TEMA 5.

LA PLANIFICACIÓN EMPRESARIAL

Planificar consiste en fijar objetivos, decidir estrategias y establecer tareas para

alcanzar esos objetivos. Es imposible organizar, gestionar y controlar con
eficacia una empresa si previamente no ha habido planificación.
La planificación puede definirse como el proceso, o conjunto de procesos,
dirigido a decidir anticipadamente qué se pretende hacer en el futuro y cuáles
serán los medios y recursos que serán empleados para alcanzar los objetivos
fijados en dicho proceso.
Razones para la planificación:
o La orientación (vector empresarial): impulsa la coordinación de las diferentes
unidades organizativas hacia un objetivo concreto.
o La asignación eficiente y eficaz (economía de medios): permite establecer
las bases para alcanzar los objetivos de un modo óptimo con el mínimo de
recursos.
o La flexibilidad (entender la empresa como un sistema abierto): facilita a la
acción directiva el cambio y la adaptación al entorno.
o Las sinergias entre responsabilidades: permite mejorar los resultados de
diversas áreas de responsabilidad dentro de la organización empresarial.

EL PLAN

El plan es la expresión documentada y evidenciada de un proceso planificador

o de planificación en una organización empresarial donde se pueden identificar
los mecanismos concretos de la función planificadora.
Una planificación puede incorporar desde un solo plan a múltiples planes que,
a su vez, puede ocurrir que sean, en mayor o menor grado, dependientes o
independientes entre sí. Tipología de los planes:
o Tiempo:
o Planes de corto plazo: duración inferior al año.
o Planes de medio plazo: duración entre uno y tres años.
o Planes de largo plazo: duración entre tres y cinco años.
o Planes de muy largo plazo: por encima de los cinco años.

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o Amplitud:
o Planes estratégicos: son planes globales y a largo plazo.
o Planes tácticos: enfocados sobre una parte de la empresa, tiene a operar
en el corto-medio plazo.
o Planes operativos: se dirige a la unidad funcional o departamental, con
una tendencia de corto plazo.
o Frecuencia:
o Permanente: Ejemplo check-in y check-out en la recepción de un hotel.
o De aplicación única: Ejemplo el programa de renovación de mobiliario en
las habitaciones de la planta de un hotel.

ELEMENTOS DE LA PLANIFICACIÓN

Disponer de un plan no siempre garantiza el éxito empresarial, ya que el mismo

debe ser ejecutado.
Una ejecución que reclama la verificación del grado de efectividad alcanzado y
la detección de las anomalías producidas.
Es posible establecer el conjunto de elementos que componen el proceso de la
planificación, pero en una planificación no siempre aparecen todos estos
elementos expresa o explícitamente o en el orden establecido que se expone:
o Misión y visión: Se encuentran en la posición más elevada de la jerarquía, al
constituirse en los puntos de partida de todo proceso planificador;
constituyen la razón de ser de la organización, dando sentido y significado a
todas y cada una de las acciones que ejecute la organización empresarial.
Sin una idea clara de la misión y visión de una organización, sería imposible
la coordinación y unidad en esta. La misión se puede entender como la
definición del propósito de la acción empresarial que se desarrolla y la visión
como la proyección a largo plazo sobre cómo queremos vernos o lo que
queremos llegar a ser en términos empresariales.
o Objetivos y metas: Quedan subordinados a la misión y visión de la empresa.
Ejemplo: la Constitución es la ley de leyes. Nuestros objetivos y metas son
las leyes, nuestra misión y visión es la Constitución.

