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HUGO H. MARENG O.
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SOCIAL...
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considerambs:a 40] :
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aly exto: ¿'mÍsmo. la, posició Iradscional asunida mos la.corriente. francesa. --
. - de la lingiiística contemperanéa: y de la que analizamos dos exponent
e teóricos “o. e
relevantes como -Benveniste, y. Simonin-Gumbrach deberemos' realiz álgunas' .
precisiones:

10 had quesconfun irlas: con.

"PROCESO" DE*ENUNCIACIÓN" +4
. Sujeto ausente, sujeto-en*situatión-de-habla, finalmente el
sujéto-enñ-el-discurso, o el: sujeto estructurado por su texto, Lap: ducción

:DEPiSrO al doble consepto NN


Ñ |

tó: sivai |

MS Locutor, en la terminología de Jakobson (ctrJakotem, _ 1963), enumciador/emnciatario i


- en la terminología de Greimas (cfr. Greimas, 1568).
-. . - . : % vz e A ON A : . .
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UNIVERSIDAD NACIONAL DE ROSARIO


SECRETARIA ACADEMIICA
DEPARTAMENTO DE COMUNIC ACION
Y TECNOLOGIA EDUCATIVA
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UNIVERSIDAD NACIONAL DE ROSARIO


SECRETARÍA ACADEMIICA
' DEPARTAMENTO DE COMUNICACION
Y TECNOLOGIA EDUCATIVA
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Es PS FRIDA
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EE “e. . m0 sE

e utilizan” distintos”
recursos: . :

destacan sintesis, conclusiones


o ideas principales. |

actividades de és- son ejercitaciones que permiten llegar


tudio: a la etepa evalvativa
.en condiciones
de resolver los problemas planteados.

actividades comple- se sugieren distintas actividades


" mentarias :. —-individuales
o grupales— que re-
fuerzan el proceso.
de aprendizaje.

Bibliografía cam- lista de obras y autores cuya lectura


plementaria: . le permitirá ampliary/o profundizar
los conocimientos de la unidad,

s
- ;
!
e
Textos:Lucrecia. Escudero.
+ Traducción: Adriana Malamud
o |]

emo
e.”
LOS PROBLEMAS TEORICOS DE LA ENUNCIACION

"HISTORIA

1.1. En su concepción más


puede ser definida como: el [SURGEMEENTO DEE <5U4 JA
sea. bajo Ja forma de la relación que establece el locutor a través' del
texto con su interlocutor, o bien la actitud del sujeto hablarte hacia
su propio enunciado. Cn E z
? . o

Parecería que una concepción de la lingiiística "tradicional", *


que ha trabajado siempre con conceptos como "sistema"; "estructura",*
"función" O "código" —una lingiiística formalizada entonces a partir de-
estratos de significación superpuestos ' unos a otros y donde la semíotica
operaría en el nivel más superior de todos, aquel de la connotación (Barthes
1964)- comenzará a disolverse para dejar de referirse al modelo canónico
ide comunicación EMISOR/MENSAJE/RECEPTOR.

Péro este deslizamiento,


“de uña lingiiística de "sistema" a
una lingiiística del "proceso" —operación situada por otra parte y necesaria-
- mente en “un horizorite epistemológico preciso, el de la disolución del
'positivismo-. implica a «su vez una nueva concepción del sujeto lingilístico
como actor social y como productor de enunciados. Es cierto que toda
teoría lingliística comporta implícita o explícitamente una formulación
semejante: sujeto cartesiano, productor u organizador, si la enunciación
es el impacto del sujeto en el texto, este nuevo espacio teórico tendrá
su topología, una epistemología del sujeto (Kristeva, 1971)
Lengua 1913
Habla. SAUSSURE,
En la lingiística clásica (de Saussure) regida por la dicotomía
lenyua/habla, sistema proceso, la lengua aparece sobrepuesta a la conciencia
del sujeto y escapa a su voluntad: la realización concreta del habla
está completamente excluída de este sistema y el omo-loquens se configura
como tal sólo en tanto soporte de las leyes del lenguaje, completamente
sobredeterminado por la estructura lingiística que lo recubre. Es el
Md
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a
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+
——
A
sujeto expulsado de la teoría, o como lo afirma Kristeva "la teoría saussu-:
reana reduce la lengua sín sujeto a una clasificación sin productividad".
Competencia Perfomance. CHOMSKY, 1957
1.2.ui bien las teorías «sobre la enunciación, o mejor aun”: :el
descubrimiento y explicitación de la dimensión creativa, expresiva del
lenguaje -—y no solamente comunicativa— tiene origen histórico en la tradi-
ción lingiiística europea, es evidente el aporte de la escuela norteamericana
regida por Chomsky con cenceptos como "creatividad de la lengua", entendida
como potencialidad de producción de frases, "intuición del sujeto parlante",
“competencia y perfomance", aunque este sujeto chomskyano sea un locutor-
oyente ideal (Chomsky, .1957, 1966).
Actos de Habla. AUSTIN,1962 .
Paralelamente a este recorrido estrictamente lingilístico, las
investigaciones de Austin y Searle, retomando la tradición oxfordiana
de la” Escuela -del lenguaje Ordinario de' matriz lógico-filosófica, tienden
a «clasificar a los| y a establecer que es un "acto lingiiís
tico" en cuanto acción social y por lo tanto describible y clasificable
en términos pragmáticos: estas investigaciones se introducen en la teoría
lingiística en ese' espacio vacío” dejado por Saussure en su elección de
la lengua como nivel, pertinente de análisis por oposición al habla, a
la actividad concreta de producción, sintetizando, a la praxis lingiiística.
"Veamos más profundamente algunos conceptos de la Escuela de Oxford.
Elementos para el Discurso Político.
. El punto “de partida fue el' descubrimiento de Austin (Austin,
1962) de -la oposición entre enunciados performativos y constativos en
la lengua. Una expresión es perfomativa si cumple con los siguientes
requisitos: :

a) describe una determinada acción de su locutor y al mismo tiempo (b)


su enunciación equivale al cumplimiento de esa acción.
“En la frase "Yo les prometo que..." su sentido intrínseco —-el hecho de
prometer-" no puedé aprenderse independientemente' de una determinada acción
que cumple simultáneamente al proferir la frase. Á su vez una 'expresión
se denomina constativa cuando simplemente tiende a describir un aconteci-
miento. En "Hoy es una día de sol..." 'el locutor no introduce con su
enunciación, ningún otro tipo de acción concomitante.

o
' - . po:
pon .
; Austin ha establecido su clasificación de - los actos da habla
(Sbisa, 1978). Al enunciar una frase cualquiera, se cumplen res actos
simultaneamente:

1. un acto locutorio,
en la medida
en que se articulan combinan
los sonidos y en que se evocan y combinan sintádticamente
las acciones representadas por las palabras. 11
2; un acto ilocutorio, en la medida en que la enunciación
de la frase se constituye de po.r sí en un' determinado, acto
Cumplo el acto de prometer al, decir "Yo prometo". Es.
un acto cumplido en el habla “misma, explicitado en
una forma perfomativa. y o,
A
ha

3. un acto perlocutorio, en la medida en que lo enunciado


“ . sirve ' para fines más' lejanos. Es la consecuencia o
efecto que los actos ilocutorios tienen sobre las accio-
nes, los pensamientos y las ereencias de los oyentes..
Reglas Constitutivas y Normativas.SEARLE,
1976
Para discernir mejor esta noción de ilocución, Searle jíSearle,
1976) define ante todo la idea de Una regla es constitu-
¿tiva cón relación a cierta fori cuándo su violación quita
a “esa
' actividad su caractér distintivo. Por ejemplo: las reglas del
ajedrez son constitutivas en.relación al juego, pues se deja de jugar
al ajedrez si las desobedecemos; pero las reglas técnicas a las que se
atienden los buenos: jugadores son|viS£h | (nada impide jugar al ajedrez
y jugar mal). De esta distinción Searle afirma que las reglas que fijan
el valor ilocutorio de un enunciado son kepnbts
E FE Econ relación al
empleo de esos enunciados . La distinción entre lo ilocutorio y lo perlocuto
rio responde a la distinción entre el acto y la acción, entre lo que
es intrínseco y lo que es agregado en la actividad Jingiiística (Todorov,
1974)Nos encontramos con las primeras bases de una lingliística del discurso,

»
tomado a''quíen su acepción más simple, en cuanto conjunto.de frases articula-

...
das. Es a través de este nuevo - espacio abierto que entran en relación
al menos dos campos de exploración: aquel de los problemas pragmáticos
en general y el de una lingiiística del discurso en particular. Robin
(Robin, 1973) afirma que "podemos considerar al discurso como proceso,
en su relación a lo extra-lingiístico; es decir, al discurso como práctica,
en “el sentido que le asigna Foucault: no como actividad libre del sujeto
sino como conjunto de reglas que incluyen al sujeto que forma parte del
mes ma

discurso”.
a

La enunciación formará parte del acto de producción del discurso.


Pero entonces la cuestión inicial subsiste:¿cuál sería el lugar del sujeto
en esta lingúística que toma en consideración y como eje organizativo
el concepto de producción de enunciados y de localización, sea en relación
con una situación de enunciación o a condiciones de producción extra-
textuales?. . : :
DEFINICION DEL PROCESO DE ENUNCIACION- .
2.1.La ' primera aproximación úe esta problemática son los textos
de Benveniste a propósito de la subjetividad del lenguaje, donde el sujeto
usente aussur viene ser reemplazado or el sujeto "hablante"
SPisen y úeñte de todo sentido posible (Benvenisto, 1966). y :
mr
Lo que caracteriza
e
ze A
es lal Eso
Benveniste "el
propone lo que podría llamarse
de la locución: esta característica
de la enunciación". 7
cuadro figurativo

subrayar sal, menos “dos problemas” ¿que


2.4.Me parece interesante
sujeto enunciador como la anteriormente
presentan una concepción del
transparente a sí mismo, es decir,
por una parte este sujeto
presentada:
libre de cualquier tipo de determina-
es un sujeto pre-freudiano y también
un sujeto "libre" de restricciones
las
«ciones :socio-políticas, eS decir,
ser el origen del sentido que enuncia:
sociales. Es la ilusión del sujeto de
referencia (directa o diferida) o ausencia
el discurso se organiza por
a la situa ción de enunciación ("Yo-aquí—-ahora").
de referencia

Teoria de la Enunciación e Ideología. PECHEAUX, 1975


1975) el problema de la teoría de
Para Pecheaux (Pecheaux,
en Benve niste , resid e en que este tipo
la enunciación tal como aparece
constitutiva del sujet o, produciendo
de teoría reflejaría la ilusión
sujeto sin contradicción
o reproduciendo á nivel teórico, la ilusión de un
-la lengua de Saussure- y su realiza-
y mediador entre el sistema colectivo enunciador
a través de la“idea de un sujeto
ción particular -el habla-
particulares. ES
que lleva cosas, intenciones, decisiones

de Pecheaux -a la que hay-que leer a su vez como


. La crítica
co marxista francés- se * inscribe, es
inserta dentro del aparato' teóri
dentro de una crítica más: amplia a la lingiiística del discurso
verdad,
que no ha sido capaz todavía de incorporar la
en general, . lingiiística
del sujeto. :
concepción sicoanalítica o marxista

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HACIA: UNA. . TIPOLOGIA -DE LOS . DISCURSOS
enunciación: está siempre presente. en el “interior de un
3.1.La
FORMAS de. esta_ Presencia, así" como los ¡GRADOS
enúñiciado: las Jgiferentes
de. : intensidad _pérmiten crear una|fiP01
n? 13 y 17).

opondrá .un discurso centrado en el locutor a un discurso


a). “Sé
rdsifzado en torno al receptor:del discurso:- .Esta delimitación es evidente
y elemental en los discursos 'orales, “dónde se puede distinguir! claramente
entre : un orador que ignora a su público y aquel que adapta! su 'habla a
los oyentes presentes. * : ]

Se opóondrá el discurso explícito 0 autónomo, al discurso


b)
o de: situación. Dos: direcciones gravitántes: una en.la cual,
“implícito
! es de "situación",
lenguaje: es decir que cuenta con, elementos extralingúís''
ticos : de complemento “Jenguaje PRACTICO-; otra en la cual el: lenguaje

progúra:. constituir .un todo cerrado y homogéneo, con tendencia a hacerse


compacto y preciso tengúaje TEORICO- . “Es .la oposición conocida entre
el. lenguaje cónversa cional y el científico.

La FRASE análisis .de la lingiiística- no es un SIGNO


-unidad de
sino -.una UNIDAD DE . DISCURSO que no puede ser reducida a la 'concatenación
ús constituyentes y" +Gúya * función: 'es- “la: predicación (se dice'"algo"

-En esta nueva teoría lingiiística las «relaciones entre enunciado/


entinciación .serán. prioritarias, pues marcan precisamente todos aquellos

problemas a los que la lingliística tradicional había dado la espalda.

Practicas Discursivas
3.%.Este:" Téordenamiento
comienza a trabajar con las
sobre * ¿ún Corpus considerado
a

Es. “decir. -tentará de establecer 1 por. qué un , cierto. TIPO de discurso. (científi-

cosaspoético, político;..etc) se .DIFERENCIA -a. otras prácticas: discursivas.


A

fr
| 3 -propolen- : fundar mé
se pueden:

5, donde- hay, ura; 1ogalización- Aoreperager?


GLIACION (Sit, Edie historia” a Los textos!

al

De este modo no será pertinente la presencia de shifters en':


la superficie textual sino .el hecho que las determinacio nes re—envían
a la situación de enunciación (extralingúística) en un caso, y en el otro
re-envían al “texto mismo. : :

egiásDiscursivas” -
Pódemos E 1é:
a
- púeden “no. estar: “marcadás —¿ni'por*oposiciones de tiempo ni por
de -.orden
ya que.el valor del tiempo de base 'es la de ser 'referen—
“circunstanciales”
.al momento del suceso mismo. “La ley en un relato de
fundamental:
cial
tipo: "historia" .
es. que el orden. lineal de los enunciados SIMULA el orden
.
de
cronológico los sucesos enunciados.

3.3.El un- tercer tipo, de enunciación:


discurso indirecto: Sin

embargo hace..notar . SimoninGumbrach, hay. textos, Mmiíxtos"., donde -se alternan


sucesivamente fragmentos de "discurso" (personales) y fragmentos de "histo—-
aia (impersonales). En el ¿caso, de la novelística: :que emplea técnicas
"mixtas. 0, en el caso de los .discursos. orales, los:discursos' políticos.

Este "tercer tipo de enunciación" posee muchas. características


del discurso, pero está necesariamente inserto en un contexto del tipo

Sit. E.. Comparte cón el discurso el estar enunciados por un S=S -un
sujeto del enunciado que coincide con el sujeto de la enunciación- y
a su vez en la utilización de ciertos shifters, amplitud en el manejo
de los tiempos verbales, particularidades del discurso oral, abundancia

de modelizaciones, etc. NN :

En síntesis: a esta, doble. localización de textos tipo "historia"

y "discurso". es posible adjuntar, textos que: participen simultáneamente


0. cor un. leve .predominio-- de los. dos anclajes, típicos de. la ¡enunciación-
—- y asú vez en la utilización de ciertos shifters, amplitud “en el- manejo

de-- los - tiempos verbales, particularidades del discurso oral, abundancia.


de- modelizaciones, etc.

En síntesis: a esta doble localización de textos tipo "historia"


y "discurso" es posible adjuntar textos que participen simultáneamente
-o con un leve predominio- de' Los dos anclajes típicos de la enunciación.
Una: : tipología de los “discursos así entendida, permite trabajar con un

espectro -más amplio. de textos. : no

3.4.Algunas”conclusiones -provisorias |
- —=

Luego de este breve recorrido teórico, estamos en condiciones


de afirmar. la existencia de dos formas diferentes de concebir . el| problema

de la enunciación lingiística: o bien como una estructura no-lingúísti-


ca, es decir, simplemente referencial,.o bien como una instancia: epelusiva-
mente lingiiística cuyo soporte es el enunciado —oral o escrito. "

. !
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1
i
i

El Sujeto en el Texto '

«os
que hablamos” de discurso estamos
Para”, Greiñas” désde. el- Hómento: em
en * consecuencia dejamos. de lado al
haciendo * referencia a un PROCESO: y
de -enunciados para ' encontrarnos frente a, un
sujeto . ontológico productor
es decir, frente a un concepto gramatical:
actante sintáctico,
No.
te

, qu'une instance vírtuelle


"Le sujet su discours n'est, séniotiquement parlant
linguistique,
c'estra-dire, une: instance contruite dans le. cadre de la théorie
paradigratique en une Torme
pour rendre combe de la trensformation de la forme
mediatrice se presente.
syntegnatique du langage. Devantage: cette instance
actant qui —en possession de cate—
sous la forms d'une sujet syntaxique, d'un
come des differences, come "
gories linguistiques presentes "dans la langue”,
tique, les menipul e de neniere
des oppositions dotees d'une organisation systema
matiqu e se realis ant come programe idis-
a construire un enchainement syntag
n'est ,
ce ion pas geulement
coursif. Ce qui se passe en ce lieu' de mediat
de la langue...
“une actualisation est c'est aussi la prise en charge de [oertaines
(...) necessaires pour qu 'i1 soit permis «au sujet
categories semantiques
sant les termes convi:
d'assumer le role d'operateur menipulant et organi
INSTANC E quí ne se oontente
(...) Le sujet du discours est DONC CENME
de 1'etat virtuel aa:
selon la conception saussurienne, d'assurer le pessage
monte 1'
1'tat actuel du langage: 11 appariat come 1'endroit ou se trouve
lengue"
ensamble des mecanismes de la mise en discours de la

lugar de construcción del sujeto: no existe


Es el discurso: «el
0 trans-discursivo, es. un, sujeto a construir a través
un sujeto extra
ones.
de estrategias textuales, de organizaciones discursivas” o de manipulaci
confirma lo que constituye para
Este. ¡suje="estratega"".. de .la enunciación
Greimas - la -existencia' de una dimensión cognitiva del: discurso: partiendo
de. la competencia-expresión de. su saber-hacer— el sujeto “discurrente refe-
su discurso. -
rencializa. CN |

E A,
ss”. .
>

DUBOIS, . "Enonce et enonciation", en Langages N2 13


1969 "

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o]
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ROBIN, R. Histoire et linguistique, Paris, Armand


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1976 "Du sujet scientifique en Sciences Sociales", en


Semiotique et Sciences Scialea, Paris, Seuil
Sverales
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od
i :

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. o 4 - 7 - or
a ACTIVIDADES DE ESTUDIO *

LENGUAJE” Y SOCIEDAD Junio 1984


UNA TEORIA DE LOS SUJETOS “DEL' LENGUAJE ON

dd
Patrick Charaudau
Centro: de” Análisis del Discurso
. El Discurso. : Universidad - de París Xul
. 1% Algunas precisiones sobre el término discurso.
-” . No se trata acá de definir- - este concepto porque es par icipando en
el conjunto de una teoría que es, a su vez, definida por ella. Quisieramos
To. sólo remarcar con algunos límites el territorio en el que se puede mover,
lo que _permitirá se eviten algunas. - confusiones, “ya que es verdád que
este término se emplea con diversas acepciones.

2 1.1. Eldiscurso no debe “asimilarse con la manifestación verbal del lenguaje.


Esta, aunque domine en el conjunto de las manifestaciones del lenguaje
corresponde 'a un cierto código semiológico, es decir a un corijunto estruc--
turado de signos formales. en el mismo nivel, por ejemplo. que el código
de los gestos (lenguaje del gesto)o 'el código icónico (lenguaje de
la imágen).

ms
»
ns
El discurso está: más. allá de los códigos de manifestación del lenguaje

ni
«en lo que es el lugar de la puesta en escena de la significación, la


' que puede utilizar para sus propios fines, uno o variós códigos semioló-

om
gicos. Evidentemente, no queremos decir -: con eso que había un estado
del discurso anterior a la puesta en marcha de la manifestación e indepen-
“diente de ella. Debe estar bien claro que toda puesta en escena discursiva
depende de las características de esos códigos y de todos ellos. Lo:
que proponemos ¡pues es que no se .Jlimite la acepción de este término
el único caso “de la manifestación verbal porque al mismo tiempo sería
el conjunto: de la puesta en escena del acto de lenguaje que se reducirá
a esta sola manifestación.

os

-1.2.Discurso no debe ser confundido con texto. Este último debe considerarse
“ como un.objeto que representa la materialización dela puesta en. escena
: del acto de lenguaje. Es un resultado siempre singular de un ProceBo
que “depende de un -sujeto “parlante particular y de circunstancias de produo-
ción particulares. Cada. texto se encuentra pues atravesado por un discurso
didáctico o por un discurso humorístico. ?

1.3. Discurso no debe ser - entendido según . la tradición lingiiística como


e la” unidad que sobrepasa la frase. Una puesta. en relación de varias frases :
Mo
» la pe 0 o coa
os AH
. a o. t. . a . la —
3 a Ayo”
,

la unidad-díscurso. Es necesario, como se verá


no constituye en sí sola
de frases corresponda a un juego de lenguaje
mas adelante, que este serie
en circunstancias determinadas. Al contrario,
entre varias personas
un gesto pueden ser portadores de discursos,
una frase, una palabra,
que respondan a esa condición. ,
desde el momento

fin discurso no será tomado en el sentido de E. Benveniste que lo opo—


1.4.Por
la historia como "Dos planos de enunciación diferente", Une vez”
ne a
el discurso concierne el conjunto _4e le puesta en escena de la
mas,
significación en la de sus componentes “es enunciativo (discurso) y
(Historia) . : : .
y el otro enunciacional

diferencias no nos dan zún una definición exacta del concepto


1.5.Estas
que nos ocupa, pero tienen el mérito de poner en evidencia, por contraste

sus características. El, término discurso puede asi ser


algunas *. de
utilizado en dos sentidos -—en unprimer sentido, discurso está en
relación con el fenómeno de puesta en escena del acto de henguaje.
Esta depende -de ún dispositivo que comprende dos circuitos : un! circuito

que representa él lugar del hacer Psico-Social (illo que se


externo
Situacioneal1) y un circuito interno " que representa ell lugar de
llama
organización del decir. Reservaremos el término Discurso al! campo :
la
del Decir. Se coponóra en consecuencia puesta en escena discursiva con
la puesta en escéna lingúística en lo que ésta, incluyendo el aspecto

de situación del acto de lenguaje engloba a aquella. Evidentemente


la primera no se realiza independientemente de la segunda, pero posee

un dispositivo propio que autonomía. Dará lugar a la puesta


confiere
le
lugar de géneros y que no esta obligademente unidos,
estrategias ,
en
por su existencia, a las circunstancias de producción. Así el discurso
didáctico, en sus características de Decir no está exclusivamente
unide a la situación escolar -que llamaremos Ritual y puede encontrarse
en otros tipos de situación (política, científica, mediativa (1),

etc. "

En un segundo sentido, giscurso puede ser relacionado con un conjunto

coherente de saberes divididos, contruídos la mayor parte del tiempo

de manera inconsciente por los áíndividuos de un grupo social. Estos


discursos sociales que se podrían llamar igualmente imaginarios sociales

dan testimonio de la mañera en que las prácticas sociales están represen-

tadas en un “contexto socio-cultural dado y racionalizados términos

de valor qué es lo que es serio, divertido, popular, elegante, culto, .

indulto, etc? "


A
A A
,

A
a

TH


2.Los Sujetos del Lenguaje .
Nor

2.1.Poner los sujetos del' Lenguaje en el centro de las teorías lingúísticas


es una preocupación reciente y. aún Ro está generalizada En efecto,
jAurante.. Jdargo,, tiempo hasta el advenimiento de la teoría de la enuricia—
ción- la lengua era: comsiderada como “en objeto abstracto en el que
había que describir los sistemas internos. Además el término sujeto
«no tenía más que una realidad gramatical, y aún ni en la antigua retórica
la actividad del lenguaje era una arte de persuasión, el sujeto no
estaba presente como ser de enunciación.
o Con las teorías estructuralistas : y su orientación hacia la actividad
“de comunicación -reducida y simplificada al extremo por la teoría
matemática y la computación:"así como la teoría generativa
.de Chomsky,
“el acto de lenguaje es el hecho de un "locutor-auditor ideal" y de .
un proceso simétrico entre él que lo produce . y el.que lo recibe y
lo descodifica: No hay pues lugar, para una teoría de los sujetos ya
que * estos desaparecen en la abstracción ideel de un modelo de competen—
cia supuesto perfecto. .
Es con la teoría de la enunciación que son tomadas en consideración
la presencia de los responsables del acto de lenguaje, su identidad,
su estatuto y “su rol. - ,
Ya. con (Jakobson (1980) Emisor y Receptor se encontraban diferenciados
y personalizados del hecho en las funciones Emotivas «y Conectiva,
pero es' con Benveniste (1966) que se produce el primer cambio teórico
importante "la subjetividad es la capacidad del locutor de colocarse
como sujeto”. Planteando que lo subjetivo es el ordenador de la¡organiza-
ción del lenguaje, da primacía a la enunciación sobre el jenunciado
y abre el camino a nuevos estudios basados en la oposición "Yo" "Ty",
La Pragmática va-aún más: lejos ya que sin dotarse de uha [verdadera
teoría de (los sujetos, toma en consideración el estatuto Lingúístico
. del sujeto Hablante' para explicar los Performatívos : entre las condicio-
nes que definen la Performatividad de enunciado como "la sesión sé levanto"
existe la del 'estatuto del Presidente de le Sesión del sujeto que
pronuncia este enunciado. Discutiremos esta posición un poco más adelante
pero se reconocerá el rol de apertura que juega la pragmática en relación
a las otras teorias de la lengua (2). , o
Recordemos igualmente que paralelamente al desarrollo de las teorías
lingilísticas de los años 60, la semiótica,
¡(por su parte, se interesa,
sobre todo con Barthes, en. tratar de distinguir en los objetos literarios
a yarios, tipos de epunciadores; destinadores, destinatarios, etc. - o
i aj influencia, tanto en Europa como en E.E.U.U., del:
ús
18

: | Ñ
de los. estudios antropológicos y sociológicos que se interesan,
“desarrollo
"- cada vez.más en el lenguaje, nace un punto de Vista macro-sociolingúísti-

co que integra a una situación lingiística?' dada a todos los miembros


del grupo social concernientes al ésta. De allí los términos de participan
partenaires" que se encuentran en Bernstein (1971) Halliday
tes ,. actores,
(1973), Hymes (1974), Fishman (1971), Lalov (€1971), Goffman (1974).
se puede decir que el empleo de estos términos sean de gran precisión
No
porque a menudo se emplean unos por otros, pero tienen el mérito de
obligar a toda teoría del discurso para interrogarse sobre la naturaleza
de esos séres sociales que participan en el intercambio del lenguaje.
am

2.2.Recordemos, antes de pasar a las definiciones, las que


hipótesis. consti-
tuyen el marco de nuestra teoría expuesta en Lenguaje y Discurso (Hache-

tte, 1983)

de lenguaje (3) es un fenóméno que .combina el Decir y el Hacer.


1.El acto
El Hacer “de
es lael instancia situacional
lugar que se define en
sí por
misma lugar que ocupan los responsabl
el es de este acto . El
Decir es el lugar de la instancia discursiva que se define en sí misma
como puesta en escena en la que participan protagonistas. Esta doble
realidad de Decir y de Hacer nos lleva a considerar que el acto de
lenguaje es una totalidad que se compone de un circuito externo (Hacer).
y de uno interno (Decir), indisociables uno del otro.

2.Todo acto de lenguaje corresponde a un juego de significación (4)


particular. Puede ser pues, considerado como una: interacción' de inten
cionalidades cuyo motor sería “el principio del .juego "dar (jugar)
un golpe, con la esperanza de ganar (5). :
Lo que nos lleva a plantear que la puesta en escena del Decir sale

de una actividad estratégica (conjunto de estrategias discursivas)

que tiene en cuenta los constreñimientos del cuadro situacional.

3.Todo acto'de lenguaje es el hecho de seres psico-sociales que son los tes—
tigos, más o menos conscientes, de las prácticas sociales y de las
representaciones ' imaginarias de la comunidad a la que pertenecen.

Lo que nos lleva a-plantear que el acto de lenguaje no es completamente

consciente. y que está subsumido por un cierto número de rituales-socio—


linguísticos. . '
Este' conjunto de hipótesis definen nuestro cuadro teórico que esta
representado por la figura que damos acá. ;
A
A
.
Los
Y

.
,
4

,
4

A
El

r
4
ie
- 2.3.Veamos pues la denominación que utilizamos y su definición.

