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Asepsia y antisepsia
Instrumental quirúrgico
Materiales de sutura
Drenajes
Esterilización
Técnicas iniciales
Tratamiento posquirúrgico
1 ÍNDICE
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Propiedad de:
© 2016 Grupo Asís Biomedia S.L.
Plaza Antonio Beltrán Martínez, nº 1, planta 8 - letra I
(Centro empresarial El Trovador)
50002 Zaragoza - España
Ilustrador:
Jacob Gragera Artal
ISBN: 978-84-16818-08-2
Advertencia:
La ciencia veterinaria está sometida a constantes cambios evolutivos, del mismo modo que la farmacología y el resto de las ciencias también lo están.
Así pues, es responsabilidad ineludible del veterinario clínico, basándose en su experiencia profesional, la determinación y comprobación de la dosis,
el método, el periodo de administración y las contraindicaciones de los tratamientos aplicados a cada paciente.
Ni el editor ni el autor asumen responsabilidad alguna por los daños o perjuicios que pudieran generarse a personas, animales o propiedades como
consecuencia del uso o la aplicación correcta o incorrecta de los datos que aparecen en esta obra.
El último año y medio ha sido un periodo de grandes cambios
y evolución que nos ha traído a un presente maravilloso
y que nos está llevando hacia un futuro extraordinario y único.
A María, una mujer como tú es difícil de encontrar, pero muy fácil de amar.
Ahora nos queda un largo camino por recorrer.
Agradecimientos
Este apartado lo escribimos al finalizar la obra porque representa la conclusión de un proyecto
que empezó muchos meses antes, y en estas líneas queremos reflejar nuestro agradecimiento a
todos los que de una forma u otra han participado, ayudado, colaborado y apoyado para que
este proyecto saliese adelante.
Así que tenemos que empezar con MUCHAS GRACIAS a todos los que diariamente trabajáis
“codo con codo” con nosotros, a los veterinarios que nos refieren sus casos y a los propieta-
rios que confían en nosotros para el tratamiento de sus mascotas.
Gracias muy especiales a los anestesistas que nos acompañan todos los días y sin los que no
“podríamos vivir”, Carlos, Manuel, Julia, Robberta, Mª José, Cristina y Amaya, a los vete-
4
rinarios sénior de cirugía de Valencia Sur Julia y Jose, a los compañeros de Zaragoza, Carol,
Alicia, Ángel, Ramón, Juanjo, Luis y Jaime, a los internos que se han formado y que se están
formando con nosotros Ico, Coi, Sara, Miriam, María, Sandra, Bea, Cristina, Andreu, Sara y
Juanra.
Gracias a los veterinarios que trabajan infatigablemente con nosotros y que nos apoyan con-
tinuamente con sus consejos y recomendaciones: Vicente, Nacho, Iván, Sergio, Nelo, Laura,
David, Carlota, Mariana, Carlos, Fidel, Sara, Antón, Clara, Pedro, sois de lo mejor.
Gracias en suma a todos por vuestra dedicación diaria y por vuestro entusiasmo y esfuerzo,
que hace que el trabajo a vuestro lado sea una tarea sencilla, gratificante y casi siempre muy
divertida.
Y como no podía ser de otra forma, le estamos muy agradecidos por leer estas líneas y espera-
mos que la información que contiene el resto del libro le guste y le sirva de ayuda para que sus
intervenciones quirúrgicas sean siempre exitosas.
Para finalizar queremos agradecer de una manera muy especial el fantástico trabajo que han
realizado todos los componentes del equipo de la Editorial Servet porque cuidan hasta el úl-
timo detalle para que la calidad final del libro sea inigualable. Muchas gracias Leticia, trans-
mite nuestra felicitación a todos los demás por el gran esfuerzo que habéis hecho.
Agradecimientos / Autores
Autores
José Rodríguez Dirección y coordinación: José Rodríguez
Licenciado y Doctor en Veterinaria por la Universidad
Complutense de Madrid.
Profesor titular del área de Medicina y Cirugía Animal
del Departamento de Patología Animal de la Universidad
de Zaragoza.
Cirujano del Hospital Veterinario Valencia Sur
(Valencia, España).
Jorge Llinás
Licenciado en Veterinaria por la Universidad de Zaragoza.
Diploma de Estudios Avanzados por la Universidad
de Zaragoza.
Especialista Universitario en Cirugía Maxilofacial.
Director y cirujano del Hospital Veterinario Valencia Sur
5
(Valencia, España).
Presidente de la Sociedad Española de Láser y Electrocirugía
Veterinaria.
Salvador Guillén
Licenciado en Veterinaria por la Universidad San Pablo CEU
de Valencia.
Director del Centro Veterinario Criado de Puig
(Valencia, España).
Roberto Bussadori
Licenciado en Veterinaria por la Universidad de Milán.
Doctor europeo en Veterinaria.
Cirujano cardiovascular, torácico y de vías respiratorias
de la Clínica Veterinaria Gran Sasso de Milán, Italia.
Colaboradores
Carolina Serrano Julia Artero Lola Alférez
Manuel Alamán Katia Gámez Riccardo Sinacori
Cirugía en la clínica de pequeños animales
Prefacio
La trilogía de “El señor de los anillos” es una historia fantástica que atrapa y fascina desde
el primer momento. Por eso, y a medida que fue evolucionando la obra, los fans necesitaban
saber más y conocer las respuestas a interrogantes como ¿qué pasó antes de Frodo, Aragorn,
Gimli y Légolas? ¿cómo llegó el anillo a Bilbo?... La precuela “El hobbit: un viaje inesperado”
es el principio de esta aventura y empieza a aportar los datos que faltan para comprender la
historia.
Es importante conocer las bases y el principio de las cosas para entender el presente y estar
preparados para el futuro.
Estudie, busque, escuche, observe, investigue, medite, reflexione y practique: el presente está
en sus manos y el futuro lo tiene que preparar.
Una precuela es una obra cuya historia se enfoca en acontecimientos que se producen antes
del relato inicial con el objetivo de comprenderla mejor.
6
Prefacio
“No hay viento favorable para aquel que no sabe a dónde va”
Séneca (04 a.C.-65 d.C.).
La idea de recopilar en imágenes reales las técnicas quirúrgicas paso a paso surgió en el año 2002. El objetivo era cola-
borar y ayudar a los veterinarios en la planificación y enfoque de sus cirugías. Mediante la presentación de casos clíni-
cos e imágenes obtenidas durante las cirugías queremos que el lector se identifique con ellos y que nuestra experiencia
le aporte ideas o soluciones en el enfoque terapéutico de sus pacientes.
Desde “La parte posterior” a “El tórax” pasando por “El abdomen caudal” y “El abdomen craneal”, se han ido pre-
sentando desde las técnicas más sencillas a las más complicadas para que cualquier tipo de cirujano las pudiese aplicar
y que nuestro apoyo le hiciese progresar. En el último libro, “Cirugía sin sangrado”, hemos abordado los aspectos más
importantes sobre el binomio cirugía-hemorragia, conceptos íntimamente relacionados y que se deben controlar y vigi-
lar para el correcto desarrollo de la intervención y conseguir la curación del paciente.
Llegando a este punto, hemos considerado oportuno volver al inicio para recordar y refrescar las bases de cualquier
planteamiento quirúrgico, ya que en algunas ocasiones por rutina, poco tiempo, olvido o desconocimiento, no se reali-
zan correctamente, y son fundamentales, porque de una forma u otra van a influir en el transcurso de la cirugía o en el
resultado final de la misma.
El éxito o el fracaso de cualquier intervención quirúrgica dependen de actuaciones y pequeños detalles que deben ser
vigilados y controlados por todos los miembros del equipo antes, durante y después de la cirugía.
En el libro que ahora tiene en sus manos, hemos querido reunir los conceptos y experiencias personales sobre las bases
quirúrgicas que deben protagonizar la labor quirúrgica diaria. Con humildad, la pretensión de esta obra es ser otra
7
fuente de información y formación, para que cualquier miembro del equipo quirúrgico (auxiliares, ayudantes, ciruja-
nos…) adquiera o refresque los conocimientos en los aspectos esenciales y básicos de la cirugía.
A lo largo de los siguientes capítulos, el lector encontrará información básica sobre el control y vigilancia de las infec-
ciones nosocomiales, las formas y técnicas de esterilización, cómo se debe limpiar, mantener y esterilizar el material, la
elección del hilo de sutura y los drenajes, la preparación del paciente y del personal que actúa en el área quirúrgica, la
importancia y actuación de todos los miembros del equipo quirúrgico antes, durante y después de la cirugía, cómo se
deben realizar las técnicas quirúrgicas básicas, los cuidados que debe tener el paciente después de la cirugía y la impor-
tancia de la relación con el propietario y cómo este debe implicarse en la recuperación del paciente.
Se ha intentado compilar los aspectos más importantes de la esencia y filosofía quirúrgica, adaptándolas a la realidad
veterinaria para que se pueda llevar a cabo en un hospital de 24 h o en una pequeña clínica “de barrio”, de manera que
esta obra sirva de apoyo en la formación de auxiliares, ayudantes y cirujanos, para que su trabajo sea eficaz, eficiente y
mejor cada día en beneficio de los pacientes y sus propietarios.
El éxito de una intervención quirúrgica se debe al trabajo, profesionalidad y unidad del equipo quirúrgico. Por esta
razón, cada uno de sus integrantes debe tener una sólida formación y una constante evolución basada en el estudio, la
observación, el entrenamiento y la experiencia.
Esperamos, y así lo deseamos, que este libro sea de su interés y que se rompa pronto por el uso de todo el personal del
centro veterinario.
Manejo de la obra
“Bases prácticas en el quirófano” está dividida del paciente y del personal que actúa en el área
en catorce capítulos. A lo largo de ellos, se quirúrgica; la realización de técnicas quirúrgicas
presentan los principios y bases quirúrgicas que básicas; los cuidados posoperatorios, y la
deben protagonizar la labor quirúrgica diaria. importancia de la relación con el propietario.
Esta obra ofrece un repaso del control y Este volumen incorpora la posibilidad de
vigilancia de las infecciones nosocomiales; las visualizar en la versión digital de la obra vídeos
formas y técnicas de esterilización; la elección de algunas de las técnicas o procedimientos
del hilo de sutura y los drenajes; la preparación descritos.
Contenido
La eliminación de las gónadas femeninas está indicada para evitar La cirugía se debe programar cuando la hembra esté en anestro ya
los ciclos ováricos y la gestación no deseada, en la prevención de que los estrógenos aumentan el sangrado del aparato genital y de
las neoplasias mamarias y en la disminución de la probabilidad de tu- la piel, además el útero es más friable durante este periodo.
mores ováricos y uterinos. Asimismo, la ovariohisterectomía está indi-
cada en casos de hiperplasia endometrial quística y piometra (fig. 1). La técnica quirúrgica para la realización de la OH y de la OHT sigue
Para que la hembra no salga en celo se puede realizar una ova- estos pasos:
riectomía (OT) o una ovariohisterectomía (OHT), dependiendo de la ■■ Se realiza una laparotomía en la región umbilical extendiéndose
formación y costumbre del cirujano (en USA realizan normalmente caudalmente entre 5 y 15 cm, según el tamaño de la paciente
OHT, mientras que en Europa la costumbre es realizar OT). (fig. 2).
■■ Deslizando el dedo corazón sobre la pared abdominal, se localiza
La OT también está indicada en pacientes con diabetes el riñón de ese lado. Dirigiendo el dedo caudalmente, se palpa el Fig. 3. Para localizar el útero se introduce un dedo
mellitus, epilepsia, problemas congénitos de coagulación ovario y la parte proximal del útero, que se atrapa con la yema del en la cavidad abdominal, se palpa el polo caudal
o hiperplasia vaginal. dedo. Se desplaza el cuerno uterino hacia la pared y se desliza del riñón y se dirige caudalmente para identificar el
La OT no aumenta el riesgo de piometra si el útero es normal hacia la laparotomía para exteriorizarse (figs. 3 y 4). ovario y el cuerno uterino, los cuales se notan como
en el momento de la cirugía, y es menos traumática que la OHT. un relieve y un cordón fino en el techo del abdomen
por detrás del riñón.
232 233
Fig. 1. La infección de útero se debe tratar Fig. 4. Tras identificar el cuerno uterino, se atrapa
quirúrgicamente mediante una ovariohisterectomía con la yema del dedo, se desplaza hacia la pared
lo antes posible para evitar lesiones sistémicas y abdominal, se desliza y se exterioriza sin perder la
peritonitis. presión del dedo sobre el músculo.
111
Fig. 4. Para realizar el sondaje vesical percutáneo se inmoviliza la vejiga contra la pared abdominal. (a) Se introduce un catéter provisto de su trocar en la vejiga. (b) A
continuación, este se retira y se introduce la sonda. (c) Se retira el catéter (peel away) separando sus dos mitades para dejar la sonda en el interior de la vejiga. (d) Imagen
radiológica de la vejiga que confirma que está introducido el catéter.
Cirugía en la clínica de
Nudos quirúrgicos
pequeños animales.
Ver Técnica de hemostasia
Los nudos son los responsables de la estabilidad del punto de su- intraoperatoria, Ligaduras.
En el libro Cirugía sin sangrado
tura. Los más empleados en cirugía son los nudos cuadrado, de págs. 86-95
cirujano y deslizante.
El número de seminudos que se tienen que realizar para que el
nudo final sea estable, dependerá del tipo de material (menor en los
hilos multifilamento), del tipo de nudo realizado y de la tensión tisular
en su interior.
Ver vídeo en la versión digital
Realización de los nudos
Iconos que recuerdan la posibilidad
con el portagujas y con las manos.
En el anudado se deben perseguir los siguientes objetivos:
■■ Elegircorrectamente el calibre del hilo y que sea proporcional al
183 de visualizar los vídeos de las
tejido que se sutura.
■■ Emplearel número adecuado de lazadas para que el nudo sea
técnicas quirúrgicas aplicadas, en
la versión digital de la obra.
lo más pequeño posible. De esta manera, será estable y no se
deshará durante el periodo de cicatrización.
■■ Evitar
la excesiva fricción entre las hebras al anudar el nudo, ya
que se debilita y se puede romper el hilo.
■■ Aplicar
la tensión apropiada al anudar para aproximar el tejido sin
producir isquemia. No obstante, las ligaduras requieren la estran-
gulación del tejido para evitar el sangrado.
■■ Tensar progresivamente el nudo, en sentidos opuestos y parale-
los al tejido.
■■ No utilizar ningún instrumento para sujetar la primera lazada si
tiende a deshacerse.
Índice
Sondaje vesical percutáneo 38
Conciencia y ética quirúrgicas 15
.......................................................................................................
Mejores resultados con mínimas Clasificación básica de las heridas quirúrgicas ............. 44
10
Infecciones nosocomiales .......................................................................................... 22 Introducción ..................................................................................................................................................................... 50
Infecciones urinarias
asociadas al sondaje vesical ............................................................................ 35
Técnica de sondaje transuretral .................................................................................... 36
Mantenimiento del catéter urinario ................................................................... 38
Índice
.................................................................................... 64
Empaquetado para la esterilización 95
Categorización del instrumental general
....................................
......... 67
Doblado de la bata quirúrgica y de los paños
Sección y disección . ............................................................................................................................................. 67
de campo .............................................................................................................................................................................................. 95
Sujeción y manipulación ...................................................................................................................... 69
Retracción y separación ......................................................................................................................... 72
Envoltorios para la esterilización .................................................... 99
Introducción ..................................................................................................................................................................... 80
Materiales de sutura y ligadura 107
Características del área quirúrgica ........................................... 81
Limpieza de quirófano . ............................................................................................................................... 82 Generalidades de los hilos quirúrgicos
Equipamiento quirúrgico recomendable ........................................... 83 y las agujas .......................................................................................................................................................................... 108
Área previa al quirófano ......................................................................................................................... 85
Características de los hilos de suturas ..................... 109
Limpieza, inspección y mantenimiento Calibre ........................................................................................................................................................................................................... 109
del instrumental quirúrgico . ................................................................................ 86 Elasticidad ........................................................................................................................................................................................ 109
Limpieza del instrumental quirúrgico .......................................................... 86 Resistencia ...................................................................................................................................................................................... 109
Inspección del instrumental quirúrgico ................................................. 88 Flexibilidad ..................................................................................................................................................................................... 109
uu Video funcionamiento de un portagujas ..................................................................... 89
Superficie 110
Preparación del personal quirúrgico 149
............................................................................................................................................................................................
Posicionamiento del paciente Protección del paciente. Paños de campo ........... 171
sobre la mesa quirúrgica ................................................................................................ 138
Ayuda y asistencia al cirujano 172
Intervención abdominal
....................................................................
......................................................................................................................... 139
Manipulación y entrega del instrumental
Intervención torácica ....................................................................................................................................... 139
al cirujano ........................................................................................................................................................................................... 172
Intervenciones en las extremidades ................................................................ 139
Manipulación y cuidado de los tejidos .................................................... 175
Preparación del campo operatorio ........................................... 140
Paños de campo ............................................................................................................................................................. 142
Manejo y colocación de los paños de campo ...................... 142
Índice
Gasas y torundas ......................................................................................................................................................... 198 Tubo de gastrostomía mediante laparotomía .................... 229
uu Video realización de una torunda de gasa con pinzas ...................... 201 Laparotomía media .............................................................................................................................. 234
uu Video realización de una torunda manual o de crisálida .............. 203
Orquiectomía . .............................................................................................................................................................. 240
Consideraciones posoperatorias ............................................................................... 245
ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
Cuando se trate de elegir, procura elegir siempre pone en sus manos la vida de su mascota. Por esta razón, todo
aquellas opciones que permiten luego mayor el personal implicado en el proceso debe seguir unas normas y
comportamiento ejemplares desde el punto de vista quirúrgico; no
número de otras opciones posibles, no las que solo centrándose en el acto de la cirugía, sino, desde el estudio
te dejan cara a la pared. Elige lo que te abre a los del caso, la realización de pruebas diagnósticas, la información al
otros, a nuevas experiencias, a diversas alegrías. propietario, los cuidados posquirúrgicos y el seguimiento de la evo-
lución del proceso.
Evita lo que te encierra y lo que te entierra.
Por lo demás ¡suerte! Y también aquello otro
que una voz parecida a la mía te gritó aquel día Un aspecto muy importante en todo proceso quirúrgico,
y que en numerosas ocasiones no se le da demasiada
en tu sueño cuando amenazaba arrastrarte importancia, es no perder innecesariamente el tiempo.
el torbellino: ¡confianza!
Fernando Sabater.
La conciencia y ética quirúrgicas son los pilares sobre los que se
La cirugía tiene como objetivo curar, o por lo menos mejorar, la en- debe basar cualquier intervención quirúrgica. Estos principios re-
fermedad del paciente cuando se tiene la convicción de que es la quieren pautas de comportamiento y autodisciplina en el plantea-
mejor o única opción terapéutica. En este momento, el propietario miento, estudio, programación, entrenamiento, así como la aplica-
deposita toda su confianza en el equipo quirúrgico y, literalmente, ción de los principios de asepsia y técnica estéril (fig. 1).
16
Fig. 1. La conciencia y ética quirúrgica deben regir la preparación, programación, planificación, desarrollo, realización, control y seguimiento de cualquier actuación en la
que esté implicada una intervención quirúrgica. El equipo quirúrgico lo forma desde el personal de limpieza hasta los cirujanos y anestesistas, pasando por el personal
auxiliar y ayudantes.
ÍNDICE 1 ÍNDICE
CAPÍTULO
Conciencia y ética quirúrgicas / Introducción
ÍNDICE 1 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
complicaciones
Salvador Guillén, Roberto Bussadori
El equipo quirúrgico es responsable del paciente que va a tratarse La técnica aséptica es una forma “de pensar y hacer“ que se debe
desde su ingreso en el centro veterinario, hasta que se le da el alta mantener continuamente dentro del área quirúrgica. Es una manera
definitiva. Para ello, pone todos los medios posibles para que las de reducir al mínimo las posibilidades de que los pacientes se con-
complicaciones durante y después de la operación, sean las meno- taminen antes o durante el tratamiento. Se debe mantener la idea
res posibles, manteniendo siempre el compromiso ético quirúrgico. de que los microorganismos se transmiten desde las manos, obje-
Los principales pilares sobre los que asienta cualquier tipo de ci- tos, superficies, aire, etc.
rugía para obtener los mejores resultados con las mínimas compli-
caciones y la rápida recuperación del paciente, son el control de la La técnica aséptica implica una forma de actuar para alcanzar un
infección y la correcta realización de la intervención quirúrgica para ambiente libre de gérmenes (aséptico), como por ejemplo:
minimizar la lesión tisular. ■■ Preparación
de la piel del paciente rasurando correctamente y
empleando antisépticos.
■■ Uso de material esterilizado o sometido a desinfección de alto
Las complicaciones se reducen al mínimo mediante nivel (DAN).
el perfeccionamiento de la técnica quirúrgica
■■ Correcto lavado de manos.
y el mantenimiento de los principios asépticos.
■■ Uso de barreras de alta eficiencia como gorro, mascarilla, ropa
quirúrgica, bata y guantes estériles.
■■ Limpieza rigurosa del quirófano.
Técnica quirúrgica aséptica
■■ Manipulación de objetos esterilizados solo por el personal estéril.
Toda intervención quirúrgica implica la invasión y agresión al paciente,
■■ Protección de la herida quirúrgica y evitar el autotraumatismo por
lesión cutánea o epitelial que rompe el aislamiento que tiene el pa-
el paciente.
ciente frente al medio que le rodea; e inevitablemente, el paciente corre
el riesgo de contraer una infección durante la cirugía u hospitalización. ■■ Si
existe duda sobre la esterilidad de un material, se debe consi-
Mediante la esterilización, se consigue la destrucción total de los derar contaminado.
18 gérmenes, con lo que se obtiene un ambiente aséptico.
Uno de los fundamentos de la técnica aséptica es crear barreras
entre campo quirúrgico estéril y posibles fuentes de contaminación.
El concepto de antisepsia se refiere a la destrucción Por ejemplo, los paños de campo estériles actúan como barrera
de los microorganismos patógenos mediante el empleo entre el paciente y las superficies no estériles que le rodean. La dis-
de antisépticos sobre tejidos vivos y desinfectantes tancia también es una barrera, cuanto mayor sea la distancia entre
sobre objetos, superficies y ambientes. una superficie estéril de otra que no lo sea, menor será el riesgo de
contaminación (fig. 1).
ÍNDICE 1 ÍNDICE
CAPÍTULO
Conciencia y ética quirúrgicas / Mejores resultados
ÍNDICE 1 ÍNDICE
CAPÍTULO
20
Prevención y
control de las
infecciones
Infecciones nosocomiales
21
ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
22
Tabla I.
■■ Edad avanzada.
Estado del paciente ■■ Deficiencia inmunitaria.
■■ Malnutrición.
■■ Anestesia/Cirugía prolongadas.
Ambiente que rodea al paciente
■■ Hospitalización prolongada.
■■ Cateterización vascular.
Técnica/Procedimiento realizado ■■ Cateterización duradera de cualquier tipo (urinaria, traqueal...).
■■ Fármacos/Productos hematológicos mal conservados.
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones nosocomiales
Fig. 1. La presencia del tubo traqueal y el neumotaponamiento acumulan Fig. 2. El sistema de recolección de orina debe impedir el reflujo de orina hacia
secreciones y disminuyen el aclaramiento de bacterias, pudiendo producir el paciente. Por esta razón, la bolsa de diuresis se coloca en un nivel inferior con
traqueobronquitis inicialmente y después neumonía nosocomial. Este problema respecto al paciente, y a varios centímetros del suelo.
se incrementa en pacientes con tubo de traqueostomía o si están en ventilación
mecánica durante mucho tiempo.
