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Auge, M (2000) los «no lugares» espacios del anonimato (pp.

43 - 63) Barcelona:
Gedisa, S.A.

RESUMEN
En esta lectura se explican las definiciones de lugares y no lugares, al igual que
otros conceptos que se relacionan con ellos, haciendo mención que ambos se
interconectan, pero son diferentes, el primero tiene identidad, historia etc., y el
segundo no, los cuales son lugares relacionados con el transporte, comercio, ocio,
en donde se puede poner más atención en textos, carteles que en el entorno. Son
lugares más instantáneos para la memoria.

PALABRAS CLAVE

• Lugar
• No lugar
• Movimiento
• Antropológico
• Espacio
• Viaje
• Textos
• sobremodernidad

IDEAS PRINCIPALES
la expresión utilizada por Starobinski para evocar los lugares y los ritmos antiguos
es significativa: la modernidad no los borra, sino que los pone en segundo plano.
Si un lugar puede definirse como lugar de identidad, relacional e histórico, un
espacio que no puede definirse ni como espacio de identidad ni como relacional ni
como histórico, definirá un no lugar. La hipótesis aquí defendida es que la
sobremodernidad es productora de no lugares, es decir, de espacios que no son
en sí lugares antropológicos y que, contrariamente a la modernidad baudeleriana,
no integran los lugares antiguos: éstos, catalogados, clasificados y promovidos a
la categoría de lugares "de memoria", ocupan allí un lugar circunscripto y
específico.
El lugar y el no lugar son más bien polaridades falsas: el primero no queda nunca
completamente borrado y el segundo no se cumple nunca totalmente.
Cuando Michel de Certeau habla de "no lugar", es para hacer alusión a una
especie de cualidad negativa del lugar, de una ausencia de lugar en sí mismo que
le impone el nombre que se le da. por "no lugar" designamos dos realidades
complementarias pero distintas: los espacios constituidos con relación a ciertos
fines (transporte, comercio, ocio), y la relación que los individuos mantienen con
esos espacios.
La "sobremodernidad" impone a las conciencias individuales experiencias y
pruebas muy nuevas de soledad, directamente ligadas a la aparición y a la
proliferación de no lugares.
En la realidad concreta del mundo de hoy, los lugares y los espacios, los lugares y
los no lugares se entrelazan, se Inter penetran. La posibilidad del no lugar no está
nunca ausente de cualquier lugar que sea. Pues en este tiempo se hace uso de
los textos o carteles los cuales están diseminados por los recorridos hablándonos
sobre el paisaje y explicitan sus secretas bellezas. Ya no se atraviesan las
ciudades, sino que los puntos notables están señalados en carteles en los que se
inscribe un verdadero comentario. El viajero ya no necesita detenerse e inclusive
ni mirar.

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