A
a)Sujetos: El sujeto puede. “ser considerado como un lugar de producción
de la significación Jingúística ? hacia el cual vuelve: esta significación
para constituírla. No es pues ni un individuo preciso, ni un ser colec-
tivo particular, sino una abstracción, sede de la producción/interpreta—
" ción de la significación especificada según “los lugares que ocupe
en el acto ¿langagier?. :
Se. hablará. .pues, . en lo que nos. atañe, de sujeto comunicante, de sujeto .
.enunciañte lo _enunciador ), de sújeto destinatario y de sujeto interpre-
: tante? "

b)Partenaires (Acompañantes): De una "manera general, retendremos del


diccionario aunque no lo exprese en esos términos-— la noción de "perso- o
nas asociadas" en una relación de hacer-valer recíproca que se conside-
rán por “eso mismo, dignas una de otra.
En la interacción lingiística 7, tenemos que ocuparnos de dos partenaires
el sujeto comunicante (Yoc) cl. sujeto interpretador TU i) que están
implicados en el juego de una relación” contráctual. : e
Esta —relación contractual no descansa en bases. objetivas fijadas
2. - -POr. los 'estatutos-sociales -de-los partenaires fuéra. de situación. Depende. ----- ---
del juego ? construido por el mismo acto de lenguaje, lo que hace:
que los partenaires sólo existan en la medida'en que reconozcan como
tales unos y otros con los estatutos que ellos imaginan. Así hay encuen-"
“tros en lugares como las bases, donde los estatutos de pártenaires
, «nO. dependen tanto de ¿las. categorías de profesionales jerarquizados.
“> : [patrón/empleadó, ¡h lectual, “ártista, comerciante; artesanó, "etc)
2D

ejemplo de un estatuto competencia atribuído


de 'en el momento
como por
a propósito de los temas de coriversación (Carreras de caballos, aconteci-
“máquinas tragamonedas; +etc)... La relación contractual
mientos políticos,”

4

componentes más o menos objetivos hechos pertinentes


depende “pues de
por el juego del: acto lingilístico.

Estos componentes son de tres tipos:


concebido como el marco( cuadro): físico de la situación
Lona;l:
2, ,Comunicaciona
¿los partena ires están presentes unos y otros?
interaccional:
¿se ven? ¿son únicos o múltiples? ¿qué canal oral o gráfico utilizan?
etc (V Charaud au 1973) (6) :

concebido en términos de estatutos en que los partenaires


2. Psico-Social:
son susceptibles de reconocerse uno con otro: edad, sexo', categoría
-socio-profésional, posición jerárqui ca, relación parental, pertenencia
etc. o
a una institución en los campos públicos o privados,

concebido como un conocimiento a “priori que cada uno


3.Institucional
los partenai res posee (o se construye) - sobre el otr o.
de .manera.
de
imaginaria llamado a Saberes supuestos divididos (intertextualidad)

Este componente intencional descansa él mismo en dos preguntas que


constituyen los principios de base de su puesta en obra, ¿de| qué puede
ser, cuestión, o cúal puede ser la intención de A
es trat 'egica'
I »

ser cuestión de eso, O cúal puede ser la intención


puede
de manipulación? (7) - o : 0

mn
3

2.
sujeto comunicante (YO c) es el partenaire que tiene la iniciativa
2.4.El
de producción. Es decir que procede en la "puesta en'escena
del proceso
Decir en función de los tres componentes que acabamos
(en marcha) del
de describir -y es en el componente se'integran las intencional que
hipótesis .de saber que es llevado a construirse sobre el sujeto inter—
pretante (Tv i) -—y de la percepción que tiene del ritual lingúístico
que los subsuma. Este conjunto cosntituye su lugar de palabra y el
-
resultado de esta actividad las estrategias discursivas que son suscepti
_ bles de producir efectos de discurso.
El sujeto interpretante (Tú i) es el partenaire que tiene lá iniciativa
del proceso de interpretación. Es decir que procede a la construcción
de una interpretación -—que puede ser muda o expresarse por una interac—
ción cualquiera -en función de los mismos tres componentes-.con las
hipótesis de saber que es llevado a contruirse. sobre' el sujeto 'comunican—
te (Yo c) y de la percepción del ritual ¿lingúístico?.
Sin embargo no hay simetría entre la actividad del Yo c y la del Tú
Si el resultado del proceso de producción puede ser estudiado a
i.
través de las características de la puesta en escena del Decir configura-
do en texto, el resultado del proceso de interpretación no puede ser
tomado más qué a través del texto de la interacci ón —y esta toma por
interesan te que sea no - puede ser más que parcial- ya sea de manera
.
psico-experimental, testando los sujetos interpretantes.
Por Prota:yonistas: de las definiciones del diccionario retendremos

las nociones:de "rol" y de "importante".


En la interacción llingilística? tenemos que ocuparnos de dos protagonis-
tas: el sujeto enunciante o enunciador -(Yo e) y el sujeto destinatario

Tú d) que se definen como seres palabras de la puesta en esceria del


Decir producida por el Yo 'c interpretada por el Tú. Estos seres de

de palabratoman aspectos diferentes según los roles que les son atribuí-
"por los' partenaires del acto de lenguaje en función de
dos su relación.
contractual. Estos .roles son concebidos cómo comportamiento linguístico
en los que unos corresponden a los tres componentes de la relación
contractual-comunicacional, psico-socia l e intencional, "que, esta
vez” aparecen como. índices semiológicos en la puesta en escena del
Decir y en los: que otros _ corresponden a la que llamamos actitudes
discursivas.

Estas actitudes corresponden a un dispositivos bastante complejo que


no. podemos describir en el marco de este artículo, y en el que intervie-

nen, para darnos una idea, actitudes enunciativas (amiocutivo, elocutivo,

delocutivo, los tradicionales actos de palabra), actitudes enuncivas

(los “modos de organización narrativa y argumentativa, actitudes de


- valores (ética; pragmática y hedónica), actitudes de verdades (real,
- ficción) y actitudes de credibilidad (reino familiar, etc), a

3.Un Ejemplo:“La Performétjvidad”


:311.Durante largo. tiempo fue comunmente admítido que existían en lengua
verbos 'performativos dé los que fue posible hacer listas (prometer, orde-
nar, permitir, declarar, etc). Pero como estos: verbos salían del disposi-

tivo de .la enunciación, fue necesario describir las condiciones de

la realización performativa: estos verbos, además de su emantismo


particular (describir la acción que el locutor declara cump ir) deben
ser empleados en el presente del Indicativo y en la primera persona

del singular. Así era señalado como performativo: el enunciado "yo


te ordeno que P" por oposición a "él le ordena que P" o "yo 1 ordenaba
que P", etc. : : | Ni
- Luego descubriendo los performativo -
contextos en los que el verbo
a pesar de sus buenas condiciones de empleo, no cumple el acto que
describe (cáso de ironía) algunos lingúístas propusieron calificarlos
Como "potencialmente performativos" (Roulet 1978) (8) o de llamar
ores
a "marcadde leyes de.discurso" (Anscombre, 1977). (9).

A estas observaciones: sucesivas * que nos demues Fan “que lá “performati- .-


.
li
a oa

ps
en 18 Yegua "se podría agregar que ¡en muchos

ok
vidsa no está” inscripta
de ectos enunciativos Bin
se tiene que Ver Cor cumpi.imientos
casos posible
utilizada los describa lo menos
cue la fórmula lingúística
que la sesión está abierta
de la Sesión que pera declarar
zl1 Presidente
diré: "Bueno". . a”
te

gueríamos sólo hacer una serie


vamos a argumentar €n el detalle:
2. No
2 probar que la performatividad no
de consideraciones Que tienúen
pero que concierne el conjunto de la puesta
es un fenómeno de lengua
Sus dos circuitos (externo e interno)
en escena del acto de lenguaje con
partenaires y protagonistes.
y sus sujetos correspondientes,

hablante tenga poder para ejecutar


condición que quiere que el sujeto
1)La la relación
sale para nosotros de
el acto que describe en su enunciación
externo entre los dos pertenaires
contractual que existe en el circuito
no vuelve al sujeto.enunciante
Yo c y Tú; El "yo" marca gramaticalmente,
[yo c). Sin embargo hay agregar
que
(Yo e) sino el sujeto comunicante
es que el Yo c debe hacer la hipótesis que
esta otra condición que
hay real performatividad, sería
poder de hacer mío no
el Tú tiene
dirigido 2 una persona privada
caso de "yo te. ordeno caminar"
el de
que Yo Cc tenga el poder
sus piernas (la menos evidentemente
de
el poder hacer de Tú).
hacer milagros lo transformaría
es necesario que los
manera, para que haya performatividad
De otra
contractual donde se reconozcan
estén en una relación
dos pertenaires
el uno al otro un poder hacer.

propuesta por Grice(1975) sale igualmente


2)La condición de sinceridad
(punto de vista intencional. fsií varias
de esta relación contractual
son posibles con el mismo eminciado
puestas en escena _lingúística
"yo te prometo ira tu fiesta".
decide Yo Cc promete y TÁ d es llamado a creer.
comprometerse
a)Yo Cc
(E.P.) para Yo
Tú; cree hay efecto performativo
efectivamente,
si
. :
cy Tú.
Si Tú, no cree, hay derr ota del E.P.
le.
b)Yo c no quiere comprometerse Yo c. promete y Tú d es llamado a creer
Yo c sabe que no es verdad.
Si Tú i cree, hay E.P. pera este pero
juzga que Yo c es perjuro.
Si Tú; no le cree, no hay E.P. y el
Yo e promete pero Tú d es ltiemado
c)lYo cc no quiere comprometerse
efectivamente no hay E.P. y
(indica). Si Tú no cree
a no creerle
entra convivencia con Yo €.
en
pocos casos de puesta en escena nos llevan a plantear que no
Estos
se pDuede habler en análisis del discurso más que de efecto performativo
el conjunto del dispositivo del acto de lengueje
(E.P.) y que es
que ocupan los cuatro sujetos que aseguran! O no este
CA lugar
$
4
¡0

xy
.3)E1...hecho. que una fórmula verbal cualquiera no-performativa A sí :
pueáa a contribuir producir el cumplimiento “de una- acción enunciativa -
muestra que ésta-no está necesariamente unida al empleo de una fórmula
especifica. “Así el “yo quisiera que vengas- esta noche"de un padre
a su hija. Si el padre (Yo c) no esta habituado a dar Órdenes a su
hija y ejerce habitualmente su autoridad por” la negociación, y si
la hija (Tú i) lo sabe, hay mucho que aportar para que este enunciado
produzca el efecto y el cumplimiento de orden que no pueden ser ¡señalados
por "yo quisiera que P" €l sólo. o o
Plentearemos que -el cumplimiento de una. acción enunciativa- puede
3er _producido por diferentes estrategias discursivas en las que algunas
llegan a. ocultar el Hacer por el Decir. . :

4)Por fin, ¿
el análisis de ciertas secuencias interaccionales permiten
poner en evidencia que cada vez' que el Yo e utiliza la fórmula explícita
(yo le ordeno, yo prometo; yo te permito, etc) todo sucede, desde
el punto de vista de la estrategia discursiva, como si precisamente
se pusiera en duda, la validez de la relación contractual que permitiría
la E.P., y esta, aún cuando todas las condiciones están requeridas
aparentemente para Producir el E.P.. Un patrón que quisiera echar
a un empleado de su escritorio guien ha venido a reclamarie le diría:
“jAhora, salga Señor!...Si el otro no lo: hace podrá entonces decírselo
. COL MaS befaaiiiSeñor, yo le ordeno que salga!" y también explicitar
las ' condiciones de enunciación precisando: "Soy yo quien se lo dice"
o "es sú patrón quien habla". , :
Pero las ' tres últimas fórmulas no son más que un simulacro, de E.P.
que . instituye un sujeto destinatario (Tá a) mistificado, la continuación
depende de la reacción de Tú. .
A la inversa uno. no imagina durante un asalto a un banco el Yo e
enunciar "le ordeno (que me devuelva la plata", la impresión.
de burla
que se siente en ese caso ha menudo explotada en las comedias de
W.Alien) está. unída a la fuerza de amenaza que representa la relación
contractual (el atracador tiene. un arma). la que va a satisfacerse =
con el enunciado mínimo ("la plata"). .
Esta relación inversamente proporcional entre el empleo de la fórmula
performativa explicita y el E.P. del acto de lenguaje nos lleva a
precisar una terminología. que se presta un poco a confusión.

: 4.Los Conceptos

1.El acto de lenguaje que como lo describimos al comienzo del artículo,


concierne el conjunto de la puesta en escena lingilística con sus dos
circuitos, 'externo- el de la.relación contractual entre los dos partenai- +"
234

A o

res -interno el de la puesta en escena (en marcha) del Decir con los dos
protagonistas.

que concierne exclusivamente a la puesta en escena


2.El acto de palabra
Decir, través ade la fórmula verbal que Sea, con tal que señale
del
un acto enunciativo dando un cierto rol a Yo e y Tú d.

El acto de palabra no es pues la totalidad del acto de lenguaje.


»

3.La estrategia discursiva que se mide con el posible efecto producido


por el ajustamiento (el juego) entre la puesta en escena del Decir
(el acto de palabra) y la relación contractual del Hacer.
En estas condiciones el concepto de acto performativo parece inútil
en el. análisis del discurso ya: desaparece
que bajo la descripción
“cada vez particular del' efecto estratégico producido por el ajustamiento
entre el Decir y el Hacer. : *

servirán para designar los partenaires Yo cy


4.Locutor/interlocutor
Tú 1 cuando están en situación de comunicación dialógica y utilizan
:
al canal oral.
| a estos mismos partenaires cuando la situación
5.Escritor/lector designarán
de comunicación es rio dialógica y que el canal es gráfico o escritual.

6.Dejaremos los términos de actores a la sociología, porque se presentarían


confusión en una teoría del discurso, a menos qué no se
a demasiada
los ¡identifique con nuestros partenaires —de participantes a la etnogra-
la- comunicación y a la etnometodología porque se "trata.de un
fía de
punto de vista macro-sociológico que escapa a lo que hemos llamado

el juego del acto de lenguaje; sin embargo este término podría utilizarse
para designar al tercer implicado en un acto de lenguaje.

7.Emisor/Receptor serán «dejados de lado- porque dan una falsa idea de


lo que es :el acto lingUístico. Por último nyo" "tú no serán retenidos

porque nos llevan de manera demasiado restrictiva a las personas gramati-

cales, aún si Benveniste se ha cuidado de evitar la confusión.

Ae E la Me
ETA.
de rd e
, Dl.
A A
A mor -
ms r
t>
: E
an
1l.Lo que: está en discusión. Preferimos hablar de ritual político (ver: "Le
discours propagandiste" in.. Le Francais - dans le Monde N? 182 —-Hachette-
Paris-Enero 84).

2.Este término _no está. tomado aquí en el «sentido . que. ie da. la Pragmática.
Esta tomado en un sentido más extenso ya que designa el conjunto de la.
. realidad ¿langagiere?. . . - - o -

3.Recordémos que utilizamos “este término como oponiendose a sentido en


¿una acepción inversa a la de O.Ducrot (Les mots du discours. Editions
de Minifit “Paris 1980) .. :

4.Todo atto de lenguaje. en su doble proceso de producción y de interpretación


es una interacción.Este término no esta pues reservado en el único caso
de la situación

s
dialogica. :

5.Esta analogía con la teoría del juego es igualmente utilizada los por"
analistas de la conversación (Goffman 1959)-y por ' ciertos psico-socíologos
(Chabrol, 1983)

6."Reflexión .pour une typologie des discours" en Etudes de linguistique


apliquee N* l1-julio Didier Paris 1973. :
7.Este término es tomado en. un amplio sentido ya. que' todo acto de lenguaje
consiste en "dar un golpe para ganar".

8."Essai de * classement syntaxique et semantique des verbes potentiellement


permormatifs en francais".Cahiers de linguistique 8 Ginebra.

9."La problematique de 1!i1locktoire dériven. Lenguje et Societé 2,

10.Grice H. P."Logic and Conversation, Syntax and Semantics vol. 111 Speech
Acts, 'ed P.Cole et J.L. Morgan. Academic Press. Inc. 1975 | |
a
——
x,
«

|. E
ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS ;

= ' Ñ
PALABRA DE LOS POLITICOS—(Ensayo)
: - LA
o Lucrecia Escudero
Revista Vigencia,1983
. :

dicen los políticos". Es muy difícil creer,


"o “Yo quisiera Creer lo que
Z a mí no me.gusta
den tantas vueltas"."Son todos iguales: hablan lindo pero
eso a la gente".
os partidos políticos; marea
lo que dicen"."Yo nunca vi tant "."La poto
es el sindicato, política es todo
"¿Qué se define por política? Política la seño ra
libros". "Yo entiendo lo que
es lo que dicen los
democracia
s unos títeres mal
dice, ella no sabe si es peronista o radical" "...somo
:
:
5. B.
<=",
.manejado mo
ingenuas,
«expresiones espontáneas, no motivadas, críticas o hasta
Estas
diferentes
, culturales y generacionales muy
provenientes de sectores sociales nes
curso sobre actitudes y expresio
son el material de una investigación en y los
a las próximas eleccion es
nt
de, los argentinos en vistas
políticas niciones que
deseos, mitos, creencias O defi
próximos ' candidatos., Revelan
eos. El discurso
configuran el mundo de los significados políticos 'contemporán
:
*de los políticos, ¿toma en cuenta la opinión de la gente?.

Crisis de un Lenguaje Verosimil


padecemos de una desinforma—
común afirmar que los argentinos
7 Es un lugar
crónica: por «desinterés, desilución, miedo, abulia o falta
ción política -
s que tipifican un fenómeno
"de práctica democrática, poco importan las causa . Ve
Los políticos hablan, los espectadores
social y comunicacional evidente.
uamente
no quieren saber. Cada vez más asid
escuchan y no entienden, no creen,
político se ha kransformado en un producto de los medios de
el discurso + eS
a los políticos por televisión, se los "escucha"
“comunicación. Se "ve" 7
como si formaran parte de otra especie
-- por radio, se los "lee".en revistas,
a nuestras vidas cotidianas, como si la comunicación política
-zool ógica ajena
emente
primaria, elemental o carismática, pero siempre fuert
% " esa relación
e mediatizada
“vive ncial del lider con sus seguidores- funcionara actualment
estrella de los discursos sociales
a través de esta nueva
y administrada
Al entrar en el círculo de los
es el comentador (analista) político.
que en la
evidentemente en difusión, pero:caen
medios, los políticos ganan

|
-
AS mlA Loro
ire A a e sem tin
trampá que, la misma produccióde
n los mensajes masivos propone: los' vuelve *
irreales, los falsifica. Mientras tanto, este enorme despliegue: de: signos
e intenciones, ¿convence?. :
- .ov so: . . .
Es ¡interesante aplicar al análisis' de los discursos sociales aquelio
-que Michel Foucault interroga al discurso sobre la sexualidad que, como
“el discurso político, es un discurso de poder y tal vez de guerra: cuáles
son Jas tácticas, las estrategias, las coyunturas y las relaciones de
fuerza que hacen necesaría su utilización, en síntesis, no lo que un discurso
"dice". sino lo que es capaz de "hacer": hacer creer, hacer de ir, hacér
hacer. : - . : A

e
Los Discursos
t

Pareciera que existe un acuerdo tácito entre los analistas de discurso:


, el político es “ese tipo especial de discurso que encuentra su zona de
acción entre lo pedagógico —se. enseña siempre un ciérto saber—, el discurso
religioso —poque se solicita un creer para hácer— y el amoroso -se pretenúe
un querer a menudo pasional- recortándose en un marco teatral, compartiendo.
con este género el ser una producción "espectacular". Existen no
sólo escena-
rios políticos sino también actores que abren y” cierran los discursos
y una puesta en escena ritual. No se escucha cualquier cosa ni de cualquier
modo.
:
Esta reciente generación de lectores de discursos: "políticos, básicamente
integrada por semíologos y linguistas, afirman que los ideológico, como
lo político, son dimensiones que atraviesan los -textos sociales. De lo
que .se trata es de reconstruir un recorrido de sentido que toda estrategia
discursiva propone:el discurso como contrato, combate, imposición o construc—
ción de saberes e intenciones. El lugar de la lectura —como el del poder-—
circula.

En. primer lugar se podría decir que el discurso político marca más.
fuertemente: qué otros una relación entre una fuente productora —el -orador :*
político- y los receptores, situación que aparece enmascarada en otras
formas de discursos, como_ el. -literario- o - el-de la información escrita.
Percibimos al mundo
político en su totalidad, como un complejo de signós
capaces de activar
formas de participación y contrucción de consenso.
Pero¿como se construye ese consenso?. Á “través de un contrato fiduciario
entre oradores y público, ya Sea porque el discurso polític
o trata básicamen-
a Inia +s.»ke., de .convencerlo,' o bien porque busca ser aceptado como Verdadero” por
“sus consumidores. Q : eos ter a aja
2
ce
Em do, peor que” le puede pesar a un políti ico es que 5e confunda |su discurso
.

“pubYi diteríio”o “un cueritó'- de hadas, y de alí ave, Sea, un: ed


con =um “anuncio”
obsesionado por la verosimilitudá: se otorga como creíble, exige
discurso
ser leído como verdadero.

En efecto, político
el puede situarse e elección en cualguiera
rador
de las siguientes posiciones previstas: su discurso "es" y "parece" lo
que dice, hay una coherencia demostrable y por.consiguiente se sitúa en
el eje de la verdad. Es un discurso "honesto". Pero también puede "ser"
pero "no parecer", hay verdades que el enunciador político viene a revelar
nos encontramos er el eje del secreto. Es un discurso de "revelación"
y
cercano que movilizó las creencias y escepticismos de la
con un ejemplo
pública nacional: Alfonsín sacó e la luz un pacto secreto entre
opinión
y militares. Por otra parte los discursos de la oposición
sindicalistas
"aparecen" pero "no son" son discursos engañosos, equivocados,
generalmente
en el eje del error. Finalmente pueden "no parecer", pero
sitúandonos
*"no ser, es decir, ser discursos falsos, falsificables y el eje
tambien
desde el cual criticarlos "o invalidarlos es 'el
obviamente de
preferido
la mentira, situación en la que se colocó Lorenzo Miguel para contestar
.

simpleme nte que la acusaci ón del político radical "es una gran mentira".

de estas cuatro posibilidades se construye todo un abanico


A partir
en la caracterización de amigos y enemigos. ¿El y acierto
de posiciones
va
la ductilidad del orador político en el manejo de esta dimensión veredicti
fundamentales porque se juega las posibilidades de su redibilid ad
son
y el riesgo de ruptura del contrato fiduciari o: la gente no cree, no se
interesa, no responde, se niega al juego interacci onal que todo discurso
en cuyo caso el discurso pierúe su fuerza y cae en el vacio.
propone,

Veamos elgunos ejemplos: las cartes de Aldo Moro durante cautiverio


su
a menos de las Brigadas Rojas, en Italia; no fueron "creidas” por sus
correligionarios de la democraciz cristiana, que llegaron hasta enunciar

una complejísima teoría sobre la ¡ocura de su presidente para invalidar


el contenido político de las cartas y negarse así a las
consecuentemente
negociaciones de los grupos terroristas. 0 el caso tal vez único en la
historia política argentina y sin duda único en la historia de los discursos

peronistas de una eficacia y verosimilitud no sólo probada sino enviadiable-


fuera el de la ruptura del contrato fiduciario del 1% de mayo de
como
1974 entre Perón y la juventud peronista en la Plaza de Mayo: ambos partici—

pantes rechazaron las bases sobre las que se podía establecer el contrato,

por más fregil que éste fuera. : . '

- Pero una «vez establecidas las bases del contrato fiduciario a través

de la verdad, el discurso recorre con el auditorio las vías de la persuación


que no es' naúa más que la actuación de un cierto número de modalidades
del lengtaje: hacer saber, hacer creer, hacer querer, hacer deber y hacer
poder. El. orador político deberá construír un: auditorio
que no sólo sepa
sino que también crea en lo que sabe y quiera lo que figura en el programa
político propuesto como un deber, para lo cual siente que puede.
"
-

Estas modalidades -su uso O la omisión de algunas- están siempre presentes


caracterizando a los "tipos" de discurso. El que habla lo hace siempre
desde el saber (los sujetos del poder saben") y los destinatarios podrán
compartir o- no este saber (los oyentes “deben" saber"), siendo tratados
como ' niños —no saben. ni pueden-=, como. impotentes- saben“pero no pueden—
o como adultos -—saben y pueden-.+ o

Muchos discursos políticos argentinos han jugado.con estas posiciones


el «discurso "paternalista" de algunos momentos políticos del peronismo:
o el discurso militar de estos últimos años, discurso de la "impotencia"
desde el punto de vista del destinatario. Obligados a escuchar en la imposi-
bilidad práctica de adherir o: rechazar, * los receptores de los discursos
políticos militares de este período pueden cumplir con una sola acción
icallar. El discurso se presenta siempre. — y no sólo en cuanto ritual-
desde una instencia de poder irrefutable, produciendo el consenso general
del silencio. ? :

Digamos entonces que si bien hay muchos discursos, no todos son políticos

e
porque do todos convencen. Los discursos establecen sus propias fronteras

e
y no existiría un discurso ubicuo, tan- general que contempie todas las
posiciones posibles y todos los auditorios inimaginables:

A A
un discurso
semejante sería el discurso de Dios o el de la inocencia. ¿Es posible
"hablar" a un púlpito confesadamente escéptico pero que "quiere creer'"?.
“i lo que está puesto en juego es siempre una implicación personal, tal
vez el discursopolítico argentino actual pueda replantear las bases de
A

un nuevo contrato, más cercano, más vinculado a la práctica y a las vivencias


A

cotidianas de estos espectadores que también esperan del discurso de los


políticos un lenguaje directo, menos mitológico, que los considere fundemen-
talmente como participantes. :
Estrateg Las
D ÍSCUESÍIVAS

SECRETARIA ACADEMICA
DEPARTAMENTO DE COMUNICACION
..
y3
“LA PRODUCCION DEL DISCURSO o po
del funcionamiento discursiyo
formulaciones teóricas de la descripción
En er
teoría sem io-lingúística
Greimas (Greimas, 1976) afirma que £%3 lo que la
pción 80 OD (
dar cuenta hasta el momento es de la descri E
SES

ARS

la BASE para una diferen-


conceptos analíticos-descriptivos son
Estos dos
esbozada por Simonin-
te tipología de discursos, no contradictoria con la
Gumbrach, sino complementaria de .aquella.

a que
semióticla intentará, a un nivel meta-
Es el lugar de la lectura
de producción de este discurso. Por
discursivo, formular las 'REGLAS
de embrayage/debrayage no pueden
otra parte, los conceptos operativos
sobre el sujeto que los manipula,
ser separables de toda una teorización
más amplia que abarca la competencia
y se insertan así en una "problemática
en cuanto productor de un cierto universo
y “la performance del sujeto
significante y sus estrategias. :

a) Debrayage
la instancia de la enunciación se disyunta
Es la operación por la: cual
términos ligados a su estructura de
y proyecta, fuera de ella, ciertos
(Greimas, 1976). ? se
base (Yo-aquí-ahora)

que es una proyección de la estructura básica


Desde el momento en
tres tipos de debrayáges: «actanciales
de la enunciación, encontramos
índices de persona (Yo/Tú); espaciales (la proyección
(la proyección de los
espaciales como los equivalentes :al "aquí"
de . categorías adverbiales
(la proyección de la categoría adverbial temporal
del discurso); temporales
discurso, €es decir al presente de la
como equivalente al "ahora" del

enunciación).