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Además, las bacterias pueden formar biopeliculas en la superficie El desarrollo de una infección en el área quirúrgica (IAQ) conduce al
de los catéteres urinarios favoreciendo la infección y las resistencias fracaso de la cirugía por la destrucción del tejido (fig. 4), aumento
antibióticas, incrementando la posibilidad del fracaso terapéutico. del dolor y del tiempo de recuperación, mal aspecto cosmético, in-
Los gérmenes más frecuentes asociados a la infección urinaria cremento de los costes, posibles cirugías adicionales y efectos se-
son el Escherichia coli y los enterococos. Los factores que favore- cundarios de la medicación que se debe aplicar.
cen esta infección son la duración superior a 3 días de la hospitali- La IAQ no se puede evitar completamente, pero para reducirla
zación, y el tratamiento antibiótico continuado, sobre todo cuando al mínimo se deben tomar medidas preventivas, como seguir los
se emplean cefalosporinas y metronidazol. principios quirúrgicos de Halsted, mantener las normas de asep-
Muchas de las IN están asociadas a los catéteres vasculares. La du- sia, usar correctamente los antibióticos, identificar y estabilizar los
ración de la cateterización venosa superior a 4 días puede ser un factor pacientes de riesgo y proteger correctamente la herida quirúrgica
de riesgo para el desarrollo de una infección, por eso es conveniente durante el posoperatorio.
quitar el catéter lo antes posible. Algunos veterinarios recomiendan La aparición de una infección hospitalaria en un paciente no sig-
cambiar el catéter vascular cada 3 días, pero no se ha demostrado que nifica que el centro veterinario realice mal las cosas, ya que hay un
esta práctica reduzca la tasa de este tipo de infección. porcentaje de infecciones que se no se pueden evitar a pesar de
Para minimizar esta posibilidad es necesario preparar correcta- que se siga un correcto programa de control de IN.
mente la zona donde se va a colocar el catéter y seguir una técnica Independientemente del programa de control infeccioso que se
aséptica (fig. 3). siga, hay estrategias y actuaciones sencillas y baratas que al rea-
lizarse correctamente reducen drásticamente la posibilidad de IN,
como la higiene personal, la limpieza de las instalaciones, la co-
rrecta colocación y mantenimiento de catéteres, sondas o drenajes
y la asepsia en las intervenciones quirúrgicas.
Fig. 3. La colocación de una vía venosa periférica se debe realizar tras haber Fig. 4. Este paciente fue intervenido quirúrgicamente para extirpar una neoplasia
rasurado y desinfectado correctamente la piel del paciente. Tras seguir una técnica en la región perineal. Existió una infección nosocomial por contaminación fecal, la
aséptica, se fija y protege la vía venosa para evitar que el paciente se la pueda lisis tisular condujo a la dehiscencia de las suturas.
quitar y que se pueda contaminar e infectar.
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones nosocomiales
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Tabla II.
■■ Lavar las manos con abundante agua y suficiente jabón. ■■ Utilizar suficiente volumen de desinfectante para cubrir las manos y los
■■ Frotar los dedos y las manos al menos durante 20 segundos. dedos (2,5-3 ml).
■■ Aclarar con abundante agua. ■■ Frotar los dedos y las manos durante 15-30 segundos.
■■ Secar completamente las manos con papel o toallas de un solo uso ■■ Esperar hasta la evaporación completa de la solución.
durante 10-20 segundos. ■■ No lavarse después las manos.
26
Fig. 6. Se deben colocar carteles parecidos a este recordando al personal que se
debe lavar/desinfectar las manos periódicamente, y siempre antes y después de
entrar en contacto con los pacientes.
Limpieza y desinfección alrededor del paciente Existen tres categorías de desinfección dependiendo del tipo de su-
perficie y del material:
En un estudio reciente en 10 hospitales veterinarios encontraron
que en todos ellos existía contaminación por Enterococcus, y en 1. Bajo nivel.
el 20 % de los casos eran cepas resistentes. Al analizar las super- 2. Nivel intermedio.
ficies, el instrumental y las pautas de limpieza, descubrieron que el 3. Alto nivel. Esterilización.
30 % de los estetoscopios estaban contaminados y que el 50 %
del personal clínico no los limpiaban nunca, así mismo encontraron Desinfección de bajo nivel
estos gérmenes en el 6 % de los termómetros y en el 60 % de las
puertas de las jaulas, y que en el 30 % de las ocasiones el personal Los desinfectantes de bajo nivel se emplean en superficies consi-
no los limpiaba entre pacientes. deradas no críticas y que contactan con la piel intacta del paciente
La contaminación del ambiente que rodea y que contacta con como el suelo, los comederos o el estetoscopio. Como ejemplos se
el paciente puede aumentar el riesgo de IN. Por eso se hace tanto pueden considerar:
hincapié en la limpieza y desinfección de suelos, jaulas, mesas, ■■ Alcohol isopropílico 70 %.
camillas… que obviamente están contaminadas tras el paso del ■■ Compuestos de amonio cuaternario.
paciente. Pero hay otras fuentes de contaminación que casi siem-
■■ Clorhexidina 0,05 %.
pre pasan desapercibidas y que no se desinfectan de forma ru-
tinaria como los tiradores de las puertas, las sillas de la consulta ■■ Lejía0,1 % para desinfección general, y al 1 % si hay contamina-
o el teclado del ordenador entre otras, y que también se deben ción con material biológico.
desinfectar.
Para que un desinfectante haga efecto, es necesario que las su-
perficies estén libres de suciedad y material orgánico. El producto El tiempo de contacto con el desinfectante debe ser
elegido se debe usar en la dilución y durante el tiempo de contacto de 10 minutos.
que recomienda el fabricante.
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones nosocomiales
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
En medicina humana la contaminación de los catéteres se El tratamiento de estos pacientes se basa en la retirada del catéter
produce normalmente por microorganismos comensales y una apropiada antibioterapia. La antibioterapia inicial tiene que ser
de la piel, mientras que en medicina veterinaria se trata de amplio espectro, sobre todo cuando se sospecha de una bac-
de microorganismos entéricos como E.coli, Aerobacter, Proteus teria que ponga en peligro la vida del animal. Una vez obtenido el
y Klebsiella spp. cultivo, se puede seleccionar el antibiótico más adecuado según el
antibiograma.
28
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones asociadas al catéter venoso
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Fig. 2. Se rasura todo el contorno de la extremidad para desinfectar correctamente Fig. 3. El ayudante realiza una compresión moderada en la zona proximal
la zona, mejorar la adhesión de las tiras de esparadrapo que fijan el catéter y para ingurgitar la vena, y el operador coloca una gasa estéril sobre la zona no
facilitar su eliminación cuando se retire el catéter. afeitada para reducir la posibilidad de contaminación durante la manipulación
e inserción del catéter.
30
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones asociadas al catéter venoso
31
Fig. 7. Las alas del catéter se fijan a la pata con varias tiras de esparadrapo. La
primera se introduce por debajo del racor para que la unión con la pata sea muy
estable al unir también las alas a la piel.
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
32
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones asociadas al catéter venoso
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Mantenimiento de la fluidoterapia Para conocer la frecuencia de goteo (los segundos que deben pa-
sar entre gota y gota), se divide por 60 (segundos en un minuto) el
La mayor parte de los centros y hospitales veterinarios disponen
número de gotas/min calculado anteriormente.
de bombas de fluidoterapia para administrar correctamente y con
Cuando se emplea este sistema, sin bomba de perfusión, hay
seguridad la cantidad de fluidos que precisa cada paciente en un
que comprobar que la dosis de fluidoterapia que recibe el paciente
tiempo determinado.
es la programada, ya que la posición del paciente influye mucho.
Cuando no se dispone de esta bomba, se conecta directamente
Por ejemplo, si el paciente está tumbado con las extremidades
el sistema de perfusión de gotero a la vía venosa. Existen dos ti-
dobladas, el paso de fluidos se puede detener y si está de pie en
pos de equipos de infusión: el estándar (20 gotas/ml) o el pediátrico
la jaula, la perfusión es más rápida. Para controlar este volumen se
de microgotas (60 gotas/ml). Para calcular el número de gotas que
harán marcas en la botella de suero con el nivel de inicio y la hora, y
se deben perfundir por minuto en una hora se puede aplicar la si-
el nivel al que se debería llegar en cada hora.
guiente fórmula:
Nº gotas/minuto = gotas/min del equipo de infusión (20 o 60) x Fluidoterapia de mantenimiento de 5 ml/kg/h, para un paciente
volumen a administrar en 1 h (ml de suero x peso paciente)/60 de 15 kg empleando un equipo de infusión convencional
(min en 1 h). (20 gotas/ml).
Nº gotas/minuto = 20 x (5 x 15)/60 = 25 gotas en 1 min.
Segundos/gota = 60/25 = 2,4.
Se tendrá que administrar una gota cada 2,5 s
aproximadamente.
34
Fig. 3. Las bombas de infusión facilitan la administración de drogas y soluciones con precisión y de forma constante.
Regulan automáticamente el tiempo, volumen y dosis del medicamento, fluidos o productos sanguíneos que se administran al paciente.
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones urinarias asociadas al sondaje vesical
al sondaje vesical
El sondaje vesical es uno de los procedimientos más habituales en Tabla I.
la clínica de pequeños animales. Existen numerosas situaciones en
la clínica diaria que van a requerir este procedimiento como: Factores predisponentes en el desarrollo de infección urinaria
en pacientes con sondaje vesical
■■ Crear una vía permeable y continua para la salida de la orina ha-
cia el exterior. ■■ Daño en la mucosa vesical durante la colocación del catéter y su
mantenimiento.
■■ Resolver problemas obstructivos (urolitiasis, neoplasias, coágu-
■■ Contaminación del catéter o de la orina durante su colocación.
los, tapones mucosos, etc.) que dificulten la micción.
■■ Proximidad de la uretra a restos fecales.
■■ Monitorizar la producción de orina a nivel intrahospitalario. ■■ Flujo retrogrado de orina desde el sistema de recolección hacia la vejiga.
■■ Obtener
muestras de orina (o incluso de la mucosa vesical ante la ■■ Disfunción de la vejiga de la orina.
sospecha de una neoplasia) para su posterior estudio. ■■ pH urinario normal o alcalino.
■■ Como ayuda durante un procedimiento quirúrgico, ya sea para ■■ Baja osmolaridad de la orina.
la realización de lavados del tracto urinario, vaciado de la vejiga o ■■ Pacientes con compromiso inmunitario.
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
36
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones urinarias asociadas al sondaje vesical
37
El sistema de recolección de orina debe estar por debajo
del paciente y sin contactar con el suelo para evitar su
contaminación y el paso retrógrado de la orina hacia el paciente.
Fig. 6. El sistema de recolección de orina debe estar por debajo del nivel del paciente
para evitar el reflujo de orina al paciente. Si no se puede colgar la bolsa, se coloca sobre
un soporte o caja que evite su contacto con el suelo. Si la bolsa está al mismo nivel que
el animal, debe tener una válvula antirreflujo para evitar el retroceso de la orina.
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Fig. 8. Se inmoviliza la vejiga con la mano no dominante y, a través de la línea Fig. 9. Al introducir el catéter con su trocar en la vejiga, sale la orina.
media, se introduce el catéter. A continuación, se retira el trocar, dejando el catéter dentro de la vejiga.
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones urinarias asociadas al sondaje vesical
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ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
40
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones del área quirúrgica
Infecciones del área quirúrgica Julia Artero, Jorge Llinás, José Rodríguez
La infección en el área quirúrgica (IAQ) es una infección que aparece En los últimos años las IAQ se están incrementando posiblemente
después de la cirugía en la zona donde se llevó a cabo la operación. por el aumento de las resistencias de los gérmenes a los antibióti-
Es un riesgo posible, pero es una complicación poco frecuente en cos debidas al abuso y mal uso de los mismos, y al mayor número
la mayoría de las técnicas quirúrgicas actuales (aproximadamente de técnicas quirúrgicas invasivas que se realizan en pacientes geriá-
3-5 % de los casos). Sin embargo, cuando ocurre tiene un gran tricos e inmunodeprimidos (que antes no se llevaban a cabo).
impacto en los pacientes, propietarios y veterinarios (fig. 1). Las IAQ se definen y clasifican en superficiales, profundas u or-
Estas complicaciones incrementan la morbilidad, el tiempo de gánicas (tabla I).
hospitalización, el coste del tratamiento, así como la preocupación El control de las IAQ se basa en el estudio de su incidencia y en
del propietario y de los veterinarios, los cuales en muchas ocasio- el conocimiento de los factores de riesgo que las favorecen.
nes se sienten culpables de esta complicación y asumen los gastos
derivados de su resolución.
41
Tabla I.
Infección quirúrgica superficial Infección quirúrgica profunda Infección quirúrgica en un órgano u espacio
Entre los 30 y 90 días del posoperatorio Entre los 30 y 90 días del posoperatorio si hay
Presentación En los 30 días del posoperatorio.
si hay implantes colocados. implantes colocados.
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
42
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones del área quirúrgica
Un cirujano novel tiene una tasa de infecciones 4 veces Después de una hora y media de anestesia, cada hora
superior a la de un cirujano con experiencia. adicional aumenta el riesgo de contaminación un 30 %
en los procedimientos limpios.
43
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Tabla II.
44 Clasificación de las heridas quirúrgicas según el grado de contaminación bacteriana durante la cirugía y el riesgo de infección
Tipo Riesgo
Descripción Ejemplo
de herida de infección
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones del área quirúrgica
Fig. 7. La herida limpia es la que se produce en una cirugía programada aséptica. Fig. 8. Se considera una herida limpia-contaminada cuando se lleva a cabo una
En este caso, se observa la realización de una mastectomía. Para minimizar la cirugía limpia en la que se aborda un órgano hueco y hay una pequeña salida de
contaminación, al mismo tiempo que se incide y reseca el tejido glandular, se contenido. En este caso se está realizando una colecistectomía por un mucocele biliar.
realiza la sutura cutánea.
45
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Para que la profilaxis antibiótica sea eficaz se deben seguir las si-
Es completamente imposible esterilizar la piel del paciente. guientes recomendaciones:
El objetivo es reducir al mínimo la carga microbiana para que ■■ Si
no hay infección antes de la cirugía, el uso de antibióticos no
el sistema inmunitario sea capaz de controlar la colonización es profiláctico, sino terapéutico.
bacteriana, y que la contaminación no se convierta en infección.
■■ Elegir
un antibiótico bactericida, ya que el paciente puede tener
disminuidos sus mecanismos de defensa.
■■ Elmomento óptimo para la administración del antibiótico es du-
Profilaxis antibiótica en cirugía rante la inducción anestésica, entre 20 y 60 minutos antes de la
El objetivo de profilaxis antibiótica es conseguir una adecuada con- incisión cutánea.
centración del antibiótico en el campo operatorio que impida el cre- ■■ La vía de elección es la endovenosa a una velocidad lenta.
46 cimiento de gérmenes contaminantes. ■■ Ladosis administrada debe estar en el rango superior de la dosis
terapéutica.
■■ Sila cirugía se prolonga más de lo esperado (más de 90-120 mi-
La profilaxis antibiótica no debe sustituir a una correcta
nutos), o se pierde bastante sangre, se debe administrar otra do-
técnica quirúrgica aséptica.
sis del mismo fármaco.
■■ Sise mantienen y respetan las condiciones asépticas y la cirugía
La selección del antibiótico se debe realizar en función del estado discurre sin complicaciones en el menor tiempo posible, no es
del paciente, el tipo de herida, los microorganismos más probables necesario repetir la dosis de antibiótico ni continuarla durante el
que puedan contaminar el área quirúrgica y la sensibilidad al fár- posoperatorio.
maco empleado. ■■ La elección del antibiótico debe ser tomada en cada centro vete-
En líneas generales, si la fuente de contaminación son gérmenes rinario en función de los resultados microbiológicos de las heridas
cutáneos (Gram (+)), se puede emplear cefazolina o cefalotina, si infectadas de sus pacientes.
son bacterias del tracto digestivo (enterobacterias y anaerobios) se
puede utilizar cefoxitina o la combinación cefazolina y gentamicina.
En el caso de cirugía colorectal, el riesgo de infección es mucho En caso de cesárea se debe administrar el antibiótico cuando
mayor por la gran carga microbiana de esta zona, por eso, además se hayan extraído los cachorros.
de la profilaxis endovenosa, se debe instaurar una antibioterapia por
vía oral para disminuir la carga microbiana a este nivel, como por
ejemplo con neomicina + eritromicina o neomicina + metronidazol
cada 8-12 h empezando 24-48 h antes de la cirugía (tabla III).
Es preferible no emplear antibióticos que se usan de forma ruti-
naria en la clínica como amoxicilia, enrofloxacina… por las posibles El uso inapropiado de antibióticos puede producir
resistencias que se hayan creado, ni tampoco usar antibióticos de superinfección, desarrollo de resistencias bacterianas,
última aparición como cefalosporinas de tercera o cuarta genera- toxicidad, e incrementar los costos sin necesidad.
ción, vancomicina… para evitar crear bacterias resistentes.
ÍNDICE 2 ÍNDICE
CAPÍTULO
Prevención y control / Infecciones del área quirúrgica
47
Tabla III.
Ampicilina 20-40 mg/kg IV, IM 1,5-2 h de cirugía, cada 6-8 h de forma terapéutica
Gentamicina 4-6 mg/kg IV, IM (goteo lento) Dosis única, cada 24 h de forma terapéutica (no más de 5 días)
Metronidazol 10 mg/kg VO, IV, IM (goteo lento) Dosis única, cada 12 h de forma terapéutica
Clindamicina 5-20 mg/kg VO, IV, IM (goteo lento) Dosis única, cada 12 h de forma terapéutica
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CAPÍTULO
48
Técnicas de
esterilización
Introducción
Autoclaves de vapor
49
ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
La esterilización es el proceso mediante el cual La desinfección es el proceso por el cual los agentes patógenos
mueren o quedan inactivados impidiendo su crecimiento sobre ob-
se consigue la eliminación de toda forma de vida
jetos inertes. Los desinfectantes se aplican sobre superficies o ins-
microscópica de la superficie de un objeto. trumentos para prevenir las infecciones.
Existen diferentes métodos de esterilización, La desinfección de alto nivel actúa por inmersión del objeto o
instrumento a tratar, y es capaz de eliminar todos los microorganis-
pero básicamente se pueden dividir en métodos
mos incluyendo virus resistentes y Mycobacterium tuberculosis, que
de esterilización física por calor y en métodos de pertenece al grupo de bacterias más resistentes, con excepción de
esterilización química para objetos y materiales las esporas.
Los antisépticos son agentes químicos que controlan y reducen
que no resisten altas temperaturas.
el número de microorganismos potencialmente patógenos sobre la
piel o las mucosas. Solo se aplican sobre seres vivos.
50
ÍNDICE 3 ÍNDICE
CAPÍTULO
Técnicas de esterilización / Autoclaves de vapor
Dentro de las diferentes opciones de esterilización por calor, la más Según el sistema para eliminar el aire del interior de la cámara de
extendida y eficiente es el autoclave de vapor. esterilización, los autoclaves pueden ser:
Existen diferentes tipos de autoclaves pero el principio básico de ■■ De gravedad (autoclave tipo N)
funcionamiento es el mismo. La combinación del vapor de agua y El vapor entra en la cámara y desplaza el aire, que se elimina a
la presión permite llegar a altas temperaturas más rápidamente, de través del orificio de drenaje. Cuando la temperatura es la co-
tal manera que a mayor temperatura, menor es el tiempo necesario rrecta, se cierra automáticamente este orificio y comienza el pro-
para conseguir la esterilización. ceso de esterilización.
Existen autoclaves de desplazamiento por gravedad con secado
en los que se puede introducir el material embolsado o en conte-
El autoclave de vapor produce la coagulación de las proteínas nedores de instrumental.
celulares destruyendo así los microorganismos y esporas ■■ De prevacío (autoclave tipo B)
en materiales resistentes al calor. En estos aparatos una bomba elimina el aire del interior de la cá-
mara. El vapor se genera en una cámara separada muy rápida-
mente, y cuando desaparece el aire de la cámara de esterilización
Es el procedimiento de elección para la esterilización del instrumen- se libera el vapor en su interior.
tal quirúrgico, el material textil, el de silicona y otros materiales que Los más avanzados poseen un sistema de secado mediante un
toleren temperaturas superiores a los 120 °C. flujo forzado de aire caliente que además ayuda a expulsar el va-
Los autoclaves generan vapor de agua que pasa al calderín o por de agua restante.
cámara de esterilización, hasta obtener una presión interna entre
103-200 kPa, lo que provoca que el vapor alcance una temperatura
entre 121-134 °C respectivamente. Elección del tipo de autoclave
El vapor de agua desplaza y expulsa progresivamente el aire, Dependiendo del tipo de material que se va a esterilizar y de su
penetrando en el interior del paquete o contenedor del material uso posterior, se debe emplear un tipo determinado de autoclave
(tabla I). (tabla II):
Tras el periodo de tiempo marcado, el vapor de agua se agota, ■■ Autoclave de desplazamiento por gravedad (tipo N). Está indi-
la temperatura disminuye y la presión se normaliza. A partir de ese cado para instrumental quirúrgico general y material resistente al 51
momento, el autoclave puede abrirse. calor (plásticos, siliconas y cauchos) que se esteriliza sin envolver
y se va a emplear inmediatamente. No se debe introducir material
Tabla I. tubular como sondas, cánulas…
■■ Autoclavede desplazamiento por gravedad (tipo N) con secado.
Parámetros de un autoclave Se emplea para la esterilización de instrumental y materiales só-
Temperatura (° C) Presión (kPa) Presión (kg/cm2) Tiempo (min) lidos que han sido embolsados o introducidos en contenedores
específicos para poder almacenarlos y emplearlos más adelante.
121 103 1,2 15
■■ Autoclave de pre y posvacío (tipo B). Es el indicado para esteri-
126 138 1,4 10 lizar material poroso como batas quirúrgicas, paños de campo,
gasas o compresas, así como material e instrumental hueco
134 200 2 3,5
como cánulas, sondas, tubos, piezas de mano, turbinas…
Tabla II.
Tipo de carga
Tipo autoclave Almacenamiento
Sólida sin Sólida
Porosa Hueca
envolver envuelta
ÍNDICE 3 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
52
ÍNDICE 3 ÍNDICE
CAPÍTULO
Técnicas de esterilización / Autoclaves de vapor
53
La carga del autoclave se debe realizar de tal forma que se asegure la penetración y extrac-
ción del vapor entre todos los paquetes introducidos, así como dentro de los mismos.
Una vez completado el ciclo se procede a la descarga del autoclave, siguiendo estas
recomendaciones:
■■ Nodescargar inmediatamente para evitar la condensación del vapor residual que podrían
humedecer o mojar el material.
■■ Comprobar que los controles externos de esterilización han virado de color.
■■ Comprobar que las bolsas de esterilización están íntegras.
■■ Comprobar que los paquetes y bolsas están secos.
■■ No depositar las bolsas recién esterilizadas sobre ninguna superficie fría.
■■ Retirar los controles químicos y/o biológicos para su estudio posterior.
ÍNDICE 3 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Después de la esterilización, el material esterilizado se puede alma- El resultado correcto de estos indicadores valida el proceso de
cenar para usarse más adelante. En este caso, se debe guardar esterilización. A continuación, se explicarán los diferentes tipos de
siguiendo los siguientes consejos (fig. 4): indicadores.
■■ Almacenarlo en cajones o vitrinas cerradas y alejadas de fuentes
de calor. Controles externos o físicos
■■ Colocarlas a una distancia superior de 25 cm del suelo y de Algunos autoclaves poseen en su estructura externa medidores de
40 cm del techo. presión, de temperatura, de tiempo y sensores de carga para com-
■■ No mezclar material estéril con no estéril. probar que el autoclave alcanza los valores requeridos en cada ciclo
■■ No comprimir las bolsas. de esterilización (fig. 5). Los autoclaves de alta gama registran los
datos de cada ciclo, e incluso disponen de alarmas que avisan de
■■ Colocar siempre los productos con caducidad más próxima a la
un nivel de esterilización insuficiente cuando dichos valores no son
vista.
alcanzados.
■■ Siel envase está dañado, no está estéril. Se deben desechar los Pero en cualquier caso, estos controles no son suficientes para
productos cuyo envase contenga manchas, humedad, polvo o garantizar la esterilidad de la carga procesada.
grietas en su superficie.
Indicadores químicos
Control de la eficacia de la esterilización Son controles que contienen sustancias químicas que cambian de
Los centros veterinarios deben establecer un control continuo de color o estado cuando se exponen al proceso de esterilización, y
calidad que asegure la eficacia y mejore los resultados del proceso permiten detectar de forma precoz errores o fallos en el mismo. Los
de esterilización. hay de diferentes clases (1-6) diseñados para la detección de cier-
Existen diversos indicadores que permiten comprobar las di- tas variables del proceso de esterilización. Los más empleados son
ferentes fases y variables del proceso de esterilización: limpieza, los de tipo 1, 2 y 5.
equipo, carga, paquete y exposición.