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o Políticas: Serían los principios y líneas generales de la actuación de la
organización empresarial. De ellas se deriva la filosofía de la empresa.
Las políticas son orientaciones generales para la acción. Su esencia es que
definen las áreas decisionales al delimitarlas perfectamente. Estén o no
formalizadas, son una guía para el pensamiento en la toma de decisiones y
una orientación para la acción. Ejemplo: el personal comercial que se
contrate siempre deberá conocer un idioma adicional.
o Estrategias: se elaboran para aportar un enfoque que guíe el pensamiento y
la acción para alcanzar la misión y los objetivos. Se trata de un plan de
amplio alcance y a largo plazo. Clasificación de estrategias:
o Estrategia ofensiva: deseamos mantenerlos precios tan bajos como
nuestra competencia o como nos sea posible y la táctica empleada puede
consistir en:
o Rebajar nuestro margen de beneficios.
o Reducir los costes de producción-generación del servicio.
o Combinar ambos dos.
o Estrategia defensiva: mantendremos los precios en la esperanza de que
los clientes sepan identificar los elementos y razones que justifican que
nuestros precios sean más altos. La táctica empleada puede ser:
o Una inversión publicitaria que destaque la calidad y diferencie nuestro
producto-servicio.
o Una campaña de fidelización de clientes vía premios selectivos.
o Procedimientos: Son una secuencia temporal (o jerárquica) de acciones que
debe ejecutarse para poder operar de modo efectivo sobre problemas
empresariales determinados. Ejemplo: si se solicita una inversión de mejora
en las instalaciones puede requerir un procedimiento administrativo.
o Reglas: son instrucciones precisas y concretas para ejecutar o no
determinadas acciones. Son acciones requeridas, seleccionadas de entre
distintas posibilidades. Ejemplo: Unos grandes almacenes en los que se
quiere ahorrar en costes de transporte de mercancía adquirida por el cliente,
salvo que el cliente lo solicite el vendedor no ofrecerá estos servicios de
transporte al domicilio del comprador.

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o Programas: Son planes específicos o conjunto de acciones debidamente
ordenadas de medio/largo plazo para alcanzar metas concretas (objetivos
intermedios).
o Presupuesto: Es la expresión cuantitativa, es decir, la expresión en términos
monetarios o físicos, de un programa, explicitando y, por tanto, dando a
conocer los resultados previstos (esperados) así como los medios y recursos
que se considera se van a emplear.

ETAPAS DE LA PLANIFICACIÓN EMPRESARIAL

o Identificación (detección) del problema (punto de partida): Implica la

definición y determinación (acotación) de los problemas presentes y futuros,
así como sus posibles interrelaciones. Esta fase es verdaderamente
importante, dentro del conjunto de etapas consideradas, ya que una correcta
identificación del problema permite aproximarse con mayor facilidad a la
resolución del mismo.
o Especificación de objetivos (punto de llegada): fija una primera aproximación
sobre la situación futura deseada, estableciendo los objetivos que permitan
alcanzarla.
o Determinación de premisas (restricciones y límites del campo de juego):
requiere explicitar las premisas, suposiciones consistentes, para realizar los
pronósticos del futuro, fijar las políticas clave y desarrollar los planes de la
empresa.
o Establecimiento de alternativas (identificación de todas las posibles rutas
que nos llevan de la situación inicial a la final respetando las restricciones
preestablecidas): A través de la «inteligencia» directiva que puede lograr
destilarse por medio de las técnicas de brainstorming, se lleva a cabo un
proceso creativo de generación de ideas asociadas a posibles alternativas
para encontrar la adecuada que resuelva el problema o problemas a los que
se enfrenta la organización. A partir de una primera puesta sobre la mesa de
todas las ideas, habrá que ir realizando un cribado para que vaya quedando
un número manejable de opciones, además de las que tengan mejor
aceptación por la parte de la dirección.

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o Evaluación de alternativas (filtrado de las rutas): consiste en valorar cada
una de las alternativas establecidas en la fase anterior. Expresables en
términos cuantitativos, considerarán los inconvenientes y las ventajas
incorporadas de manera que sea posible llegar a un determinado orden
jerárquico que posibilite la elección de una de ellas.
o Selección de la mejor alternativa posible (toma de decisión). Es la fase en
que se toma la decisión sobre el curso de acción a ejecutar. Pueden entrar
en acción consideraciones de tipo político, contrarias a la rigurosidad del
análisis desarrollado y que alteren la racionalidad de la jerarquía establecida.
o Especificación y asignación definitiva (perfilado final) de objetivos y
formulaciones de planes derivados o complementarios.
o Presupuestación (evaluación económica): Constituye la fase final,
convirtiéndose todos los planes en números. Serán la expresión numérica de
los resultados esperados.