, etc.
En la construcción de un texto-literario, político, pedagógico .
. ión implí cito
5 O instaurar “:al sujeto de la enun ciac
Be puede proyectar
rlo en el discurso como Un simul acro de enunciación. Esto es
e inst aura Y
.s
posible a través de dos operaciones lingiiísticas:

aparición del "Yo" (Ej. "Yo afirmo


a)debrayage enunciativo > la
la
“s
XA
A
A
.

el caso de una ENUNCIACION ENUNCIADA*


y. es

e
en Cesta hora decisiva. .-")
en el interior del texto.

del sujeto de la
enunciacional : la cancelación
b) debrayage
de la persona gramatical raja (Ej.
("Yo") y la aparición
enunciación Gral. De Gaulle); es el
país..." discurso del
un gran
“La Francia es Ñ
caso de la ENUNCIACION OBJETIVA.

b) Embrayage
el efecto de retorno a la instancia
la operación contraria. Designa
Es la oposición entre
por+ - la sus pensión , de
.de la enunciación: producida
(Greimas, 1976).
de. categorías de la persona-espacio-tiempo
los términos interior del
de otros actores en. el
el simulacro de la: instalación
Es
de dos operaciones lingliiísticas:
También es posible a través
discurso.

cuando el Sujeto de la enunciación


embrayAge enunciativo:
a). sa !
como Un actor más. (Ej. "El Gral. De Gaulie pien
entre en el discurso ión
Gaulle) generando una ilus
que... discurso pronunciado por el mismo De
sin embargo, un discurso que,
tratando de objetivar
de referencíialidad,

auténtico Gral.De Gaulle el


en primera persona -es* el
está proferido
habla. " :
* que
se desdobl a en :
cuando. el Sujeto
b) embrayage enunciacional:.
ser un diálogo efectivo O
un diálogo interno. Puede
otro, instaurando han sijdo
ísticos
simulacro. de diálogo (los ejemplos más caracter
bien un la enun ciación
Es el suje to de
"confesionales del siglo XIX).
las novelas En el caso ,
y enunciatario .
simultáneamente como enunciador
gue aparece pensarán
los artificios del tipo: "Ustedes
del discurso político, son
con enunciatarios :
se establece un diálogo ficticio
que yo creo..." donde

internos al texto mismo. :

A
.
.
Es posible dar cuenta de este sistema de operaciones en un' micro-modelo
del tipo: p> ¡

E E CATEGORIAS CATEGORIAS |TIPOS DE EMBRA | TIPO


Ss NN PARADIGWMATI—j SINFAGMATI- |YAGE/DEBRAYAGE | DISCURSIVO
T u CAS CA :
Ro N + !
UÚ Cc !
NN ENUNCIADO- :
T A ERA. PERSO ENUNCIACIONAI,
. . (discurso
Ú D NA "Icbjetivo"!)
R 0
EL H
A í :|

8 NARRADOR ENUNCIA-
A N PERSONA . FNUNCIADOR
CION—
c u ENUNCIADA
q N 1ERA. y 2DA | lera..p'"YO
. p'YO" Crelatos con
yo" .Confesio-
A Cc YO/ IU NARRATIVO
nes,
N I
E A ENUNCIATA—
1 0 o" 22
RI Diálogos)

A I 2da. p.'""TU"
L 0
N e

a nr Áá
ro
Modelo Sintético
Estrategias
>

El lenguaje no es exclusivamente un conjunto de palabras,..ni siquiera


a
de frases; el "YO" que habla está disperso en el texto a través de todo
un conjunto de estrategias que “emplea y que forman parte del patriminio
social de la 'lengua. este De
modo un "discurso" no es jamás producido
por un sujeto empírico, enunciador, que produce "antes! qué el: texto,
" sino que, por el contrario, el sujeto es la CONCLUSION de sus estrategias
enunciativas. Del mismo modo que el texto «se comprende al final de su'
lectura,el Sujeto extralinpgilístico .—"real" o "empírico", por decirlo
de algún modo-se reconoce también al final de-un proceso, reconstruyéndolo
al igual que el discurso donde se inserta y que le sirve de soporte.
Este "sujeto vacio", tan vacío o deíctico como la estructura pronominal
Mr
mm
O!
que lo sostiene, encuentra su sentido en la situación comunicativa, en
la dimensión pragmática del discurso, .

La introducción de estos dos términos operativos y la descripción


'de su funcionamiento por parte de Greimas, así como el intento de revertir
una tipología de los discursos . basada tradicionalmente én los grandes
"temas" más que en los funcionamientos reales de la lengua, como es el.
caso de Simonin-Gumbrach, nos permiten comenzar la lectura de un texto
como un ¿juego operacional, formando parte de la "semiosis ilimitada"
de la que hablaba Peirce a principios de siglo.

B-LA TEORIA DE LAS MODALIDADES EN SEMIOTICA

2.MODALIDADES Y MODELIZACIONES
Otro aspecto a tener en cuenta en el análisis de las estrategias discur-
sivas es-el que representa el estudio de las modalidades.

Ha sido [Ha E a
j el primer campo de reflexión concerniente
.
a las :*
modalidades. .A través de la reflexión de Charles Bally y de Brunot ''pasa'"
a la lingúística y salta a su vez de ésta para instalarse en el centro
de las actuales reflexiones semióticas sobre descripción de discursos
(Cfr. Langages n2-43, 1976). Es un terreno de encuentros trans-disciplinarios .
donde hay que ser muy cuidadosos para no incurrir en errores terminológicos |
y conceptuales.

. A. grandes” rasgos
E

ES es ste modo el estudio de las


moda. lidades nos reenvia con inuamen ea la descripción del funcionamiento
de los verbos performativos”' y aparece como una problemática de enclave
para la lingilística contemporánea y para la reflexión filosófico-lingilística
de la escuela inglesa (Austin, Searle, Grice, Stawson).

La «semiótica, a partir de los adelantos de las gramáticas narrativas


con las modalidades en el discurso:
: trabaja
“el punto de partida . de Aa pd
verbos modales “es .
un sujeto investido sea por
_ analizado, recorrido que realizará
un texto
saber. Los últimos querer o trabajos
la modalidad del hacer, del poder,
aplicada de Greimas (1983) son una prueba de la aplicación
de semiótica
s concretos.,
«de una teoría de las modalidades a textos figurativo
*
e

de la problemática de- las modalidades, ligada a la


La introducción
d de una gramática narrativa,
de los verbos performativos y a la posibilida
tigación de una socio-semiótica
es un paso más que da la semiótica la inves
del discurso. :

de estudiar, dos, principales recorridos


a grandes rasgos, los
Trataremos
sigue actualmente el sobre las modalidades. Descartamos el
estudio
que
y leeremos a la teoría
terreno de las formulaciones estrictamente lógicas
bajo una óptica:
de las modalidades en una: perspectiva lingiiística y luego
semiótica.

2 1Modalidades en Lingilística
son las CATEGORIAS VERBALES las que otorgan la
Para la lingiiística
localización temporales y de modeliza-
principal traza de las operaciones de
definición de Simónin-Gumbrach: "modalidades es la toma a cargo;
ción. La
o";-o bien-la del lingliísta
por parte del sujeto enunciador, de su enunciad
se afecta '
francés A. Culioli: "la modalidad es una operación por la cual
[es una categoría gramatical" (Culioli, 1975),
de una modalidad (...)
un Sujeto y un Predicado (a R b)
siempre una RELACION entre
implican
de modalidades y tratará de describir
Culioli trabaja con" un. conjunto
se siemp re con una descr ipció n de los procesos
su funcionamiento, vincu lándo
enunciativos. :
.

(á) Con la aserción dados los valores


A
V (verdadero) / F (falso) o bien

0 7/1 .o bien

/ negativo o bien A:
positivo

P / *P
ve

5
.. ES . Pm ro rr mr

se púede locálizar un valor u otro; pero


En el nivel de la .aserción.
cero de la modelización. |
no existe modelización, es el grado:
eo .. Pa o o.

“de presentar a los. dos valores o


(b) Con la interrogacion se trata
reépuesta se” elija sea P o sea
en la l
(0/1) (P/P) de tal manera que”
P. En laa práctica no se “opera jamás con sistemas de dos valores, sino con'
grados de indeterminación, de certeza .o de negación, Pero la estructura
que subyace es la anterior.

1
:
.

la injunción 'se trata de una relación que no és ni


(c) Con
pero es compatible .con ambas. Se relac .onan
aserción «ni interrogación,
con el imperativo y el subjetivo como modos verbales.
: | ] -
.
4

: o ,
e.” . Ej. "siéntate"

"Ella se siente"

la relación que recubre estas freses es de tipo injunción: el imperativo


reenvía a algo que “no es ni verdadero ni falso pero se podría acercar
a Vo'F.

2.2 Modalidades en -Semiótica


partir
A' de la definición: de Benveniste: "Llamaré modalidad a una
aserción .complementaria portadora sobre el enunciado de una relación
una «modalidad es incluir una jerarquía de predicados
L..). Introducir
modalidades comunes a la lógica y,a la lingiística: la
(...). Hay dos
POSIBILIDAD. y la NECESIDAD (...). La categoría lingúística de la modalidad
dos verbos: PODER y DEBER, se comienza a considerar a la lengua
comporta
abstracto y cerrado sobre sí mismo JCOmMS” un universo : . -
no como un universo
donde se desarrolla el juego de los actantes, : : o
de discurso, un escenario
“sus relaciones y sus. transformaciones.

an
mio

4
El SABER, el PODER y el QUERER sen las tres modalidades que Greimas estudia afirmando
que permiten "leer" cualquier discurso en tina dimensión discursiva autónoma:

En general los SUJETOS aparecen instituídos por diferentes modalidades


que se detectan en la construcción de los discursos: el sujeto instituído
por el QUERER-HACER adquiere: (a) el saber-hacer y configura el paradigma
histórico de los héroes que realizan.un recorrido COGNITIVO. La historia de
los discursos sociales presenta un repertorio de' ejemplos: desde los
discursos políticos donde el líder habla desde el conocimiento del! tipo
"Yo soy un viejo soldado que les habla y se ..." (cfr. Escudero, 1978)
hasta los héroes de las historietas del tipo Asterix, basados en la
astucia.

(b) el poder-hacer configurando el paradigma


de los héroes que realizan un recorrido PRAGMATICO. Son los discursos
. desde el poder, o desde una instancia de poder -—institucional- irrefutable
como por ejemplo el discurso militar argentino (Escudero, 1978). En
el orden de la literatura de masas, héroes como Superman -un arquetipo
de este tipo de construcción- se instauran en esta dimensión.
"

utilizados —hacer, PESA a situados en el nivel que las modalida-


des de saber y poder que los subsumen: la hipótesis es que la relación

Pero el actante sujeto no adquiere su estatuto qe, actante personal


sino a través de un acto lingilístico particular en el [desigar a sí mísmo
-o es designado- como'sujeto. La elaboración de un sistema formal permi tYy
comprender mejor Cómo constituír una tipología del sujeto, su dimensión
paradigmática; y si podemos hacer valerque la significación cambia con
el orden, encontramos los medios para indicar cada modalidad y presentar
los múltiples programas narrativos que pueden cumplir estos sujetos,
es decir, la dimensión sintagmática.

Foucault afirmaba. que todo punto de ejercicio del poder,es al mismo


tiempo un lugar de formación del saber (Foucault, 1971). Esta modalidad
jaforma a _la primera» Finalmente la garantía del SABER es el ejercicio
de la función de PODER.

rt
modales, :encontra-
ao

2.4: sí algunas :cónfiguraciones Baro

o -
mos que:
sr

:ma matrativo
Ae
complejo. Bj
)

modalidades narrativas son "entonces poder/saber/querer. En-


2.5. Las_
LON sintagmática de estados y transformacio-
de calificaciones y de haceres. Este nivel de na-—
nes de estados, es decir,
obviamente .en los discursos literarios, está
rrativización, central
también los discursos pedagógicos y políticos:
en se califican
presente
a los sujetos -—tanto enunciadores cuanto enunciatarios- para hacerlos
obrar.

en función de esta cualificación -que puede ser donada oa


("puede"), y es
la figura carismática del líder” que se "acerca" .
exteriormente (pensemos en
adquirida interiormente- que inicia su hacer. De allí
a su pueblo),
es posible definir” a la narrativizació n como un encadenamiento
que
y virtualidades, donde los heceres transformados operan
de realizaciones
o realizan los cambios que son virtuales en un estado precedente.

teoría de Greimas la estructura modal simple es la "modifica-


En le
»

ción de un predicado por un sujeto". o . .


a 4

La” jerarquía” 'dé' estos dos” “enunciados—elementales-(hacer-—ser).-


puede ——. vo
ser denominada PERFORMANCE. . . “> o o -

2-6.Las modalidades veridictorias

A continuación trataremos someramente algunas modalidades que aparecen


frecuentemente — y a menudo - constituyen la estructura profunda .en los
discursos “sociales. La "modalidad _de veridicción: es la que instaura
la "credibilidad" del discurso.

"Lorsque 1!cbjet du faire persuasif est la véridiction,le dire-wrei ””


de 1'énonciateur, le contr-objet dont 1'obtention
est escomptés oo >
: siste dans la "confiance", le "credit", ou, tout simplenent, le cfoi- >
- re-wrai que 1'énonciataire accarde au statut
dí discours enoncé",
(Greimas, 1976). "

Un enunciado. de estado' teniéndo pór sujeto S.l, es susceptible-der=o costes


- modificar todo otro enunciado de estado producido por un S. 2. El predica
do modal puede:

En el eje sintagmático leemos que aquello que-:es y parece, resulta :


verdadero, mientras” que no parece y a su vez no es, resulta 3 falsedad. : . “o
En «el eje paradigmático * aparece que lo. que es pero no aparece, recubre
nn.

la dimensión del secreto, y lo que parece pero no es, resulta un engaño»


mos

-2.7.Las modalidades factitivas: la manipulación


'

1
1

1
1

!
,
'

1
mo

Todo enunciado modal tiene por. predicado "hacer" y por sujeto un


5 1 que es susceptible .de modificar otro enunciado de "hacer" con un
sujeto S 2. Es el caso de "
_Ee-—__—.
—-
Vemos que el campo “de la modalización factitiva recubre totalmente
-, o en parte—- los conceptos de comunicación, delegación, representación,
etc. Esta modalización se presenta como un hacer cognitivo que trata
de provocar un hacer factual. Si la veridicción es una operación cognitiva
que se ejerce como un saber sobre los objetos, la modalización factitiva
«hacer ser- es una operación manipulatoria que se ejerce sobre los
: sujetos.

Esta presentación, forzosamente esquemática, nos permite afirmar


en todo texto operan' al menos «dos niveles individualizables para el
análisis semio-lingúístico: un nivel enunciativo/enuncional que es
¿posible describir a partir de operaciones de localización en el texto,
y un nivel de gramática narrativa, es decir, todas aquellas "acciones"
que se cumplen en el ouinterior de un texto y que pueden ser atribuídas,'
sea al sujeto de la enunciación como al sujeto del enunciado —ambos
actantes sintácticos. Estas "acciones", o bien transformaciones, se
describen lógicamente aplicando el juego de las modalidades a-.nivel
narrativo, amplio abanico de posibilidades que describirá el lugar
de los sujetos y su calificación, la búsqueda y posición de los objetos,
la circulación entre ambos. : ?

3.LA RECEPCION DEL DISCURSO


Hemos visto someramente cómo a través de los problemas presentados.
- por una lingiística de la enunciación, se ha podido transformar una
concepción del sujeto "fuera" de la lengua, a una del sujeto "determinado"
por su discurso. "

o . ¿ pS “Ne .. - . . a - n=
. , El sujeto sicológico, sujeto “que se ericuentra todavía, como hemos
' visto en la concepción de Benveniste, se ha distelto en una red de .
relaciones sintácticas, no llega siquiera a adoptar” el estatuto de
"persona" sino el def: como en un juego especular.

Mi hipótesis en esta primera parte. -teórico-descriptivá -o0 al menos


mi punto de partida para la serie de "lecturaS'de discursos políticos
es que este espacio dejado vacante por el sujeto de la teoría lingúística,
sujeto-en—-desconstrucción, o tal 'vez en des—-centramiento, es completado
a nivel teórico, por el creciente desarrollo .de una "teoría de la recepción
de los discursos y donde lo: que está en cuestión no es aquellá problemáti-
ca centrada alrededor de un sujeto que "habla"o o "produce",. sino en
la RELACION entre un sujeto productor y. un sujeto receptor, o más precisa-
mente, entrek | , de textos.*

El texto es produc “de-ido


manera de crear un lector: Esto no significa
necesariamente que el texto sea exclusivamente un sistema de Pprescripcio-.
nes, —hay textos- que privilegian una única lectura sobre otras. -posibles,
como es el caso del discurso ublicitario- sino sim lemente ui ro
indicar que el

3.1 coomSi es posible afirmar” que la única existencia posible del sujeto
es a través" y. en cuanto tejido de relaciones, de posiciones o de “inters
c-
ciones que parten del texto pero que terminan de construirse e
proceso! canpletivw. de la recepción-lectura, es porque no Jestá operando'
solamente con una teoría del sujeto en cuanto locutor-productor que
deja sus marcas en el texto, sino porque existe,. implícitamente, una
teoría del lector/receptor.. Utilizamos _lector/reteptor para marcar
la doble instancia, escrita u oral de recepción del sistema.

Hemos visto (cfr.Módulo 1- Actividades dé estudio) el estudio de


elementos, reglas y condiciones de la comunicación linguiística.
El concepto de "juego lingilístico". .como una estrategia comunicativa
“dentro del tiempo y ee£ espacio, que tiene sus bases en las relaciones .
sociales. de interacción Y que se proyecta como un potencial. ilocutivo
y perlocutivo (-en definitiva: la hipótesis según la cual comunicamos
con textos y cada “texto genera un sistema de expectativas sociales),
me parece fecundo en cuanto pone el acento sobre la dimensión manipula
to-
ria del lenguaje: no existirían enunciados o. cadenas de enunciados
(textos) particulares, sino estrategias semióticás y en consecuencia,
el lenguaje no respondería necesariamente a un modelo basado en la
apo > teoría. de, la información, sino más bien respondiendo a ún sistema de ” A
constriccionesy expectativas. (2)

El discurso visto como una trama de efectos comunicativos donde

el lector/reteptor puéda reconstruir la forma imaginaria original imagina-


da por el autor. Este lector conlleva un contexto sicosocial preciso
que * determinará a su vez los recorridos de lectura efectuado5»Más aún,
esta lectura no es nunca "abierta", es una lectura controlada por el
autor que fija a su vez recorridos de integración posibles. En su libro
Lector in Fabula, Eco(1979) - “afronta los problemas de una pragmática

del texto en términos de la actividad cooperativa de este posible lector


lt

("Model Reader"): el lector, como principio activo de interpretación, forma

parte del cuadro generativo del texto mismo, y las obras que definía
como "abiertas" son el ejemplo de este principio que regula tanto la
generación cuanto la interpretación de todo tipo: de discurso. Volveremos
sobre esta perspectiva al referirnos al análisis del discurso político.

-3,2 Loco En una perspectiva afín a la presentada, tendiente a individuali-


zar las relaciones entre los discursos producidos por una cierta sociedad,
condiciones de producción y efectos de sentido, es decir, postulada
a partir de una teoría de la producción, circulación y consumo de los
discursos sociales, la teoría de 'la lectura de Veron (Veron, 1987)
se inscribe a partir de la consideración de la operación de lectura
como el investimento dado por el analista sobre un cierto texto para
TRANSFORMARLO en discurso.

La lectura aparece entonces como la imposición de una gramática


de reconocimiento, gramática preconstruída por el analista y que lo

configurará en una posición diferente al de simple consumidor. Esta


Gramática asume un
la SISTEMA DE REGLAS que
forma de pone en función
el análisis. De allí que el funcionamiento de cualquier discurso revele
dos gramáticas diferentes: una gramática de producción -—que son las
condiciones externas al texto (determinaciones sociohistóricas)' e
internas al texto (el “análisis de enunciación) para generar significación-.
y Una gramática de reconocimiento “que son aquellos efectos de sentido
(lo verosímil, la ficción, el realismo, la cientificidad, la confesión,
la apelación, etc) producidos-«e fmbas gramáticas son los dos.polos
de un sistema productivo-de significación. 1

*(2)Perspectiva presente también en Bateson C. en una "Teoría del gioco o della fantasía",
della mente,
en Verso una ecología Adelphi, 1976. Edición original to an Ecology.
Steps
of Mind, Chandler Publishing Co. ,1972.
a
Ar

o
Ahora: bien esta gramática de reconocimiento "no existe más quelbajo
. la forma de discursos producidos" “yrre
e io e
€el lector=+analistá, situado en
posición de "reconocimiento"
trabajará * con los Fasgos, con las marcas
que hayan dejado en el disc Surso
aquellos procesos de producción discursiva,
La lectura-partiendo de una gramática sea de producción que de recono
ci-
miento es. siempre la actualización de uña de. las dimensiones posibles
de un discurso:” L'analyste de discours peut s 'interésser, soit aux
contraintes. d'egendrement d'un, discours ou d'un type de discours, soit
aux lectures dont un discours a ete l1'object, c' est-a-dire, a ses effets
(...). En analyse des discours, "povoir" est le mon “du systeme de rapports
un discours et ses donc <a la problematique des
efféts de sens des discours|
(Veron, 1978).

4.CONTRATO DE LECTURA
Desde el momento que consideramos al discurso como portador de una
fuerza perlocutoria, en la medida en que todo acto eñunciativo lleva
a Objetivos más. lejanos y complejos que la simple enunciación física
Y, en consecuencia, genera un sistema de expectativas, y considerando .
también que tanto el sujeto productor cuanto el sujeto
lector se encuen—
" tran inscriptos” Deol “texto "es decir,' funcionan cómo dos '“actantes
transnarrativos PARE una Cierta estrategia de tránsmisión” que se
establecerá entre estos dos actantes y que dependerá de la construcci
ón
y distribución por -. parté del sujeto úe la enunciación de operaciones
de embreyage/debrayage específicas tendientes a crear un cierto
espacio,
el espacio. textual: EN O , Ñ

44.3. Esta estrategia toma siempre la forma de un CONTRATO ENUNCIATIVO:


" (Greimas, 1976) establecido entre: los dos participantes del discurso;'
el enunciador y el lector/receptor que pueden ser caracterizados genérica
mente como poseyendo un saber generalizado sobre los sucesos textuales.

Es ca Través de la narración ficticia, política, publicitaria- que


el sujeto de la enunciación delega o no esta competencia global
de a uno
los actantes narPativós. De “este "modo
se puede delimitar en el interior
de un texto, dos espacios que permitirán la elección del nivel de análisis
. pertinente para una posible teoría de la lectura:
ns nik
va. 1 Gi.k.
ed

Una teoría de la lectura de los políticos se situará en


discursos
este espacio,
primer mientras que una gramática —narrativa, persuasiva,.
apelativa, etc.- enel sentido greimasiano, daría cuenta de este segundo
nivel, o plano descriptivo.

4.2 o. A su vez este contrato implica dos tipos de acción diferentes:


unaj : enunciador y una
Sivé por .
parte ; del
por” parte ector/receptor. La práctica del sujeto productor, enuncia-
dor, destinador del discurso, es siempre un hacer PERSUASIVO, por cuanto
tiende a cambiar el sistema HODAL del destinatario-lector, por cuanto
hacer creer al lector Y MPW es verdadero, es decir, es un “mundo
quiere
ficticio (en el caso de la literatura de ficción); o es un mundo real
(en el _caso de los' discursos sociales).
. . r+

Acción que podrá ejercitarse apoyándose tanto en el


es un discurso literario", o "publicitar io", o "político", existe siempre
un marco institucional del cual el discurso se recortá), cúanto en

, “apelando a la seducción que un discurso ejercita sobre el


lector. Hacer interpretativo, práctica interpretativa, por parte del
destinatario-lector que es siempre una . relacción de tipo. fiduciaria
como por otra parte la mayoría de los contratos- aceptando las propuestas
de lectura y también eligiendo la imagen de su comptencia como lector:
o bíen la basada en el poder o la centrada en la seducción.

Hablar de CONTRATO ¡implica una relación entre dos actantes en una


situación comunicacional dada e implica asu vez un proceso recíproco
de manipulación. ¿Por qué hablamos de manipulación? Desde el momento
Ls
a
-
que entendemos que TODO DISCURSO PROPONE SIMULTANEAMENTE. SEA -UN PROGRAMA .,
DE . ESCRITURA articulada a través de estrategias textuales, sea un hacer—
interpretativo y en consecuencia, UN PROGRAMA DE LECTURA. Este contrato *
se establecerá entre un -entinciador - y ún lec tor/receptor que acepta
las cóendiciones, el juego modal. subyacente: "para ejercitar la actividad
de. la lectura (el querér—hacer) es requisito. previo aceptar los. rasgos,
las marcas, los recorridos de lectura posible en el texto impuesto
a través de dichas estrategias enunciativas. s

5.CONCLUSIONES y o o »

De este modo la operación de lectura, lejos de constituirse cen una


actividad absolutamente libre, aun siendo fundadora de un sentido simple,
es siempre un RECORRIDO
de sentido,
'y en este caso es siémpre MANIPULATO-
RIA. -

La operación de. lectura” podrá encontrar su estatuto modal a través|


de la manipúlación en, cuanto acción tendiente a hacer seguir a los'
hombres un * programa determinado, según la «definía Greimas: "Situada
sintagmáticamente entre el quérer del destinador y la realización efectiva
por parte del
destinatario, sujeto del programa narrativo propuesto.
por el manipulador, la * manipulación opera sobre la persuasión, articulan-
do el hacer persuasivo del destinador y el hacer interpretativo del
destinatario"(Greimás, 1976).
6

Asi, la' operación de lectura se podrá articular en cuadrado modal


del tipo: o

o Podemos decir que los textos “proponen modelos de lectura a partir


de este encuadre semiótico. Fluctuan entre la soberanidad total sobre
un texto -—un discurso tan: abierto, tan aleatorio'
que sea construído
ti literalmente por su lectura, y, donde...el lector se situará en el eje
SETE
co

AS
;A

LA
iibértad y la independencia, hasta - una. sumisión
siñtagmático “de Ja
en la obediencia a un código de escritu-
total. “del lector al texto, basada
la impotencia frente” a un universo fuertemente estructurado
ra y. a
(como por ejemplo: las arengas
vinculación resultaría peligrosa
y cuya
militares). ,

paradigmáticas porque implican


Más complejas son las relaciones
el simulacro: un texto se prese nta
la posibilidad de falsificación .y
e" el recorrido
como * plaus ible de múltiples lecturas pero el lector "sigu
; o bien un texto
propuesto por, el autor, su clave de lectura (humildad)
(obediencia) pero es leído
se presenta como altamente prescriptivo
ño gramática de produc-
a su
en una clave o con un código totalmente extra
el preámbulo de la Constitución
ción (libertad) —como por ejemplo tleer"
nocimiento-
Argentina en la campaña de'1983. Todos los procesos de desco
en este eje y es.en el nivel parad igmático
«reconocimiento, se mueven
podría escapar-eventualmente- a los
donde una operación de lectura
Existe un caso privi legia do
procesos de manipulación sistemáticos.
de los discursos sociales donde este juego
dentro de la producción
una fuerza dramá tica: la construc
de libertades y prescripciones se da con
del discurso político.
ción —y descripción- del funcionamiento

ES
| -
e o
. . . S .
j '
, "

Bibliografía - al |

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mo
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DE LA CREENCIA: APROXIMACIONES EPISTEMOLQGICAS |


2 Y SEMIOTICAS l Eric Landowski
. SvATer vi 0Aaj
Sinceridad, Confianza, Objetividad-
fi

1.: Partiremos de una observación binal:.en el marco de la comunica-

, ción diaria, en la que “la semiótica: se propone especialmente dar


cuenta, se puede constatar -con pena dirán los espíritus positivos-
que no es siempre necesario “justificarse racionalmente paraj|: ser
.
creído:
"Ahórrame tus explicaciones... .confío en tí"
ni a veces, suficiente probar lo que se dice para llegar a ha erse
creer: : ] |
"Ud. tiene seguramente razón...pero no le creo" :
Para ver lo que estas aserciones tienen de paradójico, no es necesa-

rio, nos parece, admitir la hipótesis de dos niveles de función del


"creer", y su relativa autonomía:
"creer" (o no creer) lo que dice alguien es una cosa.
- "creer" (o no creer) el que dice algo y es otra cosa.
En el prímer caso todo pasa como si el hecho de "creer” dependiera

sólo de la presencia, en el discurso enunciado, de ciertas marcas

o propiedades teniendo ellas solas como efecto el hacerlo parecer

verdad, independientemente de las cualidades propias, o del status


del que lo enuncia. Desde este punto de vista, la utilización de
los procedimientos argumentales codificados y valorizados- por los

lógicos difieren fundamentalmente,


no en Cuanto a su función, del
recurso tal o cuál a sistema de "connotaciones veredictivas"'en uso
en otros contextos culturales (po ej. el caso de la recitación "recto
tono" señalada "por Greimas), no están allí más que diferentes medios
susceptibles de concurrir en función de la diversidad de las. culturas,

a la producción de un único e igual efecto de sentido-(la verdad


del propósito sometido a un interlocutor). En estas: condiciones,

, si bastaren efectivamente "buenos argumentos"- o aún una dicción .


apropiada - para traer en todos los casos el convencimiento de otro,
o si inversamente toda convicción tuviera como previa la irrefutabilidad

de un razonamiento (o lo justo de un tono), no sería necesario ir


más lejos; el análisis del "creer" saldría-entonces —-muy simplemente


si se puede decir- de una ciencia de lo enunciado, a la vez lógica
y retórica del argumento y poética del discurso.
e
Y es aguí en que vamos a reectontrar
el ségundo de los dos niveles
evocados hace. un' instante. Porque; cada :uno"lo: 6abe —comenzando”
por “*
los lógicos- la producción de los estados de creencia no es completamen-—
te, asunto de "lógica",
"(...) el hombre es, en resúmen, un ser lógico, pero: ho lo es'
. completamente. Por ej. la mayoría de nosotros se inclina a la confianza
“y .a la esperanza, más de lo que.ños permitiría la lógica." 2 (Ch.
-S..Peirce). EN :
Sistématicemos: un sistema explicativo se encuentra aquí en falta,
ya que no, se excluye que "creamos" +-mas allá de lo que autorizaría,
la lógica. Es necesario- entonces encontrar, a un nivel intermedio
entre el formalismo lógico y el substancialismo psicológico, otro
sistema explicativo, capaz de dar cuenta -en términos racionales
y no
metafísicos- de lo que nos lleva efectivamente a la confianza
“o a la
esperanza, "más de lo que la lógica nos autorizaría".
¿Esa la semiótica, narrativa y discursiva a la que recurriremos
para tratar de construir este nivel intermedio, que pone primordialmente
un juego -tal es nuestra _hipótesis- diversos dispositivos que salen
de la sintaxis actancial. :
2-— "Haciendo así, nos damos al' menos una ventaja inicial, la: de
disponer en conjunto -una problemática muy general, y del metalenguaje
que la expresa. La problemática es evidentemente la de la comunicación.
3- Actantes encuentran ahí implicados: .,
- el objeto sobre el que lleva el "creer" (o, la duda): problema de
verosimilitud. : :
— Un primer sujeto, que tomando a su carge el hacer persuasivo, eba
al mismo tiempo,- -como .enunciador querer" y "Doder ser creído": proble-
matica de credibilidad. :
- Por fin. un enunciador, “sujeto del .hacer interpretativo igualmente
dotado ' de uná competencia. Para creer, aún es necesario el "queber*
.y el "poder": problema de credulidad , : ;
Aunque tal esquema pueda ' aplicarse a un número considerable de
situaciones y de discursos, no se aplica
-y es su virtud-'a todos.
Están en particular, excluídos de su campo pertinente los discursos

de carácter
'axiomático, que no teniendo en sí mismos nada de verosímil
(o de inverosímil) tienen en virtud de sus únicas reglas de formación
: : interna y de su coherencia, dejando por decir así en paz tanto a
*¿su: enunciador * —del que no comprometen para nada lá "credibilidad"-
- Comoa su acompañante, del que no piden para nada: la "credulidad".-
No sucede igual, en revancha, con la comunicación común, cuya
eficacia descansa en esencia en la producción de simulacros encargados
“de “garantizar una. apariencia de adecuación entre el discurso y el
universo de referencia: del que se da para la "representación". Desde
este punto de vista hay dos clases de mecanismos a encarar: ES
PUODTATATY
La
go?
. .
ÉS ” - +. rc
Pa - a , Ta : , a
O

a) unos ponen en juego el arreglo intern o del discurso enunciado y apun-—


tan ala creación de ilusiones referenciales a las que ya aludimos.

b) otros que nos interesarán más, compromenten por completo la competencia


semiótica de los sujetos. de la: comunicación y constituyen la base de la
que se podría llamar la ilusión enunciativa. . .