ÍNDICE 3 ÍNDICE
CAPÍTULO
Técnicas de esterilización / Autoclaves de vapor
55
ÍNDICE 3 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Para realizar correctamente este test se debe seguir el siguiente 4. Se saca rápidamente el paquete de prueba, se deja enfriar, se
procedimiento: abre y se comprueba el cambio uniforme de color de la hoja del
1. La hoja se coloca en el centro de un paquete de prueba de test. Si existen zonas con un color más claro en la zona central,
23 cm de ancho, 30 cm de largo y 25 cm de alto que contiene indica que hubo aire residual.
paños de campo y compresas de algodón 100 % que tienen
como objetivo atrapar el aire frío residual cuando entra el vapor en El test de Bowie-Dick documenta si es eficaz el sistema de prevacío
la cámara de esterilización. de los autoclaves de clase B pero no garantiza la esterilidad puesto
que detecta que se alcance la temperatura correcta pero no que
2. El paquete se debe colocar al fondo de la cámara, con el auto-
esta se haya mantenido el tiempo necesario.
clave frío y vacío para que exista mucho aire residual que se tiene
Otro dispositivo para verificar el funcionamiento del equipo es el
que eliminar. No se debe colocar sobre el suelo del autoclave ni
control de carga hueca, que evalúa la eficacia de la penetración del
obstruyendo el orificio de drenaje.
vapor de agua en el interior de un objeto hueco (fig. 8).
3. Se realiza un ciclo rápido a 134 °C durante 3 minutos y medio
como máximo. Se debe evitar el ciclo de secado para no invalidar
el resultado.
a b
56
c d
Fig. 8. Control de esterilización de carga hueca. (a) Introducción de la tira reactiva en el interior del soporte. (b) Introducción del soporte en el interior del contenedor hueco.
(c) Colocación del contenedor hueco en la parte inferior del autoclave sin obstruir la válvula de drenaje. (d) Comprobación del cambio de color de todas las franjas de la tira
reactiva. Cuando el desalojo de aire y la penetración de vapor son adecuadas, la tinta vira correctamente en todas las franjas.
ÍNDICE 3 ÍNDICE
CAPÍTULO
Técnicas de esterilización / Autoclaves de vapor
ÍNDICE 3 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Existe material e instrumental que no se puede esterilizar por me- Las soluciones químicas desinfectantes más utilizadas para la DAN son:
dios físicos ya que no soportan la temperatura del autoclave de ■■ Glutaraldehído al 2 %. Es un potente bactericida y en solución
vapor. En estos casos, se puede aseptizar por otros medios con alcalina también es capaz de ser esporicida. La solución, al acti-
temperatura más baja como los autoclaves de óxido de etileno o de varse, tiene una vida media de 20 días (fig. 1).
formaldehído. Sin embargo, estos sistemas son complejos y caros El instrumental se sumerge durante 20 minutos a temperatura
y no se emplean de rutina en los centros veterinarios. ambiente y, si se quiere destruir también las esporas el tiempo de
Otros métodos que se pueden seguir para la destrucción de los actuación, debe ser de 3 horas.
gérmenes en el material termosensible, son la exposición a vapor Aunque el glutaraldehído mantiene un alto grado de actividad en
de formol o la desinfección de alto nivel (DAN). presencia de materia orgánica, lo ideal es limpiar bien el material
La desinfección y la esterilización consiguen la destrucción de antes de sumergirlo en la solución.
bacterias, virus y hongos, pero se diferencian en que la desinfección Los vapores de glutaraldehído son irritantes y potencialmente tó-
carece de actividad esporicida en la concentración y tiempo que se xicos, por lo que no se debe preparar la solución con agua ca-
emplean normalmente en la clínica. liente, y el personal que lo manipule debe usar en todo momento
Algunos antisépticos también destruyen las esporas tras un pe- mascarilla, gafas y guantes.
riodo largo de exposición (10-18 horas).
■■ Solución de cloro al 0,5 %. El tiempo de inmersión requerido es
de 10-15 minutos.
Desinfección de alto nivel (DAN) Para preparar una solución de cloro al 0,5 % a partir de un pre-
Mediante la desinfección de alto nivel se consigue la destrucción de parado comercial en polvo (hipoclorito cálcico) hay que seguir la
todas las formas de vida microbiana excepto las esporas bacteria- siguiente fórmula:
nas, por lo que es una alternativa práctica cuando no se puede em-
plear un autoclave de vapor por el tipo de material o por la urgencia Fórmula
en su reutilización.
Gramos/litro = (% diluido / % concentrado) x 1.000
La desinfección de alto nivel con agentes químicos está indicada
58 en materiales termolábiles y en casos de urgencia donde se debe
Supuesto clínico
reutilizar el instrumental con rapidez.
Ejemplo para preparar la solución de cloro al 0,5 % a partir
de un polvo de hipoclorito de calcio al 35 % sería
En las diluciones de los desinfectantes se debe emplear agua (0,5 / 35) x 1.000 = 14,28
desmineralizada o destilada. por lo tanto habría que agregar 14,3 g de polvo a 1 litro de agua.
ÍNDICE 3 ÍNDICE
CAPÍTULO
Técnicas de esterilización / Esterilización de material termosensible
Vapor de formol
■■ Solución de alquilamina. Es efectiva en concentración al 2,0 % El formaldehído es un agente químico con alto poder microbicida
y en 15 minutos destruye o inactiva bacterias, hongos y virus que se emplea para esterilizar material termolábil en autoclaves es-
(fig. 2). La dilución preparada se puede emplear durante 14 días pecíficos que forman vapor de formol a baja temperatura (50-60 °C)
siempre que el instrumental esté limpio. durante 5 o 6 horas. Está indicado para la esterilización de instru-
Se puede emplear cuando se requiera reutilizar el instrumental mental microquirúrgico, instrumental con piezas de plástico (lapa-
quirúrgico lo antes posible ya que también disuelve sangre y res- roscopia, electrocirugía…) embolsado con el mismo sistema que el
tos orgánicos. usado en los autoclaves de vapor, pero no se debe emplear para
■■ Ácido paracético. Es una solución acuosa de ácido acético y pe-
esterilizar textiles ni caucho.
róxido de hidrógeno. En concentraciones bajas de 0,05-0,35 % Una alternativa a la esterilización con estos equipos es introducir
tiene una rápida acción biocida. En 5 minutos mata bacterias, mi- el instrumental en una caja hermética o envoltorio sellado que con-
cobacterias, hongos y levaduras; en 10-20 minutos inactiva virus y tiene pastillas de paraformaldehído en su interior. Estas pastillas se
su efecto esporicida se consigue en 1-2 horas de contacto. alojan en un pequeño contenedor multiperforado o se envuelven en
Es un producto inestable al entrar en contacto con el aire. Con el gasas para permitir la salida del vapor de formol y evitar que el polvo
tiempo, la solución se hidroliza y pierde su efectividad, por lo que que se produce al desintegrarse las pastillas impregne el material
a las 24 horas se debe desechar. Es un producto seguro para el (fig. 3).
personal que lo manipula y el medio ambiente. El formaldehído en contacto con el aire desprende vapores de
Tras el periodo de desinfección, el instrumental se debe aclarar formol, que a temperatura ambiente esteriliza en 24-36 horas.
con abundante suero o agua estéril y secarse a continuación Cuando la concentración de formaldehído en el aire supera las
para evitar irritar y lesionar el tejido sobre el que se van a emplear. 0,1 ppm, algunas personas pueden presentar irritación, ojos lloro-
Tras la inmersión del instrumental en el desinfectante, se debe sos, picor en la nariz y garganta, y tos. Por esta razón, se debe
lavar con bastante agua estéril antes de usarse sobre el paciente. manipular durante poco tiempo evitando respirar el vapor de formol
y en una zona con adecuada renovación del aire.
También hay que recordar que la exposición a vapor de formol
en alta concentración y de manera continuada es potencialmente
alergénica y cancerígena. 59
Fig. 2. Para preparar la dilución al 2,0 % se añade Fig. 3. Las pastillas de paraformaldehído en contacto con el aire desprenden vapor de formol, que es capaz de
20 ml por litro. Este tipo de solución está indicada esterilizar el material termolábil en 24-36 horas. En esta imagen se observa la esterilización de un instrumento
cuando se debe reutilizar instrumental quirúrgico de laparoscopia mediante pastillas de paraformaldehído. Estas se alojan dentro de unas gasas para evitar que
con rapidez, ya que tiene una gran capacidad para se ensucie el contenido de la bolsa.
disolver sangre y secreciones.
ÍNDICE 3 ÍNDICE
CAPÍTULO
60
Instrumental
quirúrgico
Generalidades
61
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ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
El instrumental quirúrgico es el conjunto de herramientas que usa En el mercado existen cientos de instrumentos quirúrgicos que han
el cirujano para realizar la intervención de una forma rápida, precisa sido diseñados específicamente para ser aplicados en diferentes
y segura. Cada una de ellas está diseñada para una función deter- tejidos como la piel, el hueso o la vesícula biliar, y en técnicas quirúr-
minada y solo se debería emplear para dicha finalidad. Si se usan gicas específicas como por ejemplo la esternotomía en el abordaje
para realizar otras funciones, lo que se conseguirá será aumentar el de cavidad torácica, la hemostasia definitiva de vasos sanguíneos o
tiempo quirúrgico, incrementar el daño tisular y acelerar el desgaste la extracción de piezas dentarias (figs. 1, 2 y 3).
del material (e incluso su rotura).
“Es menester que todos los instrumentos sean propios Cada veterinario tiene sus preferencias y gustos a la hora
para el propósito que se persigue, esto es respecto de elegir y usar los instrumentos quirúrgicos en cada fase
a su tamaño, peso y precisión”. Hipócrates. de la operación.
62
Fig. 2. Los clips vasculares permiten la realización de hemostasia precisa y segura de vasos sanguíneos tanto arteriales como venosos. En este caso se está realizando la
oclusión de los vasos uterinos caudales antes de realizar una histerectomía.
ÍNDICE 4 ÍNDICE
CAPÍTULO
Instrumental quirúrgico / Generalidades
63
ÍNDICE 4 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Cada instrumento está especialmente diseñado para cumplir una ■■ Caja de traba o bisagra. Es la articulación de la pinza que per-
función determinada, pero los de un mismo tipo comparten un di- mite dar movilidad de apertura y cierre durante su manipulación
seño básico. En el caso de los instrumentos con anillas sus partes (fig. 1d).
básicas son: ■■ Mandíbulas o ramas. Es la zona distal del instrumento que ase-
■■ Anillas para los dedos (zona de sujeción). Son las argollas que gura la correcta prensión de los tejidos u otros materiales (fig. 1e).
sirven para sujetar y manipular la pinza durante las maniobras Para mejorar esta función esta zona puede tener una lámina de
quirúrgicas (fig. 1a). tungsteno.
■■ Cremallera o trinquete. Es la pieza dentada que mantiene el ins- ■■ Puntas.Son el extremo de la pinza (fig. 1f). Cuando la pinza está
trumento trabado cuando se cierra (fig. 1b). cerrada, las puntas deben quedar estrechamente unidas.
■■ Mango. Representa la zona más larga del instrumento. Une las
anillas con la caja de traba o bisagra (fig. 1c).
64
d
a b
ÍNDICE 4 ÍNDICE
CAPÍTULO
Instrumental quirúrgico / Partes de los instrumentos
La longitud del mango determina el uso
preferente del instrumental. Cuanto más
largo sea, mejor acceso y más sencilla será
la manipulación en campos quirúrgicos
profundos (fig. 3).
ÍNDICE 4 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Las pinzas de disección o pinzas de mano
están formadas por dos piezas unidas por un
extremo que se mantienen separadas hasta
que se comprimen. Las partes más impor-
tantes de estos instrumentos son la zona de
agarre para el cirujano, las mandíbulas y las
puntas, las cuales están diseñadas para suje-
tar un tipo determinado de tejido (figs. 6 y 7).
66
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CAPÍTULO
Instrumental quirúrgico / Categorización del instrumental general
67
ÍNDICE 4 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
a b
c d
68
Fig. 3. (a) La hoja se inmoviliza con un portagujas por el lado sin filo para evitar mellarlo. (b) La cuchilla se acopla sobre el mango del bisturí haciendo coincidir los
salientes del interior de la hoja con las escotaduras laterales del mango. (c) Se desliza la hoja a través de las escotaduras de forma continua y fluida. (d) La hoja queda
definitivamente montada cuando se oye un “clic”, que corresponde al momento en el que la parte proximal y oblicua de la hoja se encaja en la depresión del mango.
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CAPÍTULO
Instrumental quirúrgico / Categorización del instrumental general
a b c d
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Fig. 7. Las puntas de estas pinzas pueden tener o no dientes para inmovilizar los
tejidos con mayor o menor firmeza.
Es muy importante comprobar antes de la cirugía que los dientes encajan
perfectamente.
Pinzas de Debakey
Las pinzas de Debakey se emplean para sostener tejidos u órganos
delicados con firmeza sin que sufran daños. Son pinzas atraumáti-
cas con la punta roma y unas líneas de múltiples dientes muy pe-
queños en cada una de las ramas que acoplan perfectamente unas
dentro de otras cuando se cierran las ramas de la pinza (fig. 8).
70
La pinza de Debakey es fundamental en cirugías
muy delicadas y precisas como la cirugía cardiovascular
o intestinal.
Fig. 9. La pinza de Ferris-Smith es una pinza muy potente indicada para manipular
e inmovilizar tejidos fibrosos y resistentes.
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CAPÍTULO
Instrumental quirúrgico / Categorización del instrumental general
Fig. 10. Pinza de Backhaus. Se emplea para fijar los paños de campo sobre el
paciente.
71
Fig. 11. En esta imagen se muestra una pinza de campo “bola-cesto” (ball & socket)
que se emplea para sujetar instrumental accesorio al campo operatorio (equipo
electroquirúrgico o tubo de aspiración).
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Pinzas de Allis
Las pinzas de Allis se emplean para sujetar, separar y elevar tejidos
densos y resistentes. Sus puntas dobladas hacia el interior con múl-
tiples dientes muy finos sujetan el tejido con un mínimo traumatismo
(fig. 13).
Fig. 13. Las pinzas de Allis se emplean para inmovilizar y separar tejidos
resistentes. Producen poco traumatismo, no obstante se debe restringir su uso
sobre el tejido sano del paciente.
Retracción y separación a
El instrumental de retracción y separación fue diseñado para sepa-
rar y retener tejidos para obtener una mejor visualización del campo
quirúrgico. Pueden ser autoestáticos (se mantienen en su posición
cuando se abren) como los Gelpi, laparostato o Finochietto, o ma-
nuales (los debe manipular y sujetar el ayudante de cirugía) como
los Farabeuf o las valvas maleables.
b
Retractores manuales
72
Los retractores manuales se emplean para separar y exponer teji-
dos superficiales. Normalmente tienen los dos extremos idénticos,
doblados hacia el interior con los bordes atraumáticos (como son
los separadores de Parker o Farabeuf). (fig. 14). Habitualmente se
esterilizan y se usan por parejas.
Fig. 15. La valva maleable se usa en cirugía torácica o abdominal para separar e
inmovilizar órganos frágiles y voluminosos mejorando la visualización del campo
quirúrgico.
ÍNDICE 4 ÍNDICE
CAPÍTULO
Instrumental quirúrgico / Categorización del instrumental general
a b
73
Fig. 16. Estos separadores automáticos sirven para mantener separados los tejidos sin necesidad de un ayudante. (a) Separador de Weitlaner. (b) Separador de Gelpi.
Fig. 17. El separador de Balfour se emplea principalmente en cirugía abdominal Fig. 18. El separador de Finochietto se utiliza prioritariamente en cirugía torácica
para mantener abiertos los bordes de la laparotomía. Gracias a su valva central, la para separar las costillas o el esternón. Se debe elegir el tamaño que se adapte
exposición del campo quirúrgico es muy buena. mejor al tamaño del paciente.
ÍNDICE 4 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
74
b
Fig. 20. (a) Pinza mosquito. Tiene las ramas cortas y
finas con estrías transversales para aplastar el tejido
y favorecer la hemostasia de los vasos sangrantes
de baja presión.
(b) Pinza de Crile. Es parecida a la de Halsted pero
con las ramas más largas y potentes. Se emplea
para realizar hemostasia sobre tejidos resistentes o
gruesos.
ÍNDICE 4 ÍNDICE
CAPÍTULO
Instrumental quirúrgico / Categorización del instrumental general
Pinzas de Mixter (de ángulo recto o disector) Boquilla de aspiración Poole (aspirador abdominal)
Esta pinza se emplea para diseccionar y clampar tejidos, también Se emplea para aspirar líquido o sangre del abdomen o tórax. Esta
es muy útil para colocar ligaduras alrededor de pedículos vascu- provista de dos piezas: una cánula interna fina, para aspiración de
lares. Es una pinza insustituible para aislar estructuras anatómicas precisión y con menos potencia en campos quirúrgicos pequeños,
en profundidad y como pasahilos para la realización de ligaduras y la vaina externa multiperforada para conseguir una mayor succión
(fig. 21). cuando hay una gran cantidad de liquido o sangre (fig. 22).
Succión y aspiración
Este instrumental se emplea para eliminar del campo operatorio
sangre, líquidos y detritos tisulares. El objetivo es observar clara-
mente los tejidos sobre los que se interviene, y eliminar posibles
fuentes de contaminación. Es fundamental en las labores de la-
vado-aspiración de cavidades tras una contaminación.
75
Fig. 22. La cánula de aspiración de Poole permite aspirar grandes volúmenes de líquido. Los orificios de la vaina externa están distribuidos para la máxima aspiración eficaz
y segura, evitando atrapar los tejidos. Los orificios de la vaina interna, de gran tamaño, no pueden obstruirse por las partículas que hayan atravesado los orificios de la vaina
externa, de menor tamaño.
ÍNDICE 4 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
76
Portagujas de Olsen
Su aspecto es parecido al del Mayo-Hegar
pero con la particularidad de tener una
superficie cortante (tijeras) en sus ramas,
lo que permite al cirujano cortar el hilo de
sutura al finalizar el anudado sin tener que
cambiar de instrumento (fig. 24).
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CAPÍTULO
Instrumental quirúrgico / Categorización del instrumental general
Portagujas de Mathieu
Este portagujas tiene la particularidad de
no tener anillas, el mango es arqueado y se
ajusta mediante una cremallera muy corta
con tres dientes. Cuando estos se cierran,
la aguja queda inmovilizada y, si se sigue
haciendo presión, la cremallera se destraba
y el portagujas se abre (fig. 25).
Cuidados:
La sangre y restos tisulares se adhieren a las puntas de la
Ver Electrocirugía. pinza por lo que se deben limpiar periódicamente con una
En el libro Cirugía sin sangrado
gasa humedecida.
págs. 136-155
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CAPÍTULO
78
Área quirúrgica.
Limpieza,
inspección y
mantenimiento
Introducción
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ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
La actividad que se lleva a cabo en un área El quirófano debe ser una instalación con un diseño exclusivo, con
quirúrgica de acceso restringido (zona prequirúrgica unas medidas de higiene y seguridad concretas, y con un mante-
nimiento específico para que la posibilidad de contaminación e in-
y quirófano) es de gran importancia en pro de la fección quirúrgica sea la menor posible. Para ello, se deben seguir
salud de aquellos pacientes que son intervenidos. a rajatabla una serie de normas concretas y se debe emplear un
instrumental que cumpla con unos requisitos que lo hagan seguro y
fiable, como se expone a continuación.
El diseño del área quirúrgica se basa en los principios La principal preocupación del personal dentro del área quirúrgica
de control de la infección, seguridad y empleo eficiente es la protección del ambiente de la sala quirúrgica y del que rodea
del personal, el tiempo y el espacio. al paciente (fig.1).
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CAPÍTULO
Área quirúrgica / Características del área quirúrgica
Fig. 1. El quirófano debe ser una instalación específica que reúna las condiciones
exigidas para realizar intervenciones quirúrgicas en condiciones de esterilidad
absoluta, y con los medios apropiados para que los cirujanos lleven a cabo la
operación con la mayor precisión y mínima lesión para el paciente.
ÍNDICE 5 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Limpieza de quirófano
1:10, que a nivel práctico es ½ litro de lejía en 4,5 l de agua fría
El quirófano debe ser uno de los espacios más limpios (nunca emplear agua caliente). La limpieza debe empezar por la
del centro veterinario. parte central de la habitación hacia la periferia, evitando el exceso
de humedad en las esquinas (fig. 2).
ÍNDICE 5 ÍNDICE
CAPÍTULO
Área quirúrgica / Características del área quirúrgica
Fig. 4. Las columnas quirúrgicas colgadas del techo del quirófano permiten Fig. 5. Las lámparas de quirófano deben proporcionar una iluminación
centralizar las canalizaciones de electricidad y gases para evitar cables y tuberías por homogénea, luz diurna, que no produzca sombras y regulable en intensidad para
el suelo del quirófano. Asimismo, permiten suspender diferentes equipos para evitar reducir la fatiga ocular.
mesas accesorias que ocupan espacio y dificultan el movimiento de los cirujanos.
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
■■ Mesa de cirugía de acero inoxidable, de fácil limpieza y que se intervenciones que se realizan normalmente y del presupuesto del
pueda subir y bajar (manual o motorizada) para la exposición óp- centro. En líneas generales, el carro de anestesia debe tener dos
tima del campo operatorio, dependiendo del tamaño del paciente entradas de gas (O2 y aire), sistemas de seguridad y alarma en
y la altura de los cirujanos. caso de reducción del flujo de gases, sistema de evacuación de
■■ Mesa auxiliar y de instrumental. Se emplean para colocar los ins- gases anestésicos, vaporizador anestésico, respirador automá-
trumentos y material que se usa durante la intervención. También tico y monitores para controlar la frecuencia cardiaca, la presión
deben ser de altura variable y se colocan cerca el paciente pero arterial, la saturación de oxígeno y la temperatura.
nunca en contacto con él. ■■ Electrobisturí.
Permite la sección y coagulación de los tejidos de
■■ Asientos para reducir el cansancio y las lesiones músculo-articu- forma segura para evitar el sangrado intraoperatorio. Para evi-
lares (fig. 6). tar accidentes el paciente debe estar aislado eléctricamente y la
■■ Maquina,equipos, circuitos y monitores de anestesia. Hay mu- placa de retorno correctamente colocada. Estos equipos deben
chos modelos y la elección dependerá del tipo de pacientes e estar alejados de productos o gases inflamables (fig. 7).
84
Fig. 6. Durante los procedimientos quirúrgicos, en numerosas ocasiones los cirujanos se Fig. 7. El bisturí eléctrico monopolar y bipolar es un instrumento de gran ayuda en la
ven obligados a adoptar posturas poco ergonómicas que pueden predisponer a diferentes sección y coagulación de los tejidos para evitar el sangrado intraoperatorio. Durante la
patologías articulares y musculoesqueléticas. Por lo tanto, es importante adoptar una pos- electrocirugía y la cirugía láser se forma humo, por eso es recomendable contar con un
tura cómoda y que permita liberar la tensión de las articulaciones, para la salud del cirujano aspirador específico para humo como el que se observa en la segunda bandeja.
y para una más cómoda realización de su trabajo.
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CAPÍTULO
Área quirúrgica / Características del área quirúrgica
Fig. 9. El área prequirúrgica dispone de lavamanos para los cirujanos, zona de Fig. 10. La zona para el lavado del personal quirúrgico debe tener un espejo
limpieza y estilización del instrumental, así como armarios para el almacenamiento para comprobar que el gorro y la mascarilla se han colocado correctamente y,
del instrumental estéril, material de sutura y otro tipo de aparataje quirúrgico. tanto la aplicación del jabón como la apertura del paso de agua, deben tener un
sistema que no se tenga que manipular con la mano. Junto a esta zona existe una
superficie horizontal sobre la que se disponen las batas y guantes que va a usar el
personal de forma estéril.
ÍNDICE 5 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
■■ Al finalizar la intervención se retira el instrumental, se mete en un ■■ Se coloca el tapón del fregadero, se llena con agua tibia (20-
fregadero con las ramas abiertas o desmontado si tiene varias pie- 35 °C) hasta sumergir los instrumentos, se añade un detergente
zas, y se enjuaga con el chorro de agua fría para arrastrar los res- suave de pH neutro para no dañar la cobertura protectora del
tos biológicos. Hay que evitar que estos restos se sequen para fa- instrumental, como jabón de lavavajillas, o mejor aún, un deter-
cilitar su limpieza y evitar que la superficie del instrumento se tiña, gente enzimático, y se deja sumergido durante aproximadamente
dando un aspecto sucio y preocupante. Hay que recordar que se 10 minutos (fig. 2).
debe lavar todo el instrumental se haya usado o no.
