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'Polluters must pay': UN secretary general calls for global wi…

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'Los que contaminan deben pagar': el secretario general de la ONU pide un impuesto mundial sobre las
ganancias inesperadas para las empresas de energía – video

Naciones Unidas
'Los que contaminan deben pagar': el jefe de la ONU
pide un impuesto sobre las ganancias inesperadas a
las compañías de combustibles fósiles
António Guterres dijo que el dinero recaudado debería desviarse a
las naciones vulnerables que sufren pérdidas causadas por la crisis
climática.

Oliver Milman y Julian Borger en Nueva York


mar 20 sep 2022 20.08 BST

Los países deberían imponer impuestos sobre las ganancias inesperadas a las
empresas de combustibles fósiles y desviar el dinero a las naciones vulnerables que
sufren pérdidas cada vez mayores por la crisis climática, ha instado el secretario
general de las Naciones Unidas .

António Guterres dijo que “los que contaminan deben pagar” por el daño creciente
causado por las olas de calor, las inundaciones, la sequía y otros impactos
climáticos, y exigió que “ya era hora de avisar a los productores, inversores y
facilitadores de combustibles fósiles”.

“Hoy hago un llamado a todas las economías desarrolladas para que graven las
ganancias extraordinarias de las empresas de combustibles fósiles”, dijo Guterres en
un discurso ante la asamblea general de la ONU el martes. “Esos fondos deben
un discurso ante la asamblea general de la ONU el martes. Esos fondos deben
redirigirse de dos maneras: a los países que sufren pérdidas y daños causados ​por la
crisis climática y a las personas que luchan contra el aumento de los precios de los
alimentos y la energía”.

El llamado de Guterres llegó en su discurso más urgente y sombrío hasta la fecha


sobre el estado del planeta y la voluntad de los gobiernos de cambiar de rumbo.

Sus primeras palabras fueron: “Nuestro mundo está en un gran problema”.

“No nos hagamos ilusiones. Estamos en mares agitados. Un invierno de descontento


global está en el horizonte, una crisis del costo de vida se está librando, la confianza
se está desmoronando, las desigualdades están explotando y nuestro planeta está
ardiendo”, dijo a la asamblea. “Tenemos el deber de actuar y, sin embargo, estamos
estancados en una disfunción global colosal. La comunidad internacional no está
lista ni dispuesta a enfrentar los grandes y dramáticos desafíos de nuestra época”.

El lacerante discurso, pronunciado en la sede de la ONU en Nueva York, se hace eco


de los llamados de los activistas y de la Unión Europea para gravar a las principales
empresas de petróleo y gas que actualmente disfrutan de ganancias récord tras la
invasión rusa de Ucrania. En julio, Exxon anunció que había obtenido una ganancia
trimestral récord de $ 17,8 mil millones, mientras que Chevron reveló su propia
ganancia récord de tres meses, de $ 11,6 mil millones. Mientras tanto, BP obtuvo una
ganancia de 8.500 millones de dólares en el mismo período.

Según la propuesta de Guterres, los ingresos de los impuestos fluirían


predominantemente a los países en desarrollo que sufren "pérdidas y daños" por el
calentamiento global, para ser invertidos en sistemas de alerta temprana, limpieza
de desastres y otras iniciativas para desarrollar resiliencia. Los países vulnerables
están preparados para aprovechar la semana de la asamblea general de la ONU para

pedir a las naciones ricas un impuesto mundial "relacionado con el clima y basado
en la justicia" para pagar las pérdidas y los daños.

Guterres acusó anteriormente a los gobiernos de tener una "adicción" a los


combustibles fósiles y calificó las nuevas inversiones en petróleo, carbón y gas como
"locura moral y económica".

Pero su discurso del martes fue particularmente puntiagudo, pronunciado en el gran


estrado de la asamblea general y luego de la reciente visita del secretario general a
Pakistán, donde las inundaciones de lo que llamó "un monzón con esteroides"
sumergieron a un tercio del país y desplazaron a millones . de personas

“Nuestro planeta se está quemando”, dijo Guterres, y pidió a los líderes mundiales
que pongan fin a su “guerra suicida contra la naturaleza”.

“La crisis climática es el tema definitorio de nuestro tiempo”, agregó. “Debe ser la
primera prioridad de todo gobierno y organismo multilateral. Y, sin embargo, la
acción climática se está poniendo en un segundo plano, a pesar del abrumador
apoyo público en todo el mundo”.

“Tenemos una cita con el desastre climático… Los veranos más calurosos de hoy
pueden ser los veranos más frescos de mañana. Los choques climáticos que ocurren
una vez en la vida pronto pueden convertirse en eventos que ocurren una vez al
año. Y con cada desastre climático, sabemos que las mujeres y las niñas son las más
afectadas. La crisis climática es un caso de estudio de injusticia moral y económica”.

Los gobiernos deben realizar una “intervención” para romper su adicción a los
combustibles fósiles, dijo Guterres, apuntando no solo a las propias empresas
extractivas sino a toda la infraestructura de las empresas que las respaldan.

“Eso incluye a los bancos, el capital privado, los administradores de activos y otras
instituciones financieras que continúan invirtiendo y suscribiendo la contaminación
por carbono”, dijo el secretario general.

“E incluye la enorme máquina de relaciones públicas que recauda miles de millones


para proteger a la industria de los combustibles fósiles del escrutinio. Al igual que lo
hicieron con la industria tabacalera décadas antes, los cabilderos y los
manipuladores han arrojado información errónea dañina. Los intereses de los
combustibles fósiles deben dedicar menos tiempo a evitar un desastre de relaciones
públicas y más tiempo a evitar uno planetario”.

Guterres dijo que “ya era hora de ir más allá de las discusiones interminables” y
brindar financiamiento a los países vulnerables y a las naciones ricas para duplicar

los fondos de adaptación para 2025, como prometieron hacer en las conversaciones
climáticas de la ONU en Escocia el año pasado. Una nueva ronda de conversaciones,
conocida como Cop27, tendrá lugar en Egipto en noviembre, en la que las pérdidas y
los daños serán un tema central.

Aunque los gobiernos acordaron limitar el calentamiento global a 1,5 °C por encima
de la época preindustrial, casi todos los países se están quedando atrás en sus
esfuerzos por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero lo
suficientemente rápido como para evitar este nivel de calentamiento y, por lo tanto,
evitar impactos climáticos catastróficos.

Las emisiones ya se han recuperado a los niveles previos a la pandemia y un análisis


de esta semana mostró que aún quedan por quemar muchas reservas conocidas de
de esta semana mostró que aún quedan por quemar muchas reservas conocidas de
combustibles fósiles en el mundo, suficientes para liberar 3,5 billones de toneladas
de gases de efecto invernadero, lo que aplastaría el presupuesto de carbono antes de
que lleguemos. a 1.5C siete veces.

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