En términos un poco metafóricos todo sucede en el primer caso como


el nivel (Áiscurso "pegado a lo real" es decir desembragado en relación
al sujeto que lo produce, decía objetivamente el "ser de las cosas", y“
.en el segundo, como si el discurso, reflejo de una subjetividad que allí
se expresaría sin mediación, diera directamente, con toda transparencia,
“acceso a la "verdad del sujeto". En un sentido la diferencia entre los
dos tipos de procedimientos, ¿es ', se lo 've,bastante delgadap Mientras

.
que con el procedimiento . de-* desembrague el efecto de verdad del discurso
resulta de la producción de “los simulacros del mundo referencial, con
el procedimiento de embrage, el efecto de credibilidad es alcanzado por
la construcción. de un tipo de objetos «semióticos no menos "ilusorios",
, E el simulacro de los sujetos referenciales, actantes
de la enunciación.

El mismo término de actante tiene sin embargo algo de ambivalente (y


a veces incómodo) ya que sirve para-designar a veces a los protagonistas
del acto de.la enunciación (enunciadosy destinatarios), a veces los protago-—
.nistas de la "narración", comprometides, en calidad de figuras del discurso
enunciado en el cumplimiento de programas narrativos (sujeto, destinatario,
etc). Entonces, ciertas configuraciones que ponen áindisociablemente en.
juego “los dos niveles, las estructuras de lo enunciado —texto y las relacio-
* nes entre enunciador y el destinatario, ya que los actantes de la comunica—
ción, instalados en el discurso, van a llevar funciones precisas como
actantes de la narración. . : poe

Para nosotros las instancias actanciales de la enunciación (enunciador/des


tinatario), lejos de ser simples polos neutros de ina relación de comunica-.
ción concebida como puramente funcional (del tipo emisor, receptor), són
al mismo tiempo, una hacia «a otra, . "figuras" cargadas de significación
y asimilables a las figuras actanciales de la narración, es decir,¡especial-
mente dotadas de competencia .y comprometidas en ciertos pro ramas. La
ilusión enunciativa, en calidad de garantía del "creer" oa menos en
ciertas de sus formas, resultaría en particular de esta superposición
de niveles. - c "
3 ¿ A qué tipos de "programas" se debe en estas condicione» ocuparse
|, para que los enunciadores se transformen en sujetos "creíbles" y correlativa-

ca
24

EIA
Me
,

IR
"mente sus | destinatarios en sujetos "crédulos"?., De: manera. my. abrupta
plantearemos que el "creer" en calidad de presuponer una relación —llaniada
"“fiduciaria"- entre. dos .'actantes, se sella en el momento sólo en|que puede
superponerse a la'simple relación de co-presencia entre acompañante; instala-
dos en el "aquí y ahora" de una "situeción de comunicación ada" ,- una

er car
relación “de tipo semio-lingiística. El enunciador va' a atribpírsele el
. estatuto actancial de sujeto sintáxico, en el interior de un esquemá narrati-

letra
"vo en que el "destinatario" ocuparía por su “ládo, la posición del “destinata-

SCUSA
rio sintáxico.
“He aquí la propuesta que vamos ahorá a someter a la prueba de ejemplos
concretos, sabiendo que esto:no funcionará. probablemente sin algunas recompo—
siciones necesarias. os :

5
Nes
4- :Encararemos primero dos tipos de configuraciones, la promesa y la 3
Es

apuesta, en las que la "cuestión de confianza" planteándose ÉS:


de forma explíci-
"ta, se resuelve según dos caminos divergentes, correspondientes a los
dos términos
principales de nuéstro "modelo". En -el primer caso el estableci-

si REA
miento .'de . la relación.:fiduciaria pasa .primero por la construcción «del

ro FUE
destinatario, en el otro por la puesta en lugar del sujeto. : 1

Es evidente que la .promesa pone en relación dos actantes y apunta,


entre ellos, a' la conclusión “de una .especie de contrato por el cual el

Spence
que promete (s1 el enunciador) se compromete a hacer algo, y generalmente
algo conforme a lo que espera su acompañante (S2). Sintagmáticamente,

ER
AASPE
se puede imaginar ya sea que .el compromiso de Sl responde a una previa
demanda de S2 (es lo que encararemos más. adelante en rélación a la' apuesta),

«0% Si
ya sea que al contrario el "que promete" anticipa todo pedido explícitamente

RASCA paraa
y se compromete en un programa conforme al único programa presupuesto

OA
de su acompañante. Un tal programa atribuído al destinatario fno puede
. ser construido más que por el' enunciador. Es lo que pasa en especial en
el pequeño juego de las "promesás electorales": frente a un cuerpo político,
al
Earl
VELO ARIAS
que en' la misma medida en que pide "todo" (la prosperidad económica
aay
y
las libertades, la estabilidad y eél' cambio etc.) no pide nada articulado,
“es al hombre político” (S1) que le cabe explicitar un orden de los valores
«en el que el destinatario:(S2', el elector tomado individual
IPP

o colectivamen-
-. te) pueda "reconocerse". |
AANz

“Lo esencial del hacer persuasivo del enunciador consiste pues,en este
Rp

-caso, a hacer adherir al destinatario a-la imagen que se le da de sí mismo en


calidad de árbitro (simulado) de los valores, es decir en calidad de destina-
tario. Es. generalmente” “del. _lado del. enunciador que uno se coloca para
' recusar las "bellas promesas". Se reprocha a los que la hacen de no mantener-
las luego, sin embargo, desde nuestro punto de vista; es en la fuente
misma y del lado «del destinatario: que la "vigilancia demistificadóra"
- debería sobre todo ejercerse, porque: lo que importa" ante todo, no es que
prometido se realice o no, sino el “acto mismo. de adhesión Por el que
ls
1
: e A
3 ze ml

a los simulacros que se les propone lés den


los sujetos; identificándose
que, bajo color de "promesas", construyen en realidad
confianza a los mismos
reside .la verdadera ilusión enunciativa, el resto no
su "deseo". Allí
es más que efecto segundo, referencial.
Con la. apuesta situación se revierte: se tenía:hasta aquí un enunciador
la
* sujeto en rol de destinatario, ahóra se. va a tener uno- destinatario
en . búsqueda de enunciador. Es quizás la superstic ión de las cifras, tal
como se la encuentra en algunos habitués a los juegos de puro azar, que
punto de vista: para que el jugador de lotería esté
ilustrará «mejor este
de ganar", jugando por ejemplo su fechá de nacimiento, es necesario,
"seguro
todos Los. números posibles, ..la "cifra ganadora" (o
sin duda: que - entre
la «que él crea tal) esté para él (s2) de una cierta manera constituida
de un verdadero sujeto competente (51). ¡Es decir
“en el equivalente
que otra .para llenar la espera, que es la suya, en “calidad
mejor
Apostar si Dios existe no sale pro ablemente
de :* .apostador-destinatario.
estructura muy distinta. La espera, el pedido —manifestadp entonces
de una
plegaria- va junto, allí también, con la construcción el Sujeto
por la
que la llenará. e .
-acá.se podrá objetar que se trata de un caso límite. Sih embargo,
Pero
dispositivos parecen también actuar en toda' clase de situáciones
los mismos
que no tengan más nada de "metafísico". Si "yo", 52, quien tengo necesidad
de un servicio cualquiera; le pido a alguien (51) "prestármelo" -confiando
“en "él para que la cosa se hagá- establezco entre nosotros dos una relación
a sujeto mandado, para el ejercicio de un hacer,
de . destinador-mandante
de un programa determinado y al mismo tiempo, es necesario,
es decir,
en eso —que tenga una cierta "representación" positiva
para que yo confie
aquel al que me dirijo: es necesario que mí acompañante, 5 1, me aparezca
-de
a la vez como capaz de realizar lo que le pido y como deseoso
especialmente
de hacerlo "para mi". En otras palabras: como "devoto" —es decir -como un suje—
to competente. Entonces esta representación- este simulacro del sujeto
soy yo sólo quien puede construírla, aún si el "hacer interpretativo"
que yo ejerzo antes de detener decisión,
mi es decir de' apostar o no sobre
la credibilidad de S 1l, se funda y en un sentido sanciona el "discurso
persuasivo" (verbal u otro) “que él me dirige (explícitamente o no).
“vida diaria -—profesional entre otras- está hecha así de innumerables
sugerencias y de apuestas continuas - sobre la competencia modal de otros,
cada uno ocupando indistintamente a veces el lugar de enunciador —sujeto

(s 1) destinada a proponer “sus "servicios" a destinatarios potenciales.

Otras veces la posición de enunciatario-—destinador limitado a forjarse las


Figuras de sujetos posibles, antes de confiarles "misiones”.

5. Sin embargo, diversos aspectos técnicos o metodológicos del problema


general que nos ocupa han sido un poco -escamoteados. Quisíeramos ahora .
retornarlos de manera más explicita.
Una primera puesta a punto se informa-a fin'de' limitar. mejor la natureleza'
de la "competencia" del sujeto creíble. Hemos -esbozado la posibilidad
de descomponerla en dos elementos:
(a) Una relativa a la "capacidad" del sujeto (b) el otro a su "deso" de
réalizar el programa de* enunciación-déstinatario, teniendo en cuenta la
distinción, semifticamente bien.- establecida, -entre modalidades que actúan
: ,
(poder, saber) :y modalidades que son virtualés (querer, deber) que se
recofiocen acá. Quizas sin embargo se podría sugerir, a título de propuesta
terminológica, reservaR el término de credibilidad, en el justo sentido,

EN
a las determinaciones que

LE
garantizan

un
la "competencia técnica" del. sujeto
y. permiten ala vez al enunciador de fiarse en su maestría (o superioridad)

$3
Due!
-en un. poder hacer y o en su sáaber-hacer. Es así, que recientemente se
pudo. “ver a un Mebate electoral ..por ejemplo transformarse por momentos
en una especie de examen teniendo como meta el reconocimiento de la "compe-
tencia económica" y jurídica, de une de los dos candidatos presentes.

Pero los políticos no son los


únicos que realizan tal régimen de credibi-
«lidad. Todo prestatario
de servicios vive eh' resúmen bajo la' misma insignia
y debe al menos apropiarse de los signos de una técnica —aún cuando el
procedimiento no tenga sús riesgos (ver por ejemplo "Los Médicos". de Moliere),
El término de "fiabilidad" permanecería 'entoneces disponibles para designar
la otra parte de la competencia del sujeto en el cual se "puede confiar":
su. competencia "ética". Todo lo que contribuye a Hacer de él un acompañante
"devoto", "leal", "regular", dicho de otra forma, 'el comjunto de las cualida-
des correspondientes a elevar "modalidades" ¿viatualizantes?- del querer
hacer y o del deber hacer.. ++ mt : o -

Segunda Precisión: hemos dado cuenta invariablemente de , relaciones


que “se establecen: entre dos sujetos,
" postulando y, “aún si"el adjetivo ha
sido poco utilizado, el caracter intersubjetivo del lazo d confianza
“És -claro sin embargo- desde el: momento, «que el fenómeno compromete la
instancia .de la enunciación —que la emergencia de dos acompañanti s actoral-
mente diferentes, uno "creible", otro "crédulo", no répresehta más que
uno de los modos posibles de actualización de la estructura sintáxica
. considerada. En profundidad,. enunciador y destinatario se uhen!
.
en una
sola figura sincrética- el "sujeto de la enunciación", que se encuentra
además, en la superficie, en el caso de la "cónfianza en sí mismo”. Que
el Hombre "crea en el Hombre" (Juan Pablo 11) o que crea en Dios, la' relación
+ fidúciaria, reflexiva en un caso, transitiva
el «otro, es en fundamentalmente
: (sintácticamente) la misma. Hablando estrictamente, la confianza, sería
“pués, algunas veces, asunto de intersubjetividad, siendo siempre un juego
inter-actancial,
Por último una palabra para ubicar mejor más allá de la” idea de contrato-
las condiciones generales de la confrontación que, subyace la misma emergen-
A piRS: OI 5

.
cia de .toda "cuestión de confianza"-s Bos sujetos actoralmente distintos;
a 5

mo . gen, .
.
.

A EN rt PE
cd
.
E
PORApo
4
..

uno S 1 prometiendo hacer -: lo” “que-. el otro-le (S2): 8i. se, mira de -
pidió
cerca, es evidente que tal compromisó nño'*tiene más que a medida
pertinencia
en que el programa . en el que se defina por oposición
5 1se compromete
a Otro programa posible-eventualmente más "tentador". Se promete siempre
lo qué no nos cuesta nada?. Igualmente, si se examina por unos momentos
la escena del juramento, «¿se le pediría alguna vez galsuien decir la
"verdad" si el otro discurso, el de la "mentira" HR al menos para
ciertas personas, más "rentablef": para el sujeto? ¿Qué es lo que hay que
decir, más. profundamente, sino qué la palabra dada en la promesa o el
juramento lejos de sellar alguna armonía prestablecida entre los programas
E

respectivos de las partes, interviene en un contexto polémico en el interior


del cual la divergencia, siempre látente, de los intereses perseguidos,
por cada uno, crea ante todo una legítima desconfianza entre los sujetos?.
De allí la necesidad de ampliar un poco la problemática,
. z .
.. +

6. Teniendo en cuenta esto último parece en efecto difícil encarar la


"confianza" independientemente del conjunto .de paradigmas del. cual forma
parte. “Tanto mas que se.dispone, en todo caso en francés, de tres términos
cuya misma proximidad es como una invitación al esfuerzo de sistematización,
"confianza", "desconfianza" y "desconfianza o recelo". Admiítamos —quizas
(mefiance).- (defiance : :
arbitrariamente- que el término de "mefiance" (desconfianza) pueda servir para
designar adecuadamente el estado del sujeto S 2 que "no sabe (aún) a que
“atenerse” sobre Sl: posición de incertidumbre correspondiente a la suspensión
o a la neutralización del hacer interpretativo: ¿el desconocido qué se
me aproxima es "digno de confianza"? O bien ¿yo debo desconfiar?. Siendo
que hay generalmente interés recíproco en superar lo más rápido este tipo
“de indecisión, la mayoría de las sociedades han, como se sabe, minuciosamente
' ritualizado los mismos procedimientos del . encuentro- ya sea entre grupos
o individuos- de manera que; hablando socialmente, la confianza se encuentra
" por, decir así instalada de golpe (o más o menos considerada como una rggla)
en oposición a la defiance (desconfianza, recelo) actitud fuera de moda. Sea
lo que fuera -de esas sobredeterminaciones, se ve en todo caso que se tiene
acá formalmente un problema'con algo bastante simple: ina categoría episté-
mica general;%a incertidumbre (mefiance:desconfianza) hacia certidumbre cuYo

2% término, ¿jugando desde esté punto de vista el rol del término complejo
en la estructura del cuadrado -semiótico,. subsume a su turno'los dos términos
de. un eje de contrariedad oponiendo esta vez la "confianza" (certidumbre
- positiva)ala defiance (recelo, desconfianza) certidumbre negativa. 1
|
. . certidumbre

certidámbre positiva certidumbre negativa c


(confianza) "destanoe" (desconfianza, recelo)
?
Danna ne incertidumbre conoce rno.o....
e

»
>
,

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- . . . o “ “ Cn Lo. . -
nar "o. e. . mr : AS ' A ps , Eo ia - hno da
A PR AAA .os . . Ñ o. O os. - Lo amd Aeoet aro

= . . . bo
” . .

| |]

|
"Soy uno de los: hombres más: libres -que hay ..No conozco más ¡que una
“obligación, aquella. a Ya que me “obligó "nuestra confianza" (DiSGUPSO de”.
F. Miterand a los militantes socialistas-.reunidos en Carmaux le 9/11-80,
citado Por Le Monde. 11/11- 80 p. 10).

-Conforme a lo que dijimos anteriormente la” confianza (enjel 'sentido


estricto) está aquí en: un - buen camino, en la medida en que el [enunciador
(s 1) se plantea, muy explícitamente cmo pm nureloot docto dle:
e os
oho Al rd Ze A eARO e CS
"Estoy «libre con respecto: a las fuerzas del dinero. Estoy-libre con
respecto a las fuerzas, que por la voz de dirigentes insensatos,:
los dirigen
- tes .comunistas, buscan perdernos. Estoy libre con respecto a la clase
que dirige líbre de todos, los lobbies. No le debo nada a nadie". (Ibid)

Quedan evidentemente dos últimas posiciones a.preveer para llenar los


lugares vacíos (los subcontrariós), del: esquema anterior. Una (a la derecha)
podría considerarse como '"suspensión .de la confianza" (S 1 pasando de
lado del No "destinador" de 52; la otra, á la izquierda, como "suspensión"
de la "defiance" (recelo, desconfianza): sin hacer, hablando con propiedad,
acto de homenaje. frente a su propia persona. Sl] puede muy bien, en efecto,
marcar su subordinación a una tercera persona (S3) teniendo el lugar de
_ No-anti-destinador para S2. .Es: áquí donde se situaría especialmente toda
! la problemática de honor -concebido, entre gente honesta, como garantía
e: la - palabra: - otorgada: -si «La: fiabilidad del enunciador pasa a menudo,
“como se -acaba de ver, por la exposición .de las.marcas de su exclusiva
"devoción" — a aún de su entero sometimiento-
con respecto a su enunciador |
("No conozco más que una obligación,- aquella ala que me obligo nuestra
confianza), puéde -también en otros contextos, proceder más impersonalmente,
“de: la subordinación”
de dos -acompañantes-a un-único e igual código; represen
tación abstracta de: la instancia destinataria que garantiza de una vez
"por todas la "regularidad"
-de sus comportamientos.

-7. Antes de concluir, quisíeramos volver brevemente sobre el tema de la


"verdad". _De : formar un poco. inesperada es el término de código y el de
regularidad «que nos llevan a eso. Entre todos los códigos de referencia
que permiten .al enunciador interpretar la conducta —y no sólo el discurso-
de otros y finalmente saber con más o menos certidumbre, a que atenerse
E con respecto al otro (cualquiera sea), hay una que “La diferencia del
=* "código de honor" ampliamente ligado a un estado dado de una sociedad j
dada. Sobrevive a” todas las variancias socio-históricas en la misma medida
en la que, ¡identificándose por naturaleza a la realidad cuitural del lugar
y del momento, desposa por definición todas las variancias: es el código
de la "verosímil". EN : :
E
ze

] t de t ecs +. o
que
Sistema
e conJjun
conyencjonal
Lu osRÑES aa coRaA TES electivandpte “dest í dominio, E
¡
|
. Identificándose desde
* asegurar una cierta"regulanidad de la comunicación
de
) del grupo
: ¡este punto de vista: 'con el "universo de creencias" (A.J.Greimas
“as los enunciadores en búsqueda de credibilidad una
: considerado ' provee
expresivas adaptados a las más diversas situaciones
:- panoplia de estereotipos
de lectura a disposición de los enuncia-
Py paralelamente tantos estereotipos
Porque la misma regularidad de la comunicación
dores: Pero esó no es todo.
desde otro punto de vista,
-** hecha así posible tiene por efecto infaltablemente,
ia.
Ñ “obstaculizar lo que se podría llamar su eficac

particular cada vez “que un rito, aún reducido a su


Lo que sucede en
*

-
ofrece (o más justamente en cierta manera 'se impone)
mínima expresión, .se
a la exteriorización de un sentimiento: fulano de tal viene
“con: referencia
ejemplo de perder a un amigo: profundamente afectado se apresta a
¿por
, como es de rigor, Sus "sinceras condol encias "a su familia, no
«dirigir
le parece muy lejana de lo que siente -—y desearía expresar—
. a sólo esta formula
le parece. tan formal que duda en recurrir, a ella
: "pero la misma expresión
él no cree en ella. Pero, después de todo ¿ que importa?.
se creerá que
flatus vocis sería efectivamente intercambiadq, la buena
Aunque” un simple
sotial que se contenta con efusiones, no sería probablemen—
marcha de la vida
al contrario: ¿que se' puede hacer con los "estados
te perturbadas, muy
LEl sujeto no es nada, la sociedad es todo, las
anímicos" del «sujeto?.
necesarias y suficientes. l
formulas son pues

embargo el sujeto reprimiendo toda discreción quiere hacerse


sin Y
oir. Y el medio que lo rodea lo alienta, hoy mas que nunca. El antiguo
necesario,
código se borra, yn nuevo sistema.de verosimilitud se esboza: es
de ahora en más, "ser uno mismo" para ser creible. A tal punto que hasta
ahora que "hablar con más verdad" (M.F. Garaut-M. Rocard):
en politica hay
Sinceridad requerida.
queremos
No emitir ningún juicio sobre moral de los dos sistemas
el valor
presentes. En revancha, lo que sale del análisis semiótico y que podría
reorientar el estudio formal del "creer" es el juego que autoriza su misma
problemática no es tan nueva, aún si toma ES.
coexistencia. En realida, la
formas agudas. Toda búsqueda de "sinceridad" (frente al otro)
. “hoy en día
a uno- mismo) presupone en efecto la puesta Pe
0 de "autenticidad" (frente
el discurso sujetodel no ES
relación
en de dos discursos, uno concebido como
¿les la verosimilitud, soportada por lo social) el otro convencionalmente
"discurso del sujeto" ese en el que él "cree". Dos tipos
recibido “como” el
nos parecen ser tomados en consideración en esta perspecti-
de procedimientos
de transgresión enunciativa. Primero: la ironía,
va. Diversos procedimientos
que el enunciador produce un discurso desplazador en
¿la broma, en las
verosimilitud “en relación a lo que se espera de
relación a su propia
o de su "imagen de marca"'-, aparecen como medio para reforzar
su "personaje"
. el. destinatario el sentimiento que. el enunciador "adhieré realmente"
al espíritu, siño a la letra de lo. que' enuncia. En un plano más general,
nó específicamente “retórico, toda infrácción' a las "conveniencias", toda
“ruptura en relación al estereotipo de las conductas” socializadas. pueden
— sin duda inducir el mismo efecto de sentido. No se dice, "a contrario",'
. que .alguien que es -"demasiadóo cortés" para ser honesto. En segundo lugar,
¡los «procedimientos de Comunicación enunciativa merecerían: en la misma
optica ser mejor * explorados de lo que han sido hasta ahora: pasar del
“simple "te amo" al' "digo que te amo" es quizás —¡én el mejor de los casos!-
“darse una' chance de hacerse creer (y ¿en el beor? de hacerse creer) que
en” el enunciado, no es más sólo el lenguaje el que habla, sino realmente
Lo

e:fel sujeto que se expresa. o.

+. ¿Hay necesidad de precisar que analizar la eficacia relativa' de estos


- mecanismos,. no es forzosamente "creer en eso"?.
“?
7 .
A

a.

- e . y
: , La certeza es una. cosa fragil
A.J. Greimas, Du Sens 11

» EL INDECISO
« Lucrecia Escudero

Quisiera abordar aqui un problema teórico que se nos presentó a un grupo de


investigadores cuando trabajamos con un conjunto de encuestas cualitativas
. para la. elecciones de gobernador en la provincia de Entre Ríos en el mes
de setiembre pasado.

Tomaré el, caso puntuál de la provincia de' Entre Ríos porque no difirid
mayormente de lo que sucedió en otras provincias en lo que llego a transfor—
marse en un fenómeno de embergadura nacional y un quebradero de cabeza
para los analizadores de encuestas: me refieroa la posibilidad de preveer
el comportamiento electoral del indeciso.

La lectura "final de una campaña electoral es como una novela policial


sin misterio, ya que sabemos quien es el asesino.y quien la victima. Yo
me situaré en el lugar desde el cual se preveían la producción de las estrate-
gias discursivas de la campaña y no en el de la recepción, que es en definitiv
el lugar donde ya: la duda ha sido disipada, donde ya se ha elegidoy donde
en definitiva se ha ganado o perdido.

Se me podra marcar un dato por demas obvio: luego de una campaña electoral
el indeciso no interesa, puesto que en realidad el voto demuestra que no
hay indecisos, sino gente que ha" adherido, creido, aceptado o rechazado
el contrato fiduciario propuesto por uno de los candidatos.

Por otra parte el indeciso presentó un desafio á la maquinaria de producción


y proyección de encuestas cuantitativas y su comportamiento en cuanto elector.
aporto una gran cuota de suspenso en las predicciones que pronosticaban
7 finales cabeza a cabeza en la casi totalidad de las provincias argentinas,
“con los resultados finales abrumadores positivos para el principal 'partido
de la oposición.
» .

“+ Lo que me interesa desde una perspectiva teórica apunta a una semiotica


de la acción, pero tambien y simultaneamente a una semiotica de'la sanción
y creo que hecha alguna luz sobre un dato sumamente interesante de; la cultura*
política nacional de estas elecciones pasadas: durante “mucho E po, hasta
la. semana final, los electores no «se encontraban en grado de econocerse
- . . » - . +.
poa
'
*

rn. 4 >?

