber desembarcado todos lo elementos de
guerra que allí existían, según las listas que al respaldo se expresa.

"US. se servirá disponer a quien debo entregar dichos artículos para recoger
el correspondiente recibo.- Dios guarde a US.- F. J. Martínez". (529)

Cesaba de esa manera el Capitán de Navío Francisco Martínez en el


comando del vapor "Smyrk", cuyo cargo titular era el de Capitán del Puerto
de Guayaquil, y que por motivos del conflicto lo reemplazaba accidentalmente
el Teniente de Fragata Francisco Mora.

Aprovechamos la oportunidad para mencionar que el día 2 de julio de


1865, en una de las últimas navegaciones efectuadas por el vapor "Smyrk",
al mando del Capitán de Navío Francisco J. Martínez, en circunstancias en
que transportaba a Santa Rosa al Dr. Gabriel García Moreno, tomaron por
las pampas de Callancas a la balandra peruana "Angelita", que había salido
de Túmbez el 30 de junio y despachada para el Puerto de Guayaquil. (530)

Aquella balandra, al mando de Tomás Torres, no tomó el rumbo directo a


su destino sino una ruta distinta, hasta que fue capturada por el "Smyrk".
Por ser ésta una actitud sospechosa, ya que desvió su rumbo en circunstancias
de revuelta en el país, se dispuso la apertura de una sumaria averiguación,
para conocer los motivos de su dudosa presencia en el sector.

Llevó a cabo el auto cabeza del proceso el Teniente de Fragata Francisco


Mora, Capitán del Puerto accidental de Guayaquil, por ausencia del titular,
pero de la lectura del mismo sólo se desprende, que por un pequeño temporal
sufrieron el derrame del agua del único barril que tenían, y que se desviaron
sobre chupadores con el objeto de tomar agua y unas cabezas de plátanos en
algún lugar cercano. (531)

Igualmente se dice que regresó el día 8 de julio a Guayaquil, procedente


de Naranjal la balandra peruana "Jorge Juan", la que zarpó en días pasados
sin el despacho de la Capitanía del Puerto, sabiendo que no podía hacer el
cabotaje con bandera extranjera, por lo cual fue arrestada junto a su piloto y
dueño de igual nombre, Jorge Juan, para la averiguación sumaria
correspondiente. (532)
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 333

Realmente, por el momento que se vivía, toda embarcación que navegaba


sin las formalidades de ley„ debía ser considerada sospechosa, y las
autoridades desplegaron amplias investigaciones para descartar que éstas
estaban ayudando a los revolucionarios urbinistas.

VAPOR "WASHINGTON", BUENA PRESA

El 10 de julio de 1865 Mr. L. Prevost, por encargo del Ministro residente


de los Estados Unidos de Norteamérica, Honorable Federico Hassanrek, se
dirigió por escrito al Gobernador de la Provincia del Guayas, Sr. Miguel García
Moreno, para manifestarle que el vapor "Washington" es propiedad de una
compañía, en la cual algunos ciudadanos norteamericanos tienen sus
intereses, y que esa compañía jamás autorizó procedimientos ilegales ni
hostiles al Gobierno del Ecuador. Que su objeto no era otro que el de realizar
viajes regulares entre el puerto de Guayaquil y Bodegas, y ni el Capitán ni
ninguno de sus empleados tuvo autorización para usar el buque en otros
fines. (533)

Dice, además, que el Gobierno estaba en la obligación de proteger al vapor


contra toda agresión, mientras navegare en las aguas del Ecuador. Protección,
en caso necesario, contra todo acto ilegal u hostil de su mismo Capitán y
tripulación. Que la compañía vio con satisfacción que una armada salió de
Guayaquil con el propósito de recapturar los buques tomados por los piratas.
(534)

Termina indicando que la referida expedición regresó a Guayaquil el 28


de junio, habiendo logrado su objeto, y sin embargo, el vapor "Washington"
ni ha sido devuelto a sus legítimos dueños, ni se ha dado oficialmente la
razón en virtud de la cual está detenido en poder del Gobierno, por lo que
solicita su devolución. (535)

Por su parte el Comisario de Policía de Guayaquil hizo comparecer a


algunos ciudadanos, los cuales estuvieron embarcados en el vapor
"Washington" como pasajeros en el momento de ser tomado, para bajo
juramento receptarles la debida declaración. Esta diligencia se llevó a cabo
el 7 de junio, es decir antes del Combate Naval de Jambelí. A continuación
transcribimos dos de ellas:

"En el mismo acto el Sr. Comisario de Policía hizo comparecer al Sr. Manuel
Borja , a quien se le juramentó en todas las formas de derecho, e instruido de
las pena de perjurio fue examinado con arreglo al auto y dijo:
334 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Que el 31 del mes pasado se embarcó el declarante en el vapor


"Washington" en Bodegas, en unión de muchos pasajeros desconocidos y que
solo a un joven Morales que vino de Ambato lo conoció; que estando a fás 3 de
la tarde el vapor pegado a la isla de Guare cogiendo leña, le salieron como de
25 hombres a 30 armados y se embarcaron en el vapor muy silenciosamente, •
de manera que casi ni sintió el exponente, sino cuando ya estaban todos
adentro; que después vio que un Sr. Marcos, jefe de ellos se dirigió al Capitán
y se pusieron a hablar los dos; que no sabe los nombres de los dos pasajeros
que le dijeron que habían embarcado esa gente, con el objeto de asaltar por la
noche el vapor de guerra "Guayas", que a uno de ellos, Juan Heredia, le oyó
decir "esta noche vamos a morir o vencer", que de todos conoció al Sr. Marcos,
a Heredia y a un joven Jorge Tola, que estaban también armados con las
mismas armas que tenían ellos, que eran dos o tres escopetas, trabucos,
cuchillos, una lanza, pistolas y unas hachuelas, que después subieron en el
vapor dos cuadras más, en donde pasaron el vapor a tomar más leña, que de
allí siguieron la marcha hasta la balsa de Olivo, en donde hicieron saltar a
todos los pasajeros, sujetando al Dr. Eguiguren, obligándolo a no saltar, que
después se vinieron ellos adelante para esta ciudad, que no sabe más. Se
ratificó que era mayor de edad y no le comprenden los generales de la ley y
firmó con el Sr. Comisario. Doy fe. Francisco Frías, Manuel Borja. Mtro.
Guzmán Mde. En Guayaquil a 7 de junio de 1865.

"El Comisario de Policía hizo comparecer al Sargento primero de caballería


Salvador Morillo previo el permiso respectivo, a quien se le juramento en
toda forma de derecho e instruido de las penas de perjurio, fue examinado y
dijo:

"Que el día miércoles 31 del corriente, se embarcó el exponente en Bodegas


a las 10 y media en el vapor "Washington" en segundo pasaje, que estando un
poco más adelante de la casa de Agustín Tola, pegó el vapor a la orilla donde
habían unas tareas de leña; que en el acto se asomó un individuo, desconocido
para el exponente, por tierra con una carta que entregó subiendo arriba; que
después que bajó despidiéndose este individuo y aún estando ya en tierra,
vio el declarante que asomaron dos canoas cargadas con gente que serían
como 25, los mismos que subiendo al vapor, se regaron en popa y proa y saltó
inmediatamente el Capitán a tierra y se puso a conversar muy quedo con el
Comandante Heredia y luego después regresando el Capitán al vapor, dijo
en alta voz a los pasajeros "estamos perdidos, lo enemigos del Gobierno se
han tomado el vapor para armarlo en guerra"; que a esto contestaron todos
los pasajeros, entre ellos el Dr. Eguiguren, que si el buque estaba tomado los
dejara a ellos en tierra; entonces explicó el Capitán del vapor diciéndoles: "yo
también estoy preso, hablen ustedes con los que mandan", que después
caminando muy despacio llegaron con el vapor hasta la balsa de Olivo, en
donde a muchas instancias de los pasajeros hicieron saltar allí a varios,
inclusive al exponente, que como paje de la Sra. Rosario Echevarría lo dejaron
por empeño de la expresada Sra. Llevándose consigo a los pasajeros y algunas
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 335

mujeres, que los demás que estaban allí cree el exponente que serían del
partido de ellos, porque no hicieron mención de saltar, que del vapor al pegar
en Olivo partió una canoa de ellos mismos, de tres que llevaron hasta allí a
remolque, incluyéndose la canoa de un hombre que pasaba con un quintal de
arroz, una caja de dinero en billetes que llevaba; que al tiempo que lo tomaron
los del vapor, con las olas que hacía se fue a pique con el quintal de arroz y
sólo la caja pudieron salvar, que cuando llegó el vapor y dejó los pasajeros en
Olivo, mandaron antes al bote con dos individuos a la balsa de arriba, que de
regreso el bote, cortaron las sogas de las canoas y las soltaron, todas tres,
aguas arriba y siguió caminando solo el vapor para esta ciudad; que de los
individuos que asaltaron el vapor pudo conocer al Comandante Heredia, un
tal Alférez Ríos de Milagro, al Sargento Gurumendi (el cholo) y a José
Mercedes (el yerbatero); que ellos cargaban tres armas: hachuela, puñal y
revólver, y los jefes trabucos y dos con fusiles y dos con escopetas,
habiéndoseles dado hachuelas después hasta a los sirvientes del vapor, que
después se vinieron en un bote la Sra. que indica y un dependiente del Sr.
Roditi, y el declarante se vino en una canoa. Leída que le fue se ratificó que
es mayor de edad y sin generales y firmó con el Sr. Comisario, doy fe, Salvador
Morillo". (536)

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Fotografía de una iglesia guayaquileña tomada por el mismo Castro en 1864, la que muy probablemente sea la iglesia de la
Concepción pues estuvo ubicada en el mismo sitio de aquellla. Es decir en donde actualmente está el Museo del Bombero.
336 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

El Gobierno, por su parte, inició el procedimiento ante la Corte Suprema


de la República a fin de que el vapor "Washington" sea adjudicado como "buena
presa", y así lo comunica el Gobernador Miguel García Moreno al Cónsul de
los Estados Unidos en Guayaquil, Mr. L.V. Prevost, el día 12 de julio de
1865, a más de indicarle que este buque está retenido como tal.

Aquel diplomático le contesta que se halla sorprendido por lo actuado, y


dice textualmente: "Ninguna noticia de tales procederes ha sido dada a los
interesados, sin embargo que desde el 28 de junio, día en que regresó con el
vapor "Washington" la expedición encabezada por S.E. el Presidente de la
República, hasta hoy, han transcurrido tres semanas durante cuyo tiempo
esa noticia pudo y debió darse. Sea que el Gobierno considere el "Washington"
como una presa o como un buque capturado; sea o no que el vapor fuese
tomado en cumplimiento de la obligación que tiene el Gobierno de mantener
la policía de sus ríos, todo procedimiento en el asunto debió comenzar
inmediatamente después de la llegada del vapor a este puerto y sin una
innecesaria e injustificable pérdida de tiempo.
"El infrascrito siente decir que en lugar de someterse inmediatamente la
cuestión -si tal cuestión pudiera caber en este caso- a los tribunales, el gobierno
retuvo e hizo uso del vapor sin el consentimiento de sus dueños y lo mantuvo
fuera del poder de aquellos a quienes corresponde, prohibiendo que el
Presidente de la compañía fuese a bordo y siendo así causa que la maquinaria
pueda ser averiada o tal vez, irremediablemente perdida por descuido o mal
trato, por todo lo cual, así como por la ilegal detención del buque y consecuente
pérdida de beneficios para la Compañía, las partes interesadas tendrán que
acudir al Gobierno de V.E. por una compensación. Como V. E. se ha negado a
devolver el Vapor a sus legítimos dueños. Viene a ser un deber del infrascrito
protestar en nombre de los ciudadanos americanos interesados en el
"Washington" contra la acción del Gobierno, sometiendo el caso al Ministro
Residente de los Estados Unidos". (537) Miguel García Moreno era poseedor
de un recibo firmado por el General José María Urbina por el empréstito del
vapor "Washington", lo cual resultaba comprometedor para el Capitán de
aquel buque, pues con él se demostraba que estuvo de acuerdo con los
revolucionarios. Con el siguiente oficio se acusa recibo del mismo, y del trámite
que se da para agregarlo a la causa seguida:
"Ministerio del Interior.- Quito, 19 de julio de 1865.- Al Sr. Gobernador de
la Provincia del Guayas.
"El recibo dado por el ex-General Urbina al Capitán del "Washington",
que V. S. acompaña a su estimable nota, señalada con el No. 82, lo he remitido
por órgano del Ministro de la Guerra a la excelentísima Corte Suprema de
Justicia, a fin de que sea agregada a los otros documentos que deben servir
para la resolución que este Tribunal debe pronunciar en este asunto.- Dios
guarde a Vs.- (f) Pablo Herrera". (538)
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 337

El Dr. Mariano Miño, Apoderado del Sr. Mateo Palmer Game, según una
autorización entregada por éste, presenta la defensa ante la Corte Suprema
en los siguientes términos:

"Que el 31 de mayo por la noche una partida de insurrectos, al mando del


Capitán José Marcos asaltó en la isla de Guare al vapor mercante
"Washington", y apoyados en él, abordaron en la misma noche al vapor de
guerra "Guayas" dando muerte a su Comandante Diego Matos, procediendo
enseguida a hacer la guerra al Gobierno legítimo.

"Apercibido de este hecho, S.E. el Presidente de la República, expidió el


decreto de 6 de junio último declarando piratas a los que asaltaron dichos
buques "Washington" y "Guayas", y como tales fueron pasados por las armas,
regresando los enunciados buques y otros más en que se apoyaba la facción.

"Cuando era de esperarse que el Gobierno próvido y justo devolviese


oficiosamente la propiedad del "Washington" a mis representados se ha visto
con sentimiento negarse a la justa reclamación hecha por medio del
representante norteamericano, previniendo se ocurra a V.E. a quien por el
párrafo 17 del art. 2o. de la ley orgánica judiciaria compete el conocimiento
de las causas sobre presas marítimas como lo demuestran las copias
certificadas (número 2). En virtud pues de dicha resolución y con el derecho
perfecto que asiste a mis representados me dirijo a la notoria integridad de
U.E. con el objeto de manifestar que el vapor "Washington" no es, ni ha podido
ser buena presa, y que el detenido bajo este aspecto se ha inferido un ataque
a la propiedad de mis representados, y un fuerte agravio a la Nación
norteamericana. Es un hecho constante y reconocido por el mismo Gobierno
que la aprehensión del vapor "Washington" ha sido un acto de piratas y como
tal perseguido y transmitido a los representantes de las naciones aliadas,
según el texto genuino del mencionado decreto de 6 de junio y de las
declaraciones insertas en el diario del Guayas No. 99 y por la comunicación
del Sr. Gobernador del Guayas dirigida al Sr. Ministro Hassanrek en lo. del
mismo junio, cuya copia certificada presento (bajo No.3), de consiguiente, al
pretender el Gbno. que el "Washington" se declare buena presa, es proceder
contra sus propias comunicaciones y lo que es más remarcable, sobreponerse
a las leyes patrias y al tratado vigente entre la Rep. del Ecuador y los EE.UU.
de América, lo que paso a manifestar en su orden.

El Art. 626 de nuestro código civil no atribuye al Estado el derecho de


hacer buena presa sino únicamente de las propiedades que tomase en guerra
de nación a nación, sujetándose a lo que dispongan las leyes especiales; y
para que semejante disposición pudiese comprender la expresa del vapor
"Washington" sería preciso que la horda de insurrectos fuese considerada
como nación y que se supiese igualmente la previa declaratoria de guerra, lo
que hubiera sido un procedimiento contradictorio desde que el Gobierno ha
reconocido y declarado piratas a estos malhechores y los ha hecho reconocer
por tales a las naciones amigas y muy especialmente a las que pertenecen
338 HISTORIA MARITTMA DEL ECUADOR

mis representados.

"Así es que si algún buque norteamericano o de cualquier otra nación amiga


excitado por un respectivo agente, en virtud de la indicación del Gbno.
ecuatoriano, hubiera represado los vapores "Washington" y "Guayas", habría
sido escandalosa la pretensión de hacerles buena presa, por qué no los buques,
sino los insurrectos eran los piratas. Si se sigue consultando dicho código
civil, se verá que en su Art. 627 declara que las presas hechas por bandidos,
piratas o insurrectos no transfieren dominio y que represadas deben
restituirse a sus dueños, pagando estos el premio de salvamento a los
represadores, cuyo premio o rescate no debe exigirse de mis representados,
como lo manifestaré a su tiempo.

"Las anteriores disposiciones son leyes patrias, igualmente aplicables a


todos los ecuatorianos y extranjeros, y más apremiante su aplicación desde
que ellas están conformes con el Art. 10 del tratado del 13 de junio de 1830,
celebrado entre esta Rep. y la de los EE.UU de América, cuyo tenor es el
siguiente: "Todos los buques, mercaderías y efectos pertenecientes a los
ciudadanos de una de las partes contratantes que sean apresados por piratas,
bien sea dentro de los límites de su jurisdicción o en alta mar, y fuesen llevados
o hallados en los ríos, radas, bahías, puertos o dominios de la otra, serán
entregados a sus dueños, probando estos en la forma propia y debida sus
derechos antes los tribunales competentes, bien entendido que el reclamo ha
de hacerse dentro del término de un año por las mismas partes, sus apoderados
o agentes de los respectivos gobiernos ".

"Sin necesidad de interpretar o comentar este artículo estará U.E. en


conocimiento de que el Gbno. por un deber de rigurosa justicia se encuentra
altamente comprometido a devolver a sus dueños todos los buques,
mercaderías y efectos pertenecientes a los ciudadanos de las partes
contratantes que sean apresados por piratas, ya en los límites de su
jurisdicción, ya en alta mar, sin otro requisito que probar sus derechos en la
forma propia y debida dentro del término de un año.