ÍNDICE 5 ÍNDICE
CAPÍTULO
Área quirúrgica / Instrumental quirúrgico
■■ Se cepilla con delicadeza y meticulosidad
a b cada instrumento para eliminar coágulos
de sangre y restos tisulares, prestando
especial atención a la limpieza de las bi-
sagras y las mandíbulas. No se debe em-
plear estropajo de cocina ni cepillos me-
tálicos para no deteriorar el instrumental.
Si se dispone de un limpiador por ultraso-
nidos, se sumerge el instrumental abierto
durante 5 minutos procurando que las
zonas cortantes de tijeras, osteotomos,
etc. no contacten entre sí. Este tipo de
limpieza no está indicada para instrumen-
tal fino, delicado y de precisión.
■■ A continuación, se procede al aclarado
con agua tibia (mejor desmineralizada)
para quitar restos de detergente o solu-
ción limpiadora. Durante este proceso
el instrumental articulado se debe abrir
y cerrar varias veces para asegurar el
correcto enjuague de las bisagras.
Tabla I.
Seguidamente, se procede al secado lo mejor posible con un paño
Normas para la limpieza del instrumental
seco y suave, o mejor todavía, con aire comprimido. Se debe prestar
Se debe lavar inmediatamente el instrumental después de la cirugía. especial atención a las bisagras y recovecos (sobre todo si se va a al-
Si la sangre y los restos tisulares se secan, es más difícil la limpieza macenar el instrumental durante algún tiempo antes de esterilizarse).
previa a la esterilización.
También es necesario lubricar las bisagras y uniones del instru-
Hay que limpiar a fondo las incrustaciones solo con un cepillo suave. mental articulado con un lubricante quirúrgico que contenga una
base de parafina, no siliconado (fig. 3).
No se debe dejar el instrumental a remojo durante largos periodos de
tiempo, el agua corriente puede formar depósitos en la superficie. No Es fundamental inspeccionar el instrumental antes de esterili-
hay que sumergirlo en suero salino ya que puede corroer el acero. zarlo para detectar cualquier posible daño o alteración en las ra-
mas, bisagras y cremallera de cierre.
Se tiene que aclarar a fondo con agua destilada para eliminar los
detergentes y desinfectantes empleados. Por último, el instrumental se debe guardar en un ambiente lim-
pio y seco introducido en cajas específicas hasta el momento de su
No se debe dejar o guardar el instrumental mojado o húmedo. esterilización.
Es necesario lubricar las bisagras para alargar la vida útil del
instrumento.
ÍNDICE 5 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
88
Tabla II.
■■ Sangre reseca.
Marrón oscuro - Negro ■■ Detergente o jabón con pH ácido (‹6).
■■ Exceso de cloro en el agua.
Gotas de agua que se han dejado evaporar. La evaporación lenta provoca que los minerales del agua se adhieran a la
Puntos marrón claro - oscuro
superficie del instrumento.
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CAPÍTULO
Área quirúrgica / Instrumental quirúrgico
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
90
ÍNDICE 5 ÍNDICE
CAPÍTULO
Área quirúrgica / Instrumental quirúrgico
Inspección de las tijeras ■■ Se debe inspeccionar el borde afilado observándolo contra una
luz brillante para verificar la superficie de corte y la ausencia de
El ángulo de la superficie de corte de las tijeras determina su em-
oquedades en las tijeras convencionales, o roturas en la zona de
pleo. Las tijeras con un ángulo agudo se emplean para disecar y
inserción de las piezas de tungsteno que tienen las tijeras con el
seccionar tejidos blandos. Las tijeras de ángulos más abiertos se
mango dorado.
utilizan para seccionar estructuras más duras.
■■ También se debe realizar un test de corte para comprobar su
efectividad como se muestra a continuación:
Cuanto más afilados son los bordes cortantes de la tijeras ■■ La tijera se sujeta y manipula con los dedos pulgar y anular
(anillas negras), antes se desafilan. No se deben emplear introduciendo tan solo las yemas de los dedos.
nunca unas tijeras para cortar materiales para los que no se ■■ Se corta el material elegido usando desde la mitad de la hoja
diseñaron. hasta la punta.
■■ Para tijeras finas y delicadas se puede emplear un pañuelo
de papel.
La inspección de las tijeras quirúrgicas debe ser meticulosa y se
■■ Para tijeras de disección se puede emplear un guante de lá-
centrará sobre todo en la punta y en la bisagra.
tex o una media de nailon.
■■ Para tijeras de hilos se puede usar una goma elástica de pa-
pelería ancha o una doble capa de media de nailon.
Las tijeras con el uso repetido, pierden efectividad: los bordes
afilados se redondean y pueden aparecer oquedades. ■■ Si la tijera no pellizca el material y lo corta con suavidad, la tijera
está afilada.
Fig. 10. Los extremos de las tijeras de puntas agudas son muy frágiles y si no se Fig. 11. Las hojas de la tijera deben contactar perfectamente. Si se separan su
manipulan, limpian y almacenan con delicadeza se pueden romper. Otra zona frágil es efectividad se va reduciendo hasta no cortar nada.
la bisagra, si no se mantiene adecuadamente se puede romper como se observa en
esta imagen.
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CAPÍTULO
92
Empaquetado
del material
para esterilizar
Introducción
Técnica de empaquetar
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ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
El empaquetado es una fase importante Tras la esterilización se debe realizar un correcto almacenamiento de
durante la preparación del material antes de los paquetes para protegerlos de una posible contaminación. La mayor
fuente de contaminación son los gérmenes ambientales que se depo-
la cirugía ya que debe asegurar que el agente sitan sobre los paquetes, por eso se recomienda guardarlos en cajo-
esterilizante pueda penetrar en el interior nes o armarios cerrados (fig. 1). También se deben manipular lo mínimo
del paquete, y garantizar su protección durante posible para evitar su contaminación o rotura del envoltorio (fig. 2).
94
ÍNDICE
Empaquetado del material para esterilizar / Empaquetado
de campo
El material textil reutilizable debe doblarse de una manera específica
para que cuando se vaya a emplear, se despliegue fácilmente sin
crear turbulencias de aire.
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ÍNDICE 6 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
a b
96
Fig. 4. Se dobla la bata desde la parte inferior en forma de acordeón o se enrolla hacia la zona del cuello. Por último se colocan las toallas para secar las manos y ya está
lista para la fase de empaquetado.
ÍNDICE
Empaquetado del material para esterilizar / Empaquetado
Paños de campo
Los paños de campo se doblan como
se muestra en las siguientes imágenes
(figs. 5-9). De esta manera, el personal
estéril puede agarrarlo fácilmente y des-
plegarlo y colocarlo directamente sobre el
paciente.
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Fig. 6. Con el paño extendido se dobla dos veces, tal y como se observa en estas imágenes.
ÍNDICE 6 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
a b
98
Fig. 8. (a) Se doblan hacia el interior cada uno de los extremos. (b) A continuación, la esquina del superior se dobla hacia el lado opuesto.
ÍNDICE
Empaquetado del material para esterilizar / Envoltorios para la esterilización
Tela tejida
Las telas más apropiadas son de algodón, o algodón y poliéster,
con una densidad de 110 hilos/cm² en una doble envoltura. Se em- No se debe esterilizar el instrumental cerrado ya que puede
plean para realizar paquetes pesados. deteriorarse al expandirse por el calor.
Este tipo de tela es apta para la esterilización por vapor u óxido
de etileno (fig. 1), sin embargo, su uso continuado reduce su efica-
cia como barrera y se debe sustituir a los 50-70 usos.
Tela no tejida
Está formada por celulosa y fibras sintéticas, es resistente a los lí-
quidos y es una buena barrera protectora frente a la contamina-
ción. No obstante, puede retener la humedad durante el proceso
de esterilización por vapor y por eso, debe aumentarse el tiempo de
secado (fig. 2).
99
Fig. 1. Los paquetes textiles voluminosos y/o pesados se envuelven con telas
tejidas de algodón tratado. Es un método económico, de fácil manejo; sin embargo,
puede formar pelusas, el tiempo de almacenamiento es el más limitado, y si se
moja, hay que considerarlo como contaminado (y no se debe usar su contenido).
Fig. 2. La tela no tejida se puede encontrar en tres densidades, el de tipo medio Fig. 3. El papel para empaquetado es un envoltorio de un solo uso, económico y
es económico y está indicado para envolver artículos pequeños y medianos como muy útil.
la caja de instrumental que se ve en la imagen.
ÍNDICE 6 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
a b
100
Fig. 4. (a) Los contenedores rígidos permiten tener todo el material ordenado en su interior y transportarlo con facilidad. (b) Pueden tener un sistema de filtro que permite la
entrada y salida del vapor del autoclave, aunque por otra parte, imposibilitan la entrada de bacterias (las flechas indican el lugar donde se colocan los filtros).
ÍNDICE
Empaquetado del material para esterilizar / Envoltorios para la esterilización
■■ Bolsas a medida. Se confeccionan a
partir de rollos o bobinas. Poseen una
cara de papel grado quirúrgico (de alto
gramaje 60 g/m²) y otra de polipropileno-
poliéster (fig. 6). Asimismo, llevan indi-
cadores químicos de viraje para esteri-
lización en autoclaves de vapor u óxido
de etileno. Para elaborar las bolsas, es
necesario contar con una termoselladora
que funde y une las dos capas mediante
calor (180-200 °C) y presión (fig. 7).
101
ÍNDICE 6 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
a b
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Fig. 1. Se coloca el objeto diagonalmente sobre el envoltorio que se va a emplear para la esterilización. (a) La esquina más próxima se dobla sobre el objeto ajustándola
bien. (b) La punta se vuelve a doblar sobre el objeto como se observa en la imagen.
a b
Fig. 2. Cada uno de los laterales del envoltorio se doblan sobre el paquete. (a) La esquina derecha se pliega sobre el centro del paquete replegando la punta hacia el
exterior. (b) En el lado izquierdo se realiza la misma maniobra manteniendo la tensión en el envoltorio. Es importante que no se formen arrugas.
ÍNDICE
Empaquetado del material para esterilizar / Técnica de empaquetar
■■ Doblar la cuarta y última punta hacia el
a centro del paquete. Replegar el extremo
sobre las esquinas anteriores, dejando a
la vista el ángulo externo (fig. 3).
103
ÍNDICE 6 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Técnica de envoltorio
rectangular o cruzado
El envoltorio tipo rectangular es la técnica
que se emplea para empaquetar objetos
grandes y bultos quirúrgicos voluminosos.
■■ Sobre una superficie horizontal amplia se
extienden dos envoltorios de tela de gran
tamaño y se colocan en el centro to-
das las piezas que ya se han preparado
como se ha visto anteriormente (fig. 5).
104
ÍNDICE
Empaquetado del material para esterilizar / Técnica de empaquetar
■■ La esquina mas externa se dobla hacia
fuera y se tira de ambas hacia los late-
rales ligeramente para separarse (fig. 8).
ÍNDICE 6 ÍNDICE
CAPÍTULO
106
Materiales
de sutura
y ligadura
Generalidades de los hilos quirúrgicos
y las agujas
Agujas
ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
108
ÍNDICE
Materiales de sutura y ligadura / Características de los hilos de suturas
ÍNDICE 7 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Superficie
Generalmente es preferible elegir un material monofilamento, que Los huecos entre las hebras de las suturas multifilamento son una
tiene la superficie lisa, para evitar el “efecto sierra” que puede tener localización ideal para las bacterias donde los macrófagos no tienen
el hilo trenzado (multifilamento) al atravesar el tejido (fig. 1). También acceso, favoreciendo la infección.
hay que considerar que el hilo monofilar no tiene capilaridad, por lo
que no hay paso de líquidos ni bacterias a través de la sutura. Reacción tisular
Por otro lado, los nudos de los hilos de superficie lisa son menos
estables que los de superficie áspera, obligando al cirujano a reali- La presencia de una sutura provoca una respuesta inflamatoria en
zar más nudos. el tejido que depende de la cantidad de material implantado, ya que
Para intentar compaginar las características de ambas superfi- se comporta como un elemento extraño, de la fricción que se pro-
cies existen hilos de sutura multifilamento recubiertos de una capa duce al atravesar el tejido, y de la naturaleza química del material
externa lisa. empleado. Por lo tanto, se debe emplear un material lo mas inerte
Cuando se realiza una sutura continua con un material de super- posible, que cause una mínima lesión al colocarlo, y utilizar la menor
ficie rugosa, la fricción entre el hilo y el tejido hace que se adapte cantidad de material que se precisa.
correctamente sin mantener a tensión la sutura (fig. 2).
ÍNDICE
Materiales de sutura y ligadura / Clasificación de las suturas
Tabla I.
Reducido riesgo
Riesgo de reacción Ausencia de
Buen anudado Peor anudado de reacción a un Mayor capilaridad
a un cuerpo extraño capilaridad
cuerpo extraño
Anudado más
Baja resistencia Elevada resistencia Anudado fácil
difícil y menos
a la tracción a la tracción y seguro
seguro
Acabado industrial
111
Según el número de hebras, las suturas se clasifican en monofila- ■■ Las suturas multifilamento están formadas por varias hebras
mento o multifilamento (tabla II). trenzadas, otorgándoles mayor fuerza tensil, flexibilidad y facilidad
■■ Las suturas monofilamento están fabricadas por una sola hebra de manejo. Sin embargo, también presentan mayor coeficiente
y permiten pasar el tejido con una menor resistencia, causando de fricción tisular y capilaridad.
menor lesión tisular. No hay capilaridad, por lo que no hay reten-
ción bacteriana en su superficie, aunque son más sensibles a las
roturas, se manejan peor y hay que realizar un mayor número de Los hilos multifilamento permiten la fijación de bacterias sobre
lazadas para estabilizar el nudo. su superficie, por lo que no se deberían emplear en heridas
infectadas ni cuando se sospeche una posible contaminación.
Tabla II.
Ventajas Inconvenientes
ÍNDICE 7 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Las suturas absorbibles de origen natural se digieren enzimática- Son suturas monofilamento, pero mientras la primera pierde su
mente y son fagocitadas, mientras que las de origen sintético se fuerza tensil en 14 días, la segunda lo hace en 35 días. El poliglu-
descomponen por hidrólisis (tabla III). conato se utiliza en tejidos blandos con un periodo de cicatrización
inferior a 2 semanas, así como en órganos huecos conteniendo lí-
Catgut quido. La polidioxanona, dada su prolongada duración de la fuerza
tensil, se emplea en tejidos de lenta cicatrización como fascias y
Está formado por colágeno con una gran flexibilidad y reducida tendones. También se utiliza en la pared abdominal y en pacien-
fuerza de fricción. La resistencia tensil de la sutura se mantiene du- tes con problemas de cicatrización como por ejemplo diabéticos o
rante poco tiempo, ya que se degrada con rapidez por un proceso inmunodeprimidos.
proteolítico difícil de predecir y que se acelera en caso de infección
local. La lisis alcanza su nivel máximo a los 3 días y la resistencia a
la tensión es mínima a los 10 días. Durante todo este proceso se
La polidioxanona es suave y flexible, con gran seguridad
crea una reacción inflamatoria importante.
en el anudado y ligera reacción tisular.
Tabla III.
Tipo de material Tiempo de absorción Fuerza tensil al 50 % (días) Absorción completa (días)
ÍNDICE
Materiales de sutura y ligadura / Clasificación de las suturas
Tabla IV.
Poligliconato Polipropileno
Polidioxanona Poliéster
ÍNDICE 7 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Las suturas vienen en un paquete estéril listas para su uso clínico. En los paquetes de sutura figura la siguiente información (fig. 1):
Normalmente cada sobre contiene una sola sutura, aunque algu- ■■ Nombre del producto.
nos contienen varios hilos.
■■ Tipo de material de la sutura.
La información que se muestra en el sobre es abundante y per-
mite identificar con detalle las características del contenido. Por lo ■■ Si es absorbible o no.
tanto, se puede decidir si el hilo seleccionado reúne las caracterís- ■■ Calibre de la sutura en los sistemas USP y métrico.
ticas necesarias para la situación clínica específica en la que se va ■■ Longitud de la sutura en centímetros y pulgadas.
a emplear.
■■ Siluetade la aguja, representación real de su tamaño y sección
de la aguja.
■■ Código de la aguja.
■■ Fecha de caducidad.
b a
114
e
d
b a
d
c
e
ÍNDICE
Materiales de sutura y ligadura / Agujas
La aguja de la sutura es tan importante como el hilo. Existen agujas El cuerpo de la aguja está aplanado para evitar la rotación en el
de diferentes formas y tamaños con el objetivo de poder elegir la portagujas cuando se inmoviliza (fig. 1a). Se utilizan en tejidos poco
más adecuada según el tipo de tejido y la topografía de la zona. resistentes como intestino, grasa, músculo o tracto urogenital.
La mayor parte de las agujas quirúrgicas están fabricadas con ■■ Las agujas de punta roma se emplean sobre tejidos friables
acero inoxidable. La aguja debe ser capaz de permitir el paso del como el hígado o el bazo. Su punta obtusa diseca el tejido al atra-
hilo de sutura realizando el mínimo orificio para ello y dañando solo
vesarlo y no se lesionan vasos sanguíneos y conductos biliares.
el tejido imprescindible. Su capacidad de penetración debe mante-
■■ Las agujas de punta trocar tienen una punta con cuatro vér-
nerse en el tiempo, tiene que ser firme y estable en el portagujas, rí-
gida, pero suficientemente dúctil como para evitar romperse a pesar tices cortantes que gradualmente se convierte en un cuerpo
de adquirir cierta curvatura. cilíndrico. Con este diseño la aguja penetra con facilidad en el
tejido pero sin cortarlo (fig. 1b). Se usa para la sutura de tendo-
Una aguja quirúrgica puede dividirse en tres partes: la punta, el nes y cirugía cardiovascular.
cuerpo y el mandrin: ■■ Las agujas de punta cortante son aquellas que tienen varios bor-
■■ Lapunta de la aguja determina la agudeza de esta, por lo que la des cortantes. Los bordes afilados le permiten atravesar tejidos re-
selección dependerá del tejido a suturar (fig. 1). sistentes como piel o fascia, y se deben evitar en tejidos blandos ya
■■ Las agujas de punta cilíndrica o redonda están diseñadas para que aumentan la lesión tisular y el riesgo de sangrado e infección.
atravesar el tejido separando las fibras que lo forman sin cortarlo. La más empleada es la aguja de punta triangular invertida (fig. 1c).
115
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
■■ El
mandrin es el extremo donde se fija la
hebra a la aguja: a
■■ Puede tener un ojo u ojal para poder
enhebrar el hilo de sutura. Son las de-
nominadas agujas traumáticas (fig. 2).
Estas agujas producen un mayor trau-
matismo en el tejido porque el hilo de
sutura, al pasar por el ojo de la aguja,
sobresale por ambos lados de la
misma (fig. 3).
b
Fig. 2. Las agujas enhebrables permiten emplear
suturas en carrete, que son más económicas, pero
el hilo se puede dañar al enhebrarse y la hebra no
queda sujeta con firmeza a la aguja, dificultado su
manipulación. Pueden ser (a) de ojo cerrado o (b)
de ojo francés, que son más fáciles de enhebrar,
aunque el hilo se deteriora con mayor facilidad.
Para definir una aguja hay que tener en cuenta varios aspectos. Los
más importantes son: Engarce Punta
Diámetro
■■ Lalongitud de la aguja, que es la distancia en milímetros de la
punta al mandrin (fig. 4).
■■ Elradio o ángulo de curvatura, que es la distancia desde el Radio
centro de la cuerda hasta el cuerpo de la aguja. Esta caracterís- de la Cuerpo
tica define el radio de giro de la aguja cuando se manipula con aguja de la aguja
el portagujas. Las más usadas son las de 1⁄2 círculo, 3⁄8 círculo y
recta (fig. 2).
ÍNDICE
Materiales de sutura y ligadura / Tipos de sutura y aguja según el tejido
el tejido. Generalidades
En líneas generales se deben seguir las indicaciones que se citan a ■■ Lasutura de órganos huecos se debe realizar con material ab-
continuación: sorbible monofilamento para evitar el efecto capilar del hilo
■■ Lassuturas en el interior del organismo deben ser absorbibles multifilamento.
para que no queden cuerpos extraños. ■■ Se emplea material no absorbible cuando la sutura no debe des-
■■ Se elige un hilo multifilamento cuando se requiere una mayor re- aparecer con el tiempo como en el caso de las herniorrafias o la
sistencia a la tensión, como en el cierre de una laparotomía. ligadura del conducto arterioso persistente (figs. 2 y 3).
■■ Cuando hay sospecha de que un tejido está contaminado, se de- ■■ Laselección del tamaño de la aguja adecuada depende del es-
ben evitar las suturas multifilamento, ya que las bacterias pueden pesor del tejido a suturar, y la curvatura depende de la profundi-
quedar aisladas entre las hebras del hilo. dad de la estructura a tratar, de manera que es preferible que la
curvatura sea mayor cuanto más profundidad haya.
■■ Para la sutura de una herida cutánea se debe emplear un hilo
monofilamento para evitar el paso de bacterias de la piel del pa- ■■ La
piel y estructuras superficiales se suturan con mayor facilidad
ciente al interior del organismo (fig.1). empleando agujas de 3⁄8 o rectas con punta triangular.
■■ Losórganos internos se deben suturar con aguja atraumática de
punta cilíndrica, con curvatura 1⁄2.
■■ Lasestructuras poco vascularizadas, como los tendones, se de-
ben suturar con material no absorbible.
■■ Los órganos parenquimatosos como bazo, hígado o riñones se
suturan con material absorbible monofilamento y agujas de punta
roma. Se debe emplear un calibre grueso para evitar cortar el te-
jido cuando se apriete el nudo.
117
Fig. 2. En la sutura del diafragma los autores empelan un hilo no absorbible, Fig. 3. Para la fijación de mallas en casos de herniorrafias los autores emplean un
monofilamento, montado sobre una aguja de punta cilíndrica. Dejando los cabos hilo de sutura sintético, no absorbible, monofilamento, montado sobre una aguja
del nudo largos para evitar que se pueda deshacer y para no lesionar órganos cilíndrica.
adyacentes.
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CAPÍTULO
118
Sondas
y drenajes
Introducción
Sondas de extracción/Drenajes
119
ChaNaWiT/shutterstock.com
ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
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ÍNDICE
Sondas y drenajes / Sondas de extracción/Drenajes
Un drenaje es una comunicación del interior del organismo con el Se debe mantener el mínimo tiempo posible ya que también repre-
exterior. Se coloca cuando existe la necesidad de realizar lavados senta una vía de infección ascendente. Por este motivo, debería ir
o aspiración de líquido o aire de una determinada localización de cubierto por un apósito que se cambie regularmente.
manera reiterada. Las complicaciones más frecuentes son la infección de la herida
En cualquier caso, con los drenajes se consigue disminuir el y la dehiscencia del punto de fijación del drenaje a la piel.
riesgo de infección, se evitan posibles retrasos en la cicatrización, e
incluso se mantienen las funciones orgánicas (como en el caso del Técnica de colocación y retirada
drenaje torácico por derrame pleural) siempre que se realicen y se
mantengan adecuadamente. ■■ Se localiza la zona afectada y se practican dos incisiones localiza-
das en las zonas dorsal y ventral.
■■ Tras evacuar el contenido y realizar el lavado antiséptico de la ca-
Los drenajes pueden ser pasivos (por gravedad o capilaridad) vidad, se introduce una pinza de forcipresión. Con ella se rompen
o activos (llevan acoplados un sistema de succión). las posibles trabéculas que pueden existir en el interior, y se exte-
rioriza por la incisión superior (fig. 1a).
■■ A continuación, se desliza el drenaje de Penrose en el interior de
Drenaje pasivo la cavidad, dejando bastante longitud en ambos lados (fig. 1b).
■■ Para evitar que el drenaje se pueda perder o que se introduzca en
el interior de la cavidad, se recomienda anudarlo sobre sí mismo
Drenaje de Penrose o fijarlo con una ligadura (figs. 1c y 1d).
Es el drenaje pasivo más utilizado. Consiste en un tubo blando de ■■ Para evitar el riesgo de infección cuando se retira el drenaje, este
látex que se introduce en el interior de una herida, a continuación se se corta junto a una de las entradas en la piel y se extrae por el
saca cada uno de sus extremos por incisiones diferentes y se deja otro lado. De esta forma, se evita que la parte externa del Pen-
siempre una de ellas en la zona más ventral posible para que la gra- rose penetre en el interior del tejido.
vedad favorezca el drenaje del líquido acumulado. Ambos extremos
pueden fijarse a la piel o mejor sujetarse el uno al otro mediante un
punto, un nudo o una grapa para facilitar el movimiento del tubo y el 121
drenaje del líquido.