.
1
,

:
,

la
.
,
,

AX
sr , . . A

»
.
plenamente en los candidatos propuestos presentados' como ) objetos. de: :valor
— ya sba por. los rasgos de. la personalidad (carismatico/no carismatico) ya
sea pór los programas narrativos presentados con los cuales los electores
podían entrar en conjunción o disyunción,

¿Porqué el indeciso es interesante tambien desde el punto de vista teórico


y que puede aportar “la semiótica en la dilucidación del hacer p agmático
de este tipo particulár de sujeto?. : :

En primer lugar el indeciso pone en relación un conjunto de cainpos!| semánti-—


cos a partir de la definición misma del diccionario y nos introduce en
el territorio de la definición. de cual es la configuración modal. a la que
pertenece. En. segundo* lugar nos coloca también frente: al problema desde
una perspectiva de la producción de estrategias discursivas“ de la eficacidad
de los discursos sociales, su potencialidad de producción de estrategias
confiables y creíblesy nos coloca entonces de lleno —en un segundo momento-—
en la producción de esos simulacros textuales que son las ¡consignas electo-.
rales.

Esto significa que se pone en Juego toda una emprésa de persuasión e


interpretación subsidiaria situada en el interior del proceso discursivo
y en todo caso enfrenta también a dos semióticas: la de la manipulación,
interpretación, eficacidad, una semiótica del saber y "de la cognición,
frente a una semiótica de la volición, del guérer aceptar lo propuesto,
¿y las formas de aceptación y/o rechazo.

El indeciso es el hacer del sujeto sobre. un objeto sobre el cual no


ha caido aun resolución, dice el Diccionario de la Real Académia Española.
Es decir, presenta una temporalidad durativa y hno puntual, es un sujeto
en tránsito.
El "indeciso "no se encuentra cólocado en “úna posición terminal
sino suspendido «entre dos acciones: la situación de certeza a la cual se
aspira (Sujeto que' acepta un universo cognitivo al que le asigna estatuto
de creible/confiable) y una «situación de rechazo que se puede articular
sea como una resistencia activa o bien pasiva de parte del sujeto.

La noción misma de in-decisión presenta a un sujeto en dificultad para


elegir, afectado en su pontecialidad de hacer para efectuar o tomar cualquier
«resolución en uno u otro sentido. Especialmente, y si lo proyectamos sobre
un diagrama de fuerzas, el sujeto _indeciso
_se encuentra simultáneamente
tensionado en dos direcciones antagónicas y opuestas. La imposibilidad
de desición radica en esta anulación simultánea de fuerzas que aparecen
al juicio epistémico como de valor equivalente. :

o De allí que la definición contraria de "decisión" o "decidir", marca


our «Presisamente la actitud activa del sujeto en su primera acepción: “dicese- to
de
n o

la determiñació resolución que se toma o da en una cosa dudosa"! DS


"a as Y

y
o ro
ul
e TR E ITA ea
E - “on ..
o,
. e.
Pz
»
Za pon
ee 1
* L A a
o 5 * a la cualidad
aceptación "firmeza de caracter" caracteriza
en «su ' segunda
ho a su accionar. Decidir entonces es cortar dificultades,
del “sujeto y
en suma: resolver. Es decir, volver a colocar
formar juicios definitivo,
una posición estable, sobre la que reina la certeza.
al sujeto en
ost. :
un cuadro estadístico que dá cuenta de L posición
Veamos por ejemplo
a propósito de la imagen de Alfonsín, donde el indice
de certeza inicial
sumamente bajo: :
de indecisos es
;

Ag ES Marz.87 AL.87i
w

Muy buena/buena 72 69 61!


regular 19 24 ar”
mala 6 6. -: Y
NS/NC 3 1 1

configuración
una epistémica relativamente estable. pero la
He aquí
indeciso,
del el No Sabe/No contesta de las encuestas cunatita tivas
figura
marca por su tipificación en la jerga estadística presisamente esta falta
de -saber pero simultáneamente esta falta de colaboración o de compromiso:
el indeciso no .solo no sabe, sino que : también puede no contestar y asi
como aparece en las encuestas, que registran el rubro como simultáneo.
que la respuesta del indeciso apunta tambien al grado de participa-
Es decir
ción “de este sujeto que puede fluctuar entre el compromiso, el no-compromiso,
el interés o la indiferencia. "

Si analizamos el cuadro que refleja el tipo de +noyo (adhesión) al gobierno


encontramos al indeciso creciendo en un tipo de apoyo Cada vez
nacional,
mas débil: :

Marzo 87 Ag. 87
Apoyo consistente 40 32
Apoyo débil 31 33 .
Posición 28 35

Esta posibilidad no sólo de no-saber que elegir sino el de no-querer


-
contestar, que linda con la indiferencia, aparece dramaticamente cuando -

se crean las imágenes de los candidatos por la UCR y el PJ:

. Ag.E6 Marz.87 Ag.86


Ricardo Laferriere My B/B 40 54 54
(UCR) Reg. 8 13 17
" Mala 3 4 11
NS/NC 49 19 18
z
y
Jorge Busti My B/B 22. 53 57
(PJ) Reg 9 14 14
Mála 4 40. 4
NS/NC 65 30 25

¿Que pasaba con estos candidatos que movían escasamente la adhésión, casi'
hasta la semana final de la campaña? Veamos el probiema desde la relación
entre los sujetos electores y la construcción de 1ós objetos de valor. '
El elector es por definición un sujeto del hacer, es decir, un sujeto
que no se encuentra en
valorizado, conjunción
sino en búsqueda con el objeto
de un objeto deseable. Esta conjunción -no se da nunca plenamente con los
candidatos, que no llegan a identificarse plenamente con los electores.
Muy someramente podemos decir que los programas narrativos presentados
por los dos: partidos mayoritarios se articulaban entre los ejes de:|

" Confianza/ saber ..=..... racional (UCR)


Esperanza/ querer ....... volitivo (PJ)

con dos estrategias simultáneas de


estaticidad eo institucional daá en las
imagenes de los candidatos de la
UER y de dinamismo e intimidad en las
del PJ. Si las estrategias de la campaña de la UCR del '83 apuntaban a
la dupla modal saber/poder, instaurando objetos de valor sobre la dimensión
veredictiva del discurso -entre el ser y el parecer, el secreto y la mentira,
lo- verdadero y lo falso- para . irrumpir nitidamente con. objetos. de valor
como la
Democracia, las instituciones y. la reivindicación de la vida (
el presente) sobre la muerte (el pasado); las elecciones del '87 marcaron
la dimensión fuertemente pragmatica del electorado. Los grandes ejes epistémi-
cos deldiscurso oficial no dejaban espacio para el deseo.. ., la volición,
la preocupación cotidiana. Frente a la. construcción de objetos con valores
subjetivos, que proponía la UCR (SER), «se privilegiaron los objetos con
valores objetivos del PJ (TENER).

Si elencamos someramente algunas de las expresiones recogidas a lo largo


de las investigacionés cualitativas encontramos:

(YO) desear. (que). mayor etica


una verdadera solución
unirse para un país mejor
mayor trabajo, etc.

Enfrentados con un conjunto de opciones que determinan el valor del


Po A . . - . Po. =* ea
E + . > . - . . 7
p te.
r .

“+ objeto subjetiváamente, la respuesta espontánea a' las cuálidades que deberíá”


-*'*
tener el gobernador armaron configuraciones discursivas particulares que
, oponían nuevamente la dimensión del SER/TENER:
»

+2
El Wntverso
Universo del afecto
cel afecto El a
universo del AR
hacer

: que sea humano : . que cumpla las promesas


que sea honesto que tenga ideas nuevas
que tenga mucho amor que nos de trabajo y vivienda
que sea caritativo
.

Del conjunto de estas demandas podemos articular una imagen del gobernador
colocado en el rol de "dador" (Destinador): : "

que el gobierro
de alep !
y muchas cosas :
que de un aumento : Lo]
que se ocupe de nosostros, etc. : | 7

|
donde se define por pasividad el rol del destinatario pero t mbj.én e el
de antisujeto por excelencia que son los militares: "

Lo mas terrible es que volvieron a gobernar los militares


_ allanaben todo, revisaben todo y había que callar *

Este objeto valorizado (el candidato a gobernador) resta frente a otro


objeto con el que si está en conjunción y que es una construcción muy
sólida de la campaña del '83: la iia at

Lo mejor que tenemos en la Argentina es la democracia


poder hablar, poder dirigirnos y poder hablar lo que nosotros sentimos
por lo menos se puede andar, porque antes salíamos a la calle y no sabíamos si
volvías
. . Tenemos que dar gracias a Dios que podemos estar en democracia, eto.

Enfrentando las cualidades de . gobernador en respuesta cruzada con los


partidos políticos, el indeciso vuelve a aparecer: !

. UCR PJ * NS/NC
capacidad y eficiencia para gobernar” 20 27 16
, iones Crear muevos puestos de trabajo Z7 31 3.
tener hombres honestos :36 16
imentener el orden 34 16 28 .
ser democrático 53 16 * 25
defender las instituciones provinciales 45 22 24
preocuparse por los problemas de la gente 38 31 22
vn
0d
Cruzado con las variables socioeconómicas clasicas sobre empleo, el
indeciso. aúquisre” proporciones catastroficas ' en la última quincena .de
agosto, si bien se perfilaba un predominio del PJ en algunos sectores:

] UR >. NS/NC
amas de casa l 29 23
desocupados E 2 un
jubilados 25 24 46.
estidiantes o coo. 2 24 20 ES
Eng
:
obreros 13/15 54/49 230/29
empleados "19 - 58 39

ESSOA
AO
TE
En este punto se realizaron trés operaciones sobre las encuestas cuantita-

o
tivas cuyo objetivo era describir el voto del indeciso a fin de circunscribir

$jeta
y aislar- al indeciso irreductible. Para ello se cruzó la intención de

NE
votar en primera y segunda instancia con otros partidos, y finalmente
se preguntaba: "Que partido ganará las elecciones" qué encubre, cómo se
sabe, la intención de voto por simpatía:

A
Marzo '87 Agosto '87

A
(1) Partido que votara para gobernar . UCR 39 20

FRZOR
AS
. PJ 25 37

e
: NS/NC 31 Bo.

Os
2 Distribución de indecisos UCR + otra ópción 6l% indecisos -

ITA
PJ + otra opción 63% indecisos
(3) Inteción de voto + 12 distribución o
de indecisos . UCR 28.1
PJ 45.8

2
(4) Intención de voto + 22 distritución .

ETT
- de indecisos UR 40.87
o PJ 48.34 | RR

(5) Pártido que ganara las elecciones: UCR 29 18|


Pp BS 76
. NS/NC 16 si
. 1
'

El indeciso bien podía ser un independiente que asignaba ecyedibilidad


al PJ or un woto peronista disfrazado, en todo caso el comport miento del

ENFARERT

¿Andeciso permitía definir su posición "como una transformación (negación


y/o aserción simultánea) donde: ==.
DN
Sapa

. ¡
: t 5,S_ .....o 0 o (S,/A0,
Ss 0 ) ó (5,0,0
(8 ) :
3 AS

'En. todo" caño el hacer persuasivo de 52 (el candidato) no es lo'suficiente-


mente”. EFicaZ” como, para lograr que 51 efectue. un juicio de certeza a propósito, 9 --
PrORITSTR
TO LR
PP
A
2 . . APN
rs o Lo
Veamos más de cerca el problema desdé una perspéctiva semiótica: ! 7
(1) El indeciso se juega sobre el SABER (modalidad epistémica) puesto
que duda,y su movimiento es de opciones (0/0) y no de 'conjunciones (y/y).
(2) Este movimiento se inscribe en un espacio mayor que esta dado precisamen—
te por posibilidadla de ese movimiento: la elección es posible por la
libertad, por la ausencia de constricción, por el ejercicio-de un poder.
En un régimen sin libertad de opción hay solo prescripción (Debe hacer)

poderhacer poder-1o hacer


+

(Libertad) (independencia) "

no poder no hacer no poder hacer


(obediencia) . (impotencia)

La duda presupone la elección y la elección presupone el poder elegir.


(3) Si macroestructuralmente la modalidad del poder-hacer sobremodeliza
al indeciso, estructuralmente este es el resultado de una fluctuación
entre su saber y su querer (quiere alternativamenté), tal como lo señalara *
Parret al colocar ala indecisión entre las pasiones guiasmicas, es decir,
que combinan simultáneamente la modalidad del sabery del querer.
(4) Pero también la dimensión del saber es fundamental, en cuanto la decisión '
y su contrapartida la dida son un acto epistémico y el indeciso un sujeto
que puede realizar un recorrido entre unestado de creencia y otro:

certitud exclusión
AFIRMAR NEGAR
(conjunción) ? (disyunción)

probabilidad incertidumbre
ADMTTIR DUDAR
(_ no disyunción) (no conjunción)

La modalización epistémica puede ser o bien virtualizante (sobre el


querer-hacer) o bien actualizante (sobre el poder-hacer). .Sin embargo
el problema del indeciso se encuentra mas cerca de la modalización actuali-
zante (el poder) que sobre la virtualízante (el querer) que recubre mas *
bien el espacio e la indiferencia (no querer conocer) y el de la curiosidad
(querer saber). " :
(5) La duda puede ser una pasión dolorosa, no tanto ligada al quere resolver
la duda (o conocer y alcanzar el conocimiento) cuanto sobre la posibilidad,
primero externa que es lo que me permite precisamente dudar, y luego
interna, que me impide. tomar una decisión. En este sentido se halla mas
cerca de la impotencia y tal es la lectura que a mi juicio hace Descartes
en, su definición de,irresolución:, "Temor que tiene el alma como en balanza
SS
»
A

,
4

e
acciones y €5 la. causa - de. que:;.no: ejecute. ningu o
entre múltiples.
tad
suceso está representado” conto” dependiente de- nosotros" pero-existe: “dificul
los: medios" (Descartes y Tratado de das. pasiones). 59/170
en la elección” de
Parret Les passing). -Y en todo caso es un lugar suspendido
citado por
la enunciación que es simultáneamente todos los sujetos
del sujeto de
y ningún sujeto, porqué no. puede reconocerse.

la cualidad del indeciso represente, con su tránsito y oscilación


Quizás
a otro- del espectro político, la “característica de este moménto:
de un lugar
eso, una transición a la democracia, entre un
el de ser precisamente
ya fue, fuertemente prescriptivo y otro que. vendrá, donde
régimen que
alcanzado como sociedad - política el objetivo “mas raro dé los '
habremos
últimos cincuenta años de vida, argentina: la circulación del poder de
un gobierno civil a otro gobierno civil.

Texto presentado en el I1. COngreso Internacional Latinoamericang de Semió-


tica. Rosario, UNR, Octubre de 1987.
!
i
ao. Fo
"Actividades complementarias

lo estudiado, las actitudes sobre


en grupo, a partir de
(1) Analiza.y discute ino en 1983
so político argent
credibilidad, confianza del discur ia?
«creencia, y organiza la creenc
ida d. ¿ Sob re que ejes organizó
y en la actual encia en la ac-
tarios del contrato de cre
(2) -¿Qué actores sociales son deposi
tualidad?
objetos que se construyen?
¿ Cuales son los

-
mo.
OO
AAAA
-
A
A
AAA
ir

nos
. p! es una construcción ambigua desde el momento en
que abre . posibilidades analógicas y responde a la inclusión de diferentes
tipos de modelizaciones. Objeto no unívoco, .

a) integra por una parte la .tipología de los discursos, junto a una serie
discursiva ya descrita por la semiótica narrativa, es decir que cuenta ya
con un
repertorio lexical, sintáctico” y gramatical legitimado por un amplio
uso, descriptivo e ¡interpretativo y b) simultáneamente es una de las zonas
de experimentación y alcance de las posibilidades actuales de una pragmalingiís-
tica, de la teoría de las modalidades ' o bien constitución de una eventual
semiótica de la acción social vista' como la constitución de una teoría de
las pasiones. (Sociosemiótica). o

,
Existiría una teoría "clásica" del discurso
político, de
corte metodológico, y basicamente permeabilizada por la
ideas de que el discurso es .el soporte significante de
los procesos ideológicos. Análisis “inmanente y textual
como lugar privilegiado de encarnación de ciertos procesos
sociales, opera en el espacio de la lectura (im) posible:
¿dentro o fuera del discurso?.
.
f nfoques En segunda generación de lectores de discursos "políticos"
. -.han eliminado el obstáculo de "la ideología" como zona
sobri el de representación en el interior de los discursos: lo
discurso: . ideológico -—como lo político- son una de las dimensiones
nolítico que atraviesan textos y es los
interesante reconstruir
el recorrido de sentido que toda estrategia discursiva
propone: el «discurso como: contrato; combate, imposición
- o construcción de saberes e intenciones. El lugar de la
lectura -como el del Poder- circula. :

AA KXáqA A A A A
O
2.TIPOLOGIAS DE L POLITICO
Los primeros
trabajos sistemáticos de descripción de vocabula
rios
* políticos tuvieron lugar en. Francia a mediados de
¿la década del 60 en el Laboratorie d'Etude des Textes
Polítiques Francais de Saint Cloud, cuyos boletines dedica-
dos a investigaciones en lexicometría' y lexicología desarrollaron
un inventario del repertorio político moderno desde el
S.XVIII a nuestros días. Al primer coloquio sobre lexicogra-
*
fía política. (1968) le siguen- los trabajos de J.M.Cotteret
y R.Moreau (1968) sobre las alocucioñes radiotelevisivas
Taxonomias del Gral.de Gaulle con un criterio cuantitativo simple,
la frecuencia en la utilización de ciertas palabras, la
longitud de los discursos, la riqueza del vocabulario. La
aparición del” texto de J.P.Faye (1972) aborda el análisis
de una formación ideológica- el nazismo y el fascismo-
y su .pósible equivalencia a nivel discursivo, investigación
sobre el lenguaje y “sobre la historia con una coricepción
del + discurso- como simultáneamente portador y productor
de acción: la enunciación del discurso político totalitario
recubre tanto lo' discursivo comó sus condiciones de produc-—
ción. :

Por último, el grupo nucleado en el “número 9 de la


revista Langue Francais (Maldidier, Robin, Slakta, Courdesses
1971) están preocupados durante esta primera etapa' taxonómica
por las relaciones entre ideología, teoría del discurso
y cambio histórico, temas que se prolongarán en los dos
números que. la revista Longages (n* 23y 41, 1976) bajo
la dirección de Louis Guespin dedicará a la posibilidad
de tipologizar el discurso político, marcando un punto
de referencia enla inclusión de esta problemática dentro
del área de la sociolingiiística.
7

1.1.Hay. algunos conceptos claves con los que se opera.


En primer lugar, el intento de inscribir el discurso aánaliza-—
do en una e ¡ideológica precisa a
* través de
las: marcas que el análisis distribucional-trans-
formacionalista «Puede aportar (Guespin, 1976).E1 trabajo
con coFpus rerortados, invariantes —semánticas o enunciativas
y variables “sociales, “clases intentando medeli-
o partido
zarlas a través de una ortopedia y sistemática
comparativa
La idea es siempre uno mas,
de los+problepor los que atravesó
Analisis la semiología de la década del sesenta: la teoría del
reflejo (ideológico en el. discurso), la localización
distribuvio—. "apa-
—estricta- de las representaciones ideológicas:éste
nalista rece" en el discurso, se "revela" a través de una ciencia

cuyo estatuto ¡ilusorio .y epistemológico es dar cuenta


precisamente de esta aparición y donde el discurso es
-un paquete de signos descifrables. Es la relación entre
una ' macro-estructura ¡deológica y una micro-estructura

textual lo que predomina, resuelta en términos de un

léxico político y una frecuencia.

En un segundo lugar lo metodológico ocupa un espacio

clave: armado de grillas (Gardin, 1976), orden de aparición

de las ocurrencias de las unidades pivotes (Marcellesi,


1976), individualización funcional de unidades —temporales,
modales, lexicales- cuya característica será especificar
el tipo de código -sociolingijístico- en el que la formación
discursiva se inscribe.

Los trabajos de Marcellesi sobre análisis de discurso,


a entrada lexical (Marcellesi, 1976; Marcellesi y Gardin,
1974) son bien conocidos, así como comstrucción del
la
"intelectual-locutor colectivo" y su localización lingliís-
tica én los discursos: del partido comunista y socialista
francés (Marcellesi, 1971). El. análisis lexical a partir
de palabras de acceso —el partido, nosostros, la república,

etc. -se continúa en un distribucional y proposicio-


estudio
nal con un incipiente orientación pragmática en tanto
se postulan . ciertas identidades entre las reglas aplicadas
"intuitivamente" por el locutor y el analista. Sin embargo,
la constitución del discurso —en cuanto objeto científico-
se realiza a. partir de estas palabras "pivotes" inventaria-
das en un estudio constrastivo y co-variacional, descartando
artículos, demostrativos “y posesivos, es decir, uno de
los soportes del tejido textual. El estudio de frases
con los verbos modales/poder/y/deber/ le permite iniciar
una tipología rudimentaria: mientras el discurso "socialis-
ta"
se articula en la recurrencia del modal/poder/privile-
giando unidades lingúísticas de la vida institucional,

el discurso "comunista" se caracteriza por lo organizacio-


nal y el uso del modal /deber/.

Evidentemente estas dos categorías de la praxis política


. aparecen -. COMO recubriendo. dos modos de funcionamiento. de lo
discursivo: el _frese de lectura propuesto por lá propia institú-
cionalización social busca deliberadamente confluir en el orden
del discurso, instaurando una verdadera isotopia de contenidos
y representaciones .. : :

1.2 La validez, en el sentido metodológico-formal, de las

correlaciones entre comportamiento lingiiístico y comportamiento


socio-político (Berstein, 1976) presenta dos variaciones intere-

santes en esta etapa teórica: Maldidier


primera (Maldidier,
1971) trabaja perspectiva:
en sincrónica
una -el
doble análisis
para cada época histórica que define los modos de comportamiento
lingiístico de los grupos sociales- y diacrónica -las transforma-
ciones que marcan etapas sucesivas- conjugado en un análisis

_enunciacional de los' discursos del Gral. De Gaulle durante


Analisis del la guerra : de Argelia, donde las marcas enunciativas estarían
en condiciones de organizar los discursos siempre sobre una
Discurso
base comparativa. Slakta (Slakta, 1971) intenta una síntesis
Sociolingiiista metodológica de la gramática de casos de Fillmore y la teoría
+HieA
de los performativos de Austin a partir de la cual se puede
construir un simulacro que le permita la descripción de ciertos

actos lingiiísticos, como el "demander" dentro de un universo


? político específico: Le Cahiers de Doleances de 1978.

- Ambas perspectivas caracterizan al discuráó político como


el. discurso, de la comunión entre el. locutor y el destinatario
—político- de un. sentido. Se trata de identificar una función
dominante “en el proceso de comunicación identificación -la
entre Argelia y “Francia, la funcionalidad histórica de la "solici-
tud” para la Revolución Francesa- es, decir, “lingiiísticamente
el análisis el: discurso político así entendido intenta poner
de manifiesto los caracteres "referenciales" del discurso 0
por lo menos uha de sus funciones: el reconocimiento:

1.3 Courdesses (Courdesses, 1971) revierte el problema de


las tipologías así entendidas insertándose dentro de formaciones-
discursivas complementarias: los discursos son fundamentalmente
polémicos didácticos (políticos) y las
(políticos) o configuracio-
nes sintáctico-semánticas que subyacen —el "combate" o el "contra-
to" desde una perspectiva semio-narrativa- “son persuasivas
o manipulatorias. Por Otra parte una tipología enunciativa
“ya aludida por Simonin Gumbrach (1971) en un interesante est_dio
del problema comó criterio de distinción del discurso político,
EN
_”. _ cho =. E] z
- eno

permitirá “considerar un discurso de base (el didáctico) del:


cual el discurso político sería una expansión de base política.
Otro .elemento que acerca el texto de Courdesses a la segunda
generación de lectores 'de discursos políticos es el concepto
de "modelización" como la impronta del sujeto en «su propio
enunciado y el análisis de "yo verbos enunciativos del tipo
o

digo", "yo repito", "yo pienso", etc., que indican la búsqueda


de una tipología más lógico-pragmática de los discursos sociales.

3. TOPOLOGIAS -DEL PODER.


Hasta aquí con una teoría "clásica" del discurso político
que transparenta la idea del discurso desde o en el poder (políti--
co. Los problemas vinculados a lo que se "quiere" hacer con
el discurso -su potencialidad de ser- las estrategias discursivas,
la intención de cambiar o construir la actitud del receptor
con respecto al contexto, sobre todo sus actitudes
evaluativas;
o simplemente "programar" un lector, nos hablan de un lugar
diferente desde -donde leer los discursos que se presentan como
. Políticos. 'Me interesa señalar aquí algunos Ítems para encarar
una lectura transversal de ciertos textos teóricos donde se
establecen criterios de reconocimiento. "

2.1 Pareciera .que la nueva generación de estudios sobre”


el discurso político girara 'en torno.aw la distinción :entre
la dimensión política y la articulación del poder (en el discúrso)
del discurso, unas intentando una nueva construcción del objeto-
discurso que permita evidenciar un nivel de coherencia semio—
lógica (Landowski);
otras vinculando lo político con tipologías
de los discursos naturales —como narrativos, pedagógicos, publici—
tarios, etc.- y el poder con una teoría de la producción y
recepción de los discursos sociales (Verón, 1978); finalmente,
un tercer tipo de lectura que considera al discurso político
como un discurso “transformatorio de las relaciones sociales
cuyas estrategias "se cumplen en el lenguaje" (Fabbri, 1973)
y cuya estructura profunda! respondería a una gramática del
poder.
Si el estatuto de lo "político" aparece como más fácilmente
localizable en cuanto TIPO -—designaría para estos autores un
micro-universo de contenidos representativos encuadrables bajo
parámetros de lectura histórico-sociales, digamos un marco
de lectura a-priori, marcado por la propia historicidad de
.

los discursos sociales-' la dimensión del poder, como modalidad


" "susteptible “ue definir” la existencia semiótica de los actantes
eh un discurso cualquiera" (Landowski, 1979) - -o bien como un
sistema de circulación de los efectos de sentido (Veron, 1978: 15),
inscribe la "pertinencia de estos metadiscursos en concepciones
epistemológicas diferentes: la primera revela la preocupación
greimasiana sobre la posibilidad de una gramática subyacente
a todos los discursos, de la cual el discurso analizado sería
-»una manifestación, la segunda se' inclina hacia una teoría de
los discursos "sociales como formaciones discursivas donde la
dimensión ideológica y "la dimensión del poder actuan como un
tejido de "intelegibilidades dispersas" siguiendo la propuesta
de Foucault (foucault, 1976).