"Mas sin invocar el tratado y atendidas nuestras leyes patrias, no puede


el Gobierno gravar a mis representados con el precio de rescate, ya que el
Art. 627 del código civil ya citado solo concede esta recompensa como estímulo
para la codicia de los represadores particulares, ya porque el Gobierno está
obligado a proteger sin emolumento ni recompensa alguna los intereses de
los ciudadanos de los E.U., amigos y aliados; y ya finalmente porque esta es
la práctica constantemente establecida en las repetidas y frecuentes
revoluciones, en que el Gobierno, ha devuelto las embarcaciones tomadas
aún por simples conspiradores. ¿No es un contraprincipio pretender se declare
buena presa el vapor "Washington", después de que un decreto ejecutivo
declara y castiga como piratas a sus autores?

"A la imparcial justificación de U.E. incumbe estrechar y consolidar con


ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 339

un fallo justo y acertado los vínculos de amistad entre el Ecuador y la


República de Norteamérica. En virtud de lo expuesto y de la luz que arrojan
los documentos presentados a V.E. suplico se sirva declarar que el vapor
"Washington" no es buena presa, previniendo su devolución con expresa
condenación de costos, daños y perjuicios.- Es justicia que imploro con el
juramento mío en derecho.- (f) Mariano Miño". (539)

El Capitán del vapor "Smyrk", Mr. George Pragdon, quien se había


desempeñado como capitán del "Washington", antes de su captura, se presentó
ante el Cónsul de los Estados Unidos de Norteamérica en Guayaquil, el 21 de
agosto, y efectuó una intersante declaración juramentada, con que aclara
pormenores de los sucesos. Transcribimos seguidamente el detalle que hace
al respecto dicho Cónsul, sobre lo dicho por Pragdon:

"Que es ciudadano de los Estados Unidos de América, de edad de 35 años,


que él mandó el vapor titulado "Washington" dos años, hasta el lo. de mayo
de 1865. Que dejó el mando de dicho vapor "Washington" por haber hecho
arreglos más ventajosos con E. Lee para mandar el vapor nombrado el
"Smyrk".

"Que Eduardo Game fue nombrado Capitán del 'Washington" en su lugar,


pero no pudiendo hacerse cargo de él en ese tiempo por enfermedad, Francisco
Game fue nombrado provisionalmente hasta que dicho Eduardo Game se
mejorase.

"Las instrucciones recibidas del Presidente de la compañía, señor Mateo


P. Game, fueron siempre de no comprometer el vapor de ningún modo posible,
de no dejarlo tomar por partidas revolucionarias o insurrectos, pero que en
caso de ser tomado por fuerzas mayores, de abandonar el vapor y
desembarcarme con toda mi tripulación.

"Estas han sido las instrucciones dadas a los capitanes de los vapores de
la compañía, y las mismas instrucciones fueron dadas en mi presencia a Diego
Sánchez (Teniente de Fragata), cuando fue capitán del "Bolívar" después de
la recuperación de los rebeldes en 1864.

"Que los capitanes de dicha compañía nunca han tenido autoridad para
alterar los viajes regulares de los vapores de la compañía de su mando; que
durante sus permanencias en Bodegas, podían fletar los vapores para viajes
extraordinarios, siempre que dichos viajes no alteraran los ordinarios empleos
de la compañía; que los susodichos viajes regulares se hacían en tres días con
parada de dos días en Bodegas y otros tantos en Guayaquil, cualquier arreglo
de extra fletamentos durante su estadía en Guayaquil, debían hacerse con el
Presidente de la compañía.
340 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Que el deponente dice que no tiene intereses en el vapor "Washington" y


que no es acreedor de acciones en dicha compañía. Que ha leído la declaración
jurada del señor Mateo P. Game datada 18 de julio de 1865, y que las
referencias que se hace en ella sobre el deponente son verdaderas, y que él
fue quien dio al señor Game los informes a que se refiere dicha declaración
jurada, con referencia a la recaptura del vapor y el estado en que estaba
antes de que lo enviaran a la segunda expedición.

"Que el deponente presenció la recaptura del "Washington" y pasó a su


bordo y encontró a los soldados abriendo las puertas de los camarotes y
saqueando cuanto estaba a su alcance: que ni siquiera ni un cuchillo dejaron
para comer. Que él con ayuda de algunos oficiales los hicieron salir lo mejor
que pudieron, pero que fue ya demasiado tarde para impedir el saqueo del
vapor.

"Que al tiempo que el vapor fue recapturado, una parte considerable de la


carga se encontraba a su bordo; que a la llegada del vapor a Guayaquil fue
entregada a sus dueños o consignatarios.

"En la segunda expedición del vapor sus calderas resumían mucho y el


mismo vapor hacía agua. Algunos de los puntales estaban rotos y las
cuadernas de la rueda de estribor perdidas.

"El día antes de la salida de dicho buque, le dije al Presidente de la


República que el vapor estaba en mala condición, su excelencia me contestó
que debíamos hacer lo posible para continuar el presente viaje. El deponente
también hizo rogar al señor Manuel Uraga de pasar a bordo para que viese el
estado del vapor. Uraga lo examinó y dijo que conforme había subido podía
bajar el río.

"Mandé el vapor durante su segundo viaje, anduvimos muy despacio y no


podíamos llevar más de 60 libras de presión por miedo de reventar las calderas
y no podíamos obtener más de seis millas por hora.

"El vapor se destruye cada día por orín, agua salada y por falta de cuidado.
Sus calderas habiendo estado largo tiempo con agua salada, están cubiertas
de orín por dentro y fuera. Costará al menos cinco mil pesos para ponerlo en
el mismo estado en el cual lo dejé yo.

"La única estación favorable para el comercio en el río es de junio a


diciembre, que es lo que se llama verano, y es cuando se habren las vías de
comunicación con el interior.

"En testimonio de lo cual firmo y sello con el sello de oficio y en la fecha y


año arriba expresado.- Firmado: Jorge P. Pragdon.- Firmado: L.V. Prevost,
Cónsul de Estados Unidos de América". (540)
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 341

El proceso se fue extendiendo y el 14 de octubre de 1865 el Presidente de


la Excelentísima Corte Suprema, doctor Pedro José de Arteta, proveyó y firmó
la sentencia administrando justicia en nombre de la República y por autoridad
de la ley, declarando que el vapor "Washington" es buena presa y que de
consiguiente dicho buque corresponde a la Nación. (541)

Para aquella sentencia dicha alta autoridad judicial se fundamenta en las


vistas del señor Ministro Fiscal y en las pruebas obtenidas por él mismo, y
dice que Mateo P. Game, Presidente de la Compañía de Navegación del río
Guayas, colocó bajo su responsabilidad a Francisco Game, su hijo, de capitán
del vapor "Washington", no obstante de que como capitán del "Bolívar" había
provisoriamente entregado este buque en el año anterior a los mismos
revolucionarios que han sido debelados en Jambelí; que este capitán
manteniendo siempre secretas inteligencias con aquellos facciosos, se había
comprometido a entregarles el "Washington" a su regreso de Babahoyo por
la cantidad de diez mil pesos, tomando mil de pronto. (542)

Después de la larga exposición de los vistos el Presidente de la Corte


Suprema manifiesta, previo a su sentencia, que ceder a favor de la compañía
sería un pernicioso ejemplo para que cualquier otro buque extranjero que, en
calidad de mercante estuviera en nuestros puertos, se entregara a los
revolucionarios por un precio convenido, y con la esperanza de que fracasada
que fuera la empresa lo reclamarían sus propietarios, acogiéndose a que la
entrega no había sido con su anuencia. (543)

Declarado el vapor "Washington" buena presa, la compañía propietaria


entabló sus reclamaciones; y se tramitaban éstas, cuando el vapor, que estaba
en poder del Gobierno, fue devorado por las llamas, en Babahoyo, cuyo incendio
inició aproximadamente a las tres de la mañana del día 11 de diciembre de
1865, en circunstancias en que se celebraba un baile a bordo. (544)

El Gobierno hizo reflotar el casco y maquinaria, siendo traído a Guayaquil,


en donde se lo puso en parrilla para su restauración completa. Pasaría
aproximadamente un año y medio para que la obra de reparación del casco
esté terminada, pues el lo. de junio de 1867, a las ocho de la mañana, fue
echado al agua. En agosto se terminó el trabajo en forma total. Su nombre
fue cambiado por el de "General Bolívar". (545) Posteriormente haremos un
relato detallado de lo acontecido con dicho vapor.
* * * * *

EL VAPOR "BERNARDINO" O "JAMBELI"

Una vez capturado el "Bernardino" por las fuerzas del Gobierno en Jambelí,
fue considerado buena presa, incluso antes del pronunciamiento de la
342 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

respectiva sentencia, y se le cambió el nombre por el de vapor de guerra


"Jambelí", poniéndolo al mando del Teniente de Fragata Diego Sánchez, a
quien se le dispuso desarmarlo e inutilizarlo. Con el siguiente oficio se ordena
el cumplimiento de aquella orden:

"República del Ecuador.- Comandancia General del Distrito.- Guayaquil,


a 10 de julio de 1865.- Al señor Teniente de Fragata don Diego Sánchez".

"Su Excelencia, el Comandante en Jefe del Ejército, dispone que US. se


haga cargo inmediatamente del vapor de guerra "Jambelí" y que mande
desmontar sin pérdida de tiempo los cañones que tiene a su bordo, quitándole
a la máquina dos piezas principales que le inutilicen su movimiento.

"Lo que comunico a US. para su inteligencia y puntual cumplimiento.-


Dios guarde a US.- S. Darquea". (546)

Aunque era notorio que dicho vapor era el "Bernardino", se lo trató como
vapor anónimo, indicándose en la causa seguida, y para fines de ley, que se
ignoraba su nombre por hallarse desprovisto de patentes. El 7 de septiembre
de 1865 el Presidente de la Corte Suprema de Justicia dice al Ministro de
Guerra que con fecha del día anterior ha pronunciado ya su sentencia al
respecto, que es la que copiamos a continuación:

"Quito, septiembre 6 de 1865, a las once y media del día.- Vistos: Resultando
que el buque sobre que se versa el presente juicio, era uno de los que componían
la escuadrilla invasora, que fue apresada el 26 de junio último en el combate
naval de Jambelí, y que desde entonces entró a poder del Gobierno,
ignorándose su nombre por hallarse desprovisto de las patentes respectivas;
en observancia de lo dispuesto por los principios de derecho de gentes y las
ordenanzas de marina que rigen en el Ecuador, artículos 4o., 5o. y 80. del
título 5o., tratado 6o. y de conformidad con el dictamen del señor Ministro
Fiscal, administrando justicia en nombre de la República y por autoridad de
la ley, se declara buena presa al referido buque y que como tal corresponde a
la Nación.- Transcríbase esta sentencia al Poder Ejecutivo para los efectos
consiguientes.- Pedro José de Arteta".

"Dios guarde a U.S. H.- Pedro José de Arteta.- Es copia.- El Teniente


Coronel jefe de sección, encargado de la oficialía mayor.- Ramón Zambrano".-
(547)

El "Jambelí" o "Bernardino" sirvió.durante muy corto tiempo, y acabó por


destruirse completamente en uno de los astilleros de Guayaquil.

En lo que corresponde al vapor "Talca", tal parece que éste fue devuelto el
día 28 de junio a su Capitán, Sr. George Chambers, dejando además constancia
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 343

de aquello al armador del mismo. La idea era no complicar más la situación


por el embargo y después contrato realizado con los agentes de la compañía
propietaria. Se pagaría, por supuesto, todo lo acordado por el valor del flete.

Tal es así que cuando García Moreno y sus fuerzas volvieron a zarpar con
rumbo a Santa Rosa, para consolidar la recuperación de dicho pueblo, al que
llegó el 2 de julio, no lo hizo con el vapor "Talca", mas si con los otros vapores.

RECLAMACIONES SOBRE GOLETAS CAPTURADAS

Con relación a las dos goletas capturadas a los urbinistas por las fuerzas
del Gobierno, tanto el Cónsul de los Estados Unidos de Norteamérica como el
de Colombia en Guayaquil, presentaron sendas comunicaciones al Gobernador
de la Provincia del Guayas, exigiendo la devolución de los bajeles a sus
respectivos dueños, conciudadanos de aquellos.

Dicho Gobernador remitió las comunicaciones al Ministro del Interior para


que el Gobierno resuelva sobre los reclamos. El Ministro Pablo Herrera
contestó el 26 de julio de 1865 lo siguiente:

"Con respecto al asunto a que se refiere la primera, ya ha entablado la


misma reclamación el excelentísimo Sr. Ministro Residente de esa República;
y respecto a la segunda S.E. el Presidente de la República ha dispuesto
conteste a V.S. que la goleta tomada en Machala fue peruana, que se ignora
hasta su nombre y que fue encontrada sin los papeles y demás requisitos
legales; pues que el Cónsul colombiano en Paita, que es uno de los ecuatorianos
que se hallan en connivencia con Urbina y los demás emigrados, le había
otorgado tan solo el pasavante con el fin de que viniera a proteger la invasión
pirática, y que por consiguiente dicha goleta fue presa que hizo a los piratas
la escuadrilla del Gobierno; debiendo esta cuestión ser resuelta por el Supremo
Tribunal de la República en conformidad con las leyes nacionales". (548)

Se pide además la liberación del Capitán de esta última goleta, de nombre


Juan Moreira, a lo que el Ministro contesta que no puede disponer su libertad,
porque es uno de los piratas que fue aprehendido con las armas en la mano,
el 26 de junio, a bordo de uno de los buques de la escuadrilla mandada por los
ex-generales Urbina y Robles. (549)

Aquella goleta también terminó por ser considerada buena presa, una vez
que culminó la causa seguida para establecer su condición.
344 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

ACONTECIMIENTOS NAVALES DESPUES DE "JAMBELI"

El lo. de julio de 1865, el Teniente de Fragata Francisco Mora, ayudante


de la Capitanía del Puerto de Guayaquil, da parte al Mayor General de Marina
del lamentable fallecimiento del Cabo de Matrícula Simón Lino, ocurrido el
día anterior. Pero al mismo tiempo, pide se apruebe el alta, en reemplazo de
aquél, del de igual clase Juan Bataguai, lo que es aceptado. (550)

En atención a que se hallaban vacantes los empleos de Ministros Marciales


de la Corte Superior del Distrito de Guayaquil, el Sr. Comandante en Jefe
del Ejército tuvo a bien nombrar de tales, con fecha 10 de julio, a los señores
Capitán de Navío Agustín E. Oramas y Capitán de Fragata Lucas Rojas.
(551)

El día 26 del mismo mes dice el Sr. General Comandante General del
Distrito de Guayaquil, que en dicha virtud, fueron separados por la misma
orden del día 10, de los destinos de Mayor General de Marina que
desempeñaba Oramas, y de contador militar, Lucas Rojas. (552)

De lo actuado el Ministro de Guerra y Marina, con fecha 2 de agosto


comunicó al de Hacienda para los fines consiguientes. (553) Posteriormente,
el 6 de diciembre, el Capitán de Navío Agustín Eugenio Oramas pidió se le
mande satisfacer las pensiones que dejó de percibir desde que fue nombrado
Ministro de dicha Corte Superior Marcial. (554)

Es de anotar que consecuentemente se suprimió la Mayoría General de


Marina, así se ordena con el siguiente oficio:

"No. 10.- República del Ecuador.- Ministerio de Estado en el Despacho de


Guerra y Marina.- Quito a 7 de agosto de 1865.- Sección de Marina.- Sr.
Comandante General del Distrito de Guayaquil.

"El Supremo Gobierno ordena que US. disponga la supresión de la Mayoría


General de Marina, cuya medida se halla en consonancia, con la que dictó
allá a este respecto, el excelentísimo señor Comandante en Jefe del Ejército;
y de su cumplimiento a US. se servirá dar cuenta.- Dios guarde a US. Francisco
Javier Salazar". (555)

El 12 de julio de 1865, el Ministro de Guerra y Marina, coronel Manuel de


Ascásubi le dice al General Secundino Darquea, que S.E. el Encargado del
Poder Ejecutivo ordena remita a la mayor brevedad un estado prolijo y
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 345

circunstanciado de todos los enseres que contenía el vapor de guerra "Guayas",


cuando fue asaltado por los piratas en la noche del 31 de mayo, cuya razón ha
dejado de remitirse a ese despacho, siendo tan necesario para el Supremo
Gobierno y para el de la inmediata legislatura. (556)

El General Darquea envía lo requerido con fecha 19 de julio, pero aclara


que dicha razón no se envió junto a los documentos pedidos por el Ministro
para la formación de la memoria del ramo de Guerra y Marina, porque no se
exigió dicho envío en la circular pasada, para el efecto. (557)

Al Ministro no le quedó más que acusar recibo de dicho documento con el


estado de los enseres del "Guayas", seis días después, y dice que con aquél se
hará el uso conveniente. (558)

Los marineros Juan Morieta y Pedro Ramos, que habían sido contratados
en el mes de abril para servir en el vapor de guerra "Guayas" y los sorprendió
la toma del buque por los revolucionarios, estaban listos para zarpar el 13 de
julio de 1865 con el objeto de sacar el cañón giratorio de dicho vapor hundido,
por lo que el General Secundino Darquea gestiona ante el Gobernador de la
Provincia del Guayas para que de Tesorería se les abone el sueldo del mes de
mayo, que les corresponde para que puedan emprender su marcha en las
embarcaciones que se tienen preparadas para el efecto. (559)

El 13 de julio fue dado de baja el fogonero Pedro Ramos, que sirvió en el


vapor de guerra "Guayas", y se dice que el día 26 de junio fue uno de los
rescatados del poder de los piratas, después de que las fuerzas de la escuadrilla
mandaron a pique a dicho buque. (560)

Se menciona además que eran tripulantes de dicho vapor de guerra el ler.


cocinero con cargo Rafael Espinel y los grumetes Juan Pincay y Gregorio
Proaño. (561) Así también, el 25 de agosto de 1865, el Sr. Coronel ler. Jefe
del Batallón No. 1, manda una lista, al Gobernador de la Provincia del Guayas,
de individuos de la guarnición del mismo vapor, que se hallaban a bordo
cuando la toma del buque por los urbinistas, y que desde ese día, 31 de mayo,
hasta el combate naval de Jambelí permanecieron en calidad de prisioneros,
no percibiendo raciones ni sueldos del mes de junio. (562)

En lo que respecta al rescate de los cañones del vapor "Guayas", en el mes


de julio, se informa que el Sargento Mayor efectivo Santiago Pasos fue uno
de los que efectuó aquella tarea, y que el de igual grado graduado Estanislao
Andrango permanece en el Hospital Militar, curándose de las heridas que
recibió en el combate de Jambelí. (563)
346 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

En el mes de julio se detectaron casos graves de disentería en la población


guayaquileña, y los médicos que estudiaron el caso consideraron que dicho
mal era provocado por el deficiente estado del agua del río Guayas, del cual
bebían, por lo que se recomendó traer dicho líquido vital de las aguas del río
Daule. Transcribimos el siguiente oficio, enviado al Comandante Juan Manuel
Uraga.