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
122
ÍNDICE
Sondas y drenajes / Sondas de extracción/Drenajes
Drenaje peritoneal
Se puede utilizar en efusiones peritoneales y peritonitis, así como
en pacientes con insuficiencia renal que requieren una diálisis pe- Ver Punción abdominal, lavado
ritoneal. Consiste en un tubo flexible de paredes rígidas con múl- y diálisis peritoneal.
En el libro El abdomen caudal
tiples perforaciones laterales, para evitar posibles obstrucciones, págs. 362-369
que se introduce con un trocar con el que se punciona la pared
abdominal. El tubo de drenaje se conecta a un sistema de reco-
lección cerrado para evitar la contaminación abdominal por vía
ascendente.
Dependiendo del tamaño del paciente y de la experiencia del ciru-
jano se puede colocar mediante técnica cerrada o abierta (figs. 2 y 3).
123
Fig. 2. En la técnica cerrada se realiza una pequeña incisión en la piel. Se sujeta con firmeza la pared abdominal y se introduce con decisión el trocar con el drenaje. Tras la
colocación del tubo, se conecta al sistema cerrado de lavado-recolección y se fija a la piel con un punto chino.
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
124
Fig. 3. En los pacientes de pequeño tamaño es preferible realizar la técnica abierta. Se practica una microlaparotomía en la zona infraumbilical y se introduce el catéter de
lavado peritoneal desprovisto del trocar. Al igual que en la técnica cerrada, tras la fijación del mismo a la pared abdominal se conecta al sistema de recolección cerrado.
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Sondas y drenajes / Sondas de extracción/Drenajes
a b
125
c d
Fig. 4. Para realizar el sondaje vesical percutáneo se inmoviliza la vejiga contra la pared abdominal. (a) Se introduce un catéter provisto de su trocar en la vejiga. (b) A
continuación, este se retira y se introduce la sonda. (c) Se retira el catéter (peel away) separando sus dos mitades para dejar la sonda en el interior de la vejiga. (d) Imagen
radiológica de la vejiga que confirma que está introducido el catéter.
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Drenaje activo
Es aquel que se conecta a un sistema de vacío para aspirar de una Una alternativa al sistema de vacío de baja presión, es el empleo de
forma continua el contenido de la cavidad. una jeringuilla que, tras realizar la aspiración, se fija el émbolo con
una aguja hipodérmica (fig. 8).
Drenaje de succión cerrado con pera
Este tipo también se llama drenaje Jackson-Pratt (JP). Está compuesto
Drenaje torácico
por un tubo de silicona multiperforado que, tras ser colocado, se co- Consiste en la colocación de un tubo (de paredes rígidas) en el es-
necta a un sistema de vacío de baja presión tipo pera o fuelle (figs. 5-7). pacio pleural introducido entre las costillas, previa tunelización de
2-3 cm (dos espacios intercostales) de la salida del tubo al exterior.
Se puede utilizar para extraer el aire pleural tras una toracotomía
Para que sean eficaces estos sistemas de drenaje activo o fluidos y sangre en efusiones torácicas (hemotórax, piotórax, quilo-
de baja presión, es necesario realizar un cierre hermético tórax). Además, puede resultar un procedimiento de urgencia en los
de los tejidos para que no se aspire aire ambiental. casos de efusiones pleurales severas y neumotórax que impiden al ani-
mal expandir los pulmones con normalidad generando disneas graves.
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Fig. 5. El drenaje JP tiene un tubo de silicona con un extremo multiperforado Fig. 6. Tras colocar el extremo perforado en su localización, se exterioriza el
que se introduce en la zona donde se quiere realizar la aspiración, y un estilete drenaje por un sitio distinto de la incisión.
metálico que sirve para pasarlo a través de los tejidos.
Fig. 7. Se fija el tubo de drenaje a la piel y se conecta al sistema de aspiración Fig. 8. El drenaje activo de baja presión también se puede realizar con una
continua de baja presión, como se observa en esta imagen. jeringuilla que, tras acoplarse al tubo de drenaje, mantiene el vacío gracias a una
aguja hipodérmica que atraviesa el pistón.
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Sondas y drenajes / Sondas de extracción/Drenajes
Para su colocación se requiere anestesia general, rasurado del he- discurren por la cara caudal. Hay que evitar profundizar demasiado
mitórax donde se vaya a colocar el drenaje, infiltración subcutánea con el trocar para no dañar los pulmones (fig. 9).
con anestésico local entre el 6º y 10º espacio intercostal, y la asepsia A continuación, se retira el estilete, se introduce el drenaje en la lo-
normal asociada a cualquier procedimiento quirúrgico estéril. calización deseada, se fija a la pared torácica y se conecta al sistema
Se posiciona al animal en decúbito lateral y se realiza una incisión de vacío para evacuar el líquido o aire presente en el tórax (fig. 10).
vertical en la piel de 0,5-1 cm sobre la 10ª-11ª costilla, y se procede
a la tunelización craneal de aproximadamente dos espacios inter-
costales hasta llegar al 7º-8º espacio intercostal.
Gracias a la tunelización cutánea, se evita la coincidencia entre el Una forma rápida de conseguir esta tunelización es estirar
punto de entrada en tórax y la abertura cutánea al exterior. De esta de la piel cranealmente hasta hacer coincidir la incisión
manera, disminuye el riesgo de neumotórax y de pérdida de presión en la piel con el punto de introducción en el tórax, de manera
negativa en la cavidad pleural. que al soltar la piel, la incisión cutánea se desplace
La punción se realiza en el 7º-8º espacio intercostal sobre el caudalmente unos 2 espacios intercostales.
borde craneal de la costilla para evitar los vasos intercostales que
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Reservorio torácico
El drenaje torácico se debe retirar lo antes posible para evitar dolor En casos en los que es necesario realizar aspiraciones repetidas
por irritación pleural, neumotórax accidental o infección ascendente de la cavidad torácica o en los que está indicada la quimioterapia
(fig. 11). A veces es difícil decidir cuando quitarlo. En el caso de efu- local (como en el mesotelioma), se recomienda la colocación de un
siones pleurales se puede utilizar como criterio el hecho de drenar reservorio torácico (fig. 12).
menos de 2-3 ml/kg/día; en el caso de neumotórax, se realizarán
radiografías de tórax periódicamente hasta comprobar que la can- Este sistema ofrece varias ventajas sobre el drenaje torácico
tidad de aire en el espacio pleural es muy reducida o ausente des- convencional:
pués de haber cesado el drenaje. ■■ Es más cómodo para el paciente y para el veterinario.
■■ Evita la inflamación y el dolor de las toracocentesis repetidas.
■■ El riesgo de infección es menor.
■■ Se evita el riesgo de lesión pulmonar por punciones repetidas.
1 2
128
ÍNDICE
Sondas y drenajes / Sondas de extracción/Drenajes
1 2
Fig. 12.1. Tras la preparación aséptica del campo quirúrgico, se realiza una Fig. 12.2. Se coloca la pinza perpendicularmente a la pared torácica y se
incisión de 3-5 cm en dirección dorsoventral en el tercio superior de la 10ª empuja para acceder al espacio pleural.
costilla. Con una pinza hemostática se realiza un trayecto subcutáneo de
2-3 espacios intercostales en sentido craneal.
3 4
129
Fig. 12.3. Se abre la pinza y se mantiene en esta posición para facilitar el paso Fig. 12.4. El otro extremo del tubo se conecta al reservorio y este se fija a la
del catéter dentro de la cavidad torácica. El próposito es que toda su parte fascia muscular con puntos de material no absorbible monofilamento.
fenestrada quede en el espacio pleural.
5 6
Fig. 12.5. Se comprueba que el sistema funciona correctamente inyectando Fig. 12.6. Se relaja la tensión de la piel y se sutura de forma estándar.
suero fisiológico en el interior del reservorio.
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
130
ÍNDICE
Sondas y drenajes / Sondas de extracción/Drenajes
Fijación de tubos
La técnica más usada para la fijación de tubos de drenaje o de Para la realización de un “punto chino” se recomienda emplear
alimentación forzada a la piel del paciente es el punto en sandalia un hilo multifilamento porque ofrece mayor resistencia
romana o de trampa china (“punto chino”) como se resume en la al deslizamiento del tubo que el material monofilar.
fig. 14.
Pasos más importantes para realizar la fijación de un tubo mediante un punto en sandalia romana o punto chino
1 2
131
Fig. 14.1. Se adapta la incisión cutánea al diámetro del tubo con un punto en Fig. 14.2. Se realiza un nudo llano con dos lazadas sobre el tubo.
U o en bolsa de tabaco. Se realiza un punto simple de fijación a 1 cm del punto
de entrada. A continuación, se anuda el punto de fijación, dejando ambos cabos
muy largos.
3 4
Fig. 14.3. Un ayudante eleva el tubo y el cirujano cruza los cabos del punto Fig. 14.4. Esta maniobra se repite varias veces hasta conseguir una secuencia
en el lado contrario en el que se había realizado el nudo. El ayudante vuelve a como la que se aprecia en la imagen. Para mayor seguridad y tras realizar el
colocar el tubo en su posición original y el cirujano realiza un nuevo nudo llano a último nudo, se realiza un punto simple que fija de nuevo el tubo al paciente.
cierta distancia del anterior.
ÍNDICE 8 ÍNDICE
CAPÍTULO
Admisión
y preparación
del paciente
para cirugía
Relación con los propietarios
133
Limpieza y lavado prequirúrgico
del paciente
ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
Relación con los propietarios José Rodríguez, Salvador Guillén, Jorge Llinás
Es importante empatizar con el propietario, escuchar Cuando el cliente va a recibir a su animal tras la recuperación quirúr-
y responder a todas las preguntas triviales e importantes gica se deberían seguir los siguientes puntos:
que le han surgido hasta el momento.
■■ Citarle
a una hora concreta y ser puntuales, no dejar que espere
para reunirse con su mascota.
■■ Confirmar que al paciente se le ha quitado el catéter venoso,
Se debe confirmar que el propietario está informado correctamente
que se encuentra limpio y huele bien antes de volver con sus
del procedimiento anestésico/quirúrgico que se va a realizar a su
propietarios.
mascota, que ha firmado todos los documentos y autorizaciones
correspondientes, que ha facilitado un número de teléfono donde ■■ Explicarle
el procedimiento realizado, la evolución del paciente y
se le pueda contactar, y que ha cumplido las recomendaciones que los cuidados que tiene que llevar a partir de ese momento.
debía seguir antes del ingreso: ■■ Explicarla medicación que debe administrar a su mascota en
■■ Limpieza y baño del paciente el día anterior. casa, para qué sirve cada uno de los fármacos y confirmar que lo
134 ha entendido.
■■ Ayuno de comida sólida de 12 horas en el caso de los adultos.
■■ Concretar el calendario de revisiones y seguimiento posoperatorio.
■■ Privaciónde líquidos al menos 2 o 3 horas previas al ingreso en el
centro (excepto en pacientes con insuficiencia renal). ■■ Devolveral propietario todos los accesorios que trajo con su
mascota (collar, correa, juguetes, cama, etc.).
■■ Confirmar que ha orinado y defecado antes del ingreso.
■■ Daral propietario un informe por escrito del caso, así como una
Se llevará a cabo la consulta/valoración preanestésica, realizando la copia de los análisis y de las pruebas diagnósticas realizadas.
exploración física completa del paciente, las analíticas sanguíneas
y pruebas diagnósticas complementarias oportunas (radiografías,
ecografía, ECG…) para comprobar el estado de salud del paciente Ver Técnica de colocación págs.
y plantear un protocolo anestésico adecuado. de un catéter venoso 29-32
ÍNDICE
Admisión y preparación del paciente / Rasurado y desinfección de la piel
El pelo actúa como capa protectora para el paciente, atrapa bacte- ■■ La parte plana de la cuchilla se apoya sobre la piel del paciente.
rias y suciedad. Por ello, es fundamental eliminarlo en un área am- Se debe evitar cortar con la zona de los dientes para no trauma-
plia alrededor del lugar de incisión, al menos 15 cm. tizar la piel (fig. 2).
■■ Como norma general el área depilada debe sobrepasar al menos
Una vez sedado el paciente, se procede al rasurado del área en la
15 cm en cada lado de la zona donde se va a realizar la incisión
que se va a intervenir siguiendo estas recomendaciones:
cutánea.
■■ El
rasurado se debe realizar en otra habitación que no sea el
■■ Sihay una herida abierta, o para proteger el globo ocular (si la
quirófano.
cirugía no es intraocular), se puede utilizar un gel hidrosoluble.
■■ Se debe emplear una rasuradora eléctrica con cuchilla para pre-
■■ Los pelos rasurados se eliminan con un aspirador o con una cinta
paración del campo quirúrgico que tenga una altura de corte in-
adhesiva cuando la zona es muy delicada.
ferior a 1 mm.
■■ Las cuchillas se deben mantener limpias y lubricadas para que corten
con facilidad el pelo y evitar lesiones y heridas en la piel del paciente.
■■ Mantener la piel tensa mientras se rasura. El rasurado se hace en dos No se deben usar cremas depilatorias, ni cuchillas de afeitar,
pasadas, la primera a favor del pelo y después a contrapelo (fig. 1). ya que pueden irritar y lesionar la piel favoreciendo
la colonización bacteriana.
135
El rasurado agresivo e incorrecto puede crear lesiones, cortes o
abrasiones en la dermis que favorecen la invasión bacteriana.
Mientras se está afeitando, se va retirando el pelo cortado. El
empleo de una aspiradora es muy útil para eliminar los restos más
pequeños del paciente y del suelo de la sala para evitar trasportar-
Fig. 1. Para el correcto afeitado de la piel se debe emplear una rasuradora que los al quirófano (fig. 3).
funcione correctamente con las cuchillas afiladas y lubricadas. La base de la Si se va a intervenir en una extremidad sin que se afecte la parte
cuchilla debe apoyarse sobre la piel, que se debe mantener a tensión para que no distal, es más fácil y recomendable cubrir esta zona con una venda
se formen pliegues cutáneos y que la cuchilla se deslice fácilmente. cohesiva o un guante de látex y esparadrapo en vez de rasurarla.
Fig. 2. No se debe rasurar apoyando la cuchilla por la zona de los dientes. Es muy Fig. 3. El aspirado al mismo tiempo que se rasura al paciente y/o inmediatamente
fácil lesionar y herir la piel, aumentando el traumatismo, el dolor para el paciente y después es importante para eliminar los pelos cortados, suciedad atrapada en la
la posibilidad de infección cutánea secundaria. superficie cutánea, y así evitar que se transporten al quirófano.
ÍNDICE 9 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Limpieza y mantenimiento de las cuchillas El motivo principal por el que las cuchillas pierden el filo
Las cuchillas se deben limpiar después de cada uso para evitar la es la falta de limpieza y lubricación.
transmisión de gérmenes de un paciente a otro, y para conseguir
que el cabezal funcione perfectamente y se deslice con mínima fric-
ción, evitando el sobrecalentamiento de la cuchilla y de la máquina.
Para realizar un correcto mantenimiento del cabezal de la má- Ver vídeo on line
quina cortapelo se deben seguir los siguientes pasos (fig. 4). Limpieza de cuchillas.
a b
136
c d
Fig. 4. (a) Limpiar los restos de pelos y detritos tisulares de las cuchillas y de su unión con la maquinilla, con un cepillo pequeño. Hay que asegurarse de que no
haya quedado pelo atrapado entre las cuchillas para que exista un correcto contacto entre ellas y corten correctamente. (b) Sumergir la cuchilla en un producto de
limpieza para cuchillas y hacer funcionar la máquina, teniendo cuidado de no mojar ninguna parte eléctrica de la máquina.Cuando la cuchilla está muy sucia o es
la primera vez que se emplea se puede dejar sumergida varias horas. (c) Secar muy bien la cuchilla con papel. (d) Aplicar un aceite lubricante. Colocar unas gotas
entre las partes deslizantes de la cuchilla y hacer funcionar la máquina unos segundos para que se distribuya bien. No se debe lubricar la cuchilla sin limpiarla
porque los pelos y restos orgánicos absorberán el aceite impidiendo que llegue a las zonas de fricción.
ÍNDICE
Admisión y preparación del paciente / Limpieza y lavado
137
Fig. 1. Tras el rasurado de la zona se realiza una primera limpieza con una solución antiséptica jabonosa empleando gasas de algodón o un cepillo suave.
ÍNDICE 9 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
El paciente se traslada al quirófano de tal forma que no se conta- el paciente y para que el cirujano tenga un acceso fácil al campo
mine el campo operatorio. operatorio (figs. 1 y 2).
A continuación, se procede a la inducción anestésica, intubación El paciente se sujeta e inmoviliza con cintas, sacos de arena, po-
traqueal, conexión a la máquina de anestesia y a su monitoriza- sicionadores de vacío u otros sistemas, pero sin comprometer la
ción. Seguidamente se posiciona de la forma más cómoda para respiración del paciente o la vascularización de la zona.
138
ÍNDICE
Admisión y preparación del paciente / Posicionamiento
Durante la cirugía, se debe colocar una fuente de calor externa Intervención abdominal
junto al paciente para reducir la hipotermia asociada al proceso
La mayoría de los abordajes a la cavidad abdominal se realizan a
anestésico.
través de la línea media. Para ello, se coloca el paciente en decú-
bito dorsal con la región ventral dirigida al techo del quirófano. Si
se utiliza un posicionador, debe ser de tal forma que no interfiera al
Hay que extremar el cuidado con la elección acceso al abdomen.
y funcionamiento de las fuentes de calor para no producir En el caso de los machos, el prepucio se sujeta con una pinza
lesiones cutáneas (fig. 3). de baja presión y se desplaza lateralmente para que no quede ex-
puesto en el campo quirúrgico.
Ver Electrocirugía.
En el libro Cirugía sin sangrado
págs. 136-155
139
Intervenciones
en las extremidades
Cuando se tiene que intervenir una extre-
midad, el paciente se coloca en decúbito
lateral y se suspende la pata de un pie de
gotero para poder desinfectar los 360 ° de
la zona quirúrgica (fig. 4). Esta posición se
mantiene durante el proceso de colocación
de los paños de campo y de la venda co-
hesiva estéril sobre el pie del paciente.
ÍNDICE 9 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Preparación del campo operatorio José Rodríguez, Salvador Guillén, Jorge Llinás
Para evitar que el pelo sin cortar del paciente puedan entrar en el
área quirúrgica se pueden emplear tiras de esparadrapo, gel de El alcohol isopropílico (70 %) no se debe emplear como
ecografía o fijador de pelo (figs. 1 y 2). último antiséptico para la preparación de la piel porque
A continuación, se realiza la preparación antiséptica de la piel con disminuye la efectividad de los antisépticos, tiene efecto
povidona iodada y alcohol isopropílico o una solución de clorhexi- refrigerante, lo que aumenta la hipotermia (sobre todo en
dina al 2 % (mejor si es una solución alcohólica). razas pequeñas), y puede arder si no se ha evaporado cuando
se emplea un equipo de alta energía (electrobisturí, láser).
140
ÍNDICE
Admisión y preparación del paciente / Preparación del campo operatorio
La desinfección de la piel se debe realizar siguiendo este protocolo: realizar en movimiento espiral que parta del centro del área qui-
■■ Utilizar
guantes para reducir la contaminación bacteriana, o una rúrgica (fig. 3) o en líneas paralelas que comiencen en el centro, y
pinza portatorundas estéril. alternativamente se va aplicando y separando a cada lado (fig. 4).
■■ Aplicar
el antiséptico desde la parte central hacía el exterior. Hay ■■ Emplear una gasa o compresa nueva en cada paso.
que tener mucha precaución para no retroceder. Se debe evitar ■■ Evitar
una excesiva irritación de la piel, y que el paciente se moje
pasar de una zona contaminada hacia el área limpia. Se puede innecesariamente.
141
Fig. 4. La desinfección de la piel mediante líneas paralelas comienza en la zona central del área quirúrgica (línea de incisión). A continuación, se desinfecta el resto de la
piel en líneas paralelas alternándolas a cada lado.
ÍNDICE 9 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Paños de campo
El objetivo de los paños quirúrgicos es ac-
tuar como barrera física para evitar la con-
taminación desde las zonas exteriores que
no han sido preparadas asépticamente y
crear un área estéril alrededor del área de
incisión (fig. 5).
No existe un material ideal para los paños de campo, y su elección Manejo y colocación de los paños de campo
dependerá del tipo de intervención quirúrgica, de su localización,
La colocación de los paños de campo la debe realizar un miembro
de las posibilidades de lavandería, esterilización y de los gustos del
del equipo provisto de indumentaria estéril. La técnica para colocar-
cirujano. Existen dos tipos de coberturas quirúrgicas: material tejido
los dependerá del tipo de paños de campo elegidos, de la cirugía
reutilizable y material no tejido de un solo uso. Ambos tipos son
planteada y de la región anatómica del paciente.
barreras aceptables para aislar el campo quirúrgico si se siguen las
Los paños de campo se despliegan con suavidad sin que con-
normas descritas a continuación:
tacte con ningún objeto o superficie. No se deben sacudir para es-
■■ Los paños tejidos reutilizables están confeccionados con varios tirarlos ya que se crearán corrientes de aire que lo contaminarán.
tipos de algodón (mejor de 270 hebras/pulgada) para impedir el
142 paso de gérmenes por los poros en seco, con o sin tratamiento
impermeabilizante. Son muy cómodos y se adaptan muy bien Cualquier paño de campo o parte del mismo que se encuentre
al paciente, pero si se mojan permiten el paso de gérmenes de por debajo de la mesa quirúrgica se considera no estéril ya
otras partes del paciente hacia el área quirúrgica. que no se controla visualmente.
■■ Hay una gran oferta de paños no tejidos de un solo uso. Son re-
comendables los que están formados por dos capas: una interna
impermeable de poliéster que evita la translocación bacteriana, y
otra externa de fibras de celulosa con capacidad de absorción.
■■ Los paños de campo impermeables de una sola capa son in-
cómodos de manipular, se adaptan mal al paciente y acumulan
líquidos que mojan al paciente y a los cirujanos.
ÍNDICE
Admisión y preparación del paciente / Preparación del campo operatorio
143
Fig. 8. Los paños de campo se fijan con pinzas de campo tipo Backhaus que se introducen debajo de los mismos para despejar el campo quirúrgico y evitar que los hilos
de sutura se puedan trabar en ellos. También se pueden emplear puntos de sutura en campos quirúrgicos pequeños o en los que pueden molestar las pinzas de campo.
ÍNDICE 9 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
También se puede emplear un paño o sá-
bana de gran tamaño que cubra todo el
paciente y que tenga una abertura si es
reutilizable. Si es de un solo uso, el ciru-
jano realizará la ventana con unas tijeras
de Mayo adaptada al tamaño de la incisión
que va a realizar (fig. 9).
144
ÍNDICE
Admisión y preparación del paciente / Preparación del campo operatorio
145
ÍNDICE 9 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
a b
146
Fig. 12. El tercer campo quirúrgico se emplea para aislar un órgano y evitar que su contenido pueda derramarse y producir peritonitis.
(a) Aislamiento del estómago fuera de la cavidad abdominal previo a una gastrotomía para extraer un cuerpo extraño.
(b) Aislamiento en el interior del paciente alrededor del hígado para evitar una contaminación peritoneal por bilis al realizar una colecistectomía.
ÍNDICE
Admisión y preparación del paciente / Preparación del campo operatorio
Fig. 15. Una alternativa es colocar un paño de campo sobre la mesa y extremidad
contralateral. A continuación, se dispone otro paño de campo más pequeño sobre
este y el ayudante circulante deposita la extremidad sobre él. Después, el cirujano
rodea la pata con el segundo paño de campo para aislar la zona y lo fija con
pinzas de campo u otra venda cohesiva estéril.
ÍNDICE 9 ÍNDICE
CAPÍTULO
148
Preparación
del personal
quirúrgico
Introducción
ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
págs.
Ver Preparación del quirófano
79-91
ÍNDICE
Preparación del personal quirúrgico / Vestimenta y conducta en el quirófano
Vestimenta y conducta José Rodríguez, Jorge Llinás, Roberto Bussadori, Salvador Guillén
en el quirófano
El maquillaje debe ser mínimo para evitar que pueda contaminar cinta y pasarla por detrás del cuello para evitar que puedan caer
el campo quirúrgico si se desprende de la cara. dentro de la herida.
Cuando se usan gafas se deben limpiar con una solución an- Para entrar en el área quirúrgica, se debe usar una atuendo es-
tiséptica antes de cada intervención. Asimismo, se debe fijar una pecífico (tabla I):
Tabla I.
Ropa Pijama quirúrgico de dos piezas que debe cambiarse cada día.