.2.2 Una (nueva) re-definición del objeto en términos semiolin-


gúísticos incluiría por una _parte ¿laz puesta en evidencia de
aquellos criteñios de reconocimiento aportados por la “tipología
de los discursos naturales -la manifestación de lás representación
políticas se encontraría ligada a un cuadro referencial bastante
reducido- y también todos los niveles
de de "politización"
un. discurso: entre relaciones
actantes (sintácticas) y una
distribución de los valores sémicos investidos en los actores
(señántica). La hipótesis de Landowski es la siguiente: -lexami-
nar , a la luz de una teoría (actancial)
del poder, las configura-
ciones discursivas enganchades en los roles (actorialées) del
Poder" (1977) desde una perspectiva intern
a del análisis textual.
En efecto,: Jas condiciones de producción de los discursos
sociales aparecen inscritas como simulacros en “la estructura
“textual:De” ésté modo “la configuraciones discursivas como la
apelación y la prescripción -—temas recurrentes en la economía
del discurso político- serían actos cuya función performativa
es Comprometer la competencia modal del enunciador y del enuncia-
tario, mientras que la descripción -—otro tipo de efecto de
sentido— apunta a la competencia cognitiva: "Como discurso
narrativo, Produce "sucesos": corta (en función de una teoría
política o de otra) ¿la materia social para constituirla en
“una historia del presente, hecha de acciones políticas
narrativi-
zadas, accediendo las peripecias del mundo social al estat
uto
“de "sucesos “políticos significantes a la lectura y la "descripción"
de un observador; por otra parte, en tanto que acto de enunciación
esencialmente bajo la forma de ordenes y apelaciones- el discurso
político és el mismo. suceso para todo enunciatario constituído
Aa su vez en observador". Landowski (1977)
En esta perspectiva, el: principio teórico de construcción
de este campo de estudió es doble:
la delimitación de las unidades
de tipo discursivo y la recurrencia a ciertos temas -—habría
una Similitud formal de organización - semiótica en las grandes
teorías politicás —y!la articulación de la modalidad del poder:.
"el discurso (del poder) político". El lugar del sujeto (político
y enunciador)' es ambiguo en tanto sujeto real —dotado de una
competencia y una performance específica, (su poder hacer)-
y en tanto. sujeto político virtual, situado en el discurso:
"Todo pasa como que el sujeto _político no estuviera jamas
instaurado" ' marcando la paradoja que el discurso político
propone: ser un discurso re-presentativo pero a su vezoun
discurso de persuación y manipulación. :
*

2.3 Esta dimensión "accionalista' presenten en todos los


discursos pero central en la construcción del discurso político
es el recorrido «de lectura inicial de Fabbri: los dos grandes
items del análisis. semiótico lo integran la coherencia “de
los contenidos representativos y la fuerza. perlocutiva. Los.
actos del lenguaje —actos de autoridad, los compromisos persona-
les, los pactos, la totalidad de la enunciación pberformativa-
la construcción de ¡isotopías, el juego de las modalidades,
son - tácticas de construcción de un discurso que se quiere
éficaz en el terreno dela acción.
Si esto es posible en términos de descripción semiótica,
es porque para el autor existe la posibilidad de una correspon-
dencia entre lógica política y "gramática estratégica":"el
discurso político no es sólo el lugar de una única modelización
sino un proceso de transformaciones modales que establece
y activa las técnicas de circulación de las obligaciones y
los deberes en ¿el«discurso del poder". atea
La modalidad del "poder" «se articular semánticamente '-es
interna al texto- pero lo desborda para configurar a su vez
una dimensión institucional. De este modo no existiría una
especificidad del discurso político desde el punto de vista
de la modalidad del poder, ya que esta sería también típica
de otro tipo de discurso: la lectura de configuraciones "de
poder" dentro del texto —figura de autoridad, carisma, legitimi-
* dad, delegación, etc. nos permitiría describir las formas
en las que el poder se organiza en algunos tipos de discursos
que lo requieran. La innovación de Fabbri en esta perspectiva
es la consideración del poder no como modalidad exclusivamente
factitiva -—del orden del hacer— sino como una modalidad de
estado —del orden del ser-—. .
En el modelo greimasiano la dinémica del discurso recae
en la: circulación permanente a través del texto de objetos
privilegiados -del orúen del saber, del querer o del poder-—
regularidad que alcanzaría también al discurso político. En
la reflexión que aquí. .nos ocupa, los actos ilocutorios que
constituyen” figuras “de poder, indicarían explícitamente un
recorrido pasional, verdaderas . configuraciones pasionales
del orden del ser: "En la texonomía de los discursos (didáctico,
científico, publicitario) el discurso. político tiene la modalidad
compartida por otra parte con otros discursos persuasivos-—
de ser un discurso "agitatorio", es decir; siente la necesidad
de vencer la diferencia, la apatía, de.programar las pasiones
con las cuales quisiera ser escuchado. Se podría diferenciar
el tipo de pasiones que son programadas (...) en este
sentido,
"conservador", "radical", "oposición" no son solamente catego
rías
cognitivas de lo político sino que expresan verdaderás
pasiones
discursivizadas" (en la taxonomía Fabbri-Marcarino, /1979).

La posibilidad de una gramática del poder tendría como


objetivo estas; formaciones discursivas; cuya fuerza y eficacija
son diferentes y a menudo antagónicas o rechazadas, riesgo
eventual de todo discurso persuasivo.
,

“2.4 Para Veron las posibilidades de estas gramáticas de


.poder són múltiples. No existiría ura única posibilidad del
funcionamiento social +-y - consiguientemente de producción y
de reconocimiento de
sentido-, este es-un proceso, una semiosis
mas que un lugar preciso en el tejido discursivo: los: discursos
son siempre "de" poder en mayor 0. en menor medida (Veron,
1978). La perspectiva del análisis exclusivamente textual
se disuelve, los conceptos analíticos para estudiar
los funciona—
mientos que conciernen al poder y a la'“«ideología san términos
que designarán momentos en un modelo general de la producción
social del sentido: "Ideológico y poder re-envían a dimensione
s
de análisis de los fenómenos sociales y no a "cosas" o "instan
cias" que tendrían "lugar" en una topología social" (1978).

Si el texto es entonces sólo un punto de pasaje de múltiples


sistemas heterogéneos, en el efecto de credibilidad, de cohesión,
que funda el poder de un discurso para ser aceptado socialmente.
Poder como una dimensión que concierne al lugar de la lectura
y no a la producción especifica del discurso —desde o en el
PODER- "la noción de "poder" de un discurso no puede designar
ótra' cosa que los efectos de ese discurso en el interior de
un tejido determinado de relaciones sociales". (1978).

Dos... precisiones finales: un discurso “noes en sí mismo


político, sino que es una forma de enclave que se relaciona
con la constitución y manipulación del dispositivo enunciacional;
moro
AAA noz 7 - " 7 : ,
es un discúrso frágil ("agonístico") en cuento susceptible.
de ser;-
"robado" o destruído por la oposición (1978).
r

4 .TACTICAS Y ESTRATEGIAS
A

Es ¡interesante aplicar en el caso del discurso político,


aquello que Michel Foucault interrogaba a los discursos sobre
" la sexualidad, a saber, las tácticas polimórficas del poder:
cuál es la productividad táctica del discurso —qué efectos recípro-
cos de poder y saber aseguran- y'su integración estratégica
cuál." coyuntura y cuáles relaciones de fuerza hacen necesaria
su utilización. En síntesis: no lo que un discurso "dice" —su
dimensión cognitiva y representantiva- sino lo que un discurso
es capaz de "hacer" -—hacer hacer, hacer creer, hacer decir.

3.3.La pragmática ocupa actualmente el espacio de las investiga-


ciones lingiiísticas dedicadas a las condiciones, externas al
texto, de producción, recepción e interpretación de.los discursos
o, como afirma Parret, al análisis del "tejido de regularidades
que los gramáticos- reconstruyen bajo la forma de estrategias
(-..) la pragmática, en cuanto análisis del lenguaje-en-contexto
lo discurso) reconstruye este tejido de estrategias" (Parret,
1980:251). _

El concepto de estrategia, que se ha deslizado de la teoría


de los juegos (Cenot, 1974) hacia “el centro de estas investigacio-
nes cCcomó un concepto analítico clave en la descripción del funcio-
namiento discursivo, designa
': en "forma general ese sistema de
regularidades lógico-semáticas que permiten considerar al discurso
como emergente de un conjunto de leyes de producción de sentido.
Para Vignaux son estas regularidades las que revelan la ideo-
lógica “del discurso, el esquema de representaciones que subyace
a toda estructura discursiva y las estrategias serían los procedi-
mientos de formación de estos esquemas que aseguran la "imbricación
de efectos de sentido y efectos de poder (1979:70).

En la reflexión de Parret, las estrategias se presentan como


"una regularidad interiorizada y valorizada generando el fragmento
discursivo a partir de un contexto de enunciación (1980:252)
y poseen -tres características — que fundamentarán a su vez una
tipología de. las estrategias-: - son del orden de la competencia
discursiva de' los hablantes. no de su; perfomance. son.-translingiiís-
ticas: porque describen aquellas condiciones a las que los partici- ,
pantes de una interacción comunicativa se “someten, poniendo
en relación contexto con enunciado, y por último,: son normativas,
en el sentido que da Searle a este término, como opuesto a la
ley natural.

.
3.2. Si volvemos a
a "la preocupación inicial por enunciar algunos
criterios de reconocimiento —textual o contextual- del discurso
político en'
la serie de los discursos sociales, vemos que esta
última perspectiva nos permite delimitarlo como el resultado
de la convergencia de tres tipos de estrategias específicas
con sus efectos. concomitantes:

(a) la producción /recepción del“ discurso político aparece


siempre como. un proceso metacomunicativo. Todo discurso fundamen-
talmente un paquete de: normas para su' desarrollo y mantenimiento,
fija sus líneas de acción y de- defensa. Los discursos enunciados
desde una fuente militar, que excluyen el espacio de la respuesta
y cuyo “consenso es el consenso del silencio, o su cuasi-antítesis,
los discursos "de masas" de corte popular que se van conformando
a: través de un feed-back permanente con sus oyentes; tienen
en común no sólo: la posibilidad de un repertorio de lecturas
posibles sino que delimita las reglas de la situación comunicativa
(Escudero, 1978)

“Más . allá de la instancia institucional desde


donde son enuncia-
dos, -cada discurso postula su-propia institucionalidad, un ritual

y
que le es propio. Tanto la producción como -.la recepción del
discurso implica una calificación: los participantes de la interac-
ción que postula el discurso están munidos de una cierta competen-
cia y a su vez desarrollan un programa.

(b) la producción/recepción del discurso político aparace


siempre respondiendo a una estructura modal de tipo veridictiva:
se presenta como creíble, :exige ser "leído" como verdadero.
En este caso pareciera que fuera la fuerza perlocutiva determinante
que conlleva a su vez la Ídea. de consenso: discurso necesariamente
situado en un contexto de acciones e intenciones, pretende un
cierto acuerdo, sino de hecho, al menos de derecho: el de ser
tomado como cierto.
:

.. Este efecto de veridicción, .como: lo llama Creimas,.. .como


“por otra parte' al discurso científico y al religioso, puede
relacionarse con un principio pragmático, el de cooperación
«comunicativa (Grice, 1967) por el. cual la intelegibilidad de
un discurso tiene como condición fundante
la intención —común
a los participantes-. de construir un significado. Es, posible
comprobar que el discurso político. es aquel tipo de discurso
que establece con más precariedad este tipo de contrato
cooperativo
en tanto sujeto permanentementea los riesgos de ruptura negación
por parte del receptores no adherentes (Escudero, 1978,b)

(c) finalmente' una tercera línea de efectos: todo discurso


tiende a crear un lector. El discurso político evidencia la
construcción .de un Jlector-oyente competente y/o incompetente
que funciona inscripto en el texto, como resultado de estrategias
enunciativas y enunciacionales precisas,

«La existencia de este lector es requisito indispensable para


el funcionamiento y desarrollo del discurso, y su acertada cons-
trucción permitirá la supervivencia de "lo político" como registro
final. : :

3.3.Digamos entonces que no existe "un" discurso político,


sino discursos reconocidos como políticos en situaciones determina-
das y por consiguiente leídos como la resultante de estrategias
textuales específicas, entendiendo por estrategia toda operación
que el sujeto de la enunciación de un discurso hace -funcionar
de manera que -ciertos efectos de sentido ligado a través de
un recorrido de lectura privilegiado. En síntesis: no existe
un lugar de enunciación del discurso político que no esté atrave-
sando por la
lucha política, por la relación de fuerzas estableci-
das, codificadas y ritualizadas por una sociedad.

Si bien todo discurso se produce siempre a partir de otros


discursos -—y
el caso de la
literatura es el más
evidente- el
discurso político produce fundamentalmentepara contestar, refutar,
invalidar, apoyar, los discursos precedentes. Declarado o implíci-
tamente polémico, no existiría "grado cero" del discurso: toda
neutralidad sería la negación misma de su existencia. o?
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ACTIVIDADES DE: ESTUDIO

: Eliseo Veron

SEMIOSIS DE LO IDEOLOGICO Y EL PODER

1.Producción de sentido. Materialidad del sentido.Dos“gramáticas”


Tratamos aquí
(1) de concebir los fenómenos de sentido como aquellos
que tienen, por
un lado, siempr la forma
e: de investimientos en conglomerados
de materias
sensibles que por ese hecho devienen en materias significantes
(investimientos susceptibles de ser descritos como conjuntos de procesos
discursivos), y que remiten, por otro lado. al funcionamiento de un sistema
productivo. Todo sistema productivo puede ser considerado como un conjunto
de . presiones cuya descripción especifica las condiciones bajo las cuales
algo es producido, . puesto en circulación y consumido. Lo mismo, para el
sentido. Ahora bien, esas presiones, en lo que se refiere al sentido tal.
como éste es localizable en las materias significantes que.circulan dentro
de una sociedad, no constituyen - ciertamente un conjunto homogéneo; esas
.—presiones no fluyen desde: una misma fuente, no tienen todas los mismos.
fundamentos ni remiten todas ad: mismo tipo de "leyes". En otras palabras,
hay sistemas diferenciados de la producción de sentido cuya descripción
exige sin duda recurrir a conceptos y modelos diferentes. Aquí nos interesa-
mos en aquello que, entre esas presiones* múltiples en-la producción
de
sentido, remite a los lazos que el sentido mantiene con los mecanismos
de, base del funcionamiento. 'social, es decir a lo relacionado con el orden
de lo ideológico y con el orden del poóer, Ello.no quiere decir que vamos .
a situarnos aun nivel particular del funcionamiento social o que tendremos
que tratar con un tipo de matería significante. Muy por el contrario:
el orden de lo ideológico y el order del poder atraviesan de extremo a.
extremo a una : sociedad, Volveremos sobre ese ' punto.

Si se plantez el marco general de una teoría de la producción de sentido,


“éste último aparece ¡inevitablemente como resultado de un trabajo social
»- m
A

(en una terminología ligeramente diferente: como engendrado por prácticas).

se manifiesta entonces bajo la forma de investigamiento de


Lo que
materias es trabajo: social.Sólo hay sentido si éste está
sentido en
a complejos de materias sensibles. Incluso si se quiere
“incorporado
de "representaciones" O de "sistemas de representaciones", éstos,
hablar
el análisis de la producción de sentido, no pueden tener otra forma
para
de existencia que. la de investimientos “significantes en materias. El
punto de referencia de todo procedimiento empírico en este terreno está
constituído por fenómenos de sentido constatadós. Disposición de materias
significantes " portadoras de sentido, conjuntos significantes que han

sido extraídos , para las necesida des del análisis, del flujo ininterrumpido
_de producción -—circulación— consumo de sentido en un contexto social
dado. Lo que yo llamo aquí tinvestimiento" no es más que la puesta en
espacio-tiempo de sentido, bajo la forma de procesos discursivos.

El problema del estatuto de una multiplicidad de conceptos analíticos


utilizados: en las ciencias sociales para estudiar funcionamientos que
conciernen al poder y a las ideologías se plantea así. Es evidente que
tales . conceptos (por ejemplo "instituciones", "relaciones sociales",
"normas", "dominación", "representaciones" y tantos otros) remiten a

lecturas hechas 'por el sociólogo, antropólogo, de "paquetes" extraordina—


riamente complejos de: materias signific antes de: todo tipo. Una teoría
de la "producción del sentido debe interrogarse acerca de los fundamentos
de tales "lecturas". Una teoría de la producción social de sentido no
puede dejar de sustentar al mismo tiempo su propia legitimidad epistemológi
ca; en tanto que discurso (con pretensiones científicas) sobre el sentido
socialmente producido.

Una. aproximación que se propone aplicar a los fenómenos de sentido


el modelo de un sistema productivo debe postular relaciones sistemáticas
entre conjuntos significantes dados (constatados), por un lado, y los

aspectos fundamentales de todo sistema productivo: producción, circulación,


consumo. El sentido de esos aspectos impone la descripción de las condi-

ciones bajo las cuales su funcionamiento. Se puede así hablar de condiciones


de producción, de circulación, de consumo. A estas últimas preferimos
denominarlas condiciones de reconocimiento (2). Estas condiciones son
ciertamente -al
exteriores conjunto- significánte dado (constatado) que
ha podido ser tomado como objeto de análisis, pero:no pueden ser considera—
das como ajenas al sentido en general: esta distinción entre sentido
. producido y condiciones de producción no debe reproducir la vieja dicotomía
infraestructura-superestructura, como sicel sentido fuese un "nivel"
de la.sociedad
y como sí hubiese "abajo" alguna realidad de la que el
sentido estuviese ausente. El mas íntimo fragmento de compo
rtamiento. social
«implica el sentido. Hay, entonces, sentidos de ambos lados de la disti
rición'
conjuhto significante-condiciones de producción. El corte se produce por
la intervención del análisis.

En. el funcionamiento de una sociedad nada es ajeno al sentido: el sentido


está presente en todo. Luego lo ideológico y el poder están también presentes
en todo. En otros términos: tode fenómeno social es susceptible de ser
"leído" en relación a lo ideológico. y en relación al
poder. Decir que
lo ideológico, que el poder están" présentes en todo
es afirmar el principio
de una “lectura, y no la posibilidad
concreta de llevarla a término: estámos
muy lejos de tener logs instrumentos para mostrar la ubicuidad del. poder
y de "lo ideológico. Al mismo tiempo, afirmar que lo ideológico, que el
poder. están en todos lados, es radicalmente diferente de “decir que todo
es ideológico, o que todo se reduce a la dinámica del poder.
Ello quiere
¡decir q
decir ue "ideo:01óg
ló ico", p r" remiten.
"pode ? a dimensiones de análisis de los
fenómenos sociales, y no a "cosas", a "instancias" que tendrí
-en la topología social. Volveremos anun lugar
-sobre esto.

Aún si especificamos nuestra aproximación como un apuntár hacia el:


funcionamiento del sentido en relación a los mecanismo de base de una
sociedad, por lo tanto como. un .. enfoque. del .orden del
«poder y «del :orden
de lo ideológico, la ubicuidad de estas dimensiones no facilita las cosas:
debiemos tratar con toda clase de materias significantes. Ahora
. evidente bien, es
que las articulaciones del sistema 'productivó no son de
naturaleza la misma
del funcionamiento social. Se puede "leer" lo ideológico en
un sistema de comportamientos rituales igual que en la organización de
la gestualidad cotidiana; se puede mostrar como un discurso de prensa,
una conversación de pareja o un discurso fílmico se articula en
que
una dinámica
concierne al poder. En cada : caso, las condiciones de producción,
circulación, de
de reconocimiento, implican - mecanismos diferentes, . exigen
la puesta en juego de análisis específicos. La producción de
está sentido no
sometida a las mismas- presiones cuando * se trata de-la circulación
evanescentes de las palabras en situaciones sociales llamadas interpersonales
que cuando el interés se dirige: á una: circulación más extensa como la
que el soporte tecnológico" hace: posible para el discurso escrito. Hay,
sin embargo, algunos elementos «conceptuales propios al modelo
del sistema abstracto
productivo del sentido considerado en general, que pueden
ser precisados. Permiten describir la aproximación desde el punto de vista
metodológico.
At

> ” -. e »

Describir el trabajo social de investimiento de sentido en materias


significantes consiste en analizar operaciones discursivas de investimiento
de sentido. Esta operaciones son reconstruidas (o postuladas) a partir
de marcas que están presentes en la materia significante. En otros términos,
estas operaciones son siempre operaciones subyacentes, restablecidas a
partir de marcas ' en la superficie material. Hemos distinguido en el modelo
¿y

de un sistema productivo tres aspectos: producción, circulación, reconoci-


miento. Se puede
hablar de marcas cuando se trata.de propiedades significan-
tes cuya relación, ya'sea con las condiciones de producción, ya sea con
las condiciones de reconocimiento, no está especificada. Desde este punto
de vista, por ejemplo, el lingilísta trabaja. sobre marcas propias a la materia
significante lingliística. Cuando la relación entre una propiedad significante
y sus condiciones de producción (o de reconocimiento) se ha esablecido,.
esas marcas se, vuelven huellas, de la producción o del reconocimiento.
En efecto, estos dos conjuntos de condiciones nunca son idénticos:
las condiciones de producción de un conjunto significante jamás son las
mismas que las condiciones de reconocimiento (3). la separación entre produc-
ción y reconcimiento es extremadamente
variable, según el nivel de funciona
miento' de la producción de sentido
en que uno se sitúe, y según el «tipo
de conjunto significante que se estudie. En todo caso, tenemos que ver
siempre con dos tipos de "gramática": "gramáticas de producción" y "gramática
de reconocimiento" (4). Por el cóntrario, no existen realmente huellas
de la circulación: el aspecto
hecho "visible" circulación no puede ser
en "el análisis más que como la distancia entre los dos conjuntos de huellas,
las de la producción y las del reconocimiento. Voy a dar, para ilustrar
«la importancia de la distinción entre los tipos de gramáticas, dos ejemplos
situados a nieveles completamente diferentes del funcionamiento social:
uno remite a los procesos de interacción, el otro concierne a la circulación
social del discurso escrito.

Hace tiempo he tratado de distinguir algunas características discursivas


que permiten diferenciar la palabra producida por sujetos que, por otro
lado, otro
discurso (el de la psiquiatría y el del psicoanálisis) describía
como la de
los pacientes neuróticos graves: histéricos, fóbicos, obsesivos.
Así era posible relacionar ciertas propiedades significantes de la palabra
de' estos pacientes con los fundamentos dinámicos de cada tipo de "neurosis".
La manipulación del relato sobre la enfermedad, el ejemplo de conectores
temporales para describir el episodio "original" de sus problemas y el
dispositivo de la enunciación centrado sobre el sujeto se vuelven así
et

intelegibles, por ejemplo, a la luz" de un modelo de la dinámica profunda


de los sujetos histéricos. Desde este punto de vista, entonces, se trataba
de la reconstrucción de una gramática de producción del discurso del histé-
rico. Era evidente, al mismo” tiempo, que las propiedades discursivas de
esta palabra eran, por así decirlo una puesta én acto, en la situación
de ¡interacción de las estrategias propias de la historia: problema por
lo tánto | del' efecto de sentido de esta palabra sobre un interlocutor,
es decir, problemas ' de reconocimiento. Y "era imposible “inferir de una
manera lineal o directa a partir de una descripción de la palabra de un
sujeto desde el puñto de vista del sistema de presicnes en que se produce
el sentido, el efécto de sentido- de esta palabra sobre todo “sujeto: se
_ precisaba necesariamente tener en cuenta los rasgos meuróticos dominantes
en el interlocutor. En otros términos: un sujeto con dominante Fóbica
no "reaciona" al discurso histérico de la misma manera que un sujeto obsesivo
. , .

Las estrategias interactivas (y por lo"tanto el objeto de poder dentro


de la situación de interacción) parecen así una especie de mecanismo de
articulación recíproca entre dos gramáticas: la del locutor-productor
de una palabra dada, y la del interlocutor, quien, en reconocimiento,
hace una "retoma" de esta palabra para producir otra (5).

Esta distinción . ayuda igualmente (y es el segundo ejemplo) a comprender


“la circulación social de los textos, en particular lo que concierne a:
las prácticas científicas. Eñ relación a la materia significante lingiiística,
entonces, y en la medida en que teñemos que ver con las presiones derivadas
de los mecanismos de base del funcionamiento social, la separación entre
producción «y reconocimiento nos permite tocar la cuestión de la historia
social de los textos, es decir el conjunto de relaciones (sistemáticas,
pero cambiantes). que definen la distancia entre las condiciones (sociales)
bajo las “cuales ur texto ha “sido producidó, de un lado, y las condiciones
(quer se "desplazan" si se puede afirmar, así,a lo largo del tiempo históri-
co) bajo las cuales ese texto es "reconocido". En el orden de la producción
social' de conocimientos, “esta distáñcia puede Ser de docéñas de años.
5e ven bien que para un texto dado «se puede tratar de recosntruír una
gramática pará dar cuenta de sus condiciones de producción, pero que por
el otro lado habrá de hecho una. serie de gramáticas de reconocimiento,
asociadas a diferentes momentos “históricos en los cuales ese texto ha,
. producido efectos (visibles en la práctica discursiva de una ciencia,*
es decir visibles bajo la forma de otros textos de los que el primero
ha sido en su momento una condición de producción). Todo texto es entonces
susceptible de esta doble lectura. He tratado de aplicarla al caso, particu-
larmente significativo, del ' Curso de lingiiística general: en mi opinión,
son las condiciones de producción de Já separación misma las que explican
los: fenómenos de emergencia de práctica científica. (6).

Dos aspectos fundamentales, en consecuencia, en una teoría del sentido


en tanto-que. éste es: engendrado por un sistema productivo: el uno, comprome—
tido con la reconstrucción de gramáticas de producción; el otro, consagrado
a la reconstrucción de: gramáticas del reconocimiento. Tanto desde el punto
re
¿wwnde vistá 'sincrónico -como. del diacrónico, la producción: social de sentido..
consiste en una red significante que es, para todos sus efectos prácticos '
A

infinita. A todos los niveles de funcionamiento social; “esta.red. tiene

forma de uña estructura de engranajes. Tomemos todavía el caso “de los


la
con soporte lingiúístico. En la medida en que otros
discursos sociales
parte de las condiciones de producción de texto un
textos forman siempre
o de un conjunto textual dado, todo proceso de producción de un texto

es en realidad un fenómeno de reconocimiento. E inversamente: un conjunto


efectos de sentído,. - expresado como una gramática: de reconocimiento
de
puede. ser registrado más que como. texto próducid o. En la red infinita
no
de la producción de sentido, toda gramática de producción puede ser contem-
plada como resultado de condiciones de reconocimiento determinadas y una
gramática de reconocimiento no ¡puede ser registrada más que bajo la forma
proceso textual determinado: he ahí la forma de la red de producción
de un
en la historia. Aquí es decisivo el término "determinado", pues
textual
no expresan propiedades "en sí" de los textos; tratan
esas «gramáticas
representar las relaciones de un texto o de un conjunto de textos con '
de
"exterior", con sus sistemas productivo (social). Este último es necesa—
su
riamente histórico.

que .se debe subrayar es «que no puede inferirse, de una manera directa
Lo
y lineal, reglas de reconocimiento (de los "efectos de sentido") a partir
de la gramática de producción. Esta última define un campo de efectos
sentido posibles, pero la cuestión de saber cuál es concretamente la
de
de reconocimiento que ha sido aplicada a un texto en un momento
gramática
dado, permanece indecible a la luz de las reglas de producción.

2.El plural de los textos. La mira discursiva - Paquetes significantes”


Lo que hemos dicho todo análisis de.un conjunto
hasta aquí implica que
significante, cualquiera que materias(s) significante (s)
sea la (o las)
en juego es necesariamente heterónomo. El sentido producido se vuelve
visible sólo en relación con el sistema productivo que lo ha engendrado,
es decir con relación a ese "exterior" constituído por las condiciones.
de producción, de circulación, de reconocimiento. Los análisis que se
pretenden "inmanentes" se sitúan en las prolongaciones de lingiística
tal como ha sido generalmente practicado hasta ahora: tomar un texto como
secuencia de enunciados que remiten a "la lengua”. Ahora bien, y para

quedarnos en primer lugar en el marco de los fenómenos propios del lenguaje,

una teoría de la producción social de sentido está lejos de ser un objeto


hemogéneo. Todo texto es susceptible de una multiplicidad de lecturas,
es un objeto plural, es el punto de paso de varios sistemas, diferentes,

heterogéneos, de determinación. En un texto, en otras palabras, hay diferen


tes tipos de huellas. y una- misma marca lingliística. "puede ser "leída" como
huella' "vinculada a diferéntes sistemas de determinación, «según el
" Lipo de lectiurá” qué se” haya ido "haciendo del“texto. En'un texto estár
las huellas, eventualmente, del autor, que remiten
a un sistema históri-—
co-biográfico: y al universo * de su "obra". Ciertamente hay también
huellas del trabajo del inconsciente. Están las huellas de los lazos
que el ' texto mantiene con las condiciones sociales bajo lás cuales
éste ha sidó producido,. y también las huellas de operaciones que
permiten el mecanismo “de articulación de ese texto en una situación
de poder, en una red de relaciones sociales determinadas. Y así sucesiva
mente. Por ello, en mi opinión, sería un grave error tratar de trabajar
sobre los fenómenos discursivos transfiriendo cierta operación lingiís-
tica basada en: la noción de "lengua". Esta transferencia caracteriza
a la "primera semiología" (7). En esa perspectiva se trataría de
hacer "análisis .del discurso" de constituir una especie de teoría
universal “de lo discursivo, contrapartida y complemento de la teoría
de la lengua. Cuando uno se sitúa: al nivel del fúncionamiento discursivo
se está plenamente en lo social; la producción discursiva de sentido
(y no hay una que no sea discursiva) es totalmente social: se están
viendo los discursos y no el discurso. No se trata de decir que cuando *
se pasa al orden de los discursivo se pasa á lo social: en realidad,
la lingiiística como «ciencia de la lengua, como ciencia ajena a lo
social, sólo se ha podido constituir sobre la base de un dispositivo
metodológico destinado a: expulsar. lo social:''del lenguaje, reduciendo
la actividad de la lengua (siempre “discursiva y siempre social) al
modelo de la producción de fÍrases por un locutor-auditor ideal (8).

Se ve entonces por qué el discurso me parece un objeto ilusorio.


Se puede tratar, por el contrario, de constituir poco a poco una
teoría de la producción social' de los discursos (pequeño capítulo
de una teoría de la producción social «del sentido en general).
para cada tipo de análisis és preciso especificar el nivel de pertinen-
cia de la lectura, el modelo del sistema productivo en el marco del
cual se va,a situar un conjunto textual para ubicar ahí operaciones.
Entonces hay que transformar el objeto empírico de partida (el o
los textos) por medio” de un procedimiento que apunta al orden de
la discursividad. Definamos aquí ese orden de la discursividad, al
menos en negativo: no hay que tratar a los textos como si consistiesen
necesariamente en secuencias (necesariamente lineales) de enunciados,
obtenidos por “"hormalización' del: “corpus (obtenidos, en otras palabras,
por destrucción de lo discursivo).