"Comandancia General del Distrito.- Guayaquil 14 de julio de 1865.- Al


Sr. Capitán de Navío, Jefe General de Alta Policía.

"Siendo de opinión los facultativos del Hospital Militar de que la disentería


que se está pronunciando en esta ciudad, es a consecuencia de encontrarse
mala la agua del río, y habiendo fallecido el balsero Manuel Herrera, que
tenía a su cargo la empresa de traer agua dulce del río Daule; me dirijo a US.
con el objeto de invitarle a que se sirva disponer el alistamiento de las balsas
que sean necesarias para proveer a la ciudad de agua potable, y mandar que
dentro de dos días empiecen a hacer los viajes, para evitar las enfermedades
que se propagan por esa causa.- Dios guarde a US.- Secundino Darquea".
(564)

García Moreno, enérgico e implacable, era capaz de no permitir que ningún


diplomático extranjero colabore, así sea discreta e indirectamente, con el
adversario. Así lo consideró respecto al Cónsul General del Perú en Guayaquil,
don José Plácido Roldán, por lo que le canceló el exequátur de su patente de
Cónsul. Este a su vez respondió con el siguiente oficio:

"Consulado General del Perú.- Guayaquil, a 12 de julio de 1865.- Sr.


Gobernador de la Provincia.

"He sido impuesto, por la nota de US. fecha de ayer, que el Sr. Ministro de
Estado en el despacho de lo interior, le comunica, con fecha 5 del corriente
que S.E. el encargado del Poder Ejecutivo, ha tenido a bien cancelar el
exequátur de mi patente de Cónsul General del Perú, y que dará cuenta a mi
Gobierno de las causas que ha tenido para dictar esa resolución. Por la primera
oportunidad, tendré el honor de elevar a su conocimiento, copia de la nota
que he recibido; y, con este motivo, me suscribo de US., con las consideraciones
debidas, su atento servidor.- José Plácido Roldán". (565)

Es de indicar que en dicho oficio se nota la falta de la protesta de estilo por


el procedimiento del Gobierno. Lo cual no es muy usual, cuando las
circunstancias que motivaron aquella decisión, pudieran provocar la reacción
del diplomático extranjero, estando en todo su derecho.
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 347

La señora viuda del Comandante Diego Matos, solicitó al Gobernador de


la Provincia del Guayas dé el trámite correspondiente, para que el Presidente
de la República le otorgue las letras de montepío, que por ley le corresponden.
Estas fueron conferidas y enviadas a Guayaquil con el oficio que transcribimos
a continuación:

"No. 237.- Ministerio de Estado en el Despacho de Guerra y Marina.- Quito


a 21 de julio de 1865.- Sección General.- Señor Coronel Comandante General
del Distrito de Guayaquil.-

"La señora Rosario López, viuda del Capitán de Fragata Diego Eugenio
Matos a quien sacrificaron los piratas para apoderarse del vapor "Guayas",
ha representado a S.E. el Presidente de la República, por conducto de la
Gobernación de esa provincia, pidiendo se le confiera letras de montepío
militar, y S.E. ha tenido a bien mandar se le extienda las que US. encontrará
adjuntas.- Dios guarde a US.-Pablo Bustamante. (566)

El 26 de julio del mismo año contesta el General Darquea, que "con los
requisitos legales se le dará el curso que corresponda a las letras de montepío
militar que S.E. el Presidente de la República ha mandado expedir a favor de
la señora Rosario López, viuda del Capitán de Fragata Diego Eugenio Matos,
y que US.H. se sirve remitir a este despacho con su estimable nota fecha 21
del presente, cifrada con el No. 237". (567)

El 19 de julio el Comandante General del Distrito de Guayaquil, General


Secundino Darquea, con su nota No. 266 solicita a S.E. el Presidente de la
República, que la oficialidad, tripulación y guarnición del vapor de guerra
"Guayas", que fue robado por los piratas en la noche del 31 de mayo, formen
su revista del mes de junio como si hubiesen estado en esa plaza, para que
sean pagados el sueldo que les corresponde. (568)

El Presidente García Moreno accedió a aquella petición, en mérito a la


justicia que les asiste. Y dice verbalmente: "Bien entendido que este derecho
solo se les declara por el mes de junio, con excepción de los que continúen en
servicio activo; de lo que se ha dado el correspondiente aviso al Ministerio de
Hacienda". (569)

Aunque el conflicto contra España será detallado en la segunda parte de


este tomo, nos adelantaremos a mencionar que cuando arribó a Guayaquil la
"Blanca", fragata de guerra de S. M. Católica, no saludó a la plaza ni a S.E. el
Jefe del Estado. En esa virtud el Presidente de la República dispuso el 29 de
348 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

julio de 1865, que tampoco se salude a ningún buque de guerra español cuando
llegue al Puerto de Guayaquil, ni se ice el pabellón nacional el día de la Reina
de España. (570)

Las disposiciones fueron dadas al Gobernador de la Provincia del Guayas


y al Comandante General del Distrito de Guayaquil, a fin de que se sirvan
dictar las órdenes convenientes para el cumplimiento de las mismas.

Días después, el Coronel Francisco Javier Salazar, es nombrado Ministro


de Guerra y Marina, por lo que con fecha 14 de agosto de 1865 el General
Vicente González, desde la Comandancia General de Guayaquil, acusa recibo
del decreto correspondiente, con los siguientes términos:

"Se ha recibido en este despacho la circular fechada 5 del presente mes,


marcada con el No. 13 de la Sección General, a la cual se acompaña el decreto
dictado por S.E. el Presidente de la República, nombrando Ministro de Estado
en el Despacho de Guerra y Marina al Sr. Coronel Francisco Javier Salazar,
a la cual se le ha dado la publicidad correspondiente". (571)

A fines de agosto se produce un caso irregular con Tomás Matos, pues


habiendo sido ascendido, con fecha 6 de julio de 1865, al grado de Alférez de
Navío por el mismo Presidente Gabriel García Moreno, en premio a los buenos
servicios en campaña, con fecha 28 de agosto el Sr. Comandante General del
Distrito pide "se libre despacho de Alférez de Fragata al de Navío Tomás
Matos", es decir un retroceso en su graduación, o tal vez , era necesario para
legalizar su condición jerárquica actual, pues al siguiente año sigue constando
como Alférez de Navío. (572).

Es más, ante aquella solicitud S.E. el Vicepresidente, en ejercicio del Poder


Ejecutivo, dispone que el oficial peticionario compruebe legalmente haber
obtenido en la fecha que corresponde el empleo de Alférez de Fragata. (573)

Días después el Ministro de Guerra y Marina informa sobre el otorgamiento


de aquellos despachos con el siguiente oficio:

"No. 13 .- Ministerio de Estado en el Despacho de Guerra y Marina.- Quito,


a 20 de septiembre de 1865.- Sección de Marina.- Al señor Comandante
General del Distrito de Guayaquil.

"Atentas las razones que US. expone en su estimable nota de fecha 13 del
corriente No. 385, S.E. el Presidente de la República se ha servido librar
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 349

despacho de Alférez de Fragata al de Navío Tomás Matos, el mismo que


encontrará US. adjunto para los efectos legales.- Dios guarde a US.- Manuel
Bustamante". (574)

El 28 de agosto de 1865 el Sr. Coronel Francisco Javier Salazar, manifiesta


al Comandante General del Distrito de Guayaquil, que "con fecha 27 del mes
anterior, el señor Gobernador de la Provincia de Los Ríos hizo presente al
Supremo Gobierno que a consecuencia del asalto dado al vapor "Guayas" y
por petición de esa Comandancia General, remitió cincuenta hombres para
reforzar esa plaza, de los que se habían presentado voluntariamente y que
no habiendo sido devueltos a sus hogares como debía, solicitaba del Gobierno
la orden del caso, y para obrar con acierto mandó S.E. que la indicada
Gobernación remitiese una lista nominal de las personas reclamadas, la que
habiendo venido por este correo ha dispuesto que la remita a US. para que
sean dados de baja en los cuerpos donde se encuentren, con excepción de los
que hubiesen sido remitidos en pena de no haberse prestado al servicio de la
Guardia Nacional, para lo que US. tomará los informes convenientes.- Dios
guarde a US. Francisco Javier Salazar". (575)

DISGUSTO DEL CAPITAN DE NAVIO JOSE ANTONIO GOMEZ

Dice don Camilo Destruge que el Comandante José Antonio Gómez tenía
una aversión profunda al abuso y al despotismo, no se convenía con ciertas
órdenes, unas veces arbitrarias y otras imprudentes, cuyo cumplimiento se
le encomendara, y que él tuvo siempre la firmeza de no llevarlas a la práctica.
(576)

Lo cierto es que de los últimos acontecimientos algunos disgustaron a dicho


oficial, sobre todo, los indiscriminados fusilamientos a los urbinistas vencidos,
luego del combate naval de Jambelí. Mas no sabemos con certeza el motivo
que lo indujo a despojarse voluntariamente de sus despachos de los grados
militares, que fue ganando con gran esfuerzo a lo largo de su vida naval.

Efectivamente, estos fueron entregados por el Comandante Gómez al Dr.


García Moreno adjuntos a una carta, en la que protestaba por ciertos
procedimientos, con los cuales estaba en desacuerdo. Anexaba en ella sus
despachos de Aspirante de Marina, Alférez de Fragata, Alférez de Navío,
Teniente de Fragata, Teniente de Navío, Capitán de Fragata y Capitán de
Navío. No quería, Gómez, tolerar más el despotismo presidencial y sus excesos
de poder.

Lógicamente, aquello causó el enojo del Presidente García Moreno y por lo


350 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

tanto mandó a que se le siga un sumario. Así se dice en el siguiente oficio:

"No. 299.- República del Ecuador.- Ministerio de Estado en el Despacho de


Guerra y Marina.- Quito, a 21 de agosto de 1865.- Sección General.- Señor
Comandante General del Distrito de Guayaquil.

"Vista en el Despacho del Supremo Gobierno la representación del Capitán


de Navío José Antonio Gómez, con la que devuelve siete despachos de los
grados militares que ha obtenido. S.E. el Presidente de la República,
atendiendo a que con este hecho ha cometido un grave delito militar, por
haberse despojado voluntariamente de su honorífico carácter contra la expresa
prohibición de las Ordenanzas del Ejército, y penas impuestas en la real
orden de 25 de enero de 1802, ha tenido a bien ordenar que US. le mande
seguir la correspondiente causa, sirviendo de cuerpo del delito la citada
representación, que con tal objeto la encontrará US. adjunta.

"Lo digo a US. en contestación a su estimable nota fechada 14 del presente


No. 324, con que remitió el citado documento para el puntual cumplimiento
de lo que S.E. manda.- Dios guarde a US.- Francisco Javier Salazar" (577)

EL GENERAL RAMON CASTILLA RUMBO AL DESTIERRO

En los primeros días de agosto de 1865 fondeó frente a Santa Elena el


bergantín de guerra peruano "Guisse", llevando a su bordo en calidad de
preso al General don Ramón Castilla. El Gobernador de la Provincia del
Guayas se apresuró a enviar al Supremo Gobierno, el parte con que
comunicaba la llegada del expresado buque con el ex-presidente peruano.
(578)

Mas el 13 de agosto se presentaron en Guayaquil dos oficiales


pertenecientes al "Guisse", los que habían llegado por tierra con la finalidad
de enviar una comunicación a su Gobierno, en el vapor que debía zarpar al
día siguiente con rumbo al Callao. Aquellos informaron a las autoridades
militares del puerto que el bergantín de guerra arribará a Guayaquil, en
donde piensan esperar órdenes. (579)

El General Vicente González, que se desempeñaba como Comandante


General del Distrito, se dirigió por escrito al Ministro de Guerra y Marina,
con fecha 14 del mismo mes y año, para informar pormenorizadamente sobre
aquel acontecimiento, y pide disposiciones concretas cuando dice: "Lo comunico
a US. para conocimento de S.E. el Presidente de la República; y para que se
sirva ordenar la conducta que debe observarse con esta especie de refugiados;
debiendo asegurarse que, entre tanto, la Comandancia General observará
aquellas que dictan las reglas de urbanidad y hospitalidad". (580)
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 351

El Presidente García Moreno dispuso el día 21 de agosto, que si el bergantín


"Guisse" tocase en las aguas del Ecuador, y viniese algún otro buque con el
fin de capturarlo, esa Comandancia General tome todas las providencias
conducentes a hacer respetar la neutralidad de nuestro territorio, y el pabellón
nacional. (581)

El mismo día 21 el General González comunica al Ministro la conclusión ,


de dicho episodio, con el siguiente oficio:

"República del Ecuador.- Comandancia General del Distrito.- Guayaquil,


a 21 de agosto de 1865.- Al Sr. Ministro de Guerra y Marina.

"Tengo la honra de participar a US.H., que anoche fondeó en este puerto


el bergantín de guerra peruano "Guisse", sin traer a su bordo al General
Ramón Castilla por haber sido transbordado a un buque de vapor, mandado
por el Gobierno legítimo del Perú, para conducirlo a la China o a Europa,
según lo aseguran los oficiales pertenecientes a este bergantín.

"El "Guisse" ha venido remolcado hasta la Puná, desde la costa occidental,


donde se encontraba, por el vapor "Inca", enviado por el mismo Gobierno del
Perú, con el objeto de saber si se había cumplido la orden de transbordar al
General Castilla, y ha llegado aquí en mal estado de servicio a consecuencia
de su larga y penosa navegación.

"US.H. se servirá poner estos particulares en conocimiento del Supremo


Gobierno, para los fines que puedan importar.- Dios guarde a US.H.- (f)
Vicente González". (582)

EL BALANCE DE LA PRIMERA ADMINISTRACION GARCIANA

Es indudable que el Presidente Gabriel García Moreno fue un organizador


extraordinario, pero la tirante situación internacional, y los brotes frecuentes
y violentos de orden interno, que le tocó afrontar, no le permitieron realizar
en toda su plenitud el programa de reorganización que había planificado.

No obstante en esos primeros cuatro años se destaca una amplia actividad,


como ser el gran esfuerzo emprendido para enderezar la economía, trastornada
por los gastos emprendidos durante los distintos conflictos; establecer un
sistema educativo más amplio y eficiente; y, llevar a cabo la obra pública mas
urgente, como las carreteras proyectadas, que quedaron inconclusas, pero
que terminadas en partes invitaban a su sucesor a esforzarse para culminar
la construcción de las mismas.

Dice don Alfredo Pareja Diezcanseco en su análisis de lo que García Moreno


hizo de provecho:
352 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

"Pero veamos sus obras. Una de sus buenas cualidades fue la de buscar
hombres de valer para que colaborasen en su administración. Así, ya lo vimos,
obtuvo los servicios de Vicente Piedrahíta. Así también, en 1863, quiso que le
ayudase una personalidad ilustre: Antonio Borrero, cuya candidatura para
la vicepresidencia auspició decididamente. Pero Borrero, con un gesto
republicano que le honra, se excusó ante el Congreso, fundándose en que era
candidato oficial. García Moreno se indignó contra Borrero y jamás le perdonó
su independencia.

"Sus obras de progreso material son muchas y buenas. Su celo y honestidad


administrativos, solamente comparables a los de Vicente Rocafuerte. Su afán
por la instrucción pública, encomiable, pero sólo desde su punto de vista,
pues si mejoró los métodos de enseñanza y trajo del exterior buenos maestros,
colocó la formación espiritual del país bajo la tiranía confesional. Salían buenos
bachilleres, buenos aficionados a ciencias, pero no salían de las escuelas
hombres de espíritu libre, que es la condición eterna del progreso. Hay en
este esfuerzo por la enseñanza pública otro paralelismo con Rocafuerte, con
la diferencia esencial de que Rocafuerte se esforzó por la enseñanza laica.

"Durante el primer periodo que acabamos de contar, dos preocupaciones


básicas le ocupan su tiempo: la creación del Observatorio Astronómico de
Quito y los caminos, principalmente la carretera Guayaquil-Quito, y la Quito-
Esmeraldas, para la cual celebró un contrato, siguiendo los planos trazados
por el Presidente de la Audiencia, Barón de Carondelet, a fines del siglo XVIII.

"Ha conseguido, ya lo sabemos, reformar las costumbres del clero. Ha traído


muchos frailes de Italia y de Alemania, principalmente para la enseñanza.
Pero en el País no mandaban frailes ni militares: es sólo su voluntad la que
dirigía y castigaba, tanto a liberales enemigos como a católicos amigos...

"Algo de indudable importancia que hizo García Moreno -otra vez, el


ejemplo de Rocafuerte- fue la reorganización de la hacienda pública, y el
enfrentamiento de problemas básicos, como la mejora del sistema de
recaudación aduanera, la sobriedad en los gastos, la cautela, en fin, en el
manejo de los delicados asuntos del dinero. El resultado no se hizo esperar,
pues, sin aumento de impuestos, las recaudaciones fiscales mejoraron
notablemente.

"La carretera de Guayaquil a Quito avanzaba con tanta rapidez, que ya


en 1862 desde Quito se llegaba por ella a Ambato. Claro que no fue una obra
extraordinaria, como se ha dicho, puesto que se trataba de estabilizar antiguas
rutas y más era una tarea de empedrado, construcción de puentes y
ensanchamiento.

