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Los seres humanos somos muy propensos a sufrir múltiples tipos de accidentes, los
cuales pueden conllevar a daños irreparables en la vida del individuo o hasta incluso
pueden tener como consecuencia la muerte, por ello, es importante reconocer que
tipo de lesión o daño se ha generado en el organismo de nuestro paciente, con la
finalidad de brindarle un tratamiento adecuado y salvaguardar su vida.
Los accidentes o incidentes que tienen un gran impacto o daño en el cuerpo del
paciente tienen principalmente como consecuencia traumas encefálicos y vertebro
medulares que ponen en riesgo la vida del individuo. Por ello, es trascendental aplicar
correctamente el ABCDE, ATLS y BLS en la escena del accidente y en el ambiente
clínico; esto nos permitirá evaluar y responder mejor ante la situación. Asimismo, es
importante mencionar que, un gran porcentaje de la causa de este tipo de lesiones
son los accidentes automovilísticos, dado que, debido a la gran frecuencia y cantidad
de personas politraumatizadas que tiene como consecuencia diariamente, la
evaluación y asistencia médica debe ser rápida y meticulosa en el ambiente
extrahospitalario, durante el traslado del herido y la atención en el ambiente
intrahospitalario. Desarrollar cada uno de estos protocolos de atención es
imprescindible para brindar una mayor esperanza de vida.
La apertura de la vía aérea debe llevarse a cabo con control cervical, involucrando a
dos profesionales para mantener la cabeza en una posición neutral mientras otro
equipo realiza la apertura de la vía aérea mediante maniobras que implican elevar el
mentón y levantar la mandíbula.
- También se realiza una evaluación rápida del estado circulatorio, que implica
verificar el nivel de conciencia, el color de la piel, el relleno capilar, la
temperatura corporal y los pulsos centrales del paciente. Esto proporciona
información valiosa sobre su estado circulatorio y puede guiar las
intervenciones necesarias.
POR EL MECANISMO:
CERRADO
Se produce por el movimiento en latigazo del cerebro hacia atrás y adelante,
golpeándose de manera interna con la superficie áspera del hueso craneal.
PENETRANTE
Lesión a un área específica del cerebro:
Figura N° 11: “Por arma de fuego”.
POR LA GRAVEDAD:
LEVE
Es la más frecuente, aun así, la persona debe estar en observación, ya que esta
podría perder el conocimiento, una vez que la paciente este completamente
recuperada y sin ninguna otra sospecha de lesión puede darse el alta.
MODERADO
El paciente con esta clase de trauma queda inconsciente durante un largo periodo de
tiempo hasta 24 h después de haber sufrido el impacto, y además presentara lesiones
cerebrales que deberán ser atendidas a la brevedad.
GRAVE
POR SU MORFOLOGIA:
FRACTURAS DE CRÁNEO: Es la ruptura de los huesos de la cabeza.
EN LA BÓVEDA CRANEAL: Son la union de todos los huesos craneales para formar
un casco para proteger principalmente al cerebro, cerebelo, tronco cefalico y otras
terminaciones nerviosas.
CON HUNDIMIENTO: ruptura del hueso cráneal con depresión hacia el cerebro,
puede generar absesos, necesita de intervencion quirurgica de levantamiento.
Figura N° 15: “Fractura con hundimiento”.
DE BASE: esta en la base del cráneo, los signos más comunes para identificar esto
son el hematoma periorbitario (ojos de mapache) y signo de batle.
DAÑO AXONALDIFUSO: Afecta las fibras nerviosas que conectan las las diferentes
partes del cerebro (Axones) se rompen causando microhemorragias, y puede
provocar el coma o alteraciones neurologicas.
COLUMNA CERVICAL SUBAXIAL C3-C7: Son las últimas cinco vértebras estas
tienen discos intervertebrales y articulaciones interapofisarias, el principal movimiento
de este segmento es el de flexo-extensión.
Figura N°23: “Columna cervical”.
HIPEREXTENCIÓN
HIPERFLEXIÓN
COMPRESIÓN
ROTACIÓN
FLEXIÓN LATERAL
ESTIRAMIENTO
En segundo lugar, Los elementos básicos del tratamiento para todos los pacientes
con lesión cerebral traumática son: Mantener ventilación, oxigenación y perfusión
cerebral adecuadas para evitar daño cerebral secundario. El tratamiento temprano e
intensivo de la hipoxia, la hipercapnia, la hipotensión y el aumento de la presión
intracraneal pueden evitar complicaciones secundarias. El sangrado de las lesiones
(externas e internas) debe controlarse rápidamente según sea necesario y los
volúmenes intravasculares deben reemplazarse rápidamente con la solución
cristaloide más adecuada.