Desde este punto de vista, el orden de lo discursivo remite a


dos asuntos “importantes. El primero se refiere a lo que he denominado
- -más-+arriba .la materialidad del. sentido. En efecto, la discusiyidad....
es un proceso de espacio-temporalización de la materia lingiiística:
e. — o

“despliegue espacial y puesta en secuencia en el tiempo, inextricablamen-


te “ligados el uno con la otra. Contrariamente a la opinión de Saussure,
el orden del discurso no es lineal. El segundo asunto se relaciona
con el hecho que, existiendo interés por el estudio del serítido social-
mente producido de conjuntos significantes registrados, prácticamente
nunca se trata 'cón objetos significantes homogéneos. En los discursos
sociales hay siempre varias materias y por lo tanto varios niveles
de codificación * que opéran simultáneamente: imagen-texto; ¡magen-
palabra-texto-sonido: palabra—comportamiento-pestualidad, etc. Estos
"paquetes" significan complejos son los que recorren las redes sociales
del sentido. o, " es

3.Ideológico,, poder(1).La travesía de lo socia!l.(El obstáculo marxista)


Aunque sea cierto que ninguna otra teoría
tan decisiva haya sido
en este terreno como la teoría marxista, hay que reconocer que actual-
mente es ella la que más obstaculiza el desarrollo de una reflexión
sobre el funcionamiento de lo ¡ideológico (o, en todo caso, cierta
versión de esta teoría). Añadiréó que la tendencia a la reificación
de los conceptos se ha acentuado particularmente en la teoría marxista
" contemporánea en comparación con los textos "clásicos". La misplaced
concreteness* ha arrasado con mucho. Se ha retomado la dicotomía
infraestructura/superestructura, esa concepción geológica o, más bien
piramidal de la sociedad que quisiera que ésta estuviese constituída
por "pisos" «superpuestos (9). Por supuesto que es una metáfora, pero
dice bastante sobre otras propiedades de la
teoría en que aparece:
la "base" (ajena, por supuesto, alo ideológico, que se encontraría
afuera) es "determinante 'en última instancia"; la superestructura,
más O menos distanciada, "sigue". 0 bien: la superestructura puede
volverse relativamente autórioma de la "base", pero es seguro que
' lo político. es más "cercano" de la "base" que lo ideológico. La misma
mentalidad de reificación ha producido el concepto curioso de "práctica
ideológica", como si lo ideológico fuese algo que se encuentra "en
no algun lado", como si lo ideológico, al interior de una misma serie
homogénea estuviese "al lado" de lo económico y de lo político.

Ya lo hemos dicho: hablar de ¡ideológico


y de poder es hablar de
dos dimensiones en el análisis del
“funcionamiento de una sociedad.
Estamos hablando de una doble mirada “que puede alcanzar cualquier
fenómeno social, a cualquier nivel del funcionamiento de una sociedad,
cuando se trata a la vez de comprender su producción y su reproducción
(10). :
En consecuéncia, son dimensiones que atraviesan entéramente a una
sociedad.

"Se trata de comprender la semiosis* necesariamente invertida en


toda forma. de orgahización. social (ya esta denominada como el orden
del orden de.lo "económica" de lo "político" de lo "cultural" de
lo "ritual", etc. al ser descrito independientemente de su dimensión
significante). Sin esta semiosis no es concebible forma alguna de
organización social. Lo que “no quieré decir que esta semiosis que
atraviesa la sociedad sea, en su conjunto, susceptible de sér descrita
a partir de un principio simple de coherencia interna, y no muy al
. contrario. Volveremos sobre esto. .

Mark Augé ha señalado muy claramente el problema: "Se trata (...)


de repensar las consecuencias de algo considerado verdadero por lo
evidente, demasiado evidente quizá para que “se lo perciba siempre:
con claridad. “Las grandes líneas de la organización económica, social.
o política son objeto: de representaciones al, mismo título que la
organización religiosa mas exactamente, la organización y la representa
ción - se dan siempre juntas; una organización no"existe antes de ser
representada. No existe tampoco razón para pensar que una organización
represente a otra, y que la verdad de un "nivel" en el lenguaje de
las metáforas verticales esté situada en otro nivel(11). Así se plantea
un “importante problema: el de determinar (siempre en el contexto
de sociedades concretas) la naturaleza particular y las modalidades
de funcionamiento de esta semiosis al interior de relaciones sociales,
descritás por el sociólogo “ó “él” antropólogo como pertinentes a lo
económico, a lo social, a lo político.

Intentemos ahora caracterizar de forma mas precisa esos dos conceptos


de "ideológico" y de. "poder", no en general, sino en relación a la
producción de sentido, a la semiosis de una sociedad. Tenemos ya
los puntos de ' ubicación necesarios: estos conceptos remiten a los
dos tipos de gramática de los que hemos hablado.

Lo ideológico es el nombre del sistema de relaciones entre un


conjunto significante dado y sus condiciones sociales de producción.
En las sociedades industriales capitalistas, esas condiciones conciernen
«a la manera en que la red de la semiosis social es dinamizada por
los conflictos de clase.

Tras mencionar esto, me parece imposible aprehender la complejidad


de este sistema de relaciones por medio de nociones simplificadoras
como
* la de "interéstde “clase” (incluso si se «intenta definirlo "objeti-
vamente"). La construcción de las gramáticas de producción de los
discursos sociales puede muy bien prescindir de tales nociones que
t eo

implican, además, una teoría ingenua del sujeto. , .

Suponiendo que un día tuviésemos los instrumentos para reconstituir


el conjunto de” las condiciones de producción de un tipo específico

de sentido producido, se puede decir que una ideología, históricamente

determinada (en el sentido en.que se habla de "fascismo" de "socialismo"


de "stalinismo"), no es mas que una gramática de producción. 0, más
bien, una familia de gramáticas, pues será necesario explicar como
una ¡ideología históricamente determinada puede investir materias
significantes muy diferentes (el discurso escrito, el comportamiento,
las películas, el espacio. ¿Acaso no se ha hablado de "arquitectura
fascista"?, etc.). Las condiciones de este investimiento (el proceso
de producción) no son ciertamente «las mismas para las diferentes
materias. Cada materia define presiones específicas impuestas a las
operaciones discursivas de investimiento de sentido (12).

Cuando se trata de dar cuenta, al interior de un proceso determinado


de circulación, de los efectos de sentido de un conjunto significante
dado, es decir cuando se mira desde el lado del reconocimiento, se
está tratando la cuestión del poder. La noción de "poder" de un discurso
no puede designar otra “cosa más que los efectos de ese discurso al
interior de un tejido determinado de relaciones sociales. Ahora bien,
esos efectos sólo pueden tener la forma de otra producción de sentido.
Ya lo hemos dicho: todo reconocimiento engendra una producción, toda
producción es el resultado de un sistema de reconocimientos. Si,
por ejemplo, tal tipo de "mensaje" de los medios masivos tiene un
poder sobre los "receptores", ese poder no . puede interesarnos más
que bajo la forma de sentido producido: comportamientos, palabras,
gestos que definen a su vez relaciones sociales determinadas que
mantienen esos "receptores", y que van entrelazándose en la red infinita
de la semiosis' social.

Esta manera de concebir los conceptos de "ideológico" y de "poder",


conlleva un cierto número de consecuencias. Me limitaré aquí a recordar-—
las rápidamente (13).

"Ideológico" no es el nombre de un tipo de conjunto significante,


por ejemplo de un tipo de discurso que sería el "discurso ideológico".
"Discurso ideológico": he ahí otro animal que forma parte de la extraña
fauna de cierto marxismo reificante. Una vez más: lo ideológico es
au

una dimensión «susceptible de ser ubicada en todo discurso marcado


por sus condiciones sociales de producción, cualquiera que sea el
"tipo".
. .,

Una ¡ideología no es un repertorio". de contenidos ("opiniones", o


"actitudes" o incluso "representaciones"), es una gramática de engendra-

miento, de investimiento de sentido en materias significantes. Una


ideología ser. decidida al nivel de los "contenidos".
entonces no puede
Una ideología de manera fragmentaria)
puede manifestarse
(siempre
también bajo la forma de contenidos (es quizá aquello que corrientemente
es denominado como el "discurso político"). Pero el concepto de ideolo-
gía (una ideología) no puede ser definido a ese nivel. De hecho,
la relación ideología (históricamente
de una determinada) con la
* producción de sentido que” ella engendra es el mismo tipo que la que
existe entre la lengua y (la producción de la palabra, tal como ha
sido formulada, por ejemplo, por Chomsky : hay que darse los medios
de describir un: sistema finito (ennumerable) de reglas de engendramiento
para dar cuenta de una producción de sentido que es infinita. Pues

a partir de una ideología se puede hablar de totalidad del


la Universo,
"real" e "imaginario", y se puedene utilizar todas' las materias signifi-
cantes. El concepto de "ideológico" no tiene nada que ver con alguna
noción , de formación o de ocultamiento de algo pretendidamente "real".
Se toca así la vieja cuestión "ciencia/ideología". Digamos de inmediato
que esta cuestión concierne a un muy pequeño fragmento del Universo
de la producción social de sentido: el orden del discurso escrito
de pretensión referencial, que es siempre aquel cuya forma adopta
el "conocimiento científico". Algunas observaciones, entonces, respecto
qu. es campo restringido. El discurso "científico" es típicamente
social. Para los” discursos sociales no hay —sentido que pueda ser
"no ideológico" esto querrá decir que no se podría producir sentido
por fuera de toda. presión de engendramiento, lo que es absurdo. Todo
discurso social está sometido a condiciones de producción determinadas.
Se puede, por el contrario, establecer una distinción al, nivel de
lo efectos de sentido entre el "efecto de cientificidad", de un lado,
y el "efecto ideológico" de . Esta
otro. "distinción es un asunto de
reconocimiento y no de producción. En otras palabras: la diferencia
entre el efecto de sentido discursivo que se denomina "conocimiento"
y el efecto "ideológico" concierne al poder de los discursos.

Esta última observación merece algunos comentarios. El fundamento


de la distinción entre estas dos gramáticas de reconocimiento (aquella
en donde opera el "efecto de cientificidad" y aquella en donde se *
produce el "efecto ideológico") puede ser formulado del modo siguiente:
el '"efecto de cientificidad" se basa en una especie de desdoblamiento:
el discurso es reconocido por instaurar una relación con la relación
con lo "real" que describa. Esta relación doble puede ser obtenida
cuando un discurso que, como todo discurso, está sometido a condiciones
2.

o
de producción, determinadas, “se _ Muestra precisamente como estando sometido.
a condiciones de producción determinadas.

En otros términos: la relación del discurso con sus condiciones de engen-


dramiento. El "efecto ideológico" es, por el contrario, el del discurso
absoluto: este discurso que se muestra como si fuese el único discurso
posible sobre aquello «de lo cual se habla. Pero el uno y el otro de esos
efectos de reconocimiento tienen necesariamente lugar al interior de discursos
que son ideologías en producción. (14)

Se puede ver en qué toca esta distinción al poder de los discursos:


para, que un discurso tenga poder debe poner en marcha una creencia. Las
creencias implicadas por el "efecto ideológico" y el. "efecto de cientificidad"
son bastante” diferentes. El paradigma del "efecto ideológ:
absoluto, el discurso de la religión. Inversamente, el modelo del mismo
discurso del "conocimiento" es aquél que no conlleva la creencia absoluta,
el de un discurso relativo.
,

Quizá no sea inútil insistir sobre el hecho que este problema (en una
vieja fórmula: la cuestión "ciencia/ideología") es un aspecto. extremadamente
parcial del dominio de lo ideológico: la tendencia a reducir ese dominio
a una cuestión semejante está desgraciadamente muy difundida. El dominio
de lo ideológico, en, realidad, concierne a todo sentido producido sobre
el cual las condiciones sociales de su producción han dejado huellas. Entre
las lecciones de Marx he aquí una - que es necesario no abandonar: nos ha
enseñado que si uno _sabe mirar bien, todo producto Carga las huellas del
sistema productivo “que lo engendró. Esta “huellas están ahí, pero no se
las ve: son "invisibles". Cierto análisis _Puede hacerlas visibles: _aquel
que consiste en "postular' “que la naturaleza de un producto sólo
s es intelegible
en relación a las reglas sociales de su engendramiento.

Si se aplica sistemáticamente ese póstulado al estudio de la semiosis


social, - hay sin embargo otro aspecto de la teoría marxista que no se puede
conservar. Los compartimientos se . caen, los seccionamientos estallan: lo
ideológico no es
una superestructura pues sin ideología, es decir sin produc-
ción social de sentido, no habría ni mercancía, ni capital, ni plusvalía.

4.Ideológico, poder(t!):la red múltiple.(El obstáculo izquierdista)


Pero, ¿qué es en suma el poder? No podríamos decirlo mejor' que Foucault:
"..)y el” poder no es una institución, y no es una estructura, no es una
- cierta potencia de. la que “algunos “estarían "dotados: es el nómbre “que se *
s

le da a .una situación estratégica compleja, en una sóciedad dada". (15)


Esas estrategias no existen. fuera de los paquetes significántes que “lás
cargan, no. existen . sin la articulación, en las relaciones sociales, de
los innumerables discursos que atraviesan a la sociedad, no existen' sin
el engranaje de ' producciones de sentido y de reconocimiento de señtido,
en una semiosis que Peirce bien había descrito como infihita.

Imaginemos ahora una sociedad en donde hipotéticamente un único conjunto


de reglas productivás permitiese explicar la producción de sentido: a)
en toúos los niveles _de funcionamiento «social; b) al interior de todos
los tipos de "paquetes" significantes; c) en todas las redes de circulación
de sentido; d) tanto en producción como en reconocimiento. Ese sería el'
modelo de una sociedad enteramente dominada por una sola gramática. Tal
sociedad permanecería' eternamente inmutable: pasaría “su tiempo histórico
reproduciéndose apaciblemente, siempre idéntica a sí misma. Es muy dudoso
que semejante sociedad haya jamás existido en el mundo; es igualmente dudoso
que alguna sociedad "primitiva" Se parezcá en cualquier aspecto que sea
a esta imagen. “En todo “caso, es seguro que nada está más lejos de ése
modelo que nuestras sociedades industriales capitalistas.

Ahora bien, cierto pensamiento de - izquierda trata desde hace cierto


tiempo de cumplir la “imposible tarea de explicarnos que vivimos en este
tipo de sociedad. Anunciando con estruendo ya sea "el fin de la producción"
(16), ya
sea ' "el estado: * cibernético" (17), ese discurso nos muestra cómo
una única-y misma lógica está en marcha en todos lados: la de la .Forma/objeto
del "principio de simulación", en Baudrillard, la del discurso del poder '
(no en, tanto. que * dimensión analítica, sino en tánto que el poder “concreto
único, que de arriba hacia abajo domina todo), en Franflin. Curiosa paradoja
la de este pensamiérto que, por ótro lado, muestra bien' la complejidad
de la producción-reconocimiento de sentido en nuestras sociedades capitalis-
tas. Hace ya mucho tiempo que el funcionalismo sociológico, proclamaba
alegremente "el fin de las ideologías" (18). Un poco más tarde, Mc Luhan,
el profeta de la era electrónica, se regocijaba explicándonos que nos
volvíamos nuevamente una "tribu" integrada. por el poder mass-medíantico
(19). Cierto pensamiento de izquierda ha invertido simple y lianamente
el signo retomando todos esos temas, intactos. Ello ha dado como resultado
un discurso apocalíptico sobre la unificación abasoluta de la dominicación,
que ni. siquiera tiene nece sidad- “al parecer,
de ser ejercida: el sistema
. se reproduce automáticamente. He aquí -la paradoja: es evidente que para
comprender las condiciones de producción de ese discurso es inevitablemente
necesario referirse al discurso
del poder: no esta vez a cualquier discurso,
no a todo discurso, sino
a un discurso muy preciso: el del poder establecido
«en las sociedades capitalistas. Se .diría que ese discurso ha tenido un
-gran .éxito en- la izquierda: ha conveñicido” :a "algunos de la homogeneidad
y coherencia total de nuestras” socie
dades.
Cualquiera que sea el_nivel de la producción de sentido en que se sitúe e

cualquiera que sea - la:- «duración histórico que se determine, las


del: tiempo

¿e
gramáticas de producción y las gramáticas de reconocimiento, ya lo hemos
dicho, jamás coinciden exactamente. * Lo ideológico y el poder son redes
de la producción social de sentido perpetuamente sacudidas por los mecanismos
dinámicos de la sociedad y, por lo tanto, siempre más o menos desfasados

el uno respecto del otro: la producción y el reconocimiento sociales del


están, en cada nivel, en cada momento del tiempo histórico, en
sentido
cada zona de funcionamiento social, sometidos .a un proceso perpetuo de
desarreglo y de reajuste. En la medida que el tejido de la semiosis
en
social no es más que la dimensión significante de la organización social,
está ¡incesantemente dinamizada por los conflictos sociales. En nuestra
sociedades industriales capitalistas, en primer lugar y sobre todo por

los conflictos que se desprenden de la lucha de clases.

Este efecto paradójico, en la izquierda, del discurso (o más bien de


los discursos) de la clase dominante por demás no es nuevo. Un autor como
Marcuse ya había recorrido enteramente este círculo. Habiendo partido de
un radicalismo todavía marcado por el pensamiento marxista, encontró su
final en la proclamación de un "socialismo biológico". Eclosión de lo irracio-
nal puro al interior de un discurso ello es el retorno de
de izquierda:
lo reprimido. Los síntomas no faltan viejos tiempos existían
nunca: en los
las sociedades "primitivas"; los "primitivos'” no conocen más que el "intercam-
bio. simbólico", ni siquiera conocen al Inconsciente (20). Un discurso aterro-
rizante apocalíptico asociado a la nostalgia de un pasado imaginario, perdido

para. siempre: eso nos dice bastante, estoy seguro. Mientras más compleja

es una sociedad, más compleja es la semiosis que la atraviesa. Lo ideológi-—


co y el poder están en todo, en tanto que "marcos de inteligibilidad del”
campo social", retomando la expresión de Foucaul. Esta ubicuidad no remite
entonces a la homogeniedad de una coherencia global que produciría la unifica-
ción significante -de una sociedad en su conjunto. “Omnipresenci a
del poder:
no porque éste tendría el privilegio de agrupar todo bajo su invencible
unidad, sino porque éste se produce a-cada instante, en todo punto, o más
bien en toda relación de un punto a otro" (21). : .

5.Del lado del Sujeto


Entre el sentido investidoy las condiciones de este investimento, entre
las materias significantes y las presiones que definen la naturaleza del
trabajo de investimento, se encuentran los agentes de los procesos de produc—
ción y de los procesos de reconocimiento. Para nosotro, el sujeto es entonces
tre

un. punto. de. paso_de. las reglas operativas. de la.producción-y..del -conocimiento o


o, dicho de otra manera, es -el lugar de-manifestáción de una legalidad
que sobrepasa toda "conciencia" que 'el sujeto puede tener del sentido.

El sujeto no constituye, por supuesto, un "medio transparente"; éstá


muy lejos de eso. Esasu vez fuente de presiones gue definen su funcionamiento
en tanto que "sujeto". Es aquí, me parece, que. el psicoanálisis encuentra
supunto de articulación con una teoría de la producción social de sentido.
Aunque ese * término de "articulación" puede engañar tratamos con
el psicoaná-
lisis de Ja misma manera que con lo ideológico y con el poder, a un nivel
de, lectura. Pues el inconsciente también está en todo.
No existe, ciertamente, .
discurso que no esté tejido al . orden simbólico: eso es una trivialidád.
Pero- una trivialidad que encierra también un peligro, “el de mantener a
propósito de todo .y de cuál quier cosa, un mismo discurso. universalizante,
que se contentaría con “encontrar cada vez. a la castración, al padre, al
falo. La "contribución" del psicoanálisis se volverí
a así esa "nueva retórica"
denunciada. por «Michel de Certeau a propósito «de la historia: "recurrir
a la muerte del. padre, al Edipo o a la transferencia sirva para
todo. Esos
. concéptos fFreudianos supuestamente utilizables para todo fin pueden ser'
“aplicados sin dificultad .en las regiones obscuras de la Historia (...).
Se le mete ahí en donde una explicación económica o sociológica deja un
resto. Literatura de la elipsis, arte de presentar
los desechos, o sentimiento
acerca dé un asunto, sí: pero análisis freudíano, no" (22). No se trata,
entonces, en relación a un conjunto significante dado, de
recoger alegremente
aquí y allá, las :huellas del orden simbólico y de sus relaciones con el
imaginario para. recomponer un modelo, el .que.seguiría .siendó.el mismo en.
la disposición fundamental de "sus elementos. Inclusive suponiendo que las
"reglas. del juego" para llegar a esa recomposición sean explícitas (lo
que rara vez es el caso) y no adaptadas ad hoc
según las necesidades circuns-'
tanciales del análisis (lo que casi siempre es el caso), tal operación
no podría satisfacernos. La puesta en relación.del orden de lo ideológico,
del poder y del inconsciente implica representarse una trama tejida por
esas tres economías a la vez. He tratado de sugerir por qué el orden de
los ideológico y el del poder'no son idénticos, por qué remiten 'a problemá-—
ticas estrechamente ligadas, pero distintas. Esos dos órdenes tampoco podrían
reducirse a la cuestión del sujeto. El "encuentro" entre
estas tres economías
es un fenómeno histórico, y la trama. que ellas producen revela
en momentos
diferentes de la sociedad, diseños diferentes. Es la ubicación de esas
configuraciones diferenciales que es intere
sante. Cada disposición de materias
significantes ("normalízadas" en los medios masivos, por ejemplo), implica
una posición del sujeto que le es específica (pienso en el cine en comparación
con la imagen televisiva) (23). En la diacronía, toda distancia
significativa
entre... producción y reconocimiento de conjuntos
7
Liz textuales determinados implica
- '“un-cambio en la posición del sujeto.
mE
A

Hay que subrayar en relación a este "encuentro" de una teoría del sujeto
con- una” teoría de la producción social del sentido la importancia decisiva
de un estudio quer progresa, lentamente, en estos últimos años: el de los

dispositivos” de la" enunciación. Considerarlos en general plantea enormes


problemas, pues si sabemos algo de su funcionamiento al interior de la
materia lingúística, la teoría de estos dispositivos, tal como toman forma

en” otras materias distintas del lenguaje, está todavía por hacerse. A esto
se añade que lo discursivo, las combinatorias particular propia de los
"paquetes significantes", afecta al dispositivo de la enunciación al interior

de cada .matéria.

Es evidente dispositivo,
que tal como funciona en la materia Lingilísti
este
ca que puedeformar parte del discurso fílmico, por ejemplo, ya no es el
mismo que aquél que caracteriza a la enunciación en la actividad de la
lengua propiamente dicha, ya sea ésta oral o escrita. Aún quedándonos dentro
de los límites del. discurso lingiiístico, no se puede exagerar la importancia
del análisis de la enunciación, a menos que se comprenda que en última
instancia este análisis no concierne a un "aspecto" .del discurso; no abarca
un "nivel" de la discursividad, sino, al contrario, conlleva (o en todo
_ caso, debería conllevar) una transformación global y profunda de la concep-
ción de la actividad del lenguaje. El dispositivo de la enunciación, entrelaza
do en todo a las operaciones discursivas, afectando por ello a todo instante
al material léxico, es aquella red de huellas por la cual el imaginario
de la historia viene a linjertarse (de manera siempre fragmentaria, siempre
parcial en cada proceso de producción o de reconocimiento) sobre estructura-
ciones determinadas del orden simbólico.

Traducción: Javier PROTZEL


(+) Esta traducción del trabajo de Eliseo Verón aparece en Contratexto
graciás a “la. autorización del autor, quien originalmente lo publicó
en Communications, n 28. Paris, 1978. pags. 7-20.

(1) Este trabajo, al proponerse como el esbozo de una problemática extremada-


mente vasta y compleja, obliga a. presentar de una manera forzosamente
esquemática y dentro del espacio disponible: los asuntos tratados.
El lector queda invitado: a completar esta lectura, sobre todo en lo
referente al problema de lo ideológico, la con de otros dos artículos:
"Remarques sur 1l'ideologique comme production de :«sens" en "So iologie
et Societés; Montreal, 5 (2) :. 45-70, 1973, e" “Ideologie et communications
de masse:sur la constitution du discours bourgeois dans la presse hebdoma-
daire", en Ideólogies, _litterature et societé _en' Amérique Latine.
Editions: de 1'Université de Bruxelles, 1975: 187-226. La cuestión
de lo ideológico en relación al "discurso de la ciencia" está desarrolla-
do en detalle en Fondations (en una recopilación de textos en preparación -

(2) De los tres términos que corrientemente dan nombre a los tres momentos,
conceptuamente distinguibles, de un sistema productivó, él “dé consumo
parece el más puramente económico cuando se le aplica al área del
sentido. Eso viene problamente del hecho que en los ensayos (muy variados-
de tranferencia del. "modelo" económico a otros terrenos, la instancia
consumo ha merecido precisamente poca atención. Como no ha sido objeto
de un trabajo de "metaforización" comparable con aquél al que se ha ..
sometido a los «otros dos términos, consumo sigue dando la impresión
de ser un término "puramente económico". En la situación actual, me
parece preferible . reemplazarlo por. el de reconocimiento que, por otro
lado, ha sido ya usado en lingúiística para aludir al momento de "recep-
ción" del circuito del lenguaje, siendo consciente que.ello produce
cierto desequilibrio. Como quiera que fuese, cierta flotación terminoló-
gica me parece inevitable. en el estado actual de la- investigación,
habida cuenta además de que una decisión individual no puede causar
la estabilización terminológica.

(3) De la ausencia de esta distinción se produce la "ilusión inmanentista"


. 1. análisis de textos, , característica de lo que he denominado. ¿en.;
q
Ta

otro * lado- la "primera semiología". Véase "Remarques sur 1'ideólogique


comme production de sens", loc. it.
(4) El término "gramática" debería llevar comillas a lo largo de todo este*
texto. Han sido eliminadas en lo que sigue para no hacer el artículo
demasiado pesado. o

(5) E.Verón y C.R.Sluzki, Comunicación y neurosis. Editorial del Instituto.


Buenos Aires, 1970.

(6) Ver al respecto Fondations, op.cit.

(7) "Remarques sur l]'iúeologique..." loc. cit.

(8) No se trata ciertamente de negar la importancia histórica de tal dispo-


sitivo. ?

(9) Yo mismo utilizaba esta terminología en "Vers une logique naturelle des -
mondes sociaux"..En Communications, 20: 246-278.

(10) No es casualidad el que no haya lugar, en el contéxto de este pensamiento


marxista "reificante", más que para una concepción puramente reproducto-
ra de lo ideológico.

(11) Marc Augé. Theorie des pouvoirs et ideólogie. Hermann. París. 1975, pag.
XIX. Sin embargo en mi opinión, la noción de representación debe remitir
a la semiosis, y en consecuencia a la producción de sentido y a procesos
de' investimento de materias significantes, si ese término quiere
evitar, por otro lado, la reintroducción de la dicotomía infraestructura
superestructura bajo una nueva forma.

(12) Ver mi artículo "Pour une semiologie des operations translinguistiques".


En Ys Cuaderni di studi semiotici, 4:81-100, 1973, para una tipología.
de las reglas constitutivas de las materias significantes.

(13) Se encontrará una discusión mas detallada en Fondations, op. cit.

(14) Esto me parece ser el fundamento de la distinción entre esas dos


gramáticas de reconocimiento, la de la "cientificidad" y del "efecto
ideológico". Pero ciertamente, no es el único elemento. Habría que
añadir que el concepto de un efecto de sentido y los que se refieren
a los tipos de discurso deben ser mantenidos, en mi opinión, en total
separación. -En otras palabras: no hay que imaginar que todo discurso
producido por las instituciones llamadas "científicas" es un discurso
en el que se produce necesariamente el efecto de "cientificidad".
¡Ni mucho menos! Este es todavía un asunto que no tiene que ver solamen—
3
te con las propiedades de los discursos. considerados
en "ellos mismos",
sino con el” conjunto de las. "relaciones “entré lós-discursos y.las
condiciones de producción, circulación y reconocimiento.
(15) Michel Foucáult. ' Historie de la: sexualité,I. La Volonté de savoir:
Gallimard.. París,1976, pág. 123. :

(16) Jean Baudrillard. L'Echenge. Symbolique.et la Mort. Gallimard. París,


1976. o

(17) Jean Franklin. Le discours du pouvoir. Coll. "10/18". París, 1975.