"Fue García Moreno quien creó el Colegio Bolívar de Ambato, para lo cual
contribuyó con dos mil pesos de su peculio. Para el colegio de las Hermanas
del Corazón de Jesús, en Quito, regaló cuatro mil.
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 353

"Por fin, se recordará las mejoras introducidas en los hospitales y casas de


beneficencia, y las reparaciones de las calles de la ciudad de Quito.

"Por el momento, esto, más o menos, ha sido todo. ¿Valía la pena la sangre
derramada? ¿Valía todo ello el terror? ¿Valía acaso la privación de libertad,
exigencia humana que da nobleza al hombre?" (583)

Lo cierto es que García Moreno heredó una organización fiscal insuficiente


y caótica, a causa de los conflictos internos producidos en los últimos tiempos
hasta el triunfo garciano en 1860. No estamos de acuerdo con Ricardo Pattee,
quien considera que el descalabro económico lo generaron los regímenes de
Urbin a y Robles, fueron mas bien las desastrosas revoluciones que afrontaron
las que destruyeron la economía de la nación. Todos estaban incursos,
gobiernos, provisorios, líderes de oposición, etc.

Pero lo loable es que García Moreno comenzó en su gobierno las gestiones


activas para el mejoramiento y la reorientación del fisco, acometiendo en el
periodo de esos cuatro años los difíciles problemas de la deuda interna, la
recaudación aduanera, el caos monetario y la satisfacción de los acreedores
británicos. Instituyó, eso sí, una rígida supervigilancia de los gastos en todos
los departamentos del Gobierno. (584)

El 10 de agosto de 1865, antes de finalizar el periodo de su mandato, García


Moreno envió su mensaje al Congreso, y entre otros asuntos manifestó:

"La instrucción pública desde 1863 depende no del Poder Ejecutivo, sino
del Consejo General que forma un cuerpo soberano, un cuarto poder para el
cual no hay responsabilidad ni sujeción y al que se debe el reglamento que
hoy rige, triste monumento de la ignorancia de sus autores. Los
establecimientos de enseñanza que el Gobierno ha fundado por contratas y
sin intervención de aquel Consejo son los únicos que prosperan, gracias al
método y a la perseverancia de los institutos religiosos encargados de
dirigirlos.

"En la hacienda nacional sigue dando los mejores resultados el sistema de


contabilidad introducido por la administración que va a cesar, pero queda
inmensamente que trabajar para regularizar los impuestos establecidos,
haciendo mas equitativo su repartimiento. Un empréstito para extinguir los
billetes de circulación forzosa de los que se han amortizado más de las tres
octavas partes, para recoger toda nuestra moneda feble y para terminar las
vías de comunicación iniciadas, es de necesidad imperiosa; y puede negociarse
en Europa con prontitud y ventaja. Se han dado ya los primeros pasos para
conseguirlo, dejando a la Administración siguiente el honor de arreglarlo
definitivamente y de invertirlo en los importantes objetos referidos. Mientras
la moneda sea un obstáculo para los cambios, y mientras el país carezca de
carreteras y ferrocarriles, no hay que esperar grandes progresos de nuestro
comercio necesariamente lánguido, de nuestra industria forzosamente
354 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

atrasada y de nuestra agricultura reducida tristemente en el interior al


limitado consumo de poblaciones empobrecidas.

"De admirar es que en medio de tantos obstáculos y continuas agitaciones,


las mejoras materiales hayan tomado tanto incremento. No hay provincia
que no haya hecho en estos cuatro años adelantos notables; pero entre todos
ellos, me limitaré a citar la parte concluida de la carretera destinada a unir
la capital con Guayaquil. Las dificultades principales que ofrecía su
construcción, están ya vencidas; muy pronto las provincias de Pichincha, León
y Tungurahua se comunicarán por medio de ella; y conseguido el empréstito,
podrá mi sucesor dar cima a esta obra importante y grandiosa antes de
terminar su período". (585)

TRIUNFO ELECTORAL DE JERONIMO CARRION

Estando por terminar su primer periodo de mando constitucional (1861-


1865), García Moreno consciente de que la Constitución Ecuatoriana de 1861
disponía que el Presidente no podía ser reelegido sino después del intermedio
de un período, buscó una alternativa republicana para entregar el poder a
alguien de su conveniencia.

En marzo de 1864 decía García Moreno que "es necesario que nos fijemos
en un sujeto digno de ejercer el mando supremo, pues me parece que sería
casi un acto de infidelidad a la Patria el dejar abandonado el campo
eleccionario a merced de los intrigantes". (586)

En un inicio dudó de la eficacia de la candidatura de Jerónimo Carrión por


su condición de serrano que, por la animosidad existente en la Costa, podría
restarle mucha fuerza electoral. (587) Tal es que el 23 de abril de 1864 escribió
al Dr. Antonio Borrero lo que sigue: "Los argumentos que usted me hace
contra la candidatura del Sr. Carrión, adquieren una fuerza incontrastable
por la resistencia universal que he encontrado aquí (Guayaquil) y por el riesgo
de que el provincialismo, fomentado e irritado aquí por el círculo de Carbo y
los conspiradores sirva de pábulo a la anarquía". (588)

Estando en Guayaquil en diciembre de 1864, García Moreno pudo palpar


los sentimientos liberales en el verdadero foco de aquella tendencia. Era
candidato liberal don Manuel Gómez De La Torre, y García Moreno era
partidario de proponer al guayaquileño José María Caamaño por los
conservadores, es tanto que el 4 de diciembre le dice a don Nicolás Martínez:
"Acepte, pues, Ud. esta candidatura (de Caamaño), única esperanza del país
y trabaje por ella con decisión y actividad". (589)

El lo. de febrero de 18651e escribe al mismo personaje, y entre otros asuntos


le dice: "así la cuestión quedará simplificada: por un lado Caamaño y todo los
ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL CONFLICTO Y FIN DE PERIODO PRESIDENCIAL 355

hombres honrados y por otro Gómez y todos los pillos" (590)

Pero muy pronto García Moreno va a cambiar su modo de pensar. Y es que


estalla la tempestad cuando el Presidente disuelve con la policía al "Club
Republicano", central de la candidatura de Gómez De La Torre, lo clausura,
llamándolo club sedicioso. Persigue y encarcela a los partidarios del candidato
liberal, que reparten volantes o boletines de simple propaganda.

Ante aquel atropello Caamaño reclama al Presidente y le exige libertad


para la propaganda del otro candidato. García Moreno se indigna ante aquella
noble actitud, y mas aún cuando el candidato conservador le dice: "si por
esto no fuera digno de mandar la República (por respetar la libertad de
sufragio), declaro bien que nunca me resignaría a gobernarla, mucho menos
contra la voluntad popular". (591)

Suficiente para que García Moreno descalifique a Caamaño. Es más, se


apresuró en enviar una carta circular a sus amigos políticos en la que lo
reprueba, y propone un nuevo candidato: Jerónimo Carrión:

"Quito, febrero 28 de 1865

"Mi estimado señor:

"La candidatura del Sr. José Ma. Caamaño fue presentada por mí y
aceptada por la mayoría de la República, en el concepto de que él contribuiría
al bien y no a la ruina del país.

"Por desgracia estábamos engañados; y la Providencia nos ha favorecido


permitiendo que el mismo Sr. Caamaño se haya encargado de desengañarnos.

"Ud. no ignora que en la Capital se formó un club sedicioso en el cual


figuraban las heces de la infame revolución de julio pasado; y que el Gobierno
prohibió su reunión como contraria al orden público, dejando a sus miembros
en plena libertad de sufragar como quisieren. Esta medida aconsejada por
las exigencias del orden, es conforme con la constitución y las leyes; pues
como en ellas no se encuentra reconocido el derecho de formar clubes, el
Gobierno tiene completa libertad de acción para tolerarlos o prohibirlos según
lo considere conveniente. Y, sin embargo, el señor Caamaño ha reprobado
esta medida legal y necesaria, dándole el colorido que no tiene; y deja por
consiguiente conocer cuál sería su política si mandase y cuáles las
consecuencias de ella.

"No permita el cielo que contribuyamos a establecer una administración


débil y ciega, que deje sin freno las pasiones anárquicas y entregue al país en
las manos rapaces y envilecidas de que se libertó a costa de tantos sacrificios...

"En mi humilde opinión debemos escoger entre los candidatos presentados


356 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

con posterioridad por la oposición al que, siendo fiel a la religión de nuestros


mayores, irreconciliable con los bandidos, incapaz de enriquecerse con la
explotación del tesoro público, amigo del progreso del país... y de los dos
candidatos , restantes, el señor Carrión tiene aquellas cualidades". (592)

Ejecutadas las elecciones, Jerónimo Carrión obtuvo más de veintiún mil


votos, Gómez De La Torre algo más de ocho mil. Algunos historiadores como
Benjamín Carrión y Alfredo Pareja Diezcanseco dan a entender, o lo dicen,
que se había consumado una farsa electoral. Pero sea como haya sido, Carrión
era el nuevo Presidente de la República.

LA MARINA AL INICIO DEL MANDATO DE CARRION

El 7 de septiembre de 1865 don Jerónimo Carrión asumió la Presidencia


de la República del Ecuador, y entre sus colaboradores nombró al Coronel
Ignacio de Veintimilla para el desempeño de Ministro de Estado en el
Despacho de Guerra y Marina, y como tal comenzó a actuar. Pero la Marina
de Guerra estaba reducida a la mínima expresión. No había buque de guerra
alguno y la Mayoría de Marina se encontraba suprimida.

Con relación a los jefes navales, continuaban los mismos que sirvieron
durante la Presidencia de García Moreno, es decir, el Capitán de Navío Juan
Manuel Uraga, quien en realidad se desempeñaba como Jefe Superior de
Policía; el Capitán de Navío Francisco Javier Martínez, Capitán del Puerto
de Guayaquil; así también el Capitán de Navío Agustín Eugenio Oramas y el
Capitán de Fragata Lucas Rojas, Ministros Marciales de la Corte Superior
del Distrito de Guayaquil. Mas este último fue llamado al servicio activo en
diciembre de 1865, para que se encargue del comando del vapor de guerra
"Jambelí", que como sabemos, se trata del vapor "Bernardino", arrebatado a
los revolucionarios urbinistas y declarado "buena presa". Aquel bajel fue
armado en guerra por el gobierno, proporcionándosele la dotación necesaria
para tal fin. Hasta aquí nuestro estudio, que tendremos el honor de continuar
en la segunda parte de este tomo.
NOTAS 357

NOTAS
(1) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno", Segundo tomo.-Editorial
"Vida", Guayaquil, segunda edición.- Página 284.
(2) Ibídem.- Página 331.

(3) Ibídem.- Páginas 334 y 335.


(4) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 492, folio 201.

(5) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno", Página 337.


(6) Ibídem.

(7) Ibídem.
(8) Ibídem.- Página 338.

(9) Alfredo Pareja Diezcanseco.- "Historia del Ecuador".- Casa de la Cultura


Ecuatoriana, Quito, 1958.- Página 122.
(10) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno".- Página 339.
(11) Ricardo Pattee.- "Gabriel García Moreno y el Ecuador de su tiempo".-
Editorial Jus, México, 1944.- Página 245.
(12) Mensaje del Gobierno Provisorio a la Convención Nacional de 1861.
(13) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno", Página 348.
(14) Ibídem.
(15) Ibídem.
(16) Ibídem.- Página 349.
(17) Wilfrido Loor.- "La victoria de Guayaquil".- La Prensa Católica, Quito,
1960.- Página 405.
(18) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno".- Página 350.
(19) Ibídem.- Páginas 350 y 351.
(20) Ibídem.- Página 351.
(21) Ibídem.- Página 352.
(22) Ibídem.
358 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(23) Ibídem.- Página 358.


(24) Ibídem.- Página 376.
(25) Ibídem.- Página 364.
(26) Ibídem.- Página 381.

(27) Ibídem.- Página 386.

(28) Julio Tobar Donoso.- "García Moreno y la instrucción pública".- Editorial


Ecuatoriana, Quito 1940.- Página 114.

(29) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno", Página 388.

(30) Manuel Freire Heredia.- "García Moreno", Forjadores de la Historia


Ecuatoriana.- Editorial Pedagógica Freirhe, 1985.- Páginas 40 y 41.

(31) Ibídem.- Página 107.


(32) J.L.R.- "Un gran americano, García Moreno", Prensa Católica, Quito,
1921.- Página 109.
(33) Monseñor Manuel María Pólit.- "Escritos y discursos de García Moreno",
Página 163.
(34) Ibídem.- Página 481.
(35) Alfredo Pareja Diezcanseco.- Obra citada.- Páginas 122 y 123.

(36) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno".- Página 307.

(37) Ibídem.- Página 468.


(38) Ibídem.- Página 464.
(39) Ibídem.- Página 320.
(40) Dr. Octavio Latorre Tapia.- "La Armada del siglo XX, las dos primeras
décadas".- Edición DIGEIM, 1986.- Página 49.
(41) Ibídem.- Páginas 49 y 50.
(42) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno".- Página 315.
(43) Ibídem.- Página 320.
(44) Ibídem.- Página 329.
(45) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 503, folio 03.
NOTAS 359

(46) Ibídem.
(47) Ibídem.- Tomo 493, folio 4.
(48) Ibídem.- Tomo 494, sin foliar.
(49) Ibídem.
(50) Ibídem.
(51) Ibídem.
(52) Ibídem.- Tomo 503, folio 13.- 13 de febrero de 1861.
(53) Ibídem.- Tomo 494, sin foliar.- 24 de febrero de 1861.
(54) Ibídem.- Tomo 492, folios 207 y 209.
(55) Ibídem.- Tomo 494, sin foliar.- Guayaquil 8 de marzo de 1861.
(56) Ibídem.- 11 de marzo de 1861.
(57) Ibídem.
(58) Ibídem.
(59) Archivo General de la Nación, Bogotá, Colombia.- República.- Secretaría
de Guerra y Marina.- Tomo 390, folios 115, 116 y 132.- Tomo 51, folio
89.
(60) Capitán de Fragata Mariano Sánchez Bravo.- "Protagonistas en el mar".-
Edición INHIMA 1994.- Página 20.
(61) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 494, sin foliar.
(62) Ibídem.- Tomo 492, folio 191.
(63) Ibídem.
(64) Ibídem.- Tomo 494, sin foliar.
(65) Ibídem.
(66) Ibídem.- 24 de mayo de 1861.
(67) Ibídem.- 29 de mayo de 1861.
(68) Ibídem.
(69) Ibídem.
(70) Ibídem.- Tomo 503, folio 90.
360 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(71) Ibídem.- Tomo 494, sin foliar.- 4 de junio de 1861.


(72) Ibídem.
(73) Ibídem.- 5 de junio de 1861.
(74) Ibídem.- 14 de junio de 1861.
(75) Ibídem.
(76) Ibídem.- 2 de julio de 1861.
(77) Ibídem.- 10 de julio de 1861.
(78) Ibídem.
(79) Ibídem.- 3 de agosto de 1861.
(80) Hernán Andrade G. y Amílcar Tapia.- "Documentos para la historia de
la Escuela Militar 1830 - 1930".- Centro de Estudios Históricos del
Ejército, v. 2, 1991.
(81) TNNV-UN Mariano Sánchez Bravo.- "Forjadores Navales del Ecuador".-
Edición DIGEIM 1986.- Página 151.
(82) CPFG-UN Mariano Sánchez Bravo.- "Historia Marítima del Ecuador".
Tomo VIII, La República 1850 - 1860.- Edición INHIMA 1997.- Página
13.
(83) "El Seis de Marzo", Quito, martes 23 de mayo de 1854.- Periódico oficial.
Año 3. Epoca Segunda. No. 109. Trimestre II.- Archivo del Profesor
Alejandro Guerra Cáceres.
(84) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 494, sin foliar.- 2 de julio de 1861.
(85) CPFG-UN Mariano Sánchez Bravo.- "Historia Marítima del Ecuador".-
Página 398.
(86) Ibídem.- Página 372.
(87) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 492, folio 212.
(88) Ibídem.- Tomo 494, sin foliar.- 25 de noviembre de 1861.
(89) Ibídem.- 6 de diciembre de 1861.
(90) Ibídem.- Tomo 533, sin foliar.- 14 de mayo de 1862.
(91) Ibídem.- Anexo a oficio del 14 de mayo de 1862 (oficio diferente al de la
nota 90).
(92) Ibídem.- 14 de mayo de 1862.
NOTAS 361

(93) Ibídem.- Tomo 515, folio 290.


(94) Ibídem.- Tomo 533, sin foliar.- 4 de junio de 1862.

(95) Ibídem.- 9 de diciembre de 1862.

(96) Ibídem.- Tomo 515, folio 288.

(97) CPFG-UN Mariano Sánchez Bravo.- "Historia Marítima del Ecuador",


Página 396.
(98) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 515, folio 292.

(99) Dr. Fernando Jurado Noboa.- "Los Fernández-Madrid: Una vieja familia
de marinos".- Revista INHIMA No. 14, de julio de 1993.- Página 133.

(100) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


del Guayas.- Tomo 541, folio 115.

(101) Julio Estrada Ycaza.- "El Puerto de Guayaquil 2".- Guayaquil, Archivo
Histórico del Guayas, 1973.- Página 178.

(102) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


del Guayas.- Tomo 559, sin foliar.- Oficios del 06 de febrero de 1863 y
del 17 de marzo de 1863.

(103) Ibídem.- 17 de marzo de 1863.

(104) CPCB-UN Mariano Sánchez Bravo.- "Buques y Personajes", Edición


INHIMA 1991. Página 239.
(105) Ibídem.- Página 240.
(106) Ibídem.- Página 241.
(107) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 576, folio 206.
(108) Tomado de Julio Estrada Ycaza.- "Guía Histórica de Guayaquil": Notas
de un viaje de cuatro siglos, tomo 1.- Páginas 137-140.
(109) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno", Página 384.
(110) Dr. Jorge Villacrés Moscoso.- "Historia diplomática de la República del
Ecuador", tercer tomo, segunda edición 1982.- Página 55.
(111) Ibídem.- Páginas 55-63.
(112) Jorge Basadre.- "Historia de la República del Perú", tomo IV.- Editorial
Universitaria/ Lima-Perú, 1970.- Páginas 254-255.
362 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(113) Wilfrido Loor.- "La victoria de Guayaquil".- Página 388.