Zuecos antiestáticos que solo se empleen en el área quirúrgica. En su defecto, usar calzas de un solo uso que se deben
Calzado cambiar antes de entrar al quirófano.
Mascarilla Es necesario que cubra la boca y la nariz. Su eficacia se reduce con el tiempo, sobre todo si se humedece.
Bata quirúrgica estéril Puede ser de tela o desechable y tiene que ser utilizada por todo el personal que esté en contacto con el campo operatorio.
ÍNDICE 10 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Gorro
Se utiliza para evitar la contaminación del campo quirúrgico por
caída de cabello o descamación cutánea. El gorro debe cubrir todo
el pelo desde el nacimiento del cuero cabelludo, incluyendo las pa-
tillas. Al igual que la mascarilla, tiene que colocarse antes de entrar
b
en el área quirúrgica (fig. 2). El gorro quirúrgico es una barrera de
protección, no es un adorno para estar guapa/o.
Fig. 2. El pelo es portador de gran número de bacterias. Por esta razón, la cabeza se
debe cubrir con un gorro por completo. Lo debe usar todo el personal que entra en
152 un quirófano. (a) El gorro cubre todo el cuero cabelludo impidiendo que pelos o
descamaciones cutáneas puedan caer en el campo quirúrgico. (b) En cirugías
de alto riesgo en las que se deben extremar las condiciones de asepsia es
recomendable el uso de gorros tipo yelmo que cubren totalmente la frente, el
cuero cabelludo, la nuca y el cuello, dejando libre solo la cara.
Mascarilla quirúrgica
Se emplea para proteger el área quirúrgica de la contaminación
por aerosol procedente de la boca y nasofaringe de los cirujanos
y ayudantes. Deben estar fabricadas con un material ligero que
permita respirar con facilidad pero que filtre el 99 % de partícu-
las > 5 μm. Para emplearse correctamente se deben seguir estas
recomendaciones:
■■ La banda metálica se dobla sobre la nariz para adaptarse sobre
ella y evitar que el aire respirado salga hacia los ojos. Si a pesar
de esta adaptación se emplean gafas y se empañan, se puede
pegar una tira de esparadrapo entre la mascarilla y la nariz (fig. 3).
ÍNDICE
Preparación del personal quirúrgico / Vestimenta y conducta en el quirófano
■■ Las tiras se anudan sobre la coronilla y el cuello. No se deben
cruzar, ya que de esta manera, los laterales de la mascarilla no se
adaptan a la cara y el aire respirado se escapará por los costados
(fig. 4).
■■ Es imprescindible que las mascarillas se desechen tras la ciru-
gía. Asimismo, no deben dejarse colgando del cuello cuando
se sale del quirófano ya que son una fuente importante de
contaminación.
■■ En cirugías en las que se genera humo (electrocirugía o láser) se
deben emplear mascarillas especiales con mayor poder filtrante.
Fig. 6. Las calzas protegen el calzado de derrame o fluidos y se desechan al Fig. 7. Dentro del área quirúrgica es recomendable emplear calzado cómodo y
finalizar la intervención. antiestático para reducir la fatiga. No se debe usar calzado que deje al descubierto
los dedos, o que tenga la suela lisa para evitar lesiones y caídas. Se recomienda
un calzado exclusivo para esta zona que se limpie con facilidad en caso de
contaminación con sangre u otros fluidos.
ÍNDICE 10 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
en el área quirúrgica
En el área quirúrgica se deben vigilar y extremar al máximo todos los ■■ Mojarselas manos y los antebrazos, manteniendo las manos por
pequeños detalles que puedan influir en la contaminación del pa- encima de los codos.
ciente, por ello es trascendental el comportamiento y la actuación ■■ Enjabonarse las manos y los antebrazos con bastante jabón an-
del personal presente en el área quirúrgica. Entre las normas básicas tiséptico neutro.
para el personal que accede al área quirúrgica hay que recordar:
■■ Con un cepillo suave y estéril, cepillar 20 veces las uñas, cada
■■ No entrar con ropa de calle. uno de los lados de los diez dedos (cuatro caras), las palmas y
■■ Utilizar
ropa específica para esta zona, así como mascarilla, gorro dorsos de las dos manos y a continuación, los antebrazos hacia
y calzas. los codos. Utilizar la parte del cepillo para las uñas y los dedos, y
■■ Conocer y cumplir las normas de la técnica aséptica. la parte de esponja para las manos y antebrazos.
■■ Nosalir con la ropa del quirófano por el centro veterinario, y si se ■■ Nunca retroceder con el cepillo, siempre comenzar en las puntas
hace, se protege con una bata limpia. de los dedos y finalizar aproximadamente a 5 cm del codo.
■■ No comer, ni mascar chicle en el área de quirófano. ■■ Mantener siempre las manos elevadas para que el agua y el ja-
bón escurra por los codos.
Fig. 1. El lavado prequirúrgico de las manos tiene por objetivo eliminar la flora bacteriana de la piel del personal. Se realiza con un jabón antiséptico produciendo abundante
espuma para favorecer la limpieza jabonosa.
ÍNDICE
Preparación del personal quirúrgico / Comportamiento en el área quirúrgica
Fig. 2. Para eliminar el jabón se aclaran las manos con abundante agua manteniéndolas hacia arriba para que el agua discurra hacia los codos. Las manos nunca se
sacuden para eliminar el agua.
155
a b c
d e f
Fig. 3. Las manos se deben secar de forma independiente y lo mejor posible. (a y b) La toalla se extiende completamente debajo de una de las manos. (c y d) Se
secan a conciencia ambas manos con una de las caras de la toalla. (e) Se seca uno de los antebrazos con movimientos oscilantes hacia el codo. (f) Se dobla hacia
el interior la toalla y se seca el otro antebrazo de igual manera. La mano no debe tocar el codo. Nunca se seca o se regresa hacia la mano.
ÍNDICE 10 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
a b
156
Fig. 4. (a) Tras secar las manos concienzudamente se agarra la bata por la parte interna de los hombros y se retira uno de la mesa auxiliar. (b) Se introducen las manos en
las entradas de las mangas y se despliega la bata sin movimientos bruscos para no generar turbulencias de aire y sin tocar el mobiliario cercano o el suelo.
a b
Fig. 5. (a) Se introducen las manos por las mangas correspondientes sin exteriorizarlas por los puños para colocar los guantes siguiendo la técnica cerrada. (b) El ayudante
ayuda a colocar la bata desde la parte posterior y cierra la bata en las zonas del cuello y la cintura. A continuación se calzan los guantes estériles siguiendo la técnica
cerrada para mantener al máximo las condiciones asépticas.
ÍNDICE
Preparación del personal quirúrgico / Comportamiento en el área quirúrgica
a b
157
Fig. 6. Las batas desechables tienen una cinta que el cirujano debe anudar por la parte anterior. (a) Para esta maniobra se sujeta la cartulina por la zona marcada como
estéril, y se separa la parte de la cinta que está enganchada a la parte marcada como no estéril. (b) La cinta desenganchada se sujeta con la mano izquierda, y se ofrece la
cartulina a un ayudante para que la agarre por la zona marcada como no estéril.
a b
Fig. 7. (a) El ayudante rodea el cuerpo con la cinta, el cirujano la agarra, desprendiéndola de la cartulina, y la anuda con el extremo que mantenía con la otra mano. (b)
Finalizada la fase de vestido quirúrgico, la persona estéril sujeta las manos a la altura del pecho y se dirige al campo quirúrgico.
ÍNDICE 10 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
158
ÍNDICE
Preparación del personal quirúrgico / Comportamiento en el área quirúrgica
■■ Lasmismas maniobras se realizan en el
lado izquierdo para colocar el guante de
este lado y quedar listo para la siguiente
fase (figs. 11-14).
159
ÍNDICE 10 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Técnica abierta
■■ Tras el vestido quirúrgico, el personal se dirige al campo opera- La técnica abierta para la colocación de los guantes estériles se
torio con las manos unidas a la altura del pecho. El objetivo es debe limitar a los procedimientos en los que no se viste una bata
tenerlas bajo control visual y evitar que contacten con cualquier estéril o se tenga que poner un guante estéril adicional durante la
superficie u objeto que no sea estéril hasta que comience la inter- cirugía. Se recomiendan seguir los siguientes pasos:
vención con la preparación del instrumental y la colocación de los ■■ Se abre el envoltorio que contiene los guantes para manipularlos
paños de campo (fig. 14). con comodidad. El puño doblado del guante permite manejarlo
por su cara interna evitando que la piel contacte con la superficie
Se considera zona estéril la comprendida entre los hombros y la estéril (fig. 15).
cintura por la parte anterior, incluyendo los brazos y las manos
■■ Se sujeta el guante por el doblez y, sin tocar ninguna otra parte
enguantadas.
del guante, se enfrenta cada dedo en su posición. El dedo pulgar
se separa de la mano para mantener el puño del guante a tensión
(fig. 15), de esta forma será luego más sencillo desdoblar y colo-
Usar dos pares de guantes superpuestos minimiza el riesgo car correctamente el guante en su posición.
de contaminación por perforación del guante, pero también
reduce la sensibilidad del cirujano.
160
Fig. 14. Para mantener bajo control visual las manos y evitar su contaminación inadvertida, se juntan las palmas o se entrelazan los dedos a la altura del pecho. De esta
forma, el personal estéril se dirige al campo operatorio para colocar los paños de campo, preparar el instrumental y empezar la operación. Siempre que se interrumpa la
operación, y haya que esperar, las manos deberán juntarse de esta manera para evitar su contaminación.
Fig. 15. La primera mano se desliza en el interior del guante sin tocar su parte externa. La otra mano sujeta el guante por la parte doblada y tracciona del mismo para
enfrentar cada dedo en su hueco correspondiente. El dedo pulgar debe quedar cubierto por la parte doblada del guante y separado de la mano para facilitar la siguiente
maniobra del enguantado.
ÍNDICE
Preparación del personal quirúrgico / Comportamiento en el área quirúrgica
161
Fig. 17. Los dedos de la mano izquierda atrapan el doblez del guante derecho por su cara externa y lo despliega hacia el brazo cubriendo la mano, el puño y la manga.
Se deslizan los dedos en el interior del guante traccionando desde el exterior con la otra mano y sin tocar la parte interna del guante.
Fig. 18. La mano enguantada sujeta la parte externa del guante doblado de la otra mano y la desdobla sobre el antebrazo cubriendo la muñeca, el puño y la parte distal de
la manga. Se tracciona del puño del guante para desplegarlo sobre la manga completamente.
ÍNDICE 10 ÍNDICE
CAPÍTULO
162
Equipo
quirúrgico.
Normas durante
la cirugía
Introducción
Preparación y organización
del instrumental
ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
164
Fig. 1. Los miembros del equipo no estériles se encargan de anestesiar, posicionar y preparar al paciente sobre la mesa de operaciones, y ayudan a los miembros estériles
a preparar todo el material e instrumental que vaya a ser necesario durante la cirugía.
Fig. 2. Los miembros del equipo quirúrgico estériles son los que preparan y actúan en el campo quirúrgico.
Los miembros no estériles que colaboran, o simplemente observan la cirugía, se deben mantener alejados de la zona estéril al menos una distancia de 50 cm.
ÍNDICE
Equipo quirúrgico. Normas durante la cirugía / Introducción
Durante la cirugía se deben seguir unas reglas estrictas que son 9. El personal estéril debe permanecer en el área cercana al campo
aceptadas por todos los miembros del equipo quirúrgico y que se quirúrgico. Si abandona la zona de seguridad (50 cm alrededor
basan en los siguientes puntos: del campo operatorio), aumenta el riesgo de contaminación. El
1. Superficies estériles solo contactan con superficies estériles. Hay personal estéril no debe salir del quirófano para buscar o pedir
que vigilar que ninguna superficie u objeto no estéril se ponga en material.
contacto con una estéril. Por ejemplo, cuando el ayudante circu- 10. El personal no estéril se encarga de entregar el material necesa-
lante entrega un objeto estéril, su mano no debe contactar acci- rio al equipo quirúrgico. Al abrir el envoltorio externo, la persona
dentalmente con la mesa de instrumental. estéril lo tomará, o bien lo depositará sobre la superficie estéril
2. Un objeto es estéril si ha pasado el proceso correspondiente y su donde no haya otro material.
envoltorio está íntegro. El ayudante circulante debe comprobar 11. El personal quirúrgico y el presente en el quirófano se debe
la integridad del envase del objeto que va a abrir y pasar a los mover lo mínimo posible para no crear corrientes de aire que
cirujanos. pueden vehicular partículas contaminantes a la zona de incisión.
3. Los bordes de los envoltorios se consideran no estériles (2,5 cm 12. En el área quirúrgica está totalmente prohibido comer o mascar
de margen). Cuando se abre y se entrega material estéril, se debe chicle y se debe hablar lo mínimo posible ya que la boca es el
hacer de tal manera que la parte externa no pueda contactar con mayor reservorio de bacterias. Las mascarillas no son eficaces al
el guante estéril o la mesa del instrumental (fig. 3). 100 %.
4. Cuando se vierte un líquido estéril en la batea o riñonera quirúr- 13. La humedad transporta gérmenes de las zonas no estériles ha-
gica, no debe derramarse ni gotear sobre el campo estéril. cia el campo operatorio estéril. Los paños quirúrgicos de tela
5. Si existen dudas sobre la esterilidad de un objeto, se debe con- reutilizables van perdiendo la impermeabilidad con los lavados y
siderar como contaminado. Si se cae al suelo, aunque esté en- esterilización, por eso es recomendable emplear paños estériles
vuelto, se debe retirar, limpiar y esterilizar de nuevo. de un solo uso.
6. De la bata quirúrgica se considera estéril solo la parte anterior, 14. Los paños quirúrgicos, el material y el instrumental, se deben
mangas y la zona comprendida entre la axilas y la cintura. El per- preparar y colocar justo antes del inicio de la cirugía para re-
sonal estéril debe mantener sus brazos y manos por encima de la ducir al mínimo su contaminación por exposición ambiental. Se 165
cintura y por debajo de las axilas (fig. 4). considera que el campo quirúrgico está contaminado al haber
pasado dos horas desde su preparación.
7. Si dos personas estériles deben cambiar posiciones se cruzarán
espalda contra espalda o frente a frente (fig. 4).
8. De las mesas auxiliares solo se considera estéril la parte superior
horizontal. Y su cobertura protectora no se puede mover durante
la cirugía.
Fig. 3. Cuando el ayudante circulante abre un material estéril, debe doblar e Fig. 4. Cuando se cruzan dos personas estériles lo harán siempre poniendo
invertir los bordes del envoltorio para que el ayudante estéril pueda extraer el en contacto las mismas zonas (el pecho o la espalda). En este caso una queda
contenido sin romper la asepsia. enfrentada al campo quirúrgico mientras la otra rota poniendo en contacto las
espaldas.
ÍNDICE 11 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
ÍNDICE
Equipo quirúrgico. Normas durante la cirugía / Ayudante no estéril o circulante
Fig. 2. Para abrir los sobres estériles, el ayudante circulante separa las pestañas
superiores para que el cirujano o su ayudante extraiga el contenido sin tocar la
parte externa del envoltorio.
Distribución de líquidos
Para pasar líquidos al equipo quirúrgico vierte el líquido directa-
mente sobre el recipiente que el ayudante estéril coloca cerca del
borde la mesa auxiliar, o bien lo sostiene en el aire (fig. 4). Durante
esta maniobra, el ayudante circulante debe evitar que el líquido se
derrame sobre la mesa.
ÍNDICE 11 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
El número de ayudantes necesarios dependerá del tipo de opera- ■■ Respondera las complicaciones que surjan durante la cirugía se-
ción y de su complejidad. Normalmente se cuenta con la colabora- gún sus conocimientos y habilidades.
ción de uno o dos ayudantes y un instrumentista. ■■ Tras la cirugía, acompañar al paciente a la hospitalización, ano-
tar y registrar en el expediente las órdenes y pautas terapéuticas
El ayudante estéril y el instrumentista deben seguir los pasos descritos
indicadas por el cirujano durante la recuperación posquirúrgica y
anteriormente en cuanto a su preparación aséptica (lavado de manos,
durante su estancia en el centro veterinario.
colocación de bata y guantes), e inicialmente se encargará de:
■■ Cubrirla mesa de instrumental (mesa de Mayo) con un paño qui-
rúrgico estéril.
Durante la intervención quirúrgica, los ayudantes deben seguir
■■ Recibirel instrumental y material necesario para la intervención estrictamente las indicaciones del cirujano y nunca deben
quirúrgica y organizarlo. tomar una iniciativa sin antes consultar y tener la aprobación
■■ Cubrir al paciente con paños estériles, aislando el área quirúrgica. del cirujano.
■■ Pasaral cirujano el instrumental o material que necesite de forma
correcta.
■■ Ayudar y realizar aquellas maniobras que le encargue el cirujano. Las personas provistas de indumentaria quirúrgica son las encar-
gadas de colocar los campos quirúrgicos y de preparar el instru-
■■ Separarlos tejidos a requerimiento del cirujano manteniéndolos
mental y material estéril que sea necesario para realizar la interven-
protegidos y húmedos.
ción quirúrgica programada. Siempre deben estar de cara al campo
■■ Mantener limpio y ordenado el instrumental, y eliminar los restos quirúrgico, y si se deben cambiar de posición y cruzarse con otra
tisulares de la punta del electrocauterio o pinzas bipolares. persona “estéril”, lo harán de frente, y si es con una persona “no
■■ Solicitarlo que sea necesario al ayudante circulante antes de que estéril”, lo hará de espaldas.
el cirujano lo requiera.
■■ Ayudar a suturar y cortar los hilos de sutura correctamente.
■■ Controlar el material que se utiliza en la cirugía, prestando espe-
cial atención al número de gasas, compresas, agujas, etc. para
que no queden olvidadas en el paciente.
168
ÍNDICE
Equipo quirúrgico. Normas durante la cirugía / Instrumental
del instrumental
El material e instrumental que se va a emplear en una intervención La mesa de instrumental se debe cubrir con un paño de campo
quirúrgica se debe disponer, y mantener durante la cirugía, en un estéril, mejor si se colocan dos capas, siendo la primera de material
orden lógico para racionalizar, aumentar la eficiencia en el trabajo y impermeable. A continuación, el ayudante circulante acerca las ca-
optimizar el tiempo. jas con el instrumental, el ayudante estéril lo recibe y lo ordena en la
Lo ideal es contar con un instrumentista que se encargue de mesa del instrumental en seis zonas (fig. 2):
estas funciones. No obstante, en la mayoría de los centros veteri- ■■ Diéresis.
narios, la instrumentación quirúrgica la realiza el ayudante estéril o
■■ Sujeción.
el propio cirujano. Por este motivo, es tan importante que cuando
algún miembro del equipo quirúrgico use un determinado instru- ■■ Hemostasia.
mento, luego lo vuelva a colocar en su lugar sobre la mesa del ins- ■■ Separación.
trumental. Siempre se debe mantener el orden establecido, es la ■■ Especiales.
única manera para encontrar rápidamente un instrumento cuando
■■ Síntesis.
se tiene que emplear de nuevo (figs. 1 y 2).
La colocación del instrumental se debe realizar para seguir siem-
pre la misma secuencia de uso en relación según donde se dis-
ponga la mesa, siendo la zona de diéresis la que está más próxima
al cirujano.
Los instrumentos deben estar siempre en su lugar específico, No se debe sobrecargar la mesa de Mayo. Es necesario
tanto al principio como durante toda la cirugía, que los instrumentos se mantengan organizados durante
para encontrarlos y usarlos inmediatamente. la cirugía y no “perderlos” en el campo quirúrgico.
169
Fig. 1. En una mesa desordenada y llena de instrumental no es posible encontrar con rapidez un instrumento específico, sobre todo cuando se tiene que localizar con
urgencia.
ÍNDICE 11 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
170
Fig. 2. El instrumental se coloca siguiendo el orden en el que se va a emplear durante la cirugía. Se empieza por la diéresis en la zona más próxima al cirujano, a
continuación, disección y agarre, hemostasia, separación, instrumentos especiales y sutura. Es esta imagen se observa la distribución cuando la mesa del instrumental está
a la izquierda del cirujano. Si estuviese a la derecha se tendría que distribuir el instrumental al revés, estando la zona de diéresis a la izquierda.
ÍNDICE
Equipo quirúrgico. Normas durante la cirugía / Paños de campo
171
Tabla I.
■■ Ya están estériles
■■ Más caros
■■ No hay que invertir tiempo en lavandería ni preparación
Paños desechables para la esterilización
■■ Manejo más incómodo
■■ No se adaptan bien al paciente
■■ Muchos son repelentes al agua
ÍNDICE 11 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
ÍNDICE
Equipo quirúrgico. Normas durante la cirugía / Ayuda y asistencia al cirujano
Bisturí
La hoja del bisturí siempre debe estar bajo control visual para evitar
lesiones inadvertidas.
El ayudante instrumentista sujeta el mango del bisturí dirigiendo
la punta hacia el mismo y el filo hacia abajo (fig. 1a). El cirujano ex-
tiende la mano con el dorso hacia arriba (fig. 1b), y el instrumentista
coloca el mango del bisturí entre los dedos y la palma de la mano,
por lo tanto, el cirujano lo sujeta como si fuese un lapicero para rea-
lizar cortes precisos (fig. 1c) o como un cuchillo de mesa para llevar
a cabo incisiones largas (fig. 1d).
a b
173
c d
Fig. 1. (a) El bisturí se entrega con el mango hacia el cirujano, la hoja debe estar siempre a la vista. (b) El cirujano extiende la mano pronada con el pulgar dirigido hacia las
falanges para mostrar que quiere un bisturí. (c) El bisturí se sujeta como un lapicero para incisiones precisas, o como el arco de un violín para realizar incisiones largas (d).
ÍNDICE 11 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
b c
174
Fig. 2. (a) Para solicitar una pinza hemostática el cirujano extiende la mano supinada. (b) El ayudante le pasa la pinza cerrada dirigiendo las anillas hacia el cirujano.
(c) Los instrumentos curvos se sujetan como se muestra en esta figura para que sean una prolongación de los dedos.
Fig. 3. Las tijeras se piden extendiendo los dedos índice, corazón y pulgar mientras los demás se mantienen doblados.
ÍNDICE
Equipo quirúrgico. Normas durante la cirugía / Ayuda y asistencia al cirujano
Fig. 4. Para solicitar un portagujas con hilo de sutura se muestra la mano con todos los dedos doblados como si lo estuviese sujetando.
175
Fig. 5. La seña para las pinzas de disección es con la mano pronada. Se mantienen doblados los dedos a excepción del índice y pulgar que quedan extendidos, dispuestos
a sujetar la pinza.
ÍNDICE 11 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
La manipulación delicada de los tejidos influye directamente El tejido interno debe tener un aspecto húmedo y brillante,
en una recuperación más rápida, con menor dolor y con menos por ello se debe irrigar periódicamente con suero fisiológico
complicaciones. atemperado.
Los tejidos internos, los músculos y el tejido subcutáneo no están A medida que se profundiza en la disección el campo quirúrgico,
preparados para estar expuestos al medio externo. Si se resecan se va haciendo más angosto, por este motivo será necesaria la se-
se hacen friables, aumentando la lesión y la inflamación local. Para paración e inmovilización de los tejidos (fig. 8). Se pueden emplear
evitar esta complicación se deben irrigar periódicamente y cubrir- separadores autoestáticos o manuales. La técnica de separación
los con compresas humedecidas en suero fisiológico atemperado tisular debe ser delicada, sin un gran esfuerzo para evitar lesiones
(fig. 7). La irrigación periódica del campo quirúrgico también reduce por compresión que produzcan rotura del tejido o isquemia.
la posibilidad de infección, ya que diluye la contaminación bacte-
riana y retira restos tisulares y coágulos de sangre que la favorecen.
176
ÍNDICE
Equipo quirúrgico. Normas durante la cirugía / Ayuda y asistencia al cirujano
Para retirar y contener tejidos en el interior
del organismo se puede emplear una com-
presa humedecida en solución fisiológica,
la mano abierta de un ayudante o valvas
metálicas (fig. 9).
