Por ejemplo, diseñamos una acción formativa que enseñe a los alumnos a comunicarse por

un lenguaje de signos básico.

A nivel cognoscitivo hemos de asegurarnos que los alumnos conocen los signos básicos,
comprenden su significado y saben aplicarlos.

A nivel psicomotriz hemos de asegurarnos que el alumno muestre los signos de forma que sean
entendibles y siempre de igual manera.

En el campo afectivo debemos valorar el papel que juegan las emociones durante el proceso de
aprendizaje, hemos de tener en cuenta actitudes, emociones, sentimientos, valores y
prejuicios.

Para diseñar una prueba de evaluación de aprendizaje simple a nivel cognoscitivo aplicaremos
pruebas objetivas del tipo Selección múltiple o de Correspondencia como, por ejemplo:

En lenguaje de signos, que significa (elija la opción correcta):

¿Qué hora es?

Ahora
¿Qué día es hoy?
Después

Empareja mediante líneas cada signo con su significado:

Mucho
Ahora
¿Qué día es hoy?
Después

Si se desean evaluar los campos psicomotriz y afectivo, habría que plantear pruebas prácticas
en las que se valoren tanto la correcta ejecución, como la comprensión de los signos, para
ello deberemos prestar especial atención a la destreza motora y la coordinación muscular,
así como la actitud y motivación del alumno.