(114) Ibídem.- Página 409.
(115) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 621, folios 291, 292 y 293.
(116) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno".- Páginas 354 y 355.
(117) Oscar Efrén Reyes.- "Breve Historia General del Ecuador", tomos II y
III.- Quito, decimocuarta edición.- Páginas 140 y 141.
(118) Ibídem.- Página 141.
(119) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 247.
(120) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno".- Página 396.
(121) Ibídem.- Página 405.
(122) Ibídem.- Página 409.
(123) Ibídem.- Página 444.
(124) Ibídem.- Página 396.
(125) Ibídem.- Página 397.
(126) Ibídem.
(127) Ibídem.- Página 400.
(128) Ibídem.- Página 402.
(129) Ibídem.- Página 404.
(130) Benjamín Carrión.- "García Moreno, el Santo del Patíbulo".- Editorial
Conejo, Quito, 1984.- Páginas 437 y 438.
(131) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno", Página 406.
(132) Ibídem.
(133) Ibídem.- Páginas 150 y 151
(134) Alfredo Pareja Diezcanseco.- Obra citada.- Página 105.
(135) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno", Página 152.
(136) Alfredo Pareja Diezcanseco.- Obra citada.- Páginas 105 y 106.
NOTAS 363


(137) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 196.
• (138) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno", Página 411.
(139) Ibídem.
(140) Ibídem.
(141) Ibídem.- Página 414.
(142) Ibídem.- Página 413.
(143) Ibídem.- Página 414.
(144) Ibídem.
(145) Ibídem.- Página 415.
(146) Ibídem.- Páginas 1-16.
(147) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 556.
(148) Ibídem.
(149) Wilfrido Loor.- "Cartas de García Moreno", Página 452.
(150) Ibídem.- Página 449.
(151) Ibídem.- Página 452.
(152) Ibídem.- Página 451.
(153) Ibídem.- Página 453.
(154) Ibídem.- Página 461.
(155) Ibídem.- Página 473.
(156) Ibídem.- Página 477.
(157) Ibídem.- Página 488.
(158) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 492, folio 195.
(159) Ibídem.- Tomo 510, sin foliar.
(160) Ibídem.
(161) Modesto Chávez Franco.- "Historia general del Cuerpo de Bomberos de
Guayaquil".- Segundo tomo, segunda edición 1985, Banco Central del
• Ecuador.- Página 391.
364 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(162) Ibídem.
(163) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 514, folio 106. Quito, 8 de enero 1862.
(164) Ibídem.- Folio 109.
(165) Ibídem.- Folio 243.
(166) Ibídem.- Folio 243.
(167) Ibídem.- Folio 245.
(168) Ibídem.- Folio 249.
(169) Ibídem.- Tomo 515, folio 94.
(170) Ibídem.- Tomo 533, sin foliar.
(171) Ibídem.- Tomo 514, folio 253.
(172) Dr. Fernando Jurado Noboa.- "Las noches de los Libertadores".- Volumen
2.- Ediciones Iadap, Quito - Ecuador, 1991.- Página 202.
(173) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 515, folio 90.
(174) Ibídem.- Tomo 51, sin foliar.
(175) Ibídem.- Tomo 533, sin foliar.
(176) Ibídem.
(177) Ibídem.
(178) Ibídem.
(179) Ibídem.
(180) Ibídem.
(181) Ibídem.- Tomo 515, folio 294.
(182) Ibídem.- Tomo 533, sin foliar.- Oficio del 13 de junio de 1862.
(183) Ibídem.- Oficio del 12 de julio de 1862.
(184) Miguel Angel Cabodevilla.- "El gran viaje".- Ediciones Abya-Yala, Quito
1998.- Página 8.
NOTAS 365

(185) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


del Guayas.- Tomo 559, sin foliar.- Guayaquil 16 de marzo de 1863.
(186) Ibídem.- Tomo 533, sin foliar.- Decreto dado el lo. de marzo de 1862.
(187) Ibídem.- Tomo 510, sin foliar.- Oficio del 30 de octubre de 1862.
(188) Ibídem.
(189) Ibídem.
(190) Ibídem.
(191) Ibídem. Torno 541, folio 116.
(192) Ibídem.- Tomo 559, sin foliar.- Documento del 2 de mayo de 1863.
(193) Ibídem.
(194) Ibídem.- Tomo 715, folio 183.
(195) Ibídem.- Folio 177.- Oficio que dirige al Mayor General de Marina.
(196) Ibídem.- Tomo 559, sin foliar.- Oficio que dirige el Mayor General de
Marina el 30 de mayo de 1863.
(197) Ibídem.
(198) "El Nacional".- Periódico oficial del Ecuador.- Número 108, Quito a 11
de marzo de 1863.
(199) Ibídem.
(200) "Reglamento para prevenir abordajes en la mar".- Servicio Hidrográfico
y Oceanográfico, 1968.- Página 3.
(201) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 533, sin foliar.- Oficio de la Comandancia de la goleta
de guerra "Salado" del 25 de octubre de 1862.
(202) Ibídem.- Anotación de lo resuelto.
(203) Ibídem.- Oficios del 6 de diciembre y del 19 de diciembre de 1862.
(204) Ibídem.- Oficio del 31 de diciembre de 1862.
(205) Ibídem.- Oficio del 9 de diciembre de 1862.
(206) Ibídem.- Tomo 559, sin foliar.- Oficio del 14 de enero de 1863.
(207) Ibídem.- Tomo 558, sin foliar.- Comunicación No. 24.
366 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(208) Ibídem.- Tomo 559, sin foliar.- Oficio del 6 de febrero de 1863.

(209) Ibídem.- Oficio del 17 de febrero de 1863.

(210) Ibídem.- Oficio del 26 de marzo de 1863.

(211) Ibídem.- Oficio del 27 de abril de 1863.

(212) Ibídem.
(213) Informe del Ministro de Guerra y Marina dirigido a las Cámaras
Legislativas del Ecuador en 1863.- Quito, Imprenta Nacional, por M.
Mosquera.

(214) Ibídem.- Anexo.

(215) Ibídem.- Anexo.

(216) Ibídem.
(217) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 541, folios 111 y 112.

(218) Ibídem.
(219) Ibídem.- Folio 125.

(220) "La Unión Colombiana".- Diario de Guayaquil.- 12 de enero de 1862,


página 3.
(221) Julio Estrada Ycaza.- "El Puerto de Guayaquil 2".- Página 168.

(222) Ibídem.

(223) Ibídem.
(224) "La Unión Colombiana" .- Diario de Guayaquil.- 12 de enero de 1862,
página 3.

(225) Ibídem.
(226) "El Nacional".- Periódico Oficial.- Quito a 26 de diciembre de 1863.-
Número 139, página 4.

(227) Julio Estrada Ycaza.- "El Puerto de Guayaquil 2".- Páginas 168 y 169.

(228) Ibídem.- Páginas 116 - 119.

(229) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


del Guayas.- Tomo 715, folio 160.
NOTAS 367

(230) "El Nacional".- Periódico oficial del Ecuador.- Número 127; Quito, 3 de
octubre de 1863, página 2.
(231) Alfredo Pareja Diezcanseco.- Obra citada.- Página 128.
(232) Manuel Gálvez.- "Vida de don Gabriel García Moreno", Segunda edición,
Editorial Difusión S.A. Buenos Aires, 1941.- Página 205.
(233) Ibídem.
(234) Oscar Efrén Reyes.- "Breve Historia General del Ecuador".- Página 148.
(235) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 312.
(236) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 594.
(237) Ibídem.- Página 589.
(238) Ibídem.- Página 590.
(239) Ibídem.- Página 591.
(240) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Edición Banco Central del
Ecuador, Quito, 1992.- Página 225.
0
(241) Ibídem.- Página 227.
• (242) Manuel Gálvez.- Obra citada.- Páginas 210 a 213.
(243) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 592.
(244) Ibídem.- Página 593.
(245) Ibídem.- Página 594.
(246) Ibídem.- Página 595.
(247) Ibídem.
(248) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Páginas 315 323.
(249) Alfredo Pareja Diezcanseco.- Obra citada.- Páginas 135 - 138.
(250) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 558, sin foliar.
(251) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 329.


368 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(252) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Páginas 627 - 629.


(253) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 334.
(254) Julio Pimentel Carbo.- "El Gobernador del Guayas de 1862-64".- Boletín
del Centro de Investigaciones Históricas, 7: 12-17 (1947), 51-58.
(255) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 541, folio 113.
(256) Ibídem.- Tomo 541, folio 114.
(257) Julio Pimentel Carbo.- Publicación citada.
(258) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Páginas 636 y 637.
(259) Alfredo Pareja Diezcanseco.- Obra citada.- Página 139.
(260) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Páginas 334 - 338.
(261) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 647.
(262) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 578, sin foliar.
(263) Ibídem.
(264) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, 47/179.- 1864.
(265) Ibídem.
(266) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Volúmen 731, folio 45.
(267) Miguel Angel Cabodevilla.- Obra citada.- Página 5.
(268) Ibídem.
(269) Ibídem.
(270) Ibídem.- Páginas 5 y 6.
(271) Folleto "Pacífico Inédito, 1862-1866".- Exposición fotográfica en Quito,
Guayaquil y Cuenca.
(272) Ibídem.
(273) Miguel Angel Cabodevilla.- Obra citada.- Página 8.
(274) Ibídem.- Página 10.
(275) Ibídem.- Página 10.
NOTAS 369

(276) Folleto "Pacífico Inédito, 1862 - 1866".


(277) Ibídem.
(278) Miguel Angel Cabodevilla.- Obra citada.- Página 8.
(279) Ibídem.- Páginas 21 - 27.
(280) Ibídem.- Página 49.
(281) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Páginas 215 y 216.
(282) Ibídem.- Páginas 217 y 218.
(283) Ibídem.- Páginas 219.
(284) Ibídem.
(285) Ibídem.- Página 238.
(286) Ibídem.- Página 239.
(287) Ibídem.- Página 239.
(288) Ibídem.- Página 240.
(289) Ibídem.
(290) Archivo Nacional de Historia.- Corte Suprema de Justicia.- SCG: HS/
6o. tomo 138; NFS.
(291) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito 47/ 98.- 1963.
(292) "Historia Universal".- Ediciones Nauta, 1983.- Tomo 3, páginas 33 y 34.
(293) Ibídem.- Página 34.
(294) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 382.
(295) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito.- Documento del 28 de
octubre de 1863.
(296) Ibídem.
(297) Ibídem.
(298) CPCB-UN Mariano Sánchez Bravo.- "La Primera Escuela Náutica 1822-
1830". Edición INHIMA 1988.- Página 128.
(299) Camilo Destruge.- "Album biográfico ecuatoriano", tomo II.- Edición
Banco Central del Ecuador, 1984.- Página 423.
370 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(300) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 380.


(301) TNNV-UN Mariano Sánchez Bravo.- "Forjadores Navales del Ecuador".-
Página 83.
(302) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, 47/96, 1864.
(303) Ibídem.
(304) Ibídem.
(305) Ibídem.
(306) Manuel Gálvez.- Obra citada.- Páginas 291 y 292.
(307) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Páginas 240 y 241.
(308) Ibídem.- Páginas 242 y 243.
(309) Ibídem.- Página 243.
(310) Ibídem.- Página 244.
(311) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 403.
(312) José María Coba Robalino .- "El fusilamiento del General D. Manuel
Maldonado en 1864", publicado en "Dios y Patria".- Riobamba, año V,
Vol. V, No. 18, de abril de 1882, página 173.
(313) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Páginas 244 y 245.
(314) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 384.
(315) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Página 247.
(316) Archivo Nacional de Historia.- Comunicaciones del Ministerio de Guerra
y Marina, 1864.- Folio 16.
(317) Ibídem.- Folio 24.
(318) Ibídem.- Folios 82 y 86.
(319) Ibídem.- Folio 111.
(320) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito.- Tomo 19, folio 197.
(321) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 578, sin foliar, 12 de septiembre de 1864.
(322) Ibídem.- Varios documentos.
(323) Ibídem.- Tomo 578, sin foliar, 5 de octubre de 1864.
(324) Ibídem.- Tomo 576, folio 181.
NOTAS 371

(325) Ibídem.- Folio 191.


(326) Ibídem.- Folio 198.
(327) Ibídem.- Folio 197.
(328) Ibídem.- Folio 206.
(329) Ibídem.- Tomo 578, sin foliar.- Tomo 576, folio 218
(330) Ibídem.- Tomo 576, folio 219.
(331) Ibídem.- Folio 243.
(332) Ibídem.- Tomo 578, sin foliar.- 11 de octubre de 1864.
(333) Ibídem.- 14, 16 y 17 de septiembre de 1864.
(334) Ibídem.- 19 y 20 de septiembre de 1864.
(335) Ibídem.
(336) Ibídem.- Tomo 576, folio 259
(337) Ibídem.- Tomo 578, sin foliar.
(338) Ibídem.- Tomo 576, folio 227.
(339) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente", Página 246.
(340) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 731, folio 268.
(341) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Páginas 246 y 247.
(342) Informe del Ministro de Guerra y Marina, Coronel Francisco Javier
Salazar, dirigido a los Honorables Legisladores.- 10 de agosto de 1865.
(343) Mensaje del Presidente del Ecuador al Congreso de 1865.- Quito,
Imprenta Nacional, por Mariano Mosquera.- 10 de agosto de 1865.
(344) Luis Robalino Dávila.- "García Moreno", Talleres Gráficos Nacionales,
Quito, 1949.- Página 221.
(345) Ibídem.- Página 285.
(346) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 494.
(347) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente", Página 248.
(348) Alfredo Pareja Diezcanseco.- Obra citada.- Páginas 48 y 49.
372 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(349) Manuel Gálvez.- Obra citada.- Página 262.

(350) Ibídem.
(351) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Páginas 248 y 249.

(352) Ibídem.- Páginas 249 y 250.

(353) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


del Guayas.- Tomo 576, folio 243.

(354) Ibídem.

(355) Ibídem.- Tomo 578, sin foliar.- Orden General del 29 de octubre de 1864.

(356) Ibídem.

(357) Ibídem.- Orden General del 7 de noviembre de 1864.

(358) Ibídem.
(359) Ibídem.- Tomo 731, folio 370.

(360) Ibídem.
(361) Ibídem.- Tomo 578, sin foliar.- Orden General del 10 de noviembre de
1864.
(362) Ibídem.- Oficio del 14 de octubre de 1864, a las 5 de la tarde.

(363) Ibídem.

(364) ANH/R Comunicaciones del Ministerio de Guerra y Marina, 1864.- Folio


574.- 4 de noviembre de 1864.

(365) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


del Guayas.- Tomo 578, sin foliar.

(366) Ibídem.- Tomo 380, folios 73, 74, 75 y 76.

(367) Ibídem.- Tomo 578, sin foliar.- 25 de octubre de 1864.

(368) Ibídem.- 28 de noviembre de 1864.

(369) Ibídem.- Recibo de su entrega al nuevo dueño.

(370) Ibídem.- Hojas de supervivencia.

(371) Ibídem.- Tomo 576, folio 313.

(372) Ibídem.- Folio 311.


(373) Ibídem.- Folio 333.
NOTAS 373

(374) Ibídem.- Folio 347.

• (375) Ibídem.- Folio 351.


(376) Capitán de Fragata Mariano Sánchez.- "Historia Marítima del
Ecuador".- Página 384.
(377) Archivo del Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito.- Rollo 033,
Doc. 41.- 1864.
(378) Ibídem.
(379) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 584, folio 47.
(380) Ibídem.
(381) Ibídem.- Tomo 566, sin foliar.
(382) Ibídem.
(383) Ibídem.
(384) Ibídem.
(385) Ibídem.
• (386) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 589, folio 92.
(387) Ibídem.- Tomo 589, folio 53.
(388) Ibídem.- Tomo 602, sin foliar.
(389) Ibídem.- Tomo 589, folio 93.
(390) Ibídem.- Tomo 599, sin foliar.- Oficio del 24 de enero de 1865, de la
Capitanía del Puerto de Guayaquil.
(391) Ibídem.- Tomo 589, folio 95.
(392) Ibídem.- Tomo 599, sin foliar.- Oficio del 6 de febrero de 1865.
(393) Ibídem.- Tomo 602, sin foliar.- Oficio del 9 de febrero de 1865, emitido
por la Comandancia General del Distrito de Guayaquil.
(394) Ibídem.- Tomo 589, folios 183 y 184.
(395) Ibídem.- Folio 186.
(396) Ibídem.- Tomo 599, sin foliar.- Oficio del 24 de febrero de 1865, de la
• Capitanía del Puerto de Guayaquil.
374 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(397) Ibídem.- Tomo 602, sin foliar.


(398) Ibídem.- Tomo 602, sin foliar.- Oficio del 18 de abril de 1865, de la
Comandancia General del Distrito de Guayaquil.
(399) Ibídem.- Tomo 590, folio 52.
(400) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito.- 48/9.
(401) Ibídem.
(402) Ibídem.
(403) Ibídem.
(404) Ibídem.
(405) Ibídem.- Tomo 599, sin foliar, oficio de la Capitanía del Puerto de
Guayaquil del 28 de marzo de 1865.
(406) Ibídem.- Oficio del 16 de mayo de 1865.
(407) Ibídem.
(408) Ibídem.- Tomo 590, folio 96.
(409) Ibídem.- Tomo 602, sin foliar.- Oficio de la Comandancia General del
Distrito del 15 de mayo de 1865.
(410) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Página 250.
(411) Ibídem.- Página 251.
(412) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 584, folio 218.
(413) Ibídem.- Tomo 584, folio 221.
(414) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón , Quito.- 48/8; 1865.
(415) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Páginas 251 y 252.
(416) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 584, folio 236.
(417) Ibídem.- Tomo 609, sin foliar.- Oficio de la Comandancia en Jefe del
Ejército del 6 de junio de 1865.
(418) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Página 252.
(419) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Documentos
hológrafos.- Ref. 1564, 25 de febrero de 1927.
(420) Ibídem.- Gobernación del Guayas.- Tomo 584, folio 240.
NOTAS 375


(421) Ibídem.- Tomo 609, sin foliar.
• (422) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 494.
(423) Manuel Gálvez.- Obra citada.- Página 267.
(424) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito.- 48/119, folio 142.- 7 de
junio de 1865.
(425) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Documentos
hológrafos.- Ref. 1564, 25 de febrero de 1925.
(426) Ibídem.- Gobernación del Guayas, tomo 603, copiadores.- 5 de junio de
1865, número 229.
(427) Ibídem.- Volúmen 750, folio 167.
(428) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito.- 48/74, folio 87, 1865.
(429) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal.- Gobernación del Guayas.-
Tomo 584, folio 79.
(430) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito.- 48/23, 7 de junio de
1865.
(431) Ibídem.- 48/13, lo. de junio de 1865.