ÍNDICE 11 ÍNDICE
CAPÍTULO
178
Técnicas
quirúrgicas
iniciales
Introducción
Incisión cutánea
Disección y sección
179
Hemostasia
Sutura
ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
En la formación quirúrgica se deben adquirir Para que la técnica quirúrgica sea segura, eficiente y reproducible
(fig. 1), el cirujano debe adquirir y practicar habilidades manuales
una serie de habilidades, manuales y mentales, como: manejo del instrumental, disección y manipulación de los te-
que van a influir directamente sobre el transcurso jidos, hemostasia, sutura, anudado y cierre de las heridas (fig. 2).
de la intervención. Los movimientos no deben
ser necesariamente rápidos, pero sí deben ser
efectivos y con un propósito.
a b
180
Fig. 1. Con el paso del tiempo y la práctica, se van desarrollando habilidades manuales que permiten realizar intervenciones quirúrgicas con precisión y seguridad,
reduciendo al mínimo la posibilidad de complicaciones intraquirúrgicas. En este caso se está realizando una ligadura transfixiante en la arteria renal (a) y la sección
del parénquima hepático en una hepatectomía (b).
Fig. 2. Todos los miembros del equipo quirúrgico deben tener una serie de habilidades manuales básicas, como el manejo del instrumental, el anudado o la técnica de
sutura, que se pueden adquirir en biomodelos. Es muy importante practicar en casa y adquirir destreza y soltura en este tipo de maniobras para que luego las cirugías
sean más seguras y rápidas.
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Incisión cutánea
En todas las intervenciones quirúrgicas hay que realizar una incisión La incisión se realiza con bisturí mediante un corte preciso y per-
cutánea que debe ser apropiada para cada tipo de operación. Su pendicular a la piel, que debe llegar hasta el plano anatómico de-
forma, dirección y longitud estarán relacionadas con la técnica pro- seado con un único corte. Hay que evitar múltiples cortes sobre la
gramada y la profundidad del campo quirúrgico. Una incisión muy misma zona para no incrementar la lesión tisular y el sangrado.
pequeña que se amplía con excesiva tracción, produce desgarro de
los labios de la herida, incrementa el traumatismo tisular causando
mayor dolor posquirúrgico, aumenta los tiempos de recuperación y
cicatrización, y eleva el riesgo de infección local. Una incisión exce-
sivamente grande causa un traumatismo innecesario, aumenta la
hemorragia y la exposición del organismo al exterior (favoreciendo La sección del tejido también se puede realizar
la pérdida de temperatura y de líquidos por evaporación), e in- con electrobisturí, siempre que se utilice la técnica correcta
crementa la probabilidad de contaminación e infección en el área con la mínima potencia posible.
incisional.
Incisión larga
Las incisiones largas se realizan con ho-
jas de bisturí de los números 20, 21 o 22,
montadas en un mango del número 4, de-
pendiendo del tamaño del paciente de la
longitud del corte.
181
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
En estos casos se emplea la parte central y convexa de la hoja para Incisión de precisión
que exista mayor contacto entre el bisturí y el tejido. De esta forma,
Para realizar incisiones cortas y muy precisas, el bisturí se maneja
se consigue una mayor estabilidad de la hoja cuando se realizan
como un lapicero (fig. 4), y se emplean hojas de bisturí del 10, 11 y
incisiones largas, como en una laparotomía (fig. 3).
15 montadas en mangos de los números 3 o 7, o bien la punta de
El corte es efectivo si la piel esta en tensión. Para ello, el cirujano y el
las hojas mencionadas anteriormente.
ayudante traccionan de la piel con sus dedos (fig. 1), o bien el cirujano
El corte se realiza moviendo tan solo los dedos y manteniendo la
lo hace con los dedos índice y pulgar de su mano no dominante (fig. 2).
piel tensa, como por ejemplo en la corrección de un entropión pal-
Al mantener tensa la piel, el cirujano puede observar la profundidad del
pebral. En otras situaciones, el corte se debe realizar con decisión
corte que está realizando para así aplicar mayor o menor presión sobre
y energía, como cuando se quiere incidir un órgano hueco como el
el tejido. Se realiza un movimiento continuo y fluido del brazo, de tal
estómago o la vejiga, ya que si se titubea la mucosa se desprende
forma, que nada se interponga entre la vista del cirujano y el bisturí.
de la capa submucosa y no se llega al interior del mismo (fig. 5).
a b
182
Fig. 3. (a) El corte siembre debe ser perpendicular al tejido y (b) las incisiones largas se deben realizar con la parte convexa de la hoja manteniendo el máximo contacto con
el tejido.
Fig. 4. La sujeción del bisturí como un lapicero, moviendo tan solo los dedos, es Fig. 5. Las incisiones en órganos huecos, como estómago o vejiga, se deben
la técnica elegida para realizar incisiones cortas y precisas. En este caso se está realizar con decisión para seccionar de un solo movimiento todas las capas
incidiendo la piel de un párpado para corregir un entropión. anatómicas. Si se realiza con timidez, es muy probable que la mucosa se separe
de la submucosa complicando seriamente el acceso a la luz del órgano.
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Disección y sección
183
a b
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Disección cortante
La disección cortante se realiza principalmente con tijeras. Se corta El corte con tijeras se tiene que realizar con la punta de la misma. Si
el tejido, que previamente ha sido identificado y expuesto, asegu- se emplea la zona más próxima a la bisagra, la atención del cirujano
rándose que no se lesionan otras estructuras anatómicas (fig. 1). se centra en esta zona y, al cerrar la tijera, la punta puede lesionar
Para disecar y seccionar tejidos amplios y resistentes, se em- otro tejido porque no se tiene bajo control visual.
plean las tijeras de Mayo (fig. 2); o las tijeras de Metzembaun La disección cortante también se puede realizar deslizando las
cuando se disecan tejidos finos y delicados (fig. 3). ramas semiabiertas de la tijera sobre el tejido con un movimiento
continuo, como por ejemplo cuando se diseca el tejido subcutáneo
de la línea media antes de realizar una laparotomía (figs. 2 y 3).
Las tijeras curvas ofrecen mayor maniobrabilidad y visibilidad
en campos profundos. Las tijeras rectas son más cómodas
en tejidos superficiales.
184
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Disección y sección
Disección roma
La disección roma se realiza como fase previa a la sección cortante el instrumento con las ramas abiertas para romper el tejido, pero el
para identificar y asilar el tejido correctamente antes de seccionarlo, autor considera que esta maniobra aumenta el riesgo de lesionar
o bien sobre tejidos delicados en los que la disección cortante es una parte del tejido que no se observa correctamente, por eso re-
peligrosa. comienda extraer el instrumento cerrado.
Normalmente se emplean tijeras o pinzas anguladas (disectores) La disección roma también se puede realiza con torunda de gasa
cuyas ramas se introducen en el tejido cerradas, se abren para se- húmeda (bola de Kuttner), bastoncillo de algodón, que también sir-
parar sus fibras, se cierran y se extraen cerradas para repetir otra ven para realizar hemostasia, o los dedos del cirujano (figs. 5 y 6).
vez esta maniobra (fig. 4). Algunos cirujanos recomiendan extraer
185
Fig. 5. Disección de una masa en el mediastino caudal adherida al diafragma Fig. 6. La disección roma digital es un método excelente para separar planos
empleando bastoncillos de algodón estériles para evitar lesionar el nervio vago tisulares delicados y frágiles, consiguiendo buena exposición con mínimas
que se identifica con la cinta vascular amarilla que se observa en la imagen. pérdidas de sangre y lesión tisular. En esta imagen se están separando las
adherencias que unían un absceso intraabdominal a un segmento intestinal.
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
186
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Hemostasia
187
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
188
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Sutura
La sutura es la fase de la intervención en la que se aproximan los Sujeción de la aguja con el portagujas
tejidos que fueron seccionados con el fin de garantizar y acelerar la
Al abrir el sobre de la sutura como indica el fabricante se puede
cicatrización. Se buscan estos objetivos:
prender correctamente la aguja por su parte central con el portagu-
■■ Correcto enfrentamiento y aproximación de los bordes de la jas sin tenerla que manipular (fig. 1). Este es el punto donde normal-
herida. mente se debe inmovilizar la aguja.
■■ Estabilizar
el tejido, sin producir isquemia por excesiva compre- No obstante, se puede fijar junto al mandril cuando se suturan te-
sión, mediante la aplicación de la tensión adecuada. jidos delicados en campos profundos en los que la sutura se debe
■■ Reducirel traumatismo tisular colocando el mínimo número de realizar con precisión y delicadeza (fig. 2); o se prenderá cerca de
puntos que sean necesarios para conseguir la correcta inmovili- la punta de la aguja cuando se vaya a suturar un tejido duro, así se
zación de los labios de la herida. puede realizar mayor fuerza y control sin que la aguja se descolo-
que en el portagujas y se reduce la posibilidad de rotura. (fig. 3).
■■ Minimizar la posibilidad de contaminación/infección de la misma,
para ello, no se debe dejar el nudo encima de la herida suturada.
189
Fig. 2. Para realizar una sutura con precisión en tejidos delicados y profundos, se Fig. 3. Cuando la aguja se sujeta cerca de la punta, el brazo de palanca es menor,
sujeta la aguja por la zona proximal para tener mayor longitud útil en el paso de la por lo que se puede hacer más fuerza para atravesar tejidos resistentes sin que
aguja. Sin embargo, la posibilidad de descolocación y rotura de la aguja es mayor. se descoloque la aguja. En este caso, se requieren varios giros del portagujas para
hacer pasar toda la longitud de la aguja.
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Técnica de sutura
Se puede realizar una sutura continua o discontinua dependiendo ■■ Tras
pasar al otro lado, inmovilizar la aguja con la pinza de mano
del tejido y de los gustos del cirujano. En cualquier caso, se deben lo más lejos posible de la punta para no estropearla.
seguir las siguientes recomendaciones para realizar una correcta ■■ Destrabar el portagujas, liberar la aguja, desrotar la mano y volver a
sutura con el mínimo traumatismo para el tejido: sujetar la aguja al otro lado. Hay que evitar que el portagujas sujete
■■ Inmovilizar
el tejido con una pinza de mano cuando va a ser atra- y dañe la punta de la aguja.
vesado por la aguja. En tejidos resistentes, como la piel, se usará ■■ Repetir el movimiento de prono-supinación para terminar de pa-
una pinza con dientes, mientras que en un tejido delicado se em- sar la aguja (fig. 5).
pleará una pinza sin ellos (fig. 4).
■■ Teneren cuenta que las agujas rectas se avanzan con un movi-
■■ Atravesar el tejido con la aguja de forma perpendicular siguiendo miento rectilíneo y perpendicular a los labios de la herida (fig. 6).
la curvatura de esta. Con agujas curvas, la mano realiza un mo-
vimiento de prono-supinación, para que la aguja avance a través
del tejido siguiendo su curvatura.
190
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Sutura
Fig. 5. Para atravesar el tejido con una aguja curva, se aplica la fuerza en la misma dirección que la curvatura de la aguja para atravesar el tejido con el mínimo
traumatismo. Debe evitarse tirar de la aguja en sentido perpendicular a la herida.
191
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
No forzar el paso de la aguja a través del tejido, se puede Los cirujanos noveles piensan que al realizar muchos puntos
doblar e incluso romper. Si la aguja está doblada o su punta de sutura y apretar con fuerza los nudos, la sutura queda
alterada, se debe emplear una sutura nueva. más estable y segura. Nada más lejos de la realidad.
■■ Calcularque la distancia entre la entrada y la salida de la aguja en que puede producir su invaginación y evitar una posible contamina-
ambos lados de la herida, debe ser idéntica para que la presión ción de la herida por cúmulo de suciedad en el nudo (fig. 7).
sea la misma.
■■ Mantener la misma separación entre punto y punto. La distribución
Cuando el cirujano tiene poca experiencia los errores más comunes
equidistante entre los puntos de sutura en una herida, minimiza la al suturar un tejido pueden ser:
lesión tisular y la correcta inmovilización durante la cicatrización. ■■ Emplear demasiados puntos de sutura para aproximar los bordes
■■ Losnudos de los puntos deben quedar a un lado de la herida. De de la herida, lo que causa excesivo traumatismo e inflamación del
esta forma, se evita el efecto mecánico sobre los labios de la herida tejido (fig. 8).
192
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Sutura
Punto simple
Tabla I.
Es el punto más empleado porque se realiza con facilidad. Se emplea
Comparativa entre las suturas continuas y discontinuas tanto en vísceras, pared abdominal, tejido subcutáneo, como en piel.
Los puntos de entrada y salida deben guardar la misma distancia con
Continua Discontinua respecto a los labios de la herida (3-5 mm), y es la misma que debe
Precisión en la marcar la separación entre puntos sucesivos (fig. 7). Cuando se emplea
aproximación de los bordes ** **** en la piel, es importante que exista cierto grado de eversión de los labios
de la herida. Para conseguirlo, la aguja debe entrar y salir en el tejido
Seguridad y estabilidad
de la sutura ** **** con un ángulo superior a 90 ° (fig. 9). Si no se realiza así, los labios de la
193
90º
Fig. 9. La aguja debe entrar y salir del tejido con un ángulo de 90 ° o superior. De este modo, se conseguirá que los bordes de la herida se aproximen correctamente evitando que se inviertan
al incluir mayor cantidad de dermis.
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Sutura
Punto recurrente
Los patrones de colchonero, tanto vertical, horizontal como cru-
zado (en X), son muy resistentes a la tracción de los bordes de la
herida, y se emplean para evitar la dehiscencia de la sutura.
En la piel, los autores emplean con frecuencia el punto recurrente
vertical o “cerca-cerca, lejos-lejos” con el que se logra un correcto Los puntos recurrentes verticales son más difíciles de quitar
enfrentamiento de los labios de la herida y una mayor superficie de tras la cicatrización porque hay menos sitio entre el hilo
contacto estable, por lo que se reduce el número de puntos nece- y la piel para poder introducir la tijera.
sarios (fig. 12).
a b
195
c d
Fig. 12. (a) El punto comienza muy cerca del borde de uno de los labios de la
herida (1-2 mm). (b) A la misma distancia, la aguja atraviesa el otro borde de la
herida. (c) Se tracciona del hilo para mantener la piel tensa. A cierta distancia
(0,5 -1,0 cm) y perpendicularmente, se introduce la aguja en este mismo
lado de la herida. (d) La aguja atraviesa la herida y se exterioriza en un punto
equidistante al punto de introducción anterior. (e) Se realiza el nudo con varias
lazadas para estabilizar el punto.
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Suturas continuas
Las suturas continuas se realizan con ma-
yor rapidez y distribuyen mejor la tensión a
lo largo de la herida. Normalmente, se em-
plean para cerrar heridas internas, ya que
si se usan en el exterior la posibilidad de
rotura y dehiscencia de la sutura es mayor.
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Sutura
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Gasas y torundas
Las gasas y compresas no tejidas desprenden menos pelusa, ab- Las gasas quirúrgicas son más pequeñas y más populares en ci-
sorben más líquido o sangre, son más suaves y flexibles y no se rugía veterinaria (fig. 1). Se emplean principalmente en el control de
adhieren a los tejidos. Pero se resbalan al humedecerse y no son la hemostasia, limpieza del campo quirúrgico (fig. 5) y en tareas de
adecuadas para disecar porque son menos abrasivas. disección (fig. 6).
Es desaconsejable emplearlas sueltas dentro del campo quirúr-
gico ya que se podrían olvidar allí. Además, estas gasas se tiran
Compresas quirúrgicas frecuentemente a la basura durante la cirugía, lo que dificulta el con-
Las compresas quirúrgicas (fig. 2) se emplean principalmente en ciru- taje de todas ellas al finalizar el procedimiento para comprobar que
gía abdominal y torácica para proteger los tejidos expuestos al exterior no se ha dejado ninguna en el paciente.
198 (fig. 3), así como para secar un campo quirúrgico profundo ya que Es aconsejable utilizar gasas y compresas quirúrgicas con una
cada una de ellas absorbe aproximadamente 100-150 ml de suero o alta densidad de hilos por cm2 (>18 hilos/cm2).
sangre. Gracias a su superficie rugosa son muy útiles para inmovilizar Para realizar disecciones delicadas y hemostasia por compre-
órganos y vísceras, evitando que se deslicen dentro del campo opera- sión (fig. 6) es preferible emplear torundas. Las torundas se pueden
torio (fig. 4). En todos estos casos se deben emplear humedecidas en comprar ya confeccionadas (fig. 7) o se pueden realizar manual-
suero estéril atemperado para proteger y no lesionar los tejidos. mente a partir de gasas quirúrgicas.
a b
Fig. 1. Gasas quirúrgicas: (a) Gasa tejida (algodón 100 %). (b) Gasa no tejida Fig. 2. Compresas de algodón 100 % con los bordes ocultos y cosidos para evitar
(poliéster y rayón). Las gasas de algodón pueden deshilacharse durante su la pérdida de hebras en el campo operatorio. Ambos tipos tiene un marcador
manipulación. radiopaco para poderlas identificar en una radiografía. La cinta cosida en la
compresa de la izquierda también sirve para fijarla con una pinza a los paños de
campo e identificarla mejor durante la cirugía.
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Hemostasia. Gasas. Compresas. Torundas
Fig. 3. Las compresas quirúrgicas se emplean para Fig. 4. Las compresas evitan que las asas intestinales se deslicen hacia el campo quirúrgico, facilitando las
proteger los tejidos expuestos al medio exterior y maniobras del cirujano. En este caso se está colocando un anillo de ameroide alrededor de una comunicación
para favorecer la hemostasia por presión sobre porto-sistémica localizada en la curvatura mayor del estómago.
la superficie hemorrágica. En este paciente se
realiza una esternotomía media. Las compresas
colocadas favorecen la hemostasia de las esternebras
seccionadas y protegen al esternón durante la cirugía.
199
Fig. 5. Con mucha frecuencia el ayudante utiliza una Fig. 6. En este caso se está empleando una torunda de gasa (flecha amarilla), sujeta con una pinza portatorundas,
gasa para realizar hemostasia por compresión de para realizar hemostasia y disección roma de las adherencias del lóbulo derecho del páncreas al tejido que lo
pequeños vasos sangrantes y mantener el campo rodea (flecha azul).
quirúrgico limpio. De esta forma el cirujano puede
trabajar con comodidad y precisión, como se puede
observar en esta imagen durante la realización de
una toracotomía lateral.
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
200
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Hemostasia. Gasas. Compresas. Torundas
Técnica para la realización de una torunda de gasa con pinzas (Fig. 10)
1 2
3 4
201
Paso 1: se coloca la gasa con los bordes cortados hacia arriba para que no se
puedan soltar hilos en al campo quirúrgico.
Paso 2: se doblan hacia el interior cada una de las esquinas de la gasa.
Paso 3: las cuatro esquinas de la gasa se encuentran en el centro y quedan
fijadas por la pinza portatorundas.
Paso 4: para compactar la torunda se vuelven a doblar las esquinas hacia el
interior.
Paso 5: la pinza portatorundas inmoviliza la gasa que ya está lista para usarse
como torunda.
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
1 2
Paso 1: desplegar completamente la gasa. Paso 2: doblar una esquina sobre la opuesta.
202 3 4
Paso 3: doblar el lado más largo dos veces hacia la esquina superior. Paso 4: se sujeta la gasa por la mitad con los dedos índice y corazón.
5 6
Paso 5: los extremos libres se anudan o se retuercen. Paso 6: se juntan las dos puntas.
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Hemostasia. Gasas. Compresas. Torundas
7 8
9 10 203
Pasos 9 y 10: se estira de la esquina superior, se introduce donde estaba el dedo índice y se envuelve con ella el rollo que se había formado anteriormente.
11 12
Pasos 11 y 12: se gira hacia fuera el doblez inicial que hicimos para envolver el resto. Queda concluida la torunda crisálida.
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
* Gossypiboma, término derivado del latín gossipium que significa algodón y del Kiswahili, boma, que significa a “place of concealment” (conceal: ocultar, disimular;
sitio donde se oculta o disimula algo).
Fig. 12. La limpieza y hemostasia del campo quirúrgico con torunda se realiza Fig. 13. Extracción de una gasa abandonada en una paciente a la que se le había
haciendo compresión perpendicular y directa sobre el vaso sangrante, no se debe realizado una ovariohisterectomía unas semanas antes. La eliminación completa
realizar una limpieza por arrastre. de la cápsula del textiloma no se realizó por las adherencias existentes entre los
órganos vecinos (intestino, colon, vejiga, uréteres).
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas iniciales / Hemostasia. Gasas. Compresas. Torundas
Tabla I.
1. Contar las gasas antes y después de la cirugía. Utilizando paquetes con un número determinado, por ejemplo 4 compresas y 10 gasas.
2. Revisar periódicamente el campo operatorio buscando gasas escondidas.
3. Retirar inmediatamente las gasas pequeñas una vez usadas y llenas de sangre. No tirarlas directamente al cubo de la basura.
4. No dejar una gasa en el interior del paciente para hacer hemostasia.
5. El instrumentista debe hacer recuento periódico del material empleado y recordar al cirujano las gasas y compresas que está utilizando en el campo
operatorio y que deben ser devueltas.
6. En lugares profundos, sujetar la torunda a una pinza de forcipresión.
7. No dejar gasas usadas sobre los paños de campo, ni cerca del campo operatorio
8. Utilizar compresas quirúrgicas de mayor tamaño, se visualizan mejor, sobre todo las que tienen una cinta cosida.
9. Recontar gasas y compresas antes de proceder al cierre del campo operatorio.
10. Usar gasas y/o compresas con marcadores radiopacos ya que se localizan fácilmente en una radiografía posquirúrgica en caso de duda.
ÍNDICE 12 ÍNDICE
CAPÍTULO
206
Posoperatorio.
Cuidados
y control
Introducción
Apósitos y vendajes
Identificación de complicaciones
Micolas/shutterstock.com
Cuidados en casa
Retirada de puntos
ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
208
ÍNDICE
Posoperatorio. Cuidados y control / Apósitos y vendajes
Tras finalizar la cirugía, la herida se debe cubrir y proteger con un 2. Contribuir a evitar el autotraumatismo del paciente tras la cirugía.
apósito simple (capa no adherente + capa absorbente + capa ad- 3. Inmovilizar la zona para favorecer la reparación cutánea y/u
hesiva). Podría no sustituirse pasadas 24 h cuando la fibrina ha se- osteoarticular.
llado la herida, pero es mejor cambiarlo con frecuencia (fig. 1).
4. Contribuir a controlar el dolor del paciente durante su recupera-
ción, sobre todo en casos de fracturas (ya que el vendaje limita el
movimiento).
Los apósitos se cambian cada 24-36 h, o con mayor frecuencia
5. Desbridar heridas abiertas y contaminadas (empleo de un ven-
si la herida es muy exudativa para mantenerla limpia y seca.
daje húmedo-seco).
6. Absorber exudados, bacterias y detritos tisulares procedentes de
la herida para favorecer su cicatrización.
Objetivos de los apósitos y vendajes
7. Reducir el riesgo de edema, seroma y hemorragia. El vendaje no
Los apósitos y vendajes tienen como objetivos: sustituye a una correcta técnica quirúrgica pero puede contribuir
1. Proteger la herida: evita la contaminación de una herida quirúr- a ello. La presión debe ser la justa y controlada para no producir
gica y favorecer la cicatrización. problemas vasculares, isquemia y necrosis (fig. 2).
209
ÍNDICE 13 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
a b
210
c d
Fig. 4. La cicatrización por segunda intención se favorece con el empleo de una capa interna como hidrogel (a) que absorbe exudados y reduce el edema, una capa intermedia
que absorbe y retiene fluidos (b), y una capa externa que inmoviliza las capas anteriores al tiempo que acolcha la zona y la protege de traumatismos externos (c y d).
ÍNDICE
Posoperatorio. Cuidados y control / Apósitos y vendajes
La capa secundaria tiene como objetivos
principales absorber exudados, acolchar y
proteger la herida distribuyendo la presión
en caso de ser necesaria (vendaje de Ro-
bert Jones). Se pueden emplear distintos
materiales dependiendo de la zona y del
objetivo del vendaje (fig. 5).
211
Realización de un vendaje
La realización de un vendaje correcto es un arte, es más com-
plicado de lo que parece para que quede bien, sea estable en el
tiempo, cumpla los objetivos buscados y que no cause complica-
ciones (figs. 4d y 7).
Fig. 7. La capa externa del vendaje se debe realizar con mucha precisión y
seguridad para que sea estable. Se debe inspeccionar periódicamente para que
produzca las mínimas molestias y no existan complicaciones secundarias.
ÍNDICE 13 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
En cualquier tipo de vendaje se debe prote-
ger correctamente los relieves óseos. Para
ello, en estas zonas se aumenta el almoha-
dillado o se coloca alrededor soportes tipo
“donut” que impidan el contacto directo del
relieve óseo con el suelo (fig. 8).