A lo largo de todo el proceso, el compromiso del factor humano es clave. Dado

que los canales de autoridad serán insuficientes para conseguir la integración
de todos los componentes de la unidad empresa, deben establecerse enlaces y
relaciones multidireccionales e introducirse una cultura corporativa que permita
superar tensiones, recelos y fricciones.

HERRAMIENTAS DE PLANIFICACIÓN EMPRESARIAL

Cada problema de planificación requerirá del mecanismo adecuado para dar

forma al plan o conjunto de planes necesarios
Lo primero que se necesita para planificar es información. La naturaleza de lo
que deseamos planificar condicionará el tipo de información que necesitamos.
La información puede ser cualitativa o cuantitativa. Si la información tiene que
ver con el grado de estabilidad política, la ausencia o presencia de corrupción
administrativa, el grado de tolerancia al tipo de negocio que pretendemos abrir
y a la clientela asociada al mismo por parte de la población, etc. nos estamos
refiriendo a información cualitativa, es decir, a información no mensurable o
medible en unidades propias, no artificiales.

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Si la información tiene que ver con la cifra de universitarios del país, el nivel de
renta, el gasto, la inflación, la carga fiscal, etc., entonces trabajamos con datos
cuantitativos, es decir, cuantificables y mensurables.
Para tratar técnicamente dicha información disponemos de la estadística que
nos ofrece técnicas muy concretas de manipulación y tratamiento de datos,
cualitativos o cuantitativos, atemporales o temporales, que nos es preciso
conocer para avanzar en nuestro proceso decisional.
La Estadística Descriptiva nos permite obtener datos, por ejemplo, de
tendencia central también denominados medidas de concentración que nos
permiten resumir conjuntos de datos en uno solo.
Otros datos importantes que nos ofrece la estadística descriptiva son los datos
de desviación o medidas de dispersión (varianza, desviación típica...) que nos
dan información sobre el desajuste entre el dato que tenemos como
representativo del conjunto de datos y todos los demás. Cuanto mayor sea ese
desajuste menos fiable será el dato que representa al conjunto.
La Inferencia Estadística es un peldaño más en el que no trabajamos sobre
datos encerrados en sí mismos, sino que, a partir de una muestra, tratamos de
conocer las propiedades de la población de la que hemos efectuado esa
extracción muestral.
La Econometría nos permitirá dar forma a modelos económicos con un claro
propósito de predicción estadística.
El conocimiento de la Estadística es un plus en la capacidad directiva.
el desarrollo de las Tecnologías y Sistemas de Información, nos lleva a
considerar el Big Data y la minería de datos y tener el soporte de científicos de
datos para sacar el máximo rendimiento de la información con propósitos
planificadores y decisionales.
Hoy en día las organizaciones son cada vez más conscientes del papel que
juega la BI (Business Intelligence o Inteligencia de Negocios) como base de
apoyo y cimiento de edificio decisional de la dirección. A esta tendencia se
suman ya las innovaciones provenientes de la AI (Artificial Intelligence o
Inteligencia Artificial).
Herramientas como los data warehouse y los data marts aparecen como
herramientas útiles en la toma de decisiones para las empresas.

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Un data warehouse es un elenco o conjunto de datos diversos, integrados,
variables en el tiempo y no volátiles que son utilizados como soporte y apoyo
para la toma de decisiones.
Los data warehouses se construyen para dar servicio a las necesidades de
información requeridas por una organización empresarial, mientras que los data
marts atienden a las necesidades de información de una parte, unidad, grupo o
área específica de dicha organización.
Ambas son herramientas que incorporan las mismas funciones, si bien la
capacidad de un data warehouse es superior en cuanto a que permite
almacenar mayor volumen de datos que un data mart, configurándose como un
almacén central para toda la información del negocio.
Esta función planificadora a través de las herramientas y mecanismos
mencionados precisa disponer de información interna y externa que aporte
conocimiento sobre clientes, proveedores, conocimiento del mercado o
mercados en que se actúa, características de la competencia, etc.

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