(432) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 584, folio 207.
(433) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito.- 48/15, 2 de junio de
1865.
(434) Ibídem.
(435) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 603.- Copiadores No. 230, 7 de junio de 1865.
(436) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Páginas 252 y 253.
(437) Ibídem.- Páginas 253 y 254.
(438) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
del Guayas.- Tomo 603.- Copiadores, No. 230, 7 de junio de 1865.
(439) Ibídem.- No. 233, 9 de junio de 1865.
(440) Ibídem.

(441) Ibídem.- Tomo 605, sin foliar.- Oficio de la Comandancia del Batallón
• de la Guardia Nacional de Marina, Morro, del 13 junio de 1865.
(442) Ibídem.
376 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(443) Ibídem.
(444) Ibídem.- Tomo 599, sin foliar.- Oficio de la Capitanía del Puerto de
Guayaquil del 12 de junio de 1865.

(445) Ibídem.- Tomo 590, folio 182.


(446) Ibídem.
(447) Ibídem.- Tomo 603, Copiadores, No. 239, 19 de junio de 1865.

(448) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Página 254.

(449) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


de Guayas.- Tomo 584, folio 208.
(450) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Páginas 254 y 255.

(451) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Documentos


hológrafos.- Ref. 1564, 25 de febrero de 1927.

(452) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


del Guayas.- Tomo 603.- Copiadores No. 216, 26 de mayo de 1865.

(453) Ibídem.- Tomo 584, folio 62.

(454) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 392.

(455) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente", Página 256.

(456) Camilo Destruge.- "Album biográfico ecuatoriano", Tomo II.- Páginas


25 y 29.
(457) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
de la Provincia del Guayas.- Tomo 602, sin foliar, copiadores, 9 de junio
de 1865.
(458) Manuel Gálvez.- Obra citada.- Páginas 267 y 268.

(459) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


de la Provincia del Guayas.- Tomo 602, sin foliar, copiadores, 11 de junio
de 1865.
(460) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 495.
(461) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
de la Provincia del Guayas.- Tomo 584, folio 84.
(462) Ibídem.- Tomo 609, sin foliar.
(463) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 495.
NOTAS 377

(464) Manuel Gálvez.- Obra citada.- Página 268.


(465) "El Nacional".- Quito, 18 de julio de 1865.- N° 191, página 2.
(466) Ibídem.
(467) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 497; y, "El Nacional".- Quito
18 de julio de 1865.- No. 191, página 2.
(468) Luis Robalino Dávila.- "Orígenes del Ecuador de hoy".- Editorial José
María Cajica Jr. S.A. Puebla, México, 1967.
(469) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 496.
(470) "El Nacional".- Quito, 18 de julio de 1865.- No. 191, página 2.
(471) Ibídem.- Páginas 2 y 3.
(472) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Página 256.
(473) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 497.
(474) Ibídem.- Páginas 497 y 498.
(475) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
de la Provincia del Guayas.- Tomo 609, sin foliar.
(476) "El Nacional", número extraordinario.- Quito, julio 6 de 1865.- Página
1.
(477) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
de la Provincia del Guayas.- Tomo 603, sin foliar, copiadores, No. 242.
(478) Remigio Romero Cordero.- "El Ejército en 100 años de vida republicana,
1830-1930".- Edición Centro de Estudios Históricos del Ejército
Ecuatoriano, 1991.- Página 245.
(479) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Páginas 258 y 259.
(480) "El Nacional", número extraordinario.- Quito, julio 6 de 1865.- Página
1.
(481) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
de la Provincia del Guayas.- Tomo 609, sin foliar.
(482) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 498.
(483) Manuel Gálvez.- Obra citada.- Página 270.
(484) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 499.

(485) Instituto de Historia Marítima.- Archivo Histórico.- T.Q. 135, 1865.
378 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(486) Manuel Gálvez.- Obra citada.- Página 9.

(487) Benjamín Carrión.- Obra citada.- Página 468.

(488) S. Gómez Jurado S. J.- "¡¿Mártir García Moreno?!".- Editorial Alba,


Cuenca-Ecuador, 1952.- Página 12.
(489) J.L.R.- Obra citada.- Página 176.
(490) Ibídem.
(491) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 395.
(492) Ibídem.- Páginas 395 y 396.
(493) "El Nacional", No. 194, Quito 20 de septiembre de 1865.- "Mensaje del
Presidente de la República al Congreso".- Página 3.

(494) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Documentos


hológrafos.- Ref. 1564, 25 de febrero de 1927.

(495) Ibídem.
(496) Manuel Gálvez.- Obra citada.- Página 270.
(497) Alfredo Pareja Diezcanseco.- Obra citada.- Página 152.

(498) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


del Guayas.- Tomo 609, sin foliar.
(499) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Páginas 260 y 261.
(500) Alfredo Pareja Diezcanseco.- Obra citada.- Página 153.
(501) Ibídem.
(502) Manuel Gálvez.- Obra citada.- Página 271.

(503) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Documentos


hológrafos.- Ref. 1564, 25 de febrero de 1927.- Página 7.
(504) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal.- Gobernación del Guayas.
Tomo 609, sin foliar.
(505) Ibídem.
(506) Ibídem.- Tomo 603, sin foliar.- Copiadores, No. 248, julio de 1865.
(507) "El Nacional", número extraordinario.- Quito, julio 6 de 1865.- Página
1.
NOTAS 379

(508) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal.- Gobernación del Guayas.


Tomo 603, sin foliar.- Copiadores, No. 248, julio 5 de 1865.
(509) Ibídem.- Documentos hológrafos.- Ref. 1564, 25 de febrero de 1927.-
Páginas 8 y 9.
(510) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Página 262.

(511) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal.- Gobernación del Guayas.


Tomo 609, sin foliar.
(512) Ibídem.
(513) Ibídem.- Tomo 603, sin foliar.- Copiadores, No. 248, julio 19 de 1865.
(514) Ibídem.- Tomo 609, sin foliar.
(515) Ibídem.- Tomo 584, folio 111.
(516) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Página 263.
(517) "El Nacional", número extraordinario.- Quito, julio 6 de 1865.- Página
1.
(518) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal.- Gobernación del Guayas.
Tomo 603, sin foliar.- Copiadores, No. 248, julio 5 de 1865.
(519) Ibídem.- Tomo 602, sin foliar.- Copiadores, julio lo. de 1865.
(520) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Páginas 263 y 264.
(521) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal.- Gobernación del Guayas.
Tomo 584, folio 148.
(522) Ibídem.- Tomo 603, sin foliar.- Copiadores, No. 250, julio 10 de 1865.
(523) Ibídem.- No. 263, julio 19 de 1865.
(524) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito.- 48/74, folio 87, 12 de
julio de 1865.
(525) Ibídem.-
(526) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal.- Gobernación del Guayas.
Tomo 584, folio 39.
(527) Según don Gaspar Alamiro Plaza, el Smyrk arribó a Guayaquil el día 4
de julio de 1865.
(528) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Página 258.
(529) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
de la Provincia del Guayas.- Tomo 584, folio 231.
380 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(530) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


de la Provincia del Guayas.- Tomo 599, sin foliar.- Guayaquil, 8 de julio
de 1865.
(531) Ibídem.- Guayaquil, 11 de julio de 1865.
(532) Ibídem.-
(533) Ibídem.- Tomo 584, folio 257.
(534) Ibídem.-
(535) Ibídem.-
(536) Archivo Nacional de Historia, Quito, Fondo Gobierno.- Caja 91 (1865-
70)
(537) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal.- Gobernación del Guayas.-
Tomo 584, folio 259.
(538) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito.- 48/78, folio 91; 1864.
(539) Archivo Nacional de Historia, Quito, Fondo de Gobierno.- Caja 91 (1865-
70).
(540) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
de la Provincia del Guayas.- Tomo 594, folios 30 y 31.
(541) "El Nacional", periódico oficial, No. 201.- Quito, octubre 28 de 1865.
(542) Ibídem.
(543) Ibídem.
(544) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil. Gobernación
de la Provincia del Guayas.- Hológrafos, Tomo 2 (11 folios del sumario
seguido).
(545) Camilo Destruge.- "Urvina el Presidente".- Página 264.
(546) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
de la Provincia del Guayas.- Tomo 584, folio 93.
(547) Ibídem.- Tomo 591, folio 326.
(548) Banco Central del Ecuador.- Fondo Jijón, Quito.- 48/81, folio 94; 1865.
(549) Ibídem.
(550) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación
de la Provincia del Guayas.- Tomo 599, sin foliar, Guayaquil 24 de enero
de 1865.
NOTAS 381

(551) Ibídem.- Tomo 609, sin foliar, oficio No. 21 de la Comandancia en Jefe
del Ejército, Guayaquil 10 de julio de 1865.
(552) Ibídem.- Tomo 603, sin foliar.- Copiadores, 26 de julio de 1865.
(553) Ibídem.- Tomo 591, folio 93.
(554) Ibídem.- Tomo 592, folio 244.
(555) Ibídem.- Tomo 591, folio 206.
(556) Ibídem.- Folio 79
(557) Ibídem.- Tomo 603, sin foliar.- Copiadores, No. 260, 19 de julio de 1865.
(558) Ibídem.- Tomo 591, folio 80.
(559) Ibídem.- Tomo 602, sin foliar.- Comandancia General del Distrito de
Guayaquil, 13 de julio de 1865.
(560) Ibídem.- 14 de julio de 1865.
(561) Ibídem.- 15 de julio de 1865.
(562) Ibídem.- 25 de agosto de 1865.
(563) Ibídem.- 29 de agosto de 1865.
(564) Ibídem.- Tomo 602, sin foliar.- Copiadores, 14 de julio de 1865.
(565) Ibídem.- Tomo 584, folio 258.
(566) Ibídem.- Tomo 591, folio 38.
(567) Ibídem.- Tomo 603, sin foliar.- Copiadores, No. 277, 26 de julio de 1865.
(568) Ibídem.- Tomo 591, folio 63.
(569) Ibídem.
(570) Ibídem.- Folio 169.
(571) Ibídem.- Tomo 603, sin foliar.- Copiadores, 14 de agosto de 1865.
(572) Ibídem.- Tomo 591, folio 243.
(573) Ibídem.
(574) Ibídem.- Folio 327.
(575) Ibídem.- Folio 173.
(576) Camilo Destruge.- "Album biográfico ecuatoriano", tomo I.- Página 250.
382 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

(577) Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil.- Gobernación


de la Provincia del Guayas.- Tomo 591, folio 169.
(578) Ibídem.- Tomo 584, folio 106.
(579) Ibídem.
(580) Ibídem.
(581) Ibídem.- Folio 42.
(582) Ibídem.- Folio 112.
(583) Alfredo Pareja Diezcanseco.- Obra citada.- Páginas 155, 156 y 157.
(584) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 418.
(585) Mensaje del Presidente del Ecuador al Congreso de 1865.- Imprenta
Nacional por Mariano Mosquera, Quito.- Páginas 6 y 7.
(586) Ricardo Pattee.- Obra citada.- Página 446.
(587) Ibídem.
(588) Ibídem.- Página 447.
(589) Benjamín Carrión.- Obra citada .- Página 658.
(590) Ibídem.
(591) Ibídem.- Página 659.
(592) Ibídem.- Páginas 659 y 660.
383


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Documentos Históricos Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de


(Periódicos Oficiales, Oficios, Guayaquil (1860 - 1865)
Cartas, Folletos, Ordenes
Generales, Reglamentos,
Decretos, etc.) Archivo Histórico del Instituto del Historia Marítima
(Armada del Ecuador)

Archivo General del la Nación, Bogotá, Colombia.-


República, Secretaría de Guerra y Marina

Fondo Jijón.- Banco Central del Ecuador, Quito

Archivo Nacional de Historia (Quito)

Archivo Histórico del Autor


387

INDICE ALFABETICO

PERSONAJES Arteta, Pedro José de, Dr., 308, 341, 342


Ascásubi, Manuel, Coronel, 13, 17, 58, 228, 265,
268, 277, 283, 287, 288, 319, 320, 344
A Ascásubi, Roberto de, 16, 17, 18, 20, 226, 290
Ascásubi, Rosita, 95, 120
Acosta, José, 311, 312 Atahualpa, 200, 204
Agramonte, Roberto, 308, 309 Auz, 239
Aguilar, Ignacio, Capitán, 123 Avila, Eusebio, 272
Aguilar, N., Sargento Mayor, 285, 302, 303, 317 Avila, Juan, Coronel graduado, 92, 149, 217, 218,
Aguirre, Carlos, 55, 108, 168, 170 219, 325
Aguirre, José Tomás de, Dr., 315 Avilés, José, 16
Aguirre, Juan, 168 Azuni, 294
Aguirre, Napoleón, 173
Aguirre, Pacífico, Teniente Coronel efectivo, 94,
316, 318
B
Alarcón, José María, 234, 235
Alarcón, Quintiliano, Meritorio, 60 Baca, Clemente, Meritorio, 61
Albán, Coronel, 220, 221 Baca, Eduardo, Meritorio, 61
Alcedo y Herrera, 36 Balanzátegui, Lorenzo, 311, 312
Alfaro, Eloy, 102, 220, 221, 310 Balda, Zenón, Capitán de Ejército, 151, 153
Almagro Vela, Manuel, Dr., 197, 198, 201, 202 Baldebrito, Pascual, Marinero, 148
Almeida, José María, Sargento Mayor, 316 Ballén, Aurelio, Teniente de Fragata, 70, 127, 132,
Alvarado, José, Soldado, 323 133, 136, 137, 138, 139, 151, 154, 155, 156, 157,
Alvarado, Vicente, Subteniente, 297, 326 158, 162
Alvarez, Francisco, 268 Baños, Manuel, 223, 224
Alvarez, Modesto, Sargento Mayor graduado, 297, Baquerizo, Ambrosio, 311, 312
325 Baquerizo José María, 55
Andrade, 168, 301 Baquerizo Moreno, Alfredo, Dr., 4
Andrade, Ramón, 267 Barragán, Blas, Teniente, 94
Andrango, Stanislao, Sargento Mayor graduado, Barreiro, Agustín, 98
297, 305, 325, 345 Barreiro, Antonio, Subteniente, 94, 278
Antiche, Pedro, Matrícula de Capitanía, 298 Barrera, Gregorio, Capitán, 191, 194
Arámbulo, Daniel, Particular, 62 Barrera, Joaquín, Aspirante, 30, 64, 67, 68, 147
Aramburu, Manuel, Meritorio, 62 Basadre, Jorge, 89
Araujo, Darío, Meritorio, 61 Bataguai, Juan, Cabo, 344
Arauz, 17 Bautista, Juan, 158
Arboleda, Francisco, 322, 323 Bello, 294
Arboleda, Julio, General, 166, 167, 168, 169, 170, Bello, Mercedita, 71
171, 172, 173, 174, 175, 178, 179 Benítez, Jacinto, 265
Arce, Manuel, Cabo, 139 Bermeo, Manuel, Teniente, 296, 326
Arcia, Juan León, Teniente Coronel graduado, 242, Berthe, 170
243, 296, 305, 325 Berri, Guillermo, 235
Arellano, Víctor Hugo, 3 Bessine, Carlos, 236
Arévalo, Manuel Sixto, Coronel graduado, 296, Bohórquez, Juan, 274, 307, 311, 312, 318
304, 323, 324, 325 Bolívar, Simón, 116, 127, 177, 245
Arias, Juan, Comandante, 278, 281, 283, 306 Boda, Manuel, 333, 334
Arias, Rafael, 240 Borrero, Antonio, Dr., 97, 207, 352, 354
Arrieta, Eduardo, Guardia Marina, 70, 71 Bouman De Mert, Honorario, Coronel, 49
Arroyo, José María, Coronel, 192, 193, 194 Boza, Mayor, 323
Bravo, Manuel, Dr., 319
388 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Brito, José Mercedes, Sargento Mayor graduado, Cobos, Gaspar, 194