1 2
212
Fig. 9.1. Se colocan unos rollitos de algodón entre los dedos para evitar que se Fig. 9.2. Se pegan dos tiras largas de esparadrapo sobre la piel sana en la parte
lesionen entre sí y que se claven las uñas cuando el vendaje esté acabado. lateral y medial o craneal y caudal. Las partes no adheridas a la piel luego se
pegarán sobre el vendaje para evitar que se deslice distalmente.
3 4
Fig. 9.3. Los extremos del esparadrapo se adhieren a una lámina de plástico Fig. 9.4. Se extiende la capa intermedia del vendaje, que es la que aporta
para que sea más fácil separarlos posteriormente. absorción, inmovilidad y acolchado. Esta capa se realiza con abundante algodón
o venda sintética de almohadillado. Se debe distribuir uniformemente sobre toda
la longitud de la extremidad y sin comprimir.
ÍNDICE
Posoperatorio. Cuidados y control / Apósitos y vendajes
5 6
Fig. 9.5. Para aumentar el acolchado e incrementar la “dureza” del vendaje, se pueden Fig. 9. 6. Para estabilizar esta capa y hacer la compresión del vendaje, se
colocar otras capas de algodón sobre la capa intermedia dispuesta anteriormente. emplea una venda de gasa empezando por la zona distal. Cada vuelta solapa el
50 % de la anterior.
7 8 213
Fig. 9.7. Se separan las tiras de esparadrapo y se fijan sobre el vendaje. De esta Fig. 9.8. Finalmente se coloca la capa externa empleando una venda cohesiva. El
forma se evita que se deslice distalmente y pierda su efectividad. vendaje empieza en la parte distal, y al ir avanzando cada vuelta de venda cubre el
50 % de la anterior. Para aplicar esta venda se debe desenrollar aproximadamente
9 una longitud de 20-30 cm para evitar una excesiva tensión y compresión.
ÍNDICE 13 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
1 2
214
ÍNDICE
Posoperatorio. Cuidados y control / Prevención del autotraumatismo
215
Fig. 2. Los collarines cervicales sirven para inmovilizar el cuello con un objetivo terapéutico, o para evitar que el paciente lo doble y pueda lamerse las heridas.
ÍNDICE 13 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Camisetas
Existen camisas o protectores comercia-
les que se colocan alrededor del cuerpo
para evitar que el paciente pueda acceder
a heridas en el abdomen o el tórax. Como
alternativas se pueden emplear camisetas
de algodón ceñidas al cuerpo con nudos o
imperdibles, o un “body de bebé” depen-
diendo del tamaño del paciente (fig. 4).
216
Apósitos y sustancias
antilamido
Sobre el vendaje se pueden colocar par-
ches adhesivos que contienen sustancias
naturales que son desagradables para el
gusto del paciente y por eso, este rehúsa
lamer el vendaje sobre el que se colocan.
Como alternativa, se puede aplicar so-
bre el vendaje, y nunca directamente sobre
la herida: cayena, pimienta, tabasco, mez-
cla de vinagres (2⁄3 vinagre manzana + 1⁄3 vi-
nagre vino blanco) o zumo de limón. Nadezhda V. Kulagina/shutterstock.com
ÍNDICE
Posoperatorio. Cuidados y control / Identificación de complicaciones
Durante la recuperación posquirúrgica, la estancia en el hospital y A continuación se explicarán las complicaciones más frecuentes.
los días siguientes, es necesario revisar periódicamente al paciente
para identificar posibles complicaciones como: Seroma
■■ Hemorragia.
El seroma es un cúmulo de exudado, posiblemente debido a una
■■ Inflamación.
excesiva manipulación y traumatismo del tejido durante la cirugía.
■■ Seroma. Absceso. Esta colección de líquido causa aumento de volumen debajo de la
■■ Secreción. piel o puede drenar a través de la herida. Aparece a partir del se-
■■ Separación de los labios de la herida. gundo o tercer día tras la cirugía.
Los autores lo tratan inicialmente con paños de agua caliente
■■ Cambios de color en la piel (pálido=poco aporte sanguíneo;
sobre la zona para favorecer la absorción. Cuando el seroma es
negro=necrosis).
voluminoso y no responde al tratamiento conservador, está indicada
■■ Mal olor. la punción-aspiración del mismo, siempre bajo condiciones asépti-
■■ Fiebre. cas para evitar una contaminación secundaria y la transformación
■■ Exceso de tensión en los bordes de la herida. en absceso (fig. 1).
■■ Dehiscencia de la sutura.
217
Hemorragia - hematomas
La hemorragia posquirúrgica puede deberse a la recuperación de la
tensión arterial tras la anestesia, o a un fallo en la hemostasia de va-
sos importantes (fig. 2). Es más frecuente en la cirugía oral y uretral
debido a la gran vascularización de estos tejidos y a la facilidad para
el sangrado si se pierde el tapón plaquetario inicial en las primeras
horas del posoperatorio (fig. 3).
Si la hemorragia es leve y superficial, se puede controlar me-
diante un vendaje compresivo que se debe vigilar con mucha fre-
cuencia. Si la hemorragia es más intensa y duradera, se deberá re-
intervenir al paciente para identificar el vaso sangrante.
ÍNDICE 13 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
218
ÍNDICE
Posoperatorio. Cuidados y control / Identificación de complicaciones
Infección
La infección de la herida quirúrgica está asociada a dolor, leucoci-
tosis, aumento del catabolismo, proteólisis y posible fracaso de la
intervención quirúrgica.
La posibilidad de infección aumenta en cirugías muy prolonga-
das, mala manipulación de los tejidos, cirugía de tejidos infectados
y mal vascularizados, en el abordaje de órganos huecos, así como
en pacientes que se lamen y pueden autoinfectarse (fig. 6).
Si la infección es profunda y se forma un absceso, está indicada
la colocación de drenajes para la eliminación del pus y el trata-
miento local de la infección (fig. 7).
Fig. 5. Extracción quirúrgica de un coágulo de sangre alojado en el tejido
subcutáneo para evitar su contaminación y posible trasformación en un absceso.
219
Fig. 7. Las colecciones de pus se deben drenar para acelerar la recuperación del paciente. En este caso se
observa la colocación de un drenaje de Penrose para evacuar un absceso paralelo a la línea de incisión.
ÍNDICE 13 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Dehiscencia de suturas
La dehiscencia de la sutura es la separación de las capas de la ■■ Cirugíade urgencia en la que no se sigue el protocolo
herida quirúrgica que han sido estabilizadas (fig. 8). Existe riesgo de correctamente.
evisceración si afecta al cierre de una laparotomía. ■■ Infección local.
Los factores que favorecen esta complicación son: ■■ Causas generales como edad, nutrición, enfermedades sistémi-
cas (diabetes…).
■■ Errorestécnicos por emplear demasiados puntos de sutura, ele-
gir mal el material de sutura, englobar poco tejido a cada lado de
la herida y/o apretar excesivamente los nudos.
220
Fig. 8. La tensión excesiva en los bordes de la herida, la compresión excesiva de los puntos de sutura o un número excesivo de ellos, son factores que favorecen isquemia
tisular, necrosis y dehiscencia de la sutura.
ÍNDICE
Posoperatorio. Cuidados y control / Identificación de complicaciones
Retraso en la cicatrización
La principal causa de retraso en la cicatrización es la inversión de Cuando se emplea demasiado material de sutura o no se maneja
los labios de la herida en puntos o grapas cutáneas que no se han correctamente la piel, aumenta la inflamación local y disminuye
colocado correctamente. Al no quedar la dermis y el tejido subcutá- la vascularización, lo que compromete y retrasa la cicatrización
neo correctamente afrontados, la cicatrización es mucho más lenta (fig. 10).
ya que se ha creado un hueco interno que tiene que cicatrizar por
segunda intención (fig. 9).
221
ÍNDICE 13 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Nutrición:
222 ■■ Ofrecer comida en poco volumen y con frecuencia, e ir normalizando la ingesta según
la tolere.
■■ Observar si vomita, tiene nauseas o está inapetente.
■■ Cambiar la dieta si está indicada.
Cuidados de la herida:
■■ Vigilar todos los días la herida para detectar enrojecimiento, inflamación, secreción,
dolor…
■■ Evitar que se chupe o rasque la herida.
■■ Mantener el apósito o el vendaje limpio y seco hasta que se retire.
■■ No bañar al paciente hasta que se quiten las suturas.
ÍNDICE
Posoperatorio. Cuidados y control / Retirada de puntos
La retirada de los puntos suele realizarse entre los 7-10 días tras la
cirugía, aunque en animales más viejos puede retrasarse un poco
más ya que poseen una cicatrización algo ralentizada. En cualquier
caso, tras una cicatrización normal, la retirada de puntos es un pro-
ceso no doloroso ya que, una vez desaparecida la inflamación pos-
terior a la cirugía los puntos de sutura adquieren algo de holgura
permitiendo un corte fácil (con tijeras u hoja de bisturí) y una retirada
de la sutura sencilla (se estira uno de los cabos que quedan sin que
tenga que existir contacto con la piel) (fig. 1)).
Las grapas necesitan una pinza quitagrapas para facilitar su ex-
tracción de manera indolora (fig. 2).
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ÍNDICE 13 ÍNDICE
CAPÍTULO
224
Técnicas
quirúrgicas
básicas
Tubos de alimentación forzada
Laparotomía media
225
Orquiectomía
Ovariectomía/Ovariohisterectomía
ÍNDICE
Bases prácticas en el quirófano
El soporte nutricional enteral está indicado en los pacientes críticos Tubo de faringostomía
con el fin de reducir la morbilidad y la mortalidad. Se recomienda
Está indicado en pacientes anoréxicos o que no pueden ingerir ali-
en los pacientes que no ingieren al menos, el 75 % de su requeri-
mentos por la boca, pero nunca se deben emplear cuando el pro-
miento energético. Los tubos de alimentación forzada se pueden
blema digestivo se localiza en el esófago.
usar durante varios días o varios meses, dependiendo del caso.
Existen sistemas específicos para la colocación de estos tubos, Para la colocación del tubo de faringostomía se debe seguir estos
no obstante, en este capítulo se presentarán las técnicas que se pasos:
pueden realizar con material general.
■■ Tras la anestesia general del paciente, se coloca en decúbito late-
La elección de la técnica que se emplea depende del tipo de
ral derecho y se prepara una zona aséptica de 5x5 cm por detrás
paciente y del segmento digestivo que se quiere evitar.
de la rama mandibular.
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ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas básicas / Tubos de alimentación forzada
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
228
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas básicas / Tubos de alimentación forzada
Esta técnica se puede realizar en el transcurso de una laparotomía o mediante una microla-
parotomía por el lateral izquierdo: 229
■■ Serealiza una incisopunción por el lado izquierdo del abdomen, y con unas pinzas poten-
tes se introduce el tubo de alimentación en la cavidad abdominal (fig. 10).
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
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ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas básicas / Tubos de alimentación forzada
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ÍNDICE 14 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Si se realiza el abordaje a la cavidad abdominal solo para colocar el fibras del músculo oblicuo interno que se observan perpendicu-
tubo de alimentación en el estómago, se lleva a cabo por detrás de lares a las anteriores, y por último se identifica el músculo trans-
la última costilla del lado izquierdo. verso del abdomen cuyas fibras se dirigen perpendicularmente a
■■ Serealiza una pequeña incisión en la piel y los músculos se dise- la línea media (fig. 17).
can en el sentido de sus fibras. ■■ A continuación, se localiza el estómago y una zona de la parte
■■ Primero se encuentra el músculo oblicuo externo cuyas fibras van central de su cuerpo se exterioriza a través de la laparotomía y se
desde el arco costal a la línea media, por debajo se disecan las sutura a los músculos con una sutura continua de material mono-
filamento absorbible (fig. 18).
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ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas básicas / Tubos de alimentación forzada
■■ Seintroduce el tubo de alimentación en el estómago como se sonda y tirar de ella con delicadeza (fig. 20). La herida que queda
describió anteriormente. no se sutura, tan solo se trata con antisépticos tópicos y poma-
■■ Eltubo de fija a la piel con un punto de sandalia romana de mate- das protectoras. De esta manera, el estoma cicatriza en pocos
rial no absorbible grueso (0 o 1 USP) (fig. 19). días. Hay que advertir al propietario que al principio saldrá por
el orificio contenido gástrico y que debe mantener limpia la zona
■■ Cuando se quiere retirar el tubo de alimentación tan solo hay que
mientras cicatriza.
cortar el punto de sandalia romana, deshinchar el balón de la
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ÍNDICE 14 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Las intervenciones quirúrgicas más frecuentes que se realizan en Tras la preparación del paciente y el aislamiento del campo quirúr-
la clínica de pequeños animales se llevan a cabo en el interior del gico, se realiza la incisión cutánea en la línea media con un bisturí nº
abdomen, para ello hay que entrar en la cavidad peritoneal. En la 22 o con un electrobisturí (fig. 2).
mayoría de los casos el acceso se realiza con una laparotomía me-
dia a través de la línea alba (fig. 1).
La laparotomía (o celiotomía) media se realiza a través de la línea
alba, que es la fusión de las aponeurosis de los músculos abdomi- La incisión cutánea se debe realizar con decisión
nales. La línea blanca se identifica fácilmente en la parte ventral del para que solo sea un corte. De otra forma se incrementa
abdomen, pero es más difícil de identificar cuanto más caudal es la el traumatismo tisular y la hemorragia.
laparotomía.
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Técnicas quirúrgicas básicas / Laparotomía media
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
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ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas básicas / Laparotomía media
Durante la laparotomía se deben proteger los órganos ■■ Exploración del duodeno y del páncreas. Con relación al pán-
abdominales de la desecación con compresas quirúrgicas creas se debe manipular lo mínimo posible y se debe proteger de
y/o suero fisiológico estéril atemperado. lesiones externas.
■■ Traslocalizar el ligamento duodenocólico que fija el duodeno al
techo abdominal, se continúa la exploración del yeyuno e ileon
En el caso de ser una laparotomía exploratoria, se debe realizar la hasta la válvula ileocecocólica. Durante esta maniobra, se com-
inspección precisa de los órganos abdominales de una forma siste- prueba la continuidad del tubo digestivo, su correcta vasculariza-
mática siguiendo este protocolo: ción, la ausencia de defectos en el mesenterio y el estado de los
■■ Extracción cuidadosa del bazo fuera de la cavidad abdomi- nódulos linfáticos regionales.
237
nal, tras su inspección se protege con compresas o paños de ■■ A continuación, se explora el colon hasta la cavidad pélvica.
campo, y se deja a un lado. ■■ Para explorar la glándula adrenal, el riñón, el ovario y el espacio
■■ Visualización e inspección de los lóbulos hepáticos y de la cúpula retroperitoneal del lado derecho, se tracciona del duodeno ha-
diafragmática. Se debe comprobar el estado y permeabilidad de cia la izquierda, o del colon descendente hacia la derecha si se
las vías biliares, vesícula y colédoco. quiere observar el flanco izquierdo.
■■ Inspección del omento, visualización y palpación de todas la par- ■■ Por último, se explora el útero y le vejiga, incluyendo la próstata
tes del estómago. en los machos.
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
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ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas básicas / Laparotomía media
Tabla I.
Monofilamento, absorbible, sintético de 3/0 a 1 USP dependiendo del tamaño y peso del
Material de sutura paciente, sobre una aguja no cortante.
Los puntos se colocan a 5-10 mm del borde de la incisión y se separan unos de otros 239
Distribución de los puntos aproximadamente 3-8 mm.
Tejido suturado Fascia externa de los músculos recto abdominal de cada lado de la laparotomía.
Nudos Realizar 7 lazadas en los nudos de inicio y fin de la sutura para asegurar su estabilidad.
Piel Sutura intradérmica con hilo 3/0-4/0 USP montado sobre aguja de punta triangular.
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
Las razones más frecuentes para castrar a un perro son: control de La castración se puede realizar siguiendo una técnica cerrada o
la población, corrección de desarreglos hormonales y de comporta- abierta. En ambos procedimientos, se empuja uno de los testículos
miento, además de evitar las neoplasias testiculares y la hiperplasia hacia la zona prescrotal para incidir sobre él y evitar lesionar la uretra.
prostática. También está indicada en el tratamiento de adenomas En la técnica cerrada, sin abrir las túnicas testiculares, se identi-
perianales, otras patologías prostáticas, criptorquidia y en la torsión fica el cordón testicular retirando hacia el paciente, la grasa y fascia
testicular (fig. 1). de la túnica parietal con una gasa. En la zona donde el cordón es-
permático se estrecha (fig. 2), se realiza la ligadura en bloque si-
guiendo la técnica de confianza del cirujano.
La orquiectomía puede aumentar el riesgo de carcinoma
Los autores prefieren realizar la técnica abierta porque consideran que
prostático, hemangiosarcoma, osteosarcoma y carcinoma
ofrece mayor seguridad. Para llevarla a cabo se siguen estos pasos:
de células transicionales.
■■ Seavanza el testículo cranealmente, se incide la piel y el tejido
subcutáneo sobre el mismo.
La orquiectomía se puede realizar mediante ablación escrotal ■■ La incisión continúa y se amplia sobre las túnicas vaginal y albugí-
(fig. 2), pero lo normal es llevarla a cabo mediante una incisión pres- nea para exponer el testículo (fig. 4).
crotal por la línea media (fig. 3).
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Técnicas quirúrgicas básicas / Orquiectomía
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Fig. 4. Se inciden las túnicas que recubren el testículo y se amplía con tijeras
para poderlo exteriorizar con facilidad.
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
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Fig. 7. En los vasos testiculares se realiza un nudo de Miller, el cual ofrece una
gran seguridad y estabilidad de la ligadura.
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Técnicas quirúrgicas básicas / Orquiectomía
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Fig. 8. El conducto deferente se ocluye con una ligadura sencilla ya que la presión
vascular es muy baja y la probabilidad de una hemorragia secundaria es mínima.
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
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ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas básicas / Orquiectomía
Consideraciones posoperatorias
La inflamación del escroto puede ser frecuente, sobre todo si la progresivamente y aumenta el volumen de sangre en el abdomen,
incisión afecta al escroto, por esta razón se debe limitar el ejerci- es necesario realizar una laparotomía y explorar la zona próxima a
cio físico, aplicar paños de agua fría y recomendar el uso de collar los riñones para localizar el vaso sangrante.
245
isabelino.
Si se observa hemorragia por la incisión, lo normal es que sea
de origen subcutáneo o de los vasos del septo testicular. Este tipo
de complicación se controla con presión y, si es necesario, con Si se suelta la ligadura de un pedículo vascular testicular
sedación. y el hemoabdomen aumenta, hay que realizar
Muy raramente una de las ligaduras de los pedículos vasculares una laparotomía amplia para identificar los vasos
se puede soltar y sangrar dentro de la cavidad abdominal. En este testiculares en la proximidad de los riñones. No se debe
caso, el paciente debe vigilarse constantemente, realizar hemato- realizar una laparotomía pequeña y perder el tiempo.
critos seriados y controles ecográficos. Si el hematocrito desciende
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CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
La eliminación de las gónadas femeninas está indicada para evitar La cirugía se debe programar cuando la hembra esté en anestro ya
los ciclos ováricos y la gestación no deseada, en la prevención de que los estrógenos aumentan el sangrado del aparato genital y de
las neoplasias mamarias y en la disminución de la probabilidad de tu- la piel, además el útero es más friable durante este periodo.
mores ováricos y uterinos. Asimismo, la ovariohisterectomía está indi-
cada en casos de hiperplasia endometrial quística y piometra (fig. 1). La técnica quirúrgica para la realización de la OH y de la OHT sigue
Para que la hembra no salga en celo se puede realizar una ova- estos pasos:
riectomía (OT) o una ovariohisterectomía (OHT), dependiendo de la ■■ Se realiza una laparotomía en la región umbilical extendiéndose
formación y costumbre del cirujano (en USA realizan normalmente caudalmente entre 5 y 15 cm, según el tamaño de la paciente
OHT, mientras que en Europa la costumbre es realizar OT). (fig. 2).
■■ Deslizando el dedo corazón sobre la pared abdominal, se localiza
La OT también está indicada en pacientes con diabetes el riñón de ese lado. Dirigiendo el dedo caudalmente, se palpa el
mellitus, epilepsia, problemas congénitos de coagulación ovario y la parte proximal del útero, que se atrapa con la yema del
o hiperplasia vaginal. dedo. Se desplaza el cuerno uterino hacia la pared y se desliza
La OT no aumenta el riesgo de piometra si el útero es normal hacia la laparotomía para exteriorizarse (figs. 3 y 4).
en el momento de la cirugía, y es menos traumática que la OHT.
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Técnicas quirúrgicas básicas / Ovariectomía/Ovariohisterectomía
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ÍNDICE 14 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
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Técnicas quirúrgicas básicas / Ovariectomía/Ovariohisterectomía
ÍNDICE 14 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
■■ Laligadura de los vasos uterinos caudales y el cierre del cuerpo ■■ Si el útero es patológico, se recomienda el cierre completo del
del útero se puede realizar de diferentes maneras según el ta- muñón uterino mediante una sutura continua. En estos ca-
maño de la paciente y los gustos del cirujano: sos los autores recomiendan realizar una sutura de Parkerker
■■ En animales de pequeño tamaño con el útero normal, se pue- (fig. 12).
den realizar dos ligaduras simples en el bloque del útero y los
vasos uterinos (fig. 10).
■■ Cuando el útero es de mayor tamaño y está sano, se realizan En la ligadura transfixiante o en la sutura del útero se puede
dos ligaduras transfixiantes que se solapan en la parte central producir desgarro del tejido o una hemorragia vaginal.
del útero (fig. 11).
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Fig. 10. En animales pequeños se puede realizar la ligadura en bloque del cuerpo Fig. 11. Para la hemostasia y cierre del cuerpo del útero, cuando no existe
uterino junto a los vasos uterinos caudales. La sección se realiza a nivel del cuello patología, se pueden realizar dos puntos transfixiantes entrelazados en la parte
uterino. central.
ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas básicas / Ovariectomía/Ovariohisterectomía
Fig. 14. Si la arteria ovárica se rasga o se suelta la ligadura, se produce una Fig. 15. Si se emplea material de sutura no absorbible en las ligaduras, se pueden
hemorragia importante que requiere actuar con rapidez y precisión. La primera formar granulomas de cuerpo extraño que fistulizan hacia la pared abdominal.
maniobra es compresión en la fosa renal para cohibir el sangrado, y después se
localiza el foco hemorrágico.
ÍNDICE 14 ÍNDICE
CAPÍTULO
Bases prácticas en el quirófano
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ÍNDICE
Técnicas quirúrgicas básicas / Ovariectomía/Ovariohisterectomía
■■ Remanentes ováricos que van a mantener la actividad hormo- gran tamaño. Se debe a la laxitud de los ligamentos que mantie-
nal de la hembra. Esta complicación se presenta principalmente nen la vejiga en la cavidad abdominal. La vejiga se desplaza cau-
en hembras obesas en las que es difícil la disección del pedículo dalmente (vejiga pélvica) y se acorta la longitud de la uretra, lo que
vascular y no se extirpa todo el tejido ovárico (más frecuente en provoca una menor resistencia a la presión vesical. El tratamiento
el lado derecho por su localización anatómica), o porque un frag- en estos casos se centra en la administración de fenilpropanola-
mento del ovario cae en la cavidad abdominal y se revasculariza. mina o estrógenos. También se ha propuesto la colposuspensión
Estas pacientes se deben reintervenir cuando están en estro para mediante fijación del muñón uterino al ligamento prepúbico du-
poder visualizar mejor el remanente ovárico o los vasos asocia- rante la OHT para reducir al mínimo el desplazamiento caudal de
dos (fig. 19). la vejiga.
■■ Incontinenciaurinaria. Puede ser secundaria a adherencias de la ■■ Menordesarrollo de los genitales externos cuando se operan
vejiga al muñón uterino, lo que impide la distensión normal de este hembras prepúberes.
órgano. Esta posibilidad se evita si se omentaliza el cuello uterino. ■■ Obesidad, muy frecuente en estas pacientes. Por esta razón se
La incontinencia urinaria por desplazamiento caudal de la vejiga debe verificar periódicamente su peso, controlar la ingesta de ca-
se presenta en el 20 % de las perras castradas, sobre todo las de lorías y aumentar el ejercicio físico.
La identificación de un remanente
ovárico en un lado no debe anular la
inspección del sitio ovárico opuesto.
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ÍNDICE 14 ÍNDICE
CAPÍTULO
En esta obra los autores quieren presentar de manera su-
cinta y práctica los principios y bases clínicas que tanto para
veterinarios, como auxiliares, técnicos de quirófano y estu-
diantes deben conocer, dominar y mejorar en relación a la
atención quirúrgica que reciben sus pacientes.