(18) Daniel Bell, en su libro clásico The End of Ideology. New York, 1960.

(19) Marshall McLuhan. Understanding media: the extensions of man. Mc


Graw-Hill, New York, 1969.

(20) Jean Baudrillard. Op. cit., pág. 210.

(21)- M. Foucault. Op. cit., pág. 122.

(22) Michel de Certeau. L'Escriture de l'historie. Gallimard. París, 1275,


pág. 292.

(23) Subrayemos, desde . el punto de vista, la importancia de los pasos


que se han dado en la búsqueda de una: configuración específica del
sujeto al interior de la' institución cinematográfica (aunque no se
aborde explícitamente la cuestión de lo ideológicoen
) el reciente
número (23) de Communications. sobre Psicoanálisis y Cine.
en

"Yo tengo confianza en este pueblo". Algunos problemas de producción/


recepción del discurso militar argentino (1)..

Lucrecia Escudero

- El discurso militar argentino ha construído en el curso de estos últimos En


años, y particularmente durante el período que va del golpe de estado
del General Onganía en 1966 al.-.del General Viela en 1976, un imaginario
político -—discursivo que adquiere el estatuto de "sentido común'', de doxa
cotidiana +. es decir, ha tratado de construir.o un espacio de creencias
admitidas como "razonables", entre las que se
encuentra una cierta imagen
de la Nación argentina, del pueblo y fundamentalmente del Ejercito y de
la subversión. o

¿Se puede considerar al discurso militar como. un discurso autónomo a


y sobre todo como un discurso -"político"?, Digamos que la misma situación
de enunciación de este discurso lo contamina -—si no de «hecho
1ál menos
de derecho - de una "politicidad" que la institución militar como tal se niega
a aceptar. Paradoja del discurso militar: afirma su caracter "profesional"
en la lucha
política nacional durante todo
1975, por ejemplo, mientras el año
es responsable de. preparar el golpe de estado del mes de marzo del año
siguiente. En todo caso, en América latina debemos encarar un problema
particular y generalizado: los militares ejercen el poder, detentan el
poder, hablan del poder, producen y reproducen el poder a través de sus
discursos, crean en suma un universo de creencias, localizando :un repertorio
de ¡imágenes y estipulando un ritual de relaciones sociales. No se trata
tanto entonces del problema del ' discurso a partir del poder, sino del
poder a través de los discursos en los cuales una reflexión sobre el discurso
militar argentino,
en tanto que productor de hechos políticos, se sitúa.

Por otra parte' es imposible de analizar un discurso a partir del poder,


sin tomar 'en consideración la manipulación de este universo de creencias
producidas por la fuente militar que realizan los medios de comunicación. L.>
Es el caso de la construcción de la imagen de "subversión", "guerrillero", :
"defensa de la patria" o "muerte", para citar las más corrientes; construcción nos
delicada y . compleja que elije sus recorridos en la prensa y la televisión.
Es a partir de esto que existe un doble discurso: el que producen los
militares y el que es construído a través de “los medios, en sus editoriales,
comentarios, titulares ,y espacios de imágenes que le han
consagrado a
los militares en estos últimos años: hay un tejido discursivo a partir
del cual se recorta "el" discurso militar.
Desde el comienzo. de .1975,. fecha en la cual el: gobierno constitucional'
de Isabel de Perón autoriza: oficialmente a las Fuerzas Armádas a participar
activamente 'en la luchá” contra la! "subversión", los discursos militáres
no háblan practicaménte de
otra _cosa. Celebraciones militares, oraciones
funebres, .árengas, decláraciones, los discursos militares nos han inundado
de palabras tratando de establecer la creencia en dos objetivos fundamentales
la delimitación del enemigo que debe ser aniquilado, la ¿carácterización
y su diferenciación de otro actor de la guerra ("la Nación Argentina");
la preparación de la opinión: pública al “golpe de éstado que poñía fin
al breve período constitucional ináugurado por -.el triunfo electoral del
movimiento peronista de 1973. Una simple tectura de los contenidos expuestos,
haciendo .apelación :a :la competencia —Somún de: lectura política que tenía,
todo * lector argentino en el período, “revele la total polarización “del *
discurso militar alrededor —obsesivamente- de estos dos sujetos.

Cómo el discurso. militar - organiza discursivamente esta creencia? ¿Cómo


hace para que este "real" será aceptado “como verosímil y conveniente?
En primer lugar podemos “decir que. el discurso político es ese tipo de
discurso que marca' mas fuertemente' que otros una relación entre“ los Sujetos
productores y los sujetos receptores; entre procesos de producción discursiva
y procesos de, lectura a los cuales un discurso se somete (o es sometido).

Para 'buscar una especificidad del discurso político, habrá que situarse
"fuera" del discurso, situándonos en recepción, como lo subraya muy claramen-—
te Eliseo: Verón (2), “tratándo de establecer las condiciones que permiten
que un. discurso séa «reconocido como político, «del mismo modo que decimos
Que un. discurso. "literario", porque existe toda' una retórica de percepción,
porque 'está emitido “desde uria instancia reconocida” como instantia dé” poder:
respondiéndo :a un aparato del estado, en fin;' producido por un grupo social
reconocido y“ portador” de una aceión' “política determinada!: Teriemos '“entondes
una doble
institucionalización: la que deriva de la situación específica
de Producción del discurso y la que proviene de una tipología” de los discur-
(3), ambás instancias . sociales. El discurso político establece una
relación particular que podría tomar la: forma de un contrato fiduciario
entre el enunciador y sus receptores: sea porque los trata de convencer
-en tanto que tiende a transformar el sistema de expectativas “y el sistema
modal de destinatario —lector-, «sea porque trata de ser aceptado como
verdadero por aquellos” que .:lo reciben. Se Puede decir que todo “discurso
político responde a una estructura modal de tipo "veredictiva": se da
por creíble, quiere ser tomado como verdadero... A partir del momento eh
el cual hablamos de persuasión, ' implica concebir al discurso como una
interacción, impuesta a Cada participante de un sistema de inter—cambios
(valores) y en consecuencia como un ritual: el que toma/delega la palabra,
la situación a partir toma la palabra y enuncia, la situación de recepción,
Qt,
Lo».

en fin, -el: contexto político-social global en el cual este discurso es


enunciado. Si consideramos que todo discurso es portador de una fuerza .
perlocutiva, en la medida en que: todo acto de enunciación apunta a objetivos O
que van más. halla de la enunciación física'y en consecuenciz ESTATE II
pen _
sistema de espectativas; considerando también que tanto el sujeto productor"
“como «el sujeto receptor se encuentran inscriptos en-la interacción estable- on
z cida, pero también en el' discurso mismo- es decir, funcionan como dós
actantes narrativos podemos hablar de una posible estrategia de trasmisión,
- que se establecerá entre los actantes y que dependerá de la construcción
" ze “y de la .distribución por parte del sujeto de la enunciación de operaciones
OL ' específicas tendientes a crear" no, solamente un espacio discursivo, sino
también un lugar de creencia. “ o

El sentido vehiculado y construído en un discurso, no puede ser re-


enviado a un referente "ideológico", del cual el discurso político daría
cuenta,” sino” que asume más bien la forma de un contrato de lectura puesta
a prueba entre los dos participante
des.
la situación de enunciación del
discurso. Este contrato implica entonces dos "haceres" diferentes: un
hacer” persuasivo por parte del enunciador —hacer que podría apoyarse sobre
la dimensión del poder, por
ejemplo en "Es el Ejercito de la Nación que
les habla", sea sobre la dimensión del «saber en "Es-este viejo soldado
que le habla, confiando en ustedes porque sabe...'"(4) y un hacer interpreta-
tivo por parte del receptor-lector. Finalmente, hablar de un contrato
de lectura en tanto que lugar posible de manifestación de sentido, implica
sobre todo tomar en consideración la eventualidad de procesos de manipulación
subyacentes, en tanto que cada discurso propone simultáneamente no solamente:
un programa de escritura articulada en sus estrategias textuales, sino
un programa de lectura consistente en la aceptación o rechazo de estas
estrategias textuales, como condición de establecimiento de un recorrido
- de sentido.” :

Desde el. punto de vista de una teoría de-la enunciación, el caso del
discurso político es particularmente interesante: adquiere el estatuto
de discurso en el momento en que "crea" la situación políticaEn . otros
términos, el discurso político, es tal “vez, el único tipo de discurso o
que genera una situación "política" en el momento en que es pronunciado.
La frase de Austín "cuando decir es hacer", no podría corresponder mejor
a este tipo de discurso. Reforzando el nivel perlocutivo presente en todo
discurso, el discurso político aparece nuevamente como sujeto a una doble
confluencia: el del suceso y el del discurso.

Digamos que no existe "un" discurso político,: sino discursos reconocidos


como políticos en situaciones determinadas y en consecuencia, "leídos"
- . : : r t

A a+ > Cao, ? > -4, : s “7


“como: resultado - de estrategias- político-textuales específicas, ' “entendiendo
por estrategias a toda operación lingúística que que el sujeto de la enuncia—
ción de un discurso hace funcionar de modo de. provocar ciertos efectos
de sentido “vehiculizados a través de ciertos recorridos de lectura privilegia
dos. En sintesis: no existe "un"! lugar de enunciación del discurso político
que no este atravesado por dla lucha política, por la relación de fuerzas
establecida,. codificadas .y ritualizadas por la sociedad. Si todo discurso
se produce siempre a partir de otros discursos —y el caso de la literatura
me parece. el más evidente- el discurso político no se produce solamente
a partir de una red de discursos emitidos arteriormente, "sino que es Pproduci-
da fundamentalmenté para contestar los anteriores,. refutar, invalidar
o” apoyarlos. La producción misma del discurso político aparece entonces
-.explícita o implicitamente como polémica, porque es siempre una "respuesta
a, no existiría un grado cero, una neutralidad posible del discurso.

Lo que esta en juego entonces es siempre una implicación personal:


los receptores deben creer o -no,, adherir o refutar, en suma, deben ser
movidos pasionalmente, en el sentido que el término "pasión" recubre:
cómo una acciór vista o soportarla a partir de una situación de recepción,
pasión como una configuración modal de lectura: un hacer-hacer que tiende
a Uun
.querer-deber-hacer.. El discurso político ,5e sitúa entonces en un
nivel intermedio entre el acto que propone ("hay que exterminar la subver-
“sión) y. una, disposición, general por parte, del receptor hacia la acción,
y, en consecuencia, la. lectura "privilegiada". del analista podra “ser una
reflexión trans-textual, tendiente a reconstruir los procesos de circulación
de sentido que van del emisor al receptor y que no encuentra en el discurso.
más que un punto de anclaje, evitando los riesgos de una lectura "literal".

PRESENTACION
DEL MATERIAL ANALIZADO

El material aquí presentado representa un conjunto de conclusiones


-por los demas provisorias- de un análisis del: discurso militar argentino
durante el período que precede al "golpe de estado de marzo de 1976, tomando '
como nivel de lectura el reconocimiento, y tratándo de localizar las estrate-
glas persuasivas de los - enunciadores centradas sobre la caracterización
«de- la violencia -política. - --- == o 7

Establecer que * tipo de estrategias discursivas: selección de actores


de "motivos", propiedades, clasificaciones y Jerarquizaciones de los objeti-
vos presentados, zonas y formas de enunciación tendientes a fundar la
coherencia y verosimilitud del discurso. El texto elegido, "Yo tengo
confian—
za en este pueblo", es un arenga pronunciada por el General Anaya frente
a la clase militar 1954 en formación en la ciudad de Córdoba el 31/3/1975,
.u
En primer lugar y en lineas generales, el texto permite resumir un
conjunto de elementos” que son constitutivos del discurso militar, y que
podrían tomar la forma de un proceso del siguiente tipo: "

PLANO DE LA ENUNCIACION: yo hablo (s,) aquí *Xfundación de ¿Auditorio expli-


una creencia cito (57)

PLANO DEL ENUNCIADO : El Ejercito dice aqui-pPasiones —» Auditorio impli-—


( Ss!1). ahora : ( Ss!5) o"

Hacer-hacer (persuasión) " dixis estructura Hacer interpre-=


" espacio- modal vere—- tativo (manipu- o
temporal dictiva lación) :

El último texto "Estrategias textuales' es una cronología de los titulares


circunscriptos al, mes de marzo de 1976 en el periódico La Razón, donde
la hipótesis de trabajo es mostrar ccmo subyace una estrúctura narrativa
en el encadenamiento de titulares, al punto que pueden ser leidos como
un texto autónomo.

"Yo tengo confianza en este pueblo"

La situación de "toma .de la palabra” por parte del general Anaya dirigíen—
dose a lós soldados argentinos en sede del 3er. Cuerpo del Ejercito en
- Córdoba, marca de forma muy presisa'el lugar donde este discurso es pronun—
ciado y a su: vez como esta situación marca, reciprocamente, la exclusión
total de la respuesta, la. imposibilidad de la palabra de los receptores.
Son las estructuras mismas de la «situación de comunicación, fuertemente
ritualizada, las que impiden una ¿intervención presisa: podríamos decir
que este discurso se "presenta como coercitivo porque obliga a escuchar ! EN
en .la imposibilidad de responder, sea para adherir o refutar. Los receptores :
pueden cumplir una sola: acción: callar. El discurso militar se presenta
entonces como emitido a partir de una instancia de poder irrefutable que
genera consenso sino de derecho al menos de hecho: el consenso general
del silencio. :

Podemos delimitar a su vez en el interior de este auditorio general


dos sujetos particulares'a vá dirigido
los cualés el discurso:

—- un auditorio explícito: "Todos los soldados del Ejercito Argentino"


1 .

— un auditorio explícito: "Las organizaciones internacionales al servicio de


2 ideologías extranjeras que pretenden dominar nuestra
tierra".

Estos dos actores, soldados/organizaciones internacionales, aparecen delimi-


tados a partir de una configuración discursiva de dos modelos de competencia.
¿Cómo se construye un auditorio competente? :

Estrategia I -:: El actor/soldado del ejercito Argentino esta munido de una


competencia que es administrada a través del discurso como un hacer—cognitivo:
el discurso re-produce una. serie..de imágenes (patria, Ejercito, Nación,
Pueblo) que el soldado debe conocer y re-conocer para cumplir mejor con
el objetivo de la institución: "armarse para servir a la patria". Es posibie
hacer una lectura paradigmática de todos los discursos militares del período
siguiendo la imagen. de /patria/ que aparece de modo regular para configurar
un recorrido cognitivo, similar al que hacen los /soldados/ . En síntesis,

el discurso militar re-envía continuamente a zonas pre-construídas como

/patria/,/nación/ o /pueblo/, pre-construídas en tanto se asientan en los


discursos precedentes que la han servido de pedagogía, y donde este "discurso
analizado viene a' reforzar e inscribir.

Podemos ' decir que * incluye


/patria/ una dimensión familiar (patria como
vida familiar, modo de vida). : : O

-una dimensión geográfica (tierra,


_ sol, "este sol”). :
una dimensión institucional (institu-
ciones que educan y protegen) .
a

: .. " una dimensión histórica' (memoria de -


una pasado, "un futuro". No existe, no puede existir, otra patria fuera de la
establecida por este imaginario. La e patria posible es aquella configura-
da _ por e discurso. La “perfomance | e: los actores aparece | entonces como *

al trabajo, tomar parte en la lucha antisuversva. El discurso presenta X


a su vez un modelo de /soldado/ en el cual el auditorio debería reconocerse

y adoptar: "

— defender la patria : .
-— defender la libertad del pueblo
- munido de un deber sagrado

munido de dos pásiones: la abnegación y el coraje

el actor/organizaciones extranjeras/ es considerado a


, Por su parte,
partir de una imagen definida por la negación:

— pretenden dominar ,

- entregan al pueblo a la violencia y al terror

Contrariamente a lo realizado con el actor /soldado/ el discurso niega


este segundo actor toda competencia: "se olvidan", "no saben", "se equivo-
a
...". Se les niega toda posibilidad de saber y por consiguiente,
can si
“de actuar con éxito (ellos no triunfarán jamás"). Esta configura—
de hacer,
puede ser comprendida en dos estructuras modales específicas:
ción actorial

[organizaciones extranjeras/ /soldados del Ejercito Argentino/

verdad prescripción : interdicción

, parecer deber-hacer XA hacer


ser

e error no deber-no hacer os no deber-hacer


secreto

no ser permiso facultativo


«no parecer

falsedad > |

MODALIDAD VEREDICTIVA MODALIDAD DEONTICA

que cumplen las /organizaciones extranjeras/ es la negación :


El recorrido
del ser: ser+parecer: del eje de la verdad se pasa a la negación no ser+pare-
falsedad
cer: error ("ellos se equivocan") y “finalmente al no-ser+no parecer:
"ellos no saben que...'"), es decir, se les niega
("ellos se olvidan",
la posibilidad misma de constituirse, como sujetos. El recorrido de/soldados
del Ejercito Argentino es mas limitado y se juega enteramente sobre el
prescripción/interdicción: la única perfomance posible
eje complementario
este sujeto se mueve en el marco de un deber-hacer y un deber no-hacer.
de
dos Casos, es posible hablar de un programa narrativo: este imaginario
En los
por el discurso delimita dos actores que. cumplen dos
político instaurado
atacar y defender a la patria por la pérdida
programas complementarios,
o la adquisición de una competencia. :
Estrategias 11: Luego de haber caracterizado los actores y haber fijado
sus estructuras modales,. podemos ' hablar de uña segunda estrategia ligada
a la forma en la cual $e enuncia el discurso. En primer lugar hay una
oposición entre la no-persona (organizaciones extranjeras/) y la categoría
de persona (/nosostros/). En segundo lugar, el sujeto de la enunciación
toma a 'su cargo .directamente el enunciado: "Yo tengo confianza en este
pueblo. Yo tengo confianza en ustedes que son ese pueblo en armas", estable- .
ciendo una' relación de equivalencia:

“pueblo+pueblo en armas

que a su vez implica una diferenciación anterior Yo/pueblo/pueblo en “armas.

Este "yo" es el resultado de ¿una doble conjunción: un nyo" que ha:'


sido precedido por el “Ejercito argentino/ puesto que el "habla en su
nombre", y es un "yo" que se encuentra continuado por un /pueblo en armas/.
Esto permite delimitar dos utilizaciones del pronombre "nosotros":

a) Yo=Ejercito argentino (nosotros, ) que engloba a su vez


b) pueblo en armas= soldado argentino (nosotros,)

Este "Yo" cumple vn conjunto de acciones enunciativas: "Yo me voy a


dirigir a ustedes",' "Yo los exorto", "Yo se como 'un soldado argentino...",
es decir, este "Yo" esta dotado de una competencia (el saber) que le permite
hacer (exhortar, querer,etc) y también establecer la perfomance del otro
(cual es el deber del soldado).

Estrategia 1Il: Como: se obtiene:


la credibilidad? El "Yo" enunciador deberá
ensayar un hacer persuasivo a partir de la verosimilitud
de los hechos
enunciados,” de modo que su .auditorio acepte los hechos como verdaderos.
Por otra parte, el funcionamiento normal del discurso contribuye a hacer
confluir el hacer persuasivo con el hacer interpretativo del auditorio,
consolidando y garantizando el discurso. Este hacer persuasivo se establece
a: partir de la construcción de un sistema de valores establecidos como
oi

" objeto de consenso, que permite la confluencia entre el enunciador y el


receptor que deberá cumplir con una acción determinada "aniquilar la subver—
sión". Discurso que ensaya de fundar .una creencia: la necesidad de defender
a la Nación, “creencia que aa su vez excluye toda duda, y de alli. la necesidad
de presentar al enunciado propuesto como avalado por afirmaciones categóricas
Discurso que se articula sobre el creer del receptor, pero inmediatamente
despues sobre su hacer, :

Es'*. cierto que el auditorio puede negar -intómamente-, rechazar: el modelo e


propuesto, negar su perfomance. Sería difícil seguir a todos los soldados
de la clase 1954 para saber si ellos continuaron, una vez fuera de la
sirviendo a, la patria en los términos propuestos
institución militar,
no se - sitúa evidentemente en este nivel,
por el discurso. El problema
de saber como el discurso construido, discurso que es
sino que se trata
un modelo que pretende persuadir todavía, más alla
trata legitimar
de
El discurso militar aparece entonces como una
de su enunciación.
propia
Es un discurs o que juega contra el tiempo pero que debe
potencialidad.
asumir el espacio-tiempo (finito) de su enunciación, tratando de provocar
un efecto (infinito) que lleve al auditorio a la acción, es decir, a la
modificación del estado de cosas existentes: el nacimiento de la dimensión
política comienza con la muerte del discurso en cuanto discurso.

se fabrica el titular que anuncia el golpe de estado militar


Como

titular principal del diario La Rrazón durante el mes de


Esta es la lista del
marzo de 1976.

2/3: Novedades desconocidas


3/3: Se esperan respuestas
4/3: Una reunión decisiva
5/3: Emergencia nacional :

6/3: Grave situación económica


8/3: Trabajadores y empresarios discuten la emergencia
9/3: Tensión en los sindicatos. :
10/3:Reconstruyen el plan
11/3:Se esperan novedades
12/3:Agitación en los sindicatos
13/3:La tensión sindical es preocupante
15/3:Hubo un grave atentado
16/3:Inquietud en Buenos Aires
17/3:Hermetismo silencio en la FFAA
18/3:Drámatica negociación
19/3:El proceso llega a su punto culminante
20/3:El Ejercito enfrenta la situación
22/3: Jornadas descisivas :
23/3:El'fin es inminente. Todo ha sido dicho

¿Cómo construir este "suceso" que todavía no ha tenido verdaderamente


pero qué lo tendrá en breve, o como, para decirlo en pocas palabras,
lugar
articular un consenso en los lectores de modo de hacerles aceptar
es posible
la inminencia: de un golpe de estado?. En primer lugar puede leer el se
conjunto de los titulares como respondiendo a una estructura narrativa
elemental: el relato se abre con una novedad desconocida que debe ser
(suspenso) y en consecuencia se esperan las respuestas, que llevan
revelada
a un desenlace previsible.
menos tres actores explícitos: los obreros, los
Se puede localizar al
FFAA sobre los que recaen la mayor parte de las acciones.
patrones y las
Los actores se reúnen, discuten. la situació n, callan, negocian:
se agitan,
el períodico construye este. relato a través de la alternancia de titulares
de tipo “informativo, ' que dan al lector un "nuevo" conocimiento dobre

la realidad del tipo de los titulares "Obreros" "Trabajadores y empresarios",

"Reconstruyen el plan", "Agitación en los sindicatos"; alternandolos con

titulares de .enunciados de constatación, es decir, que describen un suceso:

"Emergencia Nacional", "El proceso llega a su culminánte":


punto para llegar
finalmente a la modalización de esta información: se pasa de una reunión
decisiva a una negociación dramática. Estos elementos establecen un espacio
textual determinado --en -de- -un-- ón
funci objetivo: como la camara enfoca una
situación para fijarla en el espacio-tiempo de la imafen, la puesta -en
discurso de los titulares focali za
una: situación precisa para construirla de-
finitivamente en la memoria de los lectores: la emergencia nacional.

Las caracteristicas .de este relato son fuertemente referenciales: trata


de crear efecto de paralelismo entre la sucesión de hechos [políticos y
su puesta en discurso, que deben aparecer como simultáneas. Este efecto
provoca a su vez un efecto secundario colateral. El lector esta informado
de los que pasa en el país pero al mismo tiempo esta preso en el. suspenso
impuesto por el hecho que' se trata justamente de sucesos en curso, y no
de sucesos históricos ya pasados. Este efecto secuñdario esta producido
por la articulación de los titulares en parejas que podrían responder a
un esquema de preguntas-respuestas: "Novedades desconocidas"/'"Se esperan
respuestas"/ por ejemplo, que. creen de suspenso y de intriga que se resuelve,
como er una novela policial -—y solamente en 'parte- por el titular final
"El fin es inminente. Todo ha sido dicho".

Otro elemento me parece importantea tenér en cuenta : la serie "Novedades


desconocidas"/"Se esperan réspuestas"/ "Inquietud en Buenos Aires"/ "Jornadas
decisivas"/ pone el problema del sujeto enunciador y su estrategia: aquel
que se asume como enunciador absoluto; delimitado/una única - perfomance
de lectura posible para el receptor. Las "novedades" que estos titulares
enmarcan, deben ser leídas a partir de los desconocido, la preocupación,
la espera y la inquietud; es decir, no pueden ser leídas no importa como:
el enunciador proponé fuertemente .las reglas rituales de este contrato
de lectura. Sucede lo mismo con los titulares con una referencia explicita
a_la violencia ("Hubo un grave atentado"): practicamente no hace falta
que aparezcan, y de hecho aparecen solo una vez, porque la serie completa
de los titulares crea de por si un efecto global de inseguridad y de vacio
político que preparan el golpe final. Sería legitimo preguntarse porque
se elija finalmente ese día (15/3) y no otro, para construir un titular
sobre la violencia, semana. esa donde la media matemática marcó un muerto
cada cinco hoPás y ún “atentado con bombá tada tres horas. + 7
NOTÁS

traducida del original frances: "Jai confiance dans ce peuple:


(1) Versión
quelques problemes de production/réception du discours militaire en

3344 Cabiérs de Recherches Universitaires No 4- Universi te


en Argentine"-—
de Paris VII.

la ideología y del poder" — Communications


(2) Veron, E.:"Semiosis de
N%_28 - 1978

(3) Guespin, L: "Types de discours et fonctionnements discursifs" Langages


N* 41- 1976.

artículo son el resultado de numerosas discusio-


(4) Las conclusiones de este
nes con Paolo Fabbri, que tuvieron lugar en su seminario sobre persuasión

manipulación en la Universidad de Bologna, a quien agradezco no


y
las numerosas sugerencias que aparecen aquí sino sobre todo
.solamente
“esfuerzo por persuadir a los estudiantes de -que el lenguaje no
su
es solamente comunicación.
Analiza y . discute en grupo,a partir de lo estudiado, las competencias
y perfomances de los áctores' sociales implicados en la "guerra sucia".
y. :
pro

¿Qué actores' sociales, a su juicio, son susceptible hoy de una manipula-—.


«ción: léxica, Somo > La de este - ejemplo? . :

pS

Ord
Autcso La. ¿partir
s2, 7.
de 1984 fue que libraron una guerra irregular.
nido: Operas ón a que * Suarez Mason reconoció como propia
_eoherente con la pretensión castrense de
O có E
ia

de operaciones.

No_debe ser utilizada -

Guerra-guerra revolucionaria-—
'contraspbversivo" insurgencia

Lucha contra la subversión , Guerra contrarrevolucionaria

Subversivo-La subversión Guerrillero-revolucionario-


irregular

Bandas de delicuentes El enemigo-El adversario-El =


»

subversivos autodenominados erp oponente.:


montoneros, ocpo. Utilizar |con
minúscula

Banda de delincuentes Fuerzas guerrilleras-fuerzas


E

subversivos (rural /urbana) . organización —OPM-Guerrilla


rural- guerrilla urbana.
__ Debe ser utilizada No debe ser utilizada

Usurpando el uso de uniformes, Vistiendo el uniforme militar

insignias o

“¿Díisfrazados de policias, militares Vistiendo uniforme policial,

«etc. militar, etc.


estra

Delincuente capturado o Prisionero de guerra- tomado


“detenido prisionero.
Pe .

Refugio de: delincuente Aguantadero-casa operativa-


¿ibubversivo : base.

e]
=*

“«Escondite donde delincuentes Embute-Berretin-Cárcel del


y «Bubversivos ocultan el pro- pueblo. :
ii.ducto de robos o personas
- 'Becuestradas.

Fuerzas Legales Elementos de FFAA, FFSS y FFPP

Ejército Argentino Fuerza

Operaciones cóntra la subversión Otras que no sean especificadas

a. De seguridad : en el RC-19-1
b. Militar . "
c. Otras, de acuerdo el RCU-19-1

Enfrentamiento Combate

Acciones de delincuentes Operaciones de la guerrilla


" subversivos
a. Asalto a. Ataque
b. Asesinato b. Ajusticiamiento
c. Robo de armamento c. Recuperación de armamento
d. Secuestro d. Captura de enemigos
El ex ministro de justicia del dictador Jorge Videla, Alberto Rodriguez
Varela, propone dejar atrás lo que llama "la, guerra civil argentiha",'
con uña. "ley de pacificación". Empeño vano. La historia
dirá sí el conflicto
“de la década «del 70 fue una guerra. Por ahora el país piensa lo contrario.
En eso tuvo éxito la cartilla de acción psicolóficá de Videla. y Suarez
Mason.
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