297, 325 Coello, Rafael, Meritorio, 61
Brown, 36 Córdova, José María, Capitán, 323
Bustamante, Manuel, Guardia Marina, 61, 349 Córdova, Rosario, 152
Bustamante, Pablo, 347 Cornejo, Ramón, Coronel, 284, 285
Coronel, Idelfonso, Dr., 306
Corpancho, Manuel Nicolás, Dr., 19, 21, 99
Cortez, 11
Cortez, Comandante, 284
Caamaño, José María, 12, 354, 355 Cruz, Daniel, Alférez de Fragata, 30, 64, 65, 66,
Cabodevilla, Miguel Angel, 196 72, 232, 248, 253, 273, 321, 322
Cadena, Salvador, Subteniente, 323 Cruz, José, Sargento Mayor, 259
Calvo, Doctor, 166 Cruz, Santiago de la, Marinero, 281
Camargo, Basilio, Subteniente, 297, 326 Cucalón, Abelardo, Alférez de Fragata, 251
Campana, Francisco, Guardia Marina, 59, 63 Cucalón, Manuel Felipe, Subteniente, 297
Campos, Dr., 17 Cueva, Mariano, 174
Campos, Nicanor, Guardia Marina, 59, 61
Campoverde, David, 310
Campozano, Pedro, Coronel, 279, 284 CH
Campuzano, Juan Manuel, Comandante, 223, 284
Canal, Leonardo, General, 180
Canseco, General, 212 Chambers Stocks, George, 231, 291, 292, 293, 342
Cantos, Justo, 322 Charton, Emest, 86
Caraballo, Basilio, 236 Chávez Franco, Modesto, 124, 285
Carbo, Manuel, 218 Chávez, Francisco, 89
Carbo, Pedro, 11, 22, 158, 207, 354 Chávez, José H., Capitán de Corbeta, 29, 37, 47,
Cárdenas, Vicente, Dr., 169, 180 52, 55, 152
Carvajal, Rafael, Dr., 16, 17, 24, 67, 80, 84, 85, Chica Cortázar, Pablo, Comandante, 284
92, 108, 112, 114, 115, 126, 142, 174, 211, 218,
287, 319, 320, 328
Carondelet, Barón de, 352
Carrión, Benjamín, 24, 98, 166, 167, 170, 171,
179, 191, 245, 275, 295, 305, 356
Carrión, Jerónimo, 271, 354, 355, 356 D., Juan A., 200
Carvajal, Manuel, Subteniente, 297, 326 Darquea, Mayor, 262
Casanova, Carmen, 152 Darquea, Antonio, Capitán, 92, 262, 263, 264
Casares, Camilo, Dr., 168 Darquea, Bernardo, Teniente, 262, 263, 264
Castellanos, Comandante, 324 Darquea, Ricardo, Alférez de Navío, 72, 232, 235,
Castilla, Ramón, Mariscal, 14, 15, 18, 19, 20, 21, 248, 253, 262, 264, 273
79, 80, 85, 86, 87, 97, 99, 100,103, 105, 106, 107, Darquea, Secundino, General, 92, 95, 154, 232,
108, 109, 110, 111, 112, 113, 114, 119, 120, 179, 235, 236, 242, 252, 256, 258, 260, 262, 265, 266,
212, 218, 350, 351 272, 273, 276, 277, 279, 280, 283, 288, 289, 290,
Castillo, Domingo, Teniente, 297, 326 299, 306, 313, 317, 321, 323, 325, 326, 327, 342,
Castillo, Santiago, Meritorio, 60 344, 345, 346, 347
Castillo, Capitán, 150 Dávalos, Bernardo, Coronel, 94, 95, 181
Castro, Julio, Dr., 18, 90, 92, 180 Décimavilla, Mercedes, 152
Castro, Lorenzo, Meritorio, 62 Destruge, B., Dr., 21, 97
Castro, Manuel María, Dr., 170, 214 Destruge, Camilo, 209, 210, 216, 225, 227, 242,
Castro Ordoñez, Rafael, 197, 198, 199 244, 274, 279, 283, 284, 288, 295, 300, 312, 313,
Castro, Rafael, 131, 201 320, 322, 324, 331, 349
Capelo, Darío, Sargento Mayor graduado, 297, D' Hout, Jorge, 36
305, 325 Díaz, Damián, Marinero, 148
Celpa, Manuel A., Guarda, 137, 138 Dillon, Ing., 35, 36
Cevallos y Zevallos, María Gertrudis, 319 Domínguez, Pablo, Marinero, 281
INDICE ALFABETICO 389

Doyle, Juan María, Capitán de Fragata, 265 Figueroa, José Vicente, Teniente, 92, 297, 305, 326
Duchéne, P., 108 Filmore, 294
Dulcan, 113 Florencia, Francisco, Guardia Marina, 152
Durán, Domingo, Capitán graduado, 326 Flores, Federico, 138
Flores Jijón, Antonio, Dr., 15, 34, 99, 101, 102,
177, 178, 185, 186, 244
E Flores, Juan José, General, 11, 13, 14, 15, 16, 17,
18, 19, 22, 25, 31, 36, 68, 71, 72, 79, 87, 88, 90,
92, 94, 95, 97, 98, 105, 106, 107, 110, 118, 146,
Echeverría, Rosario, 334 151, 159, 167, 176, 180, 185, 186, 187, 188, 189,
Egüez, Manuel, Teniente, 297, 326 190,202, 208, 209, 211, 214, 218, 219, 220, 223,
Eguiguren, Dr., 334 226, 228, 230, 231, 232, 234, 235, 236, 237, 238,
Elizalde, Isabel, 152 239, 240, 241, 242, 243, 244, 245, 257, 276, 278,
Elizalde, Pedro, Alférez de Fragata, 152 284, 285
Endara, 166, 170, 239 Franco, Carlos María, 311, 312
Endara, Javier, 216 Franco, Federico, 160
Engracia, Casimiro, Subteniente, 297, 305, 326 Franco, Fernando, 268
Erazo, General, 171, 172, 173 Franco, Guillermo, General, 11, 14, 15, 19, 21, 29,
Erigoyen, José María, Coronel, 284 59, 65, 79, 85, 87, 90, 91, 98, 99, 100, 103, 109,
Erisuma, Manuel, Capitán de buque mercante, 257 110, 111, 113, 119, 120, 181, 222, 228, 242, 243,
Escalante, Manuel, 272 258, 259, 298, 300, 306, 308, 310, 317, 318, 324
Escobar, Arcesio, 167, 168, 169, 170 Franco, Habacúe, Coronel, 323
Escudero, Pablo, 98 Franco, Joaquín, 311, 312
España, Diego, 68 Franco, José Antonio, Particular, 63
Espinel, Claudio, 314 Franco, Pablo Julián, Coronel, 288, 322, 323
Espinel, Marcos, 109, 207, 216, 220 Franco, Ricardo, Meritorio, 60, 62
Espinel, Pedro, 222, 223 Frías, Francisco, 334
Espinel, Rafael, primer cocinero, 345 Fuentes, Cayetano, 237, 311, 312
Espinoza, Gabino, Cabo de Resguardo, 137, 138,
139, 297
Espinoza, Javier, Dr., 55
Espinoza, José, Capitán graduado, 297, 325
Espinoza, M., Francisco, Marinero, 148 Gálvez, Manuel, 165, 168, 170, 220, 245, 275,
Espinoza, Pablo, Sargento, 194 288, 306, 309, 313
Estevez, 38 Game, Eduardo, 339
Estrada Ycaza, Julio, 73, 74, 75, 158, 159 Game, Francisco Modesto, Capitán, 274, 275, 276,
339
Game, Mateo Palmer, 267, 274, 277, 280, 331,
F 337, 339, 340, 341
Garaicoa, Jacinto, Meritorio, 61
Fabre, Antonio, 72, 99, 101, 103, 104, 106, 107, García, Comandante, 19
108, 109, 111, 112, 113, 115 García Avilés, Francisco, 160
Fabre, José, Coronel graduado, 230, 231 García, Lorenzo, 215
Fagan, 111 García, Luis, 316
Farías, Tomás, 321 García Moreno, Gabriel, Dr., 4, 8, 9, 11, 12, 13,
Feraud, Mateo, Teniente de Fragata, 260, 261, 268 14, 15, 16, 17, 18, 19, 20, 21, 22, 23, 24, 25, 30,
Feres, Roberto, alumno particular, 60 31, 33, 35, 36, 47, 51, 52, 54, 64, 68, 69, 72, 79,
Fernández, 17 81, 85, 86, 87, 89, 90, 91, 92, 94, 95, 96, 97, 98,
Fernández, Ignacio, Coronel, 94 99, 100, 101, 102, 103, 104, 105, 106, 107, 108,
Fernández, José D., Marinero, 148 109, 110, 111, 112, 113, 114, 119, 120, 126, 132,
Fernández Madrid y Bello, Francisco, Capitán de 133, 136, 141, 142, 150, 155, 156, 157, 160, 162,
Navío, 69, 71, 72, 151, 230, 232, 248, 253, 264, 165, 166, 167, 168, 169, 170, 171, 172, 173, 174,
273 175, 176, 177, 178, 179, 180, 186, 187, 188, 190,
Fierro, Vicente, 171, 172 191,195, 204, 207, 208, 209, 210, 211, 212, 215,
390 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

216, 217, 218, 219, 220, 225, 226, 227, 228, 229, Hautefenille, 294
231, 236, 237, 239, 241, 244, 246, 251, 252, 255, Haz Baldomero, Sargento Mayor efectivo, 297,
256, 258, 271, 273, 274, 277, 285, 286, 287, 289, 305, 325
290, 291, 292, 295, 296, 299, 300, 301, 302, 305, Henry, Gregorio, 236
306, 307, 308, 309, 310, 311, 312, 313, 314, 315, Heredia, Juan, Capitán de Fragata, 275, 279, 281,
316, 317, 318, 320, 321, 324, 325, 326, 328, 331, 298, 301, 334, 335
332, 343, 346, 347, 348, 349, 350, 351, 352, 353, Hernández Bello y Puigvert, María Mercedes, 71
354, 355, 356 Hernández, Miguel, Capitán, 244
García Moreno, Miguel, 242, 285, 286, 293, 295, Herrería, José, 268
333, 336 Herrera, Manuel, 346
García Moreno, Pedro Pablo, 71, 160, 218, 323 Herrera, Pablo, Dr., 17, 18, 92, 221, 225, 328, 336,
García Vernaza, Juan E., Presbítero, 296, 326 343
Gaviria, Fernando, 186 Herrera, Tomás, 255, 257
Giménez, José María, 283 Hidalgo, Adolfo, Meritorio, 62
Gin, 239 Holguín, 226
Gómez, Abelardo, Alférez de Navío, 298, 311 Hoyos G., Melvin, Arquitecto, 159
Gómez, Angel María, 194 Hurtado, M. G., 160
Gómez Cox, Juan, Capitán, 224
Gómez de la Torre, Manuel, 16, 354, 355, 356
Gómez de la Torre, Teodoro, Coronel, 60, 185
Gómez, José Antonio, Alférez de Navío, 29, 36,
126, 232, 248, 298, 311
Gómez Jurado, Severo, Padre, 24, 69, 170, 309 Ibáñez, Manuel, Soldado, 129
Gómez, Miguel, 265 Icaza, Sargento, 323
Gómez Valverde, José Antonio, Capitán de Navío, Illescas, José, Dr. Coronel, 245, 304, 318
11, 12, 13, 55, 60, 71, 126, 132, 151, 184, 230, Illingworth, Juan, General, 152
253, 261, 264, 349, 350 Indaburu Bodero, Julián, Subteniente, 285
González P., 191 Isabel II, 196
González Suárez, Federico, Monseñor, 310 Isern y Batlló, Juan, 197, 198, 199, 204
González, Vicente, General, 120. 123, 243, 245, Iturralde, Mayor, 242
321, 348, 350, 351 Iturralde, Faustino, Sargento Mayor graduado, 92,
Groignet, 36 263, 264
Guedes, César, Teniente de Fragata, 30, 53, 54, 66, Izquierdo, José, Capitán de Corbeta, 70, 149, 233,
235, 248, 261, 262, 267, 273, 277, 327 234
Guerrero, Agustín Lucas, General, 92, 93, 178 Izquierdo, Nelson, particular, 62
Guerrero, Mariano, Teniente, 297, 326 Izquierdo, Ulises, particular, 63
Gurumendi, Sargento, 335
Gutiérrez, Francisco, Capitán de Navío, 258, 259,
260, 261
J
Gutiérrez, Gaspar, adjunto celador de Policía, 296,
305 Jado, José María, Guardia Marina, 59, 63
Gutiérrez, José, Teniente Coronel graduado, 297, Jaramillo, Pedro, Coronel, 284, 285
325 Jaramillo, Rafael, 316
Gutiérrez, Juan A., 214, 215 Jiménez de la Espada, Marcos, 196, 197, 198
Guzmán, M., 334 Joaquín, 200
Junco, Juan Ignacio, Subteniente, 297, 326
Jurado Noboa, Fernando, Dr., 127
Junín, Juan, Meritorio, 63

Hanssaurck, 288
Harman, Adrián, 194, 195
K
Harman, J. E., 282, 283, 291, 293, 295
Hasaurek, Friedrich, 73 Kenedey, Williams, 235, 257, 258
Hassanrek, Federico, 333, 337 Klinger, Leonor, 168
INDICE ALFABETICO 391

Klinger, Virginia, 168, 169, 170 Maridueña, Marcelino, Teniente Coronel


Krushchev, 180 graduado, 297, 304, 325
o Marín, Eusebio, Guardia Marina, 63
Marín, José A., 160
Mariscal, Juan Francisco, Subteniente, 285, 311,
312
La Vallete, 113 Márquez, Miguel, 53
Lafuente, Bernardo, Capitán de Ejército, 151 Martín, Adolfo, Guardia Marina, 61, 63
Lamota, Domingo, Capitán de Fragata, 148, 276, Martín, Vicente, Meritorio, 62
311, 312 Martínez de Aparicio, José Antonio, Coronel, 242,
Lamota, Lautaro, Comandante, 284, 285 243, 296, 304, 319, 325
Lapierre, 99 Martínez, Roberto, Alférez de Fragata, 152
Lara, Celestino, Coronel, 272, 284 Martínez, Francisco Javier, Capitán efectivo de
Larrea y Loredo, José de, 82 Navío, 151, 248, 251, 257, 265, 267, 273, 274,
Larroque, Enrique, Alférez de Fragata, 30, 64, 66, 290, 295, 297, 301, 302, 304, 311, 312, 325, 332,
72, 235, 257, 285, 298 356
Latorre Tapia, Octavio, Dr., 35 Martínez, Nicolás, 354
Lavayen, Julio, Comandante, 284, 285 Martínez Pallares, Antonio, General, 11, 13, 17,
Layana, José, Comandante, 322, 323, 324 23, 32, 54, 71, 94, 136, 137, 140, 151, 154, 161,
Lazo, 17 228
Le Gouhir, José María, Presbítero, 310 Martínez y Sáez, Francisco de Paula, 197, 199,
Leal, José. 312 204
Lecaro, Tiburcio, Alférez de Navío, 30, 47, 223, Maruri, N., 37
232, 234, 253, 265, 296 Mata, Antonio José, Coronel, 60
Lecijamo, Manuel de J., 189 Mata, Daniel, Guardia Marina, 60, 61, 63
Lee E., Capitán, 124, 339 Matos, Diego B. Guardia Marina, 232, 253, 268,
León, General, 228 277
Lessers, de, 108, 109 Matos, Diego Eugenio, Capitán de Fragata, 14, 52,
Letamendi, 17 53, 54, 55, 56, 57, 64, 66, 67, 70, 72, 122, 124,
Leví Castillo, Roberto, Dr., 3 126, 128, 129, 130, 131, 136, 137, 138, 146, 147,
Lincoln, Abraham, 213 149, 150, 151, 155, 156, 181, 230, 231, 232, 240,
Lino, Simón, Cabo, 140, 344 248, 253, 257, 261, 262, 266, 273, 276, 277, 327,
Lombeida, Manuel, Capitán graduado, 297, 305, 337, 347
325 Matos, Tomás, Alférez de Navío, 72, 232, 233,
Loor, Wilfrido, 102, 103 234, 253, 296, 297, 326, 348, 349
López, Cayetano, 255 Medina, Luis, Comandante asimilado, 284
López, Escobar, Manuel, 17 Melgar, José Fabio, Doctor, 80, 83, 85, 113, 114,
López, Rosario, 347 115
Luccenius, 294 Mena, Juan, 311, 312
Lucero, 203 Méndez, Manuel, Práctico, 137, 138, 139
Luna, Manuel, Teniente, 297, 326 Menéndez, Angela, 152
Luzarraga, 119 Menten, J.B., 102
Merchán, Manuel, Marinero, 132
M Merino, Pablo, Guardia Marina, 68, 261
Mestanza, Mariano, 216
Millan, Antonio, 210
Macine, Francisco, Capitán graduado, 296, 326 Millan, Juan Francisco, 156, 157
Malaver, Mateo, 159 Millet, 246
Maldonado, Manuel Tomás, General, 220, 224, Mins, 126
225, 226, 227, 228, 310 Miño, Mariano, 337, 339
Malo, Benigno, 237, 238 Miranda, Manuel, 268
Manjarrés, Eugenio, 322, 323 Mirón y Alayón, Carmen, 127, 152
Marcos Tejada, José, Comandante, 223, 274, 275, Mirón, Horacio, alumno particular, 60
276, 298, 301, 307, 311, 312, 318, 334, 337 Moncada, Pedro, Capitán efectivo, 296, 305, 325
392 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Moncayo, Pedro, 207, 225, 227, 229 272, 273, 344, 356,
Montalvo, Juan, 168, 245 Oramas, José Agustín, Guardia Marina, 64, 65
Montealegre, Tranquilino, adjunto celador de Ordeñana, Domingo, Guardia Marina, 72, 232,
Policía, 296, 305 235, 253
Monteverde Granados, Carlos, Contralmirante, 4 Ordinola, Gabriel, 265
Monteverde Nimbriotis, Enrique, Vicealmirante, 4 Ordóñez, Carlos, Coronel, 247
Mora, Francisco, Teniente de Fragata, 62, 248, Orellana, Eugenio, 192
252, 255, 265, 266, 273, 282 Ortíz, José Pío, Teniente, 92
Morales, 22, 334 Ospina, 166
Morán, Domingo, Subteniente, 296
Morán, Ramón, 37
Moreira, José, Marinero, 180, 258
Moreira, Juan, Capitán, 343
Moreno, Cesáreo, Subteniente, 94 Palma, N., 311, 312
Moreta, Jorge, Teniente, 92 Palma, Ricardo, 169
Morieta, Juan, Marinero, 268, 345 Pallares, General, 11, 17, 23
Morillo, Salvador, Sargento Primero, 334, 335 Pallares, José, Alférez de Fragata, 30, 64, 66, 67
Morlás, Servilio, Subteniente, 297, 326 Pancho, 200
Mosquera, Manuel, Subteniente, 297, 326 Panelo, Antonio, 236
Mosquera, Tomás Cipriano, General, 87, 108, 166, Paredes, Mayor, 192
167, 168, 170, 171, 173, 174, 175, 176, 177, 178, Pareja, César, Meritorio 61
179, 180, 181, 185, 186, 187, 194, 216, 226 Pareja Diezcanseco, Alfredo, 25, 100, 165, 175,
Mouton, Juan Henrique, 236 179, 186, 245, 313, 314, 351, 356
Muñoz, José María, Capitán de Corbeta, 152 Pareja, Guillermo, Sargento Mayor efectivo, 92,
Muñoz, Manuel, Soldado, 150 296, 305, 325
Murgueito, José, Teniente Coronel graduado, 296, Pareja, José María, Oficial Mayor, 55
325 Pareja, Pedro, Capitán, 92
Murrieta, Antonio, Capitán graduado, 296, 305, Parra, 236
325 Parreño, Francisco, Capitán efectivo, 92, 296, 305,
Musse, 294 325
Pasos, Santiago, Sargento Mayor efectivo, 257,
297, 304, 325, 345
N Pastor, Joaquín, Capitán efectivo, 297, 325
Pattee, Ricardo, 96, 101, 165, 171, 178, 186, 207,
Napoleón III, 103, 107 216
Navarrete, José Antonio, Sargento Mayor Paz, Patricio M., 197
graduado, 251 Paz Soldán, José H., 89
Navas, Ignacio, Teniente Coronel, 263, 264 Paz y Amor, Fernando, 197
Negrete, Félix, Sargento Mayor, 93 Pazmiño, Marcelino, Subteniente, 92
Nieto, Pablo, Capitán, 94 Peña, José, Subteniente, 323
Noboa, Diego, 226, 240 Peñafiel, Manuel, Subteniente, 297
Núñez, Miguel, Teniente de Fragata, 232, 234, Peñateli, Perides, Guardia Marina, 59
253, 263, 273 Pereira, Juan B., Coronel, 252
Pérez, Antonio, 159, 160, 161
Pérez, Emilio, Marinero, 130
o Pérez, José María, 89
Pérez, Matías, Alférez de Fragata, 152
Olguín, José Joaquín, 182, 183, 257 Pérez, Roberto, Meritorio, 62, 63
Onffroi de Thoson, Enrique, 48 Pezet, General, 181, 213
Oramas Yzaguirre, Agustín Eugenio, Capitán de Picard, 36
Navío, 13, 29, 30, 31, 33, 37, 38, 49, 50, 51, 52, Piedrahita, Vicente, 146, 178, 179, 180, 181, 182,
56, 57, 58, 65, 66, 67, 70, 126, 136, 137, 138, 146, 183, 184, 194, 195, 352
147, 148, 149, 150, 151, 154, 155, 159, 182, 183, Pieruzzini, Sebastián, 236
184, 213, 230, 231, 248, 254, 255, 258, 261, 266, Pincay, Juan, Grumete, 345
INDICE ALFABETICO 393

Pinzón, Almirante, 71, 72, 212 Rocafuerte, Soldado, 302


Pío IX, Papa, 24, 25 Rocafuerte, Vicente, 159, 352
Piocok, 126 Roditi, 335
Pizarro, Francisco, 1 Rodríguez, Gregorio, Comandante, 284
Plaza, Francisco, Guardia Marina, 61 Rodríguez, José Antonio, Meritorio, 61, 63
Plaza, Gaspar Alamiro, Capitán, 276, 284, 285, Rojas, Lucas, Capitán de Fragata, 13, 14, 29, 32,
302,303,311,315,317,318,319,326 49, 50, 51, 52, 70, 126, 151, 232, 252, 254, 255,
Plaza, Honorio, Guardia Marina, 61 258, 259, 260, 344, 356
Plaza, U., 181 Roldán, José Plácido, 274, 278, 282, 346
Polit Lazo, Manuel María, Arzobispo, 170, 179 Romero, Cerafín, 236
Pragdon, George, Capitán, 339, 340 Romero, Eusebio, 311, 312
Prévost, L.V., 278, 333, 336, 340 Romero, Manuel, Guardia Marina, 59
Prieto, Francisco, Profesor, 60, 61, 62, 63 Ronquillo, José Dionisio, Teniente Coronel, 290
Proaño, 11 Rosado, Pío, práctico, 136
Proaño, Gregorio, Grumete, 345 Rosero, Matías, 171, 172, 173
Puig y Galup, Bartolomé, 197 Ruiz, Pedro, Comandante, 284

Q s
Quevedo, 100 Sachapelli, Emilio, Subteniente, 33
Quiñónez, Manuel Salvador, Mayor, 192 Salazar, Francisco Javier, General, 94, 95, 221,
Quiroz, José María, Coronel graduado, 92, 246, 243, 344, 348, 349, 350
297, 304, 325 Salcedo, Teniente, 138
Salcedo, César, Meritorio, 61, 63
Salcedo, Guillermo, Guardia Marina, 30, 54, 63,
R 64
Salvador, Daniel, Coronel, 68, 94, 95, 125, 126,
Radiche, Felipe, Teniente de Fragata, 152 127, 136, 150, 151, 154, 173, 211
Ramos, Francisco, 268 Samaniego, 241
Ramos, Pedro, Fogonero, 345 San Martín, Joaquín, Alférez de Fragata, 60, 126,
Real, Rafael, Comandante, 284 151
Regalado, Cabo, 323 San Martín, José de, General, 127
Reina, Alberto Wagner de, 21 San Quírico, 99
Reina, Francisco, Capitán de Fragata, 152 San Román, Miguel, General, 87, 89
Rendón, Francisco, Teniente Coronel graduado, Sánchez Bravo, Mariano, Capitán de Fragata, 3
92, 218, 263, 264 Sánchez, Diego, Teniente de Fragata, 30, 33, 232,
Requena, 36 248, 251, 253, 273, 277, 295, 297, 326, 339, 342
Reyes, Oscar Efrén, 96, 165 Sánchez Rendón, Mariano, 303, 317
Riofrío, Miguel, 207 Sánchez, Zoila Cuesta de, 303
Ríos, Alférez, 335 Santana, 209
Ríos, Raymundo, General, 246, 247, 259 Santiago, Triconel, Voluntario, 298
Riso Patrón, E, 158 Santos Centeno, Manuel A., Coronel, 94, 95
Robalino Dávila, Luis, 170, 291, 307, 313 Santos, Rufino de los, Marinero, 258
Robalino, Justo, Teniente, 226 Saona, Miguel, Teniente Coronel, 285
Robinson, Juan Antonio, Coronel, 284 Sarrade, Felipe, Dr., 100, 289
Robles, Francisco, General, 12, 63, 155, 208, 211, Sárria, Manuel, 194
222, 226, 242, 276, 284, 298, 300, 301, 304, 307, Saucedo, Bartolomé, 268
308, 310, 311, 312, 317, 319, 343, 353 Scamas, León, Clérigo, 103
Robles, José María, Capitán de Fragata, 276, 298, Sea, José, 311
311, 312 Selaya, 179, 180
`4. Robles, Julio, Meritorio, 59 Serpa, Epifanio, 89
Roca, José, Capitán, 130 Silva, Manuel, Alférez de Navío, 72, 232, 248,
Roca, Vicente Ramón, 156 253, 265, 266, 272, 273, 277, 327
394 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

Silva Santistevan, José, 89 Urrea, José Seledonio, 87, 180


Sinchez N., Sargento Mayor, 285, 302, 303, 317 Urueta, Alejandro Antonio, Capitán, 252, 255
Smyrk Taylor, C., 124, 331
Somonte, 130
Sono, Luisa, 152
Sotomayor y Nadal, José, Coronel, 284
Soulin, Juan Hipólito, Capitán de Navío, 102, 152 Vaca, Ignacio, Teniente Coronel graduado, 93
Spaerer, C.G.E., 236 Vaca, Isabel, 226, 227
Stagg, Leonardo, General, 152, 257 Vaca, Rafael, 311, 312
Stalin, 180 Valencia, Mario, Subteniente, 268
Suárez, Antonio, Comandante, 284 Valverde, Juan José, Capitán de Navío, 58, 152
Suárez, Manuel María, Alférez de Fragata, 31, 60 Vallejo, José María, Capitán de Navío, 151, 155,
Sucre, Antonio José de, Sargento Mayor graduado, 276,298,307,309,311,312,318
296, 325 Vallejo, José Pío, Teniente de Fragata, 152
Vallejo, Ventura, Mecánico, 276, 311, 312
Vargas, 241
T Vásquez, Gabriel, 322, 323
Vásquez, Nicanor, 311, 312
Talavera, Ramón, Alférez de Fragata, 236 Vega, Manuel, Doctor, 96, 97
Talbot, Guillermo, Coronel, 121, 123 Veintimilla, Ignacio de, Coronel, 28, 95, 157, 158,
Tama, Federico, Guardia Marina, 59 226, 227, 238, 356
Tavani, Monseñor, 328 Veintimilla, José de, Coronel, 94, 157, 158, 181,
Therond, E., 86 184, 185, 188, 189, 190, 210, 228, 246, 247, 310
Thouvenel, Eduardo Antonio, 103, 104, 106, 107, Velásquez, José, 268
108, 109, 110, 111, 112, 115 Vélez, Nicolás P., Capitán Efectivo, 92, 239
Tola, Agustín, alumno particular, 60, 274, 334 Vera, Catalino, Soldado, 323
Tola, Eugenio, Capitán, 320 Vera, Domingo, Sargento Mayor, 94
Tola, Jorge, 334 Vera, Enrique María, Teniente de Fragata, 127,
Topete, Juan Bautista, Comandante, 292, 293 139, 146, 151, 184, 252
Torres Crespo, Thelmo, Dr., 244 Vera Francisco Meritorio, 59
Torres, Rafael, Subteniente, 94 Vera, José Antonio, Guardia Marina, 60, 62
Torres, Tomás, 332 Vera, Juan Gualberto, adjunto celador de Policía,
Trinite M., Emile, 99, 100, 101, 104, 106, 108, 296, 305
110, 111, 114, 165, 208 Vera, Manuel, 311, 312
Vera, Melintón, Coronel, 302, 316
Vergara, Antonio, Aspirante, 60
u Vergara, Francisco, Guardia Marina, 59
Vignal, 318
Ulloa, Luis, 179 Villa, 218
Uraga, Juan Manuel, Capitán de Navío, 29, 36, 37, Villacrés Moscoso, Jorge, Doctor, 79
38, 39, 41, 43, 45, 47, 73, 146, 195, 215, 216, 225, Villalobos, Víctor, Capitán graduado, 297, 325
232, 234, 239, 240, 253, 254, 257, 258, 271, 272, Villamar, Rafael, 238, 239
273, 296, 298, 303, 305, 311, 318, 325, 327, 340, Villandrando, Miguel, Sargento Mayor graduado,
346, 356 94
Uraga Pazmiño, Enrique, Dr., 39, 41, 43, 45 Villao, José, Comandante, 284
Urbina, Gabriel, 64 Viola, Santiago, 313, 314, 315
Urbina, José María, General, 15, 19, 21, 25, 58, Viteri, Daniel, Sargento Mayor graduado, 92
85, 87, 88, 102, 120, 155, 167, 175, 176, 177, 187, Viteri, Darío, 307, 311, 312
188, 195, 196, 204, 207, 208, 209, 210, 211, 212, Viteri, Domingo, alumno particular, 60
216, 219, 220, 221, 222, 223, 226, 227, 228, 229, Vítores, Juan, Guardia Marina, 59, 62
231, 236, 237, 239, 245, 246, 247, 248, 251, 271,
276, 279, 280, 284, 285, 289, 290, 291, 292, 300,
301, 303, 304, 307, 308, 309, 310, 311, 314, 316,
317, 319, 336, 343, 353
INDICE ALFABETICO 395

Yépez, Manuel Santiago, Coronel graduado, 93,


Wattel, 294 175, 325
Wiener, 318
Williams, Jorge, Contramaestre, 266
Wisse, Sebastián, 102, 204
z
Wright, Thomas Charles, General, 152, 216, 217,
218, 219, 220, 311 Zambrano, Ramón, Teniente Coronel, 320, 342
Wright, Tomás Carlos, hijo, 218, 219 Zarama, Francisco, Coronel, 170, 171, 172, 173
Wright Vallarino, Alberto, 217, 219 Zúñiga, Leonardo, Meritorio, 59

BUQUES

A E
Adelaida, goleta peruana, 130 Eduardo, goleta inglesa, 283
Amazonas, fragata, 120 El Tiempo, pailebot, 126
Angelita, chata, 53, 332
Anne, vapor, 231, 244, 254
Apurinac, fragata, 283 F
Flor de Avante, goleta mercante, 185
B Francisca, chalupa peruana, 265

Bernardino, vapor, 210, 211, 218, 223, 254, 276,


284, 289, 298, 300, 301, 302, 303, 331, 341, 342, G
356
General Bolívar, vapor, 341
Blanca, fragata de guerra, 291, 292, 293, 295, 347
General Sucre, goleta, 29, 30, 31, 65, 233, 234,
Bogotá, vapor, 21
236, 239
Bolívar, vapor fluvial, 119, 124, 241, 267, 276,
Guayas, goleta de guerra, 181, 183, 194, 229
339, 341
Guayas, vapor de guerra, (buque anterior), 62, 126
Guayas, vapor de guerra, 72, 231, 232, 233, 234,
c 235, 239, 240, 243, 244, 245, 248, 251, 253, 254,
257, 258, 261, 263, 264, 265, 266, 267, 268, 271,
Carmencita, chata, 54 272, 273, 275, 276, 277, 278, 279, 280, 281, 282,
Cinco de Abril, goleta de guerra, 258, 259 283, 284, 285, 286, 289, 298, 299, 302, 303, 304,
Clorinda María, goleta, 181, 182, 183, 229 305, 313, 317, 327, 331, 334, 337,338, 345, 347,
Colombia, fragata, 52, 253, 257 349
Covadonga, goleta de guerra, 197, 212 Guayaquil, vapor británico, 155
Cuatro de Abril, goleta, 29, 30, 31, 37, 38, 47, 49, Guisse, bergantín de guerra, 350, 351
52, 68 Gustavo, bergantín, 236
Cundinamarca, fragata de guerra, 52
H
D
Huaraz, vapor de guerra, 18, 19, 21
Diecisiete de Julio, bergantín goleta de guerra, 61,
195
Dije, vapor, 98
396 HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR

S
Inca, vapor, 351 Salado, goleta de guerra, 14, 29, 30, 32, 33, 49, 50,
51, 52, 53, 54, 55, 56, 57, 58, 64, 65, 66, 67, 68,
J 69, 70, 71, 72, 73, 120, 121, 122, 124, 125, 126,
128, 129, 130, 131, 132, 136, 137, 138, 146, 147,
148, 149, 150, 151, 153, 155, 180, 181, 194, 214,
Jambelí, vapor, 341, 342, 356
229, 230, 236, 239, 240, 243, 251, 252, 254, 255,
Jorge Juan, balandra, 282, 332 256, 257, 258
San Carlos, vapor, 210
L San Jacinto, pailebot peruano, 282
San Nicolás, buque, 282
Liebre, pailebot, 123 Smyrk, vapor, 125, 232, 239, 244, 245, 277, 288,
290, 291, 295, 296, 299, 300, 301, 302, 303, 304,
M 311,317,331,332,339
Sol de Lima, barca, 282
Machala, vapor, 61, 195, 253, 257 Sucre, goleta, 31
Machángara, goleta de guerra, 147, 148, 150, 191,
194 T
Margarita de Paita, pailebot peruano, 282
María y Julia, barca española, 137 Talca, vapor, 194, 195, 290, 291, 292, 293, 294,
295, 296, 299, 300, 301, 303, 305, 307, 311, 313,
N1 314, 331, 342, 343
Teresita, goleta nacional, 130
Nueva Granada, vapor, 210 Triunfo, fragata de guerra, 197, 212
Nueve de Octubre, bergantín, 279
u
o Ucayali, vapor de guerra, 18, 19, 21
Ola, bote peruano, 268
Olmedo, pailebot de guerra, 61 w
Washington, vapor, 119, 200, 212, 233, 236, 239,
P 267, 273, 274, 275, 276, 277, 278, 279, 280, 281,
Paita, vapor inglés, 289 282, 283, 284, 286, 289, 291, 292, 298, 301, 302,
Paquete del Sur, goleta nacional, 150 304,321,327,331,333,334,336,337,338,339,
Peruano, vapor, 161 340,341

R Y
Resolución, goleta de guerra, 197, 212 Yenny Lee, goleta, 132
ti
OBRAS DEL MISMO AUTOR PUBLICADAS POR EL
INSTITUTO DE HISTORIA MARITIMA

FORJADORES NAVALES DEL ECUADOR

Historia de la Armada a través de las biografías de 25 de sus distinguidos oficiales


navales.

LA PRIMERA ESCUELA NAUTICA 1822 - 1830

Vivencias de los primeros cursantes de la Escuela Náutica, desde que fue creada por
iniciativa del Capitán de Navío Juan Illingworth.

BUQUES Y PERSONAJES

Relaciones históricas sobre los buques de guerra más sobresalientes de nuestra patria
(Ecuador), personajes que han prestigiado nuestra Marina y otras narraciones sobre
episodios navales.

REMEMBRANZAS ANTÁRTICAS

Sucesos, anécdotas y vivencias relatadas por el autor, quien como Segundo


Comandante del Bu "Orión" participó en la Segunda Expedición Antártica
Ecuatoriana.

PROTAGONISTAS EN EL MAR

Trata del protagonismo de oficiales y tripulantes y de familias distinguidas que


aportaron con varias generaciones de marinos a nuestra nación.

HISTORIA MARITIMA DEL ECUADOR: TOMO VIII

Relato histórico sobre los principales acontecimientos navales ocurridos durante la


República, en el lapso 1850 - 1860.

NOTA: El autor ha escrito otros dos libros y aproximadamente medio centenar de trabajos
1
históricos. Estos últimos publicados en distintos órganos de difusión.
Este libro se terminó de imprimir
el 28 de abril del año 2000 en la
empresa gráfica MacFormas.
Armada del Ecuador
Instituto de Historia Marítima

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